DOCUMENTO DE POSICIÓN DEL FORO EUROPEO DE CINE DIGITAL (EDCF)

Transcripción

1 DOCUMENTO DE POSICIÓN DEL FORO EUROPEO DE CINE DIGITAL (EDCF) CONGRESO DE BARCELONA Marzo de 2010 La transición al Cine Digital ya está en marcha las salas de cine de Francia están ahora digitalizadas en un 17%. Sin embargo, una parte considerable de la industria cinematográfica europea sigue teniendo dificultades y se pregunta sobre el coste de la tecnología, las opciones de financiación y el papel más adecuado de la prolífica ayuda estatal. Por qué el Cine Digital? Es necesario que el cine considere la evolución general en la oferta de sonido e imagen de mayor calidad. Es necesario seguir siendo competitivo con otros formatos de entretenimiento como la TV, el home cinema, e incluso los dispositivos portátiles, para mantener una posición de mercado viable que perdure en el tiempo. Las salas de cine de todos los tipos deben mejorar la calidad de la experiencia que ofrecen para seguir siendo competitivas y, en consecuencia, viables. El cine digital permite que los exhibidores ofrezcan más películas y más proyecciones de esas películas. Actualmente, el coste de una impresión en 35mm lleva al distribuidor a pedir que la película se proyecte durante un período de tiempo mínimo. Esto no siempre redunda en beneficio del exhibidor si la película no genera la recaudación de taquilla esperada. Con las impresiones en 35mm, un exhibidor trata de devolver la impresión al distribuidor cuando piensa que ha llegado al máximo de su audiencia potencial, o si el distribuidor necesita la impresión para otro exhibidor. Por el contrario, cuando se trata de un archivo digital que se descarga a un servidor, el exhibidor puede quedarse con la película y organizar las proyecciones a su conveniencia, por ejemplo, si un colegio desea exhibir la película en un momento en que le venga bien. En estos momentos, se considera que el formato en 3D va a convertirse en un nuevo paradigma de la experiencia de la sala de cine. Este formato exige como mínimo un equipo digital conforme con la norma ISO TC36. Numerosas películas animadas vienen ahora en 3D, y algunos directores de cine eminentes que van desde Wim Wenders hasta James Cameron, utilizan el formato en 3D para expresar mejor su visión artística. Este formato estará pronto disponible para la televisión en casa: cómo podríamos imaginar que los visitantes de las salas de cine no esperen lo mismo? Techicolor ha anunciado recientemente una opción en 3D mejorada para los proyectores de películas. Esto subraya la importancia percibida de la presentación en 3D, aunque creemos que el 3D Digital llegará a ser con el tiempo el formato preferido.

2 Las películas en 3D son más caras de producir, y la tecnología es todavía muy reciente. Se espera que esto cambie rápidamente en los próximos cinco años, motivo por el cual el equipo preparado para 3D debería ser una consideración importante en relación con todo el contenido que se ofrece en las salas de cine comerciales. Cifras recientes de recaudación de taquilla confirman la atracción que el formato 3D ejerce sobre las audiencias, subrayando la importancia de que los propietarios de las salas de cine dispongan de esta tecnología para llegar a estas audiencias. Tecnología y normas del cine digital las necesidades y las consecuencias Disponemos ahora de normas ISO globalmente aprobadas, que han sido creadas previa consulta con la industria. En los últimos años, ha habido debate y consulta en los congresos de la industria, entre los que se incluyen IBC, NAB, I-DIFF, IMAGO, ECS y CinemaExpo, y cada delegado nacional ha representado a sus industrias locales en las reuniones de la ISO. La inclusividad del proceso de normalización se confirma especialmente en Europa, gracias a la inclusión de la velocidad secuencial específica para Europa. Los fabricantes construyen ahora su equipo conforme a estas normas. El coste del equipo es sin duda una barrera para su despliegue más amplio. Existe al parecer una idea equivocada ampliamente generalizada de que el coste y, en consecuencia, el precio de los sistemas de cine digital son directamente proporcionales a la resolución espacial que se especifica a efectos de conformidad. La razón es mucho más compleja: Los sistemas de cine digital se desarrollaron inicialmente porque la industria cinematográfica sabía que los costes estaban subiendo vertiginosamente, necesitaba recursos escasos (plata) y utilizaba materiales poco respetuosos del medio ambiente (soluciones de blanqueo, revelado y fijado). Debido a que las películas tenían una vida de distribución limitada, tampoco se podían reciclar con facilidad, siendo así poco económicas. Todos estos factores conducirían a un incremento de los costes en el tiempo. Por otra parte, los medios digitales tenían una trayectoria de costes en descenso y utilizaban una tecnología reciclable reduciendo aún más los costes. Desde mediados hasta finales de los años noventa, el desafío residió en convencer a la comunidad creativa (productores, directores y directores de fotografía) de que esta nueva tecnología podría ofrecer la misma calidad de imagen que una película en 35mm. Esa calidad de imagen era multidimensional, pero se podía simplificar en tres elementos principales Contraste, Color y Resolución. Dada la naturaleza de la tecnología del cine tradicional, la química y los procesos tienden a ofrecen un nivel de resolución que el negocio cinematográfico podía gestionar, muy a diferencia de lo que sucede en el mundo de la TV, donde una variedad de cámaras, sistemas de transmisión y, en su mayor parte, los televisores están fuera del control de los realizadores de los programas y los canales de TV. Es así como la televisión (el video) ha llegado a tener una reputación de calidad de imagen escasamente controlada.

