Peregrinaci6n de Omega

Transcripción

1 Peregrinaci6n de Omega BOGOTA nrprenta KACIONAL 1906

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3 EXCVS:\S La mayor p.rrte de estos capf tuk-s Iueron escritos ahora un afio. durante cl viaje que hicimos al lado de Monseiior Ragonesi, y se publicarou cntonres en varios periodicos del pais: los ot.ros estaban ineditos, Rcdactados aquellos prccipitadamcn te, al fin de cad a jornada, cr.ando <11111 ten iarnos el polvo del camino, y escritos estos luego, scgun los recuerdos () breves apuntes, pues la Iatiga y las facnas no perrn i- tieron muchas voces tomar la p~no1a, son sin duda incorrectos y deficientes los unos v los otros, DueIen;')s sc.bre todo que por estas misrnas ca u- sas hayan sido.imitidos muchos no m bres de pel'sonas que tomaron parte en las festividadcs y de quienes recibirnos atenciones en nucst ra larga correr ia. Heciban todos 1')8 scn tirnien tos de nucst ra profunda gratitud. A veces, para arncniz.ir cl relate, nus hcrnos permitido incluir atg-un chascarrillo 0 agudeza. Con ello no hcmos querido hacer rnofa de poblacion ni de persona alguna. Las relaciones de viajes con ~610fechas y norn bres poco in teres tienen para el lector, y e~ fastidiosa su lectura. A fi n de que nuestras cronicas no fuesen tan insipidas Y;1 una que ot ra anecdot.a U observr.cion epigtam,itica rccogidaentrc las muchas que se.lecian en las horus de ruta {)en torno de la mesa. Confiarnos tam bien en que no se tornen a mala parte observaciones sobre incomodidudcs del camino,

4 - IVcnfcrrnedades endernicas 0 raza predominante. Anhelos patrioticos mas que prurito de censura nos han rnovido a hacer indicaciones en pro del progreso y de la sanidad. Y es buena la idea que tenernos de la raza indigena: ella ha realizado en America, especialmente en Mejico, obras trascendentales y produlido hom hres notables. Y si en la de estas latitudes hay, como se ha dicho, sangre japonesa, el mundo sabe hoy muy bien de cuanto ella puede ser capaz. El Dr. Ancizar hizo ahora medio siglo un viaje a las provincias del Korte, y de ahf su farnoso libro Peregr inacion de Alpha. Si hernos tornado su mismo titulo queda excusada nuestra pretension con e1 seud6nimo (que usarnos ahora por primera vez). Si el es el Alpha de los pereg rinos, nosotros somos tan s610 hurnildc Omega.

5 PEREGHINACION DE O\JEGA T'om.unc.s v l t r-n de las ocho ell la cs ta cron del Norte al lado del Excmo. Sr. Delejrad» "\poshilico Monsenor Hagonesi y del (~eneral Santiago Camarg-o. ex- Gohernador de Tundama!" hasta haec pocos dlas Consul en ClI razao. Vamos con ellos en viaje,i Bucaramanga..'" -los p romctcrno-, re-fe r ir en estas cor respondencias al~(unos de tal lcs de nue s t ra co r re r ia. Vimos e-n la \.'staci()n,i va r ios amigus de \1110S y ue pesa temprano 10 apa ot ros, ri r de 10 dc' la hora y r- q tado de la cs tacion habian ido,i. da r no-s la desped ida. Allf estaban, en t ro otros. vi si mprit ico C-inteligentc Sr. Min is t ro del Brasil, que pen saba acom pafiar nos, pe ro ti quicr una indisposici()n de sa.l ud le impidi6 ir a conocer esta parte de la Repiihlica,!" D. Luis Halberstadt. siemp re amable y siern p re cor recto. ique es plend ida es ta ha la manana ~ Eol sol, <'1ue ell Diciernb re dc-jasl..' ve n cc r pol' las n u lns, tornaba aho ra su r evancha, d is pe r sa ba,i est;ls. 'I \H' se refug iaban allti en los confine:'. del bo r izou te, v pa.seaba t riunfant.e y mag nif co po r la lxivcda azul, hafiando en tibia I\1Z la in men sa sabana v do raudo los cer ros, las a rboledas. las casas y las ueh~'~as. C ruz.imos <I.Chapine ro, donde se ve ia n Ius aleir res I-!I"Upos de vo rn ncan tea: luego el Puente del Cormin, doride se eleva hov un he rrnoso castillo de piedra. y lleg-amos <1Cajica {las d iez de la manana. Al livi mos al Gobe r nado r de Quesada, G'cneral

6 Brigard, qu ien habia venido con algunos ernpleados (8res. Gonzalez " Pinz6n) al encuent ro del Sr. Delegada y sus cornpane ros. Justo es reconoce r el buen servicio del Fer rocarril del Norte. Con tad a exaetitud parten sus t renes, su s em plcados son modelos de cultura, crimodos son sus vaganes. jy cutin ag radable cs cruzar la gran sabana por el pie de aquellos cer ros he rmosos, contemplando en las q uintas () en medio del campo las buenas farn il ias que toman en es tos dias un descanso de las fatigas del afio! ic6mo t.rausfo r ma el campo a las gentes: los rost ros hiliosos v duros de la ciudad sc vuelyen joviales y arnables en- media de la cam pifia repleta de oxigeno. Pa rece que csa br isa se llevara en sus alas toda pasion mezquina y dejara una satu racion de alegria'y de bondad. "81(~eneral Br igard fue fel ici tado por sus t rabajos fecundos en el Departamento. l~l ha dado grande impulse a la instrucci6n publica. compuesto los cam i- nos y emprendido muchas obras bcneficas. Goza ademas de una gran popular idad. El Sr. Delegado y sus com pane ros tomaron el coche en Cajica y siguieron en el por el camino Hamada de los pueblos. Pasa.ron par T'ocan cipri y Gachancipa, bell as poblaciones que pod rian se r luga res de ve raneo como los mejo res de la sahana. Al li hay agua en abun dancia, he rrn osos paseos, gl'ntes se rviciales y bueuas. gn el p r ime ro de es tos pueblos vivid lasgos afios el sahio Dr. Duquesne, y fue alli donde hizo sus celebres estudios sobre los aborurenes. [Como Ie provoca a uno cles mouta.r se un momento y su bi r a esas coli nas tan suaves, tan man sas, tan llcnas de aromas, v mi ra r dcsde alii todo el valle. v ve r al Funza dcsc ri biendo sus majcstuosas eu rvas, pcrezosamente. como un boa de las llan n ras orientales! Al viaja r en Col am bia sc e xpe r irnenta una. sensaci6n de soledad. He ve la falta de poblacion. No He encucnt ran sino grupos de la.hr iegos que estan movi en do el a rado, t r il lando 0 cu ida.ndo los pot re ros, y uno que otro viaje ro que pasa ap re su rado su camino. Y esto es en campos fe rt ilisi mos, entre gentes benevolas e inofensi vas. a pocas ho ras de la capital y a orillas de un cam ino carretero. Las mismas ventas parecen abandonadas. Hay mementos en que se cree uno en un desierto. l. Cuando ve rernos esos campos

7 llcuos de q uin t a s. cruzados po1' vchiculos de todas cla- :-.es, con hot:..ie s Y harro s? :i\:f,is vida hu mana me rece n t'sas tic r ras fe:tindas v sanas que convidau,i vivi r en vilas. - En Colorn.iia n() tcnernos todavia el t n ris utu, Las g-entes no viaj.m ruin pol' conocer lin rio (I u na s rocas, po r t.repa r,i lin monte () pol' contvmpla r alg:una maravilla tie la natu rn.lez a. La rn isrn a fotog-rafia no ha salido de las c ir clades en husca de nues t ras cu riosidades natu ralcs. v no tcnernos vistas de los si t ios pinto rescos ni alhtunes de las hellezas de cada provincia, como los t ie rn-n todo«los pue-blos en ropvo-s. A cada rl~\'uelta del camino ('s u n paisaj~' sobcrbio. Ya en 1<1 tarde pasamos pol' entre dos pueblos. Ala izquierdl Ses<}uile, que podia ser tam bien lug-ar de ve raneo, qlle se m ira en u n pol-tic() r iac h uelo y que domi na con - u campana1'io la Ilanu ra: ~-,I. la de1'echa Suesca, donde est,\.n las roca-, can tadas pol' I 'allon, :' la bella hacienda en la cual pasaba sus tcrn po radas el Dr. Holguin c uanclo f ue Prl'sidente de la l~epublica. Este peda zo de saban a al norte de Bog-ota ha sido cl p rcd ilccto de n ue-st ros m audatn r ics. Ri1 el Puente del Comiin ha hiaruo-, vi sto la rt'r!i(t!jili'ii((. hacienda del S1', Mar-roquin: cerl'adexemoc(ln est;\. el [>o!n'ro, que f ue del (~elh ral Salg-ar; poi' aq u i en las ccrcanias de Sucsca q ued.i :',"((11 r 'ircnt«: murada m uc hu tiem po del Dr, Parra. J;~n Suesca term ina la sa ha na y «m pieza ol te r reno q lie h rado 1<:1I"u n za va po I' tuda la ()ril la de la r u ta, ca llado y manso. SI1 adolc sccncia cutin t ranqu ila. Ks!Il\;go, pol' al lzi en las tier ras d.lidas. doude se vuelvc im pe tuoso y terrible. En los hcr mosos campos de 'l'ilat,i nus encont ra- 1l10S con una cabalgata qul' ha sal ido de Chocont.i al encuentro d,: S. E. Alii est,in los dos HR. PP. dorn i- nic,~nos que dirig'i.'n el c u ra to, y con ell os m uchos vecrnos. Al cacr el sol pol' alia muy lcjo-, t ras l1l10s montes az uloso-. e indecisos, en t ra,i Choconta el Sr. Deleg-ado con ~;u nurne rosa co m itiva. Las g-entes, adve r- tidas de su llegada, salen a saluda rlo a la orilla del carn ino, y de rod illas recibcn las bendiciones que les envia ca rinosamcnte el bucn p relado desde la ventani- Ila de su ea r ruaje. jbello espectaculo! j1l1onsefior. con la son r isa en

8 -4- los labios, siem pre afable, siern pre dulce, siempre henevolo, enviando su bendici6n a aquellos campesinos de pura raza indigena, quecorren a ponerse de hinojos a Sl1 paso:>' que se inclinan con hondo ar robamiento! Las campanas de la hermosa pohlaci6n saludaron con j iibi lo a S. g., y las gentes acudieron a la plaza a conocer al representante de S. S. que goza en Celombia de inmerrsas sim patfas y que allf se de tuvo a pasar la noche. Poco despues de la com ida llegaron a la casa eural, lugar de su alojamiento, unas cua ren ta senoras y un grupo de aldeanos a pedir a S. E. inte rpusie ra sus influencias a fin de que permanecieran en el pueblo como ell ras de el los RR. PP. dom in icanos, a quienes, se decia, ibase a p rornover a otro lugar. Monsefior ofrecioles atender a su suplica. Manana habla rernos de esta poblacion v de ot ros inc iden tes del viaje.. Choconni, J.~nel"O 4. II El me rcado en Choconta tiene luzar los sabados, v desde las cinco de Ill. manana el ruido de los ca r ros 110S despcrto, y salirnos al balcon.i gozar del ai re matinal. Espesa niebla envolvia la plaza. pero ya se oian en ella los ruidos delosprimeros me rcade res. en ratu despucs vino el sol, despej6 el blanco cortinaje. :>' un hirnno parecio sal ir de toda Ill. campina. i Hermosa la plaza de Choconta! Brota el aglla c r is tal ina y pu ra, en medio de ellos, por los chor ros de una pila que Henan el amplio tazdn de piedra, y huenas casas de dos pisos forman :'>umarco. No e ran las ocho y ya el me rcado estaba en plena. Alli todos los ar tefactos de la coma.rca: las mantas, los licnzos, las alpargatas, los canas tos, las ollas, las cobijas, la buena industria indigena. Y en los vendedo res el tipo chibcha conservado puro a t raves de cuat ro sig'los. i Las tirna quc la iglesia este inconclusa, y, como nuestro capitolio, parece no acabar se jamas! Esa manana el Sr. Delegado dijo allf una misa : el General Camargo, diligente y activo, dirigi6 los prepa rativos del viaje v recibio los abrazos de sus nurne-

9 m u ral las, dt~. Y aq i en Jlledio Ia fal ta del /uris)j/o la«lin al tivo n rosos amigo», y nosot ros nos pu si mos a cscud r ifta r los libros pa r roquiales. Hallamos en cllos, entre ot ros datos cu riosos, el sisruiente que no cita ninguna crcin ica: EI 14 de Noviem bre de 1819 f ue ron ejecutados en Chocorrta once es paffole s ; Juan G()mcz. Jacinto Garcia, Il dc-fonso Salcedo, Agustin Ltipe z, Ped ro Fernandez, F'rancis co Esteban V e1as(!uez. Jose Bohdrq uez, Miguel Rodriguez y otros t res cuyos nombresnopudo ave r iguar se seg-un dice la pa r tida de defu nc ion. ;.Qllienes eran es tos chapetones? i,flh'ron prisioneros de Bovaca t) fugitivos des pues de la g-ran batalla, que vinie ron a cae r aqu i en manos de los pat r iotas? En todos estes pueblos se \C Ia aiegrta de la paz y se aplaude la tarea del General Reyes..:\1l1 tuvirnos t,l g'listo de ve r al vete rano General Ram(;n Acebcdo, an tijruo Jefe de la A rtille ria. hoy dcd icado a las labores del cam po, Tam bien virnos.i los C ene ralcs R. );'ei ra v A uton i» He r re ra, vale rosos y si mpat.icos lihe rales que av udan hoy con sus palabras y prestigio en la Iaho r de conse rva r la paz y darie impul so al progreso. No lejos de Chocon tri St' hall a Hatovicjo, llamado hl'y Villa Pinzon en honor del (~eneral Prospero Pindin, Bello» curn pos, ag-ua abu ndan tc y buena y terrenos fer-aces. IEs s u cura el Dr.,Angulo, v en casa de el nos detu vimos alg-un rato el Sr. Delcsrado v sus compafie rox. La iglesia est;i en construccidn. ' Adelante l.'sta el paramo de Al ba r racin, donde empieza el De-par-tame-nto de Bovac.i. Am espcraban a ;\l'1011seiiorlo~; ca r ruajes en viados po r cl Cohernador de cste Depar tamen to para seg-ui r su ma rcha a la capital. - u \".Ie!\,O ;i larnentar e nuext ra tier ra. i Vue pai saj es tan sobc-r hios! Hav en Albarracin, f~ la ixq uicrda del camino, una ab ra ;) 1>0- q ue ron que en nada es infcr io r ri las 'pie son visi tadas en Suiza I) No rucira po r milla re s de viaje ros. i Sitio encantador aq uel! Al extremo de u n val lec ito que se ve abajo del carn ino se levan tan unox ce r ros como dos ando de el y majestuoso. Todo a lli pide, si llo turista s, que las d istancias r.o pe rm iten ven ir has ta aq ui, ;i 10 rnenos un fot6.g-rafo () u n pin to r '1Ut' dc-a corioce r aquella maravilla, Mas auli,esta Vr-ntaq ucmada, hoy Padua. cuyo Pa r roco, Dr. (jarda. sa.lio ;i caballo can u n g-rupo de p6rtico

10 - 6-- vecinos,i encont rar ;i S. E. La carretera sc aparta un poco del pueblo, pero se ocupan a111en hacer una variante que permita ;i los car ruajes pasar por en medio de el. En Ventaquemada fue nuestro primer combate de guerra civil. All i pelearon en Diciemhre de 1812 cent ral istas v fedcralistas. No somo-;"par tidar ios del cambio de nomb rcs. Respeto el sentimiento de gratitud hacia los hom b res notables, que lleva ;i sus compat r iotas a. darlcs su nombre,i las poblaciones: pero 10 mejor se ria denominar con ellos a nuevas fundaciones \' no cambial' el de las antiguas. Hoy hay fiebre de l~udar nomb res, y el lo no es cosa insignificante. Aqui tcnernos dos pueblos con nuevo bautisrno: al uno se Ie pone el nornbre de u n general, al otro e1 de la pat ria de San Antonio (sentimiento piadoso que ig-ualmente respetamos). Pero con esos cam bios se borra mucha historia y se pie rdcn muchos recuerdos. Villa Pinzon, ademas, hahria quedado mejo r llama rla Pinzonia, ;i fin de da rle nom b re mas bello y de una sola palab ra. Y en estos dos casos no es tan sensible el cambia como cuando se trata de nom b res indigenas. Aq ui, en fin, e ran norn b rcs espanoles y realrn ente poco he rrnosos: Hatoviejo, Ventaquernada. Pero los nom b res g-eograficos de los aborigenes son bellisj mos. ast los de los chi bchas como los de los panchcs y demas tribus de nuestro territorio: Sesquile, Ramiriqui, Gualanday, Guarino, Com bei ma, Coyai ma, Chir iki. jpordios no los vamos a. carnbiar po r Brctana, Nor-mandia, Transvaal, Tu rquia, Versalles Monaco! Una de las desg racias de n ucs t ra tierra es la tendencia a. perder el sabor local, a borrar las tradiciones,,i no tcne r fisonomia propia. El pueblo japones ha. tenido la sabiduria de tornar los adelantos de otros paises sin perder su sello nacional, su indole peculiar. 1<:1l0shacen fer roca r r iles, telegrafos, telefonos y automovilcs, pero conse rvan su idioma, su caracte r \' su s costum bres. No se les ha ocurrido llarnar a sus "ciudades Londres, Berlin 6 Paris. [Y que de confusiones t raen cstos nombreseuropeos! Una car ta a r rojada al co r reo con la direcci6n de Madrid. sin p recisa r el pais, deja al pobre empleado en la duda de si se trata de Se r rez uela ode la capital de Espana. Se nos dice que un nino nacio en Constantinopla, y no sabernos si fue en Ia. tierra del Sultan 6 pol' ahi en un cafetal de es te nombre.

11 7 En la (~eogtafia de la Com isicin Co rog rafica, al hablar de la Provincia de 'T'unja se recue rda que en ella tuvo lug-a' la celebre batalla que dcc id io la libertad de la N ucva ':;'ranada y que tan fccuudos r e su ltad ox tuvo para la Lndcpcndencia de America, «Con todo es to, ag'reg-an los au to res de aq uel l ih ro, en va no hu scan los ojos del pat r iota en cl solitario campo de Bovac;i un monu mcn to. una columna s iq u ie ra <juc conmcrno n- su ce so tan g-rantle y dcc.i-si vo: los sol it a r ios p.i ra mos y el r u ido del tor rente in mcd iat«son los iin icos que le hablan de la reden cion a mc r icaua.» Los L'eseos patri()ticos dl.' los aut o rr-s de aq uel la Geografl" SL' han cu rn pl ido. Hoy en c-l cam po de Bovaca se eleva u n he r mo-,o monumento e-n cuu nu-rn o ruci()1l de la t rascendcnta! hatalla. Al li es t.in los bus'tos de Bol iva r " Santan<kr \' cl nom h re de sus bravos com panc ros. Con g-usto vi nio-, in sc r ito el del ca pcl l.in del cjer-cito. l\ii~!'uel Diaz, que rn u r i.i v n e l com bate y que ha si do olvidado en m uchas ndrn inas d«nues t ros p roce res. «La libcr tad del n ue vo m n n do ( s la esperanza del u n ive r so,» d ice en una de las ca ras del monu m en to: hc r mosa s palab ras «Ut' l'1 Li be r tado r pron uucid ell ol'asi,'in rriemo rabh-. Hov duher ia deci r se ollserv6:',[onsefior al lee r las-vz«!,~':'dd J111C4'O nru ndo cs la CS!'I'/'(U1Z({ de! 1IJ1l7.'I'rsa. Hacia el Iado op ucs to cs t.in las hcr niosas palab ras que el cura Dr. Choquehuauca le dirigiera a Bolivar al ent ra r ii s u pueblo: «V ucst ra g-loria c rece ra con los siglos COHIO c recen las sorn br-as cuando cl sol dcclina.».,::] br.st.o de Bolivar t'st,i mutilado. Manos salvajcs profanaron la augusta efig-il', y debe se r repa rada 10 mas pronto. l~~ntor no hay u n pa rq uecito que' esta bien asea do y cuidado can pat r idt ico esme ro. Cu r ioso fue el encuent ro del Sr, Ddcgado con el Sr. Obispo de T'u nja. Once kilornet ros antes de esta ciudad S. E. q ui so hace r un poco de eje rcicio: se desmonui de l cochc y sigui() carn inando,i pie con sus com pafie ros. Ig-ua.l idea habia tcnido e1 Sr. Obispo, que venia de '.runja. a s u encuent ro. 'T'am bicn cl se bajo del coche v se pu so a anda r con s u sc(l'lito. De pronto, en una vuel ta de camino los dos p relados se encont raron frente a frente, a pie, y cada uno con su corni tiva. 'T'ra- de las salutaciones y p resentaciones se pu so en marcha hacia Tunja la lucida caravana. Esplendida fue la entrada a la ciudad. Can el Sr.

12 Obispo habian venido al encuent ro de S. E. el Dr. Dustano Gomez, Secreta rio general y encargado accidentalmente de la Gobernaci6n por ausencia del Gobernador; el Dr. Arturo Garda Medina, hermano de este: el General Cogollos, J efe de la t ropa, y ot ros funcion~rios ptibl icos. Lueg-o se ag-regaron rnuchis i- mos vecmos. A la entrada de la pohlacion estaba formado el bata1l6n que hace al li Ia g-uarnici6n y el Cuerpo de Gcnda.rme rfa. Iban en cl primer coche cl Sr. Delegado, el Sr. Obispo, el Gobernador interino y nosot ros. Lue- ~o scgui'an los dernas car ruajes y much ixirnos jinetes, el ejer cito y una gran multitud que corri6 a conocer al dist.inguido representante de S. S. Y a recibi r su hendicidn. III T'unja es ciudad muy in te resan te para el viajero. Sus viejos edificios. sus calles est rechas pero bellas \' aseadas, sus grandes iglesias, los escudos de sus casas, todo ese conj unto de cosas antiguas, de t ranqu ilidad y silencio la hacen una ciudad especial, de sello p ropio, de caractcr peculiar. Y es 10 que nos agrada de las ci udades: que elias no se ascmejen las unas a las ot ras. Tunja nos pa rece adem as el Bogota de ot ros tiernpos, la sonolienta Santafe de hace unos cincucnta 6 cien afios. As! debio de se r la capital de la Repiibli ca cuando no habia t ranvias, ni fe r rocar riles, ni luz elect rica, ni acueducto, ni esa vida fehricitante y agitac1a. Asf, apacible, buena, si lericiosa y lenta. Y cuando vernos en sus calles un an ciano, nos descubrimos con respeto, pues nos pa rccc estar ante uno de los hombres del 20 de Julio, ante un represcntantedeesosprimeros Cong resos, 6 ante la figu ra augusta de algtin patricio de lostiempos de la Nueva Granada II de la Confederaci6n G-ranad ina. Pueda se r que T'un ja no pie rda su color local. Haganse en ella nuevos barrios, levan ten se edificios mode rnos, pero guardense todas las reliq uias de ~u

13 <) - pasado: sus viejos alta res, sus mu ros vet.us tos. Arnarnos todo 10 rnode rno, pcro g-ustamos de que sc res pete 10 anti guo. l<~nbog-ota. se han comet.ido en los ul ti mos tiern pos ~rrandes p rofanacioncs por la piq ucta demoledo ra. Los pueblos cu ltos sal van cua nto pucdcn los monumentos (Ie ot ra edad, bien sea una f uen tc, una escalinata, UIU piedra sepulc ral, sin pe rju ic io de levantar sunt uc-sos palacios. Los franccses hacen la to r re F:iffel, p,-,ro no por ello dcst ruvvu la tor re San Jacques (j la pue rta de San Martin. 'T'ern p rano sali6 Mon sefio r a. rvco r rv r la si mprit.ica ciudad, no ohstantt q\1e ya el la councia. I<~\1e prim e ro al ed ific i.i de la (~ohernaci(ln. All i 10 rcc ibie ron el Dr. (~(Iml'z. dl'm;is e m plcados de el la. Es u n hermoso cd ificio, ':tntig-\1o convento, con g-ran patio y amplios co r redo r es. En el est;! e l local de la Asnrn blea, doncle virnos ret ratos del Dr. Mu r illo, D. Car-los HolgUin y d Gl'lwral t\losqncra. 'l'amhit~11 hay al li nn C\1ad ro de la batalln de Varg-as (I la de Bovactl. y que pa.rece SCI' obra del abaude rado Espinosa y formal' parte de esa colcccion pintada pol' el de batallas de la rnrlupendencia. que si no ticncn valor a rt ist ico, SOI1 de g-rande ap rccio como docu men tos hi strir icos. una \'I'Z q\le el fue testig-o p r--sencial <It' las Iib rada s en e1 sur de la Republica. }<~nes te edificio esta. el a rch ivo his to r ico del Depa rtarnc-n to, a r chivo peq uefio pero que tiene legajos preciosos. Su a rchivero e"" el Sr.}<~met('rio Moreno, qu ie n 10 cu ida con paternal ca rino y <jue ha logrado salva r de la dest ruccion v del olvido int e r-esan tes rnanusc ritos. Ya nos e ra co~ocido el norn b rc del Sr reno v ha biamns tenido ocasion de ad mirar sus labo res cn pajeog rafia. En La Unidad.peri6dicoquesepuhlic6 en Tunja en 1,388, v recientemente en El Hovarcu sc v en el Ro'/dIJl de llist'oria y. 1 Jltl:~iied((d('s t uvi mas ocaxirin de leer docu mcntos descif rados por el Sr. Moreno. I'~st~1un an cia no hondadoso que nos rcci hiri carinosamente y nos most ro algunos de los m;is antiguos codices. Alii vi mos aut6g-r'lf'l la firma de Sua rez Rondon y de al~unos de sus corn pafie ros en la fundacirin de T'unja. Sitodos los ar ch ivos tuvie ran hombres laborioso~ y arnan tes de la a rq ueolosria como e1 Sr. Moreno, se sa lva rian m uchas pag-inas de n ues t ros anales. Estu\'imo~; lueg-o en la ig-lesia v en el cuar tel de San F'ranc isc«, si tuados am hos en tina r isu efta plaz ue-

14 la, sernejante a la de La Capuchina en Bogota. La iglesia es grande y bella y esta al cu idado de ~res religiosos de su orden. En el cua rtel vimos ejecutar habiles maniobras al J]atal16n I5 de linea, habilmente dirigido par cl General Cogollos, y virnos el orden y aseo del edificio, as! como el cuidado con que se guarda el nurneroso parque. jhcrmosa la iglesia de Santo Domingo! 'I'iene especialmente una capilla dorada con embutidos de conchas y porcclanas, de gran mer-ito. Al lad a esta el convento, donde viven una docena de monjes. V'isi tado fue tam bien el colegio de He rrnanos Mari stas. (Itle es un edificio de primer orden yen el cual reciben inst.ruccion un cen tenar de alurnnos. Luego fuimos al otro ext rerno de la ciudad, donde esta el celebre Panopt.ico de 'T'u nja. Galantemente recibidos por su director, el General Paez, recor rimos los visitantes aquellos kihregos pasil los. aq ue- 110s som b r ios calabozos. Todo esti con grande asco y en mucho o rden, y los presos t rabajan en iit iles oficios.. Lm posi ble enu me ra r po r ahora todos los edificios de Tunja. Se ve un renacimiento de pat riot.ismo y espi ri tu publico, y de ahi que sea hoy la antigua capital de los Zaq ues una de las mejores ciudades de la Republica. Una cosa Ie falta pr incipalmente, y que la echamos me nos en todos los locales que visi tarnos: el acueducto. Es hoy Ia principal necesidad de esta poblacion. Antes que pensar en otros prog resos, emp rendaseesta ob ra, que es indispensable en coleg ios y ca que un en te ra. EI Obispo de T'u nja., Dr. Maldonado, pe r tenece a una distinguida familia bogotana, yes muy amado en su di6cesis, como 10 fue en la capital cuando eje rcia alli el cu rata de la Cated ral. Bogota via con regocijo su ascenso a la m it ra, pues se ponia un merecido honor sobre la cabeza de uno de sus buenos hijos, pero sen tia la tristeza de ve r alejar aq uel pastor que era para todos tan buen amigo y tan digno par roco, EI d ia de la llegada de Mon sefio r Ragonesi obseq u idlo con espkindido banquete, y en el tuvimos el gusto de conoce r las pr incipales pe rsonalidades de la Ma.g-istratu ra ~. de la Ig-lesia. Am es taban el Dr. Go-

15 mez, quien con tino e intelig-encia de.se mpefia acci dcntalmente la Oobcrnacirin: el Dr. Enrique Forero, en cuyas manes esta la iust ruccidn publica y ;1.la cual le es ta dando poderoso impulse: los cant)nigos Dr es. Mesa, Perilla, Nino, Caballero; los supe r iorcs de las comunidades lie J:ranciscanos, dorn inicanos v lazn r istas. RH. PP. Hozo, Cornejo y Pron. Tl1\'imos entonces ocasion <Ie conve r sa r con va r ios d«e110s v de apreciar sus meritos. 1<:1 Dr. Nino tiene esci'ita' una obra sob re et.imolog ias, bastant«in te rc san tc: el Dr, Caballero posel' una magnifica b ihl iutoca, y no cornu me r o aficionado -i no Iple en ella ha heche vas tos e s tudios. 'T'unja es la ciudad de los L ;tnllnig-os; pcsan cllos en todos los asu ntos de la vieja ci uclad, y son influentes pe r sonal idades en la socieclad. la polit.ica v las let ras, Ent re las «hras notables qul' hoy Sl' haceu en 'T'unja csta la casa para sace rdotcs ancianos. ibella idea la de levantar aquel refug'io para q uie ncs no pucde n ya consag rar sc a sus ta reas por edad Ii e-nfe r mcdad ' 8s el cuar tel de inval idos de la milicia de Cristo, IV 1<':1dia 7 salimos de T'u nja en coc he. Acorn panaron as. E. en largo t rayecto del camino 121 Ilmo. Sr. Maldonado, el Dr. Gomez v alg-unos ot ros amig-os. A poco rato. al mi rar hacia at ras poria ven tan illa del car ruaje, veiamos la ciudad Ievan ta r se enh ics ta, como un castillo de la edad media, con sus hlancas to r re s, y rodeac1a de barrancos, como fosos, para tender sobre ellos puvn tes levadizos. AWi. hac ia <:1oriente, se divisa el alto de Soraca. desde donde la cautci D. J os~ Joaquin Ortiz: AUf e"ta l a ant ig'u a y noble Vi l l a Patr ia ltd Zaquc y rumba de J<ond6n, Con "II ai re puro,,;11 brill ante c ie lo, Su,; a lt as tor res 'Iue ilumina.l sol. JUUe dt' recue rdos pe rsonales se despie rtan en los viajes 1'01' coma rcas q ue uno recor r io en otro tiempo! Las epoca", polf ticas, los cornpane ros de ruta de esos dias, la familia de entonces, nuest ra si tuacirin cuando p or alii c rrzamos. La vista de aquel alto y de ('se sel1-

16 _- de ro que baja a la ciudad nos trajo a la memoria urr hrumoso dia de 1899, en que solos y fatigados llegamos por ahi, viniendo del valle de T'enza, a la herrnosa capital, y la vimos por primera vez. El coche rodaba por la polvo rosa car rete ra, y todos contemplabarnos las feraces campinas y los cer ros az ulosos que cer raban el ho rizont«. Monsefior se hacia leer par uno de sus companeros, :i rates un librade hi storia de Colombia, a ratos otro sabre g-eografla y estadisticn. Maravillabase con el pr irne ro al oir todas las hazaftas de nues t.ros proce res, y con el segundo al ver como es de extensa Colombia, cuantas sus r iqueza s, curiri eaplertd ida su si tuacion en el giallo, y ve r al m ismo tiempo nuestro at raso y abandono. Pais. mas grande que m uchos de J~uropa, decia: aqui cabe t res veces F'rancia, y un solo Departamento es tan grande como Italia. Pero al mismo tiem po el nos infundi'a palabras de a.lieuto y fe en el po rveni r de nuest ra raza y de nuestro pais. J1.":1 al muerzo fue en la casa Hamada Et ijhlllz((j/o, :i la orilla izquie rda de nuestro camino. AlH nos atendie ron con toda galanteri'a su duefto Sr. Hernandez \' los miernbros de s u familia.. lba con nosot ros cse dia el ilust.rado canrin igo- Dr. Mesa, y buen companero de viaje fue en aq uellos campos que cl bien conoce. 1~1nos ensenaba todos los si tios cu riosos que recorda e1 car ruaje. All! estaban los pueblitos de Chivata y Oicata, que duermen entre unas lomas, envuel tos en la neblina, ignorados y t ranquilos. y cue rdos. lueg-o los campos de Bonza, de epicos re- EI ruido de otro coche y de aleg re cabalgata se hizo all' hacia adelan te, y en el lleg-o a nuestro encuentro el Gobernador de Tundama, D.. Marco A. Torres; su secretario, ej cura Dr. Perez, y va rios caballeros. 'T'ra.s de las salutaciones del case>seguimos todos hacia Duitama. La polvareda era cada vez mas espesa, el mime ro de jinetes au merrtaba sin cesar y las g-entes de a pie se amontonahan sob re el camino. Un momento nos detuvimosen Paipa, donde se le hizo a Monsenor e fu s iva reccpcidn. Por una calle larga que conduce a la plaza, adornada de a rcos y repleta de gente, entraron los car ruajes: y de halcones y verrtanas caia uua lluvia de flores. Despues de conocer la iglesia y reposa r un ins-

17 tante en la casa cu ral, volvirnos ;i sa.li r ala carretera v tornarnos el camino de Duitama. - Nuevos jinetes eng rosaron la cabalgata y vito rearon varias veces ul Sr. Delesrado. La nuhe de polvo envolvia todo el camino v sello se divi saban indecisos los grupos de caballos v se oia el aleg re y en t.usias ta voce rio. Alii' entre un grupo dixt.inguirno-, la fisunomia jovial y xirnpat.ica del p res bite ro Dr. Olivos, ;i qu ien habiamos conocido en Bog-ot;l hace pocos afios. cuaudo bacia sus es tud ios. En Du itama habra fies tas de torus. las \lll~-art'''' fiestas colomhianas: UI) ce rcado en torno de la plaza..\' adentro jinetes y multitud de gentes de a pie lid iando un to ro fu r ios.» Y po r ahi cerca tabur nas y g-aritos. t. Po rq ue en vez de es tas fiestas en que ni s iq u iera se ve el ar te ell' la tau rornaq uia, si no des()r<lt~nes de todo genero, no >'l' gasta I.'SC dinero en obras <111 ra bles v ve rdaderurnen te fest.ivas e hig-ienicas. como u n rai-nu{se!. una montana r nsa, un!ago para roma r? La multitud que co r rici ;l saluda r ri S. E. fue inmensa..iine tes v peatones se amontonaron al cos tado de la plaza por don de hizu s u entrada. ~' m uchos Sl~ apifia rou sob re 1'1 ce rcado <I ba r re ra: y p re-sen taba un as pecto singular aq ue-l la moll' de persona" de todas dases. edadcs v condiciones. que se at ropellaban.\ f.: olpeaban pur t repa r se sob re los rnade ros. En Du itarn.i t uvirnos el:.rusto de hallar al (~()bernado r de Boy;u';i, Dr. Garcin Med ina, q u icu habia \'L'- n irlo ii vc-r ;i -su suegr() cl Sr. Zam ud io, ljiw ll( g-aha dt> Yt'nezuela dl'spll0s de quinn' afios de au sc-ncia. La e ntruda a Santa Rosa en la manana si~'uienh' Iuc- helli sj ma. La cabalguta Sl.' jluso en o rdcn v clesfi- III trots d ca r r uaje <11.' S. i":.; las carn panas Sl' ccha ron ;i vuelo: la g-endarmeri'<t y un batullon p resentaron las ar mns. y la m ult itud se prccipitxi sob re la plaza a cunoce r al rcp rc sen tau te de S. S. Y ;i reci hi r su bendicion. Dia de reirocijo [UI.' aq uel para la capital de 'T'u n- dania: ademri- cle la vis ita de ~l(/nsenor lle:.raban ii e sa plaza ca r r uajvs po r pr im e ra H.-I:. \' en e sa felha i-ra el cum pleanos dvl Gobc r nado r. l':'n Santa l~()sa se de tuvo Mon sefio r todo 1.'1 dia siguienk, para dec ir al li la mi sa pontifical que dcsea-

18 ban el Gobernador y los vecinos que habian veriido de los alrededores a saludar a Morrsefto r. Para ello habia alli va.rios eu ras: el de Santa. Rosa, Dr. Perez; el de Belen, Dr. Pineda; el de Tasca, Dr. Olivos; el de Betei tiva, Dr. Martinez; el de Cerinza. Dr. Lozano. Bueno era tambien haeer alli todos los preparativos para el largo y penoso viaje en bes.tia que ibamos a emprender, y aprovechar aq uella etapa para conoce r la ciudad, rclacionar nos con sus han rados vecinos y apreeiar la ob ra de paz y de concordia y las mejoras materiales del Gobernador Sr. Torres. En esta bella poblaci6n nacio el Excmo. Presidente de Colombia General Reye~, y ah i en la esquina de la plaza Ie m uest ran al viaje rc, con todo errtus iasmo, la casa de balc6n verde donde vino al mundo el il us t re colombiano. T'am bien es Santa Rosa la pa:- tria de l Dr. Luis Carlos Rico v del General Pefia Solano, actual Gobe rnado r de Santander, del Dr. Carlos A rtu 1'0 Torres v de los he r manos Calde rones. En la mitad de la plaza es.tri aiin la columna de piedra sabre la cual se hallaba el famoso aerolito de Santa Rosa, (Jue fue llevado haec poco tiempo al Museo de Bogota. En la columna hay unainseripci6nque dice: A croiito, Pcsa I5 quill!aks. Lo!utiM Ccdlia Corrcdor ell la ('ulilla de Toearita en ('/ aiic) de Ilht.'. Colocado (('I"! frar arden de la l}funicijalidad d S de?.\'(.plil'ljlbr{' I873, sicj/(!o Alccddc f-!.'mi;.;dio lliojltaih(s. Des cuad ros hay en la iglesia de Santa Rosa que pueden ser de Vasquez, como nos 10 indicaba el irrte- 1igente cu ra, En el uno,;i 10 rnenos, que rep resenta alga alu sivo al purgatorio, SI esta bien ca.racte r izado e1 colorido \' estilo del maestro santafe rcno. Pew el cuad 1'0 de,:erda.dero mer-ito es una Magdalena, sobre la cual tam hien nos Ilamd la atericidn el Dr. Perr-z v que sin duda es de algun buen pintor ext ranjero. - Santa Rosa tiene gran po rve ni r. Campos fe raccs, sociedad distinguida, si tuacion ad mi rable y con carretera hasta Bogota, que hoy se ha te rrn inado y que se prolong-ani a Belen. AJ enumerar es tas ventajas y rnuchas de su s r iquexas y ma ravillas nos decia el Gobernador can algun ai re de t r isteza: «S61o una cosa nos Ialta, 10 que le faltaba a Cdrdoba: el ju icio.» «jah, pero esc vend ra, y pronto!, contesto Mon seno r. iaqui a 10 menos hay un Gobernador muy juicioso!» En la tarde del siguiente :dla. ensilladas las ca-

19 sa lizacidn t ,- balgaduras, v puestas las cargas sobre sus respectiyasenjalmas, par tirnos para Belen. lba con nosot.ros est' dia el H. P. Basig nana, Superior de los Salcs ianos de Bog:ota, q uicn habia sido desig-nado po r e l Sr. Deleg-ado para se rvi r!e de Secretario durante 1..'1 viaje, por no habc r pod ido ve n ir Mon-sefto r Cortesi. EI Padre Basi~'nana estaha en Ut ica a nuest ra ')artida de Bog-obi, )~'por eso no sali(i con nosot ros (k la capital. Hizo rapidas jo rnadas para alcanzu rnos para 10 cual 11..' avud.i su,,;dud de hierro v cl se r.n can sa.bl«" act ivo. Basta dcci r cutil Iuv su tiltima jo r nada: sali~) 01 d(' Chocun tti. l1eg-o a 'I'unja a las dos de la tarde Y po r noc tri e-n 1~1()de Piedras, m uy ce r c.i de Santa Hosa..\1 dia sig-uiente stnos reuniri en e~;ta ci udad antes de mcdio clia. Muchos ve.iinos sal ie ron ;i acorn pana rnos. y era bien pintoresca la ca ravana q uc ri larg'o paso se Iue deslizando po r aq uel camino lpll' lleva hac ia Bd0n, Bajan por al li Ias ag-uas que forman el rio Suapag-a. Van esas linfa}; al Chi camocha, (ph' no kjo,.; de cstos si tios em pieza la ma.je-s t uosa cu rva de m uc ha-, Il.'gllas l}ill' do sc r ibe po r entre a ltas mon tanas. pa r t icnclo L'11 <los csta comarca opulcn ta, y que va ;i t.e-r m iua r all.i -:n los con ti nes de la Mesa de J (> r idas. Pasa mos c-sa tanh,' po r Cer inz«, alden <ph' q ucda ce rca de Helen. La mult itud qtle SL' apiftl) al paso dl' S. E. fue inmeusa. ioh! jcu;intos indios! POl' toclo s los seude ros "allan en montones como u n re hano de ca rue ros, v at ropelltin dosc u nos con ot ros Sl' arrodillaban ante e-1cabal!o de Mon scno r. Xu habiamos visto en ninjruna pa r t«tan com ple ta la ig"naldad h u m ana. Todas esas hu mau idadc-s t ienen d m ismo vc-st ido, coincn 10 m ismo, duo r mcn 10 m isrno. l~ntr~' esos in<hg-enas no hay desigual<lad alg'una: todos ig'\lal r iq ucza, ig:lla1 caracter. igul1 ca ra, igual es ta t u ra, ig'ual edad. Se disting-nen apenas los in fan to s llw110rcs lie doce afios ; IllegO, de ah i para arriba, ;,quil~n pod rri dcci r de hombrr-s y muje res cu<il esta en la adolt-,.;cencia, cu.il en la vejez? E1 indio no echa canas, Y de a ll i la mayor dificultad para p r eci r SlIS ailus.' La civi rac can sus refinaruicn tos muchas desig"ualdades: dos hermanos c read os bajo el m ismo te~110 t icnen gustos, scntimiento~ y pas ioncs d is ti n tas, y \'ienc la dife rencia entre 1a vida del uno y del ot ro. Pero aq ui se ve la identidad en todo: iderrticos gustos, ident icos \'i-

20 cios, identicas cualidades, Todos beben Ill. mi srna chichll. v comen la m isma mazarnor ra. Nos aco rdabamos al ver estos grupos homogeneos de una senora que en Bogota al ve r en la puerta de un cuartel las cantineras dandoles Ill. com ida a los soldados, preguntaba: leomo haran es tas m uje res para distingui r a. sus esposos? Al final iza r el dia ent rarnos a Belen, donde se him a Monsenor eritus iasta recepcidn, y se le dio magnifico albergue en casa de la familia Marino; todo ello di rigido por el distinguido par roco Dr. Pineda, quien esa noche saluda a S. E~.y a sus cornpane ros en elocuente y delicado br indis. VI Sa.lirnos de Belen a las oeho de la manana, acornpafiados por el Sr. cu ra y algunos ot ros vccinos. Tba tam bien con nosot ros el cs tirnable Sr. Luis Nino, quien venia desde Santa Rosa con el encargo de acornpanar a Mon sefio r hasta Onzaga, y nos presto con sus conocirn ientos y su larga practica opo r tunos se rvicios. A poco de andar se interna el viaje ro en espeso -bosque, y se va descendiendo por en medio de frondosos ar boles. Serneja aq uello al monte de La Mesa: la misma vegetacion de tierra tern plada, los m ismos arroyos criatalinos, el mismo olor d«montana. Cambia luego el pai saje: aho ra e s Ill. su bida hacia el pa rarno. Trepando sin cesar en espi ral, por camino ped regoso, se llega a una alta cum bre, donde sopia u n viento helado v se ve la lob reguez de las alti planicies supe r io res. Una que ot ra cabana como acu r rucada v aterida se encuentra de trecho en t recho al horde "del sende ro, <lduerme a diatancia escondida alla entre las lomas v los mator rales. Aql1el cs el pa ramo de Los Ca iuttos, y cuando uno S(' c rec en la cima mas elevada, ve a la izquie rda elevar se ot ras em inencias b ru mosa s. sol itar ias v tet r i- cas. Este pa rarno tiene la ventaja de estar habitado, y se hallan a.lbergues, aunque m uy pob res. En una de esas chozas, El ~""((li/rl', nos de tuvirnos a tomar el almue rzo que llevabamos de Belen. EI frio era inten so, caia la lloviz na y el vien to soplaba sin cesar. Tomado el re fr iger io en el pobre corredor de la

21 casucha, sentados sob re piedras, sin mantel ni n.bundantes cubie r tos. seg-nimos el camino. ioh n.lm ue r zos en el pa rarno! ique celom biano no los ha heche y Ius recue rda con placer, a pesar de toda su f rujral ida d y de la melancolia del paisaje! Despues fue la hajada: bajacla m uy larga, inacabable, cte rna. A rates son ve r- daderas escaleras de piedra. Las rn ulas descieriden lentamente, como meditando cada paso que dan hacia abajo. Mementos hay en que p rovoca desmontarse de ellas y bajar a pie aq uellos peldafios. Se en vid ia,t los ar rie ros que p asan lig-ero y seg-uros, sin temor a la caida Ėl camino va en plena montana, bajando siemp re. Por alla en los montes de la izquie rda reson6 un trueno que hi.eo ceo en las opuestas p rofu nd idades ; lucg-o ot ro, y ot ro, y otro. La voz de la tempestad resonaba en las concavidades de la cordillera. v los arboles parecian est rcmcce rsc. Empezaron a cae r u nas g-otas y nos co.ocamos los respectivos abr igos: el hule en el sorn hre ro v el encauchado sabre los hom bros. La lluvia cayo sabre toda la montana, y el carn ino se to rnd en tin rio. Srlcnciosos bajabarnos uno t ras ot ro como neg ros f.mtasrnas: y los saxeos escalones no te r- minaban n un ca. Al fin lleg-amos al ter mino de la bajada, doude se encnentra el valleci to de Susa. El riachuelo que rodaba a la izquie rda aumentaba sus aguas con los arroyos de la montana, y luego se un io con otro que hajaba mngiendo por la de rccha. Ahi en la un icin de e sas aguas esta la hacienda de Campobello, de los Sres. Castellanos, donde debiamos pasa r la nochc-,pues Onzaga estaba adn bastante lej os. Eran ya las iiltirnas horas de la tarde y las sornbras ern pezaban a envolve r can su negro tul aque! sitio solitario y recondito, cuando echarnos pie a tierra Iat.igados y Ill'nos de agua y de lodo. De los sombreros caian pequenos cho r ros, los zamar ros y polai nas dejaban en el co r reclo r una huella de humedad y limo, y las montu ras es tahan ernpapadas de Ilu via y de S\Idor a. un tiempo. Al li, bajc aq uel techo hospitala rio, nos espe raba el rcspetable cura de On zag-a., Dr. Prada, con los duefios de la ':lacienda y algunos ot ros caballeros. Debido a. sus cuidados v atenciones nos repusimos del can sancio de la jornada y pasamos agradable noche. 2

22 - 18- No obstante haber arribado en las horas del erepusculo, pudimos darnos cuenta de la belleza del sitio, que jusfifica su nombre. Un cerro lleno de vegetaci6n se levanta detras de la casa, y de cl bajan dos riachuelos que la circundan, y que bafian a un lado y a otro dehesas opulentas. La noche envolvi6 toda la coma rca con espesa sorn b ra, y s6lo se veian las luces de algunas luciernagas que vagaban por la tierra, y uno que otro lucero que tras la tormenta ti tilaba timidamente en el cielo. El rio rom pia con su rumor el silencio de la selva. Acomodados en dos cuartos todos los viajeros, tratamos de conciliar el suefio, el cual vinopronto debido al aire frio y pu riairno, al arrullo del rio y a la alegre charla. De esta reco rdamos una anecdota, Hablaba alguno sobre las indicaciones de un almanaque que para ese dia habia anunciado buen tiem po, y se trat6 de las profecias meteoroi6gicas: «En Bogota existi6-refiri6 alguno-un senor IIamado Belar mino, que hacia calendarios con esta ciase de vaticinios, Ocupabase una noche enhacerelalmanaque del afio pr6ximo, y con toda paciencia anotaba Ios dias en que tend riamos buen tiempo, lluvias.ygranizadas. Cuando mas abst raido estaba cerca de la larnpara en sus predicciones ba rornet r-icaa, lleg6 su esposa, Ie toed el hombro y le dijo: Belarmino, no pon!1as II/(- via en uicrues porque se pone la plaza de mcrcado intransitable.» VII Por camino escab roso, de bajadas y subidas, fuimos al dia siguiente a almorzar a Onzaga. En todas las chozas del camino habia a rcos de hojas y Bores silvestres y bandcras de distintos colores. A)a. puerta de esas casu cas salia toda la familia a recibir la bendici6n del Sr. Delegado. En es te viaje singular se tiene Ia ocasion de conocer todos los moradores de cada habitaci6n, pues viejos y nifiox, hombres y rnujeres, amos y sirvientes, sanos'y enfermos, sin faltar uno solo, aparecen am amontonados. «Buenaoportunidad para levantar pane ros. el censo», deda alguno de los com-

23 - 19- Pasarnos par la hacienda de Tiuarito, el rio Chaguaca y el r iachuelo de Chaguajunca. Por ahi en todos esos sitios 1I0S most.raban los campos de lucha de la ultima guerra.: ce rca de al li hubo un tiroteo, mas alla se asornaba la guerrilla de G()mez y de Eslava, en aq uel cerro ocurri6 no fusilamiento, junto de esas brefias murieron no secuarrtos. jrefiid,t y tenaz fue la lucha entre esas montafias! A medida que nos ap roxi mabamos a. la poblaci6n la gente de a. caballo y de a pie aurnento considerablemente. enos cchetes" que cstallaron en un cerro dieron el aviso de nuest.ra aproximacion, y por todas las ve redas, a un l..do v ot ro del camino, descendian cor r iendo los campes inos y von ian a engrosar la multitud que iba det '~,isde 8. E. A la entrada de la poblacion estaba la banda de musi ca que en tond el himno nacional. icuan grato oil' esas notas marciales ejccu tadas en pobres instrurnen tos y par a rti sta.s de aldea! En la plaza fue grande cl entusiasmo. Las campanas del temple repicaron Y la gente se amontonocn torno del caballo de Mon sefio r. qu ien, antes de desmonta rse, impa rtid su bendicion. En tanto que e1 se dirigi6 luego a conocer los t rabajos de la iglesia, escu d r iftamos nosot ros algo del archivo parroquial. All i vimos que la par roquia fueerigidaen l()56; que luego, por haber sido dest.ruido el pueblo, se reedific6 nuevamente, v se hiz.o otra vez la erecci6n el 2() de J unio de 1767, p(;r eidr.i<'rancisco Javierde Equino, en nombre del Arzobispo Alvarado, y que sus primeros poblado res fueron J oscf de Cardenas, Juan Miguel Gonzalez, Antonio de Pefialosa v Manuel de Reafio. El norn hre de Onzaga es indigena, y pueda se r q ue no se Ies ocu r ra,i Sl,S veci nos camhiarlo por nom brc europeo. f<:nonzaga comienza el viaje ro a ve r en la mesa los V<LSOS y cu cha rus de plata, que dcspues se encuentran en toda.s las p(ulaciones de Santander. restos de opulencia de pasados dias. que los santandereanos han sabido con se rva r con ex(lllisita \'eneraci6n. Al li ern pieza,i obse rvar se tam bien la veg eta.ci6n de las t ie r ras.:;ilidas: e l platano, la cafra y las palrne ras. Por la tarr.e tomarnos el camino de San Joaquin. camino he r rnosu pe ro que in fun de nn poco de pavu ra. A la izquie rda ce r ros elevados y a la de recha hondo-

24 nadas profundlsimas y cu bie rtas de vegetaci(ln e xuberante. No se vc sino ;:i t rechos el fonda del abis mo, pe ro aquello es un vdrtice inmenso; se teme un mal paso de la cabalgadura, un eneuentro con acernilas cargadas. Son euatro ho ras de vertigo. Am plias, bien t razadas las cu rvas t razadas po r todas aq uellas faldas, por las cuales vamos marchando lentamente; pero al ver las g randes moles de arriba, amenazando nuestras cabezas, y las hondas y rniste riosas simas de abajo, serrtfrnos, por mas que nos sean conocidas esta c1ase de rutas, la emocion que dan los g randes precipicios, el escalofrfo que produeen las -alturas inconmensurables. Y pareee que en aquellas profundidades no se hubiera posado la planta humana, sinoque fuesen guarida de fieras, Pero no, allf existen casitas, donde hay algfin ligero plano, or illas del abismo, y se ve el verde de las sementeras; oirnos tam bien sal ir del fondo el gemido de un trapiehe. «Y si uno se rueda, lquien 10 recogera?» preguntaba el camarero de Monsefior. Lmposi ble responderle; dif'icil se ria has ta saca r los restos de quien llegase a rodar por entre esos hor ridos y pavorosos riscos. Cerea de San Joaq ufn estaban esperando a Monsefio r el simpatico cura Dr. Melendez. el venerable Dr. Rueda, vicario de la diocesis, quien tern pe raba al li, y algunos par roquianos, Al caer el dia llegarnos ala si mpat.ica poblacion, 10 m isrno que en las anterio-.res, entre vito res y repiq ues de campana :.v rodeados de espesa multitud. San Joaquin se llama p ri rnit ivamen te Petaqnero, y este nom b re 10 conserva el rio que pasa no lejos de allf. La plaza es muy pintoresca. Esta cu bie r ta de menuda yerba y pareee un tapiz verde, y en medio se levan ta un alto y frondoso eucalipto, A un lado la iglesia y la casa cu ral, con he rrnoso corredor, y en el costado del frente un viejo edificio muy espafiol: la antigua carcel de 108 tiempos coloniales, con su pue r- ta en a reo, sus dos ven tanas de rejas de hierro a los lados y su largo balcrin en el piso alto. Det ras de ese lado de la plaza destaca un g-ran cerro su poderosa mole. jque bien aq uella plaza can su alforn b ra de esmeralda tendida a los pies de ese gig-ante que envolvian ya a n ues t ra Ilegada las som hras del c reptis.culo, y que pa recia med roso y tet rico, pe ro que al sig-uiente

25 21--- dia Sl' nos most r.i, con la aurora, r-i s uefio, c u bie r to de \''''g-etaci()n y vida, Fecun do y an irnaclo y majcst uoso! VIIl En es te dia tocaba la subida de Los Cacaos. Nos la habian anunciado te r rible. All i f:laquean las mejores mulas v desfallecen muchixirnos viajcros. Es una cuesta alta: mu~l alta y muy pendiente y cscabrosisirna, Pe ro no la hallamos en mal estado, v antes bien muy cornpues ta. Es deci r, no habia trozo s pelig rosos 6 que impidieran el paso de las bes tias como en otro tiempo; mas la su bida si es de las mas Iragosas y elevadas que pueden hallarse. Al principio cuando aiin estarnos al nivel con las colinas delos lados, se ve abajo el pueblo de San J oaq uin y el riachuelo que corre a '3U puerta, pero luego subiendo aiin mas, estas quedan tam bien abajo. Seguimos caracoleandohacia arriba, y ya al rato vemos a n uest ros pies tam bien los cer ros elevados que antes mirabamos sobre nues t ras cabezas. Por mornen tos se detienen las caballer ias a. respirar y g-mmmo,>del sobe rbio espectaculo. Sin embargo hay todavia que su bi r otro tanto, y aiin divisarnos montes, alla en lontananz.a, con mayor altura. Azotamos las pobres best.ias y proseguimos la ascension. Uno tras otro en larga fila van Monsefior, el General Camargo, el Padre Basignana, el Dr. Perez, el Dr. (~uticrrez, unos veirite caballeros que salie ron de San Joaquin a. acompafiar ;i S. E. hasta aquella arrogante cumhre y el au tor de esta correspondencia; luego (;iovannino s6lo y pensativo, despues las cargas y los pobres a r r ie ros.. En cu rva in te r m inable, retorciendose hacia de recha y hacia izquierda, pero siernp re hacia arriba, va la nume rosa cahalgata, un tanto fatigada y s ilenciosa, j Al fin sob repujarnos a las mas al tivas montafias! Todo esta bajo nuestro nivel. Los encumbrados picachos que antes nos creiamos incapaces de dominar, estan ahora abajo, muy abajo, y nosot ros por encirna de todos los plieg-ues de la cordillera. de todas las mu rail as de gran ito. -Tan s610 el nevado de Guican alla mlly lejos muest ra a. nuestra altura su blanca cabeza, y pa.rece medir s u tall a can nosot ros. Pero un viaje es como la vida. [No hay que henchirnos de 01'- g-ll1l0;que unas horas despues volveremos a caer a los

26 valles, y a mirar por sobre nosot ros a los menguados oteros! Ya en la cima hay un camino por entre las rocas. A lado y lado paredes de piedra, de cinco a diez metros de altura; especie de subte r raneo <5ttinel descubierto en la techumbre. Ahf no se terne rodar al abisrno, sino que nos asalta la ideade una piedra desprendida de 10 alto: aplastado q ueda rfa el viaje ro como una pobre rata, pues no tiene de anchu ra el sendero mas de un metro. Tiene unas diez cuad ras este desfilade ro, v t ras (;1 se sale al fin a la ciispide. [Oh es pectacu lo J~aravilloso el de esa cuchilla donde termina la as cen aidn! A la derecha una hondonada que se extiende en cu rva c6ncava, por muchos kil<5metros, y en el final de ella las arrugas de la montana con el claro ohscu ro de sus precipicios, y un ejercito de colinas y montes. A la izquierda el valle de Mogotes, verde, r is uefio, jocundo y apacible, con su rio que suavern en te se enso r tija entre sus casas y plantios, y con su ciudad tendida carifiosamente en medio de la llan u ra. En la casa de esa cuchilla, suspendi da entre dos abisrnos, nos desrnontamos a reposar \In08 instantes y a contemplar el paisaje. Monsenor tuvo animo para subir a pie a un montecillo que hay adelante, para admirar con los gemelos el llano y las montafias. Ya desde antes de cae r al valle empezarnos a hallarpersonas que han venido de Mogotes al encuentro de Monsefior. Alli tuvirnos el gusto de est rechar Ia mano del caballeroso Dr. Arguello, secretario de instrucci6n publica de Galan, y de algunos caballeros que 10 acompafiaban, quienes venian en nombre del Gobernador a saluda r al il ust re hues ped, Luego, ya en el llano, encont rarnos a los sace rdotes Dres. Ardila y Pron, comisionados par el Sr. Obispo, yal Sr. cura de Mogotes, Dr. Sarmiento. Cordial yalegre fue el encuentro con estos distinguidos p resbiteros, y para todos ellos tuvo S. E. frases de sirnpatia y de alabanza. La caballe ria crecia por momentos y desfilaba por el valle como una serpiente. Todos iban joviales y entusiastas: los viajeros poi' llegar a esa bella ciudad y hallarse rodeados de tantos amigos; los mogotefios por recibir en su tierra al representante de S. S. y a sus compafieros, a quienes apreciaban poi' uno U

27 - 23- otro titulo: com pafte r ismo de colegio, afinidades po- Ht.icas, in ti midadcs de cam pafia, etc. etc. A las puertasde la ciudad la concur rcncia de a pie y de ;i caballo era grandisima y todos se p reci pitaban en mon tdn junto de S. E. De pronto llegtirnos al principio de una cal le ex ten sa que va desde las afueras ha.sta la plaza. Estaba ella ern pavcsada de banderas ;i todus lados: blancas las u nas v arnar illas las ot ra.s, v muchas tr icolo res. Una serie de a rcos de plantas- v de telas, de trecho en t recho: las ventanas llenas de co r t.i nax, de festones y de g"lli rnalcla s, y en elias a.sornados los g-rupos de familia y p r irnorosos nines. Sob re los andenes una multitud respetuosa que se es t rem ecia de placer al ve r llegar al esperado huesped: al li enfermos que habian dejado el lecho para recibi r la bcndicion, y mad res que alzaban en alto ang-el ito s p reciosos. como los de la Concepcion de Murillo, qui enes u nian las manos (J c ruzaban los brazos al paso de Monseno r. Y alia. en la plaza, al final de esa calle de flores y cor-tinajes, de bande ras y de coronas, de i-rscr ipciones y de escudos, un g-rupo de rruis icos tocaba cl himno nacional entre una nubc de mcren so. Apenas pasaba Monsenor la mul titud seguia det rtl.s de el; y 'lsi iha por la calle t ras el nu me roso escuad r6n una in fan te ria que c recia ;i cada instan te. AI liegar ;i la plaza la aglomeraci6n fue ext raordiuaria, y los caballos apenas podian caminar. Desrnon tdse S. E. con sus com pafte ros en la espaciosa casa cu ral, v en ella Iue ron todos debidamente atendidos por el (fistinguido par roco. Alli esta en la sala, como en casi todas las casas cu rales de esta via, el retrato de Prospero Pinzon; sentimiento noble de gratitud al caudillo que salvo en Paloncg ro la causa catolica. La igle~,ia de Mogotes cs bellis ima, grande como una cated ral. I~n su puerta tiene una insc ripcion que dice: Hoy I2 Agosto de I78j. Hay adem as tambien en la plaza una antigua capi lla. Mogotes es una ciudad industriosa; se t rabajan al li sornb re ros de paja como los rnejo res que se hacen en America; se hacen tam bien bellos ar tefactos de cuerno. Los habitantes son labor iosos, hon rados v hospitala r io s, y magnifico su clirna. -

28 Caen con frecuencia rayos en ;,10gotc:-;, Y s u ig-iesia fue destruida una vez por el elect r ico flage1o. Por eso el Dr. Oviedo dijo una vez al cu ra de Cajica, cuando le pregunt6si ser ia convcniente per mu tase este cu rato por el de Mogotes, del cual el primero habia si do cu ra: - ~uien teniendo a Cajica [,0 perm uta por Mogotcs, Mereee tantos azotes Como rayos caen a.lla, IX Temprano parti6 de Mogotes la alegre caravana. Muchos vecinos salieron a acornpanar a Mon seffo r en gran parte del camino. Este es al principio un llano, algo sernejante a los alrededores del Espinal 6 del Guamo, en el Tolima: los m isrnos caminos de horrnigas arrieras forrnando ramales que se acercan, se apartan 6 marchan paralelos, Las gentes salen al paso de S. E. y se arrodillan con gran devoci6n. De pronto termina el plano y empieza la subida. [Como provoca poner un t ranvia, 6 un autom6vil, 6un omnibus a Io rnenos sobre ese valle de Mogotes! Basta.ria hacer unos cuatro puentecitos y estaba el camino carretero. EI paisaje en la altura es magnifico. Culebrea alla abajo el JJfogotico, por entre plataneras y cafiaverales, Otro riachuelo rodando mansamente le sale al paso, se une a el y siguen, unidas sus aguas, lamiendo sin ruido, con dulzura, por en medio de la amplia canada, los bosques,y los plan tios, Trepan las mulas jadeantes, y el paisaje se ensancha. A 10 lejos se ven las colinas del otro lado del valle, v en el fondo se divisa aiin la risuefia poblacidn.. Luego vienen unas lomas semejantes a las de la sabana de Bogota cerca de la Boca del Monte de la Mesa. AlH hallarnos al Sr. cura de Curitl, el estimable Dr. Urrea, con gran ruime ro de sus feligreses. De pronto se descubre alla, todavia en lon tananza, el hermoso pueblo de CuritL Blanquea su torre como una gran roca en medio del valle, y se ven en torno de ella los techos rojizos de las casas, pe ro atin lejos, como una mancha indecisa. Bajando, bajando, al fin se llega al poblado y empieza a oir-se el voce rio

29 _. 2:; -- del pueblo. jqu0 hermosa la calle por donde se llega a. la plaza! Por todas partes bande ras y guirnaldas. La gente I..'sta.alegre. Las carnpanas se «chan :i vuclo :v mandan l'0r toda la cam pifia sus notas arg entinas. T'ras de los paramos y las tier ras f rias se halla esta poblacion de clirna calido ya definido. All i todo el espectaculo de la tierra caliente. Los naranjos en medic de la plaza, las ruanas blancas, los ojos brillantes y negrcs, los rost ros perlados, el ambiente lleno de luz, las ventanas am plias y ahicr tas a todo viento. La iglesia es integ ramente de piedra y ticneun at rio digno de una cated ral. Las casas son c6modas y lujosas, Se adrni ra uno al hallar en esa apa.rtada region, t ras de fragosos carninos, habitaciones tan eonfortables, muebles finiaimos, ve rdade ra opulencia. Am se detuvieron unas horas el distinguido Representante de S. S. y sus cornpaneros, y tras del suntuoso alrnu e rzo ofrecido por el simpatico Parroco siguieron su camino hacia San Gil. La vista de Cur iti, a poco de haber salido de la poblacion, es rnaravillosa. Brillan sus blancas paredes, heridas por el sol de ocaso; m ueven las matas de platano sus hojas en fleco, como penachos de esme ralda; se yen sus calles rectas subiendo hacia Ia plaza, con su fila de ventanas recicn pintadas, y en medio la iglesia, como madre de todos los hogares, amorosa y ri suefia, enhiesta y tranquila. joh! aquello es un pedazo de Andalucia. Es un barrio de Cordoba, 6 de Granada, <3de Sevilla; algo de es pafiol y mor isco, imponente y simpatico. A poem; kilornct ros ernpiezan a llcgar los jinetes que vienen de San C il al encuentro del respetable viajero. Ya son jovenes joviales y cultos, de todos los par tidos: bien Iuncionarros publicos: ora carnpesinos v artesanos. Al li estan a la mitad del camino el Gober nado r, Sr. Mnnt.illa, y 1..'1 Ilmo. Sr. Obispo, Dr. Blanco. Con ellos el sec reta rio de gobierno, Dr. Duarte; el can6nigo de Ia cated ral de B')g'ota, Dr. Rojas; el Dr. Manuel Maria Rueda, 1..'1 Sr. c u ra Dr. G6mez, los her manos Silva Otero, el Dr. Carlos Tirado, tantas pe rsonalidades diatinguidas de la magi st ratu ra y del cle ro, de la politica y de la medici na. Y la cabalgata crece y crece sin cesar, y llena 1..'1 camino, y Ievanta torbellinos de polvo. El sol dei.poniente haee brillar la cadena de oro y la cruz pectoral de Monse-

30 - 26- fior, quien, siernpre r isuefto, va adelante impartiendo sus bendiciones, El cortejo crece aiin mas a la entrada de la pohlaci6n. Aque110 es un mundo de caballerias que con la variedad de sus colo res y condiciones y con los abiga r rados t rajes de los ji nete«, da a esa bajada un tinte pin to resco 4ue no olvidaran faci lrneute quienes 10 presenciaron. Y a un lado, a la izqu ierda, las aguas, por s u parte, formando cascadas adrn irables, pai sajes sin igual. Ya son remansos cristalinos donde el ag-ua pa rece detenerse a gozar unos momentos de pe reza, como viaje ros que reposan bajo la som b ra de un ar bol: ya son charras que caen como cr istal de r reticloy forman lucg"o borbotones de espurna. Saltos de ag ua y arnplios pozos. unos t ras de otros. ;,C6mo es que la fotog rafia de ellos no esta en todas partes para rnostrar nuest ras bellezas natu rales? L Porq ue los textos de geog rafia no se ilust ran con esas rna ravi ilas?. A las cuatro de la tarde lleg-a la comitiva a las calles de la capital de Galan. Las casas os tentan cortinas y flores, y entre elias las bellezas ferneniles. mejeres que todas las rosas, que resplandecen reclinadas sobre la barandilla de los balcones. Un medio bata- 110nprcsenta las arrnas y bate su pabeltdn. La rn ultitud saluda reverente al Delegado Apostolico, al Sr. Obispo, al Gobe r-nador, a todo el co r tejo. Aquella cor r ierite de jinetes dcsem boco pronto en la plaza y se dirigi6 a la elegante casa, frente de la ig'lesia, que se les tenia preparada a los viajeros. Justo descansar, t ras de tantas jornadas, en la antiguay noble ciudad, cuna de tantos pat ricios y clirna tan bienhechor y sano. Manana ir ernos a conocerlao a pasea r sus calles, a buscar su rio y a disfrutar de la amistad de sus vecinos, caballerosos y buenos. Las sombras vinieron sabre la ciudad, pero no se aduefiaron de ella. La luz brot6 al ocultarse el sol en centenares de bornbillas, v volvirnos as! aver la luz elect rica, que desde Bogota no nos most raba sus alarn brillos de fuego. Una magnifica retreta puso fin al espectaculo de aquel dia inolvidable. x La hermosa iglesia de San Gil, en cuyo atico se levanta una estatua de la Virgen, repica alegre sus

31 27 -- cam panas. y las gentes co r ren p res u rosas hacia ella de todos los barrios a OIl' la m isa de Monseno r, quien sale de s i. ca.sa y a.t ra.vic-sa la plaza con s u roq ue t.e y vest.ido rno rado, acorn pariaclo de va r ios sace r do tes, las au to r idaclvs y sus com pafie ros de viaje. Solemne Iue la m isa en aq ucl t.ern plo, al cual acud io la mejo r sociedad sang'ilena y m uch isi mas personas <11.,1 pueblo. Las t,)rres de la igle,.;ia cstan aun inconclusas. per<> asi sin el pinaculo' "'l' yen bien y rec ue r dan por su forma, ~ruardadas pol' s u pues to las p ropo rcioncs, a Nut'S! ra ~,t ftora de Par is. que semcja u nos geme10s mirando bacia las nu be s. San (; il I.'sti en la o r illa de un he r moso rio, v a el Fuimos ;t)atlarnos con va rios arn igos, en tanto <lue S. E. regresaba it la casa it cam hiar sus vestidu ras pon tificale s ~' n:'cihi r e1 sa ludo de algunos cabal le ros. 'l'iene el 1"0 u n hello puente de hierro, constrllido en 1875 po r D. Abela rdo Ramos, m ue r to hace pecos meses en BUl'naventll ra, don de Sl.' ocupaha en los t rabajos del fcr roca r r il. EI Sr. Ramos fue un hombre iit il: s u nom b rc esta en va r io-, puentes y ob ras de insrcnieria que lo ria ran perdurable. Ah i fue UlW (ie los p r irn e ro s com bates de la campafia del No rt» en la pas.ula r evucl'ta. 'T'r-aido r es aq uel rio: in vita al hafto con S\1:-'> linfas P\1 r is ima-, y sus aparente", reruan so-s, pe ro ja\'! del que ine xpe rto se deje coger po r s u co r r icu t.e, PUl'S ahogado sera en sus hondos remol nos. rrodavla se recucrda, alii. entre S\1S muchas vic ti mas, al gallardo Samuel Bond, joven hogotanu que pereci() pol' salva r la vida de su com panero de hafio ahora u nos t rci nt.a afio s, Por la tarde f ue ron Mon sefio r y sus cornpane ros con e1 Obi spo, L'1 Gobernador. sus sl'cretarios Sres. Duarte y A rgiil llu, el alcalde Sr. Or ddnez, el Sr. Carlos Parra y ot ros arn isros ;i conocer la ciudad: todos a caballo, pues las distancias son grandes yalta la ternpe ratu ra. Visi tamos p ri me ro un delicioso si tio sobre la o rilla del rio, una especie de oasis <5parquecito, su p remamente poetico. Se siente allf una cal rna, un bienestar, una d icha inefable: el rio, que t ras grandes cho r ros de e s pu ma se apacig ua, forma un po:w c ri s tal ino, v on d u Ia suavem e nte como un lago: el ccfi ro que m ueve las hojas, r iza el agua y aca ricia las mej illas: los arboles que extienden bondadosos sus rarnajes por toda

32 - 28- la playa; los ruidos de la corriente y de los mancebos q ue se bafian <5lIenan los bar riles de sus asnos: todo eso es encantador y dig-no de aur'ea pluma y de pincel maestro. EI hospital, que visitarnos IntEg-o.esta mny bien se rvido por las hermanas de la caridad. Los enfermos se inco rporaban en sus lechos para recibir la bendici6n de S. E., y era grato vel' como se animaban aquellos sernblantes palidos, y como son refan 0 Ilorahan de alegrfa al verse visitados y bendecidos po r tan alto pe rsonaje. El edificio es amplio, y una vez concluido sera uno de los mejores asilos de esta coma rca. 'T'arnbien tienen a su cargo las hermanas de la caridad, en otro edificio distante, un colegio y un odelinato. Todo marcha muy bien. T'rabajan los huerfanos en varios oficios, principalmente en tejidos, y virnos de ellos magnificos t rabajos. Protector de este asilo es D. Pedro Silva Otero, a quien debe la ciudad muchos beneficios y cuyo lema parece ser caridad y progreso. Estuvimos tarnbien en el cementerio; nos complacio verlo con bastante aseo y bien ar reglado. Muchas veces en nuestros viajes poi' Col om bia hernos visto con dolor el lugar don de d.uer men los padres de la aldea en completo abandono; pueblos conocernos que tienen poi' nec ropolis un potrero sin tapias ni flores. POl' eso nos gusto aquel camposanto de San Gil, con su hilera de arbolillos y su turnbas blanqueadas. Mas suave sera el reposo de los patriarcas que edificaron casas, fundaron hogares y labraron la tierra cuando sienten manos ca rifiosa.s plantando ja rd ines alladode sus cenizas y recordando sus nom b res y sus hechos en mar-mol, en cuarzo 0 en madera. San Gil llegara a grande altura: su si tuacirin topografica es magnifica, sus hijos son laboriosos y sanos.}1~1obispo Sr. Blanco, hombre de vasta ilust racion y grandes vir-tudes, es muy amado de su grey, yel Gobernador Dr. Mantilla goza de gran popula.ridad. Mantilla, asf como fue brazo fuerte en la guerra y desplego entonces todas sus ene rgias, hoy con la paz ha venido a se r un eficaz agente de la concordia y respeta toda opinion hon rada y bu sca toda colaboracion patri6tica. Dijimos adios a San Gil al dia siguiente y tornamos camino para Bucaramanga.

33 Nos acom pafia ron ese dia larg'o t recho cl limo. Sr. Blanco, que iba a vis itar alg-unas pa r roq uias de la Diocesis. el Gobernador y muchos arnuros qne tuvieron la g-alanteria de sal ir con S. I':. ha s ta rnu v lejos dv la ciudad.. At ras se qucdo durante la su bida Giovannino, y como se queja.se.ul alcanzarlo algtin grupo de jinctes. de la flacu ra de s u mu li to, le dijo el duefio de este. que alli iba: -Ahi donde usted vc, ese machito es caucano. v ha estad» en Popayan. Cali y Buenaven tu ra. - -L,) c reo, dijo el italianito, pero no ha estado en Pasto. XI Desandando el camino que habiamos at ravesado para en t ra r a San Gil, y gozando nuevamente de la vista de las cascadas, lleg-amos ;i la al tiplani cie. Volvimos tam bien ;i poco caminar a disf r uta r de la vista de Cu ri ti, que dejamos luegn a un lada para ~cguir directa.mente hacia Los Santos. En una posada nos fue grato saludar nuevamente al Dr. Urrea y de mas amigos de aquella poblacion, que sal ie ron a presentar su horncnaje a Morrsefior y nos acom pafia ron algunos kilrimet ros. El Sr. Blanco tornci poco dcspues hacia la izquie rda, para Ba ri cha ra. Esa manana ;i las ocho tuvo lugar un temblor de tierra, pero nosot ros nada sentimos. Fueron los amigos de Curiti quienes nos refirieron el hecho, y luego 10 supi mos tam bien en va rias poblaciones del camino.,i.quc fue rza movi6 en aq uel dia toda aquella coma rca? Lo ignoramos; pero es cu rioso titic ese misrno dia fuc e1 terremoto de Jamaica, que dcst ruyo a Kingston y ot ros lugares de la Antilla ing lesa. l.que son los explosivos que ha inventado el hombre: la pdlvora, la dinamita, la ruelini ta, que pode rosas hacen volar edificios V horadan las rocas, ante la Fue rza de los ternblores' 'Iue mccen toda una nac ion, con sus rios, su s ciudade s, sus bosq ues, sus valles y sus morrtafias? Trotando, trotando nos acercarnos a la bajada del Sul«, Sabiarnos que aq uel lo iba ;i ser muy largo, pero si<~mpre nos so rp ren dio tamana profundidad..a una bajada sig-ue otra y luego otra. Es eterno aq ucl llescenso. y a mcdida que se baja, el sol es

34 mas quemante y el calor mas violento. Se yen alla, muy lejos, los cer ros opuestos, y se divisa tam bien una mancha blanca, que es el pueblo de Los Santos. Pe ro para llegar a el hay que bajar dos leguas y subir ot ras dos. [Como provoca tender un puente colosal, de muchos kil6metros, sobre aquel abismo tan ancho y tan profundo, que tuviese por est ri bos Ias dos montanas de las opuestas riberas! EI camino es ped regoso y baja caracoleando por entre el monte. jes sobe rbia aq uella abra de la cordillera! jque famosa linea de batalja para detener un ejer cito invaso r! Dos ho ras llevabamos de bajada y aiin no se veia el rio ni el pueblo de Sube, que se halla en su ribera..apa recian apenas, abajo, los montes que forman las altas pa.redes por entre las cuales corren las ag uas. jes aquello un abisrno dentro de otro abismo! jrl'ras de una profundidad sigue otra mas grande! Y las bes tias casi desfallecen, no obstante su buena cali dad, con el interminahle descenso. Y nosot ros nos sentimos fatig-ados, medio insolados bajo ese sol de fuego. Un albe rgue hay en la mitad de aquej1a escalera interminable: se llama Co rrctridor, y ahi tuvirnos el gusto de hallar al Sr. cu ra de Su be, el ca rinoso anciano Dr. Melendez, quien nos espe raba en ese lugar para alrnorzar. - Dirnoslc de beber a las pobres hest.ias en un chorro c r istal ino que baja de la montana y cae frente a la casa por tuberia de guadua; tom arnos el correspondiente alrn ue rzo, reposarnos u nos momentos y emprendimos de nuevo el descenso. La bajada es cada vez mas escabrosa. Peldanos de piedra en es pi ral eterna; vueltas y mas vueltas a derecha y a izquierda. Es como bajar en mula la torre Eiffel va rias veces, [ Y que pelig ros los de una caida! Basta que se reviente la baticola o se desprenda un est ribo para rodar sobre los g-uijarros. Era casi medio dia y no terminaba la bajada. U nas revuel tas mas v al fin cairn as al fonda del ab ra por dondo pasa el Chicamo('ha, majestuoso v al tivo. Alli estaba el pueblecito de Su be, al cual hoy, por la mania de cambiarnombres,lehan pue s to el Jordan. A este pueblo vienen multitud de cn fe rrnos en bu sca de salud. EI c1ima y el agua curan en l:j las enfermedades cutaneas y regeneran la sangre.

