TRINITY COLLEGE EDUCACIÓN, PSICOLOGÍA Y SALUD EXCELENCIA EDUCATIVA La tarea de ser padres una tarea difícil. Educar a los hijos es la tarea más complicada a la, seguramente, un padre o una madre se pueden estar viendo comprometidos. Es una tarea que no sólo no te enseñan, sino que, a pesar de haber buscado orientaciones, manuales de instrucciones y consejos profesionales, muchas veces nos podemos ver incapaces de poner en marcha lo que sabemos que es lo ideal y lo correcto. Por qué pasa esto? Porque estas pequeñas personitas a las que tenemos que educar y criar, nos suscitan emociones, inseguridades y miedos a la par que grandes satisfacciones y alegrías. Nuestros hijos pasan por diversas etapas, que tienen que ir resolviendo con nuestra ayuda y así, ir forjando su identidad. Ese proceso en el que se forma su identidad pasa de un momento en el que disfrutamos viendo que nuestro hijo quiere hacer todo como nosotros (el niño que quiere hasta afeitarse como su papá, y la niña se viste y habla como su mamá) al momento en el que de repente todo lo que decimos parece que es inadecuado y no acertamos con el jersey que le compramos. Y es aquí, donde muchas veces, nos tambaleamos. Sin embargo, es en este momento en el que debemos mantenernos más firmes, y ser fuente de seguridad para nuestros hijos que están comenzando a ser transgresores y negadores de la que ha sido su realidad hasta ese momento. Esa transgresión y esa negación, son elementos necesarios y constitutivos para la correcta formación de su identidad. Sumario La tarea de ser padres. Una tarea difícil. María José Mayorgas. El lavado de manos. Elena Moreno Arroyo. La importancia del aprendizaje musical. Miriam Rodríguez Morales. Ocio. Joana Ramos Thomson
Para que esta definición de personalidad se dé de una manera adecuada, es fundamental que el niño tenga la experiencia doble de: ser queridos en todo momento, y a su vez, ser protegidos. Y, cómo protegemos? A través del establecimiento de normas y límites. Las normas (y los límites) son como esos escudos que ponemos a su alrededor para velar por su seguridad. El niño necesita saber a qué atenerse, saber qué puede hacer y qué no, y tener la garantía de sus padres son firmes en su criterio y confían en ello firmemente. Un padre o una madre que establece un límite pero en su cara se puede entender que no está seguro con lo que está estableciendo será percibido por su hijo con las dudas que, no dicen sus palabras, pero, que, sin embargo, sus gestos sí dicen. Por ello, si no estamos seguros de lo que queremos trasmitir, será importante decir a nuestros hijos: voy a pensarlo y te digo. De esta manera, además, estamos siendo ejemplo de la importancia de reflexionar sobre las propias acciones y decisiones. No debemos olvidar que enseñamos más con lo que hacemos que con lo que decimos. Somos ejemplo en el día a día, en cada acción que llevamos a cabo. No debemos olvidar que enseñamos más con lo que hacemos que con lo que decimos. Somos ejemplo en el día a día, en cada acción que llevamos a cabo. Nuestro pequeño tendrá que desarrollar la idea de que no es un Súper-hijo y que va a necesitar la ayuda y el cuidado de los adultos y de los compañeros. Hasta la edad de los 6 años, aproximadamente, tenemos a nuestro pequeño protagonista de historias de dragones y princesas, en las cuales con su capa y espada es capaz de combatir contra todo tipo de problemas. Sin embargo, tendremos que favorecer las situaciones en las que le demos cabida para expresar sus inquietudes, sus inseguridades y sus miedos. Si nosotros le damos un espacio donde es lícito hablar de sus sentimientos y sus miedos, estaremos entrenando a su vez su capacidad para identificar los sentimientos y el sufrimiento ajeno. Primero en él, y una vez que desarrolle esta capacidad, será capaz de identificar estas emociones en los demás. Así, estaremos desarrollando su capacidad de empatía y responsabilidad para con los demás. Sería muy difícil registrar las emociones de los demás si no somos capaces de registrar las emociones