El CSN informa al Congreso de que el funcionamiento de las centrales e instalaciones radiactivas ha sido correcto en 2006

Transcripción

1 El CSN informa al Congreso de que el funcionamiento de las centrales e instalaciones radiactivas ha sido correcto en 2006 La presidenta del CSN agradeció, en nombre del Pleno del Consejo, las demandas de transparencia de la Comisión de Industria y aseguró que, en 2006, el impulso y el control parlamentario guiaron la actuación del organismo El Pleno del CSN con Antonio Cuevas, presidente de la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados (a la dcha. de la presidenta en la imagen). 21 de noviembre de 2007 Ver la comparecencia completa En la presentación del informe anual de actividades del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ante la Comisión de Industria, Turismo y Comercio del Congreso de los Diputados, la presidenta del organismo, Carmen Martínez Ten, calificó de correcto el funcionamiento en 2006 de las centrales nucleares, instalaciones del ciclo e instalaciones radiactivas, desde el punto de vista de la seguridad, y añadió que se situó en niveles equiparables a los de los países del entorno más desarrollados. Respecto de las centrales nucleares, Martínez Ten manifestó que la valoración de su funcionamiento en materia de seguridad resulta tanto del estudio de los elementos de evaluación que tradicionalmente utiliza el organismo de forma individual (indicadores de funcionamiento; sucesos notificados e incidentes; hallazgos de inspección y evaluación; dosimetría de trabajadores, y apercibimientos y procedimientos sancionadores iniciados), como de los resultados del Sistema Integrado de Supervisión de Centrales (SISC), vigente desde 2006 a efectos internos y a conocimiento del público este año. El contenido del Informe Anual y todo lo relativo al SISC está disponible en la web del CSN en Relaciones Institucionales de Interés->Relaciones con las Cortes y Portada ->SISC, respectivamente.

2 Conforme al nuevo SISC, que cataloga según un código de colores el impacto para la seguridad de los parámetros importantes de funcionamiento de las centrales, el conjunto de indicadores y hallazgos de inspección se situó el año pasado en verde muy baja importancia para la seguridad-, salvo un indicador y un hallazgo blancos entre baja y moderada- en Ascó. En la matriz de acción, que actúa como tabla de diagnóstico del SISC, todas las centrales cerraron 2006 en la columna de respuesta del titular, que implica un mantenimiento del programa base de inspección y el tratamiento de las deficiencias identificadas dentro del programa de acciones correctoras de la instalación. Sólo Ascó II se colocó en la columna de respuesta reguladora, primer nivel de intervención adicional del CSN. A lo largo de 2006, los técnicos del Consejo realizaron un total 177 inspecciones, que cumplieron las previsiones del plan básico de inspección y con las inspecciones reactivas requeridas. Instalaciones radiactivas En cuanto al funcionamiento de las instalaciones radiactivas, la presidenta del CSN explicó que fue adecuado durante el período estudiado, a tenor del número de incidencias y su significación en términos de riesgo, de los resultados y trascendencia de los hallazgos de inspección, del análisis de los informes periódicos requeridos, de la dosimetría del personal implicado y de los apercibimientos sancionadores incoados. Además, aseguró que el nivel de control sobre las instalaciones radiactivas y la actividad de inspección ejercida, ya fuera por el CSN o por las Comunidades Autónomas con Acuerdo de Encomienda de Funciones, resultó suficiente. La presidenta del Consejo hizo especial hincapié en la importancia de la cultura de la seguridad en este campo y solicitó de los diputados su apoyo para reforzar al CSN en la labor de implicación del personal con licencia de este tipo de instalaciones y de fomento del papel que desarrollan los Servicios y Unidades Técnicas de Protección Radiológica, y las entidades que prestan servicios especializados sujetos a regulación. En 2006, el CSN respondió a las solicitudes de licenciamiento en una media de 5 meses, tiempo aceptable, aunque mejorable, y que atribuyó en parte a la cuantiosa autorización de instalaciones complejas, como aceleradores de uso radioterápico. Por otra parte, en términos de dosis colectivas e individuales medias, los resultados de control dosimétrico realizado a trabajadores en instalaciones nucleares, como en las del ciclo y las radiactivas, se mantuvieron o redujeron ligeramente respecto de los niveles históricos. Además, registraron niveles similares a los de otros países del entorno. Martínez Ten avanzó que el CSN ha decidido fomentar la formación de los usuarios y titulares en el uso de la dosimetría, al registrar administrativamente 82 trabajadores de los expuestos en las instalaciones radiactivas una dosis superior a los límites por una realización incorrecta del control dosimétrico. En tres casos, se superó el umbral de dosis. En un contexto caracterizado por niveles correctos de seguridad y protección radiológica asociada al combustible gastado y a los residuos radiactivos, destacó la especial significación de dos actividades específicas de licenciamiento y control realizadas en 2006: la autorización de construcción de un almacenamiento de 2

