El agua y la hidratación

Transcripción

1 El agua y la hidratación Por: Ing. Jorge Bolaños Quirós En muchos lugares del planeta el agua natural puede estar contaminada, ya sea con contaminantes artificiales, como los diversos pesticidas utilizados en los campos, o por la actividad humana, por la enorme cantidad y mal manejo de los desechos fisiológicos (se cree que la población humana produce el equivalente al peso de tres portaaviones de desechos fecales por día), también por la enorme cantidad de basura que producimos (genera gran cantidad de fluidos contaminantes), y también por los desechos animales. La ingesta de agua contaminada puede alterar nuestro organismo contrayendo enfermedades tales como tifoidea, cólera, hepatitis B, o disentería, también de enfermedades transmitidas por roedores como la histoplasmosis, además de otros trastornos generados por parásitos que podemos contraer al beberla. El contraer un problema de salud estando de gira no es conveniente, por diversas razones: lejanía de centros de salud, grado de dificultad del terreno para auxiliar al paciente, severidad del caso; son factores que pueden dar con la finalización de un evento planeado con mucho tiempo y traer consecuencias muy serias a un individuo. Por lo tanto es fundamental desconfiar siempre, purificar y potabilizar el agua que tomamos. Para eso existen diversas maneras de hacerlo. De donde juntar agua. Lo primero que hay que observar para suponer que el agua es potable, es que ésta corra o sea que no esté estancada. 1. Es preferible el agua de un arroyo que desemboca en un lago y no la del mismo lago, y mejor aun es el agua de los manantiales que nacen entre las rocas de la montaña que el agua de los arroyos que luego forman. En conclusión ir a buscar agua río arriba a los manantiales o a las nacientes de los arroyos siempre es la mejor opción. 2. Si estamos en una zona tropical o subtropical una opción es buscar señales de vida, como peces o camarones; estos últimos particularmente son muy susceptibles a los contaminantes y nos dan una buena idea de la calidad del agua. Pero se debe tener cuidado también, con altas poblaciones en los arroyos, ya que pueden generar una alta descarga fecal y contaminarla. 3. Una observación fiable, es que tan cristalina se observa; sino arrastra lodo, restos vegetales u animales (tan pequeños que no son reconocibles); también si estamos en una zona de altura, donde predominan los bosques de roble (como en Costa Rica), las aguas pueden presentar un color bronce, debido a la alta concentración de taninos en sus raíces; aún así esta agua son seguras. 4. Después de un fuerte aguacero, es recomendable no recoger agua de los arroyos o ríos, ya que el lavado del suelo, puede arrastrar gran cantidad de sedimento, con altas concentraciones de bacterias o parásitos.

2 5. Siempre que acampemos en un lugar donde dependemos del agua natural, es bueno reconocer la fuente de agua, ya sea caminando esta, arroyo arriba, en busca de un posible contaminante. Como un animal muerto que haya quedado tendido ahí; o este sea el bebedero de otros animales, que generalmente defequen u orinen cerca. 6. De grupos de aves o murciélagos que aniden sobre el arroyo. 7. Aprovechar la humedad del aire (en forma de rocío por la mañana). La frescura y la humedad nocturna provocan la condensación del agua sobre las plantas. Gracias a un sistema de bolsas de plástico semienterradas por encima de un hoyo, es posible conseguir agua de condensación potable. 8. En zonas desérticas puede ser más difícil aún. Escarbar en lechos secos de ríos o arroyos puede dar buenos resultados. Los cúmulos de vegetación en un determinado lugar son indicativos de existencia de agua. En los terrenos calcáreos podemos buscar en el interior de las grutas. 9. Los animales también necesitan beber; observar sus desplazamientos a primera hora de la mañana o última de la tarde puede ser un indicativo de dónde se encuentra el agua. Determinadas plantas, que varían según la zona geográfica, sólo crecen donde hay agua. 10. En caso de que no encontremos ninguna fuente de agua podemos aprovechar la condensación que se produce improvisando un destilador. Necesitaremos un plástico de 2 x 2 m. y un cubo u otro recipiente para recoger el agua. Con este sistema se dice que podemos obtener entre 0,5 y 1 litro de agua al día. Hay que cavar un hoyo en cuyo fondo colocaremos un recipiente que recibirá el agua de la condensación que se produce en las paredes del plástico con que cubrimos este hoyo. Una piedra en el centro del plástico conducirá las gotas hasta el cubo. El destilador será más efectivo si introducimos plantas en el agujero para aprovechar su humedad. 11. Podemos aprovechar el rocío de la noche dejando ropa de algodón, que absorba bastante agua al intemperie, también aprovechando algún plástico o lata que destile agua a un recipiente (como un vaso, un tarro, una bota), o simplemente arrastrando la ropa o una esponja, temprano al amanecer para recoger el rocío de la noche anterior. Lo mismo ocurre si hay neblina o vapor de agua en el ambiente.

