Respuestas a tus Preguntas

Transcripción

1 Asociación de Psicología Americana Respuestas a tus Preguntas Para una mejor comprensión de la orientación sexual y la homosexualidad Desde 1975, la Asociación de Psicología Americana viene pidiendo a los psicólogos tomar la delantera en la remoción del estigma de enfermedad mental que se ha asociado por mucho tiempo con las orientaciones gay, lesbiana y bisexual. La disciplina de la psicología está preocupada del bienestar de las personas y grupos y, por lo mismo, de las amenazas a dicho bienestar. Se ha demostrado que el prejuicio y la discriminación constantemente experimentados por las personas que se identifican como lesbianas, gays o bisexuales tienen efectos psicológicos adversos. Este folleto fue diseñado para entregar información precisa a quienes quieran comprender mejor lo que es la orientación sexual y el impacto del prejuicio y la discriminación en las personas que se identifican como lesbianas, gays o bisexuales. Qué es la orientación sexual? La orientación sexual refiere a un patrón perdurable de atracciones emocionales, románticas y/o sexuales hacia hombres, mujeres o ambos. La orientación sexual también refiere al sentido de identidad de la persona, basado en dichas atracciones, conductas relacionadas y pertenencia a una comunidad de otros que comparten aquellas atracciones. Estudios realizados durante décadas han demostrado que las orientaciones sexuales forman parte de un continuo, yendo desde la atracción exclusiva por el otro sexo a la atracción exclusiva por el mismo sexo. Sin embargo, la orientación sexual generalmente es discutida basándose en tres categorías: heterosexual (atracción emocional, romántica o sexual por miembros del otro sexo), gay/lesbiana (atracción emocional, romántica, o sexual por miembros del propio sexo), y bisexual (atracción emocional, romántica o sexual por ambos sexos). Esta gama de conductas y atracciones ha sido descrita en varias culturas y naciones alrededor del mundo. Muchas culturas usan etiquetas de identidad para describir a las personas que expresan estas atracciones. En los Estados Unidos las etiquetas más comunes son lesbianas (mujeres que se sienten atraídas por mujeres), hombres gay (hombres que se sienten atraídos por hombres), y personas bisexuales (hombres o mujeres que se sienten atraídos por ambos sexos). No obstante, algunas personas pueden usar etiquetas diferentes o no usar etiquetas en absoluto. La orientación sexual es diferente a otros componentes del sexo y género, incluyendo sexo biológico (características anatómicas, fisiológicas, y genéticas asociadas con ser hombre o mujer), identidad de género (el sentido psicológico de ser hombre o mujer), 1 y el rol de género social (las normas culturales que definen la conducta masculina o femenina). La orientación sexual comúnmente se discute como si únicamente fuera una característica del individuo, como el sexo biológico, la identidad de género, o la edad. Esta perspectiva es incompleta pues la 1 Este documento se enfoca en la orientación sexual. Otro documento de la APA, Respuestas a Tus Preguntas Acerca de los Individuos Transgéneros y la Identidad de Género, trata acerca de la identidad de género.

