Familias homoparentales en España tras el cambio legislativo: logros, dificultades y retos

Transcripción

1 Familias homoparentales en España tras el cambio legislativo: logros, dificultades y retos González, M.-Mar; López, Francisca y Serantes, Alba 1 Departamento de Psicología Evolutiva y de la Educación Universidad de Sevilla De los nuevos modelos familiares que podemos encontrar actualmente en la sociedad española, los constituidos por progenitores homosexuales y sus hijos e hijas son los que de modo más reciente han pasado a ser visibles y a recibir la consideración de familias. Nuestro equipo de trabajo, motivado por conocer las características, procesos, dificultades y logros de las familias de madres lesbianas o padres gays, llevó a cabo en el año 2008 un estudio donde participaron 36 familias andaluzas (28 de ellas de madres lesbianas y 8 de padres gays). La forma en que éstas habían accedido a la maternidad o paternidad se distribuye entre quienes habían optado por técnicas de reproducción asistida (13 familias), quienes habían recurrido a la adopción (12 de ellas) y quienes habían tenido a sus hijos o hijas en el marco de una relación heterosexual anterior (11 de ellas). Se diseñó una entrevista en profundidad que fue realizada a los padres y madres, para que comentaran, entre otras cuestiones: qué había supuesto para ellas el cambio legislativo que ha permitido el matrimonio entre personas del mismo sexo y cómo había sido su experiencia con diferentes instituciones públicas y privadas. Nuestros resultados muestran que para la gran mayoría de las familias el cambio legislativo tuvo una influencia importante en sus vidas en diferentes sentidos (mayor visibilidad y legitimación; más seguridad y tranquilidad por la situación legal de sus hijos; posibilidad de casarse y adoptar conjuntamente). A pesar de ello, la práctica totalidad de las familias considera que se deben producir aún otros cambios en las instituciones (disminución de prejuicios homófobos, adaptación de protocolos administrativos), al tiempo que reclaman que los profesionales que trabajan en ellas deben disponer de una mayor y más específica formación en diversidad familiar, para evitar efectos indeseables como los que ellas han experimentado (encuentro con personal desinformado, ausencia de protocolos, rechazo explícito ) A partir de estos resultados, se realiza una reflexión sobre qué aspectos pueden y deben mejorar desde el punto de vista institucional, para atender de modo más ajustado las demandas y necesidades de estas familias. 1 Las autoras están inmersas, desde hace algunos años, en el trabajo con familias de madres lesbianas o padres gays. Pueden establecer el contacto a través del correo de la primera autora: margon@us.es

2 1. Introducción De todos los nuevos modelos familiares que podemos encontrar ahora en la sociedad española, sin duda los constituidos por progenitores homosexuales y sus hijos o hijas son los que de modo más reciente han pasado a ser visibles y a recibir la consideración de familias. Obviamente, mujeres lesbianas u hombres gays habían criado y educado con anterioridad a sus criaturas, pero los estigmas, tabúes y hasta la persecución, que habían rodeado tradicionalmente la homosexualidad, habían puesto un manto de ocultación sobre estas realidades familiares. En los últimos treinta años, sin embargo, una serie de cambios sociales y legislativos han extraído la homosexualidad del código penal, para introducirla en el código civil. Así, en los primeros pasos de la democracia se derogaron leyes y artículos en virtud de los cuales se perseguía y encarcelaba a personas homosexuales; tres décadas después se ha regulado el derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo, aportando con ello legitimidad a las uniones de gays y lesbianas, así como reconocimiento legal a sus familias. Permítasenos añadir que también los ámbitos académicos han contribuido a este reconocimiento reciente, en la medida en que han sido las investigaciones las que han desvelado su existencia y que desde ellos se les ha dado nombre y, con ello, entidad dentro de la sociedad. Gays y lesbianas han usado distintas vías para formar familias. Inicialmente, la mayor parte de estos hogares se constituyeron con hijos o hijas habidos de uniones heterosexuales anteriores. Junto a estas familias, que podríamos llamar familias homoparentales reconstituidas, paulatinamente han ido ganando en presencia otras que se han configurado cuando los padres ya se vivían como gays o las madres ya se sabían lesbianas, las que empiezan a llamarse familias homoparentales planeadas o ex novo. Una de las vías fundamentales seguidas por gays y lesbianas para extender su familia ha sido la adopción o el acogimiento de menores, realidades que fueron posibles en solitario en España desde finales de la década de los ochenta, y que se puede realizar conjuntamente desde el cambio legislativo de También las técnicas de reproducción asistida han servido para que un número considerable y creciente de lesbianas haya accedido en nuestro país a la maternidad, en solitario o compartida. En España no es posible la maternidad subrogada (las conocidas como madres de alquiler ), aunque sí lo es en algunos otros países, con lo que algunas parejas de gays están teniendo descendencia en el extranjero por esta vía. A pesar de que las familias homoparentales son ya una realidad en nuestra sociedad y han sido objeto de amplio debate, seguimos teniendo más preguntas que