3 Consejo de supervivencia Es conveniente llevar siempre, algún tipo de purificador en nuestro equipo o en nuestro kit de supervivencia, ya que son un sistema muy rápido, confiable y fácil de utilizar. Que cantidad de agua debo portar: Lo ideal en cualquier excursión corta es llevar desde el inicio la dosis suficiente de agua a fin de no tener que recurrir a juntarla. La cantidad de agua que necesita ingerir el cuerpo humano depende de la temperatura y humedad del ambiente y de la actividad física que hagamos. Generalmente necesita como mínimo 2 litros de agua diarios y en una zona desértica con más calor y sequía necesitará alrededor de 10 litros de agua por día. La esperanza de vida humana sin agua es de 2 días en el desierto y 8 o 10 días en climas frescos. Purificar el agua: En casi todos los casos antes de potabilizar el agua habrá que purificarla para quitarle la turbiedad o pequeñas impurezas que pueda tener. El método más práctico para esto es dejarla reposando el mayor tiempo posible en un recipiente para que las impurezas se decanten o floten. Luego, con mucho cuidado de no revolver el agua, con un tubo flexible o manguera trasvasarla a otro recipiente utilizando la técnica de sifón. Otra forma de purificar el agua es filtrarla usando varias capas de tejidos o arena limpia. Sino se cuenta con el sifón se decanta con mucho cuidado dejando siempre un buen sobrante con los contaminantes. Diferencia entre: Potabilizar: El agua, que se pueda beber sin peligro para la salud. Aceptable, bueno. Purificar: Eliminar agentes extraños; limpiar de suciedad e impurezas.

4 Formas de potabilizar el agua: Ebullición del agua: Se recomienda hervir el agua durante 5 a 10 minutos como mínimo (lo más recomendable son 20 minutos). Cuando el agua alcanza su punto de ebullición (100º C) todas las bacterias mueren o se inactivan. Aún así, la hepatitis B, resiste la ebullición. Se puede destilar la orina o el agua de mar, obtendremos agua pura sin peligro de bacterias, concentración de sales o minerales peligrosos para la salud Este método no evita la presencia de productos tóxicos. Con el fin de evitar los depósitos y las partículas en suspensión, podemos tratar la presencia de productos tóxicos. Con el fin de evitar los depósitos y las partículas en suspensión, podemos tratar de decantar el agua dejándola reposar y recuperando el volumen más limpio, desechando el volumen más sucio (que se depositará al fondo o / y en la superficie). El agua que se hierve y cuyo vapor puede recuperarse por condensación es un medio para conseguir agua pura (sin productos tóxicos, sin bacterias o virus, sin depósitos o partículas). En la práctica, fuera del laboratorio, el resultado no es seguro. Potabilizar agua con cloro: El cloro es uno de los desinfectantes más efectivos. Es muy eficaz contra las bacterias pero no tiene buenos resultados contra la erradicación de los virus que transitan por el agua sin potabilizar. Por eso se recomienda filtrar el agua antes de clorarla y después de la aplicación del cloro debe mezclarse bien y dejarse reposar 30 minutos para que el cloro entre en contacto con los microorganismos. Además el gas de cloro es toxico, por lo que se debe dejar el recipiente abierto para que escapen los gases. Potabilizar agua con yodo: Este desinfectante es muy eficaz para eliminar las bacterias, los virus y otros microorganismos que podemos encontrar en el agua. En general de 2 a 10 gotas por litro puede ser suficiente para purificar el agua clara. Aquí también, para aumentar la efectividad, es necesario filtrar el agua antes de aplicar el yodo, mezclarse y dejarse reposar durante 15 a 20 minutos. La coloración tarda un poco en desaparecer. Potabilizar agua con Pastillas potabilizadoras: Es el método más práctico y efectivo 100%. Estas liberan iones de plata que acaban con los gérmenes, previenen de nuevas infecciones. Estos compuestos deben aplicarse en cantidades exactas y respetando el reposo necesario antes de consumir el agua. Se venden en cajas con un número variable de pastillas según sea cada pastilla para

5 purificar 1, 5 ó 20 litros de agua. Se recomienda leer las instrucciones de uso en el envase y fecha de vencimiento Filtrado del agua En ocasiones, la única agua que podremos conseguir será la que se encuentre estancada en charcos, sucia por el barro. Antes de beberla, y si olvidarse del aspecto de la purificación, debemos clarificarla para eliminar las partículas en suspensión. La manera más sencilla es dejarla reposar varias horas en un recipiente, y después, con un tubo de plástico o el tallo hueco y flexible de una planta traspasarla a otro recipiente situado en una posición más baja. También se puede filtrar usando varias capas de tejidos o con arena limpia, ayudándonos de un filtro improvisado con un pedazo de caña de bambú, cuyo extremo, agujereado, taponaremos con unas briznas de hierba. Fuentes consultadas: 1. Bruno Urgelles Latorre. Purificar el agua en la montaña. Andinoman.blogspot.com 2. Campamentismo. Beber agua en la naturaleza. Potabilizar el agua. Consejos. Mundotrekking.com.ar 3. Diccionario Wikipedia.org. El agua. Supervivencia.