DETERMINACIÓN DE LAS CAUSAS DE MUERTE DE LOS CETÁCEOS

Documentos relacionados
LISTA DE ESPECIES DE CETÁCEOS REGISTRADAS EN AGUAS PERUANAS

LISTA DE ESPECIES DE CETÁCEOS REGISTRADAS EN AGUAS PERUANAS GRD

CENSOS AÉREOS DE CETÁCEOS Y TORTUGAS EN EL MAR VALENCIANO

COMPARACIÓN DE VUELOS Y CRUCEROS PARA CENSOS DE CETÁCEOS Y TORTUGAS MARINAS

Esculturas de la Naturaleza. a Foto: Carlos De Sa. FUERTEVENTURA Senda de los Cetáceos

Qué es la ANATOMIA? Qué es la FISIOLOGIA? FUNCIONES VITALES

ANEXO 1. Especies y biodiversidad marina presentes en la zona Chiloé- Corcovado, catastradas por el Centro Ballena Azul.

FACULTAD DE MEDICINA MED303 (ANATOMIA HUMANA II) MARZO - JUNIO 2014

Los Cetáceos del Perú y su Estatus de Conservación

Órganos del cuerpo humano

INFORME TÉCNICO SEGUIMIENTO VÍA SATÉLITE DE TORTUGAS

FÍSICA Y QUÍMICA 3º ESO. OBJETIVOS, CONTENIDOS Y CRITERIOS DE EVALUACIÓN 1ª Evaluación: Unidad 1. La medida y el método científico.

MORTALIDAD EN LANZAROTE 2013

Seminario del Proyecto LIFE+ INDEMARES Avanzando en la Conservación Marina

Código del lugar: ES FORMULARIO NAT 2000 NATURA 2000 FORMULARIO NORMALIZADO DE DATOS PARA ZONAS DE ESPACIAL PROTECCIÓN PARA LAS AVES (ZEPA)

MAPAS SENSIBILIDAD AMBIENTAL PUERTO SAN ANTONIO

INFORME SOBRE LA MORTALIDAD DE AVES MARINAS, TORTUGAS Y CETÁCEOS POR ARTES DE PESCA EN EL 2012.

PROCEDIMIENTO CLAVE PARA EL EVALUACIÓN DE LOS ESTUDIANTES DE LA FACULTAD DE CIENCIAS DE LA ACTIVIDAD FÍSICA Y EL DEPORTE DE LA ULPGC

ANATOMÍA TOPOGRÁFICA VETERINARIA APLICADA. PERIODO FEBRERO- JULIO /2010.

VISAVET (UCM) L OCEANOGRÁFIC

FACULTAD DE VETERINARIA PROGRAMACION DOCENTE CURSO ACADEMICO (Asignaturas cuarto curso)

UNIVERSIDAD DE LONDRES PREPARATORIA

Documento de orientación para la supervisión de los controles oficiales

ASIGNATURA: BIOLOGÍA. MATERIA: Biología MÓDULO: Fundamental ESTUDIOS: Grado en Química CARACTERÍSTICAS GENERALES* DESCRIPCIÓN. Página 1 de 5.

REGLAMENTO DE NOTIFICACIÓN OBLIGATORIA DE LAS INTOXICACIONES AGUDAS CON PESTICIDAS

CREACION DE LA BASE DE DATOS ESPAÑOLA DE VARAMIENTOS DE CETÁCEOS (BEVACET) Informe presentado por

SOCIEDAD ESPAÑOLA DE CETÁCEOS

PROGRAMA MUNDIAL DE TRABAJO PARA CETÁCEOS

ASIGNATURA: BIOLOGÍA CELULAR Y GENÉTICA

CARTA DESCRIPTIVA (FORMATO Modelo Educativo UACJ Visión 2020)

GUÍA DEL ESTUDIANTE. ÁREA O MATERIA: Biología y geología 4º E.S.O. DEPARTAMENTO DIDÁCTICO: BIOLOGIA Y GEOLOGIA.

Procedimiento para la definición de la política de personal académico y de administración y servicios PR_10

ASIGNATURA HISTOLOGÍA GENERAL (GENERAL HISTOLOGY)

ENFERMEDADES TRANSMITIDAS POR ALIMENTOS ETA. Dirección Vigilancia y Análisis del Riesgo Equipo ETA Abril 2014

TÉCNICO SUPERIOR UNIVERSITARIO EN TERAPIA FISICA EN COMPETENCIAS PROFESIONALES ASIGNATURA PATOLOGÍA I

UNIVERSIDAD JUÁREZ AUTÓNOMA DE TABASCO

Universidad Central Del Este U C E Facultad de Ciencias de la Salud Escuela de Medicina

Biología 2 Segundo de Media. Proyecto 1 Agosto/Sept Prof.: Lic. Manuel B. Noboa G.

Toma conciencia sobre la importancia de la célula.

Fecha de elaboración: Mayo de 2010 Fecha de última actualización: Asignatura Subsecuente

Informe Final Técnico y Financiero

Antes de adentrarnos en las aguas que albergarán

Variabilidad espacial de las propiedades químicas de los suelos.

MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES SECRETARÍA DE ESTADO DE LA SEGURIDAD SOCIAL DIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN DE LA SEGURIDAD SOCIAL

CURSO DE ESPECIALIZACIÓN CUIDADOR DE ZOOLÓGICO

Aparatos que intervienen en la nutrición

Zonificación de Áreas Naturales Protegidas. Ing. Benjamín Lau Chiong Unidad de Política y Prospectivas. Dirección de Desarrollo Estratégico

CURSO OSTEOPATÍA CRANEAL Y VISCERAL

Introducción. La muestra

1.1 INSTRUCTIVO - GUÍA PARA LA ELABORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL INFORME DE AUDITORÍA

POLITICAS NACIONALES BASADAS EN EVIDENCIA: SIGNIFICADO E IMPLICACIONES

Servicio de Evaluación, Calidad y Ordenación Académica

RESUMEN DE LA POLÍTICA DE CONFLICTOS DE INTERÉS GRUPO CIMD

Hernández-Pina, F.; García-Sanz, M.P. y Maquilón, J.J.

CAPITULO III. El propósito de la investigación fue recopilar información actualizada de las Micro

Curso de formación en los aspectos teóricos, prácticos y de base legal en el diagnóstico de la tuberculosis bovina

QUÉ ES LO QUE NOS PERMITE MOVERNOS?

Recuperación de suelos contaminados

CONVENCIÓN SOBRE EL COMERCIO INTERNACIONAL DE ESPECIES AMENAZADAS DE FAUNA Y FLORA SILVESTRES

RED DE SEGUIMIENTO DE LAS AGUAS SUPERFICIALES

INVENTARIO Y DESIGNACIÓN DE LA RED NATURA 2000 EN ÁREAS MARINAS DEL ESTADO ESPAÑOL

UNIDAD 4: LIVING THINGS (LOS SERES VIVOS)

HOJA DE ASIGNATURA CON DESGLOSE DE UNIDADES TEMÁTICAS INFORMACIÓN REQUERIDA POR ASIGNATURA

Por ello, previo informe favorable del Pleno de la Comisión de Recursos Humanos del Sistema Nacional de Salud, en su sesión correspondiente al día

COMPETENCIA S Y OBJETIVOS DE CONOCIMIENTO DEL MEDIO DE TERCERO

PROCEDIMIENTO CLAVE PARA LA ACTUALIZACIÓN DEL PERFIL DE INGRESO Y LA

PERFIL PROFESIONAL DE ENFERMERÍA EN LA UNIDAD DE HOSPITALIZACIÓN

Introducción a las Observaciones Meteorológicas

MANUAL DE PROCESOS DEL SGIC. Directriz 3: Garantía y mejora de la calidad del personal académico y de apoyo a la docencia

CURSO DE ESTRUCTURA Y FUNCIÓN II

Aprobado el plan nacional de la TDT

ASCOBANS 13 th Advisory Committee Meeting Document AC13/Doc. 8(S) Tampere, Finland, April 2006 Dist. 24 March 2006

GUÍA. Valores Naturales de la Zona Marina de la Reserva de la Biosfera de Fuerteventura. interactiva GOBIERNO DE ESPAÑA

... g o i n g o n e s t e p f u r t h e r 39

Presenta: Ricardo Gómez Lozano, CONANP

TRANSPORTE Y COMUNICACIONES.

