Observatorio Estatal de la Igualdad en el Emprendimiento. Informe 2011 de la igualdad en el emprendimiento

Transcripción

1 Observatorio Estatal de la Igualdad en el Emprendimiento Informe 2011 de la igualdad en el emprendimiento Diciembre de 2011

2 El Observatorio Estatal de la Igualdad en el Emprendimiento es fruto de la colaboración entre: - La Secretaría de Estado de Igualdad, a través de la Dirección General para la Igualdad en el Empleo y contra la Discriminación, a la que corresponde, entre otras funciones, el apoyo a las mujeres para el autoempleo y el fomento de la actividad emprendedora. - La Fundación INCYDE, de las Cámaras de Comercio, dedicada al apoyo a la creación y consolidación de empresas, especialmente en beneficio de los sectores menos favorecidos, a través de formación y asesoramiento, así como mediante la realización y promoción de estudios e investigaciones. El equipo de trabajo de este informe ha estado compuesto por: Aurelio Jiménez Romero Vanessa Crespo Isla Y ha contado con la colaboración de: Carmen Cesteros Fernández Margarita Artal Serrat

3 Contenidos 1. Introducción Perfil de las emprendedoras españolas Edad Estado civil Personas dependientes Nivel de renta Apoyo familiar al emprendimiento Lugar de origen Motivación para emprender Nivel formativo Experiencia emprendedora previa Presencia en redes sociales y uso de las TIC Perfil de las empresas creadas por mujeres Sectores Formas jurídicas Inversión media Empleos esperados Dimensión de actividad Pertenencia a estamentos empresariales Barreras para el emprendimiento femenino Conclusiones y recomendaciones Bibliografía Agradecimientos... 33

4 1. Introducción La actividad emprendedora es básica para cualquier economía, también para la española, y la contribución femenina a la misma constituye un factor que impulsa la igualdad efectiva entre mujeres y hombres y hace a todas las personas partícipes por igual en el desarrollo socioeconómico del país. Hablar de la igualdad en el emprendimiento es hablar de la situación de las mujeres y los hombres en la sociedad, y del papel del emprendimiento en la misma. Las mujeres presentan perfiles y necesidades específicas diferenciadas en muchos casos de los hombres, que deben ser tenidas en cuenta si se quiere apoyar un desarrollo igualitario de la creación y consolidación empresarial. Sin embargo, la existencia de datos e información que analice pormenorizadamente estas diferencias y contribuya al diseño de las mejores políticas públicas en este ámbito es heterogénea y discontinua, razón por la que se decidió crear el Observatorio Estatal de la Igualdad en el Emprendimiento. Este informe es el primero de una serie anual que nace con el objetivo de convertirse en un referente apoyado en un trabajo constante de exploración y análisis por parte del Observatorio, pero también de las entidades públicas y privadas que trabajan a favor del emprendimiento en España. Este primer informe se ha construido a partir de rigurosas fuentes secundarias a cuyos responsables agradecemos su colaboración-, complementadas con una modesta encuesta realizada desde el Observatorio. Los informes venideros contarán con mayor información en calidad y cantidad gracias a la elaboración en el Observatorio de una guía de indicadores específica para su uso por las entidades y personas que trabajan habitualmente con emprendedores y emprendedoras. 4

5 2. Perfil de las emprendedoras españolas La caracterización típica de la persona emprendedora indica que es hombre, de 36 años, con estudios profesionales superiores o universitarios, que ha recibido formación específica para emprender y con un nivel de renta alto 1. Sin embargo, como el propio informe GEM subraya, este perfil ha de tomarse con cautela pues esconde una gran heterogeneidad. En cualquier caso, es cierto que históricamente la actividad emprendedora de las mujeres españolas ha sido inferior a la masculina, al menos en lo que se refiere a la actividad económica formalizada. Hoy en día diversos factores económicos, pero también sociales y culturales, están ayudando a revertir esta tendencia, de forma que cada vez más las mujeres españolas se plantean la opción del emprendimiento como alternativa profesional. Esto es especialmente perceptible entre los jóvenes: según los datos de la encuesta realizada por ESADE en marzo de , no se observan diferencias estadísticamente representativas entre hombres y mujeres en las actitudes vinculadas a la iniciativa emprendedora, lo cual es positivo. Sin embargo, sí es significativa en términos estadísticos la diferencia entre ambos sexos cuando se pregunta directamente si se imaginan en un futuro creando su propia empresa (contestaron afirmativamente el 81% hombres frente al 77% de las mujeres), lo que indica que persisten modelos de desarrollo profesional con sesgo de género. Además, analizando la creación efectiva de empresas se percibe la existencia de una brecha entre hombres y mujeres que, si bien presentaba una tendencia decreciente, ha vuelto a aumentar desde el comienzo de la crisis en 2008: la participación femenina en las iniciativas que están en fase emprendedora en España el año 2010 supone un 36,4% del total, un 5,9% menos que antes de la crisis 1. De cualquier manera, para comprender mejor la relación de las mujeres con el emprendimiento conviene comenzar por la caracterización de aquellas que dan el paso de poner en marcha una iniciativa económica Edad La iniciativa emprendedora es especialmente significativa entre los jóvenes, colectivo caracterizado por su creatividad, innovación, espíritu emprendedor y aventurero, menor aversión al riesgo y mayor sensibilidad hacia los cambios 1 Informe GEM España Libro Blanco de la iniciativa emprendedora en España. Fundación Príncipe de Girona

