ILUMINISMO - Recuperación de nociones fundamentales Textos: Zeitlin Lucchini Portantiero
Iluminismo (o Ilustración ): movimiento filosófico, cultural e ideológico que se desarrolló en Europa (Francia) durante el SXVIII, El Siglo de las Luces
Los Iluministas elaboraron sus construcciones intelectuales a partir de los cimientos colocados por dos movimientos del siglo anterior (SXVII): Racionalismo y Empirismo. Sintetizaron los mejores elementos de cada uno, reelaborándolos, dotándolos de nuevos significados y logrando una metodología unificada: el método científico Racionalismo (Descartes, Spinoza, Liebniz) - La fuente de conocimiento es la razón, dominio de las verdades eternas, que lo son tanto para Dios como para el hombre. - Los hechos, los fenómenos reales, lo que puede captarse a través de los sentidos, son engañosos, no conducen a la verdad ni al verdadero conocimiento. - El conocimiento es innato, no deriva de la experiencia. Partiendo de la razón, la herramienta para llegar al verdadero conocimiento es el método deductivo. Empirismo (Locke, Hume) - Enfatiza el papel de la experiencia ligada a la percepción a través de los sentidos como fuente del conocimiento. - Se parte del mundo sensible (perceptible a través de los sentidos) para formar los conceptos. Es en este mundo que los conceptos encuentran su justificación. - El método para producir conocimiento es la observación y la experimentación.
Ideas y principios de la Ilustración Ni la razón por sí sola, ni tampoco el uso exclusivo de la observación y la experimentación pueden proporcionarnos el conocimiento de la realidad. El conocimiento de la realidad natural y social depende de la unidad de la razón y la observación en el método científico. Influenciados por el desarrollo de las ciencias naturales (especialmente, la física, la figura y hallazgos de Isaac Newton ley universal de la gravedad-), los iluministas consideraban que también era posible estudiar científicamente lo social, lo político, la historia. Estudiando lo que es, el orden fáctico existente, es posible descubrir las leyes que lo rigen y, por lo tanto, sus posibilidades intrínsecas, lo que es posible, aprender a trascenderlo.
El Iluminismo tuvo un aspecto crítico-negativo y otro positivo-creador. El aspecto crítico-negativo consistió en que los Iluministas estudiaron y analizaron a las instituciones políticas, religiosas, sociales y morales. Las sometieron a una critica implacable desde el punto de vista de la razón. En general encontraban que las instituciones tradicionales eran irracionales, contrariaban la naturaleza del hombre e inhibían su desarrollo. Combatieron el fanatismo, la superstición, la intolerancia, lucharon contra la censura, exigieron libertad de pensamiento, atacaron los privilegios de las clases feudales, y sus restricciones sobre la clase industrial y comercial. El aspecto positivo-creador consiste en que el pensamiento iluminista no es mera reflexión. La crítica es su arma en la lucha contra la irracionalidad, pero no es su objetivo último, sino que tiene una finalidad práctica. Reclamaban un cambio en todas aquellas instituciones tradicionales que a través de la duda y la crítica eran encontradas irracionales. Tenían fe constante en el poder de la razón y en la ciencia. A través de ellas es posible aprehender el universo y subordinarlo a las necesidades de los hombres, alcanzar grados cada vez mayores de libertad, progreso ilimitado. Ello los llevó a ser humanistas, optimistas y confiados. En cuanto a la búsqueda de la felicidad, consideraban que las aspiraciones no debían trasladarse a otra vida, sino centrarse en encontrar los medios para mejorar la vida terrenal. La felicidad humana era antepuesta a la salvación religiosa.
El Iluminismo fue un movimiento con marcada preocupación por lo político y lo social, lo que además de la crítica al Antiguo Régimen, llevó al desarrollo de la teoría de la democracia y la división de poderes. Sus ideas penetraron en sectores minoritarios de la sociedad, pero éstos procuraron su difusión a través de diferentes medios: las sociedades científicas, literarias y artísticas; las sociedades de amigos del país (en ciudades y capitales de provincia), los Salones (reuniones, tertulias), la Enciclopedia.
Antes que el Iluminismo, el Renacimiento (S XV y XVI), en tanto amplio movimiento cultural que impulsó el desarrollo del arte, las ciencias naturales y humanas en un momento en que se producía la consolidación de los Estados europeos, la afirmación del capitalismo y el ascenso de la burguesía, fue el primer momento de ruptura o inflexión que permitió progresivamente la constitución autónoma del conjunto de las ciencias sociales. El Iluminismo (SXVIII), con su concepción de que el conocimiento de la realidad natural o social depende de la unidad de la razón y la observación en el método científico, es el antecedente fundamental para el surgimiento posterior de la sociología (SXIX). Sin embargo, el Iluminismo estudiaba científicamente el orden social para criticarlo y transcenderlo. Un siglo más tarde, buena parte de la sociología occidental se desarrollaría como una reacción frente a este aspecto crítico y creador del Iluminismo.
Voltaire Rousseau
Montesquieu Kant