Centro de Estudios e Investigación de Teatro y Sociedad / Museo Interactivo Mirador. Una experiencia interdisciplinaria: Teatro y Educación

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1 Cátedra de Artes N 12 (2012): ISSN Facultad de Artes Pontificia Universidad Católica de Chile Centro de Estudios e Investigación de Teatro y Sociedad / Museo Interactivo Mirador Una experiencia interdisciplinaria: Teatro y Educación Por Consuelo Morel mmorel@uc.cl Imagen 1. Taller de Estrategias Lúdicas e Interactivas para el Aula. Fotografía de Rodrigo Canales El Centro de Estudios e Investigación de Teatro y Sociedad (CTS), de la Pontificia Universidad Católica de Chile, es una unidad nacida en el año 2010 al alero de las Facultades de Artes y de Ciencias Sociales de la misma universidad. Su misión consiste en realizar investigación interdisciplinaria y generar conocimiento sobre las relaciones entre teatro, sociedad y cultura, de modo de establecer interacción con distintos actores sociales respondiendo a sus demandas y desarrollando recursos para apoyar la creación de políticas públicas. Bajo esta premisa se establece la relación con el Museo Interactivo Mirador (MIM), ubicado en la comuna de La Granja, al sur de la ciudad de Santiago, espacio educativo, interactivo y lúdico único en Chile. Con m2 instalados, el MIM se ha transformado en uno de los espacios de innovación más importantes del país. Desde su apertura en el año 2000 recibe un promedio de visitas al año, siendo un 70% de su público estudiantes. Su metodología, de acuerdo a su propia definición, se basa en la educación entretenida y el aprender haciendo. El museo tiene tres principales líneas de acción: las exhibiciones fijas del museo, exposiciones itinerantes regionales y un Programa de Formación Continua

2 Reseñas 165 para profesores. En esta tercera línea, cuya búsqueda es entregar herramientas a los profesores para la aplicación de metodologías interactivas en la enseñanza, es donde apostaron por el CTS como un aliado estratégico. Metodología de trabajo La propuesta aceptada por el MIM consistió en el desarrollo de un Taller de Estrategias Lúdicas e Interactivas para el Aula, destinado a la capacitación de profesores, basado en el juego como dinámica metodológica y con especial énfasis en un trabajo dramático, el trabajo del cuerpo, la voz y la afectividad. Para este objetivo, se diseñó un plan en tres etapas, que incluyó una investigación teórica para elaborar el diseño del taller, una serie de marchas blancas como pretest del mismo, y la implementación efectiva del taller con su respectiva evaluación. Se conformó entonces un equipo interdisciplinario donde se integraban conocimientos de arte contemporáneo, sociología, pedagogía teatral, psicodrama, comunicación efectiva y por supuesto, teatralidad y juego dramático. En esta primera etapa de investigación, se contó con la colaboración de Verónica García-Huidobro, especialista en el área de pedagogía teatral. En el proceso de trabajo se revisó la reforma educacional chilena y sus principales orientaciones, el informe McKinsey sobre sistemas educacionales exitosos a nivel global (determinados por la OCDE), y se hizo un análisis crítico de las anteriores experiencias del Programa de Formación Continua del MIM. Se consideraron conceptos propios de las habilidades blandas y las orientaciones renovadas con las que estas se enseñan, principalmente a nivel de las corporaciones, intentando generar un modelo de trabajo que fuera innovador y que se relacionara con la forma en que el mundo laboral está dialogando en la actualidad. Así entonces fue posible discutir sobre una serie de ejercicios provenientes de la pedagogía teatral y el psicodrama que se trabajan en capacitaciones, coachings y talleres teatrales, de modo de poder generar un diseño a la medida de lo solicitado, combinando estas distintas orientaciones. Se detectó que era importante desarrollar en los docentes una serie de habilidades que permitieran instalar en ellos una dimensión lúdica e interactiva como actitudes personales puestas al servicio del trabajo y, por lo tanto, al servicio de la experiencia de enseñanza, de manera de transferirlas correctamente en la experiencia del aprendizaje. Esto implicaba replantear las mismas nociones de creatividad e interactividad y descubrirlas como competencias propias con potencial de ser desarrolladas. Solo de esta manera se lograría entrenar al docente lo suficiente para poder integrar estas nuevas estrategias propuestas como parte de su ejercicio profesional cotidiano. Esta nueva perspectiva se convierte en un hallazgo interdisciplinario, donde vemos posible una forma de diálogo entre teatro y educación desde un marco más amplio, generando una experiencia renovada en cuanto a didácticas docentes.

