OFICINA INTERNACIONAL DEL TRABAJO Oficina Regional para América Latina y el Caribe La crisis del Empleo juvenil: Un llamado a la acción Prioridades y líneas de acción en América Latina y el Caribe Lima, 2 3 de octubre 2013 1. Los desafíos del Empleo Juvenil en América Latina y El Caribe En un contexto en el que la gran mayoría de los países de América Latina y el Caribe ha logrado un buen desempeño económico, sobreponiéndose paulatinamente a los embates de la reciente crisis financiera internacional, los 108 millones de jóvenes de 15 a 24 años de edad en 2013 parecen disponer de condiciones sumamente favorables para su desarrollo en diferentes ámbitos de su vida. Más educados que generaciones previas, mejor manejo de nuevas tecnologías y mayor adaptabilidad en comparación con los adultos, tendrían mayores oportunidades de acceder a mejores condiciones laborales y trayectorias laborales ascendentes. Sin embargo, según datos de la OIT sobre Trabajo Decente y Juventud 2013 1, una serie de obstáculos impiden el aprovechamiento pleno de estas ventajas, no obstante logros alcanzados en algunos indicadores laborales, la precariedad de la inserción laboral de los jóvenes continúa siendo una característica persistente en la región. Entre 2005 y 2011, el desempleo de los jóvenes de 15 a 24 años se redujo de 16.4% a 13.9%, No obstante, aun triplica la tasa correspondiente a los adultos. Si bien esta reducción del desempleo es positiva, los jóvenes desempleados representan más del 40% de total de los desempleados de la región. Asimismo, se destaca la gravedad del problema en el caso de las mujeres jóvenes cuya tasa de desempleo a nivel regional alcanzó al 17.7%, comparado con un 11.4% en el caso de los hombres jóvenes. Del total de jóvenes de la región, aproximadamente 35% solo estudia y 33% solo trabaja, cerca de un 12% estudia y trabaja al mismo tiempo y uno de cada cinco jóvenes en la región no estudia y ni trabaja (los ni-ni). Uno de cada 20 jóvenes no estudia, ni trabaja ni desempeña quehaceres del hogar, y tampoco busca trabajo, tratándose, sin duda, de jóvenes excluidos y de alto riesgo social. Además, el 19% de las mujeres jóvenes del mismo grupo etario se ocupan en oficios del hogar, lo que les limita las perspectivas favorables para una futura inserción laboral. Entre los jóvenes que trabajan, un elevado porcentaje lo hacen en condiciones precarias, solo el 37% cotizan a un seguro de salud y 29% a un sistema de pensiones y más de la mitad (55.6%) tiene un empleo informal, lo que por lo general significa, bajos ingresos, inestabilidad laboral, desprotección y violación de derechos laborales. Además de la brecha intergeneracional y de género otro elemento que afecta la inserción laboral juvenil es la alta segmentación socioeconómica, que a la vez es reflejo y origen de la elevada desigualdad en América Latina. En efecto, las evidencias indican que se mantiene una enorme brecha en el desempleo de los jóvenes pertenecientes a los quintiles de menores recursos (25.5%) frente a los quintiles de mayores recursos (8.5%). Esta fuerte correlación de acuerdo al nivel de ingreso familiar per cápita se mantiene en todas las variables, solo cerca del 12% de jóvenes del quintil más pobre cotiza a un seguro de salud o sistema de pensiones frente a un 60% del quintil más rico, de manera similar quienes pertenecen a los quintiles de menores recursos tienen más probabilidades de tener un empleo informal (77%) en comparación con el los que tienen 1 OIT 2013. Informe de Avance: Trabajo decente y Juventud en América Latina. Lima 1 P age
más recursos (41%). La falta de oportunidades laborales decentes para los jóvenes está provocando altos niveles de violencia e inseguridad en muchos países y, en algunos, la mitad o más de los jóvenes se irían de sus países si tuvieran la oportunidad. En consecuencia, se puede afirmar que la situación laboral de los jóvenes latinoamericanos es crítica, dinámica y segmentada, todo lo cual presenta un gran desafío para las políticas públicas en un periodo que algunos analistas califican como la década de América Latina. En términos generales y con muchas variaciones, la región se ha beneficiado de un ritmo de crecimiento económico considerable (mismo si los países se han visto afectados por la crisis económica mundial) que ha hasta cierto punto a favorecido una reducción considerable de la pobreza. Al mismo tiempo que la región tiene una ventaja demográfica y debe mejorar la productividad de los trabajadores jóvenes. Estas tres cosas pueden ser aprovechadas para avanzar en la agenda del trabajo decente para los y las jóvenes. Es importante que los gobiernos aprovechen al máximo de esta ventana de oportunidad demográfica a través de políticas públicas que estimulen el empleo juvenil, y es imprescindible que actúen ahora. A partir del 2025, el número de perceptores con respecto al número de dependientes empezará a decaer, pues la fuerza del trabajo envejecerá 2. Si la región no aprovecha las oportunidades que provee la fuerza de trabajo ahora, será más difícil generar las rentas necesarias para cuidar una población mayor en el futuro. 