PANORAMA MUSEOLÓGICO EN EL NORTE CHICO PERÚ

Tamaño: px
Comenzar la demostración a partir de la página:

Download "PANORAMA MUSEOLÓGICO EN EL NORTE CHICO PERÚ"

Transcripción

1 ESCUELA NACIONAL DE CONSERVACION, RESTAURACION Y MUSEOGRAFIA MANUEL DEL CASTILLO NEGRETE INSTITUTO NACIONAL DE ANTROPOLOGÍA E HISTORIA PANORAMA MUSEOLÓGICO EN EL NORTE CHICO PERÚ TRABAJO DE TITULACIÓN QUE PRESENTA ISABEL ROSARIO CORNEJO RIVERA PARA OPTAR EL GRADO DE MAESTRA EN MUSEOLOGÍA Dirigido por el Dr. Luis Gerardo Morales Moreno Esta tesis corresponde a los estudios realizados con una beca de excelencia otorgada por el Gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores CIUDAD DE MÉXICO OCTUBRE, 2016

2

3 JURADO DE EVALUACIÓN Presidente, Dr. Luis Gerardo Morales Moreno Vocal 1, Dr. Manuel Gándara Vázquez Secretario, M. Leticia Pérez Castellanos Suplente, Alejandra Mosco Jaimes

4

5 INTRODUCCIÓN El panorama museológico que aborada la presente investigación hace referencia a la presentación de un estudio de los museos de una región particular del Perú, que involucra la construcción de su historia y el rol social de dichos espacios, de sus formas específicas de organización y funcionamiento y de los agentes culturales que han hecho posible su desarrollo. Concretamente, esta investigación tiene como propósito estudiar el origen y trayectoria de los espacios museístos del Norte Chico peruano, a fin de producir un diagnóstico del estado actual y reflexionar sobre el quehacer museológico sobre esta región particular. El interés por este tema de estudio surgió cuando participé durante los años 2005 a 2009 en el Proyecto de Investigación Arqueológica Norte Chico. Los trabajos y resultados de las investigaciones de campo se difundían en las poblaciones más próximas a las excavaciones y luego en cada espacio de la región donde se nos abrieran las puertas: municipios, escuelas, universidad, etc. Esta dinámica propició que se conocieran las investigaciones y también las labores que los arqueólogos realizabamos con el patrimonio. Esto generó el acercamiento de varias personas involucrados en la conservación y difusión de su patrimonio arqueológico e histórico. Se trataban en su mayoría de docentes, autoridades municipales y de asociaciones civiles como patronatos de cultura, responsables de colecciones arqueológicas y la administración de espacios museísticos que tenían el interés de generar mejores condiciones para los espacios y los acervos. Todos lo miembros del proyecto colaboramos y asesoramos en diversos temas como la conservación e inventario de piezas arqueológicas, el desarrollo de exposiciones temporales, entre otros. En este acercamiento se hizo evidente un conjunto de espacios museísticos que se desconocen en la museología peruana. En especial, de las formas y estrategias con que estos agentes manejan y conciben el patrimonio de la región. Una búsqueda en el grueso de la producción de literatura museológica peruana dio como resultado apenas unas referencias básicas sobre museos en el Norte Chico. Sin embargo, iniciar una búsqueda en ese campo, ha permitido esbozar un panorama sobre los museos peruanos y seguir una trayectoria sobre el manejo de los mismos a partir del museo precursor, el Museo Nacional. Las dificultades de llevar las ideas que representan la nación a la praxis y la gestión del patrimonio cultural son notorias y constantes en la historia del Museo Nacional del Perú y en la diversidad de instituciones que acompañaron esta trayectoria. Muestra, en síntesis, la dificultad (y/o desinterés) por parte del Estado para crear políticas culturales sostenibles.

6 Los museos en el Perú surgieron en su mayoría en la segunda mitad del siglo XX. Hasta ese momento no se tenía idea de los museos que se encontraban en el país. Los primeros estudios o diagnósticos de museos peruanos realizados por iniciativas particulares como las del museólogo Afonso Castrillón o la de un plan establecidos por la UNESCO-PNUD para registrar el patrimonio latinoamericano, a finales de la década de los 80, nos acercaron a una situación crítica. Al interior de ellos se manifestaba unas grandes ganas de hacer museos bajo premisas tradicionales y con muchas dificultades (carencia de recursos económicos suficientes, falta de especialistas e infraestructura) para la acción de sus principales funciones. Según la museología tradicional y las clásicas definiciones internacionales sobre el museo, después de ver la situación de los museos con estos estudios, se puso en evidencia que en el país solo muy pocos logran desarrollarse bajo el modelo internacional (Castrillón, 1986). Particularmente en cuanto a museos del Norte Chico, solo fueron mencionados tres de los más antiguos, de forma reiterada en estos diagnósticos y en guías generales de museos: Museo Bolivariano de Pativilca, Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura y el Museo Universitario (UNJFSC). Más allá de estas escasas referencias, existe pues un evidente vacío informativo sobre el estudio del universo o conjunto museístico en esta región, sobre su origen, trayectoria y funcionamiento. A la fecha se han localizado pocos y dispersos estudios referenciales sobre el patrimonio museológico del Norte Chico. Por ello se ha creído conveniente comenzar el estudio con objetivos fundamentales para tener una visión panorámica y los alcances que han logrado. Estos objetivos fueron: mapear el universo o conjunto museístico actual (cantidad, tipología), plantear la configuración del panorama museológico considerando su trayectoria temporal y, finalmente, producir un diagnostico actual a partir de dos casos representativos como el museo de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión y el museo escolar Nuestra Señora del Carmen. Y, finalmente, producir una reflexión del quehacer a lo largo de 45 años, lapso en el que varios de los espacios museísticos fueron creados, muchos se lograron mantenerse activos y algunos otros cerraron. Todo en cuanto se conocía en el 2006 sobre la practica museológica en el Norte Chico, proviene de un listado elaborado por el Dr. Henry Marcelo Castillo, actual Jefe del museo de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión (UNJFSC). La lista comprendió un total de 18 museos (Guara, 2007; Marcelo, 2009). En el 2008 propuso el Proyecto de Red de Museos del Norte Chico, recuperación del Patrimonio Cultural y Natural como estrategias de Comunicación Ecoturística sostenible para el Desarrollo Regional (Marcelo, 2007). A la fecha, el desarrollo de la propuesta si bien no ha logrado una