3 Esta percepción (del vídeo) sigue siendo un obstáculo importante en la comunidad creativa del cine en relación con la captación de la imagen digital, pero el desarrollo de una rigurosa tecnología de proyección electrónica ha convencido a esta comunidad de que ahora es suficientemente buena para sustituir a las películas al menos en una distribución de copias de estreno (show-print). La oferta de alto contraste, precisión del color y resolución a corto y largo plazo tiene implicaciones sobre las especificaciones ópticas, de gestión térmica y de electrónica. Estos requisitos tienen implicaciones en los costes de los componentes de los proyectores. El elemento final en la oferta de un sistema de cine digital práctico y desplegable era la integración de un sistema sólido de protección de datos que minimizase, o incluso eliminara, la posibilidad de hurto del contenido de la electrónica del proyector. El home cinema normal y los proyectores large venue concebidos para grandes espacios, no conllevan esta obligación, que también tiene una implicación de coste. Aparte de estos requisitos fundamentales de un sistema de proyección de cine digital (que no guardan relación con la resolución espacial, por ejemplo, 1,3K, 2K, 4K), las especificaciones también permiten superposiciones gráficas que soportan subtítulos más flexibles y fáciles de leer. Una consideración importante en la definición de la especificación del cine digital residió en que el cambio de la tecnología tradicional a la digital debía impedir su pronta obsolescencia, en razón del rápido ritmo de la nueva tecnología. Esto llevó a los realizadores a elegir una opción 4K compatible en ambos sentidos El anuncio recientemente realizado por Texas Instruments de ofrecer tecnología 4K (que antes ofrecía únicamente Sony Corporation) no sólo trae más competencia a la gama alta del cine digital, sino que es el preludio de sistemas 2K más rentables en el futuro, cuando los competidores traten de hacerse con su parte del mercado. La norma del cine digital fue así ampliamente aceptada por la industria cinematográfica como una evolución cara pero necesaria para ofrecer un activo sostenible durante un período de tiempo justificable A pesar de que los proyectores de bajo precio ofrecen aparentemente una capacidad similar, aceptable en opinión de la mayoría de los patrocinadores, ponen en peligro la experiencia fuera de casa de las salas de cine comerciales, haciéndola cada vez más precaria y menos convincente, siendo probable que sea superada por los sistemas caseros y también que se degrade en el tiempo, debido a los componentes menos estables de sus tecnologías. Como ejemplo, casi todas las videocámaras de consumo ofrecen ahora capacidad de grabación Full HD. Muchos televisores ofrecen también imágenes con resolución Full HD native spatial. Full HD es 1,9K en la jerga de uso corriente, por lo que parecería que la frecuentemente solicitada opción 1,3K no ofrecería una opción comercializable, incluso si produjese una calidad de imagen satisfactoria. Cabe asimismo mencionar que los costes de los proyectores guardan una estrecha relación con el brillo, y necesitan tanto potencia luminosa como una eficiencia fiable, como sucede con la tecnología en 35mm, a la que sustituyen. Plantea una nueva demanda de esta potencia la capacidad en 3D, donde las eficiencias ópticas de los sistemas con obturador llegan a necesitar hasta tres veces más flujo luminoso.

