El Desarrollo de la Escritura Académica en la Universidad Dra. Priscilla Nuñez Tapia Facultad de Idiomas Ensenada. B.C priscilla.nunez@uabc.edu.mx Línea Temática: Lectura y Escritura en la Lengua Extranjera Resumen En la educación superior, los alumnos presentan problemas de escritura. Es por ello que es necesario desarrollar la escritura académica, como una tarea fundamental de la universidad para la reflexión y el aprendizaje significativo de los estudiantes. En consecuencia los profesores de las instituciones de nivel superior deben trabajar en colegiado para desarrollar la literacidad. Palabras claves: lectura, escritura, literacidad, escritura académica, habilidades y aprendizaje.
Leer y escribir son procesos intelectuales que se dan dentro de ciertas prácticas sociales y es un despropósito que la universidad no se ocupe de ellos, porque los desaprovecha como estrategias de aprendizaje y porque los desconoce como constitutivos de las comunidades académicas que han dado origen y sostienen la propia universidad. Paula Carlino. El siguiente apartado es parte de un estudio de caso realizado en un grupo de la licenciatura en docencia de idiomas, de la Facultad de Idiomas de la UABC Ensenada, acerca de la importancia de desarrollar la escritura académica en inglés. En este trabajo, se presenta a grandes rasgos cierta teoría del porqué es importante desarrollar la escritura en la universidad. Con ello, se pretende que la UABC considere esta información para el desarrollo de la escritura, ya sea en el idioma materno así como en otras lenguas, en especial en el idioma inglés el cual se utiliza en varias materias de las licenciaturas de esta institución. La escritura en la educación superior se ha convertido en un problema en las universidades a nivel mundial, ya sea porque los alumnos no saben escribir, no entienden lo que leen o simplemente no leen (Carlino, 2005). Así, surgen las siguientes interrogantes en relación al porqué es importante enseñar a escribir en los niveles superiores: Acaso los alumnos no deberían llegar sabiendo hacerlo solos? Quién tiene que hacerse cargo de la escritura en la universidad? Además, las asignaturas que cursan los alumnos están conformadas por un conjunto de conceptos, ligados a modos específicos de pensar, vinculados a formas particulares de escribir y estas formas deben ser enseñadas junto con los contenidos de cada materia (Di Stefano y Pereira, 2004 en Carlino 2004). Las interrogantes anteriores serán respondidas al final de este trabajo.
La palabra escribir proviene del latín scribĕre 1. Una de sus acepciones es representar las palabras o ideas con letras, con signos trazados en papel u otra superficie, y la otra es comunicar a alguien por escrito algo. Mientras que la palabra escritura, también del latín scriptūra 2, es la acción y efecto de escribir o el arte de escribir. La escritura, de acuerdo a Guemide (2008) es un proceso de construcción y los estudiantes deben desarrollar ésta habilidad, aunque resulte difícil. El proceso de escritura consiste en una serie de pasos que se siguen para escribir un texto. No se escribe un texto perfecto al primer intento. Dependiendo del escritor, se inicia desde la planificación, lluvia de ideas, categorización (la cual incluye la selección del tema, la audiencia, e investigación sobre el tema), organización del escrito, borrador, corrección-edición, y finalmente queda la versión final (White y Arndt, 1991). Creme y Lea (2000) afirman que, escribir y aprender son actos tan íntimamente relacionados que no se les puede separar. También mencionan que, escribir es un acto solitario e individual, el cual implica aprender, ya que cuando se escribe de forma apropiada sobre temas específicos, se aprende a descubrir el verdadero sentido de lo que se estudia. Aunque escribir es considerado un acto solitario, a muchos estudiantes que están acostumbrados a trabajar en grupo les resulta difícil. Para alumnos de primer año en la universidad, la escritura académica -la cual tiene características propias- puede sonar como de otro mundo. Por un lado, los estudiantes están tratando de adaptarse, de encontrar su identidad, de entender su concepción del mundo, y por otro deben de empezar a redactar en las disciplinas académicas. Al principio para muchos alumnos será difícil iniciar a escribir en este ámbito, pero poco a poco se irán desenvolviendo y se acortará la distancia entre lo que ya saben y lo que aun deben aprender (Creme y Lea, 2000). 1 Scribĕre. Definición citada del: Diccionario de la Real Academia Española, 2001. 2 Scriptūra. Definición citada del: DRAE, 2001.
