Establecimiento de cortinas rompevientos en el escenario agrario cubano

Transcripción

1 Establecimiento de cortinas rompevientos en el escenario agrario cubano Arsenio Renda Sayoux Efraín Calzadilla Zaldívar Marta Marina Jiménez Águila Yolanis Rodríguez Gil

2 2014, Arsenio Renda Sayoux Efraín Calzadilla Zaldívar Marta Marina Jiménez Águila Yolanis Rodríguez Gil 2014, Instituto de Investigaciones Agro-Forestales Calle 174 no e/ 17B y 17C, Siboney, Playa, La Habana Edición y corrección: Fermín Romero Alfau Diseño de cubierta: Arnulfo Espinosa Diagramación: Gladys Armas Sánchez ISBN:

3 índice Introducción /5 La mplementación de cortinas rompevientos / 7 En áreas agrícolas / 8 Aspectos básicos en La creación de cortinas en infraestructuras productivas / 8 Consideraciones para la mplementación de cortinas en casas de cultivos y otras instalaciones del sector agropecuario / 9 Impactos en la apicultura / 13 Arboles sombreadores de cultivos permanentes como el café y cacao y cortinas rompevientos /15 En áreas de ganadería /18 Pastizales /19 Establecimiento y manejo de plantaciones / 21 Consideraciones para la mplementación de cortinas / 22 Conclusiones / 24 Listado de especies / 25 Bibliografía / 27

4 Introducción Esta obra constituye una adecuada respuesta del Instituto de Investigaciones Agro-Forestales a los planteamientos recientes del Ministerio de la Agricultura sobre la necesidad del escenario agrario cubano de retomar el tema de las cortinas rompevientos a partir de los pronunciamientos iniciales del Comandante en Jefe en los años sesenta del pasado siglo y su vigencia a la luz del cambio climático que ya se está manifestando, expresada en los grandes efectos negativos de frecuentes huracanes en instalaciones y sistemas de producción agropecuaria del país. De ahí que las máximas autoridades del gobierno y el Partido hayan exhortado recientemente a los diferentes sectores de la sociedad de la importancia y necesidad de proteger no solo todo el escenario agrario rural, sino todas las instalaciones e infraestructura productiva vulnerables a los vientos huracanados, aunque cuando adquieren altas categorías se hacen menos efectivas las acciones de protección y actividades agropecuarias productivas. El empleo de las cortinas rompevientos como técnica agroforestal innovadora, con especies maderables y frutales en la producción agropecuaria, se conoce desde hace siglos en defensa de los huertos y pequeñas parcelas por medio de hileras de árboles. En la literatura se recoge que comenzó por el sudeste de Europa, la región central de América y algunas zonas de China. Sin embargo, en Cuba las cortinas rompevientos no se practicaron en su forma tradicional, ya que antes de 1959 la actividad forestal era casi nula; pero en muchos huertos caseros y en cercas vivas en pastizales, de alguna forma actuaban como una cortina rompeviento, donde se podían observar especies leñosas de frutales y maderables multipropósito, así como otras de bajo porte alrededor de los cultivos con la finalidad de protegerlos de los vientos y daños mecánicos, y para conservar la humedad en los suelos debido generalmente a la no aplicación del regadío. Las primeras cortinas rompevientos se establecieron en Las Puentes, Motembo, en la antigua provincia de Las Villas, según los intere- 5

5 Arsenio Renda, Efraín Calzadilla, Marta Jiménez y Yolanis Rodríguez ses del inmenso plan de frutales de los años sesenta, y en la provincia de Matanzas con la plantación de Casuarina sp. para proteger una plantación de Mangifera indica. De ahí que las cortinas rompevientos hayan constituido una tecnología innovadora introducida en el país con vistas a mejorar y proteger los sistemas de cultivo de los vientos alisios -que soplan regularmente del nordeste y del norte, así como de los nortes (108 km/h) y los sures (126 km/h), de turbonadas, las brisas de mar y de tierra y los huracanes (más de 140 km/h). A partir de 1967 se iniciaron estudios técnicos integrales con la participación del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), de la Universidad de La Habana, de la Dirección Nacional de Mecanización y del Instituto Nacional de Desarrollo y Aprovechamiento Forestal (INDAF), y se elaboraron las primeras normas técnicas de algunos cultivos, en los que se incluía el establecimiento de cortinas rompevientos. En 1972 existían en Cuba aproximadamente 3500 km de cortinas rompevientos: 1600 km (45 %) correspondían a cítricos, 800 km (22,8 %) a plátano, 400 km (11,4 96) a tabaco y 370 km (10,5 %) a frutales. Si se considera un ancho promedio de 10 m, La protección efectiva se extendería a más de ha, ya que con una altura media de 15 m se induce una protección a los cultivos de diez veces dicha altura. Entre las especies más empleadas se encuentran Callophyllum brasiliense (ocuje), Casuarina equisetifolia (casuarina), Citrus limón (limón), Eucalyptus saligna (eucalipto), Hibiscus elatus (majagua) y Tamarix indica (tamarindo), según CP PCC de La Habana (1967). 6

