Fases del proyecto Faso05
Antecedentes El proyecto Faso 05 resultó un proyecto complejo para nosotros, no simplemente por las dificultades técnicas y logísticas a las que nos enfrentábamos sino por otras cuestiones que se referían a las características propias de una experiencia en Burkina Faso y la relación con una realidad como la suya. Se trata del tercer país más pobre en el mundo con las consecuentes consecuencias a nivel de desarrollo económico, social, cultural y tecnológico. En este sentido, se nos planteaban gran cantidad de cuestiones enfrente a esta experiencia. Cuál era la justificación de gastar más de 6000 euros en los viajes de un equipo humano formado por nueve personas, teniendo en cuenta que la matriculación de un niño en una escuela local cuesta 1 euro? Por qué no invertir ese dinero a través de una ONG o una organización local para que realizasen su proyecto? Se trataba finalmente de preguntas superficiales pues la importancia de cualquier proyecto no radica en resultados fáciles, sino en soluciones creativas y eficaces para problemas que responden a mecanismos mucho más complejos y que van más allá que la construcción de un pozo o del euro de inversión en la escolarización de un niño en Burkina Faso. La experiencia del Emotique con Laafi surge hace ya tiempo a través de los creadores del proyecto Laafi desde Francia y Emotique desde España. Esta organización se crea gracias al esfuerzo de un reducido equipo de personas en París que estaban en contacto con diferentes personas y colectivos en Burkina Faso y querían trabajar conjuntamente. Consideramos a Laafi como uno de los partners principales de este proyecto. De la misma forma que Laafi en su momento, el Emotique se planteaba la importancia de no afrontar el proyecto a través de una visión europea así como de la importancia de llevar a cabo acciones de pequeña envergadura y a través de una relación directa con la población local o las Instituciones o los colectivos ya asentados en la zona. Emotique tiene en cuenta siempre en todos sus proyectos y especialmente en un proyecto de estas características la importancia de no imponer modelos y de ser sensible a otras formas de organización así como de pensamiento. De esta forma, consideramos que un proceso de cualquier tipo (tanto creativo, como relacional) obtiene los mejores resultados. Gracias a este planteamiento, compartido por Emotique y por Laafi fue posible el proyecto Faso 05, que ha obtenido resultados espectaculares en el poco tiempo que lleva en marcha. Hemos conseguido uno de los objetivos principales, gracias al apoyo a la creación y el desarrollo de un grupo estable de teatro que ya ha creado un espectáculo completo y está realizando actuaciones en diferentes puntos de la zona de Africa central. Nuestra conclusión a partir de esta experiencia previa es la necesidad de conocimiento de la realidad a tratar, para intervenir en los problemas a través de acciones concretas y eficaces para la población. De ahí surge nuestra voluntad de no trabajar con grandes organizaciones sino a través de estructuras modulares, de la misma forma que trabajamos otros proyectos de Emotique o planteamos nuestro trabajo a nivel artístico y tecnológico. De esta forma, los agentes que participan en el proceso, cualquiera que sea, tienen la capacidad y las herramientas para gestionar los recursos y los efectos.
PRIMERA FASE DEL PROYECTO EN BURKINA FASO (2005) El proyecto se inicia con el viaje de Joan Coll, miembro de Emotique a Burkina Faso en junio de 2005, para entrar en contacto con la parte de la organización Laafi que se encuentra en la región de Koudougou. Después de conversaciones con el responsable local, Desirée Yameógo y presentándole nuestra actividad y nuestros proyectos, Desirée nos propone llevar a cabo el proyecto Faso 05. El proyecto se iniciaba de una forma natural, a través de las necesidades que existían en la zona por llevar a cabo un proyecto de estas características, pero sin un base económica para realizarlo. Emotique decide abordar el proyecto y tomar el riesgo económico junto a Laafi de realizar el festival Faso 05. Esto supuso una inversión de riesgo de material por valor de 36000 euros junto a una cantidad aproximada de 12000 euros para cubrir las necesidades básicas a nivel logístico. Afortunadamente a finales de año, conseguimos el soporte para los viajes a Burkina Faso por parte de l Institut d Indústries Culturals de la Generalitat de Catalunya y por parte del Instituto Nacional de Artes Escénicas y Música. Finalmente, Emotique invirtió 6000 euros en el proyecto. En este proceso de trabajo y con este presupuesto, conseguimos los objetivos principales en la primera fase que eran: 1. la formación de un grupo estable de teatro, con 40 bailarines y músicos que trabajaron durante cuatro meses para preparar diferentes acciones escénicas y musicales que serían presentadas por primera vez en diciembre de 2005 durante el festival Faso 05. En las fechas en que Emotique viajó a Burkina Faso, los dos grupos trabajaron para crear un espectáculo completo y para relacionar por un lado la cultura tradicional con la cultura contemporánea, y por otro lado para introducir el multimedia en la creación de su espectáculo. 