2 orientación sexual se define a través de las relaciones con otros. Las personas expresan su orientación sexual a través de conductas con otros, incluidas acciones tan simples como tomarse de la mano o besarse. Así, la orientación sexual está estrechamente conectada con las relaciones personales íntimas, que poseen necesidades profundas de afecto, apego e intimidad. Además de las conductas sexuales, estos lazos incluyen tipos de afecto físico no sexual en la pareja, metas y valores compartidos, apoyo mutuo y compromiso continuo. De esta manera, la orientación sexual no es meramente una característica personal circunscrita a un individuo, sino que más bien la orientación sexual de cada persona define el grupo de personas en el cual es más probable que encuentre las relaciones románticas satisfactorias que son un componente esencial de la identidad personal para muchas personas. Cómo se dan cuenta las personas que son lesbianas, gays o bisexuales? Según el entendimiento científico y profesional actual, las atracciones principales que forman la base de la orientación sexual adulta, emergen típicamente entre la niñez media y la adolescencia temprana. Estos patrones de atracción emocional, romántica y sexual pueden aparecer sin haber tenido ninguna experiencia sexual previa. Las personas pueden ser célibes y saber su orientación sexual -ya sea esta lesbiana, gay, bisexual o heterosexual. Es muy común que las lesbianas, gays y bisexuales tengan experiencias muy distintas con respecto a su orientación sexual. Algunas personas saben que son lesbianas, gays o bisexuales mucho tiempo antes de siquiera buscar algún tipo de relación con otras personas. Algunas personas se involucran en actividades sexuales (con personas del mismo sexo o del otro sexo) antes de asignarle una etiqueta clara a su orientación sexual. El prejuicio y la discriminación hacen que para muchas personas sea difícil aceptar sus identidades de orientación sexual. De tal modo, reconocer una identidad lesbiana, gay o bisexual puede ser un proceso lento. Qué causa que una persona posea una determinada orientación sexual? No existe un consenso entre los científicos con respecto a las razones exactas que hacen que un individuo desarrolle una orientación heterosexual, bisexual, gay o lesbiana. Aunque muchas investigaciones han examinado las posibles influencias genéticas, hormonales, del desarrollo, así como sociales y culturales, en la orientación sexual, no se ha hallado nada que permita a los científicos concluir que la orientación sexual está determinada por algún factor o factores en particular. Muchos creen que ambos, la naturaleza y la crianza, juegan roles complejos; la mayoría de las personas experimentan poco o ningún sentido de la elección en el caso de su orientación sexual. Qué rol juegan la discriminación y el prejuicio en las vidas de las personas lesbianas, gays, y bisexuales? Las personas lesbianas, gay y bisexuales en los Estados Unidos encuentran muchos prejuicios, discriminación y violencia a causa de su orientación sexual. El prejuicio intenso en contra de las lesbianas, hombres gay y personas bisexuales se expandió mucho durante el siglo XX. Estudios de opinión pública durante las décadas de 1970, 1980, y 1990 constantemente mostraron que, en grandes segmentos del público, las personas gays, lesbianas y bisexuales eran blanco de actitudes fuertemente negativas. Más recientemente, la opinión pública ha comenzado poco a poco a oponerse a la discriminación por orientación sexual, pero las expresiones de hostilidad hacia las lesbianas y los gays todavía son comunes en la sociedad estadounidense contemporánea. El

3 prejuicio en contra de las personas bisexuales parece existir en niveles similares. De hecho, los individuos bisexuales pueden ser blanco de discriminación por parte de algunas lesbianas y gays al igual que por parte de personas heterosexuales. La discriminación por orientación sexual toma muchas formas. El prejuicio antigay severo se ve reflejado en la alta tasa de acoso y violencia dirigida hacia lesbianas, gays y bisexuales en la sociedad estadounidense. Numerosas encuestas indican que el acoso verbal y el abuso son experiencias prácticamente universales para las lesbianas, los gays y los bisexuales. Además, la discriminación en contra de las lesbianas, los gays y los bisexuales relacionada con el empleo y la vivienda aún persiste. La pandemia del VIH/SIDA es otra área en la cual el prejuicio y la discriminación en contra de las lesbianas, los gays y los bisexuales tienen efectos negativos. Durante los inicios de la pandemia, la creencia de que el VIH/SIDA era una enfermedad gay contribuyó al retraso en enfrentar el caos social masivo que el SIDA generaría. Los hombres gay y bisexuales han sido afectados de manera desproporcionada por la enfermedad. La asociación entre el VIH/SIDA y los