La revolución narrativa del siglo XX La técnica es el manejo conciente de los recursos artísticos. En el arte narrativo, que se deriva de la

Transcripción

1 La revolución narrativa del siglo XX La técnica es el manejo conciente de los recursos artísticos. En el arte narrativo, que se deriva de la situación del narrar ; hay un acontecimiento que se narra, un lector a quien se narra y un narrador que sirve de intermediario entre ambos. La tríada formada por el narrador, la materia narrada y el lector, es lo característico de la actividad narrativa. En todas las formas narrativas, lo primero es el narrador, cuya actitud es variable. En el siglo XIX nos enfrentamos al narrador omnisciente que conoce todos los hechos ocurridos y está facultado para penetrar en la conciencia de sus criaturas imaginarias cuando así lo cree necesario, ejemplo de este tipo de narrador encontramos en las novelas de Balzac y en los relatos de Maupassant. En el siglo XX, en cambio, el narrador se retira cada vez más, llegando al grado extremo en aquellas novelas que presentan como técnica predominante el monólogo interior o torrente del pensamiento, donde el lector asiste directamente al fluir del inconsciente del personaje, sin la intermediación del narrador, es el caso de la novela Ulyses de Joyce, donde al final aparece el pensamiento del personaje de Molly Bloom en forma de un monólogo interior. El novelista, según opinión de Mario Vargas Llosa, es un creador de mundos y con la primera palabra que escribe ya crea un mundo; los elementos estructurales creadores de este mundo son tres; acontecimiento, espacio y personajes. Veremos a continuación cada uno de estos tres elementos y cómo su tratamiento cambió radicalmente de la novela decimonónica a la narrativa del siglo XX. El acontecimiento (argumento) es lo que sucede en la narración y puede aparecer de diversas maneras. En las novelas denominadas de acontecimiento, éste ocupa el primer plano, es el acontecer mismo el que establece sólidamente un principio, un medio, y un fin. Los ejemplos más claros de las novelas de acontecimiento son las novelas policíacas y las novelas históricas, donde el lector se mantiene en constante excitación por la curiosidad de saber lo que sigue, de conocer lo que sucederá. El espacio no es solamente el paisaje sino en general el ámbito en que se mueven los personajes y en que tiene lugar el acontecimiento. La representación de la sociedad o la época contemporánea al autor (tan frecuente en la novela del siglo XIX) constituye un espacio. Si Balzac agrupó sus novelas en series: estudios de la vida privada, estudios de la vida de Provincia, estudios de la vida parisién, etc. y les dio, luego, el título global de Comedia humana, es porque deseaba abarcar el mundo como espacio. 1

2 Los personajes. Su importancia y posición es variable de acuerdo al tipo de narración; así, en la narración larga, el personaje es un elemento estructural entre otros; en las formas cortas, en cambio, es el personaje quien parece determinar la estructura. El personaje literario principal se denomina protagonista. El tratamiento de los personajes ha ido evolucionando a lo largo del tiempo. Lo que marca el hito fundamental en este aspecto es la aparición de la novela de Cervantes El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha, donde se presenta el análisis psicológico de caracteres. Características de la novela decimonónica (del siglo XIX) 1) A diferencia de lo que sucede en poesía, el lenguaje no es considerado un valor creativo en sí mismo sino un medio destinado a describir el ámbito de los sucesos, las acciones realizadas y los caracteres que la llevan a cabo. El novelista trata de emplear un lenguaje utilitario, de significación concreta y unívoca (sentido claro y único), apto para reproducir la realidad. 2) El ámbito de los sucesos expuestos es aproximadamente contemporáneo a la composición de la novela y constituye un fondo histórico real para los acontecimientos ficticios pero verosímiles (similares a la verdad) en que se hallan comprometidos los personajes novelescos. 3) Ese ámbito proporciona, además, un marco social de características propias, con pautas de estratificación y movilidad claramente definidas. El centro de interés narrativo está dado por las acciones que cumple el protagonista para ubicarse favorablemente en ese marco social, en un intento de consolidar su situación o mejorarla. En esta búsqueda de prosperidad, que determina el triunfo o el fracaso individual, el protagonista ambiciona prestigio y fortuna, y a menudo el matrimonio constituye una vía de acceso para ello. 4) Las características de las acciones que lleva adelante el protagonista son indicativas de los valores que predominan en la sociedad en que éstas se llevan a cabo, en la cual imperan los criterios individualistas y competitivos de la mentalidad burguesa. 5) En el curso de las peripecias que vive el protagonista, el acento pude recaer en la pintura social o encaminarse hacia la minuciosa exploración psicológica del comportamiento. 6) El objetivo principal de la novela apunta hacia el examen de conducta en circunstancias sociales específicas, propósito que generalmente acarrea un enjuiciamiento moral del individuo y de la comunidad. 2