7 articulación como red, ha propiciado un acercamiento y un trabajo colaborativo entre este agente con los demás agentes vinculados y responsables de colecciones y de espacios museísticos. También se sumó valiosa información sobre la vinculación entre el Proyecto Arqueológico Norte Chico y el Lic. Juvenal Ramírez, docente encargado del museo de la institución educativa Nuestra Señora del Carmen. Un pequeño artículo publicado en el año 2007 sintetiza las labores realizadas con la colección arqueológica de la escuela y reconoce el esfuerzo de la escuela iniciado hace 28 para crear un museo y articular el patrimonio arqueológico a la experiencia educativa. Hay que resaltar que este fue y es, al momento, un caso que representa la situación en que viven varias instituciones educativas que poseen colecciones formadas por objetos donados o recolectados en diversos sitios arqueológicos de la región. Centrarno en él, además, nos ha permitido aproximarnos al estudio de los denominados Museos Escolares que en el país hasta ahora no habían sido analizados pese a ser constantemente mencionados en las guías, catastros y diagnósticos de museos peruanos. Pese a esta iniciativas, se desconocen las características y praxis dentro de estos espacios que esta investigacion ha tratado de documentar y reflexionar. De la lista publicada por Marcelo podemos identificar un universo conformado de forma categórica por museos, ligados al patrimonio natural y cultural. En el sentido de recuperación de su proyecto se advierte una condición, la perdida del patrimonio. Es claro que un listado no es un examen detallado de una situación pero, en su mayoría, los nombres de los museos aludieron al patrimonio arqueológico. El Norte Chico es una denominación de amplio uso coloquial en el país. Hace referencia a un territorio localizado en un sector costero, al norte de la capital peruana. Esta integrado por las provincias de Barranca, Huaura y Huaral en las que, desde el siglo XX, se desarrollan importantes centros económicos productores y comerciales, dedicados actualmente a la producción agroindustrial (azúcar, papel), pesca (artesanal e industrial) y comercio. Ello ha hecho del Norte Chico un territorio rico y variado culturalmente porque estas actividades propician constantes procesos migratorios de poblaciones [de la Sierra a Costa] (Marcelo, 2015) para la adquisición, intercambio de productos y el acceso a la oferta laboral. Pese a estas condiciones que aparentemente favorecen el desarrollo positivo, de fondo se encuentran problemas que afectan al tejido social: precarización del trabajo, discriminación, violencia, zonas rurales en situación de pobreza extrema. Estos problemas son reconocidos por los agentes involucrados en los museos y en buena medida se relacionan con los daños que constantemente afectan al patrimonio.

8 A partir de finales de la década de los 90, las investigaciones y descubrimientos arqueológicos centrados en el Arcaico Tardío ( años a.c) fueron estableciendo y subrayando la relevancia de sus valles. Han posicionado, pues, a la región y a Sudamérica como uno de los Focos Civilizatorios de la Humanidad, junto a Mesoamérica (Olmecas), Europa (Creta), Asia (China), África (Egipto), Cercano Oriente (Mesopotamia) y Lejano Oriente (India). En dichos lugares se desarrollaron las sociedades de las cuales las posteriores fueron heredando, en cierto sentido, su patrimonio (formas de gobierno, practicas rituales, sociales, etc.). Esto ha generado un impacto a nivel científico porque replanteó las posturas asumidas sobre el origen de la civilización andina. Además, ha impulsado el campo económico y social mediante el desarrollo del turismo cultural hacia la región. Este en especial se concentra en el valle de Supe y el asentamiento arqueológico Caral, postulado como zona nuclear de todo este fenómeno civilizatorio. La riqueza del patrimonio arqueológico concentrado por más de 4500 años, presente desde Arcaico Tardío (3000 años a.c 1800 años a.c) hasta el periodo de ocupación Inca (1533 años d.c), sin siquiera incluir el patrimonio histórico, es muestra de una larga secuencia de sociedades prehispánicas que vivieron y aprovecharon los valles del territorio. El patrimonio aquí se encuentra en permanente condición de vulnerabilidad causada por tráfico de bienes culturales que propicia el saqueo, además de las invasiones de poblaciones que carecen de viviendas y pugnan por establecerse dentro de las zonas arqueológicas. En ese panorama crítico para el patrimonio, la aparición de los proyectos de investigación -como el Proyecto Norte Chico o Zona Arqueológica Caral-, centrados en el estudio del fenómeno civilizatorio, han ido aportando mensajes en pro de la conservación del patrimonio, que se pueden reconocer en los espacios museísticos documentados en el presente estudio. Además, han introducido nuevas ideas y conocimientos sobre el patrimonio y la historia regional. Con esto también se entiende que la propuesta de red de museos es un llamado a integrar estos espacios que se mantienen entre el interés e indeferencia sobre el patrimonio, para que sean motores del desarrollo social y económico de la región. Vistos los referentes y el estado del conocimiento, se plantearon las siguientes hipótesis alineadas con los objetivos de investigacion ya mencionados: - En primer lugar, propongo que se trata de un universo variado, el cual no ha sido formulado originalmente acorde a un plan o política museológica. Son, en su mayoría, producto de múltiples iniciativas locales generados por diversos agentes que participan de la gestión del patrimonio como: autoridades distritales, provinciales, docentes, investigadores.