35 31-- Des pues de breve descanso resolvimos proseguir e1 viaje, no obstante el calor que nos ahrasaua. Pasamos el puente de madera y al ot ro lado hallamos va a rnuchos veci nos de Suhe que haja ron has ta al li ;i reci bi r a Monscfto r. Y em pezri la suhida. Esn tam bien es inacabable. Escalones so hre escalones, v al f ren te una mole altisima, ;~ la cual hay que lle~ar antes de terminar d dia. Des pucs de una media ho ra de asce nso el pai saje es maravilloso: se ve ccirn o desarrolla el Suhe <IChicamocha Sll mean d ro por entre esos escarpados montes. Pa r.-ce u n rey de Iabula que se ab rivra paso por entre fu.-rt.es m u ral las v las fllese apartando para su marc ha ;'. u no v a ot ro laclo. A bajo la alden bafiando sus pies en LlS oudas: at rti«las gran des rn ole s por donde bajarnos ha.ce puc as ho ras, V po r a ll.i., lejos. en un repecho de la cordillera, el pueblo de A ratoca como un nido de ;iguilas. Sobre nuest.ras cabez;ls unos picachos t;l11 altos, tall altos, que pa recen he sa r las nubes II sos tener la hciveda az.ulada. 1':1 se nde ro se llena de j ine tes que est.in es pe rando a :VIoL'senor a la vera del camino, y siguen det ras de el des pues de habe r lo sal udado. 'T'ras de u n caballo va otro, ~' dcs pues ot ro, \' lul'g-ootro. l<:s una larga cadena am bulan te, que se ensortija por toda la su bida, De pronto vi mos t rc padas sobre encumbrados riscos, en cu riosos mon toues, las gentes de a pie. Pa recia al p r inci pio una bandada de aves contemplandoa los viaje ros ; despnes u n eje rc ito defendiendo lasuhida; 11110S estahan scn tados en las rocas, v los ot ros de pie, formados en fila. Era eso supremamente interesante. Aillegar ce rca de la curn b re se d ivisaba daramenteaquella multitud abi~arrada. Todos los sl.'mhlantes son rcian, todos lo~ sombreros e ran a~ita<1os en cl aire. Ya q ucda.ha!l111\' abajo el pu ehlo de Sulw. Eran las til ti mas horus dei d ia y t rcpabamos los post re ros cscaloncs de la montana. ;.Porqlle---dec1aGiovanino -vno t rac r toda la tierra que van ;t sa-car del Canal de Panalll,t \' lienal' con ella estm; ahismos?. AI h n terminamos la su hida en mvd i«de ovac iories, y to ciimo s la Mesa. la g'l'an.:yll'sa de Jeridas, que se extiende po r muchns leg-\las v c uv a r iq ucza es irnponde rable. AlIi, al llega r,t ella, est;i el pueblo de

36 32-- Los Santos. y en el pasarnos la noche, mu)' bien a tendidos P?r el bondadoso cu ra Dr. Serrano v los buenos veci nos. XII ique he rrnoso pedazo de Colombia es la Mesa de Jeridas 0 de Los Santos! Aislada de toda cordillera, ahi en el coraz6n de Santander, y circundada por impetuosas aguas, serneja una isla apacible en medio de aquel oceano de cer ros que la circundan por todas partes y que ondulando se dilatan por leguas redonda. a la Buen gusto tenia el cacique Guanenta cuando sefiaki a esa altiplanicie para residencia de su corte, y gran sensatez han tenido los laboriosos santandereanos que hoy la cultivan y trabajan. El climaes delicioso y la tierra prodiga, De ahi que sea esa Mesa uno de los si tios de mayor porvenir en Colombia. El cafe de aui-nos dicen-es el mejor del mundo. En cornpafiia de nuestro antiguo amigo Ambrosio Mantilla, que tiene ahi una hermosa propiedad, y de muchos vecinos de Piedecuesta, que salieron al encuentro de Monsenor, recorrimos aquella opulenta Mesa, llena de ganados y de sernente ras, y cruzada por aguas purisimas. Ese dia tuvimos el gusto de contemplar el nevado del Gilican, que se llama tam bien de Chita 0 del Cocuy. Es un gigante que eleva alguno de sus picos a mas de cinco mil novecientos metros de altura. El dia que trepamos el Alto de los Cacaos no log rarnos divisarlo bien, por estar envuelto en su cortinaje de b ru mas, pero hoy si dejo ver, por rara casualidad en este si tio, su lama blanco como una colo sal gualdrapa de armino. El almuerzo fue en el sitio llamado La Honda, hermoso lugar adonde vien en a tomar banos y a reposar unos rrieses los vecinos de Bucararnanga y Piedecueata. Ahi tuvimos el gusto de conocer varias estimables familias y a muchos veci nos de este ultimo lugar que venian -a recibir al Sr. Delcgado. 1~1Dr. Mantilla dirigi6le la palabra a Morrsetto r en nombre de todos el los, y grato nos fue ve r como las laborcs del campo, de las cuales cs afortunado

37 titan, no han minorado la amena ve r hos idar] que conocimos en Marrti lla desde los bancos del coleg-io. I':s el adernas un caballero y u n pat r iota. A j)aso largo seguimos po r la vas ta Mesa hacia la gentil Pietlecuesta, que cspe raba Con irnpac iencia al l~epresenbnte de S. S., ataviada con sus m cjo rcs galas, mos t ran.io Sl1 mejo r sonrisa y hanada po r las luces de una tarde dorada y tranquila. Irimcnsa fue la aglomeracilln de genks al llesrar ~ilas pue r t as de la ciudad, y muy he r moso el de-stile. El Dr. Qtintero, s u disting'uido pa r roco, que habia sal ido al cncue-n t ro con algunos ot ros sace rdot.es y muchos fdig-reses, iba al lado de Monsenor, v luego segufa una interminable compacta muchedum bre. fila de ji ne to«, _,-t ras el los Por una calle la rga se hizo la ent.rada, v bien pintoresco fue todo aq uel lo, En pue r tas y ven tanas y en los andeno-, sto'ap ifiaban las gentes al paso des. E., y l-5ea r rod llaban II incli naban con rcs pe to al distinguir entre el g-rupo las bo rlas ver-des y oro sob re l-5u sombrero.le paja, y Sl1 m uceta mo rada, y s u cadena de oro, y ~1I paternal son ri sa. Y 01 bendccta a de recha y a izq uie r da, sereno, dulce, ca r iitoso. Y las carn panas gritaban alegn's en los cam panar ios. Y se agitaban con el vien to los centenares de pendone-, que fiameaban en pue r tas y balcones. La procesion pase! por debajo de una se r ie de a r- cos hechos con elegancia. I~n n nos cs ta lian las a r mas del Pon tificc, en ot ros e l escudo de Colombia v en var ios inscripciones al usivas al ilust rc huesped.. Lentamente fue pasan do Monsefior y su comi tiva bajo esa llrvia de flores. y se lleg6a]a plaza, donde una banda de nnixica tocaba el himno patrio. No olvidaremos f;icilmente cl espect;iculo de este d ia, Esa calle la rgn ernpavesada de bandc ras. ya tricolores, ya blancas v ama r illas, va solo blancas; esos a rcos con tiara y llaves de flores: esas vcntanas t ras de cuya.s rejas se veian, va nevadas cabezas de an cianos, va rost ros son rientes de herrnosas p rrmo roso-.. mllj(~res. ya figura~ de n ifios 'Tornarno«la diagonal de la plaza y fuimos a desrnonta r nos en la bella aquella, casa ell ral, a una cuad ra de 'T'odo el sig-uiente dia pcr mancci mos en la bella ciudad de las or illas del Riode Oro. Tiene Piedecues- 3

38 - 34- ta su color local y algo que 1a aparta de 1a monotonia de muchas de nuestras poblaciones. Hayen su plaza, en sus casas, en S\1S edificios, en sus moradores algo especial y caracte ris tico que produce en el viaje ro sirnpatia y encanto. L n lado de la plaza es beliisimo: se elevan alli dos iglesias elegantes, con un esti lo di stin to al de casi todas las de nuest ras ciudades y pueblos,que tienenarquitectura igual; y en medio de cllas el edificio municipal, el!itjld de Ville, amplio, aseado, bien arreglado; al pie un at rio con bancas comodas, desde las cuales se domina toda la plaza. Ese costado de csta bas ta.r ia para forrna rse la idea de que los piedecuestanos son hom bres amigos del confort y del buen gusto. Pero es al ver el hospital cuando se nota que allf saben hacer bien las cosas, que hay al Iado del espir i- tu publico bastanto dosis de estetica, No es el hospital una casa infecta, es t rccha, mal d ispucsta, como sue1en verse en Colombia; no: es un edificio vasto, con hellos salones, arnplios cor redores y rodeado de jar-dines. Las He rmanas de 1a Caridad, junto con las n ifias que educan en el vecino colegio, recibieron a Monsefio r con toda alegria, y hubo recitaciones y canto. iquc placidez se veia en los rost ros de los pohres enfermos al recibi r as. E.! Inco rporabanse en el lecho y se santiguaban al reci bi r la bendicidn. Pobres tullidas se ar rast raban a besa r el anillo, y alg-unos idiotas 10 miraban con ojos abie rtos y rna ravillados. V'isi tarnos lucg-o la car eel y los colegios de hombres. En todas partes se recibio al Sr. Delegado can respcto y ca r ifio. Par las calles de Piedecuesta corren arroyos 10 m is mo que antiguamcntc en Bogota. Hoy son un adorno y si rven para el aseo, pero tend ran que desaparecer, como desaparecieron en 1a capital, e1 dia en que se estab1ezca e1 servicio de car ruajes. Esas corrientes de agua nos recordaron el Bog-ota de nuestra nifiez ; los dias de escuela en que toda disputa de muchachos tenia la amenaza de «10 voy a lavar en e1 cano.» gn cas i todas las casas hay deliciosos banos de a1berca; pero esos dias tenian los piedecuestanos una preocupacirin: venia turbia, muy turbia, el agua que abastece a la ciudad, 1a cual siempre fue crista1ina. Unos derrumbes ocasionaban aquello, pero e ran de-

39 _.. r rum bes cue pa recian p rod ucidos por fu e r zas inte rnas, 10 que hacia terne r alguna catast rofe. Confiarnos en que ella no llegara y pronto volveran las aguas a su antigua pu reza. Sepan,,i 10 menos para su cons uelo, los buenos hijos de Piedeeuesta que en Bogota con f recuencia vienen por cl acued ucto unas aguas que pa reccn ho r- chata. XUI (: ra.n.io e rn n ue s t ra emoci.in e l dla 17, PUl'S Ihamos a ent rar,t Bucararnanga, ciudad por la cual habiamos tcnido g'randes sirnpatias. Sabiaruos IIue se p reparabr. su n tuosa recepcion, y el pob rc co r res ponsal que esc r ibe estas Iincas experimentaba la timidez de no se r ac reedor a la parte que le co r rc spond iese en los festejos ni de es ta r a la altura de tal so lern nidad. Iha adem.is,i abrazar,t antiguosamigos, v sentia que el COraZI)ng"olpeaba impaciente y nervioso. Propiamente la entrada ;t Huca ra.maujra empezo para nosot ros dcsdela Florida, r isucfta poblacion que hace escala entre Picdccucsta y Buca ramanga, y en la cual se cle tuvo u n momento Monscnor para saluda r al curl y pa.ra conoccr la ijrleaia. Era alli va ta n considerable el mim e ro de personas que habian venido de Buca rarnanga, lllie nos scn tiamos l'n las pllertas de la ciudad. Nos liq~aba ya el alien to de:la populosa capital. y m ir.ibarnos ha cia adclan tc c rcvcnclo ve r., a sus campanarlos..a La Florida vin ie run va r ios jdve nes en bicicleta, )' con los.'ineh's y gcntcs de,i pie que salian dt' torlas partes Io r ma ron in merisn corn itiva. SCgllllllOS,t paso ap rcsu rado, a paso de alegrla. deteniendonos s610 par mom en tos,i tcnde rle el brazo a un viejo amigo,,t es t recha r Ia mano de alg-un caballero a q.iien nos p resen taban, a saludar de lcjos,i alg-tin conocido,i q uien no podiamos ace rcarnos par laag lomc-acion de gcntes. Alii est,t Manuel Ibanez, Mag ist rado del Tribunal, hogotano que ha echado raices en Hc.ca rarnang'a, donde tanto He le q uie re: alli el Dr. Aurelio Muti s, excel so como medico, v como politico, y como amigo; alia el R. P. Mario Valenzuela, el jesuita poe ta, bien conocido en Colom hia; al1<i e1 Dr. Quijano Gomez, can qu ien se simpatiza al mo-

40 -- 36 mento de conocerlo, y tantos ot ros que eeria largo enumcrar. T'eme rosos de olvidar alg-uno, no mencionamas sino los que tuvirnos en unos momentos a nuestro lado. Pero alla can Monsenor, v allado de los ot ros cornpane ros, icuantocaballero apuesto, cuanto hombre dis tirnruido, cuanta muest ra de la //ite bucaramanguense! Ahi en La Florida tuvirnos una periosa noticia: el General Peiia Solano habia caido del caballo al sali r de la ciudad al encuentro de Mon scfto r, v estaba sin sentido, moribundo, en una casa a la e~trada de la poblacion. Los arnigos del Gobernador, la poblacidn entera, cstaban cons te rnados. Adernas del dolor de ve r en esa situacion al g-allardo rnandatario, iba a ser esto el fracaso de la fiesta. --iaila esta Bucaramanga! dije ron va rias voces en un recodo del camino, v muchas manos se extendieron hacia el ponicntc indicando la ciudad. Alla estaban en efeeto las dos tor res ai rosas v enhiestas de s u principal iglesia, y al pie de ellas, polluelos en torno del ala materna, los ot ros campanarios y los tejados de las casas. Y a. medida que nos ace rcabamos se divisaban mas disfintarnente algunos detalles de la ciudad, y veiarnos ya claramente la forma de esas tor res, de raro estilo, alga como hizan tino 0 morisco. A la entrada de la poblacion nos indicaron el lugar donde se hallaba el General Pena Solano, y el Sr. Delegado y sus corn pafie ros nos des morrtamos para entrar a saludarlo. Ya el General habia recobrado el conocimiento, y aunque suf ria aiin agudos dolores, se puso de pie y nos ab razo con ent usiasmo y rnost.ronos su afable son r isa. Por prescripci6n de los medicos y stiplicas desusamigos pe rrnanecio al Ii hasta las horas de la tarde, en que fue llevado a 8U casa en u n coche. Magnifico fue el desfile del Sr. Delegado por las calles de Bucararnanga : pasarnos por la plaza de la Concordia y luego por dos calles largas hasta la casa que se Ie tenia preparada. En todas las casas habia banderas y adornos, y la multitud que se aglomeraba a s u paso era extraordinaria. No s6io estaban alli los habitantes de Bucaramangasinolosque habian venido de muchos pueblos vecinos. Imposible era a Iosagentesde policia detener aquella multitud de gentes que se precipitaban porlas bocascalles y det ras de

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42 -37- la caballe ria como rios desbordados. jquc movirn iento, que cnt usiasrno, que aleg ria! En los balcones las bellfsirnas nijas de Bucaramanga, con sus t rajes claros, vapo rosos, se inclinaban sob re las ba randillas como corolas de flo res t ropicales. Un bata1l6n se abri6 en dos alas, junto con la g-endarme6a, Y por en medio de esas ma rciales Iilas paso saludando la arrogante caravana. Esa noche tuvo lugar una magnifica re t reta di rig-ida por el ar ti sta Sr. Villalobos.. J;-:lSr. Deleg'ado y sus com pafie ros fucron esplend idarn cn te alojados, y atendidos cspecin.lrncnte por el caballe roso D. Joaquin Bre-ton, encargado de tan delicada m isicn. [Oh inol vidable entrada a Buca ramanga! Habran Ih:gado a tu s pucrtas y paseado por tus calles generales victo riosos. caudillos de alto mer ito: pero (;1 quicn se aclarno jamas por todos los par tidos, por todas las clascs sociales, por todos los gremios, como al Sf. IkIL g;ulo Apostolico? jcu;inta satisfaccidn senti:lmos todos los que ibaruos a s u lado al ve r que alii no habia venccdo res ni vericidos ; que si se de r ramaban lagrimas e ran de placer, y tlue at ras no quedaba ninguna huella de sangre! Vaya en nom b re del Sr. Delegado y de todos sus compancros una voz de gratitud hacia las auto ridades, la sociedad y el pueblo de Buca rarnarura, par la esplendida manifestac ion que todos hicieron en aq uel g-randioso dia. XIV l.que viaje ro pod ra olvida rtv, ciudad hermosa, aunque c1 vien to de la vida ern pujc su vela por lejanas tie r ras, v c ru ce el am plios mares y g-randes capitales? 'I'll rccue rdo q ue-dar.i si em p re en la memoria como el de una sonata inde leblc que gllsta de tarafear el lahio afios dcspucs de ha bc rla cscuchado. jbucaramanga, Bucu ramamra! j~omhre dulce, cadencioso, que sona ra siem p rc cu rinoso en nuestro oido, que pron uncia ra sie mp re n ue s t ra boca can ent usiasrno y dclei te! "':1 nos reco rda rri perennemcutc aquella sociedad cul ta y buena, tanto amigo caballeroso v noble, L'"a sernana de co rd ia.lidad v fiesta., Hig-e los des ti nos de Santander e1 General Pefia

43 38 - Solano, bien conocido en el pais. Hermosa pagina de su vida es la defensa que hizo de la ciudad en la pasada revuelta. Si Bucaramanga hubiese caido en poder de la revoluci6n en esa hora de sorpresa y de aislamiento, el Gobierno de Bogota hab ria sucu mbido sin duda, Pefia Solano es modesto y calla sus glorias militares para pensar s6lo en la paz y el progreso de Santander. Nos constan sus g randes esfue rzos para que Iuesen 1ucidos los espectaculos de esos dias, y coronada fue su obra por un cxito completo. Sus secrctarios son los Sres.F'. Sorzano, J. M. Philips y J. M. Garcia, conservado res el primero y el ultimo y liberal el segundo. Buena prueba de la concordia que reina en Santander, tierra ag itada en otro tiempo por insensatas pasiones. Todos t res son funciona rios modelos, ve rdade ros patriotas y distinguidos caballeros. La expoeicion fue espectaculo consolador. Tras de tautos desast res es grato ver todas aq uellas muestrasdel trabajo y de la industriasantandereanos. Cuatro afios de paz han dado ya esplendidos f rutos. Y no solo Santander sino los dernas depar tamentos, principalmente Antioquia, enviaron alli productos de su agricultura, de sus minas, de sus fabricas y de sus talle res. Hacer una relaci6n de la expcsicion se ria tarea larga para una simple correspondencia; de ella se publicara el catalogo y haremos en otra ocasi6n detallada revista. Conste por hoy que en ella hubo el mayor orden, que fue muy visrtada y que todos salian de allf felices y satisfechos al ver c6mo renace la tierra colombiana bajo e1 radiante sol de la paz. Las fabricas de cigarros, de ce rveza, de tejidos: las aguas minerales; las muest ras de sansevie ra: los cuadros de sus a r ti s tas eran especialmente elog iados por la concu rrencia. Muy visi tado ig-ualmente el salon de antiguedades: al li preciosas reliquias de nuest ra historia: una capa de Bolivar, una espuela de Paez, un aut6grafo de Morillo y muchos t rofeos que muest ran como el pueblo de Santander sa be g-uardar objetos y documentos que nos recuerden los pasados dias. asf los felice; como los infortunados. Una noche tuvo lugar un concierto y en otra una velada Iirico litera ria. En ambos espectaculos virnos cuanto es el desarrollo ar tiatico e intelectual de la 80- ciedad bucaramanguense. 'I'arnbien sera para ot ra oca-

44 sion el hablar de cada uno de los rnime ros de los prog ramas, que hoy, asi de viaje, nos altan fuerzas para tal faena. Baste decir que ambos fueron cspectaculos se rios, cujtos, mi rificos. }':l segundo 10 o rganizd la Sociedad Pedagog-ica de Santander, Socieditd digna de todo aplau so par sus labo res en pro lie la iust r uccicn, con 10 cua esta hacierido al pueblo san tande reauo altf simos beneficios: es ta fiesta fue of recida ;i Mon sefio r en elocuente d iscu r so por cl Sr. D. Enrique Puyana. Bella la cstatua de Garda H()\ ira, y elegante el cspectaculo de s u inaugu rae ion, Ahi, al pie del pedestal, y deszar rada que f ue por la polvo ra la bandera que cubria la efigie, p ron unc id algu nas palab ras el Sr. Delegado, ley() su alocucirin e1 Gobernador y dijeron discu rsos los Sres. Mu tis v Sorzano. 'T'odas cstas pil'- zas orator-as Iue ron aplaudidas po r la in ruensa concu r rcncia que lienaba la plaza. En la inausru racidn de la exposicilln tuvimos el gusto de or tam bien olocucntes a rengas: all.i habki el secretario Sr. Phillips, en Irases opo r tu nn s, sob rias y elegan tes: luego ocupri la tribuna el Dr. Carlos Tirado, y en tu s ia.smo al auditorio con. su palab ra vibrante y a rtist.ica: des pucs oimos al Dr. Quijano Gumez : si el esti lo es el hombre, la oratoria 10 retrata can ma vo r cxacti tud: al escuchar el bello discu rso del Dr. Qtiijano sc ad ivina al personaje, se comprende que el o rador es u n hombre pat r iota, ilns t raclo y bondadoso. Las fe st.ividadcs se succdian u nas en pas de ot ras. En la igle"ia tuvo lug-ar una m isa pontifical, para la cual fue ayudado Mou sefior por el distinguido par roco Dr. Quiros y var ios sace rdotes que habian venido de los pueblos ci rcunvecinos, y en ella p redico el R. P. Ma ri o Valenzuela. Ahi estuvieron el Gobe rnadar, sus sec rcta r ios, los rep reaentantes del Gobierno nacional, (.1.' los departarnentos y de las provincias, y muchas gentes notables. En la plaza principal hubo maniobras m ilita res, y por la noche en el ci reo de to ros una ma rcha de antorchas ejecutada po r el mismo batalkin. el cual manda el gallardo Coronel Velez. Hubo f.esta para todos: cl pueblo goz6 de las cor ridas de to ros en la plaza de Belen d u ran te la sernana, Y cosa exce pcional: no hubo la menor rifia ni accidentc desgraciado, que tan f n-cuentes son en esta

45 clase de regocijos, altivo. y mas entre un pueblo orgulloso y Para conc1ui r los festejos oficiales se hizo la siernbra de un a rbol en el parque de Romero, Reunidas las autoridades y principales fam ilias de la ciudad en el edificio de la asarn blea, don de tuvieron lugar el concierto y la velada, desfila ron luego, en civica procesion hacia el poetico parque, y al fin de esas elegantes filas iba Mon seno r seguido de la banda de musica. Hicieron los concu r rentes una gran rueda, rueda herrnos'isi rna, que los t rajes feme-niles hacian aparecer como una colosal gui rnalda de flores. y en medio de ella entraron Monsenor, el Gobernador v ot ros funciona.rios, y coloco el primero con sus propias manos una ceiba, que sera el a rbol de la concordia y de la paz, y que los buenos hijos de Bucaramanga no deja ran secar, sino que 10 frondoso y verde. ha ran crecer y conservar siernpre Y fucra de los espectaculos del dia, de los regocijos oficiales, que son cosa pasajera, lcual es la impresion que deja Bucaramanga al viaje ro? La de una ciudad adorable. EI clima es sano, no es fuerte, no hay un calor sofocante, y existen buenosestablecimientos de bafio, mejo res que en la capital de la Republica; la sociedad es co r recta v distinguida: virnos en los hogares familias hono rabiltsimas y en el club caballe ros de alta v refinada aristocracia. J1:1 parquecito Romero es muy hello. Buena idea la de sern brario cas i todo de mangos. Asi como la elegancia de un ramo esta en hacerlo de una sola flor <3 de flores de un solo color, cs Cllic eso de haeer un bosque del mismo a rbol, y de arbol tan bello como el mango. ;,Porque en el Tolima, doride es ta planta se da can opulencia y donde el clirna pide a gritos su 80mbra, no se hacen en las poblaciones pa rques como este de Bucararnanga? Pueblos conozco alla en esas ticr ras cal idas donde d ifici lmen te encuentra el viajcro una sorn b ra para arrimar un momento Sl1 cabalgadura. Y en los lugares <It> nuest ra saban a t,porque no sernb rar toda una plazuela de sauces, de esos verdes sauces que dan una nota tan suave, tan placida y tan perfumada? nacional! ioh, el sauce debia de se r nuestro ;irhol En un costado del parque esta el hospital y el cemente rio. Ambos los visi taron el Sr. Delegado y sus

46 compane ros. El hospital esta al cuidado de las hermanas de Ill. caridad. [Cuan grata fue para los pobres, enfermos esa visita de Monscno r! Ancianos v nifios 10 coritem plaban con extasis, y aq uc-l los rostro~ pal idos, de pupilas t ri s tes y labios de amargura, parecian t ran sfigu ra r s.e en salud y alegr ia al rccibi r con toda fe la apos tdl ica hcn dicion. U nas pob rcs locas bcsa ron a t raves de las rejas de sus celdas el anillo de S. Eo Los padres jesui tas dirigen un colegio a pocas cuad ras de la plaza principal. Es muy hucno ese plantel, y de otro modo no podia se r, p ue s S1\ su pe r io r l's el ilu s t.rado P. Valenzuela. Tiene Huca ramanjra una peq uena hihlioteca en la calle real; estri ape nas en panalcs, pero como es amplio el local y es magnifico s u bibl iote ca r io, e1 Sr. Simon Harker, hombre ilu s t raclo y amigo de la in st r uccion, c reernos que sera p rcispe ra la ma rcha de este estahlcci m ien to. Debe ria fomenta rse la c reucion de un m usco, y bue-na base sedan las cu r iosidades de la expos.icion. Ot ros asilos v colegios a cargo de diver sas congregaciones vis itamos al lado de Mon scno r, y en todos el los virn os o rden, aseo y buen gusto. Las calle s de Buca rarna njra son largas pe ro l11uyest rechas: eso hace l1uc sea im posi hle e s tabl ece r el se r- vicio de t ranvias en muchns de el la s, v attn dificulta el de coches ; pe ro sf convend ria ponc r lo en algunas de ellas, pues ya la ciudad st' ha extendido bastante y es grande la fatiga al carn ina r ;i pie. F n t ranvia entre Bucaramanga y La Florida se r ia tam bien cosa facil v muv util. -Bucaraman~a ha tenido si emp re u n buen elernento de progreso: las colonias e xt run je ras. Residen actualmente alii, y han residido tam bien en ot ros afios, m uchos ext ranje ros que son ornato de csa socicdad y elementos de s u adelanto v hieries ta r. Tiene esta ciudad su hi stor iado r. el labor ioso Sr. D. J. J. Garda, q uien ha e sc r ito sus cronicas y t rahaja en u r.a nueva ed icidn de elias. Conocja moslo de norn b re y habiarnos leido s u obra...\1 t rata rlo pudin~os ap reci.i r tam bien al ci udada no, al pat riota y al am uro..buca ramangn da una nota jocu nda, lozana y magn ifica en medio de las mon tanas de Santander. J<:s un paisaje oriental el de s u ciclo azul, sus ja r d incs de

47 crotos, de los cuales cada hoja parece la paleta de un pintor; con sus palmeras, sus amplios almacenes y sus cerros lejanos en el confin del horizonte. Y algo superior al Oriente, pues aqui ni esas pers ianas, ni ese encierro en el hogar, ni esevelo-e,ldwrclzaj-que -cubre los rostros de las muje res del Levante; abominables costum bres que Pierre Loti acaba de flagelar en su ultima novela Lcs Descuchantes, Aqui 10 contrario: las ven tanas abiertas a todo viento, y el viajero ve desde la calle la familia platicando en sus mecedoras, 0 bien el tropel bullicioso y encantador de mujeres en t raje claro, que pas an sob re los andenes de Iad rillo. Al bogotano, acostumbrado a ver los postigos de las casas bien cer rados y las senoras en las calles vestidas de negro, Ie produce esto un placer singular, una dulce ernocion. AlIa no vernos en la noche pasar una fila de damas vestidas de blanco y con zapatos de a rrn ifio, sino cuando van para el baile 0 hay funcion de gala. Yaqui es de todas las calles y de cada instante. Y cl novelista frances jcomo gustaria de ver estas salas abie rtas a todas las mi radas, y esos rost ros libres de todo manto! Y va para conc1uir una palabra oportuna de alguno de los viajeros, un improntus de galante Imomo. Be referia la noche de la inaugu racion de la estatua un chiste bogotano. La estatua de Colon recientemente levantada en las puertas de la capital sefiala hacia la sabana, y cuentan los bogotanos que la estatua esta diciendo: Todo esto es de Fulano, v ponen ahi el nom bre de un rico propieta rio. - - Y la de Garcia Rovi ra, que ticne tam bien el braze extendido, t.que estara diciendo?--pregunt6 una senorita que estaba alli con va rias amigas que habitan hacia el barrio que senala la efigie. --Esa dice-dijo nuestro amigo-aim uiuen las mas hcrmosas, [Oh, Bucaramanga! Tierra buena, tierra sana, tierra rica, tierra alegre. Dejaste en nosotros irnpe recede ro recuerdo. Que las bendiciones de Monsefio r caigan en terreno fecundo y se conviertan en tu s campos en co rolas y raci mos, y en tu recinto en colegios y fab r icas: que sob re tus hijos caigan toda clase de beneficios, y que siern p re seas p rdspe ra y feliz, joh tierra buena, tierra sana, tierra rica y tierra alegre!

48 xv Quj~o Monsenor conocer antes de sali r de Bucararnanga el cam po de batalla de Pa10 1It',l(ro, y visi tar a Gi ron. AlH fuimos can el cu ra de Bucararnangu, Dr. Quiros, v con cl Dr. Ordonez Yanez, cu ra de Sardinata, quien habia ven ido hasta Piedccucsta ;i saludar al Sr. Delegado ~.que dcsde al lri nos acom pafiaba. J'.:lera el mejor cicerone para recor re r aq uellos si tios memorabies, pues se halld en la c rue nta batalla y presencio todos sus :~rande's episodios. Se baja una cuesta, se pasa ;.i I<?iode Oro y em picza hlego una l.ug-a y penosa a,.;cen:-;ion en seqwntina: se llama esa subida EI Tira!mz()/l, v asf es en real idad: vueltas y rovu ei ta s hacia las nubes, por un camino Ilcno de guijarros. Al pie van q ucdando todas las col inas, y al m ira r hacia at rtis se ve a Huca ru marura ya mny abajo, alla del ot.ro lado del r io, sohre una Ilan u ra. T'ocarnos al fin la cumb re, v lleg-al11o,,;a las casas de PaloJl(',!(ro. Desde el las se ve g-ran parte del cam po de hatalla. Al li f ue cl Wate rloo de la rcvol ucidn, v no di remos de la revuelta pasada iinicamente, sino de la hid ra revolucionar ia. Si ahi hubie ran sido vencidas las fue rzas del Gobie rno, la tea de las rebeliones hab ria seguido encendida quien sabe hasta cuando. :81 General Uribe ha d icho en rec icn te ca rta es ta f rase Ilena de sinceridad sob re la batalla de Pcralonso, anterior a la de Paioncsrro : «Decididamente, bien pesado to do en la halanza del pat r-iot.is mo, mejo r hab ria sido que alii nos de r rota ran.> Seg-uimos por la cima de la montana, pisando el campo don de libraron t.itaruca lu cha nuest ros dos grandes pa r ti dos. Alli se des t roza ron en horas de 10- cu ra que q uiz as pa.sa ron para s iem p re. l<~lte r reno esta aiin con nurne rosos despojos del combate: sob re una col ina rcdonda que se llarnaba antes julylia/or/a ().!-oj/la!'t'/ada y que hoy se llama LOJ/la de los mucrtos v doride fue mti s encarnizada la pelea, se ven aiin restos de cin tu rories, de ca r- tuche ra.s y de kepis; ropa en harapos: tablas de las cajas de municiones: cascaras de caps ulas, y tibias y Iernu res y pedazos de c rti ricos. Da pavor la vista de esos ji rones.le cuero enneg-recidos y encar rujados.

49 -44-- de esos pedacitos de cobre que ar rojaron plomo sob re infelices soldados, de esos huesos blanqueados y cor roidos por la intemperie. EI Dr. Ordonez nos indicaba a cada paso algun lugar memorable: allf cayo Julio Martin Restrepo, Coronel an tioq ueno; alli fue herido erdaneta, el Jefe de la Artilleria; por alla dio una carga Pinzon sobre el enemigo; en aquel bosque perecieron centenares de soldados: esa hondonada fue la fosa de muchisimos cadave res que no pudieron se r enter rados: y seg uiamos hallando despojos po r doq u ie ra. [Cuan abundantes se rfan recien pasada la batalla, s i hoy, despues de siete afios, se encorrt raban aiin en gran cantidad! Llegamos, t ras de mucho caminar, al Iuga r donde esta la celebre piramide de calaveras. Hay unas doscientas arnontonadas, mirando todas con sus cuencas vacfas hacia los cuatro pu ntos del horizonte. i Vision macab rica aquella! Todas tienen esa mue ca sarcast ica de los esqueletos. Una que otra, un nombre escrito con lapiz, que no se sabe si es el de un viaje ro 6 el del pobre difunto. Unas g randes, ot ras chicas, de angulos faciales de todas las mcdidas. l De q uienes fueron esos c rarieos? ~}ijran soldados, oficiales <Ijefes? ~Tendrian esposa, madre, he r manos, hijos? lque pensamientos tendrian al morir en ese campo, olvidados, y en medio qu izas de ag udos dolores? Picarnos las cabalgaduras para no pensar mas en tales melancoljas, v tornarnos, el camino de Gi ron. Dificil sin embargo apartar de la mente la preocupaci6n de tarnafia hecatombe. Cuentan que Napoleon dccia al contemplar los dcspojos de un campo de batalla, y ver los mue r tos y los hc r idos allitendidos: «Espectacu- 10 hecho para que los p rinci pes le tomen horror a la guerra.» Al pasea r sob re Patonesrro pensabarnos tambien que al li de hian ir todos los revolucionarios, conspi rado res y agitadores a jurarle amor a la paz y a renegar de sus belicos conatos. Por un lado de la ser rania dimes vista a Gi ron, y descendimos hacia la poblacion por un bello camino, de donde se divisan las he rmosas ma rgenes del Rio de Oro, que pasa lamiendo unas vegas de esrneralda. Al medio dia es tabarnos en la vieja Giron, notable ciudad en ot ros tiernpos opu len tos, y que hoy, s i de caida de su anti guo esplendor, conse rva si la bel leza de sus campos, el bello caracter de sus moradores,

50 su magnifica iglesia y res pctables hogares que guardan la nobleza y la hidalsruia de sus antcpasados. Am es pe raba a. 1Ionsd'ior el dig-no cu ra Dr. Mantilla, quien obseq uiolo, a-si como a S11-S com pafie ros, can es plendido al m ue rzo. Lueg-o fue cl Sr. Ddegado a la iglesia y confi rrnd cen teua res <It.'n ifio-s. Bella ;;.quella basil ica de G i rrin : grancle, al ta. hien ven tilada, (on dos patios ;i los Iados, de doride le ent ra ai re pu 1'0 por todas las pue rtas de las naves, y con un bello pr.lpi to de nui r mol. As! ell' higienicos debian se r todos os tcm plos, LOll m uchas pue r tas late rales que de-n ;i vest.ibulos de ambos lados para <jue no haya jam;is at m.isfe ra mal sana. En uno de esos patios esta enterrado el a rq uitecto. La insc ripcion dice: Lni«J.Jf)lao'o Prira : Ij..1fayo,,sSj.. Bella I. S ig-ualmente la plaza, donde extienden su rarnaje Jl1l1\' ve rdr- v m u v f rondoso cuat ro marnones v una ce iba ' En la ta rtle regresamos a Bucaramanga, no po r los ce r ros de p({!ojl~'gr(), sino por la playa del rio, que es camino de pocas ho ras v de cornodo t ranai to. En tar to que pasabamos bajo g-randes ce ibas y caracolics y al pie de ce r ros donde en otro tiempo sc ext raia ore y plata, refe rian algunos var ias amicdotas de Paioucgr«. H.ecordamos apenas dos: -MIn -delia un ant.ioq ueito refi ricndole a un amigo 10 tc -rihle de la hatal lnv-la matanza fue tan hor ro rosa, q Ill' los ~'allinazos no com ian va sino de capitan para a r r iba '. De otro contaban que decia tam bien a sus arnigos:.. Pig-uraos cua] ser ia el tiroteo que un zancudo sali«con cinco balazos. XVI icuan triste dejar a Bucararnanga! Dias de reg'ocijo, de en tusiasmo pat r iot ico, de placida aleg ria pasarnos al li, y jarnas hab rernos de olvida.rlos. La cabalgata se puso en ma rcha ;i las ocho de la manana, y tom6 por el barrio de Belen. Alli salian las (J'entes a pue r tas v veritanas a des pedi rse de Monseftor. l~~nia pintore'sca plaz uela vag-aha la t ri steza del

51 dia siguiente a toda fiesta: se desbarataban en ese instante los palcos y bar reras que habia n servido parala Iidia de los dias ante rio res, [Herrnoso aquel lado de la ciudad! El sol doraba las hojas de los arboles, y al frente mostraban las colinas sus deliciosas quintas y sus suaves declives. De pronto ern pezci la subida, y el grupo de jinete» fue trepando, t repando, po r Ia ladera, hasta liegar a una cu mb rc, A la derecha revc rbe raba un arroyo, alla en 10 profundo de la canada, sornb reado par C()POSOS caracolies. y ala izq uie rda se veian los llanos del norte de la ciudad y la quinta de Larsen, y en el confln, muy lejos ya, los escarpados cer ros de Paloueg ro. Seguimos subicndo y llegarnos rato despues al Alto de la Cru e, All i nos des pedirnos del General Pefia Solano, del Dr. Mu ti s, del cura Dr. Otalo ra, del GeneralHernandez, del Dr. Phillips, de D. Rafael Quijano, del Sr. Clausen, de los dernas caballeros que vinieron hasta al li a acorn pafiar nos y de q uienes Ilevamos inolvidable recuerdo. Volvimos a mira r los pies del encu m- brado monte, Ievantarnos en alto los sombreros y partimos hacia adelanto. No lejos, sob re un cerro mas elevado, ab re sus brazos una gran cruz, de u nos tres metros de altu ra, elevada ahf en los dias de la g-uerra, y que semeja esos oratorios de Bretafia que han levantado las esposas de los marinas sabre las rocas del mar para oral' en los dias de tormenta. En torno de esa cruz habia una partida de labriegos, quienes saluda ron al Sr. Delegado, al divisar lo a distancia, con una salva de cohetes que reson6 po r todas las brefias. Am se hallaba el apreciable Sr. Andrade, ducfio de una hermosa quinta, a la que ent ramos unos instantes y dcsde la cual volvimos a dar una ultima mirada a la gentil Bucaramangao Ahf estaba al pie, con sus cal les rectas, sus techos rojos y sus altivos campanarios; mas a.lla sus casas de campo y sus poeticos llanos; y despues Gir6n, la noble Gir6n, que rnues t.ra alla en lontananza sus enhlestas torres y los tejados de sus casas, sus bosques y sus plantios, y en la remota lejania los cer ros azules y sobe rbios, cerrando ese pai saje delicioso y magnifico. Aquello es como la vista de Medellin desde el Alto de Santa Elena. Asf como la canto el poeta: :Muellemente tendida en Ia llanur a.

52 Adelanto se hallan var ias cascadas bell'isi mas. Primcro una a la derecha, por cuyo pie pasa el carninante; 1tlt::!~Ouna i la izquie rda, for mada por t res chor ros consec utivos y que pa rcce n t res nitidosvellones. Poco des pucs otra que cae tam bien sohre el camino como la pri me ra, y cuyas g-otas alcanzan a salpicar. como u n vapo r izador, cl rost ro del viajero. Y po r al li otra vez rcc ue rclos de An t ioquia. La montana.;e eleva ;i ambos lados del camino. que va por una vialda, ;i alturas prodig.-iosa,.; :' ell declives inve r owim ilcs corn o en la tierra del maiz, Xo hav miis te r r.mo plano que el que van pi sando las cabalgadu ras, dt~ dos metros de anc h u ra. A u n larlo y ;i ot ro cvr ros pe rpendicula res, y abajo, unas vcces ;i la de rccha y ot ras i la iz.quie rda, el abi smo don de se Dye rug'i- u n to r ren tc, que i rates deja ve r ;i traves del Iollaje sus li nfas de plata y sus chor ros de algod61l. Aq nello l's un camino por en t re dos mu rallas de ve rd u ra, y c rcc uno por morn cntns que la planta h u- mana no se ha posado jamas en eso» p rec ipicios, y que esas semen teras que all icrccen fueron scm b radas por las aves v los vieritos. Pero no: al l.i cs t.in unas chozas, de 1:recho en t recho, su s pcnd idas sob re los riscos mas ernpinados, que nos haccn reco rda r a Emiro Kas tos, qu ien decia que los antioquefios hacia n sus mo rudas en picachos doride Jes darla n:rtigo a las ;iguijas.. Llama sc uno de aq ucllos mon tes Jlo)/serra!c.L la izq uie rda del camino. yen real idad recue rdan sus hrenas d es ca rpado cerro de la capital. "I'odo el esta Heno de habi tac ioncs v scrnen te ras..alruor-ztirnos ell un si tio llamado Ad)()/solo. en medio de la montana. Los buenos carnpeai nos habian levantado all i, como en toda la ru t a, u n arco de flores y helechos al ~r. Delegado, y Jo cs pe raban ell res petuoso grupo. Esa casa, dulce refugio, en mitad de esa jornada, estri clevada entre cuat ro abisrnos, pe ro se goza des.de ella dej pai saje de las canadas. Hay una pal me ra que se incl ina sabre las p rofundas s imas y que soli tar ia, sin otra de s u cspecic, Iue sin duda la que d io su norn brc i la posada, bien que sl hay rnuchos otros a rbus tos que rodean la habi tacidn, a la cual viene por rtis tico acueducto de glladuas e1 agua de Ia montana. Despues de una ho ra de repose la caravana se puso en ma rcha.

53 Iban aquel dia con el Sr. Delegado, adernzls de sus companeros en las ot ras jorriadas, los Dres. Calderon, Quiros, Ordonez, y Ortiz, presbitcros de quienes ya hemos hablado. El Dr. Calderon, que es poeta dist inguido, ameniz6 aquellas horas de duro camino con la recitaci6n dealgunas hell as est rofas, Alli le Olmos can vivo placer la poesfa a un peste del teleg rafo que hiciera cuatro dias antes, al pasar por al li pa ra Bucararnanga a recibir a Monsenor Ragonesi. Yelcan6nigo poeta recita con majestad y buen g-usto, VOl,clara, dulce y cadenciosa, VOl,de buen orador, del que sabe en tusiasmar y convencer. EI rfo T'ona dejo escuchar su rumor. Par en medio de g-randes piedras y de arboles secula res ruedan sus ondas fo rrnando remolinos y saltos. Ya es.un pozo como un espejo, ya son espurnas que sernejan un tapete de a rm ifio. jque hermoso rfo! icuanto provoca desmontarse y bajar por entre el bosque a su ori- Ila, beber esa agua cristalina, da rle de ella a la pobre bestia, y bafiar se en sus linfas! Dos veces c ruzarnos el rfo, la. una por un puente de madera y la otra vadeandolo, Ala izquie rda vimos de pronto otro tor rente. Es la quebrada de San Antonio, (Iue baja im petuosa yagitad a y une sus aguas con las de aquel rio, Al fin, en las tilti mas horas de la tarde, Beg-amos a las ce rcanias de Tona. AIH estaba el ell ra Dr. Zafra y un grupo de Ielig reses. Los arcos eran cada vez mas frecuentes. A mcdida que nos ace rcabarnos la multitudde a caballo y de a pie aurnen taba. Var ios cohetes resonaron y oirnos el alegre repiquc de las campanas, Monsenor impartfa sus bendiciones sin cesar a un lado y otro de la via. Por una larga calle, ernpavesada de coronas y banderas, hicimos la entrada ala pintoresca poblacion, La muchedumbre se agolp6 a la plaza, donde sobre una tribuna le dirigio un nino la palabra a S. Eo, quien antes de desmontarse dio al pueblo su bendicidn. Fuerte es la r uta de Bucaramanga a Tona. Su bidas y bajadas sin cesar, durante todo un dia: pero debe reconocerse que no obstante 10 abrupto del terreno y 10 despoblado de mucha parte de el, no esta en mal estado el camino. No hay en el ningtin paso peligroso 0 di ficil donde haya de desmontarse el viajero. Pero como la fatiga SI es grande, vamos al lecho a to-

54 mar descanso para la jor nada del dia sig'uiente, que sera mas larga.\' pesada q lie la de hoy: a tamar fuerzas para atravesar manana el pa rarno y lleg-ar antes de troche a Mu ti scun, poblacion va :i las pue r ta.s ell' Pam plona. XVll 'I'ona m ues t ra aiin los est rag-us de la revolucion. Hay algunas casas en ru ina s, (Iue fueron dc.r r ihadas durante los cornbutcs: ot ras g'uardan, a manc ra de cicatrices, las seftalc-, de los halazos. :\le d icen que en la plaza exist ia una hermosa pal me ra, <Iue ( levaba su penacho por en cima de todas las habi tacioncs y era muy amada par los tonerises. En un moruen to de rabia v de vengallza cortada fue, para. heri r asi ;i los tcnaces g'uerrillcros de aq uel pueblo. Hoy los buenos veci nus la han rce m plaz ado pol' ot ra, que ya se asorna ai rosa pol' soh:e el ce rcado que la ci r cunda, al lado de la modesta pila. iqllicra Dios que sea rociada sin cesar par los unos y po r los ot ros, y venga:i so r el ;ir bol de la conccrdia! Detras de la ig-lesia sllrge un cerro al tivo y con espeso boxq ue: pa.rece un centinela gig-ante q ue cui- <lara de una curia tendida a sus pies. Aq uello es hermoso: he visto pueblos, como San J oaq uin, con s u cerro a media cuad ra de la plaza elev;indose en plena poblacion como si Iue sc pues to pol' manus de a rq u i- tectos para emhellec(~rla, pe ro n injru no tan imponente cual el de 'rona; una selva espesa, vi rg:en, primitiva, sin que ~e yea un seride ro, ni una sernen te ra, ni se eleve el humo de una cabana. Y asf dehen dejar-lo. ioh buenos hijos de 'I'ona, no vaya is ;1.roza r lo, ni,i Ilamarlo con nombre ex t ranje ro: 'lsi esta bien, ag-reste, in c ul to v mi ster ioso! - La telegnfista de T'ona. S rita. Mar-tinez Du ran, es buena poetisa, y en los ratos en que reposa de las ta reas de Mo rsc toma la lira v hace cantos de del i- cado sentimiento. jcuanto me;ito cs el cultivo de las bell as let ras lejos de hibliotecas, atencos e imprentas, sin aud ito r ios ni lecto res, sin aplausos ni es tirn ulos! Un voce r io de nifios nos de-spe r td antes de que el sol salie ra de su lecho de nuhes. l~ra que se llcnaban de p;l.rvulos la plaza y la iglesia para la confi rmaci6n. El ternplo estaba ahierto e ilu rninado, y br illaban en 4

55 medio de la obscuridad como est rellas las luces de su altar. AlIa fue Monseiior, y 10 mismo que en todas las pohlaciories, dio el segundo sacramento a un centenar de infantes. En las prirne ras ho ras de la manana emprendi6se la nueva jor nada. [Y cuan larga ha sido ella! Primero una subida fatigante, penosa, interminable. Las mulas sudaban copiosamente y se detenfan a t rechos para tomar aliento. Caracoleando, caracoleando sin cesar, al :fin, despues de tres ho ras de marcha, sentimos un viento frfo y vimos volando como nubecillas unos jirones de niebla. Era ya el hal ito del pa ramo. Unas revueltas mas, en espiral, y es tuvimos en la helada cumbre. El paisaje habia cambiado por com pleto. All! toda la vegetaci6n de las grandes altu ras: los musgos, el frailej6n, la familia entera de los helechos, la niebla envolviendo, como un velo de novia, los riscos de la izquie rda, el campo sem b rado de grandes piedras cubiertas de liquen, el camino silencioso, yer to y melanc6lico. Y a la derecha unas suaves hondonadas con pequeno cuadro de verdor. La primera impresion es la de que se ha llegado a un desierto. No.c~nta un ave, no murmura un arroyo, no se ve un viaje ro, no hay reses, ni caballos, ni ovejas: parece que no hubiera ni siquiera insectos; pero al adelantar unos kil6- metros se ve alla, en una falda del paramo, un labriego arando con su apacible yunta; no lejos, en una ligera hondonada, una casa de teja envuelta entre la neblina; mas alla unas sementeras de trigo. Pero jque desolaci6n en los picachos del otro lado! La vida ha desaparecido de esas b refias y no hay allf fauna ni flora. Hilos de agua pasan mansos y cristalinos, pero consum iendoso a cada instante entre la tierra y recorriendo debajo de ella, como si huscasen tarnbien el abrigo. [Cuan herrnosos esos arroyos subter raneos que most raban a t rechos sus linfas y nos hacian recordar a Gutierrez Najera: En la sombra, debajo de tierra, Donde nunca lieg6 la mirada, Se deslizan en cur so infinito Silenciosas corr ientes de agua. Tan solo pas6 por allf un arriero aterido, t ras una recua de mulas, tam bien cabizbajas y entumecidas, y luego un viajero a cahallo, con la cara cuhierta

56 51 con una rnonte ra, uti I ab r igo contra las rafagas de cierzo. 81 frio era grande. y sin ernba.rgo el paramo no estaba bray) en esc dia. Ra\'os de sol se filtraban a braves de las g-asas y do raban las peq uefias hojas de los a rbustos. Piensa uno con terror en que la noche pueda sorprenderlo en esas altitudes, sin un tambo ni un hagar Y aunque es apenas medio dia, azotamos la mula para sali r pronto de esos campos asolados. Pero en medio de su dcsolacion aq uello es interesarrte v magnifico. Un rio, el Caraba, se rpentea :i la de recha :-.-:-;epasea majestuoso entre esas lomas des nudas de \ egetaci6n. cual si fueae el rey de aque- Ila cornarca. Allin, clespues de una hora de paramo, ernpezamos a descender y llegamos a una cabana a la orilla de un riachuelo de Iiq uido c r is tal. Ames Cues/ababa, y nos desmontamos a almo rza r con e1 Dr. Patino, eura del pueblo de Silos. t res leguas apa r tado del camino, quien nos es pe raba en ese s itio, rodeado de muchos feligreses. ----Nada boba me pa rece la cucstccita-e-decia Giovannino, que llegaba fatigado: -antes bien, me parece muy terrible. Pintoresco fue el almuerzo en el cor redor de aquel alberg ue. La bandera de Colombia como un telon hacia fondo al cuadro y nos resguardaba del soplo frio, y en torno bande ras blancas y arna rillas, y festones y coronas de flores. A pecos pasos los parroquianos, hombre", muje res y nifios, en abigarrado grupo, sentados en las piedras v los troncos del camino. Subia cad a cual a suo cabalgadu ra, hecha aquella etapa, y siguio la ca ravana lentamente su ma rcha. Poco dospues hay otra casa (lue se llama Chorritos, y al Ii estaban unos jinetes de Silos que esperaban a S. E. Todos se desmonta.ron al verlo, se ace rca.ron respetuosos y le he sa ron el anillo, ':l el Sr. Evan~eli.sta Trujillo, maestro de cscuela, p ronuncio un bello di scu r so. La cabalgata se aumento con los simpaticos veeinos de aquel pueblo, q uicnes nos acompaiiaron gran parte del camino. Unos cohetes resona ron por alla sobre unos cer ros: era que ya habian d ivisado a S. ~~.va r ios vecinos de Mutiscua, q uiencs habian venido a su encuentro. Era alli el RClrlchadcro. B""CO DE LA REffiBLICA 118L.1~lE.C. L1.iiS-. Hcla ~4/.ANGO CAT ALOGAClON

57 }1~1 Sr. cu ra de Mut.iscua, Dr. Cote. estaba en esc lug-ar can un gtupo de caballeros. Can el debido respeto saluda ron a Monsefior, v cl Sr. cu ra le di rigi6 algl1nas elocuen tes palabras de bienvenida. De ahi reg rcsaron los veci nos de Silos v seg-ulmos acornpafiados pol' los de Mut iscua. '- A la derecha, alla en lontananza, recostado contra unos cer ros, bafrandose los pies en el Caraba, habiamos visto a Silos, poblacion s irnpat.ica a la cual no Ilegamos por no demorar el viaje. Silos es nom bre espanol, y se puso par los fundadares en memoria de un lugar de la Madre Patria. Caraba es palabra indi'gena, pero igrio ramos su significado. Es curiosa que en esta region casi todos los nom bres de los aho rfjrenes son esd rtij ulos, al contrario de los del interior, que son agudos, 10 que indica un idiorna muy diferente: aqui tenernos Cucuta, Tachi ra, Cacota, Babega (fracci6n de Silos), Icota, etc. etc. Vaya ese data para los filologos que es tud ien las lenguas mue r tas de nucst ras t r ibus. AlIa se ve Mu tiscua, Los compane ros nos mostraron desde el alto de La Piiluda la s.irnpat.ica poblacion abajo, en medio de los altos ce r ros. Es placeritero ve r en los viajes a caballo la ciudad 6 aldea donde uno va a llegar, aun cuando este muy lejos: la fatiga se mino ra al divisa r el campana rio, a pesar de que nos separan de el la rgas Ilanuras 0 abruptas montanas. En todas las casas del camino habia algun arco. Al li de la estetica de los buenos campesinos. Los unos eran todos de frailejon: los ot ros de flares; de algunos colgaban racirnos de na ranjas. Todo este camino desde Boyaca ha s ido una especie de Corpus. En varias chozas han levan tado alta res ;i la vera del camino, mesas con fiore ros, cortinas e imagenes de santos. Y par todas las ve redas venian las g-entes a conocer a Monsefior. Al acabar de oir cl un discu rso, en alguna de estas jornadas, volviose a uno de sus companeros y le dijo: -Measaltan de improviso con herrnosos discu r-sos y yo no se como defenderme de ellos, si con un prudente silencio 6 con un mal cas te llano.

58 - - ;;3 - XV III Mazriifica Lt entrada ii Mu t iscua. I~I mi m e ro de jinetes era c re cido y la m ult.i tud de ii pit> inmensa: en todas las casas habia hande ras, coronas v co r t ina s ; en la plaza resonaban los cohctcs y las campanas. y un globo se elevd en r-l ai re. A Ia entrada, bajo u n a reo con la tiara v las llaves pon tificia s, dirig-i6ie Ia palabra a 8. g. un joven en hello di scu rso: IUl~g-o, mib adelarite, ce rca de otro prir ti co de flores, «I Sr. C~ uillermo Contreras [-ronuncid e-loc ucn tes palab ras. All i ce rca estaba la bella casa del cu ra, el Dr. Avel ino Cote, q uien dio ;i Monsenor y su corn itiva esplendido alojarn iento. Hermosa se vela aq uella calle de la entrada de Mut iscua: al f ren te de la casa hahia unas let ras de musg'o que dccian: Loo r {{I E",\'('c-!C/ltfsiJJlO IW('Sj>I'd, ~' ell la an" ra «puesta: Ilil' ('sl qui i-eutnrus est, En la batal.a de T'escua en IH40, no lejos de es te pueblo, m u r ici cl bran) co ronel Muti s. De all! vino cl nombre de es ta poblacion, 6 sea de la reu nicin de los dos norn b res, Y en realidad ljul'do orig-inal \' eufonico. Mu tisc ua t arn hicn so no ;i nuestros oidos cuando n iftos para anunciar una batalla. Eran los dias de la revol ucidn de IH76, dias pavo rosos en yut' cl partido conse rvador hiz o un esfuc rzo ti tan ico para reconq uistar el poder que habia perdido en 18()();pe ro todo fue en vano: lejos de tr iunfa.r pe rd io los <los Estados de An tioq uia y Tolima, dondc g-ohernaba; y;t ruuchos de sus mcjo rcs se rvi do rcs. Cada de r rota, cada muerte de un jefe conse rvador nos prod ucla ag-udo dolor. Cuando lieg-6 la not.icia de la m ue r te de Sehasti;in Ospina uue st ra t r is tcz a Fue in m en sa. Habiamo-, sido sus d iscipulos hacia pocos mcse s. y aun(iuc incapaces de ap recia r sus alt.as dotes in telect.uale s. si pudimos es ti ma r s r bondad v ca r ifio. 'rreinta afios han pasado y no 10 olvidamos..ai IIeg-ar ;i ;VIutiscna no sc nos apar taba u n momcn to s u imagen. All i, no Iejos de lit poblacion, sucurn bid cl gallardo joven, cuya biografla esc r ihici :\1artinez Silva v cuva mue rt.e lamen td Caro en una val iente eleg ia. uac de ence Bella s la it entre la irin cer ros, peru ce r ros poblacidn. tan Est;i pin to rescos v r-rada f(>rtiles que hacen (it' Mut.i scua un s itio c-ncan tado r."

59 - S4 -- Llena de arrugas es toda esta coma.rca: montanesa y altiva como Antioquia. Hablabase esa noche all i, en torno de la mesa. sob re la extension de los Departarnentos de la Republica, y alguno refi r io las palabras de un ant.ioquefio en una conversacion sernejantc: --El Departamento mas grande de la repiiblica-> d ijo el buen pai sano-s-es Antioquia: 10 que tiene es que esta muy ar rugado: pe ro si us tedes 10 esti ran bien, resulta mas grande que toda la nacicin. En Mu tiscua habia una nueva com isirin de Pamplona que salia al encuentro de S. E. Com ponian esta 108 Srus. Dr. Joaquin Uribe (candn ijro), Antonio Villamizar (alcalde), Beli sar io Matos, Isidore Guerrero, Miguel Hernandez, Leopoldo Castellanos, Jose A. Canal, R. Sabino, Francisco Blanco v F'ructuoso Calderon. jcuan grato Fue el encuentru 'con aquel hondadoso p resbite ro y con aq uellos distinguidos caballeros, quienes eficazrnente nos a.yuda ron para la co r reria del siguiente dia! En la siguiente manana. y poco antes de emprender la marcha, dijo el Sr. Delegado la misa en la amplia iglesia, y confir mo a muchos n iftos de la poblacion y de los campos veci nos. Bella es la reunion de todos aq uel los infantes en el momento de la confirmacion: unos de pie, ot ros alzados en los brazos de sus pad rinos: unos que lloran, ot ros que sonr ien: muchos que mi ran extat.icos con los ojos abie rtos a Monsenor. IY que variedad de t rajes! los rices, los acomodados, los de clase media, los pob res, los infelices. Todos los g rados de la fortuna con algunos cont rastes: gritaban algunos de los primeros en trajes de seda, son reian varios de los iiltirnos cubie rtos tan s610 con su camisita en ji rones. ioh! [cuan belles todos esos grupos de ninos, v q ue O"rata algarabia con la que llcnan las naves del temeo plo! IComo se pien sa en 1os gran des pi ni nto rea, en la Virgen de la si lla, en la Madona de San Sixto, en todos esos lienzos donde mueve sus brazos y pies desnudos el divino nino! Provoca abrazarlos a todos, besarlos y regalar les dul~es. iy como vuela la imagina.- cion hacia una cuna lejana, donde la aurora estara despertando en ese momento a un pedazo de n ue s t ra alma! Diji mos adios a Muti scua y ernp rendimos la mar-

60 55 chao 'I'er reno siem p re quebrado hasta cae r al llano de Pamplona. I~n todas las casas del camino habia a rcos como en las jo rnadas an ter io rcs. v de todas sal ian ;i saludar a Mon sefto r..ai tin lleg;imos.i la ulti ma bajada para en t ra r ti la vieja y noble ciudad de Crsua. La m ulti tud era inmensa: salia.n en trope! po r las ve rcdas del camino, se su hian ;i los arboles v ce rcados de uno v ot ro lado, y llegaban ;i i 111 ped ir el -paso de las cabal lcr ias. 'I'e rm inada la bajada tocarnos en las pue r tas de la ci uda d. iuue voce r io sal ia dc clla! En todo-, los t.ern plos repicaban: los cohet.es es tal laban incesanterncn te, y millares de pe rsonas daban s u murmullo de alesr ria v de entusiasrno.. Otro dia nabrem os de referi I' la entrada ;i Pamplona, los fe-rtejo» de es ta ciudad y las gra.bs ernociones que ella p rodujo en todos los viaje ros. XIX La entrada a Pamplona ha s ido una magnificencia. La antigua y venerable ciudad desplcg'<l to do su fausto para recibi r ri Mousenor Ragonesi, a q uien espe raban hacia dia.s con grande impaciencia. Dive r sas vers iones q lie ci rcularon sob re s u viaje, y la grave cn:ermedad del Sr. Obispo de la didcesi s, hicieron terner, cuando Monscnor est.aba en Buca ramanza, que no tuvie ra lugar el viaje hasta Pamplona, 6 que la rcce pcidn no lleg-ase ;i tene r toda la <un tuosiclad debida. 1':1 oport..mo telegrama del Sr. Delegado, en que manifestaba que s u viaje no tenia otro alcance que saludar al p relado y conocer la dioces is, y el haber mejo rado notahlemcnte el limo. Sr. Parra, hicieron que Fuesen unani mes el placer y el en tu s iarno en esa recepcion. Cuando d Sr. Delegado y su com itiva llega ron a La Esfil'J"(mz/t, i) sea a las puert~s de la ciudad, un mar de goentl.' movia sus ondas ablg-arradas detras y en torno de los cabalgadores. Y por toda«partes ban deras, in sc r ipcones y guirnaldas. jhermosa esa entra- -da a la ciudad! Desllzanse mansarnente las ag uas so-

61 Sf> -- hre lecho de ve rdura por en medic de la plazuela de San Francisco, donde se levanta la iglesia de es te nom b re, con s u jardincito al frente y a s u lado el rnonaster io: y por una csqu ina empieza la larga y recta calle que conduce a la plaza mayor y por don de hicimos la entrada. En la plazuela, en la calle real, en la goran plaza habia arcos hechos con mucho arte. U no parecia de O"ranito v tenia las arrnas v el lema del Pontffice Ro- ~ano, Rcstaurart> Omnia i;, Cristo; otro era como la portada de un edificio romano; en otro se destacaba sobre l un angel que of red ale una corona al ilu st re huesped: mas alla otro con un grupo de niftas que representahan el corne rcio, la religion, las artes y la industria. Por debajo de esos arcos pasd Mousenor con su cornitiva, saludado desde balcones, puertas y ventanas por toda la sociedad pamplonesa, que ar rojaba flores sob re su cabeza y a sus pies. La multitud que se apifiaba en los andcnes se arrodillaba a recibir la bendici6n que el impartfa con benevola son r-isa. Los programas y la pu blicacion que him el Ca.pitu- 10 con el titulo de Homeuafe cat6/ico enumeran bien todos los detalles de la fiesta de este dia y las que luego tuvieroniugar. Van aqui tan solo nuest ras impresiones pe rsonales. A Pamplona se le ha comparado con T'unja, pero nosot ros le encontrarnos su sello propio; fuera del ciima frio no hay otro punto de sernejanza con la tierra del Zaque. Otros la igualan a Popayan ; ignoro que haya de verdad en esta comparacirin. Las calles de Tunja son est rechas, altas sus casas vesta toda ella edificada sobre un promontorio rodeado de f080s. Pamplona esta rccostada en un vallecito, besada por dos mansos r ios ; las calles son anchas, y bajas la mayor parte de sus casas. Tunja elcvase ai rosa a. manera de una fortaleza, y sus tor res son atalayas que dominan los confines. Pamplona reposa muellemente con la solemnidad augusta de una casa solariega. 0 buscandootro sfrnil, la una es centinela inquieto y vigilante, v la otra sultana que espera la contemplen y Ie r indan homenaje, BI Sr. Delegad?,fue,hospedado en el palacio episcopal, y se le atendio, as: como a sus compafieros. con toda afabilidad. El limo. Sr. Parra estaba en el lecho, v asf permaneci6 -' du rante los cuatra dias que allf resi

62 entra.r a ucl rlo. de sus afios y ues 57 dimas. 'T'iene el Sr. Parra ochenta v cinco anos, v es mu v amado de su grey. Probo el duro pan del dest.ierro' en 187h, v residio en Panarnrl durante largo tiernpo. Apoyada la es palda sabre anchos almohadones. sentado en el lecho, la cabeza cu bie r ta can un patluelo blanco, c-staba e1 dia en que t.uvi mos el gusto de sal a l\ pesar con se rva bien todas sus facultades, v nos ha.blci con voz clara v dulce.. Algo' entristece i Pam plona la nie hla que la envuelve par las ta rdes en algunas epocas del afio, pero sus mananas son rad ian tcs. en sol tibio hafia sus calles, sus plazas y sus ce r ros, y sopla una hr isa deliciosa.; Cuan grato platicar en una esquina 6 en la plaza a. esa ho ra matinal con los buenos pam plan ence», joviales, caballeros y si nce ros! Una parte de la poblacion se eleva hacia una colina donde estrin la ig-lesia del Carmen v un axi lo di rig-ido por las her manas betlemitas: es como el barrio de l<:g-iptoen Bogot;'i, y de al li se goza de la vista de la ciudad, El Club del Comercio L'S mu y e1egante, compuesto de cor rectos caballeros, y su p residente es el Dr. Leopoldo Castellanos, hombre de cultura, ilustraci6n y hondad ex:epcionales. 1':0 e1 dub tuvo lugar una hermosa velada en honor del Sr. Delegado. A111pudimos apreciar el notable desarrollo intclectual y ar tistico de Pamplona. Fue ron m u v notables todos los mime ros del programa-. El salon' estaba ar reglado can esplendidez y reinaron en la fiesta mucho orden v refinada distillci6n.. Los He rmanos Eudistas, ca.si todos f ranceses, dirigen el sem inar io. 'I'uvimos el gusto de apreciar la amabilidad v s impat.ia de los padres, ani corno el acie r- to con 'lue (:ducan al li un centenar de levita s. 1':0 Pam plona habia en tu sia.smo pol' el camino del tlarare, y en rea.lidad esa via st~r;i una rcdencion para la ciudad. Quedara. ella,i pocas jo r nadas del Llano, y par all! vend ran los gana<!os,i. est.a.s reg-jones. El Sr. Delega.do manifestd it los jefe;., de la cmp resa su en tu s iasmo par e'sta ob ra, y puso eficaz mente sus inflnencias al servicio de ella. Parn plona, por s u c1ima frio y sano, por sus c()- modos ed iticios. por sus n ume rosos profeso res, puede se r un centro inst ruccionieta como 10 fue en otra achaq

63 epoea. Esa es hoy tam bien una de las aspiraciones de sus h ijos, la cual desearnos se vea cumplida. Esta ciudad es la ciudad sag rada, la ci udad catolica por excelencia: ot ras ciudades de Santander han sido capitales politi cas. cen t ros come rciales: Pamplona s iem p re ha tenido el baculo, siern p re ha sido Ia ciudad d ioce sa.na, la capital rel ig iosa. POI' SIlS ca lles se hallan a cada paso sus canonigos. sus f rai les. las gentes que van a la iglesia. De Pam plona refieren la anecdota de que una vez, cuando Bolivar lieg-6alii poi' ahi en los iilt.irnos m ese s del afio, Ie hicieron semana sarita con toda-, sus ceremon ias y procesiones, a fin de obsequiarlo con el mas sun tuoso de sus espectaculos: pero esto se atribuye tambien, como todos los gracejos. a ot ras ciudades de Colombia. - Hace falta en Pamplona un parque 6 ja rdin publico y alguna distracci6n. Ya que cornpanfas de teatro no vienen a estas montana», y en Bog-ota rnismo las conseg uirnos con dificultad, pong-ase un carrousel; una balanza ru sa, un ja.rdin dondese oiga rmis ica todos los dias de fiesta, en esas mananas doradas y tibias. As! se le quitar ia a Pamplona algo de ese ai re de melancolia que le dan la niebla, los avisos de entierro la plaza enyerbada y los gallinazos sobre los tejados. En Bog-ota tenernos igualmente esos ca r telones fiinebres y hasta haee poco tam bien las aves neg ras se veian en c1 centro de la eiudad. Pamplona guardaba, segun parece, rnuchas reliquias de otros tiem pos, con las cuales se hubiera empezado la fundaci6n de u n museo, 6 que si rvie ran para mostrarlas al viaje ro en iglesias 0 edificios piiblicos: pero casi todas han desapa recido. La catedral, que fue dest ruida por el terremoto de 1875, a un costado de la plaza, tenia segtin euentan cuad ros de alto mer-ito y curiosas lapidas. De estas existen por ahi una 0 dos olvidadas si rviendo de pavimento en la calle; y haria bien el corisejo municipal en recogerlas y Ilevarlas al salon de sus sesiones. Pintu ras no vimos notables sino dos pequenas a la entrada de la actual catedral, sob re las pilillas de agua bendita, que pareeen se r es pafiolas ; un cuadro de regular tamano en la sacristia de Ia iglesia del Carmen, el eual representa la postu ra del escapular io a San Simon Stock. y que es de mano maes t ra, tal vez el mejor que he-

64 mos visto en nu es t ra cor re rfa: v un San Pedro en la iglesia de Belen, bastante notable y que a no duda r- 10 es de huen pintor italiano. Si rve hoy de catcd ral la ig'lesia del an tig-lio COIlvento de m.mjas de la Concepcidn, con vvn to q uc OCl1- paba toda la manzana. y (luc hoy est;i de cua r u-l. Tiene sobrc la pue rta esta insc r ipcion. qut' indica vi afio v la muy reverenda rnad re abadesa a q u ien lc tud; inag-l1- rarla: A 1797,.,icllllo,_JIJ!l L.II. H..1/. Nita dl' Ius.111- Rus/i({s. Cie rto es que en Pamplona no Sl' ven la aleg ria. el movim ierrto v d esplendor de Buca ramarura y Cllcu ta, pero e so no Ie dana. B:lla l's rnajestuosa, sole m ne y t ranquila. As i, envuel ta en sus nieblas. con s u at mdsfera de serenidad y paz, sentada t'n trono de esmeralda ent re e;as dos ciudades bulficiosas v hellas. nos pa rece una mat rona venerable de cabellera g-ris, reposando en \etnsta sj llcta, con sus dos hijas ;t los lados, altas, rozag-anh;s, ani madas y esbcltas. xx En Pamplona t.uvimo-, el g'llsto de ve r al (;'eneral (~onzalez Valencia. el g-allaruo ada.lid del g-obierno en la pasada revoluciein:,. el Sr. Delegado le of rec ici vis ita r s u hacienda de ISI:((/d. que est;i;i va r ias horas de Pa.mplona y de la cual podiamos sa li r Itl\~g'o;i Chinacota para toma r all i el camino de Cucuta.. Diole el (jeneral (~onz;ilez al Sr. Deleg-a.do para esta jo rnuda, corno st' la habra dado va en las de Bucara.manga a Pam plona, la Famosa mula en q ue el General Pinz6n hiz.o la carupafia del norte. y es tuvo en Paloncsrro, y ~lue rifada luego vino a. se r p ropiedad del General Gonz:ilez. Acost umbrada a. tales personajes ' - dccia Giovannino ---si la monto yo () alg-un leg-o, de seguro que se «ncabr ita v nos e xtiende sob re el camino. COg"flTIos pri me ro la via nacional que va a. Chi nricota, con muchos vcci nos de Parriplona, que nos acornpanaron gran parte de la ruta. Ala izq u ic t-da, del otro lado del rio, sob re un collado, vimos el pueblo de Chopo; y at puente que 10 sepa ra del camino nacional salieron a saludar a. s. ~:. m uchos veci nus encabczados por su simp,i ' ;ico pa r roco, quien IH>S hizo corn pafiia en un largo trecho.

65 -- bo - Poco des pues toma a la derecha cl camino de Isat/d; una subida la rga y solj ta ria. Apretarnos bien las cinchas, nos despedimos de los amigos que hasta al li vinie ron y empezarnos la ascension. 1:<::8 una subida en medio de espeso bosque, y es por l.":onsiguiente pinto resco el sende ro. Grandes arboles extienden a los lados su rarnaje y se ve toda la flora de nuestras rnon taftas de tierra fria. AI principio alg-unas hahitaciones por ahi diseminadas, pero luego un camino despoblado. Y a medida que se su he, la vegetacion va cam biando: aparece la de las grandes alturas: los musgos, los liq uenes, los helechos; y aumenta la soledad. jquc montana tan elevada! Terciamos a la de recha, ala izq uie rda, pero siempre hacia 10 alto, y un nuevo risco aparecfa sobre la floresta, Unas dos ho ras llevabarnos, de subida cuando empezd a caer la lluvia. Sonaba el aguacero sobre las hojas de los arboles, y el cielo estaba obscu ro y el camino resbaloso, Pusimonos los correspondientes abrigos: el negro encauchado y las fundas amar illas, y seguimos trepando de uno en uno po r entre la arholeda. en arroyo irnpetuoso baja cantando el himno de las mon tafias a. un lado del seride ro, y se precipita golpeando contra las pefias, saltando por sob re las rocas, cubriendose de espurna como caballo desbocado, 6 retorciendose en remolino y escupiendo a los arhustos de la or illa. -Antes eran ricas --decia alguno al ver estos chorros impetuosos----ias naciones que tenian minas de carbon: hoy 10 son las que tienen caidas de agua. Por eso se les ha llamado la lutlla blanca. Y todos pen sabamos en el porvenir q ue se le prepara a Celom bia, tan rica en esta claxe de moto res. Seguimos su biendo, subiendo sin cesar. La lluvia d isrn inu ia por momen tos, pero lucgovolvla ci empezar. A la derecha se ex tiende un bosque vi rgen, espeso, impenetrable, y por al la se oian resonar u nos truenos ron cos. Las m ulas se detenian a cada momenta,\, respira r. A una cuesta sucedia ot ra, Y seg'uiamos trepando en fila, uno t ras otro: Monaenor, el General Gonzalez, el Padre Basignana, el General Camargo, el joven Samuel Villarreal, que venia con nosot ros desde Bucaramanga, Giovannino y cl autor de estas lineas. La Iluvia, 10 escabroso del camino, la soledad y el frio

66 -- b l -- no qucb rantaban el huen humor, v todos ibamos jovia- Ies v satisfechos. A Mon seno r Ie into rcsaban los arholes del camino. las corrientes de ag-ua. la topog-ra- Iia en general de aq uellos s it ios. 1':1(jeneral (ion"alc" Ie daba do todo explicacioncs, v modcstamentc relataba alg-o de sus cam pafias cuando -Ie inte r rogaba sohre clio. -T'odavia falta mucha subida.- -nos gritaba este desde la \'ang-nardia a los que verriarnos atr;ls,--'y hay que apu rar po rque nos coge la noche y salen los tigres. Giov,lIlnit,o ab ria en tonces tarnanos ojos Y empezaba a azotar y l~spokar con los talones. pucs no llevaba cs pu elas,,i Sl1pob re jamelgo, quicn no se daba poi'entendido de tal cosa y seguia irnpasi ble unos metros det ras de todos. Y en realidad debe de se r horrible la noche en la lobreguez de aq uel paramo. Y d icen que los tigres si salian poi' am en no lejana epoca. Debido al (ieneral Gonzalez cl camino es taba en buen es tado x no habia paso a.lguno dificil don de t u- vicscmos que desrnontar nos. La su hida e ra cada, vez mas pcnd ien te. Era ahora una cucs ta tk tierra neg-ra y fango-sa. Las pob res be st ias. no ohstante su buena calidad, pa recian no {Joder mas y sudaban copiosamcrite-. Un manto de niebla cnvolvio todo el paramo y un viento helado empez(1 a azota rnos el rost ro, Kra ese cier zo el hal ito del picacho cuva cabeza ya casi t.ocabarnos. rnas g-radas mas de a~fl,lella escala y es tuvi rnos en la ci ma, All! nos esperaban el General M. J. Canal, cunadodel General G()nzale~, con ot ros miernb ros de su familia. v muchos peones de su hacienda. Eran las cinco de la "tarde.. De ahi de est' picacho se g-oza -nos refirieron un espcctaculo sobe rbio: se ve el valle del T'achi ra, el de Chi nacota y var ios pueblos y rios. Pe ro la nehlina. nos irnpidio g'ozar de tan magniuco pai sa.jc. Lnego descendimos 11110Stantos kilomet.ros y llegamos ala preciosa hacienda. A11I tuvi mos el honor de conoeer i'. la d isti ng uida familia del (jenera\. Bien vale la pcnav ai pena Fuese, que no 10 es, la de esc viaje, poi' llezar a ese eden y disf rutar allti de tan franca hospitalidad, de tan bondadosa com paftia. No digo las cinco II sci s leguas de ague! camino: muchas mas se harlan con g-nsto poi' pasa r en tal sitio unas horas como la-s lim' pasarnos bajo aquel hog-ar modele. Que akgre:ue aq uel la nochc, en que una banda de rrnisicos CI)n ir st rnme ntos nacionales nos (li{) a sabo rea r

67 deliciosos paai llos y torbellinos; y en que oiamos al calor de ese lar ya el chascar ril!o oportuno, ya las voces de las bellas hijas y sobrinas del General, ya las risas de unos nifios que le se rvi rfan a Murillo para modelos de sus Concepciones. A Gonzalez Valencia se Ie admira en aquellos sitios: al li se ve al hombre de t rabajo y de hogar, al huen ciudadano, al militar sin amhiciones. icuan superior a las glorias militares-que las tiene el grandes, y a las luchas.y afanes de la polifica, en la cual es ta su nomhre sin mancha--es para I es ta vida del campo rodeado de los suyos y sin torturas ni abrojos! En la guerra se llama a Gonzalez, con razon, el Bayardo colombiano; y al verlo aquf en sus labo res de campo, cuidando sus plantios, a or illas de un bello rio, sobre campos de be rilo, al pie de ese picacho rnajes tuoso, viene a los labios el conocido nomhre de Cincinato, Al dia siguiente despues el camino de Chinacota. del almuerzo tomarnos XXI A poco de habe r salido de [scald. hallarnos al Sr. cu ra del Valle y a algunos ot ros vecinos que habian saiido a la via a saludar a Monsenor. Despues erupezarnos a encontrar gentes de Chinacota que venian con el mismo objeto, y que iban eng rosando la caballe rfa, En todas las casas del camino habra arcos, y de ellos colgaban cuadros de san tos: todas las pobres oleog rafias de esas viviendas, en medio de plantas silvest res. En muchas chozas colocaban una mesa al lado de la ruta, y alli hacian un rtistico altar con flo res en f rascos y con toscas imagenes. Muy poetico es el valle de Chinacota, ban ado por la quebrada de Iscald y en medio del cual se extiende la s impat ica poblacion. Fue grande la cantidad de jinetes que salio al encuentro del Sr. Delegado. Desde al li, en el camino, tuvirnos ocas idn de t ratar a. muchos de los vecinos de Chinacota y de apreciar tan nobles am igos. Entr6 Monsefior y su gran comitiva por una callc toda llena de banderas, cor tinas y gui rnaldas, que conduce a la plaza. All! resonaban los cohetes y las cam-

68 63 - panas: se eleva.ba un globe y tocaba la banda nuestro himno, el himro de Nunez y Sindici. En la plaza, f rente a la casa qu,~ iba a ocupar 8. E., habia un he rrnoso arco, y al pie c.e el Ie dirig-i6 la palabra el Sr. Vicente Duran. Esplendidarnente fueron atendidos el Sr. Delegado y sus com pafie ros en cl alojarnicnto que sc les tenia prepa rado por el Sr. cura Dr. F'ig ue roa, dig no parroco pol' todos ap reciado, Alli tuvimos el gusto de reci bi r la cornisuin que venia de Cticut a al encuen t ro de S. E., compue sta de los di st.invu idos caballeros los 8res. Hodrtg:uez, Faccirri, U nda v Cordero. J;~ldia siguiente 10 dedicamos a conoce r la poblacion. La iglesia es g-rande y majestuosa: tienc un bonito bautisterio, con frescos que rep rosen tan la vida de San Juan Bautista. Hay un centro literario, (lue propende tarnbien por las mejoras mate riales de la poblacion, el cual se llama Nile/eo de tajuvcutu«. Alli estuvi rnos y pudimos apreciar que tiene Chinacota una juvcn tud estudiosa y prog resi sta. La municipalidad celebro una sesion especial para recibir a. Monseno r. y al li en esa pieza alta que mira hacia la plaza y desde cuyo balcdn se goza de hello panorama. conocirnos a los ed iles de Ch inacota y ap reciarnos su espiritu publico. Herrnoso t:~sel hospital. AlIa nos recibie ron las He rmanas de la Caridad con el en tuaiasrno con que en todos sus colej-ios y as ilos han acogido a Mon setio r. Despues de pasea r las salas y vel' los enfermos y desarnparados, p resenciarnos en el patio la fiesta con que las ninas celeb ra ron la hon rosa visi ta, Con trajes claros, vapo rosos. elegantes, se formaron delante de los espectadores aquellos botones de lirio, que tenia cada uno sobre el pecho una let ra del aifabeto, y disputaron entre si, en animado dialogo, sob re cual era el mas noble de esos signos, y acabaron por formal' un let re ro que decia: Francisco Ragollcsi. En est' dia tambien se semhr6 po r Monsenor un ar-bol en la plaza, f rente a la iglesia.. Alii crece ra lozano, sin duda, al pie del atrio y junto a la abu ndan te fuente que aleg rc de r rarna en medio sus cri stali nas v risuefias aguas. " Ya en Chinacota ernpiezan a ve rse bastantes

69 muebles de marrnol, y'ue luego en Cticuta se hallan en profusion. Es la ola de lujo y bienestar que viene de la frontera. 'Tam biein visitamos el coleg io de varones,.y nos cornplacio vel' el orden, aseo y buen metodo de los es~ tudios que all i se hacen. Patrocinador eficaz de este plantel es el Dr. Figueroa. Al siguiente dia tomamos el camino de Bochalerna, poblacidn que no es ta en el camino de Chinacota a Ciicuta pe ro la cual deseaba visitar Monsefior. Para ello habia sido invitado poi' su pa r roco Dr. Peralta, quien junto con sus felig reses estaba hacia dias en p reparativos para la recepcion. Grande era la caravana en este camino, pues rnuchos vecinos de Chi nacota salieron a acompanarnos, y de Bochalerna vinieron a recibirnos otros tantos. Iban tam bien con nosot ros la comisi6n de Ciicuta y var-ios sace rdotes que deseaban acompanar a Monsefior hasta Cucuta.. El rio Pam pion ita pas a entre Chi nacota y Bochalema, y hay sobre el un puente colgante, pero no de alambre sino de lianas <5 bejucos y que se mece como una hamaca. Las bestias pasan poi' el rio, y poi' el puentecillo los de a pie. Los jinetes, si el rio no esta crecido, atraviesan montados en la cabalgadura. Pin to rescos fueron esos ratos en que c ruzo el r10 la caravana. U nos picaron sus bestias y montados se rnetie ron entre las ondas, que les alcanzaban a mojar las monturas; Monsenor y otros des pac ham os solos los caballos y rnulas, y pasamos po r Ia harnaca, como allf se le llama. Se balanceaba aquel puentecillo como un columpio, sobre los chor ros blancos y los pozos cr istalinos; y se mezclaba al ruido de Ia corriente el de los que pasaban poi' el y los gritos y risas de los viajeros, que iban llegando unos en pos de otros a la orilla opuestao Era un cuadro animado, curioso, excepcional. El camino sigue luego poi' entre una campifia exuberante y poria orilla de una quebrada que viene en precipitada carrera, ya con murmullos, ya con rug idos, a buscaral Pamplonitapara unirse a cl y llevar unidas sus aguas a los confines del territorio.. La.recepcion en Bochalema fue tam bien esplendida. Ii:l Dr. Peralta v todos los vecinos se esme raron en aquella suntuosa fiesta, y g ratisi mas fueron para el

70 Se t a alto y al d ivisu el Sr. Delegado v sus com pafie ros las hora-. que pasaron en esa am ena v si mpatica poblacidn. Dcsgraciadamente no pud ie ron deterie rse mas de una nochc, po r- que ya en Cucuta se Ies cspe raba al ella siguiente. XXll Por la orilla de la misma quebrada llue anduvimos a la entrada salimos de Bochalerna. Bajan las aguas de aq uel to r rente entre una n~getaci6n e xube rantc y van alegres e im pctuosas en husca del Pamplollila. Monsenor y sus cornpafie ros en largu desfile van a largo trote por esa pinto resca ribera. Es esa la ultima jornada para llegar a Cucuta, ter mino del viaje, y naturalmente todos vamos emocionados. repa un desde li se val lcc ito de Bochalema que ha quedado at ras, y luego se o)'en mugir las on las del rio que alla adelantc co r re hacia la f ron te rn. lj n rato des pues tornamos la ribera izquierda de este y scguimos hacia el norte. Hermosamente ruedan las ondas del Pamplolli/a en medio de aquellos ce r ros: ya se ahren en dos brazos para ci r- cundar un islote, ya saltan en al bos y ru idosos chor ros, va se arremolinan en cr istali nos rcrnansos. Y nues tras cabalgadu ras van trotando sin cesar pol' esa margen est recha y fangosa. - Aquellos son los ce r ros de la J)O)~iu([lla"-dij() alguno seftalando un con t ra f ue rte de la cordillera. Y todos habl.irnos en ton ces del sangriento combate. Alia s.ucu mbid hace treinta afios, 'en la rcvolucion de 1876, el ejercito que formaron al unirse las guerrillas conservadoras de Cundinamarca, Boyaca y Santander. jque de recue rdos tuvimos de esa epoca, y de aq uella triste hecatornbe! Desde las goteras de Bogota vinie ronse moctuie y guasc(!s po r montanas y valles, acrecentando sus fuerzas con los copa rtidarios en arrnas de los dos Estados vecinos, y formaron al fin ejcrcito pode roso. Ahi estabar; los rnejo res guerrilleros, ahi muchos hombres de gran valia en las filas conservadoras. Y en ese campo resolvie ron medir sus fuerzas con las t ropas del gobierno.tena;.: fue la batalla, y en ella cayo muerto Daniel Malo, gallardo joven bogotano,,.. -v j

71 - 66- muchos ot ros jefes y oficiales de ambos par-tides. La batalla se decidio en favor del gobierno, y va rios de los jefes conservadores tuvieron que refugiarse en Venezuela. Ot ros vinieron a caer en Mutiscua y luego en Mogorontoque. Manuel Briceno logro volver sana y salvo al oriente de la capital y uni rse con la Iraccion de la guerrilla que habia quedado su viaje para el Norte.. en Guasca cuando [Cuan t riste es al viajar por Colombia ver dondequiera la huella de nuestras carnice rias! No hay si tio donde no se haya librado un com bate 6 acampado un eje rci to, La geografia del pais la hem os aprendido cuando nines en los boletines de guerra mas que en los textos de estudio. Y al oir aquello de revolucion de 54, de 60, de 76, de 85, etc. etc., exc1amaba Giovanrnno: -Molta rivotueionc, I colombiane Pill riuotueionc que almanaccos, Deapucs de la quebrada de Bochalema, que le ent ra por la izquie rda, recibe el Panrplouita la de Iscald, que baja por la derecha, grande y espurnosa como un rio. Detuvimonos a almorzar en Santa Elena, pintoresca casa en la orilla de aquel, don de hay un gran puente que se pasa para tomar el camino que sigue ll1cg-opor la margen de recha, jque grata ernocion se siente al llegar a esas posadas a orillas de un torrente <5 rio correntoso! El ruido de las aguas que golpean fu riosas contra las grandes piedras, la vista de las moles de hasalto que se elevan a uno y otro lado, y la satisfa.cci6n de hallar c6modo puente cer y alegria. y buen alojamiento dan al viaje ro pla- Frente a la casa estaba tendida una piedra extensa, una laja de unos seis metros de larga por t res de ancha, la cual hacia pocos dias se habia desprendido del cerro vecino y rodado sobre el camino casi hasta la puerta de la hospederia. 'I'arnbien a un lado de la venta estaba ot ra piedra como de un metro ciibico, que cay6 al desprenderse la primera. --Afortunada.mente fue de noche-i-dijo el d uefio de la venta-y no rnu r id persona alguna. Apenas sentimos I1n remez6n terrible. -- -Quicn sabe-i-dijo Giovannino-s-s i ahi debajo no habra una docena de ar rieros y algunas rnuli tas, pero

72 ning uno ha podido sali r a dar la noticia. Las tima que esta mia no hubie ra caido en la catast rofe, para que me hubiesen dade, otra para estc viajecito. En Santa Elena hay telefono can Ciicuta, v fue grato conve r sar por telcon los amigos de esa ciudad, 'I'ambien oirnos a111, en tanto q ue al mo rzabarnos, un graf6fono. Ut.il is irno se ria el telefono en rnuchas posadas de Colombia ce rcanas a las ciudades para uni r- las can alambre, pcro de larga d istancia para el viajero lor las escab rosas bajadas y subidas. Dignos de aplauso son q uicncs esta hlcccn tales servicios en medio de las mon tan.rs. Hecho el al m ue rzo y pasado el puente, segulmos sabre la ribera de recha, por el camino que va paralelo al rio. Pasamos par la hacienda de La r;a rita y llegamos a los Vados, caser io <> aldehuela va m uv ce rca de Cucuta. Ah! estaba formada la escuela de muje res can s u inteligente di rectora, y una de las n ifias se avanzo a s. 11~.,le dirigi6 una hermosa poexia v le p resento una corona blanca, que Monsefior recil;i() con benevola son risa. En los Vadas cstaba el (~e11l'ral Monsalve, jefe de la frontera, y rnuchos ot ros cm pleados piibli cos y caballeros de Cticuta. Y;i medida <ptc adelantaba.mos aumentaba la cabalgata. 'I'odo cuan to Ciicuta tiene de sobresaliente en f.nanzas v ciencia, en ar istocracia,- milicia, sal io a oncon t ra.ral dist inguido viaje ro, Ahl tuvi mos el gusto de ver ;i viejos amigos de colcgio, de cam pafta () de negocios. y de cont rae r relacioncs con hombres flue lleg;i~mos ;i est.irnar m ucho v cu vas bonclades no olvidaremos jamas, -, Ya a las pue rtas <il' Ciicu ta nos apar tarnos del ca.- mino que va it la ciu dad y torn.irnos ;1 la de recha la via que conduce al Rosa rio, la an t.ijrua poblaci.in donde se reu nio el p r: mer cong reso colomhiano v que Fue dcst ruida por cl te r remoto de Ahi fue recibido Mon seno r con grandes a rcos, cohetes, d iscu r sos. y re piq u es de cam pana. Aq uel la s irnptitj ca poblacion rindi6 bello horn euaje al A rzobi s- po de Mira, y nos f uc g-rato a todos pisar aq uel suelo donde se congregc.ron en augusta asarn blea los pat ricios vene rables veaidos de todos los ;im bi tos del pals a constituir la nueva nacidn quc acababa de nace r. 'Pr isteza sen tiarnos al m ismo t.iernpo al ve r los escorn bros de la ant ig ua c iu dad, AlII u n pe dazo de m u-

73 -- 68 ~ ralla, alla el empedrado de una calle que va no exis te. mas lejos las sefiales de un patio. Grande v bella debi6 de ser la poblacidn, pues t rascu r r idos treinta anos se ven aiin las huel las de sus casas, de sus calles v de sus edificios.. La vista del cerro antes de llegar al Rosario es esplendida: todo el valle de Cticuta, el cauce del Tachi ra y los ce r ros de Venezuela. Y ahi tam bien los rastros de las malditas revoluciones: existen sobre la cumbre, caidas ya por el suelo, las piedras que si rvieron de t rincheras al ejercito en 1a pas ada contienda. En el Rosario dejamos las mulas y tomamos el tren del ferrocarril que va de a111a Cticuta y sig ue luego a Puerto Villarnizar. Tras de un tries de andar en cabalgadura fue delicioso volve r a hallar ruedas v viajar sobre r ieles.. Antes de llegar a Ciicuta esta la quinta de Santa Clara, en el Grcac/uzraca], la cual estaba arreglada para alojar a Monsefior y sus tres com pafie ros de viaje. Allillegamos al caer el dia y Fuimos recibidos con entusiasmo par el caballeroso Sr. Prada y su simpatica esposa, quienes estaban cornisionados para hace r a111los res pectivos hono res. Antes de referir nuestra llegada a Cticuta, que fue en el siguiente dia, contaremos una anecdota que alguno reco rdo alllegar al Rosario, y que aunq ue muy conocida de los colom bianos, no c reernos que conste aiin en los libros de historia, y probablemente no es exacta. Alllegar Bolivar al Rosario salio a pe ro ra rle un maestro de escuela, 0 alcalde 0 cosa sernejante, y empezo su discurso con estas palabras: -Cuando Cesar paso el Rubicon, senor Libertador... Pero ahf se olvid6 del resto de la arenga. y volvici a cmpezar : -Cuando Cesar paso el Rubicon, senor Libertador... N uevamente se tu rb6, y repitio una tercera vez: -Cuando Cesar paso el Rubicon, senor Libertadar... Bolivar, que era impaciente y que se encontraba con algtin apetito, interrumpi6 al orador diciendole: --Cuando Cesar paso el Rubicon ya habia almorzado, y yo no me encuentro en esta situaci6n.