3 respuestas acerca de ellas. De hecho, ni siquiera sabemos de cuántas familias estamos hablando, porque no existe un registro de ellas en los archivos de las distintas instituciones implicadas. El primer estudio que realizó nuestro propio equipo hace ocho años aportó ya algunos datos interesantes (González et al., 2003; 2004): sabemos que niños y niñas están desarrollándose bien, sin particulares problemas de ajuste psicológico y sin diferencias sustanciales con respecto a sus compañeros o compañeras que crecen en hogares homoparentales. Estos resultados son, por otra parte, concordantes con los obtenidos en los estudios realizados en otros países, de los que Allen y Barrell (1996) efectuaron un interesante meta-análisis y de los que pueden encontrarse buenas revisiones recientes tanto en inglés (Patterson, 2002; Tasker, 2005; Tasker y Patterson, 2007), como en castellano (Frías, Pascual, y Monterde, 2004; González, López y Gómez, 2010; Pedreira, Rodríguez, Seoane y Martín, 2008). Sin embargo, si el acuerdo acerca de los productos está bastante consolidado en la comunidad científica, se dispone de menos información acerca de los procesos que tienen lugar en estas familias. Por ejemplo, sabemos menos de los problemas específicos a los que se enfrentan día a día, de las dinámicas internas de relación o de su grado de apertura al resto de la sociedad. Aún así, algunos estudios recientes realizados en otros países comienzan a aportar algunas informaciones relevantes, tanto de las familias homoparentales adoptivas o acogedoras (Brooks y Goldberg, 2001; Shelley-Sirecy y Ciano-Boyce, 2002; Bennett, 2003; Hicks, 2005) como de las familias de lesbianas que han tenido a sus criaturas mediante técnicas de reproducción asistida, a algunas de las cuales se las está siguiendo longitudinalmente en Reino Unido (Golombok,, Tasker y Murray, 1997; MacCallum y Golombok, 2004), Estados Unidos (Gartrell et al., 1996; Gartrell et al., 2005) o Bélgica (Brewaeys et al., 1995; Vanfraussen, Ponjaert-Kristoffersen, y Brewaeys, 2003). Obviamente, aún carecemos de estudios que hayan analizado estos procesos en nuestra sociedad y no sabemos hasta qué punto serían comparables los resultados, dada la determinación cultural que tienen muchos de ellos. Por otra parte, no sabemos el efecto que ha tenido en las familias homoparentales de nuestro entorno el cambio legislativo en materia de matrimonio. Así desconocemos cómo han vivido estas familias el cambio en la legislación, qué efectos ha tenido en sus vidas, si realmente han legalizado los vínculos familiares o cómo está siendo su inserción real en nuestra sociedad. No olvidemos que hasta hace poco esta sociedad no contemplaba la existencia de estas familias y, por tanto, no

4 tenía engrasadas sus estructuras e instituciones para darles cabida. Por tanto, es razonable esperar que el cambio en la legislación no haya comportado un cambio absolutamente automático en las instituciones con las que estas familias se relacionan o las actitudes de los profesionales con los que tratan. Esta comunicación tiene como objetivo principal analizar el efecto que ha causado en la vida de estas familias el cambio legislativo en materia de matrimonio, los logros que ha comportado, pero también las dificultades que aún restan por salvar y, por tanto, los retos que aún nos restan como sociedad. 2. Método 2.1. Participantes Modo de acceso a la muestra Una de las principales dificultades del estudio con familia de madres lesbianas o padres gays es el acceso a la muestra, debido a una serie de dificultades: por una parte, la falta de registros que contemplen el número de familias de madres lesbianas o padres gays (nuestra población de referencia) hace que no pueda realizarse un muestreo real; por otra, aunque socialmente se han dado pasos en la consideración de estas familias, aún son objeto de valoraciones prejuiciosas, por lo que muchas de ellas se muestran reticentes a la participación, al sentirse en el centro de las críticas. Debido a lo anteriormente comentado, para poder llegar al mayor número de familias a desplegar toda una serie de estrategias para poder llegar al mayor número de familias posibles, utilizamos distintos medios, como: publicidad en medios de comunicación; carteles informativos colocados en diferentes puntos estratégicos (universidad, librerías especializadas, centros cívicos, etc.); contactos con diferentes colectivos de gays y lesbianas para que colaboraran con nuestro equipo y aplicación de la técnica bola de nieve (a través de las familias que iban participando, o que participaron en el estudio realizado anteriormente, íbamos contactando con otras nuevas). Para poder ser parte de la muestra, las familias tenían que cumplir una serie de criterios muy importantes: por una parte, que la orientación homosexual de los progenitores se viviera abiertamente ante los hijos e hijas; por otra, que existiera una convivencia diaria de los niños y niñas en el núcleo homoparental. En el caso de hijos provenientes de relaciones heterosexuales previas, la convivencia en el núcleo homoparental debía haberse producido, al menos, durante dos años. Y en último lugar, las edades de los hijos e hijas debían estar comprendidas entre 1 y 16 años.