2. La OIT y la promoción del trabajo decente para la juventud en América Latina y El Caribe La Resolución relativa al empleo de los jóvenes, adoptada por la Conferencia Internacional del Trabajo (CIT) en 2005, definió un conjunto amplio de políticas y programas para hacer frente al problema del empleo de los jóvenes. Estas políticas y programas abarcaban desde políticas macroeconómicas y marcos reglamentarios para aumentar la tasa de crecimiento del empleo, hasta políticas de mercado de trabajo e intervenciones específicas orientadas a grupos de jóvenes desfavorecidos. En Junio de 2012 la CIT realizó una discusión general, sobre la base del Informe V, la crisis del empleo de los Jóvenes: Actuemos Ya y adopto un conjunto de conclusiones que complementan, y en muchos casos operativizan, la Resolución adoptada en el 2005. En Noviembre el Consejo de Administración, en su 316 Reunión, se adoptó en forma tripartita un Plan de Acción 2012-2017) que establece ámbitos de actuación prioritarios con el fin de que la Oficina pueda dar una respuesta efectiva, y en concordancia con las conclusiones adoptadas en materia de empleo juvenil. En América Latina y el Caribe, el tema del empleo juvenil ha adquirido especial relevancia, no solamente por la vigente crisis mundial, sino también por el impulso que organizaciones relevantes (incluida la OIT) y estados han dado al tema. La XVI Reunión Regional Americana de la OIT (2006) adoptó la Agenda Hemisférica para la promoción del Trabajo Decente 2006-2015, que incluye cómo una prioridad la promoción del trabajo decente para la juventud y fija el compromiso de promover una mayor formación y una mejor inserción laboral de la juventud, con la meta de reducir a la mitad, en un plazo de 10 años, el porcentaje de jóvenes mayores de 15 años que no estudia ni trabaja3. Algunas de las áreas de intervención más importantes que se han llevado (y se están llevando) a cabo por la OIT, están referidas a: 2 CELADE. Base de datos de estadísticas y proyecciones disponible en www.eclac.cl/celade. 3 Ni-Ni 2
políticas y programas para estimular la creación de empleo e incidir en la demanda; estas comprenden políticas económicas y de crecimiento, políticas de promoción de la iniciativa empresarial y el empleo independiente, y programas de creación de empleo en el sector público; políticas y programas para facilitar la transición de la escuela al trabajo; estas comprenden medidas relacionadas con la oferta, tales como las políticas sobre la enseñanza y la formación técnica y profesional, y las políticas activas de mercado de trabajo (PAMT) por ejemplo los subsidios salariales, las exenciones fiscales y la asesoría para la búsqueda de empleo que facilitan el ajuste de la oferta y la demanda; políticas de mercado de trabajo para mejorar la calidad del empleo de los jóvenes, y políticas para mejorar la protección social de los trabajadores jóvenes; políticas para proteger los derechos, promover el respeto de las normas del trabajo y fortalecer el diálogo social a fin de garantizar una mayor participación de los trabajadores jóvenes y una difusión más eficaz de sus opiniones. Más específicamente y entre otras cosas, con el apoyo financiero de España, la OIT desarrolló entre el 2007 y el 2011 el proyecto Promoción del Empleo Juvenil en América Latina (PREJAL), con la particularidad de ser uno de los proyectos pioneros en el ámbito de la cooperación público privada. Del 2008 al 2012, implementó, junto con otras Agencias del Sistema de Naciones Unidas, Programas Conjuntos de Empleo Juvenil y Migraciones en: Costa Rica, Nicaragua, Honduras, Ecuador, Perú y Paraguay. Asimismo, en el 2008 se realizó, en el marco de la Cumbre Iberoamericana de Presidentes y Jefes de Estado, el I Foro Iberoamericano de Ministras y Ministros de Trabajo bajo el lema, Juventud, Trabajo Decente y Desarrollo en Democracia, en el que se aprobó la Declaración de Sonsonate en la cual los gobiernos Iberoamericanos, a través de sus Ministerios de Trabajo, acordaron diferentes medidas encaminadas a promover el trabajo decente para los jóvenes. Asimismo, la Organización Iberoamericana de Juventud (OIJ), con la asistencia técnica de la OIT, adoptó la Convención Iberoamericana de los Derechos de los Jóvenes (2008). Contempla disposiciones específicas, contenidas en cuatro artículos (Derecho al trabajo; Derecho a las condiciones de