La Unión Europea es uno de los principales donantes para Centroamérica. En la historia de la

Transcripción

1 Breve reseña histórica y situación actual de las negociaciones entre Centroamérica y la Unión Europea tendientes a la negociación y firma de un Tratado de Libre Comercio entre ambas regiones La Unión Europea es uno de los principales donantes para Centroamérica. En la historia de la región, la Unión Europea jugó un papel de suma importancia en los procesos de pacificación en la década de los ochenta. En lo relativo a las exportaciones e importaciones centroamericanas, el mercado de la Unión Europea ocupa el segundo lugar, después de Estados Unidos. Las relaciones entre Centroamérica y la Unión Europea están plasmadas en una serie de documentos, en los cuales se reflejan los intereses de la Unión Europea en la región. En primer lugar existe un acuerdo de diálogo político y cooperación firmado en octubre del 2003, mismo que aún no ha sido ratificado por todos los países. En el 2004 se suscribe por parte de los países de Latinoamérica y la Unión Europea la Declaración de Guadalajara. Actualmente se están elaborando estrategias de cooperación para Latinoamérica, Centroamérica y para cada país. Sin embargo, existen ciertas incoherencias, pues por un lado se busca la cooperación y cohesión social de los pueblos de la región y por otro se encuentran los intereses de la Unión Europea de integrar la región Centroamericana para fines económicos comerciales.

2 Sobre el tema se dice que La Unión Europea representa casi 14% del comercio exterior de los países centroamericanos, pero el mercado centroamericano solamente representa un 0.4% para la Unión Europea. Sin embargo, el 60% de los fondos de cooperación de la Unión Europea para Latinoamérica están destinados a Centroamérica. El interés más grande de la Unión Europea en la región es la cooperación y no el comercio. Sin embargo, es probable que la firma de un TLC entre Centroamérica y los Estados Unidos, sea seguida por un TLC con la Unión Europea, como pasó en los casos de México y Chile. Todavía queda por ver si la Unión Europea está preparada para ceder en un tratado de comercio, sobre los temas de mayor importancia para el desarrollo de la región. [1][1] El proceso del Acuerdo de Asociación entre Centroamérica y la Unión Europea En el mes de mayo del año 2004, durante la denominada Cumbre de Guadalajara Centroamérica y la Unión Europea acordaron abrir el proceso hacia un Acuerdo de Asociación que incluya un área de libre comercio entre ambas regiones. En primer lugar, la Declaración señala la importancia de la firma y posterior implementación del Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación firmado entre Centroamérica y la Unión Europea en diciembre del año 2003, así como los avances logrados en la denominada Cumbre de [1][1] Bergea (Jon). La Unión Europea y Centroamérica Nuevas Estrategias y Tratados de Comercio, julio 2005, disponible en:

3 Madrid, reconociendo ambas partes que el camino hacia un Acuerdo de Asociación es un objetivo estratégico común. La Declaración también señalaba, que este proceso necesariamente debía iniciar con una fase de valoración conjunta de los respectivos procesos de integración económica regional, lo que permitiría crear un espacio para que las partes intercambiaran información y legislaciones y a la vez diseñaren la estructura de acuerdo que más se aproximara a sus intereses. Este proceso de valoración es un requisito previo que impuso la Unión Europea como condición para sentarse a negociar la posible firme de un Tratado de Libre Comercio entre ambas regiones. En el mes de enero del año 2005, en Bruselas, Bélgica, las autoridades comerciales de Centroamérica y Europa definieron los objetivos y la metodología de la fase de valoración conjunta del proceso de integración económica regional mencionada anteriormente y que como ya se dijo, representa la etapa previa al lanzamiento de las negociaciones de un Acuerdo de Asociación que incluya un Tratado de Libre Comercio entre ambas regiones. En esta reunión se acordó que en esta fase se realizaría una valoración conjunta sobre el estado de la integración económica, y acordaron además, la creación de un grupo de trabajo ad-hoc, que se encargará de realizar los trabajos técnicos en esta fase de valoración. Entre el 31 de marzo y el primero de abril del 2005, se realizó la primera reunión de dicho grupo de Trabajo Centroamérica-Unión Europea, cuyo objetivo era cumplir con lo acordado en la Cumbre de Guadalajara, es decir, iniciar la fase de valoración conjunta del proceso de integración económica regional que posteriormente concluya en un tratado de libre comercio entre ambas regiones. En esta fase el objetivo era evaluar los aspectos relacionados con cuatro grandes áreas: el marco institucional de la integración económica centroamericana, la Unión Aduanera, el marco