9 - La configuración de este panorama está constituida por una serie de al menos tres etapas, trayectoria en la que se amalgaman los logros de los agentes involucrados en el quehacer museológico y la gestión patrimonial, con la aparición y la contribución de nuevos agentes como arqueólogos y proyectos de investigación arqueológica. - En tercer lugar, planteo que la situación actual de los espacios museísticos representativos de la región tienen serias dificultades en cuanto al desarrollo de sus actividades vitales. A pesar de ello, los espacios son impulsados y se mantienen por las acciones y estrategias de los agentes involucrados en ellos. - Finalmente, en la trayectoria de la institución museística en la región, la presencia de investigaciones arqueológicas en el Norte Chico es una fuente que genera impacto en el quehacer museológico. Sin embargo el papel central recae en sus agentes culturales locales y fundamentalmente en la concreción de sus acciones y estrategias macro que logren articular en el futuro todos estos espacios museísticos y a sus agentes. Para abordar la investigación que podría resultar muy extensa debido a la complejidad que sugiere el desconocimiento o vacio informativo, principalmente se han establecido parámetros para contrastar las hipótesis. Los parámetros se enfocaron en los planteamientos sobre el museo planteado por Adolfo Castrillón y la gestión del patrimonio. Dentro de estos aspectos se van puntualizando los conceptos del quehacer museológico, el rol de los agentes culturales y la definición del patrimonio. Las fuentes tomadas han teorizado a partir del contexto latinoamericano y peruano, y nos ayudan a conformar el marco con el que se trata de explicar la situación que atraviesan los museos y reflexionar a lo largo de la investigación sobre el enfoque que toman los museos desde la praxis, desde el quehacer museológico en el Norte Chico. La situación crítica de los museos peruanos no era, ni es, una situación aislada. La situación y vocación de los museos para una sociedad en constante cambio y al servicio del hombre fue una discusión ampliamente desarrollada por los museólogos latinoamericanos. Un balance hecho diez años después de la Mesa de Santiago (1972), mostraba que las condiciones en los museos de América Latina eran similares como sucedía en el Perú (falta de presupuesto, infraestructura, personal, falta de políticas culturales que incentiven el museo, falta de formación académica, sin dejar de lado la misión social del museo que aún no se movilizaba en ese sentido) 1. El origen de estos problemas reside en que los museos 1 La situación de los museos fue una discusión ampliamente desarrollada por diversos museólogos latinoamericanos en una publicación de la revista Museum. La discusión tuvo como eje la reflexión y los avances logrados en los 10 años

10 son virtualmente ignorados [Estado] en la definición de las políticas culturales y en que no se les reconoce su papel en la gestión del patrimonio y en la satisfacción de las necesidades culturales de una nación 2. Alfonso Castrillón (1986; 2014), referente imprescindible en la museología peruana es vigente por su sentido analítico y propositivo de la situación de los museos peruanos. A finales de los 80 planteó que en país el museo tradicional como institución es un aparato cultural que ha servido para reproducir las ideas de la clase, del poder y/o de la ideología dominante que narra la historia como un hecho congelado mediante los objetos culturales (2014, pp.19-20). De allí, su postura crítica desde la formulación de la museología como ciencia interdisciplinaria desmitificadora de la historia y un museo moderno congruente con las necesidades de mejoría de la sociedad (p. ej. de sus desigualdades sociales); mirada que se compartían en América Latina, expresadas en la reunión realizada en Santiago de Chile en 1972, que hicieron hincapié en la función social de los museos en los países latinoamericanos. Desde su postura, el museo moderno es una institución cultural y científica, que debe producir conocimientos (de forma interdisciplinaria). En el circula el sentido (conocimientos) por medio de los objetos culturales, para hacer de él una institución acorde a las exigencias de una sociedad en constante movimiento (Castrillón 1986). En esta línea y a lo largo de sus planteamientos, Castrillón (2014) se sujeta a la tendencia de ver la cultura de forma dinámica, como las respuestas del hombre para mejorar su vida, para su desarrollo material y espiritual. Siguen pasando los años y la situación crítica de los museos parece prolongada. Como se desprende de las ideas de Castrillón y de la historia de los museos peruanos, el Estado fue y es un agente principal en la cultura y los museos, pues el principal responsable del manejo del patrimonio de la nación. En ese sentido, es que parte de su crítica fue dirigida al papel del Estado en la administración de los museos peruanos, en particular del Museo Nacional porque por mucho la ideología dominante (burguesa criolla) desconoció la complejidad cultural y social del país. De ese modo, en los museos ha prevalecido el sentido de reproducir la cultura y los objetos culturales (patrimonio), presentándola como un hecho que no tiene implicancia o posibilidad de transformar el presente. En ello, rescatamos la idea de Castrillón que sostiene que en el fondo los problemas funcionales de la institución cultural, tanto en el país como en América Latina, se encuentran precisamente en ese modo de manejar, dirigir y concebir a la cultura.. posteriores a la Mesa de Santiago. Ver: Museum (1982). Museos, patrimonio y políticas culturales en América latina y el Caribe. 34 (2). Revista de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Paris 2 Montreal, L. (1982). cien años de soledad?. Revista Museum, 34(2),

11 En el Perú se reconoce que el patrimonio, y la cultura en general, tiene un sistema de gestión y administración, vinculado normalmente al aparato estatal; el ministerio de cultura es la actual entidad estatal con la misión de proteger, conservar y difundirlo. Sin embargo, en las últimas décadas es evidente que el Estado no es el único agente responsable en el manejo de la cultura, el patrimonio y los museos en el país. En el contexto contemporáneo, se suman nuevos agentes que constituyen una participación social importante que han confluido en la gestión de la cultura, y dentro de ese campo en el quehacer museológico. Los agentes tienen un papel mediador (positivo o negativo) entre el Estado y el patrimonio cultural, generando acciones y estrategias que pueden convertirse en políticas culturales, según sostienen Zubiria & Tabares (2001). De esa manera, la noción del museo se ha ido cambiando, en la medida que se introducen y participan nuevos agentes culturales. Sus acciones no necesariamente pueden propiciar una transformación, también puede implicar una reproducción de lo ya establecido. Se suman los planteamientos sobre la gestión cultural del patrimonio de Zubiria y Tabares (2001), quienes lo han analizado y teorizado en el marco de acuerdos, experiencias y encuentros iberoamericanos 3. Estos autores señalan que la gestión es una noción que ingresa a esta región (Iberoamerica), comienza a reconocerse y teorizarse, a mediados de la década de los 80 ligada a grandes transformaciones contemporáneas en la dimensión social y política; una de ellas es, principalmente, la extensión de la noción de cultura y patrimonio (Zubiria, et al., 2001, p.20). Los países y regiones adoptaron denominaciones acorde a sus realidades, así dentro de cada país se podía identificar: tejedores, actores o agentes culturales. Dentro de esas diversas denominaciones, se advierte la inclusión o mejor dicho un límite borroso de la actividad económica dentro del patrimonio (Zubiria, et al., 2001, p.22). Cabe definir la gestión y señalar sus elementos pues es una noción teórica próxima a la praxis en los museos, en particular en el Norte Chico; se toma la denominación de agente, que es uno de los más comúnmente empleados en el país. La gestión del patrimonio cultural hace referencia al conjunto de acciones programadas con el objetivo de conseguir una óptima conservación junto con un uso adecuado a las exigencias sociales contemporáneas Más que un modelo general de praxis sobre la cultura y el patrimonio, se resalta y define a partir de elementos que participan en el proceso de gestión -manejo y administración- de la cultura. Fundamentalmente, no se considera como un modelo porque tiene como fuente al agente o gestor 3 La publicación de estos autores fue realizada en el marco del proyecto Administración de la cultura, del programa dela OEI para El Mejoramiento de la administración de la educación, la ciencia, y la cultura para el crecimiento de la calidad y servicios. Estos programas conducidos por la Organización de Estados Iberoamericanos buscan el fortalecimiento de los actores y agentes involucrados en iniciativas culturales. La edición de este trabajo es una de las primeras síntesis y soportes teóricos con que se aborda la gestión en la región. De allí que se considere el empleo de términos y elementos referidos a la gestión del patrimonio.