3 166 Cátedra de Artes N 12 (2012): Imagen 2. Taller de Estrategias Lúdicas e Interactivas para el Aula. Fotografía de Rodrigo Canales El cambio de eje replantea la visión tradicional que se tiene del juego como una dinámica indisciplinada, y predispone a los educadores a desenvolverse en un ambiente más flexible ante los imprevistos. Por esto se ha concluido que no bastaba con enseñar juegos, a modo de tips o recetas, ya que esto contribuiría a continuar con un modelo demostrativo y efectista; sino que lo que se debía hacer es transformar estos juegos, para dotar a los profesores de herramientas flexibles que pudieran adaptarse a diversas circunstancias, ya sea para modificar conductas o mejorar rendimientos en el aula. Imagen 3. Taller de Estrategias Lúdicas e Interactivas para el Aula. Fotografía Rodrigo Canales Luego de una serie de marchas blancas realizadas en la Escuela Paicaví, en la Universidad SEK y el colegio Arzobispo Manuel Vicuña (Fundación Belén Educa), se realizaron las correcciones finales y se terminó el diseño del Taller

4 Reseñas 167 de Estrategias Lúdicas e Interactivas para el Aula, con una duración de tres jornadas, divididas en tres unidades ejes: creatividad, comunicación y liderazgo. Tras la aprobación de la investigación y diseño de taller tanto por el MIM, como por el Centro de Perfeccionamiento, Experimentación e Investigaciones Pedagógicas CPEIP, se procedió a desarrollar el Taller Piloto con un grupo de profesores de la comuna de La Granja. La experiencia ha parecido satisfactoria para todos los actores involucrados. Esto se percibió en el espacio de trabajo, con los comentarios de los profesores asistentes. También se pudo corroborar esta impresión en el resultado de encuestas aplicadas tanto por el MIM como por el CTS, de modo de evaluar y medir la experiencia vivida por los docentes durante el transcurso del taller. De ahí en adelante se han realizado hasta la actualidad siete talleres, en las ciudades de Santiago, Olmué, Concón, La Serena, San Antonio y Quillota, contando ya con más de 150 profesores capacitados. Las respuestas constantes tras las aplicaciones de la evaluación de la experiencia, han sido satisfactorias y dan cuenta de que los docentes consideran que el taller es útil e importante para su ejercicio profesional. También agradecen la posibilidad de nutrirse de nuevas didácticas. Seguimiento de la investigación Durante el año 2012, el CTS madura una idea que venía trabajando ya desde el inicio del convenio con el MIM: desarrollar una segunda etapa de trabajo, como una forma de realizar un seguimiento posterior a la aplicación del taller. Se sostiene que esta es la única forma de poder evaluar una efectividad real, ya que las metodologías interactivas están plenamente desarrolladas para que sean los alumnos quienes disfruten los principales beneficios, a través de una mejor forma de adquirir conocimientos. Se contó en esta etapa con la asesoría de la socióloga Antonieta Contreras, quien trabaja como investigadora del Centro de Desarrollo Docente (CDDOC) de la Pontificia Universidad Católica de Chile, para elaborar la propuesta. A la fecha, el MIM ha aprobado la primera parte de esta propuesta que es el desarrollo, aplicación y análisis de una nueva encuesta, ex post en el tiempo. Aplicada vía plataforma electrónica Survey Monkey, la encuesta fue enviada al correo electrónico de los 122 docentes que realizaron el taller. A modo de exponer algunos resultados obtenidos, ocuparemos parte de esta reseña para compartir la información que nos entregó este instrumento, pues completan el panorama de lo que ha sido la experiencia de trabajo entre CTS y MIM hasta ahora. Se determinaron variables múltiples que caracterizaban perfiles de profesores, indicaban la transferencia y las condiciones de la misma, además de una percepción en relación a los resultados obtenidos con esta transferencia, y por último una valoración del taller a la distancia del tiempo en que fue impartido.

5 168 Cátedra de Artes N 12 (2012): Dentro de los primeros hallazgos, se puede mencionar que ante la pregunta Desde el taller, ha podido implementar alguna estrategia lúdica o interactiva?, un 97,9% de las respuestas son positivas. Luego, al revisar las preguntas en torno a la frecuencia de la transferencia y las condiciones de la misma, el escenario es diverso en cuanto a la cantidad de aplicaciones y las razones de estas cantidades. Solo vuelve a haber consenso en relación al modo en que se aplicaron los ejercicios aprendidos, obteniendo un 97,7% de respuestas que aclaran que las estrategias aprendidas fueron aplicadas tras ser adaptadas a las necesidades y contexto de los estudiantes. Se detecta que un 100% de aquellos que aplicaron estrategias aprendidas en el Taller, aseguraron que estas habían motivado más a sus estudiantes en el aprendizaje. Ante estos primeros resultados que elaboran un panorama de lo que ha sido la experiencia a lo largo del tiempo, lo más destacable es la posibilidad de que la labor que se realiza dentro de la Facultad de Artes de una entidad como la P. Universidad Católica de Chile pueda impactar de forma positiva en espacios que parecen tan distantes. Espacios como escuelas municipales de La Serena o Quillota, donde desde una serie de eslabones, se logra poner al servicio de los profesores y el país, los conocimientos generados a partir del trabajo de un centro de estudios como el CTS.