74 Y picu su caballo y sig-lii(1;i de smon ta r s«ri Ia casa <j uv se lc tenia p repa rada. --.'if' 11011f: i-rro / hf'li t ro: ru tc), m u r m u [II (; iovannino, que al:otaha sin ":l'sar-;u mula POf tc-rno r de perde r el t rcn. XXIII joh pe r la del norte, bella ci udad de la fron te ra, amada Ciicuta ' jque de recue rdo-, vienen,i la plu ma al dcsc r ibi r la llegadaa t u rcci nto y toda s las ovacioncs que al li di sf r utrimos allado de Monseno r! La entrada fue en el tren quo par t io de Santa ('lara en las p r ime ras ho ras del dia, y en el cual iba gran parte de la soc iedad cucutefia que habia venido,i la quinta para ac ompafiar nos ;i la ciudad. In mensa m u lt.itud rodeo el t rcn a la lleg-ada a la ciudad v saludri reverente ;i S. E., q uicn con toda. la corn it.iva en t r.i ;i pie al pa rq ue de Santander. Alli f rente a la estatua del ilu st re neog-ranadino d irig-iol e la palabra el Gene ral Morales Berti en nomhre del Municipio, y con te s tcile Monsefiu:..Ma~'nillco era aquel espectacu lo. Las pa lm e ras del Jardin sacudian ag-itadas po r tenue brisa sus g-randes ahan icos., los ninas de metal aroji.ban ol agua en 10 alto de sus pila-, ; senoras y caballeros en semidrculo oian y aplaudian a los dos oradorcs: una multitud se agrllpaba afuera impaciente contra la ve rja lid pa rq ur-, y el homhre de las leves, con la eunstitueion en la mario v la capa sobre el horn b ro, pa recia mi ra r rcgocijadu' con sus ojos de b ron ce t oda aquc-lla ma~'nificl'ncia. Lueg'o Iue un desfile pur va r ias calles, bajo arcos de gusto y de lujo, y ei discu r so del ;ilealde Sr. l\ionsalve en uno ole ello-.. Lleg-;imos luegu a la quinta Tcrrsu, regia mansion de la Sra. Andresen, donde le fue of recido ;i Monsefior esplendidu alllluerzo, al cual asiatio el cuerpo consular adem;is de la familia de la ilu st re viuda. Al llegar ;i la quinta dirigi6la palabra ;i S. f<::. el Sr. )lantilla, yen el all11uerzo el General Berti, ambos en delicadas y oportunas frases. En la tarde reg resamos ala q ui nta de Santa Clara. jy que se rie de fiestas las de los siguiente-, dias! I~n uno fue una exhibici6n de todas las escuelas y colegios del ante de Monsenor, en la plaza Mercedes

75 Abrego. Despues de can tar el himno nacional paso en largo desfile aquel ejercito de nifios y nifias junto al dosel de S. E., y cad a cual ar rojaba a sus pies un ramillete de flores. Nifia hubo cuya emoci6n fue tan grande que por ar rojar las rosas ar rojo el abanico que llevaba en la otra mano. Monsenor dioles lueg-o a todos la bendici6n. Otro dia fue el recibo en el Club del Comercio. Alli estaba reunida la rnejor sociedad de Ciicuta, y se disfrutaron en aque1 eulto centro ho ras de dieha y fraternidad. Visit6 Monsenor, en otra ocasion. los talle res del ferrocarril, y admirado quedo del orden, aseo, disciplina y progreso que hay en aquel establecirniento, dirigido por el General Berti. Es la Sra. Andresen la benefacto ra de Ciicu ta. Gran parte de su fortuna la emplea la dist.ing uida dama en aliviar las miserias de los desvalidos, y ha levantado a su costa un grande edificio para los hue rfanos. Pasearnos sus salas v virnos las cam illas recien llegadas de Europa, v conternplamos la hermosa capilla, que bendijo Mon;'efior. jy cuan bellalaquintaque lleva su nombre y adonde veniamos todos los dias! jy cuan elegante y amable la corupaffia de la ilu st re senora y de todas las personas de su familia que earinosamente la rodean! Guarda ella con imborrable afecto el recue rdo de su esposo, el caballero danes Sr. Andresen, que hizo de Cticuta su segunda pat ria y euyo busto de ma rrnol parecia presidir aquellas reuniones joviales y serias a un tiempo mismo y marcadas con especial se llo de distinci6n v bondad. Una manana tuvo lugar el matrimonio del Sr. Gonzalez, sobrino del General Gonzalez Valencia, con la Srta. Berti, h ija del General Berti, y Monsefior vino ;i la ciudad a da ries la bendici6n, des pues de la cual el Padre Basignana dijo la rnisa. jhermoso efecto el de aq uella iglesia llena de elegan te concu rrencia y donde estahan ya los novios cuando ent rd S. E.! Abrieronse en dos filas y poi' entre ese s u reo de gasas y sedas, en el que se agitaban los abanicos como maripos.as, subi6 Monsenor al altar y unio alli a la gentil pareja. La colonia italiana festejo tam bien a sus dos compatriotas: S. E. y el Padre Basignana, con mag-nifico

76 volvj e ron ;i ciudad ;t1g-unas al mue rzo. al cud asi st.ie.ron igualmente sus compafieros de viaje. T'uvimos entonces ocasion de apreciar los me ri tos de aquella colonia t rabajado ra, si mpat.ica v buena. " Bella ciudad es Cucuta. Auchas sus callcs v cubie r tas de ;irholes como bu leva rcs. Sus casa~ son arn pl ias. con Bores y lujosos muebles. Sus mo radores son generosos, arnablcs y saben hace rse q ue re r por los viaje ros. La sociedad es culta y eleg-ante. y sus damas fig-ura rian en pucsto de honor en los rnejo res salones. Vi si td tam bien S. K el me rcado (rnejo r que el de Bogota). el hospital, la im p ren ta de HI Tral){~i(). cl cabildo y otros lug'ares de ig-ual importancia. Una noche fueron a la quinta de Santa Clara los ar tesanos y gentes del pueblo. Ellos quisieron tambien rendi r Sl1 t ri bu to al distillg"uido diplomatico, y pid ie ron el t ren para esa noche. Mas de dos mil personas amantonadas en los as ien tos de los car ros, de pie sabre los ost r ibos, trepados en los techos de los vagones, sc p re-seri ta ron en la villa. Era bello exe conjunto de ruanas y ca misas hlancas que semejaba en la noche un t ren cu hie rto de nieve. Y totlos victoreaban a Mon sefio r y a sus corn pafie ros, y a s u elocu en te t ri buno cl Sr. Saul Matcus. Con todo orden la ho ras despucs. Ot ra noehe iue en masa la poblacion de San Luis. lug-ar que qneda entre Ciicu ta y la q u in ta de Scm/a C/ara, la cual se p rcsento a saludar il Monscitor. Cada par roq uiano llevaba una rama de ar bol, y en el ext remo de ella u n farolillo de colo res. Nada tan cu rioso como aquella mareha de antor chas po r entre el camino, en medi.o de las sorn b ra.s y presidida por e1simpatico cnra Dr. Ortiz, quien dio con esta ovaei6n p r ueba de su entnsiasmo y buen gusto. ;Oh, Ciicuta! Lejos hoy ya de t.us calles cubier tas de ch ipios y clemones, de aquellas dos qui ntas dondc rnorarnos diez dias tan fasci nado res, de tus hijos hos-' pitalar ios y caballe rosos, cer ramos los ojos.y",e transporta n ues t ra alma <l ese eden venturoso, donde pasamos ho ras magic as como se pasa.r ian en un palacio encantado de los cuen tos orientales.

77 XXIV La manana era lluviosa v triste cuando salfrnos de Cucuta. El tren nos llevd de la quinta Santa Ciara.i Ia ciudad, donrle un g-rupo de amigos nos espe raba para darnos la despedida. Recorrimos a pie, bajo una Ilovizna incesante, las calles que van de la estacion a Ia quinta Teres..a. AlIi vino inmensa multitud a pesar de la hora y de la Iluvia a despedirse de Monseno r. ic uan ta tri steza daba abandonar aq uel pa raiso donde pasamos instarites magnificos! Una vez ens illadas las cabalgadu ras nos dispusimos a parti r. En la puerta de la quinta le dirigi6 a Monsenor el Sr. Vega un delicado discu rso que 10 conrnovio hondamente. Dos 1<1- grimas bien si nceras humedecieron los ojos de Monsefio r. Era interesante aq uel momento de adios: en la puerta del jardin el Sr. Delegado a caballo con su sombrero blanco y sus bo rlas verdes; a. pie a su izquie rda el orador con la cabeza descubier ta: en el fondo del ja rdin sabre la ter raza la Sra. Andresen, siern pre dis tinguida.y siem p re elegante, y en torno de ella el Iucido grupo de damas que viven a. su lado: y fuera de las rejas del jardin, en la calle, una gran cahalgata de los amigos que deseaban acorn pafia rlo en s u camino algunas leg-uas, no obstante la inc1emencia del dia: y l uego la gente de a. pie amontonada en los andenes y en las puer tas.y ventanas. Levantarnos en alto los sombreros, dimos una ultima mirada a. la quinta.y pa rtimos hacia el sur. La lluvia no cesaba: sonaban las he r radu ras de los caballos sobre las piedras de la calle melanc61icamentc; las palmeras agitaban :'IU rarnaje, movida.s por el cierzo, y de sus hojas resbalaban g randes gotas de agua. Pasarnos el he rrnoso puente de San Rafael, hasta el cual fue la multitud de a pie, y tomarnos el camino de Chinacota. Horas despues estabarnos en el pintoresco case rio de los Vadas, El Pampionitrt bajaba erecido v fangoso. El camino estaba cubier to de lodo v en algunas partes ext rcmadamente pelig roso. Como se hubiesen-s-a consecuencia de las lluvias-v-caido g randes moles de los cer ros sob re el sende ro de la orilla del rio, y dificultado el transite por alli, p reci so nos fue t repar par la antigua t rocha, la cual es bastantc penosa. La lluvia y el abandono en que esta ella despues de

78 -" I,) que se hizo ei camino por la or illa del rio la habia n tornado a un es taclo pr-i m itivo. Grandes piedras y hondos ba r r izale s obs t ru ven e l paso. v d viajo ro va de pcl iszro en peligro.'. Pc ro en catn bio iql\l~ pai saj«ma ravi lloso al llesrar ;i la altura! 1~11'10. im pet.uoso, co r re abajo poi' entre ro- Las y bosq ucs ; at ras, envuel to en t ule s de nebl ina. cl valle de Cticu ta, v ad elan te, m u v Iejos rui n, los elevados ce I' ros de la J)())ijua na v Chi nacota. Con los cncauchados sob re los hom bros v las funda s en los sorr h re ros, dcsfi l.ibarnos uno i( uno poi' aq uel cst recho se nrlc ro. La bajada era mas pel igrosa 'lue lit -subida. [J'ls l i\.halg'adu ras daban su" pasos con p rudencia, v en cie r'tos mornen tos resbalaban algun t recho 6 de sl iza.ban sus he r radu ras sob re auchas pied ra.s. Algunas "eel's la best.ia q uedaha pcrfcctaruente perpendicular al baja r las patas delantcras. Tanto que (~jovanninu exclamaba en csta posicicin: ----Alla abajo a lcanzo a ve r las o rr-ja s de ('/(('",1/' m ul ito. Despucs de csta trocha vol vi mus a vc r la he r mosa alt.iplan icie lllll~ ta n to nos com placid a la ida. Aho ra es taba llcna de fang-o. Lueg-o ot ra vez el camino q ueb rado, v t ras penosa bajada la pusada de... ;({ll/a /!,'!Cll({. doridc alrnor-zrimos. Hermosa aq uel la casa en Ia orilla del rio, junto al puente, entre dos mon tafias eno r mcs. :\ ba.jo las oudas agitadas v l'spumosas; a los lados las pa red cs de g:ranito.. 1<:1camino.Ie la J)OJ{jU({Il({ esta ba iguajilll'llte reshaloso v con grandes hovos. De nuevo vol vi mox a vel' el cam po de batalla dolide en lh7h pelea ron con las fucrz.as del Gobierno los g-uerrilleros conse rvado res que se habian r.n ido para formal' todo u n ejcrci to. En e~os desfilade ros del te r r ufio jcuantos soldados caedan, y yacen al li ind is tin tos e ig-norados! Tras de va rias hora.s dl' carn ina r por la o r illa, Ileg-amo~ al puente de la DOl/jualla. Ahi pasamos de n ue- \'0 el Pamp!oJli/((, y em pezamos la a-seen si6n hacia las cum b res del c.un ino de Chi nacota. F.n Iarg-a es pi ral po r sende ro ped rcg roso fuimos t repando a la alta cimao A cada mo merrto, al dar una rcvuel ta, veiarnos el pa.isaje de abajo: el rio se iba ach icando a rued ida ']lte su biarnos, y ya a 10 ultimo no era sino una ci n ta de plata; las casas de la orilla parecian u na.s rocas. En 10 alto descansamos u n ins tan te, mi rarnos con

79 ternura de despedida la grande abra por don de el rio se abre paso, volvimos a montar y pa rtirnos. A poco ernpezarnos a encontrar algunos amigos de Chinacota que habfan venido a nuestro encuentro. Luego al Sr. cu ra con un nu rne roso grupo. Ya con ellos hicimos la bajada a la quebrada de Ismlri. J1~s otro camino en escale ra, como todos los de Colombia. Las bes tias van ca racoleando hacia abajo sob re charcos y guijar rcs: luego la quebrada y el puente; despues una subida igual a la bajada. AlH nos sor prendid el c reptiscu lo, y fue ya en las p rirneras noche cuando llegamos a la poblacion. ho ras de la Pero esto estaba previsto por sus buenos vecinos, y todos ellos habian iluminado el frente de sus habitaclones. Es tuvo hermosa aquella entrada por en medio de faroli llos de colo res, y p recedidos por la banda de rmisica que esperaba a las pue rtas del lugar. Los vecinos de Chinacota se esmeraron en most rar as. K. el placer de tenerlo de nuevo en su recinto. xxv La jo rnada del siguiente dia por polo resulta t ragica. Era raro que entre tanta aglorne racidn de ji netes y entre tan g randes multitudes como se habian visto no tuviesemos aiin que lamentar ninguna desgracia. Pero al sali r de Chi nacota un caballo inddm ito h izo varios he.ridos v nos dejo conste rnados ese dia. A la salida de este lugar en via de Pam pion a hay una bajada, luego en el fondo un puentecito de madera, y despues una larga su bida. Es un paisaje que se encuentra en las afueras de muchos lug-ares de Colombia. Nos acompafiaban muchos vecinos de la poblaci6n, y habiarnos ya descendido al rio y cruzado el puente, y t repabarnos la cuesta uno t ras ot ro, en larga fila, como se viaja en estes caminos, con el abismo a un lado y al otro las escarpadas b refias. Monsenor iba adelante platicando con un amigo, y luego el Sr. Ranjel, vecino de Chinacota. EncabritOse por cualquier motive el caballo de este cuando ya llegaba a la cumbre, y aunque resist.iera su jinete los terribles saltos al borde del precipicio, fue al fin derribado por habersele volteado la montu ravy qued6 tendido sobre los g ijar ros del camino. El animal, como una fiera, despidio hacia

80 _.',..~,~-' abajo, pol' donde subiarnos deacu idados los ot ros viajeres. Unos logramos esq uiva r el at ropello 0 los g-olpes de las coces q ue lanzaha en el ai reo pero en -un pun to est recho dio con el Dr. Sanchez. Ie emhistiii como un ton v 10 de r r ibd con su cabal lc-ria. Levantose csta!' Iueron en tonces dos caballos dl'shocados par aquel est rec ho sende ro. De tenido el del Sr. Sanchez. sig-ni() el p ri me ro dando te r r ibles saltos, como lin tigre. Trope~o con cl General Carna rsro. que subia descu idado, v e-n un recodo del camino le hizo cae r de Sll mula. 10 ~t1,j.1le ocas iorui honda dcscalabrad \1 ra. Lueg-o. de una l:oz dc r ribo a una pobre mujc r que trepaha por ahi a pie. Las revue'ltas del cam ino no nos penni- Han vel' 10 lpte abajo sucedia a los liue 'ibarnos adelante: est,i')amos adernas atendiendo a los primeros apor reados. uno de los cuales, el Dr. Sanchez. pa recia mor ibundo. Grande fue nuestro pavor cuando oirnos terrible est rucndo abajo, en el puente; c reirnos que all! hab ria,,,iiu rioso cor-eel derrihado alg-un nuevo jinete. Pe ro pronto nos informaron 10 (lue habia sucedido. Resbalose el caballo al pasar poi' ahi en s u loca car rera. despedazo al cae r parte de la barandilla, v qued6 extendido en el puente, con los cascos sob rc el vacio. T'otal: cuat ro he r idos en nnos pecos m inutos. Pasada la cmocirin pud irnos contemplar el pa.isaje. jqu~ hermosa vista la de aq uellos cam pos ' Mi r.lmos ri 'I'escua, lugar de sanjz r icn ta batalln, la rica hacienda de E/ IJi'(}/l((lt!c. y tanto sitio de L'splendida w'g'etac i.in. Hayen est a via muv comodas posadas, con toda clase <It:'rvcu rsos, y asi el viaje no es penoso, no obstante In flng'oso que estaba el camino por causa de la lluvia. Volvinos,1.pasar. como a la venirla, por las ce rcanias de C'hopo, v tuvirnos al li el gusto de saludar al Sr. cu ra, que sali6 con algunos vecinos a presentar sus hornenajes a Monseno r. Y,1.la hora del crepiiscu- 10 ent ramos otra vez a Parnplona, en union de m uchos veci nos de aquella ciudad que habian salido a su encucntro. Cuan placente ro nos fue hallar all i, como en Chinacota, los corn pafie ros y arnigos de dias anteriores. En Pam plona t uvi rnos un encuent ro singular: una partida de indios tunebos. Supimos el dta ue nuest ra llegada que estaban en la ciudad, en casa del Sr. Juan Obando, quien tiene una hacienda por alla

81 en las ma rgenes del Sarart.\ y manifesto l\lonsenor el de seo de conoce rlos. Acahabamos de comer en el palacio episcopal y tomahamos cl cafe en la sala cuando lieg<j el estimable Sr. D. Luis Obando con los ocho indigenas. 'T'enian pantalrin y una ruanita por todo vestido; cstaban sin sombrero y sin carn isa. Algunos llevahan al cuello gargant.illas de cuen tas amar illas que les habian regalado ese dia. Y en realidad que no necesitan de sombrero: todos tienen una melena eapesa, de pel os largos, lacios, asperos, tales como la c rin de los caballos, recortados adelante en forma de capul y que les caen hacia atras y sabre la o reja, como unos cua.renta centirnet ros. Los ojos son neg ros, vivarachos pero de poco brillo; ning-uno tiene bigote ni barba. La tez es cohriza obscu ra, cas i negra: son feos pe ro no de facciones defo rrnes : la nar iz no es chata, aun cuando SI soplada en las ventanillas : los lahios no son ll1uy g-ruesos Y SI de cu rvas delicadas. }<~ntraron a la sal a con movimientos tor-pes, y los hicirnos sentar en tabu retes, pues querian posar se en el suelo. Algunos su bie ron u n pie sabre el as ien to. Sus fisonomias 80n risuenas y s impat ica-, y man ifestaban eatar muy aleg res. l\tiraban con atencidn al Sr. Delegado, a los sacerdotes que estaban a su lado y a los dernas com pane ros. Se fijaban tam bien en los retratos de pon tifices y obispos que cuelgan en la pared. Hablan pocas palab ras de espanol, pe ro el Sr. Obando, que bastante conoce de su dialecto, les servia de interprete. Uno de ellos canto unas canciones que ten Ian un ai re bastante melancolico..'ill.frir Illite/IV!U- 1ICOOS, dijo en espanol al conclui r. El idioma es monos ilabico en general, poi' 10 que pudimos pe rcibi r de esas canc iones, y no tiene la dulzura de ot ros idiornas in dig'enas de nuestro pais, sino mas bien vocables fue r te s. Y comparandolo con lenguas ext ranje ras, nos sono aquello mas ;i ingles que- a otro idioma europeo. Palabra sern ejan te al ch.ibcha no oirnos sino ata, que para ellos es JJUlI/(} y para los indios de Cundinamarca era nuo, Pe rtenecen es tos indfgenas a la tribu lcncasia, que mora poi' alia en la union del Cobug6n con el Sarare, a cuat ro dias de Pamplona. Uno de ellos se llama Tamardu, es el jefe y tendra unos cincuenta afios, Los demas son menores de treinta aaos.

82 77 Se 11.''; of recio a~rl\a1'diente \ 10 hebie ron con placer. Uno cog-ia la copa a dos manos. otro ponia el pie de ella sc b reia palma (Ie la mano v la sostenla con los dedo«para tomar. Lueg-o se le s dlo cig-arro, y Iue ron en touce-, tam bien en r iosos sus adernanes: va pretendian enccuder el tabaco par lit parte pu nt.iasruda y se llevaban ;j la boca el ot ro ex t rerno: \,: mascaban con sus ter ribles dientes. Pe ro fuma ron can delicia. Son flacos pero no parecen onfcrrnizos ni dcbiles. Viven de Ia caza y la pesca, y andan por alia en sus montana» en completa dcsnudez, No son ant.ropofagos ni ho-st ile s al viaje ro. antes bien 10 reciben con car ifio. A sus mue r tos no los en tie r rau sino que los dejan,i la in tempe rie ;i que sean pasta de los cuervos. Han vcnido en va rias ocasiones it la ciudad y pa recen gustar de la vida civilizada. PaJJlfilollll bonita, decian esa noche. Son mu v ri suenos v dcbian hacer cornenta rios gr;i.ciosos, plies!'it' hablaban entre Sl y reian. Y el frio no Ies hacia gran(le imp res idn. 'T'odos estabamos hien ahrigados, pucs la n iebla habia envuel to la ciudad dcscle las pr imcras ho ras de la tarde, y menuda Iluvia caia s in cesar. 8110s, sin cam isa, no tiritaban ni most raban esta.r ate r idos, Sus movirn ientos son de orangutanes; cuando se les iudico con sefia» (lue se ar rodilla ran pa rarlarles Mouseftor la hend i- cion. no acer taron a hacc rlo: u nos se ponian en cucl i- llas, ot ros se sentaban it la oriental, II COil las pie mas cx ten d idas hacia adelanto. Regal(Jles Monsenor unas medall itas con la etigie de la Virg-el, v les dijo que pronunciasen el nombre de Marla: se most ra ron m uv con tentos, v cuando salicron iban diciendo aq uel nom b re po r toda la calle. Conveuierite ser ia (lue se fomentasen las misiones entre aquellas t.ribus. Esos sal vajes vend rian facilmente ala vida de civilixacion v se rian iit iles ciudadanos de Colorn bia. - Al dia siguiente volvie ron al palacio episcopal y fue ron ret ratados con sus maletas y bordones; prime ro en un grupo de ellos solamen te, y luego en otro con Monsenor, el R. P. Bas ig nana y el infrascrito corresponsal.

83 XXVI Para el reg reso tornarnos la via que se llama de Garda Rovira, en vez de la de Bucaramanga que habiarnos llevado a la ida. Lbamos a conocer una region ig ualmente interesante. Salimos de Pamplona ci las n ueve y media, acornpafiados de nume rosoa amigos, y tornamos hacia el alto de Sistabita por un camino quebrado. Iban alli con nosot ros el Dr. Rod rj'guez, cura de Cacota, el canon i- go Dr. Uribe y los presbite ros Dres. Guevara y Vera v los Sres. M. Vale, L. Castellanos, F. v C. Blanco v ~tros caballeros. "- En Cacota se hizo a Monsefior entusiasta recepcion. Las calles estaban llenas de a rcos, y multi tud de vecinos sal ie ron a su encueritro. Al llegar a la plaza se det uvo la caballe ria frente a la iglesia a escuchar el discu rso que al ilustre viajero le dirigi6 una hermosa nina. Cacota esta edificada entre g-randes cer ros y es una pohlaci6n apacible y sirnpatica; sabre una colina se levanta una antig-ua iglehia del tiempo de la colonia, que lleva el nombre de San Jacinto. El templo de la plaza fue edificado en el siglo XVII, pues al pie de uno de los pilares esta la fecha: Det ras del altar mayor, en el carna rin, vimos un curiosa exvoto. Es una pequetia pintura de un caballero ar rodillado ante la Virgen, y en ella se exp resa su significacion. En 1819 tenian los espaftoles alli preso al Sr. Francisco Gonzalez, defensor de la independencia; iba a se r fusilado sin duda, cuando llego Ia noticia del triunfo de Boyaca, y as! pudo se r puesto en libertad. Devoto como era de la Virgen, a quien alzabasusoraciones, hizo colocal" alli esc recue rdo de gratitud. Cerca de Cacota existen unos banos termales, eficaces para muchas enferrnedades. }1~1terreno es en esta poblaci6n tan quebrado que la rnisrna plaza tiene bastante declive, y en los alrededores se yen las semen teras sabre planes inclinados casi pe rpendiculares 6 sob re escar pados penascos ; se divisa el ~anado pastando en altas b refias, y a veces sob re dos precipicios, y admirase uno de como no se derrumban desde aquellos riscos donde parece no pod rian pastar sino los venados.

84 AlII hab ran sern b rado el pasta de sde aq ui Lon ce r batana -dec ia Giovannino. Aun cuarido para un dicciona rio (}lie tonernos en obra rese rvamos todos los datos hiatriricos y g-eogra.- ficos de las pobaciones (Iue homos vi s itado, con sig namos aq u i los que nos dio el es tud ioso cu ra Dr. Rod rig-nez. «La quebrada que pasa no lejos del pueblo se llama de Foutiiuu), y es cu rioso hal la r al li este nom bre que, como es sabido, 10 llcva tam bien un pueblo ce rca de Bog-ota. Las f racciones de Cacota son: /Jatli/?Ila, Gallg-rldUI, Cllrj>aNd, Cj>d, Fo Illib() II, Fcrna ndarta, T((rf.(mtld, A uriqnc, /,'0/(( e Isrca oca, nom b re s todos ind ijrenas, excepto Fcruandaria, que se r ia pues to en honor de F'ernando VII <5quizas de algun F'ernando Arias. Los arroyos que forman el rio Cacota son: Cllrpa;.:d, Chirrribeg-a, (;,'arc/a, La Plata, Saut«Teresa,,)'a/ado, Tar-!('lla Id y Ca rhona].. «l<51t e r r itovio de Cacota estaba hahitado en tiempo de la conquista por una parte de la trihn de los chita re ros, que ocu paban,i Cacota e lcota y dcpendian del cacicazjro de Silos. EI primer Lon(}llistador que pis6,i Cacota rue Alfinge r, que past) po r el Corral. Dcspues vinie ron Pedro de U rstia y Ortum Velasco. De cs tc ril ti mo p robablernerite tomo cl nomhre dr- Cacota de Velasco. En t iern po de la independeucia cuenta la historia que huoo u n com bate en el puente eiechitag-a y Balaga. U'rdancta se encont ro con Ca.lz.ada cn el r io Ch i- tag-,i, cuyo paso q u iso im ped irle. Alii se t.rabo ol corn bate, pe ro como el rio e staba vadea hle, no pudo im pcd ir sclo y ljrdaneta fue de r rotado en ter rninos qne solo pu do escapar con 20t) h.im b rcs. Lon los que lleg-() ;i Cacota de Velasco, y si~'ui6 de all!,i Mu t isc ua, pol' el alto del Vicio, y Iuc,i dar a. Bucaramang-a. Calzada sig-ui() ;i Parn plona,i dejar reponer s u gl'nte.» l<~ncacota "e cclehra en el m cs de Enero u na orig-inal fiesta--sq~un nos 10 refi r io u n amig-o- en cclebra- Ci()11 de la conq uis ta. Pa.rece que se hace en la plaza u n s im u lac ro d e la lucha entre los espafioll's y los indios; en t ran los p r ime ros a. caballo a rrnados de lanzas, poi' las cuatro csq u inas, y atacan a los indios que e~tan a pie y Se d efienden can flechas. has ta que son estos sujetados. Bien inte resan te es este hecho de- habe rse conscrva.do el rvcue rdo de tal cpi sod io " t ran::s de los siglos y de re pr-escnt ar lo vivurn cn te.

85 El camino de Cacota Chitaga es igualmentepintoresco. Se baja primero a la quebrada de Cdcota, que ru mo rosa mueve ahi, al pie de la poblacion, la rueda de un molino; despues se encuentra la de Targ tcald. y luego el case rio de La Ubita, donde rnuchos campesinos esperaban a Monsefior, y bajo un a reo de flores le dirigi6 uno de los vecinos de aquel lugar un en tu siasta discurso. Despues virnos los herrnosos campos de la hacienda de kola, y el rio Clzitagd, que iba paralelo a nuestro camino, y cuyas aguas van a buscar las del Meta. Por allf tam bien el torrente Siagd, cri stali no y espumoso. Es interesante en estos viajes por las cordilleras pasar de una hoy a hid rog rafica a otra hoya de un dia para otro 6 en el misrno dia: varnos ma rchando contra la corriente y de pronto, t ras de una cima, como si las aguas cambia ran de cu rso, van ellas en nues t ra misma direcci6n. Ahora asi, en esta jorriada, las aguas van con nosot ros hacia el oriente, y sentimos la ernocion que despiertan las tie r ras lejanas y desconocidas. Estas ondas nos hacen pensar en el Sarare con todos sus rnister ios, en e1 Meta opulento, en los Llanos sin lim ites yen el Orinoco poderoso y esplendido. En Balaga hay una vista magnifica: se divisan el rio, los campos, las colinas y los lejanos montes, bafiados pol' un sol tibio y apacible y envueltos en un ai re purisimo. Y al cae r al rio, don de hay un pintoresco puente, se goza tam bien de un paisaje maravilloso. AlH fue saludado Monsenor con bellas f rases por el Sr. P. Garcia, quien 10 espe raba rodeado de muchos veci nos de Chi tagti: y t ras de los saludos y p re sentaciones sigui6 la g-ran cahalgata hacia la ri suefia poblaci6n. Al caer de la tarde fue la entrada pol' una calle toda llena de arcos y festones. Monsefior era aclarnado con entusiasmo, y al llegar a la plaza le dirigi6 la palabra el inteligente joven R. Delgado. Hay abundancia de agua en Chitaga, y eso hace que sean alegres sus calles: pero falta una fuente en la mitad de la plaza, donde s6lo se ve un a rbol rodeado de cercos. La iglesia con su espadafia se eleva en el costado mas elevado de la plaza, como dominando la poblaci6n. Parece que Chitaga sufri6 mucho en la pasada revoluci6n, y de ahi que se yean algunos escomhros. Aun cuando metida alla, en medio de morrtafias,

86 -- HI --- se sierite algo de la vida del llano; sus mo rado rcs hahlan de negocios () de cam pafias en aq uella regi6n as i como en cier tos pueblos del Tolima se sien te e1 hali to de An tioqu ia y en nuest ras f ronte ras hay rn ucho de los paises lirn it rc.fcs. F'ue ron hos pedados cl Sr. Deleg'ado y algunos de sus compane ros en la casa cu ral, v el General Camarg-o y nosot ros pcrnoctarnos bajo el tccho de D. Belisario Bautista, hon rado y vale roso llane ro que t.ierie all i su hogar. Vida inte resante la suyu: rudos afios de trabai» p r irne ro, en esas r icas llanu ras orientales; lucg-o carn panas en Venezuela al lado del General Cr es po, a q uien vio cae r he r ido de rn uc r te en una hat.alla; dcspues luchando en Cuba al Iado de Maceo, ;t. q uicn via igualmente mo ri r en el campo de comba.te, y aho ra, tras tanta faena, lleva ahi, en esas montanas, al lado de su esposa, vida pat ria real. Pasarnos alli, aterid idos por 151 Y oyeridole con ta r sus viajes y sus labo rus, una noche t ranq u ila. XXVII La rga es la jo r nada de Chitaga al Cerrito. Esta entre cstas dos poblaciones vi g-ran pa ramo de E/.1/- mor.sadcro..\ (1 se Ilega dcs pucs de alsru nas ho ras de su hida poi' u.n te r reno de no mu)' Iue r te incli nnci.in. No se haec la ascension como ;i ot ras ctis pidcs, poi' camino pcn d ien te, <i no que se va t rc pan do le n tarncnteo A poco de sa li I' elt' la po hlac icin sc hal la la cascada Samaria, qu.: cae de una altura de flo metros y cuya fuerza rnot r iz pod ria ap rovccha r se ven tajosarn en te. Al fin.;e Ilega a la curn b re f r ia y em piesa alii todo el am bi entc y la veg-etaci6n del pa ra mo: rorne ros coposos pe ro cnanos, y f railejones de t ro ncos neg-ros y que pa reccn u nos grandes hongos; sopla un vierito frio y g-asa.s de nebl ina vue-ian poi' sob re las col inas. Es u n pai sajc de devas tacu'in, el reiuado de la soledad \' de la melancolia. Pasan los ar ric ros y las acern ilas. que vieuen e-n scn t.ido con t rar io, aterido~ y cabizbajos. En una pob re cabana (Iue t.ieue el norn b re de Duque nos dcteuernos a almorzar,.y alii en el rust ico alar, sentados s o b re piedras y con la hu m ilde vaji lla colo cad a en un viejo han co. tornamos un ligero refrigerio. Un rato des pucs cont.inuarnos la jor nada. 6

87 - 82- Sigue otra vez el mismo paisaje de paramo: la misma flora raquitica: los misrnos horizontes desapacibles; la misma niebla y el mismo silencio. Pero asi y todo nosot ros arnarnos los eriales : nos sentimos en ellos muy bien; parece que funcionan alta mejor todos nuest ros 6rganos y que sanas estan la respiraci6n, la circulaci6n y la digestion. Este frio seeo y este aire pu risirno los creernos muy benefices: el dia llegara, no 10dudamos, que se recete venir a los paramos en busca de salud. Sabi.do es que el invierno en Europa robustece y que estas temperaturas bajas, cuando hay buena alimentaci6n y abrigo, son muy saludables. Hoy por hoy les tenernos horror a estos yermos porque no hay en ellos con/art sino toda clase de incornodidades: pero si algtin dia se hacen en ellos hoteles donde haya buena cam a, buena com ida, buena bodega y buena cornpafiia, se rfa grato veni r las familias a pasar alli unas sernanas. Ot ra raza que no la nuestra ya 10 hab ria hecho. Una biblioteca, un billar y diversos deportes ayudarian a hacer amena la mansi6n en estos sitios. Pero tal como son hoy no se piensa sino en pasa rlos apresuradarnente antes de que venga la noche y podamos mori r helados 6 despenados por ahi en algun precipicio. A la de recha del camino se elevan unas rocas inmensas adonde s610 suben las aguilas y los buitres. Son unas rocas dentadas.ysernejan las alrnenas de un castillo colosa1. Provoca subir a esas cirnas escarpadas y contemplarloshorizontes: se nos figura que desde a111se ha de ver toda Colombia y divisar-se el campanario vecino de nuestro hogar. Hay tam bien una pequena laguna Hamada de Comagtteta, con una cascada que cae de unos altos ri scos, Aquella lagunita, con BU agua obscura, con su istita en medio, con aquel salto de agua, con las algas que hordan sus or illas y en medio de aquellos lugares olvidados y rec6nditos, tiene un encanto y una poesia ext raordina rios, Bien quisiera el viaje ro detener'se a curiosear todos sus detalles, a beber 8U agua 0 navegar en ella, recoger sus florecillas, atrapar sus insectos y trepar por sobre las pefias ; pero aiin esta lejos el Cerrito y no hay albergue ninguno en aquel pararno. Y este campo desierto tiene va rios pisos, pues cuarido nos c reernos en las mayores alturas vernos al

88 frente otra cima, a la cual tenernos que t repar, pues va por ella el camino. Se cree que es la ultima, mas l uego se presenta alguna otra, y cl frio es cad a vez mas intenso, Al fin ~e llega al ter mino de aq uel la altiplanicie desarnparada. Ahi esta el lugar lleno de cruces que exi ste en Coom bia en todos los sit ios scrnejantes. Cu riosa cs aq uella colecci6n del em blerna cristiano en las bocas de los montes y de los paramos: se ven de todos tamafios y de todas formas; ningtin arriero deja de poner su cruz antes de aven tu ra rse en tan penosa jo rnada, y su vista, si es a la entrada, nos emociona, pues pensarncs en los pelig ros de la ruta; y si es ala salida, nos aleg ra, pues vernos que se han terminado los escollos de la via. Ahi el paisaje cambia por completo y aparccen a nuest ros ojos campos r isueffos y colinas llenas de luz y de vida. Ernpieza entonces la bajada que, aunq ue penosa, la pasarnos satisfechos y aleg rcs por haber salido del pararno y estar ya a las puertas de una poblaci6n (Iue esperaba con entusiasrno a Monsefio r. Lentamente descendirnos hasta caer al vallecito, y ahi a las puer tas de la poblacion esperaban al distinguido viajero el est.imable cu ra Dr. Garcia con gran rnime ro de veci nos. De esta poblacion, aituada en la or illa del rio Seruitd, dice Esguerra en su Iliccionario Gcogrdjico: c:es pequefia pe ro muy simpatica poblaci6n, notable por la cultura y apacibilidad de sus vecinos y por su espiritu hospitalario. Goza de excclente clirna, hay muy buenas crias de caballos y produce trigo.» Conceptos con los cuales estarnos en un todo de acue rdo. XXVIII Muy entusiasta fue Ia acogida que hicieron al Sr. Delegado las poblaciones de Concepcion y Malaga. A Ia entrada de la primera estaha el G eneral J. M. Ruiz rodeado de nu me rosa cabalga.ta, y le dirigi6lapalabra a S. Eo en un bello discu rso. EI General Ruiz es bien conocido en Colombia como militar aguerrido y distinguido medico. A nuestro pa~;o por estas poblaciones pudimos ve r cuan to Sl' le q u ie re y se Ie respeta

89 por todos los gremios v todos los par-tides. Su popularidad es grande y sincera, Engalanada con gui rnaldas y banderas estaba la c?,lle de la entrada, y multitud de gente salio a presenciar la llegada de S. E. T'uvimos el gusto de conocer muchos de los es ti mables vecinos de aquel lugar, entre ot ros a los hijos del General Sol6n Wilches, que fue Gohernador de Santander y candidato para la Presidencia de la Republica ahora afios, BelHsimos los campos de Concepcion; esta alri la p.ropiedad muy dividida y por consiguiente muy cultivada. Hayen la poblacion varias escuelas que tuvimos el placer de visitar al lado de Monseno r, v vimos que en ellas se hacen buenos estudios. " Unas ho ras nos detuvimos al li en la ca.sa del Sr. Montero, a fin de que S. E. hiciese algunas confirmaciones, y mientras l fue a la iglesia a administrar aquel sacramento acentenares de parvulos, depar timos nosot ros con aquel respetable anciano. I!'iguro l en tiempos de la federacion y presto eficaces y honrados se rvicios al partido liberal. Hoy, lejos del bullicio de la politica, conserva inalterable fe por sus principios y muestra con entusiasrno los recue rdos de otros dias. Su cuarto de estudio es como un templo de radicalismo. Al li no s610 los retratos de los jefes de este partido en Colombia sino los del li be ral isrno de otros pa.ises: se ven las efigies de Gambetta, J ua rez, Garibaldi y no reco rdamos cuan tos mas; al li colecciones de proclarnas, boletines y d iscu rsos de la epoca federal. Con entusiasmo nos ley6 var ios documentos interesantes, entre ellos una carta que le dirigio el Dr. Murillo, llena de conceptos ace rtados y ju iciosos, Acatamos siern p re toda opinion honrada y todo acto de lealtad,.y nos in spi r6 por consiguiente respeto aq uel ca rinoso cuidado para guardar esas rel iq uias de un regimen caldo y esos ji rones de una bandera vencida y des pedazada. Bien hubiera querido Mon sefio r perrnancce r en Concepcion esa noche, pues a ello 10 instaban los vecinos y 10 convidaba aquel clima delicioso y aquellos dig-nos hogares; pero ya estaba anunciada para. ese dia la llegada a Malaga, y 10 espe raban con impaciencia. Era una cabalgata magnifica la que se vela trepando la subida que lleva de la una ala ot ra poblacion, pues iban ciudadanos de am bos lug-ares y de ot ros

90 -- HS -- pueblos vccinos. Ya a la llegada a M;ilaga la multitud de g-entes c.e a pie era tarnbien inmensa, v segula ella corriendo c.et ras de los caballos. A la lleg-ada ri la ciudad, bajo.111he rrnoso a reo, Ie clio la bienvenida en adecuadas f rasos el Sr. Pardo, v Ineg-o desfilamos bajo a rcos JIluy pi n to rciscos y una Ifuvia de flo re«que caia de ven tanas y balcories. Bella la plaza de Malag-a. enma rcada de casas altas y elegantes, Hayen esta poblacion una sociedad dist iruruida y se goza en ella de una atmosfera de se ren idad y paz. Nos dicen que la elefaucia, r,laga que all i ex is t«en los campus, no en la c iudad. tie HIe ;i di srni nuir debido a en(>rg-icas mcdidas, y que q ui zris se. log ra ra pronto, si no su exti rpacion com pl ata, Sl ;i 10 menus, impedi r su propagacion. Habia en esos dias crisis ag r icola, pe ro no p roducida por pcrclida de coacchas ni Ial ta de brazos. Era al cont rar-io, crisis de ahu nda ncin, la cual hem os vis to en ot ros lug-ares de Colombia. Las tie r ras han producido ma s -de 10 que se consume, y en vez del hamb re ha venido la har tu ra. F'rancia ha presenciado el m isrno fenl)meno en este ano,y Ia crisis <JUl' sc ha llamade 'lila del mediodia ii vinicola no I:S ot ra cosa que la abu ndaricia de p roduccidn de las vifias y la disrn i- nucion del con s u m o de vinos. ;,CI)mO se reruedia ra es to en n uext rn tierra'( Opinarnos que con Ia inm ig racion. Siemp ro hernos c reido y 10 hem os dicho ya en algunas de es tas c rdn icas, que a Colombia Ie falta poblacion y que aqui f racasan m uchas l'll1presas po r falta de con su m ido n-s. El cu ra de.malaga, Dr. Zafra, nos atcndio con mucha fineza en los t rcs dias (Itle permanecimos en este luga r. 'lsi como el sefio r T. (~arcia, en cuya casa vivim os, cl l'refecto Sr. Orduz, el General Ruiz, el Sr. Carrasco y m uchos ot ros caballeros de tan si mpati ca poblacion. En honor de S. I~. se celeljr() una velada 11- rico lite ra r ia, v Iucron Il1UVaplaudidos todos los ruime ros del pro~zrall1a. ' Malag-a c s tierra de gran porveni r : clima ag radable y sano, pa r roco amado por sus felig'rl'ses, autoridades labor iosns y hon radas y puehlo t rabajador y culto: elementos son para Ileva r lejos una poblaci6n en el seride ro de la concordia y del progreso. 1 cu ra de Enciso, Dr. Villamizar. v m ucho-, de sus feligreses su plica ron ;i Mon seno r visita.ra esta poblacion y confi rrnase a llf m uchos n inos q u e no habian

91 ~ecibido este sacramento. Deseabamos todos tam bien conocer aquellugar donde se libra cruenta batalla en AlH obtuvieron triunfo las fuerzas del gobierno comandadas por el General Reyes sobre el ejercito liberal que estaba a 6rdenes del General Ruiz. Y fue decisiva csta batalla, pues en ella se decidi6 de la suerte de la revoluci6n. En tal vi rtud desviarnos del camino y nos di rigfrnos a Enciso. Salimos de Malaga el I? de Marzo, y por una larga bajada desccndimos al rio que divide las dos poblaciones. Herrnoso es el valle que q ueda a los pies de Enciso, lleno de plantaciones y de casitas de campo. En el paso del rio hay una hermosa hacienda y en una de sus casas nos refug iarnos algunos instantes mientras pasaba un chaparr6n que vino sobre nosotros al term inar la bajada. La caballeria era numerosa, compuesta de vecinos de ambos lugares, y era pintoresco el desfile por el puente y luego trepando la subida que lleva a la poblaci6n. -Aqur-nos decian--empez6 el combate, el cual fue crudo en la calle que queda a la entrada del pueblo, la cual qued6 sembrada de cadave res. Poco antes de llegar a la plaza hizo alto la cabalgata y nos desrnon tarnos en la casa designada para ello. La plaza de Enciso, que conocimos luego, es grande y bella. Hayen ella cuatro palrnas de datiles y una pila en medio, ala cual no le falta sino una cosa, que creernos indispensable para una fuente: el agua. Desde el atrio de la iglesia contemplarnos la falda del cerro, fert.il y esplendida, llena de plantios y cabanas. --Alla es Tequia, allf El Pozo-nos decia un estimable vecino sefialaridonos esos herrnosos collados y las casas de campo que blanqueaban entre los verdes cafiaverales y los cer ros azu losos. Enciso es una poblaci6n sirnpatica, y repuesta de los estragos de las revoluciones, volvera a su anti guo bienestar y sera una de las mas impor tantes poblaciones de aquella provincia. La iglesia es grande y en ella estuvo algunas horas el Sr. Delegado confirmando millares de infarrtes. -Este reloj-nos decia Giovannino a la salida, senalandonos el que se veia en 10 alto del campanariotiene 1a ventaja de no necesitar reloje ro ni estar como

92 e1 de Bogota. que frecuentemente sefiala unas ho ras y suena ot ras. Volvirno s a mirarlo y comp rendirnos 10 acertado de su observacion. pues el reloj no era 1'/2'0 sino pintado, Al regresa r a la casa nos dio tam bien ~ilos compane ros de S. E~. un oportuno aviso el fie! cama re ro, Siempre acosturn brabamos preg-untarle en broma antes de acostarnos, en todas las jo rnadas, al ve r la inspeccion q l1e hacia de los lechos y las bucnas noticias que de dim; nos t raia : -l Que hay en p ros pecto, <5bien, que hay en perspectiva? Por la noche se ace reo v nos dijo: -No hav nada en prospect/va. Pero tal noticia no nos desalento, pues ri suefios y alegres salimos a bu scar alojarniento por esas benditas calles, y a poco hallarnos posada en un meson vecino. Llevabarnos afortunadamente nuest ra companera de viaje en el 'T'oli ma, y que una vez fue con nosot ros hasta los confines donde nace el Magdalena: la hamaca, amiga fiel que nos ha salvado muchas veces de pulgas, chinches y alacrancs. ~Jl General Camargo, acostumb rado a carnpafias, tendi6se sobre una mesa bastante dura, v el Sr. Carrasco, probado tambien en estas viciaitudes, recostose sobre los du ros ladr illos. Un momento despues todos dormiamos profundamente, y pasamos una noche deliciosa. Acornpanados por el inteligente cu ra y muchos de sus esfimables par roquianos emprendimos al dia siguiente la marcha para Capitanejo. XXIX A la salida de Enciso hay un largo descenso y luego va Ia r uta por la playa del rio. Lban con nosotros muchos amigcs de Malag-a, IDnciso y Capitancjo, y ocupaba la caballer ia largo t recho del camino. Hay entre estas dos tilt.imas poblaciories un desfiladero peligroso pe ro imponente. Es como se ha d icho del Tequendama: /torrorosa mcutc IJdlo. Va el sendero par la falda de un elevado monte,.y no tiene de ancho sino unos dos metros. A la izquie rda, la roca alta y abrupta; ala derecha, un abisrno de una profundidad vert.ig inosa. Y no es, como entre Onzaga y San

93 '. Joaquin, un precipicio cubierto de arboles y maleza, sino desnudo de vegetacion y que muestra su fondo pavoroso. AHa no se puede medi r con la vista la h6rrida sima, y Sl se sierrte la espe ranza de quedar suspendido, en caso de de r ru mbe, sobre el tronco de un arbol 6 entre las lianas y matorrales. Aqui se vc una pefia calva, de granito, en fuerte declive, y abajo, muy hondo, el rio que revcr be ra y cuyos rumores no alcanzan a subir a nosotros. Quien alli rodara cae ria casi como de una torre, sin que el menor obs taculo 10 detuviese en su caida. Y asi se anda por va rios kil6metros. Es un momento solernnc. Los mas verbososguardan silencio, y las mismas cabalgaduras avanzan con emoci6n. i Cuan segura es la mula para cruzar estes tajos! Va ella como pensativa, con las orejas hacia adelante, mirando el suelo, y son maternaticas sus pisadas. Una que otra vez vuelve la vista hacia el abismo, se da cuenta del riesgo y sigue s u marcha apacible y obedien te. Muchas que serian capaces de dar-nos una corcoveada en terreno plano, tienen aqui completa mansedumbre. EI conuin ipelig ro lasdorna como sucede con muchas gentes.briosas y altaneras. Y tanto es asi que por ahi en algll11otro lugar de Colombia hay una via sernejante en tredosde r rumbaderoe, y la Haman Arnansapotros, pues el mas ind6mito corcel al pasar por esa cirna ernpieza a temblar, y su miso, sin encabritarse, como una oveja, lleva asu jinete al otro extremo. Afortunadamente no venian ese dia bestias cargadas en senti do opues to, 10 cual, cuando sucede, hace mas pelig roso aquel cam ino. Alguno manifest6 a Monsenor que serfa prudente recorrer a pie ese pedazo del camino, pero el, que no conoce cl miedo, sigui6 sereno en su brid6n. Ante tal ejernplo, iquicn iba a pensa r en desmontarse! y el mismo G-iovannino, que se apeaba en los males pasos, sigui6 imperturbable det ras de todos en su machito rucio, bien que un poco palido y sin pronunciar palabra, Soplaba un viento fuertc y todos llevabarnos la mano sobre el sombrero para evitar que se volara al abisrno. Al otro lado de estc, alla en el opuesto baluarte, formado tam bien de paredes de basal to, se veia una que otra sementera en pedazos dc tierra vegetal, y alguna choza. En ellas se asomaban los habitantes a ver a Mon sefto r a t raves de los prec ipicio».

94 - 89- Vimos en alta roea a una rn ujer ar rod illada, y S. E. le envio la bendicion por sobre la inrnensa hondonada. En el prente de la quebrada de Vera es pe raban a Monsefior el hondadoso par roco de Capitanejo y g-ran ruirne ro de vecinus: y luego t repamos a una alta cuesta, desde la cual se obse rva grandioso panorama. El CliiemlOc/W deja vc r a un laclo un pedazo de S1I cu rso: parece que ha apar tado las mon tanas para S1l paso, y de spucs de lamer las vegas de Capitanejo co r re,i csconcle rse entre las grandes moles de la cordillera, como huscando cl miste r io y el olvido. Y allzi a l f ren te vi mos lueg'o al pueblo I,:~ng-alanado y risueno. Los ji notcs aumcntabau por momentos, y al bajar al valle fue aquello inmcrisa cabalgata. Y par doquiera b rotaba la multitud de,1 pie, <lue victoreaba as. K La ruta estaba llena de a rcos, muchos de los cuales tenian d.it.iles, pirtas, platanos y ot ras f rutas. Habia va rios d.: hojas de nacurna, la que da la paja para hace r sombreros. Era d if icil eaminar entre aquella muchedurnbre. A la entrada el en tusiasmo fue indescriptiblc, y u n momentc hixo alto la com itiva para oir el d iscu r'so de bienvenida <pie le dirig-i() a Monsenor en nombre de Capitanejo uno de sus esti mables ciudadanos. Dos dins pcr manecimos en es te lug-ar hospedados en una comoda casa de la plaza y atenclidos finamcnte por e1 estimable cu ra y va rios vccinos, qu iencs nos proporcionaron al li ho ras de placido solaz. La si tur.cion de Capitanejo es ad mi rable: a or-illas del rio, en fertil cornarca. con bastaute poblacion y di sting u ida-. Iarn ilias. T'iene sin embargo una plaga que reina entre la gente del pueblo: el coto. Sahido es <lue esta plaga azota ot ras reg ioncs de Colom bia, y que se ci rcu nsc r ibc a clctcr minados lug-ares, 10 cual ha hecho at r ibu ir su origen a las aguas que en el los beben: pero :,:>arece que el hocio ha disrninuido en nuestro pais de un sig'lo a es.ta parte. Quizas la rn ejor al i- rnentacion, ctro genero de vida havan ohrado en que tienda ;( desapa rece r es te flag-elo; (~sea e n realidad el yodo, e1 cafe U ot ras su-ctanc.ias las q ue hag-an 1a cu racion. Ademas el bocio es hov cu rable cornu se ha vis to en muchos c.1s0s. ~ Po rq ucpues no se abrc en Capitanejo una c.irnpana contra es ta en fc rrnedad, que deforma las personas y clegencra la raza? Nos hemos

95 -90- preocupado aqui mucho y con razdn de la elefancia, pero hay ot ros azotes que igualmente debieran combati rse, como la fiebre amarilla, el carate v el coto. Sabe hoy el mundo que los amer icanos acabaron con la fiebre amarilla en La Habana, debido a la higiene y al aseo, y que con ella tam bien han concluido los franceses en la colonia de Dakar v los brasileros en s u bella capital. Yaqui con tinuarnos irnpas ibles viendo al v6mito negro tronchar preciosas exis tencias en las playas del Mag:dalena, sin abri r contra cl energ-ica cruzada, y nos contentamos con esc ribi r sen tidas necrologias. Buscamos las d rogas cuando hay un enfermo, pero poco 6 nada se hace en el senti do de la profilaxis. Al coto debe cornbati rsele igualmente hasta extirpar tal azote. Busquense sus causas y sus remedios y sup rirnanse las unas y apliquense los otros. Es t r-iste ver una poblaci6n tan sirnpatica como Capitanejo invadida por tan repugnante enfermedad. xxx Espectaculo singular el paso del rio para tornar el camino de Soata. Antes habia alii solido puente, pero fue destruido por una gran creciente y por el abandono en que estuvo en dias de revoluci6n, y hoy es preciso atravesarlo en tarabita. A pie fueron Monsenor y sus compafieros de la plaza a la ribera, donde esta esa maroma, la cual dista solamente un as seis u ocho cuadras. A pesar de ser bien de manana fue grande la muchedumbre que sali6 a despedi rse de Monsenor. Detras de l iba un sequito inrnenso, y en todas las casas de la via se apinaban sus habitantes 6 se veian trepados sobre las penas 0 subidos en las ce rcas y en los arboles. Al llegar al rio la mulitud se extendi6 por to do 10 largo de la playa, y alli el General Ruiz lc di rigi6 a S. E. algunas palabras de despedida que conmovieron a todos hondamente y que hicieron asomar lagrimas en mu-. chas pupilas. Poetico aquel sitio: en la orilla izquierda el est ribo, de pie sobre un hondo remolino; y el dellado de Capitanejo, caido entre el agua y azotado por las olas, Un puente derruido es como tantas grandezas que

96 - 91- hemos contem plado en estes parses en dias de revuelta.: org ullosas v c.ominadoras vieron con indiferencia pasa r las ondas por debajo, v luego se ven confundidas entre estas a causa de alg-u-ntemporal, y ju~~:tletes {> 111- dibrio de las m isrnas li nfas que antes pasauan lam iendo sus pies. I... a ta rabi ta estaba bien segura, COil alamb res y cables nlh:.'vos, pe ro siempre emociona el paso de tan ta gente, y de gl~nte de peso, como decia alg-uno de los que alli se ha.llaban. Ademtis de Monsenor y cl padre Basig'nana habia ahi sci s sacerdotes: los Dr es. Monsalve, ci ra de Tequia; Florez, de Capitanejo; Garcia, del Cerrito; Prada, de Soata: Torres, de Covarachia. y Zaf ra, de Malaga. Y f recuentes han sido las desg racias con este medio de Iocomocion en aquel si tio. Pocos dias antes reven ta ron se las cue rdas (j volt.eose la canastilla, v se ahogaron unas pobres mu-..' Jeres. -El ot ro dia se cava tarn hien un ar rie ro v alcanz6 a matarse--le decia" alii un cotudo,i. Gio~annino, que le preguntaha sobre las garantias de a.que1 paso par los ai res, desconocido pa ra el. Subio Monsenor a la oroya con t res corn pafie ros, y en pecos mementos llegaron al otro lado, don de estaban muchr.s veci nos del pueblo de Soata encabezados por su par roco. F'ue en tonces un cu r ioso cont raste: en la playa de Capitanejo se ag-itahan paftuelos dan do el adios v se oia el tr istc sollozo de todo un pueblo, y del lado de Soata estallaron los cohetes y una banda de miisica en tonci el himno nacional. AHa las congoja~ de la partida; aq ui los reg-ocijos de bienvenida. La barquilla seguia Ilevando }lor el aire y sob re las ondas a los viaje ros, de cuat ro en cuat ro, Y resonaban l~lvoccrloy los aplallsos a cada r erne sa. Sombreros y ruanas se agitaban en medio del rio para decir adios a los amigo» de Ca pi tancjo () para saludar a las ca- los de la opues ta or illa. En esta estal>al1 listas balle ria-, para emprender la jor nada. Antes de montar subio Monsefior a 10 alto del est ribo del puente que domina los campos del otro lado, para con tern pla r aq ucl pai saje y dar Sll hendicion ;i los veci nos de Capitanejo. 'T'odos se pu s ie ron de rodillas en aquella playa: hombres, mlljeres y ninos, r S. E., en ese promontorio, levarito su diest ra e

97 - 92- hizo la cruz en el aire; v centenares de man os se santiguaron lentamente S'obre la otra ribera, en medio de un silencio interrumpido tan solo por el rumor de las aguas. Dimas una ultima mi rada a Capitanejo, euya campanar io se asomaba par sabre los arboles de la veg-a, y picarnos las mul itas hacia las tierras de Tundama. De vital importancia es la con st.ruccidn del puente en Capitanejo: por al li es la via que comunica ados importantes cornn.rcas, y no se ria ni dihcil Hi costosa la obra. MonseRor manifesto ;i los vecinos de una y ot ra poblacicn que ayudarfa eficazmente a la em presa, y dio alg-unos pasos para que se organizase una compafiia que se encargara de ella. EI alrn ue rzo fue en la hacienda de Tipacoquc, bella tinea de la familia Calderon. Alli hay toda una poblacion, pues los ar rendatar-ios son nume rosos y forman muchos de ellos un caser io ce rca de la casa solariega. Forrnados estaban todos a las pue r tas de esta, con baride rolas blancas, en dos filas, por en medio de las cuales paso Monsefior con sus acompanantes. Varios de aquellos hatallones de campesinos entonaron luego algunos him nos al frente de la casa. jhermosa esa mansion! Se ve en toda ella el con/art y cl buen gusto, y ;i su lado hay un huerto delicioso, con todas las frutas de la zona. F'ue en su vecindad dondc el dulce poeta 'T'em'istocles Tejada paso sus dias e hizo sus mejores estrofas. A este lugar vinie ron varias vecinos de Saata cornisionados para presentar a Monsenor el saluda de hienvenida.. Despues de habe r sido atendidos al lf can toda g-alante ria tornamos la ruta de Soata. Grande era - el errtusiasrno en todas las casas del camino: dondequiera ar cos de flores, co r ti nas y peq ueftos alta res. Hahia entre los pr imeros algunos de los cuales pendian allado de f rutas paq uctes de alfondoques, a los cuales hicieron sin duda los dcbidos honores alg-unos de los cabalgantes, pues Giovannino, que s iernp re llevaba la retaguardia, se q ucjaba de no habe r vista tales manjares cuando el paso por debajo de aquellos areos. joh, cuan pinto resca fuc la vista de Soata cuando divisamos la poblaci6n alla a 10 lejos, en medio de semente ras y circundada de altos cerros! Las escuelas estaban con bandera desplegada en las colinas de la entrada, y parecian un ejercito en orden de batalla

98 pronto,1 defender la eiudad; y el pueblo todo par ahi en las casas, en las dehesas, en las lomas, en los recodos del camino. Pe ro aq ucllas milicias no cstaban para ccr rar el paso y defender sus lares, sino tocando el himno d e la paz, con g-uirnaldas de oliva!' mirto y forrnadas para recibi r ;i un ilus t re hues pcd. Los cohe-res sc elevaban en el ai rc v hacian ceo en las concavidades de la cordillera. Las carn panas echadas a vuelo lanzaban sus notas aleg res par toda la campina. Es inte re sante la vista de Soata des de el camino. En muchas poblaciones que vc de lejos cl viaje ro se divisan tan s(,lo las tor res y los tejados, pe ro en esta se d is ti ng'ucn claramente sus detalles: la plaza, los halcones de las casas, las tiendas, los t ran setiute s. De g-ran distancia se puede dar el saludo de llegada Ii de par tida al caminante, de sde el portal () la ventana de una habi tacicin. AI co ronar la ultima su hida hahia lin a reo de tlores, y al li fue saludado Mon scfio r con he r mosas palabras por el o rado r encargado de cllo. Des pues fue el desfile pol' las calles de Soat.i lujosarucnte cm pavesadas hasta l1eg-ar a la plaza, donde el Dr. Vargas Ie dirigi6 eloeuente d iscu r so. Atcndidos por el bondadoso par roco y los veci nos de es te lug-at pasaron Mon sefio r y sus com pancros en Soata dos dia.s, en los cuales conoc ie ron el hospital y las escuelas. La igolesia,' en coust.ruccidn, cs grande y bella y sera al te r minar se una de las mejo rcs de estc DepartamelLo. XXXI De Soata f u imos a Su sacon, <pte es jo rnada de pocas legua~,. El dig-no cu ra eon gran mime ro de j inetes vino a recibi r a Monscno r al camino, y el pueblo en rna sa 10 saludo con f rcruit ica aleg-rla a la lll'g-acla. Risuefio es ague! pueblo de Sllsaeon con sus quebradas, sus cer ros y sus plant.ios. 1"~1cl ima es agradable y tiene un vecindar io laborioso r sano. All! pasarnos la neche, y al sig uientc dia ern p reud imos cl viaje hacia Belen, lugar donde volviarnos ;i tomar el rnisrno camino que t ransi tarnos ;i la ida. Pero pa ra llegar-ri Belcn hay que at ravesar un n uevo pa ramo, pa rarno in rnenso que se cruza en muchas ho-

99 --94- ras y don de si la best.ia flaquea puede so rprendernos la noche. Primoroso es el camino a1 sali r de Susac6n. Va por entre la montana y sob re la orilla del rio; y en las horas de 1<1 manana se sentia alli un aire pur i- simo y se filt raba la Iuz al t raves del follaje. Pasamos un hello puente y seguimos trepando hacia las regiones del frio. Entonces mirando atras volvi mos a ve r el imponente nevado en todo su esplendor. Detuvirnonos va.rias veces en los repechos a. conternplar el gigante. Era una mesa de plata por encima de todos los montes, que parecian a su lado una tropa de pigmcos. El sol reverberaba sobre la argentada cima, y era impotente para derretir su nieve. [Oh majestuoso Gaican, an ciano colosal que soh resales en medio de la cordillera y dominas aquella opulenta comarca, vela sin cesar por los destines de esos nobles pueblos, ctiida de sus fue ros y envia sobre ellos auras de bienestar v concordia! Varios vecinos de Susacrin nos acompanaron hasta una casa del paramo donde nos detuvimos a almorzar. Ellos habian llevado las provisiones necesar ias, y ahf frente al rtis tico alhergue nos sentarnos en piedras y troncos para tomar la refacci6n. Soplabael cierzo y volaban rozando el suelo gasas de neblina; las bes tias ti ritaban y ar rojaban por Ia nar iz un vaho blanco, Por alla a la derecha se vie ron unos riscos donde moran los buit res. cuando el sol log ro despejar la niebla. Todo estaba como aterido: los hombres, los animales y la naturaleza. Los arboles son alli raquiticos, con los debiles t roncos cubiertos de musgo. Y el agua parece estancada. Es transparente como el cr istal mas puro, pero no se da uno cuenta de la di reccirin de su corriente. Como que ella vacila en esas alturas sobre el camino que ha de tomar y esta indecisa entre una y otra hoya hid rog rafica. Por ese yermo seguimos trotando hasta la tarde, en que empezarnos el descenso hacia Belen. En esta hoya va el rio Jaboncro, agitado y cor rentoso. Peligrosos son algunos de los puentes que se hallan en cste camino, pues no tienen barandilla y facil es que una bes tia de si lla <> de carga se vaya al abismo, sobre todo en tiempo de lluvia cuando esta el piso res baloso, En estas aglomeraciones de caballos virnos varias veces algunos a -punto de caer al vacio con su jinete A la entrada de Belen principalmente hay un

100 - 95- puentecito angosto, muy alto, y de un lado cae el chor ro de un molino. AIH las best.ius se aau stan con el golpe del agua al pasar Ill. angosta via y retroceden bacia el ot ro costado. Milag rosamente escape uno de los cornpane ros de Monsefior de rodar al fondo, pues alcanzo s u ca ba lle ria a tocar el borde del puente al cncab rit ar-se con e1 ruido del salto. Quicnes iban at ras lanzaron un grito de ang us'tia al ve r tan inminente peligro.., Una neche permanecimos en Belen, donde tuvimos el gustc de ver nuevarnerrte al Dr. Pineda y a muchos vecinos del lugar. Al dia sig'uiente nos det.uvi mos algunas horas en Ce rinza, simpatico pueblo que a Ill. ida vimos tan solo de paso por no habernos all! desmontado. Ahora pudirnos conocer!o y relacionarnos con var ios apreciahles vecinos. En la casa del Sr. cu ra fuirnos galantemente atenddos por este durante el rato que pennanecimos en este lugar. Tiene Cer inza una bella iglesia, buena casa municipal y dos cemente r ios. Su clima es bonancible y la si tuacion m uy pinto resca. Cuando pasamos en Enero, camino de la frontera, no hubo ocasi6n sino de ve r las multitudes que venian de los campos a. rendir homenaje a S. E. Ahora al reg reso, aunque solo reposam08 alli POC08 mementos, grato nos Iue ve r que aurique peq uefio es importante este Municipio y moran en el distinguidas familias. El camino de los dias siguientes fue por los mismos lug-ares que ya habiamos visitado, sin que hubiese ningun incidente notable. Volvirnos aver la gentil Santa Rosa, donde tomarnos coche despues de dos meses de andar a caballo; los hellos campos de Duitarna y Paipa, exuberantes de vegetaci()o, con hermosas casas y ricas dehesas: la venerable ciudad de los Zaques, y Ven taquernada, Hatoviejo y Choconta, lugares todos ellos en los cuales fueron recibidos Monsefior y sus companeros con toda esplendidez. En es ta ultima poblacion tornarnos scnda di st.inta de la que t ransi tarnos a la ida. Kl Ferracarril del Norte acaba.ba de llegar a Nemoc6n; al li habia en csa sernana resonado por primera vez el grito civili zador de la locornotora, " con cste motivo fue par ese lugar el regreso. El par roco de Nernoccin nos atendi6 g-alantemente. y en ~;U casa pe rrnanecimos hasta la Ile-

101 - 96- gada del tren, en el eual fueron a reeibir a S. E. los Sres. Ministros de Relaciones Exteriores y de Iustruccion Publica, el inteligente Secretario del Sr. Delegado, Monsefior Cortessi, que es en Bogota de todos querido y respetado, y muchos amigos del representantc de S. S. y de sus compafi.eros. [Cuan grato estrechar a los parientes y relacionados t ras de un viaje por lejanas regiones, a traves de cordilleras y rios, de valles ardientes y de gelidos montes, de eriales tristes y de jocundos oasis, dcspues de ver ciudades y campos yaldeas, y tratar tantas y tantas gentes de variados dimas y de todas las clases sociales! Dulce es llegar al terrufio cargados de dulces recuerdos, referi r en el hogar las gratas emociones del viaje y citar en cl con ca rifio y gratitud los nornb res del ilustre viajero que nos honr6 llevandonos a su lado, de los buenos cornpafieros de aquella excursion y de tantos amigos que nos abrumaron can sus atenciones en este viaje de tan hondos e inolvidables recuerdos. _._~--

102 FE DE EHRATAS 1<:11 var ios capft ulos aparcce el nornbrv de Giovannino sin la doble eric. Confiamos en que cl simpat ico carnarcro no se disgustarzi por esto. y conservara el mismo buen humor que LIYO en to do el viaje hasta en las f recucntes ca idas de su rnulita. AI1in del capitulo seg-undo se dice: <Iban en el primer coche el Sr. Dclcgado, el Sr. Obispo, cl Gobc rnado r interino y nosot ros.> l<~n estes viajes en que hay que lid iar con rnonturas y zamar ros y cr uza r par amos r rfos, se ol vid a hasta Ia g ramatica, y mas cuando no era mucha la I!Ue sabiamos antes de la par tid a. Corrija c1 lector esc ve rbo segim su leal saber y cn tc nd e r. En la pagina 4'J se habla ('11 primera persona del singulac Ale dicci., he zisto, ctc., y a~l apar cccra sin d uda poi' ahi en ot ras p{ll~inas. Pvovino esto de que las cor rcspondcncias enviadas a los pe riodicos c ran escr itas unas en singular J otras en plural y varias en t e rce ra pc rsona, y al re cop ila r- se en est e Iolle to que daron algunas sin In. debida unif'ormidad. Constc cn todo casu que no cu lparnos de los ye rros al cajista, como cs uso y cost u rnb r e, sino que Homos responsables de la mayor parte de cllos. Pucd e que en otra edicion logremos hace rla mas cor rcctu y completar la con muchos nombr es y episod ios que he rnos not ado que faltan en estas pag-inas.

103 APENDIC~J~~ 7

104 1>ECRETOS Y PHO(iHAMAS COXSIDEl<:\XJ)O : Que e) t<;x,'m'j. Sr. D. F'rancisco Rag-ulll'si, Arzobispo de Mira, Dt.'!eg-adu Apostolico d el Sumo Pontffice S. S. Pio x..jefe dvl :)r\w Catolico, d csd e SlI llegada al pais. "11 desern pert<> <!e' aug usto cargo que se le confia ra ante 1<1 Nacion, ha dado pr m-bas <It- su aquilatadu,','\0 e\"ang(.li,~o y <1..] e nt rajiable a mor que p rofesa a Ius colombianos :, Oue.I EXI:1l10, Sr. Rag-onesi. mnln ernincnte en virtud y cie ncia. int crp rot ando sa hia v f.lmente el p rcccpto d ivino d.,1//1((0.' los 111/0.' Ii ((I.' ' ha cout r ibuido CUll tir meza incont rastablv uje no a mundanas p r cocupaciones y con la autor idarl moral ell' '1l1e.sta invcstido, a implantar en el pals ei rvinado <k la pal. y la concordia, q u e trinto han men.ster los coloru l-iauos para hace r pat r ia arnarla." amahle, s,'gtm 1'1 lema <lei Je f. su p re rno li,- la Nac ion : QUt' 1'1 1';XCllW. SL Ragonesi. g'uiado POI' vir t ud impele n t e bacia todo hie n, sin apa rta rs. de xu mision de PI'fncip" de la Iglesia,.:o!aOOI';l complacido en Ja m a rc ha p rogr c- siva de los pueblos, I'll ftlt'l"l.ij d e 101a.rmonia establccida en 101 c rcac ion POI' e l autor de la Nat n raleza :." por eljo misrno ha q ue rido hacer coincid ir su visita {lias Dit',cesis del Norte, con la l' xposici<)l1 ind ust rial y al'tfstica a '1tit' Santander sc ap resta pa r a hou ra r la memoria de una de las mal'; pu ras &!lol'ias d e la Re('tthlica:

105 La Que est a para llegar al Departamento tan ilust rv buesped. DECRETA: La Gober nacion de Santander. en su propio nomb re y en el del pueblo que representa, tiene en rnuy alto honor la visita <jue le haee a1 Departamento el Exemo. Sr. Delegado Apostolico; rinde homenaje de veneraci6n y respeto a. 1a augusta Potestad que dignarnente rep resenta, y tributa al Excmo. Sr. Ragonesi la ad rni racion y aprecio a que 10 hacen acreedor sus eminentes vir-tudes. Por las autoridades civiles y militares del Departamento se haran al Excrno. Sr. Delegado Apostolico los honores correspondientes a la dignidad de que esta investido. Un ej ernplar aut6grafo de este Decreto le sera p resentado al Excrno. Sr. Delegado por el personal de la Gohel'-., nacion. l<~xpedido en Bucaramanga el14 de I<~nero de ALEJANDROPENA S.-J<~l Secretario general. FHANCISCO SORZANO-E1 Secretario de Hacienda, J. M. PHILLIP:" -I<~l Director de Instruccion -Publica. Josie M. GARCiA H. PROGRAMA del gran concierto que se dara en el local de La Asamblea en la noche del jueves 24 del presente, dedica.do por el Gobiernodel Departamento al Excmo. Sr. Delegado Apost6lico y a. beneficia de b Socied ad de San Vicente de Paul. PRIMER A PARTE I-:Shausj>ie1. Obertura por la or-questa. II --Discul so POI" el Sr. Dr. D. Juan Sarmiento H. III --La kfuta di Portia'. Divertimento. Ejecutado en violin. piano y violoncelo por las Sr itas. Lucrecia Alvarez s Julia Aguilera y el Sr. EugenioAndrade,. IV-Farfid/a. Valse. Cantado por 1a Sra. D<l-Matilde J. de Sorzano y acornpaiiada en el piano poria Srita. Ernestina Jimenez V -r [area del Destitl(}. Piano a cuatro manes por la Sra. D<l-Matilde J. de Sorzano, r la Sri tao Ernestina Jimcnez.. VI-;l1"ora!l}(l. Intermceeo por la or-questa. ('hr. Harh. c: /l1uliicr. R. (r e//i. JI. (;crimele. R. Rosales.

106 p los Raul ]01 - SE(~l'NnA PARlE VII. II/ill.} ell- II/aro. Prelud io del t v r cv r acto, po!" la orq uesta. V III -.Vor!lrbflel/u. Poesia d eclamada por su autor el SI'.]).Aure1io~1artfnez~L IX --Par/a. Valse cantaooporlasrita. Isalwl Villarreal, acornpaiiada de piano y I' iolin ar Sres, Mart inez y ;\ti~l1el Santos. X - (('fie/ok /llili"ill/(l. Fanta~f;l para piano por }: Sra. D;~ Mat ildv J. <11' So r- zan\)... X I. II/dal/Ic y illlr.~rlj. Can to po r la Sr a. IP.Mal"-a Luisa R. de Pu vana, acornpaiiada por los Sres, Ratl1' Mn rt incz y \fig-uel Santos X II. Lnria (//'!~(/m1j}('j moor. Duo d e violin y piano c je cutado poi' Jos Sres. Xli- J.:'ue1 Santos yraul Ma rt irie«" XIII,III/OIII'('//.'r. '-a]:..w PO]' la o ru u est«. I... irdili. Hell/ni. ( II. de Heriol. R. llo',!!rr. lid acto,h' hoi.ten aje COil 41\" los cat{,jjcos,ip lu ci ud ad y las her- 1Il;l1H1ades cele'l1'antn In vis it a del Excmo. SL l ). Francisco Ragolll'si como Representante,1. la Santa S.lle "11 Co1omhia. el d ia, de mafiana., la~,los,k );( t a rcle "11 e] t.mplo pu r roq uia l,k San I... n urr-u no. l--ojwrtunl po r Ia or questa. Jl. De d ic ator ia <1,,1aet() poi' uno d,' Ius sare rdotes prese ntr-s, III Valses poi' la or q uesta. IY Discu rs» dl'1 Sr. Dr. Daniel FOl't'ro Reyes it nomhrl' d c la par roq u ia de San Lau rvano \' de las con- J.:'I'e~;aciones de cat(,licos <II' ella. como -son la venerable Ur-d cn T'e rce ra <IeSan F'rancisco;el Apostolado de la ()raci,:ln, la Ad o ruc ion Pvr-pet ua, Sociedad.Y Curt «dl' San Jose. d e l P"!'Jwtuo Socorro, d el Car- 1111"1. las :'\Il'rcedl's, ti" Ma rja Au x iliador-a, de Hija!oi <I,~Marfa. tit' Jesus :\"azarl'!1u -" Cof rad ia de Animas, V - Pi,'1.as musicales por la Ol''lu,'sta, \'J.- Disc u rso del 81'. (;"I1<'1'a] Elisl'o Vlar tfncz como rep rvse nt an te de la pa r roqu ia <1(' la Sagrada Familia y,it- las he rrnaud ad cs 11(' la Santa Cruz. de la Adora-, j(;n Pc-rpet ua. de la SaJ.:'ra<la Familia, de Hrjas tie] In rn ncu la.lo Co1'a/"ill,!t- :\Iari"a y dl' San Juan Ncpomucvno. B~CO DE LA RffU13UCA.IBUGlE:: luis AN.;JLL ARANGO C1- T ALOGAClQN

107 - 102 VII--Polka par la or q uesta. VIII- -Discul'so par el joven Jesus Reyes a nornbre de la Sociedad Cateq uistica y de San Luis Gonzaga. IX-La bend icion apostolica por el Exc mo, Sr. De lejrado. X--Valses finales pal' la Banda. Bucaramanza, l<:ne1'o 21 de DJi:CRwro NUMJi:RO 2 /'.,'1 Alcalde 11ltwiripal de /lampiol/rl. f<:n 1I~ ell.' sus facultades leg-ales. y CONSIDfo:HANDO: 1<'>Que hay aviso de que proximamente sale de la capital del Departamento para esta ciudad el Representante <1(' la Santa Sedc, Excmo. Sr. Dr. D. Francisco Ragonesi, dignisimo Arzobispo de Mira y Delegado apostrilico e n Colombia; 29 Que todos los habitunt es de Ja ciudad, en nuest ro caracter de catolicos y de rniern bros de una sor ied ad culta, estamos en 1.'1 deber de reoibi r lo de una manc ra que cor respanda a la alta dig nidad de que esta invest ido : 39 Que esta visi ta, unica en nuestro»ue lo natal. const i- tuye un singular.y Fausto acontecimiento y lin favor de q ue no disfrutan todos los pueblos del Departamento. poi' 10 cual d ebe mos corr-esponde r a est a g"1'acia Ill.' u n modo especial, DECRJo:T.\ : Art. Ie) I<:xdtas\' it. todos los habltantes d la ciudad para que concur ran it. la recepcion de tan ilust re huesped, manifestando de est a manera el jubilo y viva cornplac e nc ia que como verdaderos catolicos cxpe r irue ntan <II recibir- al Representante de la Santa Sed c. Art, 29 1'':1dfa de la recepcion apar ece rau aclor nados los fr entes de las casas con cortinas, guirnaldas \' bander-as blancas. En las oficinas publicas, en las casas de ia calle real y de la plaza publica se izara el pabellon nacional. POI' la noche habra ilurninacion general. Art. 39 Los emple arlos mu nicipales, en cuer po colcctivo, visitaran al dignfsimo SI'. Delegado apostolico ei d Ia sig uiente de BU llegarla, it. la hora que oport una rnent e Se illdicara. Consultese con la Prefectura de la Provincia para su publicae ion. Expedido en Pamplona. a veint it res de Ene ro de mil novecientos siet e. ANTONIO A. Vrr.r..uIIZAI< Lui" /llbf'rto Ralllfro_. Sec re tar io.

108 a CXpt'ps; l, 103 Ht'ptibho, lit' (1,loJll!Jia- j )epllrlll tucuto de...,(ljilllllde)' 1'!'I'- {('dura til" Iii!')"o:';!lr;a [JlIlllj>lo!lll. 1~'lItro 2-1- de 11)(1;, Ap robarlo. l'.\t<i.<ls PEI-?ALTA La j1tlllll ol:~'tli.'''?ado)'li -" ri ({ub dd «(JIII,TrIO tiene n el hone-r de invitar,i ustc d a la ve lad a L~OIl q uc a nornb re d,- la socicdud pamploriesa :-;eobse q uia r.i al Ilrno, S,'. Delegado Apostolic«, Monseiior F'rancisco Ragonesi, la 110- che del 3 de los cor r ientes. en el local d el Club. Pamplona, F'eb re r» 1' ) de 1'Hli. t rad Sc d arti pr lr.clplo a la vel ada preci samente a las 1:\_ \<;sta tarjeta deberri,,,,,- pt'!'senta,la por liskd en la pue rt a de en, a 1. lo loca de la velad a lirico lit era ri a que.st' voritie a.rri esta tll.l<'ih-;i las ~ p. 111.,'n el local dt' Ia As am hlr-a. I -Sinfonia,Id.~-;orlaJll, A, \'illalobos, Ilv-Discurso del Sr. Dr. Manuel Enrique Pu vana. [II --Poesfa, l!c)'oiil({ parllui/ PO('}}/ll, Pacho Valencia. Hecitada por la Sr ita. IW Sofia Peralta. IV--.t,.;a de 1,,'/ jural/toi/o. (;altamhide. Cantada COil acompaiiarn icntu de piano.\' violf'n POl' las Sritas, Rosalina Mart inez. I<:ft>na :\-Iutis. TlI]a Arenas. Julia Sarmiento v f<:rnestina Var gas. Y -- EduCI,rilJI/ ~, Il/~-;rllr, Confvr e nc ia clir tad a por el Sr. D, Jose Marla Carda H, V'l-r--Valses.,'llIdl'pof(!rllo (f.' T. ('arn-no. Por Ia Banda del Depar tam cuto. VII-- -/.':>t ",til.' Poema de I<:nrique Alva rez Henao, Recita- (10 POI' el Sr. Dr. Greg-orio Consueg ra. VIII - Ddo.lc III. I/rirau«. Caballe-ro. Cantado por las ya ci tadus senoritas. con acompaiiarnie nto d e violin _,- piano. IV-.Voc!td){(cl/f', Poesia recitad a po r SlI au tor, Sr. Au relio Mart inez Mutis tl ). X-:\lal'\:ha rnilitar alemana: j'i'd rf fa f}(fllt!e/'ll. (1) No habiemlo pod ido el ~I', :\la.rtfnez Mut is I>OJ' un g rave quebr anto de sa.lud cumpll r el uurne ro que le cor respondfn en el concicrto anterior. resolvlo tom a r parte en est a \"I'lada para desva nccer ell el pu bl ico cua lquie ra m a la impn si(>ll.

