Ortega, E.; Piñar, M.I.; Ortega, V.; Palao, J.M. (2004). Incidencia de la inclusión de la línea de 3 puntos sobre el tanteo en baloncesto y propuesta de modificación en categorías de formación. RendimientoDeportivo.com, N 7. <http://www.rendimientodeportivo.com/n007/artic035.htm> [Consulta 09/01/2005] Incidencia de la inclusión de la línea de 3 puntos sobre el tanteo en baloncesto y propuesta de modificación en categorías de formación. Ortega, E.; Piñar, M.I.; Ortega, V.; Palao, J.M. (2004) 1) INTRODUCCIÓN En la temporada 1984-1985, la FIBA introdujo la línea de lanzamiento de tres puntos. Esta modificación reglamentaria supuso una revolución en el deporte del baloncesto, al modificar los estilos de juego de los equipos tanto a nivel ofensivo como defensivo. Esta regla ha permitido una mayor variedad en el juego y una modificación importante en el tipo de participación de jugadores exteriores e interiores. Los primeros pueden desarrollar su cualidad de tiradores y encestar desde posiciones alejadas al aro y, los segundos, al quedar más espacios libres cerca del cesto, pueden recibir y jugar el balón con más facilidad, ya que, las distancias que van a recorrer los defensores para realizar las ayudas van a ser mayores. Así, un alto porcentaje de eficacia en lanzamientos de tres puntos provoca que los defensores tengan que recuperar las posiciones de rebote desde zonas más alejadas del cesto. Esto aumenta el espacio disponible para los jugadores interiores que van a estar sometidos a menor presión defensiva (Sampaio, 1998). El lanzamiento de tres puntos se presenta como un recurso importante para conseguir disminuir las posibles diferencias entre equipos de distinto nivel, e incluso ganar encuentros que se presentan difíciles de vencer con otros tipos de lanzamientos. Puesto que, sumar de tres en tres puntos puede permitir la consecución de espectaculares y atractivas remontadas. En este sentido, Sampaio (1998) demostró que la eficacia en los lanzamientos de tres puntos es uno de los indicadores, junto a la eficacia en el tiro libre, que más contribuye para establecer el ganador en los partidos equilibrados. Parece quedar patente la relevancia que tuvo y tiene el lanzamiento de tres puntos en el desarrollo del baloncesto tal y como se conoce hoy en día. Desde esta perspectiva, en el presente trabajo de investigación se plantea la siguiente reflexión: si es tan relevante este lanzamiento, por qué no se forma a los jugadores más jóvenes que se inician en el baloncesto a lanzar desde posiciones lejanas?. Además, la utilización de lanzamientos desde zonas lejanas obliga a la defensa a estar más cerca del jugador con balón para evitar este tipo de lanzamiento, lo que supone mayores espacios libres cerca del cesto, provocando mayor número de 1x1 eficaces; por lo tanto, la inclusión de la línea de tres puntos es un aspecto claramente recomendable en estas etapas (Cárdenas y cols., 2001; Piñar y Cárdenas, 2004; Ortega, 2004). Indiscutiblemente, esta línea no debería situarse a 6,25 metros como sucede a partir de categoría infantil, sino que debería estar adaptada a las características del joven jugador al igual que debería ocurrir con el balón, la canasta y el resto de las dimensiones del terreno de juego. De igual modo, las demandas del juego y la formación del jugador requieren que este tipo de lanzamiento sea experimentado por los jugadores de categoría benjamín y alevín pero de forma adaptada a sus capacidades físicas, fisiológicas, biomecánicas y psicológicas (Cárdenas y cols., 2001; Ramírez, 2001; Piñar y Cárdenas, 2004; Piñar y cols., 2003; Ortega, 2004). Actualmente, diferentes federaciones regionales, están incluyendo en sus reglamentos la línea de 3 puntos, situándola en la mayoría de los casos a una distancia de 4 metros, coincidiendo con la línea de tiros libres, siguiendo la propuesta de Cárdenas y cols., (2001). http://www.rendimientodeportivo.com/n007/artic035.htm 1/8
