Alimentos y nutrición al final de la vida Food & Nutrition at the End of Life Los alimentos tienen un significado especial en nuestras vidas. Nos proporcionan bienestar físico y emocional. Preparar y compartir los alimentos transmite intensos mensajes de amor, cuidado y amistad. Cuando alguien con una enfermedad grave no come, no sólo se pierden los momentos de compartir y comer juntos, sino que es natural que los miembros de la familia tengan preguntas y preocupaciones. Es común que los miembros de la familia se esfuercen mucho para encontrar y preparar alimentos llamativos, sólo para que al final el ser querido coma un poco y diga que está lleno o que la comida no sabe bien. Por un lado los miembros de la familia pueden sentirse frustrados, desamparados y ansiosos por lo que pueda suceder si la persona que está enferma no come. Por otra parte es posible que los pacientes que no tienen ningún deseo de comer no quieran que los miembros de la familia los presionen. Cuando esto sucede es útil recordar que la pérdida del apetito es algo normal en el proceso de una enfermedad. 1
Cambios en el apetito Changes in Appetite Los cambios del apetito son comunes en las personas con enfermedades que reducen el lapso de la vida. Algunas personas pierden el interés en comer. Otros experimentan cambios en el paladar, y las comidas favoritas dejan de saberles bien. En ocasiones las comidas no saben a nada o tienen un sabor metálico. Las personas con una enfermedad grave pueden sentirse llenas o no sentirles el gusto a los alimentos por muchas razones: A medida que las funciones del cuerpo disminuyen, éste le reenvía señales al cerebro informándole que la comida y los líquidos ya no son necesarios. Los pacientes pueden tener náuseas debido al movimiento, los medicamentos o las obstrucciones causadas por tumores. Las células cancerosas pueden desprender sustancias químicas que afectan el centro del cerebro que controla el apetito. Es común que los pacientes pierdan el apetito a medida que su estado se deteriora. Puede que tomen sólo algunos sorbos de líquidos o que coman pequeñas porciones de alimentos que se traguen fácilmente, o puede que no coman nada. Se trata de un proceso natural. A medida que el cuerpo comienza a apagarse y las necesidades energéticas disminuyen, el propio organismo produce sustancias que suprimen el apetito y cualquier otra sensación que un individuo sano pudiera experimentar, tal como el hambre, por ejemplo. A medida que disminuye la ingestión de líquidos y alimentos es raro que los pacientes digan que tienen hambre. A medida que la muerte se acerca el cuerpo tiene más dificultad en administrar los líquidos. La supresión del apetito parece ser la defensa natural del cuerpo contra la ingestión de demasiado líquido. Sin embargo, los pacientes pueden sentir malestar a causa de resequedad en la boca. El cuidado oral frecuente con compresas bucales es útil para controlar ese malestar. Otras cremas hidratantes para los labios también ofrecen una sensación de bienestar. 2
Qué puede hacer la familia para ayudar? What Can Family do to Help? Recuerde que la comodidad y el cuidado son las cosas más importantes que puede ofrecer. Deje que el paciente decida cuándo quiere comer y beber y con qué frecuencia. Decirle al paciente que no hay problemas si dice no cuando le ofrecen alimentos y liquidos. No incite ni presione excesivamente al paciente para que coma. Comer cuando no se tiene hambre puede provocar vómitos, náusea, un aumento del edema o que el paciente se atore o ahogue. Ofrezca una amplia selección de alimentos y bebidas, pero no presione ni fuerce al paciente a comerlos. Confíe en el paciente, que está guiándose por las señales que le da su propio cuerpo. Ofrézcale comodidad al paciente manteniendo su boca y sus labios húmedos. Descubra otras maneras de demostrar amor, compasión y preocupación. Dar un masaje puede ser reconfortante. Jugar cartas o leer en voz alta puede ser una actividad agradable y socializadora. Entienda que la nutrición intravenosa o a través de tubos no es efectiva para personas con una enfermedad en estado avanzado. Estas medidas pueden provocar mucha incomodidad en el paciente. Al contrario de la noción popular, la deshidratación no es dolorosa al final de la vida; es la respuesta natural del cuerpo durante el proceso de la muerte. El paciente está menos consciente del dolor o la incomodidad cuando esto pasa. 3
Qué puede hacer la familia para ayudar? Additional Suggestions Hable con una enfermera, un nutricionista o un médico para plantearles sus preguntas y preocupaciones. Ofrézcale al paciente medicamentos para la náusea o el dolor antes de comer, si es apropiado. Permítale al paciente comer en un ambiente agradable, preferiblemente en la mesa o en una posición que le permita estar sentado. Pregúntele al paciente lo que sabe mejor y respete sus deseos. Para evitar que el paciente se atore o se ahogue, ofrézcale comida y bebida sólo cuando esté lo suficientemente despierto y alerta como para comer y tragar. Agradecimientos especiales a Donna L. Weihofen, R.D., M.S., y a Maribeth Mohr, R.D., por su ayuda en la preparación de esta información. 4