109 PROGRAMA de la "dada que el Club del Comercio y la Junta Organizadora de Recepci6n dedican. en nombr de 1<1. sociedad pamplonesa, al ilustre Deleg'ado de la Santa ~ede en Colombia, Monsefior Francisco Rag-onesi. PRI:I1ERA PAI<TE I-!ntroducciou. Himno nacional por la Banda i/nio», Il---ilhisica, por la Banda. III- Discurso de apertura y dedicatoria dl' la velad a, por el Sr. Dr. Leopoldo Castellanos. IV <Fansto, Fantasia para piano (Levbach ), por la Srita. Lucrecia La Rotta. V J Due Foscari. Duo conce r tant e para piano y violin (Ketterer y Hermann). VI-- Fantasia de fl Troratore (S. Alassio), por la Srita. Concepcion Soto F. VII--.1 iliollsciior Raj((}ll(,~/. POL'S1<l por el Sr. Clemente M. Rlanco G. VIII--.lrr ell del (de J<:mil Waldteufel ), por las Sritas. Rosalhina y Guillermina Blanco. IX La (;azza Ladra. Fantasia brillante para violfn y piano. (Vogel y Lefort). X-Romallza. Canto por la Srita. Herminia Villamizar P. XI--.l toi. Valse para piano a cuat ro manos (Wald teu- Icl ), por la Srita. Lucrecia La Rotta v el Sr. Luis David Villarnizar. - XII---Discurso de clausura de la velad a, por el Sr. Dr. F'r-uctuoso V. Calderon. XIII- '. XIV--Musica POI' la Handa {'U/(JJI. Pamplona, Febre ro ~ de 1'lm. PRO(~RAMA para 1a recepcion del Kxcrno. Sr. D. Fr-ancisco }{a.gont "i. Enviado Extraordinario y Detcg ado de l a Santa Sede en Colombia. J>iA.~o A las 10 a, m. sald ra la comision cornpuestu del muy Ilust re Canonigo 'T'esor e ro de la Santa Iglesia Cated ral, PresbHero Dr. D. Joaquin Crib e V. y los Sres. Alcalde D. Antonio V'illarniza r. D. Belisario Matos, Dr. Isidore Gue rr-c-

110 10:; roo Miguel He r nanclez., Dr. Leopoldo Caste llanos, Jose A. Canal, Rafael Marfa Sabino, Francisco Blanco." Dr. Fr uctuoso Calderon. y 10 cond uciran it la capit al de la Diocesis,'n nurn b re :1,,1Il mo, SI'. Obispo y del V t'i1l'l"ilbk Capitulo. II t.\,\ 1 1- A las h a. Ill. s,' iz,li'{m en torl as las,'asas pa r t ic u la rv-s d e la poblacion band e ras blancas con los colon's pontificios. amarillo ~ blanco.." el pabellon nacioual en torlas las oficinus publicus. St' ador na rau con f'estoncs, cor t inas, coronas y haud e ras tod as las pue rt as, ve nt auas y halcom-s po r donde ha dl' pas II' la augusta IH'\'sona d,' Mons.iior RagOlwfii.." s,' colocaran los arc()l-\tl'illllfaks (It- 'I,i(' se t ra tn vn "lllumel'04 1l,.J f{mlll'lillie ('ami/ro. II-,\ las 12 rn. el rvp iq ue general (k campanal-\ ser{, l'! aviso pa ra q uv todos los catlllicos que puedan hacer lo rnonten {I caballo y salgan a l,'ncllentro d e l ilust re viaje ro.." al se r lanzados al cspac io 101-\ p rirne ros cohe tones en f<~1rosal toua la ciuda.lanfa se poih\1-f!.n m a rvha hast a.1 molino d e l ~r. D. FI'ancisco V'illa m iza r. III Al s,'r d ivisad» <ksd,' "I a rc«,1<' [:«F,.. pcnljl,a Monsviior Ragonesi. la Banda d,' ruusica toca ra cl himno nacion al v la Iu e rza m ilit ar dar(t los::n canonazos /1 sa lvas (t q ue t ie ne lkrt'cho corno Minist ro Ph-nipote nciar io de la Santa Sed e : al Ilega r (, l'st,' a1',o s,'r{t rvc ihiclo poi' la cor poracion muuic ipal. q u it- n It- ha ra una corta salut ac ion en nornbrv <It' la c iu d ad v <1,,1 M u nic ipio : la Banda sv ad elantara hast a,:1arco de la /)lllull'!a,')'(/11 Fraurisro, dond e toeara nuevamcntv. 1 him no nac ioual al St r rcc ib ido Monseiior Ragcnesi POI' vl Pr'cf.(lo <I. la Pvoviu c ia v tod os los e mplcu- (los ;It'! De par-t a me nt o. All i t a mb ien St' k har{t ot r a cor t a sallllari/lll en nombrv d cl l),-partan1l:nto, I\'---Se:.:-uil';t la,'abal:.:-ata poria calle Ht'al hasta la esq uiua de la Reclusion. doll<le sera recibido pol' los e rn plca- <los nacionales v xalu d atlo COil los houor es ru ilitarvs co r respon d icn tes a sll alto raruro. pur la fue rza y (;,'n(lal'lllerla nac.ionales, />(,J'IJ sill,'alz'lis IIi (1JIIf'tlJl/rs. mauifcstacionvs que suspe nde ran desd. HI 717ia}//ar. San Fnlllcisl O. e n atellcit)l1 ulestado de salu d <1,0 11l1,'~tro amado Pr clado Diocvsano. V, AI llvg ar ;l la,'squina d,' HIO/ir;o tod a la cabalg-at a, con c xce pcion <I" los ecksiastictls. se separar,l:i let plaza v Ior ma ra en Ifnea par'alc la ;l la ace ra. En.st «ar co s.ra l,,'..:ibido ljoi' las,'scudas de ambo- H,'XUS y Jas c'ongj'egal'jon es piadosas, q u ienvs for mar.in en rlos alas hasta el a reo de I" mita<1 <Ie la ace r«, vn <!on<l,' p r inc ipia ra la formaci/ill,k b:-; comunidades n'gulares /1 SliS d iput aciones. Al llejrar a la mitud d c la ace ra St' "xhihinl e n 1'1 te mplet e e-l c uad ro ale- ~~tlrico de las nijia», las q iu- 10 sal uda ra n en no m b re <Ie la reo!igi/lll, las a.rtvs. las v i.nr ias, 1a agticliltul'a y ('1 come rc io.

111 VI---Kn la pu e r ta de Palacio sera saludado e invitado a cnt rar por el muy Ilust re Arce diano de Ia Santa Ig'lesia Cated ral rep resentante del Pr-elado y Jefe de la Cornision, Prcsbfte ro Dr. Numa J. Calrlerrin. q uien tam bien p resid i- ra la entrada como Jufe de Ja cornitiva, VII---El resto d e ~'ste diaserft de descanso para e l ilust re huespe d, y al d ia si~t1iente se ran las rece pciones oficiales y part icula res de acue rdo con el orrle n que Ht' publicara en el j{olllt'1j{~i, ('aft}lim y el reg lame nto que establezca vel J;~xcmo. Sr. nt'll:'~ado Apostolico. NOTA EJ curnpl im iento de este prog ruma en todo 10 que se retacion a con la cotocacion de los a rcos y adornos y el ar reg lo de la procesi6n para la entrada Y Kilanla del orden en el Palacio I<;piscopal queda a cargo del respl'table Cuerpo de Gendarmerfa Naciona.l y de su dig-no Jefe el Sr, Coronel D, Aurelio Contrer-as. Parnplona, 1<:111:'1'021) de 1907, GRAN VISITA f", (.lira pdrroro y d Aicalde JJulI/i,/pal (/t' Horha!cllla par tic ipau cornplacidos Clue el Excmo. Sr. DI", D. Francisco Ragonesi, Arzobispo de Mira v Delegado Apostolico ante el Gobicrno de Colombia, Ileganf a esta poblacion el 4 de los cor rientes, v se hacen el honor de invitar de la manera mas cordial a ]~ recepcion de este escla.recido Principe de la Santa Iglesia y dignisimo Rvp resentante de S. S. Pfo x. Bochale ma, F'e b re ro 19 Ill' 1907, PROl~RAMA tie recepcion en la par roqui a cle Bocha lema a l }<;XCllIO, ~r. HI'. H. Prancisco Ragonesl, Arzobi spo de Mira y Delegado Apost61ico de S. S, Pfo x ante el <Tobicrno de n uesf r a Republica. que se curnpl irzi en desarrollo de 10 d ispuesto por el IImo. y Rvdmo. Preladodiocesano Dr. D. Ignacio Antonio Parra. sobre homenajes a tan ilust re huesped. D i A Amaneceni e ngalanada la poblacion con banrle ras en 'lue se ostenten los colores del pabellon pontificio. A las 6 a. m. Ja Banda de musica recor-re ra la calle principal y anunciara con la ejecucion del himno nacionaj que Ileg-o el gran dfa de tan fausto acontecirnie nto. Los coheres y los aleg res repiques indicaran ]0 mismo. II - l<'::noportllllidad el Sr. Alcalde 1111nicipal acornpaiiado de seis caballeros mas se ad elaritaran al puente (;arria, limite de Ja par roq uia, y allf saludar-an as. K. t:'11 noi11-

112 vieru- rn rnos. _ >r,' del pueblo (at,~li-:() tie Boc ha le ma con li,ial y,'ol"tll locu cion. Las farnilias d,- los campos til' T'cscua. Colonia. Sarcuta, Laurel. sus coutor nos har.in los hono res a S. E. post randose ant\':.;u sag rad a persona y (on tim'"s varnpcst res cub r icndole la via. III -I';n el alto de San Juan t'l houo ra hk- l.'ollst'jo municipal r ump liment a ra {l S. E. po r cond ucto,k su re p r..sentante Sr. D. Gurne raiudo Cacel'es, 120n e x p resi va sal u tac ion, t raductora d el g-ran content» del pueblo. Los hubi t ant es del casc rfo de San Jost> de Cordoba y de los campos de 1':1 Brasil. Bu e navistr, Asruablanca. Pcjiaviva v T'e rebinto sald ran a n','ibir la santa In'nclicic'111d e l am~>l'ost) ParIre'lllt' con tanta ca rida.i,;. hun IV --«;n la p rirne ra esquina del pohlado vi Sr. l'c rsom-- ro municipal reeihil'{'.1. S. E.con la Banda N/rtlllril'. y esta rompe ra la marc.ha ejecutando el himno nacional adclant. de S. K La cabalgata forman'i dos alas hasta la p r ime ra esquina de la plazu : aq u i los niiios y las niiia» (I\- las escuelas publ icas y las asociaciones piadosas en d esfile de honor. q u«ter minara en la pue r ta de la casa pa r roq u ial. ha ran ;1.S. E, sus filiales cumrlirnie ntos. En l'ste lujza r las niiias Aminta VaSlllIl'l., Alicia Contreras y Araceli Pardo. ell rcp rese nt a- cion de las virt c des que caract--r izan {t S. E.. la fe, la (,Spt'- ranza r la ca.rirlad. It: r c nd iran sus hu mild es horn e naj es y le of recc ran en norn hre del Il mo, v R\-dmo. Prvlado de la Diocesis y del CUI'a r e c tor <\\' la. par roq u ia un modesto alojamiento. V -A las S p. m. habra ilu minaciou ~elwral. t<:n la Jlb- %<1 Y f reute a la casa par roq n ia! ;;e cjecutura una rvt r e t a. y con esta t,,'millar{, la humild. ovaei.'m Ilel dl,' n i \ S VI.- A las h a misa d e, 1l i"ll. Las cong rcg'aciones piadosas ot re ceran est e ohsetluio al Dios <k la Majestarl por la salud dcl Il mo.. v I~\"(lnHJ,SL Obispo Diocesano y en acci/in de g-racias poria hon r(lsfsi IIIa visita de S. 1':. A las i~/~ celeb rara S. E.. v al sarno sncr'ificio coucu r r ira e l vee indado con relijrioso cont cnto. A las 10 d ad rn inist rn r a S. E, "j santo sacramento d e la confir macion. VII --A las 2 p. m. habra rvcepc iones oficiales d e los e m- pleados civiles y til' las cong regucioncs piadosas, confor rne 10 disponga S. E. 1':1ord en en tl til' estas t cnsran lugar se hart, conoce r e n pliego especial. F. A..\1. n, (;. Bochale rna, 1',' tk F'e b re ro (It- 1<,107.

113 loh --.,jecut.tda por 1'1 Banda Riraurlc <-I7 del prvsente.1 las 1'\ p. m.. como obsequ io qlle el puehlo de Bocha lema h ace a! Excrno. Sr. Dr. D. Francisco Ral{onesi. I Lucrrri«Horeia. ll- ["rdikc. III-- -Estefania, IV - -f)lll/ubio azul. Bochale ma, F'eb r cro 7 de I'J07. L ARE C 1':r-cr o x <JU(' el Consejo mun ic ipu.l de San Jose de Cucut a prepa ru con mor ivo <1,.lu Ileg-ada a esta ciud ad del Excmo. Sr. F'runcisco Rag-onesi, Deleg-allo apost6lico. se hara en el orden sig-llientc: La co rpor acion municipal com isiona a los caballeros nomb raclos par a rvci bi r en Chinacota al Ex, mo. Sr. Francisco Ral.:'onesi. De1el.:'ado de S. S. Pfo x.. Sres. Rodolfo Faccini. Luis Fe b res Cordero, Manuel Rod riguez Ch. y Jose Rafael Unda, para Ilevar a conocimiento de aquella alta autoridad eclesiristica 1.'1 itiner-ario fijado de acu e rdo con lasautoridacles civiles v milita res, f<:lcu.. rpo de e m pleados diciales Y I.:'l'an nurne ro de vecinos espe ruran al honorable huesped en la hacienda de Los Flldos para con d uc ir lo poria ria del Rosal'io a la quinta de,"" //n!a Clara. situada en la lfnea del Ir-r rocarr-il a la front era. dond e pernoctara. AI sil.:'uiente d ia, it las H a. moo saldnl un t r e n especial '1Ut' 10 conduci ra a esta ciudad, y habra ad e mas todos los t renes que scan necesurios para el publico. f<~ne l par q ue de Santander llevara la pala b ra, a nomb re Ill'! Municipio, el Sr. Presid entc del Conce jo. I<:n 1a esquina dond e se coloq ue PI area de la Municipalic1ad 1l'dirig-in'l respetuoso saludo de bie nve nida 1'1 SI'. Alcald e de la c iudad. La concu r rcncia acom paiiara al I<:xcmo S1', Delcgado hasta la (jflill/a Teresa, cu yo a1ojamiento ha sido ofrecido I.:'alantemente poria d ist injzu id a Sra. D;~ Teresa d,~ An- (1resscn. En este t ravecto sl'ritn colocados convcuient e me nte los al"l'os t riunfalcspr-epar-ados al ef'e cto. La Jcf'atu ra militar de la frontera ha pu blicado ya prog-rama especial sobrv los hono res que Ie ha ra la I.:'uarnici(ln. 1<:1Sr. Pr efecto de la Provincia ha nombrado al SI'. D. Eusta'lllio Mantilla Breton para que Ie pr ese nte saludo en nomb rv de aq uella autoridad a su llegada a la Quill/a Teresa,

114 I!:l Sr. Alcalde del Municipio queda encargado de hacer ernpavesar la ciudad con bande ras blancas y las in~ig-nia.'i pontificias. San Jose de Cucuta, S de Febrcro de 1I)()7. PROGRAMA e-specl al para atcnder de hidamente at EXGl1lo. De leg ado Apostol ico. Desig nad«para d irigi r 10 re lat ivo al hospedaj c del Il mo. SI", Delegado Apostolico y para. el ar rcglo del te rnplo par roq uial, y confiado en la benevolencia de mis feligreses. he tenido a bien hacer las siguientt s designa.ciones. Ill' acu erdo con la Junta Directiva: I-La catolica Sra, D'~ Teresa de And ressc n :\<lilllet-., muy digna de todo elogio POI" SU esponta nea g'enerosidad. dara hospedaj e en su hermosa quinta al ' :xcmo. Sr. Ragonesi y i los caballeros q ue 10 acompaiian, en las hor as y dfas '1 1 H' pe r rnanezcan en la ciudad.!i--para el ar resrlo de la quinta...,twla ({lira. dondc pe rnoctara, las respetables Sras. y Sritas. Mar ia de Fer reol, Sofia d e Urida, Sara d e Car rasq uero. Concepcion Caicedo. Marfa Ramirez. Delia Serrano. Mar ia Mendoza. Josefina Lusar do, Vargas de la Rosa. ay ud adas y diriginas por las RR. HH. de la Caridad y las Sras. Elena de Moreno. }<;ugenia de F'acc ini, Ilba de Prad a, f<;ivia de Peralta. F'rancisca d,~ Arocha y Rebeca de 1<:strada. 1<:1honorable Concejo su minist rara 10 necesario para esos gastos; a las e xpr esadas senoras cor responde la asiste n- cia de aq uelln quinta y buscar el se r vicio necesario. 1<:1jueves de la presente se mana, {I las.nueve a. m. se reuniran con el cu ra Par roco en el local del Colegio de las RR. HH. para salir de all i en t ren exp r eso y hacer conducir los muebles al lugar desig nado, y p rovee r de todo 10 (lemas que se necesite. III- Para ar reg lar el te mplo par roquial, las Sras. y Sr itas. Tulia Ferrero. Ana Marfa de Osorio. Rita de Gandica, Victoria de Berti, Ana Dubuc, Elena de Serrano, MercedesC,)rdel'o, Alc este de Meoz, Maria de Mejia. Dolores de G-andica; y los Sr es. Felipe Hernandez, Pablo Emilio Castaneda. Ces{lreo Art uro Yanez, Alcibfades Ramirez y Pedro Llanes. El te mplo sc arreglara con los adornos que han d ispuesto hasta ahora, IV --}<:ladorno del f rontis de Ia iglesia par-roq uial toea a los Sres, Casimiro Soto, Juan Antonio Nieto, Marcos Savago, Pablo Gonzalez C.. Abad Diaz, Simon Calderon, Jose Mi~uel DeJg ado. Antonio Car-vajal, Jos,'. Maria Ayala. ay u-

115 110- dados y di rigidos por los Sres. Medar do Perez, Federico E. Farfa, Luis Eduardo Suarez v Lu is A. Valbuena. Vr-r Para const ru ir.y costear el solio, los Sres. Juan Luis Vega, Onofre Atencio, Filinto y Juan A.-Santos, Ped ro V. Felipe Serpa, Vfctor Manuel Galvis, Tomas Garcia y d e mas carpint e ros, ay udados y d irig idos por los Sres. Victor ~l. Me rchan, Hermes Atencio, Sixto Aparicio Acebe do, Rafael Kuino y Antonio ~ieto B. VI-Confiado en que el Excmo. Sr. Delegado se d ignan1 bendecir los t rabajos del templo en fabrica, se nombra a todos los ob re ros de el para q ue aseen y arreglen 10 mejor posible aq u el e d ificio..yad ernas los Sres, Clemente Hernandez. Ild efonso Calderon, Jose Molina, Carlos Bohdrquez, Manuel Gonzalez C., ayudados y dirigidos POl' los Sres, Salvador Moreno, }<~dllardo Diaz Irwin, Jesus Marfa Gonzalez, Antonio Ruiz.y Francisco de Paula Andrade. Los adornos deben permanecer durante todos los dfas que cl Sr. Delegado se halle en la ciudad. Las banderas pontificias que se enarbolen debe ran ser blancas con una cruz griega roja en el centro. Pod ran ponerse tarnbien los pabellones nacionales.,..:1 Cura pa rroco, San Jos~ de Cue uta, Enero.,0 de 1')07. ELIAS CALDERON Presbftero. PROGRAMA PARTICULAR para los honores que deben hacerse al Excmo. S,'. Dr. Francisco Ra~OIl('sj, De leg ado Apost61ico de la Santa Sede en Colombia. Habie nrlo sido desisrnada la.lefatu ra Militar para coadyuvar ell el modo d ig no y d ecor-oso con q ue la ciudad de Cucuta debe sole rnnizar la recepcion del Excrno. Sr. Dr. Francisco Ragonesi. Delegado Apost6lico de la Santa Sede, todo el personal de' la guarnicion de esta plaza tomara parte en d icha rccepcion. para 10 cual se dispone el programa siguiente : I-gn la plaza de Santander lcvantara la Jefatura Militar un arco adornado con bandcras nacionales y pontific ias, el cual d e be pe r manece r todos los d ias en que el Nuncio de S. S. se e ncuent re en la ciudad y sus cercanias. En el cuartel se levantara ot ro arco, JI--Una pieza de artillerfa emplazada en el parque de San tarid e r had. quince salvas, debiendo ser la primera en 1'1 memento en que el Excmo. Sr. Deleg'ado llegue it. la esq uina noreste de la plaza, y continuando las de mas caela diez minutos. La pieza sera atendida por seis sirvierites y su respective Jefe.

116 11] -- IlI----El He/lallull ()!J de Ill/ill/Ieria, d ehid anu-nu- uniformado, ab r ira calle de honor ai Excmo. Sr. Delegado, dcsd e laesq uina de la Botica Ale mana, at ravesando d iagonal mente ei Pa r q ue y sig u ien do la call- del Cume r cio v n direcci(ln al cuartel. IV-Gna vez q ue cl ilust re huesped haya rvcor r ido la calle de honor. cl Batallon cer ra ra la rnar-cha a rctaguartl ia con la Banda de musica ala cabeza, hasta la quinta Teresa. V~lientras el Excmo. Sr. Delegado se instala en la casa que se le t.iene preparada la Banda mar cial toca ra u na d e las m ejo res piezas de su re pe r tor-io. VI- -Desp;_It~s que el ilust r e I~epn sentantt dt, S. S. Pio X se haya instalado,,-i Batallon hat"a un d esfi lc ell su prvseucia, en columna d e rnitades COli marc ha de paso doble. La Banda toc.ara /Tonor uacional. VII---- La Banda marcial d a ra tud as las neches a las H p. m. una ret re ta al I<~xcmo. Sr. Delegado, escog iendo para ello 10 mejor de su reper tor io. Si el obseq uiado estuvie re a la bora sefialada en la quinta... fljlla ('1tlJa. la Banda Si~ t rasladarti a ese lugar, VIII -Una escolia de doce horn b res con su rvspe ctivo Cornandante h ara la g-uardia de honor del ilust re huesped. tanto en la quinta."'iwla Clara como en la q u inta Teresa, IX-::-Al d ia siguiente de lit entrada del ' ;xcmo. Sr. Deleg-ado a esta ciudad los Jefes y Oficiales dt' la ~uan1ici(ln le presentaran su saludo en corporacion. Cue uta, Vo>l)rero 19 de 1'J07. J)\JRANTE EL ALMlJERZu I--Cor<1 <\\- J/arta. FI(JI(J'~. II Valse!;,.-Ili Nez 'oil' Waldtett /('1. lii----ohertura de.\'abl/ro. fcrdi. - IV Valses.. \lieiios d«antor.. "... ('zihl/ll.:a, Para el d esfile, marcha IlOilOI' nariona]. PNHII-;NA HI':TNETA I -Sinf'onf a. (,'eulllla d«ii'j:~y..,... II - Valses Fallsto..,. SEGI;NJ>A HETHETA I Cuar tero. Hclla jl",!:lia del' amoi c... II ---Cavatina Noherto ci diablo, TI:HCEHA HETHETA I Potpou rri ();/('o,,. II--PI elu<1 o Trm'ialu,. IjOllizelli. (,'ol/llod. I'crd/ J (<:1'{'rbecr, ( )jl(-,,!ja r Ii. lerdi. No ra ~i a lg una persona autor izada pitiit.,"e un«pit-l<i Il1l\. ej) ]a~ ret ret as. la R;lIl,la la toca ra,

117 DECRI<;TO NUMERO 8 pot- el eual se dispone una rnanitestacion al Exemo. Sr. Deteg ado Apost6lieo. EI Inspector de Instrurdoll CONSIDERANDO : Ptib/ira de III Provincia Que proximarnente llegara a esta ciudad el Excmo. Sr. D,'. Francisco Ragonesi, Delegado Apostolico ; _ Que la venida de esta elevadfsima dignidad de la Iglesia es hecho unico que se registra en los anales de estos pueblos, que deben considerar tan fausto acontecimiento como un don del Cielo y una distincion que obliga la gratitud de los catolicos : - Que ade mas del sentimiento piadoso que pi-iva en el corazon de los colombianos la adhesion oficial de Colombia a la Santa Sede impone a los agentes del Gobierno el deber de rcndir hornenaje al Representante de S. S. Pfo x ; Que ia bendici6n apostolica impartida a la juventud educanda de la Provincia sera de grande estfmulo )' de-inmensos beneficios para la marcha p rospera de la instruccion publica. I>I';CRETA: Art. 19 I<~lencargado de la Inspeccion presentara el respetuoso homenaje de su adhesion al Excmo. Sr. Delegado Apostolico )' solicitara su bendicion para las escuelas de la Provincia. Art. 2'" }<';nrepr esentacion de las escuelas de la Provincia se reuniran las urbanas.r rurales de est a ciudad, de San Luis de Cucuta y del Rosario, en ellugar que se designara opor tunarnente, provistos los alu rnnos varones de banderitas blanc as con cruz roja en el centro,.r las niiias con rarnos de flores, con 10 eual se quie re ofrendar, los primeros, su inquebrantable adhesion a1 Sumo Pontffice, '! lasultirnas e1 perfume de su inocencia en los a1tares de Dios. - Reunidas las escuelas a la hora que el Exemo. Sr. Delegado seiiale, se colocaran de la siguiente manera: los varones for maran una inscr ipcion que diga: VIVA pio x. Las niiias for maran una corona que encierre aquella inscripcion, y todos, despues de recibi r la bendici6n apostolica, cntonar<l.nel himno nacional. Art. 3Q La Inspeccion solicitara de la Compaiiia del l<'errocarri11a translacion de las escuelas lj ue q uedan en la lfnea ferrea. :- Cornurriquese y dese euenta al Sr. Director de Instruccion publica del Departamento. Dado en San Jose de Cucuta, a 23 de I<;nero de 1(J07, EUSTAQUIO MANTILLA BRE'l'ON

118 11] PRO(~Hi\\IA para la rocepcicin clel ~r, Dr. Fr ancisco l~ag(jljt',;i,!"'!egado apust(, Iieo de la Santa ~('(1c en Colomhia, 'I"'" lend,." Ing'ar I1WrWn:l, Los hab it an te-s (k San Luis <h, Cucu t a v m n y l'siwl'ial, mente la Soci,~da<l tiel Pat r iu rca Senor Sail.1os(.. co m placidos de una mane ru especial POl' la feliz \'isit,t;l la Di/lct'sis tie Nueva Pamploua, y ;1 nuestro e xi mio, j usto, virtuoso e limo. S)'. Obispo Dr. l J. Ignacio Antonio Parra, Decauo del Obispado Sr. colurub Hagonesi, iauo. Sl' al visit a r l'sta rvsurnn lcca lid ac.. {I ]>1"<';;('ntal' SII;" sinc(','as Exc mo. manif'estacioncs de a<lh,'si/111 u na vvz l1l,ts al Vil'ario til'.lcsuc r isto. Pio x, n'!h'l',,,'ntado pol' cl ilust rv h \l(.;"pl't1 i\ rzobispo d e Mira. l<jo:i',\htil l " La pol:!a,'i/lil sl'n't l'ngalana<la It) mvjor posiule qlle sus hurnild cs hijc». v n la tn'hila <It- S\lS Iar ultadv» so' lt) permita; 2',' T'odos los fre nt cs (It- las casas til' hahitacilm St'rftll cond ecorados con f'estonvs (\(' ra mas <1l' oliv«, g,dlardetl:s. pend ones y ba-ule ras de color blal1<'o -' amarillo, poi' se r l'stos los colorcs tiel pabellon de la Ik!t-ga..:i/111 apostlllica; :W En la ;lal'te no r te til' la poblaci." Sr. Corneliu Dfaz, p riuc ipa) en el colllerl'io dvl Amparo, Ill'.icu crdo con los Sr cs, Martin GlIti(.rre%. Eduardo Ramil'l'i: A.. Antoniu Marfa Carabu, Rulll:n Avc-n d a ii«, Silvino Camacho, Marcelo Serrano, Hip()li to h'o1>ks. Cri!'t ino S:lllC h.-z, J Han Chacon, Ed uarrlo Bue nuiio, Alc jo Moli 11;\. Iklll'<I i.-ttl :\lonsalw. Man ucl Arias, Gil L<'l\ll'z,,,: Eulugio I lr ln n.: dar/ill una prlldjil mitl'; de fie lcs catolico;; apost<'llictls.' romano» h-va n t a n d o lin sunt uoso a reo c.uya aleg-orfa 'luella;1 su.-nt era libr-r t ad : 4'-' l<:n la I'sq u ina rlvl Sl'. H il'/.li to l~tll>ks tol'; catolico;; y rdigiosos vcciros (h,1. m po r t a n t r partido <ll' Cuaimaral lcvantaru.n LIn scherbio y "l';pl(.ndi<lo ;l1'l'o,'on c-l lema til' las aspi raciones de todo- los hijos tit- Colo m b ia, Pa: J' 'l'ra/j(lio. \'epl'esent{li1<!olus los Srvs. Pl'dn, Vr-lasco. licr manos Bautista, "I'ornas y Reyes l~amfl'i'/.. Luis A, \.'a"anu\,a. / :;;teual1 Mantilla, Antonio \larla Mol ina, /<:l"dio Stlttl, l'rancisco Pvd razu v Sras. l\;~ /~Illderia <II' )),I\'ila \.l ua ua S. de 1\'1auc ilia, :,o'en la esq u ina Ill- la cas,! qlll"hll' d e l Sr, Ismae l Cepeda se levant;lr;1 u n m.urnifico a r co fi carg-o de los Srcti. Sinf'oroso Diaz, Roberto LI'I!WZ. Se\"l-riano l~odrlg-lit'z. Heliodoro Homen', Ru Io La h rudo r. Ab<1(,n l'e1'l'z, Juan P. Silva, Jose Ines Utbi na. (~il Hu e n.uto..ial'int :\It>jia. F'lorr-nt i- no Perez \' Pantalcun Dfaz ; (,','~nla esquina lid Sr. Jose del Car rn eu Umana, a reo (It. paz y frater-nidad, :.. cargo de 10'- Sn~8. Pedro Molina, 8

119 Francisco Bustamante, Jose Marfa Duarte, Felipe Camacho, Jose del Carmen Omaiia, Jose Antonio Sanchez, Juan Patricio Gutierrez, Rafael Camero, Roman Mendoza, Pedro Ornaiia, Juan de la C. Duarte, Jose Parra, Vicente Ramfrez, Ma rcos Ornajia, Jose Marfa Nieto. Recitaci6n en verso par el joven ReguJo Caceres; 7'1 Esquina de Ja escucla de nijias, areo triunfal a cargo de las Sras. Gregoria de Sayago, Mercedes de Pen a- randa, Bibiana de Velasco, Benilda de Bautista y Domitila Hevia de Moros. Recitacion en verso a S. S. Pia x por la nina Alicia Moros; 8'1 Los Srcs..Jeuaro Zambrano, Lucas Diaz, Ambrosio Usechc, Vicente Parra, Jose del Carmen Moreno, Luis Vivas, Jacinto Diaz, Antonio Maria Prato, Sixto Rodriguez, Paulino Caceres, Ismael Nova, Martin Duran, Obdulio Prato y Segundo Duran exhibiran un lujoso arco simbolico de las artes, la agricultura, el t rabajo y Ja hon rad.ez j <J'? En la esquina de la casa parroquialla Sociedad de San Jose levantara el a reo de las t res vir-tudes tcologales. A la llegada de S. E. it este arco se daran las quince salvas de ordenanza militar q uc le cor responrl e n como Delegado apostolico de la Santa Sede ante cl Gobierno de Colombia. Himno a S. S. el Papa, cjccutado por los niiios y nijias de las escue las ; 10. Los Sr-es. Presid ente Vicente Diaz (~., Vieepresiderite Tobias Ornafia, Secrctario Mar-co A. Ornafia, Subsec re tar io Leopolda Bc rbesf, Director del Culto Antonio Moreno, Su bd irector Evangelista Dfaz, T'esorero Martin Duran, Su btesorr-ro Reyes Ramire7. y todos los dernas socios en comunidad con el Sr. Dir ecto r genera] de la Asociacion se p resentarrin ante e1 Exemo. Sr. Delcgarlo apostolico, Dr. Francisco I~ag-onesi, Art-obispo de Mira, Rcp resentante de S. S. e l Papa Pfo x ante cl Gobicr no de Colom bia, can cl fin unico de dar una prue ba mas del espfr itu de su mision, de adhesion por el inestimable bcneficio Ile no de caridad que ha hecho en venir a estas regiones. Tanto el Presidente como los d c mas del Directorio y socios de la Cong regacion del Padre putativo de Jesus lleva ran el distintivo, el eual es la medalla del Patriarca Seiior San Jose, llevanrlo la palabra el Sr. Francisco Andrade Berti. Sail Luis de Cucuta, Febrero 11 de I<~L CURA PAR[{OCO Y LOS VECINOS

120 MANIFESTACIONES f}/(;ro/s dc,'.\o'(jrro. (.'o!j/en/(j rdc5idsl/oj. Excmo. Sr.: En nornbre de Prclad o y del Cle ro ue est a ni()ct'~i~ van (t V. Eo los Pr-cs.b it.e ros SIT~. I). Rafael A rrl ila y D. Luis Clemente Jouaud, con el fin de p rt-se ntar a V. E. nuestro atento saludo (k bic nvcnida y congtatu]aci(jn ]J0l' la lion rosa visita con q u e V. E. se dig n a favo recc rnos. Can est a ocasiou me ('s especial mente g-rato poncr mc it las ordcnes de V. E, y hacrr mil vot os poi' Ia g-rata p e r rn a- nencia de V. E. y (].; sus <Jig-nos co m paiic ros L'I1(I'" nosot ros. De V. 1-<;.m uv r.d icto hc-r m.mo, AI Excmo. Sr. Ih'1<'~:tllo Apvst(,lico Moirotes...., o,/rdad de Sail 1//,1'111('de /'aill- Picdcrucs:«, FlIrro /6 de / oo>. J<;xcmo. ~rollsei\o[' Francisco \-{ag-ollcsi. llckg-aun Apost(llico <1<:S. S. Pin x ante.1 (io1ji'.'rtlo,ii, Colornbi a. En mi caracte r de Pr esid cute (h' la Socicd ad de San Vicente de Paul 1"1e cs altamente hon roso t ru nsc r ihir a V. Eo la proposicion aprobada POI' e l Conse jo Di r e c t ivo de d icha Socie darl en su sesion c xt r aor-d inar ia de hoy: eel Conse io Dir ect ivo de la Sociedad de San Vicente de Paul de PiedZ'cues':a, en S1.1 propio nornb re y en e l de la

121 Asociacion en general, prescnta su respetuoso salud o de bienvenida a S. K Monsejior F'rancisco Hag-onesi en cl d ia de BU Ir-liz ar-ri ho a csta c iu d ad : sc haec el honor de e xp rcsarle la muy justa complaccncia que l'xperimenta por el singular acontcci m ie nto de ve r en la ciudad al bene mer-ito e ilust re R(1)l"eSl~ntantc de S. S. Pio x ante el Gobierno de Colombia, y pid«h u mil dv men te sc dig-ne irnpa rt ir lc su bcnd icion apostolica ala Asociacion, favor sejialado que se ra para ella, {lla vez!jul' tirn hre de g-ioria, porle roso estfrnulo que la impulse a pe rsevc ra r vn la noble lahar ell' velar POI' la suede de los me ncste rosos. <T'r-ansc rfbaso al /<:xcmo. S1', Dclcjra do Apostolico estu p roposiciou, 1a q ue le sent p resentada con nota de esti lo POl' una cornision cornpuesta de dos de los m ie mb ros de la Socied ad, que a\ ef'ecto se desiguarau por Ia Presidencia.> f<:l suscri to ap rovec ha esta oportunidad para presentar al ilusst re huesped.y d ist ing uido Pastor de la Iglesia catolica las mas e xp resivas muest ras de considc racion.y respe to. Dios g-uarde ;l S. E. m u chos aiios. LUIS FIL\NCISCO ;'VIANnl.l.A Excmo. ~;,-. Delq.~atlo Apostotico. Los que susc r ihi rnos, r esid entcs en Mundonuevo, cabecera de la parroquia de Concordia. os saludarnos efusiva y respetuosarne nt c y nos cong ratularnos poi, vuest ro feliz ar ribo a la Diocesis de Nueva Paruplona, il 1" cual nos honr a- mas en pe r tcn ece r : os p rcse ntarnos todo u u est ro ho m e naj e.r nuest ra adhesion [l vuest ra sag rada pe rsona y a vuest ra autoridad, como d ig no Rep rescntante de fa Santa Sed e, v csta mos cie rtos de q ue una visita (Ie tan alta d ig nidad serii. de rnucho bien. tanto en 10 l'cll'siastico como en 10 civil. Mu ndon ue-vo, Enel'o d e Vuest ros humild cs hijos en Jcsu c r isto. Ihtcllio jaimes, Prcsbtte ro Pastor.11ogo/IJIl Namoll Leon <Lcouidas Carariro -I.uis j. NOJ/u'I'o ('~-'Jfarco.'!nlollioJfinlllda (~. Abc!(T(;lIle~. Flls/aquio Jlollroy' -Hlo)' Dlaz. J1arco A.!iall/ista--JJaximiliallo Casas 1-.' -Oda'l'io (;dnice C-j1iglfc! POllcr-!Jcmdrio COJ//reras j.-.}farco LIIItouio :lll}{lflo -.laz'ier }!clldo,nl lj/dcj!ccio Halfl,:,la' :lose Trinidad GlZ'arim- Teodoro.,llllal'a EmiliaJ/o!{mcr-Hsleball Cacna-rLuis F.l-1ogo/MJ/- (/lislaz'o Pcmlta -Ro.,cJ/do FYd-.rez--HpI11laco.1. Canariro IJedro Hspilia Hllas.lIOltollo".

122 d«nclo ra l)furcsis de i.\'ua'(,~ fjalllp!olla--vimrfa de."il!l Jligucl-Miuistcrio erles':cislieo parroquial de Sail Laurcano-iHucara1Jlallga 'nero.;. de II)U7. AI /';XCll1o. Sr, l>e!l'g-ado Apo-stol ico. i Bend ito el que vie ne en el no m b re dl'1 Sejior! Tal L'S, I';xcmo. Sr., cl grito con que nuest ros pvchos,ie hijos y sac~nl~t.es de la Iglesia cat ol ica salud an la lleg-;ula d e vucst ra d ig nisirna persona a nuestro suvlo, Sabe mos bien c ua n nobles y hva ntados vfncu los os ligan ;'1 L'sll' pais. nccesitado dl' alirnt o pod e roso vn su t rabajosa m a rv ha. Y l',;to ya I'S rnot ivo ell' grandi' rst irna hacia, OS. Han vi b rud o tambi(.n;l tl 'l\'(.s de nu cst ras mont afias \' cond u cidox POI' las ond as dl' nuest ros r ios los I'COS (k I:sos-sentirnientos ge nc rosos con los cuales habeis dado pr incipio a vucst ra inte resantfsi ma m ision en Colombia mision ell' paz, <It' salvatruu rrl ia para los inte rescs re lig iosos ell' los hijos del pais. lit' sost,~n valioso v Lien iutvncionado al reg-im,'n autor itu r io 'JUl.' nos ri{l'; 'pl'ro POl' c uc ima Ill' torlos cstos mot i- \'OS,1L' rvcorioci m c n to " adrnira,i,>n brilla COli nt ract ivo v Ill'SO incont rastul.le par~l nosot ros, rvnac id os vn las [uentc"s sa c rosa n tas, e l c;u'acter augllsto y sagra<1o '11Il' os aco mpaii a comol\iinistro y l)l'kga<!o elt' A'Illt~l 'I u e es visih!«y Supremo Je rarcn de la Iglt-sia. POI' 10 mismo esta prvc rnine nc iu de q u e os ha lla is invest ido d cspic r ta en nosot ros vivos a n hclos de atvst.ig ua ros, como lo d ejamos consurnado ahor a, nu cst ras co rd ia lcs dernost rnciorn-s ad hcsion y p rofu aca t arn irnt o a vucst persona, crevendo d e j a r curnplidos asi u u ext rr», vot os d c "Cne racion.:: inconc.icional af ccto it la Santa Sl'(h'. Dignam; acer.tar I.-I hu mild«iw\'(> sinc e ro hom.-naje que dt' nu cst rn adict.. vol n n tad us vuviamus. d ic icridonos muy rvspctuosarncnt«vuest ros at e nt os, Sl'g-uros sc r vidor'es,. III1011 io.ii.. llidrad(, Pr'csb it e ro jllz'clla! (ju;'n;s t '.. Presbfteru--Sen.jlll Piircrcs 'lid! Old!om (.. Pr csbitc ro. Dcmclrio /IIClldoal, Presbitero--'.l11~'lIc!!/!(fllro...,iflll;'a~'o flialltfl!a, Pr esb itc ro-vy, 1/:~;'lar;'(;11I)(((fr!e. Pn shitl'l o'--.'!n- J(djm/ Jltflll!o ('(frlos (,'.....,il/o.prvsb it ero. He/nlblira de ('u!,nu/;;'a (,'o/;('i'!uu'/(jji dr,""itllialldn ljirceoi;1i de Instr((cridll /)';/;!;'Ol.\ l!mcl'o,!j{{caram((}ijta, 2.;. de I"'IC}"O dr [()U7. Excmo. Sr. F'ra uc is co Rag-onesi. De leg ado Apostrrl ico E. S. c. EI Sr. Goberna<1or me ha confiado la hon rosa com islon lie rnanifestar as. K q ue est a neche sc ve r ifica ra en cl local

123 de la Asamblea el concierto organizado par el Gobierno del Departamento para dedicarlo a S. E. como muestra de adhesion y respetuosa simpat ia. Conocedor de la exquisita arnabilidad de S. E. y en la seguridad de que concu rr-ira al acto con sus dignos cornpaneros, me permito rernitirle ad ju ntas seis boletas de entrada. Oportunamente se p resentara en casa de S. E. una comision encar gada de conducirlo allocal expresado. Con sentimientos de la mas alta estirna y considcracion me suscribo de S. :K atento, segu ro se rvidor q, b. s. m., Jose M. GAHciA H. Repziblica de Colombia-Departamento de Sautaudcr-«Presidencia del Conse]o nuoiicipai-> Nttmcro 3- Bucm:ama1zga, Enero 19 de Excmo. Sr. Dr. Francisco Ragonesi, Delegatio Apost6lico y Arzobispo de Mira--E. L. C. Tengo el honor de transcribir a S. K la siguiente proposicion ap robada unanirnemente par la corporacion que presido: e El Consejo de Bucaramanga registra en sus anales como suceso fausto y trascendentalla visita con que ha honrado a la capital de Santander el Excrno. Sr. Dr. F'rancisco Ragonesi, Nuncio Apostolico y Arzobispo de Mira, Y haciendose eco del sentimiento general en esta ciudad, t ributa al ilustre huesped la expresion cordial de profundo respeto, sincera gratitud y ferviente ad rni racion, a la vez que hace votos porque sea feliz y larga su permanencia entre los santandcreanos. «La nota de estilo serti presentada al Excrno. Sr. Delegada po r los miembros de la corporacion que la Presidencia designe.> Con sentimientos de la mas distinguida consideracion me suscribo de S. E. respetuoso servidor, AURELIO MUTIS Republica de. G'olo1llbia--E/crdto nacional- Zona min/ar del Nortc-«- Comaudancia KClleral- Nzimcro 44-- Bucaramanga, Euero 28 de Excmo. Sr.: Tengo la honra de transcribiros los siguientes artfculos dictados hoy en la Orden general de la Zona militar de. mi mando:

124 ue He nado ---.lil) -- q riza, ig impart ir la ~ Art I~l Excmo, SI'. Dclegado Apostolico, can la benevolericia le caracte 11a d bcndicion d ivina {L la band e r«que debe lleva r e l Hata/Mul J de Infautcr.u ; bandera ve rd adc rarn cnte nucional que hoy abriga, ampara y proteg-e ba jo ~11"; plieg-ue;; a todos los colornbianos sin d ist incion algu ua, la cual sab ran cond ncir victoriosa los leah-s, ahucg arlos y vale rosos milita rcs {l cu yas manos ha si do confiad a, arnaudola mas que [L su villa y d e- Iendiendola sie mp re como buc'l1os patriotas. <l: Art. 4~. El (~l'neral Cornand ant e g-t'nl'ral de la Zona militar <1,,1Nor t c. en no rnb rv de sus cornpaiu-ros de ar rnas 'j en cl su)'o p ropio. St' cornplacc ell rvconocvr tan scjialad a d ist incion y p r escntu po r ella sus sinccrus manifcstaciones de g rat itud 11 EX"l1\o. Sr. Delegado Apost6Iico.> AI Excmo, Sr. D. F'ranci sco ~ag-()llc"j, Dl'1cg-a<1oAposto lic«, etc. etc, Ap rovccho est a opo r t un idud pa ru reitt-raros mis protestas mas since ras lie amistad v de alta est irnacion v respeto con que me suscr ibo YUI~st'ro obcd ien t e )' atent~) servidor, Rej)flh!ica de (' )/(/-!"'-</'irci/oI/aciol/a/-- Zona militar del l\'orte -- Jiata/MII./' de 1/1tuutcri«-(;{(({rllicion II' /(/ ('iudad- -LVlimcro c;---pl1mp/ojlli, Fcorcro r" de Ii)U;, I:<~xerno.Sr. Dr. D. Francisco ~:lg-onc"i, Arzobi spo de Mir a y Deleg-ado Apostofico ell C,,!omlJia- I':. L. C. Altamente hon roso me es t ranxcr ib ir {t S. I-S. Ja Orden de esta g uarnicion d ic t a d a hoy, cuyo con tenido dice: < ORDEN 1110: LA GUAR"IICl(J); [':\R:\ HOY 1'1 Ill-: FI ;BRER.O DE 1')07 <Articulo... Habie ndo lleg ado,i.est a ciudud cl I<~xcmo. Monsejior Francisco l{agonesi, Arxobispo de Mira y Delegada Apostolico en Colombia. el SlISCI'ito, interp retando tielmente los scnt irnie ntos catolicos del personal de la guarnicion, en nornbre de todos sus subor d inados v en el suvo p ropio p rescnta aj ilust re viaje ro atento saludo de bienvenid a, hacie ndo votos po r su feliz per mancucia en est a ciudad, c: Articulo... Copia dl' Ia p rcsc nt e Orden sera transcrita en nota de estilo al j<~xcmo. Sr. Delcgado, c: El Teniente Cornandaute de la Guaru icidn, Dios guarde a S. E, «,llriundro Uribe (;.~

125 -- 12()-- Repllblica de Colombia- --Departamento de "';ulltander-- A Icatdta 11ltt1lio!>a/ j\ttimcro ro-r Concordia, Euero 17 de I~xcmo. Deleg ado Apost6lico---Bllcaramang-a. 1:<:11 nombre de elste Municipio, cuya d ireccion sc me ha confiado, os felicito de la mane ra mas efusiva por vuest ra feliz lleg-ada a. esa capital j a la vez que la visita de tan exi mio huesped red unde en beneficios morales y religiosos en cl norte de Ia Republica, ve re mos con satisfaccion, mediante vuest ro alto y pod eroso pr est.ig io, planteadas definitivamente Ia paz)' la concordia, suprema aspiracion d e nuestro ilustrado Gohierno. Dios os guarde. PEDRO C. J l\i~{es He/HEMiC({de C%moia-- Departamento de "'lallla"der- Pro- "[',i,cia de Cdcn!«-- Presidcuria dc! Conscio 1I1ullio!>a!-- JVdl/lcro 26 -('It/mico/a, Fcbrero -' de A. Monsefior D. Francisco Ragones i, Deleg ado Apostol ico CIl Colombia y Arzohispo de Mi r a-> Prescnte. Altamente hon rosa es para el suscr ito la corn unicaci.in de la siguiente proposici6n aprobada unani me me nf e po r Ia Mu nicipalidad en sesion de ay e r : <AI Excrno. Sr. Delegado Apostolico a su entrada a csta ciudad el Consejo municipal de Chinacota presenta su respctuosa salutacion : rcconoce en el al mas encumbrado Representante en Colombia de S. S. cl Papa PIO X; curnple con ag rado el de be r de rcndirle horue naje de g rat itud po r habcr contribuido eficazmente al rvstableci rnicnto de la concordia entre los colombianos, )' en nom b re del pueblo que rep rcscnta le protesta la mas since ra adhesion al POI1- tifi cado.> Dim; guarde {t S. K PEDRO f<~nuahno DiAZ Conseio l1ltmidpa!- Prcsidcucia- -Sail josl de Cdcuta, 4 de Fcbrero de I(j07. Excrno. Sr.: La corporaci6n municipal que me hon ro en p resid ir ba dispuesto que los Sres. Rodolfo Faccini, Luis F'eb res Cordero, Manuel Rodl'fg-uez Ch..r Jose Rafael Uncia, en repr esentacien de esta ciudad, os anticipen el respetuoso saludo de bienvenida del pueblo cucutejio,

126 121 Esta Cornision se pond ra (l las on1l'nes de V. E. en Chinacot a ). te r.d ra cl honor <It' acornpafia ros hast.a vuest ro alojarniento (;e :')ell//a Clara. Se rvios aceptar, EX1:010. Sr., las manif estacioncs de alta conside racior: y d ist ingu ido aprecio con q ue teruro ('1 honor de suscr ihi r mc Rcspetuoso se r vid o r. q u c Ill'sa vn r-st r a mario, No'){iMirlf,Ii" (()I(Jlilb':ll --/)(/>Ildalilot!o ill'...,tlll/allder ((ii/-.-;r/o JIIIIII/r/I'al,\'I;/I/rI"O 25" ('unililla, FlltTO 2() de fi)u;. ~;xcn\ll. ~r. l-'rauc isco J.?ag-mwsi. Ih 1t'g;"lo Apo,.,tc',li, o de la :-:'anla Sed,' ('\I Col om hi n P anrplou«. Los susc ritos, m i.-rn b ros d cl COIlCl'jU lit' t'ste Municipio, en n u est ro p ropic uo m b r«y.11 1 (kl pueblo 'lu" r cp r cscnta mos nos hor.rauios al <lil'ig-irus n uvs-t ro c nt usiasta sal u d o de b ie nve niclu, en pn'sl'utaros n u.-st ros uorm-uaj es ell' l~at/llicos cn'yent.s y rl'spdullsos y nos ft'licitamos POI' la d c Icrc nc ia que most ra is {l I1lIl'S! 1'0 Dc pa r t.un cn to con vuest ra visitu, 1'~1p ucbk. q lie pol' nuest I'll cond uct o hov os saluda lleva -:011 on.:-ullo ccmo SlI rnejo r t irn b rt- cl convcnci micnto fntimo de su amor y 'espdo {l los ;\1 inist ros rvp rrscn tantes de Cr isto y pr-opag'adorcs (it' nu cst r.t sac rosantu j-dig-ion; H' I'll dim; a los ungidos IlL': Altisi mo y por cso c nt usiasmado entona hosannas a los que vic u cn cn nornb rv del Seiior. Ahoru, como m ic mb ros (k unn cor porucion civil, us significamos {l vos, dig-no Repl'I-'seniantl' de la Santa Selle, que be ndecirnos la ar monia c x iste n t c hoy en Ja Republica entre los dos podere~, por considcrada como cl principal factor tie Ia t r.mq u ilid ad prese nte v prosperi(lad futura de nut-st ra Patri... Bicnvcnid o se{lis. Dios g-uarh- {l V. 1<:. l;~l Pr-esid ent c, SI:--il"OROSO (]()MlcZ '-Conn~jaI,.""a/arlo Cardenas -Concejal../t{(lfI. Jltdds /JilfZ -Concejal, All/bat Parada -Conc ejal,./os( Ted/iflliJ Fcrndndr: -Conce ial, f,,'u/imio Aria.-;-Ce,nceja1..los! Rio.\' (;th'r;;. Concejal, Vicente (arri!!o R.-CJl1cejal Scc re ta.rio..festis f~cr('z.

127 Republica de Colombia-DePartamento de... Santander--: Provincia de Oicuta-Presidellcia del Couseio nncnicipal-«nzlmero I6-Cllil1clcota, Eucro 28 de I907. Venerable Sr. Provisor Vicario general de la Di6cesis---Pamplona. Me es honroso cornunicar-le a S. E. que este Concejo, atento al cumplimiento de su deber en la parte cor respondiente a las singulares recepciones.r ovaciones que proximamente se Ie tributaran en esa yen esta ciudacl al Excmo. Delegado Apostolico, Sr. Dr. D. Francisco Ragonesi, ha d esignado para su digno Rep rcsentante alii en esos solernnes actos, IIevando su voz, al d isting uido orado r SI". Dr. D. F'ructuoso V. Calderon, a quien en este dfa se le ha cornu- -nicado tarnbien Ia designacidn, en la confianza de que tanto por S. Eo como por cl haya de ser admitida y aceptada, para los honores consiguientes, Dios guarde a S. Eo P. K DfAZ RejHiblica de Colombia-Departamento de.){wtallder--presideucia del Couseio ljutilicipal-s(m Luis de elimla, Febrero I2 de I907. Excmo. Sr. Dr. D. Francisco Rag-or.esi, Arzobispo de Mil-a y Deleg ado Apost6lico en Colombi a-s-presente. La corporaci6n municipal, al tener el honor de dirigiros el saludo de bienvenida, os pr esenta con respcto sus sentimientos de g ratitud por la distincion <] ue Ie haceis con vuestra visita al pue blo que representa, y se une al de Colombia, que gober nais con suavidad y prudencia, para pedir.al Cielo os conserve por muchos aiios. Recibid pues de buen grado tan since ras manifestaciones; aceptad los votos que hace porque Dios, como hasta.ahora, os inspire y os proteja, y brindadle la ocasion de ser -cubie rtos con vuest ra santa bendici6n. Bien venido seais, Excrno, Sr. CARLOSJULIO 1{Eyr;g-- EI Vieepresidente, Palrocinio Perez--Lo8 Vocales, Pedro ], Plrcz--Rcyes j~f{mt/lla (;.--Gor-.nelio IJiaz M.-F;l Secretario,.lose A. ivazlllrro. Club tid Comercio, La Junta Directiva, en nombre de los miembros de este centro)' en su propio nornbre, sal ucla atentamente at I<~xcmo. Sr. Francisco Rag-onesi, Delegado Apostdlico, y le

128 desea grata pcrmancncia en esta ciudad. Al mismo ticmpo presenta salu do de bienvcnida {t sus d ist ing uidos companeros. l:<~1prcsid ente, Cucuta, Febre ro 'I de 1()07. A. SERRANO li~. 1'.- {(Jl/scio IIlNlliripal til'."'(tjl./ost' de Oint/a, agradeeido por Ia especial visit a que \:1 mu y ilust re Delegado de S. S. Pio x, Excmo. SI". Francisco Hagonesi, haec a 1a ciud ad que 10 arna y 10 venera, p r esc nta a tan insigne huespcd fill sa' udo cordial de bienve nida, se cornplace en tenerlo en su se no y pid e para el pueblo de Cucuta su be ndicion apostolica. El Presid ente, Leis MOR,\LJo:S BERTI--El Vicepresidente, jl1/!fuel lit: la Rorlzc--Vocalcs, Rrasmo ;lleoz-lazaro Riaseos C.-Flormtil/o (;OIl.;:ti!cZ- Virgiliv Barco - Rafael Mejla-Carlm ljth'illi I/.---Ralucl Antonio Hamfrez--EI sccr etar io, Carlos IJtiz:ila (.'.. San Jose de Cucuta, F'eb re ro () de 1()()7. Consolalo di S. :If. if He d' ftt/fill- -.)'tlll./ost: de Csicuta, li 7 di Febbraio di It)Q7 gccelknz~l : Con il rispetto dovuto all'alta gerarchia di V. K, non che allillust rc cittadino italiano il d i cui nome onora la propria patria, mi pe r met to anticipare il mio usse qu ioso salute. Siate, 0 Monsignore, il ben ve nu to, e Din vog'lia che la vost ra cor ta permancnza in questa citta vi sia gl'ata. quanto io 10 dc~iden. Offro tin dora i miei d e bol i sc r vig'i all' Eo V. che saro ben lieto di (ooo\'erli p1'cstare. Bacio 1'iFpettosamente la mario a Monsignore. Il Console, AG. Bl';RTI A S. E. Monsignor Francesco Ragonesi, Nunzio Apostorico S. M.

129 Sociedud.lIlttflo,llt.xilio-l~resideJlda--,"'ClJl jose de Cdruta, 8 de Fehrero de fo07. Excmo. ~r. F'rancisco Ragonesi, Delerrado Apostotico. Presente..Kxcmo. Sr.: Mu y grato)' satisfactorio es para mf 1'1 t ransc ribiros 1'1 texto de la proposic ion q lie la Socied ad que p resido aprobo por unanimidad en su sesil)n del 21J del pasado : «: Estando proxima la. Ilcgarla del Sr. Dclcsrado Apostolico Monseiior I~ag-onesi, IIuicn ha recibido a. su paso POl' todos los pueblos)' ciuda d es vivas d e rnost ruciom-s de agasajo y cntusiasrno, la Sociedac1 :lflltuo.111.\"ilio se consider-a ell e) hon roso e ineludible deber de dar la m{ts cu mplida bienvenida a d ic ho SI'. Delegado. Para \'1 cf'ecto, la Presidencia d esignara a t rcs de sus miembrosde 10 masdistillg-llillopara q ue constituidos en comision le pr ese nten las d cbirlas salutaciones en norn b re ell' la corporacion, en nota de estilo.> Dignam; ace ptu r gustoso, I<;xcmo. Sr., estassinceras rnanifestacioncs de rcspe to )' felicitucion a las cuales os habeis hecho acrr-cdor POl' las simpatfas y ad m iracion q u o tan merecidamente habeis d espc rtudo en est a localidad, donde se espera \jui' vuest ra co rt a pcrmanencia en ella sera Ir u ctife ra en felices sucesos y en concordia y ar monfa para estas f ronteras. De V. 11~.con torio r espeto at en to, segu 1'0 scrvido r. Repliblica de ('(liombia --Departamento de,",ellltallder ((JIIsr- /0?1l.uJlidjm! de Arbolcdas. Rxcmo, Sr. Detcg ado Apost61ico Pumplona. f<:xcnlo. Sr.: KI Consejo municipal de Ar bolcd as por sf y a Hombre de todos los habi tant cs de csta localidad, al sahel' la plausible noticia ell' vuest ro arribo a este Departamento, se ha llenarlo de indccible con te nto, pu cs cs este un hecho (IUe honra sobr'ernane ra it los pueblos cr ist ianos que since ramentc reconoccn en VUI~Htra e xirnia persona al representanndel Vicario de Cristo, revesticlo de tan sag rada autoridad para traer it nuest ra Pat ria los inmensos bienes que del Pon- Hike romano emanan como fuentc abundantfsima para todos los pueblos crcycntcs. N uest ro corazon re bosa de alegrfa al ver en medio de nosotros al representante del Padre de la cristiandad, y no pod e mos menos q ue ofrcceros los mas

130 - 125 sinceros sentirnientos de amor, de ad hesiou, de \'CIHTacion, de rcspeto y acatarnicnto. Nosot ros, {l nom b re dvl (;ubierno Ill' nu est r a Pat ria, del cu al sornos r ep rcsc ntn ntcs en,'stl~ pueblu, q uv Sl' sic nte hoy feliz por vucst ra santa visit a, os p rcse nt arnos e-l tr ibu to de su rnision cleiido (l l.t Santa Sl,<h', d c- Ia cual sois <lignisimo Delcgado. Sin d uda vos,!':xcillo. Sr.. nos a rna is como t ie r nu v arno- I'OSO Pa<1 rl', I"ig-il{lis po r n u c--t 1'1) bien. espi ri t ual COl; santa solicit ud, y ')01' esto. no con tvn tu con "I intelig-l'nte d esc mperio <Il~vucst ra m isiou e n la capital dl' la Republica, habeis q ru-r ido consolar {l vuvxt rox h iios vin ivndo cv rca de nosot ros, por 10,'ual,LUIlOS re nd idas ~T'a,'ias a Dius q m- Sl' ha <Iignado clisce r u ir nos tanto bien..i" a \'OS por vucst r«sol ic it u d paternal. 1<:1Con-ejo v Alcalde m u ui cipales po r sl.\" e n n'pl'csel1- tacion <lei pue blo os sal u d an cor<lialnll'n1t' \ ~w ponvn sin rest riccioncs {l vu es.t ras,')\'<1,'n,'s. Dios os g-uanll', 1<:1President- lk la ""rl'0l'a"ir'm, ULEl;,\I<IO OWl'lZ- El Vicepresid., ntc d c :a ruismu,,ii/selll/o Liearaeo I",-Voca!es, Jose Antonio Urtir, (({rio.',\dl/r/{t'<, l'i{!jririo 1 'dsqur: Rlisrriu Herudude>, Hlbl{l{O (;I{rda t., 1 ;1 Sl'lTt'tario, Jf({}{{{d Si/z:tl ljarrt'i"a-' 1';1 Akak.' m u ni cipal..l/i!,tlld "!I'rhrdo. Rcj){;!JIi,.,{ <I( (',,/ II//.I,ia I), '(>ar!l/.liicli!o dr San/andcr -Proiincia dc (,'{If/II No,'/!',I (rjiisr/o 1I/IIIIin/,{{1 ('api/all t '-.io,,iili/d!".it' roo;', Cabe u.. "\ a l t o hou.»:!i,' t ra nsc rihi r a S. I':. la sijru ie n tv p roposiciou 'Ill",-] Concc j(l q uv prl'",ir1o e n sesion d e hoy a1'robo po r u nan irn itl a d <1l' yot(ls: «1':1 Consejo mu n ic ipul (It' Capi t an c jo. l'11 r e p rvsc n taci{m del Municipio, p resentu su a te nto v r cspe t uoso saludo al l<:xclllo. Sr. D,'lt'g-ado Apost,')lico. hac«lotos po r su Iclicidad y b u-rust a r v apro\'t'clla l~~ta o,asion para r at ific a r lv sus se nt irn ie n to-- d,' prof u nd a ad hesion ;'l lot Ig'lesia,'atolica apost olica romana Y {l S. S. Pio x. },:I Coucejo p rese nt a {l Monsejior Rag-Olll''ii la,'xjln'si,'m lit' su rcconoc irniv n to por su labor hu rnan itu r ia \ c r ist ia na en l'1 s,'nti<lo dt' l'stablecel' la con co rd ia,i" "tianl.,,;'la pal. til' la ~l'j){lhlica. «EI Pn'si<lt'nle, (;~I':(;()I<l() SIl.VA S.-" }';IVj ce p rvxid e n te,,lil'/al/drij,o Herrera,\':1 Voca.l, '}fartill Nojas- EI Vocal, J'r/Il/dad.lfl1lJ1JsIJ!"(j EI Sl'cretal'io, Cris/I)/J;t/ Herrera n,»

131 Con sentimientos de la mas alta consideraci6n tengo el bonor de suscrihirme de S. Eo su humilde servidor que hesa sus manos. GREGORIO SILVA S. Al Excmo. Sr. Dr. D. Francisco Ragones l, Delcgado Apost6tico de S. S. ante el Gobierno de Colombia- E. S. M. Un inrncnso y pat riotico juhilo rcbosa en los aetuales mementos en el corazon de los catolicos hijos de este pueblo al recibir albo rozados la grata noticia del feliz a r ribo {llos pueblos de esta Provincia del muy dig no rep rcscntantc de S. S. ante el Gobierno de nuest ra Pat ria. Desd e que la Provid encia hubo de per rni t ir que el suelo colombiano recibiera en su seno a V. E., todos los aetos de su augusta.y cristiana misi6n se han cncarninado {l t rabajar por el engrandecimiento de nuestro pafs, la concordia y la paz errtre sus hijos; labor sabia y elevada que 10 ha hecho acre cdor ala est imacion, resp eto y aprecio de los colombianos, y q ue sera perdurable entre ellos, mar-cando asi con piedra de oro la gtandeza, talento y acie rto en el dcse mpeno de la sublime misi.in que se os ha confiado. Aceptad pues, Excmo. SI'., como una pe q uejia muestra de nucst ra adhesion a la Santa Sede apostolica, la sirnpatfa y ad mirac.ion de las tantas y merecidas que {l cada mornento se os prodigan, y la expr esion since ra de nuestro aprecio y agradecimiento eternos. Gramalote, Feb rcro ~ de EI Cu ra par roco, BENJAMiN CASTELLANOS-EI Pr esidcnte del Concejo, JCAN DE P. PENARAl'\DA-EI Alcalde, r;uillerjjlo.iimcncz---f-i Juez municipal, Pcdro ], Uribe Cr-: EI Pe rsone ro, f(oberto Namfrez R.--l~aimundo Li ne ros, Sebastian Yanez, Adolfo Valenzuela C., Luis Pefia, Jose Marfa Vargas, Silve rio Yanez, Gabriel Vivas, Agustin Ortiz, Jose Marfa Bravo, Leonardo Latorre L., Pedro V. Suarez, M. A. Poli, Zenon Rojas 0., J. A. Hernandez, Bonifacio Soto, Pedro N. Yanez, Benicio Pefiaranda, Andres Estupiiian, Domingo Bruno, Juan Bautista Rojas, VIctor Rojas, Milciades Vargas, Luis G. Vargas S.. Jose Marfa Pc iiar-and a, Andres Callejas- -EI Notario publico y miembro d cl Consejo municipal, Patricio Stfllchcz-DomingoA. Contreras, Rcnon Suarez, Elfas Mora, VIctor Manuel Santos, Miguel Roman, Luis F. Joves, Manuel Lazaro S., Belisario Peiiaranda, Camilo Prada C., Agapito R. Yanez, Jose A. V iilalt a, Epifanio Colmenares, Oscar C. Ve rjel, Vidal Pefiaranda, Luis Vargas, Carlos Yanez. gleazar J. Rolon, Francisco J. "Cribe U., Jesus Jimenez, Jose Holon Suarez, Rosar-io Perez. Hafael Pefiaranda,

132 Excmo. Sr. Deleg ado Apost6lico-CUcuta. Salazar, Febrero 11 de 1907 COil alborozo he mos recibido la not icia de vuest ra llcgada a Cucuta. Con el mas profundo r csp e to Y {l nombre de est e pueblo as e nviamos cl salu d o de b ie nve n ida como {l representante del Scbe rano Pont ificc, y confiados en vu est ra bondad y bc ncvulcncia ab r igarnos la espe runza de que nos honrareis y alegrareis con vucst ra presencia como 10 habeis hecho can ot ras poblaciones. Vu cst ro s estimador es respduo~os e hijos en Cristo, Luis Frl ipc Ramon, Prcsbitcro ; Julio de J. Yanez, J. Antonio Or tcg a, Emilio Cal d c rou, Bclisa rio Calderon. Joaq u in Y;itiez, Sc bast ian Ortiz R., Ncpornuce no Hodrfguez M., JCl:'lISCuzman, Felipe Ranjcl, Car me rio Villamizar, Enr iq ue Cote R,, Guillermo Pe iiar and a B., Pascual Ve rj el, Mc dar d o Dam, Cice ron Parra, Ramon Boada ~1., Hu mbe r- to Bu rzo, Luis Morales R., Lcopoldo i\icndez H., Victor Villamizar ~r.,jose A. Roman, Salvador Caruso, F'rnnc isco Magnavit a, Manuel Mu t is, Fermin Y{lney. R., A. Madariaga, Pedro Villamizar,Manucl (~uzm{l11, Polica rpo Martinez, 1'\estor Sandoval (;., Rafael l~amlrez l~., Manuel Fortoul, Jose Alejo Villa mizar. Juan B. Gar bi rus, Domingo A. GUT-- mtin, Ed uar do Y{lnez Coo Juan Ar giicllo, Manuel D. Luu t ie r, V. l<:. Barroso, G. Barroso. Fl-ancisco Boad a, Sandalio Cancino, Lorvnxo G. Cu billus. Cnpit a ucjo, Fcbrcro 24 de 1907, Excrno. Sr, Dde~a(l() Apostol ico :\!on-;ci10r Francisco Hagonesi. Malaga, Excrno. Sr.: Al t ene r hoy la g-rati;;ima nueva de la aproximaci6n de V. K a estes pueblos nos ap resu rurnus con vivo jub ilo a p rcse nt a ros nuestro mu y co rrl ial y ruspe tuosu saludo y {l of rece ros nu cst ros pequenos servicios como vuest ros humildes hijos, Y alborozados n ui-st ros cor azoncs con cl c xcepcional acontcci rnie nto de svr hon rn dos can vu i-st ra a mable prcsencia, nos po r mitirnos manif cst a ros e l a r d ic nt c d csco, nuestrojusto y sol icito int e res de ntos au nque sea t ransitor iarnente en esta poblacion, en don dv t\'n~is ve r dad eros hijos que profundamente os ve n e r an, a ma n y r cspct a u. Espe rando set' favorecidos, y rcite randoos nuestro calurosa saluda de bienvenida, tenernos a grandfsimo honor susc ribi r nos de V. E. can todo respeto y consi dc racion rn u y

133 obedientes hijos y respetuosos scrvido res que solicitarnos reverentemcnte vuestra apostolica bendicion. Pri mitivo 1"16rez, Pr'esbf'te ro ; Ncpomuceno Espinosa B., Luis F. Vera, Cr escencio Acebedo Q., Crisostomo Quir6s D., Jose del C. Quin)s, 'T'ransito Bermudez S., Isidro Sanchez S., Felix K Barajas, Oli mpo Quiros, Evang-eiista Quir6s. Solon Hernandez, Focion Suarez B., Cristobal Lozano G., Crispin Cristobal Soler, Facundo Zambrano. Alejand rino Herrera, C~regorio Silva S., Eustaq u io Wilches S., Cristobal Hen-era, Ar q u im ed es QuinJs, Primitivo Barrera G., Mart in Rojas R., Salvador Le6n G., Pedro I<:lic{'chea, l<:varisto llianco S., Ananfas Riano P., Rafael Arias. Juan :K. Castaneda, Aristides Gar cfn, Deog rac ia«florez. Florentino Chaparro, Viilal Reatig-ui (). 1\1uy ag radecido pur la atenta manifestacion del 24, envio it listed y it sus felig reses especial bcndicion, en la confianza de podc r pronto saludarlos per-sonalrne nte. fo;xcl1lo. Sr. D. Francisco Rag-onesi, Arzobispu de Mi ra, Delcg ado Apost6lico y Erivl ado Extl'aonlinario (h S. s. pro x ante cl Gohicrno (11' Colombi a. I<:xcmu. Sr.: Con ve rrlad e ro j ubilo tcncrnos el hunur ell' sa luda rox, y al presen ta.ros n u est ras consid e raciones y rl'spdos hace rnos votos por q u c vuest ro paso POI' estas regiones sea feliz y nos d ejeis las huellas de paz.r de progtl'su que espe ramos, atcndic1as vuest ra santa m ision v las ele varlas Iac ult ad ex <1t'que venis invest ido.. I<:s m uy c1iffcil q uv en el t r anscu rso d e var ios ano,; teng-amos los hab it an t es de est as corna rcas la d irha (Ie vr-r entre nosotros a1 1!t'I111ino Delegado y dig-no rep rcsentante de nuestro Santo Pad rv ; pun/til' el acto d e abru-g'acion que V. E, se ha im pu csto con cst«viaje pcnosisi mo para palpar mcjor las nccesirlad es de Ius pueblos, ni t ie ue pn'l't'(!t'nte ni es [;lcil q uv tt'nga irnit ad orus. Soat{l. F'eb rc ro '27 d e }(J()7. Rafael Valderrama, Francisco Pinto Y.. J. E. Vargas, Jose Misru el Pejiue la. Pa hlo J, Camacho. Daniel Honderos B.. Mar t iniano Cardenas, Jose tie J. Mant illa. Leonidas Salazar, Hc lisar io Leon, Virgilio Sua rez, Florentino M. Nino, Jose M. Mcd ina C.. Antonio Latorre, Octavio Fuentes, Espfritu S. Latorre, Juan I<:s]a\'a R., Ramon F'ernandez, Francisco Alvarado, Bue navent m-a Ruiz. Carlos Marfa

134 Perez, Rafael Ramirez B., Jose Maria Briceno C., Carlos A. Villarrcal, Rafael Sanabria S., Jesus Peiiuela. Aristldes Rodriguez, Pedro Gomez, Joaquin Perea, Joaquin Cujar. Romulo Pen lela, Jose Medina N., Luis A. Torres G., Jesus Garcia, Ramon M. Diaz, Juan B. Mejia C., Jose Cordero Prieto, Teksforo Manrique, Viccnte Ardila r., 1'eotiste Mesa, Samuel Marquez, Gumersindo Camacho, Bruno Carreno, l'~udoxio Carreno, Matias Salazar, Carlos Jorg'c Briceno. Mariar.o Santos, Luis V. Ruiz, Jose Lopez, Victoriano Mutis, Rafael Rojas, Alfredo Reyes P.. Anunciacion Salazar, Domingo Salamanca, Facundo Barrera, Juan de J. Obando, Pedro Hojas B., Vietor M. Reyes B.. Policarpo Escobar COl Jt~SUS1\1. Uribe H., Jose Aparicio Peiia, Josf- nahriel Garcia, Jose Ma ria C(lrdoba, Eleuterio Rojas, Evangelista Avila, Jose Pelayo, Roso He rnandcz, Jesus Mancvra, Jose R. Lopez. Jose Vicente Mance ra, Santiago Br-icciio, I<~migdio Dulcey, F'rancisco Fernandez, Evangelista Velasco, Nestor Prieto Ramirez, Fulgencio Bonilla, }<~udoxio Fernandez. Francisco Dueiias, Hcgulo Barrera, Cruz Celi, Virgilio Valcarcel, F'rancisco A, Eslava, Juan Cristo, Mario A. Mancera, Alejandro }1~spine1,Sie rvo Dulcey B., Daniel Orozco MOl Nepornuccno Morales C., Antonio Maria Vilbrreal, Alcibiades Dlaz, Pnt roc inio Nino, Arst id cs Herrera, t Jliver io Torres, Nepornu ccno Bernal, Aristidus S(mdla, Juan de J, Mancipe, Reyes Medina, Ignacio Riez. Pablo Antonio Briceno, Carlos Ao Alvarado RooJuan AnJ.{arita, Martin Banco, Francisco J, Cifuentes, l<~lfasbacz, 1\1. Jesus Dtax, }1~\'angelista Nieto, Manuel S. Cifuentes, Juan Mancera, Ju;t1l B. Buitra~~o. A 1tonio Briceno. EXC1l10. Sl". j)el~'g';ltl\l Ap:)st{'lico Mon sefu rr D. F'r anc i-ico Nagollt.' si...:apit;l1iejo. La \'IlZ I!l' los hu m ilclvs cnaritn rr-vc r e n tvs y rr-spe tuosos hijos del valle de San :\IiJ.{uel se accntua hoy con su ma cong ratulacion al presentaro,-> cl lwne\'olo salurlo que como todo pueblo c re y e n t e debe re nd ir ;11 dist imru ido Hepresent au te d el su p rc mo.icf'e del orbe lat.')li,:o, y lle nos de' rcj.{ocijo glorifican la sapient isima idea de rccor rc r estas d istantes reg-ione:, d el centru de vu est ru act iva accion, (, fin de hace r b r illt.r la sublime lu2 d el \';vang'l'lio y perpetual" ('11 elias cl conoci m ic nto de la antorcha tit' 1<1 verrl ad. Sag-rada y laudable como es vuest ra m isiori. n.ul a lilas ex p rvsi vo y g randioso (IUt: rccibir de vu cst ros lahios la salu tacion de Pax vobis, sirnbolo de concor-dia y de relij.{iosidad, q ue los pueblos q u c sabe n est imur los fu e ros catolicos rniran en muy alto J.{:-ado aq uel alt isi mo saludo como el e rnblvrna de salvacion que esculpio 1.'1 Red e ntor del mundo.

135 - 130 Con todo el respeto y conside rachin que os son d e bidos pe dirnos nos impartais vuest ra bend icion, San Miguel, F'eb re ro 28 de Satu rnino Leon, T'ad eo Alvarado, Sandalio Leon. Jesus.Mojica B., Nicanor Fajardo, Pedro D. Villarnarfn, Cayetano Hernandez B., Tiberio Ramfrcz, Rogclio Heyes, Rafael Luna, Jesus Arenas, Juan Marfa Her-rera, Cosme Rincon. Rosario Villamil, JOi;e del Carmen Camez J.. Ramon Ban-era, Antonio Leon, /-<:,'angelista Salazar. Climaco Fvrnandez. Meliton Landazabal, A1cidcs Guern'ro. Pedro L. Salaza r. T'el mo Monsalve, Fernando Herrera, I<':migdio Salazar, Celso Victor-io Augur-ita, Nicorn ed es Castellanos. Se rg io T'clrnu Sanchez, Oahino Villarico, Santiago He r nanrl cz, Tomas Gutier-rez, Abigail Vargas, Primitivo Cordero, Antonio Esteban IIel'l1andel.. Samuel Montafies, B:zequit:1 Montaiies. Ramon A. Jaimes, Eliseo Sanchez. ~epomuceno Oliveros, Julian Toscano L.. Domingo Perin). Lucas E. Jai mes C.. Vfctor Salazar. Damascene Castellanos, Hilario Puentes. Leopolda Leon. Juan Quintcn>. Luis J. Luna Z.. Simon Hernandez B.. Ovirl io Fajardo, Rcsu r rvccion Castellanos. Abelanlo Alvarado, Ped1'O J. He ruandoz, Gregorio Puentes H.. Antonio Camacho, Manuel Montaiics. 'T'orcuato Villamarfn, Pablo K Jordan, Lino Esninosa, Luis Garcfa. Antonio Barrera, Bernabe Caceres G.. Jose Jacinto Gaona. Jose Marfa Pinto. Cr istobal Torres, Elad io Sandoval A.. HipOlito Sanchez, Bel1t'dicto Mejia, T'rino Gondtlez. F'lo rc nt i- no G()mel.. Jose Dolores Blanco, Antonio Jordan, EXClI1o. :Sr. D,', D. F'rauci sco Nal!'Ollt'si. (jig-ilo D.I' j.!a<!o ApostilliC'o,It' la ~anta St',l" Pamplona. Excrno. SI.: Vuvst ro arribo ala c iu d ad rn it rud a lit' vst a nio~~l'-;i!s,'s uno d e aquellos acontecimientos rams Y providvnciales (IU" Dim; en su infinita misericordia decreta para hace r d esce n- del' sob re los pueblos inrnensas hendiciones; vuest ra p resencia entre nosot ros es un siguo del arnor que el Padre celestial ha que rido rnost r-ar-nos, para nuestro consue lo,." "0:-;. Excrno. Sr., sois sin duda 1'1 escogido poi' Jesucr isto Nuest ro Senor para rep rese nta r d ignamente entre nosot ros al.jefivisible de la santa Iglesia. cuya benelica accion conforta nuest ras al mas en la divina fc, reanima nuest ros esp ir it us abatidos por los elementos de este Higlo.\' vivifica nu est ras alrnas en la pract ica del bien. Por esto nuest ros corazones rebosan hoy de entusiasrno, de aleg rfa cristiana, Y IIui<;iel'amos ir hasta vos, /<;xcmo. Sr., para est rechar y besar vuest ra he nigna mano." para recibir personalmente vuest ras

136 be nd iciones, las del lito iticc, lkkg-ado I_ 1I,~ son inc Pont universal del Divino f undador de la santa Ig lesia catolica, cu ya autoridad sost ie ne con fue rxa inq ue b i-an t ablc la fe de Cristo en cl urbe cristiano ; peru ya que no pod c mos po r circunstancia~e!-peliakfgozar <1l' lu pr"l-:('ncia <1,' vu cst ra I_'XCt'- lcntc pe rsona, va mos con nucst ro r-sp irit u hast a n)~ para llcvaros nuest ros sent imivntos de a mor,,,'\wraci.'ji1 v ufr e- ce ros el since ro reconoci rnie n to <ii' nl,'~tra sublime.au tor i- dad, y la su rn ision cornpleta y l'1 acabmil'l1tt l incondit:ional ;1. vuestros mandates. porq uv suis "j tli~nlt Ikkgado del Vicario de Cristo. a q uie n los c r ist ia uo-. t!,:h"\i1os ohedcccr. ()!- habla r io-, con e1 COI'ilZ(1I1.-n Ia mu no., \"os,!';xcnlo. Sr.. que salj~is m e dir.' ilpn'ci;'l- 1l'.I,'stro!-.;,..nt im ic n to- Ill' ad hvsion y a mor (l la Santa Sed,' y ;\,-os. dig'l1u Ixqlrescnta n t c de ella, los ofrcce rcis s,'g-urament, a1 Divi no Macst ro..'1 en su nomb rc e nvia rvis vuest ras b-nd icioncs al 1)\1t'1>10 d e Ar boledas, qllt' con alt-gria,'\'\stian;1 <ts,;alu(la,'11 I'S1<- Ilia Ie liz. l)o:mciano A. V.\I.1)H-{t(.\.\L\. l'r, "hlt' l li: Ausc lmo Lizarazo V.. Olegurio Ortiz, Jose Antonio Ortiz, Ci pria no ()ru()- jiez R., Aurelio Jaimes 13.. Salvador Rod l-lg"ul:z. Jesu~ Jaimes, Carlos Sanchez, Alfonso Parada C.. 'Iig-ud Acebcdo. Jenlnimo Ortiz, Hipolito SUa1'l'1. R, Eli~L'o Silva, Daniel Ser runo, ManuvI Silva Bar rv ra. l~afal'lsilva, Vidor Manuel Romel-o, Ru l.en de Hcrn.indvz. Francisco Pinto C,. Hrliodo ro Pavon, He r m.urcnes Villamizar. F~lix t~on(k 1\1.. \ :1ise rio Hernan.le«.

137 ~~~ek~~wff"~~;rl~~~~~ _ _ ,.. DISCURSOS DIRIGIDOS AL SR. DELEGADO Excmo. Sr. De1egado Apost61ico Sf. Dr. D. F'ranclsco Rag"on~si. Privado de todos los mer itos y recursos necesarios para hace rlo, tocorne en suerte, Ii~xcmo. Sr., el alto honor de dirigiros en nombre de todas las autoridades civiles de este Municipio, de cuatro establecirnientos de educaci6n primaria y en fin de t res mil ovcjas red irnidas can la sangre preciosfsima del Divino Salvado r, el filial saludo y las manifestaciones de complacencia par la visita pater-nal con que os digmtis favorecernos. as recibimos, J~xcmo. Sr.. como angel de paz. De allende ej Atlant ico habcis venido can ellaudabilfsimo fin de unir las partes discordantes y constantemente en lucha en nuestra querida cuanto desgraciada Patria; vos habeis hecho que la Iglesia y el pod e r civil de Colombia se estr echcn mas y mas en f rate rnal ab razo, hacieridose reciprocas prornesa s de apoyo, y habcis sol id ificado las bases del bienestar social; y hoy mediante el auxilio divino ve is coronada vuestra obra colosal coad yuvando eficacfsirnamente a los nobles y grandiosos esfue rzos del primer Mag ist rado de la Nacion, el Excmo. Sr. Presidente d c la Republica. Y n080tl'08, todos los que ve rdad e ramentc amamos la t rauq uilid arl publica, fundamento d e p rog rcso, cug rand ec irnicn to y fclicidad, os vivi re mos profunda y eternamente agradecidos POI" los singularfsimos bcneflcios que haceis {l Colombia. Por esto el pueblo entusiasmado e xclarna : i Hosanna al que vicuc en el nombre d el Senor! Esta peq ueiia parte d el rcbajio de Jesucristo que hoy tiene la dicha de rcci bi ros en su se no hace Iervicntes vot08 al Cielo pal' vuestro bienestar y desea arrancar del Cordero Inmaculado un tor rente de beridiciones para vos, gxcll1o. Sr.