6 tecnológicos, lo que los hace más proclives a embarcarse en este tipo de proyectos 2. Sin embargo, y aunque la elevadísima tasa de desempleo juvenil que existe en España en estos momentos está haciendo que la edad media de las personas emprendedoras disminuya, lo cierto es que la Tasa de Actividad Emprendedora 3 de los menores de 25 años se sitúa por debajo del 3% en Y es que, aunque los jóvenes presenten predisposición al emprendimiento, la falta de experiencia, de financiación y de contactos personales, dificultan el desarrollo efectivo de sus iniciativas. Según el estudio de ESADE, y para ambos sexos, las actitudes positivas hacia el emprendimiento disminuyen con la edad. Así, es habitual que las personas, tanto hombres como mujeres, opten por iniciar su actividad profesional trabajando para un tercero y sólo en algunos casos y después de haber acumulado experiencia, contactos y, en ocasiones, recursos, deciden optar por crear su propia empresa. En definitiva, tanto los datos del GEM como los de la Fundación INCYDE sitúan en 36 años la edad media de las personas que están emprendiendo actualmente en España, sin que existan más que ligeras diferencias entre hombres y mujeres Estado civil Este no es un dato habitual en los estudios de caracterización de las personas emprendedoras pero, vinculado a la existencia de personas dependientes a su cargo, puede ayudar a comprender la estructura social y por tanto los apoyos y también las obligaciones familiares- con los que se cuenta a la hora de emprender. Según la encuesta realizada por el Observatorio 4, la mayor parte de las personas que emprenden están solteras, siendo las casadas las que conforman el segundo gran grupo, pero a una distancia importante, y resultando poco significativos el resto de los estados. 3 La Tasa de Actividad Emprendedora (TEA, Total Entrepreneurial Activity rate), mide el porcentaje de la población con edades entre 18 y 64 años que está involucrada en una actividad emprendedora de reciente creación (hasta 42 meses de actividad). Es el principal indicador que calcula el GEM. 4 Sobre una muestra de 200 personas. Noviembre de

7 Ilustración 1. Estado civil de las personas que emprenden Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento Estos datos indican que la diferencia no es significativa entre sexos y que, en ambos casos, menores compromisos familiares facilitan el emprendimiento Personas dependientes El 35% de las emprendedoras encuestadas por el Observatorio indicaron tener personas dependientes a su cargo, fundamentalmente hijos o hijas. En el caso de los hombres, este porcentaje disminuye hasta el 32%. Nuevamente, son las personas con menores compromisos familiares las que emprenden mayoritariamente en ambos sexos aunque, en esta ocasión, sí se detecta una diferencia entre mujeres y hombres que puede estar señalando un reparto desequilibrado del cuidado de personas dependientes dentro de las estructuras familiares. Esta afirmación cobra más fuerza al cruzar los indicadores de estado civil y personas dependientes: Aunque en los restantes estados civiles también existe un desequilibrio por género, es entre las personas casadas donde la brecha entre hombres y mujeres es más manifiesta. 7

8 Ilustración 2. Relación entre el estado civil y el cuidado de personas dependientes 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0% Hombres Mujeres Casado/a 50% 37% Resto estados civiles 7% 12% Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento Nivel de renta El estudio realizado por ESADE para el Libro Blanco de la cultura emprendedora no detecta diferencias significativas en las actitudes positivas de los jóvenes hacia el emprendimiento por cuestiones de renta familiar, aunque señala que son más proclives aquellos que provienen de hogares con niveles económicos inferiores. Sin embargo, el GEM, que clasifica a la población en tres tramos de renta, sí ha detectado en los últimos años una fuerte disminución de las iniciativas emprendedoras en los dos tramos inferiores, lo cual se puede considerar un indicativo de la mayor vulnerabilidad de estos estratos de población a las restricciones en la financiación derivadas de la crisis económica actual. 8

