ASPECTOS ECONÓMICOS RELACIONADOS CON LA UTILIZACIÓN DE LA INDUC- CIÓN/SINCRONIZACIÓN DE CELOS E INSEMINACIÓN A TIEMPO FIJO EN RO- DEOS DE CRÍA Ricardo Alberio En Argentina, el uso de la Inseminación Artificial (IA) fue muy desarrollado a partir de la década de 1960. Los dos elementos típicos de la realización de esta tecnología fueron los siguientes: 1- Se basaba en la detección de celos dos veces por día y la inseminación de los animales doce horas después de haber sido detectados en celo. 2- Por razones de manejo, estuvo sobre todo restringida a las vaquillonas y vacas secas puesto que la detección de celos diaria en vacas con ternero es dificultosa y genera pérdidas, tanto a nivel de las crías como de las pasturas sobre las que se realiza este manejo. De acuerdo con lo anterior, las principales motivaciones para el uso de la inducción/ sincronización o agrupación de los celos y servicios fueron: - contribuir a corregir situaciones en las que, de otra manera, sería imposible o muy dificultoso de realizar en la actualidad la IA (campos con monte, falta de potreros o de equipamiento apropiado, o de inseminador, pocos deseos del productor de mantener servicios de IA durante 60 a 90 días, etc.), - facilitar su aplicación en situaciones en que la detección de celos es dificultada por el manejo del sistema y, finalmente, - ampliar la posibilidad de aplicación de inseminación artificial en vacas en anestro posparto. Una consecuencia secundaria de la agrupación de los servicios es que permite acortar en forma significativa el período de parición, lo que constituye un aprovechamiento de esta metodología no menos importante desde el punto de vista económico. Asimismo, una mayor supervisión de la parición posibilita disminuir las pérdidas neonatales, la mayor homogeneidad del lote de terneros, así como su mayor peso promedio al destete se traducen en atrayentes beneficios económicos; esta agrupación permite una mejor previsión y utilización de los recursos alimenticios, etc. En trabajos realizados en las décadas de 1960 y 1970 fue demostrado en nuestro país, y en varios otros, que el uso de la inseminación artificial era capaz de producir mejoras en los sistemas productivos, que podían oscilar entre un 30 a un 50% dependiendo de los parámetros productivos que se deseara mejorar o que fuese utilizada para hacer cruzamientos (Manchado y col, 1983, no publicado). En este mismo análisis se demostró que la inclusión de la sincronización de celos en un programa de IA no sólo no reduce las ventajas del mismo, sino que permite una ligera mejora económica (Cuadro 1). En este análisis no fueron tenidas en cuenta ventajas no cuantificadas económicamente, como la posibilidad de aumentar el uso de la IA en diferentes establecimientos, el aumento del número de animales inseminados en un establecimiento, etc. Asimismo, en aquellos cálculos no se tuvo en cuenta la posibilidad de reducción de los costos de la sincronización de los celos lo cual ha sido logrado en la actualidad. Cuadro 1. Incidencia de la inseminación artificial (IA) y la sincronización de celos (SC) en el rendimiento productivo y económico del rodeo de cría. (Manchado y col. 1982; no publicado) Sistema Kg/ha I.B. C.D. M.B. Retorno Servicio natural 115 100 100 100 100 Inseminación artificial 139 120 100.1 143 119 Inseminación artificial+ SC 141 123 100.5 150 121 I.B: ingreso bruto. C.D.: costo directo. M.B.: margen bruto. S.C.: sincronización de celos. Otra consecuencia de la inclusión de la inducción/sincronización de celos, que también tiene importancia económica, está dada por el hecho que los animales tratados (frecuentemente vaquillonas) paren en su primer ciclo reproductivo en forma muy agrupada y muy temprano en el período de parición. Esto se traduce en una productividad mayor a lo largo de su vida productiva (García Paloma y col., 1992; Burris y Priode, 1958 y Leismeister y col., 1973), tanto por mejorar su propia performance reproductiva (Cuadro 2a) con mayor producción de terneros como por permitir una parición muy agrupada que se traduce en un aumento de los pesos de los terneros destetados (Cuadros 2b y 2c). Cuadro 2. Efecto de la fecha de parto sobre la performance productiva, medida en tasa de preñez, de vacas de cría.
