Cómo reaccionan los niños frente a un desastre? Algunos tips respecto a síntomas esperados y su manejo.

Transcripción

1 Cómo reaccionan los niños frente a un desastre? Algunos tips respecto a síntomas esperados y su manejo.

2 Introducción Los desastres naturales son eventos traumáticos y aterradores, que impactan la vida de los niños, ellos pueden no comprender estos eventos, ni las medidas que los adultos adoptamos respecto a ellos. Esto puede llevarlos a sentirse confusos, ansiosos y temerosos. Este impacto es inmanejable, sin embargo es importante evitar que se traduzcan en un daño emocional más serio. Para esto los adultos debemos poder reconocer aquellos síntomas o conductas esperadas y saber como manejarlas.

3 Cuál es la reacción típica de los niños frente a un desastre? Muchos sentimientos y reacciones frente a los desastre son comunes a las distintas edades. Sin embargo en los niños es posible describir reacciones específicas entre ellas están las siguientes: Temor a futuros desastres. Conductas regresivas. Alteraciones del sueño y terrores nocturnos. Temor frente a eventos asociados al desastre.

4 Es importante recordar que: Los síntomas de los niños están dados por aspectos constitucionales y experienciales, es este sentido los niños ya fueron expuestos a la vivencia del terremoto y a las reacciones de los cercanos significativos. Pese a buscar síntomas comunes, cada niño responde al trauma de forma distinta, algunos reaccionan en forma inmediata, otros tras semanas o meses post evento. El conocer los síntomas más comunes busca facilitar a padres y profesores el reconocimiento de los síntomas y posibilitar una reacción oportuna.

5 Conductas específicas por edad: Etapa pre escolar (1 a 5 Años) Durante esta etapa los niños son especialmente vulnerables a la disrupción en su mundo seguro. Los niños aun no poseen las destrezas verbales y conceptuales que les permitan enfrentar efectivamente el estrés en forma autónoma. Ellos tienden a buscar seguridad en los miembros de su familia o adultos que jueguen roles protectores. Uno de los temores más importantes durante esta etapa es el temor al abandono, los niños que sufren algún tipo de pérdida habitualmente desarrollan algún tipo de sintomatología. Algunos síntomas típicos son: Succión del pulgar. Enuresis. Temor a la oscuridad y/o animales. Adherencia a los padres. Terrores nocturnos. Dificultades ligadas al control de esfínter. Dificultades en el habla (Ej. tartamudeo). Disminución o aumento del apetito.

6 Conductas específicas por edad: Etapa escolar (6 a 10 años) Durante esta etapa las conductas regresivas son los síntomas más frecuentes. Algunas conductas típicas son: Irritabilidad. Lloriqueo. Adherencia excesiva a los padres o adultos significativos. Comportamiento agresivo en casa o colegio. Competencia abierta con hermanos más jóvenes por la atención de padres. Temores nocturnos, pesadillas, miedo de oscuridad. Rechazo escolar. Pérdida de interés o poca concentración en la escuela.

7 Conductas específicas por edad: Pre adolescentes (11-13 años) En esta etapa la reacción de los pares son especialmente significativas. El niño tiene que sentir que sus miedos son apropiados y que puede compartirlos con los otros. En esta etapa las respuestas deberían apuntar a disminuir la tensión y la preocupación, así como también posibles sentimientos de culpa. Algunas conductas típicas de la edad son: Alteraciones del sueño y/o apetito. Rebeldía en el hogar. Rechazo a realizar tareas. Problemas a nivel escolar (Ej. Peleas, desinterés, problemas atencionales). Problemas físicos. Pérdida de interés en actividades con pares.

8 Conductas específicas por edad: Adolescentes (14 a 18 años) Al igual que en la etapa anterior, las actividades e intereses se centran en los pares. Ellos se ven especialmente afectados por la interrupción de las actividades con ellos. Algunas reacciones típicas de esta etapa son: Síntomas psicosomáticos (Ej., erupciones, problemas intestinales, asma, etc.). Dolores de cabeza y tensión. Alteraciones del apetito y del sueño. Amenorrea y dismenorrea. Aumento o disminución del nivel de energía. Apatía. Conductas disruptivas y/o delictivas. Disminución de las conductas emancipatorias. Baja en el nivel de concentración.

9 Conductas a seguir post trauma Una vez que el niño ha vivenciado una situación traumática, haya o no desarrollado síntomas, hay que ayudarlo a desarrollar estrategias que le permitan manejar las emociones negativas y las conductas desesperadas. Es importante que las personas sientan que tiene la posibilidad de sentir el temor pero que no sea invadida por este. En términos generales esto se facilita con adultos que tengan buen humor, que tengan una actitud positiva tanto respecto del evento traumático como respecto a la conducta de los niños.

10 Que hacer por edad: Etapa pre escolar. Durante la etapa re escolar puede ser de utilidad: Estimular la expresión del trauma a través del juego. Proveer de confort físico y refuerzo verbal. Brindar atención frecuente. Estimular la expresión de los temores a través del sueño. Tener un plan para calmarse, se refiere a actividades placenteras previas al dormir. Permitir cambios transitorios del sueño, como el permiso de niños para dormir con una luz sobre o con la puerta abierta, o sobre un colchón en los padres o el cuarto de otro niño, o estar con el niño mientras se duerme.