9 Ilustración 3. Evolución de la distribución de la actividad emprendedora total en función del nivel de renta de las personas emprendedoras Fuente: GEM 2010 Los datos obtenidos por la encuesta del Observatorio, no reflejan grandes diferencias entre hombres y mujeres entre quienes parten de una renta bruta superior a /año. Sin embargo, son significativamente más las mujeres que parten de las rentas más bajas. 9

10 Ilustración 4. Nivel de renta bruta previo al emprendimiento Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento Entre estas mujeres que emprenden partiendo del estrato inferior de renta, un 63% están solteras, separadas o divorciadas y un 44% declaran emprender por necesidad. Esos datos señalan no sólo de menores ingresos personales sino, a priori, también de menos apoyos económicos familiares y, por tanto, mayor vulnerabilidad. Aunque, como se verá más adelante, en términos absolutos no se puede afirmar que en España las mujeres emprendan por necesidad de manera significativamente superior los hombres, sí que es cierto que son porcentualmente mayoría las mujeres entre las personas que emprenden impulsadas por esta razón. El nivel de renta previo al emprendimiento también está vinculado con la capacidad de inversión inicial y, por tanto, con el sector y la dimensión que se le da a los negocios, por lo que la situación expuesta puede estar suponiendo una barrera a la mayor presencia de mujeres en determinados ámbitos empresariales. Con cierta lógica, a medida que se incrementa el nivel de renta también lo hace el porcentaje de mujeres que emprenden por oportunidad, y el estado civil se distribuye de forma más homogénea entre las distintas posibilidades, desdibujándose como un elemento característico del perfil de la emprendedora. 10

11 2.5. Apoyo familiar al emprendimiento Como se ha podido observar, la estructura familiar y social constituye un elemento clave en el perfil de las emprendedoras. De hecho, casi el 80% de las encuestadas por el Observatorio indicó contar con mucho apoyo de su entorno cercano, mientras que esa valoración es doce puntos porcentuales inferior en el caso de los hombres. Ilustración 5. Valoración del apoyo del entorno familiar al emprendimiento Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento Estos datos se contrastaron en el grupo de discusión organizado con emprendedores y emprendedoras 5 y, de forma unánime, se consideró básico el apoyo de tu entorno para perseguir un sueño. Sin embargo, las mujeres manifestaron mayor asertividad que los hombres, algunos de los cuales matizaron su adhesión a la afirmación anterior. En cuanto al tipo de apoyo recibido, el emocional y afectivo es el que se cita en primer lugar en las encuestas, seguido del económico. En términos generales, se puede decir que si bien cualquier persona agradece el apoyo familiar, las mujeres lo hacen en mayor medida. Debido a ello, pueden 5 Observatorio de Igualdad en el Emprendimiento. Noviembre de

12 buscarlo de forma más proactiva y verse condicionadas en mayor medida por su ausencia Lugar de origen Tal y como indica el GEM, la participación extranjera en el ecosistema emprendedor español cobró especial relevancia en los años previos al inicio de la recesión económica, habiendo sufrido un proceso inverso desde entonces. Ilustración 6. Evolución de la distribución de la actividad emprendedora total en función del lugar de origen de las personas emprendedoras Fuente: GEM Según esos datos, actualmente casi el 91% de las personas que emprenden tienen la nacionalidad española. Sin embargo, existen diferencias sensibles por sexos. La encuesta realizada por el Observatorio señaló una mayor presencia de población extranjera entre las mujeres (9%) que entre los hombres (1%). Estos datos resultan coherentes con los de la nacionalidad de las personas atendidas 12