4 Congreso Mundial de Reservas de Biosfera Taller sobre participación de los jóvenes

ATRIBUTOS DE LA BIODIVERSIDAD

ASIGNATURA: LABORATORIO QUÍMICA Y BIOLOGÍA GENERAL

Estudio Integrado del Ecosistema Costero Marino Peruano y sus Recursos Explotados ECOMARES

UNIDAD 12.- Estadística. Tablas y gráficos (tema12 del libro)

TECNICO ESPECIALISTA EN REFLEXOLOGÍA PODAL Y MANUAL nivel I y II. curso

RESERVA ESTATAL SANTUARIO DEL MANATÍ BAHÍA DE CHETUMAL

METODOLOGIA PARA LA CONSTRUCCION Y APLICACION DE MODELOS DE SIMULACION DINAMICA A PROCESOS DE IMPORTANCIA AGRÍCOLA

TEMA 2: LA FUNCIÓN DE RELACIÓN

PROGRAMA 313D DONACION Y TRASPLANTE DE ORGANOS, TEJIDOS Y CELULAS

LA EDAD CELULAR. EDAD: Cronología versus biología

GuíaSalud: Guías de Práctica Clínica en el Sistema Nacional de Salud

ACTA DE INSPECCIÓN PARA AUTOELABORADORAS DE ALIMENTOS PARA RUMIANTES

PERFIL PROFESIONAL INGENIERÍA EN TECNOLOGÍA AMBIENTAL. Universidad Politécnica de Durango

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD CARRERA DE TECNOLOGÍA MÉDICA ASIGNATURA: ANATOMÍA

Riesgos y Medidas Preventivas en Trabajo en Espacios Confinados

Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en Pekín. Otros documentos. Nuevo catálogo. extranjera

Evolución del Indicador Urgencias Hospitalarias en Consumidores de Alcohol Aragón 2005 / 2011

Curso de TECNICO SUPERIOR EN HIGIENE BUCODENTAL

Medir con cámaras infrarrojas

ASOCIACION CIVIL MAGNUM CITY CLUB Informe de Revisión Especial sobre Procedimientos Previamente Convenidos Diagnóstico Organizacional Reportes

CONTENIDO: 1. METODOLOGÍA Partes de enfermedad profesional comunicados según sector Índices de incidencia Segundo trimestre

Transcripción:

DETERMINACIÓN DE LAS CAUSAS DE MUERTE DE LOS CETÁCEOS Eva Sierra Unidad de Investigación de Cetáceos de la División de Histología y Patología Animal del Instituto Universitario de Sanidad Animal y Seguridad Alimentaria de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (IUSA-ULPGC) esierra@becarios.ulpgc.es 1. SITUACIÓN SANITARIA DE LOS CETÁCEOS Y SUS AMENAZAS. ANÁLISIS TERRITORIAL GENERAL. La estabilidad del medio marino es, cada vez más, una condición crítica para el desarrollo sostenible del planeta. La protección y conservación de los ecosistemas marinos es una prioridad mundial. A lo largo de la historia se han ido acumulando datos biológicos, oceanográficos, geofísicos, etc. con los que se han podido definir riesgos y plantear soluciones para mantener un equilibrio duradero y un desarrollo sostenible entre las actividades humanas y la conservación de los mares. Entre estas ciencias ambientales, recibe un especial interés el estudio de los mamíferos marinos, puesto que, como los hombres, son mamíferos homeotermos, con un amplio periodo de supervivencia y que se encuentran en lo más alto de la cadena trófica, constituyendo unos excelentes bioindicadores del medio marino, aportando una valiosa información sobre el grado de degradación o conservación de este hábitat a través del estudio biosanitario de estas especies. A nivel global, son muchas las amenazas (naturales o antropogénicas) que afectan a los cetáceos de vida libre. Entre las causas de origen natural se encuentran las enfermedades infecciosas o parasitarias, las cohesiones sociales (varamientos masivos), las patologías perinatales, etc.; mientras que el uso de sónares asociado a maniobras militares, las colisiones con embarcaciones o la exposición a contaminantes son responsables, directa o indirectamente, de gran parte de los varamientos y/o muerte de cetáceos debidos a la acción del hombre (origen antrópico). El conocimiento actual sobre la mortalidad de cetáceos en la mayoría de las especies es aún escaso si lo comparamos con los datos existentes en mamíferos terrestres. Existen algunas excepciones, como es el caso del estudio y seguimiento durante un largo periodo de tiempo de poblaciones de delfines mulares residentes (Tursiops truncatus) en Florida (Barros and Wells, 1998). Sin embargo, la mayor parte de la información existente sobre patología, exceptuando los animales en cautividad, proviene de estudios puntuales y temporales realizados en cetáceos varados, cazados con fines comerciales o atrapados accidentalmente en artes de pesca. Por otra parte, en la actualidad, las numerosas hipótesis sobre el por qué varan los cetáceos sigue perteneciendo al mundo de los misterios científicos, ya que la mayoría de las explicaciones publicadas poseen argumentos y resultados no concluyentes que, en general, no cuentan con la aceptación unánime de la comunidad científica. 1

Sin embargo, la observación de lesiones en estos animales, a través de la realización de necropsias ( amateur o profesional ), algunas de las cuales afectan a órganos vitales a través de mecanismos fisio-patológicos que provocan graves alteraciones de su funcionalidad y comportamiento, cuando no, directamente su muerte, ha supuesto la aceptación general de que la enfermedad puede ser una de las explicaciones al hecho de que los cetáceos se acerquen a la costa y terminen varando. A pesar de todo, es un hecho constatado en el estudio de las patologías de los animales salvajes y, en concreto, de los cetáceos varados, que en muchas ocasiones no se llega a establecer un diagnóstico final o definitivo, si por éste se entiende la determinación de la causa del varamiento y/o muerte del animal. 2. SITUACIÓN SANITARIA DE LOS CETÁCEOS EN CANARIAS. Las Islas Canarias constituyen un territorio altamente poblado a la vez que fraccionado. El impacto antropogénico sobre el medio marino, que constituye el nexo entre las islas, se ve sometido a diferentes actividades como el tráfico marítimo de transporte de mercancías y personas, la industria pesquera, la contaminación química por vertidos al mar (urbanos, industriales o agrícolas), la actividad turística de observación de cetáceos (directa o indirecta) y la contaminación acústica (tráfico marítimo, prospecciones y extracciones, sónares civiles o militares). Individual y colectivamente, las mismas tienen un efecto directo e indirecto sobre la vida y supervivencia de los cetáceos. Las aguas de las Islas Canarias constituyen una de las regiones con mayor riqueza y diversidad del Atlántico nororiental, habiéndose citado 30 especies diferentes de cetáceos. Es un área de extremado valor natural debido a su situación estratégica en la ruta de muchas especies migratorias y a sus particularidades oceanográficas (temperaturas, grandes profundidades cerca de la costa al carecer de plataforma continental, abundantes cefalópodos, zona de calmas en el sur-sureste insular, etc.). Todo ello ha dado lugar al establecimiento de poblaciones residentes de cetáceos, como el delfín mular (Tursiops truncatus) y el calderón tropical (Globicephala macrorhynchus), y de otras especies con presencia a lo largo del año, como el delfín de Risso (Grampus griseus), el cachalote (Physeter macrocephalus), el zifio de Cuvier (Ziphius cavirostris) y el zifio de Blainville (Mesoplodon densirostris). De estas 30 especies, al menos 24 han sido encontradas también varadas en las costas de las Islas Canarias. Los cetáceos varados constituyen una fuente importante de información sobre la anatomía, la histología y la patología de estos mamíferos marinos. Se tienen referencias históricas de varamientos de cetáceos en las Islas Canarias, pero ha sido en las dos últimas décadas cuando se ha comenzado a estudiar y referenciar este fenómeno que cuenta con un gran interés social y mediático. Desde el año 1980 hasta hoy, se tiene constancia de que en Canarias han varado más de 1000 cetáceos. 3. FUNCIONAMIENTO DE LA RED DE VARADOS EN RELACIÓN CON LA ULPGC. La Unidad de Investigación en Cetáceos del Instituto Universitario de Sanidad Animal (IUSA) de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria participa en la red de varamientos de cetáceos de Canarias junto al Gobierno de Canarias (Dirección General del Medio Natural), los Cabildos insulares, el Centro de Recuperación de 2