6 La implementación de cortinas rompevientos En la práctica productiva se ha observado que las cortinas rompevientos se han establecido desatendiendo un tanto criterios básicos como la orientación en los cuatro puntos cardinales y la consideración de elementos climáticos en diversas regiones del país. Se deben orientar de norte a sur o de este a oeste, aunque a veces su diseño circular o cuadrado puede ser más efectivo, sobre todo en la protección de infraestructura productiva y social, lo cual ayuda a mejorar la capacidad de preparación y prevención del país ante emergencias por huracanes u otro tipo de desastre natural o meteorológico. El escenario agrario cubano, independientemente de su ubicación geográfica y posición altitudinal, requiere La presencia de cortinas rompevientos con la observación de elementos climáticos, fundamentalmente de aquellos que puedan influir en la disminución de la evaporación física y la velocidad de los vientos entre un 30 y un 40 % o más. Al extinto Instituto de Desarrollo y Aprovechamiento Forestal, Gindel -un especialista extranjero contratado por la FAO en recomendó para Cuba la aplicación del índice Higroscópico (IH) para caracterizar diversos microclimas y especies a plantar, con la fórmula: IH = R X N / E donde: R: Cantidad de lluvias N: Número de días con Lluvias E: Suma de evaporación anual o temporal Con este procedimiento se trata de resaltar el efecto estacional sobre el crecimiento de los árboles, teniendo en cuenta la influencia de las lluvias, la temperatura y los vientos. También este experto estableció, por ejemplo, en algunas localidades de las antiguas provincias de La Habana y Las Villas, que en la época de sequía el IH oscilaba entre 0,5 y 10, y que entonces se debía utilizar especies arbóreas xerofíticas por reflejar ese índice condiciones semidesérticas, mientras que 7

7 Arsenio Renda, Efraín Calzadilla, Marta Jiménez y Yolanis Rodríguez cuando fluctuaba entre 6 y 40 recomendaba especies mesofíticas en la composición de las cortinas rompevientos. Este autor insistió mucho en que las cortinas debían ser permeables a la velocidad de los vientos. En nuestra opinión se debe retomar igualmente tales consejos sobre los indicadores climáticos, pues hoy el país ha alcanzado un fuerte desarrollo en la meteorología, con una gran red de estaciones que pueden muy bien facilitar estos datos para la conformación de las cortinas, donde consideramos que no haya limitaciones, toda vez que esa rama del saber forma parte del Consejo Nacional de la Defensa Civil. En áreas agrícolas Las cortinas deberán situarse a no más de 150 m de distancia, de manera que protejan del aire varios metros a una distancia proporcional a su altura. Si nosotros hacemos buenas barreras rompevientos contra ciclones, podremos proteger en un alto grado las plantaciones de frutales y platanales. En general nuestra agricultura deberá incrementar mucho el uso de las cortinas rompevientos contra cualquier tipo de viento. En 1967 Fidel Castro planteó con mucha fuerza que las cortinas rompevientos debían establecerse de manera que se pueda leer el periódico durante vientos huracanados. A medida que se difunda, multiplique e implemente esta práctica agronómica, se está contribuyendo con diversos servicios ambientales muy necesarios para la durabilidad en el tiempo de nuestra seguridad alimentaria y de las infraestructuras productivas de diferentes sectores de la economía. Aspectos básicos en la creación de cortinas en infraestructuras productivas No todas las instalaciones e infraestructuras a proteger con cortinas rompevientos tienen la misma configuración y extensión superfi- 8