5 Por medio de las distintas estrategias comentadas, se llegó a contactar con 41 familias distribuidas en toda la comunidad andaluza, de las cuales han participado 36 finalmente. Los motivos por los que cinco de las 41 familias no llegaron a participar, fueron variados: incumplimiento de algunos de los requisitos del estudio; renuncias por motivos personales; cambio de domicilio y de los datos de contacto Características de las familias En este apartado se realizará una descripción de las principales características sociodemográficas y estructurales de las familias estudiadas. Como se ha comentado en el apartado anterior, finalmente se han estudiado 36 familias. Hay algunas características que hacen que la muestra sea heterogénea internamente. Uno de esos aspectos hace referencia a la forma en que estas familias han accedido a la maternidad y paternidad. Como puede observarse en la Tabla 1, las 36 familias se distribuyen equitativamente entre quienes han tenido a sus hijos e hijas a través de técnicas de reproducción asistida (36,1%), quienes han optado por la adopción (33,3%), y quienes han tenido a sus hijos e hijas antes de reconocerse como homosexuales, a través de uniones heterosexuales anteriores (30,6%). En cuanto a la distribución de la estructura familiar, como se observa también en la Tabla 1, la mayoría de las familias son biparentales (75%), es decir, viven en pareja con sus hijos e hijas. La situación legal de estas familias formadas por una pareja también es heterogénea, ya que hay algunas que han contraído matrimonio (15 parejas que son el 55,55% de las biparentales); otras que son parejas de hecho (2 parejas, que suponen el 7,41% de las biparentales) y aquellas que viven juntas pero no tienen vinculación legal (10 parejas, que suponen el 37,04%). De forma complementaria a las familias biparentales, el 25% de la muestra total está formado por madres (6 de ellas) o padres (3 de ellos) que viven con sus hijos e hijas en solitario. Como suele ocurrir aún en este tipo de familias, la mayor parte de ellas son familias mujeres lesbianas. Lo mismo ocurre en nuestra muestra, de forma que el 77,7% son familias de madres lesbianas y el 22,3% familias de padres gays. Estos datos no deben sorprender si tenemos en cuenta que sólo las mujeres tienen posibilidad de concebir con técnicas de reproducción asistida y que, además, el grueso de las custodias tras separación o divorcio se otorga a las madres.

6 FRECUENCIAS PORCENTAJES Reproducción asistida 13 36,1% Vía de acceso a la maternidad y paternidad Estructura Adopción 12 33,3% Relación heterosexual anterior 11 30,6% Biparentales 27 75% Monoparentales 9 25% Sexo de los progenitores Familias de madres lesbianas 28 77,7% Familias de padres gays 8 22,3% Tabla 1. Características de las familias Si tenemos en cuenta variables más cuantitativas, y nos fijamos, dentro de la Tabla 2, en la columna de las medias obtenidas, podemos decir, de forma genérica, que: las familias estudiadas tienen entre uno y dos hijos; aquellas que conviven en pareja llevan de media 9,91 años y tienen un ingreso mensual bastante alto (2.504,12 euros). No obstante, también existe variabilidad en estos aspectos comentados, como puede observarse en los datos de los mínimos y máximos de cada una de estas variables, mostrados en la Tabla 2. MEDIA DESVIACIÓN TIPO MÍNIMO MÁXIMO Número de hijos e hijas (N=36) Años de convivencia con la pareja actual (N=27) Ingresos netos mensuales (N=34) 1,4 0, ,91 6,7 0, , , Tabla 2. Otras características de las familias Características de las madres y padres En este apartado comentaremos las características de las madres y padres entrevistados. El número total de progenitores que han formado las 36 familias es de 62. Como vimos en el apartado anterior la mayor parte de las familias está compuesta por madres lesbianas (77,7%). Consecuentemente, el 79% de las personas adultas de la muestra son mujeres, como puede observarse en la Tabla 3. Más de la mitad de la muestra adulta ha alcanzado un nivel de estudios universitarios (61,3%), seguido por el 32,2% que ha llegado hasta estudios secundarios y el 6,5% que sólo cuenta con estudios primarios o menos. En cuanto a la situación laboral actual de padres y madres, encontramos que el 83,9% de las personas entrevistadas está en activo y el 16,1% se encuentra inactivo o desempleado.