13 por el PAEM 6, según los cuales 11,6% de sus beneficiarias son extranjeras, de las cuales casi un 6% son latinoamericanas. En general, las personas que provienen de países en vías de desarrollo suelen presentar tasas de emprendimiento más elevadas, motivadas en muchos casos por la necesidad. Teniendo en cuenta que la destrucción neta de empleo de los últimos años ha afectado fundamentalmente a un sector fuertemente masculinizado y con mucha presencia extranjera como el de la construcción, cabría esperar una elevada tasa de actividad emprendedora entre los hombres que han perdido su puesto de trabajo. Sin embargo, lo que se percibe es un incremento de la actividad emprendedora femenina, tal vez como reacción a la pérdida de ingresos por parte de sus parejas Motivación para emprender Según el GEM, el 73% de las personas emprenden por oportunidad, mientras que el 25% lo hacen por necesidad y el 1,7% indican otros motivos. Además, según esa misma fuente, no existen diferencias estadísticas significativas que indiquen que las mujeres se ven abocadas en una proporción significativamente superior a la de los hombres a emprender por necesidad. En la encuesta realizada por el Observatorio los resultados no son coincidentes 7, siendo más altos los porcentajes de respuestas que señalan la necesidad y, especialmente, otros motivos. Entre los motivos diferentes a la necesidad o la oportunidad, predomina el deseo de realización personal o vocacional, de tal manera que, sumado al porcentaje que del emprendimiento por oportunidad se supera el 60%. En cualquier caso, estos datos cobran más sentido cuando se cruzan con los niveles de renta previos al emprendimiento y con la estructura familiar. Mientras que entre las mujeres que se sitúan en niveles de renta más altos, y también las que tienen menores compromisos familiares, predomina el emprendimiento por oportunidad y vocacional, entre las de menor renta es más claro el predominio del emprendimiento como vía para la subsistencia económica. 6 Programa de Apoyo Empresarial a las Mujeres (PAEM). Tiene como objetivo sensibilizar a las mujeres hacia el autoempleo y la actividad empresarial y ser un instrumento eficaz para la creación y consolidación de empresas lideradas por ellas. 7 Es importante recordar que la encuesta realizada por el Observatorio no tiene representatividad estadística y, por tanto, sus resultados deben ser considerados como orientativos. 13

14 Ilustración 7. Principal motivación para emprender por sexo 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0% Oportunidad Necesidad Otros No contesta Mujeres 40% 35% 23% 2% Hombres 51% 37% 11% 1% Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento Nivel formativo Está comúnmente aceptado que existe relación entre el nivel de educación y la aproximación al emprendimiento, tanto en la predisposición a emprender como en la forma en la que ésta se materializa. Los datos del GEM para el año 2010 señalan una preponderancia equilibrada de los niveles medio y superior (37,1%; 36,4%) frente al nivel elemental (26,5%) entre las personas emprendedoras. Esta tendencia se mantiene en otros estudios cuando el análisis se desagrega por sexos. Sin embargo, la comparativa entre ellos indica que el porcentaje de emprendedoras que cuentan con formación superior es sensiblemente mayor que el de los emprendedores. 14

15 Ilustración 8. Nivel formativo de las personas emprendedoras por sexo Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento Los datos del PAEM corroboran los obtenidos por el Observatorio: el 52% de las mujeres atendidas a través de contaban con estudios universitarios o superiores, el 22% con formación profesional y el 14% con bachillerato. Si los datos de nivel formativo se cruzan con los de la renta previa al emprendimiento se observa cómo el mayor nivel formativo de las mujeres se mantiene en todos los niveles de renta. Sin embargo, es entre las rentas más bajas donde el porcentaje de universitarias supera con mayor amplitud al de universitarios, diferencia que disminuye paulatinamente a medida que aumenta el nivel de renta. 15

16 Ilustración 9. Nivel de renta vs nivel formativo por sexo Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento

17 2.9. Experiencia emprendedora previa Según el GEM, un 24,8% de las personas emprendedoras cuentan con experiencia empresarial previa y, de éstas, casi un 73% indican que fue exitosa. Estos datos son similares a los obtenidos en la encuesta del Observatorio en el caso de los hombres pero no así en el de las mujeres. Entre las emprendedoras encuestadas por el Observatorio son amplia mayoría las que emprenden por primera vez. Por otra parte, y aunque su número no es significativo, son escasas las que emprenden por segunda vez después de un fracaso anterior. Ilustración 10. Experiencia emprendedora previa por sexo Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento Presencia en redes sociales y uso de las TIC Analizar el uso de las redes sociales digitales permite conocer mejor cómo se relacionan las personas emprendedoras con las TIC, pero también cuáles son sus preferencias a la hora de interaccionar con su entorno. 17