12 cultural, que es un promotor y generador de cambio en la medida que crea y genera estrategias [proyectos] acciones y políticas, las cuales son resultado de su conocimiento y análisis del contexto [territorio] político, social y, principalmente, cultural;confronta y desarrolla distintas forma de expresión y manifestación cultural, encuentra las relaciones que se dan o pueden dar entre el patrimonio y la comunidad (Zubiria, et al., 2001, pp.47-48). Desde la gestión se puede realizar un acercamiento a la forma en que los agentes culturales han ido direccionando o guiado sus acciones culturales, específicamente en sus modelos de gestión o administración. Este concepto implica el abordaje de temas de índole administrativo, organizacionales, de planificación dentro de los museos. En esta investigación, los agentes culturales son los principales involucrados en la gestión, administración del patrimonio y en el quehacer museológico. En una organización son aquellos que le dan vida y estilo propio, son quienes deben garantizar el logro de las variables organizacionales y la satisfacción de las necesidades y aspiraciones culturales de la comunidad o de un grupo social determinado (Zubiria, et al., 2001, p.69). Esta definición acorde a lo expuesto, permite denominar y reconocer como agentes culturales a: investigadores (arqueólogos, historiadores, etc.), docentes o profesores, autoridades locales (alcaldes), proyectos de investigación, entidades gubernamentales (municipios), asociaciones civiles (patronatos, fundaciones, comités civiles). La identificación y desarrollo de sus acciones en lo que a gestión y quehacer museológico se refiere, nos señalan el camino, las tendencias o nociones con que conciben o han ido construyendo sobre el museo, y, a más profundidad sobre la cultura. Tampoco se puede dejar de lado definiciones que de forma implícita se encuentran dentro de las definiciones. El patrimonio y las dimensiones del quehacer museológico, son nociones que se derivan de dispositivos legales y reglamentaciones que los regulan y protegen (Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación Nº y el Sistema Nacional de Museos del Estado). Acorde a las definiciones oficiales, el patrimonio en el sentido que se le emplea en la investigación -es decir, precisamente dentro de los museos- se expresa en cada uno de los objetos culturales (materiales o inmateriales) o su agrupación (colección) a los que damos algún tipo de valor y significado histórico, arqueológico, artístico. Más allá de eso, se pueden recuperar dentro de las reflexiones si es que el sentido del patrimonio para los agentes tiene otras implicancias. Se ha mencionado el quehacer museológico, disgregándola de la gestión patrimonial. En Sistema Nacional de Museos del Perú, responsable de la acreditación nacional de museos, y en general en la praxis museológica del país, se reconoce la noción y funciones del museo por medio del concepto

13 proporcionado por el Consejo Internacional de Museos (ICOM). Bajo este referente, como una forma de acercarnos a examinar las acciones dentro de los museos, se definió el quehacer museológico como el ejercicio o desarrollo de las funciones que caracterizan y dan vida al museo: adquirir, conservar, estudiar, exponer y transmitir el patrimonio con fines de educación y deleite (Desvallées & Mairesse, 2010, p.52). Evidentemente se disgregaron los elementos del concepto más conocido y empleado con el propósito de evaluar. Sin que ello, haya establecido el límite para incorporar diversas acciones que dinamicen su existencia. Como ya se ha venido señalando, el área de estudio toma como referente el Norte Chico peruano. La denominación en los últimos tiempos viene siendo revalorizada y retomada en el campo académico por medio de los estudios arqueológicos tanto sobre el periodo Arcaico Tardío como de otros periodos (Haas & Ruíz, 2003; Aguilar, 2006; Brown, 2009; Cruzado, 2010; Ichiki, 2012) en los que se destacan las vinculaciones y la continuidad cultural de los principales valles del territorio. Estos análisis contribuyen a profundizar la dimensión regional en la historia. La investigación se enmarca de forma diacrónica entre los años 70 hasta la actualidad. Es decir se corresponde con la fundación de los primeros museos, el Museo Bolivariano de Pativilca y el Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura, y culmina arbitrariamente en el 2014, año que fue el punto de partida para la construcción de esta investigación. En este margen temporal se ha podido establecer la aparición de diversos espacios museísticos acompañados de diversas oportunidades y agentes culturales que han favorecido su creación, gestión y dan forma al quehacer museológico en el Norte Chico. El marco metodológico o estrategia trazada parte del propósito, las características del objeto de estudio e investigación y los objetivos planteados. Se entrelazaron los varios datos a documentar, sistematizar y reflexionar a la luz de la teoría. Para cumplir con ello, se situó la investigación en el campo de la investigación documental y de campo; al inicio de los capítulos se describen y explican las técnicas e instrumentos empleados. En primer lugar, se revisaron y analizaron las fuentes bibliográficas sobre la museología peruana y las concernientes al Norte Chico que son desarrollados en los dos primeros capítulos. Asimismo, se registró a través de visitas cada uno de los museos, colecciones y exposiciones localizados en la región. De ese universo se seleccionaron dos casos representativos por su antigüedad, sus aportes y su funcionamiento continuado en el tiempo, entre otros criterios que se describen dentro del capítulo 2. El estudio de casos se fundamenta en la revisión de fuentes documentales-históricas, visitas a los espacios museísticos y entrevistas a sus principales agentes vinculados a su gestión y quehacer. Su selección tuvo el objetivo de