3 combustible gastado en seco en la Central José Cabrera, conocido como ATI, y la aprobación del diseño del contenedor de almacenamiento HI-STORM 100 que albergará el combustible gastado de la central mencionada. Por lo que respecta a la vigilancia radiológica de los niveles de efluentes gaseosos y líquidos se han mantenido en niveles correctos y equiparables a los de países de nuestro entorno. Supervisión integral En su primera comparecencia parlamentaria desde que asumiera la presidencia del regulador en diciembre pasado, Martínez Ten aprovechó para destacar ciertos aspectos del Sistema Integrado de Supervisión de Centrales (SISC), cuya principal característica es que cuantifica de forma objetiva un conjunto de parámetros que definen el estado de la seguridad y de la protección radiológica de forma preestablecida, reglada y orientada al riesgo. En función de los resultados que obtengan las instalaciones nucleares de forma trimestral, el SISC permite dedicar una atención sistemática, proporcionada y predecible a la situación de cada una de ellas y eventualmente adoptar medidas correctoras en aquellas áreas que reflejen un indebido incremento del riesgo, proceso que exige un fuerte compromiso de los titulares. Para ilustrar la importancia que el organismo otorga a esta nueva metodología y los esfuerzos realizados para su implantación, la presidenta del CSN explicó que durante 2006 se redactaron y aprobaron más de la mitad de los 64 procedimientos que apuntalan el programa. Asimismo, informó de que un experto del Consejo se encuentra este año en el regulador estadounidense (Nuclear Regulatory Commission) para profundizar en el conocimiento de buenas prácticas de supervisión al objeto de incorporarlas cuanto antes al SISC. Auditoría y colaboración con el OIEA Por otra parte, el CSN inició en 2006 el proceso de preparación para la misión IRRS (Integrated Regulatory Review Service): una auditoría integral del funcionamiento del organismo que efectúa in situ el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). Con vistas a esa gran inspección a la que se someterá voluntariamente el Consejo en febrero de 2008, el organismo español debe cumplir numerosos requisitos. De entre los acometidos en 2006, Martínez Ten destacó la elaboración de un informe de autoevaluación y de un plan de acción, así como un nuevo análisis de todos los procesos del organismo. La revisión del sistema regulador es un servicio que el OIEA presta a petición de los Estados miembros y que, en el caso del CSN, tendrá un alcance global. De la evaluación del OIEA, la más amplia y completa de las previstas, se desprenderá un informe de recomendaciones y sugerencias de mejora que el CSN podrá desarrollar en dos años. En 2010, el OIEA revisará los avances efectuados. En otro orden de cosas, Martínez Ten informó de que el organismo dirigido por Mohamed ElBaradei ha solicitado la colaboración de España para fomentar programas concretos de cooperación en materia de regulación y seguridad nuclear con países emergentes. Se trata de poner su experiencia y conocimientos en el marco de la seguridad nuclear y la protección radiológica a disposición de países con escasa 3

4 experiencia en esos aspectos y que han anunciado su intención de construir centrales nucleares. La presidenta del CSN recordó la necesidad, desde un punto de vista global, de impulsar la formación, el intercambio de información, la implantación de buenas prácticas y, sobre todo, de ayudar a definir los requisitos y los estándares necesarios para que puedan desarrollar programas de energía nuclear civil en las condiciones adecuadas. Acciones derivadas de Vandellós II La presidenta del CSN se refirió al cumplimiento de las acciones derivadas de Vandellós II. El incidente de 2004 dio lugar a una serie de requerimientos parlamentarios, entre los que Martínez Ten destacó la formalización y sistematización de los planes de mejora de la gestión de Vandellós II, y los planes de aplicación de las lecciones aprendidas al resto de las centrales. Tras calificar 2006 como el año, con diferencia, en el que la actuación del organismo ha estado más determinada por el impulso y control de la Comisión competente del Congreso de los Diputados, mencionó varios ejes de actuación sobre los que el CSN está dispuesto a poner el acento y redoblar esfuerzos: el refuerzo de la cultura de seguridad, el desarrollo de normativa, el recurso a la evaluación internacional como la efectuada por expertos de la Agencia Europea de Energía de la OCDE a raíz del suceso de Vandellós o la que realizará próximamente el OIEA-, y la garantía de transparencia, que Martínez Ten resumió como el camino adecuado y obligado para avanzar en la credibilidad social. Prueba del inequívoco compromiso del CSN con el fomento de la información pública son los pasos que está dando para estrechar las relaciones con la Asociación de Municipios en Áreas del entorno de las Centrales (AMAC) o, a través de los denominados Comités de Enlace para fomentar la colaboración con asociaciones de la industria, empresas, asociaciones profesiones, etcétera. Además, el CSN ya está publicando las actas y resoluciones del Consejo, las actas de inspección, los dictámenes técnicos y, desde el mes de junio pasado, los resultados trimestrales del SISC. Nueva Ley y futuro del CSN La intervención de Martínez Ten en el Congreso incluyó repetidas referencias al peso específico de la transparencia entre los valores estratégicos del CSN y al alcance que ésta tiene en la reforma de la Ley del Consejo, aprobada el pasado 18 de octubre por el Parlamento. Transparencia y comunicación entendidas no sólo como una política de puertas abiertas con la sociedad y sus representantes, sino también como piezas fundamentales en la interrelación entre el regulador, los titulares y los grupos de interés. Martínez Ten detalló a ese respecto que la norma prevé la creación de un Comité Asesor para la información y la participación pública que el CSN estima que podría actuar como instrumento de dinamización, normalización y de difusión del alcance y resultados de dichas relaciones. Al mismo fin contribuirá sin duda otra disposición que insta al CSN a impulsar y participar en los foros de información de los entornos de las instalaciones nucleares, cuestión que el CSN acaba de plasmar en la firma de un importante Convenio de colaboración con AMAC. 4