8 Establecimiento de cortinas rompevientos en ei escenario agrario cubano cial, así como su ubicación geográfica, diferentes grados de pendiente y exposición a la dirección predominante de los vientos más frecuentes, ni tampoco se puede prever el rumbo que toman los huracanes que atraviesan a nuestro país, y el grado de vulnerabilidad ni nivel de resistencia a la velocidad de los vientos huracanados. Esto significa que en las instalaciones (casas de cultivo, vaquerías, aserríos, despulpadoras de café, naves avícolas, etc.) tienen que diseñarse las cortinas en forma cuadrada o circular para aumentar el nivel máximo de protección preventiva, o como principio básico que tengan tres hileras de árboles como mínimo, dispuestos a tres bolillos y permeable a los vientos. Consideraciones para la implementación de cortinas en casas de cultivo y otras instalaciones del sector agropecuario 1: Casas de cultivo u otras instalaciones 2: Hilera Eucalyptus sp. 3: Hilera casuarina 4: Hilera ocuje 5: Hilera de frutal (limón u otros) Concepto básico invariable de anchura de la cortina de 10 m con tres hileras de árboles a tres bolillos. Altura de árboles de 14 m debilitan velocidad del viento en un 20 % (a 1 o 2 m del suelo). El diseño para las casas de cultivo debe de ser cuadrado o circular para protegerlas en todas las direcciones del viento. Nota: Esta propuesta de especies es flexible de acuerdo con las condiciones de las instalaciones a proteger.

9 Cultivos agrícolas La mayor efectividad a 90 es del 46 %. Su longitud debe ser no inferior a diez veces la altura de árboles, como igualmente la distancia entre ellos. El ancho nunca inferior a tres hileras plantadas a tres bolillos o triángulo equilátero (más o menos 3900 plantas/ha) debe ser permeable a los vientos. Según Hoofman (1984), en la zona de las cortinas se produce un efecto microclimá- tico donde la humedad del suelo es del 0,3 al 8 % más alta, la humedad relativa del aire del 5 al 10 % y el rocío 200 % superior en comparación con las áreas agrícolas sin cortinas rompevientos, cuando la altura de los árboles alcanza los 14 m, lo cual debilita su velocidad en un 20 % a una altura de 1 m de la superficie del suelo. La vegetación forestal aporta beneficios directos e indirectos esenciales para el desarrollo agropecuario sostenible por sus relaciones recíprocas con los sistemas de producción, al proteger y mantener, entre otros, la fertilidad del suelo, la calidad de las aguas, suavizar los rigores del clima durante el proceso de producción. De acuerdo con ello, la implementación de las cortinas rompevientos debe ser sobre todo en las Llanuras -que casi ocupan el 65 % del terri- 10

10 Establecimiento de cortinas rompevientos en el escenario agrario cubano torio nacional-, así como en las partes ligeramente alomadas con una extensión cercana al 17 %, que en suma potencia su aplicación al 82 % de las áreas dedicadas a la producción agropecuaria con un per cápita de área agrícola de 0,59 ha. De ellas solo está cultivada 0,27 ha/habitante [ONE, 2007], lo cual es altamente preocupante si se tiene en cuenta que el desarrollo del país depende fuertemente de la agricultura. Por otra parte, en esas condiciones del relieve se ubican 67 municipios (más del 40 % del total nacional) con índice de boscosidad menor del 10 % [Dinámica Forestal, 2005], mientras que nacionalmente hoy alcanza algo más del 27 % [Dinámica Forestal, 2012], por lo que se debe considerar este importantísimo indicador a los efectos de incrementar y mejorar la uniformidad en la distribución nacional de la cobertura boscosa mediante las cortinas rompevientos en áreas destinadas a la producción agropecuaria que hoy no pertenecen al patrimonio forestal, con impactos ambientales muy beneficiosos y necesitados en la actualidad. De esta manera se aplica el principio de conservar y mejorar al suelo y al medio ambiente, produciendo riquezas en el corto plazo para incentivar su generalización en aras de la Cultivos agrícolas La anchura de las cortinas igualmente debe ser flexible en dependencia de las condiciones del suelo, el relieve, del tipo de cultivo a proteger, diseño de uso de la 11