hombres gay y bisexuales y la creencia errónea que algunas personas poseían de que todos los hombres gays y bisexuales estaban infectados, sirvió para estigmatizar aún más a las lesbianas, los gays y los bisexuales. Cuál es el impacto psicológico del prejuicio y la discriminación? El prejuicio y la discriminación tienen un impacto social y personal. A un nivel social, el prejuicio y la discriminación en contra de las lesbianas, los gays y los bisexuales se refleja en los estereotipos cotidianos de miembros de estos grupos. Estos estereotipos persisten incluso aunque no sean respaldados por la evidencia, y comúnmente son usados para justificar el trato desigual hacia las lesbianas, los gays y los bisexuales. Por ejemplo, las limitaciones en las oportunidades laborales, la parentalidad y el reconocimiento de la relación son comúnmente justificadas usando suposiciones estereotípicas acerca de las lesbianas, los gays y los bisexuales. A un nivel individual, tal prejuicio y discriminación puede también tener consecuencias negativas, especialmente si las lesbianas, los gays y los bisexuales intentan esconder o negar su orientación sexual. Aunque muchas lesbianas y gays aprenden a sobrellevar el estigma social en contra de la homosexualidad, este patrón de prejuicio puede tener efectos negativos serios en la salud y el bienestar. Los individuos y grupos pueden ver el impacto del estigma reducido o empeorado por otras características, tales como la raza, etnia, religión, o discapacidad. Algunas lesbianas, gays y bisexuales pueden verse enfrentados en un menor grado al estigma. Para otros, la raza, el sexo, la religión, la discapacidad u otras características, pueden exacerbar el impacto negativo del prejuicio y la discriminación. El prejuicio, la discriminación y la violencia generalizada a la cual las lesbianas y los gays están comúnmente sujetos son preocupaciones de salud mental significativas. El prejuicio sexual, la discriminación por orientación sexual, y la violencia antigay son la fuente más grande de estrés para las lesbianas, los gays y los bisexuales. Aunque el apoyo social es crucial a la hora de sobrellevar el estrés, las actitudes antigay y la discriminación pueden dificultar que las lesbianas, los gays y los bisexuales encuentren dicho apoyo. Es la homosexualidad un trastorno mental? No, las orientaciones lesbiana, gay y bisexual no son trastornos. Los estudios

4 realizados no han hallado asociaciones inherentes entre ninguna de estas orientaciones sexuales y la psicopatología. Ambas, la conducta heterosexual y la conducta homosexual, son aspectos normales de la sexualidad humana. Ambas han sido documentadas en muchas culturas y eras históricas diferentes. A pesar de la persistencia de los estereotipos que describen a las lesbianas, los gays y los bisexuales como perturbados, varias décadas de investigación y de experiencia clínica han llevado a todas las organizaciones médicas y de salud mental dominantes en este país a concluir que estas orientaciones representan formas normales de la experiencia humana. Las relaciones lésbicas, gays y bisexuales son formas normales de la vinculación afectiva humana. Es por ello que, ya hace tiempo, las organizaciones dominantes dejaron de clasificar la homosexualidad como un trastorno mental. Y qué con la terapia que intenta cambiar la orientación sexual de homosexual a heterosexual? Todas las organizaciones de salud mental más importantes han expresado oficialmente su preocupación por aquellas terapias que promueven modificar la orientación sexual. A la fecha, no ha habido ninguna investigación científicamente válida que muestre que las terapias cuyo objetivo es cambiar la orientación sexual (a veces llamada terapia de conversión o reparativa) sea segura o efectiva. Además, parece probable que la promoción de terapias de cambio refuerza los estereotipos y contribuye a un clima negativo para las lesbianas, los gays y los bisexuales. Este parecería ser especialmente el caso de las lesbianas, los gays y los bisexuales que se han criado en contextos religiosos más conservadores. Algunas respuestas útiles de un terapeuta tratando a un individuo que tiene problemas con su atracción por personas del mismo sexo incluyen ayudar a esa persona a sobrellevar activamente los prejuicios sociales en contra de la homosexualidad, resolver exitosamente problemas asociados con y resultantes de conflictos internos, y llevar activamente una vida feliz y satisfactoria. Las organizaciones profesionales de salud mental piden a sus miembros respetar el derecho de una persona (cliente) a la autodeterminación; ser sensible a la raza, cultura, etnia, edad, género, identidad de género, orientación sexual, religión, estado socioeconómico, idioma y discapacidad del cliente cuando se trabaje con él, y eliminar los sesgos basados en estos factores. Qué es