Fauna Salvaje del Cabildo de Gran Canaria, la Sociedad para el Estudios de Cetáceos en el Archipiélago Canario (SECAC) y Canarias Conservación. La incorporación de nuestra unidad a la red ha contribuido con la incorporación de la metodología diagnóstica de la Anatomía Patológica y otros diagnósticos laboratoriales, además de infraestructuras adecuadas. Como parte integrante de la red de varados de Canarias, la Unidad de Investigación de Cetáceos analiza una media anual de 50 cetáceos varados. En esta red de varamientos, nuestro grupo es el responsable del estudio patológico de todos los cadáveres con el objetivo principal, no siempre alcanzado, de determinar un diagnóstico de la muerte del animal y profundizar en el conocimiento de la patología de los cetáceos. La conservación de los cetáceos es fundamental para ayudar a mantener la biodiversidad del ecosistema marino. El estudio de la patología en cetáceos comenzó a desarrollarse a partir de la segunda mitad de los años 60, encabezado por los trabajos de patólogos y científicos norteamericanos, quienes realizaron preferentemente su labor en el seno del programa de mamíferos marinos de la Armada de los Estado Unidos de Norteamérica. Inicialmente, estos estudios se nutrieron mayoritariamente de animales mantenidos en cautividad, si bien, posteriormente se incrementaron con nuevas aportaciones procedentes de cetáceos varados. Los cetáceos mantenidos en cautividad y los de vida libre comparten muchas patologías, aunque en los primeros se detectan algunas diferencias específicas relacionadas con su manejo y su entorno que no han sido observadas en los animales de vida libre. La patología de los cetáceos varados, al igual que en otras especies salvajes o de vida libre, conlleva una serie de dificultades adicionales, requiriendo conocimientos básicos en la biología, anatomía y fisiología de estas especies, además del necesario aprendizaje metodológico y científico previo de la patología animal y comparada. Uno de los principales problemas reside, con frecuencia, en el estado de conservación de los cadáveres, lo que condiciona el número de casos disponibles en las condiciones adecuadas para realizar estudios completos y estadísticamente significativos. Por otra parte, el hecho de ser especies protegidas impide realizar trabajos de experimentación, práctica común en los animales domésticos, para demostrar distintas hipótesis fisiológicas y fisiopatológicas. Los cetáceos están protegidos tanto por la legislación estatal -la Ley 4/1989, el Real Decreto 1997/1995 de 7 de Diciembre, que determina la inclusión de los cetáceos en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas y el Real Decreto 439/1990 que regula el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas-, como por directivas comunitarias -Directiva Hábitat aprobada por la UE el 21 de mayo de 1992 (Directiva 92/43/CEE del Consejo) relativa a la conservación de los hábitat naturales y de la fauna y flora silvestres-. El delfín mular (Tursiops truncatus) figura, además, en el anexo II de especies de interés comunitario para cuya conservación es necesario designar zonas geográficas especiales que deben ser objeto de medidas especiales de protección del hábitat. Algunas de las especies de cetáceos presentes en las aguas canarias, como el calderón tropical (Globicephala macrorhynchus), la ballena franca (Eubalaena glacialis), la yubarta (Megaptera novoaengliae) y la población canaria de delfín mular (Tursiops truncatus) se han incorporado en el Catálogo Nacional mediante la Orden del Ministerio de Medio Ambiente de 9 de Junio de 1999. Por su parte, el Gobierno de Canarias, mediante el Decreto 151/2001, de 23 de julio, creó el Catálogo de Especies Amenazadas de Canarias, incluyendo 15 especies de cetáceos bajo distintos niveles de protección. 3

Por otro lado, el gobierno canario también reguló las actividades de observación de cetáceos en el Archipiélago, estableciendo una normativa para proteger a los animales del impacto que pudieran causar las mismas, mediante el Decreto 178/2000, de 6 de septiembre. 4. OBJETIVOS. El objetivo genérico de la labor llevada a cabo por la Unidad de Investigación de Cetáceos es el estudio de las patologías y la determinación de la/s causa/s de la muerte en los cetáceos varados, utilizando los conocimientos actuales de patología animal y/o comparada. 5. METODOLOGÍA. Según el Acta de Protección de los Mamíferos Marinos de los Estados Unidos de América (1972) se define a un cetáceo varado como: - Cualquier cetáceo muerto en la costa o en el agua. - Cualquier cetáceo vivo en la costa que es incapaz de volver al mar o que necesita atención médica. - Cualquier cetáceo vivo en el agua pero incapaz de volver a su hábitat por sus propios medios o sin asistencia. Los varamientos se atienden siguiendo un protocolo de actuación. En el caso de que el animal esté vivo, se intentará, siempre que sea posible, su recuperación por parte de equipos veterinarios especializados y posterior liberación al medio natural. En el caso de que el animal vare muerto, o muera tras un intento de recuperación/liberación, se realizará, por parte de la Unidad de Investigación de Cetáceos (IUSA) la pertinente necropsia reglada. Las necropsias se llevan a cabo en el lugar donde aparecen los animales, en zonas habilitadas en los vertederos, en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre (CRFS) del Cabildo de Tenerife, en dependencias habilitadas a propósito por los cabildos insulares (incluyendo las naves de las cofradías de pescadores) o en la sala de necropsias de la Facultad de Veterinaria de la ULPGC. Estas diferentes instalaciones condicionan, obviamente, el nivel de cumplimiento del protocolo estandarizado para una adecuada realización de la necropsia con finalidad diagnóstica. El tamaño de los animales y las infraestructuras para el transporte constituyeron la razón básica de la realización de este trabajo en las distintas ubicaciones, hecho que es común a muchas redes de varamiento en las que se practican necropsias de cetáceos (Geraci and Lounsbury, 1993). En este sentido, la principal particularidad de la red de varamiento en las Islas Canarias la constituye la insularidad que obliga al traslado de personal y material, así como al transporte de las muestras. Igualmente la logística en cada isla es diferente y desigual, lo que condiciona también el grado de cumplimiento del protocolo de actuación. Técnica de necropsia A los animales varados, cuyas condiciones de conservación y circunstancias logísticas lo permiten, se les realiza una necropsia completa o parcial, cuando el tiempo disponible no permite un trabajo más detallado. 4

