Protección de cascos de modelos RC Capítulo IV

Transcripción

1 Protección de cascos de modelos RC Capítulo IV Autor: José González Álvarez Qué tipo de pinturas se usan en los modelos de RC?. La respuesta sería: cualquiera. Todas las pinturas son válidas si se tienen en cuenta sus factores positivos y negativos, se compensan y se admite el nivel de exigencia / dificultad frente a la vida esperada del modelo. Al iniciarnos en el modelismo naval, si nuestra pretensión es fabricar nosotros mismos un modelo Radio Controlado (RC) sin contar con la compra de un kit específico, nos asaltará la duda y el miedo a fabricar el casco con una correcta protección. Un casco de resina y fibra sería la solución ideal pero, el desconocimiento de la técnica y manejo de estos productos frena nuestra elección por este método de construcción. Necesitamos avanzar en la construcción de varios modelos con métodos más sencillos para decidirnos por esta técnica más compleja. Un casco de resina y fibra, salvo la dificultad de su construcción, tiene todas las ventajas frente a la tradicional construcción mediante tracas de madera pero, para un experto modelista o incluso un principiante, no debería ser un obstáculo el construir un casco por el método habitual en madera únicamente protegido mediante finas capas de pinturas y que funcione perfectamente durante años en el agua sin el más mínimo problema. Hablaremos en este primer artículo dirigido a la protección de cascos de modelos RC, de una protección sencilla mediante capas simples de pintura. Para ello hablaremos de dos niveles de calidad/protección/dificultad basado en dos tipos de resina: alcídica de un solo componente en un primer caso y una resina epoxi de dos en el segundo. Las resinas En los modelos RC la pintura del casco toma un protagonismo especial, no solo es su función estética, la protección frente a la agresión del ambiente al que estará sometido el modelo pasa a ser la estrella. No trataremos el pintado del resto del modelo. En este caso lo haremos de la misma forma y con las mismas pinturas y técnicas comentadas en artículos anteriores donde tratamos del pintado de modelos estáticos. En todos los y pinturas el protección se barrera que de ahí que sea el espesor y esta, mejor tendremos, unos límites tensión de la conviene no en nuestro caso ya que no grandes casos, métodos mecanismo de debe al efecto ofrece la resina, cuanto mayor reticulación de protección aunque hay marcados por la película que rebasar, aunque es difícil se dé emplearemos espesores. De todos son bien conocidas las resinas alcídicas, también conocidas como alquídicas, sintéticas, gliceroftálicas o al aceite, ya que son las habituales en nuestra vida cotidiana del

2 bricolaje y son las que habitualmente se venden en droguerías. Titanlux o Titanlak son marcas conocidas de estas familias. En modelismo, Umbrol puede ser la referencia más conocida. Dentro de esta familia hacemos referencia y utilizaremos únicamente a las pinturas con disolvente y nunca a las acrílicas o base agua debido a su menor protección frente al agua. Si en el apartado de pinturas para modelos estáticos aconsejaba el uso de pinturas específicas de modelismo, ya que están preparadas para pequeñas superficies y el objetivo básicamente es estético, en el actual caso de RC aconsejo las pinturas habituales que utilizamos en nuestras casas. Las que encontramos en cualquier droguería como las indicadas de Titan. Son más económicas y unas propiedes que las hacen más adecuadas, como la capacidad de aplicar espesores de película más gruesos, mayor dureza, etc.. Solo hay que comprobar, cuando abrimos un envase de Umbrol y otro de Titan o similares, la diferencia de viscosidad de cada tipo de pintura. Con la pintura Humbrol difícilmente se puede conseguir más de 30 micras de espesor. Con Titanlux o una similar aplicaríamos hasta 60 micras por capa. Aparte otras propiedades que las hacen más convenientes como su modificación con uretanos para darles más dureza. Una de sus características de las alcídicas es que son saponificables, es decir, las cadenas moleculares de las que está compuesta una vez seca, se destruyen cuando están en contacto prolongado con el agua, por