4 reglamentario comercial y la reducción de los obstáculos no arancelarios al comercio intraregional. La segunda reunión de la fase de valoración conjunta entre Centroamérica y la Unión Europea se realizó en Bruselas, Bélgica, durante el mes de Julio del Durante esta reunión las delegaciones de los países de Centroamérica y de la Unión Europea continuaron los trabajos de valoración conjunta y compartieron experiencias e información general relativa a las cuatro grandes áreas mencionadas y presentó un avance significativo en esta etapa preparatoria. La tercera y última reunión de la fase de valoración se celebró en San Salvador en el mes de noviembre del año En dicha reunión, Panamá, quien hasta ese momento había participado como observador, manifestó su voluntad y deseo de integrarse con Centroamérica a través de Tratados de Libre Comercio, lo que fue muy bien recibido por la Comisión Europea, quien ve positivamente la participación de Panamá en el proceso, como una manera de que la Integración Centroamericana avance más rápidamente. En el mes de febrero del 2006, los Viceministros de Comercio Exterior de Centroamérica concluyeron la revisión del informe final de la fase de valoración del proceso de Integración Económica Centroamericana. Las conclusiones arrojadas en este proceso determinaron, según los viceministros, que se han hecho progresos importantes en el tema de la integración centroamericana, específicamente en el marco jurídico institucional, la unión aduanera, servicios e inversión, medidas sanitarias y fitosanitarias, y derechos de propiedad intelectual, lo que permite iniciar un proceso de negociación con la Unión Europea para establecer un Acuerdo de Asociación, que incluya un Tratado de Libre Comercio. El grupo de trabajo ad-hoc elaboró sus conclusiones y recomendaciones finales, mismas que fueron analizadas en la XIV Comisión Mixta, misma que se realizó en el mes de marzo del

5 2006 y que reunió a las autoridades políticas centroamericanas y europeas. En dicha reunión, el Jefe de la Delegación de la Comisión Europea, el señor Jouanjean, señaló la importancia política que tiene América Latina para la Unión Europea, y el avance para las relaciones entre ambas partes que había representado el trabajar conjuntamente en la perspectiva de un Acuerdo de Asociación entre ambas regiones fundamentado en principios y valores comunes, que vaya más allá del establecimiento de una zona de Libre Comercio, sino que incluya un reforzamiento del diálogo político y de la cooperación entre ambas regiones. Las Partes expresaron su satisfacción por los fructíferos trabajos realizados durante la Fase de Valoración Conjunta y destacaron que la misma permitió conocer el estado actual del proceso de integración económica centroamericana, sus avances, sus desafíos actuales y perspectivas futuras, así como el funcionamiento de la integración europea. Precisamente, en el marco de la IV Cumbre América Latina- Unión Europea, realizada en Viena en el mes de mayo del presente año, las autoridades centroamericanas y europeas anunciaron el inicio de las negociaciones de un Acuerdo de Asociación que incluye una Zona de Libre Comercio. El paso a seguir en las negociaciones, es la elaboración por parte de la Comisión Europea del denominado mandato de negociación, que es el instrumento que determinará las bases y los parámetros a seguir en este proceso. El mandato de negociación La aprobación de la Declaración de Viena, el marco de la IV Cumbre Unión Europea Unión Europea y El Caribe, el pasado 12 de mayo, marcó las pautas para la consecución de acuerdos entre la Unión Europea y Centroamérica.

6 De esta forma, la Comisión Europea al plantear la posibilidad de un acuerdo comercial con las naciones centroamericanas debe presentar una serie de recomendaciones al Consejo Europeo, quien posteriormente las remitirá al Parlamento para su consulta. Es así, como el llamado Mandato de Negociación del Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y Centroamérica constituye el instrumento que emana del seno de la Unión Europea en el cual se plasmarán los puntos sobre los cuales se basará el acuerdo. Recientemente el Parlamento Europeo realizó una serie de Recomendaciones al Consejo Europeo sobre este tema. A continuación se resumen dichas acotaciones: - El acuerdo debe basarse en el respeto de los derechos fundamentales y la dignidad de los seres humanos, sin menoscabar el Estado de Derecho, ni las libertades individuales. - No se pretende negociar un mero tratado de libre comercio, sino llegar a una asociación política y económica con Centroamérica, tomándose en cuenta las asimetrías y desigualdades existentes entre ambas partes, por lo que se deben incluir disposiciones sobre la cooperación al desarrollo. - Para las negociaciones del Acuerdo no se debe dejar de la lado el alto déficit económico, político y social existente en la región centroamericana, ni ignorar las diferencias entre ésta y la Unión Europea. - Tampoco se deben ignorar las características de las relaciones económicas en Centroamérica, como lo son la concentración del comercio regional en pocos países, la alta dependencia a la exportación de productos tradicionales y los bajos niveles de inversión extranjera directa de la Unión Europea en la región. - El mandato debe incluir expresamente la base jurídica sobre la cual se negociará el Acuerdo de Asociación.