7 Si nos fijamos ahora en la Tabla 4, vemos cómo la media de edad es de 40 años, si bien el rango de edades oscila entre los 24 y los 51 años. FRECUENCIAS PORCENTAJES Sexo Mujeres 49 79% Hombres 13 21% Educación universitaria 38 61,3% Nivel de estudios Situación laboral actual Educación secundaria 20 32,2% Educación primaria o menos 4 6,5% Activo 52 83,9% Inactivo o desempleado 10 16,1% Tabla 3. Características de los padres y madres Media Desviación Típica Mínimo Máximo Edad de los progenitores (N=62) 40,00 5, Tabla 4. Edad de los padres y madres 2.2. Instrumentos y procedimiento Los datos que presentaremos en esta comunicación se obtuvieron a partir de una entrevista elaborada por nuestro equipo, y que se realizaba en el hogar familiar conjuntamente a la pareja, o individualmente en el caso de las familias monoparentales. Esta entrevista profundizaba en numerosos aspectos de la vida cotidiana de estas familias, además de incluir otras variables pertinentes según nuestros diferentes objetivos de investigación. Además, estas dimensiones se adaptaban a las circunstancias de cada tipo de familia, habiendo preguntas específicas para los casos de adopción, casos de reproducción asistida y casos de hijos e hijas que provienen de relaciones heterosexuales anteriores. La entrevista diseñada evaluaba numerosas dimensiones; de entre ellas, las que guiarán esta comunicación, tienen que ver con las preguntas donde padres y madres valoraban, en primer lugar, los logros obtenidos a partir del cambio legislativo (de forma genérica y en su caso particular); además, se les preguntaba por su experiencia en el registro civil; con el equipo médico; en la escuela de sus hijos e hijas, etc. A partir de sus propias experiencias, padres y madres, también nos daban

8 una valoración genérica, y nos comentaban los retos que aún tienen por delante familias como las suyas. 3. Resultados 3.1. Repercusiones del cambio legislativo Como se expuso en la introducción de esta comunicación, el principal objetivo de la misma es conocer el efecto que ha causado en la vida de las familias entrevistadas el cambio legislativo en materia de matrimonio, los logros que ha comportado, pero también las dificultades que aún restan por salvar y, por tanto, los retos que aún nos esperan como sociedad. Para poder ir cumpliendo nuestro objetivo, empezaremos comentando los resultados relativos a qué ha supuesto para nuestras familias el cambio legislativo que permitía que tuvieran la posibilidad de casarse. Las respuestas de las familias, cuya distribución puede observarse en la siguiente tabla, nos hacen ver que para la gran mayoría (85,7%) la aprobación de la ley ha cambiado algo en sus vidas, aún cuando esto no signifique un uso concreto de este derecho. Estas familias concretan estos cambios en los siguientes aspectos: más de la mitad (60,5%), reconoce que la aprobación de la ley les ha aportado mayor visibilidad, sentirse escuchados y legitimados, en una sociedad más abierta ; el 15,2% considera que ha supuesto un incentivo para seguir luchando por otras reivindicaciones ; otro 15,2% de estas familias habla de la posibilidad de poder casarse y adoptar ; y por último, un 9,1% reconoce que les ha aportado más seguridad y tranquilidad por la situación legal de sus hijos e hijas. Como datos interesantes, y que evidencian realidades que han podido materializarse gracias al cambio de ley, podemos comentar que el 55,55% de las familias biparentales han contraído matrimonio (15 de las 27 familias biparentales); además y quizás lo más importante de cara al bienestar de los menores, pueden tener acceso a una coparentalidad legal. Como comentaremos posteriormente, cuando hablemos del registro civil, casi la totalidad (95,24%) de las familias biparentales ex novo de nuestra muestra, han registrado o están en proceso de poder registrar conjuntamente a sus hijos e hijas.