Ciertamente la escritura académica es como aprender otro lenguaje, pero con la ayuda y guía de los docentes los alumnos la desarrollarán. Para ello, Creme y Lea en su libro Escribir en la Universidad señalan el proceso de la escritura académica que los docentes deben enseñar y el cual los alumnos deben seguir para desarrollar su redacción. Existen muchos autores que presentan el proceso de la escritura académica, el cual no es muy diferente entre uno y otro, y tampoco lo es del de Creme y Lea. Estos dos autores presentan los siguientes puntos a considerar: a) aprender los diferentes tipos de redacción; b) saber escribir en cursos diferentes; c) realizar lluvia de ideas a partir del título; d) plantearse preguntas guía para todo el escrito; e) conocer la estructura de los diferentes tipos de ensayos; f) desarrollar argumentos propios; g) revisar el trabajo desde introducción hasta conclusión para hacer las correcciones necesarias ya sean de contenido, estructura, gramática y puntuación; h) pedirle a un compañero de clase, amigo o colega que revise el trabajo para verificar la coherencia global del texto; i) entregar el trabajo; y j) a partir de la retroalimentación del docente o tutor aprender para mejorar las redacciones futuras. En la universidad, la escritura es la forma principal mediante la cual todos los miembros llevan a cabo sus estudios y comunican sus aprendizajes. Escribir y aprender son inseparables, pero aprender a escribir con eficacia puede ser uno de los componentes de la formación universitaria que más habilita intelectualmente y es una responsabilidad compartida por todos (Centro para el Estudio Interdisciplinario de la escritura, 2002; citado por Carlino, 2004). Guemide (2008), a su vez señala que la escritura requiere de habilidades para pensar con profundidad, analizar y clasificar. Ahora bien, no solamente se trata de que los estudiantes escriban. Como parte complementaria se tiene a la lectura y escritura como actos que se relacionan, tanto como el
escribir y aprender. De aquí provienen otros temas de investigación que se han realizado tales como: escribir a través del currículo, alfabetizaciones académicas, y escribir y leer para pensar críticamente. Estos temas deben ser considerados por los docentes al enseñar en cualquier nivel educativo y al enseñar a leer y escribir. Carlino (2004) precisa que cada docente debe ocuparse de cómo leen y escriben sus estudiantes. Esto se debe a que cada disciplina contiene su propia práctica discursiva, involucrada en un sistema conceptual-metodológico y afirma que aprender una materia no consiste sólo en adquirir sus nociones y métodos sino en manejar modos de leer y escribir característicos (p.7). Otra de las razones que atañe a los docentes en cuanto a la escritura de sus estudiantes, es la que se refiere a escribir o parafrasear lo que los estudiantes saben, al hacerlo, se dedica un tiempo de reflexión e incluso, se reciben comentarios sobre lo que se escribe (retroalimentación) y de acuerdo con Carlino (2004) corresponde a los docentes enseñar a pensar a sus estudiantes por medio de la escritura según los modos de pensamiento disciplinares (p.10). Ahora bien, se tiene el argumento de que quita tiempo enseñar a escribir a los estudiantes en las diferentes disciplinas que se llevan en la universidad, ya que los docentes y expertos de las diversas materias sólo pretenden trabajar en los contenidos específicos. Sin embargo, existe una forma de ocuparse de cómo los alumnos leen y escriben los conceptos en una materia sin que reste tiempo al aprendizaje de éstos. Carlino (2004) sugiere: Incluir actividades de lectura y escritura guiadas hace rendir más el tiempo para que los alumnos comprendan sus conceptos aunque simultáneamente los docentes transmitan algunos contenidos menos. Incluso, cuestiona a los docentes de la siguiente forma sigo exponiendo los innumerables temas de la materia o ayudo a que los estudiantes aprendan (a leer, escribir y a pensar) sobre los fundamentales? (p.14).