a) Comportamiento reproductivo Día del parto en el período de parición 1-20 21-40 41-60 61-80 81-100 Vacas preñadas en el servicio siguiente (%) 93,1 90,6 87,1 82,1 73,9 Adaptado de Burris y Priode, 1958 b) Kg de terneros destetados (USA). Día del parto en el período de parición 0-21 22-43 44-66 67-87 Total Pesos en el primer destete (kg) 193 182 167 157 173 Pesos en destetes posteriores (kg) 196 197 194 189 192 Pesos destetes totales (kg) 195 189 186 184 188 Adaptado de Leismeister y col., 1973 c) Kg de terneros destetados (Argentina). GRUPOS DIFERENCIA 1 2 Peso primer destete (kg) 168.9 149.8 19.1 Peso 4 destetes post.(kg) 163.3 159.4 3.8 Peso destete total (kg) 164.5 157.2 7.3 Grupo 1: vacas paridas en los primeros 25 días en su primera parición. Grupo 2: entre 26 y 90 días. Adaptado de García Paloma y col., 1992 Como consecuencia de ambos hechos se aumenta en forma significativa la cantidad de kg de ternero destetado (más terneros y más pesados). Con estas consideraciones es posible comprender por qué el uso de estas tecnologías no está restringido únicamente a ser un potenciador de la IA, sino que puede comenzar a formar parte del manejo de los servicios naturales. La inducción de los celos merece un tratamiento complementario a lo ya mencionado. El término refiere al uso de tratamientos capaces de interrumpir el período de reposo sexual, ya sea de las vacas que amamantan, como el de los animales jóvenes que se encuentran próximos a la pubertad. Su uso ha estado motivado por varias razones tales como: - En el bovino, la IA ha sido realizada históricamente en las vaquillonas de dos años y vacas secas, por razones de manejo (ausencia de terneros) y por la falta de celos en la vaca que amamanta. En los últimos 10 a 15 años, este esquema ha sufrido una modificación importante con la incorporación de la vaquillona al primer servicio desde los 15 meses de edad. La consecuencia biológica inmediata de esto ha sido que una proporción variable de estas hembras se encuentran aún en anestro prepuberal. La única forma de poder realizar servicios eficientes de IA en esta categoría es utilizar tratamientos capaces de inducir celo y ovulación. - La vaquillona de primer servicio es la categoría menos apropiada para incorporar la mejora genética, particularmente cuando dicha mejora está ligada al peso al nacer o a la ganancia de peso hasta el destete. Por otra parte, la vaquillona de primer servicio constituye, en el mejor de los casos, un 25% del total del rodeo. Si pudiese incorporarse a la vaca multípara con cría al pie, la cual tiene menores problemas de parto que la vaquillona y además constituye la mayor parte del rodeo de cría, los programas de mejora genética tendrían un impacto mayor por lograr un avance más rápido en el programa y permitir ejercer una mayor presión de selección en su descendencia. Tanto la vaquillona de 15 meses como la vaca con ternero presentan, sin embargo, el problema de tener períodos de anestro que impiden poder realizar programas de IA de una duración razonable. Los tratamientos de inducción de los celos permiten incorporar a ambas categorías al programa de IA posibilitando no sólo el aumento de la cantidad de animales que pueden ser inseminados sino que incorpora de esta manera a la vaca con ternero, que es la categoría más numerosa y que puede expresar mejor algunas de las características que se desean transmitir (peso al parto, ganancia de peso, etc.) sin causar aumento de los problemas al parto. - El anestro posparto, y por lo tanto la ausencia de ovulaciones y celos que caracterizan a la vaca con cría, reducen su productividad. Hace ya varios años que fue determinado por Habich y Joandet (1976) que por cada día que se prolonga el anestro después de los 60 días del parto, se pierden 800 grs. de ternero destetado. A modo de ejemplo, una vaca con cría que reanuda su actividad cíclica a los 90 días posparto (situación muy corriente en nuestro país) va a destetar 24 Kg. menos de su nuevo ternero que si comenzara a ciclar a los 60 días. Por lo tanto, la inducción de celos contribuye a reducir los períodos improductivos consecuentes del reposo sexual y mejora la productividad global al realizar servicios y permitir destetar más Kg. de ternero. En nuestro país, los largos períodos de servicio han sido una modalidad utilizada frecuentemente por los productores para resolver problemas nutricionales o sanitarios. Sin embargo, estos largos períodos no se han