2. la creación de una sala de informática en una escuela local. Durante este proceso, Emotique ha puesto al servicio de Laafi y de la comunidad local su tecnología y su capacidad y experiencia, así como aportando un nuevo enfoque multimedia y artística a la cultura tradicional. Este tipo de experiencia forma parte del enfoque del Emotique que siempre ha trabajado de una forma muy cercana con diferentes proyectos artísticos que se alejaban de las formas más convencionales del arte. Así Emotique mantiene una relación estable con el proyecto de L Antic Teatre (www.lanticteatre.com), un teatro que desde Barcelona trabaja la creación artística contemporánea en relación con colectivos de muy diversa índole. Alvaro Uña y Joan Coll forman parte del comité de gestión de L Antic Teatre. Emotique siempre ha trabajado en el ámbito de la creación artística y el desarrollo tecnológico a partir de un discurso de progreso a todos los niveles (como creadores, como individuos, como colectivo, como miembros de la sociedad, etc). Faso 05 ha sido una de las experiencias más importantes del Emotique hasta ahora, no simplemente como satisfacción personal o viendo los resultados efectivos de la experiencia in situ, sino porque forma parte del proyecto de Emotique a larga distancia. SEGUNDA FASE DEL PROYECTO EN BURKINA FASO (2007) Nuestro objetivo es continuar y ampliar el proyecto ya iniciado así como mantener la relación con la organización Laafi y con Burkina Faso. De esta forma, pretendemos dar las herramientas y la proyección necesaria a colectivos y artistas que pueden aprovechar nuestra experiencia en el campo artístico y tecnológico y que pueden intercambiar y relacionarse con nosotros de una forma productiva en ambos sentidos, así como continuar su formación y su evolución como creadores. La estructura básica del proyecto es la siguiente: 1. Experiencia a nivel de formación en el país a partir de talleres y conferencias ya programadas: proponemos un taller específico para trabajar el concepto de multimedia de Emotique y las herramientas que desarrollamos con el grupo a trabajar. 2. Experiencia a nivel de formación en Barcelona, en la sede de EMOTIQUE: a partir de una selección, se invitó a una persona del taller a formarse en Emotique durante un periodo de tiempo, con los equipos y entornos de Emotique.
Por un lado, la llegada de Emotique abre la posibilidad de conocer una experiencia diferente en el campo de la creación artística y del multimedia, así como otra forma de enfrentarse a la situación actual en el campo del arte y la tecnología. Por otro lado, mediante la experiencia directa en la estancia en Emotique, se cierra el círculo del desarrollo de esta persona y del colectivo entero compartiendo un sistema de trabajo abierto y las formas de construir modelos eficaces que después se puedan desarrollar en la zona de origen, ya de una forma independiente y autónoma. Esta es una acción directa, gestionando los recursos y analizando los resultados de una forma eficaz y sencilla. De esta forma, se está actuando ya en Burkina faso. Después de la primera experiencia en Burkina Faso, Emotique ya está planteando la forma de trabajar con un miembro del grupo en la sede de Emotique en Barcelona, ofreciéndole un periodo de formación así como dotándole de las herramientas necesarias para después continuar y desarrollar el proyecto en su región, ampliando las perspectivas del grupo que ya se creó y que está trabajando y obteniendo resultados in situ. Una de las ideas sobre las que se basa la estructura del proyecto es la concepción, indiscutible, de que la formación es un elemento básico para el desarrollo, pero sobretodo la de que un sujeto formado con herramientas nuevas y/o diferentes es un valor insustituible para el progreso y el desarrollo en su país. El proyecto es muy consciente de la importancia de la bidireccionalidad: por un lado, el trabajo en el país/zona y con el grupo; por otro lado, la nueva experiencia por parte de miembros del grupo para aportar directamente los conocimientos y las herramientas adquiridas de una forma todavía más directa y con una consciencia total del valor que ahora tiene ese conocimiento y experiencia en su país/zona. Otra de las ideas básicas en la concepción de la estructura básica del proyecto es la de generar acciones pequeñas, concretas y, por tanto, controlables. Los objetivos son claros y se pueden mantener entre los colaboradores del proyecto, el sistema de gestión se adecua a las circunstancias de esta colaboración y los resultados se observan a medio plazo y se amplían ya a largo plazo por parte de los que ahora serían los destinatarios. El proyecto pasa a sus manos. El proyecto genera estructuras autónomas, que ya no dependen de la gestión o la intervención por nuestra parte. Es importante remarcar como el proyecto se plantea como una plataforma de intercambio y progreso para Emotique así como una plataforma que genera nuevos colectivos y nuevos sistemas de creación y gestión por parte de estos creadores/colectivos. El impacto de desarrollar el proyecto a un nivel tan local posibilita manifestaciones y respuestas en lugares que podrían ser inimaginables a