tanto no son aptas para inmersión. Dicho así suena tan terrible que deberíamos olvidarnos de ellas, pero debemos tener presente que nuestro modelo, como mucho va a estar dos horas en el agua cada muchos días. Esto lo comento por si algún modelista decide dejar su modelo aparcado en el estanque de su finca durante el invierno. A título de curiosidad, comentaros lo habitual y característico que es ver a los botes de cualquier puerto y barcos de ribera pintados con el típico minio de plomo, incluso hoy día, que no es otra cosa que una resina alcídica pigmentada con plomo. Esto hoy día es una chapuza. El minio de plomo era (ahora está prohibido su uso) un pigmento con unas propiedades anticorrosivos magnificas para el acero pero que no sirve para la madera. La resina al ser alcídica se descompone en el agua con el tiempo así que funcionalmente no es una buena opción. Hace muchos años, cuando la pintura la fabricaban los propios pintores, su protección se debía más a su elevada penetración en la madera ya que la pintura se fabricaba con aceites de linaza cocida que tardaban varios días en secar. Hoy en día con las resinas sintéticas de rápido secado y menos humectantes que apenas protegen en estas circunstancias. Para nuestros primeros modelos son perfectamente válidas aunque necesitará unos mayores cuidados y un control y mantenimiento más exhaustivo. Las resinas óptimas para proteger nuestro modelo son las de dos componentes y específicamente las Epoxi. Estas resinas se caracterizan por la extremada reticulación de su estructura molecular cuando se inicia el proceso de curado, dificultando el paso del vapor de agua y oxigeno a través de la película de pintura una vez seca. También por su elevada resistencia mecánica. Tienen el inconveniente de su precio y una mayor dificultad de trabajar con ellas al tener que manejar dos componentes con un tiempo limitado de manejo. En el caso de usar este tipo de pinturas, dado que normalmente no se suministran en cualquier color podemos aplicar como capa de acabado una resina alcídica de un componente la cual es fácil obtener en cualquier color y cantidad. Ambas calidades pueden fabricarse transparentes (barniz) ya que no es otra cosa que la misma pintura sin pigmento, el problema es su menor calidad de protección frente a sus homónimos con pigmento. Es necesario, en los casos que queramos un acabado barnizado y en especial en los barnizados con alcídicas, un seguimiento muy exhaustivo para comprobar el estado del modelo en cada navegación y hacer un habitual mantenimiento. Por supuesto, la parte sumergida debe estar pintada con pinturas de color, incluida la obra muerta y solo la parte superior que esta fuera del agua se debería barnizar. Fichas técnicas del producto Cuando nos suministran cualquier pintura es importante que nos faciliten las fichas del producto que compramos. Una de ellas nos facilita los datos básicos: espesor típico de la capa de pintura, rendimiento, disolvente recomendado, tiempos de secado y curado, tiempo mínimo y máximo de repintado y otros datos de interés. La otra ficha es la de seguridad y se refiere a

3 los compuestos de que está formada la pintura y sus riesgos potenciales de salubridad, así como qué se debe hacer en caso de accidente (ingestión, contacto con los ojos, la piel, etc.). Comentemos alguno de los datos, que a mi entender, son los más interesantes. Rendimiento. Este valor refleja el consumo de pintura en la aplicación para el espesor reflejado en la ficha y se indica en litros por m2. Este valor se puede obtener de la formula teórica: Rendimiento = Sólidos Volumen (SV) x 10 / espesor a aplicar Los SV, también conocidos como materia fija y que deben ser facilitados en la ficha de producto, indica el porcentaje de la parte sólida que contiene la pintura en el envase. El resto es disolvente, por tanto será este sólido la parte la que quedará formando la película de pintura. A este rendimiento (teórico) habrá que restarle las pérdidas que se producen el la aplicación (restos que quedan en el envase, en la brocha, en la pulverización si se aplica a pistola, etc.). Podemos calcular un 15/20% de perdida para una aplicación a brocha. El valor que nos da la ficha