Tratamiento del Cáncer de Mama Metastásico

Documentos relacionados
CONSENSO Revisión de la Literatura sobre Tratamiento del Cáncer de Mama Metastásico

Revisión de la Literatura para la. de Mama Metastásico

REUNION BIBLIOGRAFICA CLINICA UNIVERSITARIA REINA FABIOLA

CANCER DE MAMA DR. MIGUEL SAMEC HOSPITAL DR. TEODORO ALVAREZ (CABA)

Actualización en Cáncer de mama

Uso Clínico-Oncológico- Bioquímico de Marcadores tumorales. Angel Gabriel D Annunzio Médico Oncólogo

TECNOLOGÍA EN SALUD DE INTERÉS Lapatinib 1. INFORMACIÓN GENERAL

Caso Clínico de Cáncer de Mama. Fernando Hernanz

INSTRUCTIVO PARA GESTION DE MEDICACIÓN ESPECIAL:

ANÁLISIS DE DUPLICIDADES DEL SUBGRUPO TERAPÉUTICO L02 - TERAPIA ENDOCRINA

CASO CLINICO: TRATAMIENTO NEOADYUVANTE EN CANCER MAMA HER-2 + Anabel Ballesteros García Hospital Universitario de La Princesa

Cáncer de mama avanzado

ESTRATEGIAS TERAPÉUTICAS EN CÁNCER DE MAMA. Raúl Carrillo Vicente Oncología Médica HGU Santa Lucía Cartagena (Murcia)

ENSAYOS Cáncer de mama. Investigador Principal: Dr. Manuel Ramos

Avances en cirugía axilar: «Linfonodo centinela y mas allá»

Grupo de estudio internacional del cáncer de mama (IBCSG) 23-01

Es la segunda causa de muerte en Chile y se ha convertido en una de las enfermedades más temidas entre los hombres mayores de 40 años.

SOLICITUD DE MEDICAMENTOS ONCOLOGICOS CON AUDITORIA PREVIA. Pulmón 2 Renal 4 Colon 5 Mama 6 Cabeza y Cuello 8 Tumores SNS 9 Cancer Gastrico 10

GUÍA CLÍNICA PARA PREVENCIÓN Y SEGUIMIENTO DE CÁNCER DE MAMA 2015

Mujer con cáncer de mama y

TECNOLOGÍA EN SALUD DE INTERÉS Deferasirox

Tratamiento del cáncer de Pulmón

Versión Electrónica. Enero 2007 GUÍA DE DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO DEL CANCER DE PROSTATA

Terapia sistémica adyuvante en. J. Gutiérrez, L Bronfman, A. Acevedo, H. Cerda, L. Cereceda, J.M. Reyes, C. Salas.

Seguimiento a largo plazo del superviviente de cáncer

El Inmunomomento en Melanoma: Nivolumab más respuestas y larga supervivencia? Alfonso Berrocal

Resultados relevantes obtenidos con Escozul para Cáncer Maxilar

JORNADA EDUCACION NEUROLOGICA CONTINUA NEURO-ONCOLOGIA

PREVENCION DEL CÁNCER GINECOLÓGICO CÁNCER DE MAMA DRA. RAMÍREZ MEDINA SERVICIO DE GINECOLOGÍA Y OBSTETRICIA UNIDAD DE MAMA

IEM. Biopsia Linfonodo Centinela (BLC) IEM BOOKLETS. Una guía para pacientes

PROGRAMA PRELIMINAR DOMINGO 18 DE JUNIO DE 2017

INSTRUCTIVO REGISTRO PARA LAS ATENCIONES DE QUIMIOTERAPIA

Población. Comparación. Resultados

ACTUALIZACIÓN EN EL DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO DEL CARCINOMA DE TIROIDES HOSPITAL UNIVERSITARIO RAMON Y CAJAL, 22 DE NOVIEMBRE 2010

De qué sistemas se dispone para evaluar el riesgo vascular? A qué población y con qué frecuencia se le debe evaluar el riesgo vascular?

Hospital Universitario Dr. Peset Valencia, 20 de octubre de 2011.

Servicio Medicina Interna CAULE. Sesión Clínica

Tomoterapia: precisión y máximo ajuste en el tratamiento del cáncer

5. Cáncer de próstata en progresión bioquímica

LO ÚLTIMO EN PATOLOGÍA RESPIRATORIA MARÍA LIZARITURRRY R3 MEDICINA INTERNA HOSPITAL UNIVERSITARIO LA PAZ

Formulario de solicitud de TRATAMIENTO del Cáncer de Mama

CASO CLÍNICO 17 PACIENTE CON CÁNCER DE MAMA Y METÁSTASIS CEREBRAL ÚNICA

Situación actual y tendencias en el Tratamiento médico del Cáncer de Mama

TRATAMIENTO DEL CÁNCER DE MAMA

Opciones para preservar la fertilidad en mujeres jóvenes.

9. Profilaxis de la ITU

Radioterapia hipofraccionada locoregional es posible en cáncer de mama ganglios positivos?

Sesiones Interhospitalarias Cáncer de Mama. Alejandro Velastegui O. Hospital Universitario Fundación Alcorcón

AVANCES EN TRATAMIENTO DE CÁNCER DE MAMA SALVADOR BLANCH (ONCÓLOGO MÉDICO IVO)

Congreso Nacional de Climaterio AMEC 2014

NUEVO ENFOQUE DEL CÁNCER DE MAMA EN PAÍSES DE BAJOS INGRESOS. Dra. Levitt Universidad de Oxford Presentado en SABCS 2011

Varón de 52 años Agosto 2006: Estudiado en Urología por cólicos renales. Se detectan en ecografía LOES hepáticas.

Bibliográfico AOCC. Cáncer de pulmón no células pequeñas EIIIA. Controversias El rol de la quimioterapia

ESTATINAS EN PERSONAS MAYORES

Cáncer. Cáncer de mama. En más del 15% de los. es evitable gracias al auto examen.

A PROPÓSITO DE UN CASO: ENFERMEDAD OLIGOMETASTÁSICA

NIC I. Labio Anterior NIC III. Labio Posterior

The Pharmaceutical Letter Lib. IX; nº 2 1 de Febrero de 2007

TRATAMIENTO PALIATIVO ESPECÍFICO EN PACIENTES CON CÁNCER. Purificación Martínez del Prado

Tratamiento con hormonas del cáncer de mama diseminado

Tratamiento de la recai da del ca ncer de ovario en pacientes no candidatas a platino

PAUTAS DE ONCOLOGIA MEDICA

Cáncer de Mama Metastásico

TERAPIA ONCOLÓGICA " UNA VISIÓN DIFERENTE "

Bioestadística, Estadística en Medicina

SIMPOSIO DE MAMA DIAGNÓSTICO Y SUBTIPOS MOLECULARES

Dra. Florencia Perazzo Prof. Asociada de Medicina IUC Servicio de Oncología CEMIC -Argentina-

FACTORES DE RIESGO. EDAD >50 Estilo de vida Historia familiar (BRCA1/2) Relacionados con reproducción FACTORES PRONÓSTICOS

Guía GEICAM de Práctica Clínica en Cáncer de Mama Metastásico Dr. Antonio Antón Hospital Miguel Servet. Zaragoza

Dr. Jorge Gutiérrez C., Dra. Garbiñe Ballesteros, Dra. Lucía Bronfman, Dra. Silvia Armando

MASA ABDOMINAL. Fecha: 10/12/2014 Nombre: Dra. Ana Mª Castillo Cañadas R 4 Tipo de Sesión: Guías clínicas

Preguntas para responder

Caso Clínico nº 14 T3N1M0 HER2+ Miquel Àngel Seguí Palmer

PAUTAS DE ONCOLOGIA MEDICA

SARCOMA DE EWING Y TUMOR NEUROECTODERMICO PRIMITIVO.

RESULTADOS PRELIMINARES

Prevención Primaria del Cáncer de Mama Evidencias Científicas. Dr. Milko Garcés Castre

Metástasis de Adenocarcinoma y Cáncer de Mama

Tumor phyllodes. Erika Fonseca Chimá Residente de obstetricia Universidad de Antioquia. Asesor: Dr. German Garcia

Qué es el cáncer de mama?