4 Es verdad que muchas formas de contenido alternativo han sido probadas en entornos de salas de cine, en algunos casos con señales de TV de definición estándar y proyectores de menor coste. Bien podría ser que el público acepte estos sistemas para determinados eventos especiales, pero a medida que la HDTV se generalice, los sistemas que están instalados hoy dejarán pronto de ser aceptados, representando una mala inversión para los propietarios de las salas de cine. Algunos operadores han utilizado sistemas más baratos para presentar anuncios publicitarios, pero no han durado mucho y ya han sido reemplazados. Los operadores de las salas de cine desean un único sistema que pueda ofrecer todas las formas de contenido, sin tener que recurrir a técnicos especializados in situ. Esto impulsa la demanda de una tecnología con capacidad universal y no de sistemas individuales de bajo coste. Algunos realizadores podrían estar dispuestos que sus películas se exhibiesen en un equipo de menor calidad, aunque se necesitaría un único sistema capaz de reproducir todos los formatos. No tiene sentido instalar equipos individuales adaptados a diferentes normas. Cabe apuntar que la norma de cine digital ISO TC36 es la única que ofrece una definición completa de cómo se debería presentar el contenido a una audiencia. Las tecnologías HDTV tienen una multitud de normas de compresión, cifrado y velocidad de datos, y no tienen un proceso que satisfaga las necesidades de presentación de los locales de las salas de cine comerciales, donde la uniformidad del brillo de la pantalla y la presentación del sonido constituyen una consideración fundamental. Esos sistemas han sido desarrollados para receptores de TV y no para locales públicos. Los realizadores desean la mejor calidad para sus películas. Algunas veces, por una razón artística o financiera, ruedan sus películas con cámaras ligeras, pero los gastos de postproducción siguen siendo altos 1. No aceptamos el argumento de que los realizadores europeos estarían satisfechos con normas menos exigentes que aquellas de sus colegas americanos. Sería posible explicar el público que va a una sala de cine que la película europea que va a ver se ajusta a una norma menos estricta que aquella de una película americana? A esto hay que añadir que el formato en 3D está apenas en sus comienzos, y algunos directores europeos están empezando a pensar en utilizar esta técnica. La industria cinematográfica ha sido activa en la definición de las normas ISO aplicables a la proyección digital. Los distribuidores de películas y los exhibidores de las salas de cine acogen con agrado una norma que permite la misma universalidad de utilización que se puede alcanzar con la impresión en 35mm. Es necesario que las salas de cine inviertan en esa norma única, que permite la proyección de todo tipo de contenido. Redunda en beneficio del negocio de las salas de cine que no se les impida exhibir algún tipo de contenido. Los sistemas que cumplen los requisitos de la norma ISO logran este objetivo.