El protocolo básico para el desarrollo de la necropsia en cetáceos es el estandarizado y publicado por la Sociedad Europea de Cetáceos por Thijs Kuiken y Manuel García Hartmann (Kuiken and García Hartmann, 1993). Este protocolo se ha innovado, utilizando procedimientos referenciados en el manual publicado por Geraci y Lounsbury (Geraci and Lounsbury, 1993), añadiendo algunas modificaciones propias de los protocolos utilizados para la necropsia de mamíferos terrestres domésticos del libro de la necropsia de los animales domésticos del Profesor King y colaboradores (King, 1989). Debido a la experiencia adquirida y el hallazgo de nuevas patologías no descritas anteriormente en cetáceos, hemos ido implementando nuestra metodología conforme nos han ido surgiendo nuevas necesidades. En este sentido podemos indicar como ejemplos la apertura de la cavidad abdominal con el objetivo de observar las venas mesentéricas y tomar muestras de gases en el sistema vascular digestivo o hepático de los cetáceos de profundidad y, también en estos animales, la apertura de una ventana en el cráneo y en la duramadre para observar y tomar muestras de posibles émbolos gaseosos en los vasos superficiales del cerebro. De manera resumida, los animales son fotografiados, se toman las medidas básicas (al menos, longitud y perímetro mayor), se cuenta el número de dientes y se pesan en aquellos casos en los que es posible. Toma de medidas en un ejemplar hembra cría de cachalote (Physeter macrocephalus) varada en Tenerife en 2010. La apertura del animal se realiza, en la mayoría de las ocasiones, en decúbito lateral derecho, abriendo una o varias ventanas de piel y según el tamaño del animal, siguiendo líneas perpendiculares al eje mayor del animal, desde la zona caudal al cráneo, y por delante de la aleta pectoral, hasta la zona inmediatamente caudal a la región anogenital, abarcando, dorsalmente, la musculatura dorsal y ventralmente, hasta aproximadamente la línea media del animal. 5

Apertura de un delfín listado (Stenella coeruleoalba) varado en Fuerteventura en 2008. Una vez se disecan y eliminan parcialmente las masas musculares dorsal y sublumbar desde la parte posterior del cráneo hasta la zona retroabdominal, se procede a la apertura de las cavidades (abdominal y torácica). Después se separa la cabeza una vez seccionada la musculatura del cuello, desarticulada la articulación atlanto-occipital y seccionada la médula espinal. Posteriormente, se diseca la musculatura de la cabeza y se deja al descubierto el cráneo siguiendo el procedimiento estándar para acceder al cerebro, que se extrae una vez se seccionan los pares craneales en la zona ventral del cráneo. Igualmente se accede a los sacos nasales y senos pterigoideos. Los oídos se extraen, normalmente, al final de la necropsia. Una vez expuestos los distintos órganos se procede a inspeccionarlos, fotografiarlos y a la toma de muestras in situ o una vez separados y extraídos del resto del cadáver, atendiendo a las condiciones y lugar donde se realiza la necropsia. Sistemáticamente, se toman muestras, de aproximadamente 2-3 cm 3, de piel y grasa subcutánea, músculo esquelético, tiroides, tráquea, pulmón, corazón y grandes vasos, diafragma, esófago, compartimentos estomacales, intestino, páncreas, hígado, riñón, glándulas adrenales, bazo, nódulos linfoides, timo, vejiga urinaria, testículo/ovarios, útero, glándula mamaria, cerebro, cerebelo, tronco del encéfalo, médula espinal, hipófisis, mucosa de senos paraóticos y sacos aéreos, grasa acústica del melón y mandibular y los complejos timpano-perióticos (enteros). El estado nutricional de los animales se establece morfológicamente atendiendo a parámetros anatómicos, como la presencia de determinados relieves óseos, la masa muscular dorso-axial y el perímetro circular torácico relacionado con la especie, tamaño y edad del animal. Esto nos lleva a clasificar su estado nutricional en: - bueno-moderado - pobre-caquexia moderada - muy pobre-caquexia severa El estado de conservación del cadáver se determinó siguiendo los parámetros y la clasificación establecida en el protocolo de la necropsia de cetáceos de la Sociedad Europea de Cetáceos (Kuiken and García Hartmann, 1993): - grado 1: muy fresco 6

- grado 2: fresco - grado 3: autolisis moderada - grado 4: autolisis avanzada - grado 5: autolisis muy avanzada Estudio histológico de rutina Las muestras se fijan en formaldehído tamponado al 10% a temperatura ambiente durante 24 horas y se procesan según el método de rutina para microscopía óptica mediante un procesador automático de tejidos. Posteriormente, se incluyen en parafina por medio de un dispensador de parafina y se realizan cortes histológicos con un micrótomo a 5 µm para su tinción rutinaria mediante la técnica de Hematoxilina y Eosina (H/E). Técnicas histoquímicas En muestras tisulares seleccionadas se realizan las siguientes técnicas especiales histoquímicas según protocolo (Prophet et al., 1992). En los casos en los que es necesario para establecer una mejor aproximación al diagnóstico definitivo y es posible, atendiendo a la disponibilidad de los anticuerpos adecuados, se procede a la realización de pruebas inmunohistoquímicas de las muestras tisulares seleccionadas. Para la realización de la técnica inmunohistoquímica se utiliza el método descrito por Hsu y cols. (1981) con modificaciones (Hsu et al., 1982). Técnicas microbiológicas (bacteriológicas y virológicas), toxicológicas y parasitológicas De los animales con un estado de conservación 1, 2, ó 3 se recogen rutinariamente muestras de, al menos, piel y grasa subcutánea, músculo esquelético, pulmón, hígado, riñón, bazo y cerebro, con el fin de, si así fuera necesario, realizar estudios microbiológicos (bacteriológicos y virológicos) y toxicológicos. Estas muestras se almacenan a -80º y a -20º centígrados. Método diagnóstico El objetivo del anatomopatólogo es el reconocimiento de las lesiones con el fin último de diagnosticar las enfermedades (diagnóstico de los procesos patológicos, enfermedad ). Aunque en ocasiones no es posible determinar la enfermedad concreta y/o su etiología, la descripción y posterior interpretación de las lesiones representa, con frecuencia, una herramienta de inestimable valor en el desarrollo del conocimiento de la patología animal y en particular de la patología de los cetáceos. En base a este concepto establecemos dos tipos de diagnóstico: 1. Morfológico (denominar la lesión, diagnóstico lesional). 2. Etiológico (referido a la causa o causas identificadas o no en el cadáver, órganos, tejidos o célula del mismo). 1. Diagnóstico morfológico Se refiere a la denominación de la alteración morfológica observada en los órganos, tejidos y/o células sometidas a estudio. 2. Diagnóstico etiológico Se refiere a la identificación de la/s causa/s naturales o antropogénicas responsables directa o indirectamente de esas alteraciones morfológicas, que en el caso de los cetáceos dividimos en causas: 7

- Físicas: trauma por colisión, por interacción intra-específica, por enmallamiento, etc. - Químicas: intoxicación por contaminantes medioambientales de origen antropogénico. - Biológicas: virus, bacterias, parásitos, hongos y biotoxinas. - Biológico-etológicas: envejecimiento, alteraciones de la comunicación, la orientación, la alimentación, la reproducción, etc. En base a este tipo de diagnóstico establecemos la siguiente división atendiendo al origen antropogénico o no de las etiologías: 2.1 Diagnóstico etiológico natural o no antropogénico: - Interacción traumática intra interespecífica. - Patologías de la reproducción o perinatales: parto, debilidad neonatal, separación materna, etc. - Patologías derivadas de alteraciones del comportamiento. - Patología vírica orgánica / multiorgánica. - Patología bacteriana orgánica / multiorgánica. - Patología parasitaria orgánica / multiorgánica. - Patología micótica orgánica / multiorgánica. - Neoplasia primaria / secundaria, orgánica / multiorgánica. - Patología del varamiento activo individual / masivo. - Biotoxinas. - Trastornos del desarrollo orgánico. - Patología embólica gaseosa. - Patología senil. - Otras patologías (espontánea, metabólica, etc.). 2.2 Diagnóstico etiológico antropogénico: - Interacción con pesca: enmallamiento, trauma por utensilio de pesca, etc. - Patologías por cuerpos extraños: ingestión de cuerpos extraños, cuerdas, etc. - Patología embólico-gaseosa compatible con un proceso descompresivo severo asociado a maniobras militares. - Trauma por colisión con embarcación. - Contaminación química antropogénica. 6. PRINCIPALES RESULTADOS DE LOS ÚLTIMOS AÑOS La Unidad de Investigación de Cetáceos de la División de Histología y Patología Animal del Instituto Universitario de Sanidad Animal y Seguridad Alimentaria de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (IUSA-ULPGC), ha realizado durante el período comprendido entre enero de 2000 y diciembre del año 2013, la necropsia completa o parcial de 444 cetáceos. El número total de varamientos registrados en las Islas Canarias durante dicho período ha sido de 601. Con respecto al total de animales varados, los principales datos obtenidos, a modo de resumen, se refieren a: 8