18 En la encuesta realizada por el Observatorio se preguntó específicamente por el uso de redes sociales horizontales personales 8 (Facebook, Tuenti, ) y verticales profesionales (LinkedIn, Xing, ). Como se puede observar en el siguiente gráfico, son mayoría las personas emprendedoras que cuentan con un perfil en las personales, pero no ocurre lo mismo con las profesionales. Este dato es especialmente significativo entre las mujeres, lo cual puede considerarse indicativo de una preferencia por el uso de estas redes con fines sociales ajenos al trabajo. Ilustración 11. Uso de redes sociales por sexo Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento Al analizar el uso de la tecnología asociada a las TIC, se observan parámetros que podrían reafirmar un mayor uso por parte de los hombres en el ámbito laboral más uso de Internet o smartphones- mientras que las mujeres predominan en el uso de plataformas de comercio electrónico, vinculado a la compra por Internet y, por tanto, más asociado a su vida personal. 8 Aquellas que fomentan las relaciones entre personas en función de su perfil social y que no están caracterizadas por un contenido u orientación temática concretos. 18

19 En cualquier caso, lo que estos datos están indicando es un patrón de uso de las TIC diferente por género, pero no una brecha en los conocimientos o el nivel tecnológico entre hombres y mujeres. Ilustración 12. Uso de las TIC por sexo Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento

20 3. Perfil de las empresas creadas por mujeres 3.1. Sectores Tal y como indica el GEM, la distribución sectorial del emprendimiento en España está dominada por la orientación al consumo, disputándose la segunda plaza entre servicios y transformación pero, en cualquier caso, a una distancia considerable. Ilustración 13. Distribución sectorial del emprendimiento Fuente: GEM Al buscar información específica relativa a las emprendedoras, y tal y como indica Rachida Justo en su tesis doctoral 9, Una gran cantidad de los estudios plantea que existe un perfil femenino de carácter sectorial, con una mayor concertación de las mujeres emprendedoras en el sector de los servicios y en el comercio al detalle y una infrarepresentación en el sector industrial, los servicios a empresas y la construcción (Anna, Chandler, Jansen, y Mero, 2000). Las características propias a estos sectores femeninos, que ostentan menores barreras a la entrada, una competencia alta y márgenes de beneficio reducidos influirían sobre las probabilidades de éxito de las mismas, en prejuicio de las emprendedoras (Minniti, Arenius et al., 2005). 9 "La influencia del género y entorno familiar en el éxito y fracaso de las iniciativas emprendedoras Rachida Justo, junio

21 Los resultados de la encuesta realizada en 2011 por el Observatorio son coincidentes con la citada tesis al indicar que la preponderancia de mujeres al frente de empresas que operan en sectores tradicionalmente femeninos, aunque significativa, es poco llamativa, como tampoco lo es su ausencia en los sectores tecnológicos. En cualquier caso, como se ha visto en el capítulo anterior, existen condicionantes culturales, educativos y económicos que siguen suponiendo incentivos a que la actividad empresarial femenina se dirija principalmente hacia sectores con menores barreras de entrada Formas jurídicas Según el DIRCE 10, el 52,5% de las empresas en 2011 estaban constituidas como persona física, es decir empresas unipersonales o sin asalariados, y el 34% son sociedades limitadas. En la encuesta realizada por el Observatorio se observa cómo las mujeres se decantan mayoritariamente por la figura de persona física mientras que entre los hombres predomina la sociedad limitada, aunque estos datos no se pueden considerar concluyentes tanto por el tamaño de la muestra como por haber muchas personas encuestadas que declararon no tener formalizada aún la actividad económica. 10 Directorio Central de Empresas. Instituto Nacional de Estadística (INE) 21

22 Ilustración 14. Formas jurídicas según sexo de la persona emprendedora Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento Inversión media Los últimos datos del GEM sitúan la inversión media de las iniciativas nacientes en , aproximadamente un 80% más que en 2009 ( ). Además, considera que no varía en función del sexo, apoyando la tesis de que el tejido empresarial femenino está cada vez más diversificado y presente en actividades tradicionalmente masculinizadas. La encuesta realizada por el Observatorio señala emprendimientos con unos requisitos de capital bastante más modestos pero es coincidente a la hora de señalar que no existen diferencias significativas en función del sexo. Únicamente la decisión de emprender en un ámbito de los considerados preferentemente femeninos (ver apartado 3.1.) puede establecer una diferencia en la inversión inicial, pero dicha diferencia se debería a las características de dichos ámbitos y no al sexo de la persona que emprende. 22