normalmente es el práctico, en cualquier caso lo deberá especificar. El espesor a aplicar se indica en micras (1 mm = 1000 micras). Tiempos de sacado. De fácil comprensión pero uno de lo parámetros que más problemas provoca en la pintura. Nos indica el tiempo que debemos esperar para manejar de nuevo el modelo o aplicar nuevas capas de pintura. El secado se debe a dos fenómenos, a la evaporación del disolvente y la reacción química que se produce internamente en la resina. Dependerá básicamente de la temperatura y ventilación del habitáculo en el que se encuentre el modelo. A mayor temperatura y ventilación de aire menos tiempo se necesita para el secado. Los datos de la ficha normalmente se indican para una temperatura de 20ºC. El tiempo de secado para poder manipular es inferior al de repintado de la capa siguiente y es muy importante esperar a que se cumpla este antes de pintar nuevas capas de pintura. Es un error habitual aplicar antes de tiempo. Cuando tocamos la superficie con los dedos, puede dar la sensación que esta seca pero es posible que no sea así si no hemos esperado el tiempo necesario o la temperatura sea baja. Esto puede provocar la retención del disolvente en el interior de la capa base y un arrugamiento de la capa de pintura si aplicamos otra encima. Debemos aplicar la pintura con ventilación pero nunca con corriente de aire ya que no nos permitirá trabajar bien con el pincel ni que nivele correctamente la resina ya que secará antes de que fluya y se extienda. Os aconsejo dejéis un mayor tiempo de secado de la capa de pintura de lo aconsejado en la ficha técnica antes de una nueva aplicación. Espesor de capa. Nos indica el espesor que dejará la pintura en la aplicación. Este espesor dependerá de la formulación de la resina, viscosidad y cantidad de disolvente que contenga. Si echamos disolvente en exceso a la pintura liquida, la capacidad de aplicar un espesor adecuado se verá afectada y en una aplicación normal, la pintura se descolgará en forma de olas o lágrimas. Si no añadimos disolvente puede que la nivelación de la pintura sea pobre y el espesor excesivo. En la ficha nos indicará qué cantidad de disolvente es la apropiada en cada caso. Es la experiencia la que mejor nos guiará ya que cada tipo de pintura tiene una viscosidad diferente (más o menos liquida). El espesor habitual de una pintura alcídica de un componente es de 40/50 micras (0,04/0,05 mm.) y de una pintura epoxi de 75 a 150 micras. Construcción y preparación del casco Para una correcta protección debemos partir de un casco muy bien construido. No es aconsejable que la perfecta línea de aguas se responsabilice a la masilla y que

4 esta tape y corrija los bollos o fallos de continuidad del casco. El éxito de nuestro trabajo se deberá a varios factores: a la firmeza de las tracas del casco, la perfecta cubrición con la pintura sin defectos y en un correcto mantenimiento posterior. Consejos sobre la fabricación del casco A diferencia de un modelo estático con un acabado color madera, donde el aspecto, fabricación y colocación de tracas es muy importante ya que todas las juntas son vistas, en el caso de los RC podemos fabricarlo sin excesivo cuidado en lo relativo a la estética de construcción, ya que ira oculto con la pintura, pero no en su robustez. Es evidente que un casco de madera tiene problemas que surgen debido a su particular método de construcción, a trozos, por medio de tracas que deja numerosas grietas y espacios abiertos entre ellas. Otro problema añadido es que se utiliza para las uniones cola blanca que no es resistente a la humedad. Es importante dejar el mínimo de espacios o agujeros (a pesar de que utilicemos masillas para rellenarlos) y utilizar tracas encoladas entre sí de suficiente grosor y consistencia para que no se muevan o se hundan cuando lo agarremos con fuerza. Todos sabemos que la madera es un material blando, elástico y poroso que en contacto con el agua la absorbe rápidamente. Cuando se produce un contacto con esta, debido a un poro o daño, la madera se hincha rompiendo aún más la capa de protección de la pintura y provocando un deterioro aún mayor. Podemos decir que es un ser vivo, se mueve. mucho nudo debido a estos puntos