Número de casos por especie: Especie Número de caso Balaenoptera acutorostrata 4 Balaenoptera borealis 4 Especie Número de caso Balaenoptera edeni 1 Balaenoptera physalus 10 Balaenopteridae 5 Delphinidae 7 Delphinus delphis 44 Globicephala macrorhynchus 59 Grampus griseus 19 Kogia breviceps 35 Kogia sima 8 Kogiidae 1 Lagenodelphis hosei 6 Megaptera novaeangliae 2 Mesoplodon bidens 1 Mesoplodon densirostris 5 Mesoplodon europaeus 13 Mesoplodon mirus 1 ND 10 Phocoena phocoena 1 Physeter macrocephalus 56 Pseudorca crassidens 2 Stenella coeruleoalba 102 Stenella frontalis 85 Stenella longirostris 3 Steno bredanensis 21 Tursiops truncatus 48 Ziphius cavirostris 48 ND: No determinado 9

120 100 80 60 40 20 0 Balaenoptera acutorostrata Balaenoptera borealis Balaenoptera edeni Balaenoptera physalus Balaenopteridae Delphinidae Delphinus delphis Globicephala macrorhynchus Grampus griseus Kogia breviceps Kogia sima Kogiidae Lagenodelphis hosei Megaptera novaeangliae Mesoplodon bidens Mesoplodon densirostris Mesoplodon europaeus Mesoplodon mirus ND Phocoena phocoena Physeter macrocephalus Pseudorca crassidens Stenella coeruleoalba Stenella frontalis Stenella longirostris Steno bredanensis Tursiops truncatus Ziphius cavirostris Nº de varamientos-porcentaje por isla: Lugar de varamiento Número De casos La Graciosa 1 El Hierro 7 Fuerteventura 119 Gran Canaria 163 La Gomera 17 La Graciosa 13 La Palma 8 Lanzarote 80 Lobos 1 ND 7 Tenerife 185 10

1; 0% 7; 1% La Graciosa El Hierro 185; 31% 119; 20% Fuerteventura Gran Canaria La Gomera 7; 1% 80; 13% 163; 27% La Graciosa La Palma Lanzarote 1; 0% 8; 2% 13; 2% 17; 3% Lobos ND Tenerif e Según el mes de varamiento: 120 100 80 60 40 20 0 11

Porcentaje por sexo: Nª de casos-porcentaje por edad: En cuanto al grado de conservación: 5% 2% 30% 10% 13% 40% Autolisis avanzada Autolisis moderada Autolisis muy avanzada Fresco Muy fresco ND 12

Nº de casos-porcentaje por diagnóstico etiológico: 157; 26% 277; 46% Animal sin necropsia ND 94; 16% Origen antrópico 73; 12% Origen natural En el total de 444 animales a los que se les pudo realizar una necropsia completa o parcial, los datos diagnósticos son los siguientes: 94; 21% 277; 62% 73; 17% ND Origen antrópico Origen natural Tomando solo en cuenta aquellos casos en los que se pudo establecer un diagnóstico etiológico definitivo, los porcentajes de las causas de muerte y/o varamiento según su naturaleza (natural o antrópica) fueron: 21% 79% Origen antrópico Origen natural 13

En los casos en los que se realizó una necropsia parcial o completa y se pudo establecer un diagnóstico: porcentaje de animales según los principales diagnósticos etiológicos observados en los cetáceos varados en el Archipiélago Canario desde el año 2000 hasta el 2013 (n=350). Colisión con embarcación Interacción con pesca Interacción traumática intra-interespecífica 1% 2% 0% 4% 6% 7% 7% Intoxicación por biotoxinas 4% 8% Neoplasia 4% 7% 2% Otras patologías (espontánea, metabólica, etc.) Patología del varamiento activo Patología embólica gaseosa 43% 4% Patología infecciosa y/o parasitaria 1% Patología senil Patologías de la reproducción o perinatales Patologías derivadas de alteraciones del comportamiento Patologías por cuerpos extraños Trastornos del desarrollo orgánico Trauma 14

7. CONSERVACIÓN Y ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN EN CANARIAS EN RELACIÓN CON LAS CAUSAS DE MUERTE. Históricamente existen algunas referencias de varamientos de cetáceos en las Islas Canarias, aunque las reseñas bibliográficas sobre la presencia de ballenas y delfines en Canarias son escasas y esporádicas resultan muy interesantes desde el punto de vista histórico y científico. Las primeras reseñas quizás sean las que se recogen en un texto de Plinio sobre la expedición del rey Juba II (siglo I AC) a las islas, en la que, entre otras cosas y productos de interés, señala la abundancia de ballenas que eran arrojadas a sus costas. La evidencia de antiguos varamientos en estas islas viene dada por el hallazgo en yacimientos aborígenes de vértebras y costillas de grandes cetáceos, así como ídolos tallados en huesos de ballenas (Cueva de Los Ídolos, La Oliva, Fuerteventura) o colgantes confeccionados con los dientes de cachalotes y otros cetáceos. En la "Historia Natural de las Islas Canarias", Viera y Clavijo hace referencia a algunos varamientos ocurridos en el siglo XVIII, destacando el varamiento en masa de treinta y siete animales en el Puerto de la Luz (Gran Canaria) en 1747 y el de más de treinta cachalotes acaecido en Arrecife de Lanzarote en 1796. Entre 1980 y mediados de los años 90 las referencias de los varamientos ocurridos en las costas canarias recogieron básicamente datos biológicos (que incluían, por ejemplo, la determinación de la especie, edad aproximada, sexo, contenido estomacal y datos referentes al estado del aparato reproductor) y morfométricos, complementados, según el caso, con algunos datos como la presencia de parásitos, la localización del varamiento, etc. (Martín y Carrillo, comunicación personal). En la segunda mitad de la década de los 90, y especialmente a partir de 1999, se complementaron estos resultados con estudios anatomopatológicos en cada uno de los animales varados al formalizarse la creación de la red de varamientos de cetáceos de Canarias. Desde enero del 2000 a diciembre de 2013 vararon en las Islas Canarias un total de 601 cetáceos pertenecientes a 24 especies distintas. La utilización de la Anatomía Patológica como método de estudio de las patologías de los cetáceos varados en las Islas Canarias en este periodo de tiempo nos ha permitido establecer el diagnóstico etiológico en el 58,23% de los mismos. La mayoría de los cetáceos varados pertenecieron a las especies de delfín listado (Stenella coeruleoalba) y delfín moteado del Atlántico (Stenella frontalis), representando el 16,9% y el 14,1% del total de especies varadas, respectivamente. Las especies: Phocoena phocoena, Mesoplodon bidens o Balaenoptera edeni estuvieron representadas por un solo ejemplar, respectivamente. El mayor número de varamientos se ha registrado en Tenerife (31%), seguido de Gran Canaria (27%). El menor número de varamientos se registró en La Graciosa y la isla de Lobos, con un varamiento en cada isla. Esto obedece, en nuestra opinión, a tres parámetros principales, la longitud de la costa, las condiciones orográficas y la densidad de población que accede a las mismas. Así, las playas de fácil acceso y mayor presencia humana se encuentran en el primer grupo de islas y se contrapone con las dificultades que presentan las del segundo grupo. 15