salir del clóset y por qué es importante? La frase salir del clóset se usa para referirse a varios aspectos de las experiencias de las lesbianas, los gays y los bisexuales: la conciencia de sentirse atraído por personas del mismo sexo; el acto de contarle a una o algunas personas acerca de estas atracciones, la revelación generalizada de las atracciones hacia personas del mismo sexo, y la identificación con la comunidad lesbiana, gay y bisexual. Mucha gente titubea al pensar salir del clóset a causa de los riesgos de encontrarse con prejuicios y discriminación. Algunos eligen mantener su identidad en secreto; algunos eligen salir del clóset en circunstancias limitadas; algunos deciden salir del clóset de manera pública. Salir del clóset es normalmente un paso psicológico importante para las lesbianas, los gays y los bisexuales. Algunos estudios han mostrado que tener un sentimiento positivo acerca de la orientación sexual propia integrándola dentro de la propia vida fomenta el bienestar y la salud mental. Esta integración comúnmente involucra revelar a otros la identidad propia; también puede implicar la participación en la comunidad gay. Ser capaz de discutir la propia orientación sexual con otros también

5 aumenta la disponibilidad de apoyo social, lo cual es crucial para la salud mental y el bienestar psicológico. Al igual que los heterosexuales, las lesbianas, los gays y los bisexuales se benefician al ser capaces de compartir sus vidas con y recibir apoyo de sus familias, amigos, y conocidos. Así, no es sorprendente que las lesbianas y gays que sienten que deben esconder su orientación sexual reporten problemas de salud mental de manera más frecuente de lo que lo hacen las lesbianas y gays que son más abiertos; podrían incluso tener más problemas físicos de salud. Y qué pasa con la orientación sexual y salir del clóset durante la adolescencia? La adolescencia es un periodo en el cual las personas se separan de sus padres y familias y comienzan a desarrollar la autonomía. La adolescencia puede ser un periodo de experimentación y muchos jóvenes pueden cuestionar sus sentimientos sexuales. Darse cuenta de los sentimientos sexuales es una tarea normal del desarrollo en la adolescencia. A veces los adolescentes tienen sentimientos hacia o experiencias con personas del mismo sexo que causan confusión en el ámbito de la orientación sexual. Esta confusión parece disminuir con el tiempo, con resultados diferentes para los distintos individuos. Algunos adolescentes desean y se involucran en conductas homosexuales pero no se identifican como lesbianas, gays o bisexuales, a veces debido al estigma asociado con una orientación no heterosexual. Algunos adolescentes experimentan sentimientos continuos de atracción por el mismo sexo pero no se involucran en ninguna actividad sexual o pueden involucrarse en conductas heterosexuales por tiempos de duración variable. Debido al estigma asociado con la atracción hacia personas del mismo sexo, muchos jóvenes experimentan atracción homosexual por muchos años antes de volverse sexualmente activos con parejas del mismo sexo o revelar sus atracciones a otros. Para algunas personas, este proceso de exploración de las atracciones homosexuales lleva a una identidad lesbiana, gay o bisexual. Para algunos, reconocer esta identidad puede ponerle fin a la confusión. Cuando estos jóvenes reciben el apoyo de los padres y otros, es más probable que sean capaces de vivir vidas sanas y satisfactorias y seguir avanzando por el proceso usual del desarrollo adolescente. Mientras más joven sea la persona cuando él o ella reconozca tener una identidad no heterosexual, menos son los recursos internos y externos que él o ella tendrá. De esta manera, los jóvenes que salen del clóset a temprana edad necesitan especialmente del apoyo de los padres y los otros. Es más probable que los jóvenes que se identifican como lesbianas, gays, bisexuales, enfrenten cierto tipo de problemas, incluyendo el abuso escolar y malas experiencias en el colegio. Estas experiencias están asociadas con resultados negativos, tales como pensamientos suicidas y actividades de alto riesgo, tales como el sexo sin protección, el alcohol y el uso de drogas. Por otra parte, muchas lesbianas, gays y bisexuales no parecen experimentar mayores niveles de riesgos de salud o de salud mental. Donde ocurren los problemas, estos pueden estar estrechamente asociados con experiencias de prejuicio y discriminación en sus entornos. El apoyo de personas importantes en la vida del adolescente puede entregar una contraparte útil al prejuicio y la discriminación. El apoyo en la familia, en el colegio y en la sociedad en general ayuda a reducir el riesgo y estimula el desarrollo saludable. Los jóvenes necesitan cuidado y apoyo, expectativas apropiadamente altas y aliento para participar activamente con sus pares.