9 Influyó en sus vidas la aprobación del matrimonio homosexual Sí 85,7% No 14,3% Mayor visibilidad, sentirse escuchados y legitimados, en una sociedad más abierta 60,5% Cambios a partir de la aprobación del matrimonio homosexual Un incentivo para seguir luchando por otras reivindicaciones 15,2% La posibilidad de poder casarse y adoptar 15,2% Más seguridad y tranquilidad por la situación legal de sus hijos e hijas 9,1% Tabla 5. Repercusiones del cambio legislativo 3.2. Experiencia y percepción genérica de las instituciones sociales Respecto a las relaciones que las familias entrevistadas han tenido necesariamente con las instituciones sociales (ámbito educativo, sanitario, registro civil, etc.), los resultados obtenidos nos dibujan un panorama que debe mejorar en algunos aspectos. Respecto a la valoración genérica que hacen las familias de las instituciones sociales, a partir de sus experiencias personales, los datos obtenidos nos indican que un 45,7% del total de madres y padres entrevistados, perciben que las instituciones sociales las ven como un problema, están desinformadas sobre ellas, y aún conservan prejuicios que las invisibilizan ; un 31,4% cree que la desinformación y los prejuicios dependen de personas específicas y no tanto de las instituciones ; mientras que el 22,9% valora que hay aspectos que han mejorado, aunque aún se necesitan cambios. Como puede observarse en la tabla siguiente, la gran totalidad de las familias (97,2%) cree que deberían producirse cambios a nivel institucional, mencionando principalmente los siguientes aspectos: prejuicios homófobos y sexistas (48,6% de aquellos que consideran que debe cambiar), formación de técnicos (31,4%), igualdad efectiva de derechos (14,3%), y adaptación de protocolos administrativos (14,3%). Cómo las instituciones sociales consideran a las familias homoparentales Con desinformación, como un problema, obviándolas, sin protocolos adaptados La desinformación y los prejuicios dependen de personas específicas y no de las instituciones Hay aspectos que han mejorado, aunque aún se necesitan cambios (se las considera familias con derechos) 45,7% 31,4% 22,9% Debería cambiar algo a nivel institucional Sí 97,2% No 2,8%

10 Prejuicios homófobos y sexistas 48,6% Cambios que debieran producirse en las instituciones (*) 2 Formación específica del personal técnico 31,4% Igualdad efectiva de derechos 14,3% Adaptación de protocolos administrativos 14,3% Tabla 6. Instituciones sociales y familias homoparentales 3.3. Valoración de las familias a partir de su experiencia con distintos profesionales Otro de los aspectos interesantes que está relacionado con la experiencia de las familias con las instituciones, es la percepción que éstas tienen sobre la formación de los profesionales que están relacionados con el ámbito familiar, formada a partir de sus experiencias con ellos. Los datos que presentamos ponen de manifiesto, de forma general, que existe una necesidad de mejora en la formación de estos profesionales. En la siguiente tabla presentamos las variables relacionadas y que se irán comentando. En primer lugar, indagamos acerca las opiniones de estas madres y padres acerca de la formación de los profesionales que trabajan con familias, obteniendo los siguientes datos: el 86,1% piensa que los profesionales no tienen formación suficiente sobre diversidad familiar, el 8,3% considera que sí la tienen y el 5,6% no tiene una opinión formada aún. Al respecto, aquellos entrevistados que perciben la necesidad de formación, destacan que ésta debe dirigirse a los siguientes aspectos: más formación en actitudes de tolerancia, respeto y apertura (58,6%) y mayor información y actualización en diversidad familiar y género (41,4%). Junto con lo anterior, les preguntamos si han tenido dificultades en el momento de realizar trámites administrativos por el hecho de presentarse como lesbianas o gays. Ante esta pregunta, el 26,5% de los padres y madres entrevistados ha señalado que sí ha tenido problemas, destacándose los siguientes: personal desinformado (55,6%), ausencia de protocolos (22,2%), rechazo explícito (11,1%), y trato inadecuado (como un problema) (11,1%). Valoración de la formación de los profesionales que trabajan con familias No tienen formación suficiente sobre diversidad familiar y sexual 86,1% Tienen formación suficiente sobre diversidad en 8,3% 2 Las categorías de esta variable no son excluyentes, ya que las familias podían hacer referencia a más de una en sus respuestas. Se utilizará un asterisco a partir de aquí, para las variables de este tipo.

11 general No sabe o no contesta 5,6% Aspectos que desarrollarían en la formación de los profesionales Han tenido dificultades al momento de realizar tramites administrativos por ser gays o lesbianas Actitudes de tolerancia, respeto y apertura 58,6% Mayor información y actualización en diversidad familiar y sexual 41,4% No 73,5% Sí 26,5% Personal desinformado 55,6% Problemas Ausencia de protocolos 22,2% Rechazo explícito 11,1% Trato inadecuado (como un problema) 11,1% Tabla 7. Valoración de la formación de los profesionales Los datos que presentamos a continuación, ejemplifican una experiencia concreta de las familias con personal de la administración. Si tenemos sólo en cuenta a las madres y padres que han recurrido a la reproducción asistida ó adopción, y el momento en que estas familias tuvieron que inscribir a sus hijos e hijas en el registro civil, podemos ver que se encontraron con algunas dificultades. Así, como puede observarse en la siguiente tabla, más de la mitad de las familias (68%), afirman que tuvieron una mala experiencia; un 12% de las familias expresa que han tenido un buen trato, pero que los funcionarios no conocían el procedimiento a seguir en sus casos; por último un 20% de las familias ha tenido una buena experiencia. Como se observa en la tabla siguiente, aunque sólo el 19% de las familias registró al niño o niña a nombre de ambos progenitores, el 81% piensa realizar la filiación conjunta, o está en proceso de hacerlo. Llama la atención que el 70,6% de los casos encontró problemas, o está encontrando, al realizar el registro conjunto. Al detallar más los problemas con lo que se encontraron estas familias, encontramos lo siguiente: personal desinformado (50%), ausencia de protocolos adecuados (50%), rechazo explícito (16,7%) y sentirse tratadas como un problema (16,7%). La valoración global que hacen las familias de este proceso relacionado con el registro civil, es bastante negativa, si tenemos en cuenta que lo que les ocurrió se alejaba de sus expectativas: así, más la mitad valora que fue muy diferente (47,8%), o diferente (21,7%) a cómo les hubiera gustado; mientras, el 13% lo vivió de forma parecida a la esperada y el 17,5% lo experienciaron tal y como esperaban. Las sugerencias que realizan el 88,9% de las familias están relacionadas con la mejora de