La media de animales varados en este periodo en las Islas Canarias fue de 42 animales por año, distribuidos a lo largo de los 12 meses, con ligeras concentraciones durante la primavera y el principio del verano, siendo los meses de abril y mayo los que presentan un mayor número de varamientos. Esto se debería principalmente a la mayor presencia y densidad en la población de algunas especies durante estos meses, como ocurre en los casos de los delfines comunes (Delphinus delphis), delfines listados (Stenella coeruleoalba) y delfines moteados del Atlántico (Stenella frontalis). En cuanto al género, los machos vararon con mayor frecuencia que las hembras (45% versus 39%). En el 16% de los casos no fue posible determinar el sexo de los ejemplares. Por edad, los ejemplares maduros y viejos representaron el 45% de los varamientos en este periodo, mientras que el grupo formado por los neonatos, crías y subadultosjuveniles representaron el 44%. En el 11% de los casos no se pudo determinar la edad de los animales. En la literatura científica se indica que la mortalidad en los cetáceos es alta en animales muy jóvenes, disminuye en los animales maduros y vuelve a incrementarse en los animales viejos (Ralls et al., 1980). La metodología utilizada para la determinación de la edad utiliza rangos muy amplios y nos impide profundizar en este aspecto. La definición de la edad con mayor precisión requiere de la incorporación de técnicas como el método de recuento de líneas de crecimiento dentales (Slooten, 1991), el cual, si bien se realizó en algunos de nuestros casos, no se ha llevado a cabo sistemáticamente por motivos principalmente logísticos. De los 601 cetáceos varados en las Islas Canarias durante el periodo de estudio, en 444 animales se realizó la necropsia completa o parcial (en algunos casos en los que la limitación de tiempo y el tamaño del animal no permitieron completar el protocolo), obteniendo resultados anatomopatológicos que son los que forman parte del estudio. Al resto de los animales varados no se le pudo realizar la necropsia debido a dificultades logísticas o al estado de descomposición muy avanzado en el que aparecieron los cuerpos. Atendiendo al estado de conservación, de los 601 cetáceos incluidos en este periodo de estudio, en 205 casos (35%) la necropsia se realizó en un estado de conservación de muy fresco o fresco, en 81 (13%) en condiciones de autolisis moderada y en los restantes en un estado de autolisis avanzada o muy avanzada. En general, la literatura presenta como condiciones ideales para la realización de la necropsia con fines diagnósticos (Geraci and Lounsbury, 1993) aquellas carcasas en estado de conservación de fresco o muy fresco, siendo de parcial utilidad aquellas en un estado de moderada autolisis. Muchos autores cuestionan la utilidad de las carcasas en un estado de conservación autolítico o muy autolítico (Geraci and Lounsbury, 1993). Nuestros resultados contribuyen a reafirmar también este hecho respecto al grupo fresco o muy fresco, con un 85,8% de diagnósticos establecidos. En el grupo de autolisis y autolisis avanzada, obtuvimos un diagnóstico en el 45% de los casos, pero si incluimos exclusivamente, los casos en los que pudimos realizar la necropsia parcial o completa, este porcentaje alcanza el 73,9%. Por lo tanto, estos resultados cuestionan la afirmación de Geraci de no viabilidad diagnóstica en animales que no presentan un estado de conservación fresco o muy fresco en el momento del varamiento, si bien muchos de ellos se incluyen entre las causas de muerte de origen antrópico con evidentes signos asociados visibles macroscópicamente. 16

Atendiendo a la naturaleza/origen de estas etiologías, hemos podido encuadrar estas causas en naturales o antropogénicas. De nuestros resultados se desprende que la mayoría de los cetáceos que varan en el Archipiélago Canario lo hacen por causas naturales (79%), mientras que aproximadamente un cuarto de los varamientos (21%) son causa directa o indirecta de la acción del hombre. En el primer grupo (causas naturales), las principales etiologías están representadas por las patologías infecciosas y/o parasitarias (43%), que incluyen, básicamente, a los agentes infecciosos (virus, bacterias hongos) y a los parásitos. Las infestaciones parasitarias multiorgánicas observadas, de intensidad moderada a severa, incluye varias especies de parásitos que pueden afectar simultáneamente a varias localizaciones orgánicas como la piel, tejido subcutáneo, senos pterigoideos, pulmón, tracto digestivo, hígado, glándula mamaria, riñón, cerebro, etc. El papel de los parásitos como causa de varamiento y muerte ha sido discutido ampliamente en la literatura científica (Dailey, 2001). En nuestro estudio hemos podido constatar su alta prevalencia, pero su valor etiopatogénico está claramente condicionado a la importancia funcional del órgano afectado. Úlceras no perforantes e hiperqueratosis reactiva difusa en la porción queratinizada del estómago asociada a la presencia de anisákidos. Ejemplar subadulto de delfín mular (Tursiops truncatus) varado en la playa de las Canteras (Gran Canaria) en el año 2005. En cuanto a las infecciones víricas y bacterianas, éstas pueden tener un curso sobreagudo-agudo o crónico, dependiendo de la patogenicidad del agente implicado y la forma de presentación del proceso infeccioso. En términos generales, los principales virus que afectan a los cetáceos pertenecen a las familias Paramyxoviridae (género Morbillivirus) y Herpesviridae. En este contexto y de forma similar a como ha ocurrido en sus homólogos terrestres, las virosis por virus del género Morbillivirus representan un ejemplo paradigmático de agentes altamente patógenos también para los mamíferos marinos, con, al menos, 10 epidemias causadas por estos virus en los últimos 25 años, afectando a varias especies de pinnípedos y cetáceos de poblaciones distribuidas por todo el mundo. 17

Especie afectada Zona geográfica Año Tursiops truncatus Costa Atlántica de los EEUU 1987-1988 Stenella coeruleoalba Mar Mediterráneo 1990-1992 Globicephala melas/ Stenella coeruleoalba Cuenca occidental del Mar Mediterráneo 2006-2008 Tursiops truncatus Costa de Francia 2010 Balaenoptera physalus Costa del Mar Tirreno 2011 La infección por Morbillivirus tiene dos formas de presentación: una forma sistémica y una forma restringida al sistema nervioso central en forma de meningoencefalitis no supurativa. Se cree que ésta última es una patología análoga a la panencefalitis esclerosante subaguda descrita en perros y humanos y que representa una variante aberrante del virus, de presentación crónica (Domingo et al., 1995). En un reciente estudio llevado a cabo en cetáceos varados en el Archipiélago Canario se observó que el Morbillivirus es el principal agente causal implicado en las meningoencefalitis no supurativas (Sierra et al., 2014b). También se han descrito dos casos de infección sistémica; en un calderón tropical (Globicephala macrorhynchus) y un delfín mular (Tursiops truncatus) varados en las costas de las Islas Canarias (Bellière et al., 2011; Sierra et al., 2014c). Recientemente se ha documentado la detección de secuencias específicas de genoma Herpesvirus en tejidos de delfines listados infectados por Morbilivirus de cetáceos en la epidemia del Mar Mediterráneo del año 2006-2008. La presencia de Herpesvirus en cetáceos (marsopas, delfines y ballenas) se reconoce desde 1980. Su presencia, hasta la fecha, se ha descrito en cinco familias de cetáceos: Phocoenidae, Monodontidae, Delphinidae, Koggidae y Ziphiidae (Arbelo et al., 2012; Arbelo et al., 2010; Martineau et al., 1988; Smolarek Benson et al., 2006), asociada con infecciones localizadas de la piel y mucosas, o como infecciones sistémicas o de órganos internos (Arbelo et al., 2012; Arbelo et al., 2010; Blanchard et al., 2001; Esperon et al., 2008; Kennedy et al., 1992; Saliki et al., 2006; Sierra et al., 2014b; Smolarek Benson et al., 2006; Soto et al., 2012). Los Herpesvirus se han asociado también con encefalitis en una marsopa común (Phocoena phocoena), un delfín mular y un delfín listado (Stenella coeruleoalba) (Esperon et al., 2008; Kennedy et al., 1992; Sierra et al., 2014b). En cuanto a las etiologías de origen antrópica, la interacción con pesca y las colisiones con embarcaciones se encuentran entre las principales causas de mortalidad de los cetáceos en el Archipiélago Canario (7%, respectivamente). La interacción con pesca se traduce en el enmallamiento de los animales (quedan atrapados en las redes de pesca) y en lesiones traumáticas por distintos artilugios de pesca. 18