14 examinar el panorama museológico en una gran escala temporal para establecer la configuración del panorama museológico y establecer el diagnóstico de la situación actual que atraviesan. Para ello, el abordaje se relaciona y contrasta con la definición actual más ampliamente conocida del Museo, establecida por el ICOM en 2007 (Desvallées & Mairesse, 2010), al que se le suma la noción de agentes culturales que proviene del campo de la gestión del patrimonio cultural (Zubiria & Tabares, 2001). Por último, se revisó, analizó y reflexionó el conjunto de información producido a la luz de los alcances teóricos expuestos. El estudio se ha centrado en un examen panorámico de una región, acompañado de un análisis de casos particulares y representativos, que finalmente conforma una pequeña pieza de la praxis museológica del país. Se aspira que los resultados obtenidos contribuyan a reflexionar sobre este tipo experiencias desconocidas en el campo de los museos y el manejo del patrimonio arqueológico en una región donde su situación es de permanente vulnerabilidad. Situación que es compartida en el resto del país. En ese mismo sentido, la investigación ha querido analizar el rol de los agentes culturales que participan del quehacer museológico, con lo cual se busca contribuir de manera directa con ellos y con el patrimonio que resguardan, incentivando sus acciones o discutiendo la forma de mejorar estrategias. El estudio ha cumplido los objetivos trazados. Esos aspectos desarrollados a lo largo de los tres capitulos han podido subsanar el vacío informativo señalado y pretenden desencadenar futuras discusiones museológicas. En el capítulo 1, se ha podido definir el panorama de los museos peruanos como una aproximación general en donde se entiende la situación, posibilidades y concepciones museológicas de los museos en el Norte Chico. En el capítulo 2 se presenta el universo museístico del Norte Chico, constituido por 18 espacios museísticos; cifra también indicada por el Dr. Marcelo en el 2006 se mantiene aunque constituido por variaciones debido a la desaparición y creación de nuevos espacios. Este universo está constituido por museos (uno universitario y otro local), colecciones, salas de exposición, Casas-Museo y un proyecto de museo regional. En ellos, fundamentalmente se conserva el patrimonio arqueológico local, obtenido en su mayoría por medio de exploraciones arqueológicas a distintos asentamientos y cementerios prehispánicos, y en menor intensidad por investigaciones, donaciones e incautaciones. Su existencia y la experiencia, en particular de los agentes responsables del manejo de estos espacios, pudieron ser identificadas entre 2005 y 2006 a raíz de los talleres participativos desarrollados por el Proyecto Norte Chico. Finalmente, en el capítulo 3 se analizaron dos casos representativos, el museo de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión y el museo escolar de la Institución Educativa Nuestra Señora del Carmen. En ellos nos introducimos al quehacer museológico ofrecido por la experiencia de sus agentes, así como la integración de la trayectoria y

15 características del universo museístico en torno a una reflexión panorámica. Esta proximidad lleva a subrayar las condiciones en que operan estos espacios, sus dificultades y logros traducidos en acciones y propuestas de gestión de sus agentes, como sus estrategias para manejar las colecciones y sus acciones sobre la interpretación de su patrimonio. Finalmente me tomo estas líneas para agradecer en primer lugar, y especialmente, a mis padres y hermanos que desde lejos o cerca siempre me dan su cariño y apoyo incondicional. A la Secretaría de Relaciones Exteriores de México que mediante la dirección de Intercambio Académico y la subdirección de Asuntos Especiales para América Latina, han logrado que la posibilidad de estudiar en México sea un hecho; dentro de esta subdirección, un agradecimiento enorme a Irais Barreto Canales por su acogida y asesoría. Al Dr. Luis Gerardo Morales, por su guía y disposición durante el desarrollo de esta investigación y por alentarme la tarea constante que es reflexionar sobre nuestros museos latinoamericanos. Asimismo, al Dr. Manuel Gándara y a las maestras Leticia Pérez y Alejandra Mosco por su lectura y comentarios que han aportado muchísimo para afinar este trabajo. A los Dres. Henry Marcelo y Arturo Ruíz, y a los Lic. Juvenal Ramírez, Mario Advíncula y Jorge Príncipe, por abrirme las puertas a los museos y a sus experiencias con el patrimonio del Norte Chico. A todos mis colegas y amigos PANC. A Denise Pozzi-Escot, por su motivación y aliento constante. Al lado de ella, a mis compañeros del Museo de Pachacamac. Infinitas gracias a Andrés Triana por su asesoría y apoyo constante durante el proceso de ingreso al posgrado y, de igual forma, dentro de la ENCRyM. A mis maestros y compañeros de la maestría, por su ejemplo, amistad, sus enseñanzas y por su contagiante pasión por los museos. A la casita sudamericana: Florencia; Iván; Ricardo; Chris; Kathe; Gerardo; Edu; Xu, Adriana y su familia. Gracias chicos por hacer de México mi hogar. A mi compañía distante por su amistad inigualable: Laly; Ernesto; Aldo; Cinthya; Karla; Liz y su familia maravillosa. A Álvaro, por creer, estar y ser mi compañero.

16

17 TABLA DE CONTENIDOS CAPÍTULO 1. BREVE HISTORIA DEL MUSEO PERUANO El nacimiento de los museos y el papel del Estado peruano La situación de los Museos Peruanos Los museos en cifras La museología como disciplina y el ideal del museo en el Perú El Museo Ideal Conclusiones del capítulo CAPÍTULO 2. MIDIENDO EL UNIVERSO: MAPA DEL UNIVERSO MUSEÍSTICO Y CONFIGURACIÓN DEL PANORAMA MUSEOLÓGICO EN EL NORTE CHICO La región del Norte Chico Mapa del universo museístico en el Norte Chico Diseño y construcción del instrumento para mapear el universo Aproximación conceptual y sistematización del mapeo Mapa actual del universo museístico Configuración del panorama museológico en el Norte Chico Una mirada al interior del panorama: Selección de casos de estudio El Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión El Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa "Nuestra Señora del Carmen" Juntando las piezas del panorama: Propuesta sobre su configuración Conclusiones del capítulo CAPÍTULO 3. EL PANORAMA MUSEOLÓGICO EN EL NORTE CHICO: BALANCE Y REFLEXIONES Diagnóstico de museos El Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión El Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa "Nuestra Señora del Carmen" Diagnóstico actual Reflexiones en torno al quehacer museológico en el Norte Chico Conclusiones del capítulo CONCLUSIONES GENERALES BIBLIOGRAFÍA ANEXO 1 ANEXO 2 ANEXO 3