23 3.4. Empleos esperados Las mediciones del GEM en cuanto a las expectativas de creación de empleo a cinco años vista señalan que un 54% de las personas que emprenden esperan haber creado entre uno y cinco puestos de trabajo. Sin embargo, también es importante el porcentaje de personas que señala que no esperan crear otros puestos de trabajo (21,3%) o que no son capaces de realizar una previsión (13,6%). Como se puede ver en el siguiente gráfico, los datos obtenidos en la encuesta del Observatorio son similares. En este caso, en el que los tramos establecían entre uno y tres empleos y entre cuatro y siete, se aprecia como las expectativas son algo menos optimistas de lo que puede estar señalando GEM. Aunque las diferencias por sexo son significativas, en todo caso se podría indicar que entre los hombres parece haber menos incertidumbre y algo más de optimismo. Ilustración 15. Expectativas de creación de empleo según sexo de la persona emprendedora Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento

24 3.5. Dimensión de actividad El hecho de crear una nueva empresa con vocación global es, en sí mismo, un elemento de competitividad. La serie de datos del GEM en cuanto a la internacionalización muestra que la tasa de exportación entre los nuevos emprendimientos es baja, especialmente desde la llegada de la crisis, y que las que exportan lo hacen a pequeña escala. Ilustración 16. Distribución de las empresas en fase emprendedora según la intensidad exportadora y su evolución temporal Fuente: GEM En la encuesta realizada por el Observatorio, sólo un 28% de las mujeres y un 31% de los hombres declararon el ámbito internacional como objetivo de mercado para su nueva empresa, porcentaje similar, en ambos sexos, al de aquellas personas que no aspiran a un mercado más allá de su propia provincia. Los responsables GEM, en un informe 11 de 2010, señalaban que, si bien la crisis ha afectado a la internacionalización de las actividades en fase emprendedora de España, la mujer ha resultado más perjudicada que el hombre ( ), lo que lleva a pensar que existen múltiples factores que pueden haber influido en este resultado. Entre ellos cabe destacar: su mayor aversión al riesgo, su menor 11 Mujer y desafío emprendedor en España. Universidad de Cadiz IE Business School. Mayo

25 disponibilidad de capital, el tipo de sectores en que opera, que pueden haber resultado afectados en mayor proporción por la crisis y la menor dimensión de los negocios. En este mismo sentido, el estudio realizado entre 2006 y 2009 por la Universidad Rovira i Vigili 12, indica que ( ) hay evidencia empírica suficiente para convenir que las empresarias eligen deliberadamente una dimensión pequeña para sus empresas y evitan una expansión rápida y no perciben la necesidad de crecimiento de igual forma que sus homólogos masculinos Pertenencia a estamentos empresariales En contraposición a lo que ocurre en países del Norte de Europa, la predisposición al asociacionismo es baja en el área mediterránea. Aún así, la participación en asociaciones, gremios y Cámaras de Comercio se considera positiva para el desarrollo empresarial y es indicativa del grado de cooperación interempresarial del ecosistema emprendedor. Ilustración 17. Pertenencia a estamentos empresariales por sexo Fuente: Observatorio para la igualdad en el emprendimiento En la encuesta del Observatorio se aprecia una pequeña diferencia a favor de los hombres en la pertenencia a estamentos empresariales que, más que a una 12 Género y creación de empresas. Efectos de la división sexual del trabajo sobre la creación de empleo y la situación profesional. Ignasi Brunet Icart et al. Publicado por el Instituto de la Mujer (ISBN: ) 25

26 preferencia personal, puede deberse al perfil (sector, dimensión, etc.) de las iniciativas de unos y otras. En cualquier caso, como era previsible, el nivel es bajo en términos generales para ambos sexos. 26

27 4. Barreras para el emprendimiento femenino Probablemente, la principal barrera que afrontan las mujeres en relación al emprendimiento es la persistencia de un marco social sexista en el que conviven y no necesariamente de forma pacífica- actitudes machistas con planteamientos apoyados en la diferencia sexual a la hora de afrontar tanto la vida personal como la profesional. En ambos casos, la resultante es la perpetuación de roles de género. Esta realidad social tiene como consecuencia la predisposición de muchas personas (hombres y mujeres) a adoptar ante el emprendimiento femenino actitudes que en nada ayudan a la igualdad real. A modo de ejemplo y como indica el estudio realizado por Universidad Rovira i Virgili 13, pese a que las características femeninas ganan en reconocimiento y valor en (la literatura sobre emprendimiento), al éxito en los negocios se sigue aplicando el patrón masculino. Incluso cuando se hace referencia a la existencia de un estilo femenino de poder directivo. Así, indica ese mismo estudio, las mujeres son devaluadas basándose en percepciones sobre quiénes son, el tipo de empresas y sectores que eligen, a quién conocen y quién las conoce, y que provienen de expectativas históricas sobre los roles de género. Las opiniones recogidas por el Observatorio en el grupo de trabajo organizado en diciembre de 2011 abundan en esta percepción. Así, las emprendedoras presentes reconocieron haberse sentido minusvaloradas en algunas ocasiones, y haber percibido actitudes paternalistas en otras. Efectivamente, persisten, también entre las personas que prestan orientación y apoyo a quienes emprenden, ideas como que las mujeres con iniciativa empresarial lo hacen fundamentalmente para tener más tiempo para su familia (y, por tanto, lo hacen a tiempo parcial y en sectores menos exigentes ), o que lo hacen como hobby, sin que su actividad vaya a consistir su principal fuente de ingresos ya que lo hacen amparadas económicamente- por su estructura familiar. 13 Género y creación de empresas. Efectos de la división sexual del trabajo sobre la creación de empleo y la situación profesional. Ignasi Brunet Icart et al. Publicado por el Instituto de la Mujer (ISBN: ) 27