propias. De esta manera, experimentará seguridad al comprobar que estamos de manera incondicional para guiarle en lo que no sabe hacer y que además le reprendemos por lo que debe cambiar o mejorar. Reprender y poner límites es una de las maneras de decirle que nos preocupamos por él y no le dejamos caer en peligros. En todo momento, esta reprimenda debe ir acompañada de afecto: Yo te quiero, y te quiero educar y ayudar, y por eso te tengo que decir que esto no es lo correcto. En muchas ocasiones nos resulta muy difícil poner estas normas. Implica que tenemos que asumir el papel de malos, cuando hasta la fecha nuestros hijos han querido estar siempre pegaditos a nosotros. Vemos alejarse a nuestros hijos (física y emocionalmente) y eso nos resulta doloroso. Sin embargo, es parte de la evolución deseada de nuestros niños. Están marcando la diferencia, se están diferenciando de nosotros y nosotros le estamos entrenando a valerse por sí mismos. Pero ayudarles a valerse por sí mismos, no significa que no puedan contar con nosotros cuando lo necesiten, cuidado!. Es muy importante que siempre tengan la opción de volver si hay algo que no saben gestionar. 2
Cuando nuestros hijos nos rechazan por marcar esos límites, siempre que sean coherentes y firmes, nuestra respuesta no debería ser más que para enfatizar nuestra coherencia, y que ellos perciban que estamos seguros de nuestras medidas. Tristemente estamos perdiendo a nuestro club de fans, pero a la vez estamos colaborando en el desarrollo y la diferenciación de esas personalidades que eran copia de las nuestras. El peligro sería pensar que la norma no existe; entonces, todo estaría permitido y esto llevaría a un sentimiento de estar perdido y no saber hacia dónde ir. Otro sentimiento que puede aparecer cuando nos enfrentamos al conflicto con nuestros hijos es que no podemos ser Súper padres o Súper madres, donde nos gustaría poder satisfacer en todo momento a nuestros hijos, darles todo lo que ellos querrían y aprobarían, ser sus amigos y caerles bien en todo momento, además de poder disfrutar de todo lo que disfrutaríamos si no tuviéramos hijos. Ser padres también implica una lista de renuncias: no voy a ser siempre el mejor padre del mundo, no voy a poder hacer todo lo que haría si no tuviera hijos y no siempre voy a saber qué hacer. A medida que nuestro pequeño va creciendo, esos límites y esas normas se van interiorizando, y así, cuando se encuentre en momentos sociales o momentos donde la familia no tiene lugar, tendrá esa capacidad de verse a sí mismo como un extraño, analizando y reflexionando sobre sus acciones, será capaz de pensar en las emociones del que tiene el de enfrente y tendrá presente que si opta por saltarse una norma, será bajo su responsabilidad porque Mamá y Papá me dijeron que esto no era lo adecuado. Como padres debemos estar siempre n un lugar diferente al de nuestros hijos. Nuestro lugar es el de Autoridad y poder, y no debemos igualarnos a ellos en conflictos. Si así se diera, tenemos que tener claro que la partida la hemos perdido. Él nos tiene que tener presentes como figuras de Autoridad, que establecen límites, que se siente seguro y siempre acompañando nuestras acciones de ese amor incondicional que se manifiesta a través del Afecto. 3
EL LAVADO DE MANOS El lavado de manos es una práctica lo suficientemente básica y a la vez importante para estar incluida en todos los protocolos de higiene y limpieza habitual, así como en la lucha contra eventuales brotes infecciosos que es conveniente atajar y dar una cobertura adecuada. De hecho es el primer paso a realizar por los profesionales sanitaros antes de su entrada a quirófano, o cuando en los protocolos internacionales en la crisis del ÉBOLA se insistía hasta la saciedad en lo importante del lavado de manos frecuente, incluso en los entrenamientos para instalarse los EPI (Equipos de Protección Individual), hasta 3 veces tenía lugar la fase de lavado de manos. Por otro lado hay suficientes estudios que demuestran la gran cantidad de microorganismos