Luis Vigil Mare Crudele Del 2 de octubre al 14 de noviembre 2009 GUILLERMINA CAICOYA GALERIA Asturias, 12. E-33004 Oviedo. Tel. +34 985 242 503. www.galeriaguillerminacaicoya.com
Mare Crudele, 2009 Óleo / Tablero 240 x 120 cm
Mare crudele, de Luis Vigil Mare crudele, la última entrega pictórica de Luis Vigil, es consecuencia de un intenso y continuado trabajo a lo largo de 2009, sobre todo en los últimos meses, en Barcelona y Oviedo. Iniciado en la capital catalana, muestra un sustrato profundamente mediterráneo. Las figuras femeninas que aparecen, sean las Sirenas o esa moderna Anfitrite, son ecos de aquellas personificaciones femeninas del poder, como Circe, que configuraron el imaginario del marinero griego, a veces en forma de monstruos, como Scyla; hacen pensar en Lighea, un cuento de Lampedusa en el que un helenista se enamoraba de una sirena con sonrisa de koré arcaica, por la que se arrojaba al mar. En todos estos personajes la muerte se funde con el eros, aun en el sentido de disolución de la psiquis en el inconsciente, simbolizado en la mujer y en las aguas. La resolución de estas obras en gruesos empastes y los contrastes de tonos más oscuros sobre los que destellan otros más claros, como joyas, hacen pensar en los fondos submarinos de Anglada-Camarasa, cuya riqueza sensorial aprecia mucho Luis Vigil. Pero este es sobre todo un pintor de línea oscura, y por eso a quien de verdad recuerda es a Gutiérrez Solana, pintor cuya talla se agiganta con los años. En las obras de Luis Vigil se ven también esos ambientes densos y estáticos donde las figuras parecen mineralizadas mientras que, por el contrario, los objetos tienen un intenso fulgor de vida. Pero las figuras están, desde luego, ahí, con una presencia permanente que no puede obviarse. Muy pocos artistas de hoy tienen la capacidad de concentrar en sus personajes una carga psíquica tan pesada. Cada uno de ellos parece marcado por un destino si no cruel, como refiere el título de estas obras, sí muy definido, y no poco angustioso. Bien es cierto que la puesta en escena exagera a veces, con toda premeditación, su lado burlesco, de manera que algunos parecen monstruos de feria o personajes de vodevil barato. Pero, como ocurre en Solana, esto en lugar de hacernos reír, nos entristece aún más. He aquí un pintor que congrega un mundo de imágenes muy personales, paradójicamente tomadas, muchas de ellas, de fotografías, revistas y publicaciones. No lo parece, a la vista de la intensidad vital y atormentada que revelan. En su trabajo acumulativo, tenaz y dificultoso, ajeno a cualquier orientación artística externa, el pintor ha creado desde hace algo más de dos décadas, un imaginario cuya potencia figurativa se ve inmediatamente
cuando se reúnen, cosa nada fácil, varias obras suyas. Al recordar las que ha pintado a lo largo de ese tiempo, en un trabajo a veces febril, con frecuencia discontinuo, asombra la coherencia profunda de esas imágenes y su fertilidad, que hace pensar en las poéticas del barroco, a las que alguna etapa suya ha estado muy ligada, como las obras que reunió en 1997 en Antonio Machón, su galerista más asiduo, pintadas durante una decisiva estancia en la Academia Española en Roma. Es, en esto, un pintor profundamente mediterráneo, entre español y napolitano, muy siglo XVII, como Solana. Pero también nos hace pensar otras veces, y lo refuerza la condición excéntrica de su obra respecto a las tendencias dominantes, en la pintura británica, en artistas como Stanley Spencer. Algunas figuras recuerdan por su agresiva expresividad, y por su realismo casi sucio, propio de épocas de depresión, las del norteamericano Reginald Marsh. Son pintores, todos ellos, singulares e irreductibles, como lo es también Lucien Freud, artistas cuya potencia creadora y expresiva les aparta de las influencias de sus contemporáneos, y les hace ser siempre fieles a su estilo. En Luis Vigil vemos algo que hoy resulta quizá extemporáneo, pero que, sin duda, acabará por apreciarse, una personalidad artística consistente y original. Y algo más raro aún, un mundo propio. Muchos de estos cuadros los ha compuesto y pintado el artista como elementos de un políptico de grandes dimensiones, pero son también autónomos. Además, hay otras obras de formato más reducido, consecuencia de una excursión iconográfica por los motivos de marineros, que introducen por su tratamiento enfriado del color, por sus composiciones organizadas según ritmos muy medidos, algunas novedades en su universo pictórico. Recuerdan en su ambiente y en la procedencia de algunas imágenes, visiones propias de los años cincuenta, una etapa de nuestra reciente historia que tiene mucho que ver con la necesidad de olvido y que, evocada desde hoy, tiene un cierto aire de limbo. La consecuencia de esa impremeditada elección es una atmósfera pictórica más silenciosa, menos exaltada, a través de la que el artista continúa su búsqueda. Javier Barón
Mare Crudele, 2009 Óleo / Tablero 120 x 120 cm
Mare Crudele, 2009 Óleo / Tablero 120 x 120 cm
Luis Vigil Oviedo 1963 EXPOSICIONES INDIVIDUALES 2009 Mare Crudele, Galería Guillermina Caicoya, Oviedo. 2007 Galería Depósito 14, Madrid. 2000 Galería Masha Prieto, Madrid. 1998 Centro de las Artes Ciudad de Getafe, Madrid. Galería La Escalera, Cuenca. 1997 Galería Antonio Machón, Madrid. 1996 Galería Antonio Machón, Madrid. 1995 Galería Antonio Machón, Madrid. 1993 La Sacrée Peur, Galería El Caballo de Troya, Madrid. 1987 Galería Antonio Machón, Madrid. EXPOSICIONES COLECTIVAS 2009 Galería Gema Llamazares, Gijón. 1999 Figuraciones del Norte, Caja Madrid, Madrid. Icónicos, Facultad de Bellas Artes, Madrid. 1998 Canción de las Figuras, Antología de la Pintura entre Dos Siglos, Sala de Exposiciones del Senado, Madrid / Instituto Cervantes, Roma / Escuela de Bellas Artes, Paris. BECAS 1995 Beca de Pintura de la Academia de España en Roma. PINTURAS MURALES 1998 Teatro García Lorca, Getafe (Madrid). 2006 Teatro Don Quijote, Consuegra (Toledo).
Edita Galería Guillermina Caicoya Asturias, 12. E-33004 Oviedo Tel. +34 985 242 503 www.galeriaguillerminacaicoya.com galeria@guillerminacaicoya.com Texto Javier Barón Fotografías Carlos Casariego Impresión Imprenta Mercantil Asturias, S. A. Copyright de la edición: Galería Guillermina Caicoya de la obra: Luis Vigil del texto: Javier Barón de las fotografías: Carlos Casariego Depósito Legal: As.-000/09