18

19 CAPÍTULO 1. BREVE HISTORIA DEL MUSEO PERUANO Hablar de la museología peruana en la actualidad es remontarnos a diversos estudios sobre la historia del Museo Nacional, a los diagnósticos de la situación de los museos peruanos (Castrillón, 1983; Aparicio, 1985; Martínez, 2002) y a un conjunto de estudios de casos. Estos valiosos y variados aportes constituyen un corpus de información importante que describen los museos a la vez que son indicadores sintomáticos del estado en que ellos operan en el país. Es un conjunto que parece desarticulado donde lo más desarrollado y propositivo por esbozar la situación de los museos, son los diagnósticos realizados en la década de los 80 y principios del Estos estudios son iniciativas independientes que en suma lograron medir el pulso de los museos peruanos. Algunos de ellos generaron propuestas de cambio, principalmente en la voz del museólogo peruano Alfonso Castrillón (1986), quien hizo un llamamiento a la participación del Estado en los museos y a la acción para que ellos sean más abiertos al público así como al rol que deben desempeñar en el desarrollo social y local como motor de cambio nacional. variados En el presente estudio se plantea realizar un examen detenido en la panorámica regional del Norte Chico. La mayor parte de instituciones que la conforman no alcanzaron siquiera mención alguna de su existencia dentro de las publicaciones referidas, aún cuando este panorama ha ido constituyéndose desde hace un poco más de 40 años. De unas 18 instituciones museísticas que se localizan en la región solo se mencionaron tres o cuatro por ser las más reconocidas o tener afiliación estatal o municipal. Por tratarse de un campo con escasos referentes en la literatura museológica, en el presente capítulo inicial se busca caracterizar y describir el panorama museal peruano, con lo cual se busca situar la posición del quehacer museológico desarrollado en el Norte Chico dentro de ese contexto. Para ello, se cubre un período extenso de modo general. Se parte desde la fundación del Museo Nacional en entidad que se convertiría en el museo progenitor y ente administrativo de los museos del país- hasta la actualidad. Tiene un mayor énfasis desde la segunda mitad del siglo XX en adelante, en cuanto al manejo de los museos por parte del Estado. Para lograrlo se ha articulado el conjunto de antecedentes de los museos y su administración en el país, la acción de las instituciones estatales responsables de ellos, los resultados de diagnósticos sobre la praxis en los museos peruanos y sus propuestas para una nueva práctica o quehacer museológico. Conjugar este conjunto nos provee una visión amplia para analizar y reflexionar sobre dicha práctica a nivel regional y nacional con la esperanza de que más adelante permita 15

20 ser un aporte que pueda ser empleado para comparar y analizar con otras experiencias museológicas en América Latina. En líneas generales, se plantea que este panorama se caracteriza por reunir un conjunto de instituciones museísticas con serios aspectos que dificultan su pleno desarrollo. Se encuentran en una situación crítica interna, generalizada y continua. Esta situación parte de aspectos fundamentales como la falta de una política museológica emprendida desde el Estado, la carencia de personal y su especialización, así como de recursos económicos, entre otros, que afectan sus principales funciones vitales de conservación, investigación y difusión y dificultan el quehacer museológico en el presente y que amenazan su futuro. En los últimos años, sin embargo, se pueden reconocer aspectos que han venido a traer potenciales aportes positivos a este panorama. Por ejemplo, el aumento de programas de especialización en museología y gestión patrimonial desde la década de los 90. Además, la creación de instancias administrativas e iniciativas culturales desde el Estado para el manejo de los museos a pesar de que aún es palpable la ausencia de una política museológica que los integre y mejore sus condiciones. Y, la aprobación reciente de la Ley de Puntos de Cultura, en el transcurso de este año, que permitirá abrir canales de diálogo entre el Estado y la sociedad civil, para fortalecer y concretar acciones de la ciudadanía en el campo general de la cultura. 1.1 El nacimiento de los museos y el papel del Estado peruano El origen de los museos en América Latina está ligado tanto al nacimiento de repúblicas independientes y su trayectoria ha estado acompañada de la arqueología, la historia y la antropología; dentro de los museos a lo largo del siglo XIX, y durante el siglo XX, éstas disciplinas jugaron roles muy importantes en la formación y concepción de los Estados-Nación. El origen del fenómeno del museo en América Latina es un tema que aún no tiene un estudio a profundidad, este requiere de análisis de índole histórico, político y social. A pesar de encontrar en su origen algunas similitudes, las pautas que las diferencian se anclan en sus dimensiones internas muy particulares como la constitución de su población autóctona, los procesos de ocupación de sus territorios, la procedencia de sus ocupantes y la diversa evolución política y cultural interna, lo cual se acompaña de forma tácita de un proceso de afirmación identitario así como de formación y consolidación de naciones (Linares, 2013, p.38). 16

21 En líneas generales las similitudes de los museos de las repúblicas nacientes se vinculan a una construcción territorial (fronteras geográficas) y temporal (dimensión de lo ancestral), conforme al designio de sociedad culturalmente homogeneizada. En el caso de los Museos Nacionales de Chile (1830) y Argentina (1884), se entrelazaba la historia natural, la antropología y, a lo largo del siglo XIX, se fueron sumando nuevas disciplinas (Botánica, Etnografía) como resultado de un proceso cientificista derivado de las aspiraciones positivistas. El marco ideológico era el evolucionismo y el patrimonio concebido como monumental, representando la cultura, la erudición y el progreso de los pueblos (Brichetti, 2009, p.18). En el caso del Museo Nacional de México (1825), éste se configuró como el espacio en el que los nacionalismos fundaban nuevos orígenes. En particular, en los Museos Nacionales de México y Perú-otrora virreinatos de España-, se pueden advertir algunos paralelismos en cuanto a se convierten en instituciones precursoras y entidades dotadas con facultades para administrar y resguardar el patrimonio. El Museo Nacional mexicano y peruano fueron creados en Desde sus inicios y por mucho tiempo se mantuvieron inoperantes pues se vieron afectados por las dificultades que marcaron el inicio de las jóvenes repúblicas: conspiraciones, invasiones, saqueos, levantamientos, a la que se sumaba una generalizada crisis económica (Fernández, 1987). En contraste con lo que sucedía en el Perú, la consolidación liberal del Estado (1867) y la continuidad del gobierno de Porfirio Díaz ( ) favoreció la maduración institucional del Museo Nacional mexicano; en ese periodo se le sumaron colecciones y museos particulares, se le dotó de un reglamento que lo mantuvo con un claro instrumento para la educación, organizado interiormente por disciplinas y áreas. Pese al desconcierto que se vivió por la revolución ( ), el museo se mantuvo en funcionamiento; en esa parte de su historia se fueron separando de él componentes para dar vida a otros museos como el de Historia Natural (1913), también se le confirieron funciones sobre el patrimonio al incluirse en el las inspecciones de monumentos arqueológicos y edificios históricos. Desde mediados del siglo XX en adelante con el establecimiento de los gobiernos posrevolucionarios operó como réplica del nacionalismo (Morales, 2007) y el sentimiento de lo propio, de lo mexicano, fue cobrando vigencia (Fernández, 1987, p.187). En sus diversas denominaciones y trayectoria ha formulado la praxis del culto moderno de la ancestralidad (Morales, 2007, pp.32-33). Dentro de los paralelismos y diferencias, encontramos que el Museo Nacional en América Latina es un espacio sintomático de las transformaciones, cohabitación y discrepancias, tanto políticas como sociales de su tiempo. Pero más allá de los periodos lineales de su historia, pensar a profundidad en ellos da pie a la formulación de discusiones museológicas, a la reflexión sobre la representación del pasado y sobre la 17