138 en p d ir. cordial saludo <II' nida y r- 133 ; Mutiscuanos! Si las Iechas gloriosas de 1111 pueblo be r ccuerdun sin cesar y se conme rnoran d e aiio en aiio con d e most racioncs de jttbil0, csta tn mbien <1..0 c qucd a r grabada con ca ract e rcs l~enlurahles en los anales de nu est ra histori a, po rq ue roy he mos visto al angel 11e la concordia, al viceg e rente dvl 11m' ocupa la silla Ill: San Pedro, Fausto aconreci m ie n t. que 'luiza no se rqh'tira un cl cu rso de nitcstra vida. Un vivo sentirniento de respctuosa simpatfa me anima ;'1(lil'igiro~ la palab ra para signiticaros, I~xcmo. Sr., la intima satisfaccion y e l rcsrocijo que con mot ivo tie vuest ro feliz a r ri bo anima a todos los hab itnnt ex de la ciu d ad de Chin.icota en general, Y par t icula rrncnte para p rescnt ar-os en nom b re de la Sociedad ivtlr!c() de la/uz ('lilud. (1\IC m e honro rcsi nuestro hicu vc pone nos {l vuest ras ()rdenl's. Como hab ruis n-nido ocasion de est u d ia r c l l~l'glamento que nos I'igt.' y los muvilcs que g'ufan nu cst ras laborcs, solicito nos su min stn~is alg u nas lu ccs, Y pa ra pe rfcccionarlo os sin'ilis hace rnos alg'unas in d ica cion cs. las cualcs se r.in uce pt ad as como mandates, ya que la conrianza q ue nos hab(.is inspirudo n.1s oblig-a ;'1ello con pa t c r na l au to r idud, pues vucst ro se ncillo I" hurnild e porte ha cau t ivado nu est ros cor azon cs. ibienvcnido sea cl EI1\'iado til'! Senor ~es la \OZ q ue resuena en los {tnloito,; de Colom bia, mi q u e r id a pat ria. isf! i bienvc nido sea d v rtuo"o Rcp resentant«q ue S. S. Pia x con sabidu rfa \ singular insp iracion d ivina nos l'l1\'i() como Dekg-ado Ap()stolilo ~ Colombia os vio llegar {l sus playas it sv uiejanza d el buen sarnar it ano : at ruvcsustr is los marl's para vc ni r a trae rnos Ikspucs d c con t ie nda fratricida prccioso b{dsamo para cicat rizar nucst ras he r idas. Mi pat ria os con ternpla cornola figu ra ell' la hiblica paloma que!los t rajo 1a feliz nueva con "I ver-de ramo 1'.C olivo. Vinist cis a prcd ica r la concordia entre los colornhianos.. v vuest ra SU;.\'l' 1'0" ha sirlo fecunda scrn illa. No l's ext rafio pues que las mult itu des se agolpen y salg an a vuest rc paso para. salu d ar-os, q ue todos nuestros corazones reboce n de j uhilo a vuest ra vista, si basta la campijia se ha enrralanado con sus preciosas flor es, con sus prv-

139 dilectos atavios, par a ost entar complacida it vuest ra vista su virginal belleza. Interpretando el justo sentimiento de alegria que la j u- veritud d e Chiruicota sient e vicndoos entre nosot ros ; la gratitud Clue en su pecho st' albe rga por las altas distinciones que le habeis prodigado; convencidos como estamos del divino preccpto de q u e el principio de la sabidur ia es el ternor de Dios, e n nornb re de este caro centro aq u i reu nido os ratifico la e xp resion de nuestro filial afe cto, y os ruego nos impartais la bend icion apostolica que nos em-fa el ilust re Pontffice de la Iglt'sia catolica desdl"' cl sag-rado palacio de-l Vaticano. }<;s nuestro fr-rvie nte d eseo que sea is feliz en vu est ra gira por estas coma r cas, y q ue en vucst ro noble corazon se graben las de mostraciones de afcr to y simpatfa con que- os d isting u e tin pueblo agraclecido. Chinacota (Santander), F'e b r e ro i (Ie 1 1 )()7. gxclno. Sr. Delc).:"ado ApostOlico, El pueblo en cuyo t e ITitu.-iu acabais til' pe ne t ra r me ha comisionado para que a.su nombre y en el mio propio de a V. :K cl saludo de bienvenida a este pcdazo d e Colombia, donde se albe rga un puiiado cle catolicos q ue ~i han sido cspiritualmente desg raciados hasta aq u i (si me es pe r mit ida Ia expresion ), espe raban ansiosos Ja Beg-ada ell' V. E., porque con ella creen se re rned iaran los males que los aq uejan. Aunque es muy d if icil par a m i, tanto por no posee r ningunas dotes orator ias como por Ia cd ad que 1111' d enicga el Caracter ne cesario para ri-p r esentar una colcct ividad nu rne rosa, no vacil~ u n momenta en accptu r tan honrosfsi rna mision, porque como catolico conveucido siento en mi alma hervir el entusiasmo pur todo aquello que vaya encaminado a glorificar al Rey rl el Unive rso pe rsonificado en sus legitimos rep resentant cs. As! pues, /<;xcmo. Sr. inte rp reta ndo los senti mie.ntos de que estarnos anirnados, se rvios aceptar el respet uoso y vener ando saluda que con efusion y cariiio us damos los hijos de Chitaga, extensive a vuest ros ilust res compaiieros, como tambicn los mas ardientes votos por vuestra cornpleta salud, fe1icidac1 v tina larga vida pant mayor bien de la humanidac1 c r istiana. As! como no ha rriucho que se engalanaban nuestras ciud ades haciendo der roche de ostentoso lujo ; que se levantaban al"cos d e t r iunfo con le mas e insc r ipciones honorfficas :

140 h :,~11"SLl "':Z de bonanza y tan re como 'I1H' ninfas revest.idus con el t raje sirnbolico de la pu r eza 111'- vaban en sus manos vi rg inales coronas de laurel, r que inmensas muchedurnbrcs sc apostaban entusiastas en sus avenidas todo esto nad a mas que para trihntar honores a un caud illo tr-iunfant e q u«e nt ruba o rjzu lloso de sus hazafias a 1I11t>stras capit ales bland ieudo su vspad a manchada mil y mas n'o's CUll la sang r c <It' nuest ros hcr manos, i etlan j usto "S'IlI' hoy que los santandc rcanos he mos u-nido la d icha de r" ia I'\'l~ihil-a V K en vi-rita que ent rajia sing-ular si mpat ia y ap r ec io, os t r ibu tc mos c ulto de ad rni rac ion,'- respeto! Mu y \t'abk cs 'IUl' en esta,~pora. 'IUt' Ior murri pag-ina de oro en 11u c-st istor t-poca Ielicid ad, le- \';tl1tcilius a rcos t r iunfales y t'ng-alanemos nuestrus poblacio- Ill'S. ap rcsu ra.ndonos a re cib i r dig-namentt' al ilust re hero\' q\!t' r ep rvsv nta en Colo m hia 101 autor id ad suprema del Prtnci p. d el catolicismo. Conter nineos : m u y grande es nuestro huesped y sornos quit-;l iud ijrnos de tanto honor. pe ro ya q ue cl Cielo en com- JH' nsal'i.'ji1de nu est ras pasa d as d csvcnt u ras nos concede hoy,'st" gahnliin. j usto e:--'lilt' asi 10 reconozcarnos.\" le t ratemos como;l alto misione ro q u v vien e ;~ confirrnar la paz de nuest r a arnada patr ia y ;l hacer nos Iccundos en el bien. derra mando sob rv ella Y sobre nosot ros "j baj!.,amo pur isimo de la d ivina e nsejianz«que se desprendl' del misrno que represent" al Pescatlor <1('Cali1ea, l'sco/rido PO}' 1'1 mismo Jvsuc r isto pal-a SCI' la hast' im-on movib lc (I('l/rrandioso t'tlificio 11.' la Ig-L'sia l"atl)lil-a, Bi,'n plies, Excillo. Sr, : ent r ad e n nuest ro pu eblo, q u e au n q uv poore.\' hu mildv. ansia vu est ras bendicioncs : en el no hallarsis "I orua mcnto y gala con 'I ill' dvbe r ia se r vest i- do para i.n acto tan t rasccudcntal, por q uc el infort unio ell la pasad a cont iend«c ivil 10 red u jo <I. la absolut a pob reza, PCI'O c n carnbio "ereis rdkjat"sl' en los s,'mldantes de sus morudorvs 1a fdici<1ad.\ satisfaccil)n \jul' dan el cu mplimien to ti, una santa aspi racion, y POl' t'sto comp re nd cr-eis que,'11 sw; co razoues SL' e nt rct cj e n poi' la gratitud una guil" naldr de olivo y otra lie laurel para cenit" moralmente vuest ras siene- y las de aq ue l q uv e n nornb re rl-- Dios os ha enviado cnt re 11080tros, Excmo, SI', ~OREln() DEU;,\))O A, J)hlTKSO DIKIGIIJO,\1. IUIO, SI<. DEI.l':GADO APOSTOLICO A SH U.Jo:I'ADA.-\ CACOTA I';!. 2~ DE FI':BRERO DE 1907 Excrno. Sr.: 1<:8 la pr-i me ra <J u, un personaje ilust \'08 honr a.-on S.l presencia la modesta aldea a que acabais de

141 ljegar. Lle nos de entusiasmo y jubilo todos HUS habit antes ocurren p resu rosos a daros la bienvenida y abren sus corazones al rejroci]o por tan Iausto acontccimiento, que hara epoca como suceso saliente en los an ales de su vida. Vastos territorios habcis recorr'ido para llegar a cste rincon de vuest ra grcy, yen el concierto armonioso de recepcioncs brijlantes que los pueblos alborozados hayan presentado a tan distinguido huesped se oira la nota dc la nuestra como acento humildc en el diapason de los sublimes arpegios. Perrlonad nuest ra sencillez : ignoramos la pompa con q ue se debe rccibir a tan alta je ra rqu ia j solo sabe mos 11UC los hijos se entregan a arrebatos de alcgrfa cuando llega a cllos el rcprescntante del Padre de la cristiandad sob re la tierra. Somos vuestros hijos en la Iglesia, y en n080tl"os encontrais sus valieritcs defensores. Vuestra presencia es para nosotros nuncio de paz y de ventura; ella nos haee evocar hechos portentosos. Vemos en vos al ungido del Senor, al ilust re genoves, al marino heroico, al navegante sin rival. Colon, el descubr idor de un mundo Y vuest.ro compatriota se nos aparece en estes instantes con todo el rcsplandor de su gloria, coronada su cabeza con el nombre de America y circundada BU Irente de est rellas, entre las que aparecc la Nadon que lleva su nombre: i Colombia! nuestra querida y adorada patria. Cuando volvais al sene de vuestra bella Italia Ilevadle nuestros votes de admiraci6n y sirnpatfa, y acordaos de q ue los hijos de Cacota os quicren y os adoran, He d icho. l>iscuhso PNONUNCIADO PON 1-:1.SR. DR. n. 'l'jmoll'/'n liij';nesi';s Llmo, ~r. Deteg ado Apost6lico. Comisionado por Ia Municipalidad de este Dist rito para rendiros su saludo de bienvenida, 10 mismo que a vuestros ilustres compaiie ros, os prescnto esta poblacion, la mas recicntemente fundada en est a Provincia v la mas tristernente abat ida por los furores del ultimo vendaval de t res aiios. Desde los ticmpos del gran Bolivar no habfa tenido en su sene este pueblo a un tan ilustre viajero como el que hoj llena con su nornbre Y con su fama los ambitos de la Republica de Colombia; de csta Republica mil veces d esg'raciada porsu indisculpable afici6n a. las eontiendas civiles, que la han llevado ala d esmc rn br-acion de su territorio v casi ala extincion de su nombre en el 1'01 de las naciones, Si una rebelion mas sucediera contra los pod e res constituidos, los colombianos tendrfan que llorar, como Polonia. pe rd ida para siempre la libertad de BU pat ria.

142 d ig.\ ft isi rno colonizador es..lcf'e de la cr istiandad, 137 Mas como todo mal t rae su re me d io, (on el ultirno tu r- hi(m vi no el am or a la paz y el entusiasrno por la politica (lei primer ~,lagi~trado de la Re publica, que con un inte res ve he rne nt c v con valor sostenido d csa r r-olla esc prog rarna ell ter mino- e n que no 10 hab ia heche ning un ot ro mandatar io durante d sigh> que llevarnos de vida incl cpc ud ir nt c. I'~sa labor. corno todo, 110 hubie ra alcanzado el vigo r que se le H' sin la in mcdiata colaboracion d e l e m in e n te Sr. Dclegado, a quien e stc- pre blo r.-ci be hoy ent r«sus hrazos can cntusiasmo sublime, Mil hc-c ho-, us scrialan ;l la con,;idera(i(m de los ciud adanos,'oilhl Princ ipc de la Iglesia y,:oi1w habil isi mu diplomat ico, pt'ru d isc u lpad q uv nil,)s ha hl c sino d,' aqlwlla im per iosa n"t'",;i( ad na cional. I<~stepu r blo. at ado corno e l ant ig uo /<:ncelauo can la eternidad de una cad e na a la et e rnid ad d c una roca, no aspi ra a Ie r ro.a r riles que no pasaran por aq ui en media centuria. ni ;'1 in d ust rjas que su incornunicacion no le pe r ru itiria d csar rolla r : picnsa ~I)l() en la paz para re haccr sus capitales POI' m e rl io dl'la seg"ul-idad, para sost e ue r sus colcjrios p r ivados. para cucauzar todns sus Iuc rzas morales en una sola corr-ient«y pa ra cnf rcntarse con sus picas ;'llas c uat ro m il leg uas cuad rad as de bald ios que aq u i no l11;ls. d e nt ro d c su jurisd iccion. d esaf ian {l Ill'; ob re ros del t rabajo. ( los capit alistas los Desmantclado y t r iste al pil' d e l nevad o del Almorzaclc ro,,'o1\1ll una casa d e campo e n me d io de u n yermo, sie n- k no e:-;tar a la a lt u ra nccesa r ia para acog""r d ebid amcnte a tan ilust n- h uespcd, pv ro 10 rc c ibc con cl afcc to y con la g-ratittul d e.ruicnes ve n en el ocasioual mcnte (l uno de los g rand es fu n rlado r cs <it' la paz : e n su modo de se r Racial. al filant ropo y al ha hil d iplornat ico,.\ l'n "I or d c n r elig ioso. al n n'pre,;('ntante del Sahe muy bi en est a pcq uciia e nt id ad polit ica de cuanto valor sun vucst ras infl ue nc ias u ntv los pueblos v entre el clero de la l\:eptlblica; sa ln- 'I ue en tor no de \'uest"ro clevado p restigio se.ncuc n t ran modcradas tod as las cor r ie n t.es dvl urdcn social. y sabc en tin ella m isrna qul' por tan mer-itoria labor os rcconocera,' d ia no m uy lejano, por el momenta que s{)lo co r r espondv a l rt-c uv rrl o,it- los ve r-d ad e ros lihe r-tado rvs de Colombia. I';ntrad pues, sapient isimos viaj c ros. en hom b ros de est a poblacion '111e os ad miru como grandes y que os contc mpla cmocionada como corazones nohiifsi mos v acr ecdor es al mayor respeto social, - Cerrito. F'e b rc ro 211 d,' 1'107.

143 138.- DISCURSO PRONUNCIADO POR LA ALUMNA D'~L COLEGIO U/ ;L CERRITO SRITA. ANA CARVAJAL, EL 26 FI';BRERO DE 1907 Ilmo. HI'. Delegatio Apostol ico. Del fondo del cor azon e mocionado v con movido POIlas mas g ratas irnpresiones cornpar ezco en este augusto momenta a presentaros, Ilmo..r Revd mo. 5,',. los mas fervientes votos de g ratitud y de arnor por vuest ra generosa visita a este lugar aislado.r e xcentr ico de la Republica. Vuest ra mision es sublime.r lorresultados que de ella deriven estos pueblos se ran incalculables: pe ro \.'11 10 que se nos of rece como mas ocasional y opo r tu na es en ese scnt i- micnto de paz.r <h' union entre los colorn bianos de qui' habeis most rado se r el mas sabio p red icador y el colabora<lor mas encurnbrado de nuestro (~obierno. Aquel inefahle don de la ar rnonfa habra huido del te rr-itorio pat rio, dejaudonos en la mas angustiosa ha rbar ie. cuando d esde la ca.tedra de vuest ro ministerio e vang'clico y sublime se dej6 oi r la elocuentc.r autoriza<1a \'0;1, del Representant e del Romano Pontffice, e xhor taudo a to<108108fie les a defender el orden y it ensalzar la fraternida<l publica. \.'specie de contineute moral en que se ag itan y s,' d ese nvuclven las pasiones y las ideas, hasta pone r nos en camino <I. obtener la sublime aspiracion universal: la d e la estahilidad en el organismo politico. Eleg ido acer tada y digna ment e por el sucvsor d e Pedro para realizar obra tan irnportante, tan arriua y por tentosa; cousag rado y ungido por esas manos t1'ansparentes P intang ibles, para coronarla y darle solidvz, os hallais dese m- pejiaridola, ilust re ob rcro de la vijia del Senor, a contcntamiento general, para bien de Colombia y de toda la A medea. como si hubierais sido inspir ado pal' esa Ziolulltat! suprema que asf BC manifiesta ostensible mente en el destine de todos y de cada uno de los se res de la c reaciou, como e n las leycs morales que rigcn la marcha de los pueblos y dv I,ls socioclades. Asf pues esta pohlaci6n, al abr iros las p ue r tas para II U<' entrcis como el bien venido mcnsaje ro de la justicia y de la arrnonia, os presenta las mas rend idas mucstras de su ag radecimiento por tan sejialado se rvlcio como el que habeis prestado al pais en los actuales rnornentos, anate mat izando el rnonst ruo de la anarq u ia, que es de 10 que necesita para presentarse aun como nacion cr-istiana y grande entre las mas her mosas de la tierra.

144 e n dorid c allll DISCUI'(SO 1)1,; DFDlC.<\TOl'(lA I'I'(ONC:-IClAVO POI'( p:\blo 1';MILlO BARON EN,A Vl,:LADA r.fxrco LITERARL\ QUE E~ OB~l':QUIO DEI. r:xcl\io. ~R. Dl,;I.Jo:(:AD() APOS'('()J.ICO TtTVO LPGAR 10::-;' MAI,\(;,\,,;:-< 1..\ "loche DEL ~R ])I.; 1"I,;HRI':I-lO III. 1'/(17 Lal'j.~o t rcc ho habeis re co r rid o ya Ik nu.st r«ab r u p to territm-iu. y po r todas pa rt es vuvst 1'0 paso h ac e {, las tlores e xhala r ((111 p rofusion sus aromas. y a l esp ir it u colec t ivo de los p u e b lo-s p ro r ru III pi I' al ho rozado "11 ruan if'c-stac ione«<it' org-u'lo y li,' jllhilo po r la visit a qllt' os rlig-il;lis har e r le-s, ilust rc h u.ispi-d, po r t ad o r d,' val iosa consig-ila rr-c ihid a,'11 (,J u mb rul del Vat icano al seiiala ros e l Sumo. POlltlti,'\' 1a t ie r ra (Ie Occide ntv. el hrr moso m urulo til' Col,lll. Portudor. dil!:o. dv invaloruble prr-nda 'IUl' Sl' adivina en vuvst ra mario. la b.-nd iciou para los hi jos rl. Colombia, que t'11 vu est ra alma g-t'llerosa co hij a las itlea:-; de paz. de concordia, (Ie a r mon ia ell "I,Tt'do santo rl cl,..-i:-;tianisn!o. e n una palab ru, rlt' salu d pal'a t otl os. v '(\H' par t ir n dn {L los cuat ro vie ntos del solio radiant" 'illl' oc upais ;; h,'neplaeito de la Reli~~i()\1 y th' Ia e;,'i1\:;a. va difundit-il(\us,' [I mane rn de un fluido benetieo POI' torlos 10:-; ;Lmhitos del pais. danrl«vigor a las al rnas, lust rv.t las,'oll1ulli(!;tdt's t: im pu lso it nuest ra c ru hrionuria (i\'iliz;\"j(lil, Encont rais, ""; vc rd ad, u na pat r ia d,'smanll'lada y pob rv -«: lh'reilwll,'j ",'0 (\<01vla r in ~Ut>rn'ro. 1'1c ho- '1 U " (:l'1 a( :1'(1,'11 la t r.ure d ia. c l vapor d. Ia sang-n' q uv corn» manto crqltlscular cu b r. Iii llanu ra..\ 1'01' doq u ie ra t'lestrazo como rr-sult ado final (k las pasion--s t'llcoll.lfla:-; v salid as d e rna.l rr-. Pero l'llcolltr{lis, q u ier» d.:"jnj:-i. till" n urt.«pili/ill. si todos Sll'" h ijos os hl-int1an,'oil placl'" <'St' I,'~az,. Y ella us a b re los b ruzos con torl o,,1 afvct«d,' su (oraz(li1 e rn incnt c mcn tc r rist ia no. "II~r'i11(kcido con la:-; ~pieas glorias de un pasarlo,;asi fahuloso. aq u ila t a du ell larga,\. dolorosa adve rsid ad v c m hcllvrido cn 1a "SCUt'!a a r t ist ica d e su prodigiosa natu~akza. q uv.lsi hact' cautur al ave si lvest r«del incultc Caqud{L como "I insp irado t ruvado r (\to la costa antillana, al barrlo d e la csca rpada mont aiiu co mo al poet apacible tl la sabana azul q uv a r ru lla e l 'T'e q nv nd a ma. Bien sab ia ella al pl'odi~;l1-os SlI ca r ijio cuan import ante y t rusce n d entul es vuest ra rnision evangclicu. nuevo apostol tj Ut' su re{lis las oridas til m ult uosas del Oceano y apareceis, como el arlo, d cspid iendo tor rentcs t1<- l uz en e l hor izontc colombian», pu.ra venir ;L colaborar en la g-rande obra del Excmo. G"llel'al Reves: e l establer imien to definitive de la paz SOUI'l' as bases del orden y del t rabajo, unica simiente que pue dc rcnd ir opi mos f ru tos. La aura es (0108a1. I<~I d esencadenamiento d,~ los hec hos q ue aug u rvn su coronacion

145 req u ie re t ie rnpo, mucho t iernpo, y s(/lu una labur infatig-able y constante, il nomhre del pu ebloq uc elig-i() a q uien tiene la gloria dt> habe rla iniciado, Y a nornbre del Maestro Divino que He sacr ifico enseiianrlo Ia ve rdad, el amor y la justicia, cl cual tiene en vos it un preclaro discfpulo.r rcp resen tant e, pued e llcgar (l rnostra rnos la playa anhelada a nosot ros, dcsgraclados nauf'ragos que he mos sabor eado hasta las hcc--s las vicisit udr-s de un tiempo hor rascoso (. inclvmente. La par ticipacion q ue habcis tenido v tvnd reis todavia en d icha labor, ve rdadcramentc humanitaria POI' re fc r irse al beneficio de un pueblo e nte ro, dados vuest ro influ jo (lecisivo y el poderoso ascvnd ientc de «Ill' gozais sob re nuestros bien intcncionados mandatarios, habra de granjearos la ete rna g ratiturl de este pueblo, dejando asi a vuvstro rt'- greso al Viejo Mundo un monumento de gtanito que perdurant en nuest ras futuras generaciones, v un nornbre ilust re mas en e l fallo irnpa rcial de nuest ra historia. Santand c r. aunq ue pad ece en su mayor parte la ceg ue- (lad ab ru madora del analfabeto. t iene sin e mba rgo t'] prurito de la lcaltad, como g-uanlan sus seivas flores privilegiadas POI' su bcll eza y sus pe rf'u m cs. Y es que. como dict' Juan de Dios Pcza: Las pru.de ras tiel tropico dan I-US as Sin que n arl ie las h ay a cu lt ivado. i Uuc fue ra si se apoyara con decision (. inn-res la d ifusion de las let ras, la escucla, vi cultivo del caractc r y d e Ia inteligencia! Irfa ve rt izinosamentc po r el camino del progteso. senda q u e ha llevado a d espe cho d e las dificul tades economicas y de dive rso car ac.te r qul' se han p rvse ntado. Por eso, redoblando sus csfu e rzos a rned ida!jut" se t'lll'iqut'- ce el venera de sus aspiraciones sic mprc crecientes como Ia velocidad de u n cuerpo \.Iue cae () como e l ag-ua que brotando de pe q u ejio manantial coucu r r-«al mar en cau d aloso r1\.). Santander se acoze hoy a vuest ra p rote cc ion, si es que lieg-a a rne rece r tan han rosa d efe rc ncia. Abogad, senor, ante las pot cstad cs con q uicru-s St' ro%<i vuest ro elevado rninistr-r io : ahogad por el adelanto inn-leetual y material de estos e xcent ricos lug-ares. (! u e si en ullos el pueblo se ag'lome ra pant sa lu d a ros a vuest ro paso y re cibiros en su humilde choza, el arnor con que 10 hact- r ival iza con e1 del potent ado que as albe rga en su rico palacio, En nornb re de la e nt id ad rclig iosa, en especial <lei e m i- neutc y d istingu ido DI". Zafra, d igrifsi mo par roco que nos cabe en sue rte posce r {t los rnalaguefios, de las e ntidades polftica y social de esta ciudad, en nombre del pueblo, he venido ilofreceros, Excmo. Sr., esta corta velada, si exig ua en su forma, intensa por el objetivo que encierra. Aceptarl-

146 141 la pues como una rnuest ra d e ad mir acion,.y accptadla COil vuest ros dig-nos cornpafie ros como una hurnilde hoja de ye- (Ira recog-ida al aza r en 101 abu nd.an tc cose cha Ill' vuestra nohl«\wn';!rin;h'.i(,n POI' pstns a nd u r r iah-s. DJSCU,,"SO 1''' UXUNCL\l)U POI< 1';1. SI<, n.,\j)ui.i'o j'al'tj)() j':n J';1. Pl'XTO DONDE EMPI/':ZA \0:1. CA~IELI,ON QUE POl't EI. C.UIINO DJo; LA CONCEPCION n.\ EXTHAlJ,,\.\ \(\I.A(;A Exc mo, Sr. : EI Conse jo municipal Ill' estu poblar.i on Sl' cong ratula!jo.yal pn's -nt ai (l S. E. su mas r espe t uoso salu do de bienve nitl a, fclicittiudose al mismo t ii-rn po pnr r-l a r rj ho (I. tan ilust r«hu(.~;ped, Habier rl«rccaido vn mi la d csig naciou <II: c u mpli r ante vos con est c corn et ido, y' aunq ue pond c rosa y en u n toclo supe rior (l mis escasas Iuc rxas la consigna, llo la he csq uivado, pues ella me t raia rl alto honor <II' vcn ir tumbien a colocar en vuest ro camino mi hu mild«ramo de oliva v la satisfacci(lll d e ayudarh- al pueblo malag uc iio {I vnt rvtuje r sus g-uirnal-.las de in mor tales qui: han <I" consc rvar 1-ii,'mpn' vivas las mas g ratas imprcsioncs de vucst ra hon rosa visitu. No ~s lin sunt uoso r ec ihirn iento 10 qlll' "I pu c hlo 1'00'irvnse se prom etc oire cc ros, No son los fast os ni la" l'i'lut:za~ (I<-las c iud ad cs ouu lentas los que ron sus ace rvos de 0)'0 levan tun oste nsiblemente hoy u n solio para rc-cibi ros. :,\c';. fin solio ~f, pcro levantadu '-<>11 este inrncnso ac e rvo (il' alrnas \ Ik cor azoues se ncillos, u u c Iu nd irlos torlos,'n la fe (1<,1 IT'istianismo arnan since ramente 'S1I religion;,1i1mn la p.li.; aman 1'1 t rubajo ; os a man y estrin de gala y regocijo por q u e ve n c n \'II!--, senor. si m bolizarlos cstr», g-randes y he r rnosos idl~aks; po rq ue en \'OS t'ncueut ran el art!'1i viaj c ro '1U'" (lt~spj'l'll(li(lo dt' ot ros I11UtHlos ha ve nido a rr rad iar :-iohrt' ",,(a jove n y des:.:-renada Repllblica, {l cu y«calo r deut' b rot ar la si rn icn t e 'lui.' mfls t ar dv nos t rae ra 11,:-; opi mox v a hun d a n t.-s f ru tos dv l hie n y del progreso.. He t e r m inad. IJISCFI<SO P.I<OXFNCL\J)() I'Oj~ u. I:\SPI';CTO!' 1)1'; I:-lSTl<l'CCH"N p{'- B!.ICA Dr': LAS PROVINCI.\S ))1'; (;,\.I<ciA 1«0\'11<:\ v I'()HT01:1. I'.N 1J~:\!)J': I.M; t':squi"as In: 1..\ PI.\Z.\ ])1': ~I.\L\(;.\ J<:i'I J<:L \1O~IJo:N'I'()DE 1-:,,'nC\R.\ IH('IL\ Cll'IL\J) 1,;1. LXC;\lO, SI<. J)Jo:l.I :n:\1>().\postl'l[.jco 1 :1. nl\ 21, J)I; l'i':htll':i~() Senores: Kn el curso d e la vida de las naciones 1:01110 en la de los in d ivid uos ()(UI'I'en incidentes mas.~ mvnos saludables que

147 vigur izau la v xistencia individual y la dt las colectividades. Mas para que tales incid cntes tengan lugar no basta dcjarse llevar de la cor riente natural de los sucesos, sino que es ne cesar-io que los pueblos y los ind ivid uos se hagan acr eedores al favor de torlo movi mie nto de progr-eso y civilizacion. Por u n incidente pues en la vida de la nacionalidad co- 10m biana que el Sr. General Rafael Reyes ha encauzado por la via de la paz basada en la concordia nacional, se halla entre nosotros una alta pot cstad catolica, suceso (jue es de gran significacion moral)' (lue de muest ra que los esfue rzos hechos po r el Excrno. Sr. Presidcnt e de la Republica en e l campo arnplio de la couf rate rnidad colombiana no han sido l'steri- II'S, por'q uc sin ellos no hab ria te nido lugar la l<~xposiei6n Industrial y Ar t fst ica en est e Departamento, causa secundar ia del feliz arrilo de tan esclarecido Prr-lado. 1-<:1 pueblo santande r eano, regido hoy por el exirnio Sr. (~encral Alejandro Pen a Solano, es (juiza el p rime ro que en e l pais ha abie rto las pue rtas del t rabajo en todos los campos ric la actividad hu mana, desp'ues de duras pruebas a que Iue sorn et id o durante nuest ra ultima contienda civil. Y no podia se r de otro modo, dada la indole de nuest ro pueblo al que Dios dotl) de sil1g-ulareh cualidades, 'luc a se mejanza de dos raudales que St' encuent ran en el camino del Oceano, se chocan. se repclen. ' lueg-o se funden en cst recho abrazo y forman IIn f;olo cauce, como para hacerse partfcipes por igual de las prerrog-ati"ah de nan g-acion que aislad a me ntc no conseg'uirian. Asf como la se ne ct ud con la nifiez He avie nen, el pueblo santand e reano, valie nte. au daz v fie ro como el leon en los cornbat cs de nu est ras luchas f rat r-icid as, cs ell fa paz noble y generoso con el ene rnigo que ha cornbatido en lid f ranca: " ve n cvdor /i vencido, no ve en su contendor sino la imagen ). se mvj a nza d e su st-i-. a qu ien le tiende mano arniga para au nar sus esf'ue rzos en la lucha por la vida y continuar juntos por e-l cau ce que conduce a la meta de sus aspiraciones. Pueblos de las coud iciones del nuestro no pueden pasar inadve rt idos ante la mirada de Diosv y he aq u i cl porque hoy en est a culta capital del laborloso pueblo rovirense se eucuent ra alborozada muched u mbre reunirla e n este sitio. Si la capital del Departamento t uvo la fortuna de SCI' la p r ime ra en alberrra.r en su seno a Monsciior Ragonesi, Delegado de S. S. Pfo x y Agente d iplomatico de nuestro rey cspi r itual, nosot ros no hc rnos sido menos afor t unados porque Dios en sus altos dcsignios tenia dispuesto que esta rica region cit' nuestra a mad a Patria no quedara exclu ida del beneficia d e la visi ta de tan ilust re huesped, cuyo paso por los pueblos de esta Provincia habra de SCI' tan benefice en el orden moral y rt'ligioso como la gota dt: rocfo que en la flor se de r rarna.

148 Si la j.resencia ell' Monsejior Rag-one!:'i es motivo de juhilo para 1)8 habit antes de esta coma rca, juzgarnos que para tan p rvclaro Apostol de la religion de Jesucr isto tambien l-iera motive de satisf'accion. porque de este modo cu m ple su alta mision dl' lle va r cl consuelo ;1 los COnllOI1l'S atlig-irlos y de regal' SCIvasta ilust racion q ur ;1 manera de polcn f'ccundantchubra de se rvi r de a bono ;1 las flores con que rnu y p ront o vl p rado colornbia no Sl' habra de tapizar. I<~xcm,). Sr. Dclejrado: en mi car.icter de Inspector de Inst ruccion Pttblica de las Provincius de (;arcfa Rovira y For toul,.\"en nornb re del lucido pe-rsonal de maest ros que rig-i'll las «scuelas que esta n bajo mi vig ilancia, os saludo m n v cord ial m ent e, os presento cl horncnaje de ad miracion,\' rcspo to \jul' todo pueblo culto t r ibu ta a los q ue se p rcocupan por l'1 progreso de la hu manidad, y hago votos por vuestra felicidad y la del suelo que ha!)("is hon rado con vuest ra prvse ncia. IHSCUl<SO l'hon1jnclado PON }'.I. SH. <'~Jo:NERAI.\.'ITONJ() Ot/IlUZ. PHIo:FJo:CTO r.i: 1.,\ I'\-(OVINClA, EN I.A VELADA r.nerco I.TTI ;t/arij\ QUI-: I';N HOl'O\-( Ill';\' 1 ;XC:-'lO. S~. })ELEGAIlO,\POST(')[,ICn TUVO I.tl(;,\1-/ 10:1"!'>!\\.,\(;,'1 VN 1..-\ NOCHE DEI. 21' ni: FI';Il~I';~O 1))0;!(/07 1<;X\:IllO Sr.: Mot ivo de par t icular l-iatisf;tcll('jn no; para rn i el honor '1\1~' \Ill" c.ab: en suer-to como Pr ef ecto de est a Provincia, de daro:,;:' nombre de ella la bie nvcnid a a t ent a y rcspetuosa y \li'csenlams d hornenaje de la mas profunda sirnpat ia bacia vos." d~' ad hcsion vehement- al SUJlJO Pontffice, de quien sois dig-no Hq>rcsl'ntante. Habeis venido a este pais como he raldo (\to ve nt u ra, j'tent-is por tanto dc recho a la vene racion dl' los colombiar.os, Una gllt:rra de t res anus. tal vella mas f u ncsta de cuantal-i reg ist ra nucst ra historia. habra conver tido nuestro sue- 10 en yermo y <leso1a(lu, nu cxt ras ind ust rias iucipiunt es vierouse paralizadas, la riqucza acu mulada en mu chos ajios <1rlabor consta n tc (lesapareci(, como POl' e ncanto, y p()!' sob rc todas estas d esg racias, como si fuescn po cas aun, se d estacaba como u n fantasma la perversion de los curacte res, pues toda nocion.ie moral habia huido para dar asid e ro en los vorazoru-s a los c rueles instintos de la ba rbar-ie. I<:ntan p enosas circunstanc ias Y cuunrlo ya el curvo pico 111'1 aguila sajona habfa ar r-eliat a do u n prccioso jiron de nuvst ro territorio. y la Patria se hallaba a menazada de diso-

149 luci6n; cuando el mas negro pesimismo se habfa apoderado de todos los animos, surze por el voto de sus conciud adanos el hombre que debia manejar la brujula en esa noehe sin est rellas de nuestra vida nacional, y con la energfa y fir meza del que habfa desafiado la naturaleza b ravia y salvaje de nuestras selvas vf'rgcnes, aeomete la rcconst ruccion del edificio nacional, desvencijado ya r socavado por sus cirnientos. La labor es de ciclope, pero el arquitccto es di~no de la magnitud de la e m p resa. Mas cl ernpuje de su brazo de titan choca (011 un esco.. 110: es el monstruo revolucionario que se revuelca herido en aus mas caros dereehos.r t rata de eerrar el paso ;1. la obra saludable que debe conducirnos a la civilizacion ; para conseguirlo todos los medics son buenos, r en el deli rio de aq ue- 11afiebre ig nescente, apela al atentado mas abominable y vcrgonzoso, de cuyo esti~ma quiso Dios. f rustrandolo, libe r- tar a la Patria. Es este un momento de suprema ang ustia: todos los corazones palpitan ante la sornbrfa expectativa de la Naci6n. El dragon parcel' devorarla, Pe ro he aq u i q ue <it' repentv los eapfr itus se se renan.r la t ranq uilidad renacc como despues de neche te mpestuosa nos acar icia la aui"o!"a con sus tintes son rosados. Lentarncnte la razon y el bucn sentido prv valeccn, y por sob re los inte reses cgoistas, por sob re nuest ras int ransigcncias pol iticas se yergue la idea de la Pat ria, que debe embargar toda nuest ra atencion y debe ser el objeto particular de nuestro culto, para ve.rla algun dfa ocnpando un puesto de honor en el concie rto universal. La paz. ese si m- bolo del progreso. e:; el Idolo ante el eual He p roste rnan todos los colorn hianos ; por todos los amuitos del pa is se le erig-en alta res y en todos los pueblos se organizan socicdades que mantienen vivo el fuego sag ratio q uc la ha de conse rvar. l<~nest a labor para hace r cambial' cl ru rnbo de los acorrtccimientos, para hace r entrar en razon it espf'ritu«obcccados {t quienes dominan e1 egofsmo y la pasion; en esta lueha contra la pe rve rsidad, vos, gxcmo. Sr.. sois e1 palad m esforzado que con los recu rsos de la inrncnsa autoridad moral de que estais investido, sin mas armas (IUe la de la persuasion, log rais gunar la mas noble, la mas saludable de las batallas: la 1>atalla de la paz. Xo pod ra olvidar Colombia el inmenso bien q ue Ie habeis hecho de pone r vuestra alta pe rsonalidad al servieio tie la noble causa tie la paz, ayudando al Jefe del Estado a e char los fundamentos del orden en un pafs que iba a ser dcvorado por las fauces de 1a ana rq u ia.. Alud icndo al Santo Padre Leon xrrr, de imperccedera memoria, \'OS habeis d icho : «Del seno feeundo del c ristianismo salieron rnuchas veces y said ran siempre heroes de impe r iosa voluntad a tamar las naciones POI" la vfa de la I"C-

150 - 145 forma y del prog-reso social; salie ron y sald ran aun ing enios crcador es a en riqu ece r el mundo con altos monu me ntos de 10 ve rdade-o, de 10 bueno y de 10 hello; inspiruciones y aspiraciones sublimes florecie ron siernp re y no S~ agotaran jarnas. Pero no es esta la labor dir ectamentc confiad a por el Red entor a su Iglesia. Su mision social p ropia, universal, per e nnr-, es mision de armonla; su apostolado civil es bendecir, legitimar y enlazar en abram frater-nal todos los elementos de la sociedad, {l fin de q ue todos en concordancia conspir en al cornun bienestar de cada nacion y al bien supremo d e todo cl genero hu mano.> Avos, Excrno. Sr., son de aplic.rcion exacta vucst ras propias palabras, Habeis vcnido it est» pals a trahajar can esp ir itu eminentemente cr istiano POI' la ar monfa de las volun tad es de todos los colornbianos, 1'01' la confraternidad social, 1'01" cxtirpar de raiz los germenes nocivos anidados en nuestros pechos. J uzgad pues si ante tarnaiio be neficio vuestro nornbrc pue.de pasar indif'e rente para nosotros, si puede ser facilmente 01- vidado :r si no es justa que ocupeis un puesto en nuest ros corazones, Habeis visto {l vucst ra entrada a csta ciudad pintada la alegrfa en los rostros de la muchcdurnbre : esa alegrfa os ex pr esa mas claramentc que el mcjor orador podrfa hace rlo, el sentirniento de ad rniracion y cariiio que habeis conquist ado : allf se refle ja la d euda de gratitud inmensa que para con \'OS hernos cont raido y que no podemos pagar mas qr.e con nuestro e te rno reconocimiento. Excmo, Sr.: la modesta y hu rnilde acogida que os hace mos no cor responde a vuest ra elevada digriidad ni a la magnitud de los scrvicios q lie habeis prcstado a. nuestra quer ida Pat ria, Os rogarnos acepteis con indulgencia las manifestaciones de nuestro aprecio y si mpat ia ; ellas son u n brote since ro y esponta neo del ca riiio y la ad miracion (IUe os profesamos; cuando auscnte de nuestro suelo os halleis contemplando el her moso cielo de vuestra patr ia, acordaos con bene volencia de esta tierra que os ama, de esta cornarca que lleva como un timbre de orgullo el nom ore del ilustre p roce r de nuestra independ encia cuya memoria perpetua el bronce en una de las plazas de la hospitalaria y g-entil Bucar'amang'a. Excmo. Sr.. sed bienvenido. DlSCUR:,O DI :f. sa. CURA OF :lfar.aga. DR. ZAFRA Excrno. Sr.: 1<;nvuest ra presencia nuestro espfr itu se conrnueve y nuestro corazon se inunda en in me nso pi";lago de jubilo, y con sobra de razon. 10

151 14h - --, 1- -En vuestra augusta persona conte mplarnos al e ximio Representante del preclaro pontificado de Jcsucr isto en nuest ra afortunada Colombia, distinguida altamonte por la Providencia divina con el encumbrado beneficio de la sapientfsima eteccion hecha en vos, Excmo. Sr., como dignisimo Delegado en nuestra necesitada tier-ra. Esta sublime razon derrama torrvntes de d eleit e sobre e1 espfritu cristiano en la contemplaci6n de las multiplicadas finezas con que Jesucristo ha errriquecido a los hombres: ya es la luminosa catcd ra encendida por la eterna sabidurfa, la cual bril1a con luz indefectible en el universo mundo; ya el gran p rivilegio de las aureas Ilaves para el acceso de los hombres [l la coronaci6n en los cielos : ora es la recia constitucion de nuest ra Iglesia cristiana que al inqucbrantable penasco sobrepasa; ora es el admirable secrete de la infrangible unidad actuada en el inmenso orbe cristiano con suavfsirna caelena de luz r de amor; ora es la apoteosis cristiana en la tierra, constituida por Jesucr isto en el gran banquete eucarfstico, en donde el pan celestial abunda y en donde el nectar de la vida inmortal se liba, II-Colombia, Excmo. Sr., no pued e menos de consid e- raros como el angel p rovidencial ell' su felicidad, y por eso los pueblos que a ella pertenecen tienen que est rernecerse de indescifrable gowen vuest ra augusta p resencia. En efecto, ella debe it vuestra sapientfsima inte rve ncion, lejos de toda du da, la se mpit e rna conju racion de las intestinas discordias, que cual volcan del ave rno der rarnaban a profusion sobre ella la rnuer te y la miseria. A vuest ro influjo las charcas de encend ida sangr-e, en dond e todo d e recho nauf ragaba, se e xti ng u ie ron, y las piras del odio en los corazones colom bianos se apagn ron, que dando ape r cibirlos pa ra he rrnosos temples de la paz. Anora all uel loco entusiasmo \j lie movia con movi miento irresistible a uno.') a tornar el puiial S ;l ot ros la espada para de r ramar a tor rentes la sangre fraternal. St' ha tornado en entusiasmo santo para conve rt ir el puiial y la espada en habiles instrumentos para abrir las ent raiias de la tierra, de los bosques y de los mares, y asi apod e rarse de las ingentes riquezas que all i se d epositan, y tambien para levantar los poderosos contrafuertes en donde se han de est rellar las olas pe rseguidoras de la paz, Y Hamada Colombia a d escmpeiiar papel ilustre en el gran teatro de la civilizacion, se aper-cibe con preciosos ar reos a ocupar el puesto que le corresponde: esto es 10 que promulga el pito de las locomoteras de nu est ros escasos fer-rocarr-iles, las que impacientes por recorr er toda la extension del inmenso territorio colombiano, vornitan fuego; esto es 10 que dice la nacicnte industria, que d espleg ando a toda prisa sus poelerosas alas se apresta para ganar punto levantarlo en la encu m b rarla escala de la

152 po rfe ccion ; esto to que con g rand ilocucncia p ro rne te la cornpactac ion de todos los pueblos de Co1um bia en ('1 gran p rop/isito dt' dar mue rte a la guerra, para If ue asf la Pat ria sea engalanarla por' las manos de la,:i,'ili%a.:itlll con la dianema p reciosa de la gloria. III- Para la r econst ruccion de Colombia ha bcis colaborarlo (on vuest ra p ropia sag rada mann en el fi r me basamiento de la cristiana educacion de la j u vcnt ud, a tin de dar al glorioso edificio una vida in mortal. A l'so Se refiere el sapient isimo docurne nto sal id o de vuest ra plu ma de or-o y encarecido {t vu est r as d ig nid ach-s infc r io rcs. y de seg n ro que IOH resu lt ac.os cor r cspondc r.in a vncst rn-, nuhilfsi mas intr-nclones -" ;1 vucst ros multiple» y pod e rosos csfue rzos. l<:n cl trazais r u rr.bo lurn inoso ;1 la juve nt ud colorn biana, q uien hara suya csa luz pant penct rar segu ramentc ell los senos del porvcnir, d ispe rsanclo nie hlas, ar rollando obstaculos y sobrepasanc.o escollos para l1egar it la nobilfsima meta de la J"t'dencion de la Pnt ria e n t'l t r ip l«o rrl e n f isico. int electual )' moral. Con mu cha razt'>i1 pues tudos los pu e b los dt' Colombia se enc iend cn ell c,ii1<1l'n1e en tusiasrno en vu est ra augusta presencia; y si la c ivilizada Grecia mulriplicaba estatuas y disce rrria <lure;;s coronas a los hombres que con su abnegacion Ie acar reaban inmortal gloria. Colombia lle na <It' ardor os levantara a 'ios, su me rit isirno protector, monu me nto eterno lie gtatitud vn su coi-a7.0n y dt'cretara pant vuest ras nobillsirnas sie ncs in mar cesib!e corona adamant ina. Con mucha ruzon el Cle ro en general, y en pa rt icula r ('1 de <.~al-cia Rovira, a cuyo nornb re tengo \'1 honor de habla r. se enorg'ullece al conte rnpla ros {I )01. 'ahexa 11,' los int"l'''';l's,','in;i{uiticos en Colombia, se Ilena de holgu ra al ve ros en cst e suelo, 10 mismo qu\';1 vuest ra ilust re comitiva. d ignitic.i ndolo con vuestra presencia. y t ieru- a gl'and\' honor p resentaros sus calurosos votos de hie nve nid a, lit'.uno r. <It','ell,-raci(ln v (It' obed ie nc ia. ' Malaga, l'\:bn'!'o Ill' 1'107, Kxc 1110, Sr. l<~spradi.'a cornun y constaute que en ocasiones como la p resen te, er que unido un pueblo por los sentirnientos de g ratitud, respcto y ad rni racion,,!uiera manifestar publicamente esos svnt imie ntos, ya que moral )' Ifsicarnente es imposible mant ene r los ocultos, y p ract ica tarnbien es que alg uien les de'orrna conereta " los depouga en la medida de sus f'ue rzas :i aqu el it q uien correspond an fntegros; pe ro como la palab r a j a mas alcanza ra a lle nar uu cometido. y si el cornitr-nte es ind iz no, su relacion, auuuue espon tane a, no

153 o que la sera sino un palido reflejo de la verdad; de aq u i, sejior, que anticipadamente os suplique no mireis en mis palabras sino parte de esos sentimientos que nuestros corazones sie n- ten hacia vos. Representante inmediato del Jefe de la Iglesia en nuestra patr ia, en vos miramos, reconocernos y acatamos el caracter de tal que en hora feliz el Padre Santo os invistio, y por 10 mismo os hacernos depositario de la sumisi6n, el amor y e1 respeto que el como nuestro Pad re cornun se me rece, Transcurridos hasta hoy muchos an os de estar inscritos en e1 numero de los pueblos adoradores del Crucificado, no nos habra permitido el Senor en su Providencia tener r honra y felicidad de contemplar a un dignfsimo Representantc del sucesor de San Pedro y gozar de cerca los beneficios que una mision como la vuestra lleva siempre consigo : poi' 10 tanto no podemos menos de bendecir al Supremo regulador de las esferas porque nos ha preferido a tantos pueblos como habitan 1a redondez de la tierra. j Gloria a la Iglesia que extiende su civi1izadora influencia al traves de los siglos y de los espacios y hace que e1 hombre, siendo feliz en la tierra, mire en perspectiva el cielo. Perdidos nosotros en las crestas de los Andes, ent rega- :los ala lucha diaria por Ia vida y ajenos a las p reocupaciones de los pretendidos filosofos del error y la mentira, nos gloriamos de mantener inc61ume 1a fe de nuestros mayo res, es la joya mas p reciada del alma, el lazo mas hermoso que une las hombres entre S1 y la {mica que salvara 1a humanidad de volver a los tiempos anteriores, a. la inrnolacion del cordero sin Olancha en el Calvario; y en union con nuestros pastores legi'timos miramos con dolor y pedimos al Cielo se digne separar las pruebas a que ha sujetado al Romano Pontifice, Vicario de Cristo en la tierra y Rey de derecho entre los hombres, de se r expoliado y aprisionado por uno de los arnbiciosos de la tierra, ioh! que ejemplo tan conmovedor y que ensefianza tan sublime los que prcsenta nuestra Religion sacrosanta, en la que todos, desde el Jefe Supremo hasta el ltltimo subdito estan tan i'ntimamente unidos y gozan de las gracias y tam bien de los derechos imp rescriptibles que su fundador le concediera y que marchan bajo dirccci6n tan acertada ala conquista y posesi6n de la verdad, eterno fin adecuado a. las aspiraciones supr e mas del hombre. Ojala que las otras liamadas tam bien religiones mostraran algo sernejante a esto. Permitid, senor, que en nombre de mi pueblo os felicite y alabe poi' vuestra conducta tan amplia y generosa para los colornbianos todos desde el primer momento que respirasteis las perfumadas br isas de nuestras cordilleras en que estrechandonos entre vuestros generosos brazos y abrigandonos con vuestro apost61ico manto, nos hicisteis olvidar

154 it q u e os a te n d d r-c g'llla,i c n Ja u«t,l HI) x cr c por q 1"l'IlCO!'('S qut' pa r-ec ian e to r nos, ha rt«hi(j:-;tl'is corn pr end c r qh': t(llh,s t~ranlos liijos dl' un m isrno Padre y nos enseiiast eis U(' I e Reclentol" I'llI' IJral.<.ls ruz adopttl a t od o- los h ijos ttl'! ho mb r» poi' h.-r manus SllyoS'y los dl'jl) {t todos por hc rc d c ros de su rv ino, ;Ah~ q uie ra ('1 cielo tcntramos sie mp t'jl'mplo de vuest r as v ir tu d es no sea pvr d ido para las g'('jlttac.iones f U t U ras. Para conclu ir. os suplic.unos,!<;xt:nlo, Sr.. no nos ahan- <loncis sin que dv r ra nniis antes (,1 t esoro de las g-racias del c ual sois tie-l d e posi tar io t- i m pa rt a is ta mbicn vuust ra bi-nd i- citm apostrli ca (l n080t ros }lo!>rts pccadorvs q lic Ilotamos pc rd id os, 1'1.'1'0 sie m p r c con la vist«fij a en el ciclo t'll II ternpvst uoso mar de la vida. I~xcml'. Sr. IliSCm~S() DEI. SH. 1J1';'Ill';'I'InO l'as'll'l.l.akos Kxcmo. Sr. Ikleg'a<lo; En norub re clt~ la sociec1ad lil,dag'ut'fia \"Cng-o;'l dil'igiros rl saludo de bienve nida \" a orn'ttros ('1 t ri bu to de ad miracion y r cspeto it <JUt' sois altl'cdo!" I:OnlU e x irnio rep resentante del ilust re Jv te d c la Igit'sia Cat/.lic;\ ant" t'] (;obit:rn(l y e1 cle ro d e nuestro pais. Lkgast~is a Colombia ('Jl rncuu e n tos dl' ama rgu ru ('st al lan t c-, ocasionad a P0l' la situacii'in t:a/.tica en <jue nos hal!a1.>01mo~, y sin vacila r pr<"st01~teis apoyo eficaz 011pr imc r mandatario de la Republica cn 101 0/)1',( g'randiosa y toclavia mal int crp rt.tadu Ill- la concordia nacional. Dcsde cntonces su e.rnpuje d! iuiciado r dej,) t.it- SIT UJl simple ideal para c rn pezar it Ihl' fr utos <JUt sat isfac e n vn mu cho los anhelos dt:! pat riotisrno: las convulsion.:s <lj.:"/lilicas, qtu- par ccian auunciar Ia disolllci(~n del pals, dvsaparur.ie ron para dar lug-ar {l la espe ranza de una rcsu r rccciun ; los colornbianos, pat riotas ante torlo, han comp rend irlu, con lastimosas excc pciones, que es nec esar iu e r rudicar th' su corazon cl odio salvaj e que tanta» lag-rimas no!' ha h echo ve r t e r ; eel problema rclig ioso ya no e x iste.> y la Nacion, d eseosa de paz y con la noble aspir acion <le la j ust ici a y Ja ve r dud, St' cumple la ley y se tiene fe en el porvcni r. Vuest ra presencia, como la del a reo iris que anuncio d ias de bonanza dl'sput-s <It' cspantoso catuclismo, es pues una garantfa -:Ie t ranq uilidad social. de seg-uridad y progreso en nuost ra arnarla Pat!'ia. I<~xcmo.Sr.: no tengo palab ras para expresaros debida mente nuestro agradecimiento pur el honor inmerecido <1ue nos clisperisais COil vuestra visita. q lie es para nosctros u n he cho cu lm inant e de q uv pod ria e nvane ce rse cualquie-

155 ra poblacion civilizada, u n dist intivo honorffico!jul' nu uca olvidaremos. El pueblo malagueiio, arno roso y al t ivo como el arnplio cielo y las ernpinadas cordilleras q ue han model ado su cantcte!", os espe ra lieno de ansicdad y alegria para re ndi ros hornenaje de g-ratitud ('n la modesta esfe ra de HUS capacidades. Bien ve nido se{tih. Excmo. Sr. e ilust.res corn paiic ros de viaj e. Malag-a. 2(, de F'e b re ro d(' 1(107. DISCURSO IlEI. SI':NO~ OI';NEHAl. J. 1'1. HUIZ )':'" CONCEPCH):'I EL 2h J)I': FER~ ":RO {)Io; 1907 Excmo. Sr. Delegado : Las autor idades civiles y un g-rupo de Ius vecinos mas connotados de este Municipio de La Concepcion me han hecho el indeclinable y alto honor Ill' d esig nar me para dirigiros la palab ra, Con acend rados sent irnientos de prof undo r espvt«, de filial adhesion y de carinosa si mpat ia, os doy. en nornb re del pueblo y en el rn io propio, muy atento y cor-dial saludo de bienve nida. asi como it los distiruruidos caballeros q ur- os acompaiian. Se.rvios, Ilmo. Sr.. ace pt ar con be nevole nc ia la humijde hospitalidad que. siq uie ra sea POI' b revcs mo rn entos, os of rece rnos de to do corazon. go estas apar t adas re~iones, tan d istant es de todo cvnt ro importante, y en las cuales 110S falta. con f recuencia hasta 10 necesar io, no he mos podido hallar narla dig-no de vuestra clevad a investidu ra, Ill' vuest ra p ropia importancia personal -" de la de \"I1('8t ros dig-nos compajie ros. Apenas sf po(h'\tios d isi mular la \'erg-uenza que nos causa la peq uejiez -" pob reza rle nuestro obsequio: apelarnos it vuestra indulzencia -" a vuest ra g-enet'osidad y {t las de estes caballeros; ellos sahr{tn cornpe nsar con crcces 10 que noh falta de recursos y 10 que nos sob ra de incivilidad, En vuestra laboriosa co r re r ia por el norte de nuestro pais habreis tenido ocasion Ill' notar que la conservacion de la paz publica es Ja mas irupe riosa de nuest r as nccesidades y la mas vehe mcntc de nu estr-as aspi raciones. Calculad, Monseiior, con cuanta vene racion. con cuanto amor y con cuanta g ratitud sera pronunciado vuest ro norn br e, especialmente por los hombres p revisivos y patr iotas. cuando todos sabe mos que ya a vuest ra porlerosa iniciativa, ya a vuestra eficaz coope racion se debe mucho d e 10 que se ha hecho para conseguir tan inestimable' be neficio. Contarnos

156 mc recid l r a ad b, para per m iti mc p rcse nta r 151 torlos, }<;X,:nlO, Sr.. con '1Ut' >;~g-uil'(.i~p restaudo a la Nacion vuest ro valioso continge ntc para Ikg-ar al tin a conseguir \'1 establecimicnto de la paz estab!c. st;lida y f e cu nd a, sob re los incon movibh-s f'u ntl a nu-n tus dt' la j ust ica, (Ie la c q u idad y de) d e rc-cho. <)uizas asi lleg-ar;l para nosot ros la ~ra del verrl adv ro progl"'-;() moral, int elvct ual y iljatl'i'ial que anhe- nco, {amos (on t{lnto a para S,h'ar hi,\' dt' la isrnoraucia 'Ill,' v nos esforzamos de la por m ise r ia,'sta conscg u ir pnb r«t ivrra tan q cuanto dvsverrt Muchos d olor es hahn:is rada. aliviado I" ;t1il'ian?is; mucha-. necesidadt::-; hab reis re mcd iado y podr~is rr-rn cd iar ; muchas hlt as y 1JI11':ho» e r ror.:s ha h 1'(.is ro1'regido y corregi n~is, asi e n \'1 onl\'l ec'lasi{lstico,'1l!1l0 en ej civil. Vuest ro norn b rcserfl bend id o y vc ne rado, torlos los pueblos q daran e y ue agr advc idos y sat isfec hos il,' la mauc ra como ha sabirlo cumplir su paternal y apost/ilica mision I'! muv digno rcp r ese n- tanto del Pontffice sup re mo de lu crist iundad. La inusitada solicit ud 'iu" habeis e mpleadu en la visita pastoral con q u«ilos hallt~i:-. hon rado ha ra epuca I'll la vida de estas re motas cornarcas." sel';l impc rcce dero su rccue r- do: q uv e l de vucstra cor ta pe r m.mc ncia c nt r e n080tr08, si acaso alg-lil1:l vez ]IL'gart'is ;l vvora r lo. s('a sie mp re p lace ntvro para \'08 l's nuestro ultimo <I"St'II, H,: dich«. IHS,'l'l-h() PIo:(lXI''''l'I.\)l() l'(>!< I-:I.SI<, 1l10XlSft, \\"11.l'HESS, MlIV 1';~:"JlII>, S,'.: ~ll1~has v Jl1l1 v din'l'sas Soil las t:ir,'ullstancias ag ru pa- (las en m i es,:aso iut elec to par a pe r rn it ir mc la nunca hicu a ibe rt, II mils iv n ante,,1 ar a t a rn ie n to dr- V.,.;, una palabr a, una sola, (lspera y ag reste en su m.-cunismo,.o mn los ag-rios v abruptos riscos de nuestro suclo and ino,!wi'() qlll' li<:g'ut: e n stt idcolog ia a sig nifica r lill re lig ioso sahulo, una rne r it isi ma hie nvc nid a y una entusiasta cuanto catolica fe lic it ac ion que dirige uno de los mas humildcs pueblos del mundo c ristiano." el ultimo pufiado {Ie ('atolicos de la Di/iccsis pamploncsa, en cu yo suelo nos honra mos, al Repn'scntante dl' la sup re ma digriidad pon tificir., q lit: tan d ig'lla mcnt e L'j e reeis, l<:xc rno. SI'. No I'S mi p roposlto p rcsc n ta ros mi salurlo adornado con el ropaje retcr ico. no: a e110 s,' opone mi insuficiencia int e- lectual: pe ro :;1 I'S mi deseo p rcsenta roslu a nornb re de este pueblo c r ey ent e, q uien po r e xceso tit' be ncvolencia me ha discer nido el in rne re cido y alto honor <I\- rcpresentarlo en en estos grato,.; y solcmnes momentos, con la simplicidatl d e nn hijo con SlI tie rno y car itat ivo padre, hacieridolo e x tv n- sivo a vuest r«hono ra bh- r sl'l,'cto acompunn mie nto. r

157 i ~2ue inte rp rctacion pue de da rse a cst e clocu ent e silencio de estes vuest rus hijos que act ual rncntc g-ozal1.ii' vuest ra presencia'! Pucd en, no obstante, me at rvvo a d eciroslo, rcd ucirse {t ad rni racion, santo regocijo y g-i-atitud: ad rn ir'acion al bu en Padre; ud miracion al rn er-it isimo Rep resentante d e Ia Santa Scd e ~omana; adrniracion al alto mandatario de la Iglesia catolica en Colombia. y ad m iracion al Jefe del Ejercito colombiano (juc milita bajo el cr istiano y civilizadur cstandar te de nuestro Santlsino Padre 1'1 Papa Pfo x, el mismo del Pescador (~'a!i!{'o. l. Como no pond e rar 1'1 gozo, 1'1 j ubilo que estes vucst ros hijos e xpe ri me n- tan en vuestra presencia, J~xcmo. Sr.'! ;.Cu{l1se ra la confianza que abrigan estes vuestros adictos fieles en p resencia del que tan sabia y religiosamente dirige todos los interest's de nuestra Iglesia, del que tan benignamcnte atiende it todas nuestras necesidad es econornicas? ":Cual ser{i 1'1 alien to, la ani macion que experi men tan los soldados en presencia de su bueno, experto y valeroso Jefe? Regocijernonos pues, v con justicia, por tan singular suceso, Alabernos y bend igamos al Senor (j ue todo 10 g-obicma. Rindamos infinitas g racias al Senor que nos d ispensa el inmerecido pe ro trascendcntal y tamaiio beneficio de que Ilegue a. nuestras pue r tas un huespe d revestido de tan encumhrada dignidad, hccho que no se registra en los anales de nuest ra historia eclesiast ica en Colombia, Nos ha llega- <101:'1 tur no de regocijarnos con el esclar-ccido v e xceleutfsimo huesped. Dig-news pues, Excmo, Sr. hacer nos el sing-ular hono r de aceptar nuestra sencilla e xp rcsion <Ie acendrada y perdurable gratitud POI' el nu nca bien me rccido favor y cl alto merecimiento q ue "OS, l~xcmo. SL. os dignais d ispensar-nos en est e dia de vuest ra paternal visita. i Quieru el Cielo, a q uien 10 ped irnos fc rvorosamcut e. pagaros con creel's vuestro inrne nso y apostolico celo y bendecir todos vuest ros pasos para bien de uucstras alrnas Os debcrnos, me per m ito rcpctir, Excmo. SI"., gratitud. y la gratitud de que sea capaz un corazon sensible, y basta donde le sea dado agradccer. Dignaos aceptar, poi' ultimu, todos nuest ros pasos como otras tantas de most raciones de alborozo q ue el pueblo de Capitanejo y los cat6licos de San Miguel, presentes en no escasos de sus representantes, os quiercn significar: y os ped.irnos hurnilderneute, f<:xcmo. SI"" vuest ra paternal bendicion. Capitanejo, Marzo 2 de 1907.

158 1 _-, :"..~ 1)[':lTl<~() ])1-:1.(;I SI :I<,\I..l- ~1.,\\-IZ )',~ r.\ I\J<c\BII'.\ DE l'ap!'i\:-;r,:.\() / ]))';'\.-\1</'(1 J)J 1'1()7 1';XCl1lO, SL Iklq~,\(lo: Yeng) en repn'sl'ntaci(ln d c una {!ran porci<'ll1 del pueblo cle Garcia RO\'ira a daros en las inro h c re n t cs frases q u e per-mite la e morion que me e m ha rjra, poi' la para m i sole m- nidad de estt' mouu-nto. \'t'n{!(};; d a ros, repito, e1 rlolo roso salu d o (It' despedi(la. ~() os dvj a mo-, rn t':"tntrws b razos, Excmo, Sr.; bon los <11: nuest ros he r ma.nos de 'T'u nd amu lob que os reciben, y si no alcanza n ;1 at cnd e ros como vuest rn elevada je rar'qu ia, vuest ros clevados rue rec im ie ntos." vuest ra honorable pe rsonalidad 10.Ic m a nd a n, conf'io en q u e 10 sabran hacer mcjor que nosot ros. d aclos su ma;o; ad e lantadu cult u ra y los mayores recu rsos de toclo g(.nt ro de /jut' d isporie n. Vuest ra bn~yfsil11a estancia entre nosot ros Sera de Iecunda e nsejianz» y alto cje rnplo : vuest ra inagotablc benevolvncia e il ust ra d a tolcranc ia aca bar.in sin d ud a entre nosot ros COil el est rvc ho esp ir it u de se c t a y con la nu-zq uina int ransurcr.cia - n todo teitt'110. lh' huy I'll ad elant e los caructe res apocados qul' no ~\' at rvv a n u a va nza r u n paso en el campo mort! quc da ran co mo la m uj e r c1t'1 pasaje b iblico. convc r t idos e n estat ua (It' pied ru, q IIt. d il!a;1 los q ue vengnn despu{.s:~ Aquf mu rio la intole runc ia»; y nosot ros d ircmos tamhi en : <: Aq u i nacic ron la concor d ia I" la ar rnon ia.> V'u cst ro d ecid ido inlen~s po r la p rospv r idi«! moru l. intelectual y rnate rial de cstt' pals ha despt'rtado vn t r e no-ot ros el arlor mccirlo esp ir it u publico, ha rcaviva.lo \'1 pa t r iot ismo yo se t rad ur ir.i y tarde en actos cor r.-ctus, que os dc mucstr-cn como he mos atc nrli.lo \"th'si r(js ;.;"hios l'ol1sejos y curinto os 10 ag rad ece mos, j En\'icliahlt' p rivilcsrio (,J tid saber v Ja vir tu d! Avasalla voluntad es Y cau tiva cornzorres. Sf, «stu mos d ispuestos a coopcrar eficaz ment«;1. la grande ob ra <It' reconst ru cci.in moral.\' mate rial d e nucst ra pat ria bajo vucst ros ilust rados auspicios ; r.uest ros labios os be ndicen. nu est ras ma nos os aplauduu ; hay en nuest ras mentes puesto de honor q ue con- vuest v se rva C,)11 coruzon cs h.i car levantado iiio ro la gratitud rrlo, altar en en- que stilt.> ros YOS oficia.is, }":x,~1ll0, Sr. l<~l hu milrle y labor ioso p uv b lo rovi rvnse, que uintas y tan inmerec.das pruebas ha!'ccibido cit' vucst ra paternal solicitud, r e ci bi ra tarnbien con arnorusa vene racion y con filial respeto la be nd icion que os su pl ico le impar triis como ilust r e rcprcse ntantc d el Pon t ific c maximo del o r lie cr istiano. nuest

159 ._ Rccibid, Monsefior, mi saludo de despedida. 0>; d ij e antes que era doloroso: per mitid me, senor. rcctificar esta expresi6n. Puede se r el dolor hijo de la ausencia. Vos no os ausentais, senor: os alejais de nosotros, pero vuest ras cxirnias virtudes, vuest ro sabe r y vuest ro at ract ivo personal haran q ue vu est ra imagen viva sic mp re con nosot ros y entre nosot ros. No muy t ar d e, 'lsi 10 esper amos, se levantar.i en este rnisrno sit io uno de los monu mentos que el progreso debe al arte modcr no, monumento que ir{l vinculado a vuest ro nomb re. Cuando los vianrlantes Que a d iar io pasen POI' aq uf sin los pelig ros inhe rentes it este ve hiculo p r irn it ivo, los cuales desafiais con singular se re nitl ad, llegan!.. a sus mentes vuestro nornb re, sus labios mu rrnu raran una be ndicion y sus 1.'.(1- razones sc sentiran conrnovidos por el ag radecirnicnto. He dicho. DISCUI<SO PI<ONUNCIAJ)O EN TlI'.\COQUl'; I<~xcmo. SI'.. Venerable Pontffice de la Iglesia Universal, actual mente or gu llo y p rez de la Republica. Vim oj>tisijllo: It'll ntes ersro docetc omues J!enles... HI ecce ego uobiscnu sum omnibus diebus usque ad cousummationew sa culi- --Mandato divino pronunciado poi' los misrnos labios del Alt isirno y en cuyo cumplimiento y realizacion ve nfs, ya como celoso pastor de vuestra grey, ya como ilustre mandatario y ya tam bien como habil diplornatico: misian sacrosanta )' de alt isirna significaci on la de venir como p ropagador de las ve r dadcs evangclicas en feliz arrnonfa con el podcr temporal; si, en representacion de ese santo que en Roma ocupa la pr ime ra Silla d el mundo catolico. y por tanto en nomb re de todo un Dios. Pues a la ve rdad todos los Pont ifices (IUl' han ocupado esa SiB a rornana han sido iluminados como poi' u n rnisrno espfr itu, y de ahi la unidad de accion, la identidad c int e- gridad de tan sag rado ministc rio y la infalibilidad en sus doct rinas: por eso dond e esta el representante de Jesucr isto ajh esta el espfr itu de Dios, de la misma manera que estan los cfectos en sus causas, las consecuencias en sus pr incipios y los reflejos en la luz, siendo csta la razon mas poderosa para que la humanidad entera os vene re, para que este pueblo humillado os reciba de rodillas, se glor ie de poseeros en CStOB rnomentos, a1fombre de pal mas y de ftores vuest ro camino y revercnte aguar de vuest ra santa bend i- cion; y can tanto mayor razon cuanto desde el transcurso de todos los tiernpos y al t raves de todas las edad es, POl' primera y {mica vez venfs a pisar estas retiradas com areas de Sud America; sf. porque han pasado muchos siglos, Y

160 13)S -- pasa.rau..\ la planta de vuest ro pi,' nil \'ol\"'r;1 ;1 hon r a r est c nuestro t ristc pero agtadecido sue lo, Y t. Cl mo no se nti r dilatarse el,'orazllll d c: L'ntusiasl1lo y dc j uliilo cn presencia d e tall alta personalid'lll. y al cout- m- plar los grandi's t itulos e insignias Ill' q til: \"l'ilis invest id o en e l <101>1l' ca.ractc r de vuest ra hicnhechoru v loahl,' misi(lil. en dondc SL' ha heche feliz,\' ar moniosa ~\(ith-lla rt'l'lp"o,';, subor d inacion de las dos grandes entidadl's.,'uyus j efvs.,\'" por Ia sant id ad v sabidu r ia del uno co mo pur la ilust racion e incomparable 'tino d el ot ro han Iur ruatlo,-i si m bolu d e l engrandecirniento y dl' las g'lurias nacionalvs, c uyo» h cc hos ind isc.u tibl r rncntv St~ pal pan "11 torl as las st:n:iones del pals y se alca.nz an (I d ist iruru ir v n todas las fas,'s l!t' la ar t ivid ad hu ma na. y en dond c de modo especial St' rnanifiesta cl a x iorna de que el catolicismo es la savia y fth'rza vital de tod a civilizaciou, y csta la que frat ernal ment c uuc los pueblos a los pueblos bajo una rnisma hu mauidad ': Excrno. Sr. : serall illgellte~ los be neticios de vucst ra visita y esta sen! d. In m[ls alta y ete r na gratitud par a estas gcneraciones, v la cual se r a volocarla en una de las mcjores paginas de nuest ra histor ia lit' la rnismu rnanc ra que SL' coloea una g-uirnalda ante Ius monumentos :- en los ti- mplos: pero tarnbicn l's \-erdad qui" al lin de vuest ra gloriosh y hvnefaetora pe reg r inacion hahreis ob te nido II uv si e n 1a antigiiedad y cut re tod os los pue blos tit' lll:ls all (I <Ie la Cruz, r-l pueblo he b reo e ra,-) unic«dt.'\lositario dv las ver dadvs 1'\'- veladas, 11O~' 10 I:S 1'1 ruuudo errtvro. por q ue [I ellas ni el t iv m po ni " espacio porie n l im it e«, de tal rnane ra que a1 fill de vuest ra jor nad a, como hvvh«c u m plido, pod eis e x clurna r como Pluta reo: he rt-cor rido torlos los puehlos clv Ia t io r ra \' he r-ncou t r-aclo c iu clud cs sin monu mcntos, sill obelist'(ls. sin mu rallas, sin I", "s.l" sin lct ras, pe ro niruru na doihk no se haya le va nt ad o u n tc mp!o a1 Alt isi mo. dll11de no s,' Itrinda culto " adoral,j(ll1 I" s,' r,';;petl'11 sus m in ist ros. Si, <I" esto porlcis i'l1form,u' al i)dl1cipl' <1,-la Ig-le;;ia, Rccibid pucs,!<:xci110, Sr.. ell u n ion <I" vucst ros dignos compaircros, el mas e nt usiast a saludo de hie nve uida. q ne os prescnto como indig no corn isionad o (I nom ln. de t od as las poblaciones lie esta Scccion del Departume nto, como tarnbien nu est ra prot esta dv ad mi racion y d e esp ec ial sirn pat ia hacia vos, de rcspeto p rofu n do, dt' adhesion y de com plcta surnision (t la voz de ese santo y supremo Jet" de la Iglesia 11nive rsal, cu va 1>('n<1icion i 111plora mos po r \'uest 1"0 coud ucto. J. ~l.\htl:"i.\~() CAIWI :N,\S Soat;l. \Ial'/:o 4 de 1('07.

161 id ell' gobic rrios. Papa San Leon etcnien- -- ISh --- ljisctt!\'so I>U. S!\'. DANI! ;!. HONDEIH)S EN' SOATA. I :K l.a Noell"; 1>1 :1..::; nrc MAIo/ZO DE 1 ()07 I<;xcmo. SL: Se me ha disce rnido ei alto honor d e ve nir en nomb re de los pueblos de esta Provincia it presentaros :l \'O!> y a vuest ros dignos cornpaiie ros cor d ial y r espctuoso saludo de bienvenida: e xcusad pues, senor, q ue el mas humilde de vuestros hijos venga a d istraer vuest ra d clicada atcncion. Desd e que fclizme nte pisasteis el suelo cle Colombia como Enviado de S. S. y repr esentant e su yo, la HqHlblica ha cnt rado en una era de paz y de concordia, signo incq u i- voco de civilizacion y cle progreso. El saludo del Salvador, Pa... ' I'obis, fue el saludo q ue vos, senor, dirigisteis entonces it todos los colombianos. Habeis sido pues, Excmo. Sr., el heraldo mensajero de la bonanza d espues de la tormentosa bor rasca de nuest ras continuas disensiones y colaborador eficaz en la obra redentora de nuestro ilustre mandatario. Y no podia su ced e r de ot ra manera sicndo asi IIu e la Iglesia. interprete tiel S constante observadora ele las e nseiianzas de su divino Iundador, ha atendido sie rnp re con solfcito cuidado a las necesid adcs de sus hijos v e nviado a todas las naciones el (lleo santo ele la pacificacion. La historia de la diplornacia pontificia. pud ieramos decir, es la histor ia de la t ranq uil ad los EI d <10 en Mantua la ira d est ruc to ra de las hordas d e Atila, sois vos, SenOI', de tcniendo en nuest ra a mada patria cl suicida re ncor de nuest ros odios y hacicndonos e x t e nd e r el civil i- zador a b razo de la fraternielad universal. Y 10 habcis obtenido, sefior : vuest ra tarva no ha sido cster il. As! nos 10 anu ncia en rccicnte docu rne n to oficial el Excmo, Sr. Presideute de Ia Republica, ill' grata recordaci,on en este instantc, y no se oculta tampoco il nuestro!'> 010S. - POI' tan marca.lo favor los pueblos de esta Provincia agradecielos, POI' mi indigno conducto os tributan su filial.saludu de reconocirniento. d cseando que vuest ra augusta presencia en esta ciudad sea el astro p rccu rsor de ot ros rnr-jor-es y mas feliccs tiempos. Il~JNDIS EN LA CO:v1lDA El. DiA DE LA LI.EGAJ>A.\ SOATA POI' cornision del SI'. Cu ra parrow de esta ciudad caberne 1.'1 honor, Exc mo. Sr. Delegado, de p rcsen ta ros cordial y respctuoso saludo de bienvenid a. Ma rcara epoea cxcepcionalmente importante en la vida de esta poblaci6n vuestra Ileg ada it ella; poi' l'so sus habi-

162 157 tantes nos sentimos ho v honrados '" llcnos de alborozo al tene ros como huespe d, a"\"os, repr-esen tant e de altfsirno poder cu ya iurnarccsible gloria se ha c xtc nd ido de d ia en d ia al tr aves de diet: y nuevc sig'los; it vos, que con vuest ro esp ir i- tu de tole rancia y conciliacion habeis p restado pod e roso apoyo al.iefe de la Nacion en su ob ra (ll' prog-rt'so material v de rt-const ruccion rno ral de Ia Pat ria.. Las ovaciones de que habcis sido objeto vn vuest ra excursion, y la de que sois objeto aqu i, hurnild e y sencilla, 81, pe ro since ra, dernost rara n a V. E. cuanto se os ama y cuan g-ran<lc es la sin ce r idarl (lei carifio que se os p rof'esa. Los pu r blos arnan y rcsp et a n la supe rior idad q ue se irnpone, y las man Icstacioues de su ad m ir acion son el justo tr ibuto q ue r inden a q uiencs cncarnan una aspiracion suprema. Exc usadrnc. Ex crno. Sr., si os e x pr esn el vivo anhelo de que e l rccue rdo de esta tierra que habeis hon rado con vuestra visita os sea siemprc g-rato, como sera impe recede ro 1.'1 vuest ro en nuest ra memoria. Per mitid me en fin que al levantar mi copa 10 hag-a para lrriudar pal' la ventura de V. 1<;" por la del ilust re Pont ifice reinante y par la de vuest ros dig-nos compajie ros. Salud, Excmo, Sr. Soata. Marzo 4 de 1907, F/ol:\NClSCO Al.vAHAIJO ]<;XClf.O. Sr. Delegado. 1<;1haber me encornendado d iruriros la palab ra interpretando los senti mientos de este pueblo (el de Susacon ) es cargo mu y superior it mis fue rzas, y POI" 10 mismo como a bondadoso padre respet uosamcnte 01:; pido me concedais vuestr'a ge.ierosa ind ulgencia, la <Inc siernpre y en todas partes con mas Iuc id ez h rj lla ra POl' SCI' el signa mas caracterfstico lit vuest ra muy conocida y elevada g randeza. Cuanto mas grande sea la d ignidad, abnegacion y generosidad c.e un padre, tanto mayo)' debe se r el respeto, adrni racicn y reconocimiento de un hi]o, Refulgente y vivo d estello de esa gran lumbrera del Vaticano.uuisisteis, Excrno. Sr. Dclegado, antes que exhibit" vuest ra luz ante el mas renornbrado, rico y populoso pais. iluminar y «onsolar mas bien el nuestro, por se r tal vez 10'1 mas pobre, aciago, insignificante y obscu roo Ante tail mag-minima y grandiosa idea nada os ar red ro, nada os pudo dctcner: d ejasteis a vuestra muy amada patria, )' con ella los mas caros y sensibles afectos del corazon: at ravesast cis los mat-es, r ecor r isteis infinidad de dimas insalubr es, yen una palabra, sac.rificasteis vuest ra conveniencia y e xpusisteis vuest ra vida.

163 -- 15H - Y en los mementos mas Iunestos y c riticos para Colombia, eual coloso y ardiente defensor de la paz, como valeroso y resuelto adalid, saltais a la palest ra. desatais vuest ras ar mas, poneis en juego toda vuest ra irresistible eloc uencia y desplegais vuestras muy insignes y prodigiosas dotes parlamcntarias, y e-n cambio del odio, la destruccion y la guerra, dejais avante vuest ro grande.r sublime ideal, el memorable programa de nuestro ilustre, egregio y primer mandatario: union, paz y progreso. Y como obra vuest ra, a pesar y d especho de algunos, seguira triunfante sie mpre nuestro tan bello y sagrado lema. Por esta noble y generosa accion y ot ras muchas de igual magnitud los pueblos to<108os saludan, contemplan y consideran como el gran colaborarlor republicano, y generalmente ya os adaman como a uno de los inclitos y esclar ecidos padres de nuest ra patria. Por tantos, tan grand eli y rnarcados merecimientos, nada digno hay de vuest ro elogio, y menos puede haceroslo el mas pequeiio.y hu milde pueblo de nuestro territorio que en t ropel, alborozado y entusiasta viene a vuestro encuent ro, con el vehemente deseo de tener la dicha de veros: y aquf a vuestros pies rendido os acata, encomia y vene ra, y en cristiano transporte tarnbien os admira y considera como el mas digno y sapientfsirno rcpresentante de nuestro Sant isirno Padre Pio x. Denodado, solicito e infatigable Pastor que desd e la cabana hasta los confines del aprisco recorreis gustoso e impasible las hondonadas, desiertos y malezas, solo poi' cvitar le el mal)' proporcionarle el bien posible a vuestro predijecto.y q uer ido rebaiio, vuest ra unica aspiracion, repose y satisfaccion ind ecible. Disting uid isi mo Jefe de la Iglesia colornbiana, que tan importanttsimos beneficios le habeis hecho y de celestiales berid iciones le habeis colrnarlo: benig no, miser-icord ioso y clemente, impartid put's a vuest ros hijos vuest ra santfsima bend icion, q ue no otra cosa d igna dl~ vos como of rend a os p resentarnos que nuestro acerid rado y filial amor, sumisi6n estricta y completa y la mas pronta y ciega obediencia; y q ue r eve rent es, rcconocidos y gratos, nuestras voces al Cielo elevarnos con el hosanna una y mil veces al que viene ('0 el nomb re del Senor. Susacon, Mayo h de 1 1 )()7. l>1scl:i<so A~'l'E 1-:1. EXCMO. SR. DELEGADt) l~xcmo, Sr.: "I'engo Ja honra, au nq ue inrne recida, de pr esentar a V. K, it nom br e de la Diocesis, la mas cordial bie nvenida y

164 nucst ra su rnision filial, robustecida lit' toda consid e racion J r espe tc. Nada tan honroso para u n eclesiast icu como d Ile va r l.i palab ra en estos solcmnes mome ntos, Ksta hon rosa desigriacion me la ha confer ido e l respetable y \'irtuoso decano riel Episcopado colorn biano, cuyas fuvrzas ffsicas, si bien un tanto gastadas POI" e l t rabajo de inf at igab le apostol, y por la mano de bil itadora del tie mpo, tod avia dichas fuerzas se mueve n con re lativa e ne rg ia, porq ue las anima esa impulsadora f'ue rza divina que en e l cenaculo t roco la t irnid ez y humana cohard ia en el valor he roico.ie los Apostoles. 1<;1pod er divino que corrse rvo j u- v,'nil 1'1 alma tie Le(m XIII en un c ue r po hu rnano casi secular. ('S e l que conse rvando la existcncia <1t'l Ilrno. Sr. Parra, haec que con su izq u ie rda se d espid«ya <1(' un siglo )' con su der-echa casi t<.hjuc.ysalud«un lh1eyo "iglo (IU~ se le aproxirna en su larga vida. La a.jnegaci.')n es la forma suprema del a mor: por tanto, si habeis sopor-tado con resig nacion las aspe rvzas de nuest ros carninos en un viaje largo POI' veni r a visitarnos, es prcciso n nd irnos con ad m iracion a la evid encia d e! arnor '1ue nos nneis. La visita de V. Eo a estes pueblos t~s la p rirne ra en los anales de la Dclegacion Apostolic» en Colombia. l<;ste acontecimiento por e nde hara epoca y honda huella luminosa en nuest ra vida re ligiosa y civil, mar-cando una fulgurant- pag-ina en nuest ra histor ia mode rna, la que por encima de muchos aiios venin futuras g-eneraciones como leg-ado hon roso de gloria nacional. A vues t ro paso habeis visto los pueblos agolpa rs«e n d e nsa multitud para salud a ros con la anhelante palpitacion de e mocionados corazones, ol vid arulo cad a cual en vuest ra presencia los dist intivos colores que forman nuestro pr isma politico, para que resucne lib re me nt e cl a rrnonioso concento del re ligioso pueblo colo mbiauo. E! sol <:11 un espe jo suele estudiarse mejor y con apac ihle calma. En V.,,;. a maravi- Ila irradia el arnable caractvr del actual Pontifice Romano. y ya que pe rsonalrnente no le poderuos vel', Ie ad mirare mos siqu ie ra en el diafano cristal de vuest ra arnable Exccleucia. I~s t rad.cional nuestra su mision a la Santa Serle: por eso una f'rasc amable caida de vuest ros labios sabre la multitud ser:l r.icogida can evanzelica ve ne racion, maxime si fuer-e como el cfluvio d ulce 'Jue St' cr istaliza en las g ratas vi b raciones c.e H na paz lj ue suspi ramos POl' vel' aseg u r arla. Si ya terminara para esta Nacion Ia edad de hierro sauguinario )' estuvierarnos en la aurora de una cdad <ll' oro. j como os conte mplara nuestra histor ia POl' encirna dr- los siglos colocado cnt re estes <los pe rfodos como UI1 arco iris tit' paz! 1~11 vuestra ma rcha, ora,,1 t r e pa r una e mpinada celina. ora al se pu lta ros en uno df' nuest ros hondos valles. <-,1"in'

165 IhO -- puro de nuestras majestuosas y poeticas selvas os t raia e l aroma que agradablemente extraiia el europeo; aroma de flares que no visteis po rq ue con honesto pudor ocultan sus petalos entre el hurnedo follaje de las neg ras montaiias. No os ad mireis ni 10 tengais por arrebato de am or pat rio si os digo que esas flores son el emblema de un pueblo todavia inocente y con el candor de la fc cristiana, comparado con los centros de maldad de lejanos paises donde el piteo de las locomotoras ensordece a cada momento al viandante; de un pueblo que si bien permanece impasible ante el imponente y fiero aspecto de fratricida met ralla, es noble y su miso a la voz de la conciencia cristiana y del Representante de San Pedro hasta el punto de rendir las arrnas y entregar!;us laureles en el campo misrno de Ja victoria. En Colombia 10 que no conquista la espada de celebres cam peones 10 alcanza la voz autorizada del Pontffice Romano. No hay hombre ni pueblo mas digno de adrniracion que aquel que no ceja ante la fuerza bruta; pero la \'OZdel deber le encadena con un cabello. POl' eso hoy estos pueblos y sus ministros os brindamos nuestra sumisi6n can la misma facilidad que si fuera un ramo de flo res. Los corazones del Clerc y del pueblo santandereano se han refundido hoy en uno s610 en Bucaramanga, donde palpita con la gallardia de un pueblo intelectual y con la rnistica efusi6n de un pueblo catolico, Si : en Bucaramanga, cerebro del Departamento adonde vienen los sedientos del saber para luego esparcirse a los euatro vientos como meteoros luminosos; Bucaramanga, cuyas blancas casas, entre el tapiz verd inegro del valle de Soto, a 10 lejos se ve n como los blancos cisnes que ye rguen su cuello y levantan su pecho sobre la tersa superficie de los lagos; sf, aquf palpita hoy el coraz6n magnanirno de Santander; aq ui donde cl mismo huracan quiere formarse una aureola can los atomos brillantes del oro de Giron que levanta de las calles; aq uf donde el profano presiente los hechizos de la Arcadia y los catolicos, en este dfa, estamos como en las campiiias del Tiber I> en los espaciosos jardines del Vatieano; Bucara manga, en fin, donde la altiva nobleza de sus gobernantes es personificae ion de la lealtad r hace derroehe de am able ~enerosida:d para con el augusto Jefe de la Iglesia. Bucaramanga, Enero de 1907.,- R. ORDONEZ Y. Presbitero.