traducido en mejoras de la productividad del rodeo, no sólo porque se encubren los problemas principales sino porque aún cuando estos sean resueltos, la eficiencia productiva sigue siendo menor que cuando los servicios son más cortos. Esto es claramente ejemplificado en la comparación de la productividad de rodeos con servicios de 2 o 5 meses de duración realizada en EEUU por Wiltbank en 1985 (Cuadro 3). Cuadro 3. Rendimiento, en kg de ternero producidos, con servicios de diferente duración (calculado sobre 100 animales en servicio). DURACIÓN DEL SERVICIO (MESES) 2 5 Terneros destetados 92 78 Edad de destete (días) 253 229 Ganancia diaria (grs.) 750 700 Peso al destete (Kg.) 244 230 Kg. destetados 22450 17940 Costos adicionales (en Kg.)* 1314 ------- Margen bruto (en Kg.) 21136 17940 Diferencia entre servicios (%) 18 * Costo adicional debido al tratamiento hormonal realizado en este grupo. Adaptado de Wiltbank, 1985 En este ejemplo se observa que tanto la cantidad de terneros como su peso al destete es mayor en el servicio de 2 meses respecto al de 5 y que, aún teniendo en cuenta los gastos adicionales del servicio más corto (por haber utilizado tratamientos de inducción de celos), la productividad final de éste supera en alrededor de un 18% a la productividad del servicio de 5 meses. Teniendo esta comparación como referencia, se puede comprender por qué durante los últimos 30 años se ha procurado realizar un acortamiento de los servicios y se ha propuesto una duración de tres meses como la más apropiada. Sin embargo, cuando se realizan servicios de tres meses de duración, la proporción de vacas con actividad sexual cíclica al comienzo del mismo, es alrededor de un 40 a 60% en el mejor de los casos. En estos sistemas es difícil alcanzar, y más aún sobrepasar, el 50% de vacas preñadas en el primer mes de servicio. La inducción de los celos permitirá aumentar significativamente el número de los animales preñados al comienzo del servicio, con lo cual este último puede ser acortado y, por lo tanto, se mejorará la productividad del rodeo. Como consecuencia de esto, en los últimos años la duración del servicio más aconsejada es aquella que no sobrepasa los 2 meses. En nuestro país fueron realizados diversos estudios para determinar la productividad o la eficiencia económica de rodeos en los que se implementa la técnica de inducción / sincronización de celos asociada con la IATF. A continuación se presentan algunos de ellos que, aún cuando realizan diferentes abordajes, tienen como factor común que en todos los casos se produce una significativa mejora de la productividad con el uso de estas técnicas. En el primero de ellos, el análisis de la productividad de un rodeo se hizo considerando un servicio con inseminación artificial de 30 días de duración comparando durante ese período un grupo (Grupo Control) en el cual la IA se lleva a cabo con detección de celos diaria respecto a otro en que se realizó inducción/sincronización de los celos e IATF (Grupo Tratado), prosiguiendo posteriormente la IA con celo detectado como en el otro grupo (Doray, comunicación personal). Los resultados de este análisis fueron los siguientes: 1- La preñez en 30 días fue de 34,2% y 51,5% para los grupos Control y Tratado, respectivamente. 2- La duración del intervalo inicio del servicio-concepción fue el doble en el grupo Control respecto al Tratado (6,1 vs. 12,5 días). 3- En el grupo Tratado, el 67% de las gestaciones se obtuvieron el primer día del servicio y el resto, a los 18 días promedio de su inicio. 4- El peso estimado al destete fue de 139 kg en el grupo Control y 143 kg en el Tratado (se estimó 23 kg al nacimiento + 0,687 kg/día de ganancia diaria hasta el destete x 176 días hasta el destete en las vacas tratadas y 168 días en las vacas sin tratamiento). 5- Como consecuencia de la mayor cantidad de terneros y su mayor peso, la productividad estimada de cada vaca en servicio fue de 47,5 kg (139 kg x 34,2% de preñez) en las vacas control y de 73,6 kg (143 kg x 51,5% de preñez) en las vacas tratadas. Es de señalar que el análisis anterior fue llevado a cabo a partir de trabajos realizados en la década de 1980 en que la eficiencia de la IATF después de tratamientos de inducción/sincronización de los celos era inferior a la