12 los trámites administrativos (adaptación de protocolos y formación del personal de administración); además, el 77,8% de las familias sugieren que debe mejorarse el trato personal, de forma que éste se realice de forma adecuada y libre de prejuicios. Mal 68% Cómo les fue en el Registro Civil Buen trato, pero desconocían el procedimiento a seguir 12% Bien 20% Registraron al hijo/a a nombre de ambas/os Piensan tramitar la filiación o adopción conjunta (en los casos en los que no lo han registrado ambas/os) No 81% Sí 19% Sí 94,1% No 5,9% Por qué no piensan tramitar la filiación o adopción conjunta (aquellos que respondieron que no lo harán) Están tramitando otra adopción (individualmente) 100% Encontraron problemas al realizar el registro ambas/os Sí 70,6% No 29,4% Personal desinformado 50% Problemas con los que se encontraron en el Registro Civil (*) Ausencia de protocolos adecuados 50% Rechazo explícito 16,7% No les tratan con normalidad sino como un problema 16,7% Muy distinto a cómo les hubiera gustado 47,8% Valoración de cómo les fue en el Registro Civil Distinto a cómo les hubiera gustado 21,7% Parecido 13% Exactamente cómo les hubiera gustado 17,5% Cómo creen que deberían ser estos trámites (*) Sin problemas administrativos: personal informado y protocolos adecuados 88,9% Trato personal adecuado y sin prejuicios 77,8% Tabla 8.Adopción y reproducción asistida: experiencia en el registro civil En contraste con los datos anteriores, que dibujan un panorama negativo, los datos que se refieren a la relación de las familias con el o la pediatra de su hijo o hija, evidencian que hay ámbitos donde las relaciones son más positivas (como ocurriera con la escuela). Al abordar la experiencia con los pediatras, encontramos por parte de madres y padres una percepción positiva del trato recibido por éstos (100%), observando que el 84% conoce de manera clara que el niño o niña tiene dos

13 madres o dos padres; no obstante, en un pequeño porcentaje (5,6%) este profesional no trata como madres o padres a ambos miembros de la pareja. El pediatra sabe que la o las madres o padres son homosexuales Trato recibido por el pediatra (en los casos en los que conoce la orientación sexual) El pediatra las trata a ambas como madres (en los casos de proyecto común) Sí 84% No 16% Muy bueno y adecuado 100% Sí 94,4% No 5,6% Tabla 9. Adopción y reproducción asistida: experiencia con el pediatra Relación familia-escuela Como vimos anteriormente, no todos los datos son negativos. Si tenemos en cuenta específicamente los datos de la importante relación entre la familia y la escuela, vemos que está funcionando bien. En este sentido, los datos que presentamos a continuación reflejan, en alguna medida, cómo las familias están cada vez más normalizadas y no intentan ocultar su realidad familiar. Como podemos observar en la tabla siguiente, el 80,6% de los padres y madres señalan que su situación como familia homoparental es conocida en la escuela a la que asisten los niños y niñas. La forma en que la escuela ha sabido la situación familiar varía en función de si los padres y madres lo han manifestado de forma explícita (75,9%); implícitamente lo han hecho saber (20,7%); o terceras personas lo han comentado (3,4%). En los casos en los que la escuela no conoce la situación familiar (19,4%), los padres o madres señalan que esto se debe a que no se ha dado la situación de decirlo y que consideran que no es relevante entregar esa información (60%), mientras que otros cuentan que no lo han revelado por respetar la decisión de sus hijos o hijas en este sentido (40%). Por lo que respecta a la reacción que ha habido en la escuela cuando se ha sabido la situación familiar, los datos son también muy positivos: el 72,4% de las familias nos ha respondido que las han aceptado plenamente; en un 17,3% de los casos la escuela parece aceptarlo, pero se evita el tema; y en el 10,3% restante la escuela ha reaccionado con rechazo. En estos últimos casos, el rechazo proviene del profesorado en dos de cada tres casos, y de los otros padres o madres en el tercio restante, como puede observarse en la tabla siguiente. Conoce la escuela la situación familiar Sí 80,6% No 19,4%