166 sencia aq u i, amable vixita, ":xcmo, S', Delega.clo Apostol ico, Veue ratrles liig-nhlalles de l a sant a [g-lesir, respetablcs sacerdotes. senoras, senoritas, gl'e,.;, cornl- -ionados del Gobi er no n aciona l, caballeros y consocios: hoy en ad elan- de La " onorable Junta organizadora dl' la rcce pcion y el Club del Camrrcio. distinguida entidad q ue tcngo el alto IS inrne rccido honor de p resid ir. tuvieron simu ltancamcnte la feliz y opor tu na idea de reunirse para ofrcce ros, Ilmo Sr.. de la ma nera mas respct uosa, sincera y cordial. en nornb re de toda la culta sociedad pamplonesa, esta hu mild e velada Hrico lit eraria, morlesta e xp resion (lei inti mo y profu ndo alburozo qu e vuest ra g-rata cuanto honrosa visita ha vcnidu a producir ell todos nuest ros espf r it us, pu es ella, asf fu nrladame nte 10 cspc r a mos, hab ra de se r Iecund isi rna en g-randes resultados y en magnificos beneficios para esta important e Diocesis de San Pedro, Apostol de Nueva Pamplona. Esta am able visita, que con indecible jubilo recibe ufana la scnsata socicd ad parnplonesa, muy d ignarnente representada en csta reunion POl' las distinguidas damas, vene rables sace rdotr:s y cultos caballeros que nos honran con su p re- esta dig-o. ser;'t t e en los anales de nuest ra que r id a ciudad Ia \'07. de mando que nos or dena prog resar, e l estf mulo para au me n ta r la cultu ra moral e intelectual, y sob rc todo, la dulce, la autorizada palab ra d e concordia entre los csp irit us para q ue 10- g re mos y pod amos todos transitar por Ta arnplia y honrosa senda de la paz, unico be neficio de que necesitan los paises lat inoarn e r ica nos para conquistar su eng randccim icnto y para obune r su cabal, su cumplido bie nestar. Es vuest ra importantc visita, Excmu, Sr., el vivido rayo dl' sol que d isipa y fu nd c los ult imos ncg ros nu ha r rones de la ma~ espantosa y d eshecha de las te mpestad es: b rillante, prornctedora aurora de mejorcs dfas para el pueblo santandereano; p resagio de pj"()ximas y risuefias realirlades: g-aranti'l de inme diatas ve ntu ras, de t ranquilidad acentuada \ de tole rancia en toda la vasta comar ca. - Estas aserciones quedan plena j' brillantemente comprobadas con el hecho significativo y notable de que hoy mismo habeis honrado de alta mane ra ala red eutora emp r esa del camino del Sararc haciendoos po r acto g-eneroso y espontaneo el mas distinguido entre torlos sus accionistas. Se rvios, Excrno. Sr. aceptar est a humildc velarla como franco tributo del muy alto apr ecio, de la r espetuosa consideracionquc os profesa entusiasrnada la Diocesis <11.' Pamplona, cuyo d ig nisimo Prelado, ret e nido aun en cl lec ho POI" crudes He frimientos, no pudo d ispcnsarnos el honor de concur rir en esta neche ala prescnte reunion. Sabc d, limo. Sr., que del fondo tid corazon Ill' torlos y I!t' cad a UI10 (Ie los moradorcs de Pamploua SI:' levautan fer- 11

167 vientes votes hasta el trono del Sel' Omnipotente en demanda de vuestra inte resante salu d ; de bienandanza y satisfactorios resultados, ya en vuest ra elevada misi6n diplomatica en Colombia, ya en vuestras bondadosas visitas pastorales a las dive rsas Diocesis colombianas, con ellas distlnguidas y honradas. por ellas beneficiadas y favor ecidas, Aquellos votes, Iervidos y since ros de los parnploneses. se dirigen tambien en parte muy principal a impet rar una larga, p rospe ra existencia, y absoluta, completa felicidad para el muy ilust rc Pontffice, hon ra de su siglo, lumbrera de las ciencias y elevadfsirno cocficiente del podcroso catolicisrno, que con intellgencia, abnegacion y virtudes eminentes, dir ige hoy desde Roma, augusta capital del orbe catolico, con mano fir-me, habil y discreta, el poder espi ritual mas difundido, fuer te y eficaz que exist e en la aetnalic1ad sobre todo 1.'1 haz de nuestro extenso planeta. En el ejercicio y desernpefio lie este sublime pod er han d escollado y han br-illado con ref'ulgente luz propia los Anastasios, los Alejand ros, los Inocencios, los Clernentes, los Sixtos, los Paulos, los Leones. los Pfos y tanta8 ot ros <erninencias que a todos los dorninan.> astros esplendcntes 6 estrellas de pr irnera magnltud que estan luciendo en el amplio firrnarnento azul, que cub re, cual inmenso, riguisimo manto de sin iguales esrneraldas el albo, mor bido e inconmovible contorno de la cristiandad. De aq uel dilatado pod er y de este l>gregio Pont ifice sois, Excrno. Sr., muy fiel, d igrrisimo representante en nuest ra amada Pat ria; por tanto, sed muy bien venido al te r-ritorio parnplones, y contad siernpre en el con la absoluta decision y con la rnejor fe y con la mayor voluntad de todos sus numerosos pobladores, para quienes son ya bien conocidas vuestra carifiosa aficion por Colombia, vuestros constantes deseos y esfuerzos por su adelantamiento y cordialidad, y mas que todo, las relevantes virtu des y cualidades que os caracterizan y enaltecen, aq uilatandoos. Para el Club de! Comcrcio es particular, excepcionalmente satisfactoria, esta irnportantfsima reunion en su establecimiento, y os aducire algunas de las razones en que ello se funda: como el es un centro social, anhela siempre po r atraer a su seno los rnejores, las mas selectos elementos que le sean hornologos y hornogeneos; como el es un centro intelectual, aspira a reunir en s610 un foco principal todos 108 fulgidos destellos del genio, del ingenio y del talento, que sue1en hom-arlo visitandolo; como el es un centro moral, necesita recoger y fijar en s610 un punto central los me iores ejemplares de virtud y de cond ucta q ue quie ran favorecerlo con sus sirnpatfas, concurso y apoyo: y en fin, como el es un centro prog resivo, solicita, acepta y agradece todas las insinuaciones, conseios y adve rtencias que ema-

168 163,- nan de 1m; nobles g'eneradores del hie n.,'"<\ individual. va cojt'di,'a rn e n t e consid e rado. 1';8 POI' todo csto POl' 10 q u e el Club, fic l t rasun to, viva imag'en (1,' la se nsata socierlad pam ploncsa, apr ccia y estirna en todo su j usto valo r, en tuda su alta sig nificac ion, vuest ra horrrosa p rescncia en su S,'110, I':xcmo, Sr.. vrner'ablcs sace rdotes, senoras, senoritas y ca ballc ros 'Ill\' habuis tcnido la e x quisita amabilidad <II> acepta r ('sta hurn ild e cuanto respe tuosa invitaci6n a Ia p rese nte sesion sole mne. La comision. altamonte hon rosa, que 111<' rue d isce rni- (La POl' las respetables cor poraciones asociadas para prcsentaros est a "dada ar t ist ica, su ape rt u r a,\ m u y ate nta dedicator ia, va {I q u c-d a r ya t er m inad a: as..:endcran lucgo {l esta hermosa t iibu nu los ve r-d ad e ros, 10:-; rorn pvt e ntes or-adores, ace r tados intvrp r et es de los d e licados sentimientos que abr iga y cult iva la intclect ual socierlad de Pamplona: vendntn, d igo, a d csar rollar con lucirn ie nto hriiiante los irnportant es ternus que adios les cor respond en, y it fijar con acierto la cvid cnte, notoria y si ng ula r importancia d el simpatico suceso q ue todos nosot ros \,:-;tai1108 aq u f Iestejando sus anteced e nt es y consecuentes. ora me d iatos ora inrncd iatos, y hasta sus ul te rior'es re sul t ados, ron t od a 'it'g"llric1ac1 beneticos. Disirnulad, Il mo. Sr.,, honorublv coucu r rcncia, os 10 ruego, cl d ese mpeiio harte d esacc rtado <!t' mi cometido. pues apenas he t ratado de cu mpli r con un dcbe r indeclinable; pe rdonad tarnbien tod as las incorrccciones que aun involuntar ia ment e hab reis de obse rva r en el cu rso v desar rollo de esta velad a, casi del todo imp rovisada. ' As! PUt~S no pod e mos hac -r ot ra COS<l sino acoge rnos tan solo a vu est ra amplisima benevolencia, para que alcanc e a cub rir t odos los. def'ectos no intcncionados, obra y efecttl lie lab circunstancias, que hab rei«lie e ncontr-ar en ella. La extension lit' la g'enerosidad, bien 10 sabeis todos vosot ros mejor q ue yo, fu e, 1'1'3 y ser{1 sie mp re el rnejor atributo, el mas au tent ico d ist in t ivo d e las a lrnas ~ran<1es. nobit's J magruinimas. I,I':OPOU>O CASTELI,ANOS. Pn"sj,1entt> '1el C/II/I del ( omerri» <1(' Purnptona.

169 DISCURSO DE OFRECIMIENTO PRONUNCIADO POR EL SR. LAZARO F. SOTO A NOMBRE DE LA SOCIEDAD ROVIRENSE, ANTE EL EXC:'vIO. SR. DELEGADO APOSTOUCO, EN LA NOCHI': DEL 28 DE FEBRERO DE 1907 l';xcmo. Sr. Delegado Apost61ico. senores, cabal leros. Yo, el mas humild e de los hijos de esta nuestra amada Colombia, he sido engrandecido con el elevadisimo encargo que me ha hecho la sociedad que bulle hoy en regocijo por tenerlo en su seno, para que a nombre de ella presente a V. E. su grande, eterno y sincero agradecimiento, {mica cosa medianamente digna de que dispone para cor responderos a la regia visita que Ie habeis obseq uiado. Servios pues, Excmo. Sr., aceptar las f rases con que he querido interpretar los nobles sentimientos de la comunidad que por mi fortuna ante V. E. represcnto. Sabio profesor de la humildad '.>' caridad cristianas, habeis trepado riscos y atravesado paramos para llegar hasta un pueblo que os ad mira, pero que solo pucde ofreceros las incomodidades a que su juventud 10 obliga; a un pueblo que nada que os me rezca pue d e p resentaros, porque es tin nino aun, pe ro a q uien Dios '.>' sus hijos haran grande y que su futura g randeza a V. l;~.la consagra. Aumentad, Excrno. Sr. el distinguidfsimo honor que al pueblo rovirense le habeis hecho con traer hasta esta escondida regi6n de la Republica vuestra persona de Principe de la Iglesia de Cristo, aceptando gustoso las of rend as pobres que el os haga. Sabed que los te mplos de la Provincia estan a vucstras ()rdenes; que las escuelas publicas y p rivadas se cnorgulleceran al cumplir vuestros mandatos: que los industriales os dedican sus manufacturas; que la riqueza natural del suelo que hoy honra el pisar de vuestra planta, todo es vuestro, Tened segur idad de q u e en nuest ras mernorias. como el nornb re de nuestra Pat ria. vivira el recuerdo de los sacrificios que por ella habeis heche, y de que en cada uno de los corazones rovirenses habra una celda destinada a guardaros el mas franco de los afectos. Excmo. Sr. mscurso DEL SR. CL1':MENTE BLANCO EN PAi\IPLONA EI. 31 DE ENI~RO D\'; 1907 Excrno, Sr. Delegado: La honorable cor-poracion municipal de esta ciudad, que aq u f vie ne ;l r-ecib iros, me ha hccho el alto c inmereci-

170 que la concordia e ntre toclos los colo mbianos L'S el medio se- conscgui rla. Av u nos, l'~xclllo. Sr.. con vuest voz evangelica: alen tad nos con vuest ros sabios conscjos, Cr'ced, Excmo. Sr., que 1..'1 pueblo (Ie Palllp}ona os venera r urna, Y q u c l",.'cihidi ro n religios<l rcspcto y p rofunda gtatitud Ja be nd icion 'llil' os (Iign(.is dark a nornb r.- del g-unl rle Carta Iu nd a me ntal rese de Ag-osto til' dad rop i«<e-n ra ----I():; do honor <Ie cornisionar rn c para qul'.i no mb r c dvl pueblo 'Jill' r e p nta y en el su yo p os (I~ r cspe t uoso y filial saluelo ell' l.ienve nicla. A POLLS poblaciones de {'o]oil1ijia!los ha t or aclo la SUe1'- tc (Ie rccibi r una visita tan g rata y hon rosa como la que boy nos ha:eis. Po1' eso Pa m plonn SL' "Ilg-alana para rvcibir08, v Iien.i d c j usto,- a rdo roso e nt usiasmo as ab re sus puer tas, y -l e los pe chos de vst c pueblo se vscapan con j{lb ilo las subimes palabi-as d cl c r e ye n tr-: «; Hc n d ito se a el que vie ne I'll nornb re del Sejior '> S;'be<l, Excrno. SI"., ql1l' \'sta nuest ra tjllcrida ciudad ha sido y se1'{l sie mp re catolicu: qlle en la h' cn ol Dios c rcadol' y Reelentor cif ra su org ullo..\" ljue e n la p ract ica de su "clig-i(ln acata, respe ta y ama (I los augustos Prelados q ue d esde su e rccc ion ell capital de la Diocesis hasta el presente le han elado por sus m(.ritos y vir tu dcs d ias ell' g-ioria a la Ig-lesia, Podeis, Excrno, Sr.. d cc ir al sucesor de Pedro q uraq uf ell un rincon ele los An d es hay Ull pu e hlo humilde ~ pe queiio ell sus fo r mas ex te r nas, P(,I'O g run d c vn cl arnor a los hijos de Cr-isto espa r c idos en el 01'1)(' e n tero pal-a llevar la luz divina a los c ntend irn ivntos v vl con vcucimicn to d,' lat; ve rdad es ct e rnas {t los corazones dt la hu mani dad, La socivclad civil de est e mu nicipio anlu-la ve r ci ment acla en la Pat ria la paz, q u c L'S d{ll1 de Dios, y POl' eso cr ce Jefe su p rr-mo de Lt rr ist ian d ad. Ex<:mo, Sr. EXCIllO, :-ir. Velq.:a,lu Apo~t<'>lj,:(). 4 br c En mi «d.der d..r ep rcsvnt ant e del Gubierno nacion,d en I'sta cut id ad municipal. auuq ue indig no r.ara ello, me at re vo :1 - u plic aros, IDXC1l1U, Sr.. qui' os diglwi:; ofr mis rlcsalifiadas e insipicnt es frasl's nucirlas de u n C01'<IZ(Jn alborozarlo poi' vuest ra p rcse ncia. ob1ig-alllionj( (t es!o solamente ei e n tusiasrno de catt)lico since ro, La jove n Colombia, Ex c mo. Sr.. sltspll'aha un d ia po r ost e nt a r sus galas de catolicid ad Iib r eme ntt-. Y {I Dios rogaha con h urnild e encur c ci mh-ruo po r,'olls,'g-ltit' tal 11n, hast a 'IU" El ~t' <ligna acc.ecie r ;( sus sup li cas, y e ntouc es surg-i(,la <It' L'1 nom Dios Fue-nte Sl p rv ma l~s", (k t.orla au tor idad.> declarando ell' en su a rt ic n lo,~s'1ut' b I~l':igi/Illcatl~1i"a <lpost!'ilira rornana er'a

171 -- 16h -- la de la Nadon Y que los pod eres publicos la protegerfan y harlan que Iuese respctada como esencial elemento del orden social. Colrnose entonces la aspiraci6n j ustfsirna de los colombianos, quedando sus conciencias tranquilas.r el sentimiento cat6lico acent uose entrando en la pril.dica de todos sus debe res cristianos sin ternores de ninguna especie. Aun faltaba algo mas para mayor garantfa: faltaba el acuerdo de la Santa Selle con el Gobie rno, y esto no se hizo esperar por q ue se trataba ya con un Gobierno netamente catolico y cu mplidor estricto de aq uel alto docu m ento, por 10 cual se creo felizrne nt e el Concordato cclebr ado entre la Santa Sede Apost6lica Y el Gobierno de la Republica de Colombia, que vino a sellar definitivamente nuest ra libertad de creyentes en la fe del Crucificado. Con estas bases sostenidas por el supremo legislador ha venido efec tuandose en Colombia no solamente su t ransforrnacion politica.y social, sino que en todas partes se ve su eng randecimiento, siendo inuurne ros los beneficios recibidos del Dios de las naclones, contandose entre estos como el de mayor timbre de honor para Colombia la representacion directa de la Santa Sede ante nuestro d igno Gobier no. encar nada hoy en la dignfsima persona de V. K Monseiior: nuest ra patria Ol; debe mucho, muc hisi mo, porque por vuestra inte rvencion hoy goza clellema p rccioso paz)' trabajo, fincado en la concordia nacional, Os prometo que en cuanto t'ste en rnis facultadcs y tenierido por mira principal el no menos grande de «mas ad minist racion y menos politica.> procurare mantene r la concordia entre los asociados en est a parte de la Republica. Hoy que la Providencia nos ha d epar ado la g'ran fortuna de teneros entre nosotros, Excmo. Sr.. vuestros humildes hijos de esta catolica ciudad os r inden t ributo de admiracion y respeto, goza.ndose en Dios N uestro Sefior poivuestra anhelada l1egada a esta hu rnild e poblacion, e imploran vuestra apostolica be ndicion. Bcncdictus qlli z.'ci/itin Nomine Domin]. Chinacota, Fe b re ro (, de LUIS l"rancisco C; ()MJo:7. R. DF..sPRDII)A DE 1.0~ HIJ0'; DE CHINAcOTA A s. ~;. j.;1. I>I :LI :G,\.I>O APOSTOI.ICO Honn» rertamen seruaui, i Detened, detened vuestras pisadas, Monseiior! Desde aqu i por vez post re ra, Bendecid, bend ecid nuest ra p rade ra, Nuestro Querida pueblo y nuestro hogar.

172 Ihi ; Cuanto alzasteis pe q uejiez tan grande! -:'Pagar vuest ra bondad? ivano deseo: La misrna d cuda que gravo a Saqueo, V'ie nv nuest ros p~'l'h()s[. gra\'ar. Sabi«conciliador de pod e res, I-+:spar'..s luz, ast ro ref'ulgent e: Caut ivas, tie nes 1'1 1{1)1l de gentes. Sed uccs. causas ad m irac ion, I-+:snuestro kn'iente an he lo Que al lin I{.' t u jo r n ad a, 1'~1\hat alla por. 1 Cielo. Obtcngas po r vic tor ia La corona de Ia (iloria. La victor-ia del Senor.,\ll{l en los tie 111(JOS de la antig ua Rorna. Cuando reinaban Xu mas v Xe roncs, A los valie nt es bravos earn peones, COil miles de sold.ulos agul'rridos. gn couq uistas de t ie r ras los enviabau: y estos :':-ll'~i'rl"'(ls f u c r t es y te m id os ~~Ipielag.'o insondable 10 su rcabau. r.legaban {L la ti. r ra ap ctccida Y alli r esue ltos yo.on sed <k gloria F'ir mes luchaban como heridos leones, En pos II..' sf d ejaudo irunensas charcas De sangre, y sie mpre hacia adelanto Con el g1'ito de guerra y de victoria, Colocaban mu v fu-mes v triunfantes If:" los t ronos cont rarios sus pcndones : Y asi' ag-n:g-aban [L su fue rte irnpcr io l\1a~tie r ras. mas vasallos y mas dunes. Mas hoy e n t ie mpo de la Roma nueva, Allf do regie y sin igual se eleva 1':1trono del Pontftice cr istiano. A los varones sabios y discr etos Manda este Sobe rano Por todo el orbe, v con ard iente celo, En conq uistas de almas para el Cielo; Y ':8t08 Nuncios de Dios, estos Pr-clad os,

173 lhh -- Sin ar rnas, municiones ni sold ados, Con el g-rito de paz y de concordia, Luchan t enaces, siempr e con fir meza, Hasta alcanzat- esplendida victoria; Yen pos de sf de jan la estcla Radiante.'" pura de su santa e mp rcsa. Hoy it Parnplona cabele la d icha De tene r en su.se no al g-ran Enviado Que es de Colombia su Patriarca amado; Porque eual suave bienhechor rocfo Que hace creeer las plantas dcst roxadas, Luchando con ardor ha conseguido Extender hasta todos los confines De esta pat ria en untiernpo deszraciada, Como inmensa nevada de jazrnines, EI blanco manto de la paz cristiana. Y par eso los hijos de Pamplona Rfndenle hoy homenaje, Y elevando sus alrnas hacia el Cielo Pidcn Ie rvientes y con grande anhelu Que le eoneeda Dios etcrnos dones A este conquistador de corazones. Pamplona, Fvb re ro ~ Ill' 1'J07. CLE:lIENTE ;1-1.BLANCO o, DISCURSO EN LA RECI,;PCJ(JN DEI. EXDIO. SH. D. FHANCISCO RAGONESI, DELJ';GADQ APOST(JI.lCO DE LA SAN'TA' SEDE EN COLOMBIA. AI. I.LEGAR II SU:l1 '\NSION DI'; LA QUINTA «TERESA> Excmo. Sr.: Del fondo somb rfo de noche te ne b rosa surge ;i. \'n'es en los cielos u n punto luminoso que deleita la mirada.y torna alegre cl espfritu abat ido. Asf en mi obscura vida, vida hu mildc, d csprovista de merecimientos, acariciada s610 del dolor, br illa un instante feliz, con resplandores que me of usc an y d eslu mb ran, que bastan para disipar las sornbras de un pasado y para constituir la gloria de una vida futura. Tal es, Excmo, 81'., e1 momenta prcsente, en que sin saber como ni porque. me yeo en vuestra presencia, doblemente honrado con ella y con cl erica rgo de saludaros en nombre de dos e nt id ad es respctables a cual mas: cl Gobierno civil de- Ia Provincia y la ciudad catolica de Cucuta, Misi6n es esta, Excrno. Sr., 11 ue me ab ru ma con el peso de su impor tancia, y que al accpt ar-la resientc mi hu mildad

174 - lui -.I m i modest i,,,- Pur vanidosa prde!1si('n pod r ia t rad uci rse mi prvsc-ncia en este lujra r. y por ir rcspeto acaso que mi pobr e pa lab ra, d esp rovist a de elocuencia y galauu ra, ahogada PO' e l te mor,r la c moci.in, s,' dirija (I YOS. vnron ilust re, po r mil t it ulos c mine nt e. para p r escut aros el homenajc r e nd ido de un (;obie1'no y de u n pueblo albo rozados. Pcro no. SuIL priva "11 mi (li1illlo al rcsig'na r rnc a t(li1to honor, eld eseo de correspondc r,i. la volu ntarl de mis cornitcntes, yel m{ls int irno aun de r e nd ir pe rsonalmentc mi trihuto de r espc tursa ad hcsion y dt' filial amor al (lig-nfsimo Rcprcsent a n t e de la Santa Sede. 1<;1~'r. Pr e Ic c to de la Provincia. catolico Iervoroso par 1I11<l parce y agente dig-no po r ot ra <11' u n Gobie rno que gllilrda,,'on t~l Punt ificv rvinant e vfricu los mu y cst rcchos, r ree de su dt'1h'i' hace ros la mas viva v siuce ra manif'estacion de ~tlbjlo POI' vuest ra presencia eri la Provincia de su mando. ~' con ta1 tin me ha d esignado su vocero. CUll' plo pues tan g-1'ato e nca.rgo ponicndo en su nombr e bajo los f Iices auspir ios de vucst ras pat e r nales b.nd i- clones los pueblos torlos de esta laboriosa, hospitalaria y dig-na sel'ci()!1 11t'partamcntal, con las mas Iir mcs prornesas tk HI in., ucbruntabl c fe, d e su incorul ic ional ad hesion {\ la s<l14ratla persona tie 1'10 x y Ill' su SUpl'l'I1lH su rnision {I las dl'.cisiones tit' la 19-Iesia, Cucuta, la g-entil Cucu ta : la hi ja mi mada de la prospc r id ad :: tlt-l t rabajo: la l'lilta c iu d ad cu yos g randes at raet ivos Ie han rne r ecido set' Ila mad a Pcri«cit'!.\'or/c, llena de cnt usiusrto, rvbosantv dv aleg-rfa, s,' t'ng-alana hoy pa ra rel'ihil'os en S\l svn». Ella. q ue ha sabo rvado g-rantles arua rjru rns : q ue ha sido somct irla it gtandes p ru ebas, co mo '1\1l: en su suelo d ue r tu e '1I1a j,(cneraci{m \1elTihada poi" rurlo cataclismo ; como qulat1l1 no se han bor rado en SII localidad las hucllas san~tit'ntas de una hecatom be: como que ac t ualrne n te gime bajo 1'1 t u tclajc inicuo q uc la veja en sus d e rechcs, le ata los brazos y le ar rast ra {\ la d ecade ncia: Cucut a infortunada, d igo, guar<laba en sus analcs una p{q:6na blanca, una prig-ina intocada, en q ue escr ibi rti con let ras lh' oro las inef'ables,tlegdas, as g-ratas imp rcsiuncs que dej,ii'{t vuest ra visita. Posi l.le es. Ex c mo. Sr. que it vuest ros ofdos hayan ilcgado, en alas d..la l'xag,tacil"n, ecos que pud ieran haber ent r isteci do vucst ro corazou de pad rv, not as (lui.' pu d ie ran haberos lcc ho d udar de los fu nd arne ntos mo rales y relig.iosos en que rc posa la socicd ad de Cucut a. Fclizmente vuest ro vlaro talen to, vuest ru il ust rudo c.r it cr io v vucst ro vast isi rno conocimicnto del col'a%{,n h u m a no no (;s hab r a n pe r rn it id o j uzg ar uos con lil!t'rl'za, As i nos 10 han dicho!a g-i!lantel'1a que habcis usaclo (on esk p uv lilu y l'1 t ino con '-jlll"labl-is in tvr ve nido v n SllS ult imo» ingnlt()s acon u-ci-

175 mientos. AS1 nos lo esta diciendo elocuenternente vuestra presencia entre nosotros. Vuestra visita it est a ciudad, venciendo distancias penosas y salvando dificultades, es la prueba mas evid ente (1(>vuest ra p re d ileccion por ella, y distincion q ue la (OIOCil en ele vado rango entre las ciudades catolicas del or he. F'eliz.rnente vuestra mision apostrilica se ha extendirlo hast a nosot ros, v os hallais va en la ciudad de Cucuta para q ue podais ap reciarla en sus quilates. Verch. un pueblo c re ycnte y f'ervoroso: encont rareis un pueblo que si altivo y celoso d e sus d e rechos, "abe se r tarnbien surniso y esclavo del dcbe r. Podeis d ecir '11 Aug-usto Pontffice q ue os ha enviado con delegaci6n de sus pode rcs que el pueblo cucuteiio le ama, le respeta y le venera. Recibid, Kxcmo. Sr., junto con vuest ros dignos compafie ros, el efusivo saludo de bienvenida IJUC el Jefe polftico de la Provincia y la ciudad catolica de Cucuta os presentan par mi conducto, y dignaos aceptar tarnbien el hu mildfsimo tributo personal de mi a mo r y mi respeto, B;UST.\QUTO ~LUn[Lr"\ B'(/o;T()N Cucuta, l'\-1>rel"o 9 d e 1<)07. mscurso EN LA :\tanifestacion QUE LOS COLl';GIOS Y fo;scu1.;i.as DE LA CI1TDAD HICIERON AL EXCMO. SR. RAGONK"I EL DfA 11 DE lo'ebrero Excrno, Sr.: Colaborador del Gobierno de mi patrla en e l importante Ramo de la Inst ruccion Publica, cuya inspeccion me csta encornendada en esta Provincia. me correspondc el alto honor de saludaros en nombre de la juventud educanda y de presentaros este g rupo de alrnas sencillas e inocentes para que os digneis bendecirlas y can ellas a todos los que en las escuelas y colegios de esta region forman su corazon e ilustran su entendimiento. Ellos vienen it presentaros tarnbien su humilde of renda : estes nifios, esperanza de la Pat ria colombiana, os prorneten crecer en el santo ternor de Dios, y os hacen la protesta de su fe y de su arnor y obediencia al Augusto Pontffice reinante S. S. Pio x, a quien dignamente representais, Y las niiias, tiernas fiores de estos valles, os vienen a ofrccer que solo a la luz del cristianismo exhibiran sus atractivos, y que sus virtudes seran siempre rico perfume que s6lo ofrendaran a Dios en sus alta res. Bendecid, Excmo. Sr., con la autoridad pontificia de que os hallais investido, las buenas intenciones y las sinceras

176 171 - promesas lle ~stos runos, para que ':011 el au xilio divino ellos sean maiia ua para la Iglesia halu a rt cs,,,- rnonu me ntos de gloria para Dios, Bendecid tam bien a sus maestros para '\ lie Iort.alccidos por la fe e ilu minados por las lucl's de 10 Alto pucdan llenar su augusta m ision viendo clara la se nd a 11,,1 rl e be r y pe netrando las g randes responsabil id ad es que so b re- ellos pesan como depusitarios del sag rado tesoro dt' la inoccncia yen, cargados r.e format' hombres para Dios y para la Pat r ia. l~xcmo. Sr.: l~n rn canl.ctt.'r de Jcf c de la Acl rni nist raciou de l'stt" Municipio y recor'dando con la mayor com placcncia 'I ue y a en ot ra oc.ision habia tenido e l honor de est rcchar vuest ra mano, vengo a dares en nornb re de mis conciudadanos y en el mio prcpio nuestro e nt usiasta y cordial salu do d e bienve nida. I~ste.Hit' blo, q u e re bosan do d e aleg't'1a os ac1ama )' os bend ice, mira en vos, como se mira la est re lla de la manana despues <'e una noche t e m pest uosa. el consue lo que des, pierta la cspcrnnza y el feliz aug u r io tie una realidad moral. Pueblo,~atolico el de Cucuta. os verte ra como al re p resentante del Vicario de Cr isto : pueblo t r-abajador, os ve como al mensa j,'ro de la paz que aplacando las pasioncs de partido hace r evv 'decer los campos ar idecidos antes por Ia guerra civil, pur blo lit- vigo roao c m pu je y nl' e xt r aorrl inar ias ene r- gfas, ve ell vos, K'Cc.mo. S\'" l'l ideal de I1n consoladur en los actuales.ielicados problemas que 10 p reocupan. i Y harto consuelo "s. senor. cl hccho IlL' que el r cp rescntantc ecle siastico y d iplornatico dv 101 sublime C(ltedl"a de San Pedro pise pr-irn era \'l'z,.\' q uizas ell la unica.lu rante rnuchos sigolos, esta nobil isima ciud:ul q uv con t{lntos t itulos ha son ado con un vc nt u roso porve nir ~ Al dzros las g-racias poi" e I alt isi rno honor que nos habeis dispensac.o, no pod e mos menos de congr-at ularuos con cl Excmo. Sr. Ge ne ral Presidente de la Republica, quien para reconstr t.ir la enantes d esg raciad a pat ria colornbiana, ha encont rado como colaborador de sus ene rg'ias morales e intelec tuales.y de su magnanimidad y nobleza de co razon a un apostcl tan rnagnanirno, tan noble, tan ilust rc y tan dig-no del aprecio de los pueblos como vos, Recibid, senor, con la efusion de todos los corazones del pueblo cucutefio, nuest ras mils co rd iales manifestaciones de amor y d' g-ratitud. Cucuta, Febrero ') de It)07.

177 JHS I<;xrmo. Sr, : Hayen el Cielo cspfr it us rad iantes De alas de nieve, de ojos de diarnantes, A velar en el mundo d estinados Por los pueblos. comarcas y reinados: 1 110s,aunq ue invisibles l<;mociones del poder divino. En estelas de luz de jan se nsibles Los pasos (1ue sciialan su camino. 1 1soplo pcrfumado de su boca, Aun mas melifluo que elrnaterno beso, Cuando a los pueblos toea, "" Rapidos los im pulsa hacia el progreso. Cuando cl {lngel rebelde enfurecido En las ondas del aire se rp ent ea, Y can sana infe rnal, ernperle rnido, Quierc d est ruir al hombre Y enlodar de JeSUS el santo norn br-e KI Angel de la Guarda acu d e aprisa, La espada ernpuiia y en leal pelca Hu nd e al angel rebclclc en sus abisrnos : Y en son de triunfo su celica sonrisa Iris de paz en la extension flarnca. De una misiou igual Dios ha provisto A ot ros se res tam bien preclestinados A apace ntar los pueblos rociados Con la sangre purfsirna de Cristo. 1<';1108 en for-rna humana Llevan Iirnpio cristal en su concie nc ia; Claro raudal de ciencia De sus labios ungidos brota y mana; En su alma, toda arnor y toda oidos Al triste lam en tar de los g-emidos. En vano el Iobo de ad uejiarse trata De las mansas ovejas.r cor d e ros, Pues acude el Pastor. con pies Iig eros, Y al verdugo Sll p resa le ar rcbata. l<;h tal la majest ad de su apost u ra Y son tan f'ervorosos sus afanes, Tales luces emerge su fig ura, Que d ebajo de humana vest id u ra Transparenta a los {mg.les gllarelianes.

178 173 A ti, sabio d iscreto, Amante del progreso y cle SlIS doues : Centinela que guanlas <:,1secret» De 1110\'C I' los h u manos corazones ; Grande, egn:gio Prelado Digno vicegl~n~nte del gran Pf(l Que lleva por blason la ho,!!/(i'/'{l ardiel//(', Deja que hu m ildcrncuu-. Y {l nornb re dt> este nido d e palomas Rinda al Padre cornun de nuest ras al mas El voto mils Icrvientc y los aromas De SI1 honda g-nltitutl, hat iendo pal mas ; A ti, exim io Leg-ado del gr'all Pfo, Como lin huv r to carjrado de rocio Que ;11 soplo de la br-isa e mpapa \'1 sur-lo : A ti, egregio Prelado, Rinden sus cor azones Estas esposas del Senor del Cielo. Son pob res, es verd ad. sus custos dunes, ~IaB gratas son il Dim; sus o raciones. En ti fincan su honor \' SlI consu elo, Pucs e res ttt virtud \.jue las esr.u du : I~n las tormentas de la negra du da l<~resde su espe ranza fir me an helo ; I:<~nti ve n al Pastor del u niverso A 1 j e ra rca till e rige los <Iest inos De la Iglesia de Cr isto : I:<~llasalzan sus ojos hasta Rorna, Do reside e l Pontffice mas santo, Que es honor de la Iglesia y \.'S esparrtr) Al error,.y (l Satan, rev de Sodorna. Yo levanto mi voz entusiasmad a Para tejer de corazones pui'os Una g-uirnalda her-mosa y per-fu rnada, Simbol0 de los Irutos ya madu ros <)uc van dejando en pos de la jor nada. Ve ;, t us pies la corona Cuyas flores son virgenes amantes Del Rey de las alturas cc nt elle ant es ; KI angel de Pamplona Que guar da nuest ras alrnas )'.lestiuos, Ciiia (l t us sie ncs, cual t riunf'al p rexea, Otra bella corona: En la tierra los lauros t r iu nfadores, Y en el Cicio, ent re vivos resplandores, I'~llau rel q uc (l los j ustos galanluna. Pamplona, (f?ecitacii\\i de la ~rita, Blan",),

179 PALABRAS PRONUNCIADAS POR EL SR. FRANCISCO ANDRADE BERTI CON MOTIVO DE LA VISITA IJF:L EXCMO. EEL EGA DO APOST<)r.ICO,~ LA POBLACION DE SAN LUIS DE CUCUTA Exemo. 8r. J)eJeg-<L110 Apostol ico. En este instante solemne que ha de Her para San Luis de Cucuta como la aurora de un g-ran dia, titulo de gloria y de ete rna recordacion, una f ue rza poderosa me haee escalar los peldaiios de esta tribuna, destinada tan solo para aq ue- 1108a quienes la Iuz de la ciencia ha iluminado su cerebro y el don de la palabra los ha Iavorecido. Ella es la gratfsima obligacion de corresponder a las dignas autoridadcs, al ilust re Consejo municipal, a la piadosa Cong'rcgacion de San Jose y al pueblo en general, quienes colmandome de honra inrnensa que no merezco, me designan para que en su nombre os signifiq ue sus alegrfas al recibiros en su seno y os presente el testimonio de su rnas sincera adhesion al Romano Pontffice, de quien sois digno r epr esentante en Colombia. Ante la grandeza de vuestras virtudes y de la alta dignidad de que estais investido, debil, muy debil fuera mi voz si pretendiera hacer su elogio; y si en el debil recurso del lenguaje, aun en las at revidas hiperboles, quisiera traduciros las g rat isimas y multiples impresiones que hoy palpitan en el corazon de los hijos de este pueblo, necia serfa mi pretension. Las g randes irnp resiones estan fuera del rlominio de la palabra. Se sienten pero no se desc riben.,,:en que idiorna pucden traducirse con bastante fidel i- dad los intimos coloquios del corazon que conffa y espera, cuando en presencia del objeto de su amor y su vene racion se estr ernece lleno del mas justa regocijo? i.quien alcanza a reflejar siq uie ra en los mas suntuosos cuad ros las rusticas creaciones del pensamiento cuando de- Jante de las sublimes inspiraciones de nuestra santa Religion, rotas las cadenas que nos ligan al duro paste de nuestra propia miseria, dejarnos que el alma en dulce extasis vuele a. las placidas regiones de 10 inmortal, sernejante ala olorosa mirra del incensario que cual escala misteriosa lleva hasta Di08 las lagrimas de la tierra y trae de Dios al hombre la misericordia y el pe rdon? Si me f'uera dado, condensando en una sola cristiana demostracion todo cuanto amor y vene racion cabe en el corazon y pensamiento de los hijos que represento. hacia vos, Excmo. Sr., tomaria la p reciosa redoma donde se guardan los balsarnicos perfumes. y junto con ellos dcpositarfa en vuestras sandalias el o.';;cu]o p rornesa de paz :v fidelidad.

180 17;; -- Pe ro obligarlo pur las leyes de la oport u nidad it saludaros,~nnomb re del Municipio de San Luis de Cucuta, el I1UC os da la bienvenida por mi hu mild e ()rgano, os suplico me perrnitais que os diga como los hijos de Jer usalen cuando a. las pue rtas de la ciu d ad santa recib ian il 8\1 Divino Maestro: iijcjlcdirtus qui 1-'ellit III 11(11111"(' f)(ij/1illi ' ihe-rid ito cl q n e vicne en nornb rc del Scjior ' San Luis de Cucuta, F, l'htli 12 d. }')07. Del t e rnplo en e! vcst ibu lo se a lza ba Un mag-nifico trono y un dosel: A los lados 1'1 pueblo se apifiaba : ':'Que dories () que prr-mios espe raba r Lo I) ue pirle al Pastor su mansa gore)'. }-t;nfrente del Pastor las hancle rolas Agitadas dd vierito y del a mor, Se mejaban un mar de blancas olas Su rcado de rojizas barcarolas Al cornpas de las hrisas dl' aquil/)i)o Como suena la br isa bullidora En las hojas del verde platanal, I<~lamor, de f ragancia arrobadora, Yel juhilo infantil, br isa de aurora. Bullfan en ruidoso festival. HeHonaban los rit micos cant ares: Reludan las n{lmulas de tul; Del alma entre Ius niveos azahares, Cual susur ro del viento en los palma res, AlzabaHI' un concie rto ;t la vir tud. En los pechos sencillos la alegr ia Modula triunfalmente S\1 cancion : Y 10'1 cnjarnbr'e de niiios este d ia A los pies del Pastor se est rerne c ia Parod iando los triunfos de Sion. Dibujanse las tie rnas miniat u ras Del alma del Pastor en el cristal : Y ajenas del dolor a las t r-ist uras, Elevan hasta e1 Rev de las al t u ra-- en himno juhiloso-y t riu nfal.

181 Cabe la turba aleg re de los nifios i Que g randioso desfila el porvenir! En los copos de nieve, en los armiiios i Como riclan los fulgidos cariiios Que emerge el astro rey desde el cenit! Cual esperan las flores desde el cielo Las gotas del rodo bienhechor, Tal los niiios, corolas de este suelo, Piden para SUH almas con anhelo ~~Icelico rocfo del amor. Ya se yergue el Pastor y Padre amado En el nornbre de Dios a bendecir; Su rostro, cual Moises, esta nirnbado, Vibr a su corazon regocijado Y al Olimpo sus gracias va a ped ir. La inmensa multitud se post ra amante, EI Pastor la bendicc con arnor ; Ruedan sobre sus ejes de diamante Las puertas de Solima triunfante, Y fluyen los arroyos del perd6n. Alzad, j oh mansa g rey!la noble f reutc Bafiada en este lirnpio manantial ; Perfumen vuestras flores el ambiente Mientras sube a la altura refulgente El incienso que arde en vuestro altar. Fcbrero de NUMA r. CALDERON Presbltero. Excmo. Sr.: Si hay acontecimientos faustos Y placenteros en la vida -de los pueblos y que deban escribirse con tinta indeleble -en sus anales, es el presente, que la ciudad de Malaga, entu- -siasta y alborozada, esta sintiendo en estos solemnes rnomentos con vuestra honrosfsima visita, Y no pod ian ser menos el contento y la aleg rfa que hoy se experimentan, porque grande y elevado es el personaje visitante; la visita es practicada por un digno y encumbrado Ministro del Altfsimo, enviado a Colombia en representacion del Jefe del universe cat6lico; es la primera de esta especie que Malaga recibe, y sucede en tiempos en que esta seccion necesita una mana fuerte y vigorosa que le asegure mejores Mas.

182 -- iii - S(~lu l iios en sus inescr utab lcs d csiguios Y q u e es tudo bonduel h: pod ido sacia r nu est ros a rd ic ntes d escos de vcros en est a tie ITa, conce dcrnos Ia gracia de part icipar d e vuest ras licnd icioncs pate rnalcs, asi comu el in mc rcc ido honor de pone rnos a vuest ras onlencs. Conoce do r <1(' tan g-randcs mcritos, vie ne hoy con honra especial ante V. E. el Colt-gio de varoncs (le esta ciudad. au n q u e no cle b id a m e ntu r,~on~'allil.a<1o, y d c q uicn soy su hu rn ilrl c Director, COli el lin lle dares las fvlic it ac ion es mas e:usi,'as POl' vucst ru bicnvc nid a Y la de vuest ros honorabh-s co m paite ros: p r csc n t a ros 10;. horne nnjes (Ie r espe to, si rn pa t ia Y a.l hcsion '1UI~ torlo-, so u t imos bacia vu cst ra persona, d c jar coustanc ia de los votes '111L' ha ce mos por q ue vu cst ra pv r man c nc ia en est a tierra os sea g-rata, Y ponv r il nll~stt'as '~nlel1l's cstc nuclco de jily,'l1es q n e la Provid cncia ha coufiad o (l n u cst ros c u id aclos para 'jul' lcs scfialernos el camino q n c <leba conduc irl.», {l la posi lilc Ic lic idud, Os nunifestamos acle nnis, EXClllO. S.'" que tanto los Su pc r iorr-«como los al u rn nos d e est e novel cstablcci m ie n to seremos L'IIC<lcL's gllanliallc's d c las id e as c r ist iauas cucarnadas en \'llestra personalidad y licks admirar1on's d e V, E. Digll<iOS a"l~p'.al' cst e!1l"lueno ho m e naj c nacido de pc chos h u tn ild es. peru q uv han Ievauta.Io it Y, I,;. un altar en el f'ondo de sus co razoncs. rlon d c r in d cn c ulto it vucst ras cualirlad es c x cclsas. He d icho. \1 {da~~a, Xla r'zo 1Q d e 1'J07. E~lI';TUtiO 1)1'.\1-:1'1-: S. A~f como ell,:j II u er to m istrr ioso Cuan d o «st aba JL'SUS en la agonfa y po r sus livid as m e j il las ya co r r ia A tor re ntes pu risi mo su dor, Un {111g'e! L'1 Pad re Orn nipot cn t c, En me d io de las fu r ias d el ave rno, En\'fa d csd e el solio sc m pi tc r no A consolar {l su IIijo e n su dolor ; AS1 <lei Vaticano dcsp rcnd ido Otro {ll1ge1 vucla con afan, Y {l manera de heroe y de titan, De nuestro Padre en SlI ultimo ester-tor Se ace rca allecho casi funerariu Dond e se halla c xanirne el e nfcr mo, De la mucrte acaso con el m ue r mo, Y con su aliento da "ida a Monserio r. 12

183 Y como el angel da fue rza al Hombre Dios, Y le alza dd suelo en que yacia Por salvar al pecador a quien ansia Conceder de sus culpas el per don, ASl el Delcgado del gran PlO Llega al lecho del Prelado parnplones A quien abraza, consuela y a la vez Da salud y la paz del coraz6n. Y asf como del angel en presencia Se mitigan cl tedio y la tristeza, Y se reanima de un Dios la fortaleza Extinguida a impulsos del dolor, La presencia del sabio Ragoncsi De nuestro Padre calma la agonfa, Propinandole el ambar, la arnbrosfa De los du1ces acentos de su amor. Bend igarnos al Dios tres veces Santo Que nos trajo tan grande p e rsonaj c Vestido del bellfsimo ropaje De la virtud, la ciencia y el amor j Pidarnosle conserve la existencia Del nuevo {mgel de paz y de concordia, En la qu er ida, la feliz Colombia Que lc respeta y arna con ardor. Pamplona, Febrero 22 de 1<)07. JOAQufN 'GRIDE V. JES(;S, MARfA Y JOSE Excmo. Sr. Delegado Apost61ico en Colombia. Nuestro Ilmo. Prelado nos ha d esig nado para saludar anticipada njcnte a V. E. en csta ciudad a su nombre y en rep resentacion del Capftulo Catedral, de todo el Clero y del pueblo parnplones, Hubieran sido los descos del Prelado el presentaros esta misma Cornision en la primera poblacion de la Diocesis a que llegasteis, pe ro por circunstancias especiales que vos mismo conoceis cor respondio tal honor al Gobierno del Departamento que os invito de antemano para la inauguracion de un monumento publico y para la apertura de la exposicion en est a ciudad. Mis cornpaiie ros y yo tenemos en grande honor el cumplirniento de esta cornision cerca de vos, en quien miramos

184 al reprcsentante del Padre de la cristiandad y al cgr egio Arzoiispo de Mira, encargado de bend ccir los Iuturos destinos de nuestra querida Patria, y el mas fuerte susteritaculo rle Ia au tor idad de nu est ros crninentes Prclados, de los de- :echlls y pr-e r rogativas del Clcro ce rca del Gohierno de Co- "ornb a, 1\OS ha confiado e l Ilmo. Prelado Diocesano el gra t isi d cbe r de acornpaiiaros d esd e esta ciudad a lu de Pamplona, en dondc el rnisrno,.j)co zo/cutc, unido a su Cle ro y a- los c atolicos, os obscq u iara en 1'1 morlesta mcd ida de sus recursos pe ro al tenor de sus mag na ni mos sentirnientos de incond icional ad hcsion {l la Secl~' rornana. Vos, Excl11o. Sr. llcyart~is sin duda {, nuestro Pr clado abu ndantca con-,;u"l(\;, para Sll alma at r ib uln d a, sorn b ra cficazrnentc p rot cctora para sus cnc rgfas de Pastor y palab ras de aliento para los tilt irnos d ias de su largo y Iccundo Episcopado. i Con que j ubilo y contcnto Sf' p repara el {I recibi ros en su Sl.le episcopal, como {I un e misar io del Cielo que Ilega a. regoci.jar cl final de su car re ra! j Y con que e nt usiasrno el Cle ro y los,:atolicos os hab r c mos de l'l'cibir en nuestro hoga r pam ploucs para cu rnplirnc ntar {I nuestro Padre rodeatlu de su gtt'y y <ll~ la corona d e ~lis fides hijos! Antes Ill' mi viajc he te nido ocasion Ill' pe rcibir la complaceucia de HI alma POI" los hon rosos y d ijrnos re c ihi m icntos que se os han hcc ho en las c iucladcs de Pivd ecuesta y Hucarumanga, que han sabido iu t c r p rr-t a r asf los nobles de- 8"OS d: su Pastor. En Pa rnploria, r iud ad de I11l'nOrt'S r e cu rsos, hallareis g'l~nlljllas manifcstacioucs del cor azun, testimonio franco d e p icd ac y de n~ligil)n y noble ajegrfa de tudos los catolicos al r evc r c nciar en \-OS al llig-nfsimn re p rescn t an te del egn:gio v san tsimo PtU x. q ue es 8U amado Padre v a 1a yet: Pastor unive rsal dv las al mas, - Huca ra mang a, }':ne1'o 22 de 1')07, NUMA J. CALDERUX, Prl.'shitero. } :I, VATICANO (AI ]';)('1110. Sr. De leg ado Apostol ico). Alumbra en las alturas como a n to rc h a Con d estellos de luz clivinizada La roca ante los siglos Ievautada, Del angel de la fe habitacion. 1<:1Hombre Dios sentola como basa De su trono in rnor tal sob r c la tierra

185 Y el sol de la ver dad allf se encicr ra Como la idea divina en su razon. Desertoras dell(lbaro divino Las cdad es sin fe, sin luz, sin g ufa, En su triste crisrilida sombrfa Una t ras ot ra ave r'zonzadas van. El cisma y la impicdad ensor tij ados En la roca, cual sie rpe de veneno, Quericndo triturarla entre su seno, S610 su escarna retorciendo estan. Si sus ar mas esgri m e cl cisma rudo, Si la irnpicdad dcscarrra BU martillo, Nueva fulguraci6n y nuevo brillo Despiri e el pedcr nal de la ver dad, Y bajia e1 orbe en infinitas Iuces Que se clesg ranan como lluvia de oro De la al tisirna cirna del tcsoro, De espe ranza, de Ic, de ca.rirlad. Avanza sie rnp re de laurel cciiida En los torneos IIu e sostiene sola; Siempre el error cual borrascosa ola, Perdido queda en bruma ante su pie. Cual una cxhalacion eterna y fija, Sob re la obscu ra soledad flotante La roca de la Iglesia militance Entre mil rnu ndos irradiar se ve. ioh celestial divino monurnento, De los siglos cristianos rnaravilla, Tus hijos d esleales la rodilla Han doblado al refle jo de tu luz! IAb re tus pue rtas, Vaticano augusto, Y deja contemplar al Grande Anciano! Post rada en el c respon de Oceano Mi pat ria besa su fulgente cruz! Deja llegar las quejas de las auras, Yen nombre de Colombia 10 salu d en, Y al t raves de los mares hoy se anuden El dolor de sii hija y su dolor. Dejanos ve r la candida paloma Que en tus c1austros anida, cuyo arrullo Ahoga en los concilios del orgullo El vano balbucir de su furor. Cada suspiro que su pecho exhala Es un idilio del amor divino;

186 181 Cada buella que deja en su camino Una ver dad nos haec com prcndc r. Y isu mirada en el cspacio inqu iet a, Como [0-:0 de luz d e ctcr na llama, Se eleva {tlo infinite, 1.'1 mu nrlo inflama, Y t raspasa los cielos su porl e r, ioh! ic uan ta gloria guardas en tu scno, Moritaiia inacccsiblc, sobe raua: ':'u cupula sc rncja la manana (lui' b r il.a can ct cr uo rcsplandor ' Has si 11.' escoih1(~s 1.'11 tu Iue rte lil11ro Y SlI a mor paternal g uar d as cau t ivo, [Ie su nccho \"01(, d cstcllo vivo Y hoybaiia nuestro suclo fill fulgo r. Hoy ve mos la vir tud y cl g-enio unidos, Como nuncios ell' par, y de ar mon ia;,\1 cantor de Le.in en aq ucl d ia Oue lu t ier ra de luto sc cub r i/i. <::'1110 Le.ln, 4: vi r t u d ar monizantc.> Sublime encarnacion del pcnsarnic nto. Vistie ra de be lleza 1.'1 scnt irniento, c,)!110 1'1 \1'1'00 la carne d eifico : Os ve mos alu rn b rar cual mctcoro, En\'iado de la Silla Sober-ana, 1) bu jaudo can tintcs de manana, Los nu blos de una tarde de pesa r. Pvlicano d c albu rn inmaculada, Con alas d e 01-0 en abanico fi jas, A la Ig-Iesia y la Pat r-ia, como a hijas, Llarnais <t vucst ro pecho a d escausa r. ~~n 1.'1 azul de nuestro pat rio suelo Veranse Iulgu rar de vuest ra glol'ia, Eternos caract e rcs: y la historia AI mu nd o llevara vuest ra labor. Y..n nuestro pecho, como llama viva, Ardedl la memoria ag-radecida, Y :olombia de a fcc tos con movida C("iira vu est ras Sil'l1C'S con su amor. Josie l~os,\!,(io CAKV,\JAL. l'reshitl'ro. Malaga, F'e b rc ro 28 de l'ioi.

187 Rej>t;blica de Colombia-- Departamento de Santander- Provincia de Soto-Akaldia?mmiczpal-J]ucaramaJJga, I7 de ElIcro de roor: Al Excrno. Sr. Francisco Ragonesi, de Ia Santa Sede-Presente. Arzobispo de Mira y Detegado Excmo. Sr.: (1) En nombre del Municipio de Bucaramanga, de cuyo gobierno estoy encargado en mi caracte r de Alcalde, tengo el alto honor de prcsentaros mi atento saludo de bicnvenida ala vez que el testimonio de veneraci6n y respeto hacia cl augusto Soberano del orbe cat61ico, a q uien dignamente r'ep resentais en esta Republica. Grande es el contento de los hijos de esta ciudad al recibiros en su seno, y fervientes sus votes porque vuestra misi6n ante el Gobierno de Colombia sea Iecunda en bienes para la civilizaci6n cristiana, mediante la cual hab re rnos de consegu ir la paz y tranquilidad necesarias para alivia.r la penosa situaci6n en que se ha visto envuelto el pais. Con sentimientos d e rcspeto yalta consideraci6n soy de S. E. atento s seguro servidor, JORGE MUTIS RcPtiblica de Colombia- Dep artatnellto de Sautander-r- Provincia de Garda Rovira-Comejo?/ltwiClpal-lV/alaga, 28 de Febrcro de roor: Excmo. Sr. Francisco Ragonesf, Delcgado Apost61ico-E. S. P. EI Consejo municipal de est a ciudad, en sesion ext!'aordinaria de hoy, aprobo POl' unanimidad de votos la siguiente proposici6n : «Congratulase cordial mente esta honorable corporacion poria feliz llegada a est a poblaci6n del Excmo. Delegada Apost61ico Monseiior Francisco Ragonesi, le dirige su respetuoso saludo y se manifiesta altamente agradecida POl' su gene rosa visita ala ciudad. «Con nota de estilo se presentara POI' dos honorables Concejales copia de esta proposici6n al Excmo. Sr. Delegado Apost6lico.» Excmo. Sr. El Presidente, TrMOLEoN GARc1A-El Viceprcsidente, PABLO E. BAR6N-Los Concejales, l\ticallor Suarez Adolfo Pardo-e- Manuel 1J1'.Sudrer-«El Secretario, Jua«E. Comez C. (1) Van a continuaci6n varlas manifestaciones que no fueron inoluldas en la seeci6n correspondiente.

188 He/ntblim de Culombia-- J)cj!arlaJilm/o de.siljl/lliulc1'- COIlscio liiullicipal- I)1'c.,idc}/(;1I- _\'ttmcro.f- -' ('011 cordia. Eucro 27 de!1}(j7 Excmo. :; r, De leg ado Apost o! ico-" Pamploll:t. La corporacion que me honro ell p r csid ir al'robo en scsion d,~ hoy la sigu icnt e p roposicion : «F! ('ollse/(i III/nileipal de Concordia «CO:-;:SIlll :l-i..\;\luo ; «19 Que se t ie nc conocimiento de la feliz llcgada d el Excrno. Sr. Delcgado Al'ostolico ala riu d ad de l''1mplona; «2': Que tan hon rosa c uan to provccuosa vrsi t a al norte de 1'1 Rcpttblica de tan ilust r c Prvlado es mot ivo de jubilo para los pueblos en cu yo se no rc cibcn '11cximio hucspcd ; y «39 ~)ne es un dclwr 111'las :\1unidpali<1'1<11's en rcp rescntacion de Ia rcspec t iva cnt idad cu rn ph r con cl debe r de sal u d a r al ilust re viaje ro y signiticark su adhesi(l\l inalterabl«, tanto en 1o moral como en 10 religioso, «l-i.es!.'jo:lvi : : <Presentar al Excmo. Sr. lklegado Apostolicv cl mils r-espet uoso y cordial sal u do, hacicndo votes po r St1 salud y porq ue su visita it est as apar tadas region!'s del pafs lc sea p ropicia y Iccuuda en hie ncs cspi r it ualvs y socialcs. «T ransc r ibase {t q u ie n corn~rjlonda.:l> Dios guanle it S. K.IuA;\l BOHi.Jt<QUEZ R. pr10posrcron a.probad t por el Consejo municipal de San Cayetano en su ses ion del df a 1'.' de Fetrrero de 1')07. El Consejo municipal de San Ca ye tano, fie! interprete de los sent im icntos cat olicos del pueblo que representa, se com place en presentar Sl1 respetuoso saluda de bienvenida {l,~~onseiior Francisco H,a~onesi, Ar~obi~11O de Mi ra l dignisimo Delegado Apostolico de S. S. P10 X, Y hacieudole nuevas protestas de fe y ad hesion al dig-no Rcp resentantc de Jesucrista, pid e para su pueblo S1l santa Y paternal bendicion. EI Prcsidente, PE])r10 RA:I!ir1EZ HOJAs -I<:I Vicepresid ente, ALEJO GAMBOA-El Vocal, Hcruardo Isaza- El Vocal, Sotcro.!allllN. - EI Vocal Secretario, IJelllJ;llo.Jl. Santaeila,

189 Sociedad de Sail Josc--Pt'cdcCllcs/a, r..11c1 O I6 de I907. Excmo. Monsei'iorFrancisco Hagonesi, Delegatio Apost6lico de S. S. Pfo x ante el Gobierno de Colombia-E. S. M:. Tengo cl alto honor de transcribir a V. K la proposici6n aprobada por el Consejo Directivo de la Sociedad de San Jose fundada en esta ciudad: «El Consejo Directi\o de la Sociedad de San Jose, en su p ropio nombrc y en cl de la asociacirin en general, saluda respetuoso al ilustre y venerable Morrsejioj- Francisco Ragonesi, dig-no representante de S. S. Pfo x ante el Gobierno de Colombia, presenta a tan distinguido huesp ed sus mas expresivas muestras de consideraci6n y aprecio y pide humildemente para toda la hermandad su apost6lica bendici6n. <Esta proposici6n se transcribira al Excmo. Sr. Delegada Apostolico con nota de estilo, que pond ra en sus manos una Comisi6n de dos miernb ros del Consejo Directivo designados POl' la Presidencia ~ Me es grato y honroso suscribirme del Excmo, Sr. Delegado humilde y obsecuente servidor, El Presidente, ALEJANDROGONZALEZ Sociedad de Sail Vicente de Pazll- (;ramalote. Excrno. Sr. Delegado Apost6lico. No es la primera vez que nuestra incipiente Asociaci6n tiene el alto honor de d irigirse {l V. K, puesto que apenas germinada la semilia que confiara un digno Ministro del Santuario a nuestras rnanos, inexpertas a indignas tal vez, perc rebosantes de anhelos cristianos por hacer cl bien y Ilevar un consuelo a los que gimen sin pan y sin abrigo, hubimos de comunicar a V. E. la instalaci6n de la Sociedad de San Vicente de Paul en este pueblo, en virtud de 10 cual tuvisteis a bien impartirnos vuestra paternal bendici6n. Hoy, con el plausible motivo de vuestra visita apost6lica a la Di6cesis de Nueva Pamplona, gozosos os enviamos, Excmo. Sr., nuestro filial saludo de bienvenida, y hacemos votos al Altfsirno porque scan fecundas en frutos vuestras labores y paseis Mas agradables en medio de esta minima porci6n de la g-rey pamplonesa, fervorosamente adicta a la causa del egregio Pontffice Pfo x-ia causa de la Iglesia,-a. quien dignfsimamente rep resentais.

190 La humiklc Confe rencia de San Vicente de Paul de este pueblo os pide una vez mas, Exc mo, Sr., cl alien to potente c.e vuest ra apostrilica bend icion para p rosejru ir sin vacilar en la tarea come nzad a. Ex c mo. S)'. (;rllnalotc, F'cb rc ro de 1')07. El Pr-esid ent e, Antonio l~. Y{lnez; l'1 Vicep rcsidvn tc, Ernosto Salas :\1.; el 'J'csor c ro g-cneral, :'ITigucl Ro mau ; el Direct< r d e la Sccciou Hosp it alr Li rnosn c ra, Mun u cl Lazaro :).; c-l Dir-ector d e la St~,'ci(ln Mcnd icunt e, Jose A. VillaIta; cl Di r er tor- de la Secci(ln d e Prop,lg-an<la, Agapito R. Y {lnez; cl l Ji rv.vto r rlc.«secci('j1l Catt'ljuista, Jo,,6 de Jestls An::\'alo; el Scc rct.u-io gt nlta1. Ca m iio Prada C. Socios: Jose A. Rolon ~;.. Hermogt:nt's Torres, Lt-onar do Latorre L., Campo l<~lfa3fig-ueie<1o, l<:pibnio Colrncnares, Mariano de Jesus Parada, Guillc r mo A..\Ien<1ez, Manuel Supantery, Avelino T'osran.i, Milc iad es Rodrigucz, Facunclo Rojas, Ne pornuccno Fig-lIen do, Juan Xl cd ina, Vicente Camacho, Abelar do L('jll Z. ]J/IJrcsi.. de ;VtltTa PallljJ!ona-- Vicar/a de SanlUli[o --Jfillisterro parroquia] dc.... (l!azar-.vtllll'rt! ';P'--'s(r!azal', R1Jero 2S dc root; EXClIlo. ~:'r. De leg ado Apostol ico Dr, D. Francisco Rag-ollcsi. Ex cmo. Sr.: Pumplonn, 1<:1I~kro d«la Vica.r ia Ioranea de Santiago He cornplacc en p resentar a S. E. su saludo de respeto.r de profunda esti mucion, :r haec votos al Ciclo por Ta corn plcta Ielicid ad de S. E. :r po rq ue le sea gl'ata SlI pc r rnancncia en est a Provincia cclesiast ica. Doble mcrlto e nca r na la visita de S. E.: el de las copiosas lcnd iciones q ue por conduct» de S. E. d e r rama el Cie10 ell favor de esta Diocesis, que <II rccibi r (l S. E. Sp sieritc lle na d e ortrullo noble y dig-no, y cl del alto honor con <jilt' por' rned io de esta visit a se d ig na S. E. Iavor cce r it nuest ra a m ad a Diocesi«, que rcconocida po r tan sefialados be ucfici,is of rccc en ca m hio a. S. E. S\1 manifestacion de p rofu n d a gta titil <I. OII/I/e datuui OPlilll 11111, ci OJ1lJlC domnru PCljcc/{{!Il drsnrsum est, dcsccudcus a 1 Jail', 1ll1!1iunnr. El inmortal Pfo x, que vela incansablc por la felicidad de 8U re bajio, os ha const ituido su vicegc rc nt e en Colorn hia,.r al saludaros con sentirnicntos d e posi t ivo ca rifio, ren d irnos horne na e al Rep rescntante d e Cristo. y al rvc ib ir lle nos de alborozo vuest ra paternal visita, r c c ib imos con ella una <1&-

191 diva excc1ente, un d6n perfecto que desciende del Padre de las lumbres. Siendo como es el coraz6n de V. K to do h9ndad, todo cariiio en favor de la grey del Senor, ese corazon haec sus manifestaciones ad extra, siendo esta visita prueba incqufvoca de vuestro paternal amor. A eje mplo del Divino Maestro, d er ramais be neficios por doquie ra, Ilevando it las inteligencias la IUl de la ve rd ad, alentando los corazonesabatidos, animando al cumplimiento del deber, sejialando a todos el CicIo como posit iva recornpensa y br i- Ilante corona del mortal. Sed bienvenido, Excmo. SI", Espe ramos os d igricis aceptar los sentimicntos de profundo respeto y estirnacion con que nos es honroso suscribirnos de V. E. humildcs hijos en Jcsucr isto. Luis Felipe Ramon, Presbftero: Benjamin Castellanos, Presbite ro: Pedro Leon Calder-on, Presbitero; Domiciano A. Valderrama. ANHELOS Y RESPETOS DEL PUEBLO DE C1:CUTA A las manifestaciones de si rnpat ia, de respeto y filial adhesion con que las autoridades de la Provincia, eclesiasticas, civiles y militares, han ce1ebrado el feliz altibo a est a region del Excrno. Sr. D. Francisco Ragonesi, Delegado Apost6lico de S. S. Pio x, el pueblo dc Cucuta quiso unir la suya estrictamente particular. Por esta razdn ha sido tan cntusiastamente firmado el saludo de bienvenida que sigue, y en e1 cual por deferencia it este mismo pueblo figuran las firmas de respetabilfsimas personas. Sentimos verdaderamente, y per cllo pedimos excusas, que en tan numerosa lista d eje n de figurar muchos centenares de firmas que en p1iego se han qucdado, debido a 10 reducido de las columnas de que disponemos; de 10 cont rario, csta ser ia la manifestacion mas nutrida que hasta ahora se baya publicado en pueblo alguno de la Republica. Pero confiarnos en que documentos de tan suprema importancia seran manana recopilados y dados a IUl. Excmo. Sr.: Servfos aceptar nuestro respetuososaludo y nuestra protesta de simpatfa hacia vos, y de adhesion al insigne Prelado que en bora venturosa fue elegido para regir los destinos de la cristiana grey. Grandes son las calamidades que afligen a est a ciudad, enantes p rospe ra, a la hora en q lie os habeis dignado distinguirnos con vuest ra hon rosfsi rna visita; pe ro es 1a mayor sin duda la que se deriva de la clausu ra de nuestro puerto flu-

192 vial: ella hie re de muer tc nuestro come rcio, nuestra ag ricultura. nuestra industria, todas nuestras fuentes de riqueza, y arrre nazu Ilevtindonos a la ru ina acabar con todo 10 que constitu ia nuestro o rg'ullo : la espc ranza de contribuir al engrandel~imientll de la Pat ria, forne nta ndo e1 desarrollo de la instr uccion, principio (II' vc rrlad c ro progreso. Por esto vucst ra presencia entre 110S0t."OSes nuncio dl' fl'1icidad, de mojoram icnto, por q ue confiarnos en quv vos, q uc habcis alcanzado tan alto pucsto en la cstirnacion y rcsp eto d e la Nacion columbiana por vuvst ras e m inerites vi r t u d es, Ilevareis a las altus reg'illl1l:s oficialcs cl ceo de nuestro [usto clamor. h'l'iteramos las p rot cst as de nu est r a co nsi de rac ion mas dist injruida y S01110Svucst ros hi jos ficldisimos. San Jose de Cucuta, Fub r e ro H de l'l07. Luis ~lorales Berti, Carlos Victor Silva, J. D. Monsalve, A..I. Vargas, Vicente Villamizar Jaimes, Jorl!e Fer rcro, F'r anc is co de P. Monsalve, Pedro ;\1. ;\lejfa, Manuel V. Sanch««, Virgilio Ha rco, Francisco de P. Dur{tI1, Rafael Me] ia, AI"t\1ro C(lgo110, Lazaro Riascos C.. Man u el :Rodriguez Chiari, Jose Mar ia Andr-ade B., l<;zequiel Fig-ueroa, Onofre P. At c ncio, Hnl tasa r Botero, l~lfas Castillo, Mateo Jacome, Gc rma n Bccc r ra, )1. )1. Gonz,l.lez {~.I Juan 1\1. Mer-chan, F'runcis co de P. Meoz, Pedro Jar«, Manuel Diaz, Adonai J. Cuellar, I<:uuardo A. Cont r cras, Pastor Ontiveros 11., Jesus Maria (;ol1z{tlezs., Hermes Monrov COl Victor M. Ramirez, R<J,l1ll.l1M. ~osas, Celio Comas, :Rafad Lopez, Rolando Marcued, Al!ustln Castro, Luis J. Du ra n,' Lucio Andrade, Carlos Por "as, A ng-el Mar ia Corso, {;u illenno Du lj ue, F'rn ncisco A. Dur in. Rafael Diaz, Mar tin Bermudez, Ceferino Vcrjcl, Felipe Arellano, Jucobo Bustamante, Tibulo Berti, Felipe Maldonado, Francisco Santos M,; Carlos Julio Lindartc, Ol irnpidcs COI11.{tlez,Guillermo Avendano. Ricardo Rubio, Eduardo Perez, Alfr-edo Ibar ra, I':duardo ;\16ndez, Jose Agustin "Mendoza, F'rancisco Antonio {;uerrcro, Rufino Romero, Seve r iano Granados, Luis Aurelio Gonzalt'z. Jose Perow, T'eodosio Contreras, Juan de la C. He r-bcsi, Oli mpo Galvis, Francisco A. Caballero, Leonidas Zabala, Miguel Rios, (;ahriel lxestrepo, Ramon Oviedo, Eliseo Pavon, Jesus Ca mc r«p., Angel Marla Iha.i'ie;t" Nicolas Urdaneta, Casimiro Arias, Antonio Mar ia Guerrero, Anu nciacion Becerra, T'csa lio Mar tfncx. Isa.ias Torres. Jose Antonio Casanova, Luis A. Moros, Juan n. Moreno, Pacifico Castaneda, Teolloro Pe rozo, I<:nrique Mcoz, Jose Maria Diaz, Victor M. Hoyos, Ernigdio Dfaz R., Kuma P. Hernandez, Carlos D6.\'ila C., Manuel Davila C., Josefito Be r besi, Lorenzo,Mantilla, Domingo Mantilla, Roso Bar re ra, Benito Blanco. Agustin Garda, Gabriel Martinez, Si rnon (;arc1a, Manuel Y{tncz. Pe d ro Sanchez. Jesus Duarte, F'ranoisco Jaimes, Francisco

193 188 - Yanez, Ernesto Rodrfguez, Meliton Duran, Manuel Perez' Jesus Vargas, Pedro Velasco, Alejandro Martinez, Carlos Forero, Neftalf Fo re ro, Simon Parada, Feliciano Naranjo, Cerbelean Tami, Felipe Vivas G., Rafael A. Bermudez, Eliseo GOmez. Reyes Pe rnfa, Jose Moreno, Nepornuceno Cardenas, Pablo Cardenas. Pablo Emilio Gonzalez. Bernardo Colmenares, Bernardo (~arcfa, Isaac Quiroga. Miguel A. Duran, David Ferrero, L. Aranda Briceno, Jorge Jesus Prada, Pastor Sanchez, Ramon Docouso, Hermes Atencio, Emiliano Martinez, M:aximino Lopez, Nicasio Guerrero, Cornelio Contreras V., Evangelista Moros. Doming-o A. Ramirez C., Segundo Bejarano, Jose Andres Durrin, Rafael Uribe R., Hernan S(tnchl~z, Pedro Roberto Villamil. Ezequid Gal'cia. Carlos K Jacome, Tomas n. Amaya, Julio A. Colmenares, Horacio Gal vis, LuisJ. Torres, Anastasio Mora G., Alberto ('rtlllz(t1ez D., Jose Agustin Barroso. J. Ef r afm Cardenas, Felix Maria Ramirez, Carlos Eslava, Antonio M. Casaba, Alejandro Colmenares H., Manuel A. Medina. Pedro A. Gandica, Jose Ig-nacio Osorio R, Silvio Galvis, Luis Alberto Marciales, Carlos Manuel Ferrero, Vfctor M. Lusardo, Egidio Car rasq uo ro, Pedro R. Gandica, F. Mendoza B., Cerbeleon Gonzalez D. Vfctor M. On tive ros, Julio Acosta, Daniel Mejfa R., Froilrin Davila, Vfctor M. Moros. Luis Avendano, Rafael Colmenares B., L. E. Vicini. Ricardo Jordan 0., R. Sanchez, AndresB. Fernandez. Ernesto Fossi, Carlos Davila H., Rafael Acero Cardenas. Alfredo Vargas, Juan B. Corso, Manuel Cote. Patrocinio Ararat, Miguel Alvarado, Juan Merchan, Domingo A. Clavijo, Francisco A. Me rchan, Jose Marfa ROdriguez 0., Pedro Leon Vega P., Pedro Contreras. Sinforoso Lopez, Luis Vargas V., Pedro Manuel Hernandez, MarcoA. Hernandez A., Domingo Hernandez, Pablo Perez C., Tiburcio Castellanos, J. Vanegas. E. Ramirez, Luis F. Marcuccf, Salomon Ramirez, 'Tornas A. Sanchez. Aurelio Moreno, Manuel Davila C., Victor 1\'1. Aranda Briceno, Carlos J. Dfaz, Pecl roe. Aguero, Jose de! Carmen Cont re ras P., Juan de Dios Maldonado, Florentino Alvarez. Miguel Osorio, Jose Reyes Pe rnfa, Simon Cardenas, gsteban Pernia, Luis Domingo Rios, Manuel Jesus Mantilla, Juan de D. Chacon, Rafael Rodriguez, Noc Alvarez, Hel'mag-enes Bar ragrin, Damian Villamizar, Domingo Jaimes, Manuel Jesus Mantilla, Venancio Ranjel, Juan Jura, Aurelio Munoz, Felipe Vivas G., Carlos Sanchez R. Pablo I<~.Castaneda, Manuel M. f<;stl-ada P. Orestes Ornaiia, Guillermo Vega Mendoza, Jose de la Rosa Buitrago, Pablo Nino. Pedro Vicuna, M. R. Vanegas. Hernan Dtaz, Felipe G. Ranjel, Carlos Julio Ordonez, Marco A. Vega, Antonio M. Duran, Arturo Ranjel, Cecilio Mendoza, Bustorg-io Perozo D., Felipe.K Pe rozo, Ladislao Restrepo, Anastasio Ramirez, Emilio Cardenas, R. E. Ranjel, Nicolas Morales.