Independientemente de la distancia a la que se deba incluir la línea 3 puntos (4 ó 4,5 m), cada entrenador debería adaptar las reglas a las características de su equipo, por lo que la utilización en los entrenamientos de la línea de tres puntos adaptada a las características de los jugadores se hace necesaria para lograr un adecuado proceso de enseñanza-aprendizaje. El objeto del presente estudio es profundizar en el efecto que tuvo la inclusión de la línea de tres puntos sobre los puntos conseguidos por partido y la igualdad de los partidos en la máxima categoría del baloncesto nacional. Todo ello con el objeto de comprender mejor el efecto que esta modificación reglamentaria tuvo, y abordar así desde una mejor perspectiva la posibilidad de incluir la línea de 3 puntos en categoría benjamín y alevín, así como plantear alternativas a la línea de 3 puntos (6,25 m) en categoría infantil y cadete, para fomentar y mejorar el lanzamiento a media y larga distancia. 2) METODOLOGÍA La muestra objeto de estudio está compuesta por 1.748 partidos de las ocho temporadas comprendidas entre 1980 y 1988 (122 equipos implicados). Cuatro temporadas previas a la inclusión de la línea de tres puntos y cuatro temporadas tras su inclusión. Los resultados de los partidos se obtuvieron de la base de datos de la página Web de la ACB. Del total de partidos analizados (Tabla 1), el 38,28% (669) pertenecen a las cuatro temporadas anteriores a la inclusión de la línea de 3 puntos y el 61,72% (1.079) a las cuatro temporadas posteriores. Tabla 1: Número de partidos analizados desde la temporada 1980-1981 hasta la temporada 1987-1988. Las variables del presente estudio fueron, como variables independientes: la existencia o no de la línea de tres puntos y el nivel de los equipos; y, como variables dependientes, los puntos conseguidos por equipo local y visitante, el total de puntos conseguidos y la diferencia de puntos entre el equipo ganador y el perdedor. El nivel de los equipos se estableció en función de su clasificación final en la competición, diferenciándose dos grupos: a) primeros ocho clasificados y b) equipos clasificados del noveno al último. Con el objetivo de poder analizar partidos según las diferencias en el resultado final, a partir de la propuesta de Sampaio (2000) se dividió el total de partidos en equilibrados (1-8 puntos de diferencia), desequilibrados (de 9 a 18 puntos de diferencia) y muy desequilibrados (más de 18 puntos de diferencia). Se realizó un análisis descriptivo e inferencial con el paquete estadístico SPSS 12.0 utilizando la prueba T de Student para comparar medias de muestras independientes, con un nivel de significación de p <.05 3) RESULTADOS Y DISCUSIÓN En la tabla 2 se observa la media de puntos anotados por los equipos locales, los equipos visitantes, el total de puntos anotados en el partido y la diferencia de puntos entre el ganador y el perdedor, de cada una de las temporadas objeto de estudio. http://www.rendimientodeportivo.com/n007/artic035.htm 2/8
Tabla 2: Puntos anotados desde la temporada 1980-1981 hasta la temporada 1987-1988. En concreto, en la figura 1 se aprecia la evolución de puntos anotados por los equipos locales y por los visitantes, así como las diferencias entre el equipo ganador y el perdedor. Cabe destacar la tendencia decreciente de la diferencia de puntos entre ganadores y perdedores, así como la tendencia a que si aumenta o disminuye el número de puntos anotados por los equipos locales, también aumentan o disminuyen los conseguidos por los visitantes. Figura 1: Evolución de puntos anotados antes y después de la inclusión de la línea de 3 puntos. En la Tabla 3 se observa el total de partidos analizados, la media y la desviación típica de los puntos anotados por los equipos locales, los equipos visitantes, el total de puntos anotados en el partido y la diferencia de puntos entre el ganador y el perdedor, de las cuatro temporadas antes de incluir la línea de 3 puntos, y de las cuatro temporadas tras su inclusión. http://www.rendimientodeportivo.com/n007/artic035.htm 3/8