actual (30-35% vs. 45-50% de preñez en la actualidad) con lo cual, las diferencias obtenidas en ese estudio se harían más marcadas a favor de los animales tratados. En un segundo estudio realizado a partir de información obtenida a fines de la década de 1990 se realizaron dos evaluaciones económicas; una de ellas, comparando la productividad de un rodeo con servicio natural durante 90 días y poca mejora genética con relación a otro rodeo en el que se realiza una IATF y se prosigue el servicio con toros durante 50 días. En la segunda de las evaluaciones se hizo la comparación de dos lotes cola de parición en uno de los cuales el servicio se realizó con toros durante 30 días y en el otro con tratamiento de inducción de celos e IATF continuando el servicio con toros durante 30 días (Butler y Alberio, 1997). En ambos estudios se comparó la eficiencia productiva medida en cantidad de kg de ternero destetado y también en ambos casos, los cálculos se hicieron considerando lotes de 100 animales. En el primero de estos estudios, la comparación se hizo entre un rodeo con 90 días de servicio natural con un manejo muy bueno (90% de parición con un 45% ocurrido en el primer mes del servicio), con otro rodeo con IATF al comienzo del servicio y realizando el repaso con toros durante 50 días (93% de parición, con un 70% parido en la primera mitad del período de parición). El incremento de 18.3% de kgs de ternero producidos en el servicio de 50 días fueron producto tanto de las mejoras debidas al progreso genético (aproximadamente la mitad de las vacas han sido preñadas por un toro mejorador con IA) como al producto del acortamiento del servicio y por lo tanto al agrupamiento de la parición (Cuadro 4). En el caso presente no se cuantificaron ni evaluaron económicamente algunas variables que son de indudable beneficio para el sistema, tales como: 1- Anticipo en el diagnóstico de gestación, lo cual hace posible anticipar las ventas y disminuir la carga animal por posibilitar un uso más eficiente de las reservas forrajeras. 2- Facilita realizar el destete precoz y posibilitar una recría e invernada más eficiente al disponer de terneros muy homogéneos. 3- Mejora el control de la parición, con lo cual es posible disminuir las pérdidas. Cuadro 4. Estimación de la productividad de dos rodeos sometidos a duraciones de servicio de 90 y 50 días (calculado sobre 100 animales en servicio). En el rodeo con 50 días de servicio, se utilizó tratamiento de inducción de celos e IATF. DURACIÓN DEL SERVICIO (DÍAS) 90 50 Preñez en el primer día de servicio (%) 1,5 50 Preñez en 25 días (%) 40 80 Preñez final (%) 90 94 Peso de los terneros al destete (kg) 165 187 Kg totales producidos 15200 17980 Diferencia (%) 18,3 Costo adicional en kg * ------ 1428 Margen bruto en kg 15200 16552 Diferencia final (%) 8.9 * Costo adicional debido al tratamiento hormonal realizado en este grupo. Butler y Alberio, 1997 El estudio descrito más arriba fue realizado partiendo de una situación de estado del rodeo muy buena, con una sanidad muy controlada y un estado corporal superior a 3 (en una escala de 0 a 5). Esto se puede obtener por lo general en rodeos de Pampa Húmeda. Sin embargo, en muchas regiones del país, y aún en la Pampa Húmeda, es común llegar al momento del servicio con un estado corporal inferior al mencionado. Se suma a ello, que en muchas regiones existen otras limitantes tales como las deficiencias minerales sumando a la subnutrición, la malnutrición. En tales circunstancias, los resultados reproductivos normales son inferiores a los mencionados antes (ej., tasa de parición de 75%, distribuida en tercios iguales en los tres meses). También en esta situación, los resultados de preñez a la IATF serán inferiores a los mencionados más arriba (25-35% en lugar de 45-55%). Sin embargo, aún en estos casos este resultado será capaz de producir mejoras en la productividad corriente de estos rodeos rodeos y probablemente con diferencias mayores a las descriptas más arriba. En el análisis anterior el supuesto fue que se trató e inseminó a todo el rodeo, preñándose la mitad con la IATF. Sin embargo, es posible hacer un uso estratégico de estas técnicas. Por ejemplo, la vaca cola de parición constituye una categoría de baja productividad cuando es manejada en forma tradicional. Pero es posible mejorar su eficiencia productiva si a ese grupo lo inseminamos después de una inducción y sincronización de los celos?. El análisis mostrado anteriormente, pero restringido a las vacas cola de parición, permitió observar un