11 Que hacer por edad: Etapa Escolar Durante la etapa escolar es de utilidad: Tener paciencia y tolerancia. Realizar sesiones de juego con adultos y pares o discusiones/conversaciones con adultos y pares. Relajar las exigencias ante la escuela o en casa (con un entendimiento claro que esto es temporal y la rutina normal será reasumida después de un período conveniente). Desarrollar estructuras pero no exigencias en tareas y responsabilidades en casa. Ensayo de medidas de seguridad para ser tomadas en futuros desastres.

12 Que hacer por edad: Etapa Pre adolescente Durante esta edad es de utilidad: Participar en actividades con niños de su misma edad. Participar en actividades de grupo orientados a retomar las rutinas. Discusiones de grupo orientadas a comprender el desastre y a planificar acciones en posibles desastres futuros. Estructuras acciones y dar responsabilidades pero de baja exigencia. Disminuir temporalmente las exigencias a nivel escolar y familiar. Brindar atención individual extra.

13 Que hacer por edad: Etapa Adolescente (14 y 18) Algunas sugerencias de utilidad son: Estimular la participación en la rehabilitación y reparación de la comunidad. Estimular la reanudación de actividades sociales, atletismo, los clubs, etc. Estimular la discusión de experiencias de desastre con pares, miembros de familia ampliada, otros significativos Temporalmente reducir expectativas para el nivel de funcionamiento de la escuela y general Animar, pero no insisten, la discusión de miedos de desastre dentro del ajuste de familia

14 EL HABLAR CON LOS NIÑOS SOBRE TERREMOTOS Y OTROS DESASTRES NATURALES (AACAP) De nuevo los padres y profesores hacen frente al desafío de discutir un desastre natural con los niños. Aunque éstas puedan ser conversaciones difíciles, son también importantes. No hay "correcto" o erróneo" en la manera de hablar con los niños sobre tales acontecimientos. Sin embargo, aquí están algunas sugerencias que usted puede encontrar provechoso. 1. Cree un ambiente abierto y de apoyo donde los niños sepan que pueden hacer preguntas. Al mismo tiempo, es mejor no forzar a niños hasta que estén listos. 2. Dé a los niños respuestas e información honestas. Los niños generalmente saben, cuando Ud. da respuestas esquivas; esto puede afectar su capacidad de confiar o de sentirse seguro con Ud. en el futuro.

15 3. Utilice palabras y conceptos que los niños pueden entender. Adecue sus explicaciones a la edad del niño, su lenguaje y nivel de desarrollo. 4. Prepárese para repetir la información y explicaciones varias veces. Una cierta información puede ser dura de aceptar o de entender. Hacer la misma pregunta repetidamente puede ser una manera del niño de reasegurarse. 5. Reconozca y valide los pensamientos, sensaciones y reacciones del niño. Déjelos saber que usted piensa que sus preguntas y preocupaciones son importantes y apropiadas. 6. Recuerde que los niños tienden a personalizar situaciones. Por ejemplo, pueden preocuparse de su propia seguridad y de la seguridad de los miembros de su familia inmediata. Pueden también preocuparse de amigos o parientes que viven lejos. 7. Sea tranquilizador, pero no realice promesas poco realistas. Es bueno dejar saber a los niños que están seguros en su casa o en su colegio. Pero no le prometa que allí no habrá otro terremoto.

16 8. Ayude a los niños a encontrar maneras de expresarse. Algunos niños pueden no querer hablar de sus pensamientos, sensaciones o miedos. Pueden sentirse más cómodos expresándose a través del dibujo, del juego, etc. 9. Deje saber a los niño que muchas personas están ayudando a las familias afectadas por el terremoto. más reciente. Es una buena oportunidad para mostrarles a los niños que cuando sucede algo atemorizante, hay gente dispuesta a ayudar. 10. Los niños aprenden mirando a sus padres y profesores. Estarán muy interesados en cómo usted responde a los acontecimientos del mundo. También aprenden al escuchar sus conversaciones con otros adultos. 11. No deje a los niños mirar demasiada televisión con imágenes impactantes. La repetición de tales escenas puede ser muy perturbadora y confusa. 12. Los niños que han experimentado traumas o pérdidas en el pasado son particularmente vulnerables a la exposición prolongada o intensa a noticias o imágenes de desastres naturales. Estos niños pueden necesitar de ayuda y atención adicional.

17 13. Monitoree los síntomas físicos como dolores de cabeza y estomago. Muchos niños expresan su ansiedad a través de dolores físicos. Un aumento en tales síntomas sin causa médica evidente puede ser una muestra que un niño está sintiendo ansioso o abrumado. 14. Los niños en que persiste la preocupación por terremotos u otros desastres naturales pueden requerir de evaluación de un profesional de salud mental entrenado y calificado. Algunos indicadores de que un niño puede necesitar ayuda adicional son: trastornos en curso del sueño, pensamientos intrusivos, temores recurrentes respecto a la muerte, respecto a alejarse de los padres o respecto a ir a la escuela. 15. Así como padres y profesores pueden querer seguir las noticias y los acontecimientos a diario; muchos niños solo quieren ser niños y jugar, subir árboles, etc.

18 16. Los terremotos y otros desastres naturales no son fáciles de comprender o aceptar para que cualquier persona. Es comprensible que muchos niños y jóvenes se sienten asustados y confundidos. Los padres, profesores y adultos significativos pueden ser la mejor ayuda escuchando y respondiendo de una manera honesta, consistente y contenedora. Afortunadamente, la mayoría de los niños, son resilientes a los traumas. Creando un ambiente donde los niños se sientan libres de hacer preguntas, podemos ayudarles a hacer frente a acontecimientos y experiencias estresantes, y reducimos el riesgo de que desarrollen dificultades emocionales a largo plazo.