RECRÍA Y REPOSICIÓN DE LA MAJADA I. CONCEPTO DE RECRÍA II. CRECIMIENTO Y DESARROLLO III. DESARROLLO DE LA FUNCIÓN REPRODUCTIVA IV. EL PESO CORPORAL Y LA FERTILIDAD V. REPOSICIÓN 1. Reposición de ovejas madres 2. Reposición de carneros 145 I. CONCEPTO DE RECRÍA La recría es la época de crecimiento post-destete de las hembras y machos enteros hasta el momento en que inician la etapa de reproducción. Una vez que comienza la recría, luego del destete, debe prestarse especial atención a la alimentación y sanidad. En cuanto a la alimentación, los animales de recría ocupan el segundo espacio en las prioridades luego de la oveja preñada en el último tercio y las lactantes. Sanitariamente, es una categoría muy sensible a las parasitosis internas por lo cual se debe prestar especial atención en ese sentido. El destete es realizado a fines de diciembre. Si la cría ha sido bien manejada y los corderos están gordos se destetan y se venden todos los machos y las hembras y las hembras que han sido rechazadas por alguna tara o por defectos raciales. Por ejemplo: chilla, manchas marrones o negras, etc. La señalada es una buena oportunidad para marcar los corderos con problemas, facilitando el trabajo al destete. Al destete y con un mercado más o menos normal, la costumbre es vender todos los machos junto con el refugo primario de las corderas (con defectos groseros de vellón y conformación). Según el campo y el manejo el rango de peso va desde 20 a 27 kg con 4 meses de edad, en pradera natural. Un buen manejo de la majada antes del destete, tendría un efecto más pronunciado sobre el desarrollo posterior de la recría, que una abundante alimentación en corderas que llegan mal desarrolladas al destete, o sea que las corderas bien desarrolladas al destete pueden soportar mejor una restricción en la nutrición y luego recuperar el crecimiento perdido. El desarrollo de la cordera debe ser continuo desde su vida uterina, un buen peso al nacer, al destete y sin perder peso durante su primer invierno de vida. De esta manera la borrega llega más rápido a la pubertad y comenzará su vida reproductiva a los 2 dientes con 35 a 40 kg, o más, según la raza.
II. CRECIMIENTO Y DESARROLLO El crecimiento es un proceso complejo, pues no sólo aumenta el tamaño de los animales, sino también experimentan cambios en la apariencia o forma y en la composición de sus tejidos y órganos. Es sabido que las distintas partes del cuerpo crecen a velocidades distintas. Se suele definir al crecimiento como aumento de peso; los cambios de forma, composición y función son el desarrollo. Después del nacimiento el ritmo de crecimiento se acelera hasta alcanzar un pico que se mantiene hasta llegar a la pubertad. Luego esa velocidad merma hasta que, a la madurez, el peso corporal permanece relativamente estable (peso teórico de adulto). Con una nutrición adecuada, la curva de crecimiento de los ovinos, al igual que en otras especies, tiene forma de S acostada o letra sigma griega. La porción más empinada de la curva representa la fase más rápida de crecimiento. Un buen manejo de los animales para reposición procura capitalizar aquella fase veloz, que se produce poco después del nacimiento y merma un poco después de la pubertad. Como promedio a los 4-5 meses de edad, en condiciones de buen manejo, un ovino puede llegar al 50-60% de su peso adulto. En condiciones ideales un cordero/a de madre doble propósito puede promediar una ganancia de 350 g/animal/día, desde el nacimiento hasta la pubertad. Sin embargo pocos en la práctica se crían en condiciones perfectas. En la mayoría de los casos las ganancias son de alrededor de 250g/animal/día, lo cual es bastante inferior a lo requerido para una recría ideal. 146 III. DESARROLLO DE LA FUNCIÓN REPRODUCTIVA Como ya se vio la evolución hacia la madurez sexual es un proceso gradual. Hemos definido a la pubertad como el comienzo de la capacidad fisiológica para la reproducción, pero sabemos que la plena capacidad reproductiva se adquiere más tarde. El momento de la primera manifestación de la pubertad, tanto en machos como en hembras, varía mucho acorde con la alimentación y las condiciones climáticas. En los machos tiene una gran importancia la nutrición adecuada y un manejo prolijo para con el desarrollo de los órganos reproductores, ya que el peso de los testículos está relacionado con el peso del borrego, la evolución de los mismos depende del índice de crecimiento del animal. La manifestación precoz de la capacidad sexual depende exclusivamente de un alto índice de crecimiento. La pubertad en borregos es difícilmente alcanzada antes de las 18 semanas (4 ½ meses de edad). Además, su peso debe superar los 27 kg. Aunque existe variación racial e individual se sabe que un gramo de tejido testicular, elabora de 5 a 10.000 espermatozoides por minuto. De acuerdo a esto, a mayor volumen testicular corresponde mayor producción de espermatozoides. Por lo tanto carneros con testículos de buena consistencia y tamaño, manifestando además una gran libido, mejorarán notablemente los porcentajes de señalada.