22 ritualización del espacio museístico, tal como Luis Gerardo Morales se ha aproximado en su obra Origenes de la museología mexicana (1994). En las líneas que siguen se inicia la construcción de un panorama del museo peruano en esa dirección. Sin embargo, es apenas un esbozo que futuras reflexiones museológicas pueden retomar y discutir. La creación del Museo Nacional peruano, en 1825, y su historia como institución cultural es la que quizás representa y recoge mejor varios aspectos de la evolución, visión y situación de los museos en el Perú. En esa trayectoria se recupera el papel del Estado en el manejo de los museos y el patrimonio cultural. Este papel se ha desarrollado con innumerables dificultades y ha ido cambiando conforme a la coyuntura política y social. Ha representado desde su fundación el difícil inicio de la museología nacional del Perú (Kania, 2010). Desde su nacimiento se han creado y fusionado varios museos fundados con la intención de representar a la Nación peruana [1]. Durante el siglo XX, a la par de tratar de consolidar el Museo Nacional los esfuerzos del Estado han dado nacimiento a varias organizaciones con la finalidad de administrar, conservar y promover la cultura y generar políticas para su autogestión. Dichos esfuerzos han tenido y tienen un alcance difícil por la falta del desarrollo y ejecución a tiempo de políticas culturales y museológicas, mismo que se ve reflejado en los resultados de los diagnósticos nacionales de museos realizados en el transcurso de la década de los 80. La fundación del Museo Nacional peruano se dio poco después de la consolidación de la independencia del país. Fue un proyecto ilustrado de la burguesía criolla, el cual era frustrado constantemente por el vaivén político de la república. Los liberales tras la declaración de la independencia en 1821, y a lo largo de ese siglo, tuvieron el anhelo constante de crear un sistema constitucional estable, ajeno a los golpes militares pues en ese entonces cada caudillo quería formar su propia República estable. Bajo una política liberal -primordialmente en el sentido económico- y con una serie de gobiernos inestables, no fue posible como tampoco tuvo prioridad- la maduración institucional del museo a pesar de los esfuerzos de sus directores. Entre 1825 a 1872 el Museo Nacional no había forjado una colección notable, como lo refieren algunas impresiones de viajeros notables (Ravines, 1989, pp.24-26). En el año 1861 el museo llegó a reunir una variada colección de un poco más de 5000 objetos de antigüedades peruanas, mineralogía, zoología, curiosidades y objetos de arte, a partir de donaciones y envíos de autoridades de provincias (Ayllón, 2012); su agrupación tenía la intención de dar un cuerpo y sustento orgánico al museo con una 18

23 colección que abarcara la totalidad del patrimonio cultural y natural del país. Con ello logro tener algo similar a una colección de Historia Natural, la cual se fue perdiendo debido a las mudanzas continuas y administraciones nada favorables repercutieron en el núcleo del museo que quedó reducido a un conjunto de rarezas. Sobre esta base trastocada se pretendió organizar el museo dentro del Palacio de la Exposición, espacio al cual fue trasladado durante el año De este periodo no se encuentran referencias sobre las disposiciones o exposición de la colección puesto que todo el primer intento de organizar el patrimonio cultural de la nación, por medio de la creación y administración de la Sociedad de Bellas Artes, quedó abruptamente interrumpida y devastada a causa de la Guerra del Pacífico ( ). El quiebre producido por la Guerra del Pacífico generó el debilitamiento de la vida política, social y cultural del país cuando la capital del país fue tomada por tropas chilenas entre 1881 a Se sufrieron muchísimas y lamentables pérdidas humanas y materiales. Tanto la Biblioteca Nacional, el Palacio de la Exposición (que incluía Escuelas de Arte, Museo Nacional, etc.), museos y otros lugares emblemáticos de lo nacional fueron saqueadas por las tropas chilenas y el patrimonio que custodiaban fue tomado como botín de guerra; entre otros aspectos, el Museo Nacional se desdibujó del panorama hasta Este hecho fue un parte aguas importante en la historia de vida republicana. A consecuencia de la guerra se diluyó medio siglo de la trayectoria del Museo Nacional. Su nacimiento y su vaivén hasta esta primera etapa representan el primer intento de elaborar un discurso sobre la identidad nacional. Después de la guerra, el país se cuestionó las causas de las mismas y entró en una etapa conocida como la Restauración o Reconstrucción Nacional comprendida entre En ella renace el sentimiento nacionalista, apoyado en valores como la lengua, tradiciones y la cultura material. Había que contrarrestar el período de fracasos de la nación y para ello se buscaba en los variados aspectos del patrimonio preocupaciones universales: antigüedad, heroísmo, sacrificio, exaltación de héroes, virtudes únicas, etc. (Lowenthal, 1996). Y el espacio para lograrlo fue el Museo Nacional (Kania, 2010, p.221). Esas primeras décadas conformarían el renacimiento de la museología peruana (Kania, 2010, p.220). A partir de las colecciones de propiedad pública [2], el 6 de mayo de 1906 el presidente José Pardo y Barreda volvió a retomar el Museo Nacional bajo el nombre de Museo de Historia Nacional, institución que dependía del Instituto Histórico del Perú. El instituto fue creado bajo su gobierno en 1905 y tenía un claro propósito [restauración y conservación] nacionalista al reunir los elementos para escribir la historia del Perú, formar el Museo Nacional y conservar los monumentos históricos (Ayllón, 2012, p.11). Por 19