194 - 1~() -- Efl-(.n.\1. ~,lendoza, Julio Sauchez, Juan de Dios Patino, Orestes Rincon, Francisco Antonio Riras, Felipe Sanchez, Ezcq uiel Garcia, Julio A. Col mc na res, Abel Belt ran, Humberto (}\Jmez. Pc d ro R. Pulido, Rafael L..{l!WZ, Ramon Garda, Pedro Jose Ramfr cz, O",'ar V,'ga, Santos Gu e r re ro, (~uillennu S. Mantilla. Joaquin DIal.. F'rauc i-«o A. Hur naud cz, J. Hemandez Ix.. Sixto Aparicio A. Hcrn.i n Montoya, Vicente Du ran, Pedro At e ncio, Marco T. i\1"i1cio, Marcos Santander. Carlos J. Atencio. Mar t in Hern{uHh:1., Juse del Car men Vela, Juan de Dios Castro, Luis Castro. Andres Castro. Con;:alo Castro. /<;n1('si0 Pnt ca r r-o vo, Sinf'o roso Afana dor, ]os:'.\ntonio Dfaz. Lu i«1';nj'iqut~ C;tldt:I'/>n, Ilddonso F. Cah is. IL'rnab:' Mahlouarlo, Salvador Xlo rc no, An d rcs '\tcndo/a V. Jos(. /<;'lclrn<lci/ll\ Movano. Luis Alberto :'la1- donad o. "lew'.\lci'chan. Marco 1\. Jticomc. Pe d ro ~. Xavar ro, Tcolll)ro H. Ca maruo, Xazario HilTra. Mun u el Marfa Antolinez, Jos:' Ma ria Prato. Jos~ Znrnb rano. Manuel A. Dfaz, Jose D, Orclluno, Cr uz l~anjcl. Ag ustill Cal vis, l"afael Chacon, Hcc tor Mal donado, Julio A. (;nil1en, (~m;tayo Maldonado, Can- po E..Ia ru, Manue-l Cont rcras, Lr-on id as lxarn i- rcz. Juan Neira, Agustin Guc r re ro, Clf maco Sepulveda, Pahlo R. Garcia, To!>i;)s Gonz(lkz, (;ulikl'll1o Avcnd aiio, Simon Calder.in, Luis Liz..uno, Clc rnvntv Diuz, \'ietor Patino, Agustfn GuarIn, Alejandro :\larql!cz. :\Iar..:o A. Sayago, Miguel Cont r crus, Campo E. Nieto, \'fetur.\i,:jih. Emiliano Sarrniento. Lconr io Boh/lI"I/u,'z, MiguL'1 S. Ur'bi na, Saturninu Antol invz, Adolfo Cont re ras. Arturo Hernandez, Ild cfousu Ca ld c ron, Jcsu» Calder/l\l, Ascension Urdt')nt'z, f<~i'ari,,;to Hc rna nd.-x. JOSl- (h' la R, l Jocouso, '<:fraim Carda, Ramon Guc r rc ro, J,'SlIS Gue r rvro, Carlos '"elandia, Diego Ramirez. Isicor o Mn nt illa. 1'c(ll"l) i-?anjl:l, Juse Granados, JOSl-.A..\Iur1.i. Pastor l~anjl:1. t;abril'1 Rl'yt'S, Antonio Ave n- d afio, TL:'ltilo Yillami1.ar, Ca rlos A. V[lsquc1., Julio Armijo, Vf cto r :11. Xl ildonarlo, Lvonc io Paz. Ovirl iu Maldonado, Antonio Nicto B.. Antonio Sak, do. l"atd :\laldonado. Elisco Maldonudo, ~,Iigu,,1 Alvarcz, lsa ias Gut ier ro», Vfctor Marfa Pe rn ia, Jose ~. Maldonado, Luis F. Jaimes. Carlos \Targas, Hc1io<loro G\~'l11ez.Al f'rcdo Balsa, Tom;ls Briceno, Pahlo E. Ave ndaiio, Heried ic to FI(ll-e1., Carlos J. Briceno, Bernabe Castro R., 1\ <11'0 M. Rodriguez, Pedro Say ago, Rafael Sanchez R. Pablo E. Castillo. Pedro Crist ancho, Arturo Perez, ro 0 He Pedro mtlgenes Herrera, Victorino Jelvi», Alejo :\Ianlul'z, Jesus Marfa Davila. Luis F. Castro (;. Ram/JI1 :\1. (;all'is. Xla rcclino Hriccjio, Nepomuceno Gonzalez, Isiduro Duran, Severo de J. Araujo, Felipe Ranjel, F(.1ix Gah'is. Inocencio Contreras, Aurelio Vil lam izar. Mar t in Gal vis, L('(ln H. Gal vis, Alejandro V'illa mizar, Ild efonso Vi llarn ixa r, Zacarias Vil1amiiar, Antonio Romero, Zcf er ino Se das, Pedro Jaimes, Lisan-

195 dro Carvajal, Silvestre Soto, Miguel Duran, Dionisio Bautista, Vidal Duran, Apolinar Negron, Benedicto Ranjel, Ramon Villamizar, Venancio Ranjel, Jose Luis Meneses, Juan Soto, Pablo Soto, Jose M. Soto, Alfonso Olivares, Luis M. Galvis, Pedro Galvis, Manuel Galvis, Pedro Jauregui, Herminio Galvis, Eusebio Ranjel, Ernesto Galvis, Lucio Carrillo, Cayetano Duran, Miguel Garda, Salvador Duran, Ricardo Saez, Francisco Villamizar, Crisostomo Villa mizar, Emilio Duran, Mercedes Maldonado, Enrique Ballona, Antonio Pineda, Cupertino Pineda, Ismael Pineda, Hilari6n Ardila, Nepomuceno Ranjel, Sanson Duran, Esteban Duran, Reyes Duran, Custodio Du ran, Roque Duran, Simon Hernandcz, Cupertino Fajardo, Bonifacio Du ran, Tadeo Saez, Cornelio Sacz, Pablo Ranjel, Epif'anio Soto, }<~lfassoto, Lucio Soto, Epif'anio Maldonado, Manuel Maldonado, Eustaquio Urbina, Angel Ignacio Maldonado, Salustiano Ranjel, Francisco Ranjel, Le6n Ranjel, Paulino Ranjel, Vicente Gallardo, Carlos Gallardo, Francisco Mujica, Anselmo Negron, Antonio Negron, Silvestre Rivera, Her moge nes Rivera, Benjamin Carrillo, gpifanio Carrillo, Santos Quinones, Ezequicl Quinones, Atanasio Quinones, Francisco Ranj el, Dionicio Ranjel, Victoriano Baez, Efausto Ranjel, Canuto Ranjel, Zenon Ranjel, Salomon Ranjel, Marcos Soto, Jose R. Sarmiento, Remigio 'T'romp is, Manuel J. Calderon, Francisco Muiioz, Isidro Chaustrc, Jose Mesa R., Daniel Castro, Saul Mateus Briceno, A. F. Angulo Colrnenarcs, Alejandro Angulo, Jose Marfa Calderon, Antonio Marfa Duran, Antonio Ruiz A., Roman Davila n., Constantino Perez, Manuel Galvis, Daniel D. Duran, Ramon Vera R., Satu rnino Paipa, Antonio ~I. Cobos, Jose Antonio Medina, Eugenio Peralta S., Nicodemus Garda, Bernardino Medina, Roberto Pads V., Antonio Quiroga, Pablo A. Chacon Eo, Julio Roa. Timoteo Gutier-rez, Juan C. Mant illa, Ramon Nino, Eliseo Guillen, Daniel Ayala, Manuel Ave ndajio, Ernesto Gutierrez, Eleazar Avendano, Resun-cccion Fuentes 0., Sinforoso Alvarez, Alfredo Guticn-ez, Nicolas Guillen, Alfonso Ramirez,.Pastor Sayago, Camilo Davila, Leonidas Sayago, Antonio Ruiz, Guillermo Nino, RIo)' Galvis, Pedro Mantilla M., Santos Joves, Antonio Ortega, Eusebio Lopez, Ignacio Mantilla, Constantino Ramos, Luis Francisco Faccini, Antonio Quiros, Reyes Lara, Belisario Ranjel, 'T'e mistoc1es Corso, Bautista Hcr manos, Pedro Ranjel, Luis Vega, Luis Rincon, Tadeo Pabuencia, Miguel Duran, Pedro Luna R., Luis Lara, Silvestre Castro, Eladio Nino, Felix Arenas, Gerardo Rojas, VIctor Ramfrez R., Guillermo Arias, Alejo Pinto, Rafael Rojas, Jose Caceres G., Feliz Marfa Martinez, Vicente Zapata, Ramon Marfa Ton-es, Gregorio Pineda, Reyes Soto, Apolinar Cacique, LeonardoArdila, Marco A. Colmenares, Alejandro Cardenas, Daniel Diaz G., Simeon Do-

196 couso, Jose Marfa Say ago, Hernan Sanchez, Candido Jaimes, Benjamin Baez, Nestor ~ayarro, Segundo F. Gonzalez, Jose Juan Peiia, Ramon J. Cordoba, Cl1maco Garda, Marco A. Ramirez. Pedro Corso C., Vidal Vargas, Timolcon Lopez A., Francisco Cogollo. Francisco A. (~()nl.{dez, Ramon Ordonez, Luis A. Acebedo, Andres Casanova, Fermin Heyes, Emilie, HeYl~s. Ricardo Plazas, Elias Chaustre, Antonio G. Garid ica, \~ictor::-'1. Ayala, Antonio \L Cacc rcs, Antunio Castro, Anselmo Jaimes, Joaq u in Hc rnaudez. Diego Ramirez, Manuel F. Dfaz, Abel V clasco, ~Iarco T. i\leh,:ndez, Domingo Villahora. Luis Mu iioz, Oil'go j<:spinel, Joaquin F. de Cast 1"0, Luis Eduardu Ur ibc, IIoracio Guar in ~I., Ra- Lei I\bgolltll1, Silvio Amador T., Ruperto Col me narcs, Cesa r A!~t1ilera. Luis A. Cu c lla r, Vicc n tc Rueda, Cl irnaco.ioya, (;ollzalo C;uerrero, Sat u rnino Cortes, Alfredo Carrillo, Hcr mogcnes Salcedo, Francisco Vargas, Carlos J, Vera, Francisco I~odrlguez, Isidro Velasco, Samuel T. Ur bina, Eliseo I\IaI(lonado, Gregorio Rueda, Luis Villamizar, Daniel Pedraza, Antonio Alarcon, Elov I'. S;tnchez, Roberto Mar in, Juan DIII-;LI1,Rafael Ban-oso, Pedro Amaya. Carlos L. Confre s, Carlos Contreras, (;usta\'o Con t re ras, Agustin Arias, Julio ::-'erozu, Angel Ranjel, Casimiro Uu rtin, Agutitin Guc r re ro, Antonio Jai mus, Eustusio GuelT\'ro, Paulo Cill-- d cnas..iesus Camacho. Francisco (~arci'a. Ang cl S.Olarte, Ig-"lacio Cardenas, Julio Guait e ro, Pedro Gonz{tle!-, Ga1Jriel Arias, Saltl Mancilla, Octaviano Sarmiento. Julio Ramfr.iz, Rafael Martinez, Pablo Xavns, Artnro Pe rozo, Luis Thomas, Antonio Cer rnda, Carlos Y[lneZ, Leonardo l{es[l epo. Florentino Xava r ro, Ro.lol io F'acci ni, Inocencio Bosch, Julio Acosta Urrlanet a, Luis Lind art e P., Erl1csto Dfaz, Rorlolfo Rodr iauez H., Epaminondas Parra. Francisco (;il, lvlisco Mart inez Pe iia, Casimiro Carda, Hernan P,~rez 1"., Onofre A. Moreno. C\'lso N. Perez, Juan Luis Vega, Luis (;"n<1icil, Cesar Cor tcs, Justo!-?osas. Carlos J_ Rosas, Marco A. Hc r-na n d cz, Jesus Follaco ~l., Eie{lzar Prato, Dar io Gand ica. Pablo E. Castillo. Luis Antonio Rosas, Roberto Sanjuan, Marcos Quintero. Bi r mel Rarn lrez, WiIfrido l\amirez. Victor Manuel Ur ibe, Felix Maria Gonzalez; Juan Bautista l-?ueda, SalJ! Rarn ir-cz, Juan de Jesus Sanchez, Pablo ::IelTera, Justiniano Flol"l:z Roo Pcd ro S. P(.rez, Marcos Ca rd e nas, Valentin Becen-a, JOSI: de Jesus Clavijo, F'rancisco Clavijo, Leandro Clavijo, Arturo Sanjuan. Pedro R. Silva, Luis A. Ramf'rez. Elbano :'II;trquez, Jose F. Morales, Lr is Molina, Bernardo Castro, Nicanor Fig-ueroa, F'rancisco Nino A. Naza rio Ca rc io, An ibal He rnandez. Candelario Becerra, Patrocinio Moros S., Jose Marfa V elasco, Rlio Monroy A.,.Manuel Camarg-o, Manuel A. Galvis, Hernan Sanchez, Abclardo I\lojica. Trif<In I)ur{LI1, Lucas Clavijo, Lino Rarnfr cx, Justiniano Me d ina. Pinto Dur an, 18i<10-

197 ro Nino, Gusta\"o E. Moros, Horacio Gonzalez, Tesalio Martfnez, Jose Antonio PradilIa, S. Isaias Acevedo Eo, Evaristo Silva, Alfredo Gomez, Luis E. Velandia, Antonio Salinas, Benjamin For toul, Marcos Rodrfguez, Manuel F. Lopez, Rafael A. Cardenas, Roseudo Pena, Juan A. Carvajal, Pedro Villamizar, Francisco Bacz, Evangelista Moros, Pedro Moros L., Segundo Osuna, F'rancisco Osuna, Boaner-jes Col menarcs, Julio Moros, Gregorio Colrnenarcs, Jose Moreno, Luis A. Quintero, Israel Ontiveros, Cruz Velasco, Juan Carrillo, Leonidas Rarnrrez, Manuel Ramirez, Eleuter io Santander, Saul Ser-pa, Alejandro Carrillo, Pedro Sandia, Pedro K Ranjel, Pedro M. Atuesta, Feliciano Molina, Daniel Rodr I- guez, Jesus Hamirez, Francisco Gonz{tlez, Ricardo Gaitan, Gerardo Santander. Quiso ci pueblo que est a manifestacion escr ita fuera tarnbien de presencia,.r de ahf q uc el luncs en la manana cir cularnn cartelones invitando para las primeras horas de la nochc al Par-que de Santander, Ingar donde los trenes galantemente ofrecidos por el Sr. Presidente de la Cornpaiifa del F'e r rocar-r-il espcrarfan con suficientes vchfculos para conducirnos a la quinta Scm/a Clara, residencia nocturna de S. E. Nada mas propio que esta personal rep rescntacion: nos e ran bien conocidas las rclcvantes virturles que adornan al Excmo. Sr. Delegado, su vasta ilustracion, su boridadoso caracte r, q ue hacen de el un sacerdote modele. Pe ro a cstas une 61otra of renda, mas valiosa, si cabc, r la que cnaj ena nuestro carijio: su paternal amor it est a tierra colornbiana, sus desinteresados csfu e rzos por la union de todos sus hijos. Causas com plejas concu rrfan a hace r la visit a del Sr. Deleg'ado, de sura honrosisirna, de excepcional importancia para esta region. Coincide su Ilegada con un acontecimiento que aunq ue por su f'rccue ncia parece invcte rado ya en nuestro or'ganisrno sucial, re clama perentoriamente cuidadosa atencion: la clausu ra de nuestro puerto fluvial y la opinion manifcstada en d ivcrsas formas de la necesid ad moral que ticnc est a Provincia de clit-igir sus pasos por territorio propia hacia el mar. Cucuta, que ama con ta nta sinceridad la paz, que tienc nociones tan eompletas de 10 que vale el trabajo, ha pagado sin q ueja los impuestos, a veces fucrtes, que nuestro t ransito par extraiio territorio le cuesta, No es pucs el cgofsrno el que la inspira: q uie re para sus vecinos toda la prosperidad a que tienen derccho los pueblos t tabajadores, ve rfa con el mayor placer el est rechamiento de sus rclaciones, r persiguicndo este fin ha soportado con grande estoicisrno ataq ues contra sus Ieg-Himos de rechos: pe ro Ie asiste n razones podc rosas para querer posee r un camino propio, que ala vez que fomente nues-

198 rodeado de ros, tit' nu es- tie t ras rv acioncs con nuest ros hc r manos del Athintico, que ab ra a la e xplotacion ricos vene ros naturales, que facilite vasto campo a las inmizr-ac iones. nos lion' t arnbien d e futuros dcsag rudos. hacienda d esapar ece r las causas. A las ocho, los nucve 0 d icz car ros d ispuestos estaban totalmcnt c lle nos de g-ente, <1\1e en su l']t'mplar af{ll1 d c hneel' ado de presencia gran parte d c ella ocupaba an n en las mismas locornotoras sit.ios exput-stos {i pl'1igrosas caidas. Hasta los t cchos de los car ros los invad ia la concur rcncia, y con pe5al- ingcntc mult it ud ll enuha las a lamc d as vieudo que no hah!;t puesto para ella. {gual nu me ro de car ros se hab r ian lle narlo iu-ru lmcn te. iqu,< c nt usiasrno a(lul-1, y que urd cn, Y qt1l< respvto, \" elle u nifir acion! Ni una sola palab ra incond uc en t e : s()io [l'ases de con tento y a n h clos de ventura para est:t I"egi()n sal ia.n de torlos los labios y palpitaban en torlos los pcc hos. Part ie ron los t re nes acompanundo la imponcncia de sus silbatos y est r u endos (Ie vapo r mil1ares de gritas {t la Pat r-ia, al Pn'sitlent\ <I,' la l,epll!>]ica y aillmo. Sl". De1egal!o. Scr ian las nuevo cua ndo J]t'g(tmos ;t S({lIla Cia/a. AI1;t, SlIS I'espdablt-s coru pajiv alg"una" t ras aut or id adcs y de un l.e llo grupo <It- St'nOl'as y S\'nol"itas, e l Sr. Dl'1t'gado csp c ra ba til' (ados en ];. IJaTan<1i11a e! 11l'Sembar q u e de l'sos miles,le personas q n e con cnt usiasmo rc - ve rentc iban con su presencia {t besar h- su mana consag rnd a, [t rcga r lc las rosas d e su simpa.tia y ad miracion y [t pcd ir lc en nom b rc til'] p roz rvso e manar i.iu de Dim; - y en 110m br c <1\'1 den't ho -at ibuto (Ie la just icia (Ie las naciones "tina d e sus cticaces intlucncins \'11 bien dt' 1a p rospv r idarl v e l d cco- 1'0 de estll'l'g-j.)n. Pint.rr la alel!"rla y plf1cem,'s (IL' S, I,;. \'11 aqucllos instantcs es im posibl e hace r!o. Pa rec ia cual si '111isiese t raslad a rsv en cue rpo y espf r it u al rincon del mas apar tud o car ro {i estrcc ha r {t los hu m ildvs 'Ill,' all i sc c ncont rascn v {t cornunicarles.on cl alma su con t e nto. Los vit ores sc n:dublaban vel cntu-.iasmo c r er ia. j Era d cli ran tc,'se c nt usiasrno!, 1<:1Sr. (;eneral Jefe tit- la f ront e ru fie apn'sur.',;'; p r e- scuta r!c al Sr. Sat" Matcus Bricciio. no m b rarlo al cfecto int(-i"pret\~ <Ie Ius sc nt im ien tos y an helos en 1a tribuna. ::\0 la mano, v n!a forma rururosa Ik 101 c t iq u e ta, sino Ius b razos ab ie r tos y ef usivos t uvo e] Ex cmo. pat-a - l jove n or arlor. I<:n \,1 calor del ab razo lc l"('petia: «~;n \OS a b razo {L todo el pueblo, po r q uicn he seut ido sie rn p re p re d ih-cto car iiio. E] pueblu cs el todo \k todos los p ucblos.> Matetls Briceno r esporidfa a vsas d.ist.ingu id isi rnas y vehe me ntcs cong ratulacioncs con palab ras y exaltacioncs de {tllimoj, nat u rales it su modo de ser cuba lle roso Y (t sus noblcs in te r ior id arlcs cuarido a]gun d csco (: in te res g.enet'al las aruma. 13

199 Fue presentado lue~o al notable hombre publico Dr. Posada y '11 simpatico C01110 culto General Santiago Camargo, q uiencs tam bien le significaron cumplimentar en el a los quc allf rcp rcscntaba. No pud ie ndo tcner cl Sr. Delegado a todos ce rca de el, le ofrecii> a Mateus Briceno un pucsto inmcdiato a RU derccha, y asf, como si una larga confianza los u nic ra intimamente y como si una misma je ra rq ufn los nivelara, hablaron en el lc ng u ajc se nc illo de 10H arnigos sob re e1 futuro brillante de Colombia, sob re la union de los paiscs latinoarne ricanos, cou se-rvando su vc r dad cr-a independencia; sus industrias.r sus vias propias; de la f ructuosa labor del General h'eyes, cuyo origen reside en la practica de la concordia; del hc r moso porvenir q uv Ia Pr-ovid encia lcs rcse rva a estas ricas zonas, dada su posicion topog rafica y la cond i- cion especial de sus h ijos para la lucha hon rada del vivir. Se une a est a -Te d ec ia Mat cus-e-la fe en el Cr eador. innata en nosot ros, ese ncial rn e n te catolicos, pe ro catolicos sin supe rche rfas. Piezas selectus de la or q uesta m e jor de la ciudad cont r ibu ian a hace r mas g-ratas las horus. Crcernos q ue en ninguna otra circunstancia aq uellos a r tistas Ie hab ian puesto tanto co ruzon il sus intc rp rctaciones. Can la venia de est ilo l\iateus Briceno f'ue a ocupa r el lugar de dond e dcberta d ejarsc oir, acompaiiandole en el t rayecto aplausos y palab ras de ap robacion y de placer general. Dcjarnos vn la plu ma, POl' no hacc rnos p rolijos, los tantos dctallcs ill' beneplacito q ue cl orador, sie rnp re celeb rado, cosechara durante su d iscu rso: < Ya 10 veis, d isrnfsi mo senor. Todo un pueblo viene a rendiros la oblacion de su carijio, de su ap rccio y de su adhesion. Y estas d e most r acioncs He hacr n al misrno tiempo extcnsivas it las honor'abl cs personas (jue as acornpaiian en est a gi ra de import ancia nacional. «i Bien ve nido scais, ilust re PrIncipe. y d ig naos aceptar de cad a corazon cucut ciio una p rot est a fe rvorosa de afccto! «i. ~2ue ot ra cosa podia hace r nuestro pueblo. nuestro pueblo que t.ie ne arnalgarnada la Ie del c re y c n te con la religion del t rabajo, que ve nir ante cl rcp rese n tan te de sus ritos a dcshojarle las p r im irias de sus respctos catolicos, y arite el erninente colaboraclo r en la conciliaci6n colombiana a ofrece rle las gracias q ue por los be neficios de la paz e mpieza a d isf ru ta r? «Kstas, senor, las dos razones (jue nos t r ae n aq uf reverentes \' agr-adecidos. «Nos hicisteis la d istincion de visitur il Cue uta en una epoca en q u e ella no pued e of rece r a vnest ros ojos las galas

200 )S - de sn aye r csph-n d cn tc : sus relieves de p rospe r id ad material I" u n:. d e aq uellas sus par-ticu la rcs e xp losiones de la vida de su esp:',-itu colcct icio. ~ Cuc u t a, la bella e in d ust r iosa Cuc u t a, la que eon sobra de e logios halh~is oldo pond e ra r, t iv ne at pl-1'sl'ntl'su alma ind ivid ua a bat idn PO)- \'1 rigor t;l' 10;; ron t rut io rn pos. -r C0I10Z.:O los su p rv mos, dir(.is: cl rl csa--t r c e0l1s1'cl1l'11l:ial de la g-11l'ita I'n;;I'!1orl'ada aq u i con san;t por t a n to t ic m po, y la dl'cadl'llcia q uv con;;i,~'o!r'ajo 1,1 1ll1'llosprccil) de sus p rod u c to- v;lft'lt'i'u", -r.'\/1, I'>'l'l!lo.. LW"OIl vs:!s las rn larn id a dvs qui.' actualrrun u- nr» tl.urclan. " Las lu-r id as e x t c r nas y rno ru lcs dl: ];,s gut'ltas ~l' rcstanan aq u i <,'n cst c centro hidalgo y humanitario con la m isma p ron t it u d con q u,' sc orva la ult iuia cha rcu de sa ng rv ; y la r u ina dt, mu-st ro.~ran vc nvro Sl' ha sab id o reparar en parte, con vsa vi r tu d vir il, con e"l' fauat ismo, 1)()11r1<l d eci rsc, d c la l u c ha t e n.iz v hon ra d a po r la e x ist e nr ia. ing-cnita {I est a ciud ad an ia. «Hal eis oi d o habla r llc nuestro ac t u al con t rut ie nt po Sl\- fr ido va l' 1 llias tic: una OCaSil)n, ca d a vcz con rna vo r se re nid ad :;' pc r j u icio. Lo l'il1ill'z{li;; {I conoc c r apcnas, por q u«sll]o vicndolo v ;;inti,~ntlolo til' cv rca,' \,,'1110S v 10 sl'ntimos n080tr08,"'i' pul'tll' ap rr-cia r e n ;;\1 vrr d a d cro vail)!': e1. ei de nuestro aisla rn ic-n to con c-l (kcano, con t'sl' cauce por d oud c la intdig-t'l1cia ;;1' tla (,1 llt'':o <I" luz con ia civilizac.ion, y 1'1 prog-n'so t I-a usrni: e y d ilat a sus 11111nilil'\'nl'ias. «1';;;!,l1110Spri,adostll' ('!'lasltit1togati\,a;;, d e l';;ta;; hie n- e r r r an u cll' nu est ro.-o m err io d anzas, LOll 1;J iut pcion vias q ue con sac rific ios t ant os nos ti,'jaron t razadas po Ias e in d e- pc n d ie nt c«aq u rl los,'iejo;; pat ri c ios, id/.latras d c l cu l t o de la libe rtad ame-ricana. <A foudo hah(.is l'stutli,ulo 1I111'stra iucli t«histor ia, Sal>eis qul' 1'11a fill' r u b r icad a _\ o x p u cst a e n \'1 te m plo de la inmor talidari po r l'sos m ismos a lun-los pat r iot as. pad 1','':, de los que hoy nus d cnom iua nios con ]0;; g-l'ntili,'io;; tit' colorn hianos, pc ru anos, 'Tnl',olal1l>S, cc uator ia nos y hol iviauos. Unt' esc t eso ro cq ui tat iva mvnt c divi.l ido un dia, nos pl')'tt'i1u'" ;( todos, :- que usu r par nos r ua lcsq u icrn,ic t'':o;; (1t'I'I'ehos e;; una falta e nt rnjiado rn (II' lin tll'lito til' fl'all'!-nidao, «i Y 1/1Ii(.n h u hiv ru dt' dr-cir. no hl.: Pr iuc ipc, que n05- ot ros, los pri1110g-enitos tit' ('sa familia, ve n d rfamos a se r las vict imas til' un d cspojo se mc jau tc! j <)liien hubie ra c re ido que ese pa:rimonio Sl' nos ir r-espe t ar-a como {I patrimonio de int ruscs! e Pe rfcctn m cutc 5alH~is c u a lcs han sirlo los rnot ivos que he rnos d aclo para q ue asi sc nos t rat c : los m u y sublimes de se r para con elias sie rn p re gl'nl'rosos, y los de tener como dije no ha rnucho e n u n peritldico, un cor azon g-randc, muy ~ran(il' para sabe rlos amar.

201 <A vuest ro lado esta el erudito Dr. Posada, quien conoce tam bien fntimamente, como Secreta rio de Relaciones Exteriores, el modo cor recto, demasiado cornplaciente, que ha empleado nuestro Gobierno en sus asuntos internacionales. < Pc r-donad me, Ilust risi mo, 10 rudo y levantisco de mi lenguajc, que es el de la digna clase que ahf teneis, que no sabe de los vocablos de scda del glosario de la diplomacia! Pero cs p reciso habla ros asi, aunque quiza faltandoos al rcspeto debido de nuestra j er ar-quia, por q ue en estc 010- mento me hago eeo de sus q uejas. <Estas palab ras vib rarrin en vuest ro espfritu selecto con la rudeza del choq ue de dos orid as: pe ro aspi rarnos tarn bien a que elias hab ran de dejar en vu est ra alma la dulce fruicion que los j ustos d esahogos dejan. <Vuest ra presencia en Cucuta, en estos mornentos de angustia econo mi ca, en estes mementos de clamor general, sera un eficaz lenitivo, porq ue vos, que habeis sobr csalido en el pafs por esc d eseo fe rvie nt e de se rvir-le, sacrificando en esta labor no pocas ene rp ias psicologicas y fisiolog icas, di reis al rcg resa r it la capital estas palabras al alto Gobierno protector del General Reyes: "AHa, en ese Norte altivo, industrial y cu Ito, hay grandes au hclos que colmar. hay gral1des neccsidad cs que satisfacer." «Y vuest ras influencias, puestas {l favor de tan irnportante servicio, auxiliadas por las de los que os acompaiian y acogidas POl' el Jefe del poder nacional, hab ran de t raducirse pronto en la p ract ica aspiracion de esta Provincia: UNA ViA PROPIA POR TERluTOIUO PROPIO. <isalud a vuest ros d ignos cornpaiicros! j Loor a vas, il ust re latino de la misma preclara raza! Consag rado de la divina religion que profesamos; emisario de nu cst ros anhclos ante e1 supremo Oobie rno,.y colombiano par los irnpagables oficios que habeis puesto en nuest ra union Irate rnal.> Algo sern ej an te a una ficbr e pat riot ica e m bar-gaba las voluntades cuando termin6 cl joven poet a y pole mista, y vino a suscitar aun mas esa santa e xacer'bacion el himno de la pat ria, con el desgranamiento de sus est rofas de jubilo y de gloria. Una figu ra veneranda, toda son r isas y d ulzu ras, se d estaco en segulda: Monseiior Ragonesi hablaba al pueblo, y el pueblo en esc instante prosternaba ante 61 sus carifios, sus gratitudes y sus vene raciones. Aqu i sus sublimes y halagadoras frases de amor paternal y de satisfactoria esperanza: «Sr. Mateus y queridos ciudadanos: <Con gran gusto recibo cl saludo del amado pueblo de Cucuta, y con igual satisfacci6n 10 retorno afectuosamente.

202 197,-- <Au nqu e el asunto de q u e se me hablo no ent r a directamente en la csf e ra de mi mision diplomatica, sin embargo, por el especia ca riiio haeia esta si rnpatica ciudad me oeupare en ella con todo em pejio y con todos los medics que est :'n ami alcance, «La prim -rn palab ra que dire al Exc mo. Sr. Presid cute ~el'[l Ie rvoross palab ra de ap rcc.io, de p r-ed il e c c ion )' (Ie int e rcs po r Cucut a. <Pen> el rncdio mas eficaz para lograr los fines deseados d e be se r una rccion ordcnada, serena v he nc hida de confianza en el pr.t r iot isrno iluminado de las a utor id ad cs, cspcc ial mc n te del pr ime r l\iag-istrado. <Yo SL:que e l Excrno. Sr. Gc ncra l I~e)'l's sr- p rvocu pa ace rca de la prospv r idad d c est a Iaboriosa corna rca,,) no d uclo q 1"-' pronto vcr«mos los rr-su ltados de CS,1 p reocu pacion. <I'~ntretanto me es gustoso re pe ti r 10 q u c )'0 d ecia antes eh ayc r.il ilust re Presid ente del Conse jo municipal: que si l'sla ciue:ad In pasado por tantas cala mida.les, no Sl' ha abatido ja mas, )' no d udo q ue pronto se levant ara para eaminar con paso agigantado e n la via del bienesta r y d el progreso, y que te-nd ra un gl'an papel en los altos d cst inos no solo de esta cornarca sino de toda la l~l'puulica. <Y con e.ste d esco implore de Dios abu nd antcs berid iciones para ella y ren ucvo de todo cor azou mi car ijioso saludo.> i. Quicn s ; at rcvcr ia a d csc r ibi r la emocionante animacion de entonces ; q uicn pod r ia d cci r que no sintio can todos infla marsclc ~I alma de ind cci hle oi'g-ullo? Cor respc nd ia contcsta r al d ist ing'u id o Dr. Posada, y con esa elocuencia p rop ia de los hombres que como el han sido hechos pa ra manej a r la palab ra y t rad uci r anhelos, 10 hizo en los tcr rninos sigllient('~: <Sefiores : <Con vivo placer he oido ('1 elocuent e d iscu rso del ilustrado Sr. Mateusv ; le p resc nto mis ag radecimicntos por las bond adosas palab ras con que ha hecho alusi{m [L mi persona y al pucsto que ocupo en la Cancille rfa colomhiana. < Mu y gratas e mociones hemos t enido cl Sr. De lcgado y sus cornpafieros de viaje en esta cor r-er ia po r los Dcpa rtam en tos del Nor te. Al placer d c 1a e xcu rsion por comar cas pintorescas se ha agregado la rlicha de conocci".r dc ap reciar' el caracter de sus habi ta nt cs. Hcrnos visto altivas cordilleras y fecundos valles; he rnos cruzado 60S irnpctuosos y entrada en hermosas ciudades y poet icas ald eas. Pe ro sob re todas estas dichas hemos sentido la satisfaccion inmensa de ve r como circula sana y e xubcrantc la savia nacional por todas las arte rias del pais. El Excmo. Sr. Delegado ha visto Que nuestra Patr ia no ha muerto y que ella renace boy jo-

203 - 19K - ven, lozana y g rarul e t ras <1etantos infortunios, como en los gloriosos d ias en que ccrca de estos sitios se reunian llcnos de halag iiefias espe ranzas nuest ros prime ros legisladores. «Es aq IIf en los ext re rnos del territorio dond e se le toma el pulso a Colom bia. Aq u i se ve c(lmo pal pi ta SlI noble sangre y co mo su organismo est a vigoroso y llcno de vid a, Se crec hallar campos de d esolacion y de r ui na t ras de la larga hccatornbe que hernos pasado, y con placer y or gullo hcrnos cncont rado distinto cspectaculo : campos cult ivados, rne r- cados abu nd an tcs, r icas casas de cornc rcio, y la fe en m e jores d ias y gran dosis de cntusiasmo en el alma de tod os los ciud ad anos. <T'odo esto d ircrnos al volve r al co razon d e la I~eptlblica. Dire mos que he mos visitado iglesias, oticinas, hospitales, cuar tc lcs, colegios y hogures.r plazas publicus, y que han visto uucst ros ojos un cle ro ilust rado y bu cno, fu nciona r ios publicus cu mplicndo con todos sus d ebc res. manes car itat i- vas cuidando de la vejez y de la orfandad d esa mparadas y aliviando las llagas del cucr po y las heri<las del alma, una fue rza publica que sabe cambial" en muchas horus del d ia el fusil poria piq ueta, y a fin de no cstar ociosa en la paz dedicarse a cornpone r 10-; carninos y {t e mbellcce r las poblaciones; un movimiento instr uccionista altamonte placen t e ro, y una juvcntu d de ambos se xos que cult iva las le t raa y las artes y que figu rar ia con brillo en los mas aristocr.iticos salonvs, y un pueblo. como cl que csta aq ui r eunido, t rabajarlor y culto, alcg re y simpatico, consag r-ad o a sus labor es en cl campo y cl taller, y que sabc usa r siempre una condueta civil izarla.r c r ist iana, Y d irc mos tam bien cu.ilcs son las aspi rucioues y 10,.. scnt im ie ntos de cstos pueblos, cuales son sus nccesidad cs y cualcs las c m p r esas que cllos d esean acorne te r. <Pe ro attn hay u n espcctac ulo mas bello: he mos palpado como se extiende y arraig-a la concor-dia entre todos los colornbianos, debido al irnpulso que le ha dado a tan generosa idea el ilust re Presidcntc de Colombia, Sr. General Reyes. lah! todos los hijos de est a tierra, baiiada por tiinta sangre, rcsuel tos estrin {l no scguir matandose unos con ot ros, a no segu ir agotando sus r iq uezas y sus ene rg ias en los c riales de la polftica. Bueno que todos nos int c rcse mos.r tomemos parte en los debates de los g-t"andes p roble mas del pais, como inrnig raciou, fttrocan-iles e instrucci6n publica, pero no pe rdarnos salud, fama, dinero y t ie m po en esteriles <lispu tas yen ag rcsioncs pe rsonales. ino mas campos de sangre, no mas charcas de lodo! <Y si los asuntos internos los va mos {l resolver en el seno de la paz, asi tam bien hab re mos de dar les sol ucion {l los problemas internacionalcs. La conf rater nidad americana e xige que se estrechen en vez de d cb ilitarse los vfneulos de union

204 nosot ros. Y CJ1110 1,1.l iscu rso qui' p ronu ncio el Sr. (;,'neral ~Io- i "S Ih' tan unisi rno, ralcs He r t c g-randl' aiza r. p y d t ej a- 1\)\) l Iigc entre las nac ioru-s,ie est c cont ine nt e, esp.-cial m cn tc entre las q u«t uvic ron una rn ism a cu na, iguall's glol'ias y It's est;t rese rvado id(.ntico po rve n ir d e pro~tl'h) y (I,~ op u lcncia. «Y,'sta gentil ciutlarl. ccn t inc!a avn nzarlo Ill' nu cst ras f rontc ras, po r t ico d c o ro de nu cst r«p;tls.unad o, oj'gullo d e Ja Ll'lTa colornb iana put' su c u t u ru. su ln-l hzn y SlI p rospcr idud, hu e n cj e rn plo nit;l d an d o Ill' la cord u ra y c lcvaclo cadletel' dl~ sus hi 'los. Sal u do car-i iiosa mcn tc ;'l,'ila v ;, los in tvutcs, patriot'its y nobles c u cutviios, y hago \"~,l()s por q u«alcauccn.-n,'st!' aiio tod a clast' de p rospc rirladcs.> T"i'HIl10 ruconocido v notable cola liorudo r d\~l Gobic r- no. SllS fl'ah's vi b rn ron li;;ljestu(jsas y balagii.,nas c n toclos los o ve n.cs. '1'l'L) t'1 l l mu. SL J)dL'~'ado, en su illlpa,'ienei;1 rl,' qui' Sl~ su p ic ra c u a nto hac ia dt' p r-ovoc ho po r nosot ro- Y cuan to agrad cc la csas d e rnost rac ioncs, IJO sc confor muba L'Oll lo q u e u r hirncstu hal.ia e x p rcsado, con 10 que tudus dl' morl o tan c l.uo hab iamos t'nll'ndid,) v de rnam- rn tan grata \" hc r mo-.isirna hab iamos sab id o ag;'adec"i" y lla marulo,i :\Iat:'us HI'in'no lc d ijo : «I [a(,'d sa ln-r dl' liul'\'o al p uchlo qll" si.'ntl> no pod c r acarici,,';l club uno y,/11" mi p ri mrra»alab ru,;1it: dir(- a l Sr. <:en'~)'al h'eyl's ser;'l una pa la b rn dl~ pl"ospl'i'idad para esta t ie r ru.> ASI lo signilic() e l jovcn,ll'~;ignal!o, i't t icm po que los t rvill's e Icc t uuban sus,~a1l1bios pa ru rl n'gl't':.;o, Y.-n t rc t ant» e l Exclllo.. ;'l pvsa r d,' las instauc ias l"l~pl'1idas q u.: Sl'!L' hac ian p a r a 'lui' no s;tli,'ra al ruso POI' t c mo r <].- una in d isposici(l11,it' su p rur iada sa l u d, s,' ;l)!'ital,a «n los c.i r ros dt' «n- Irvnt c,'slrl','hando rna nos c ucu llcvi d a-: po r el t ra ha jo y en via.nrlo 1\ esped illas Cllll su pan 1I do, Y t i-r rn innrl a h u hiv ru q uc.l ado L'sta d cfic ic-n t c I'l'sl'na;l no habc. sidll por q u e e l S)', Pn'sidente d el Con c ej» convoco a d icha corpor,lci,)n;l sl'si(li1 [lul,li,:a para la tank tid dia sig-.iic n t e, la did hon rar ia COil su I'rl'SCllcia c-l Sr. J>t-1t'gado. Llic ha.lu nt a, tal vcz la lll;'ts trascl~ntl,~ntal qui' lw1110s t cnido, tun, u n car{lctl'i' d e S01t'1I1Ill' pa t r iot ism o. /<:1Sr. <:l'neral :\lorl\!l's Berti, infut isruble impu lsor de torl a olua q nos t uso c man ifiesto ante cl , Sr.. vn t rl~ ot ras ne c csidadvs. la II li1' tvn Ia mos d,' pre- Ie rcnc ia : una r u ta p rop in POl' 10 p ro n t o dl' he r r-aclu rn, po r la cu al I nc au c o mos n ue -t ro cornc r c io. Con planos d c most ro la posi h lid arl,11' hucv r I'll brt'\'('s rl ias!'t'alizahk la del Sr. Vi"g-ilio Ha rvo. 1':1~,r, Dcle:,:-atlo vio bs,'os,ts Iac t ilih-s con I'S.? modo int clig cn t c y a visarlo q uv 10 d istiruru«. )' p ro mc t io 10 q u e en d ive rsas oc asioncs nos ha p ro me t irlo : in t c rcxa rsc vi va m e n t c POI"

205 200 _. mos de el constancia aquf, en este pliego de rccue rdos, de recuerdos jarnas extinguidos, porque en elios viven la vida del espfritu y del progreso los respetos y anhelos del pueblo de Cucuta: < Per rnitid, I<:xcmo. Sr., que convencido de vuestra genial bondad y aprovechando de la galanterfa que usais con est a corporacidn hond.ndola con csta visita, os trate brevemente de un asunto de vital importancia para e1 porvenir de est a Provincia y mu y especial mente para Cucuta, <Sabe V. Eo que en el transcurso de los ultirnos siete anos nuestro t rafico POl' el rio Zu lia ha sido interrumpido rcpctidas veces, con graves pe rjuicios para nuestro come rcio. Al principio creyose por todos que tales medidas obed ecfan a cuestiones de orden publico, pe ro hoy y a nadie ignora que ticnen otras causas mu v d ife rcntes: se trata sencillarnente de una lucha comerciaf en la que Cucuta lleva la peor parte por falta de una vfa q u e la ponga en comunici6n con cl Exterior, cuyas relaciones con el mundo civilizado son la base principal de su movimiento. «: En Cucu ta como en todo Colombia hay por nuestra hermana Republica el ca rifio mas grande, y colornbianos y venezolanos fntimamente Iigad os por vinculos de sangre son los mismos que lucharon ayer por su liber tad y sus derechos. Nos queda todavfa un resto de abnegacion y patriotismo de los hombres de nu est ra magna guerra, y si Bolfvar y Santander, Paez y Rieaurte, y Sucre y Nariiio todo 10 sacr ificaron POI' hace rnos Iib res, es innegable que las voces de odio entre sus descendicntcs apenas serviran para ernpafiar la grande obra de nuest ros rnayo res, en est a Irontera en donde se mcci6 la cuna del Hombre de las Ieyes y en dondc hubo herofnas como Mercedes Abrego, tiene Que habe r y efectivamente hay el deseo mas grande de cordialidad y de armonfa no s610 interna sino cxte rna. < Excrno. Sr. : Cucuta ha calculado como ob ra del Cielo vuest ra visita a estos valles en los mome ntos mas crfticos de su vida. Las palab ras de aruo r que habeis dirigido reaniman su espfri tu abatido y le hacen concebir grandcs esperanzas, Por eso os aclama con jubilo y llena de fe os rinde pleito homcnaje. <La manifestaci6n de anoche, en que mas de dos mil personas fueron en trenes cxpresos a vuestra residencia de Santa Ciai a a saludaros y pediros una voz de alien to, es una prueba elocuente de cuanto acabo de deciros. Nad ie quie re medidas extremas para cor ta r este malv y de allf q uc la voz general que resuena d el uno al ot ro extremo de esta f rontera es la de que el Gobierno nos preste apoyo para una vfa propia por territorio propio, que nos abra paso el Magdalena. l Que c1ase de via sera. esta?-podni p reguntarsenos->

206 y cun t cst are mos que auuque se a por ahora un camino de her rad u ra. El de hierro vend ni d espues como consecuencia logica de nuestras relaciones con los pueblos de la Costa. < T'engo ilia vista un mapa de Santander, que he estudiado un poco, y con los datos que me ha su miuist rado el Sr. Barco c rco que tal ernpr csa no ocasiona /.;ran costo. EI Sr. Barco me dice que el ced er ia con gusto el pr ivilcg io que hoy tie n e para cl camino, rese rvandose unicarncnt e el d c rccho a. las lcguas q ue ha const ruido a sus cxpensas. La antigua Compaii i l d e 'T'a rnala meq ue creo que tam bien estara patri6- t icarncnt: int eresad a.,;.oue hab r ia q u e hace r pucs en tales ci rc unstancias? Solici tar del (~obierno un apoyo eficaz, eficacisi mo. y esa cs prcc isa mc nte la suplica que os hajro, li~xcmo. Sr., corn«\'occ)'o que soy d e vst e Conce jo e int er p rc t ando fiel mcut e las asp iractoucs del pueblo cucu tefio. 0Ul' nuestro Prcsirlcnte Reyes. cu ya ub ra e1,' pal Y de progreso es una espe ranz.. d e r ed encion para nucst ra pob r c y aniq uilada Colombia. nos \'twi\' suficient es g-rupos de zapador es para abr ir es,' ca rnino, y nu est ro cornc r cio se r canirua ra como por cncanto, y nu cst ros ag-ricult01""" pod ran pcusa r va e n no aba ncloua r sus pla ntuciories. < Ex' l1lo. Sr.: Si como no 10 d u do consl'/.;l1fs dcl (;obierno 10 \I\1e hoy n~spl'tuosamente os pe d imos. vucst ro nom b re qu cd ara ligado Int imu mc n t e ala (1)1';( (it' sal vac iun de tod a esta CO\l1,U'c;l, y nu cst ra g-ratituel senl c te r na. <Hacc r el bic n es vuest ru d ivisa. Confiarnos en \'OS, Exc mo. ~'r.> ~i falta de g.l1anura \ l'xpn~si6n resulta csta reseiia, il la que tan.t isimo int c res k hc mos puesto, en cambia \lena esta de le.rf timo ca r iiio y entusiasmo. Xuvst ra pluma ha cor rido animada por un inst into generoso y alim eutuda por una savia vivificante: Ia que e l corazon d cst ila cuando el patriotismo 10 hic rc. Sao JoS(:, Febrero 1(, <1l' DOS E.<;P/ ;CTADORES BANCO DE LA REflUBLICA J18U(,JfECA LUIS-ANGH~. CATALOG4C!ON

207 DISCURSOS DEL SR. DELEGADO Reproducimos alg unos breves d iscu r sos del Excmo. Sr. Delezado Apost61ico que hemos encontrado en los pcr iodicos. EXPOSICIl)N DE llucarama~ga EI rapido viaje que acabo de hacer d esd c la capital de la Republica {l ln mct ropoli de este Departamento ha sido para mf una sucesion continuada de vivfsimas impresiones: imprcsiones de placentcra ad miracion al contemplar 10 rico y her rnoso de la natu raleza y Ia indole dcspicr ta, suave y profundamcntc religiosa del pueblo colombiano; imp resiones de tr isteza al encontrar todavia vestigios de desoladoras g ue r ras: imp resiones de consue lo y rcgocijo al ve r d espuntar ya los f rutos de la paz, los cuales se han ve nido acrecentando a medida que me ace r caba a esta poblacion tan arnable y arnada po r su cara ct e r franco, jovial y hospitalar io. Y ahora que me encuentro en presencia de este bello certamen industrial y artfstico, he rrnosas primicias de esta nueva era de concordia y de t rabajo, i cutin grande es mi jubilo y cuanta mi espe ranza para 10 poi' venir! j Exccle nte idea la de p rornovc r la e m ulacion de los ciudad anos en el campo del arte y de la industria! * * * l<~nlucha pacifica d c los ing enios, est imulad a en los porticos y g-imnasios, la raza helenica alcanzo la mas subli me altura de la filosof ia y de las artes a que el g-enio ha pod irlo llegar en alas de la inteligcncia y de la irnag inacion. En lucha pacifica de los talcntos politicos, cultivada en el foro y en las escuclas, la ant igua Roma ad qu ir io la cicn- -cia del gobier no y el secreto d e legislar con aq uclla sahid u- ria q ue lc han envid iado todos los pueblos de la tier ra. I<~nlucha pacifica del genio c r istiano, fomentada po r Ja Iglesia en los tempjos y monaste rios, la Edad Media p rod u-

208 me nt y a l perfeccionamil'nto arl a bien colo rn biana, si a e l contincnt il rlot jo monu mcntos de ar tes v de cie nc.ias de gloria impe rcced e rn pa ra cl genero hllmailo. '- Y no fue let lu cha pacifica po r la ci vilixac ion, est imu- Iada POl' cl Pontitica.Io l~ol11ano y las Cortes eu ropeas, la q uc c n Ia epoca dl'll~l'nacimiento enc"11l1i(i,'1 cvlo de millares d: esp ir itus p r ivilvg iados y pob!,'. "I Viejo Mundo de morn rn e nt os ar t ist icos v lit.c rar ios. '::l11ulus tk las ob ras cjasicas <1v las ellades dv- Perich's y (!l' Aug usto? i. No l'ue la lucha pacifica poi- e l pnlgn:so, al a m parn de la c rux, la que t rajo el (kscllbl-imiento de America ': [;n lucha pac ificu ban arl q ui ridu los pueblos mod c rnos aquel prolligio;.;o (It's;I1'1'o11o en to d as las esf'e rns d c la actividad hu ruana, q u e Sl' a d m ira cs]l,'ci,dillt'ntc en ]a;.; e x posicioncs u nive rsalcs. Y la ~acion t uad {l 1a cabl:za d c su da m c r ica no v con c x t ensos litorules so b r c ambos Oceauos. posecdo ra (1,:' un te r r itorio tan bello y tan c xu bcrante de elementos, puhla.la por una raza!lumogenca, intcli- I-~entc, vi r (!L' t{llltas l'ncrgfas, l. no qucrr;, ter ciar en cst e he r mosisi mo toi-m'o de la hu rnanidud para ocu par en las tilas dv Ius pll,'llios \Has ;ulel,lilt;illlls el pucsto <1e hono r a 'lui: h a sido pro\-j,il'ncialm,'ntl',1,'stinaeja'! min' al sub re nat I':splt~nliido m«pa rvct: l'1 C'jL'lIlplu 'Jue hoy nos of rccv -esta ci lt a y pro me t cclo ra ciud:«l. l Ic r mosa y de Ieliccs auspicios L'S Ia il1,'a (1,' invit a r con p r c m ios (I los ar t istus ~. ob rc- I'OS (1,' torlos los Dcpa r t n m c ntos it e x ponvr los r.-su lt ados (ie S,I tal, nto, sus esfu c rzos.?\o <Iu'do de '1lle s,til irn itu do nll'slro nuhi lisi ru«ejemp lo ; coutio v n q u e- s,'mejalltt's ('xposiciones s,' rqll'tir;,n CUll f rccuc ncia y Sl' multiulicar.in {l lin <Ie que s,' conozcun m e jo r calla db los teso1'os que l'n,:il'itolel suulo r olom biano, de gl~lll'raliza1' L'1.qwenliizajt' <1L' las a r tvs (- iml nst r ias patrias,,k pa t o nt izar su adelanto progn'siyu, de «st irnar de bidarne ntv "I t rabajo uav ional y cunc c dv rlc a qu clla p rr-ic rcncia q ue no po,:as \'l'cl's St' ot orjra {l las p rod uc cionr«cx t rauj c rns con d,_n" l'lt1l1ico (It-I pais y pn r t ic u la r (1l' los c iu claclanos. POI' 10 tanto. yo. H,'prt'Sl'ntantl' d vl Vicario dl' Cristo ell e~4,' pt,'hl0,'al(ilico. lu-nrl ijro L'sta hermosa Exposici<)ll. y la bt~nlligo,'j1 no mb rv d,' la Ig1l'sia, la c ua l, a n n q ur- d irccta-, JI10Ld y u rnl de los til""s. sin ( mbarg:o pj'()tl'gl'. proj11l1l:'-c' y saut.i- fica todo aqul'llo q u c t ova al p rog rvso sur ial d c l hu mauo linaj e, e l cual ha sid o lla rnrulo po r "I Cr cado r il pose e r y llornina r la t ic r ru. De scieud a cop iosa L"sta he nd ic ion SOIH-L' e l ilust r c Gobc ruadir y los dem;ls inspit-a<lol'cs.yot-ganizallon's ell" tall

209 proficuo ce r tamen, y sea para ellos abundante recompensa de sus desvelos i descienda sobre los expositores y los anime siempre mas y mas al desarrollo de su talento y de sus labores; descienda sobre quienes la visiten y despierte en ellos el espfritu de imitaci6n y de mejora; desciendasobre todos los hidalgos h ijos de Colombia y reavive en ellos la clara conciencia del altfsimo grado de prosperidad moral, intelectual y material a que puede conducirlos 1'1 afianzamiento de Ia paz. Que csta bendici6n extinga de rafz todo germen de odios y de venganzas band e r ixas, )' hag-a que a. la edad ferrea de las revoluciones y guerras intestinas, POl' las cuales bajo el imperio fatal de una ley hist6rica han pasado todos los pueblos para llegar a un alto grado de civilizacion, sucedan aureas epocas de pacificas luchas industriales, literarias y art ist icas, PAJ.ARRAS DEL EXC:'<!O. SR. DELEGADO APOST()!.ICO CON MOTIVO DE LA INA UGURACION DE LA ESTATU A D1': CUSTODIO GARCfA ROVIRA l. Que es y que siznifica la e reccion publica de la hermosa estatua que en este dia solernne tcneis vosot ros el merito de inaugural' y yo la hon ra de be nd eci r con hinta pornpa y regocijo? Es esta una nob ilfsirna rnanif'estacion de gratitud q ue tr-ibutais al gran ciudadano, y un monumento impe rece dero de gloria nacional q ue legais it las generaciones venide ras. Para mi es algo asi como una resur reccion del ilust re proce r. La memoria del heroe que Iue desvancciendose con la desapar-icion de sus con te mpo raneos renace hoy vigorosa en el espfritu de la actual generaci6n para vivir per enne en las futuras edadcs ; la grande alma de Garda Rovira, revist ie ndo formas casi se nsi blcs en estc bronce, vue1ve a e m peza r hoy la alta mision doce nte que principia en el breve cu rso de su vida mortal, y ensejia con elocuentes lecciones de esplerrdoroso ej ernplo. Este eximio magist rado que eje r cio can tanto dcsinteres los mas altos y diffciles cargos de la nacierite Republica, y que no titubeo en renunciar-los con incomparable modestia cuando en obscquio del bien publico 10 creyo prud ente y necesario, ensefia a las autoridades civiles y polfticas con cuanta abnegacion se debe se rvir ala Patr ia. Este joven g ucr rero irnprovisado, que supo organizar con rara habilidad ejercitos y combati r can sacrificios extraordinarios, y que tenazrucnte rehus6 los t itulos y honores que se Ie ofrccian, enseiia it los poderes rnilitarcs con que generoso valor se debe acudir a la defensa del hogar comun,,

210 e j e c Ensefi.i en general a tod a clase de ciudadanos virtudes mo rales, c ivicas y u rbanas este egregio var on que en las varias ci rcunstancias de su cxiste nciu lie most ro sincero creyente, pat riota acr isolado ~' caballero en singular manera cu mplido. Peru dond e especial mente S(' nos of r ece como maestro mplar IS 1.'1 campo de la publica nse iiauza. I':n la escu ela ';1.' Ior ma el caract c r del hombre; en ella se ad q u ie r cn junto con ('I tc1110r d e Dios 1'1 scnt imic nto del debe r, la obe diencia a la kyo e-i r espe to a las autor idad es, el arnot' al orden, t,l r.ulto al t ra bajo, el habito del aseo y de la hig ie ne, t'1l-:"usto estetico y todo p ri nc ipio de p rog r eso individ ua 1 -'" (oled ivo. Con su mo aciv rto rl J': x c 1110, Sr. Prcsidcntc <k la Republica, d esd e los co rn ie nzos de su Ad minist raciun, dio pod e roso impulse ;1 la iust r u ccion v cd u cacion c r ist ianus Ill' la juve nt ud, sl'cundado habil mcnt e po r su ilust r ado Ministc rio y por los at inad os Gobc rnado rvs lit' los Di-par tamc ntos, y continua en a r mon ia con la valiosa accilln c ivil izadora de un cle ro ilustrado v vi r t uoso : cont inua sin cvsa r en la magna obra, ora ~;ea mul t ip lica n d o los r c-nt ros de t:nsen'u1l.a primaria y ab r icndo nu.-vos,'o!t:gios, ora f n nda ndo escurlas nocturnas paru ob rvros, inst it u tos d" ag-ricultut-a, tallc rcs mod elos y saloncs <It' t rn bajo: vn una pala ln-a, Io rue n tando todu esfucrzo :lttblicu." p rivado.1 tin de ensanchar mas.r mas cad a <!fa " pc rfvcc io nar \'1 d esar rollo Iisico, inte le ctual y moral Ill' 'a pn'coi: j u ve nt u d de est a Hepttbliea. '-)llvs hil'n: en l'stl' pel-iodo dt' re nncirnie nto en Ius cst u- d ios v~colan's " IlO par cc c p rovidvnc ial csta ('sill'cit- de prese ntacion solc m n c 'lui' la c u lta soc iccl ad d e Bucararnanga hace <It' u n Il"l'r",'to dn'ha<lu i-n la t,jil-:"il' cit' (~arda Hovira'( Ikch:I<!1l ti",'stlldiantl's St' p r cxr-n t a q n i.- n nac id o para vl cul tivo de tu.lu l-:"~n'to dt' conoci mieutos, ora profundos v solidos. ora a rne nos v ag-ra<lahil-s, cu rso las c icncias \' rue ~I alumno m;ls <listing-uido,'\i las c lascs (It- filosof ia \. tcologofa; q uicn con paso ag-ig-antado an d u vo el vasto carupo del d e.re cho tanto civil como,'ant'1i1ico, " f ue admirado de sus d isc ipu los y p rc c cp torvs : q n ie n n:c~n'i/) las esfc ras de las let ras y de las arks. y ap r c nd iu par sf solo elg-riego, el frances, el italiano. la pintura v la music a, hasta vi punt o de n'- p roo uci r y aun creal' ob r as <It: ve r dad ero mor ito ur t istico, quicn ma yo r m en tc se most ro cn toclus los c u rsos cumo alu m- no ej e mplar y de in m e jo ra hlc cond u ct a. Pe ro si Gar'c ia l-?oyira Iue dechado perfecto entre sus condiscipulos, como p rofesor St: nus mucst ra ideal. Regent/l con su mc honor las c;itedras de mat e mat icas, de metaffsica,r de cier.cias mo rales, e infiuy/, pode rosarncnte en la difusion del gusto po r los est udios filosoticos de la esc ue la torn ist ica. que t;lntm; frutos sazonarlos y t a nto hrillo ha p rod uc ido.

211 Parece rnc pues dcsignio provid encial que quien en son de burla fue apellidado vivo y muerto HI Estudian:«; renazca hoy en la memoria de sus conciud adanos con el g-iorioso titulo de maestro del pueblo colornbiano. Sf, este pedestal cs una nueva catcd ra, y esta figura un nuevo maestro que hoy irradia aq uf, y manana, rcp rod ucida par el arte en millares de capias, ir radiara en tod os los ;i.mbitos de la Republica con dcstellos lu rninosos de la luz intelectual, del amor pat rio y del valor moral inque b rnntablc de Rovira. Par 10 tanto yo, snmamente ag rad ecido a la at cnt a invitacion y esplend ida acogida que se me ha hecho, os felicito a vos, Sr. Gobernadorj felicito ;1. los m ie m b ros d cl Iu c ido Gobierno departamental.r (t los santandcr eanos torl os, :r senaladamente al ilust re Sr. Dr. Mutis, e x-gobe r nadcr, que concibio e inicid la rcalizacion de estc monumento. Y mientras voy a cle r ra rna r sob re el las aguas lust ralcs hag-a \'Ot08 fervientes al Ciclo a fin d e que I~'IEstndiautc, con infiujo 50- b rcn at u ral, resultc eficazrnent c maestro: maestro de los gobe rnant es civiles y politicos, maestro de los m ilitar es, maestro de los ciudada dos todos, maestro especial mente de la j uvc nturl est u d iosa y maestro de maestros. Sob re la llcgad a it Pamplona dice un per iodico de aq uelia ciudad : Lucgo que S. K Heg-c)al templete de la csquina del Palacio episcopal fu e salu d ado pol' el g-rupo sirn bolico de nifias, de que se hablo en el nume ro S del Honicuaic CalOliro. En la puerta del Palacio episcopal se ost entaban entre guirnaldas las a r mas pon tificias, las de los Monscfior es l~agoncsi y Parra y las de la Union Colombiana. gn este punta el m uy ilust re Sr. Ar ce d iano le <lirig-io la palab ra en nornbre del Ilmo. Sr. Obispo y el Venerable Capitulo d e la santa ig-lesia Cate d ral. y ]0 invit();l e nt ra r en la mansion e piscopal asi: 4: Exc mo, Sr.: «Como 10 manif'este a V. 1<:. d csd c Bu ca ra manga, la ciudad de Parnplona, r espirando id ent icos se n t irn ie n tos de entusiasrno y d e amor con su limo. Pr clado, as e rnpieza a obseq u iar tal como 10 habeis visto, tan g-allanlamente, con estc inusitado rc ci bi m ivnto, por q ue inst int iva ment e ve e n vos un me nsaj e ro celestial que t rae- abu nd ancia de consu e- los para cl Pre lado enfvr mo. una sorn b ra ln ncfi ca para todos los a ctos de su au tor id ad c piscopal )' u n testimonio int e- gerrimo que d ig a il los oiclos del Pastor, d eb ilitado por la cnfermedad y los afios, que ha recor rido como bu e no las

212 . 207 send as del dcbcr y de la justicia. Es tal1a espontane idad en las manif'cstac ioncs jubilosas que sc os haccn, que no me parccc r ia c x t raiio ve r sali r tam bien de!'\1 sitio a las pivd ras que rmbn ldosan las cal lcs para cu rn pl im c n t a ros. ~ Pv ro, EXCl1lo. Sr., aqui dentro <11' r sta mor arla palpita mu v aj1jo 'ozado u n r o raxou <k hc r rnauo v de a mijro q u e os des~;t dar I.'l ab razo <1l' bic nvc nida, Y COil (.\ 'ii' n'gocijan las personas 'jul' forman la f'am ili a <11.'1Pn..ln d o. Entra<1 pronto, por q u.: YUl'Stl"O salu do ha (ll' se r para cl l'n'lado d mayor de k» consuelos Y pa r.. nosot ros una esperanza posit iva (lei pr\)ximo r c-stn bl ec im ivn to. «~o purl o yo> ad i vina r que m c tuc;ls,' e n sued,' re n ni r aq u i c nf r.mt e (te l'sll p u crt a L.s t rr-s co r r ic nt cs paraklas de o hseq u ios qui' los,'at()li,'os y las a u to ridudvs ecksi{lstica )' civil hall he cho rod a r d c-lan t c d e vuest r» camino; por q ue vr n I'll vo«, EXIlIO. Sr., m.i» q u e al Di plo ma t ico e minent c, al noble l-?l'!,rl'>;cntalltc del l'gtegio PIO x, q Ill' 11eg-a como un cvlaj c (II',.'speranza {t a hr illan t ar c l ulti mo cn'ptlscul0 <lei cpiscopa d > de Monsciior Parra. <: Entl'ati, Ex,'lJ1o. Sr.. porq u.- yaoigo rvsoua r a q u i d e n- tro los gr; nd cs d csvos ell' rccibi ros. l'on('c,'ros y obseq n ia ros con modesto Y l'~ca~o lujo ex t e r io r. pl'l'o loll pal p it an t es j ubilos <It-I co rnzon, CONTFS'I,\<:I<'):>; DLL 1':XC~Il), SH..IJl',LH;,\l>1l AI. SR, <:.\);(',:-;:1(.;0 l',\i.dlh():-: 4:'\,;l.n(a u n ida d d,' sc-n t im i.n tus I'll! n' r-l purhlo y ci Cle ro, en.rv las a u tor icladvs l'l'!t'si;t>;ti,'a,.; y pol it icas. que V. S. aca ba tit'..o ron a r ron t a n elcvad as p a la b ras para fl'st e ja r la ve n id a <It-1 Ih-k:,!.'adu Apos((')1iro.,'S e l Iruto (ll- la filial (lenlli"ln {l la Santa Sl'dl' q u«,,1 d ig nisi mo Pn'Iado ha sabid o inspi ra r,'il \'1 (L11imo dl' sus d ioccsauus. Las alabau- 7-a~ que (k. "'1 1J~Il'" V. S. m e son tanto l11as gratas cuan to mas rn e rt-c id as. < Aco p to la in vi t acion dl' ent ra r rn,sta ve nvr a hl«mo rnd a, y la ac :pto,'oll gusto \ vou dolur al p ropio t ie mpo, pues cspe ran do ha lla r {L su digno nioradur rvbosant e de sa lu d, tendr'" '1U,' ""!':" ;11)1'ul11a<\" baju e l J't'Hl d,'!lo\ol'u\-a c nfv r- 111('(la:1. «Cunho sin l'lllhar:,!.'t) 'l"l','oil 1a \isita d,'l l<l'pl"'>tlltallt e d el Vi,,; rio d,' Jl'su''I'is(o, l'l Pastor d,' los Pastorvs ve n- dr{l il t r avr la ~;tlu<! {, 1111" dl' ills q uv con m{ls cllitlaljos y d esve-los ha sab id o custodial',';.;ta h-r mosa po r c ion d,' su unive rsal rvbnjio.> La visit a que hizo il Monsciio r Pa r ra en su le c ho de do101' fill' e n cx t r-c mo co rrl ial, se n t irn cn t a l,\' patet ica Era la

213 misma bond ad del Supremo Jerarca de la Iglesia la que se retrataba en su Representante. Los dias 1 9 y 2 fur-ron para las recepciones oficiales, y -e12 por la tarde honr6 can su visita a las comunidades religiosas. No podia se r de otro modo: ellas son las hijas p red i- lectas de la Ig-lesia, y par eso el que rep rescnta la Santa Sede, que las ha aprobado, debfa hon r ar las, defenderlas y escudarlas bajo la egida de su alta protcccion. (La Unidad Catolica, Parnplona, Marzo 15de 190i. nurnero 4.14), SAl.UDO DEL EXCl\IO. SR. DEI.I ;GADO APOST6uco DE PAMPl.ONA EN LA VELADA Acabo de saber q lie en el articulo 139 del programa de esta fiesta se incluye una ~alante invitaci6n para que yo dirija la palabra a este lucidfsimo concurso. Pero 1.como hacerio de improvise halhindomc desprovisto del conocirniento y manejo del rico id iorna castellano? Dejan~ sin embargo que salzan espontanearnente de mis labios los sentimientos de gratitud y de carijio que en est e feliz momenta en mi corazon est an bullerido. Al encontrarme ay er en la adornada plaza, frente al vivo y grar:z'os!sz'lilo {cmil/etc formado po r vuest ras angelicales niiias, ag radable mentc sorprendido e xcla me : < Saludo can afecto a este ramillete de flores que con tan d clicada her mosura sirnboliza la religion. las cie ncias y las artes. Vislu mbro en esto una g enu ina imagen de la catolica, culta y civilizada Parnplona.> Pero ahora os aiiado que si ayc r vi ei sf m bolo. hoy admira la realidad. En ef'ecto, csta lfrica velada ;. no es esplcrid ida rnanifcstacion del sentimicnto religiose, de la intelectualidad y del gusto estetico, que admirablemente hermanados floreccn en esta hist6rica ciu dad? Felicite pues y agradezco con toda mi alma a los organizadores, lit e ratos, poetas y ar tistas que tanto me han hon rado, y hago votos al Cielo porq ue las dukes not as de ar rnon ia Iitc ra r ia y musical q u e nos han r egocijado se convier tan en p rovechoso concierto social, que de este simpatico centro se difunda a todos los ambitos del Departamento y a todas las cornarcas de la Republica, para que de toda ella se forme una sola familia en que todos nos arne mos como h er rnanos. En Cucuta han publicado todos los d etalles de la rnaj estuosa recepcion q lie Ie hicieron al Excrno. Sr. Presiden-

214 q S. hace con d c t~ d cl Cu e r po Diplornat ico ac rud it ado ce r ca tie! Gobier no de Colombia y factor irn po r t an t isi mo en los d est inos d e l pais. Ccnt r ibuve ron a sole runizar aq u e lla rcccpcion oficial todos 10~icatolicos con, 1 vc-uerablo Cn ra p{lrroeo d c Cucutao Dr. D. Eiias Cald e rou. Como dig-no r~l'presentante (it's. S.. S. E. "isit,) m uy houor ifica \' cor d ial mc n tr {lias HH.IIH, (It- la Ca rid ad. Con gratittlc r~e()r<lamos sie m p rc 1'1 apuyo 'In,' para las HR. lib. (I, Cucu ta sol ic it o v ob t uvo \Iollsenor Rag-ollesi e n Se pt ic m b rc d e 1')0;; del Excmo. Sr. (;"lwra1 h'eyes. Jlnhlicaclo en L«f'll/dad ({(II;/im, S"lllimos Ill) pod e r r cp rod u c ir tud os los (lisojrsos dirig-i('os ;'1.;. I';, l'll Cue uta ni las con t cst ac iouvs dl' Monse iio r Hag-olle~,i; pero como p ru eba <I,' los sen t im ie ntus qu~' animan a ~. E. t o ma mos los concl'plus sig-nil'ntt's <1,' uno de (:l1os. qt c VJ1l:i,'ITa t oclo v l prog-rama (!t, su mision aposu;lica cn Colo n b ia : DlcCFHSll m-n. S~. IJI,:!.H;\ Ill) ":~ L'O;'o;'1'j..s I'.\CI(lX.\1 1101\01'/'\- tn.r: 1'~ISnll':XTI: Ill,,!. CO;;;SI':JO ()I': (('CPT v. 1':"0[1':1. I'.\I'/QPI'; ])J.: S\"1'1'.\:'\I>1':I' V, Dign isimo Sr. Presid,'nk : Su marm-nt c g-rato rn«"s l'1 saluda de hicnvc n id a que V. S, acaba (It: d ir ig ir mc en norn b re (It' la alta cor porucicn que tan dig-nall1entl- pr,'sidl' y d c la si m pat ic a v iud ad que con (h'n,d1o se a pe llida lit I rri«dd,.\'or/r. Cout estar.rd c cu ad a m c ut o {L sn elcvado c1iscur>"l "n ('sto>; mo r rc ntus no l's posi hlc, ;. Pe r» C()J1Hl callar? Dil"l~ des palab ras sin rd!)j-icos o r nat os,,(ljlio vaya n h r ot aru.o d c rni coruzon,lg-ra(!t-cielo, Din:: que "I pu b l i..o testimonio d e fc: cut oliv«y til' acata:mienl0 Iil ia l (l la Santa Se d e q u, hoy rccibo (it','st" noble pueblo con t{li1tas d e rnost rac ioucs ell' j ub ilo y pur rnv d io d e la autorizuda \'OZ d c- V. S.. m.: llo na d,' santo I'l'g-o,ijo. Dil'(' t am b ien q u e 1I1L'"S sobr,'maih'l'a halag arlor l'1 recu e rdo u e frasl's tan mi ob ra bondadosas de pacificaciun, ob ra 'III" l's pa r t e,'s,'ii,i,t! de la mision {l1111 confiad v por c-l Sumo Pon t ific c PIO x, it q u ie n con a cie rto se le llarn.. el Pont ifice de la car id ad ;,~s Ilor que b rot a espont{ln~a1l1ente Ill' mi coraz/in de hombre " sac e rrlot e ; es f'r u to del especial car ijio que t eruro pat-a 'Oi1 est a Nacion, v por -sto no eesan:: ja mas d c t raba j a r pat-a q ue la ar mon ia ~nln' los hidalgos hijos de Colombia sc vaya afianzando carla d ia con la paz hie nhcc hora y el t rabajo Iecu nd ant c. Din~ que la alusion al colcg'io me es d e modo sing-ular pluce ntc ra. ::'\0 d udo que este nac ie ntv pl an tel, asi como t's para mi motivo de g-t"ande sat isf acc ion, asf se ra para esta noble C'lm,U"Ca «lc me nto de p rosp e r irl ad y timbre de honor 14

215 Si esta ciudad, como V. S. dice, ha sido ab ru mada POI' el peso de las calarnid ades, me cs g ustoso reconocer que no se ba d ejado abatir; fue rt e como es y activa como la fama 10 pregona, pronto se lcvantarri para caminar con paso agigantado en la via de la prosperidad y del p rog reso, y desernpefiara un gt'an papel en los destinos no solo de esta laboriosa region sino de toda la Republica, como 10 deseo ardientemente al impartirle ;l nombre del Padre Santo la apostclica beudicion. DISCURSO DEL r;xcmo. SR. DELEGADO APOSTOI.ICO ANTE LOS CONSULES EXTRANJI<;ROS, EN LA QUINTA «TERESA,» EN CON- TESTACION AI. QUE EL <leneral D. JOSI~ AGUSTiN BERTI I.E DIRIGIO EN EL ALIIIUERZO QUE SE I.E DEDICO EL nfa DR sir LLEGADA La mision civilizadora <lei Pontffice Romano es la de llevar paz y armonfa POl' doq u ie ra : paz y a rrnonfa entre las varias clases sociales, partidos politicos y entidades administ rativas de una nacion: paz y armonfa entre las distintas naciones de una misrna raza ; paz y armonfa entre las diferentes razas del genero hu mano, a fin de haccr de todos los hombres una sola familia. De acucrrlo con este sublime apostolado la politica del actual Gobierno colombiano ha sido d esd e el principia obra te naz de pacificac ion.y de concordia, tanto en el interior como en las rclacioncs inte rnacionales, cspecialmentc entre las Rcpub licas g-emelas q ue tu vie rou un rnisrno or ig c n, corrieron idcnt ica suede.y110 pod rim lleg'a r ;l sus altos p rovidenciales d est inos sino COil la cordial recip rocidad de atenciones y sc rvicios. Muy com placirlo POl' las palabras del ilustre ciudadano Sr. General Berti, br indo par la exirnia benefactora de esta ciu dad, que nos ha p roporcionado esta regia morada ; por la dicha d el ~~xcmo. Sr. Prcsidcnte General Reyes; por la salud <lei dig-nfsimo Pr elado de la Diocesis : por las autoriclades que con tan var iadas d e most raciones de car iiio me acompai1an; POl' el progreso moral y mater-ial de este simpatico pueblo; por los honorables Consu les y las naciones POl' elias aq uf rcp resentadas, yen particular poria noble lim it rofe Venezuela; poria union amistosa entre las he r manas Republicas del continentc, a fin de que sea un manantial abundoso de cornun p rospe ridad entre ellas y gran factor de civilizacion que lleve nucvos acor d es al concierto de todos los pueblos para proveer ilia realizacion de aquella fraternidad universal que es el principio supremo del Evange lio y sera la meta ultima del p rog reso hu mano.

216 A I'l'sar p no Ill' ECOS DE ta PRENSi\._. D,~ los va r ios a r ticulos escri tos Lon mot.ivo del viaje del Excmo. Sr. Rag:ol1l'si, rcp roducimos u nos pocos, para no au m cn ta r de mas.iado cste vulu rn cu. ru la ie ron 1<:1 }<;;,\CII1O. St'. Delcjraclo Apoj-;tolku Monset1ol' Francisco Rag-:mesi sali,) a y er en el t rvn d e la manana, en car ro especial y aco mpafiarlo pur pc rsonas d isti ng u id as, en d ireccion {l los Dc pn.r ta me ntox <lei nor t e de la lxepubliea. Y llcva el proposi to t'sllt'cial de asist ii' {l la inaugu rucion de la cstat ua dt'l pr/j(t'r colornbiano (;I'l1er,tl Custodio Carda Rovira, en la ciudad dt Bucaramanga, seg-tm in vit acion que khan hr-c ho c l Sr. Gobe ruado r y e l pueblo -autandc rr-a no. Asi misrno 1'1 Exc1lltl. Sr. Rag-olwsi!-'okmnizarfl con su presencia la a pe rtu ra de Ja e xposic ion iuclust r ial que SL' \'Crilicar,!. en la im port a n t e capital dl' aq u c l rico \' la bor ioso Dcpar tarncnto. til' 10 t em iiar al f;:xel11o, Sr, Deleg-ado hasta hora sal la t'staci/lll {lacornpa- va rios ca ba- Heros. f<~1 ~';r, Delq:-ado <l,':-;(k q uv piso e l t er r-itor io colombiano supo ganarsl' con Sll e xqu isito tac to, sus nob lvs rnane ras y su int eligcnte labor apost ol ica los cor azones de cuantos han ten do la fortuna de t ratar lo. Ahara e n su t ransito POI" varios V"partamentos y Diuct'sis comjrlctara t'sa labor d e persuasion c,'ang'elica de couq u istar los co razoncs para la paz y el amor, y las intcligencias para la ve rrlad, de sue rte que de su e xcu rsion podr:l d ecirse con la Iruse del Evangelio: Fas,; hact'clldo d bicli. POl' primera \'I;'Z un De lcgado Apost olico, Rep rescntant e directo del Sumo Pont ifice, ha salido (l r e co r rc r aq ue llas corna rr as, y de allf q ue en elias St' p rcpa ren los ca t olicos ha-

217 bitantes, con filial entusiasrno, a da ric mucstras de su amor y de su agradecimiento. Como he mos dicho, el Excrno. Sr. Ragonesi va a asistir ala inaugu r acion tanto de la cstat ua de u n procer como de una exposicion <londe se e xhi be n nuestras r iquexas, y de est a sue r tc, ate nd iendo (t 10 moral.y a 10 material, une su nornb re prestigioso a la sole rnni dad en que se tributa un hom enaje it la memoria de u n pe rsonaje cuyos talentos y vir tudes son dig-nos de irnitarse, y it la vcz estimula el Sr. Ragone!'3i can su presencia aquel certaml'n del progreso material, dond«sc ostentar an asi los productos naturales como los resultados de la industria. Este consor-cio de 10 intclcctual con 10 moral esta en perfecto acue r do con las doctrinas de armonia que con tanta elocuencia ei Sr. l~agonesi cxpuso en un d iscurso a la memoria del in mortal Leon xm. Hace rnos votos al Cielo porque el ilust r e viajcro tenga una co r rc r ia feliz en togo senti do,.y d espues de aumentar la suma de sirnpat ias de que y a goza en el pais reg'rese a la capital, en dorid e deja tan considerable nurncro de amigos y de ad mi radores, (/:"1 Correa /v acionai, Encro 5 de 1~)7). Hablan do de la llegaclt a T'unja de Monsefior Rag-onesi La Adlllt'lIt'sfra,;()lI de esa ciu dad se e xp resa asi: «Con lu joso acornpajiamien to p resid ido por el limo. y Revdmo. Sr. Obispo de la Diocesis y por el Sr. Sec re tar io g-eneral de la Gobernacion hizo su entrada en esta ciudad, el dia 5 de 108 corr ient es, Monsciio r Ragonesi, Delegado de la Santa Sede en cste pals. Afable y cornunicativo, al propio t ie mpo que de espiritu obse rvador y de gran penet racion, visito con el intc rcs de q uicn dese a conoce r {t fondo 108 usos r costumbres, nu est ros te mplos, oficinas y establecimientos pr incipales. Tuvo pa1ahras de aplauso para este pueblo creyente y labor ioso, y de ag raducimiento para los Gobiernos eclesiastico y civil por las atcncioncs que le fueron p rodigadas. Las sirnpatfas que en no lejana ocasion habia despertado en nosotros se han au m entado al p rescrite, yes que en el ve mos no s610 al hab il d iplornat ico amigo de Colombia. sino al Representante del Gran Pontffice Pio x, Acornpafiaban al SI". Dclegado el ilust rado y caballero- 80 Subsecretario de Relaciones Extcriores, Sr. D. Eduardo Posada, honrosarnente conocido en el mundo de las le tras, y el Sr. General D. Santiago Camargo, ex-cobcrnador de Tundama y a quien adornan notables prendas de inteligeri- -e ia y de caracte r.> t E! Correo Nacional. Enero 28 de 1907)

218 rei.i':t;i{.\:li.\~ CHCZADOS 1 :NTlH; EL COBI ;HNADOH IlE GALAN, S. E. E. DE! EG:\DO APOST(}UCO Y LOS SI{I':S.GI ;NI-:R,\1. SANTIAGO C:\:lIARGO Y DH. EDU,\HDO POS.'\I>.\ (;o!jcr,wo' l1l de (,'a!<ill Ch arat«. Fllr]"o () elf i oo>. n.i g-a<!o AI~'str'dic() (lnzag-a, En norub re pueblo, (~ohi('rno (~,d:l11, h,)nnl!l1c' p rcscntar le cordial saludo bicnvc nid a y mauifestaciou ag-radecimicnt«poi- honor q u e co nfi c runos con su g-rata, g rat isima visit a. Virrues pr/iximo l'stan~ San (;il pa ra pone r nu- /l\'denc-,,'ll 1 (lig'1 lj "~I'PI'l'St:Ilt;'Il'" dl'1 I'olltilil'l' rorna no..\tl'l1to amigo, ;\!.\);TILLA (;ellcral ~allt:ag-o Carn.r r,..~o. Dr. Eduanlo Posada f)nzag-a. Cornplacido e nvioles estltcho. r ar iiioso ab ruzo b ie n von ida. Coriffo vc r los s.thado San (;il. Gohen;,ulor- ":'an (; ii, At r n to a m ijro, ~IAXTILI.A ()llzag-a, 11 lie Ellero de 1907 Al pisar tierra dl' est e hello y g-enen.jso Departamento, le «nviarnos cor d ial saluda, I<;speramos te nc r cl g-usto de abrazarlo manana () pasado manana. :-Iuy ag-ra<1ecielljs POI' sus amables teleg-ramas. DEI.Jo.G.\I>O AI'OST"J1.ICO ' ;Ill'.UOlO P(ls.\J).\,S,\~TlAGO C,\\L\lU~O, :lfog-otes. 12 )o;ncl"o,it- }'}U7 Ala vez que It- doy las m{ls rx p rcsivns gracias po r la cornision qur- me el1\'it" me,'s «nt c rame nt. sat isfactorio dirigil' dvsd e l,lt~g-o mi co rrl ial saludo :l usia v (l,'sa noble ciudad. }<~spero est r c ch.i r le la mano manana. 1<:I. I)J. J.l':C',\ J)l) A I'OSTt'I(.rco ;Vtimero rro.; (;(J!Jr,"I/'lri,;// <II' (;(/Idl/'-.'-,1111 (,'il. 1~'llCr(/ 12 ell' roo>. Ojal{l pud ie ra t ri b u tarle a S. J:<:. tod as Jill';consid e raciones que me re cc y q u-. mi car iiio y buena voluntad d esean.

219 l<~nnorn b re d e estu c iu d ad v en el m io p rop io retorno efusivo saludo, - Grato me sera. vcrlo manana entre nosotros, Respe tuoso amig-o, lviantrlla ivzilllcro I.NS (;obcnwci(;jl de (,'amji. 'a» (;i1. HI/ao 14 de 1007, General Reyes, Carrco.\'adona!- Bogota. Ay er a las cinco de la tarde, a la cabeza de dosc ientos j inet es, lleg-() {l csta capital Excmo. Sr. Ragonesi. Sociedatl sangilefia csmerose atend e r dignamcnte it tan i1ustre huespcd, y pueblo recibi6 rcspetuoso-r-en plaza p rincipal-bendici6n de Represcntante del Pontffice romano. Respetuoso servidor, :\lantitla Ndmao r.ioor-uoberuacion de Galdll-San (//1, HI/em 14 dc Nuevo Tiempo--BoKota. Inmenso ha sido el cntusiasrno de los pueblos de estc Departamento al recibi r al insigne Ministro de Pio x. La socicdad de San G il patentizo una vel mas su rcligiosidad y cultura. Atento se rvidor, ::VIA~TILLA (Rt'vista Oficia! de San Gil, Enero H de 1907), LU';<:ADA DEI. SIt. DELEGADO El13 de Encro Iue d ia memorable y de g-rande cntusiasmo para la ciudad de San Gil por Ta llegada del Excmo_ Sr. Delegado Apostolico. Tanto el Ilmo. Sr. Obispo como el Sr. Cobe rnador del Departamento hab ian mandado hasta Mogotes sus representantes para prescntarle alii su saludo de bicnvenida y acornpaiia rlo en la cont iuuacion de su viaje, Sali6 el Sr. Delcgado de Mogotcs con direcci6n a Cu r itf, donde Iue dignamentc obseq uiarlo po r el Sr. ClII-a par roco, Sr. Dr. D. Aurelio B. Urrea; de allf poi- la tarde se dirigiu a. San Gil, en donde se le esperaba por momentos. EI Ilmo. Sr. Blanco, Obispo de la Diocesis, y cl Sr. DI-. Mantilla, Gobernador del Departamenfo, acornpafiados de mas de ochenta jinetes e innumerable gente de a. pie. salle ron ii. su en-

220 donde ha ie, tocr.clo C('11 o o r sol e a e ad que io eseaba, l hat d la id d l d cucntro, AI me dio dia lleg'l) il te me rse que la recepcil'lll llo se pu ra vc rificar con toda m n se por haber c airlo Ull fuerte ag uace ro ; pen) a q ucllo que por cl momento s: j uzgo un mal, vi 110il se r u n posit ivo bie-n, purque vino a aplaear la polva r cd a que I'll a h u rul a n c ia habfa en los carnellones. A pesar de esli hen(.lil~;1, oportun;lllu\'ia q uc calrno en parte el polvo, si,'mpn' a1g'ui1os j("','ih-s llq.:-aron Clwpo!l'al!-J,<, 10 q u c d io 111'r rcsu lt:«!o '1IW la e n t rad a y r e ce pc ion no se hic ic ran con todo e l or d c n, rvxpv to y sol o m- nid ad q u e Ia vnavoria d escaba. ; Last ima gtall(lc 'lui' la c u l- lura de alg-ulos j ove ues sang-ikiios no COIT,1 pa re j as COil los ad e ln n tos ma rc r ia lcs (11' q u«l'(,l1 j u st icia p u c d c San (:i1 1'11- org-lilleeers," AI p rcscutur:«: h co m it ivu,'11 la L'-;quilla lk la Calle Heal la B,IIl(1;1.l cl Ucpa rta rnc n to el,'j() ni r 1'1 h iuiuo naciona a r t e y g-listo. y pol' I'll m c dv a- 111)11se llirig-i() "I Sr. lkkg-allo (I la p\;va e n d orul c \'stft situada 1a casa 'III\' se I" t en ia preparada COil g-listo. vlq':-'lllcia v III io., 'La HaUlh 10 o l»«: q Ui,) con una ret reta.1.las 0,' ho d c la noch c. Al Ilia ~,ig-uient','isit() 1a ig-iesia parroq uial. 1'1 Asilo Ill' San Antonio. 1'1 Hospital, y,'oiti'spol1<1i,) alg-li11as visi t as. A las dos y met ia Ih, la tarde Iu c visit ado ofic.ialme nt c POI' 1'1 Ilrno. Sr. Obispo, acompaiiado d el clc ro q u e hab ia,'s,' elfa en la ciudad. E Prela<lo lc manifesto la satisfaccion q u e {I todos inundab. por su f c liz Ileg-;ula, -" lv presento L'1ho m cna j«de adhesion.cunto {l l~l!li'rsona1menk (OT1l0 ;'1la Santa Se d c, de la cual,'s dig-no I",'pt','s,'ntank; (,1 Sr. D,:kg-ado;1 su \'1'1. dio las g-r;tc:i"s a l Ilrn o. Sr. ()bispo POt' las at enciones que Sl' le habiau pndig-ado. -" <lio ;1 \.'OIH,,','I" 10 m u y g-rato que It' hab ia sirlo vvr Ia pv r fe c t a a r mon ia q u c lia b ia cnt rc el (;0- bi e r no cclesi.ist ico -" los e m ph-udos c ivi l.-s, -' la intima u n ion de l den> e n t 'e si " (on e l Pre lado. EI 1's sali() <1<: San (~il con dire ccion ;'1 Buc a ru m ang a. Sabe rnos que cl Sr. Dl'1l'g'ado ha llc v.ulo irn p r csiones mu y satisfac toria» <11.' Ius habitant cs del Dcpa rt arncuto de Galan, sid rc ci bid can vv d d ra alcg-rla y atund ido del mcjo r modo posib!e, Los ha hitantcs d e est a reg-ion se sicnten a Sll vez.lichosos POI' hab cr visto pe rsonal me nt c <11Sr. Ragonesi, q u icn POI' su ca rac t c r boridadoso y su trato af'able saul' ganarse la cst imacion <Ie cuantos tic nell cl honor de tratarle. Descarnos pa ru S. E, e l Sr. Delcsrado y para sus dig-nos cornp ific ros de via j c toda clast' dl~ fc l ic ida d es. [J.l;STR I,: I1U~:SPEll Se halla va en los u mb rales de csta c iu dud e l Exc:mo. Sr. Dclegado Apostol ico, y d cnt ro de br-eves instarites Bucaramang-a porl ra coutar como timbre de honor 1'1 de habe r

221 - - 21h - alojado por pr ime ra vez a un pe rsonaje de la alta talla \0 esclarecirnie nto del que viene a visitarnos. De)ando it un lado mult iples atenciones en la capital de la Republica y acatando la esponta nca.r cordial invitaci6n que Ie hiciera el Sr. Gobernador del Departamento, interprete fiel del noble anhelo de sus g-obernados, el Excmo. Sr. Dr. D. Francisco Ragonesi, sin tene r en cuenta entre otras muchas consirle raciones el Iar'go.r pcnoso viaje que iba {l emprender, vie ne hoy a hon ra r con su presencia los t rascend entales actos para Santander de la inaugu racion de la estatua del ilust re hijo de nuest ra capital y la apertu ra de la segunrla e x posicion industrial j' a rt istica que cste Departamento, se d ie n to de progreso, nu ha va cilado en llevar {l cabo en el presentc ajio. Bien conocida de tod os los colom lrianos cs ya la importante tigu ra moral del dig-no Rep r ese ntantc en nuestro pais del Soherano espiritual del or be, y la tar ea que sin descanso ni t rcgua.r antes sf con noble.r cristiano e mpeiio se ha irnpuesto, (Ie sccundar a nu est ros rnandatar ios en la ob ra de la t r'an q n ilidad de Colombia y d c la concor d ia en t rc sus hijos. De aq u i las multiples manifestacionesde si mpat ia y sincera acogida que sabc mos ha te nido en su t ransito : y de aquf tam bier. q ue Bucaramanga espe re con ansiedad la Ilegada de tan ilust re viaj e ro y se apr este a recibi r con j ubilo d ent ro de su se no al Repr cscntante del que es amado Soberano y como tal rcina pacfficamcntc sob re mas de t rescie n- tos millones de corazoncs. H.!'. JACI",TO HASSlr;",,\NA En la amada Colombia t uvirnos la fortuna, apenas se hubo r cstablc cido en IHR() el r einado de Ia paz en las concie ncias-e-q nr, no debc mos d uda r ser;l ete r no si como es de espe rarse cunde el e je rnplo del pr cstisrioso e ilust rado Rafac l Uribe Uribe al decla ra r que en 10 sucesivo pe rte necc ra {lun partido polit ico que respe t c la Religion Catolica. que es la de los colombianos,- de que los hijos de D. Bosco clava ran su estandarte entre nosot ros : ora los ve mos fundando talleres de ar t es r oficios para for mar ob reros de acue rdo con los ad elan tos de la civilizacion j ora hacicndo p ropias las desve nt u ras de los infor tunados Iep rosos r vivic rnlo con ellos para procu rarles alivio {lsus nccesid ad es f isicas y mor ales ; ya d ifund icndo POI' dorid cqu ie ra el Evangelic () rindiendo culto de adoracion al Cr eador-, con todo 10 cualla instituci6n salesiana se ha captado las sirnpat ias, cl respeto y las consid e raciones de Ia Nacion. A tan bcnefica asociaci6n religiosa pertenece el que viene como Secretario del Sr. Delegado Apostolico r que es Direc-

222 tor de las Ksc uelas Salesianas de Art es y Oficios en Bogota" el R. P. Jacinto Bassig-nana, {I q uien salu d a rnos cor tcsmentc y Ie d esc amos q lie 811 per rnanencia en Santander -el pueblo enarr.orado de los herocs de la virt u d, el tale nto y cl t rahajo--le sea grata. m'l \-:Il\' Aano POSADA l<:nla visit a con que hou ru hoy {I Bucal'amanga cl Exc mo. Sr. Rag-onesi 10 aco mpaiia 1,1cu rn pl ido caballero Dr. Edu<il'- do Posad a, '1uiel1 ocu pa puesto ell' huno r «nt r«los mas notables huiu b rvs dv l pals, por las rn ult iplc-s -' alt as dot cs d,' su in t e Iig-I'\1,;ia. Es I" ])1', Posada ha b il a!jog'al\(' <!<- r.conocida y bien ci m c n tarl a n'plltacit'li1, l{l.'prt.'sl'ntt'l con hrill«it Colombia en el Cong r cso.lu r irl ico '1Ut' ('11 ajio» pasac!ns H' re u uio en la capital lk Espan:l. Ih-sclt' rnu y jovv u ('l Dr. Posada ha p rvst ado ccnstuntcs (- importantes sc-rvir iox /1 la h'l'pttbli'-;l y ha dl'sl'l1lpenado con ac irr t o \' tino va r ic».. (;\rgo-.; oli,'iaks, vn t rv dills los de Conse je ro d~ Estadl' y m ir-rn b ro va rias vercs de la Call1al'a de l{epl'esentanks, <1\'la r ual ha si d o PI-,'sil!t-nt(', 1<:1Dr. Posada es e x im io lit era to Y I'(ll'ta sllgestin) y ol'igina1. Su plu ma deg-ante y [,"l'il ha producido va r ias ob ras que dl'ki~an y vnscjiau : rcsalta vnt r«(']\as 1'1prccioso lib ro en qui' nos d a las i rn p rr-s-io nc-s ell' sus via j cs POI' el Yiejo Mu rul«. Desd : hac" larg-<> t ie m po se l!('dic() al vst u d io de nucst ra histor ia nacional, y.i exito que ha ob tcn id o en est a c lase <1(' labo res cs. tan notor io, que hoy ocu pa el "ill/'ll <11' la p rcsidencia de la Acad c rnia de Historia. En a"llcio rl rl Dr. Pi-d ro M. Ibane,; ha publica do va r iox int e rcsa nt isi rnos t rubajos historicos que salva n d c-l olvicl o muchos y gn\l1des hcc hos de nucst ros ant e pasarlos. l'lto ('sas ser ias y la bo r iosas investig-aciones no han sido o!jst{lndo pa r'a q u c (,1 sag-al ingvn io del Dr. Posada se <listing-a COil,'sa nota ('spiritual y hu rno rfst ica que hace r ccor dn r a S{lelli. Echl'\'lTrla, Narv.ie», Carrasq u il la. "(mho Y t{ll1tos <l(n)s q\l\' han he c ho p rovc rbial cl spril bog-otano, 1--:1Sr, (;ener:tl 1~I'\'\'S, co noc edo r d c los ll1el'itos del Dr. Posada, k llam,) ;1,ocu pa r l'l d elicado p u c-sro de Subscc n-tario de Relacioncs Extl'riores, que d cse m pciia con intclig-l'llcia y consag rac ion c xccpc ionales. Salud a mos re-spet uosa rncnt e al Dr. Posada y I" of re ccmas g-usto',os las colu m nas de nu cst ra hoj a,

223 - 218 GElIlERAL SANTIAGO CAMARGO Es cste uno de los jllvenes de mas prestigio del partido conse rvador de Boyaca, de d ist inguida posicion social, de muy meritoria car r era militar y poritica y cspiritu cult ivado en nuest ras aulas literarias nacionales. Tom6 ar mas al servicio del Gobie rno al p rinc ipiar la ultima guerra q ue asolo al pais, y vino por primera vez a. Santander en momentos sole rnncs para su causa. como 'T'eniente Coronel p r irne r Jefe del Ba!alMIl Hoyacd, cond uciendo un pa rq ue que contribuy6 en mucho al cxitofinal rle Pa- Ioncgro, Pel eo como bravo en Lincoln y Capi/ancilos y reg-l'e80 a Bogota en el g-lorioso Ejercito q u e a mando tid (;eneral Pinzon se him el a.rbitn) de la victoria. Lueg-o, en la segtind a epoca de la c ru d a contienda, Camargo, con valor y constancia altamente porid e rados. obtuvo los mas honrosos grados militares, hasta vel' sob re sus hombros la est rclla de General de la Republica, q ue luci6 en.primera linea en la carripaiia de Padilla. como Cornandante general de una Division. Despues Iue por algun tie m po Su bsec rct ar io de Guerra, )' vuelta la Nacion al rcinado de la paz, ha dcse mpejiado en Ia actual Ad rn inist racion importantes puestos publicos, como -Gobe rnado r de Tundama, Dcpa r tarn en to que le toci)insta- Jar, y Consul en Cu razao ult irnamc ntc. 1<:1General Camargo cs decidido sostenedor de la polftica de concordia que en la hora p reserite infor ma L'1 magisterio de los part idos, y po r ello su presencia aq u f nos es hoy doblerncnte grata. Tal es uno de los g allar dos Comisionados por el Gobie r- no nacional para acornpaiiar oficial mc nte al Excrno. Sr. Ragonesi en su visita {t la Exposicion de Santander. Reciba nuestro atento saludo. DH. meul :!. S. PEREZ Hace parte del cortejo del Excmo. Sr. Ragonesi y vie ne de rep rese ntanre del Departamento de 'I'undarna en la ex-.posici6n. Es oriundo de Cor rales, e him SlIS p r irne ros est udios en el Seminario conciliar rle 'T'u nja, siendo Rector el Dr. Manuel Maria Camargo, y los supc r ior es, hasta su ord e nacion, en el mismo establcci m ie uto, bajo la d ire ccion de los Padres Lazar istas. Estud iante eje mpla r, puso de manifiesto desd e el p r incipio sus singulares aptitudes para la oratoria sag rad a, con-