Trabajo; Derecho a la protección social y Derecho a la formación profesional), dirigidas a regular distintos aspectos relativos al trabajo de los jóvenes, en consonancia con la Promoción del Trabajo Decente que realiza la OIT. En Febrero del 2010 (Lima) se realizó el Foro ALC-UE de Cohesión Social: Promoción del Trabajo Decente para la Juventud, donde los Gobiernos de ambas regiones establecieron líneas de actuación conjunta para la Promoción del TD para los jóvenes en conformidad con los lineamientos de la OIT. Posteriormente la Cumbre de Presidentes ALC-UE (Madrid, Mayo 2010) recogió dichas recomendaciones. En Mayo del 2010, en Salvador de Bahía, en la Cumbre de las Américas de la Juventud, se adopta la Carta de Bahía. Los Gobiernos y las organizaciones de jóvenes representativas subscribieron una Declaración en la que la Promoción del Trabajo Decente para los jóvenes es uno de sus pilares. En Octubre 2010, en el marco de la Conferencia Interamericana de Ministras y Ministros de Trabajo se suscribió la Declaración Conjunta COSATE y CEATAL: Jóvenes y Trabajo Decente. En Diciembre del 2011, la Oficina Regional de la OIT convoca un Foro Internacional sobre 3 Page
Empleo, Juventud y Gobernabilidad Democrática, que congregó a representantes tripartitos y otras personalidades de la región para debatir principalmente sobre el desafío de generar más oportunidades laborales para la juventud, Durante el primer semestre del 2012, la OIT convocó, en América Latina y El Caribe, conjuntamente con los Ministerios de Trabajo y los interlocutores sociales, 12 Foros Nacionales de Empleo Juvenil, que han permitido servir de plataforma y punto de encuentro entre los propios jóvenes y los constituyentes de la OIT. Los resultados de todos estos eventos fueron compartidos en el Foro Global de Jóvenes realizado por la OIT en Ginebra, en la que también participó la Organización Iberoamericana de la Juventud, cómo preludio a las discusiones sobre Empleo Juvenil desarrolladas en la 101 Conferencia Internacional del Trabajo. En Octubre del 2012, la OIT conjuntamente con la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB) promovió El IV Encuentro Iberoamericano de Interlocutores Sociales, donde trabajadores y empleadores se comprometieron a promover ante los gobiernos de Iberoamérica una Conferencia Regional Tripartita que se realizaría en 2013 para impulsar y mejorar programas y políticas relacionadas con el empleo de los jóvenes. En Mayo del 2013, se lanza a nivel Global la Plataforma Trabajo Decente para los Jóvenes 4, con el fin de promocionar la participación de Jóvenes en debates en torno al mundo del trabajo y brindar una plataforma donde obtener información y propiciar el debate, el intercambio de ideas, y la exposición de buenas prácticas. La Plataforma está en los tres idiomas de la OIT y cuenta con jóvenes moderadores de los cinco continentes, con una importante trayectoria en el mundo del trabajo. En Octubre del 2013, la OIT pone a disposición de sus constituyentes y organismos especializados la Plataforma de Políticas que promueven el empleo juvenil (Youthpol) que recoge información actualizada de la políticas que en esta materia han establecido los países que integran cada una de las cinco regiones de la OIT. Se están llevando a cabo encuestas de transición entre la escuela y el trabajo en Brasil, Colombia, El Salvador, Perú and Jamaica. Estas encuestas constituyen un elemento clave en el cual se van a anclar iniciativas hacia el desarrollo y el mejoramiento del empleo juvenil en América Latina.. 3. Prioridades para la implementación del llamado a la acción en ALC En consonancia con los esfuerzos realizados, la región considera el trabajo decente para los jóvenes como una necesidad y ha establecido como prioridades los siguientes puntos (organizados bajo los tres pilares de acción: (1) desarrollo y difusión de conocimientos; (2) asistencia técnica y fortalecimiento de capacidades; y (3) alianzas y promoción): (1) Desarrollo y difusión de conocimientos: mejorar el conocimiento sobre el mercado laboral juvenil - Se considera de gran prioridad el desarrollo de Políticas y programas juveniles más eficaces basados en un mejor conocimiento de la transición escuela-trabajo. Debido a la 4 Ver plataforma en www.decentwork4youth.org 4