Ejemplar hembra juvenil de delfín listado varado en La Garita (Gran Canaria) en el año 2001. El cuerpo del animal apareció junto con una red de nylon de grueso calibre y malla amplia (3 mm. de diámetro y 80 mm. de luz) alrededor del pedúnculo caudal. Ejemplar hembra adulta de delfín común varado en Guía de Isora (Tenerife) en el año 2001. Herida inciso perforante de unos 8-10 cm de longitud en la pared costal izquierda, afectando al pulmón del mismo lado. Ejemplar hembra subadulto de cachalote varado en Morro Jable (Fuerteventura) en el año 2005. Presencia de 4 cortes longitudinales y profundos (al menos 50 cm. de profundidad y más de 1 metro de longitud) en la zona dorsal y en la zona de distribución simétrica (producidas por la hélice de una embarcación de gran tamaño). 19

Las colisiones de cetáceos con embarcaciones en las aguas del archipiélago canario se han descrito afectando a distintas especies (André et al., 1997; Carrillo and Fabian, 2010; Sierra et al., 2014a). El tráfico marítimo en las aguas canarias ha aumentado significativamente en las últimas décadas con embarcaciones rápidas de grandes dimensiones, lo que ha contribuido a una mayor incidencia de colisiones con grandes cetáceos, al coincidir alguna de las principales rutas marítimas de transporte con zonas donde se localizan pequeños y, especialmente, grandes cetáceos. Otras de las etiologías de origen antrópico, responsable del 4% de los varamientos en el Archipiélago Canario es la patología embólica gaseosa-grasa asociada al uso de sonares. El varamiento de cetáceos relacionadas con emisiones acústicas durante el transcurso de maniobras militares ha cobrado una gran importancia medioambiental y científica dado los varamientos ocurridos en Canarias asociados temporal y espacialmente con operaciones navales en las que se utilizaron sonares activos. En septiembre de 2002, 14 zifios vararon en las playas de las islas de Fuerteventura y Lanzarote. Este varamiento masivo de animales coincidió, temporal y espacialmente, con el desarrollo de las maniobras militares internacionales Neotapón 2002. Durante el transcurso de dichos ejercicios la Armada Española reconoció la utilización de sonares tácticos de media frecuencia. Tras la realización de las necropsias, las principales lesiones consistieron en lesiones congestivo-hemorrágicas de diferente intensidad y localización anatómica. Mediante técnicas de tinción específicas para la detección de grasas se observaron émbolos grasos en vasos venosos y linfáticos de diferentes órganos. Por tanto, el estudio anatomopatológico realizado en los zifios varados durante las maniobras militares Neotapón 2002 en el archipiélago canario proporcionó evidencias de la relación entre las actividades acústicas antropogénicas y el varamiento y muerte de estos cetáceos. Las lesiones descritas consistentes en un cuadro congestivo-hemorrágico generalizado y embolismo graso y gaseoso son comparables al cuadro clínico-patológico que presentan los buceadores que padecen un Síndrome de Descompresión Aguda Severa y representan la primera descripción de esta patología en cetáceos (Fernández et al., 2005; Jepson et al., 2003). El último varamiento masivo en Canarias por esta causa se produjo en julio de 2004, provocado por las maniobras militares de la OTAN denominadas Majestic Eagle y celebradas a unas 70 millas náuticas al norte de la isla de Fuerteventura (Fernández et al., 2012). Estos descubrimientos dieron lugar a una moratoria antisónar en Canarias, siendo la única que existe en el mundo para evitar varamientos en masa de cetáceos. Tras las investigaciones publicadas en 2003, el Parlamento Europeo votó a favor de una resolución no vinculante, en la que se recomendaba evitar el uso de esta tecnología hasta que se conociera el daño a la fauna marina. Como respuesta, el Gobierno español aprobó en 2004 la moratoria en las islas Canarias para impedir el uso de sónares antisubmarinos militares. Como resultado de esta moratoria, no ha vuelto a haber varamientos masivos de cetáceos en Canarias por esta causa (Fernández et al., 2013). Por último, el varamiento activo, individual o masivo, es una situación antinatural en todos los cetáceos, aunque algunas especies puedan utilizar el varamiento parcial y limitado como estrategia eventual para cazar a sus presas, como es el caso de las orcas (Orcinus orca) y los delfines mulares. 20

Se define varamiento activo como aquel en el que el cetáceo se encuentra vivo en la costa, y con independencia de que el animal esté o no gravemente enfermo, el varamiento activo por sí mismo implica una situación anómala y extrema para un organismo que no está adaptado anatómica y fisiológicamente a una superficie sólida, ni a unas condiciones ambientales diferentes a las del medio acuático. En nuestro estudio hemos constatado evidencias de varamiento activo en muchos de los animales incluidos, en los que se observan lesiones atribuibles a un cuadro que hemos denominado síndrome del estrés de varamiento, pudiendo aparecer como hallazgos únicos o superpuestas a patologías previas responsables del varamiento activo de los animales. La gravedad y consecuencias de estas lesiones pueden ocasionar por sí mismas la muerte del animal o agravar seriamente una situación previa de enfermedad en los animales varados, al tiempo que puede condicionar su posterior rehabilitación, haciendo infructuosa la terapia y posterior recuperación de los animales involucrados (Herraez et al., 2013). 8. RECURSOS PARA LA ELABORACIÓN DE ESTE TRABAJO. La información utilizada en la elaboración de este tema proviene del material elaborado por la Unidad de Investigación de Cetáceos del IUSA, principalmente de los informes semestrales y anuales sobre las causas de muerte de los cetáceos en Canarias, así como de la tesis doctoral del Dr. Manuel Arbelo (Arbelo, 2007). 9. PARTICIPACIÓN EN PROYECTOS DE INVESTIGACIÓN. La Unidad de Investigación en Cetáceos del Instituto Universitario de Sanidad Animal (IUSA) ha participado en numerosos proyectos de investigación de ámbito regional, nacional y europeo, relacionados con la sanidad y conservación de los cetáceos del Archipiélago Canario. Actualmente hay un proyecto en vigor relacionado con el embolismo gaseoso y graso que sufren estos animales en relación con actividades antropogénicas, como el uso de sonares durante las maniobras militares o las prospecciones sísmicas por parte de las empresas petroleras. El objetivo es profundizar en los mecanismos etiopatogénicos responsables de las lesiones observadas, así como conocer qué factores intrínsecos y/o de comportamiento intervienen en este síndrome y hacen más vulnerables a unas especies de cetáceos frente a otras, como es el caso de las especies de buceo profundo, principalmente zifios, cachalotes y calderones. 10. PARTICIPACIÓN EN CONGRESOS E IWC. La Unidad de Investigación en Cetáceos del Instituto Universitario de Sanidad Animal (IUSA) ha participado en numerosos congresos de ámbito nacional, europeo e internacional (European Cetacean Society, Biennial Conference on the Biology of Marine Mammals, etc.) presentando muchos de sus trabajos y dando a conocer las principales líneas de investigación llevadas a cabo en el Instituto. Algunos de estos trabajos han merecido el primer premio a la mejor presentación oral o póster en sus respectivas categorías. El director del IUSA, D. Antonio Fernández Rodríguez, ha sido miembro de la comisión ballenera internacional (IWC por sus siglas en inglés), presidiendo un grupo científico mundial sobre la mortalidad de ballenas y delfines. 21

Anualmente, se elaboran unas tablas generales de casos de interacción con pesca y colisiones con embarcaciones, con los que se elaboran unos informes para la IWC. Varios miembros de nuestro equipo han sido requeridos por la organización para participar en talleres/mesas redondas sobre temas de conservación de cetáceos a nivel mundial. 11. RECURSOS DE USO TURÍSTICO. La Unidad de Investigación de Cetáceos del IUSA ha fomentado la conservación de los cetáceos como recurso de uso turístico en Canarias, a través de un proyecto regional: Investigación Biosanitaria aplicada a la conservación e innovación en el turismo de cetáceos en Canarias. A su vez, el Instituto ha participado en la impartición de cursos a monitores de avistamiento y las actividades de observación de cetáceos forman parte fundamental de la asignatura: Sanidad de los Mamíferos Marinos y Patología de Peces II, impartida en la Facultad de Veterinaria de la ULPGC, y que tiene como objetivo dar a conocer los principios de sostenibilidad, respeto al medioambiente y conservación de las especies marinas en su medio natural. 22