Tabla 3: Número de puntos anotados en las temporadas sin línea de 3 puntos y con línea de 3 puntos. Los datos de la Tabla 3 reflejan una gran igualdad entre los puntos anotados en las temporadas anteriores y posteriores a la inclusión de la línea de 3 puntos. Por el contrario se aprecia que en las temporadas posteriores a la inclusión de la línea de 3 puntos, disminuyen las diferencias entre el equipo ganador y el perdedor. En la Tabla 4 se aprecia el número de partidos analizados según la diferencia en el resultado final, tanto para las temporadas en las que existía, como en las que no existía la línea de 3 puntos. Tabla 4: Número de partidos según las diferencias en el resultado final del partido. En la Figura 2 se pueden apreciar las diferencias porcentuales entre el tipo de partido según el resultado final, para las temporadas en las que no existía la línea de 3 puntos frente a las temporadas en las que existía. Figura 2: Tipo de partidos según el resultado final del encuentro: igualados, desequilibrado y muy desequilibrados. Tanto en la Tabla 4 como en la figura 2 destaca que tras la inclusión de la línea de 3 puntos disminuye el número de partidos que finalizan con grandes diferencias entre el ganador y el perdedor a favor del incremento de los que finalizan igualados. Finalmente, en la Tabla 5 se aprecia la media de puntos anotados por los equipos locales, los equipos visitantes, el total de puntos anotados en el partido y la diferencia de puntos entre el ganador y el perdedor, de las cuatro temporadas antes y después de incluir la línea de 3 puntos, según el tipo de partido en relación al resultado final. http://www.rendimientodeportivo.com/n007/artic035.htm 4/8
Tabla 5: Media de puntos anotados en las temporadas con y sin línea de 3 puntos según el resultado final del partido. De nuevo en la Tabla 5 se aprecian las escasas diferencias en puntos anotados entre las temporadas anteriores y posteriores a la inclusión de la línea de 3 puntos. Al profundizar, se aprecia que en los partidos igualados se anotan más puntos (tanto el equipo local como el visitante) tras la inclusión de la línea de 3, aspecto que refuerza la necesidad de este tipo de lanzamientos para lograr la victoria en partidos igualados (Sampaio, 2000). Para conocer las posibles diferencias de puntos anotados por los equipos locales, por los equipos visitantes, el total de puntos anotados en el partido y la diferencia de puntos entre el ganador y el perdedor, en las temporadas anteriores y posteriores a la inclusión de la línea de 3 puntos, se utilizó la prueba T para muestra independientes, apreciándose en la Tabla 6, que: Los equipos locales anotan prácticamente los mismos puntos con y sin la línea de 3 puntos. Los equipos visitantes anotan más puntos en las temporadas en las que se incluyó la línea de 3 puntos que en las temporadas en las que no existía, apreciándose indicios de significación estadística (p=.065). Si se suma los puntos de los equipos visitantes y de los equipos locales, en los partidos en los que existía la línea de 3 puntos se anotan más puntos que en los que no existía, si bien no se aprecian diferencias estadísticamente significativas. Se aprecian diferencias estadísticamente significativas en la diferencia final de puntos (p=.000), de manera que a partir de la inclusión de la línea de 3 puntos existe mayor igualdad en el resultado final del partido. Tabla 6: Diferencias de puntos anotados entre las temporadas anteriores y posteriores a la inclusión de la línea de 3 puntos. Con el objetivo de conocer si los equipos según su clasificación final habían aumentado, o no, su anotación a partir de la inclusión de la línea de 3 puntos, se compararon los puntos anotados como locales y como visitantes antes y después de la inclusión de la línea de 3 puntos. Se diferencia entre los equipos que habían quedado clasificados entre los ocho primeros y los que habían quedado clasificados a partir del noveno puesto. En concreto, en la Tabla 7, se aprecian diferencias estadísticamente significativas entre los puntos anotados antes y después de la inclusión de la línea de 3 en los equipos locales que finalmente quedaron clasificados a partir del noveno puesto. Por lo tanto, los equipos peores clasificados cuando juegan como locales incrementan significativamente su anotación tras la inclusión de la línea de 3 puntos, algo que no ocurre con los equipos mejores clasificados, los cuales anotan menos puntos, si bien no existen diferencias estadísticamente significativas. http://www.rendimientodeportivo.com/n007/artic035.htm 5/8