14 Cómo ha conocido la escuela su situación familiar Motivo por el cual en la escuela no conocen la situación familiar Respuesta de la escuela ante la situación de homoparentalidad Situaciones de rechazo Explícitamente por ellos 75,9% Implícitamente por ellos 20,7% Por terceras personas 3,4% No se ha dado la situación, consideran que no es relevante dar esa información 60% Hay un acuerdo con los hijos 40% Aceptación plena 72,4% Parecen aceptarlo pero evitan el tema 17,3% Han habido respuestas de rechazo 10,3% La tutora ha mostrado oposición 66,7% Otros padres o madres han realizado críticas 33,3% Tabla 10. Conocimiento en la escuela de la situación de familia homoparental Reivindicaciones que realizan las familias Para terminar, expondremos las reivindicaciones que realizan las familias de cara a mejorar sus demandas, y encontrarse en una sociedad más libre de prejuicios. Estas reivindicaciones son las que nos dan las claves a la hora de conocer el camino por el que se debe seguir interviniendo. Como puede observarse en la siguiente tabla, los padres y madres reconocen que no todo está conseguido con el cambio legislativo. De hecho, realizan algunas reivindicaciones: el 47,1% de la muestra reclama la eliminación de los prejuicios sociales ; el 38,2% sugiere seguir profundizando en la igualdad de derechos ; el 18,2% de la muestra cree que debe mejorar la formación de los profesionales ; por último el 5,9% de la muestra hace referencia a la adaptación de protocolos administrativos. Eliminación de los prejuicios sociales 47,1% Reivindicaciones sociales que realizan las familias (*) Profundizar en la igualdad de derechos 38,2% Formación de los profesionales 18,2% Adaptación de protocolos administrativos 5,9% Tabla 11. Reivindicaciones sociales 4. Discusión y conclusiones De los resultados de nuestro estudio pueden extraerse algunas conclusiones claras, a nuestro juicio, así como implicaciones para el trabajo desde distintas

15 instituciones. Sin duda, el cambio legislativo ha sido bienvenido por estas familias, que sentían así que la legislación les aportaba una dignidad y legitimidad que nunca antes les había sido reconocida. Junto a ellas, una mayor confianza y seguridad, así como la garantía para propiciar más visibilidad y normalización de sus familias. Estos logros no ocultan sin embargo los problemas que se siguen encontrando en su relación con distintas instituciones sociales, problemas que evidencian los problemas de engrase que aún se dan en nuestra sociedad a la hora de hacer efectiva la integración de estas familias. 1. Es importante propiciar que personal técnico y administrativo disponga de una formación específica en homosexualidad y homoparentalidad. En la formación básica de los y las profesionales que trabajan en familia con frecuencia han estado ausentes los contenidos relacionados con la homosexualidad y mucho más aún los relativos a la homoparentalidad, por su carácter de fenómeno social reciente. Por esta razón, quienes trabajan profesionalmente con familias homoparentales lo han hecho frecuentemente sin formación específica, con muchas lagunas de conocimiento y basándose en intuiciones que pueden tener mayor o menor grado de acierto. Se impone, por tanto, como reclaman los padres o madres entrevistados en este estudio, garantizar la formación específica en homoparentalidad para los y las profesionales de las distintas instituciones que puedan trabajar con estas familias, de manera que puedan disponer de conocimientos acertados y precisos acerca de ellas. 2. Desde luego parece imprescindible revisar los prejuicios de distinto tipo que puedan tener quienes trabajan con familias homoparentales en distintos ámbitos. Cuando nos planteamos que en una pareja de lesbianas o gays hay un miembro que desempeña un papel masculino y otro un rol femenino, sin duda estamos aplicando el patrón heterosexual como canon con el que comparar el resto de relaciones; igualmente se muestran prejuicios heterosexistas cuando se supone que niños y niñas necesitan un padre y una madre para tener un desarrollo sano y armónico. En otro orden de cosas, cuando se tienen reservas acerca de que una pareja de gays, por el hecho de ser dos hombres, pueda criar a un bebé porque se duda de que sean capaces de darles todo el cuidado y el cariño que necesita, sin duda se están mostrando prejuicios sexistas. También obedece a prejuicios, en este caso homófobos, la presunción de que una persona homosexual va a mostrar peor ajuste psicológico que una heterosexual y que por ello hay que evaluarla con mayor atención. Como sociedad, tenemos la obligación de discutir toda esta serie de creencias prejuiciosas e infundadas que frecuentemente se aplican a las personas

