Jornada Mañana - Curso 501 Profesores: Andrés Luengas, Diana Velandia, Luz Dary Silvera, Cecilia y Gladys 40 niños Área: matemáticas 8 sesiones en el laboratorio
TÚ Y YO REALMENTE SOMOS AMIGOS DE ESTE PLANETA? DEL COLEGIO AL MUNDO Y DE VUELTA AL BARRIO COLEGIO SAN CRISTÓBAL SUR 30 de julio de 2013 - El día de hoy vamos a investigar acerca de las comunidades digitales - dice la profesora de tecnología - Van a buscar en internet qué son, qué tipos hay y luego van a exponer lo que investigaron. Los estudiantes prenden los computadores. Entran a google, escriben comunidades digitales en la barra de búsqueda. Dan clic sobre el primer vínculo que les sugiere el buscador. Copian la definición encontrada en el cuaderno, la memorizan y salen a exponer. Estamos en el aula de tecnología del colegio San Cristóbal Sur. Hemos llegado ahí después de reunirnos con funcionarios de la Secretaría de Educación Distrital, el Rector del colegio, la Coordinadora de la sede y los docentes que participarán del proyecto. Esta fue una de las visitas que, durante casi dos meses, hicimos a la Institución. En ellas dialogamos con el grupo de profesores acerca de los temas que iban a trabajar con los estudiantes el siguiente periodo, sus intereses y sus expectativas. Por decisión del rector, se acordó que cada semana asistiría un docente diferente a la Universidad Javeriana, de manera que 5 profesores acompañarían a los estudiantes durante las sesiones de trabajo. A partir de este diálogo se construyó un diseño didáctico de pedagogía por proyectos, el cual se valió de un proyecto ambiental, liderado por las profesoras de matemáticas y biología en el colegio, para articular los diversos temas propuestos por los docentes de las áreas participantes: español, sociales, ciencias naturales y matemáticas. Dado que, según manifestó la docente de matemáticas, faltaba apropiación del proyecto ambiental por parte de los estudiantes, el diseño buscó promover la conciencia ambiental y responder la pregunta Cómo puede aportar el uso de las TIC al desarrollo de proyectos ambientales en la escuela?
Primer acercamiento a las tabletas en el laboratorio de la Universidad Javeriana Los niños han recibido un mensaje del pasado, enviado hace 50 años. Su reto será construir un mensaje, para enviar al futuro, en el que cuenten cómo es su colegio y la vida en la época actual. Para ello, tendrán 45 minutos y deberán usar las tabletas, sin que se les indique cómo hacerlo. Se pone sobre la mesa, al frente de cada estudiante, una tableta. Ellos las miran sin tocarlas. Quienes tienen los cuadernos afuera, los ponen en la mitad de la mesa apilados. Inmediatamente se dan las instrucciones para hacer el ejercicio, las cogen, levantan suavemente el forro, miran la pantalla y la tocan por los lados, hasta que descubren el botón de encendido. Los que encuentran el lápiz lo deslizan por la pantalla; los que no, deslizan sus dedos. Yo ya sé dónde es. Uno abre el block de notas, otro se mete a internet. Cómo hacemos? Alguien abre un juego. Otro prende la cámara, la pone en video. Alguien más abre un video Cómo te metiste ahí? No sé. Se apagó, vuelva a hacer acá arriba. Entran a Wikipedia. Mire la red wifi, mire acá en configuración. Toman fotos, ingresan a Facebook, otros más están inquietos porque no pueden acceder a internet. A medida que alguno logra hacer algo con la tableta le muestra a los otros y sus compañeros lo van siguiendo. Vea saquen el lápiz, es como un contagio, pareciera que sienten la necesidad de contarse unos a otros lo que han ido descubriendo. Cómo guardo mi foto?, ahí le queda guardada. En un principio, se observa que por mesas el trabajo es muy similar: en una mesa unos están explorando el lápiz, son los únicos que de momento lo han descubierto, y escribiendo en el block de notas con él; en la otra graban y escuchan sus mensajes; en la siguiente están concentrados tratando fallidamente de entrar a internet y a Facebook. La profesora Diana Velandia, que ha estado escuchando, se para y se acerca a una mesa. Los niños están en el block de notas, ella les indica que escojan un ícono, que miren los botones. Un niño que está en el block de notas, sin darse cuenta, le toma una foto a la pantalla, entonces, cuando posa el lápiz sobre la parte de la imagen en la que están las teclas y no pasa nada, se desespera, luego descubre que tiene un lápiz para dibujar sobre esa imagen, pero aún sigue sin poder volver al archivo sobre el que quiere trabajar. Cuando se graban, algunos acercan su boca a donde ellos intuyen que está el micrófono. Para hacer videos se ubican al frente de la tableta y le hablan a la cámara, que los está enfocando a ellos en primer plano, usualmente. Cumplido el tiempo pactado, guardan lo que hicieron y cierran las tabletas. Se observa que a pesar de que la mayoría de los niños y niñas no había tenido contacto directo y previo con tabletas, al cabo de ciertas horas de manipulación, exploración y navegación entre las diferentes aplicaciones, están en capacidad de crear y producir diferentes narrativas para contarse: Video para el futuro realizado por uno de los niños.