224 d icion pr im e ru entre las rn u c has que 10 d istingu ie ron como candidate de lirn pi«vocacion para 1'1 sace rrlocio. Recibio la invest id u ra del Lcvita del Ilmo. Sr. Perilla. de nol.ilfsi ma rne moria, y poco d esp ues, en consid e r acion a sus vi r tudcs " ampjias dotes, Iue nomb rad o Cura p{iitoco de Santa Hos,'_ '<Ie Vitr-r bo, impor tantc.iudad en \I\\(' tieno asiento la c.ipit al (I" T'u n du m a. Sea bic nvcnido e l ilust ruclo rcjln'sl'ntantt' del D.-part a- m en to vcc ino, {I q u ie n saludamos cor d ial y I'CspL'tuosamentc. i lit I'll:,k 1I11cara,llallg';', Ell,'ru 17 de l':oi), Ct"C"1II0S '[til' Bucaramang-a no hahfa prcseuciado desde su Fu ud acion una fiesta C0ll10 la de ant ie r. FaItt) lu jo, falt{l porn pa, fallo la vspl c ncl idcz d c la opu le ncia que g-usta de exhibirsc, pc ro h u ho alg'o '[Ut' suplio POI' todo eso y que Ileno mas los co razonvs.«(' to.los: la t'xp]osit'1\1 <It'! si-ntimiento JlUblico en 10 que t ivn«d e m,!.s fntimo y af'e ct uoso al acog c r en cl se no dea socicrln d al Rql!'l'sentant" d e cst' podr- r secular it cuyo blando y uuo ('st(111 so rn e t id os t rvsc icntos m illoru-s (I..' cr-e yent es. Sab ias e <JUL' :a e n t rarln d e l Sr. :R.ag'one~i y sus COI11- paiie ros no so r ia antes (It- las cinco de la tarde. y sin embargo dcsde las pr irue ras hora,.; del d ia e l publico co mc nzo a afluir ;1 l.u- calles til' t r.insito. lj \1(' los vecinos adornaban con a rcos, ban.l e ras. f.'stolll's. de. A las elos de la tarde to<la circulacion fw h izo im posib lc: tal ('I"a 1aal-:'lom~Taci/lIl <1,_'g'ente:-; il pie, Un incidl'nk Ih'nosisill1o estu vo (I p u n to de t r ansfo r- mar la li,'s!;1 rn tnlg-l'di;l. Al salir al cnc ucn t ro y e n las afu eras de la pnl)lal~i/lil, r c r ca til' la q u in ta ffl~/lijlajlii. l'1 (aballo (1\It' 1110nta1>a l'1 Sr. l;l:lll'ral l't:lla d io un t rasp ic, yenclose (11' b ruc es y tall f n e r t cm c n te q u c- t,1 Sr. (;~:n('rai cayt; Icjos, IIth':1 aba jo. y Sl' vio en e l rics~o mayor ann d(' SCI' aplast.ulo PO," e l caballo, 1-:1Sr. Cl'lleral l 'e iia sufr io a I11ft:-; (1t, ligcra~; l ast iruad u ras una in t ensa con mociou cl'l"e1>ral que d u raut c var ios minutes 10 rnant uvo en u n cstarl o eli' corn plc t a inco nsc ie n c ia, ak;ti1zando it p rocl u ci r alar mu en los medicos qlle Ie asist iu n. Poco fi poco sc fui' rvcob ra ndo, y q u ie ncs 1< ;II'ollIpanaball p u d ic rort se,t:'\lir al e ncu cut ro d e l SL Ik)t'g-ad,), ql1"llan(io,,] (;t:neral \'t'iia L'Il una casita a -or illus tk la via, rotl cucl o va d c lo!-' su \'US v rvc ib iv mlo la ('ar'iiiosa hosp it alid a.d de los hue nos moi:atlo;'l'!-'. I':n cl sitio dv Lo ffrrrrll/llra la cabalg at a, hon rosam ent e e ncabe zada Plll' e l H. 1', Mario Vulcnzu c la, ~e d ct u vo (I espe rar a, Sr. Ddeg-ado. Est., l1eg-(, ill fill con sus ('(linpanl'-

225 220.. ros de viaje y varies vecinos de Florida, y allf nos Iue d ado conocc r-lc, est rechar su mano y recibir su prirnera bendicion, que 61 irnpart.ia con la sonr isa en los labios v el placer a no dudarlo en su corazon, al verse obj eto de tales hornenajes, t ributados a su autoridad no menos que a sus mer-itos pe rsonales. Rodeado de mas de t rescieritos j ine tes, de varios jovenes ciclistas y de millares de personas a pie, ent ro el Sr. Deleg-ado {L la ciudad. Saberlores del accidcnte ocu rr ido al SI". General Pciia y de l lugar en que este se encontraba, tanto el Excmo. SI". Ragonesi como sus co m pafie ros tuvieron la delicada galanterfa de d esrnontarse y llcgar-se a saludar lo. EI General estaba y a bien, pero g-uardando absolu to re poso por p rcscr-ipcion de los medicos. La cornitiva lieg() a las calles principales, y en ellas el gentfo e no r m e, e l son de las hand as marciales, los silbatos de los talle r cs movidos por el vapor, e l tla mcar de las band eras, los rcpiq ues de ca mpana, las VOCes de manrlo de los Jc Ics de la Iue rza publica t r ibutando los horio rcs d ebidos a un Minist ro d iplornat ico de p rime ra clasc, y al par con eso el ai re de stttisfacci,jn y de r e- gocijo en tod os los se m hlan tes, las vistosas d e co raciones de pu e r tas y ve n ta nas par cuyas re jas saltaban como corr ientes de luz las mi rad as de las hcr-rnosas, la anhclant«cu riosidad de todos POI" conoce r y prese n ta r el horne naje de su cntusiasmo y d e su af'ecto al Representante del Pad re y Pastor de la c r ist ian da d, tod as las al rnas confu nd id as en una sola aspi raciou, todos los corazones dorninados POI" un solo sent irnien to, el es1h:daculo de antler f u c, como d ec ia mos al principio, cspcc tacu lo unico q ue nu est ros an te pasados no vie ron y que d u d a rnos mucho puedan ve r nuest ros sucesores. <j Que he r mosas son tus tie ndas, oh Israel, y q uv mugnificos tus pabellones!» pod rfarnos deci r nosot ros ante la hermosura de Ia ovacion de an t ie r ; dado que esas t ie rulas, csos pabe llom-s Iue ron ;1(IUl la f(' since ra que al ic nt a en todos los esp ir it us, el arnor q ue impulsa tod as las vol u n t ad e-s para r e n d ir 1.'1 t ributo de su I'CSPl'to ala e rninent c personalidad que hall(lndose rcvcst id a de alt isirna autor id ad oficial, ha sido al propio t ie mpo, por la d ulzu ra y ame nid ad de sus maue ras, po r SLI g-t'neroso alt ruismo, por su ilust racion y su virt ud y po r S\I aruo r a Colombia, factor impor tantfsi mo de la paz, cl p rog reso y la concord ia nacionales, Sea esta la opo rt u niclad dt' dar nuest ros pa rabie ncs a las autoridades. it los pa r t ic ula r cs. it los rniernb ros de la colonia italiana, it torlos, en fin, los (IUe secundaron can buena volu ntad la iniciat iva oticial pa ra llegar al bu en rcsultado a que Ilcga ron los fvst ejos de a nt ie r: y sea tam bien la de congratularnos por el restab lcci miento completo de la salud del Sr. General Peiia, po r cu ya conse rvacion nos inte resamos todos los sautande reanos que anhelamos la d u rabilidad y

226 im pu {t tes rida atianzaruiento (k estas epocas de calma, tie conf ratcr-nidad y de lso las ar y {t la industria en la tierra que de J111eS:I'O nacimiento. i I.a Pa: de Buca ra-n auga. 1'1,!to Ellero d<: l'j()/j. VI,:L.\J),\ I.IHICO LITI':I<AI-:J\ La an u n c iarl a e n car t clones -" cll'cli,',l<la po r la Soc ic dad Pedag-.')!~ica dl' San t and c r al EXl'Il111. Sr. Dehogado Apostol i- co y ;1 los 1~l'lll','s,'ntan!L's d e l (;ubil'rnll nacional, de IllS lkpa r t a m.n t os \' de las Provincias, st' \'l'rilicu el sa!jado 2(, del pasado "11 "I sa1"111 d,' l.. Asa m l.h-a. Ad~'lfl;ls de los il ust res pe rsonaj cs ;l q uic nvs lu, dedicac!a,,~oilcl1r rie ron fi e-l la cl Sr. Gob e r nadur. sus di~'nos Sec rvt a r ius v un se h-rto Y num e roso,'oncurs\) de lll-r~onas d ist imru ida«dl,' est a soci~dad. T'o ma ron pa r t e act iva en \'1 c u rn pl im ie n to del p rog rarna las Sr itas, Sofia Pe raltu, h'osalina Ma r t iucz. Elena Mutis, Tlila Arenas, Julia Sarmiento I' Enwstina Va rg as : los Dr cs. Manue-l 1':nriql1l' PI1 va n a '\' (;rl'g-ol'io Consul'g-I'a; D. Jos~ Vla r ia C,u'da RoO I>'-Aur~,iill Mu r t iru-x ;\llltis v D. Luis Emilio Du r.iu, D. Alcj a ud ro Vi llalobos, D. \1i'g-u,-I Santos, D. Ralll Ma r tfnr-z v la harnl a de mtlsica d cl 1J(/1(/11ri1J /' ill' In I'an tcrill, ' Cn::mm; que toriox v cada uno ck ](,1';1';~'ill)I'es mvnciona- {los est u vie ron a la altul:a dl' su rl eher \ con tr ibu ve ron, cu{ti mas cual mcnos, " d a r rcul ce {l la fi,'sta y ;1.ace ntua r la justa fama d c q uc g'01.<l Ia So~'il'dad Pl'dag-ug-ica; pen> dcbe mos hac e r,'>i1stal" '1U" {l nosljtros nos 1Ll1l1l'. vspcc ia.l rn e n te la at e nr ior la l',jilfl'l'i'ill,ia sohl'l' Fdllrrlri..;1/ r' /It:~-/(,I/(, d ictadu po r e l Sr. Pr e sid c nt c d\' la Soci,'dad. I J. JOSI~ \Iarla (~al'- cia H. /:11 d'l'do obsc r v.imos cn db ID,:!oelo en el dvsa r ro luj» d,' arg:ulil,'nt;,,-j"'i1, -ol t u ra <it' «st i!o v lvctu ru Cf)- ITl'ct;~. :\u l\udamos q u c ('sk trabajo Sl' plli>licar;'l ell ei peric)(li,'o q u e si rve dl' c'jl'gallo {l la Sor icd ad, Y q u e su h-ct u- ra hab ru ell' rat itica r nuvst ra h u m ild o o p in iun. ; V'a y a n u cst ra \'01. de al icn t o para la Socicd ad Pec!ag-cJgic;l y para tod os los ar t istas hom b res lk le t ras que S('CUIldaron SIS Pl'opositos, yo oj ala que su l'co pc r d u re largo t ie rn po III d al nia d el I<:xcmo. Sr. Dl'l",~'adll Apost ol ico, Represe n to' n t,,. d l' S. S. PIli"! IJ'" III /\,: d,' nllc;l1'a""",g;\,-;de Jo'chrl'J'(1 <1 1'1(1/', fw:-;ij!c)'"ln DI-: n.v N J>I';IU EI u ia 2H ultimo dijo misa l'll San Lau r eano e l ExcnlO. Sr. Dde,.{'lfl0 Apost olico,,i la cual asisti"i'on las autor idad cs civiles v la f u e rza publica vest ida de gala. l 'asada la misa el Sr. Dl'fl'~ado be n d ijo la n u e va yo lujosa ha nd c rn e n via d a Plll"

227 _. el Gobierno nacional para el BatallOll 4(Jde 11l.fanteria, siendo madrinas de la bendicion las muy respetables matronas Sras. DiI- F'rancisca de Pefia Solano Y D" Teodosia de Hernandez, y padrinos los Sres, Genera.les Peiia y Hernandez. (De La Paz de Bucar arnang a, S de Febrero de 19(7). PLANTACl(JN D1'; UN A.RBOL El d ia 28 de "~nero alcg re y he r mosfsirno concurso turbaba gratamente la melancolfa del Parque Romero: a111hablase cong rcgado en tor no de Monseiior Ragonesi 10 mas granado de nucst ra socicd ad, para cor responder a una rnanifestacion conmovedora y sirnpatica con que e1 eximio visitante iha a d espe d irse de esta capital. Nu est ras d amas, lujosamente ataviadas y acornpaiiadas por gran nurne ro de caballeros, formaron un cf rcu lo, dentro del cual se hallaba Monseiior, af'a ble y sonriente como sie mpr e. despertando las simpatfas de cuantos en esos momentos 10 virnos inclinarse hacia el suelo y plantar con sus propias manos el arbol con cl cual deseaba conse rva.r entre n080tr08 memoria inolvidable de su visita, Esc arbol sim bolizara manana no tan solo el reconocimiento del ilust re diplornatico por 1a deferente acogida que los santan dc re anos Ie han heche, sino tarnbien los esf ue rzos nobles y patr ioticos de un pueblo que desea de mostrar su anhclo de progreso, honrando a. sus heroes y estirnulando torneos tan civilizado res como 1a Exposicion, y junto con el norn b re del Excmo. Sr. Delegado recorrlaran las gene raciones que han de sucedcrnos el de los gobernantes que los inic iaron y realizaron gloriosamentc. La concurrencia d esfilo en scg u id a hacia la casa de Ia Asarnblca, en donde u n gtupo de jl)venes dist inguidos la obsequi6 en norn b re del Gobier no con un su n tuoso lunch. Uno de nuest ros colaborado rcs prcpa ra lin t rabajo que proximarnente publicar e mos, ace rca de la sigriificacion moral de la fiesta que rapi dament e bosq ue j arnos. t La Pa: de Bucararnang-a, Febrero 7 de 1'1(7). HOMENAJI'; DEL CONSEJO MUNICIPAL DE RUCAI<A~IAr-;GA AL EXC~W. SR. D! ;LEGADO Repliblica de Colontbia-> Departamento de.",tl1ltandcr-./ 'residcucia de! Couseio muuicip ai->.vtlmero 3- Hucaramanga, /<"-lzero If) de If)07. Excmo. Sr. Dr. Francisco Ragonesl, Deleg ado Apostol ico y Arzobispo de Mira-E. L. C. Tengo el honor de transcribir as. K la siguiente proposicion aprobada unanimernente por la Co rporacion que presido:

228 ificaj os, y c J!:I Concejo de Bu caramanga regist ra en sus analcs' como suceso Fausto v t rascend e ntal la visita con que ha honrado it la capital de 'Santander ei Excrno. Sr. 1)1". Francisco- Ragonesi, Nuncio Apostolico y Arzobispo de Mira, y haciendose eco del sentimiento general en csta c iu d ad, tributa al ilust re hucspcd la ex p rcsi on cordial de p rof u rid o r cspcto, sinccra g rat it u d y Fervie ntc ad mi racion, {t la \TZ que haec votes por-q uc sea feliz y larga SlI p c r-mancncia entre los santand e reanos. L,I nota de est ilo sera p resc n tad a al Excmo. Sr. Delega<lo po r los mie mbros (Ie la Cor porac ion que la Presidenci". <1esig-lH'.:» Lon sc nt im icntus de la m:ls d ist ingu id a consi d c rac ion me suscr-ibo <1,'~, 1<;. rcspe t uoso sc rvid or, AeRI';UO MUTLS ]llicarama lig':t, J<~nero20 de ly07.. AI Sr. Dr. D. Au r. lio Mut i..prc..;i,lente dc l Conrn-jo de llucaraman- ~;-t.. E. L. C. Sr. Pre siclcntc : La mcn t 0 'j uv po r no posc e r vu cst ra hermosa lcng ua cast e llana yo no.iue d a e xprvsa.r e n la mcd ida (h~ mis d escos los profundos ser.t imie ntos de mi alma a ust erl y it esa noble cor'por ac ion : cor toclo, no p u cclo IlIL'nOS de d ccir t rcs scncilias palab ras qul', b rot a n espont.incnme ntc del fondo de mi cor azon. En primer lugu r mis palnb ras son de vivo agradccimiento: la p roposicion qu e esa alta co rpo racion ha u nanirncmente ap robarlo v la mag nffi ca,lcog-ida cuu que me habeis ag rudablc rncn te sor p r cncl irlo, han g-rabado ell mi alma las mas dukes imp rcsioncs de inolvi.lablc r eco rrlacion : en seg-un(lolugar. pa la b ras d e since r a f"lil~itaci{1i1 por el vsp ir it u de progreso Y espcciaunvnt c por la fl' ca t ol ica (juc aq uf debido al celo v la bor iosid ad d el cle ro, ud rnira hlr me ntc florcce y f'r uct palabras en tin <Ie vot d,'sl'us po r la p rosperidad sie mpre rn.is p uj a n t e (h' esta nobl.- y cspirit nal ciurlad y de este im port au te Ue par tarncnto. ~I. es grato r.p rovechar esta circunstancia para mani- Iestar a usted m i alto ap rc cio y particular car ijio con que me hon ro susc r ih r m e,.;. l'i-(ascisco.\rzohis]lo <1 Mi r a, 1le1<:g-a<1n Aposto li eo, \,!';LAl>A r.isrco I.IT ' :I-1I\I<IA Todos se ponen en pic si mul ta nearncnt e, movidos por sentimiento de fntimo rcspeto, cual ('1 catolico labrador se inc1ina f'ervoroso al toque de oracion : ('I himno nacionaj

229 brota en borbotones arrnoniosos e inunda el salon de ondas dulcernente sugcstivas : como visiones deslu rnb radoras pasan por la fantasfa en confuso tropel, un ignoto ternpano de tierra, su conq uista, la lucha magna, y la Libe r tad.r la Patria, rcclinadas sob re la cncanecida cor-d ille ra de los Andes, cuyas ent raiias de fuego amcnazan fu nd ir el m u ndo, v que habran d e baiiar lo con su caudal de lavas de oro. - La Sociedad Pedago/rim de.santander ha invitado a una velada Hrico literaria que dcd ica al Exc mo. Sr. Delegado Apoatolico Monsejior Ragonesi, y it los rep resontantes de la Nacion, los Depa rtarncntos y las Provincial' santand e reanas, con motivo de la inauguraci6n de la estatua del bizar ro General Custodio Garda Rovira y la apertura de la c xposicion industrial y artfstica, POl' eso se hallan allf reuuidos tan ilustres huespedcs y tan se1ecta concurrencia. Sob re las cabezas fulguran nu me rosos bombillos con sus erisor tijados hilos de oro ard iendo, que dejan en d escubier to los si mbolicos y opor t u nos atavfos del local. Los gallanletes tricolores atados a las colu m nas parecen llamaradas que inutilmente, se e mpcjian en marchitar esc almacigo de bellcza y si m pat ia que se mueve entre gasas, flores y luz, Al frente, en dos alas, -cstan los micrnbros de la Sociedad, mod estos y silenciosos lidiadores de la e d ucacion. Su labor carece de est rep ito y de pornpas, pe ro lle na el porvenir de espe ranzas. * *,'Ad J!/vrilllJ/: Desd e los pr irne ros acord es ell' t:'sta sinfonia, crencion del 81'. A. Villalobos, sc ad vier t e n la rnajestad y r iq ueza de la inspiraci6n que presidio S\I labor ioso desarrollo, el genio que pa1pita en ella can alas d e condor americana, )' la bella originalidad (IUl' se mu e ve en todas sus par-tes con esa candorosa si rnpat ia del que t imidarnentc eosaya sus ene rg ias, EI adagio. cortado en p rescncia del insig-- ne maestro Rossini, tiene la d esrnayad a rna nse du m b rc del oceano, yen SI1 se no guar da como cste la pavorosa t empestad. Se mueve con dificultad, y sus disonancias ca idas de 10 alto generan el angustioso escalofrfo <5 la apatica d esolacion. Los a/legjos, br iosos, tu rgentes, inesperados, desgar ran la pesada atmosfera de que se desp re nden y umaga n inconstuntcs se ried ad de cnojado amor j.y it veces se apagan, se ale jan, y tr iscadores resu rgcn en dorad a lejan ia que en breve obscu rcce cl melancolico andante, Vie ne el ocaso con sus celaj es, con sus parpadeos... La pieza es sost enida, de ideas f rancas, de f rase e xube rarit e. J<:I conju nto g-oza de ar rogancia varonil. EI 51". Dr. Manuel gnrique Puyana en la tribuna dedica la sesion con e xquisita cortesia en nombre de la Sociedad, y luego en discurso de f rase galana y atildado estilo ensejia al auditorio los p ropositos de aq uella, la provechosa *

230 pcdas q u c chocar icarncnt con n'tkio~ c n laho r.u mplida va, "I Iavorabl.., conccpto lie la pr.. -nsa, vl g-enltll~o concurso de la J11ujL'r vn ln,'<1\1ca,'i(~li co r r c c t a- mente iuf u nd id a. 'T'odo.. -sto 10 <ll'ja o ir cu t rv c ur h iclu-os <II.' y cacu azllk,,: afilig rauados q u o t c r m ina n <.'IJl1 explosive» jw Jl'Tfollo~ 11;;;11 1I iv n [os art ist c rnorl e lados. EI ptthii,'o!o n','ollll'ens/, agtallel'i<1o l'oil n u t ri dos uplausos. j Nuevas sen-.aciones y l11{ls vivas aun : ; Los ojos se haccn luz! F'r'otc <I..se da y alien to halsa rn ico s,' espan:e a l levanta rse Ia Sr it a. IF' Sofla Peralta. para sc r cond u c ida poicl Sr. Dr. Pu yaua al \'s,'\'nario. Ya l'st;'l en (.:.\ cspc r a S,' suspendan los aplausos,.,. :\las c-l p ubl ico la con u- rn p la (. insiste en aplaudda,.,. EI anc ho pccho S',' dibb v it los ca r m incos lubios aso ma una r u bia pocsfa, / [croitra tara 1111 pocnuc, de Paeho Valencia. Con voz a mo rosa mc n t c t u rbad a {l manera de arrullo 0 ensayos d.. ~goi-jeo, rccita con inocv n- cia las esrnaltadas est rofas en que cl poet a hac e <I.., e lla su p ropio ideal. EI»ublico d csea q u e la poe-ria no a.. 'a!)\': la hc roi na q urd a tlotundo en me d io de la m pos <1t' 111" celesk cu al blanca. so11,i(i a \'isiun c nc an t ncl ora. Nducaritill / h/~it'j'c, Valiosisi mo lingote <I.. : oru cs csta conf'e rcncia. Carnpean en ella la p rofu ndi da d 11(,1 est u d io, la cor re ccion delle nguaj e, la hcr rnosu ra h,l.bilmente d ilu id a en todas sus par:es; la consist e nc ia y la cspontaneidad adrnirable mcntc combinadas dan {l la cxposicion {l modo de pulimento con l. u c brilla y at rae Iue r tcrne n te. Todos sus conceptos son pilast ras de blanco rnar mol q ue resiste n a t raves de los tiernpos conse rvanclo la r iq ucza d e su material. Hecibi(l especial Iclicitacion lie Monsciior Ragonesi. Ala r eposada rnajvst ad d c la confc rrncia del Sr. Jos': ::\1. (~arcfa H. siple e1,,, CZ'lllJ... de Enrique Alva rez Henao. rccitado por cl 'Jr. (~regorio Consueg ra. Apenas van u nos pecos ve rsos y yael p ubl ico HI.' e mociona, He cau t iva. I<:n 1.'1 lllrt,h absol u to silcnc io St' <!l.'sgtanan las dulccs, d ia mant inas est rof'as cornu lagt'imas q u.. ' ru edan pol' palidas me j illas, Oid : (i Oh hicd ru! ttl me c nt r ist cccs : Ariigu del ce ment e r io. Y (. no se po r que m istv r io Allf naccs v alii c rvvcs. Hr-rmana (il.' los cip rcses, Sus must ias co pas a lcunzas Y ml'1anct',lic<t avanzns Pe-r 1.'1 t rorico y po r "I II1lt ro, Ct:11 l'] color v er d c O!Js.. 'Ut'O l h- las m u c r tus espt'!';ul"'ts.» I:=;

231 A manera de musica irnitativa la voz del Dr. Consuegra se modulaba dando a la composici6n toda Ja bclleza sentimental que ella encierra. No bien acaba, la V07. autorizada y respetable de uno de esos hombres qu e!lamamos sa bios anticipo su aplauso al torrentoso de la concurrencia. Quien asf dcclarna g"uarda en el coraz6n cl t eso ro de un pacta. Aun llevan la falda corta.y van encendidas en rubor. Facilrncntc se distingue en ellas su porte estu d iantil j perteneccn a ese cuadro de niiias que aiio tras aiio obtienen el g-ran pre mio, la distincion honrosa. No hableis de belleza. Ofdlas : l<~laria de HI JU1'alllenlo de Gaztarnbide y cl duo de La Africana de Caballero fueron can tados por las Sritas. Rosalina Martfnez, T'ula Arenas, Elena Mutis, }<;rnestina Vargas y Julia Sarmiento. Tal parccc que c!las aspiran al honroso t itulo de artistas. EI duo, melifluo y ar robador. sal ia de sus g argantas lfmpido y!leno de ter nu ra y se alzaba sostenido POI' las vib radoras notas del piano y las dormidas del violin, como una doliente suplica. Este nurncro, dig-no de fig-ural' en un concierto, fue aplaud ido espccialmente con sonrisas y palrnas errtusiastas por e1 Excmo. Sr. Delcgado y sus cornpaiicros. Los Sres. Santos (Miguel) y Martfnez (Raul), con el aplomo y habilidad artfstica que los d istingue, colaboraron eficazmente {t rcalzar el exito. El ultimo nurne ro fue una verdadera d.faga de arrnonfa que cause!luvia de flcrcs, ale teo de son r isas, torriasol de auroras....-i Due es decadente? Sf, pero de los her mosamente decadentes. l. Porq ue aplaudfs, si n6? NochcbucnCl es una juguetona poesia declamada POl' su autor con esa singular y apasionada modulaci6n que el acostumbra. Martinez Mutis es de esos poetas que en cada palabra encierran un deleite, en cada estrofa una encantadora sorpresa cuyo misterioso resorte solo salta a 1a presi6n del talento y del genio. * * * Son las d iez. La sesion ha terminado. La marcha alernana da la voz de partida, que inician el Sr. Gobernador y Monseiior Ragonesi, no sin haber felicitado muy calurosamente a los miem bros de la Sociedad Pedagogica por el br i- llante exito alcanzado. (La Paz de Bucar arnaug a, Febrero 10 de 1907).

232 Sr. Gobe rnador Buca r ama nz a. 10: DEI.F:GADO 1'::, V1AJE Pnmplon a, 1'.' de F'ebrcro,1e 1907 Llcgarnos pl riectame nt c, recor duudo e xq uisi tas atcnciones de listed, ~;t familia y d cmas am igos. Saluda mos car i- no!iamente a todos. 1>1-:I.E(; \1)0 ApOS'I'l)U('O" POSADA i l,u /'<1:: de BIll'" 'alllallga, Fehr"ro 10 de 19(7). EL EXC~IO. SI-I. DEI.EGAJ)O APOi>T6r.rco EI d ia ultimo de Ene ro entro {l esta poblacion, a las cinco de la tarde, el Excmo. Sr. Dclegado, ell med io de un cortcjo de caballe ~ osq lie hace honor a la ciu dad y por entre una muchcc.u more compacta, de miles, rcspctuosa y cntusiasta. Mu y corrten tos estarnos de la aleg re acogida y d el cntusiasmo, (~lie rayaron en los Hrnites del Ircnesf. La decoracion de 1J. calle de triunfo poi' donde penetr6 el Excmo. huesped rncrcce se r descrita poi' pluma de artista. Una exhibicion tan gtanada de la respetable sociedad pamplonesa como la <1('1 ~1 de Enero apenas tiene puntos de comparacion con la que esta misma sociedad hizo el memorable dfa del rt-to rno {t Pamplona de nuestro limo. Pr clado, cuando volvia del dest icr ro. Nada tan entusiasta ni tan 01'- denado como cst recibirniento, hecho antes al Pr elado proscr-ito y hoy al I';):cmo. Representantc de la Santa Sede. j Cuanto puede el nervio catolico cuarido se ensancha en los oleajes de una t r iun f'al bicnvcnida ~ J<;lpueblo parnplones espe raba ;l un Principe connotado de la je rar-qu ia catolicn, cond ecorado adcrnas can la aureola cor respondicnte al Representante de Pfo x, augusta je ra.rca de la cr ist iandarl, y no se engaiio ni en la proporcion de los p repa r at ivos, ni en la proporcion de sus manifestaciones, ni er Ja alteza del eg regio huesperl.. RClIdilosea el que t-icne en el uombrc del Sciior!. j C6mo ve iamos todos la onda de consuelo IIue confertarfa a nuestro Prclado en el lecho del dolor! i Como t raduciamos en las int enciones del Excmo. huespe d el testimonio de honor y de cavijio discer nido a nuestro Pastor, como mensaje de triunfo al incansable y antiguo luchador : Y en verdad que asf 10 fue. T'odos los hijos de Monscjior Parra, congregados en s.u lecho d e dolor y can los ojos Ilcnos de lagrimas y el coraz(~n repleto de g-ratitu<l no pud ia mos dark

233 22S un testimonio mas solemn!' d e ad lu-sion y de alabanza que el <lue ha rccibirlo del Rcprcseutante de la Santa Sed e con s6lo la visita particular y carifiosa q u e a caba d(' realizarsc. i Animo!,. Sierra OllCIlO )' jid. (:litra en r! J.rozo dctn,r.,'ci/or.' Estas palub ras cran le id as de todos en cl fondo invisible de las alrnas, y por l'so los co razoncs toclos saltaron de e n tusiasmo y se Iund icron en el crisol de la alcg ria. fdscribamos en la ultima p{lg-ina del lib ro de nuest ros r ecucrrlos esta gloriusa c/cmcridr«y refr-esq ucmosla de vez en cuando can la Irugancia de la g rat itu d, (ff"jlit'lia}l' Caft5Ii,'o ruiuiero S) HOIlIENAJE DEL IDIO. Y HEVD:lIO. HI<. DH. D. IGNACIO ANTONIO PAHRA Y EL Vl;;NEHABLE CAPiTULO DE LA SANTA IGLESIA CATJo:DJ<AL AL EXCMO. SR. FJ<ANCISCO RAGONESI, DELEGADO APOSTOLICO Dedicatoria, DE S. s. pio x j Cuantas gratisi mas imp rcsion es ha d ejado el Excrno, Sr. Delegado en su visita.1. Santander! Los Gobie rnos civil y eclesiast ico, las autor idades supcr iorcs Y subalte r nas, las entidades mayores y mcnor cs, los gremios elcvados y humildes, las ciudarles y los pueblos han recibido en abundancia las bendiciones fecundas que S. :K ha den-amado con tanto cariiio como generosidad. Torlo a su paso se ha conmovido en ondas bullerrtes de entusiasmo y de alegrfa cr istiana; todo ha q uedado p rofundarncnte satu rado con las ovaciones espontaneas de universal sirnpat ia y con los fecundos brotes de la inteligencia y del coraztin, d esar rollados gallardarncnte para cumplimentar como se 10 merece al egregio Arzobisqo de Mira, Representante de la mas alta d ig nid ad de la tierra, del inmortal Pio x. I<~IExcrno. Sr. Dclcgado ha tenido que conve nce rse de la fir meza de nuest ra fe catolica, que es antorcha briliante y pod erosa que ilumina los cerebros y cnar dcce los cor'azones de los santandereanos; y ha debido vel'. con la clar idad de su e ntend lmicnto, la fecunda labor del cle ro santandcreano, presid ida po r su Ilmo. y Revdrno. Pr-clado, en maut e- ner viva y fulgurante la doble antorcha de la fe y la pietl ad cristianas en la generalidad de los ficles. i Que glorioso ce r- tamen de sentimientos clcvados y de si m pat ias c r istianas han dado las cornar cas de Santander! Bcnd igumos a Dios po r tan Ielices t riu nfos de nuest ra santa f'c, y p id amosle q u e los Iccundc bajo el manto pol irn it a de los fe lices augu rios. dcsg ranados di-l corazon y de los labios de Monse iior Ragonesi.

234 S. S. PIO x, pa ra est abh-cc r la a r mo nia cnt r«1a Ig lesiu y e l Estado, dt'sig'nl) co mo Ixepn'sl'ntante dl' la Santa Scd c al ilust re Dl'1eg-a(lo q tu- hoy rcsid««n Colo rn b ia \ que tan bien ha sabi d o int c r p r e t a r los srn t im ic ntos dt.' a mo r q ue S, S. d isp e nsa a Colombia. Para hace r palpable tan especial favor e1ig-io a Monseiior Ragonesi, Pr-e lado eminente por sus vir-tudes, su ce.ract e r y su cie ncia, y u nificado en las ideas de concordia Ieliznentc im plant ad as po r el Excmo, General Rcyes y secun.ladas tambicn can vigor por d <1ignlsimo Arzobispo de Mi r.i. Como una rn t esr ra (It--sus clcvarlos scnt irnientos en fa- \01' de la reg-i6n santand e reana ace pt o la invitaci6n que le hicie ra el Gobie ruo de este Departamento para concurrir al ce rtamcn ind ust ral y artfstico q u e sc inaug u ro en Bucaramanga el 20 del prcsente, en honor al proce r de 1a Irid ependencia General Custodio Garcia l-?ovira, y con tal mot ivo, despues de habc r rcalzado con Sll presencia los fcst ejos civilizadores de 1a c xposicion, nos hon rar-a can SlI,isita en los pr imc ros Mas del ent rnnt e meso Para cor respond e r d ig narnent e it est c honor d cbe rnos recibirlo con tod as las d e rnost racioncs d c af ecto y si rn patfa de que es ca.paz cl pueblo cucu tejio, sie rnp rc listo it discernil' los rn e re cidos honores a sus ilust rus huespedes. Si en Bucara manga concu rr ieron mas ell.' 10,000 personas a la recepcion de Monsefior Rar-onesi, y si sc lc t ribu taron todos 10" honores de su d igu idud, t. ponilh: Cucuta no ha de dejar igual nota de elocuencia. t r ad ucid a en rcspeto, sumision v cn tusiasrno hacia cl d ig no Rcp resc ntant e del Vaticano, cuya visit a serit de incalcu lables berieficios, para csta ciudad? EI atcn d e ra a nuest ras ncccsidad es como a moroso Pastor, Iacultado como esta por S. S. para clio. Hasta hoy he mos recibido los siguicntcs telcg-ramas en que nos anuncian la para nosot ros g-rata nueva. Prciecto- Cucut a, Bucaramauga, If! (le Enel'O de 1907 Ay er tarde rue recibido esplcnd idarnerite Sr. De leg'ado, acompaiiado por rcpr esentantcs nacionales a la exposicion. Mas die? mil personas ocuparon las calles de la entrada a la ciu dad, Servidor, pj';na SOLANO Excmo, De leg ado Apostol ico llllcaraman/;a. San.losri, Eller'o 18 de 1907 En nornb re de toda la Provincia p resento a V. E. respet uoso saludo de bicnvcnida a est e Departamento. Deseole

235 as. E. complete bienestar, y os pido nos impartais vuestra bendici6n como hijos sumisos de la Iglesia r obedientes admiradores de S. S. El Prefecto, VICENTE VILLAlIIIZAR J. Refnlblica de (.'olombia- Tclegra./os uacionalcs-r- Bum ramanga, IS de Eucro de I90S. Sr. Pr efecto- Cucuta, Sumamente agradecido por su atento teleg rarna. Retorno cordial saludo y envfo especial bendici6n a usted y a toda esa nobilfsirna Provincia. DEr.EGADO Al'OSTOLICO Cucuta, Erie ro 20 de 1907 Excmo. Sr. Deleg ado-c-bucaramang a. Cucuteiios saludan reverentes V. l<:. l. Honrareislos visita? Saludoos. B:LfAS CALDEH6N. Preabft ero Bucararnang a, 22 de Ellcro de 1<J07 P'resbftero El(as Ca ldcron, Muy agradecido por fill telegrama. Retorno cordial saludo y Ielig reses, enviando especial bcnd ic ion. DEr.EGADO.t\POSTOLICO Bucar amaug a, 2-l de Ellcro de 1')(}7 EI Traoajo, Monseiior Ragoriesi resuelto visitar esa region por la eual ticnc d.efe rentes sirnpat.ias. l<:star t al1 tfines primera semana F'ebr'cro. Suntuosa fiesta inaugu racion estatua pn)- eel' Garda Rovira. Exposici6n magnifica. Pueblo entusiasta rcpitc cada instante farnoso lema Gobic rno (~ene ral Reyes: paz j' traba]o, LUIS l\lohales BERTI En p rog rarnas especiales se dispond ra la mane ra como deba hacerse la recepci6n, ala cual cspe rarnos concu rra el pueblo en masa. (El Trabajo de San Jose de Cucuta, Enero 2ti de 19(7). IlONROSA VISIT A En la manana de este d ia hara su entrada a la gelltil Cucuta el Excmo. Sr. Francisco Ragonesi, De legado Apost61ico.

236 Los habitant es de la ciudad se sienten honrados v complacidos al tener dentro de breves horas como huesped a tan ilust re Dignidad c.e la Iglesia Catolica, que en su misi6n de paz y concordia ha secu nd ado los nobles y levantados propositos del Jefe del pais. La presencia del Excrno. SI". Ragonesi en est a Provincia en los actuales mementos (lara vigor [L nu cst ros p roy ectoo sob re vfas de cornunicacion y ser[t de incalculable» beneficios para el norte de Santander. La redaccion de HI Trabaio pr esentale respet uoso saludo de hienvenida POI' med io de estas cor tas Hneas, (lui~ sirnbolizan la alta cstirna v ad miracion hacia S, S. Pio x. l<:ste saluda 10 hacemos e x te nsivo it. sus honorables compaiicros, R. P. Jacinto Bassignana, Dr. Efluarl10 Posada y General Santiago Camargo, Ch imicot a, t:> Ill' Febrero rle 1907 Llust rc Pr es idcute v horor a.blc-, mi<:lilbro", del Conscjo municipal de Ciicut a.. Altamonte cornp lac ido por noble cornision que ese honorable Conce]o se sirvio e nviar me, doy las m.is e x p rcsivas g racias, y d esd e lllego cnvio [L todo el amado pueblo cucu tejio un especial sall1do.:oll yin) d eseo (!c r cnovar!o personalmente. Dcsd e q u e Sl~ xu po cl a r 'illo (i<' \'!'-tl~ ilust r.!h'rsoi1,lje a Bucaramanga, C{tclIta,!jue (on \:s[lecial intercs dt'seaba la visita it sus valles (le' d ist injru iclo d iplornrit ico, se ap rvsu r o a hace rle la invi tacioa po r mcd io de su d isrno Conccio. 1':1 Excmo. SL Ragon.,si la a':l'pt() g'ustoso. v d csd e entonces esta ciudad ylas p,)blaciones q u«forman- la Provincia de Cucu ta ~e ap resta ron al borozurlas para rvci hi r al q~regi() hucspc d. Desdc e l 1 de 10>; cor ricntes SL' fijaron carteloncs suscritos por Ia Presidcncia del honorable Conscjo municipal, la Jefatura militar ('e la f ronte ra columbiana y POl' cl Alcalde de la ciudad, Cornisiones de distinto or den Iueron repartidas,.y una cornpu cst a de los Sres. Rodolfo Faccini, Jose Rafael Unda, Luis Feb res Cor d e ro Y Mauucl I~()drig'ue:t. Ch. par t io en la mniana del rnar t es d c Ia se mana pasad a a la poblacion dl~ Chi nacota para ad clant a r lcs a 1 l<~xcmo. Sr.

237 l~agonesi y {t sus com paiie ros u n sal u do de bien vvnida {t no m- bre del pueblo cucuteiio. 1<~1Repl'esC'ntante dc's. S. P10 x hab ia heche su entrada en la tarde de esc mismo <1ia {t dicha poblacion, en rncd io de u n e nt usiasrno general. La cornision de Cucuta solicito v obtuvo en la noche una au d icncia del Excmo. Sr. lxagone;;i: y en ella fue puesta en sus manes la nota de estilo cnviada par la Municipalidad, Acto continuo cl Sr. Rod r irru cz Ch. Ie clil'igio las sijru ient es palab ras : e El honorable Consejo municipal de Cucuta nos ha hecho el honor de comisionar nos para que a nombre d el laborioso y noble pueblo que representa os demos la bienvenida a sus risuefios valles. c Vuestra visita, Excmo, Sr., es motivo de sincero entusiasmo, porque al1i, paso a paso, hernos seguido y ad mirado la hermosa labor que con nuestro ilust re Presidente habeis hecho en pro de la pat ria colombiana. POl' eso las palmas que a vuestro paso se mezan, las flares que vuestro camino alfombren y las multiples dernost raciones de respetuosa adhesi6n can que sereis recibido, con elocuencia os hablaran de los sentimientos que anirnan a los babitantes de la Perla del ivorte hacia el dignfsimo Representante de S. S. Pio x. c Gratitud eterna guardara el pueblo de Cucuta, Excmo. Sr., por haberos dignado llcgar hasta el, a d ejar con vuest ra presencia los beneficios de vuestra apostolica bendici6n. «Sed pues bienvenido, Excmo. Sr., con vuestros distinguidos cornpaiieros, {L la tierra del t rabajo y del valor heroico, a la tierra del lfombre de las Ieycs.» Dichas f rases, que llevaban le expr esion de la ciudadania cucuteiia, fueron contestadas por cl Excmo. Sr. Ragonesi con otras llenas de agradecimiento y de carifio para la culta Cue uta, por la cual dijo tener predileccion. EI Sr. Faccini, que tam bien habfasidocomisionado por la Colonia italiana para saludar en su nombre a tan ilustre compatriota, pronunci6 un elegante discu rso en la lengua del Dante, discurso que hizo sonrefr con melancolica alegrfa al Excmo. Sr. Ragonesi y que contesto inmediatamente recordando tarnbien a su pat ria iontaua. Desde ese instante la Comisi6n de Cucuta se puso a las 6rdenes de S. Eo, y autorizada quedo para comunicar que haria su entrada a la ciudad en la manana del sabado pasado. En Bochalema fue recibido con vftores y repiq ues. Compacta multitud se vefa en sus calles: la banda de aquella simpatica poblacion ejecuto las mejores piezas de su reperto rio, y el Sr. Delegado sentfa caer sobre su noble cabeza una lluvia de flores que llevaban el fresco aroma del ag radecimiento. En el trayecto del camino que de Boehalema conduce a esta eiudad S. Eo el Delegado fue gratamente sorprendido,

238 """\ "\") ~:,.., PIH'S j)(tr (lo'lllierlt veia on<!cal' ia amarilla y b la uca l.arule ru 1'0ntiti,"j,,: ltr,:;ls.ulo r u ad ox con Ilo rc-, sil vcst rcs SV c ncon t raban ;" cada I'a'o. y en ;.:TUpoSpintorescos nuvst ros lab r icg'os!auoi'io:"w, y l.on rados CSpL'I"a1>an ansiosos 1{ '1u" pasara e l Principe insiz n e del (;ohiej'lw \' at icn no. A 1.(1.' I iufo.' ll('g"'~ L'1 Ex,'nJl.i. SL l,a~'()lil'sj con la ya numerosisim«co mit iva que t ra ia, ;'t las c uat ru (1,.' la t a r d e d el vier ncs x. En cstv pcq uefio G1St'l'IO <lei Murur ipio tid h'osario dos cscu clas en comunidad 1c abr ie ron cal le 11l' honor, 'al final d e la c ual se hallaban pe rsonajcs irnportant cs tie Cucuta que hasta ;1111hab ian id.o {t c n con t rar lo. Otra escuela de aq ucl la m isrna regi<~n hizo 10 p ropio en u n punta tlenominado Los /)r,ti{).'. La sat isfaccion sc vefa ret ratada en el rost ro al Excrno. SL.Ragonesi, y d ijonos que e ran las mc jor es y mas g-ratas nu.nif'estaciones para (.1 aq u el las q u e le p resentaban los labios de los peq ucfios q u e con e l no rn b rc de Dios aprendfan el d e la Pat r ia. Desd e el Alto del :Rosario con ternplo ma ravillado nuestro her moso valle. Con los b razos cruzados y d ilatadas las pupilas fijabase ya e n Cucuta la d uejia, que en aquella hora nrcparabasc (l dor mir r eclinada g raciosament e al pie de sus pintorescas colinas : ya en la /1i'.'lrJrim I 'ilia, cuna del liombrc de las!rye's y albe rsrue del primer Congrvso colombiano, Las d e hcsas en dond e pac iuu t r anqu ilame ntc infinidad de ani males ; las br isas rumorosas del T{lchira; c l balanceo r itrnico de las,~ig-anteseas pal mc ras, y todo cl encanto de la tarde en aq uel sitio dieronle tal e nt usiasrno a S. E. que exclarno cornplacido : it; Tierra iucom pu rable '> A las seis de la tarde ent niba mos a 1<:1Rosario, en dondc el Sr, Alcalde de aq uella localid ad le d ir ig io la palab ra. Allf, como en Chiriacot a \' en Bochale rna, i:ie estaba de g-ala: arcos, Iestones, band c ras. 'notas alcg rcs de musica fiestr-ra y cuanto hay de mejor en nuest ros pueblos lucicron para <1I1Uelqulit ha venido de ovacinn ell ovacion hast a ('stl' conffn norte de Colombia. A la quinta Santa ((aret, d istant e legua y media de ellcuta y en la Hnea del Ier rocar r il. l1ego el Sr. Ragonesi a las seis y media de la tarde. Aq ucll a, espaciosa, encontr abase tarnbien ar reg lada can exquisite gusto. Una guardia de honor presento las armas. y marcha para el Presidente de la Republica toco el corncta. Xu me rosas sejioras y caballeros espe raban su llegada, ya su p rescncia for maron <los alas per donde paso el con su genial son r isa saludarido afablernente, A las oeho de la neche, confor me al prog rama particular de la Jefatura de la f rontcra, un t re n c xp reso con todo el personal de la misrna y mult it ud ell' gente llevo la banda militar que arm nizo con escog idas piezas la cornida de S. K En este acto torno la palab ra el Sr. Ueneral Monsalve, J'efe Militar de la Frontera, y en ideas elcvadas le present6 la rnanifestaci6n.

239 En Cue uta con ansiedad se esperaba la aurora del dfa siguiente, que llevarfa una feeha marcada can caracteres g rand es en 8U historia. A las d iez y media de la manana el estumpido del canon anunci6 a la ciudad que S. E. el SI". Deleg'ado hacia 8U primera visita con sus distinguidos cornpajie ros de viaj e, R. P. Jacinto Bassignana, Secrctario pr ivado de S. K; el Sr. Dr. D. Eduardo Posada, aito empleado de nuestra Cancille rfa, y el Sr. General Santiago Camargo, ex-gobernador de Quesada. Dos t renes fueron puestos a su disposicion por el Sr. D. Meliton Angulo Heredia, Secretario de la Cornpajiia del Ferrocar ri., quien en elegante discurso los of recio a nombre de ella. Con vagones especiales se habian dirig ido ala quinta Santa Clara llevando un lujoso acompafiarniento de darnas y caballeros, y en medio de este y POl' debajo de los arcos triunfales levantados en su homenaje paso el Plenipotenciario de S. S. EI silbo de Ias locomotor-as, las campana.. Ianzadas a vuclo, los acordes solernnes del himno nacional y el entusiasmo de la muchedumbre, todo cubri6 el acto de un tinte tan imponente que es mas para sentido que para descrito. Al Parque dt~ Santander Monsejior Ragollcsi entro POI' en medio del Ba/alloll 6 9 de lnjmztcria, abie rto en columnas. Las arrnas le Iue ron p resentadas, y con su brillante sequito se d etuvo un momenta para admiral' la estat ua d el p rocer. EI General Morales Berti ocupo en seg u id a la t ribuna prepa rada al efecto y le preseuto su saludo, como Presidente del Coucejo Y ;l nornb re del pueblo de Cucuj a. con las siguientes clocuent es f rases : «Excmo. S,'. Delegado Apostol ico : «Antes de pone r en roanos de V. E. la co m u nicaci on que os d ir ige el Concejo de este Municipio, con motivo de vuest ro arr ibo {l esta ciudad, vcngo en nornb re de esa misrna corporacidn, que me es hon roso p residi r,.r del pueblo de Ctrcuta en general, {l presentar {t V. Eo mi respetuoso saluda de bienvenida. <Vuestra presencia entre nosot ros, despues de inaugural' en la capital del Departamento la bella exposici6n 01'- ganizada por nuestro prog resista Gobernador, y despues de veneer, como hahcis vencido, las dificultades de un viaje tan penoso, es una p rueba de especial deferencia que jarnas sabremos ag-rad ecer debidamente. CPOI' eso Cucu ta os abre las pue rtas lle na de regoci io y sus habitantes se cong regan aq uf para hace ros pub'lica manifestaci6n del aprecio y simpatias que les inspirais, las cuales habran de convencer aun mas a V. E. de que este es

240 23~ pueblo c re yente y r espe tuoso, que arna y acat a los Minist ros del Alt isirno q ue C0ll10 vos traen en la rnano cl ramo de ol iva, sfmbolo de la paz. Ya son aq u i bien conocid as vuestras grand es vir tud es, cl inte res que tencis POl' e1 prog-reso y t ranq uilidad de est" pat r ia colornbiana y vuest ra labor inapreciable poria union de todos sus hijos al r edcdor d el (;0- bie rno que habilrmnte d ir igc nuestro ilust re Prcsid cut c. Gratitud ete rna 01; d ebe la Republica que est;'l hajo vu est ra sabia y benefica d irc-ccion apost olica. < Nad ie ignora en Cucu ta cuanto habcis t rabaj ado tambien por cl sostuni m ie n to del colcg io que con ac ie rto regentan los l le r mauos dt las I<:scuelas Cr ist iauas en csta ciudad. Manana, cuando nu est ra juventud a bandorie los claust ros para atrontar resu elt a la lucha po r Ia vid a, e n cada hag-ar se bendecira vuest ro norn b re, v lat idos de a mor v de reconacimiento sald ran.le todos los"pcc hos. La cduea'ci()n basada en e1 se ntirnientc re ligioso. en cl respeto {L la socie dad y en el a mor al t rabajo hara de nuest ros jovenes ciurl adanos celosos del IHlen no mb re de la Pat r ia, ajenos ;'l las d est ructoras luchas in test in as y sa nos y robustos elementos d e p rog-reso y bienestar del pafs y muy especialmcntv de la ciudad en que nacie rou : dt' esta ciud ad azotuda POl' innu me ras calamidudes pe ro fu e r tv y la boriosa. con grandt's esperanzas para el porveni r. <Vuest ra visitu lle na (I<' sat isfac c ion v orjru llo ii torlos los habi tan tvs de est.. vall c. q uie nes ti('ne~l plena confianxa en q uc 1'01110 :\ u nc i«'i lie sois d.-l J dl' Ill' la Iglesia Ca toli ca, de S. S, Pio X. '1uit'll l'f-; tod o car idad \ arnur para SlIS hijos, sen::is ta m b icn :\"un,'io rl i: t r a.nqu ilid.ul para t'stas co marcas. Vuest ra tisono m ia b,mdadosa.\ at ravcnu- con ti r ma aq uclla confia nza, a pa r t v (J,- la n u cva p r ue l.a dl' aprl'i'i.-. '!Ut: l'st[lis d an do ;'l ('{feuta. 4: lxueguus PUl'S, E\I'IllC, Sr.. illlpart;'lis vu est r;l Ill thllci()n apost.ilica ;~,I'S(t' noble pueblo q ur- I)S n'spda y os.ul miru. «Exc mo, Sr.: d.'sio viva m.-ntv.,:ouw 10 dt'sl'an t a m hicu todos los h ijos y v.c i IUs (11' L'sta pob la.ion,,pt,' os Sl'an ag radables los ra tos que paseis e n m edio Ill' nosot ros, Y 'IUt' tanto \"01;como vucst ro dig-no SI'L'rdal-io y honorables caballeros que en rcp resen tacuin lid «;obil'rl1o os acorn paiian lleven de est a ciudad, cscnc ialrnc n t e t rubajudor a y a j e na [L la pol i- tica, gratos e i mpc rucccle rus rcc uc rdos. «Hicnve nido sd;'s. Exclllo. Sr. ~ El I':xcmo. Sr. RagoneHi, acto continuo, cout esto est e discu rso con nohilfsi mas palabras q ue al ter m inar hicieron estalla r a la ingent«n uchcdu m b re en u n a plauso prolong-ado y cul Uroso, El Sr. Alcalde dl' Ia ciu d ad, 1:011 arlccuada rx prvsi o n, lc manifesto el e nt usias.no dl' SlI~ habitaut es po r tan f'austo su-

241 ccso, La ma r c ha cc nt inuo c n d ircc c ion ;'l la qu in t a Teresa. ~en<:rial morad~ ce.<lida e~pont{l~eamcnte pol' su bol~daclo~a ducna para aloja m ic nto d e tan ilust r c hucspcrl. All i, antes d e en t ra r al su nt uoso recinto, el SI'. Ma nt illa Breton, en nombre <lei1'refecto de la Provincia, salurlo al viaje ro con el ~ig'uientc aplau d irlo d iscu rso, (Veasc est e en la pagina 1(8). A las doce de esc d ia Iue se rvido el suntuoso banquete obsequiado a S. K, a sus d istiruruidos cornpafie ros y al respetable CUCJ'po Consular. Ala hora del champaiia cl General Jose Agustin Berti, decano de dicho Cue r po, con esa diccion Iacil y amena que le caract e r iza, 10of rccio a nornbre de la Sra, de And ressen, en la forma que sigue : «gxcmo. Sr.: c: POl' recornendacion de la respetable Sra, D<~Teresa de Andressen y en mi caracter de decano del Cuerpo Consular os of rezco, Excrno. Sr.. este almue rzo. c: Grato es para mf se r el voccro de la d istingu ida senora que es orgullo y prez de esta ciudad y {t quien Cucuta debe inap reciables beneficios, y llevar tarnbien la VOl:: en nombre de mis estimables colegas, representantes de naciones amigas de Colombia. «Grande es el placer que experimenta esta ciudad al recibir en su scno, tras largo y f'at igoso viaj e, al Representante de la Santa Sed e, Representante a quie n Colombia t{tnto estirna y respcta y a quien debe opor tu nos e inteligentes servicios. Vas. Sr., habeis cont ribuido eficaz me nte al reinado de la paz y al triunfo de Ia concordia en est" pafs; y adcmas de estes mer itos os distinguen g randes cualidadcs, como vuestro bello caracter, vuestra alta inteligencia y vuestro amor a la civilizacion.r al progreso. «Habeis tenido, Exc mo. Sr., con esta ciu clad Ia amable atenci6n de venir a vlsitarla, visita <J. ue cs motivo de alta gratitud, pues hasta estc rernoto conffn del territorio no habia llegado attn un personaje de vuestras e xcelsas cualidades e investido de tan elevada misi6n. Conf'Io en que este fausto acontecimiento traiga muchos bienes para est a comarca y. que vuestra bendici6n produzca los deseados beneficios en pro de la armonfa entre tod08 los colombianos y para la paz del continente americano. < Brindo pues a la salud de S. K Monsejior Ragonesi, el ilustre Delegado Apost6lico en Colombiav y por sus distinguidos cornpaiicros de viaje, y hago votos porque sea pr6spera y feliz su permanencia entre nosot ros.> El Excmo, Sr. Ragonesi, con esa arnabilidad y cultura que tan bien cuadran a su elevado caracter diplomatico,

242 237 «,nt,,.,t'-) (On u u tra,.,c"il<i,:ntal (li",:\1r,.;o 'IUl' l!t' 0),'11 todo,., 10,., coricu r rc n tc-, u na itn prvsi on (I,.. p roiu nd: -.im a tia. A 1:ls rua t 1'0 d,' b tanh' u n t rvn ('spl'cia) II I'() a nu,':-.;- t ros hucspcd cs {I la q uint a.\'(1111(( ({(mi. Al d ia "ig-uil'ntl'. 1(1 ell' V,'bn'1"o. s,' c;nto u n sok-rn nv 'Ii' Ikillll pur,,1 I-:x c Sr. Rag-onesi. en acci{l11 (1,' gtacias po r ];i C<l11"t'n',d,j(11l(],' 1a paz y la vida.lc l Pr csidvntv de' Columbia. I':n todo,,~stl.'clia Iuc \ isit ado (,J h)l'j,n'si~lltallll de S. ~. par com isioncs de tudes los colczios y cor-po r.uioncs, pur sinnurne ro dv ciu d adunos, por n:pn'senllnh:s de bs colonias e xistcntcs ('11l'sta riu d.ul, dl'janlli' "11 carla,'11a1'll101im p r«- si(>n reliz. A las seis de l.i manana del II una Co m ision <It caballeros fuc {I recib ir al Sr. Dclcgarlo {I.':Illlill ('1IlItl, y al llegal' {I la ciudad S. E. y s.us acornpaiiuu t cs SL' dirigieron al t crn plo de San Antonio, mag nificamente d ccorado..a11i nos cspcraba la mcjor y 1I1{IS h e r rnosa de las impn siol1es. una alta not a (k especial c.ric rcncia poi' pa rt c cl cl ilust rc visitantv hacia la cult«soci~dacl lie San Jos,~ lit, Cttcuta. Dcsd e Pamplona habia of rccido espontaneamentl' S. K. C01ll0 c xq uisita galanteri<l {t las Familias d cl <listinguido hombre' publico General D. Ramon GonzfJlez ValelKia y <h 1c abnllcro (;eneral Jose Agustin Berti. que impartiria S1.lbc-ndici.iu de apostal a una parej a gentil. formada poi' d os vastagos de clara prosapia san tandc reana, ul cul to caballero D. Manuel Marfa Gonzalez (;. )' la lell a y virtnosa Srita. V;,L Ida Berti, q uienes unie ron su su e r te ante cl altar en aqu e l d ichoso d ia. 1<:1Excmo. S-. Dl'1cgado. r evestido de sus insig-nias cpiscopales, celcbro la augusta,'cl'cm<li1ia, y con su voz clara v vib rantc recite las oraciones lit uru ica«, llcvando a todos los corazones la uncion )' e l Ie rvor q u o elias inspir an. Prcsid icndo el nu me roso y ",t'ledo acompafiamicrito cl Exc rno. Sr. Delegudo \'isitl) la morrula del SI'. D. Jose Agustin Berti, padre (ie la d csposad a, hcnd iciendo asi cl nuevo hagar con que tan si mpat ica pa.rv-j a rcalza la soc icd ad de Cucu ta. A las t rcs y media ccleb ro \'1 Sr. lkkgado L'I sacra mento de la connr macion ell "I tc rn plo pa r roq u iu.l. Estos ados, a~l como cl de la be nd ic ion dv Ius t r abajos <h' nuest ro ternplo c n f{l1,)i'il:ay 11 cole-eta que pcrso nal rnc n tc hilt) para ella, d c muest ran 1a genial bcncvolvnv i: v e\'ang'elica hu m ildad d\' cst c ministro d cl Dios de carid;ld \' arno r, Prc-ciosfsimo obscq u io fila ciur.ad <1<'tucu ta q u. e~t,lsal))'{\ conscrvar con fj<lt'1idad y co rrl ir.l car iiio. po r Sc'l" u na dl' las I'aginas 111{tS hr illant csv y qui~{t unic«vn su h istor ia. Cu nn d o pase n los aiios. las geih.'raciolll's vc n id c ras s'.' cnalt cccran y Ilcna ra n ell' jl\bilo:11 r emc mo r a r "slus n'cutnlt:!'i que de mancra tan

243 sublime y bella vienen a cnriquecer la vida de la ciudad del Pamplonita. En todas partes, en el taller, en los hospitales, en las escuelas, en los hog-ares, se pronunciara siempre con profundo respeto el nombre de Monseiior Ragonesi, y su palabra de amor y de paz q uedara vibrando en el ambiente de la comarca cu cut ejia como un ceo de ~randiosa armonfa. * * *' A las ocho de la noche de este mismo d ia el pueblo de Cucuta, encabezado por' el Sr. Mateus Briceno, conocido escritor, se t raslad o a la quinta Santa Clara con el objeto de dar1e una manifestacion de si m patfa y adhesion al Excmo. Sr. Ragonesi. Diez car ros iban colmados literalmente; no menos de dos mil personas. j Que notaci6n tan elevada de cultura y eritusiasrno dio el pueblo esa noche! Pero cs que este pueblo precede asf sie mpr e en casos analogos. EI Sr. Mateus Briceno tom6 la palabra y en magnifico discurso Ie expres6 al Excrno. Sr. Ragonesi los sentimientos de Cucuta hacia el, como tarn bien las.ncccsidades y anhelos de est a region d igria de mejor suerte. 1~1ilustre obseq uiado respondi6 con palabras rebosantes de agradecimiento y de inte res sincero porque se cumplan las aspiraciones manifestadas por el orador, Acto continuo la voz de la Pat ria sc dejo oil' traducida en nuestro bello hirnno, ejecutado poria mejor orquesta que hasta hoy dia se ha pod ido organizar aq ui. El Dr. J<:duardo Posada, Subsecretario de Re1aciones Exteriorcs e ilustre Presidente de la Academia de Historia colornbiana, contcsto a Mateus Briceno de esta feliz mancra. (Se halla publicado en la pagina 197). A las once de la noche reg resaron los manifestantes comentando las bellas expresiones de carijio del augusto Principe de la Iglesia: «Yo q uisiera estrechar la mano de cada uno, atraerlos todos hacia mi pecho y decirles afectuosarnente: os agradezco mucho, muchisimo, y hare por vosot ros todo, todo 10 que este a mi alcance.> (HI Trabajo, San Jose de Cucuta, Febrero 14 de 1907). RI<:CEPCI6N DEL EXCMO. SR. RAGONESI Ofrecimos en nuestro numero anterior continuar la resen a de las fiestas que en Cucutase han estado cu mpliendo con ocasion de la visita del Excmo. Sr. Delegado Apostolico, y venimos acumplir aq uella promesa.

244 De la morae.a del Sr. General Jose Agustin Berti se rlirigia el ilust rc huespcd {L la plazuela tie Me rccd es AbITg-O. Bello espectaculo d q ue p resen taba el r e d ucido clladrihitero, colmado por todos las escuelas de ambos se xos. Unto de la poblacion como de los Municipios.\ caser ios c irc nnvccinos,.y de los colcg ios de va roncs de 1a ciu d acl. All i las candorosas nijias llevando sendos ramos de flores v los risuejios nijios con sen d as baud o r itas blancas, en coniunto como de dor mil, cntonaron los he r mosos him nos pon tific io y nacional, oidos d e pic po r la n u rncrosa concurrencia. El p rog r c- sistu Inspector <1c Inst rucr.ion Ptlolica, Srv Eustuq u io Mantilla Breton. q uicn con d cc id ido int e res, d ig no de todo encorn io, ha dado grande impulso a]a int ruccion en est a Provincia, p rocu ra.ndole re ntas suficie nt cs y dotando a todos los cstablvci m icn to de los tltiles nec esar ios y de p rofesor es id oneos, p ronu nc io!tfi siguientes pal auras, (Se hallan e n la pag-ina 171). 1<;1 Excmo. Sr. ~agonesi. con esl Iac ilid ad y modo de d ecir tan cautivador que 10 distingucn, ma ni f estns«surnamente com placido por aq ue l acto tan bello y e xpr esivo y por l'l importante y halag iieiio prog rama que const it u ian las palab ras del Sr. Inspector. Despues, de modo sole mne, irnpart io su be nd ic ion apostolica, que todos recibirnos de rorlillas. ljesfila ron luege I'll o rd e n admirable las comunidades. haciendo los niiios -.us respet uosas g-enufll'xiones al pasar d elantc del esclarccido Pr'Incipc de 1<\Iglesia, y dujando las niiias {L sus pies sus ra mos de tlores, of rend a sim bolica que cnte rnecio {L S. 1<:., c u icn repet ia despues Irccuenternentc : <l Me han tocado el corazon!» Como en el d ia anterior, el alrn n e rzo tuyo lugar en la quinta Teresa, se rvido con la misma exquisita cultura que saul' desplegar la noble benefactora del pue u10 cucu teiio, Sra. D" Teresa de And ressen. gn scg uida fue acorn pajiado por nu mcrosa concr rrencia hasta Btl residencia de Santa Clara. * * * J~112 de Feb re ro, a las ocho )' media de la manana, fue el tren con el Presidentc, Secrctario, 'T'csore ro y ot ros e rnpleados de la ernpr esa {L traer al Excmo. Sr. Delcgado, que habfa aceptado la invitacisn {\. visitar la estaci6n (lieu/a, talle res y almacen del fe r rocar r-il. A las nueve y veinticineo m inut os el tren entraba ala c iud ad y ~'iglli{) viaje d ire c to po r la lfnea oriental hasta la estaiion: de allf sig u i/> al N or t e u nos t re" k i-

245 -.- 24\1 - lornct ros, hast a lit hacienda 1_1l,':J'/{;crt'lf. dond e SL' d e t uvo alg-unos m inutos: de r eg r eso (t la estacion cl SL Dclcgado bajl) 11e1 t rc n y,"isito cl cd itic io principal, pasando por e l g ran salon de depositos y rornana; siguio a los tallc res, vie ndo {I su paso las locomotor-as, b ri llan tcs poi' su li mpieza, y el gran cobcrtizo d e los car res <1"pasaj cros y dl' carjra. Al cnt rar a los tulle res c stan las frag-uas con toda su maq u inar ia: los ob reros hicieron funcionar el g-ran martillo de vapor modelando una gran pieza d e hierro enrojccida. Sigu c luego el gran eobertizo de hierro de la mecanica y la carpinterfa. Todas las maquinas cstaban en rnovirniento: la gran sierra. el inrncnso cepillo para las piezas de madera hasta de docc metros de larg-o, los torrios para mad e ras y para rnctulcs, la sierra sin fin para eontornear, la sierra circular, las maq u inas de talad rar hie r ro y madera, de rnachihe mbrar-, y ot ras mas para pu li r, afilar, escoplca.r, etc. En fin, el taller mas completo que se pueda d esear. Todos los obre ros, con sumo re8- peto, saludaron de rod illas al Sr. Delegado, y con cor recta actitud, cual eentinelas vet e ranos, cada uno en su puesto. Vistos los talle res siguil) la concu r rencia al al maccn. Es este un salon de cincue nta metros de larg-o POI' ocho metros de aneho, con anaq uelcs en las paredes y en doble fila central, l1eno todo de utiles )' matcriales, utensilios, etc. en orden perfecto. Sicndo las diez y treinta y cinco minutes te r mino la visita y el t ren condujo al Sr. De legado y de mas acornpafiamiento hasta f r entc al Club del Comercio, adonde se le esperaba. ~I Sr. Dclegado, con su genial penetraci6n, abarco en su conj u nto y ell sus porrnenores esta seccion del ferrocarril de Cucuta, apreciando toda la importancia que tiene r el crecido valor que rep reseuta, juzg-andola como una de las rnejores cosas que ha visto en esta ciudad, y asf dc rnostro su complacencia. A la pue rta del Club del Comercio los dignatarios recibie ron a S. ~~., le condujeron al salon de la bibliot eca, donde sc estarnpo en el libro respective y en pagina especialla diligencia de su p rcsentacion y la de sus distinguidos compaiicros, q ue d ando asf sus fi rrnas au tog rafas, que se ran timb rc impcr eccde ro de alta honra para cste centro social. El caballero D. Alfredo Serrano. Pr-esidente, le dirigio las sigu ie nt es f rascs : «Excl11o. Sr. Delezarlo: «Pcr mi tid mc que al of rccc ros la COP'\ de b icnvcnid.a en nom br e <1" cstc centro social que te njro cl alto honor <te pr esidi r. 10 hag-a b rind ando poria ventura <h' V. ~. Y por la salu d de S. S. Pio x. d e q u ie n sois d ig nisi mo Rcprcscntanh'. </: Pc r m it id nu- t a m hion, EXL'mo. 81"., vxp r esaros e1 dcseo dl~ 'lilt:' e l l't"clil'r<!o (1L' L'sta t ic r ra '1Ut' hab~is hon rado y he-

246 alg u nas horns las palahras iorna c ho feliz con vucst ra p resc ncia, sea para V. E. sie rn p rc grato. COIllO ser;, vu cst ro rvcu er do in d cle bh: en n ucst r a memoria. : ExcnlO, Sr.. ; sa lnd!» Con su ing-elita ho n dud y c x q u isito tino "1 1'~xclI1o. SL Delegado Apost.')lico corrvspond io en g-alantl's j rascs al salud o q u e le dirig'i\'ra el Sr. Se r runo. lkllos mouu-ntus Iueron aq u cl lus, d u raut c los cua les n:ill() lu Ill(u.; co m ph-t a cord ial id acl ~ in\"adi.'j la akgria los espll'itus de toclos los concu r r e n tos. No d u d a mo-, que S. I';. consc rva ra (It- e llos m u v gl'ato.; n,,:t:l'i'<to';. 'Ill<' (,' illtelig"litl' fot()gtafo S.. Chaml.o» Sl' encal'.l!,',",i,' p,'rl'etua,-. (:ran pa r t. <I,' las Iu.mili as de los socios cun t r ib u ia n ul t'spkn(lor dl' \ ~;ta rl'(ep(i,'ji1; la Ban d a m ili t a r cj ccu ta ha ale e rcs air-es, \" :1 su sa lirl a las da mas v cahalkrl's Io r m a rouk l;ll1e Ill' IWI{O', " id d u lc isi- La (okjnia taiiana ljaljia pn'paradu pa ra ':St: d ia un (lb- :-;e'1uio (I S. f<~,.,'j cuu l tu\'u l ujra r vn la casa <11,1 r u lto cubu- Ile ro 8L D. Edllanlo Hlholi. Las ha nd c r as italiana y culo rnhiana se alzaba n suhre lu mesa. y al l i S'.' (Il'jaron o ir durante cau tivadoras (ll'!!tio d e l Dante y las fras,'s robust as de la kllgua til: Cc rvantcs. Una comisi'>ll cornpu estu (It- Jus Sres. PrL'si,!t'lItl' y Viccp rcside nte <1\I honorable Corise jo m u ni ci pal Iu c hast a la c asa del Sr. Ri1Joli para coud u ci r a l EXCl1lo, Sr. Dekgac10 hast a e l salon d cl Couccjo, y al li t uvo lujrur una sesi(ln impon e nt e y solcrnne, (01110 que en 1,11'1 pi(\i(),,1 pueblo de Cllc u t a, pol' cond uc to d e l Sr. (;L'n"ral Luis.'\Ioraln; Hc rt i, digno Pr-esid eute r.e aq uc lla corpuraciun. la va liosisi rna ay u d a del )':xcmo. Sr. Delcgado ;1. tin de a pli ca r (I los males (lui' nos afligcn e l sr.p re mo rv rncrl io : la via p rupia al ~Iagdalena. unica e m p rcsa 'IUl' pu e dv sacar nos (It: 1a anjrustiosa situacion en '1Ul' vivirnos, y que sera e l pcd cst a. sob re cl que hab ra d c asc ntn r-«: nu cst ra hie naud auza Iut u ra. De aq uel la sesiun. qui: marca ra ~p()ca de p rospv r idarl para Cucuta, se levant a uu act l especial q ur- hun ra ra S, E, con su firma. (Se halla e-n la,)ag-ina. 200), r~1sr. Delcgudo con e xq uisi t a p ropicdud cont est o ga.- lantemente, of recie ndo clue la pr ime ra pal ab r a '111l' dir ia al General Reyes se ria ell f'avor de Cucuta y de la apcrtura de H.

247 Al MOl e fue cst aciou Frontera, twa uta propt'a por territorio propio. Recomend6 al SI". Presidente de la corporacion municipal para dar las gracias al pueblo por las atenciones de que habfa sido obje to. Dcsd e el salon del Conscjo!5C dirigi6 a S. K a torna r cl tren que ya le espe raba para conducirlo a San Luis, donde se le espe raban iguales pr ue bas de afecto y adhesion. ** ;1: siguie nt a visitar la y allf pudo ve r "entrclaladas las des mane cillas que unen nuestras lfncas teleg rrificas y que d e b ie ra n se rvir de imperecede ro law de amistad)' concordia entre los dos pueblos hermanos. Nada notable que separnos t uvo lugar en est e dfa. * * * En la manana del 14. en union de sus cornpaiie ros de viajc, del Sr. Jefc de la Frontera y Secretario y de otros distinguidos caballeros de la cuidad, se dirigi6 al cuartel de Ia fue rza nacional, dond e su Jefe, Oficiales )' sold ados, de riguroso uniforme, le hicieron los honores de or d enanza y ejecutaron varios eje rcicios de!fnea. EI Excrno. Sr. Delegada y sus acornpafiantes salie ron cornplacidos al cerciorarse del orden y disciplina que obse rva la guarnicion de esta plaza. ~Jucda por hoy cerrada esta sucinta revista, Si en aiguna ornision he mos incurrido, ped imos por ello cxcusas, (hot T'rabajo de Cucut a, Febrcro 16 de 1907). ljl:rnws DiAS DEL SH. DELEGADO EN Cl;CUTA Con la fiesta ofrecida por las autoridades milit arcs el 14 en cl cuartel nacional al Sr. Delegado terminamos nuestra reseiia pasada. Dctallare mos aho ra a la lige ra 10 ocurrido en los Mas 1.<;,16, 17 y 18. Los dos primeros de estos los dcd ico S. S'ola hacer algunas visitas par ticu la res y a co.ioce rlo torlo, para interesarse por todo : nada se le escape a su observacion. ]<;n la manana del 17, cuando el Sr. Director de esta irnprenta y Redactor de EI Trabaio menos 10 esperaba, se anuncia en la puerta Monsefior, seguido de sus compaiie ros y de algunas personas notables de la ciudad. El Sr. Rosas,

248 RO e [til-tan kidas n (,1 hu r-alid po r.-l e 243 au n q u c Ile no de g-uzo, rnanifcstaba pc na, y asf ~l'lusig-l1ific(l. por no babel" sa hi do p revia rne nte que le iba a ot orjza r tal d istinc iou, pu es ell' 10 cont rario habr ia arreg-la<1o convenie n- t e rne nt e su talk;' para r ccibirlo. S. r:.. reencal"naci(,n de Ia ra t'llaltt'cedorn.; arnabilid ad. Ie e:'l)!"l's{, ca rifioso qtlc los tallv rr-s del p rog r e- ig-ualmcnt( dig-nos y mil d cs qu eruralanados, Con cnt usia-.mo e xa m ino des(le la p r c n-a gigantt' hasta la de t ir ar t a rj et as, dcsde 1a co r t ado ra mayor <Ie papel basta la de d ivitli r iut e rl iueus y <1l'S<1(' el tipo grandt, de c ar t e- u I(,n basta d mic rosc dpico pe r la. Aplau(h') l«la lio r pat r iot ica 1I,' 1--"/ 'li'(/(jtl/(j en ('1 Nor tv, en Ius l-xit()~ <1,-1;\ paz y 1a con.-o rrl ia. Dio 1'l.'fwtidas voces de alie nto ell la o h r a salvador a y Sl' dcspidit', cort~sml-ntl' y sa tisf'echo dr-l Sr. }\'osas, de su hijo Carlos y til' los tip(lgra- Ios alii prcsc-nt cs. Ot r» tanto h ic ieron ('I 1)1', Pc-sa(la y el (;ene1'al Camarjr«. Estas rlist in c iories. estes p re mics al esf ucrzo material e inte lect ual ohli~anin mils y mas (t le'( 'lja(ja/u ;1 continual' impertcrritl' en pos del ideal poi- <'1 cual sie rup r«ha luchad o : con t r ibu ir al engrantlecimiento del pais. La hoja volar tl' cont e nt iva del salu do suscrito [I su llegada y de la r cse iia de [a sin igual fiesta del pul-bk, Il~ se rfa p resentada cn la neche de ese d ia poi- una c1t'll'g-aci(lil compuesta de ind ivid uos de todos los gtcmios. Y asi su,'t'(li(l. A las siet e Y nu-rl ia pa r t io una loco rno to ra para.. 'ant«c'[ara llevando 1a (\Jmisi (>11, La hoj a d est inada para \'! Ilmo la q ue d e he r ia p rcscnt arlv vl Sr. D. Car los Y. Silva, era timhrada vn srt!>l Y donllias SUR lct r as. Desg-raciadaml'nte el Sr. Silva sufri(! u n a indisposicion de salud (t t ic m po dc mar char (,I t re n, lo r u al hil.li q u c sus he r mosas pala.hrtu- escr itas para (,I acto <1"lofn','illlil'nto con gusto y na t ad del caso Sr. n. Francisco de P. Duran. Aq ucl acto, a u n cuandosencillo, rc\istj{, u n car(ldel' muy simpatico y e x p rvsi vo. AI dcsdoblar S. I':. cl se doso plieg-o, de sus lahios hrotaron [rasl's de espec.ial cornplac e nc ia y de ad rniracion para l'1 p uv h lo de Cucuta que u niu 'exdamaha, it su alt iv ('Z y (I su la ho r ioxidad una c ul t u r a singular. "-No cont esto con d iscu rso - dijo; ]0 ban: con e l int c- rl-s acerid rado que por ustv d es YO)' [t tomur mv en 1a capital. ;.ellal serii el ()]umbiano, -'"esp\'cialml'nte ('I rucu t eiio, que no t ie ue para cste plecla ro pe rxonuje u n e n t us.ias mo grato de su coraz(\i" 't Como el d iscu rso del Sr. Silva es una pie-xa lac/inica pero de inte resant e ocasion y bella d e f rasc )' fondo, como todo 10 que este ilust rado joven con ci he, varnos a inse r tar lo en!'('g-uida:

249 <EXCll1o. Sr, : <Con e l mote de.lllhdos J' rrspctos dd jmefj!o de Cticu]«he rnos cornp ilarln en csta hoja tod as las notas cul m inant es d ad as durante vuest ra mer itfsi ma visita a csta ciudad, en rclac ion con sus aspi raciones y sus espe ranzas, Quedan inse rtus ell ella. para que se pe r pct ucn en nucst ro recuer do, vuest ras hermoslsimas palab ras lle nas de te rnura r de promesas; las no rue-nos importantes de vuest ro distingu ido compane ro Dr, Posada; las del Sr. Marcus Briccfio, q ue os salud o (\ nornb r.- de cste pueblo,.r las d cl rn uy dig-no Pr esidcnte de nuest ro Consejo municipal. q u ie n p roccd iendo aco rde l:oi1 sus l>llci10s antecedentes ha inte rp rctado fielmente los anhclos de sus rep resentados, solicitando vuest ro valioso concu rso para la ape r t u ra de la via que ha de salvar a un rn isrno t iernpo nuestrn dig nidad.r nucst ros inte reses, <Dig-nam, ace pta ria. Excmo. Sr., como sentimicnto de respe to. de car ifio y de gtatitud, r llevarla (I pod e r de nucst ro eximio Pr-esidcntc, I~xcmo. Sr. General Reyes, sig nificandole q u e en esta apar tada!'eg-i()n de la Republica un pueblo laborioso y energ-ico cs admirador conscien te de su labo r redcntoru. j' cspe ra confiad o los ef'ectos be ncficos de Ia celebre f ruse que infor mo e l dog-rna de su Gobie rno : nuis ([djjl"'"~~/rllr;(;l/.i' I/I('l/()S poillira," Ncb ulosa la manana d e! It), amenazadora de invie rno to r r enc.ial, se o'eyo q ue- el SI', De leg ad o t ransfc rir-ia su viaje para la tarrl e, Esto hizo que d ejara di- concu rr ir a la quinta Teresa, Ingar de la despe clid a, muchisirna gente que hab ia declarado d e vacaciones esas hoi-as de t rabajo. Lleva r ia la palab ra el orador de nota D. (~uillt,t'mo Vega M.. d esig nado al ef'ecto por la honorable cor poruc i/in municipal. S. S<:L,como para d c mostr ar que' no solo era divino sino tarnbien hu rnano, esto es, que las insignias apostolicas las llevaba un hombre de la vigorosa raza italica, bu r lo estas naturales consicle racioncs d eclarandose desde las ocho j ine t e en hr ioso mulo, al ig-llal de sus aco mpaiian tes, A t ie mpo de orjranizarse la cabalgata, j' cuando las aceras ad yacen tes pr incipiaban a colrnarse de muchedumbre. el SI-. Vega M, d io comienzo it. su d iscu rso, el que a proporcion que las ideas se d cscnvolvfan, vivierido con Ia d cclarnacion y la accion la vida elocuente de la t ribu na, los oy entes nos se ntfmos... nternecidos; j' vino a se r mas g-rande esta con mocion del sentimiento cuando fijos en S. K advertfrnos, y a al ter mina r cl orador, que su se mblante sie mp re risueno 10 ajaba una cont raccion de pesar y a sus pupilas asornahan unas hl.grimas. --Estoy tan emocionado-le dijo al Sr. Veg-a M., -4ue no t engo pala hr-as para e xp resa r 10 que sie nto. En un abrazo os significo mi g-ratitu<l por tan bondarlosos conceptos.

250 rio la concordia. paz y t ]« He aqu i las elevadas v tic r nas f rases del t r ibu no que imp resion tan honda dcjaron en el :ll1imo de S. E. : <Part is, Ex crno, Sr., d cjando nuest ros corazoucs inflamados de profunda Iv en Dios, d,' bell isi mas y halagado ras espe ranzas para el porveni r y de sublime a mor y be n d ita r a r id ad, ciment 1<10 esto en la paz y conco rd ia de la g-ran familia colorn biana, a la que habeis m irado corn» let vuest r a, inte resandoos vivarrientc por su d ic.ha, p rog rcso y bienesta r. <Habeis sido mcnsajero del bien en cst e '/t1erido pedazo del suclo pat r io, pintoresco como la cspe rauza y a rd iente cual r-l a rno r, 1101<1<: L'1 hombre a p lica e l porl e r d e su <look nat u I'alt'za:spi r t ua I y co r poral p;lj"<t im pu lsa r las cor rient cs de la civiliz.u illl1 Ilirigidas por la mana til' Dios al t ravcs de lugares i"!'c\ll1uitm; v rl e inrncnsu ra l.les d istancias, <Habcis cornpart ido con nosot ros los place r es y las p c- nas consig uicntcs {I la vida..r COil tan bomladosa e intima familiaridad cual si Iue rais hijo native de estos r isueiios va lh-s q u e os han ofrecido la f ragancia de 8US flor cs y 1.'1 nectar ti(, sus Ir utos, to<108sus encan tos y sus galas como t ributo de a mor y de ad mi racion huc ia vos, dig'nfsimo Dclegado Apostolic» (le S. :~. Pio x en nu cst ra qul'ri<1a Y he rrnosa pat ria. «llabcis d ilarado ei hor izon t«cle n uvst ras asp iraciones ) conve rt ido vn llu via copiosa de Iccuudos bu-m-s la tor menta que nos ame naza ba, {I la mane ra que ell noc he t cne b rosa se d isipan las t inie bas y upa recc el cielo t acho narl o de ast ros rcsplandccicntcs ell' luz y rnaj estad. «Haheis irupar t id o sob re nosot ros las hcnd iciones del Cicio, las que tall ruaruvi llosarn en t. clevan 1'1 alma a las alt as reg-i()n(~s del bien. «POI" tantos t avor cs, broil' dt' vu cst ras p rcc lurus virtud,'s cr ist ianas. gl"acias, m il jrruc ias. Excmo. Sr. Jl rec- la,:1 «.litis j{t1r/a J' mcuos /w!f/t"m es e l p rvc ioso,: inte resante lema p residencial : {l cl!o cout r ibu in-rnos con tod a Ia l'llttgia d e nucst ras volun tad es, con su ma d,' arno r pat rio. acatan<1o asi las nobles asp iruc iorn-s del Exc!J1o. Pr'csidc nt c de la I{cpublic«, {;ecl'ral l~afael l~,'yes. (It- q u ic n sois g-allardo y e minont«co.abo r aclo r ('11 su o h r a <I" un,,'l\1, paz y progreso. «Colombia, aleccionacia ya Pill" t;l1l\os infortunios y comunes e x t ravios, p roclarna pur!jlle;. d c su dig-no Mandata- raba coruo ej1(~q6co cor t ivo a t:wtos males. que no-s han allig-ido. Ir u to pcr uicioso de la e xaccrbacirin d c n u est ras pasionvs pol it icas. «Triple arlc lan to moral, in tclc ct.ual y matv r ial : he aq u i nucst ra consisrna q ue cu mplida asl'i!urara la futu ra g-loria de Colombia.