28 Si bien el problema señalado puede considerarse social y su constatación efectiva puede señalar a determinadas personas en este caso vinculadas al ecosistema emprendedor-, no es menos cierto que también se translucen en determinadas políticas públicas de apoyo al emprendimiento. Cuando se opta por aplicar medidas de acción positiva en la creación de empresas se recurre con frecuencia a la creación de programas específicos para mujeres. Dos ejemplos clásicos son los programas de apoyo a la creación de empresas por mujeres y las líneas de financiación a empresas de mujeres. Como alguna de las emprendedoras consultadas por el Observatorio ha señalado, en términos generales ese tipo de programas están concebidos para apoyar a las participantes en los sectores que en algunos ámbitos se consideran feminizados. Por el contrario, las emprendedoras cuya iniciativa se centra en sectores de alto impacto y/o requiere de inversiones iniciales elevadas no encuentran útiles los programas y ayudas para mujeres, no habiendo ningún tipo de diferencia por razón de género en los que no son específicamente femeninos. Por otra parte, no son solamente las políticas específicas de apoyo al emprendimiento las que condicionan, positiva o negativamente, a las mujeres a la hora de emprender. Como se ha podido ver en el perfil de la emprendedora española, es un hecho que las mujeres siguen asumiendo más responsabilidad que los hombres en el cuidado de personas o la gestión doméstica. Siendo así, la carencia de políticas y servicios que faciliten la conciliación de la vida familiar y personal es en sí misma una barrera a la actividad económica que afecta con mayor intensidad a las mujeres. 28

29 5. Conclusiones y recomendaciones El perfil de la emprendedora española trazado en este informe señala la vocación y el desarrollo personal como principales razones para la puesta en marcha de nuevas iniciativas empresariales. Así, se demuestra una vez más como es incorrecto el estigma del negocio femenino con una finalidad de subsistencia y escaso valor añadido. Sí es cierto, sin embargo, que en comparación con los hombres, las mujeres están más presentes entre los segmentos de menor renta media previa al emprendimiento y asumen mayores responsabilidades familiares. Por estas y otras razones, se puede concluir que, de forma sensible, las emprendedoras están optando por iniciativas económicas de menor dimensión y por tanto menos proclives a la creación de empleo y la internacionalización. Al mismo tiempo, este tipo de enfoque las hace más vulnerables a las dificultades habituales del emprendimiento y a los cambios en el contexto económico. Por otra parte, las emprendedoras presentan altos niveles educativos y habilidades sociales y tecnológicas equiparables a las de los hombres, por lo que no es justificable desde este punto de vista su menor presencia en sectores económicos de alto impacto. Por tanto, la primera recomendación de este informe consiste en reorientar las políticas y programas de apoyo al emprendimiento femenino hacia un mayor apoyo a la calidad y representatividad sectorial de las iniciativas empresariales de las mujeres. Es evidente la necesidad de ajustar más las políticas y programas a las variables que condicionan el emprendimiento femenino, de manera que se vaya más allá del simple objetivo de lograr más presencia de mujeres y se les ayude a contribuir de forma efectiva a los objetivos de desarrollo económico en cuanto a la competitividad, innovación e internacionalización de la empresa española. En la educación, pilar básico de la cultura emprendedora, se debe trabajar con más intensidad la eliminación de roles predefinidos por razón de sexo, así como el estímulo hacia sectores estratégicos en los que las barreras al emprendimiento son mayores. Coincidiendo con otras fuentes, este informe subraya la necesidad de potenciar políticas de conciliación y corresponsabilidad por dos razones: de manera inmediata elevan la calidad de vida de las personas que emprenden y son un estímulo al emprendimiento. A largo plazo, emprendedores y emprendedoras que demuestran que se puede poner en marcha una iniciativa empresarial sin renunciar a la vida personal serán el mejor ejemplo para derribar prejuicios y estigmas que hoy lastran el espíritu emprendedor de la población. 29