6 Las lesbianas, los gays y los bisexuales jóvenes que están bien a pesar del estrés - como todo adolescente que está bien a pesar del estrés- normalmente son aquellos que son socialmente competentes, que poseen buenas habilidades de resolución de problemas, que tienen sentido de la autonomía y las metas, que miran hacia el futuro. En relación a esto, se presume que algunos jóvenes son lesbianas, gays o bisexuales porque no se ajustan a los roles de género tradicionales (esto es, las creencias culturales acerca de cómo debe ser la conducta y la apariencia masculina y femenina ). Si estos jóvenes se identifican como heterosexuales, lesbianas, gays o bisexuales, encuentran el prejuicio y la discriminación basados en la suposición de que ellos son lesbianas, gays o bisexuales. El mejor apoyo para estos jóvenes son los climas sociales y escolares que no toleran el lenguaje y la conducta discriminatoria. A qué edad deberían salir del clóset las lesbianas, los gays o los bisexuales? No hay una respuesta simple o absoluta a esta pregunta. Los riesgos y beneficios de salir del clóset son distintos según las circunstancias de cada joven. Algunos jóvenes viven en familias donde el apoyo a su orientación sexual es clara y estable; estos jóvenes pueden encontrar que el riesgo al salir del clóset es menor, incluso a temprana edad. Jóvenes que viven en familias menos tolerantes pueden enfrentar riesgos mayores al salir del clóset. Todos los jóvenes que salen del clóset pueden experimentar prejuicio, discriminación e incluso violencia en sus colegios, grupos sociales, lugares de trabajo e iglesias. Las familias, los amigos y los colegios que brindan apoyo obran como amortiguadores importantes de los impactos negativos que estas experiencias tienen. Cuál es la naturaleza de las relaciones homosexuales? Algunos estudios indican que muchas lesbianas y gays quieren y tienen relaciones estables. Por ejemplo, algunos datos emanados de encuestas indican que entre el 40% y el 60% de los gays y entre el 45% y el 80% de las lesbianas se encuentran actualmente en una relación romántica. Más aún, datos del censo realizado en Estados Unidos el año 2000, indican que de los 5,5 millones de parejas que vivían juntas sin casarse, cerca de 1 de cada 9 ( ) tenía una pareja del mismo sexo. Aunque es más que seguro que los datos del censo subestiman el número real de parejas estables del mismo sexo viviendo juntas, los datos indican que hay hogares de parejas formadas por gays y hogares formados por lesbianas en los Estados Unidos. Los estereotipos acerca de las lesbianas, los gays y los bisexuales siguen existiendo, aun cuando estudios los han descrito como erróneos. Por ejemplo, un estereotipo es que las relaciones de lesbianas y gays son infelices y disfuncionales. No obstante, diversas investigaciones han encontrado que las parejas homosexuales y heterosexuales son equivalentes en mediciones de la satisfacción con la relación y el compromiso con la relación. Un segundo tipo de estereotipo es que las relaciones de las lesbianas, los gays y los bisexuales son inestables. Sin embargo, a pesar de la hostilidad social hacia las relaciones homosexuales, los estudios indican que muchas lesbianas y muchos gays forman relaciones duraderas. Por ejemplo, datos emanados de encuestas indican que entre el 18% y el 28% de las parejas gay y entre el 8% y el 21% de las parejas lesbianas han vivido juntas por 10 años o más. Es también razonable sugerir que la estabilidad de las parejas homosexuales podría verse mejorada si los que forman la pareja disfrutaran de los

7 mismos niveles de apoyo y reconocimiento de su relación que poseen las parejas heterosexuales, esto es, derechos legales y responsabilidades asociadas con el matrimonio. Una tercera creencia errónea es que los valores y las metas de las parejas de gays y lesbianas son diferentes a los valores y metas de las parejas heterosexuales. De hecho, diversos estudios han hallado que los factores que influyen la satisfacción, el compromiso y la estabilidad de una relación son increíblemente similares para las parejas homosexuales que cohabitan y para las parejas heterosexuales casadas. Existen muchas menos investigaciones acerca de las relaciones de personas que se