11 Arsenio Renda, Efraín Calzadilla, Marta Jiménez y Yolanis Rodríguez tierra, etc., aunque hay muy buenos resultados cuando es de 10 m cada 150 m o 175 m una de otra, en dependencia del diseño en contra de la dirección general de los vientos predominantes. Por otro lado, hay que considerar que las cercas vivas son otra forma de cortinas rompevientos, aunque generalmente son de una hilera de árboles maderables o frutales, y a veces bajo su dosel (mixta) se planta Limaireocereus hystrix (cardona) o Bromeüa pin- guin (pina de ratón) para evitar la penetración de animales en las fincas de los campesinos. Esta es una tradición de la campiña cubana, que generalmente tiene diferentes fines, con el empleo de árboles multipropósito, en especial de la familia leguminosa, arbustiva o arbórea, también llamados postes vivos, muy común en linderos o límites de fincas. Además, dentro de las especies o grupos de especies se utilizan aquellas que producen leña, madera de uso 12

12 Establecimiento de cortinas rompevientos en el escenario agrario cubano directo, forraje, melíferas, medicinales y otras. Hay que decir que las cercas vivas y los setos vivos, considerados como parte tradicional del uso agroforestal del suelo, se están rescatando, pues en Los años sesenta y setenta del pasado siglo fueron eliminadas del agroecosistema ganadero para utilizar postes de concreto, mucho más caros y casi sin ningún valor ecológico, repercutiendo en una considerable reducción de la producción apícola (Consejo Dirección GEAM, 2009), como se muestra a continuación. Impactos en la apicultura Se perdieron 500 t/año de miel al sustituir postes vivos por los de concreto. El radio de acción de una colmena (consume 1 L de agua diariamente) es de 3 km (27 km o 2700 ha). La densidad adecuada es de 1,62 colmena/km. Para producir t de miel (récord de producción) la densidad debe ser de 1,7 colmena/km. De 300 especies, solo 75 producen miel (júcaro, soplillo, cítricos, baria, Eucalyptus sp., etc.). Muchas de ellas se pueden emplear como cortinas rompevientos en áreas agrícolas y ganaderas del país. Rescate de postes vivos sustituyendo los de concreto en área ganadera que necesita ser arborizada en cercas y dentro del pastizal. 13

13 Arsenio Renda, Efraín Calzadilla, Marta Jiménez y Yolanis Rodríguez Algunas especies forestales que pueden utilizarse como cercas vivas Nombre vernáculo Nombre científico Piñón florido, Júpiter Guásima Almacigo Ciruela Ateje blanco Piñón de botija Morera Moringa Glirícidia sepium Guazuma ulmifolia Bursera simaruba Spondias purpurea Cordia alba Jatropha curcas Morus alba Moringa oleífera Cultivos agrícolas 1: Cultivo de frutales o plátano 2: Hilera de ocuje 3: Hilera de mamey 4: Hilera de tamarindo 14

14 . Establecimiento de cortinas rompevientos en el escenario agrario cubano Árboles sombreadores de cultivos permanentes como el café y cacao y cortinas rompevientos Según revisión bibliográfica, existe muy poca experiencia sobre las cortinas rompevientos en cafetales, ya que solo se hace una breve alusión en que se debe establecer en linderos y caminos expuestos a los vientos fuertes [Manual del cafetero colombiano, 1969], como se muestra en la Foto 1 de este acápite. Tal vez se pueda interpretar este criterio en el sentido de que las plantaciones de café y cacao se distribuyen fundamentalmente en zonas montañosas, constituidas por diferentes cuencas hidrográficas, cuyas vertientes, debido al gradiente altitudinal, se exponen poco a la acción de los vientos, con muchos valles estrechos o cerrados también poco expuestos.... En general, los vientos son nocivos para el cafeto por producir roturas de ramas, caída de hojas, etc., añadiéndole a esta acción mecánica una acción fisiológica no menos importante, especialmente si se trata de vientos secos y cálidos al causar marchitamiento de las hojas y de los brotes jóvenes, detención de la vegetación, entre otros.'en las regiones situadas en los trayectos de los ciclones los 15