escasa información sobre el mercado laboral, se busca analizar la información sobre los principales indicadores de la demanda laboral y desagregarla. Al mismo tiempo la OIT se propone asistir técnicamente a los Institutos de Estadística y a los Ministerios de Trabajo para el desarrollo de indicadores que permitan hacer un análisis permanente de la trayectoria del mercado laboral juvenil y desarrollar capacidad nacional para que se produzcan análisis de coyuntura sobre el mercado de trabajo juvenil. - Para mejorar el conocimiento de los programas y de las políticas de empleo juvenil se ve pertinente coadyuvar al desarrollo de la cooperación sur-sur. La Plataforma YouthPol, que documenta las políticas públicas dirigidas a promover el empleo y el trabajo decente para los jóvenes(américa Latina y el Caribe) servirá tanto para la formulación de recomendaciones de políticas y programas a nivel nacional como para la elaboración de un inventario global de la OIT sobre políticas de empleo juvenil en todo el mundo. Este inventario global facilitará la comparación y revisión de políticas nacionales y/o regionales. A través de la identificación y documentación de las principales políticas que de manera directa e indirecta están promoviendo el trabajo decente para los jóvenes en LAC, de la sistematización de experiencias innovadoras en materia de políticas, y marcos regulatorios que promuevan el Trabajo Decente y empleabilidad de los jóvenes de la región y la documentación y difusión de buenas prácticas de Programas y Políticas de Empleo Juvenil. (2) Asistencia Técnica y fortalecimiento de capacidades En relación a las políticas de empleo y económicas para promover el empleo juvenil, se tiene por objetivo continuar a impulsar planes nacionales de empleo juvenil con la participación de los actores sociales, que sean fiscalmente sustentables y evaluables. Además, se apoya el desarrollo de políticas y estrategias de emprendimiento y de creación de empleos verdes para los jóvenes. - La formalización de la informalidad juvenil, se promoveran estrategias y políticas que estimulen la formalización de las relaciones laborales de los jóvenes (27.5 M), con especial enfasis en todos aquellos que estan por fuera de los sistemas de seguridad social y que no contribuyen a sistemas públicos o privados de pensiones. - La empleabilidad: educación, formación y competencias, y transición de la escuela al trabajo, será mejorada, a través de, programas de inserción laboral y de desarrollo de competencias profesionales, al alineamiento de la educación con la demanda del mercado de trabajo y de la estrategia de desarrollo nacional, la expansión de las oportunidades de educación técnica y de formación profesional y el fortalecimiento de los servicios de empleos para incrementar su capacidad de interacción entre la oferta y la demanda de trabajo. - En lo que respecta a las políticas de mercado de trabajo, se tiene por objetivos, incorporar a la estrategia de la formalización de las empresas subsidios a las pasantías laborales que favorezcan el acceso al primer empleo, desarrollar programas específicos que desarrollen la empleabilidad de los jóvenes que no estudian ni trabajan (ni-ni) y otros grupos vulnerables e impulsar estrategias de creación de empleo en la economía del cuidado a fin de mejorar el acceso de los jóvenes al mundo del trabajo. - En relación a iniciativas empresariales y empleo por cuenta propia de los jóvenes, se ve como prioridad reforzadas, mediante al incremento de productividad de las iniciativas de auto 5 P age
empleo de los jóvenes en el ámbito rural, a la promoción de programas de formación de competencias para el desarrollo de micro emprendimientos productivos y la mejora de las condiciones de trabajo y la productividad del empleo juvenil a través del fomento de empresas sustentables. - Finalmente, en el ámbito de los derechos de los jóvenes, se prioriza, promover y gestionar políticas de empleo que amplíen la cobertura de protección social de los jóvenes, propiciar mecanismos de diálogo tripartito con participación de los jóvenes para la promoción del trabajo decente para la juventud y mejorar la protección de los derechos laborales de los jóvenes que migran de zonas rurales a la ciudad y de un país a otro. Alianzas y Promoción del Trabajo decente para la Juventud en LAC - Se ve como prioridad promover el empleo y el trabajo decente para la juventud como una de las prioridades del Sistema de Naciones Unidas (SNU) en LAC, articulando el trabajo con el resto de las Agencias del SNU a través del Grupo Regional Interagencial y desarrollando iniciativas y programas conjuntos a partir de la experiencia acumulada con los Programas Conjuntos de Empleo Juvenil desarrollados en el marco de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM). - Así mismo, establecer la promoción del empleo y del trabajo decente como una de las prioridades en las Agendas Políticas de Juventud en LAC, a través, de las Políticas de Juventud de la Región y del impulso de la Declaración de Bahía 5 Lima, 3 Octubre 2013 5 Declaración y prioridades establecidas en Salvador de Bahía (2010) por los Gobiernos de las Américas, para el impulso de políticas de Juventud. 6