3 7) La voz narrativa tiende a conducirse como un narrador omnisciente. 8) En general, el cuadro que se ofrece nos muestra una organización social estable y por consiguiente normativa, por más que resulte perfectible mediante reformas parciales. Características de la novela del siglo XX 1) Se ha desvanecido la columna vertebral de la novela clásica en la que se exponían los esfuerzos de un individuo para integrarse ventajosamente en las normas impuestas por una organización social de apariencia estable. Por el contrario, lo que en ciertas ocasiones sobresale en la narrativa del siglo XX es el cuestionamiento de la estructura social misma y de su estabilidad, al punto de que el novelista traslada a un primer plano lo que tradicionalmente solo cumplía la función de fondo histórico. 2) En consecuencia, la ficción por momentos parece fundirse con la crónica de grandes acontecimientos o con la indagación sistemática de la sociedad, de modo que los personajes pierden importancia individual y se convierten en arquetipos (modelos) de la conducta contemporánea. 3) El personaje se ha convertido en el antihéroe, pierde su importancia individual, es el hombre gris, anónimo, cotidiano, que deambula por el mundo en búsqueda de claves vitales. Muchas veces el protagonista de una narración ni siquiera es un ser humano o ha dejado de serlo transformándose en un insecto como en La metamorfosis de Franz Kafka. 4) A veces, ante la incertidumbre que ha conmovido al sistema social, la novela ha tratado de convertirse en vehículo para interpretar el enigma de la existencia humana. 5) En ciertas ocasiones, la literatura de ficción se ha visto penetrada por elementos simbólicos, alegóricos o filosóficos. 6) Por momentos, la novela inclusive se ha cuestionado a sí misma, mediante la introducción de un novelista en la trama ficticia, cuya función es indagar el proceso de composición. 7) A menudo el hilo narrativo ha quedado identificado con el incesante ir y venir de un personaje en su búsqueda de claves vitales, hecho que configura un ámbito indeterminado. 8) Con sugestiva insistencia el autor ha excedido los límites de la novela autobiográfica tradicional, en la que se atribuyen las experiencias a un personaje más o menos ficticio, y se ha puesto a sí mismo en la narración, según el procedimiento de Marcel Proust, por ejemplo en su obra En busca del tiempo perdido. 3

4 9) Por lo general ha desaparecido el tipo de relato cuya tensión e intriga se concentraban en el desenlace feliz o infortunado que pudieran tener las ambiciones del protagonista, e inclusive, muchas veces, se ha evaporado el hilo anecdótico del que solía estar pendiente el lector de la novela clásica; en cambio ciertas obras han distorsionado o rechazado el encadenamiento lógico de sucesos que era habitual en la narrativa del siglo XIX. 10) El tiempo ya no es lineal, como en la narrativa del siglo XIX; es común asistir a la denominada preposteración (los saltos en el tiempo que se producen en una narración) que surge como consecuencia de la influencia del cine sobre la literatura. La misma técnica en el cine recibe el nombre de flash back. Algunos de los procedimientos narrativos del siglo XX El cine fue una de las artes que más influyó en la técnicas narrativas del siglo XX, de él procede el montaje que es la sucesión alternada de secuencias. Un ejemplo que ilustra la técnica de montaje es la siguiente simple historia cinematográfica: un tren avanza, una muchacha atada sobre los rieles, un muchachito corre a salvarla, llega antes que el tren por segundos, la desata, se abrazan y fin. Esquematizada la historia por el montaje quedaría de la siguiente manera en una sucesión de cuadros que se alterna: (tren avanzando y muchacha atada), /-/-/-/-/-/-/ (muchacho que se acerca) el montaje de los dos cuadros en la historia sería la alternancia: 0-/-0-/-0-/-0-/-0 fin. También encontramos otro tipo de montaje de historias diferentes pero interrelacionadas. 2) Tramas paralelas un ejemplo de esta técnica la vemos en Las palmeras salvajes, de William Faulkner, se compone de veinte capítulos, los impares se titulan todos Las palmeras salvajes y los pares El viejo ; ambas historias no se relacionan. 3) Cajas chinas o la historia dentro de la historia esta técnica consiste en presentar dentro de una historia narrada la presencia de otra narración que a veces puede relacionarse con la primera a través de los personajes por ejemplo, también se suele denominar a este procedimiento muñecas rusas, por las características de éstas que tienen la particularidad de contener dentro de una mayor, otra muñeca más pequeña, a su vez esta última contiene otra y así sucesivamente. En la narrativa contemporánea se puede mencionar como ejemplo el cuento de Julio Cortázar Continuidad de los parques donde tenemos tres ficciones una dentro de la otra: la primera ficción el cuento que escribió Cortázar y que leemos nosotros, una segunda ficción el personaje del cuento que lee una novela y una tercera ficción, según nos situemos desde nuestra perspectiva, o simple ficción desde el personaje-lector, compuesta por los amantes, personajes del mundo de la novela que éste lee. 4