priori. Podríamos detallar aquí algún momento vivido durante la primera fase del proyecto en Burkina Faso, como el encuentro entre el grupo de teatro que ya era una realidad en Kougoudou junto a las altas instituciones de la región y del país (tan lejanas de esta comunidad habitualmente) en un teatro que albergaba a 3000 personas que asistieron conjuntamente a la presentación de su nuevo espectáculo. JUSTIFICACIÓN En el mundo actual, es necesario reflexionar entorno a un fenómeno que crea crecientes desigualdades en el interior de la sociedad y que supone a largo plazo la base de la falta o la dificultad en el desarrollo general por parte de las diferentes sociedades y culturas que conforman nuestra realidad. Se trata de lo que se ha definido como la brecha digital (de forma común el término se refiere al concepto del acceso a Internet) pero que fácilmente se podría ampliar a la brecha tecnológica (ampliando la definición en cuanto al uso y al acceso a las nuevas tecnologías aplicadas al desarrollo artístico y cultural). Esto afecta a diferentes aspectos del proceso, tanto a nivel de creación, como de producción y de consumo. A partir de aquí el Emotique reflexiona entorno a este fenómeno así como de la relación y la distancia existente entre el desarrollo cultural y el desarrollo tecnológico. A lo largo de la exposición de este proyecto, hemos definido algunas de las necesidades encontradas en las zonas en las que pretendemos trabajar: - el escaso o nulo conocimiento y acceso a la tecnología. - el escaso o nulo planteamiento de la aplicación de la tecnología al ámbito artístico y cultural. - el desequilibrio entre grupos muy preparados y equipados con recursos frente a otros en clara situación de desventaja. Las capacidades de Emotique para afrontar la cobertura de estas necesidades son: - Un amplio conocimiento y experiencia profesional dentro del campo artístico, de las nuevas tecnologías, del multimedia.
- Una dinámica de trabajo modular que le permite generar pequeños proyectos con resultados concretos a medio plazo. - Una estructura así como una infraestructura tecnológica que le permite afrontar proyectos de diferente índole en cualquier lugar. - La capacidad de trabajar y enfocar objetivos a partir de una perspectiva multidisciplinar y transversal de sus proyectos. Las posibilidades de Emotique para generar acciones de futuro a nivel de desarrollo cultural/artístico/tecnológico son: - La posibilidad de conocer de primera mano la situación previa en cada una de las zonas en las que se propone trabajar a través de sus colaboradores locales. - La posibilidad de generar alianzas con colaboradores e Instituciones españolas que quieren entrar a trabajar en proyectos que contengan la propuesta que exponemos. - La posibilidad de llevar a cabo un proyecto que genere acciones y proyectos autónomos que desemboquen en procesos independientes a nivel local al mismo tiempo que conectados a nivel internacional. CONCLUSIÓN Emotique abrió en 2005 una clara línea de trabajo entorno a la gestión y la transmisión del conocimiento y la experiencia adquirida en el ámbito del multimedia, a través de talleres y conferencias. Para nosotros, es muy importante trabajar por el intercambio para continuar aprendiendo y progresando como colectivo y como miembros de la comunidad artística a nivel mundial. Para entender porque es importante este intercambio y este tipo de relación, debemos definir, aunque sea brevemente, cual es nuestro concepto entorno al multimedia. Se trata de una perspectiva amplia, que va más allá de la pantalla de un ordenador. El multimedia puede ser un concepto global, que de forma transversal afecta a muchos y muy diferentes ámbitos de la creación. La creación es entendida también de una forma abierta, como un proceso en varias direcciones, que reúne elementos diversos en pro de un objetivo. La relación entre arte y tecnología es inherente pues a esta forma de concebir la creación y el multimedia. Esta relación de arte y tecnología, esta definición de un multimedia global, tiene sentido en relación con su entorno, dentro de las coordenadas de espacio y tiempo. Una caja de zapatos con un sistema básico de interruptores y cables se convierte en un sistema de iluminación de grandes dimensiones y con un efecto muy potente dentro del proceso de trabajo de un espectáculo por parte de un grupo local. Aprovechando los recursos locales y aplicando nuevas herramientas y nuevos conocimientos, el alcance de un proyecto artístico/tecnológico local se multiplica y alcanza la perspectiva global de una obra multimedia, en todos sus sentidos. Si la experiencia ya ha empezado a tomar forma en Burkina Faso, tenemos ya la constancia de que en Latinoamérica nos encontramos con una situación diferente en algunos aspectos. Así el desequilibrio principal que hemos localizado es el desnivel entre grupos muy preparados y con muchos recursos frente a grupos con una escasez muy relevante en el acceso a este tipo de conocimientos y con muy pocos recursos para alcanzar este conocimiento y las herramientas para desarrollarse en este sentido. El nexo entre ambas realidades puede trabajarse a partir de un discurso más abierto del multimedia.