identifican como bisexuales. Si estos individuos estuvieran en una relación homosexual, probablemente enfrentarían el mismo prejuicio y discriminación que las parejas gays y lesbianas. Si estuvieran en una relación heterosexual, sus experiencias serían muy similares a las que poseen las personas que se identifican como heterosexuales, a menos que decidieran salir del clóset como bisexuales; en este caso es probable que enfrentasen el mismo prejuicio y discriminación que las lesbianas y los gays. Pueden las lesbianas y los gays ser buenos padres o buenas madres? Muchas lesbianas y muchos gays son padres o madres; otros desean ser padres o madres. En el censo realizado en Estados Unidos el año 2000, el 33% de los hogares formados por parejas de lesbianas y el 22% de los hogares formados por parejas de gays reportaron al menos un menor de 18 años viviendo en el hogar. Aunque datos comparativos no están disponibles, muchas lesbianas solteras y muchos gays solteros son también padres o madres, y muchas parejas homosexuales son padres o madres de medio tiempo de menores cuyo hogar principal es otro. Como la visibilidad social y el estado legal de los padres gays y las madres lesbianas ha aumentado, algunas personas han expresado su preocupación acerca del bienestar de los menores en estas familias. La mayoría de sus interrogantes se basan en estereotipos negativos sobre las lesbianas y los gays. La mayor parte de las investigaciones en este tema se preguntan si los menores criados por madres lesbianas o padres gays poseen alguna desventaja cuando se los compara con menores criados por padres heterosexuales. Las preguntas y respuestas más comunes son las siguientes: 1. Tienen los hijos e hijas de madres lesbianas o padres gays más problemas con su identidad sexual que los hijos de padres heterosexuales? Por ejemplo, desarrollan estos menores problemas en su identidad de género y/o en sus conductas de rol de género? La respuesta emanada de la investigación es clara: la identidad sexual y de género (incluyendo la identidad de género, las conductas de rol de género y la orientación sexual) se desarrollan generalmente de la misma forma en hijos o hijas de madres lesbianas y en hijos o hijas de padres heterosexuales. No existen muchos estudios respecto de los hijos o hijas de padres gays. 2. Tienen los hijos o hijas criados por madres lesbianas o padres gay problemas en otras áreas del desarrollo personal? Por ejemplo, son los hijos o hijas de madres lesbianas o padres gays más vulnerables a las crisis nerviosas, tienen más problemas conductuales o son menos sanos psicológicamente que otros niños o niñas? De nuevo, estudios de personalidad, auto concepto y problemas conductuales muestran pocas diferencias entre hijos o hijas de madres lesbianas e hijos o hijas de padres heterosexuales. No existen muchos estudios respecto de los hijos o hijas de padres gays.

8 3. Son los hijos o hijas de madres lesbianas o padres gays proclives a tener problemas en sus relaciones sociales? Por ejemplo, ser molestados o, de otra forma, maltratados por sus pares. Una vez más, la evidencia indica que los hijos o hijas de madres lesbianas y padres gays tienen relaciones sociales normales con sus pares y adultos. El cuadro que emerge de las investigaciones en el tema muestra que los hijos o hijas de padres gays o madres lesbianas disfrutan de una vida social típica de su grupo etario en relación con la participación con sus pares, padres o madres, parientes, y amigos. 4. Es más probable que estos menores sean víctimas de abuso por parte de su padre o madre, o por parte de un amigo o conocido de uno de sus padres o madres? No existe evidencia científica que sustente el temor de que los hijos o hijas de madres lesbianas o padres gays vayan a ser víctimas de abuso por parte de sus padres o madres, o por parte de un amigo o conocido de uno de sus padres o madres. En suma, las ciencias sociales muestran que las preocupaciones generalmente expresadas acerca de los hijos o hijas de madres lesbianas o padres gay - preocupaciones que generalmente están basadas en el prejuicio en contra de los estereotipos sobre los homosexuales- son infundadas. En general, los estudios indican que los hijos o hijas de madres lesbianas o