débiles. La pintura no es capaz de absorber o acompañar el movimiento de la madera y se agrieta siguiendo la línea de contacto entre tracas (las más débiles) cuando estas se mueven. Es necesario por tanto emplear una buena madera densa para que la absorción del la humedad sea mínima. Debemos evitar las maderas resinosas de La película protectora de pintura es muy fina y en contra de lo que se cree no es totalmente impermeable. Con el tiempo, el vapor de agua va penetrando a través del film y más rápido aún, si se agrieta o se produce un poro en ella el contacto de la madera con el agua es inmediato y el deterioro del casco rapidísimo. En los modelos de RC el número de cuadernas suele ser menor que en un estático debido a la necesidad de dejar espacio para motores, baterías, relés, etc. y esto implica una menor resistencia de las tracas a que cedan cuando presionamos el espacio del casco entre estas. Para reforzar esta área y evitar que se muevan, podemos pegar con pegamento epoxi unas finas chapas de madera perpendiculares a las tracas y paralelas a las cuadernas o con el mismo pegamento epoxi y el uso de un pequeño pincel como si de una pintura se tratara, cubrir el área a reforzar y pegar sobre él un trozo de velo de fibra de vidrio o un trozo de gasa o venda bien extendida. Aprisionamos bien la gasa o fibra sobre la superficie donde hemos aplicado el pegamento. Una vez seca se aplica una nueva capa de pegamento para reforzar. El pegamento epoxi es caro y para una zona tan extensa gastaremos mucho así que otra opción más económica puede ser la cola blanca estándar. En este caso aplicar con brocha de forma generosa para que sangre a través de la venda o fibra. La cola que ha sangrado se repartirá por encima con la brocha. Una vez bien seca (esperar varios días) aplicaremos una nueva capa fina para terminar de sellar todos los huecos que nos queden entre los filamentos. Nuevamente esperamos a que seque bien y aplicamos la protección general cuando llegue el

5 turno todo el casco por su interior. Recordar que la cola blanca no es resistente al agua así que debemos proteger con pintura estas zonas como si de madera se tratara. Resinas alcídicas de un componente Habíamos decidido para esta primera opción, la aplicación de una sencilla resina alcídica de un solo componente. Con relación a la aplicación, realmente no hay mucha diferencia entre las alcídicas y las de dos componentes salvo el hecho de tener que mezclar en las segundas lo dos componentes para iniciar su reacción química. Una buena calidad de pintura sería el Titalux (brillante) o Titanlak (satinado). Los disolventes tienen su importancia. Dos marcas diferentes pueden ser perfectamente válidos pero de composición distinta con velocidad de secado desigual lo que puede dar un acabado distinto, provocar descuelgues de la pintura o cualquier otra diferencia física. No utilizar disolventes universales aunque nos lo aconseje el dependiente (normalmente saben poco de nuestro hobby). Solo el disolvente aconsejado por el fabricante, aguarrás (esencia de trementina) o disolvente sintético para resinas alcídicas. El aguarrás es bastante lento y nivelará mejor la pintura dando un buen acabado aunque tardará más en secar. El anti incrustante en los buques reales es totalmente mate y si queremos ser fieles a la realidad tendremos que acabar el sistema de protección aplicando una nueva capa fina de otro producto mate o bien, con lana de aluminio de grado fino frotaremos ligera y superficialmente. Veremos como se matiza con facilidad. Solo nos queda prestar atención y cuidado del modelo después de su navegación. Una buena limpieza y secado e incluso, en el caso de detectar humedad o agua en el interior del modelo, utilizar un secador de pelo para secar la zonas con difícil acceso. Si observáramos algún defecto, pequeños abultamientos en alguna zona del casco, en especial siguiendo las líneas de las tracas, inmediatamente proceder a su reparación. Lijado del casco completo con lija de agua de grano 400, con lija de 80 ó 100 en seco eliminar la pintura en las zona (ligeramente más amplia) con problemas y aplicación de varias capas en este área a reparar en forma de parcheo y finalmente una capa general a todo el casco con la misma pintura para igualar. Protección mediante resinas de dos componentes Un segundo tipo de resina, con un mayor grado de dificultad de aplicación, es la resina epoxi y su dificultad se debe a que sus dos componentes que la componen, son necesario mezclarlos y que, dependiendo de factores como temperatura, vida de la mezcla, proporciones de mezcla entre componentes y otros muchos factores