16 homosexuales y sus familias, porque sólo pueden entorpecer y poner barreras en el trato y trabajo con ellas. 3. Un elemento crucial es otorgar a las familias homoparentales toda la legitimidad y el reconocimiento que merecen. La aprobación de la modificación del código civil que ha permitido el matrimonio entre personas del mismo sexo ha otorgado a las parejas de gays o lesbianas el derecho a obtener el reconocimiento legal de sus vínculos, así como de los que les unen a sus hijos o hijas. Aún así, hay situaciones en que este reconocimiento legal no es tan claro o se complica por distintas razones (hijos de uniones anteriores de un solo miembro de la pareja; hijos adoptados por una sola madre o un solo padre, pero vinculados a ambos miembros de la pareja; hijos o hijas por vía de maternidad subrogada en el extranjero, vinculados legalmente a un solo padre). Entendemos que en el trabajo con las familias se ha de reconocer los vínculos reales establecidos entre los distintos miembros de la familia, así como su papel en la vida de niños y niñas, independientemente de su reconocimiento legal. 4. En cuanto a los modelos teóricos desde los que contemplar las familias homoparentales, creemos que es importante advertir de que una serie de marcos resultan inadecuados. No es útil ni pertinente aplicar a estas familias un modelo de déficit, suponiendo que son contextos que producirá perjuicios en el desarrollo infantil por el hecho de que en ellos no haya una determinada figura, masculina o femenina. Del mismo modo, son inadecuados los modelos de riesgo que partan de considerar que hay riesgos asociados a cualquier estructura familiar que se aparte de la convencional. A nuestro juicio, sí es pertinente un Modelo de reto, que parta de la consideración de que cada nuevo modelo familiar debe enfrentarse a retos y problemas específicos, y estos pueden llevar asociadas algunas de sus debilidades potenciales, al tiempo que ensayan nuevos modos de relación, nuevas respuestas y soluciones, que pueden convertirse en sus principales fortalezas. El hecho de haber tenido que enfrentarse a prejuicios hace que estas familias puedan sufrir rechazos y discriminaciones, pero también que sean buenos contextos para el aprendizaje de la tolerancia o de la libertad para vivir la vida afectiva y sexual de un modo honesto y feliz. Por otra parte, el hecho singular de que en estos hogares no haya un hombre y una mujer ha llevado a que se hayan apartado de patrones patriarcales de reparto de tareas y roles, con lo que están siendo buenos contextos para el aprendizaje de modelos fusionales e integrales de persona. 5. Es importante efectuar las adaptaciones necesarias en los protocolos, impresos, formatos de entrevistas o instrumentos de evaluación. Las madres y los

17 padres entrevistados en este estudio se han quejado con frecuencia de haber tenido que ser ellas o ellos mismos quienes aportaran las leyes y decretos en algunos servicios, y, sobre todo, de haberse encontrado con protocolos o formatos no adaptados a sus familias en distintas situaciones y contextos (educativos, sanitarios, de protección de infancia, judiciales, de la administración en general, etc.). Los servicios que trabajan con familias tienen el deber de revisar sus herramientas de información, registro, evaluación o intervención para adaptarlas a la diversidad familiar existente en general y a las familias homoparentales en particular. 6. Es imprescindible que nuestras escuelas den acogida real a las familias homoparentales, actitud que tendrá beneficios indudables no sólo para el alumnado y sus familias, que obtendrán así reconocimiento y aprecio, sino también para las propias escuelas, que se enriquecerán con la variedad de sus experiencias. Se trata de hacer la escuela. Así, es importante que desde el centro se conozca la realidad familiar de su alumnado, para tenerla en cuenta en las comunicaciones con las familias, así como en la programación de actividades que las impliquen. Algunas acciones para incluir a las familias son ciertamente sencillas: incluir en los carteles o dibujos con los que se adornan las paredes representaciones de distintos modelos familiares, incluyendo las homoparentales, o sustituir la celebración del día del padre o de la madre por la del Día internacional de las familias, establecido por la ONU el 15 de mayo. Asimismo, es importante mostrar una actitud de naturalidad ante la diversidad familiar, así como de firmeza ante las evidencias de burla o rechazo que puedan aparecer por tener una familia u otra. Por último, es fundamental el uso de materiales escolares que faciliten el abordaje de la homoparentalidad, en el seno de la diversidad familiar, desde un clima de normalidad y respeto. 5. Referencias Allen, M. y Barrell, N. (1996). Comparing the impact of homosexual and heterosexual parents on children: Meta-Analysis of existing research. Journal of Homosexuality, 32, (2), Bennett, S. (2003). International adoptive lesbian families: Parental perceptions of the influence of diversity on family relationships in early childhood. Smith College Studies in Social Work, 74(1), Brewaeys, A., Devroey, P.; Helmorhorst, F.M.; Van Hall, E.V. y Ponjaert, I. (1995). Lesbian mothers who conceived after donor insemination: A follow-up study. Human Reproduction, 10,

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