15 Arsenio Renda, Efraín Calzadilla, Marta Jiménez y Yolanis Rodríguez estragos causados a Los cafetos por los violentísimos vientos pueden ser muy considerables: árboles sombreados abatidos, cafetos derribados, mutilados... [Coste, 1969]. EL sombreado puede evitar o atenuar la violencia del viento, por lo que se precisa conocer el régimen y su velocidad promedio, sobre todo en la época de huracanes, en las plantaciones de café y cacao. La adecuada regulación es la que permite la entrada a Los cafetales de un 60 a un 70 % de luz, y se logra eliminando árboles indeseables, y lo que están presentes en exceso (por talas, anillamiento, etc.) debe comenzarse por los más viejos, sustituyéndolos por las especies recomendadas que mejor se adapten. La sombra adecuada se regula mediante la corrección de la distancia entre los árboles en los cafetales. En lugares bajos o valles cerrados la regulación debe dejar los árboles necesarios [Instructivo técnico del café y cacao, 1980]. Se comienza haciendo regulacióh de sombra profunda, eliminándose a la vez las especies indeseables y sustituyéndolas por las que mejor se adapten a la zona de producción, según la especie con espaciamiento inicial y final. El último instructivo técnico vigente sobre el cultivo del café plantea utilizar ocho especies forestales como sombra permanente. De acuerdo con Pentón [comunicación personal, 2014], especialista de la Dirección Nacional de Café y Cacao del MINAG, los árboles sombreadores en cafetales, para que sean resistentes a los fuertes vientos huracanados, solo se logra con su poda y la de los cafetos, debido a que se eliminan las ramas en exceso que las hacen muy susceptibles a ser derribadas al aumentar su resistencia a los vientos, como se muestra en la Foto 2. Un cafetal es un elemento económico que está por encima de la protección contra fuertes vientos, pues con buena agrotecnia, como las podas de árboles de sombra y de los cafetos, permite la libre circulación (no hay resistencia de sus respectivas ramas al disminuir la masa foliar de ambos que hace disminuir esos efectos del viento en un 40 % aproximadamente). La explicación parte del criterio de que Los efectos de fuertes vientos son mínimos al tener el cafetal renovado o podado luego de 16

16 Establecimiento de cortinas rompevientos en el escenario agrario cubano siete u ocho años de estar en producción, transitando por los picos de altos rendimientos (después de cinco años de ser podado es el máximo rendimiento), pues en los primeros estadios (menos de dos años) la altura del cafeto es de 1,2 m aproximadamente, y el efecto del viento huracanado es mínimo. 17

17 En áreas de ganadería En los tiempos actuales y futuros el país tiene que buscar alternativas que propendan producciones sostenidas de leche y carne, actualmente deprimida, evitando al máximo la deforestación, y como consecuencia la degradación de los suelos, principalmente aquellos ubicados en las diversas vertientes de las cuencas hidrográficas [Renda, 2013], La FAO (2005) señala que se está estimulando una ordenación silvopastoril integrada del ecosistema por diversas instituciones mundiales a partir del ofrecimiento de compensaciones (pago por los servicios ambientales prestados) a los ganaderos para que adopten prácticas sostenibles que generen beneficios medioambientales, como la retención de carbono, conservación de La biodiversidad, entre otros, en pastizales degradados, pastizal natural sin árboles, pastizal mejorado sin árboles, pastizal mejorado con árboles recién plantados, plantación maderera diversificada, bosque ribereño y sistema silvopastoril intensivo. Las áreas dedicadas actualmente a la ganadería deben ser consideradas con urgencia a los efectos de establecer las cortinas rompevientos. Según ONE (2007), en el país existen ha de pastizales, de ellas ha permanentes, ha temporales y naturales, que equivalen en total al 39,2 % de la superficie agrícola. Esta cifra elevada de áreas con pastizales, de las cuales una cantidad considerable está ubicada en suelos degradados por diversos fenómenos ya indicados y deforestada, necesita en términos de planificación y ordenamiento de los recursos suelos y bosques en el escenario agrario, incorporar más La vegetación forestal para Lograr un equilibrio más dinámico en función de la conservación de la cobertura edáfica y las aguas, y sus impactos beneficiosos en la producción ganadera, forestal, apícola y prestación de servicios ambientales. También con una superficie boscosa (incorporando árboles multipropósito en el 10 % del área de pastos naturales) se aumentaría 18

18 Establecimiento de cortinas rompevientos en el escenario agrario cubano la superficie boscosa en esos pastizales en ha en forma de franjas o cortinas rompevientos o bosquete, se incrementaría notablemente otros servicios ambientales muy beneficiosos que propicia la vegetación forestal a la luz del cambio climático. Pastizales Asimismo, con esa superficie en forma de franjas o cortinas rompevientos o bosquete, se incrementaría notablemente otros servicios ambientales muy beneficiosos que propician la vegetación forestal. 19