En cuanto a las hembras, la edad a la que se puede observar el primer estro (celo) varía desde 5 hasta 12-15 meses. La mayor parte de esta variación puede atribuirse al nivel nutricional o a otros factores ambientales, como ser el clima, la estación y la duración del día (relación luz-oscuridad), la época de nacimiento, etc. La duración de la estación sexual en las primerizas es solo un tercio de la duración de las ovejas maduras. Está demostrado que el nivel de fertilidad, tanto de las primerizas como en borregos (capacidad fecundante), está relacionada con sus pesos corporales al servicio. Cuanto más pesada, mayor es la posibilidad de que para y crie un cordero. IV. EL PESO CORPORAL Y LA FERTILIDAD 147 Una recría bien desarrollada produce más lana, puede ser encarnerada con menos edad y su primer parición es superior a la de borregas poco desarrolladas. De ahí que la edad fisiológica basada en el peso corporal, es más importante que la edad cronológica como reveladora de la posibilidad de recibir su primer servicio. Si las borregas deben recibir son encarneradas a los 4-6 dientes, son en realidad adultas jóvenes, y se pierde así un año de vida útil. Las borregas deben recibir su primer servicio con 2 dientes. Esto se puede lograr con un buen manejo. Para ello debemos fijar el concepto de que la borrega al igual que la vaquilla debe nacer con un buen peso y gozar de un manejo preferencial sin estrés nutricional, parasitario, etc., de manera de que presenten un desarrollo ininterrumpido hasta destetar su primer cordero. En cuanto a los umbrales de pesos corporales al primer servicio (de otoño) según raza (Corriedale, Romney Marsh, Ideal o Polwarth), ya se han estudiado en guías anteriores. La recría debe crecer y desarrollarse ininterrumpidamente hasta destetar su primer cordero. V. REPOSICIÓN La majada necesita reposiciones anuales variables según la longitud de vida reproductiva de las ovejas y de las pérdidas anuales por mortandad. Si la vida útil de las ovejas de la majada es de 5 años, las que pasen esa edad, deben ser eliminadas. Es decir que un quinto de la majad estará compuesta por borregas de reposición. 1. Reposición de ovejas madres Porcentaje de reposición Al hablar de porcentaje de reposición debemos referirnos a la composición de la majada. El stock puede ser estático cuando la majada se mantiene estable y no se desea aumentar el número de vientres que la componen, o disminuirlo. La reposición de madres debería incluir también una rigurosa selección para avanzar genéticamente, ala vez de mantener o aumentar el número de animales.
Una de las premisas básicas para realizar la selección de madres, es disponer de suficiente animales para efectuar los reemplazos necesarios a fin de mantener el stock original (número de animales) y posteriormente, si es posible, efectuar la selección. Esto se logra con un elevado porcentaje de señalada, que permita cumplir con los dos requisitos. Si se logra un alto porcentaje de señalada, la diferencia que se observa entre le grupo seleccionado y el grupo previo a la selección (diferencial de selección), será elevado, porque la disponibilidad de animales permite ejercer una fuerte presión de selección y por consiguiente el resultado será más notable. Si por el contrario se tiene un bajo porcentaje de señalada, los resultados entre los grupos antes y luego de la selección, serán poco o nada apreciables, ya que el número de animales disponibles solo alcanzará para reemplazar los vientres viejos y habrá posibilidad de elección y refugo por producción. En este caso el progreso genético es sumamente lento porque solo depende de los machos. 148 EJEMPLO DE REPOSICIÓN EN UNA MAJADA DE 300 OVEJAS Refugo Porcentaje de la Número de animales majada Por Seca 7% 21 Por cordero muerto, por repetición 6% 18 de cordero muerto Por vieja 5% 15 Mortalidad 3% 9 Por ubre 3% 9 TOTAL 24% 72 Borregas de reposición Quiere decir que hasta ahora necesitamos 72 borregas para reposición. Considerando un 5% de mortalidad desde el destete hasta la encarnerada son 6 borregas más. Si a ello le sumamos una selección basada en peso de vellón y rechazamos el 30% de menor peso, deberíamos contar con 110 borregas para reponer vientres con animales seleccionados.
