NOTA MÉDICA ORIENTACIÓN PARA VIAJEROS

Transcripción

1 01 ORIENTACIÓN PARA VIAJEROS Consejos básicos para el cuidado de su salud: ANTES DE VIAJAR Es recomendable que antes de iniciar un viaje consulte a su médico de cabecera quien lo orientará en función del destino, duración de la estadía y tipo de viaje por realizar. Además, le hará recomendaciones preventivas relacionadas con diarrea y enfermedades transmitidas por mosquitos, entre otras. Lo ideal es realizar la consulta con un mes de anticipación. Estas son algunas de las preguntas a tener en cuenta: Cuándo viaja y cuánto tiempo permanecerá en cada lugar? A dónde viaja? Qué países planea visitar? Si son más de un país, en qué orden lo hará? A qué ciudades? Son destinos rurales o urbanos? En dónde se alojará (camping, hotel, familia, amigos)? Qué actividades desarrollará (escalada, buceo, caminatas, visita a familia/amigos)? Ha realizado algún viaje internacional en el pasado? A dónde fue? Cuándo? Qué edad tiene usted? Qué vacunas ha recibido hasta ahora? Tiene antecedente de alergias (a medicamentos, ambiental, alimentaria)? Cuál es su estado actual de salud? Tiene antecedentes de algún problema de salud? Qué medicación toma o ha tomado en los últimos 3 meses? Presenta algún trastorno inmunológico? Si usted es mujer, Está embarazada? Está tratando de quedar embarazada o planea hacerlo en los próximos 3 meses? Está amamantando? Si usted viaja por tres meses o más, se aconseja realizar un chequeo odontológico, a fin de evitar inconvenientes durante el viaje.

2 02 Si toma medicamentos, asegúrese de que su médico le prescriba la cantidad necesaria para el tiempo del viaje, e incluya una cantidad extra en caso que el mismo se extienda por algún imprevisto. Llévelos en su envase original, en el bolso de mano y con una prescripción médica donde consten tanto los nombres genéricos como las marcas de los medicamentos. Si usted tiene condiciones de salud especiales, como por ejemplo si es diabético o alérgico a medicamentos, tenga en su poder alguna identificación que indique estas características (puede ser una pulsera o un colgante). Si utiliza anteojos, lleve consigo un par extra. Cuente con un botiquín de medicamentos (ver listado abajo) y elementos útiles para prevenir y tratar determinados problemas de salud en el destino. Chequee la cobertura de su seguro médico según su itinerario, o bien considere la posibilidad de contratar un servicio médico de asistencia al viajero. Para más información acerca del servicio no dude en contactarnos a: Línea 24 hs: Sitio Web: O acercarse a cualquiera de nuestras sucursales DURANTE EL VIAJE Use pantalla solar con protección para rayos UVA y UVB. Para destinos de riesgo de transmisión de enfermedades por mosquitos, utilice repelentes que contengan no menos de 25% de DEET (N,N-diethyl-m-toluamide) y cumpla las recomendaciones de prevención para malaria: use mangas largas y pantalones largos cuando esté al aire libre, especialmente de noche y tome la medicación correspondiente. Absténgase del sexo casual o practíquelo en forma segura utilizando preservativos de látex para reducir el riesgo de HIV y otras infecciones de transmisión sexual. Cumpla con las recomendaciones de agua y alimento seguros para prevenir la diarrea del viajero, y lleve los medicamentos indicados durante la consulta previa al viaje para el tratamiento. No olvide lavarse las manos con agua y jabón, especialmente antes de preparar la comida, después de ir al baño, toser o estornudar o use alcohol en gel (al menos 60% de alcohol). En algunos países usted sólo puede tomar agua embotellada y evite los cubitos de hielo, bebederos y agua de la canilla. Nade únicamente en piletas adecuadamente cloradas o en agua de mar. Evite nadar en agua dulce (lagos y ríos). Use las protecciones adecuadas según cada

3 03 No toque animales, aunque sean domésticos a fin de evitar posibles mordeduras. Si es arañado o mordido, lave la herida con agua y jabón y consulte al médico inmediatamente. Mantenga sus pies limpios y secos y no ande descalzo, para evitar infecciones parasitarias y fúngicas (hongos). DESPUÉS DEL VIAJE Si al regresar del viaje no se siente bien o tiene fiebre, lesiones cutáneas, diarrea o síntomas respiratorios, consulte inmediatamente a un centro médico indicando el itinerario del viaje realizado, para descartar posibles enfermedades relacionadas con el destino visitado. BOTIQUÍN PARA EL VIAJERO: Es muy importante que todos los viajeros se encuentren preparados para cualquier imprevisto. Su médico le explicará cuándo y cómo usarlo. Por ello, el contenido de un kit de primeros auxilios deberá tener en cuenta: El país que se visita. La duración de la estadía. La estación del año. Si se viaja solo o con familia. Si se visitan áreas rurales o ciudades. El estado de salud actual. Los ítems detallados en la siguiente línea son solo algunas sugerencias. Los medicamentos citados deberán ser indicados por un médico durante la consulta. Algodón. Gasa esterilizada. Cinta hipoalergénica impermeable. Alcohol absorbente. Antiséptico. Bandas adhesivas. Desinfectante. Crema para quemaduras de sol. Tijeras o pinzas. Venda elástica. Guantes de látex. Medicamentos: Para trastornos por la altura.

