en Mejor De Bien CRISTIANA DE JESUCRISTO EL SEGUIMIENTO EN NUESTRA VIDA P. Enrique Uribe Jaramillo, OCD Para el estudio personal y comunitario

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1 De Bien en Mejor Para el estudio personal y comunitario DOMINO EO ORDEN DE CARMELITAS DESCALZOS Provincia de Santa Teresita del Niño Jesús Agosto - Septiembre 2016 Colombia TUUM EL SEGUIMIENTO DE JESUCRISTO EN NUESTRA VIDA CRISTIANA P. Enrique Uribe Jaramillo, OCD

2 El seguimiento de Jesús es una expresión llena de contenido bíblico, teológico y espiritual en la experiencia de la comunidad cristiana ha llegado a ser un tema evocador de muchas realidades, que están en el origen fundante de la vida teologal y espiritual del cristiano: gratuidad, discipulado, camino, alianza, fidelidad, dinamismo, creatividad, crisis, despojamiento, conversión, cruz, resurrección el tema del seguimiento de Jesús es una auténtica síntesis de la vida cristiana. La iglesia lo entendió así desde el principio y lo fue madurando gradualmente, ella encontró en el tema del seguimiento una de las formas más adecuadas para profesar su fe en el Señorio de Cristo, en su condición de Mesias y de Maestro, de Salvador. El seguimiento de Jesús se diferencia radicalmente de la costumbre vigente en su época. Los Discípulos buscaban y escogían a sus maestros a quienes trataban de imitar en su manera de enseñar para adquirir ellos mismo autoridad. Jesús nos llama a su seguimiento para que los Discípulos lo imiten materialmente en sus gestos o comportamientos, sino para que sean obreros y colaboradores en el reino de Dios. 1

3 Quien acepta la llamada de Jesús a su seguimiento lo hace con una adhesión libre, que rompe con la antigua condición cuyos lazos impiden la entrega a un ideal. El seguimiento de Jesús además de radical ha de ser irreversible. No se sigue a Jesús solo por un tiempo. La fidelidad está en el corazón del seguimiento, aunque el Discípulo siempre este expuesto a la tentación de abandonarlo. Quien se atreve a seguir a Jesús no puede esperar un futuro y una suerte distinta a la del Señor. Seguir a Jesús es convertirse desde las raíces más profundas del propio ser (Mc 1, 16; Mt 9, 9; Mc 10, 17 ss; Mt 8, 21 ss). El seguimiento de Jesús se vive desde las raíces humanas, históricas y socio-culturales, donde toma cuerpo esta exigencia surgida desde las mismas entrañas del evangelio. América Latina, con toda su carga de contradicciones y de muerte, de injusticia centenaria, de dependencia, de explotación, de opresión y de pobreza experimenta el seguimiento de Jesús desde la óptica de la pasión y de la cruz. 2 La palabra seguimiento de Jesús esta noventa veces en el nuevo testamento; Mateo 25 veces, Marcos 19, Lucas 17 y Juan 19. El seguimiento de Jesús es típicamente evangélico y por ende Cristiano.

4 EL SEGUIMIENTO EN BOCA DE JESÚS Jesús ofrece una enseñanza clara sobre el seguimiento como parte esencial del anuncio del reino. Su palabra va revelando unas características que adquieren la condición de imperativos categóricos. Quien sigue a Jesús no puede menos que dejarse poseer por las exigencias que plantea. Entre las características que Jesús pone al seguimiento podemos subrayar las siguientes: El SEGUIMIENTO DE JESÚS EN AMERICA LATINA Seguir a Jesús en el contexto de nuestro continente es referirnos a los condicionamientos socioculturales e históricos que se padecen en estas tierras. Todos ellos son crucificantes se resumen en la cruz como símbolo del cautiverio que impide ser plenamente persona y ser continente libre. La lista es larga y todos la conocemos: marginación, pobreza, injusticia, desigualdad, dependencia, cinismo político, narcotráfico, corrupción administrativa, destrucción ecológica, opresión de los indígenas y de la mujer, explotación de menores, campañas antinatalistas impuestas, etc., etc. Sin embargo el misterio pascual de Jesús no termina en la cruz, ni la comunidad ha de propiciar un cristianismo que impida al creyente llegar a 3

5 ser resucitado como Jesús. Por el contrario la iglesia y especialmente la vida religiosa ha de proclamar un evangelio capaz de potenciar sus energías liberadoras, sus talentos y sus carismas otorgados por el espíritu santo para ir tras las huellas de Jesús. Seguir a Jesús en América Latina consiste entonces en reconocer el derecho a la esperanza, en rescatar la dignidad y empeñarse en la lucha solidaria por restaurar el rostro de Jesús en todos de manera especial en los más débiles. Seguir a Cristo es promover la cultura de la vida y del amor. 4 Este boletín utiliza imágenes descargadas de internet, no son propiedad de la OCD

6 DOMINO EO TUUM ORDEN DE CARMELITAS DESCALZOS Provincia de Santa Teresita del Niño Jesús Como hermanos de nuestra Comunidad de la Orden de Carmelitas Descalzos tenemos el compromiso de difundir nuestros temas de interés, por ello los invitamos hacer parte de nuestras redes Orden de Carmelitas Descalzos OCD Colombia Compartámoslas con nuestros amigos y evangelicemos al mundo por internet!