Si tenemos en cuenta que en general la borrega tiene un porcentaje de parición menor que las ovejas, se debería dejar un porcentaje mayor de borregas para reponer (en este caso más de 110). También tienen problemas de aptitud materna. Es posible que una borrega, al tener un parto lento y doloroso abandone su cría. Por lo tanto en la selección de fertilidad por ubre vamos a encontrar un porcentaje mayor de madres secas por cordero muerto. Total de borregas para 110 reposición Mortalidad 5% 6 Rechazo por peso 30% 31 de vellón Quedan para reposición 24% 73 149 Ejemplo de reposición en una majada con distintos porcentajes de señalada 300 OVEJAS TOTALES (Asumiendo un 50% de nacimientos para cada sexo) % Señalada Nº corderos señalados Nº corderas para reposición 70% 210 105 80% 240 120 100% 300 150 120% 360 180 En este ejemplo se observa como podemos aumentar la presión de selección a medida que se incrementa el porcentaje de señalada y el saldo de borregas que nos queda para venta, cuando el excedente de reposición es elevado. Momentos para realizar la selección de borregas de reposición. En la selección pre-esquila se clasifican las ovejas todos los años, pero también debemos clasificar las borregas de reposición de dos dientes. Esto se puede llevar a cabo pasando por la manga, seleccionando los vellones y desechando las que tienen taras o defectos. Si se realiza selección por peso de vellón durante la esquila, el trabajo descripto será previo a la misma. 2. Reposición de carneros Si pensamos en mejorar la rentabilidad de la majada tenemos que mejorar el manejo y establecer algún programa de mejoramiento genético, aunque sea mínimo. Lo fundamental es fijar los objetivos para después buscar los criterios de selección con esos objetivos. Si necesitamos carneros para reposición tenemos dos opciones: Producir nuestros propios carneros
Carneros de compra No sería recomendable iniciar un plantel para producir carneros propios, salvo en el caso que uno ya cuente con un plantel adecuado. Ya que el costo de producción sería mayor que al comprarlos. Para producir carneros se debe tener un plantel de ovejas superiores sin defectos raciales, con buen peso corporal, buena calidad de lana y buen peso de vellón. Además tener en cuenta que si las ovejas del plantel están emparentadas con la majada, se puede esperar mayor consanguinidad en menor tiempo. Compra de carneros para reposición Se debe tener en cuenta lo siguiente: A) La cabaña que elegiremos para comprar los animales. B) Decidir que carneros se elegirán para la compra. 150 A) Elección de la cabaña Elegir un cabaña que tenga los mismos objetivos de selección o similares a los que nosotros fijamos. Cabañas que tengan controles de producción ranqueados de lana, carne, peso de vellón, finura, rinde, peso corporal, etc. Elegir cabañas con registro de fertilidad en hembras y con alto porcentaje de corderos vivos. Que realicen pruebas de capacidad fecundante en machos. Cabañas con uniformidad de producción. Observar las madres de la cabaña elegida, ellas dan la idea de la uniformidad de la población. B) Elección de carneros Elegir carneros libres de defectos y taras raciales, con sanidad asegurada. Libres de Brucelosis Ovina por análisis. Deben tener buena conformación, con buenos cuartos y buenos aplomos, ni sentados de cuartillas, ni parado de garrones. Carneros con vellones pesados y con la finura (diámetro de la fibra) adecuada a los objetivos fijados. Buen tamaño y tono testicular, con circunferencia escrotal entre 27 a 40 cm. Sin problemas de ojos (entropión, ectropión o viscos).