Las siguientes son quías de diagnostico y tratamiento de las enfermedades genitourinarias elaboradas por las siguientes asociaciones:

J.A; Alba Conejo, E en representación de GEICAM; Hospital Clinico Universitario, Valencia; C H U Juan Canalejo, A Coruña;

Evaluación de intervenciones en salud publica. Victor Suárez INSTITUTO NACIONAL DE SALUD

EL EQUIPO MULTIDISCIPLINAR XXVI CONGRESO DE LA SEAP/IAP PAPEL DEL PATOLOGO EN LOS TUMORES DEL APARATO DIGESTIVO BIOMARCADORES PREDICTIVOS

personalizado del cáncer de pulmón y la importancia de las determinaciones moleculares para oncovida

D EN CANCER DE PROSTATA Y BLOQUEO ANDROGENICO.

Protocolos de la OMS para tamizaje y tratamiento de lesiones del cuello uterino. Rolando Herrero

JORNADA DE ACTUALIZACION CANCER DE PROSTATA 2014

Vacuna frente al papilomavirus humano. (Comentarios a las fichas técnicas)

Descripción CLASES MAGISTRALES, TALLERES PRÁCTICOS DE CITOLOGÍA Y PRESENTACIÓN DE CASOS CLÍNICOS

Proyecto CENIT. III Conferencia Anual de las Plataformas Tecnológicas de Investigación Biomédica

Cámara de inhalación versus nebulizadores para el tratamiento con β agonista en el asma agudo (1)

13º Congreso Argentino de Pediatría Social y Derechos del Niño y 8º Congreso Argentino de Lactancia Materna. Lactancia

Aproximación a la Gestión del Riesgo de Desastres

Ecografía en el seguimiento de la trombosis venosa profunda. Dra. Raquel Barba Martín Hospital Rey Juan Carlos, Móstoles, Madrid

HORMONOTERAPIA EN CÁNCER DE MAMA

Actualización de temas GINA Dra. Patricia Arizmendi Agosto 2014

CONTROVERSIAS HIPERTENSION PULMONAR

Universidad de Cantabria. Cribado

GESTION INTEGRAL DEL BANCO DROGAS ONCOLOGICAS

Transcripción:

Tratamiento del Cáncer de Mama Metastásico Autores: Bruno Nervi, Cristián Carvallo, Bettina Muller, Marielisa León, Geraldine Melgoza, César Sánchez, Jorge Madrid, Luis Cereceda, Manuel Yáñez, Eduardo Yáñez, Yerko Borghero. Informe elaborado con asesoría metodológica y plataforma operativa de Medwave Estudios Ltda. Coordinadora, Dra. Vivienne Bachelet. Metodólogo senior, Dr. Miguel Araujo. Metodóloga adjunta, Dra. Gabriela Moreno. Encargado bibliografía, Matías Goyenechea. 1

CONTENIDO Introducción... 4 Objetivos Específicos... 4 Metodología y Resultados de la Búsqueda de la Literatura... 5 Síntesis de la Evidencia y Recomendaciones... 6 1. Qué estudio debe realizarse en una paciente con cáncer metastásico?... 6 1.1. Cuándo se debe biopsiar una metástasis?... 7 1.2. Qué imágenes se requieren antes de iniciar tratamiento?... 8 1.3. Cuáles deben ser los criterios de respuesta?... 9 2. Cuáles son los criterios para seleccionar la terapia sistémica?... 10 3. Tratamiento de bloqueo hormonal en pacientes pre-menopáusicas... 11 3.1. Tratamiento de primera línea... 11 3.2. Líneas posteriores... 12 3.3. Rol de la ooforectomía... 13 4. Tratamiento de bloqueo hormonal en pacientes post-menopáusicas... 13 4.1. Tratamiento de primera línea... 14 4.2. Líneas posteriores... 14 5. Tratamiento con bloqueo hormonal secuencial o concomitante a la quimioterapia?... 15 6. Tratamiento de quimioterapia... 15 6.1. Tratamiento con monodroga o combinación?... 15 6.2. Tratamiento de primera línea... 16 6.3. Líneas posteriores... 17 6.4. Cuántas líneas de tratamiento usar?... 18 2

6.5. Por cuánto tiempo debe continuarse el tratamiento?... 18 6.6. Nueva quimioterapia al momento de diagnosticar la progresión o solo ante síntomas... 19 7. Tratamiento con terapias biológicas... 20 7.1. Indicaciones de trastuzumab... 20 7.2. Indicaciones de lapatinib... 21 7.3. Indicaciones de bevacizumab... 21 8. Tratamiento con radioterapia... 22 8.1. De metástasis óseas... 22 8.2. De metástasis cerebrales... 23 8.3. Para control local luego de tumorectomía y disección axilar... 24 10. Tratamiento quirúrgico de las metástasis y del primario mamario en mujeres con cáncer de mama metastásico... 25 9. Tratamiento con bifosfonatos... 26 9.1. Indicaciones de bifosfonatos... 26 9.1.1. Prevención y tratamiento de osteoporosis... 26 9.1.2. Prevención y tratamiento de la progresión metastásica ósea... 27 9.2. Cuál bifosfonato utilizar, cada cuánto y por cuánto tiempo?... 28 Tablas Resumen de la Literatura... 29 Referencias... 45 3

INTRODUCCIÓN El cáncer de mama afectará una de cada 10 mujeres a lo largo de su vida, con una edad promedio al diagnóstico de 62 años. En Chile el año 2001 ocupó la segunda causa de muerte asociada a cáncer en mujeres, antecedido por las neoplasias de vía biliar. Aunque sólo un 10% de las pacientes se presentan inicialmente con enfermedad metastásica (Etapa IV), entre un 30 a 80% de los pacientes con enfermedad loco-regional inicial (Etapas I -III) recaerán a los 10 años del diagnóstico. La sobrevida global de pacientes con cáncer de mama es de un 90% a 5 años, sin embargo en el subgrupo con cáncer de mama metastásico, la sobrevida a 5 años es de sólo un 20%, con una mediana de 2 a 4 años. Este documento ha sido elaborado por un grupo de oncólogos con experiencia en el tratamiento de mujeres con cáncer de mama, y consiste en un análisis de las preguntas más relevantes que tenemos a diario al enfrentar los desafíos clínicos de nuestros pacientes. En ningún caso reemplazan el buen juicio clínico de cada circunstancia, ya que en definitiva, son muy variadas las consideraciones necesarias para escoger el mejor tratamiento para cada paciente. Este consenso pretende ser una referencia para oncólogos y grupos multidisciplinarios que tratan pacientes con cáncer de mama. Desde el consenso de mama publicado el 2003 por la Sociedad de Mastología, ha habido un importante desarrollo en el tratamiento sistémico del cáncer de mama metastásico, incluyendo el tratamiento de bloqueo hormonal, quimioterapia, y sobre todo del desarrollo de terapias dirigidas contra blancos moleculares. OBJETIVOS ESPECÍFICOS En este consenso hemos revisado la evidencia publicada y discutido en un panel de expertos la aplicación de estas recomendaciones a la realidad chilena. Objetivos específicos: 1. Revisar el estudio inicial de un paciente que se presenta con cáncer de mama metastásico. 2. Analizar cuáles son los criterios para seleccionar la terapia sistémica hormonal, de quimioterapia o de terapias contra blancos moleculares. 3. Analizar las indicaciones de terapia de bloqueo hormonal en mujeres pre y postmenopáusicas. 4. Analizar las indicaciones de quimioterapia. 5. Analizar las indicaciones de terapias contra blancos moleculares. 6. Analizar el rol de la radioterapia y la cirugía en el tratamiento del tumor primario mamario y de las metástasis. 4

7. Analizar el rol de bifosfonatos en la prevención de osteoporosis o en tratamiento de metástasis óseas. METODOLOGÍA Y RESULTADOS DE LA BÚSQUEDA DE LA LITERATURA Para la elaboración de este consenso, un grupo de 10 oncólogos médicos con experiencia en el tratamiento de cáncer de mama metastásico elaboramos una lista con las preguntas de mayor relevancia clínica en nuestra práctica habitual. Posteriormente y para contestar estas preguntas, realizamos una búsqueda sistemática en la literatura publicada en revistas científicas, recomendaciones de guías internacionales de buenas prácticas clínicas. Revisamos críticamente y resumimos estos trabajos. Subcomisiones agotaron cada pregunta elaborando una recomendación que fue confrontada por el panel hasta llegar a un consenso. 5

SÍNTESIS DE LA EVIDENCIA Y RECOMENDACIONES 1. QUÉ ESTUDIO DEBE REALIZARSE EN UNA PACIENTE CON CÁNCER METASTÁSICO? Con excepción de dos estudios aleatorizados que compararon seguimiento intensivo y estándar, no existen otros ensayos aleatorizados que demuestren cuál es la mejor forma de seguimiento en pacientes con cáncer de mama metastásico. Revisamos las guías clínicas Europeas y Americanas, además de los 2 estudios randomizados señalados y una revisión de la literatura. El seguimiento de una paciente que se presenta con un cáncer de mama localizado, persigue diagnosticar precozmente a las pacientes que progresarán con enfermedad metastásica. Se recomienda seguimiento clínico cada 3 a 4 meses el primer año, cada 4-6 meses el segundo año y posteriormente cada 6 a 12 meses. Nivel de evidencia IV El estudio de imágenes debe realizarse en relación a síntomas o signos que se presenten. Hiramanek publicó un trabajo de revisión de la literatura para evaluar cuál había sido el primer indicador de recurrencia tumoral en pacientes con cáncer de mama metastásico. Solo 7 de 42 pacientes presentaron una recurrencia asintomática (5 mamografías y 2 por examen clínico). La mayoría de los pacientes tenían recurrencias sintomáticas (Hiramanek, 2004). Nivel de evidencia III Palli analizó dos estudios randomizados que buscaban comparar el seguimiento intensivo con imágenes frecuentes, versus el seguimiento clínico con imágenes sólo por la aparición de síntomas. Hubo 222 pacientes en el grupo de seguimiento intensivo y 212 en el de seguimiento clínico. Las tasas de mortalidad a 10 años no son diferentes para el control clínico (31,5%) e intensivo (34,8%) Utilizando el análisis de supervivencia de riesgos proporcionales de Cox no se reveló ninguna ventaja en la sobrevida para el protocolo intensivo (hazard ratio, 1,05; 95% intervalo de confianza, 0.87-1.26). Por lo tanto, no es necesario ampliar el seguimiento a otros exámenes complementarios mas allá de la mamografía y el examen clínico (Palli, 1994). Nivel de evidencia I Los exámenes de laboratorio útiles en el seguimiento son el hemograma, perfil hepático y calcemia (Kataja, 2008). Nivel de evidencia IV 6

1. En el seguimiento de una paciente con cáncer de mama localizado, no es de beneficio realizar programadamente exámenes de imágenes, salvo la mamografía anual. Los estudios deben hacerse sólo si hay síntomas que sugieran progresión con metástasis. 2. En pacientes recibiendo tratamiento activo (quimioterapia-hormonoterapia) se sugiere evaluar luego de completar 2 o 3 ciclos de tratamiento, Si el tumor no presenta cambios significativos en sus diámetros, ni hay cambios sintomáticos luego de 2 o 3 ciclos de quimioterapia; el deseo del paciente, la toxicidad y la calidad de vida deben definir la conducta a seguir: detener el tratamiento para reiniciarlo en caso de progresión, o continuar la terapia hasta objetivar dicha progresión o alcanzar toxicidad inaceptable. 3. El seguimiento con imágenes debe hacerse midiendo las lesiones inicialmente identificadas. Pacientes con metástasis óseas pueden cursar con aumento de las lesiones escleróticas como respuesta al tratamiento y no debido a progresión de la enfermedad. 4. También el fenómeno de Flare puede producir alteraciones metabólicas y compromiso clínico en tumores RE positivos durante las primeras semanas de tratamiento endocrino. 5. El uso de marcadores tumorales para el seguimiento no es estándar, y no es recomendado por las guías del ASCO. Pueden ser una alternativa en pacientes con lesiones no medibles fácilmente (compromiso óseo exclusivo, derrame pleural, ascitis por ejemplo). 1.1. CUÁNDO SE DEBE BIOPSIAR UNA METÁSTASIS? En las pacientes que se presentan con cáncer de mama metastásico, es fundamental la confirmación histológica del primario o de una metástasis. En general se debe biopsiar una metástasis en el primer diagnóstico de enfermedad metastásica, (Cardoso, 2009; Consenso Europeo, 2007), tiempo libre de enfermedad mayor a 6 meses, lesiones solitarias para el diagnóstico diferencial y para caracterizar los marcadores biológicos asociados a la recidiva tumoral, muy importantes para escoger el mejor tratamiento. Nivel de evidencia IV 1. No se requiere habitualmente de la confirmación histológica o citológica de la enfermedad metastásica, a menos que no tenga previamente diagnóstico de cáncer de mama, o que no sea clínicamente claro que se trata de progresión metastásica de mama. 2. El estudio de la biopsia de una metástasis puede contribuir con la decisión de tratamiento posterior, al permitir caracterizar los marcadores biológicos asociados a la recidiva tumoral. 7

PREINFORME FINAL CONSENSO 2009 1.2. QUÉ IMÁGENES SE REQUIEREN ANTES DE INICIAR TRATAMIENTO? No existen estudios randomizados que contesten específicamente cuáles son las imágenes que se requieren antes de iniciar tratamiento en pacientes con cáncer de mama metastásico. Revisamos las guías clínicas europeas y americanas, además de 2 estudios randomizados que comparan seguimiento intensivo y estándar, y una revisión de la literatura. Los sitios de mayor frecuencia de enfermedad metastásica son los pulmones, hígado y hueso. Es importante evaluar estos parénquimas para objetivar la enfermedad metastásica medible que permita evaluar la respuesta a los tratamientos. La radiografía de tórax y ECO abdominal son frecuentemente suficientes, si bien el scanner ofrece mayor sensibilidad e independencia del operador en comparación con la ECO. Es recomendable realizar un cintigrama óseo basal y posteriormente solamente si aparecen síntomas que sugieran progresión metastásica (Kataja, 2008; Cardoso 2009). Nivel de evidencia IV El hueso en la zona más frecuente de metástasis para el cáncer de mama (30 a 80%), además es la primera zona de metástasis en el 26 a 50% de los casos. Las complicaciones de las metástasis ósea incluyen dolor óseo, fracturas patológicas (incidencia 16% a 60%), hipercalcemia y compresión medular, perjudicando de manera importante la calidad e incluso la sobrevida de los pacientes con cáncer de mama metastásico. No hay consenso frente a cual es el método de estudio imagenológico óptimo. La sensibilidad para la detección de metástasis óseas en cáncer de mama utilizando el cintigrama óseo como método diagnóstico, es de 62% a 100% y la especificidad es de 78% a 100% (nivel de evidencia II-III). Las tasas de detección de metástasis óseas es de 0,82% en etapa I, 2,55% en etapa II, 16,75% y 40% para las pacientes en etapa III y IV (Hamaoka, 2004). No es necesaria la evaluación con TAC o RNM de cerebro como evaluación inicial en una paciente que no tenga síntomas neurológicos, considerando la baja probabilidad de encontrar metástasis cerebrales y la no demostración de beneficio en calidad de vida o en sobrevida global de realizarlo (Cardoso 2009). Nivel de evidencia IV El estudio con PET/CT en mujeres con cáncer de mama metastásico es controversial y no debe considerarse en la evaluación de rutina de pacientes con cáncer de mama metastásico. Puede ser útil para identificar los sitios de recaída, particularmente cuando otras técnicas de imagen no sean concluyentes. Nivel de evidencia IV 8

1. Evaluar la enfermedad medible con TAC y cintigrama óseo. La radiografía de tórax y ECO abdominal pudieran reemplazar al TAC sin hay limitaciones importantes de recursos. 2. Indicaciones de estudio con cintigrama óseo: En la evaluación inicial y aparición de nuevos síntomas que hagan sospechar metástasis óseas. 3. Indicaciones de estudio de imágenes de cerebro: Se recomienda la evaluación de lesiones cerebrales metastásicas sólo ante síntomas neurológicos. 4. Indicaciones de estudio con PET/CT: No debe considerarse en la evaluación de rutina de pacientes con cáncer de mama metastásico. 1.3. CUÁLES DEBEN SER LOS CRITERIOS DE RESPUESTA? No existen estudios randomizados que demuestren cuáles son los criterios de respuesta al tratamiento en pacientes con cáncer de mama metastásico. Revisamos las guías clínicas Europeas y Americanas, y la última actualización de los criterios RECIST (Response Evaluation Criteria In Solid Tumors) de evaluación de respuesta en tumores sólidos (Eisenhauer, 2009). Para evaluar el beneficio del tratamiento en un paciente con cáncer de mama metastásico debe considerarse el control de síntomas asociados a la enfermedad y la mejoría clínica, la no aparición de síntomas esperables con la evolución natural de la enfermedad, la reducción tumoral o estabilidad evaluada clínicamente o con imágenes. En algunos casos es de utilidad seguir el marcador tumoral plasmático Ca 15-3, sobre todo cuando no es fácil evaluar respuesta, pero no debe ser el único parámetro a considerar. No se recomienda evaluar de rutina con PET/CT (Cardoso, 2009). Nivel de evidencia IV Las recomendaciones de las guías clínicas Europeas y Americanas recomiendan utilizar los criterios RECIST para evaluar la respuesta antitumoral (Eisenhauer, 2009). Debe realizarse scanners basales y en el seguimiento, y para demostrar progresión se requiere un aumento en las lesiones marcadoras de >20% en la suma de los diámetros mayores, agregándose en la última revisión del 2009 un aumento absoluto >5mm. Incorpora también este año el considerar enfermedad medible para la evaluación de respuesta los ganglios que tengan más de 15 mm en el eje corto. Si se reducen a menos de 10mm se consideran normales. El nuevo RECIST recomienda evaluar en lugar de hasta 10 lesiones marcadoras de respuesta, evaluar sólo hasta 5 lesiones, y en lugar de hasta 5 por órgano, 2 por órgano. Nivel de evidencia IV Se recomienda evaluar la respuesta durante el tratamiento cada 3 meses durante la terapia endocrina, y cada 2 a 3 ciclos de quimioterapia. Nivel de evidencia IV 9

1. Para evaluar la respuesta al tratamiento cconsiderar el control de síntomas asociados a la enfermedad, la mejoría clínica, la no aparición de síntomas esperables con la evolución natural de la enfermedad, la reducción tumoral o estabilidad evaluada clínicamente o con imágenes. 2. Utilizar los criterios RECIST para evaluar la respuesta al tratamiento en pacientes con cáncer de mama metastásico. 3. No utilizar de rutina el marcador tumoral plasmático Ca 15-3, solamente cuando no es fácil evaluar respuesta, y no debe ser el único parámetro a considerar. 4. Evaluar la respuesta durante el tratamiento cada 3 meses durante la terapia endocrina y cada 2 a 3 ciclos de quimioterapia. 2. CUÁLES SON LOS CRITERIOS PARA SELECCIONAR LA TERAPIA SISTÉMICA? Para determinar el mejor tratamiento sistémico para cada paciente, revisamos 3 metanálisis, las guías clínicas de consensos Americanos y Europeos, 48 estudios randomizados Fase III, 5 estudios Fase II, y 2 revisiones de la literatura. Las opciones de tratamiento sistémico en cáncer de mama metastásico son la terapia endocrina, quimioterapia y agentes biológicos como trastuzumab, bevacizumab y lapatinib (Beslija, 2007, Kataja, 2008; Cardoso 2009). Para escoger la mejor alternativa para cada paciente, debe considerarse características del tumor como la expresión de receptores de estrógeno (RE), de progesterona (RP), de la oncoproteína cerbb2 (HER2), del volumen tumoral y velocidad de progresión. También hay que considerar características del paciente como su edad, condición general, expectativas personales, soporte familiar, acceso a terapias, otras patologías concomitantes, y el tipo de progresión metastásica. Por ejemplo, pacientes con progresión exclusiva ósea tienen una mejor sobrevida comparado con pacientes con progresión visceral. Nivel de evidencia I 1. Pacientes con receptores hormonales positivos deben recibir terapia hormonal inicial. Excepto pacientes con alto volumen tumoral de rápido crecimiento (crisis visceral) o que se beneficien de una más rápida respuesta antitumoral que habitualmente se consigue con quimioterapia. En pacientes asintomáticos la terapia se inicia inmediatamente dada la baja toxicidad del tratamiento y buenas posibilidades de respuesta. 2. Pacientes con HER2+ deben recibir trastuzumab. 10

3. Pacientes con receptores hormonales negativos deben recibir quimioterapia. El tratamiento debe iniciarse de acuerdo a los deseos del paciente, velocidad de progresión del tumor y toxicidad esperada. Se recomienda iniciar precozmente el tratamiento considerando la demostración de prolongación de sobrevida con el tratamiento, y la diversidad de alternativas disponibles. 3. TRATAMIENTO DE BLOQUEO HORMONAL EN PACIENTES PRE-MENOPÁUSICAS 3.1. TRATAMIENTO DE PRIMERA LÍNEA Para contestar esta pregunta revisamos los tres estudios randomizados publicados y dos metanálisis que comparan el uso de Tamoxifeno versus Tamoxifeno asociado a análogos LHRH en mujeres premenopáusicas. Revisamos además el consenso Europeo del año 2007, 2008 y 2009. Los estrógenos producidos por la paciente pueden favorecer la progresión de un tumor que expresa receptores de estrógeno y/o progesterona. El tratamiento de bloqueo hormonal depende de la función ovárica de la paciente. En la mujer pre-menopáusica la principal fuente son los ovarios, y posteriormente a la menopausia, la única fuente de estrógenos es la conversión periférica de testosterona suprarrenal en estrona, mediado por aromatasas del tejido graso. Hay distintas maneras de interrumpir el estímulo hormonal sobre los tumores hormonosensibles, una es interrumpir la producción de estrógenos realizando una ooforectomia quirúrgica o química en mujeres con función ovárica, o inhibiendo la conversión periférica de testosterona suprarrenal en estrona mediante inhibidores de aromatasa. Otras formas son utilizando Tamoxifeno que bloquea al receptor de estrógeno, o Fulvestrant que internaliza al receptor de estrógeno. Pritchard presenta en un análisis retrospectivo de 4.900 pacientes menores de 50 años en 15 estudios, donde compararon tratamiento endocrino de ablación ovárica con o sin quimioterapia. En este estudio se demuestra el beneficio en las pacientes que recibieron ablación ovárica versus no ablación en términos de recurrencia 59% versus 45%, y en muertes por cáncer 59% versus 49% (Pritchard, 2005). Klijn presenta un metanálisis que incluye cuatro estudios randomizados con 506 pacientes por rama con seguimiento de más de 6 años, donde se compara el tratamiento con agonistas LHRH con y sin tamoxifeno. Se demuestra el beneficio de la combinación en la respuesta objetiva (p=0.0003, HR 0.7), sobrevida libre de progresión (p=0.02) y sobrevida global (p=0.02) en mujeres premenopáusicas con cáncer de mama (Klijn, 2001). Jonat publica en 1995 un estudio randomizado con 318 mujeres comparando Goserelin versus Goserelin+Tamoxifeno, demostrando muestra una respuesta en beneficio de la combinación de 31% versus 38%; tiempo a la progresión 23 versus 28 semanas; sobrevida global de 127 semanas versus 140 semanas (NS). En pacientes que sólo tenían metástasis óseas el beneficio también fue significativo en sobrevida global (Jonat 1995). El Consenso Europeo del año 2009 y otros estudios Fase III también recomiendan en mujeres premenopáusicas con cáncer de mama metastásico el tratamiento combinado con Tamoxifeno y ablación ovárica (Cardoso, 2009; Beslija, 2007; Boccardo 1994; Klijn 2000). 11

Nivel de evidencia I 1. En mujeres premenopáusicas que no han usado tamoxifeno por un año, se recomienda terapia combinada con tamoxifeno + ablación ovárica (ooforectomia o análogo LHRH). La combinación ha probado ser mejor que cada uno por separado en la tasa de respuesta, sobrevida libre de enfermedad y sobrevida global. Tamoxifeno sólo pudiera considerarse también en algunos pacientes. 2. En las pacientes que han recibido Tamoxifeno en adyuvancia menos de 12 meses antes, se recomienda el uso de inhibidores de aromatasa de tercera generación junto con ablación/supresión ovárica. 3. Se recomienda evaluar el estado de premenopausia en pacientes que han quedado en amenorrea post quimioterapia y en las que están en perimenopausia, ya que una paciente pudiera no tener menstruaciones pero conservar cierta función ovárica. Los inhibidores de aromatasa sólo son de beneficio en pacientes menopáusicos, o sea, que tienen niveles de estradiol plasmático <10 pmol/l y FSH elevada. 3.2. LÍNEAS POSTERIORES Revisamos dos estudios prospectivos randomizados Fase III, dos Fase II y el Consenso Europeo del 2009. Forward presenta en un estudio Fase II en que 13 mujeres con cáncer de mama metastásico y 3 con cáncer localmente avanzado, todas tratadas anteriormente con Goserelin y Tamoxifeno, responden con inhibidores de aromatasa y ablación ovárica en el 75% de los casos por al menos 6 meses, la media de duración de la respuesta fue de 17 meses (Forward, 2004). Hay otro reporte de tres pacientes tratadas con ablación ovárica e inhibidores de aromatasa que demuestra resultados similares (El-Saghir, 2006). Como tercera línea de terapia hormonal se puede considerar el uso de Fulvestrant, aunque la evidencia en pacientes premenopáusicas aún es escasa (Steger, 2005; Young, 2007). También se pueden utilizar alternancias de inhibidores de aromatasa esteroidales y no esteroidales especialmente en pacientes con buena respuesta previa a hormonoterapia e intervalo libre de enfermedad mayor de 6 meses. Nivel de evidencia I 1. Las pacientes que fueron tratadas con un solo agente en primera línea (Tamoxifeno o ablación/supresión ovárica) pueden recibir el otro al momento de la progresión. 12

2. En las pacientes que progresan después de Tamoxifeno y ablación/supresión ovárica, se recomienda el uso de inhibidores de aromatasa de tercera generación junto con ablación/supresión ovárica. 3. En tercera línea se puede considerar Fulvestrant. 4. Otras alternativas de bajo costo y toxicidad sin evidencia tipo I son los progestágenos y estradiol en bajas dosis. 3.3. ROL DE LA OOFORECTOMÍA Hay escasa literatura publicada que evalúe el rol de la ooforectomia en el tratamiento de pacientes metastásicas con cáncer de mama. Revisamos un estudio randomizado prospectivo, dos revisiones de la literatura y los consensos Americanos y Europeos. La ooforectomía consiste en eliminar la función ovárica productora de estrógenos en la premenopausia. Boccardo publicó en 1994 un estudio factorial 2 x 2 multicéntrico randomizado que incluyó 85 mujeres perimenopáusicas donde se comparó la ablación ovárica (quirúrgica o radioterapia); Goserelin; Ablación ovárica + Tamoxifeno o Goserelin + Tamoxifeno. Este estudio no mostró diferencias significativas en respuesta ni en sobrevida global, y se concluyó que Goserelin era equivalente a la ablación ovárica (Boccardo, 1994). La ooforectomía laparoscópica y el uso de los agonistas LHRH son preferible por sobre la radioterapia, por producir un efecto rápido y seguro, y de una efectividad similar. El uso de los agonistas LHRH se recomendaría especialmente si se busca un efecto transitorio/reversible (Sawka 1997; Mc Donald 2008; Prowell 2004). Nivel de evidencia I 1. Las tres opciones de ablación ovárica (laparoscópica, análogos de LHRH y radioterapia) son aceptadas, y la elección depende de las preferencias de la paciente. 2. La ooforectomía laparoscópica es la opción más efectiva, rápida y de menor costo. 3. El único agonista LHRH con evidencia tipo I para su recomendación es el goserelin. 4. TRATAMIENTO DE BLOQUEO HORMONAL EN PACIENTES POST-MENOPÁUSICAS El cáncer de mama metastático es incurable, por lo tanto su tratamiento es paliativo, y apunta a los siguientes objetivos: mejorar la calidad de vida, paliar síntomas, y ojalá prolongar la sobrevida. De acuerdo a su perfil favorable por los efectos colaterales, la terapia endocrina es la preferida para pacientes con receptores hormonales positivas especialmente sin son de gran intensidad. Todas las pacientes con RE positivos son candidatas a recibir terapia hormonal, como primera línea de tratamiento excepto en crisis visceral. 13

PREINFORME FINAL CONSENSO 2009 4.1. TRATAMIENTO DE PRIMERA LÍNEA Los inhibidores de aromatasa de tercera generación tienen mejor respuesta que el tamoxifeno demostrado en varios estudios Fase III (Mouridsen 2003, Nabholtz 2000, Bonneterre, 2000; Thürlimann, 2003; Paridaens, 2008), un metanálisis (Mauri, 2006) y un consenso de expertos internacional (Beslija, 2007). Estos inhibidores de aromatasa tienen también menos efectos secundarios en términos de tromboembolismo y sangrado vaginal, retrasan el tiempo a la progresión en poco más de tres meses, pero en sobrevida global no hay diferencia estadísticamente significativa sobre el tamoxifeno (Ferretti 2006). Se debe considerar las patologías agregadas, sobre todo el riesgo de eventos trombóticos, potencialmente favorecidos por el tamoxifeno. Nivel de evidencia I 1. Si bien recomienda como primera línea el uso de inhibidores de aromatasa (letrozole, anastrozole, exemestano), se debe considerar caso a caso los costos y los beneficios. Sobre todo si el beneficio clínico es menor, el tamoxifeno sigue siendo una buena alternativa como tratamiento inicial. 4.2. LÍNEAS POSTERIORES No hay evidencia para una recomendación definitiva en el orden de las líneas de hormonoterapia posteriores que se utilicen. Revisamos 6 estudios Fase III. Rose publicó un estudio Fase III, internacional, multicéntrico, abierto, que comparó letrozole y anastrozole como terapia endocrina de segunda línea en mujeres postmenopáusicas con cáncer de mama avanzado previamente tratado con un antiestrógeno (tamoxifeno u otro). Demostró que no había diferencia en tiempo hasta la progresión que fue de 5.7 meses en ambos grupos. También fue similar la sobrevida global (Rose, 2003). Después de fracasar a Tamoxifeno y a inhibidores de aromatasa, otro mecanismo de bloqueo hormonal consiste en el uso de fulvestrant, antagonista del receptor de estrógeno que tiene actividad clínica en pacientes resistentes al tamoxifeno. Su mecanismo de acción consiste en internalizar el receptor de estrógeno. Esta es una opción tan eficaz como el inhibidor de aromatasa anastrozole (Robertson, 2003; Chia, 2008; Osborne, 2002). Finalmente, otra estrategia que ha demostrado algún beneficio consiste en la administración de progestinas como el acetato de megestrol y acetato de medroxiprogesterona (Buzdar, 2000; Kaufmann, 2000; Rose, 2003). Nivel de evidencia I 14

1. Si se administró antes tamoxifeno, se recomienda en segunda línea inhibidores de aromatasa. 2. Se dispone además del fulvestrant, antagonista ER que tiene actividad clínica en pacientes resistentes al tamoxifeno, es una opción tan eficaz como anastrozole (Robertson, 2003; Chia, 2008; Osborne, 2002). 3. En las pacientes que recibieron primera línea con un inhibidor de aromatasa, se recomienda el tamoxifeno. Se debe considerar también el fulvestrant y las progestinas acetato de megestrol y acetato de medroxiprogesterona. 5. TRATAMIENTO CON BLOQUEO HORMONAL SECUENCIAL O CONCOMITANTE A LA QUIMIOTERAPIA? No encontramos en nuestra revisión publicaciones que demuestren el beneficio de utilizar hormonoterapia y quimioterapia concomitante o secuencial. Evidencia preclínica sugiere que tamoxifeno reclutaría las células tumorales en estado de ciclo celular G0-G1, disminuyendo su vulnerabilidad a drogas ciclo celular dependientes, frecuentemente utilizadas en el tratamiento del cáncer de mama metastásico. Nivel de evidencia IV 1. No se recomienda el uso de terapia hormonal y quimioterapia citotóxica concomitante. 6. TRATAMIENTO DE QUIMIOTERAPIA Las mujeres con cáncer de mama metastásico que tienen expresión de receptores hormonales de estrógeno y/o progesterona deben iniciar tratamiento sistémico con terapia de bloqueo hormonal considerando el beneficio en general comparable, los menores costos y la menor toxicidad comparado con quimioterapia. Ha habido un gran desarrollo en las últimas décadas en nuevas drogas para pacientes con cáncer de mama metastásico, y se está iniciando una era de terapias contra blancos moleculares que se espera aumenten la efectividad y disminuyan la toxicidad comparado con drogas antineoplásicas como la quimioterapia. 6.1. TRATAMIENTO CON MONODROGA O COMBINACIÓN? Se han realizado varios estudios que comparan el uso secuencial de esquemas con monodroga versus la asociación de 2 o más drogas. Revisamos un metanálisis, dos estudios randomizados 15

Fase III, y la librería Cochrane de revisiones sistemáticas. La mayoría de estos estudios revelan una eficacia similar en términos de sobrevida libre de progresión y sobrevida global de ambas estrategias, con una mayor toxicidad en el caso del uso combinado de drogas versus el uso de monodroga (Sledge 2003, Alba 2004). Un metanálisis de estos estudios reveló un beneficio en términos de respuesta tumoral global y completa, pero confirmó la ausencia de un impacto claro en términos de sobrevida, con un aumento significativo en la toxicidad (Bria, 2005). Una revisión sistemática (Cochrane Database) de 17 randomizados con 2647 pacientes con cáncer de mama metastásico, que recibieron de primera línea quimioterapia, comparó el beneficio del tratamiento con monodroga versus la combinación de al menos dos drogas. No hubo diferencia en sobrevida entre los dos grupos HR 0.96. No hubo diferencia en el tiempo a la progresión HR 0.93. La adición de otra droga al régimen de quimioterapia se asoció con un aumento en la tasa de respuesta (p 0.04) y con un aumento en la toxicidad de alopecia, náuseas, vómitos, leucopenia. Concluyó entonces que la terapia combinada versus monoterapia tiene ventajas en la tasa de respuesta tumoral, no tiene beneficios en prolongación de sobrevida, y se asocia a un aumento en la toxicidad (Jones, 2006). Nivel de evidencia I 1. Recomendamos el uso de esquemas con monodroga en el cáncer de mama metastásico. 2. En los casos en los cuales se requiere de una respuesta tumoral rápida, como por ejemplo en el compromiso visceral avanzado sintomático, se puede considerar el uso de esquemas combinados teniendo en consideración la mayor toxicidad esperada con este tipo de regímenes. 6.2. TRATAMIENTO DE PRIMERA LÍNEA Se analizaron 2 artículos de revisión, 1 meta-análisis, 8 estudios fase III y 3 estudios fase II para contestar esta pregunta. La elección del tratamiento de primera línea dependerá de las características del paciente (edad, condición general, comorbilidades, recursos), del tumor (expresión de receptores hormonales, oncogen cerbb2 (Her2neu), velocidad de crecimiento, volumen tumoral y necesidad de lograr una respuesta rápida), y de si el paciente recibió previamente antraciclinas o no. En el paciente que no ha recibido antraciclinas previamente, se recomienda iniciar el tratamiento con doxorrubicina (60 mg/m2 cada 3 semanas), epirrubicina (100 mg/m2 cada 3 semanas) o formulaciones de doxorrubicina liposomal (Cardoso, 2009; Beslija, 2007). Si recibió previamente antraciclinas con una latencia > a 12 meses, se podría volver a usarlas, teniendo la precaución de no superar una dosis total acumulativa de doxorrubicina de 450-550 mg/m2 y de epirrubicina 800-1000 mg/m2 por el importante aumento en toxicidad cardiaca. 16

Después de las antraciclinas, las drogas de elección son los taxanos. Estos incluyen el uso de paclitaxel 80 mg/m2 semanal (Pérez 2001) o 175 mg/m2 cada 21 días (Winer 2004), o de docetaxel 100 mg/m cada 2l días (Vu 2008). Nivel de evidencia I 1. Se recomienda iniciar el tratamiento con antraciclinas si la paciente no las ha recibido previamente. Puede utilizarse doxorrubicina (60 mg/m2 cada 3 semanas), epirrubicina (100 mg/m2 cada 3 semanas) o formulaciones de doxorrubicina liposomal. 2. Si la paciente ya recibió antraciclinas, pero hace más de 12 meses, se podría volver a usarlas, teniendo la precaución de no superar una dosis total acumulativa de doxorrubicina de 450-550 mg/m2 y de epirrubicina 800-1000 mg/m2 por el importante aumento en toxicidad cardiaca. 3. Después de laqs antraciclinas se recomienda el uso de taxanos como el paclitaxel 80 mg/m2 semanal o 175 mg/m2 cada 21 días, o de docetaxel 100 mg/m cada 2l días. 6.3. LÍNEAS POSTERIORES No existen estudios aleatorizados que demuestren cuál es la mejor alternativa de tratamiento de quimioterapia después del uso de antraciclinas y taxanos. Para proponer las mejores alternativas de tratamiento en este escenario se analizaron 2 artículos de revisión, 3 consensos de especialistas Europeos y Americanos, 2 estudios fase III y 3 estudios Fase II. Para de3cidir el tratamiento a recomendar, en este escenario incurable después de tratamiento con una o dos líneas de quimioterapia, además de considerar la respuesta global y beneficios en sobrevida, es muy importante analizar el deterioro en calidad de vida asociado a la toxicidad esperada con líneas posteriores de tratamiento. Thomas publica un estudio multicéntrico, internacional, randomizado, con 752 mujeres de 160 centros y 22 países, con cáncer de mama localmente avanzado o metastásico tratadas previamente ev d1 q21d + Capecitabina (C) 2000mg/m2 vo por 14 días versus Capecitabina sola (Thomas 2007, Reed 2009). La combinación demostró un aumento en sobrevida libre de progresión de 5.8 versus 4.2 meses, una reducción de 25% en el riesgo estimado de progresión (HR 0.75;95% IC, 0.64-0.88;p=0.003), y una mayor respuesta en el 35 versus 14% (p<0.0001). También se observó una mayor toxicidad 3/4 con la combinación de drogas, con mayor neuropatía sensitiva (21 vs 0%), fatiga (9 vs 3%), neutropenia (68 vs 11%). Sólo el 5% presentó neutropenia febril y sólo el 20% usó GCSF profiláctico. Nivel de evidencia I Diversos estudios Fase II han demostrado beneficios significativos con posteriores líneas de qumioterapia en pacientes con cáncer de mama metastásica previamente tratadas con antraciclinas 17

y taxanos. Reichardt estudia el beneficio de Capecitabina oral como monodroga en 136 mujeres con edad media de 56 años, 70% ER+ (Reichardt, 2003). El 46% logra enfermedad estable con una respuesta global de 15% (1% CR, 16% PR, 46% enfermedad estable). En este estudio se observó un tiempo a la progresión de 3.5 meses, con una sobrevida global de 10.1 meses. Toxicidad ¾ con síndrome mano pie en el 13% y diarrea en el 8%. Gasparini evalúa el beneficio de Navelbina 20 a 25mg/m2 semanal en 70 pacientes, observando un 66% de respuesta global (4.5% RC, 31% RP, 30% EEstable). Otros estudios han mostrado beneficio asociado al uso de gemcitabina o doxorrubicina liposomal. Nivel de evidencia II En pacientes con disfunción hepática una alternativa es el uso de platinos (Pérez, 2004). Nivel de evidencia III 1. Las alternativas de tratamiento luego del uso de antraciclinas y taxanos incluyen monodrogas como la capecitabina, navelbina, gemcitabina, doxorrubicina liposomal. También puede considerarse el tratamiento con combinación de las drogas ixabepilona con capecitabina. 2. En pacientes con disfunción hepática una alternativa es el uso de platinos (Pérez, 2004). 6.4. CUÁNTAS LÍNEAS DE TRATAMIENTO USAR? No se han identificado estudios clínicos que puedan responder esta pregunta. Sin embargo, los estudios clínicos de quimioterapia paliativa sólo incluyeron pacientes con un performance status adecuado (ECOG 0-2), con una reserva funcional compatible con el uso de drogas citotóxicas y en ausencia de comorbilidad prohibitiva para el uso de terapias citotóxicas (Cardoso, 2009). Nivel de evidencia IV 1. El número de líneas de tratamiento depende de la condición general y deseos del paciente bien informado sobre los riesgos, beneficios y probabilidades de respuesta. 2. Continuar con más de tres líneas de tratamiento se justifica solo en pacientes con buen performance status y que hayan respondido previamente. 6.5. POR CUÁNTO TIEMPO DEBE CONTINUARSE EL TRATAMIENTO? 18

Una revisión sistemática de 4 ensayos randomizados demuestra que el tratamiento con una mayor número de ciclos de quimioterapia se asocia a una mayor supervivencia y una mejor calidad de vida que la misma quimioterapia dado un menor número de ciclos. No hay información sobre la duración óptima del tratamiento con taxanos, capecitabina, vinorelbina y otros agentes más recientes. Sin embargo, pacientes con enfermedad estable o respuesta óptima al tratamiento pueden tomar descansos sin preocupación por deterioro de los resultados a largo plazo (Cardoso, 2009; Beslija, 2007). Nivel de evidencia I 1. La toma de decisión sobre si continuar la quimioterapia se debe basar en las conversaciones entre el paciente y su médico. 2. Es razonable continuar la quimioterapia para estadios avanzados del cáncer de mama, en la ausencia de progresión de la enfermedad o efectos secundarios significativos. 3. Continuar el tratamiento hasta la progresión de la enfermedad tumoral o hasta toxicidad inaceptable. 6.6. NUEVA QUIMIOTERAPIA AL MOMENTO DE DIAGNOSTICAR LA PROGRESIÓN O SOLO ANTE SÍNTOMAS No se identificó literatura referente a esta pregunta. Revisamos las recomendaciones del Consenso Europeo del 2009. Sin embargo, basado en el beneficio de la quimioterapia adyuvante (por ejemplo, la administración de quimioterapia en un paciente asintomático, sin enfermedad medible), sería lógico recomendar la quimioterapia frente a la detección de la progresión, aún en ausencia de síntomas, para permitir la administración de la terapia citotóxica en condiciones de un adecuado performance status y reserva funcional. Sin embargo esta decisión debe ser tomada en concordancia con los deseos del paciente. Nivel de evidencia IV 1. Iniciar quimioterapia al diagnóstico de la progresión aunque la paciente esté asintomática. 2. En pacientes con lenta progresión tumoral de bajo volumen, asintomáticos, con comorbilidades o capacidad funcional ECOG >1, podría diferirse el inicio de tratamiento consensuado con el paciente considerando el riesgo de deteriorar la calidad de vida del paciente. 19

7. TRATAMIENTO CON TERAPIAS BIOLÓGICAS En 1949 se inicia el uso de drogas antineoplásicas con el descubrimiento de las mostazas nitrogenadas. En el 2009 hay 100 drogas de quimioterapia aprobadas por la FDA (Food and Drug Administration, USA) para 170 indicaciones. Es poco probable que aumentemos sustancialmente la sobrevida con la aparición de nuevas drogas. En la última década se inicia una nueva era en la oncología, donde se inicia el uso de terapias dirigidas contra blancos moleculares para aumentar su efectividad y disminuir la toxicida. En cáncer de mama hay evidencia para utilizar en algunas pacientes con cáncer de mama metastásico inhibidores de la oncoproteina Her2neu (trastuzumab y lapatinib) y agentes angiogénicos como el bevacizumab. 7.1. INDICACIONES DE TRASTUZUMAB Revisamos 5 estudios randomizados prospectivos y un metanálisis. Las pacientes con aumento en la expresión de Her2neu medido por inmunohistoquímica si el resultado es 3+, o por FISH, se benefician de recibir tratamiento de hormonoterapia o quimioterapia asociado a Trastuzumab. Fabi en un estudio observacional, evaluó retrospectivamente un total de 59 pacientes con cáncer de mama metastásico HER 2 (+) tratados en el Regina Elena National Cancer Institute, Roma, Italia, con terapias basadas en trastuzumab. El objetivo principal del estudio es el evaluar el uso de Trastuzumab en pacientes con cáncer de mama metastásico HER 2 (+), luego de la progresión de la enfermedad. Con la terapia con trastuzumab en primera línea, 35 pacientes respondieron al tratamiento, con una respuesta global de 59% y 49 pacientes (83%) experimentaron beneficio completo. No se observó respuesta en los pacientes que recibieron un 3 y 4 régimen de trastuzumab. El tiempo hasta la progresión fue de 9,5 meses para el trastuzumab de primera línea, 6,7 para el 2 régimen y para el 3 y 4 régimen, 4 y 4,5 meses respectivamente. La sobrevida global desde la primera administración de trastuzumab fue de 37 meses (Fabi, 2008). Nivel de evidencia I 1. Las pacientes con aumento en la expresión de Her2neu medido por inmunohistoquímica si el resultado es 3+, o por FISH, tienen indicación de recibir tratamiento de hormonoterapia o quimioterapia asociado a Trastuzumab. 2. Los pacientes que tienen inmunohistoquimica para Her2neu 1+ no se benefician de Trastuzumab, si tienen inmunohisqoquimica 2+ requieren la confirmación de amplificación por FISH (Seidman, 2008). 20

3. Puede asociarse a quimioterapia como Taxanos (Seidman, 2008), Antraciclinas, Capecitabina (Bartsch, 2007), Vinorelbine (Burstein, 2001), Paclitaxel/Carboplatino (Robert, 2002); o a hormonoterapia. 4. Debe mantenerse mientras la paciente no tenga progresión de enfermedad. 5. Pudiera continuarse durante la segunda línea de quimioterapia (Tripathy, 2004, Fabi, 2008). 6. Puede utilizarse como agente único con menores tasas de respuesta. 7.2. INDICACIONES DE LAPATINIB Para evaluar el rol de Lapatinib en el tratamiento de pacientes con cáncer de mama metastásico, evaluamos dos estudios randomizados y las guías de consenso Europeas (Cardoso, 2009). Lapatinib en una terapia oral inhibidora de tirosina kinasa, y ha demostrado beneficio en el tratamiento de mujeres con cáncer de mama metastásico Her2neu como monoterapia o asociado a Capecitabina (Gómez, 2008). Estudios clínicos sugieren que es un agente activo en el cáncer de mama inflamatorio y refractario (tratado previamente con antraciclinas, taxanos y trastuzumab). Además, resultados preliminares apoyan la posibilidad de que esta droga, a diferencia de trastuzumab, pueden penetrar en el sistema nervioso central y ser eficaces contra las metástasis cerebrales (Lin, 2008). Lapatinib más trastuzumab pueden ser sinérgicos, en pacientes con cáncer de mama metastásico que fueron resistentes a terapias que incluían trastuzumab. Nivel de evidencia I 1. Las pacientes con aumento de expresión de Her2neu que progresan después de Trastuzumab pueden beneficiarse de Lapatinib sólo o con Capecitabina. 7.3. INDICACIONES DE BEVACIZUMAB A la fecha existen 2 trabajos prospectivos y randomizados que han usado la combinación de quimioterapia con Bevacizumab que dado los beneficios demostrados han determinado que la se haya aprobado como primera línea en combinación con taxol en Estados Unidos y Europa. En el ECOG 2100 (Miller, 2007) 722 pacientes metastásicas sin quimioterapia previa fueron randomizadas a paclitaxel semanal con o sin Bevacizumab. Los porcentajes de respuesta 21

mejoraron significativamente de 21 a 37%, la sobrevida libre de progresión mejoró significativamente de 5.9 meses a 11.8 meses, sin embargo no hubo cambios significativos en la sobrevida global. El segundo estudio importante es el estudio AVADO (Milles, 2008) en el cuál pacientes con cáncer de mama metastásicas recibieron en primera línea Docetaxel con o sin Bevacizumab con resultados menos importantes que el estudio ECOG 2100 y sin que aún se alcance la sobrevida media. Nivel de evidencia I 1. Por lo tanto no se ha demostrado a la fecha que Bevacizumab tenga un impacto importante en el tratamiento de las pacientes con Cáncer de Mama metastásica y su uso puede ser recomendado en determinados casos, especialmente si se requiere una mayor respuesta. 2. Su asociación a capecitabina en cáncer de mama metastásico HER2 negativo, incremento las tasas de respuesta comparado al uso de capecitabina sola, pero no modifica la sobrevida libre de progresión o la sobrevida global. 3. La asociación con paclitaxel muestra beneficios frente al uso de este por si solo, pero no demostró mejora la sobrevida libre de enfermedad o la sobrevida global. 8. TRATAMIENTO CON RADIOTERAPIA 8.1. DE METÁSTASIS ÓSEAS Revisamos dos revisiones sistemáticas y metanálisis, también las guías de recomendación de expertos. La mayor parte de las metástasis óseas afecta el esqueleto axial (cráneo, columna, sacro, pelvis). Se sugiere evaluar a pacientes con metástasis múltiples, grandes, inestables, cervicales, en conjunto con cirujano ortopédico, pues en casos calificados se requiere intervención con fin preventivo o por fractura ya definida. Se ha demostrado similar resultado en radioterapia hipofraccionada (una dosis de 8 Gy) que en fraccionamiento convencional (20 Gy en 5 a 10 fracciones), pero el hipofraccionamiento se asocia a mayor necesidad de re-irradiar (Sze, 2002). Se debe discutir caso a caso el mejor régimen de fraccionamiento, considerando las expectativas de vida de cada paciente. Revisión sistemática y metanálisis de estudios que estudian el alivio del dolor después de radioterapia a metástasis óseas. El resultado sobre el dolor es eficaz, aliviando en forma completa en un 25% (medidos a un mes), y se obtienen al menos un 50% de alivio en un 41% (McQuay, 2000). El metanálisis de McQuay analiza 20 ensayos con 43 tipos de fraccionamiento diferente y 8 estudios de radioisótopos. La radioterapia produce alivio completo en un mes en el 25% de 22

pacientes (395/1580; NNT 4.2 con IC 3.7-4.7), y a lo menos 50% de alivio en 41% (788/1933). No hubo diferencia entre pacientes que recibieron tratamiento en dosis única o fraccionada. En dolor por enfermedad metastásica ósea generalizada, los radioisótopos lograron similares resultados en analgesia. En conclusión, la radioterapia es efectiva en reducir el dolor por metástasis óseas. No hubo diferencia entre diferentes esquemas de fraccionamiento de radioterapia. Sze publicó una rrevisión sistemática de la literatura y metanálisis comparando radioterapia paliativa de metástasis óseas con una fracción única versus multifraccionada. Estudiaron 11 trabajos con 3435 pacientes con metástasis óseas sintomáticas por dolor, la mayoría correspondía a cáncer de próstata, mama y pulmón. La respuesta global al dolor para la fracción única versus multifraccionada fue 60% (1059/1779) versus 59% (1038/1769) respectivamente. No hubo diferencia en las tasas de respuesta completa (34 versus 32% respectivamente). Los que recibieron dosis única tuvieron mayor riesgo (21 versus 7%). En resumen, la dosis única de tratamiento con radioterapia, fue igualmente efectiva que la multidosis en aliviar el dolor asociado a la metástasis (Sze, 2002). Nivel de evidencia I 1. Las pacientes con metástasis óseas sintomáticas, de rápido crecimiento, inestables, se benefician de radioterapia paliativa. 2. No hay evidencia para la irradiación profiláctica de lesiones metastásicas óseas asintomáticas. 8.2. DE METÁSTASIS CEREBRALES Revisamos un metanálisis, un estudio randomizados prospectivos y las guías del Consenso Europeo 2009 (Cardoso, 2009). Las pacientes con cáncer de mama metastásico que progresan con lesiones cerebrales se benefician de radioterapia holocránea, como lo demostró el protocolo RTGO 9601, entregando radioterapia holocerebral de 30 Gy en 10 fracciones. Sin embargo no hay estudios randomizados que demuestren aumento en sobrevida, pero sí en múltiples estudios retrospectivos, por lo que el sesgo de selección no es descartable. Los efectos neurocognitivos son atribuibles más al efecto del tumor que a la radiación (Arriagada, 1995). Analizamos una revisión sistemática de radiocirugía en metástasis únicas cerebrales entre el 2002 y 2007. De 1496 publicaciones, se incluyo 16 estudios. La sobrevida media de los pacientes fue menos de 12 meses. La radiocirugía seguida por radiación holocranea se asoció con una mejoría en el control local y función neurológica comparada con radiocirugía sola. Sólo en pacientes con metástasis única se tradujo en un aumento de sobrevida. En resumen, la radiocirugía con radioterapia holocránea es mejor que cualquiera de ellas sola (Múller-Riemenschneider, 2009). Nivel de evidencia I 23

1. As pacientes con metástasis cerebrales y con expectativa de vida superior a tres meses se benefician de radioterapia holocránea. 2. En el subgrupo de pacientes sin enfermedad extra craneana activa y con 1 lesión cerebral menor a 3 cm con KPS >70 (RPA I), el uso de cirugía o radioablación sumado a terapia holocerebral aumenta la media de sobrevida global en 2 meses, según estudio randomizado RTOG 95-08. 8.3. PARA CONTROL LOCAL LUEGO DE TUMORECTOMÍA Y DISECCIÓN AXILAR No hay evidencia en estudios randomizados de su beneficio. Revisamos las recomendaciones de las guias del consenso Europeo (Cardoso, 2009). Las pacientes que tienen enfermedad metastásica son, en general, incurables, por lo que todos los enfoques de tratamiento deben considerar la prioridad de proteger la calidad de vida de los pacientes. Es por eso mismo, que una vez que la enfermedad metastásica está controlada, se debe optimizar el control local de la mama y axila ya que una recidiva local es muy difícil de controlar posteriormente con un enorme deterioro en la calidad de vida de las pacientes. Es por esto que nos parece apropiado luego de tener signos clínicos de respuesta de la enfermedad metastásica, discutir con la paciente cirugía del primario mamario y/o radioterapia al lecho de tumorectomía y a la axila si está indicado. A continuación revisaremos las indicaciones estándar de radioterapia mamaria y a axila. 9.3.a Carcinoma Invasor Sin Compromiso de Linfonodos Regionales: La radioterapia local post tumorectomía reduce la recurrencia local a 10 % (29% sin radioterapia) a 15 años de seguimiento. Además, se obtiene una mayor sobrevida global, 5% absoluto a 15 años, en aquellas pacientes tratadas con radioterapia (EBCTCG, Oxford overview, 2005). 9.3.b Carcinoma Invasor con Compromiso de Linfonodos Regionales: El uso de radioterapia por tumorectomía disminuye la recurrencia locoregional a 13 % (46% sin radioterapia ), junto con un beneficio en sobrevida global absoluto de 8% a 15 años de seguimiento (EBCTCG, Oxford overview, 2005). En pacientes sin compromiso linfático regional sometidas a mastectomía y quimioterapia basada en antraciclinas, la radioterapia reduce la recurrencia local a un 3 % (8% sin radioterapia) asociado a una reducción absoluta de la mortalidad especifica por cáncer de mama de 3,6 % el cual se ve opacado por una mayor mortalidad global en las pacientes tratadas con radioterapia, sugiriendo el rol que tendría la técnica en la mortalidad por cardiopatía coronaria. En pacientes con compromiso de más de 3 linfonodos regionales comprometidos, sometidas a mastectomía y quimioterapia basada en antraciclinas, la radioterapia reduce la recurrencia local a un 8 % (30% sin radioterapia) sin estar asociada a una reducción de la mortalidad absoluta o especifica por cáncer de mama. En aquellas pacientes con 1 a 3 linfonodos comprometidos, se 24