19 Arsenio Renda, Efraín Calzadilla, Marta Jiménez y Yolanis Rodríguez Por otra parte, se calcula que para 1000 cabezas de ganado es necesario disponer de una superficie protegida y plantada con árboles (como cortinas rompevientos, bosquete o franja) de 2,5 ha (25 m 2 /cabeza) con el fin de reducir sus requisitos de agua potable [Carpió, 2009]. Además, los árboles de especies latifolias dispuestos en forma de cortina rompeviento o bosquete o franjas protectoras pueden disminuir la evaporación improductiva en Los pastizales, y les proporcionan sombra para protegerse de los rigores del clima local y alimentos a Los animales en la época de sequía. Según estudio de La evaporación y el rocío por cinco años en la Estación Experimental Forestal Guisa [Molina y Manso, 1993], la evaporación en pastizales es de 0,189 mm/día (equivalente a un promedio anual de 61,4 mm) y bajo bosque de latifolia a 1,3 m del suelo, de 0,044 mm/día (equivalente a 14,3 mm promedio anual). 20 En general reduce efecto secante de vientos en plantas y suelo (3-4 mm) cuatro veces más alta la evapotranspiración en pastizal no arbolado que en la cortina

20 Establecimiento y manejo de plantaciones uego de diseñar las cortinas, el método de preparación del En regiones agrícolas ligeramente alomadas, donde se distribuyen los suelos pardos y húmicos carbonatados, se plantan árboles en fajas protectoras o cortinas rompevientos de hasta 10 hileras, a curvas de nivel, se reduce la tasa erosiva en los primeros tres años hasta niveles no mayores de 770 kg/ha, la cual se acerca al nivel de erosión normal o natural [Geigel, 1978]. En cambio, en aquellas dedicadas a la agricultura y a la ganadería se pueden emplear las zonas llanas (65 % del territorio nacional), aradura total o en fajas con pase posterior de grada y surcado a una profundidad de 20 a 25 cm, de acuerdo con el ancho específico que se diseñó y a las especies seleccionadas. Si el terreno es pedregoso, se abren hoyos de plantación de 25 a 30 cm de diámetro y de 30 a 40 cm de profundidad. Cuando existen capas endurecidas en el subsuelo se debe subsolar de 45 a 60 cm. La época más apropiada para la preparación de tierras depende del calendario de lluvias, pero se debe hacer en marzo, abril y mayo, de manera que la plantación pueda iniciarse inmediatamente que se establecen las lluvias a partir de principios de mayo o junio, y no extenderse más allá del 30 de septiembre. Se pueden emplear marcos de plantación desde 3 x 3 m en las especies forestales, y otros más amplios de acuerdo con el tipo de frutales que se contemple mezclar en el diseño, el cual siempre requiere un espaciamiento mayor, que puede llegar hasta 9 x 9 m. 21

21 Arsenio Rendo, Efraín Calzadiila, Marta Jiménez y Yoíanis Rodríguez Esquema para el establecimiento de cortinas a tres bolillos Se debe ser flexible en la elección de los árboles maderables y frutales para conformar una cortina, aunque deben en primer lugar tener las siguientes características: 1. Buen sistema radicular que le proporcione buen anclaje al suelo. 2. Velocidad de crecimiento rápido. 3. Adecuada flexibilidad de las ramas para evitar que se partan ante la embestida de los vientos. 4. El follaje debe ser casi perenne para que proteja no solo durante la época ciclónica, sino el año entero. 5. Deben combinarse los de porte alto como la casuarina, el ocuje y el mamey de Santo Domingo, con los de porte bajo como el del tamarindo. 22

22 Establecimiento de cortinas rompevientos en el escenario agrario cubano 6. Las especies maderables no deben tener efectos alelopáticos con los cultivos que van a proteger, como suele ocurrir con los eucaliptos en general. 7. De 300 especies, solo 75 producen miel (júcaro, soplillo, cítricos, baria, Eucalyptus sp., etc.) Muchas de ellas se pueden emplear como cortina rompeviento en áreas agrícolas y ganaderas del país (más de ha). 23