que se encuentran en superficies habitualmente en contacto con las manos, como los teclados de ordenador, ratones, pantallas de móvil y otros objetos que usamos diariamente. Evidentemente todos estos millones de microorganismos no son patógenos, pero algunos en diferentes circunstancias pueden serlo. Por tanto el lavado de manos es una práctica higiénica importante y fundamental para prevenir la transmisión de agentes infecciosos de una persona a otra, y de superficies contaminadas a nosotros mismos y así evitar la propagación de enfermedades infecto contagiosas. Como hemos dicho antes, es una práctica que impide o evita la transmisión de muchos agentes infecciosos ya que las manos se pueden considerar un vehículo en la transmisión de microorganismos (virus, bacterias, hongos,...). Tanto para adultos como para niños. En los centros escolares, donde los niños pasan mucho tiempo juntos, hay muchos momentos de contacto entre ellos con juegos y actividades que lo propician, entonces hay más posibilidades de que ocurra está transmisión, por eso la importancia del lavado de manos en centros escolares. Hay que acostumbrar a los niños a lavarse las manos varias veces al día ya que están en edad de querer coger y tocar todo lo que ven, y cómo hemos dicho anteriormente muchos objetos o juguetes que usan diariamente pueden contener en su superficie millones de microorganismos, si el niño luego se lleva la mano a la boca tendría más posibilidades de contaminarse. En conclusión está técnica sirve para protegernos a nosotros mismos y a los demás. El lavado de manos ha de realizarse varias veces al día, pero sobre todo:! Antes y después de las comidas.! Antes y después de ir al baño.! Después de manipular algún objeto que pueda estar sucio.! Las mamás o personas que tienen contacto directo con bebes y cambian sus pañales, también deben de tener cuidado y proceder al lavado de manos posterior, ya que hay microorganismos que pueden transmitirse a través de las heces del niño, así que con más motivo el lavado de manos. Para que un lavado de manos sea efectivo:! Las uñas deben estar cortas para que así no se acumule suciedad bajo ellas.! Debe emplearse jabón y una vez extendido frotar una mano con la otra llegando a todas las zonas de la mano, espacios interdigitales, uñas, palma y dorso de la mano. 4
LA IMPORTANCIA DEL APRENDIZAJE MUSICAL Existen diversas razones por las cuales la educación musical es beneficiosa en todas las edades, sobre todo si comienza desde la infancia. La educación musical produce un desarrollo de la psicomotricidad mediante el movimiento de los mecanismos de un instrumento mientras se lee una partitura, se sopla o se combinan manos y voces; es un ejercicio de psicomotricidad totalmente completo. Se trabajan las competencias en idiomas, ya que en primer lugar la partitura contiene instrucciones precisas sobre ritmo, altura, duración, velocidad, carácter y técnica para tocar. Es como leer otro alfabeto: de símbolos, líneas y puntos. Además, la música tiene frases, sintagmas (semifrases) y palabras (motivos), que dan sentido al discurso musical, un sistema sintáctico que le da coherencia musical. Mientras aprende música, el niño mejora su aprendizaje en conceptos propios de las lenguas y las competencias para aprenderlas. Mediante la música también aprendemos a escuchar, trabajando el oído, adquiriendo una mayor capacidad auditiva, lo que permitirá tener mayor facilidad a la hora del aprendizaje de idiomas, tanto de su audición como de su pronunciación. La música contribuye al desarrollo del pensamiento lógico, principalmente en los primeros años, cuando se interiorizan conceptos musicales básicos. Matemáticas y lógica se desarrollan para aprender a interpretar el ritmo, con el consiguiente desarrollo del pensamiento lógico matemático y la estructura de los mapas mentales. Por otro lado, la música es arte cuyo aprendizaje favorece el desarrollo de la sensibilidad y la creatividad, sirviendo de canal para expresar y exteriorizar los sentimientos y fomentar el desarrollo del criterio artístico. 5