4 04 Antiácidos. Antihistamínicos / antialérgicos. Antimaláricos. Descongestivos. Antidiarreicos. Antitérmicos. Laxantes. Analgésicos. Ítems adicionales para considerar: Recipiente para preparar agua potable. Preservativos. Repelente para insectos Termómetro. Toallas desinfectantes. Protector solar y protector de labios. Tabletas potabilizadoras de agua o filtros. DIARREA DEL VIAJERO Los problemas gastrointestinales son los trastornos de la salud más frecuentes entre las personas que viajan. El riesgo de padecer diarrea durante visitas a áreas de bajo e intermedio nivel sanitario es considerable, y afecta a un 30 a 50 % de los viajeros que los visitan. En general, los casos son más frecuentes durante las primeras semanas de la estadía, y suelen estar asociados a malos hábitos de higiene en los restaurants. Lo que se conoce como intoxicación alimentaria involucra la ingesta de toxinas presentes en la comida. Se manifiesta con vómitos y/o diarrea que suelen resolver espontáneamente dentro de las 12 horas. El determinante más importante del riesgo de padecer una diarrea del viajero es el destino. El mundo está dividido en tres grados de riesgo: bajo, intermedio y alto. Los países de bajo riesgo incluyen: Estados Unidos, Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Japón y países del norte y oeste de Europa. Los países de riesgo intermedio incluyen: Este de Europa, Sudáfrica, algunas islas del Caribe. Las áreas de riesgo alto son la mayoría de Asia, Medio Oriente, África, México, América Central y del Sur. CÓMO PREVENIRLA? La forma primordial de prevenir la diarrea del viajero es consumir alimentos y

5 05 ENFERMEDADES POR ALTITUD Existen una serie de trastornos que afectan la salud de las personas que visitan destinos ubicados a grandes alturas respecto del nivel del mar producidos por el frío, baja humedad, radiación UV aumentada y disminución de la presión atmosférica. De todas maneras, la mayor preocupación es la hipoxia. A 3000 metros, la presión inspirada de oxígeno es del 69% solamente. La mayor hipoxia ocurre durante el sueño nocturno. Estos trastornos se conocen con el nombre de "enfermedad por altitud". Cualquier persona que visite lugares con las características mencionadas, independientemente de la edad, puede verse afectada. Enfermedad por altitud Es la forma más común de enfermedad por altura, afecta al 25% de los que duermen a más de 2500 m. Los síntomas semejan una resaca post alcohol: cefalea, a veces acompañada de cansancio, pérdida de apetito, náuseas y ocasionalmente, vómitos. La cefalea suele comenzar a las 2-12 horas del arribo y a menudo, durante o después de la primera noche. Suele resolver dentro de las horas de aclimatización. Edema cerebral por altura Es la progresión en severidad del cuadro anterior (raro). Se agregan a los síntomas anteriores una letargia profunda, confusión, ataxia. Una persona con este cuadro debe descender inmediatamente. La muerte puede ocurrir a las 24 horas de la aparición de la ataxia, si la persona permanece en las alturas. Edema pulmonar por altura Puede ocurrir en forma aislada o en asociación con los cuadros anteriores. La incidencia es de 1 en esquiadores y 1 en 100 escaladores a más de 4,270 m. Los síntomas iniciales son la falta de aire con el ejercicio o aún en reposo, asociado a debilidad y tos. El descenso o la administración de oxígeno salvan la vida. CÓMO PREVENIRLA? Tomarse tiempo para el ascenso: "aclimatarse es fundamental". Beber abundante líquido. Restringir las actividades en grandes altitudes, hasta que el cuerpo se haya adaptado. Tratar de dormir, si es posible, en lugares ubicados a baja altura. En algunas ocasiones, si es necesario y bajo prescripción médica, tomar medicamentos para prevenir la aparición de los síntomas. Ante la aparición de síntomas neurológicos o respiratorios consultar a un centro de salud.