Esta cita anterior deja mucho que reflexionar a los docentes. En la vida escolar se pretende siempre cumplir objetivos en cierto tiempo cubriendo un número de temas, que en su mayoría no pueden ser profundizados significativamente por los estudiantes para el estudio rápido de cada uno. Como lo sugiere la autora en las preguntas de la cita anterior, sería lo más conveniente para desarrollar buenos conocimientos y competencias centrarse en número adecuado de temas para ser asimilados de mejor manera, utilizando la lectura, la escritura y la reflexión para su aprendizaje a largo plazo. En relación con lo anterior, Carlino (2005) resalta que es importante que los estudiantes desarrollen su habilidad cognitiva al igual que los docentes, en donde investiguen, planeen actividades (así como los maestros planean) o tareas para aprender más de las materias de estudio, lean para aprender y escriban reflexionando. Por otro lado, la mayor parte del tiempo se da por hecho que los estudiantes llegan a la universidad con los suficientes hábitos de estudio y de aprendizaje. Pero la realidad es que los alumnos no están preparados. Carlino (2005) menciona a Biggs (1998) quien dice con ironía que las clases expositivas son útiles para los alumnos que menos necesitan ayudan porque pueden aprender automáticamente sin ayuda (ya que vienen con habilidades de aprendizaje). Pero qué pasa con los otros alumnos? Con los que no son autónomos y no tienen hábitos de estudio? Biggs agrega entonces un punto clave que todos los maestros deben reflexionar lo que el alumno hace es realmente más importante para determinar lo que aprende que lo que el profesor hace (p.11). Así, los profesores podrán identificar las necesidades de los estudiantes para planear y enseñar las estrategias de aprendizaje que sean necesarias para los diferentes tipos de alumnos.
Un concepto importante a mencionar, en relación a cuando se habla de la escritura en la universidad, es que en la educación superior se maneja el concepto de alfabetización académica. La palabra alfabetización viene de la palabra en inglés literacy que puede definirse como cultura escrita. La alfabetización académica es un término anglosajón que tiene más de una década y tiene que ver con las prácticas de lenguaje y de pensamiento en el ámbito académico superior. Este concepto se puede definir como los modos de leer, escribir, buscar, adquirir, elaborar, reflexionar y comunicar conocimientos (Carlino, 2005). Como último punto, es importante mencionar que en México se realizó una compilación de investigaciones acerca de la escritura realizadas por docentes de diversas universidades mexicanas, en el libro de título EFL (English as a foreign language) Writing in Mexican Universities: Research and Experience (Santos, 2010); la traducción en español sería: La escritura en inglés -como lengua extranjera- en las universidades mexicanas: investigación y experiencia. Este libro presenta que en México los profesores de instituciones de nivel superior reconocen la importancia de que los estudiantes escriban, tanto en español como en el segundo idioma -inglés-, para desarrollar el pensamiento y las habilidades comunicativas. En esta compilación de Santos (2010) se incluye investigaciones de la escritura de estudiantes universitarios con los siguientes temas: a) los textos, procesos de escritura y los contextos; b) la retórica contrastiva, la voz, creencias y expectativas; c) el análisis de la escritura académica en español y en inglés, para identificar las formas de cada lenguaje; d) la comparación de los procesos de escritura en español y en inglés para encontrar si lo que se aprende en un lenguaje influye a los procesos de escritura en otro idioma; e) la escritura reflexiva; f) los problemas que los estudiantes enfrentan al escribir; g) el apoyo que reciben los estudiantes de sus instituciones previas a la universidad o posgrado, así como el apoyo de los docentes para
desarrollar la escritura académica; y h) la respuesta de los estudiantes y los cambios que realizan en sus escritos a partir de la retroalimentación del docente. Todas estas investigaciones nos muestran que la escritura a nivel superior en México está siendo estudiada y desarrollada por docentes interesados en mejorar la formación de sus educandos. Los profesores investigadores de estos temas, están haciendo un gran esfuerzo, pero es sólo un trabajo de algunos que necesita se sumen más profesores para realizar más cambios en la educación, por lo que se requiere de un trabajo colegiado, no sólo de una universidad o estado sino de un trabajo nacional e internacional el cual ya ha comenzado en conferencias, congresos entre otros. Por mencionar se encuentra la conferencia internacional de renombre organizada por los docentes investigadores de escritura Charles Bazerman y Paul Rogers Writing Research Across Borders, en español la traducción sería La investigación de la escritura a través de las fronteras, realizada cada tres años, la última en el 2011. Es importante que todos los