DICTAMEN Nº. 92/2004, de 28 de julio. *

Transcripción

1 DICTAMEN Nº. 92/2004, de 28 de julio. * Expediente relativo a revisión de oficio del acto de adjudicación de parcela sobrante de concentración parcelaria, propiedad del Ayuntamiento de Hellín (Albacete). ANTECEDENTES Mediante acuerdo adoptado por unanimidad, de fecha 25 de agosto de 2003, el Pleno del Ayuntamiento de Hellín (Albacete) adjudicó la parcela número 29 del catastro de rústica sita en Casa Nueva del Rincón del Moro a D. X, por importe de Euros incluido IVA, una vez celebrada la correspondiente subasta. Previamente a esta adjudicación, el Director General de Desarrollo Rural de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente resolvió en fecha 9 de junio de 2003 autorizar la enajenación de la finca de reemplazo número 29 de la concentración parcelaria de la Zona Regable de Tobarra conforme al Pliego de Cláusulas Económico-Administrativas para la enajenación, mediante subasta, de una parcela en Rincón del Moro, suscrito el 24 de abril de 2003 y aprobado en la sesión extraordinaria del Pleno del Ayuntamiento celebrado el 12 de mayo de El Alcalde de Hellín remitió a la Consejera de Administraciones Públicas solicitud de dictamen al Consejo Consultivo de Castilla-La Mancha, con el fin de revisar el acto administrativo de adjudicación declarándolo nulo, alegando como causa de nulidad el artículo 62.1, apartado c) (actos de contenido imposible), de la Ley de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común de forma genérica, y fundamentando tal solicitud de la siguiente manera:... este Ayuntamiento de Hellín ha tramitado a través del procedimiento de subasta pública con el pliego de condiciones correspondiente un trozo de terreno [...], en el mismo se incluyen las condiciones exigidas por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha al tratarse de una parcela sobrante de la concentración parcelaria de la zona regable de Tobarra. En su día la Oficina Técnica Municipal al informar consideró que existían dos parcelas una en el término municipal de Hellín con Has. y otra en el término municipal de Liétor de Has. dado que incluso en el Registro de la Propiedad aparecen dos inscripciones distintas, comprobándose después que es una sola parcela que en todo caso es indivisible y no segregable. Se consideró que sólo era propiedad del Ayuntamiento de Hellín la que estaba en su término municipal quedando fuera las Has. del término municipal de Liétor. Al ir a formalizar la escritura pública no se puede llevar a efecto dado que registralmente aunque situada en dos términos municipales distintos la parcela es única e indivisible como ya se ha indicado y de un solo propietario que es el Excmo. Ayuntamiento de Hellín. * Ponente: Juan Martínez Martínez 1

