DICTAMEN Nº. 69/2008, de 9 de abril. *

Transcripción

1 DICTAMEN Nº. 69/2008, de 9 de abril. * Expediente relativo a reclamación de responsabilidad patrimonial de la Administración Sanitaria a instancia de Dª. X, como consecuencia del accidente sufrido por D. Z en el Complejo Hospitalario H, centro dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM). ANTECEDENTES El 15 de mayo de 2007 Dª. X presentó Hoja de reclamaciones, quejas, iniciativas y sugerencias en el Complejo Hospitalario H, como consecuencia del accidente sufrido por D. Z, de 76 años de edad, el día 13 de mayo de 2007 en la habitación 226 del citado centro sanitario, a las horas. Los hechos se exponían así: Felipe se encontraba en el pasillo con su mujer, nieto e hijo porque una enfermera iba a limpiar a una paciente de dicha habitación. Felipe se puso de espalda a la puerta con las manos cruzadas, cuando la enfermera entró y cerró la puerta, amputándole la falange distal del 4º dedo de la mano derecha, trozo que cayó al suelo. Enseguida fueron las enfermeras para socorrerlo y le dieron a Z el trozo de dedo que había caído al suelo. [ ] Lo bajaron a urgencias y lo curaron [ ] Solicito que el hospital se haga cargo del accidente ocurrido en el hospital y pedimos indemnización por daños y perjuicios. Instruido el correspondiente procedimiento de responsabilidad patrimonial se propuso la estimación de la reclamación interpuesta, entendiendo que existía relación de causalidad entre el funcionamiento del servicio y el daño alegado, y que el perjudicado no tenía el deber jurídico de soportar el mismo. Se propuso una indemnización por secuelas de euros, correspondientes a los tres puntos de valoración de la lesión, según actualización mediante Resolución de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones de 17 de enero de EXTRACTO DE LA DOCTRINA En cuanto a la relación de causalidad entre el daño producido y el servicio público en que tuvo lugar debe considerarse que existe, pues la lesión se produjo como consecuencia de una actuación del personal del Hospital General H que se encargaba de la limpieza y aseo de los pacientes, al cerrar la puerta de una de sus habitaciones inmediatamente después de indicar que la abandonasen los visitantes de los enfermos que se hallaban dentro de ella, para lavar a una de las enfermas. Del examen de los hechos recogidos en el expediente se desprende que, inmediatamente de desalojada la habitación por los acompañantes, se cerró por uno de los empleados del centro la puerta con más fuerza de lo normal. Apreciación que se apoya en la presunción de que una puerta de madera -como son las de las habitaciones del Hospital H- cerrada normalmente no provoca el corte total de la falange de un dedo, aunque éste se halle - * Ponente: Salvador Jiménez Ibáñez 1

2 Dictámenes Consejo Consultivo Castilla-La Mancha como parece ser el caso- en el marco de la misma, cayendo el trozo de dedo al suelo, según indican tanto la reclamante como la Supervisora de Nefrología que emitió informe de lo sucedido. Se está, por tanto, ante un modo inadecuado de cerrar la puerta de la habitación inmediatamente después de que una serie de visitantes abandonasen la habitación a instancia del personal del Hospital, lo que puede considerarse causa suficiente de imputación del desgraciado accidente producido. Abona esta presunción la conclusión del instructor de que, si bien se trata de un hecho accidental, éste podría haberse previsto y por tanto evitado y el que la propuesta que se examina estime la reclamación. Ahora bien, también debe tenerse en cuenta la conducta descuidada del lesionado, que se puso de espaldas a la puerta con las manos cruzadas, con éstas -o al menos el dedo lesionado- puestas en el marco de la puerta. Actuación imprudente que coadyuvó a la producción del accidente por el que se reclama. A la vista de todo ello debe entenderse que la lesión se produce por una concurrencia de conductas inconvenientes -la de la persona del servicio del Hospital que cierra la puerta con la suficiente fuerza para cortar de raíz la falange de un dedo y la del propio lesionado que tiene éste en el marco de la puerta que se cierra- que, si bien sirve para atribuir a la Administración sanitaria participación en la producción del daño por el que se reclama, también supone la participación del propio lesionado en el desgraciado accidente. Esto así, según consolidada doctrina jurisprudencial, la concurrencia de ambas culpas implica la disminución de la indemnización del daño que la Administración deba satisfacer una vez admitida su responsabilidad patrimonial. Esta misma doctrina entiende que, cuando no se pueden delimitar los porcentajes con los que debe soportar cada una de las partes responsables el daño producido, el mismo debe ser soportado por mitad. Criterio que -a juicio de este Consejo- es el que debe aplicarse en el presente caso. Establecida la existencia de relación de causalidad entre el funcionamiento del servicio público y el daño alegado en los términos expuestos en la consideración anterior, procede determinar el montante de la indemnización que procedería abonar al lesionado. Nada dice la reclamante sobre la valoración del daño sufrido por su abuelo; por su parte, la propuesta de resolución, tomando como referencia el Texto Refundido de la Ley sobre Responsabilidad Civil y Seguro en la Circulación de Vehículos a Motor aprobado por el Real Decreto Legislativo 8/2004, de 29 de octubre, conforme a la actualización del baremo de accidentes de circulación para el año 2008 efectuada por la Resolución de la Dirección General de Seguros y Fondo de Pensiones del Ministerio de Economía y Hacienda, establece la siguiente valoración: por la amputación de la falange distal del cuarto dedo, 3 puntos; por el módulo establecido de 554,68 euros para indemnización por lesiones permanentes incluidos daños morales. Total = 1.664,04 euros. En tal valoración deben introducirse dos correcciones. La primera es que la Resolución de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones que debe ser tenida en cuenta es la de 7 de enero de 2007, que publicaba la cuantía de las indemnizaciones para ese año, que es cuando ocurrió el daño que se valora. Según ella, el punto por pérdida de la falange distal del 4º dedo, para mayores de 65 años, 2

3 incluidos daños morales, se fijan en 532 euros, cantidad que multiplicada por los tres puntos en que se evalúa tal pérdida suponen euros. La segunda corrección obedece a la disminución del 50% que, por existir concurrencia de culpas, se ha señalado como procedente en la consideración anterior, con lo que la cifra a indemnizar sería de 798 euros. Cantidad que deberá ser objeto de actualización conforme a lo previsto en el artículo de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre. DICTAMEN Que existiendo relación de causalidad entre el funcionamiento del servicio público del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha y el daño sufrido por D. Z, procede dictar resolución declarando la responsabilidad patrimonial de la Administración en concurrencia al 50% con el perjudicado y declarar el derecho de éste a percibir de la Administración regional una indemnización de 798 euros con la actualización que proceda. 3

4 4 Dictámenes Consejo Consultivo Castilla-La Mancha

5 5