maestros de la escritura estén conscientes que necesitan las bases del conocimiento acerca de las investigaciones que se realizan de la escritura, las cuales aportan del aprender a escribir y de cómo ser un buen escritor (Encinas, Keranen y Salazar, 2010 en Santos 2010). Esto ayudará a los maestros a estar actualizados para proveer a sus estudiantes las herramientas necesarias para mejorar su escritura académica, pero también les darán a los docentes conocimientos actuales para planear sus clases entorno a la escritura. Hay que recordar lo que plantea Bazerman (2010, en Santos 2010), quien resalta que la escritura en cualquier idioma tiene que estar llena de experiencias, conocimientos y prácticas. Además, menciona que la escritura educativa proviene de muchos caminos y experiencias, y que el entender estas influencias y su relación los docentes serán capaces de darse cuenta qué es lo que los estudiantes están aprendiendo, qué necesitan aprender, cómo los podemos apoyar y
finalmente cómo la escritura se puede convertir en una herramienta para que los educandos expresen sus pensamientos y propósitos en cualquier contexto, profesión y lenguaje que elijan. Estas palabras de Bazerman puntean una gran verdad en el significado que tiene el desarrollar la escritura, lo cual todos los docentes deben tener presente y hacer los cambios necesarios en la práctica docente en pro de la literacidad. En conclusión, resulta entonces importante tener consideraciones particulares para la enseñanza de la escritura en el nivel universitario. Queda claro que la lectura y la escritura van de la mano en el desarrollo de habilidades y en el aprendizaje. En México un conjunto de maestros investigadores en la enseñanza de la escritura han comenzado el camino del trabajo colegiado nacional y también internacional para compartir proyectos y experiencias que enriquecen a muchos pero también donde se aprende de la escritura académica. En relación a las preguntas planteadas al inicio de este trabajo: Acaso los alumnos no deberían llegar sabiendo hacerlo solos? Quién tiene que hacerse cargo de la escritura en la universidad? Nos damos cuenta que los estudiantes necesitan mucha ayuda y no todos llegan con habilidades autónomas a la universidad. La universidad y sus profesores tienen la gran responsabilidad de desarrollar la escritura académica en los educandos. Además, en lo planteado en este trabajo, se resalta la necesidad de que los maestros estén actualizados en las investigaciones de escritura a nivel internacional para así aplicar lo estudiado en sus planes de clases con el propósito de desarrollar una cultura actual de la escritura en el ámbito superior en los alumnos, ya sea en el idioma materno así como en otras lenguas. Asimismo, se deben de conocer y enseñar las bases de la escritura y su proceso, guiar a los estudiantes durante la redacción en diversos contextos, desarrollar su pensamiento crítico como el reflexivo, utilizar diferentes actividades y estrategias
de aprendizaje, y dar tiempo para que los estudiantes construyan mejor su comprensión de lo aprendido o leído por medio de la escritura. Referencias Bazerman, C. (2010). Preface. En Santos, S. (Ed) EFL Writing in Mexican Universities: Research and Experience. 8-17. Nayarit, Mexico: Universidad Autónoma de Nayarit. Carlino, P. (2004) El proceso de escritura académica: cuatro dificultades en la enseñanza universitaria. Educere (Vol. 8) Num. 26. 321-327. Recuperado el 6 de Septiembre del 2012, de: http://www.psi.uba.ar/academica/cursos_actualizacion/recursos/carlino_cuatro.pdf Carlino, P. (2004) Colección Textos en Contexto Núm. 6. Buenos Aires, Asociación Internacional de Lectura-Lectura y Vida. Carlino, P. (2005). Escribir, leer y aprender en la Universidad: una introducción a la alfabetización académica. Buenos Aires, Argentina: Fondo de Cultura Económica. Creme, P. y Lea M.R. (2000). Escribir en la universidad. Editorial Gedisa. España. Di Stefano y Pereira. (2004). La enseñanza de la lectura y escritura en el nivel superior: proceso, prácticas y representaciones sociales. En Carlino, P., Textos en contexto Núm.6, Buenos Aires, Asociación Internacional de Lectura-Lectura y Vida. 25-39. Encinas F., Keranen, N.S., Salazar, M.G. (2010). Chapter 1: An Overview of EFL Writing Research in Mexico: What is investigated and how. En Santos, S. (Ed) EFL Writing in Mexican Universities: Research and Experience. 8-17. Nayarit, Mexico: Universidad Autónoma de Nayarit.
Guemide, B. (2008). A New Way of Developing Coherence in Writing. The Quarterly Journal of David s English Teaching World. 5. 22-23. Recuperado el 13 de Agosto del 2012, de: http://www.eltworld.net/journal/horizons%20issue%2005.pdf Santos, S. (2010). EFL Writing in Mexican Universities: Research and Experience. Nayarit, Mexico: Universidad Autónoma de Nayarit. White, R. y Arndt V. (1991) Process Writing. Longman Group, England. 144 pp. Writing Across Borders International Conference, Recuperado el 19 de Septiembre del 2012, de: http://www.writing.ucsb.edu/wrconf11/