padres gays no son marcadamente diferentes a los hijos o hijas de padres heterosexuales en su desarrollo, ajuste o bienestar general. Qué se puede hacer para disminuir el prejuicio y la discriminación en contra de las lesbianas, los gays, y los bisexuales? Las lesbianas, los gays y los bisexuales que deseen ayudar a reducir el prejuicio y la discriminación pueden ser abiertos con su orientación sexual, aun cuando tomen las precauciones necesarias para estar lo más seguros posible. Ellos pueden examinar sus propios sistemas de creencias en busca de estereotipos antigay. Pueden también hacer uso de la comunidad lesbiana, gay y bisexual -así como también de personas heterosexuales tolerantes- para encontrar apoyo. Las personas heterosexuales que deseen ayudar a reducir el prejuicio y la discriminación pueden examinar sus propias respuestas a los estereotipos y prejuicios antigay. Ellos pueden llegar a conocer a lesbianas, gays y bisexuales y pueden trabajar con personas y comunidades lesbianas, gays y bisexuales que combaten el prejuicio y la discriminación. Los heterosexuales están la mayor parte del tiempo en una buena posición para pedirle a otros heterosexuales que consideren la naturaleza prejuiciosa o discriminatoria de sus creencias y acciones. Los aliados heterosexuales pueden fomentar políticas de no discriminación que incluyan la orientación sexual. Pueden trabajar para hacer que la salida del clóset sea segura. Cuando las lesbianas, los gays y los bisexuales se sienten libres de hacer pública su orientación sexual, se les da a los heterosexuales la oportunidad de tener contacto personal con personas abiertamente gays y de percibirlas como individuos. Estudios de prejuicio, incluyendo los prejuicios en contra de los homosexuales, muestran de manera consistente que el prejuicio se reduce cuando los miembros de un grupo mayoritario interactúan con miembros de un grupo minoritario. Apegándose a este patrón general, una de las influencias más poderosas en la aceptación de los homosexuales por parte de los heterosexuales es establecer un contacto personal con una persona abiertamente homosexual. Las actitudes antigay son mucho menos comunes entre miembros de la población que tienen un

9 amigo cercano o un pariente que es lesbiana o gay, especialmente si la persona homosexual ha salido del clóset con ellos directamente. Cita Bibliográfica Sugerida American Psychological Association. (2008). Answers to your questions: For a better understanding of sexual orientation and homosexuality. Washington DC: Author. [Retrieved from Este material puede ser reproducido y distribuido total o parcialmente sin permiso alguno siempre y cuando el contenido reproducido incluya la cita bibliográfica original y la siguiente declaración: 2008 American Psychological Association. Dónde puedo encontrar más información sobre la homosexualidad? Asociación de Psicología Americana Oficina para las Problemáticas Lesbianas, Gays, Bisexuales, y Transgénero First Street 750, NE. Washington, DC lgbc@apa.org Salud Mental América (antiguamente la Asociación Nacional de Salud Mental) N. Beauregard Street Nº 2000, 6º piso Alexandria, VA Mesa Central: (703) Llamada gratuita: (800) Fax: (703) Por Qué Ser Gay Importa? Programa anti-bullying diseñado para mejorar la comprensión y el respeto por los jóvenes que son gay/lesbianas/bisexuales/transgéneros (GLBT). Centrado en un folleto llamado Por Qué Ser Gay Importa? Como Hablar con los Niños acerca de la Orientación Sexual y el Prejuicio, el programa insta a los padres y otros a comunicarse y compartir valores de respeto con sus hijos. Academia Americana de Pediatría (AAP) División de Salud Infantil y Adolescente Northwest Point Boulevard Nº 141 Elk Grove Village, IL Oficina: (847) Fax: (847) Adolescentes Gay, Lesbianas, y Bisexuales: Hechos para los Adolescentes y sus Padres Este folleto fue creado con la asistencia editorial del Comité de la APA sobre Problemáticas Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transgéneros. Producido por la Oficina de Comunicaciones Públicas y para los Miembros.

10 La Asociación de Psicología Americana First Street Nº 750, NE Washington, DC Oficina de Comunicaciones Públicas y para los Miembros Todos los Derechos Reservados