Tú y yo realmente somos amigos de este planeta? En la primera parte de la mañana, Eduardo Gutiérrez, profesor de la Universidad Javeriana, usa el video El Consumo Humano, de la National Geographic Channel, para reflexionar con el grupo acerca del medio ambiente. Haciendo operaciones matemáticas básicas, como sumas, multiplicaciones y divisiones, los estudiantes cuantifican cuántos desechos producen a lo largo de su vida. En la segunda parte, la profesora Luz Dary Silvera asume el liderazgo. Para ello, una semana antes, había venido al aula con sus compañeros docentes a conocer la plataforma y a familiarizarse con el uso de las tabletas. En dicha ocasión exploraron las diversas posibilidades que ofrecía la Plataforma del Samsung Smart School para el desarrollo de las clases y algunos videos en youtube y TED acerca del cuidado ambiental. Luz Dary toma una tableta y comparte su pantalla con el tablero: Había construido una presentación en Power Point, tomando fotografías y caricaturas de una página especializada en el medio ambiente y dos videos de youtube. A medida que las diapositivas pasan, los niños y niñas observaban atentamente y en silencio cada una de imágenes. Tan bonito. Está enfermo. Ush!, dicen algunos al ver una ballena sangrando. La profesora ingresa a un blog, lee lo que dice en él y, luego, les muestra videos de animales que son ejemplo para los seres humanos. Quién nos quiere hacer un comentario de esta imagen? Profe, yo. La docente les da la palabra, uno por uno: Están como extinguiendo la tierra, quemando árboles, echando basura. No les
importa lo que le pasa al planeta. Indiferencia, no quieren contribuir. Están matando los árboles. Se están derritiendo los polos. Tala de árboles y extinción de animales. Calentamiento global. Las manos representan que nosotros tenemos que cuidar la tierra. Los animales no son los peligrosos, sino nosotros. Para cerrar su intervención les pone una canción: Si el sol también renace, renacerán también los hombres, cambiar el mundo, empieza por ti. Del colegio al mundo y de vuelta al barrio Para promover la conciencia ambiental, se empezó por identificar los problemas ambientales del colegio. Explorando la aplicación Mindomo, los estudiantes construyeron, en grupos, mapas conceptuales que permitieron visualizar las problemáticas identificadas por ellos: botar basura, maltratar las plantas, desperdiciar el agua en los baños y botar el refrigerio. En sesiones posteriores, agregaron a los mapas fotografías que bajaron de internet y dibujos que ellos mismos habían llevado para contar lo que pasaba en la escuela. A pesar de que la instrucción era continuar con el análisis de los problemas ambientales del colegio, se cuelan en los trabajos problemáticas de impacto global: desperdicio del agua, tala de árboles, contaminación de los ríos. El mapa se fue creciendo aún más cuando, trabajando en grupo por mesas, le agregaron las consecuencias que se derivaban de cada una de estas problemáticas:
Para completar la escena, los estudiantes se fueron de viaje por google maps, visitaron Barcelona, Roma, Londres, Melgar y hasta el colegio San Cristóbal Sur y las calles de su barrio buscando rastros de contaminación ambiental. Al llegar de este viaje era hora de asumir responsabilidad, era hora de contar qué impacto estaban causando cada uno de ellos en su entorno próximo. Había que hacer un mapa del barrio. Para ello se juntaron con sus vecinos y empezaron a dibujar sobre el papel sus casas, las calles por donde transitaban, los lugares que visitaban y a ellos mismos. Cuando estuvieron listos, extendieron los mapas de todos los barrios sobre el suelo, de manera que entre todos conformaron una sola figura. Seguido de esto, en los mismos grupos que estaban trabajando, metieron sus barrios en la tableta y desde ahí intervinieron su dibujo inicial. Uno a uno fueron saliendo. Se ubicaban en el mapa y contaban lo que ellos hacían: yo boto basura en la reserva ambiental, nosotros botamos aquí todos los tarros plásticos, mi mamá hace cosas con material reciclado, yo boto basura en esta alcantarilla, yo dejo mi basura aquí. Cuando en lugar de decir botar basura un niño o una niña dice yo boto basura en la reserva natural, si bien está hablando de lo mismo está diciendo algo distinto. Hay un cambio y no precisamente en la estructura gramatical, sino en la manera en que cada uno se sitúa en relación con lo que están sucediendo: es radicalmente diferente porque están asumiendo la
responsabilidad de lo que pasa y si parte del problema está siendo producido por ellos mismos, entonces también está en sus manos el darle solución. Habrá que pasar a la acción! En este viaje con los estudiantes del Colegio San Cristóbal Sur las TIC y sus herramientas sirvieron para explorar, investigar, reflexionar y crear, facilitaron la conexión con otros lugares del mundo y el intercambio. Sin embargo, queda un sin sabor: cuando acaban su vida útil o sale un artefacto más moderno estas herramientas terminan convertidas en desecho tecnológico, es decir que también ocasionan impactos ambientales negativos Qué hacer entonces? Cómo usar la tecnología de manera responsable y cuidadosa con el medio ambiente? Al fin de cuentas Qué nos quedó de todo esto? Ahora sí se despiden los niños y las niñas.