5 No cabe la menor duda de que la norma ISO aplicable al cine digital tiene un precio. Algunas voces siguen sugiriendo que si se permiten los formatos digitales abiertos, se solucionaría el problema de la asequibilidad. En realidad, cualquier formato digital abierto añadiría coste al proyecto, debido al gran número de formatos existentes. Igualmente importante, la multiplicidad de opciones de formato incrementa la complejidad y la oportunidad de cometer errores. Incluso con las normas del cine digital tan rígidamente definidas, se está trabajando mucho en la eliminación de la oportunidad de errores en los escenarios de la presentación. A largo plazo, muchos de estos escenarios se aplicarán automáticamente a través de macrodefiniciones que estarán incorporadas en los flujos de datos, pero los órganos de ejecución están todavía trabajando en esta fase principalmente el ISDCF (Inter Society Digital Cinema Forum). Salas de cine en riesgo en qué medida es real esta preocupación, y aporta la solución el apoyo público? Existe una doble preocupación: los distribuidores de películas van a tener que suministrar tanto impresiones en 35mm como archivos digitales durante un período de tiempo prolongado, lo cual reducirá los ahorros que genere la proyección digital (que en realidad arranca solamente después de que se cierra el trato relativo a la tarifa de copia virtual (VPF), o algunas salas de cine tendrían una elección más limitada de películas. Llegará el momento en que todas las películas estén disponibles sólo digitalmente, es decir, al final de este período de transición. Es probable que el formato en 35mm siga estando disponible durante algún tiempo, aún cuando sea de forma limitada, pero está claro que su precio subirá a medida que el su volumen que se suministre a la industria descienda, hasta el punto de llegar a ser prohibitivo. Se prevé que la ayuda estatal puntual constituya una solución sostenible y uniforme para el cine digital? En particular, podrán mantenerse en su negocio las salas de cine que no se puedan permitir comprar el equipo sin ayuda estatal? Inhibirá la ayuda estatal la presión a que estarán sometidos los proveedores para que bajen los precios? El EDCF cree que mientras alguna forma de ayuda estatal destinada a la adquisición pueda potencialmente inhibir la bajada del precio libre de mercado, es primordial que existan beneficios para los aficionados al cine una mayor elección y la conservación de las películas de la cultura local. Los fabricantes ya están compitiendo agresivamente por este mercado, y no esperamos que la ayuda estatal tenga un impacto significativo en la actividad competitiva o en los precios. Podría decirse que es probable que el incremento de las oportunidades de compra estimule una atención y un proceso de ofertas incluso más competitivos. Existen modelos de negocio comerciales para la instalación del equipo. Algunas salas de cine lo hacen con su propio dinero. Otras solicitan una contribución a los proveedores de contenido, principalmente a los distribuidores de películas, en forma de una tarifa de copia virtual controlada por un tercero o directamente. Actualmente, las tarifas de copia virtual están disponibles en Europa solamente a través de terceros. La preocupación de la industria reside en organizar un período de transición fluido: la ayuda estatal puede contribuir a que esto se logre.

6 Es probable que el apoyo a la proyección digital cobre incluso una mayor relevancia en un futuro cercano. Existe la posibilidad de que los distribuidores adopten con rapidez los medios electrónicos una vez que se alcance una masa crítica. La preocupación reside en que la inversión necesaria para utilizar el equipo digital es relativamente independiente de los ingresos por recaudación de taquilla. Los exhibidores de menor tamaño necesitan un equipo con la misma tecnología, pero no pueden recuperar los costes de capital e instalación con la misma rapidez, si es que lo consiguen. Muchos de los operadores de menor tamaño encuentran su sitio en el mercado ofreciendo un interés especial y una programación de películas más variada y culturalmente diversa. Estos operadores corren el mayor riesgo de quedarse atrás en la transición al cine digital, lo cual pone en peligro a los locales que actualmente apoyan las producciones más culturales. Contenido alternativo una solución a la insuficiencia de financiación? Hasta ahora, el denominado contenido alternativo, que puede comenzar a ofrecerse a las audiencias en salas equipadas para cine digital, ha generado pocos ingresos por una variedad de razones falta de normas, falta de conocimiento técnico y equipo, y un marketing inadecuado. Estos inconvenientes se están superando ahora, y esta parte del negocio está creciendo. Algunas predicciones sugieren que esto podría equivaler a un 5% de la recaudación de taquilla en el futuro una contribución pero no un salvavidas El cine digital lleva entre nosotros casi diez años. Se han resuelto muchos problemas, pero quedan muchos otros por resolver. Organizaciones como el EDCF han contribuido en gran medida a la comprensión de la tecnología y el negocio, pero esta labor no ha finalizado muchos siguen sin comprender la tecnología y las implicaciones para el negocio cinematográfico. El riesgo que corre una parte considerable de la industria cinematográfica europea es real. Existe la necesidad de que la Exhibición, la Distribución, la Fabricación, las Organizaciones Nacionales y la Comunidad Europea sigan trabajando en una solución. EDCF Febrero de 2010