Docente - Preescolar Documentos pedagógicos Fundamentos básicos del aprendizaje inicial Fuente: SANTILLANA /Guía didáctica Santillana Inicial Fecha: Agosto 2001 Es importante tener en cuenta que, para que los aprendizajes de las niñas y los niños sean de calidad, deben realizarse dentro de un clima de armonía, respeto, buen trato y valoración de los demás. El eje principal de la Educación Inicial es el afecto, alrededor del cual se desarrolla el lenguaje como expresión del pensamiento lógico y creativo. Como eje transversal aparece la educación ambiental, que toma en cuenta la relación con el entorno natural y las relaciones inter e intrapersonales. El método por excelencia en la Educación Inicial es el juego, que se aplica en todas las actividades, pues permite el desarrollo de la sensibilidad por medio de la música, la plástica, el arte dramático y la expresión corporal. En las experiencias de aprendizaje siempre se deben tener presentes las siguientes premisas: Rutina - Realizar todas las actividades en un ambiente de respeto, buen trato y motivación. Esto contribuirá a superar los retos presentados por las actividades. - Realizar las actividades en un ambiente lúdico. - Trabajar con pintura, música y dramatización, entre otras actividades artísticas. La rutina es el ritmo que permite a la niña o al niño anticipar acontecimientos, adquirir conciencia temporal y relacionar tiempo-espacio y actividad-persona. Se aprovecha la rutina para el aprendizaje de hábitos y el refuerzo de las normas o reglas, que son importantes en el proceso de socialización. El primer momento de la rutina es antes de iniciar las actividades del día, en el que las niñas y los niños se agruparán en torno al juego o actividad libre que más les atraiga. Ello permitirá la integración, pues hará más relajado, divertido y emocionante el inicio de la jornada. La profesora o profesor aprovechará para saludar individualmente a cada alumna o alumno y charlará un rato con ella o él. 1
Es importante que los niños y niñas tengan presentes las responsabilidades que les corresponden de acuerdo al semanero planteado. Siempre, al final de cada semana, se debe evaluar el cumplimiento de las responsabilidades y se debe señalar quiénes se harán cargo de las responsabilidades de la semana que comienza. Todos los días, los niños y niñas deben tener en cuenta el trabajo que se realizará durante la jornada. Es importante mantenerles siempre al tanto de los talleres, rincones, zonas o centros. Se deben establecer tiempos fijos para el descanso y para el juego libre, así como utilizar un código o señal fija para la finalización de una actividad y para el comienzo de la siguiente; por ejemplo, una canción o un verso, una música fija para cada actividad, etc. Es conveniente trabajar en gran grupo o asamblea al final de la jornada para comentar los sucesos del día. Sugerencias metodológicas para el desarrollo del lenguaje oral y escrito Para que la niña y el niño logren el dominio de cada gesto gráfico, se propone trabajar en los siguientes niveles y con la secuencia dada: Actividades no gráficas: A nivel del cuerpo: la niña y el niño llegarán a interiorizar cada movimiento a través de su vivencia. Se puede trabajar con palos, aros, sogas y pañuelos, realizando movimientos amplios y utilizando el espacio total; luego se irá restringiendo el espacio. Por ejemplo: caminar libremente por toda la sala o el patio al son del pandero, luego caminar alrededor de los aros o dentro de ellos, caminar por un sendero formado por palos y sogas, entre otros elementos, caminar sobre un círculo o línea ondulada, quebrada, etc., trazada en el patio. Con diferentes elementos: pintura con las manos, armado, construcción a nivel tridimensional, rasgado, troceado, recorte con tijera, cosido, ensamblado, enhebrado, modelado, picado, juego con arena o agua, cultivo de plantas, elaboración de platos alimenticios en la cocina, limpieza de las mesas de izquierda a derecha, amarrado de los zapatos, puesta y sacada de la ropa. Actividades gráficas: En el plano vertical: se trabaja de forma más reducida que a nivel global, influyendo más directamente en la maduración de 2
la mano y a la vez de forma más amplia que en el plano horizontal. Se pueden utilizar pizarras, el piso y papeles de formatos grandes, medio pliego de papel, ayudando siempre a mantener la dirección izquierda-derecha. En el plano horizontal: se sugiere el trabajo en diferentes texturas con la mano y los dedos, a fin de que sientan los trazos, en el suelo y, luego, en la mesa. Cuando la alumna o el alumno necesite mayor precisión en este tipo de ejercicios, trabajará con crayón triangular, lápiz carpintero, lápiz de uso corriente y papel encima de la mesa, primero en papeles tamaño A3 y después en tamaño A4. Todos los niveles descritos anteriormente pueden ir acompañados de música que invite a las niñas y a los niños a realizar los distintos movimientos. Los estudiantes deben trabajar cada movimiento en los tres planos, empezando por los ejercicios más fáciles, y no deben pasar a otra dificultad superior hasta que dominen el primero. Es aconsejable que, antes de comenzar estos ejercicios, los estudiantes realicen una actividad de respiración y relajación muscular, para facilitar la