Tabla 7: Media de puntos anotados por equipos locales, según la clasificación final y la existencia o no de la línea de 3 puntos. De forma semejante, en la tabla 8 se aprecia que los equipos peores clasificados también anotan mayor número de puntos cuando actúan de visitantes tras la inclusión de la línea de 3 puntos; ocurre algo parecido con los equipos mejores clasificados, aunque, en este caso no se aprecian diferencias estadísticamente significativas. Tabla 8: Media de puntos anotados por equipos visitantes según la clasificación final y la existencia o no de la línea de 3 puntos. 4) CONCLUSIONES A la vista de los resultados obtenidos se puede concluir que la inclusión de la línea de tres puntos supuso. Una tendencia en el aumento de puntos conseguidos, siendo este incremento mayor en los equipos peor clasificados y en los equipos visitantes. Un incremento significativo del número de partidos igualados, readuciéndose las diferencias existentes entre los equipos analizados. Una disminución de los partidos desequilibrados (partidos con diferencia superior a los 18 puntos). Estas conclusiones junto a los resultados obtenidos invitan a realizar una reflexión acerca de la posible modificación de la línea de tres puntos en categorías de formación. Uno de los principales problemas que se presentan en el ámbito de la formación, son las excesivas diferencias existentes entre equipos. Normalmente, hay dos o tres equipos de la liga que están por encima del resto, debido, fundamentalmente, al desarrollo prematuro de algunos de sus jugadores. Aunque la existencia de la línea de tres puntos podría ayudar a disminuir las diferencias, Ferreira (2001), Martínez y Lozano (2001), Brandão y cols., (2003) y Ortega (2004), señalan que en la categoría infantil y cadete los lanzamientos desde ella son escasos y con muy poca eficacia debido, posiblemente, a su lejanía, y nulos por su inexistencia en la categoría benjamín y alevín. Por lo tanto, lo ideal sería encontrar una distancia adecuada a las características de los jugadores para que realizaran lanzamientos exteriores que les permitieran conseguir canastas con mayor valor, sin desvirtuar el gesto técnico. De esta forma se reducirían, como se ha comprobado en el presente estudio, las diferencias entre equipos y aumentaría la competencia entre ellos, incrementando las experiencias ante rivales de nivel semejante. Por otro lado, y sin perder de vista las conclusiones que se han obtenido, se permitiría que los equipos de menor nivel, hecho frecuentemente asociado a menor desarrollo físico, tuvieran la oportunidad de conseguir un mayor número de puntos, debido tanto a la posibilidad de anotar canastas de tres puntos, como a la creación de mayores espacios debido a que los defensores tendrán que estar más cerca de los atacantes para evitar este tipo lanzamiento, con el consiguiente incremento de motivación que esto acarrearía, redundando en una mejora del aprendizaje del joven jugador. Este aprendizaje se vería fortalecido por la posibilidad de variar los tipos de lanzamientos realizados por los jugadores, que se reducen casi exclusivamente a los ejecutados desde posiciones cercanas al aro (Piñar y cols., 2003). No hay que olvidar que, la variabilidad de las acciones practicadas es requisito fundamental para aumentar las posibilidades de aprendizajes posteriores (Schmidt, 1975; Le Boulch, 1985, 1991; Ruiz, 1995, http://www.rendimientodeportivo.com/n007/artic035.htm 6/8