5 4) Salto cualitativo consiste en el pasaje de una realidad natural a otra extraordinaria sin explicación previa del narrador o los personajes, ese salto puede ser gradual o abrupto. Como ejemplo del primero, en el cuento de Cortázar Continuidad de los parques, el personaje, un hombre de condición acomodada se sienta a terminar de leer una novela y los personajes que él recrea con la lectura cobran vida y uno de ellos, el amante, ingresa al mundo del personaje-lector, se pasa de este modo de lo real a lo excepcional extraordinario, el encuentro de realidades separadas y diferentes, un ser novelesco sale de las páginas de un libro que lee un lector para intentar darle muerte. Un ejemplo del salto cualitativo abrupto, lo encontramos en La metamorfosis de Kafka, donde el pasaje de una realidad a otra no es gradual ni tampoco se explica: Al despertar Gregorio Samsa una mañana, tras un sueño intranquilo, se encontró en su cama convertido en un monstruoso insecto. 5) Vasos comunicantes. Este procedimiento consiste en asociar, dentro de una misma unidad narrativa, capítulos, secuencias, personajes o acciones que acontecen en tiempos, o están en espacios diferentes. Ejemplo de esta técnica es Madame Bovary de Flaubert, en el episodio de los premios agrarios en el cual se intercala el discurso del orador y el diálogo de Emma con Rodolfo que se encuentran en un espacio diferente. 6) Multiplicidad de puntos de vista o representación pluripersonal. Para explicar este procedimiento hay que recordar que la figura del narrador es un ente de ficción que el autor crea para narrar los acontecimientos. Este narrador puede adoptar diversas posturas para narrar. Puede estar fuera del mundo narrado y ser narrador exterior o extradiegético, o puede ser un personaje. El narrador puede saber más sobre los acontecimientos que cuenta, menos o igual que los personajes, lo importante es su punto de vista para el lector. Este es uno de los cambios sustanciales de la narrativa contemporánea, donde a veces en una narración tenemos diversos narradores, y por lo tanto diversos puntos de vista sobre los hechos, sin que haya una verdad última, característica ésta que requiere de un lector participativo pues, a partir de estas distintas visiones, sin que una predomine sobre la otra, debe reconstruir los hechos. 7) Monólogo interior es uno de los procedimientos narrativos más representativo de la narrativa del siglo XX. Tiene su origen en la técnica presentada por James del flujo del inconsciente o el torrente del pensamiento, presentado como un fluir sin control de la conciencia; se trata de presentar el pensamiento en estado puro, donde se muestran asociaciones caóticas, sin un orden lógico. El ejemplo más notorio de este procedimiento lo encontramos en la novela de J. Joyce Ulyses, sobre el final de la misma, en el famoso 5

6 monólogo de Molly donde asistimos a lo que piensa el personaje sin un orden establecido, vemos directamente todo lo que pasa por su cabeza en ese momento. Este tipo de monólogo contrasta con el monólogo del teatro tradicional que se puede definir como un discurso pensado que sigue el desarrollo de un razonamiento lógico. Otra característica del monólogo interior es que en el mismo se producen saltos en el tiempo y en el espacio, al darse la simultaneidad en el pensamiento. 6