Se desarrolla también el pensamiento múltiple, ya que se necesita una buena técnica psicomotriz, llevar el pulso, tener en cuenta las duraciones, la afinación, el ritmo la intensidad y el objetivo expresivo, tanto de la partitura como del director, de los compañeros o de todos a la vez. Cuando interpretamos una obra musical se fomenta la capacidad de autoescucha y reflexión, ya que al interpretar debemos escucharnos para analizarnos, corregirnos, y disfrutar con nuestra propia interpretación, y así aprenderemos a hacer lo mismo de nosotros mismos. Al mismo tiempo, hay que escuchar a los demás, desarrollándose así la empatía y las habilidades sociales de relacionarse. Incluso la educación en valores es fomentada a través del estudio musical. Tocar bien un instrumento requiere constancia, esfuerzo y perseverancia, y al tocar en público los niños superan sus miedos y se preparan para el futuro. Los avances del día a día gratificarán el esfuerzo invertido. Con el tiempo su control será mayor, creciendo así su motivación y perfeccionismo y potenciando su autoestima. Asimismo, un instrumento es delicado y se tiene que ser responsable y cuidadoso con lo que forma parte de ellos. Un estudio realizado por el Colegio de Medicina Albert Einstein de la Ciudad de Nueva York revela que el baile disminuye el riesgo de demencia senil más que cualquier otra actividad física y más que resolver crucigramas. Bailar en grupo o en pareja estrecha lazos sociales, y aprender pasos mejora la capacidad intelectual. En conclusión, el estudio musical propicia el desarrollo integral del niño. 6
OCIO EN FAMILIA LA BELLA DURMIENTE Un terrible maleficio se cierne sobre la hermosa Princesa Constance el día de su bautizo.en su décimosexto cumpleaños se pinchará con el huso de una rueca y morirá o tan sólo dormirá? Su madre la Reina Marguerite encomienda a su fiel primer ministro Pierre, que esconda a la pequeña en lo más profundo del bosque, mientras la Reina se encargará de destruir todas las ruecas del reino, no debe quedar ni una! También visitará las cortes reales vecinas para pactar una boda con un apuesto príncipe. Arnound de Valois, el príncipe destinado a casarse con la Princesa Constance, descubrirá en su camino a una hermosa joven de la que se enamorará Pero la malvada hechicera Morgana, cumplirá su venganza y sumirá a la Princesa Constance en un profundo sueño del que solo despertará con un beso de amor verdadero. Será el Principe Arnound el elegido para besarla? Disfruta de este maravilloso espectáculo, repleto de humor, fantasía, amor y mucha magia. Horario: Mañanas y tardes - Sábados 16h y Domingos 12h (ver fechas de próximos pases) Edad: A partir de 2 años Precio:14 - Teatro Principe Gran Vía BUSQUEDA DEL TESORO EN EL RETIRO Descubre el Parque del Retiro pista a pista, de una manera amena y divertida! El Parque del Retiro tiene una amplia historia que muy pocos conocen. Imaginas una entretenida ruta del tesoro para descubrirlo? Peques y papás resolverán juntos una serie de misterios que servirán para, al finalizar la actividad, descubrir el tesoro oculto. A través de un mapa, los pequeños guiarán al grupo descubriendo preguntas que deberán resolver apuntando las respuestas en sus cuadernillos. Cada uno de los enigmas acaba constituyendo un número, al transformar, gracias a un código alfanumérico, las letras en dígitos simples que llevarán a descifrar los códigos que abren el cofre del tesoro. La participación colectiva entre los niños y de éstos con los adultos que los acompañan es básica para la resolución de los enigmas y juntos, elegir los dígitos finales que darán la consabida recompensa. Un triunfo de todo el grupo! Actividad de 3 horas por el Retiro. Cuadernillo de resolución de enigmas. Mapa del tesoro. Preguntas a resolver Recompensa final. Acompañamiento por guía. Incluye: Puerta de Felipe IV (C/ Alfonso XII frente al Casón del Buen Retiro) Información http://www.atrapalo.com/actividades/busqueda-del-tesoro-en-el-retiro-os-animais_e292770