precisión en los movimientos. La pequeña o el pequeño debe ir adquiriendo una posición adecuada en la mesa de trabajo: sentarse apoyando su espalda en el respaldo de la silla, con el tronco recto, los pies en el suelo y los brazos sobre la mesa. La educadora o el educador debe observar que el estudiante tome correctamente el lápiz entre los dedos índice, medio y pulgar. Al ejercitar los diferentes trazos, es indispensable centrar la atención del estudiante en: El punto de inicio y el punto de llegada. La direccionalidad de izquierda a derecha y arriba-abajo en cada línea. La continuidad del trazo, lo que implica no levantar el lápiz del papel. La fluidez y la precisión del movimiento, además de la precisión ejercida sobre el lápiz. El punto de inicio del círculo y el recorrido del movimiento al realizarlo, opuesto a los punteros del reloj. Enseñe a los estudiantes los recorridos exactos de cada letra al iniciar los grafismos simples, para evitar errores en la ligazón de grafemas al formar las palabras. 3
Lectura: trabaje en la lectura de imágenes, lectura predicativa, desarrollo del lenguaje oral e incremento del vocabulario. Estimule el desarrollo del lenguaje oral e incentive la conversación entre las niñas y los niños, así como con los adultos, y no corte la espontaneidad en su expresión. Realice preguntas abiertas, que permitan a la niña y al niño responder de forma fluida, mediante el uso de su pensamiento e imaginación. El método del análisis fónico de las palabras es muy importante dentro del proceso inicial de lectura. Es necesario que usted identifique la importancia del desarrollo de la habilidad de distinguir los sonidos de una palabra, cuya secuencia da la estructura de ésta. El análisis sonoro de las palabras no debe limitarse a la pronunciación enfatizada, sino también a la orientación que tiene el cambio de un sonido en la palabra, es decir, la comprensión de que, al cambiar un sonido de una palabra, puede cambiar su significación. Para esto es necesario lo siguiente: Pronunciar las palabras de forma tal que se destaque en ellas un sonido. Motivar a las niñas y a los niños a que identifiquen y pronuncien aisladamente los sonidos que se enfatizan. Determinar la extensión de las palabras por la cantidad de sonidos que las forman. Identificar el lugar que ocupan los sonidos en las palabras. Identificar los sonidos consecutivos que forman una palabra de 3 y 4 sonidos. Discriminar los sonidos de vocales y consonantes. Apreciar cómo los cambios en los sonidos y su orden en las palabras producen cambios en su significado. Relacionar las palabras por las distintas combinaciones de los sonidos que las forman. Además del desarrollo de las habilidades propias del lenguaje, se debe favorecer el desarrollo intelectual general; para esto, plantee a las niñas y a los niños actividades que les permitan resolver problemas en los que realicen comparaciones, establezcan igualdades y lleguen a generalizaciones, entre otras. Desarrollo del pensamiento 4
La construcción del pensamiento no es únicamente un problema lógico; hay que tener presente este aspecto. El sujeto se acerca al conocimiento como persona que tiene una historia, que tiene afectos y sentimientos. Enfrentarse a una situación problematizadora no solo se resuelve con procesos lógicos, también despierta deseos, sentimientos, experiencias previas. En el proceso del conocimiento no está la persona aislada, sino que participa todo su entorno. La niña y el niño responden de acuerdo con su historia personal. Estos factores influyen en la movilización o inhibición del pensamiento y voluntad. Recursos didácticos Las niñas y los niños deben estar en contacto con materiales que puedan ser manipulados y, por medio de ellos, acceder al desarrollo de sensaciones, percepciones, a la formación de nociones, conceptos y a la expresión de éstos. Sugerencias en cuanto a la utilización del material Utilizar material impreso o no, dependiendo del objetivo y de la actividad a realizarse, sea ésta dirigida, semi-dirigida o libre. No exponer todo el material simultáneamente para cada actividad, sino presentarlo de forma sucesiva, a fin de que los pequeños descubran las características y posibilidades de utilización de cada uno. Este aspecto se debe tomar en cuenta como un elemento metodológico para la educación de la atención. Retirar del alcance de las niñas y los niños los materiales que puedan ser peligrosos o innecesarios. Organizar y disponer los materiales de forma que cada uno tenga su sitio específico y debidamente señalado, con el fin de que los pequeños adquieran una progresiva autonomía y asuman pequeñas responsabilidades. Revisar periódicamente el material didáctico, con el fin de retirar o reparar los juegos que estén deteriorados. Organización de ambientes, rincones, talleres y materiales Ubicar un espacio donde las niñas y los niños coloquen sus pertenencias (loncheras, sacos, etc.); cada espacio con el nombre del estudiante que corresponde. Determinar un espacio para que las niñas y los niños coloquen sus carpetas de trabajo. Contar con un espacio donde las niñas y los niños puedan exponer sus trabajos. Para esto se sugiere extender cordeles con pinzas de ropa o contar con carteleras específicas para este objetivo. 5