6 más, pueden dar resultados diferentes y algún que otro problema. En cualquier caso su resultado es notablemente superior a las pinturas alcídicas comentadas anteriormente. En esta parte del artículo nos vamos a centrar, más que nada, en la explicación de la resina ya que el resto de explicaciones sobre la preparación del casco, aplicación, número de capas, etc., son las mismas que en el caso anterior. Podemos encontrar en el mercado muchísimos tipos de resinas epoxi de acuerdo a las infinitas formulaciones posibles que permite la química, cada uno con unas prestaciones y características distintas y formuladas para cumplir un objetivo concreto. En nuestro caso, para la protección del casco de nuestro modelo, cualquiera de las resinas que encontremos en las tiendas especializadas es válida. Las exigencias en nuestro hobby no son altas y podemos adaptarnos con facilidad a las distintas propiedades de las resinas comercializadas. Encontramos este tipo de resinas en almacenes de pintura para profesionales que hay en cualquier ciudad, en tiendas para bellas artes y modelismo (menos habitual en ciudades pequeñas) y como no, en Internet. En las primeras, el tipo de epoxi que encontramos es muy variable ya que se comercializa para la protección en la industria y el número de productos de los muchísimos fabricantes, con características distintas, es elevadísimo. El sistema aplicado en su totalidad, a excepción de la última capa de color, deberá ser de la misma familia (epoxi) ya que si aplicamos en sus primeras capas una resina de un componente es muy probable que se arrugue debido a la alta agresividad del disolvente epoxi. Vamos con la pintura. Antes del mezclado, con un palo fino y ancho para facilitar el movimiento y homogenización de la resina, batimos primero los dos componentes por separado, especialmente la base por ser más espesa, rascando los lados y el fondo del bote haciendo un movimiento ascendente al tiempo que giramos alrededor del bote. No haremos el proceso en cada bote con el mismo palo por razones obvias. Debemos preparar una cantidad ligeramente superior para asegurar que con una mezcla es suficiente y evitar hacer nuevas mezclas. No mucho más, ya que una vez hecha la mezcla y se inicie la reacción, lo que nos sobre no nos servirá. Comprobamos en la ficha técnica del producto las proporciones de mezcla por volumen de cada componente. Suponemos como ejemplo que indique 75:25 (75% de base y 25% de endurecedor). Si las proporciones que nos indica la ficha del producto son en peso, debemos utilizar una balanza con una cierta presión para calcular las cantidades de cada componente en lugar de utilizar jeringas. Hay que tener presente en no obsesionarnos con la exactitud de la relación siempre se permite una ligera desviación. En el caso de una mezcla distinta tendríamos valores de secado distintos o diferencias de elasticidad, etc. pero como en nuestro caso las prestaciones que necesitamos no son tan excesivas podríamos permitirnos ese ligero desvío. Considerando la mezcla en volumen y tomando como referencia el ejemplo anterior de relación en volumen 75/25 y que con una cantidad de mezcla de 120 cc tendríamos suficiente para pintar todo nuestro modelo por el exterior (nos daría para 1 m2 aprox. por capa), retiramos del componente base con una de las jeringas 90 cc. ( 75% de 120 cc.) y retiramos del componente endurecedor 30 cc ( 25% de 120 cc.). Introducimos los dos componentes en un frasco limpio de los que habitualmente compramos con alimentos. Si es necesario añadir el disolvente, con la jeringa de la base, que aprovechamos para limpiar, cogemos la cantidad de disolvente necesaria y añadimos a la mezcla de resina. Agitamos la mezcla enérgicamente hasta su total homogenización y ya está