incremento de gran magnitud en la productividad de las vacas tratadas e inseminadas, que superó en un 55% a las no tratadas (Cuadro 5). Por último, se debe mencionar que recientemente fue desarrollado un programa de simulación en el cual se comparan varios parámetros productivos en rodeos en los que se utiliza la IATF y posteriormente se continúa el servicio con toros (Bottaro y Scena, 2003). El programa admite incorporar una importante cantidad de supuestos entre los cuales se encuentran la duración del servicio, la dispersión de la parición, el costo de los toros de reposición y su mantenimiento, etc. Una vez incorporados los supuestos es posible obtener una importante información comparativa de los dos sistemas en evaluación (con y sin IATF). Uno de ellos es el costo por vaca preñada en ambos sistemas, el cual resulta superior en el sistema con IATF entre un 11 y un 22%. A pesar de ello, la productividad medida como kg de ternero destetado y simuladas varias situaciones en el programa, en todas ellas el sistema con IATF produce mejoras de la productividad del sistema que oscilan entre 12 y 18%, lo cual es coincidente con algunas de las cifras mencionadas anteriormente. Cuadro 5. Estimación de la productividad de la cola de parición de un rodeo en caso de utilizarse inducción/sincronización de celos e IATF (calculado sobre 100 animales en servicio). DURACIÓN DEL SERVICIO (DÍAS) 30 (Control) 30 Tratado Preñez en el primer día de servicio (%) 1,5 50 Preñez en 30 días (preñez final) (%) 60 90 Peso de los terneros al destete (kg) 135 155 Kg totales producidos 8100 14000 Diferencia (%) 72 Costo adicional en kg * ------ 1428 Margen bruto en kg 8100 12572 Diferencia final (%) 55 * Costo adicional debido al tratamiento hormonal realizado en este grupo. Butler y Alberio, 1997 Algo que es muy importante de ser señalado, es que en con este programa es posible visualizar con buena objetividad que aún bajos resultados de preñez después de una IATF son compatibles con ganancias con respecto a lo que sería la situación sin tratamiento. En dichos programas hemos incorporado tasas de preñez a la IATF de alrededor del 20% y comparado con el rodeo sin tratamiento, es posible lograr mejoras superiores al 5-10%. Esto quiere decir que aunque el tratamiento requiere una inversión inicial, aún los relativamente bajos resultados justifican su aplicación. Es importante tener en cuenta esto cuando se está ante situaciones que distan de ser las óptimas para la aplicación de tales tratamientos. Este comentario producto de lo analizado con el programa de simulación mencionado es coincidente con lo obtenido en el primero de los estudios mencionados en el cual, con tasas de preñez del 30% a la IATF, se obtuvieron significativas mejoras en la productividad de los rodeos por el simple uso de la IATF. En síntesis, todos los análisis realizados por diferentes autores para evaluar el interés económico del uso de la IATF son coincidentes en que la técnica siempre produce resultados positivos y que las mejoras en productividad del mencionado sistema de reproducción pueden oscilar entre el 10 y el 50% según las situaciones analizadas. Cuando se realizó un análisis parecido aplicado al ganado lechero, se determinó que la aplicación de un programa de sincronización de los celos e IATF producía en nuestros sistemas, beneficios netos sobre la producción que oscilaban entre 25 a 50 dólares por animal tratado (Marcantonio y de la Sota, 2000). Bibliografía Burris, M. and Priode, B. 1958. Effect of calving date on subsecuent calving performance. J. Anim. Sci. 15:527 Butler, H. y Alberio, R. 1997. Más carne, mayor rentabilidad, con la utilización Eazi-Breed CIDR. Boletín Técnico Boehringer Ingelheim. 6 pp García Paloma J., Alberio R., Miquel M., Grondona M., Carrillo J. and Schiersmann G. 1992. Effect of calving date on lifetime productivity of cows in a winter-calving Aberdeen Angus herd. Animal Production 55:177-184 Habich, G. y Joandet, G. 1976. Eficiencia reproductiva de bovinos. Análisis cuantitativo de la importancia de varios de sus parámetros componentes. Producción Animal, vol. 6:166-174 Leismeister J., Burfening P. and Blackwell R. 1973. Date of first calving in beef cows and subsequent calf production. J. Anim. Sci. 36:1-6 Marcantonio, S. y de la Sota, L. 2000. Cálculo del retorno económico por la utilización del programa Bovsynch. Manual Técnico Bovsynch de Intervet Argentina S.A. Editado por Agroeditora SRL Wiltbank J. 1985. Maintenance of a high level of reproductive performance in the beef cow herd. Ann. Conf. A.I. and Embryo Transfer in beef cattle. pp 12-27