1997, 1998; Ruiz y Sánchez, 1997). El incluir una línea de tres puntos en categorías benjamín y alevín y, modificar la distancia a la que está ubicada en las categorías infantil y cadete, mejoraría y completaría la formación del joven jugador, no sólo porque permitirá un incremento del número de canastas, sino porque además provocará que los defensores estén más cercanos a los atacantes, de manera que existirán mayores espacios cercanos al cesto y, por lo tanto, mayor posibilidad de incrementar el número de 1x1 eficaces. Por lo tanto, al igual que el baloncesto FIBA ha sufrido una evolución constante a través de numerosas modificaciones en su reglamento fruto de un proceso de análisis y reflexión continua, se debe reflexionar acerca de las posibles modificaciones a realizar en el baloncesto de formación con el objetivo de mejorar las capacidades de sus practicantes, de manera que si esas modificaciones no se pueden llevar a cabo en el entorno de la competición, puedan ser utilizadas en el entrenamiento para adaptar el baloncesto al niño y no el niño al baloncesto. 5) BIBLIOGRAFÍA Brandão, E.; Silva, J.T.; Janeira, M. (2003). O lançamento no basquetebol portugues: Estudo comparativo do tipo e eficacia do lançamento em função do nível conpetitivo e da posição dos jugadores no jogo. En Ibáñez, S.J. y Macias, M.M. (Eds.), Propuestas para la mejora en el proceso de formación y en el rendimiento en baloncesto. Cáceres: Editores. Cárdenas, D.; Piñar, M.I.; Baquero, C. (2001). Minibasket: un deporte adaptado a los niños?. Clinic. Revista Técnica de Baloncesto, 55: 4-11. Ferreira, A.P. (2001). Observação multidimensional do lançamento. Uma análise comparativa entre os escalões de iniciados e cadetes. En En Ibáñez, S.J. y Macias, M.M. (Eds.), I Congreso Ibérico de Baloncesto (pp. 183-191). Cáceres. Editores. Le Boulch, J. (1985). Hacia una ciencia del movimiento humano. Barcelona. Paidós. Le Boulch, J. (1991). El deporte educativo. Buenos Aires. Paidós. Martínez, B.; Lozano, A. (2001). Estudio del lanzamiento y el pase como medios fundamentales del juego en el baloncesto de base. Libro de Actas del IV Congreso Internacional sobre la Enseñanza de la Educación Física y el Deporte Escolar (pp. 514-520). Santander: Universidad de Cantabria. Ortega, E. (2004). Análisis de la participación del jugador con balón en etapas de formación en baloncesto (14-16 años) y su relación con la Autoeficacia. Tesis Doctoral. Universidad de Granada. Piñar, M.I.; Cárdenas, D. (2004). El minibasket 3x3 y sus aportaciones al juego del niño durante la competición. En López, A.; Jiménez, C.; López, C. (Eds.), II Curso de Didáctica del baloncesto en las etapas de formación (pp. 16-37). Madrid: Editores. Piñar, M.I.; Cárdenas, D. (2004). El minibasket 3x3 y sus aportaciones al juego del niño durante la competición. En López, A.; Jiménez, C.; López, C. (Eds.), II Curso de Didáctica del baloncesto en las etapas de formación (pp. 16-37). Madrid: Editores. Piñar, M.I.; Alarcón, F.; Palao, J.M.; Miranda, M.T.; Cárdenas, D. (2003). Análisis del lanzamiento en el baloncesto de iniciación. En Oña, A.; Bilbao, A. (Eds.), Libro de Actas del II Congreso Mundial de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte. Deporte y Calidad de Vida (pp.202-208). Granada: Editores. Ramírez, V.P. (2001). Efectos e influencia de la carga (volumen-intensidad) de entrenamiento sobre capacidades físicas y variables fisiológicas en la formación de jugadores de baloncesto en edad escolar (minibask et 11 y 12 años). Tesis Doctoral. Universidad de Granada. Ruiz, L.M. (1995). Competencia motriz. Madrid. Gymnos. Ruiz, L.M. (1997). Deporte y Aprendizaje, procesos de adquisición y desarrollo de habilidades. Madrid. Visor Distribuciones S.A. Ruiz, L.M. (1998). La variabilidad en el aprendizaje deportivo. Lecturas: Educación Física y Deportes, 11. <http://www.efdeportes.com/efd11a/lmruiz.htm> [Consulta: 12/09/2002]. Ruiz, L.M. ; Sánchez, F. (1997). Rendimiento deportivo, claves para la optimización de los aprendizajes. Madrid. Gymnos. Sampaio, A.J. (1998). Los indicadores estadísticos más determinantes en el resultado final en los partidos de http://www.rendimientodeportivo.com/n007/artic035.htm 7/8
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