30 El desajuste entre las políticas y las necesidades reales del emprendimiento femenino queda de manifiesto cuando las propias emprendedoras consideran que muchos programas y ayudas están diseñados para apoyar iniciativas que tienen características predefinidas que, de seguirse, condicionarían el tipo de empresa a crear y gestionar, por lo que no les resultan útiles y por tanto no acceden a ellas. Esto no quiere decir que lo que se está haciendo esté necesariamente mal hecho, pero sí pone de manifiesto la necesidad de revisar los planteamientos actuales. En este sentido, sería recomendable adecuar mejor los instrumentos de las políticas a las necesidades y las posibilidades de las empresarias, con aproximaciones flexibles. 30

31 6. Bibliografía AAVV. (2010) Servicios de apoyo a la persona emprendedora en España. Observatorio Pyme. AAVV. (2011) Informe del programa de asesoramiento online Empresarias.net. Año Programa de apoyo empresarial a las mujeres. AAVV. (2011) Estudio de los resultados del Programa PAEM. Consejo superior de Cámaras. AAVV. (2009) Programa de apoyo empresarial a las mujeres. Informe Anual. Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Industria y Navegación de España Departamento de formación. AAVV. (2010) Programa de apoyo empresarial a las mujeres. Informe Anual. Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Industria y Navegación de España Departamento de formación. AAVV. (2009) Indicadors sobre la pèrdua de talent femení a Catalunya. Cirem Fundaciò. AAVV (2011) Las mujeres en los consejos de administración y organismos de decisión de las empresas españolas. Informa. Grupo CESCE. Alemany, L., Álvarez, C., Planellas, M., Urbano, D., (2011) Libro blanco de la iniciativa emprendedora en España. Fundación príncipe de Girona. Esade Entrepreneurship institute. INE (2010). Encuesta a la Población Activa. Descargado en el 2011, de la página García, C., Ullóa, P., Gomáriz. N., Chillida, M. (2010) Igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en la actividad empresarial. Fundación Mujeres. Güermes, J.J., Corduras, A., Justo, R., Pampillón, R. (2010) Global Entrepreneurship Monitor 2010 Spanish Executive Report. Madrid: Instituto de Empresa. Justo, R. (2008) La influencia de Género y el entorno familiar en el éxito y el fracaso de las iniciativas emprendedoras. Universidad Autónoma de Madrid. Departamento de Estructura Económica y Economía del desarrollo. Martinez, M.A., Guilló, N. Santero, R., Castro, R.B. (2011) Trayectorias Laborales de las mujeres que ocupan puestos de alta cualificación. Colección EME, Ministerio de Sanidad, Política social e igualdad. Centro de publicaciones. 31

32 Ruiz, J., Camelo, C., De La Vega, I., Coduras, M., Justo, R. (2010) Mujer y desafío emprendedor en España. Universidad de Cádiz- Instituto Empresa, Bussiness School. Servicio de estudios Fundación Incyde, Alba Analistas Económicos y Sociales (2007). Mujeres empresarias en la Economía Española. Camaras de Comercio, Fundación INCYDE, Instituto de la mujer. 32

33 7. Agradecimientos Para la elaboración de este informe el Observatorio ha contado con la colaboración desinteresada de las siguientes personas y organizaciones, bien facilitando información, bien participando en alguna de las mesas de discusión organizadas. A todas ellas, nuestro sincero agradecimiento. Nombre Apellidos Entidad Web Pablo Almunia ITM Platform Cristina Álvarez Mylacambra Sara Berbel Barcelona Activa Sara Cillero Valnalón Ángeles Elias Madrid Emprende Mª Victoria García Univ. Camilo José Cela Georgina Jijena Fabuloosdreams Rachida Justo IE Luis Mateos Keimstorm Gemma Matos Secretaría de Estado de Igualdad Raúl Minguez Consejo Superior de Cámaras de Comercio Yago Muñoz Emeleuve Pilar Ortiz Secretaría de Estado de Igualdad Eva Sierra Zamburiña Raquel Torres Emprendedora Consejo Superior de Cámaras de Manuel Valero Comercio Jacobo Van Leeuwen Evicertia Consejo Superior de Cámaras de Beatriz Zafra Comercio 33