6 06 JET LAG El jet lag es un trastorno pasajero entre los viajeros de avión que atraviesan 3 o más husos horarios. Es la consecuencia del ajuste del reloj biológico al lugar de destino, de forma tal que el ritmo diurno y del sueño están desincronizados con el nuevo ambiente. La intensidad y duración del jet lag están relacionados con el número de husos horarios atravesados, la dirección del viaje (hacia el este u oeste), la habilidad para dormirse en los viajes y la tolerancia individual. Los síntomas más frecuentes son: Dificultad para levantarse (cuando se viaja hacia el este), despertar temprano (viajando hacia el oeste) y sueño fraccionado. Disminución del desempeño físico y mental durante el día. Aumento de la fatiga, de la frecuencia de cefaleas e irritabilidad y dificultad para concentrarse. Trastornos gastrointestinales. MEDIDAS PREVENTIVAS PARA VIAJEROS Los viajeros pueden minimizar las molestias recurriendo a las siguientes medidas antes del viaje: Practicar ejercicio, comer saludablemente y descansar. Resetear el reloj biológico antes de viajar, cambiando el horario de acostarse, en función del destino del viaje (este u oeste). Durante el viaje: Preparar adecuadamente la agenda de los primeros días del viaje, tratando de disponer de tiempo libre para descansar. Evitar grandes comidas, alcohol, cafeína. Beber mucha agua. Desplazarse dentro del avión. Usar calzado y ropa cómoda. Dormir en los aviones, en lo posible. Una vez en destino: Exponerse a la luz solar Respetar los horarios de comida del lugar, hidratarse y evitar alcohol y cafeína.

7 07 EL VIAJE CON NIÑOS Al igual que los adultos, los niños que viajan están expuestos a enfermedades como malaria, diarrea, dengue y otras enfermedades virales, así como a accidentes. Los accidentes de tránsito son un punto clave para tener en cuenta, ya que ellos constituyen una causa frecuente de heridas en niños. Hay que extremar los cuidados para evitar que los niños tomen contacto con deposiciones o desechos de animales. En caso de mordeduras o sospechas de contacto con garras, saliva o la boca de un animal no controlado, a través de heridas o fisuras en la piel, es necesario consultar con el médico, que evaluará la conducta por seguir. Cuando se viaja con niños que tienen problemas de salud tales como anemia, enfermedades respiratorias serias, enfermedad cardíaca congénita, es muy importante saber cómo obtener oxígeno suplementario y fármacos frente a una emergencia durante el viaje. Es aconsejable que si se planea un viaje con niños, se realice una consulta médica antes de viajar para tomar medidas preventivas y asegurarnos de estar preparados ante cualquier imprevisto que pueda surgir, especialmente si se trata de niños pequeños. VIAJEROS MAYORES Y CON ENFERMEDADES PREEXISTENTES La edad por sí misma no debe ser considerada una contraindicación para viajar. A pesar de las limitaciones propias de una edad avanzada, los mayores que tienen la posibilidad de emprender un viaje, como también los que padecen enfermedades crónicas controladas pueden disfrutar al hacerlo. Las siguientes son algunas recomendaciones que estos grupos deben tener en cuenta antes de viajar: Para los viajes en avión, en primer lugar se deben descartar aquellas enfermedades graves y cirugías recientes que son consideradas contraindicaciones para este medio de transporte. En relación con el servicio de asistencia médica para viajeros, se recomienda contratar un seguro médico que incluya los problemas de salud que puedan surgir en destino relacionados con esas patologías, así como la posibilidad de traslados. Si el viajero recibe medicamentos por patologías crónicas, se recomienda llevarlos en el bolso de mano (no despacharlos por si se extravía el equipaje), mantenerlos en sus envases originales (no utilizar pastilleros para evitar contratiempos en los controles de seguridad), y llevar la cantidad necesaria considerando dosis extras por si se prolonga la estadía. Se debe contar con una prescripción médica donde consten todos los medicamentos, para presentar en los aeropuertos en caso de ser requerida. Dentro del botiquín de medicamentos, se

8 08 incluirán también antidiarreicos y antibióticos para utilizar en casos de diarrea, y las personas con antecedentes de pie diabético e infecciones urinarias recurrentes tendrán que agregar antibióticos específicos, para utilizar en caso de presentar síntomas en destino. Para disminuir el riesgo de la trombosis venosa en las piernas durante los vuelos y su potencial complicación (tromboembolismo pulmonar), se recomienda el uso de medias elastizadas, realizar ejercicios de flexión y extensión estando sentado, y caminatas periódicas. Aquellos que requieren una dieta especial durante el viaje (diabéticos o hipertensos), los que necesiten utilizar sillas de ruedas en las terminales o tengan necesidad de utilizar oxígeno durante el vuelo por enfermedades respiratorias, deben contactarse con la línea aérea con al menos 48 horas de anticipación, para hacer los arreglos correspondientes. En relación con las vacunas, además de recibir las habituales recomendadas según la edad, se debe tener presente que según el destino pueden requerirse vacunas especiales, como por ejemplo contra fiebre amarilla. El avance de la medicina ha permitido ofrecer calidad de vida a muchas personas aquejadas de enfermedades crónicas. Esto incluye, naturalmente, la posibilidad de concretar su deseo de viajar. Por otra parte, viajar supone enfrentar riesgos, como en muchas actividades de la vida, que sin embargo pueden ser minimizados mediante un buen asesoramiento que evalúe riesgos y beneficios. Hay casos en los cuales, si existe la posibilidad, debe modificarse un poco el itinerario para bajar el riesgo, procurando no alterar el beneficio que traerá el viaje. BIBLIOGRAFÍA: Centers for Disease Control and Prevention (CDC) Traveller's health: Stamboulian Medicina del viajero: