Valores éticos. 1º ESO. Departamento de Filosofía UNIDAD 2. LA PERSONALIDAD Y LOS VALORES ÉTICOS 1. La personalidad y su proceso de construcción Cuando conocemos a alguien en profundidad ya sabemos cómo va a reaccionar ante una situación. Por eso nos extraña que su reacción sea diferente a la que esperamos. Consideramos que las personas tienen una manera habitual de actuar, como se comportan la mayoría de las veces. Habitual deriva de hábito, que significa costumbre. Habitual es lo que acostumbramos a hacer porque lo repetimos. Este modo de ser habitual de cada persona es lo que denominamos personalidad y lo que nos diferencia del resto. Como hemos visto en la unidad anterior, aunque los seres humanos pertenezcamos a la misma especie, tenemos la peculiaridad de ser diferentes unos a otros. Los animales, al estar determinados por sus instintos, se comportan todos de igual manera. Por el contrario, los hombres no poseemos instintos y tenemos que aprender casi todo lo que debemos hacer a lo largo de nuestra vida. Como resultado de este aprendizaje cada persona tiene un modo de ser o de comportarse distinto e irrepetible. Es decir, cada uno tiene una personalidad. De este modo diferenciamos entre el temperamento y el carácter. El temperamento es el conjunto de capacidades, tendencias emocionales, cualidades, etc. que recibimos por la herencia, a través de la genética. Así, por ejemplo, hay personas que tienen tendencia a ser nerviosas o tranquilas, a ser buenas en el razonamiento matemático o a ser buenos dibujantes porque sus 1
padres también tenían estas capacidades. Sin embargo, la educación y el aprendizaje nos puede hacer cambiar estas tendencias heredadas y construir nuestro carácter, nuestra forma particular de ser. De este modo, mediante el hábito: estudiado, aprendiendo, esforzándonos, podemos llegar a ser excelentes matemáticos o artistas aunque nuestros padres no nos hayan transmitido esas capacidades. A esta adquisición de capacidades mediante el aprendizaje es lo que denominamos carácter. A diferencia de los animales, en el ser humano es fundamental el aprendizaje para llegar a ser lo que realmente somos. De este modo, en la personalidad de cada uno, el carácter es el elemento esencial y el temperamento es un elemento secundario. 2. La autodeterminación y la adquisición de las virtudes y los valores éticos En la unidad anterior hemos diferenciado entre libertad de y libertad para. Hemos dicho que ser libre no es sólo no tener coacción (libertad de) sino también ser capaces de autodeterminarnos (libertad para), de decidir qué queremos ser. Nuestro carácter se forma gracias a la libertad para, porque vamos haciéndonos a nosotros mismos, tomando decisiones para ser aquello que queremos ser. Los hábitos o modos habituales de conducta se aprenden por repetición de actos. Por ejemplo, de pequeños, aprendemos a usar los cubiertos después de muchos intentos, aprendemos a hablar después de mucho tiempo en el que intentamos imitar las palabras que escuchamos. De mayores, aprendemos a hacer determinados ejercicios de matemáticas a base de mucha práctica o aprendemos a conducir después de muchas clases en la autoescuela. 2
Pero los hábitos son de muchas clases, hay algunos que son meramente personales, como el modo de caminar o los gestos que hacemos. Hay hábitos intelectuales como nuestra forma de estudiar o de resolver los problemas que nos plantean los profesores en las distintas asignaturas. Pero hay unos hábitos que tienen una importancia especial para llegar a ser buena persona: los hábitos morales o virtudes. El término virtud viene del griego areté, que significa excelencia. Los griegos utilizaban el término para referirse a cualquier tipo de excelencia: así, un perro podía ser virtuoso si era un guardián excelente de la casa, el ojo podía ser virtuoso si tenía una agudeza visual perfecta. Las personas también pueden ser virtuosas. Por ejemplo, un arquitecto era virtuoso si hacía unos edificios perfectos, un profesor era virtuoso si daba muy buenas clases. Pero lo más importante es que una persona fuera virtuosa no por ser muy bueno como arquitecto o profesor sino por ser muy bueno como persona. Entonces los griegos decían que la persona poseía la virtud moral. El hombre virtuoso moralmente es aquel que actúa de modo excelente, con humanidad, en su relación con los demás y consigo mismo. Lo contrario de virtud es el vicio, es decir, una persona viciosa es aquella que sólo busca el beneficio particular sin pensar en los demás. Es a lo que nosotros normalmente llamamos una mala persona. Para el filósofo griego Aristóteles (siglo IV a.c) uno llega a ser virtuoso moralmente a base de práctica, haciendo actos buenos. A base de práctica llegamos a ser buenas personas. En muchas ocasiones nos equivocamos pero si reflexionamos sobre lo qué hemos hecho podemos mejorar en la próxima ocasión. Mediante el esfuerzo y la reflexión podemos alcanzar la virtud moral y, por tanto, crear un carácter propio basado en lo que se denominan valores morales. Sea cual sea nuestro temperamento heredado podemos llegar a ser buenas personas si realmente nos lo proponemos. Todos poseemos inteligencia para analizar nuestros actos y voluntad para poder decidir lo que consideramos que es correcto. 3
Cuando nos encontramos con personas egoístas, mentirosas, desleales, valoramos negativamente sus conductas porque causan mal y sufrimiento a otras personas. Sin embargo, las personas virtuosas desde un punto de vista moral basan sus comportamientos en la solidaridad, la tolerancia, el respeto, la igualdad de derechos, la lealtad, etc. A estas ideas las denominamos valores morales: ideas en las que las personas que quieren ser buenas personas apoyan su conducta cotidiana. Así pues, cuando intentamos ser virtuosos repitiendo acciones, lo que hacemos es intentar poner en práctica estas ideas que nos guían para ser buenas personas. En consecuencia, las personas virtuosas intentan poner en práctica los valores morales que consideran adecuados para que la vida con los demás sea lo mejor posible. Esta puesta en práctica es el resultado de nuestra libertad. Decidimos seguir unos valores para construir virtudes y ser buenas personas o, por el contrario, podemos decidir seguir los antivalores (egoísmo, desigualdad, intolerancia ) y convertirnos en malas personas. Si queremos vivir en una sociedad feliz deberíamos hacer el esfuerzo de ir siendo cada día buenas personas, de forjarnos un carácter basado en los valores morales y, por tanto, practicar la virtud moral. Para ello necesitamos pensar por nosotros mismos e intentar ser críticos frente aquellos comportamientos que vemos a nuestro alrededor y que van en contra de los valores morales. Por ejemplo, en los medios de comunicación a través de al publicidad observamos diariamente cómo se nos transmite que lo más importante y lo que nos hace feliz es tener mucho dinero y enriquecerse sin pensar en los demás, observamos como ciertos políticos o responsables mienten, se corrompen y roban para beneficiarse sin tener en cuenta el bien común, etc. Hemos de pensar en estas actitudes y pensar si realmente nos conducen a la felicidad individual y a la felicidad como sociedad. 4
ACTIVIDAD 1 (Estándar 4.1.) Haz una lista con cinco rasgos que crees que forman parte de tu temperamento y cinco que creas que forman parte de tu carácter. TEMPERAMENTO 1. 2. 3. 4. 5. CARÁCTER 1. 2. 3. 4. 5. 5
ACTIVIDAD 2 (Estándar 5.1) Los seres humanos compartimos con los chimpancés un 98 por ciento los genes. Es decir, genéticamente somos muy parecidos. Sin embargo nos comportamos de manera diferente. 1.Expón tres cualidades que tienen los seres humanos pero que no tienen los chimpancés. - 2. Por qué crees que a pesar de ser tan parecidos genéticamente tenemos actitudes tan diferentes? Razona tu respuesta 6
ACTIVIDAD 3 (Estándar 5.2) Virtudes y vicios Escribe una lista de diez hábitos positivos o virtudes y una lista de diez hábitos negativos o vicios. VIRTUDES 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. VICIOS 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 7
ACTIVIDAD 4 (Estándares 5.1 y 5.2) MAFALDA: SER CRÍTICOS. HAZ UN CÓMIC. Mafalda es un personaje de comic creado por Quino. Sus rasgos principales son la ternura y su tendencia a hacer critica constructiva de nuestra sociedad. Lee con detenimiento estas dos tiras de comic y responde a las cuestiones: 1. A quién va dirigida la crítica de Mafalda en cada una de las tiras? 2. Te atreves a diseñar un comic? a) Piensa en una situación injusta que quieras denunciar. b) Diseña algunos personajes y escribe un pequeño guión c) Dibújalo y exponlo en la clase 8