12. BIBLIOGRAFÍA COMPLETA. André M, Terada M, Watanabe Y. 1997. Sperm whale (Physeter macrocephalus) behavioural response after the playback of artificial sounds. Rep Int Whal Commn 47:499-504. Arbelo M. 2007. Patología y causas de la muerte de los cetáceos varados en las islas Canarias (1999-2005) Las Palmas de Gran Canaria. 590 p. Arbelo M, Belliere EN, Sierra E, Sacchinni S, Esperon F, Andrada M, Rivero M, Diaz-Delgado J, Fernandez A. 2012. Herpes virus infection associated with interstitial nephritis in a beaked whale (Mesoplodon densirostris). BMC Veterinary Research 8(1):243. Arbelo M, Sierra E, Esperon F, Watanabe TT, Belliere EN, Espinosa de los Monteros A, Fernandez A. 2010. Herpesvirus infection with severe lymphoid necrosis affecting a beaked whale stranded in the Canary Islands. Dis Aquat Organ 89(3):261-264. Barros NB, Wells RS. 1998. Prey and feeding patterns of resident bottlenose dolphins (Tursiops truncatus) in Sarasota Bay, Florida. Journal of Mammology 79::1045-1059. Bellière EN, Esperon F, Fernandez A, Arbelo M, Munoz MJ, Sanchez-Vizcaino JM. 2011. Phylogenetic analysis of a new Cetacean morbillivirus from a short-finned pilot whale stranded in the Canary Islands. Res Vet Sci 90(2):324-328. Blanchard TW, Santiago NT, Lipscomb TP, Garber RL, McFee WE, Knowles S. 2001. Two novel alphaherpesviruses associated with fatal disseminated infections in Atlantic bottlenose dolphins. J Wildl Dis 37(2):297-305. Carrillo M, Fabian R. 2010. Increasing numbers of ship strikes in the Canary Islands: proposal for immediate action to reduce risk of vessel-whale collisions. J Cetacean Res Manage 11(2):131-138. Dailey MD. 2001. Parasitic diseases. In:. CRC Handbook of Marine Mammal Medicine 2nd, Dierauf AL, Gulland FMD, editors. CRC Press, Florida:pp-361-367. Domingo M, Vilafranca M, Visa J, Prats N, Trudgett A, Visser I. 1995. Evidence for chronic morbillivirus infection in the Mediterranean striped dolphin (Stenella coeruleoalba). Vet Microbiol 44(2-4):229-239. Esperon F, Fernandez A, Sanchez-Vizcaino JM. 2008. Herpes simplex-like infection in a bottlenose dolphin stranded in the Canary Islands. Dis Aquat Organ 81(1):73-76. Fernández A, Arbelo M, Martín V. 2013. Whales: No mass strandings since sonar ban. Nature 497:317. Fernández A, Edwards JF, Rodriguez F, Espinosa de los Monteros A, Herraez P, Castro P, Jaber JR, Martin V, Arbelo M. 2005. "Gas and fat embolic syndrome" involving a mass stranding of beaked whales (family Ziphiidae) exposed to anthropogenic sonar signals. Vet Pathol 42(4):446-457. Fernández A, Sierra EM, Martín V, Méndez M, Sacchinni S, Bernaldo de Quirós Y, Andrada M, Rivero M, Quesada O, Tejedor M, Arbelo M. 2012. Last Atypical Beaked Whales Mass Stranding in the Canary Islands (July, 2004). J Marine Sci Res Dev 2(2):107. Geraci JR, Lounsbury VJ. 1993. Marine Mammals Ashore, A Field Guide for Strandings. Galveston, Texas 77553-1675: A TEXAS A&M SEA GRANT PUBLICATION. Herraez P, Espinosa de Los Monteros A, Fernandez A, Edwards JF, Sacchini S, Sierra E. 2013. Capture myopathy in live-stranded cetaceans. Vet J 196(2):181-188. Hsu SM, Werner A, Griffiths G, Raine L. 1982. Demonstration of myoglobin in formalin-fixed renal sections by immunoperoxidase technic. Am J Clin Pathol 77(3):316-319. 23

Jepson PD, Arbelo M, Deaville R, Patterson IA, Castro P, Baker JR, Degollada E, Ross HM, Herraez P, Pocknell AM, Rodriguez F, Howie FE, Espinosa A, Reid RJ, Jaber JR, Martin V, Cunningham AA, Fernandez A. 2003. Gas-bubble lesions in stranded cetaceans. Nature 425(6958):575-576. Kennedy S, Lindstedt IJ, McAliskey MM, McConnell SA, McCullough SJ. 1992. Herpesviral encephalitis in a harbor porpoise (Phocoena phocoena). J Zoo Wildl Med 23(374 379). King JM. 1989. The Necropsy book. Ithaca, NY: [Dept. of Veterinary Pathology] New York State College of Veterinary Medicine, Cornell University. v, 62 p. p. Kuiken T, García Hartmann M. 1993. Cetacean pathology: dissection techniques and tissue sampling ECS Newsletter 17:Special Issue. Martineau D, Lagace A, Beland P, Higgins R, Armstrong D, Shugart LR. 1988. Pathology of stranded beluga whales (Delphinapterus leucas) from the St. Lawrence Estuary, Quebec, Canada. J Comp Pathol 98(3):287-311. Prophet EB, Mills B, Arrington JB, Sobin LH. 1992. Laboratory methods in Histotechnology. In:. Armed Forces Institute of Pathology Ed American Registry of Pathology:pp-53-58, 98-100, 149-160, 197-198. Ralls K, Brownell RLJ, Ballou J. 1980. Diferencial mortality by sex and age in mammals, with specific referente to the sperm whale.. Report IWC, special issue 2:233-243. Saliki JT, Cooper EJ, Rotstein DS, Caseltine SL, Pabst DA, McLellan WA, Govett P, Harms C, Smolarek KA, Romero CH. 2006. A novel gammaherpesvirus associated with genital lesions in a Blainville's beaked whale (Mesoplodon densirostris). J Wildl Dis 42(1):142-148. Sierra E, Fernandez A, Espinosa de los Monteros A, Arbelo M, Diaz-Delgado J, Andrada M, Herraez P. 2014a. Histopathological muscle findings may be essential for a definitive diagnosis of suspected sharp trauma associated with ship strikes in stranded cetaceans. PLoS One 9(2). Sierra E, Sanchez S, Saliki JT, Blas-Machado U, Arbelo M, Zucca D, Fernandez A. 2014b. Retrospective study of etiologic agents associated with nonsuppurative meningoencephalitis in stranded cetaceans in the canary islands. Journal of clincial microbiology 52(7):2390-2397. Sierra E, Zucca D, Arbelo M, Garcia-Alvarez N, Andrada M, Deniz S, Fernandez A. 2014c. Fatal systemic morbillivirus infection in bottlenose dolphin, canary islands, Spain. Emerg Infect Dis 20(2):269-271. Slooten E. 1991. Age, growth and reproduction in Hector s dolphins Cephalorhynchus hecori. Canadian Journal of Zoology 69:1689-1700. Smolarek Benson KA, Manire CA, Ewing RY, Saliki JT, Townsend FI, Ehlers B, Romero CH. 2006. Identification of novel alpha- and gammaherpesviruses from cutaneous and mucosal lesions of dolphins and whales. J Virol Methods 136(1-2):261-266. Soto S, Gonzalez B, Willoughby K, Maley M, Olvera A, Kennedy S, Marco A, Domingo M. 2012. Systemic Herpesvirus and Morbillivirus Co-Infection in a Striped Dolphin (Stenella coeruleoalba). J Comp Pathol 146(2-3):269-273. 24