2 Dictámenes Consejo Consultivo Castilla-La Mancha Por tanto corresponde dejar sin efecto el acuerdo adoptado y proceder a realizar nueva subasta por la totalidad de la parcela. 2 EXTRACTO DE LA DOCTRINA Como igualmente ha tenido ocasión de señalar este Consejo (dictamen número 49/1999, de 2 de junio), se trata ésta de una causa de nulidad que aplica en la esfera jurídico-administrativa el principio general recogido en el artículo 1272 del Código civil, que prohíbe que puedan ser objeto de contrato las cosas o servicios imposibles, en cuanto de la imposibilidad del contenido deriva una imposibilidad del cumplimiento. La concurrencia de tal causa ha sido apreciada por la doctrina y la jurisprudencia con suma prudencia, a fin de evitar que se amplíe inadecuadamente el supuesto legal a cualquier acto desprovisto de fundamento jurídico para ser dictado. En este sentido el Tribunal Supremo en su Sentencia de 19 de mayo de 2000 (R.J. Aranzadi 4363), haciendo recopilación de la doctrina mantenida en otros fallos anteriores como los de 6 de noviembre de 1981 (R.J. Aranzadi 4755) o de 9 de mayo de 1985 (R.J. Aranzadi 2909), ha señalado lo siguiente: La imposibilidad a que se refiere la norma [...] debe ser, por ello, de carácter material o físico, ya que una imposibilidad de carácter jurídico equivaldría prácticamente a ilegalidad del acto, que suele comportar anulabilidad [...]; la imposibilidad debe ser, asimismo, originaria ya que una imposibilidad sobrevenida comportaría simple ineficacia del acto. Actos nulos por tener un contenido imposible son, por tanto, los que resultan inadecuados, en forma total y originaria, a la realidad física sobre la que recaen. Son también de contenido imposible los actos que encierran una contradicción interna en sus términos (imposibilidad lógica) por oponerse a leyes físicas inexorables o a lo que racionalmente se considera insuperable. La jurisprudencia ha equiparado en algunos casos la indeterminación, ambigüedad o ininteligibilidad del contenido del acto con la imposibilidad de éste [...]. El Consejo de Estado también ha interpretado tal causa de nulidad siguiendo la citada línea jurisprudencial y así ha señalado que el acto de contenido imposible es el que, por propio ser o realidad intrínseca, no puede llevarse a cabo siendo físicamente imposible, bien porque encierra contradicción interna o en sus términos, bien por oposición a las leyes físicas inexorables o a lo que racionalmente se considera insuperable (Dictamen 349/2002, de 4 de abril); y que en todo caso debe tratarse de una imposibilidad material, ideal o lógica, sin que tenga cabida la llamada imposibilidad legal, es decir, la pura o simple ilegalidad (Dictámenes 2340/2002 y 2341/2002, de 26 de septiembre). Atendiendo a la doctrina expuesta en la consideración precedente respecto del supuesto de nulidad invocado, puede extraerse, a modo de resumen, que los presupuestos jurídicos sobre los que opera tal causa de nulidad son los siguientes: 1º.- la imposibilidad a la que se refiere la norma debe ser de carácter material o físico, ya que la imposibilidad jurídica equivaldría a la ilegalidad del acto. 2º.- La mencionada imposibilidad debe ser originaria, puesto que si es sobrevenida comportaría simple ineficacia del acto. 3º.- Son también de contenido imposible los actos que encierran una contradicción interna en sus términos (imposibilidad lógica) por oponerse a leyes físicas inexorables o a lo que racionalmente se considera insuperable. Pues bien, trasladando tales presupuestos al acto cuya nulidad se pretende, no hemos sino de afirmar que el mismo no se encuentra incurso en la causa de nulidad invocada, ya que, además de ser un acto lógicamente posible, la imposibilidad que puede predicarse de

3 la adjudicación efectuada es de tipo jurídico, no físico o material, resultando la misma ilegal, ya que fue realizada incumpliendo la normativa agraria aplicable en relación con la denominada unidad mínima de cultivo. Sin embargo, aun cuando el acto objeto de la revisión no puede considerarse nulo por no resultar su contenido de carácter imposible, sí puede declararse su nulidad en cuanto a que la segregación efectuada mediante el acto de adjudicación es nula conforme a lo establecido en el artículo 24.2 de la Ley 19/1995, de 4 de julio, de Modernización de las Explotaciones Agrarias, que establece que serán nulos y no producirán efecto entre las partes ni con relación a tercero, los actos o negocios jurídicos, sean o no de origen voluntario, por cuya virtud se produzca la división de dichas fincas contraviniendo lo dispuesto en el apartado anterior, según el cual la división o segregación de una finca rústica sólo será válida cuando no dé lugar a parcelas de extensión inferior a la unidad mínima de cultivo. De esta forma, el acto cuya revisión de oficio se pretende, al tratarse de una adjudicación de parcela segregada que no tiene la extensión mínima exigible por la normativa agraria, sería nulo en virtud de este precepto, teniendo cabida tal supuesto en la causa de nulidad contenida en el artículo 62.1.g) de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre ( cualquier otro que se establezca expresamente en una disposición de rango legal ). En consecuencia, el Ayuntamiento instructor podrá declarar la nulidad del acto cuya revisión se pretende, no en virtud de la causa contenida en el apartado c) del repetido precepto legal, sino al amparo de su apartado g), previa audiencia al interesado respecto a esta nueva causa de nulidad, con el objeto de impedir cualquier tipo de indefensión en el procedimiento. Asimismo, se ha de poner de manifiesto que, en el caso de que el adjudicatario de la parcela no realice alegación en contra respecto a la revisión de oficio del acto de adjudicación, en base al apartado g) precitado, no será necesario que este Consejo emita nuevo dictamen. DICTAMEN Que no procede declarar la nulidad de pleno derecho del acuerdo de adjudicación de la parcela número 29 del catastro de rústica sita en Casa Nueva del Rincón del Moro a D. X, adoptado en fecha 25 de agosto de 2003 por el Pleno del Ayuntamiento de Hellín (Albacete), en virtud de la causa de nulidad contenida en el apartado c) del artículo 62.1 de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común, si bien puede declararse tal nulidad al amparo del apartado g) de este mismo precepto, previa audiencia al interesado y conforme a los razonamientos contenidos en la consideración IV del presente dictamen. 3

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