7 lista para ser aplicada, no sin antes olvidar que este tipo de pintura tiene limitado su tiempo de uso, dato que encontraremos en la ficha técnica del producto como, vida de mezcla o pot life (en ingles). Habitualmente este valor está entre 1 y 4 horas dependiendo del reactivo y factores externos como temperatura ambiente, cantidad de endurecedor, etc.. Como la pintura que hemos comprado se suministra en un color estándar (normalmente rojo, gris o transparente) que no coincidirá con el color que hemos escogido para nuestro modelo, podemos aplicar sobre la capa epoxi, previamente lijada con lija de agua grano 400, una última capa de resina convencional alcídica con el color elegido. Proceso de pintado Los comentarios de este proceso son los mismos para ambos tipos de resina. En primer lugar, debemos aplicar una pintura de sellado a todo el casco, por el interior y exterior. Esto nos servirá para humectar bien la base de madera y prepararla para recibir la masilla. Reduciremos la viscosidad con disolventes (20/30%) para favorecer la penetración de la pintura por capilaridad. Si iniciamos nuestro trabajo por el exterior, comenzamos aplicando la masilla que deberá ser de dos componentes y resistente al agua. Taparemos todos los huecos e imperfecciones así como corregir la falta de continuidad del casco. Normalmente requiere una capa general raseada a cero que rellenará aquellas zonas o huecos que se necesite y no deje espesor en aquellas zonas que presenta una superficie lisa. Una vez lijada a conciencia con lijas en seco de grano 60/80 o de agua de grano 150, procedemos a aplicar una nueva capa de pintura. En el lijado de esta primera capa, si lo hacemos con lijas de agua es normal que esta llegue a tocar la madera y se hinche debido a la humedad. Esto no es tan grave ya que con una ligera pasada una vez seca la madera lo corregimos. En las sucesivas, al no tener que lijar masilla, el lijado es menos agresivo. Por supuesto debemos tener cuidado en sucesivos lijados de la pintura en no insistir en exceso, para ello iremos reduciendo el grano de la lija para que no coma mucho y solo de una ligera rugosidad. En lugar de utilizar imprimaciones o selladoras, yo prefiero utilizar pinturas brillantes de acabado ya que los defectos resaltan y se ven mejor, independientemente que, como norma general, una pintura brillante tiene una mayor proporción de resina y protege más que una mate que contiene más cargas. Marcamos aquellos defectos que veamos (van disminuyendo en sucesivas capas) y aplicamos una nueva capa fina de masilla. Lijamos con lijas de agua de grano 240 y nueva capa de pintura.

8 El grano de la lija se escoge para dar una determinada rugosidad y esta depende del tipo de pintura y espesor de la capa. Una pintura epoxi de 150 micras requiere una rugosidad mayor que una alcídica de 30 micras. Las últimas capas de resina requieren un acabado estético y la rugosidad debe ser mínima luego lijaremos con lijas de agua de grano 400. La calidad de nuestro modelo dependerá del número de capas y corrección de defectos que realicemos. A mayor número de capas mejor acabado y protección. Normalmente con tres fases de enmasillado y un total de 5 ó 6 de pintura (2 de acabado) estará listo el casco. que una menor pero más gruesas. En la aplicación de pintura siempre es preferible un mayor número de capas finas También es importante la protección del interior de nuestro modelo. Habitualmente entra agua por la borda y esta, al quedar retenida, actúa de igual forma que por el exterior con el agravante de la limitada ventilación que no favorece el secado y acceso tan limitado a los rincones, de ahí que pueda mantenerse húmedo y actuando durante mucho tiempo. Dado que no necesitamos una lisura especial, no es necesaria la aplicación de masillas en el interior. Las cuadernas suelen ser de maderas de menor calidad (contrachapado), y con muchas esquinas y cantos vivos que es donde la pintura tiene su mayor dificultad de protección. En estas zonas, al tratarse de pequeños cajones la tendencia es a dejar elevados espesores o incluso derramar pintura dejando pequeños charcos. Esta terminará cuarteando con el tiempo así que conviene que las capas sean de espesores razonables.