23 Conclusiones Su aplicación debe ser fundamentalmente en las llanuras que casi ocupan el 65 % del territorio nacional, así como en las partes ligeramente alomadas con una extensión cercana al 17 %, que en suma potencia su aplicación al 82 % de las partes dedicadas a la producción agropecuaria del país, donde los suelos que la conforman muestran un alto índice de degradación. Priorizar los municipios rurales (más del 40 % del país) con índice de boscosidad menor del 10 %. Cubrir el 10 % del área de pastizales con cortinas rompevientos equivale a ha de bosque (más del 7 % del área del patrimonio forestal del país). Según la FAO (1967), el diseño tiene que responder a más eficiencia económico-productiva en la producción de alimentos, sobre todo en zonas o regiones propensas de ser afectadas por la incidencia de vientos fuertes (muy flexible, según dirección de los vientos, condiciones y uso del suelo, etc.). EL establecimiento de los árboles dentro de las cortinas tiene que seguir rigurosamente las normas técnicas y el calendario silvícola vigente, aunque si de forma natural existen algunos, deben dejarse para abaratar los costos de establecimiento. 24

24 Listado de especies Nombre científico Nombre vulgar Función MS Bc s Pv Aa M Fc M d Mc Albizia procera Algarrobo indio X X X X Albizia falcatoria Albisia X X X Persea gratisima Aguacate X X X X X X Bursera simaruba Almacigo X X X X X Cordia gerascanthus Baria X X Swietenia macropylla Caoba X X Casuarína sp. Casuarina X X Calycophyllum candidissimum Dagame X X X Guasuma ulmifolia Guásima X X X X X X Hibiscus elatus Majagua X X X X Pouteria mammosa Mamey colorado X X X c Mammea americana Mamey de Santo Domingo X X X X Melicocca bijuga Mamoncillo X X X X Manguifera indica Mango X X X X X X

25 Anacardim occidentale Marañón X X X X Calophyllum antillanum Ocuje X X X Jatropha curcas Piñón de botija X X X X X Tabebuia sp. Roble X Lysiloma latisiliqua Soplillo X X X X X Tamarindus indica Tamarindo X X X X X Tectona grandis Teca X X Guarea trichiliodes Yanmagua X X Eucalyptus sp. Eucalipto X X Ceasalpinea violaceae Yarúa X X MS: Mejorador de suelo Bc: Biocombustible S: Sombra para el ganado y los pastizales Pv: Postes vivos para el establecimiento de cercas Aa: Valor alimentario para las diferentes especies de animales domésticos Md: Valor maderable Ft: Frutas comestibles M: Melíferas

26 Bibliografía CP PCC de La Habana (1967); Cortinas rompevientos, Instituto Cubano del Libro, La Habana. CARPIÓ, C. (2009): «Árboles maderables en áreas ganaderas, su importancia y beneficios», Memorias, DEFORS, La Habana. CONSEJO DIRECCIÓN GEAM (2009): Datos de la apicultura ofrecido por el Instituto de Apicultura, 22 de abril, IIF, La Habana. COSTE, R. (1969): El café: técnicas agrícolas y producciones tropicales, Instituto Cubano del Libro, La Habana. DINÁMICA FORESTAL (2005): Dirección Nacional Forestal, MINAG. DINÁMICA FORESTAL (2012): Dirección Nacional Forestal, MINAG. FAO (1967): «Fajas protectoras y cortinas rompevientos», World Symposium and Man Made Forest and Their Industrial Impor- tant, Camberra, Australia. FAO (2005): «Mesa redonda sobre silvicultura y agricultura», revista Unasylva, vol. 56, no. 220: GEIGEL, F. B. (1978): «Pérdida de suelos y agua en los suelos de la Estación Forestal de Vinales, con cinco métodos de preparación del suelo para plantación», Revista Forestal Baracoa, vol. 8, no. 1-2: HOOFMAN, R. (1984): «La importancia de las cortinas rompevientos para la producción agrícola y el cultivo forestal», Biblioteca IIF, Registro 9/85. Instructivo técnico para el cultivo del café (1980), CIDA, MINAG, La Habana. Manual del cafetero colombiano (1969), Instituto Cubano del Libro, La Habana. MOLINA, G.; N. MANSO, (1993): «Cantidad de rocío producido en un sitio a cielo abierto y bajo un bosque latifolio», Estación Experimental Forestal Guisa, Informe técnico. ONE (2007): Datos estadístico de la agricultura, La Habana. RENDA (2013): La vegetación forestal, los sistemas agroforestales y el manejo de cuencas hidrográficas en Cuba (en imprenta). 27