5 La presidenta del Consejo también destacó la imposición de nuevas obligaciones a todos los trabajadores de las instalaciones nucleares y radiactivas de informar a los titulares sobre hechos que puedan afectar al funcionamiento seguro, lo que refuerza el valor de la responsabilidad compartida en materia de seguridad y, en ese sentido, garantizó que se cumplirá la disposición adicional de proporcionar las debidas garantías a esas personas. A nivel general, resumió que el mandato de transparencia del Consejo queda engarzado en la nueva norma a la Ley 27/2006, por la que se regulan los derechos de acceso a la información, de participación pública y de acceso a la justicia en materia de medio ambiente, y en virtud de la cual el CSN deberá dar respuesta de los hechos relevantes relacionados con el funcionamiento de las instalaciones a los ciudadanos y para ello deberá aprovechar las tecnologías de la información y la comunicación. Además, se establece que el Consejo deberá informar por propia iniciativa y de forma puntual al Parlamento, al Gobierno y a los gobiernos y parlamentos autonómicos, y a la opinión pública de cualquier circunstancia o suceso que afecte a la seguridad de las instalaciones o a la calidad radiológica del medio ambiente, así como de las medidas correctoras que se adopten. Martínez Ten reservó, por otro lado, un amplio apartado a la necesaria modificación del Estatuto actual del Consejo, para cuya aprobación dispone el Gobierno de nueve meses a partir de la entrada en vigor de la Ley. Indicó que el CSN ha puesto en marcha una fase de estudio de su propuesta de texto, de la que podría desprenderse una auténtica cultura de transparencia a todos los niveles, y cuya primera traducción reflejará la definición del sistema de relaciones y la regulación del citado Comité Asesor. La reforma de la Ley plantea otras mejoras y nuevos cometidos para el organismo, desgranados también en la intervención. Entre ellos, Martínez Ten destacó la colaboración con las autoridades competentes en relación con los programas de protección radiológica de las personas sometidas a diagnóstico o tratamiento médico con radiaciones, así como en las tareas de inspección y control de instalaciones nucleares derivadas de tratados internacionales. En materia de emergencias, recalcó la necesidad de poner en marcha la Directriz básica ante situaciones de emergencia radiológica, aunque adelantó que el marco institucional, normativo, humano y material existente ya en España para afrontar situaciones extraordinarias desde el punto de vista nuclear o radiológico es el adecuado y que se puede equipara al de los países de nuestro entorno. En el ámbito de la protección física, considerado como siempre un objetivo estratégico, señaló tres líneas de actuación prioritarias: protección de las instalaciones, prevención del tráfico ilícito de material nuclear y colaboración con los planes de emergencia. A ese respecto, informó de la reciente firma con el ministro del Interior de un Convenio Marco que profundiza en la actuación conjunta en materia de seguridad física y en la gestión de emergencias. El marco de colaboración consolida las líneas existentes de colaboración y propicia el intercambio de información, experiencia y conocimientos. La presidenta del CSN concluyó su intervención reafirmando el agnosticismo del organismo en las decisiones energéticas del país, al tiempo que defendió la independencia como un valor precioso de todo regulador, basado en la formación y el rigor profesional del personal técnico. 5