7 - Se deben prever los mecanismos necesarios para asegurar que el Acuerdo se ajuste a las disposiciones del Tratado de la Unión Europea, según el cual los objetivos básicos son la cooperación internacional, el desarrollo, el respeto de los derechos humanos la consolidación de la democracia y del Estado de Derecho. - Las orientaciones de la negociación deben incluir la mejor forma de colaborar estrecha y conjuntamente para fomentar el multilateralismo y enfrentar en común las amenazas para la paz y la seguridad. - Los puntos de la negociación deben prever el acceso progresivo de los productos centroamericanos a los mercados europeos, en condiciones competitivas, evitando de esta forma que se acentúen las desigualdades existentes. Para lograr lo anterior se debe establecer un trato especial, diferenciado y flexible en los plazos a acordar, a partir de medidas de apoyo como la transferencia de tecnología, creación de programas de cooperación y asistencia técnica. - Se deben crear mecanismos concretos que aseguren la operatividad de las cláusulas democráticas u otras de carácter social o medioambiental, para que de esta manera no sean solo expresión de buenas intenciones. Para lo anterior se prevé que se rinda un informe anual al Parlamento Europeo sobre el seguimiento llevado a cabo por la Comisión. - Se debe incluir una participación activa y estructura de la sociedad civil en las fases de discusión, negociación y seguimiento del proceso. - La Comisión debe informar exhaustivamente al Parlamento sobre sus recomendaciones en lo que atañe al mandato de negociación. La Unión Europea y su Estrategia Regional

8 Sobre esta temática, es de suma importancia conocer a fondo el documento elaborado por la Unión Europea denominado Estrategia regional , pues esboza, al menos en teoría, cuales son las intenciones y el enfoque que la Unión Europea desea darle a sus relaciones políticas y comerciales con América Latina y más concretamente con Centroamérica, En su documento borrador de estrategia regional la UE propone concentrar su estrategia regional en la creación de un Acuerdo de Asociación que consistiría no solamente en un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre las dos regiones sino que incluiría también el diálogo político y la cooperación. Se trata de una perspectiva integral que a primera vista da una sensación de alivio de que la UE tiene la intención de representar un enfoque distinto al desarrollo en la región que EE UU, el que se ha caracterizado históricamente por el intervencionismo militar, una preocupación por la seguridad propia (guerra fría, narcotráfico, terrorismo) y agendas económicas y comerciales combinadas con presiones políticas de distinta índole. [2][2] Sobre este particular, históricamente, el papel de la Unión Europea en la región ha sido diametralmente distinto al desempeñado por Estados Unidos, jugando desde la época de los ochentas un rol político crucial en la resolución de conflictos, el mantenimiento de la paz y el desarrollo político en la región, esto ha creado un sentido de compromiso mutuo y confianza entre los tomadores de decisiones políticas de ambas regiones, lo cual podría proveer de un [2][2]

9 fuerte fundamento para la continuación de los diálogos políticos entre la representación de la Comisión Europea y los funcionarios públicos regionales [3][3] Ya en la declaración de la Cumbre de Guadalajara, ambas partes establecían la necesidad de prevenir y erradicar la pobreza y la exclusión social, por medio de la promoción de la integración y la participación de todos en la vida social y económica, a través de la consulta y participación activa de los diversos actores sociales, reconociendo que el crecimiento económico por sí solo no resolverá los problemas de la región, lo que refleja, en cierta medida, el compromiso social existente por parte de la Unión Europea. Pese a lo anterior, el borrador actual del documento de estrategia regional , la Unión Europea pone énfasis en las características económicas, comerciales e institucionales de la integración regional, dejando en un segundo plano el diálogo político y la cooperación, misma que no queda clara la forma en que se pretende implementar. Estos y otros factores históricos nos podrían generar cierta certeza de que efectivamente los intereses la Unión Europea van más allá de la firma de un Tratado de Libre Comercio con Centroamérica, sin embargo, las organizaciones sociales hoy más que nunca tienen un compromiso con la región, pues de su participación e incidencia en este proceso dependerá en mucho el tipo de modelo de desarrollo a seguir y las consecuencias, positivas o negativas que el mismo traiga para la población de la región centroamericana, evitando de esta manera que este proceso se convierta en un nuevo CAFTA. Las asociaciones civiles, organizaciones sindicales y demás actores sociales deben participar activamente en la elaboración de este proceso, a través de procesos de retroalimentación en donde se realice una labor de vigilancia y de propuestas tendientes a que en el citado tratado no se limite a un acuerdo comercial, sino [3][3] Ibidem

10 que se convierta en un instrumento generador de riqueza, que ayude a mejorar la educación de la región, generando empleo decente, garantizando la seguridad alimentaria y se respeten de manera efectiva, derechos laborales fundamentales tales como la libertad sindical, la igualdad de género y de remuneración, la no discriminación, el salario mínimo, la abolición del trabajo forzoso y la edad mínima en el empleo, por citar solo algunos de ellos. Este boletín es responsabilidad del Instituto Centroamericano de Estudios Sociales, ICAES y de la Confederación Centroamericana de Trabajadores, CCT. San José Costa Rica Visítenos en nuestra página WEB: y podrá encontrar más información. Si no desea seguir recibiendo este boletín, favor escríbanos al de envío. icaesca@icaescr.com para borrarlo de la base