24 ello, pasó a ser ente rector en el manejo de todo trabajo tanto arqueológico como histórico (Hampe, 1998, p.127). El discurso del presidente del Instituto de Historia, en la inauguración del museo, nos señala los ideales con que volvía a renacer el museo: El esfuerzo individual y colectivo debe convertir este Museo, hoy modesto, en un verdadero templo de la Tradición Nacional, debe ser la cátedra siempre abierta, la más objetiva, la más eficiente para la enseñanza y el desarrollo de la historia patria. (Mariano Ignacio Prado y Ugarteche, en: Ravines, 1989, pp.41-42). No sólo era la hora de la Historia Patria y el Museo Nacional, era el renacimiento de la museología de la mano de las Ciencias para clasificar y organizar la memoria de la nación. En parte lo demostraban los miembros que componían el instituto [3] y la selección del alemán, doctor en Letras, Friedich Max Uhle [4], precursor de la arqueología científica en el país para dirigir el museo y la Sección de Arqueología, así como la del Historiador José Augusto de Izcue para dirigir la sección de la Colonia y República. Fue la primera vez que se realizó coleccionismo estatal producto de las labores organizadas desde el museo por medio de las exploraciones y excavaciones arqueológicas. Producto de estas labores desarrolladas por Uhle, el museo pasó de poseer unas 2000 piezas, al momento de su inauguración, a conformar un acervo de algo más de 8000 piezas. Con la inauguración y funcionamiento del nuevo Museo Nacional, llamado entonces Museo de Historia Nacional, el país poseía por entonces el lugar de la memoria, continuamente despojada incluso antes de la guerra. La idea era reconstruir la nación por medio de una Historia Patria. Esto fue palpable en los decretos supremos de la época, algunos de los cuales procuraban conservar los objetos arqueológicos para la ciencia y la historia nacional, evitar exploraciones sin permiso de las autoridades, impedir la destrucción de monumentos históricos y arqueológicos, y utilizar los testimonios arqueológicos en la reconstrucción de la historia antigua. En 1911 un nuevo decreto supremo indicaba que los objetos recuperados mediante excavaciones le pertenecían al Estado, incluso serían enviados al Museo Nacional y, además, prohibía la exportación de objetos a excepción de que fueran duplicados (Kania, 2010). En ese sentido, pese a estas disposiciones que intentaban frenar la salida del patrimonio, se debe recordar que numerosas colecciones arqueológicas formadas principalmente durante los siglos XIX y XX se encuentran en museos de Europa y Estados Unidos [5]. A pesar de que se le asignó como responsable de la Sección de Arqueología, entre 1905 a 1911 el científico alemán Max Uhle desempeñó la función como director del museo. De ello dan cuenta sus 20

25 informes remitidos al Instituto Histórico. En ellos expuso cómo adaptó las instalaciones del Palacio de la Exposición, construido originalmente para albergar una feria internacional realizada en 1872 (Hampe, 1998, p.126), a las necesidades del museo. Además, indicó la organización espacial y museográfica de las áreas de Arqueología y Tribus Salvajes, Colonia y República. En la primera sala dispuso los restos prehistóricos, útiles y armas de indios y tribus salvajes, documentación de costumbres y técnicas de indios contemporáneos; en las otras dos se conservaban los recuerdos de las grandes épocas de la historia nacional (Ayllón, 2012, p.12), así como personajes y artistas prominentes del país. La presencia del material etnográfico era parte de la propuesta multidisciplinar de Uhle. Era reconocer una otredad en el país que hasta ese momento no se realizaba en un espacio museístico, a la vez fue el punto de apoyo del desarrollo científico de la arqueología para reconstruir el pasado a través del presente (Hampe, 1998; Kania, 2010). El primer informe de Max Uhle, en marzo de 1906, da cuenta de la concepción que tenía sobre el museo. Él proyectó esta institución como una de las mejores y más modernas. Su reporte contenía aspectos sobre la adaptación del inmueble a las necesidades del museo (salas de exposiciones permanentes, temporal, bodegas y depósitos de tránsito, espacios para la conservación, laboratorio de investigación, etc.), el personal especializado que necesitaría (tanto científico como de mantenimiento), la disposición de las salas y objetos (museografía), aspectos de conservación, las propuestas de exploraciones e investigaciones a realizar en un corto y mediano plazo, etc. Es interesante resaltar la visión que tenía de la institución, la cual era visión innovadora en la museología que se hacía desde el Estado para esta época [6]: Si se toma en consideración que un Museo no se funda para una sola ocasión, sino que las colecciones u objetos con que se abre son solamente el núcleo que se supone destinado a aumentarse continuamente con nuevas adquisiciones porque ningún Museo del mundo es perfecto, siempre debe seguir perfeccionándose, no importaría en ese sentido la fecha en que se deseara inaugurarlo, entregándolo al público El caso es excepcional, que un Director se ausenta por varios meses para hacer expediciones en provecho del Museo, pero tendremos también el Museo más moderno del mundo, basado enteramente sobre estudios propios, como deberían ser todos (Uhle 1906, en: Ravines, 1989) Según Uhle, el Museo era un espejo de los tiempos, de la condición científica y de la política cultural de la nación peruana (Kania, 2010). Este espacio con Uhle, formó parte de una reelaboración (acorde a los tiempos) de la memoria Nacional de posguerra de la mano de la historiografía peruana que despegaba sobre nuevas bases científicas e institucionales (Hampe, 1998, p.134). Sin embargo, una nueva ruptura produjo un cambio en el museo. La deficiencia en la administración pública, la continua disminución del apoyo económico del gobierno para las investigaciones arqueológicas del Museo Nacional por las cuales 21

26 replegaron las exploraciones de campo y las discrepancias académicas y personales que se habrían generado (Hampe, 1998) con los círculos conservadores del instituto, llevaron a Uhle a alejarse del museo en El circulo conservador estaba conformado por doctrinarios de la ideología criolla del hispanismo, el cual tuvo entre sus representantes al que se convirtió en el nuevo director del museo: Emilio Gutiérrez Quintanilla. Durante su dirección el museo tuvo un periodo de cierre y se segregó la Sección de Arqueología, la cual pasó a la dirección del arqueólogo Julio C. Tello. Esta separación, que en realidad era supresión, denotaba solo el interés por el contenido de la Historia Colonial y la Independencia (Kania, 2010). Sin embargo, los cambios más significativos en la administración del museo que involucraron los demás museos del Estado en el país vendrían en las primeras décadas del siglo XX, a inicios de los años 30. Esta discrepancia en apariencia superficial era más profunda y se manifestó en el campo intelectual peruano a inicios del siglo XX, en lo que se llamó la generación del 900 dominada por investigadores sociales y docentes universitarios con influencia ideológica y que dan lugar a posturas contrarias respecto a las ideas de indio. Por un lado el Hispanismo, formulado por aristócratas criollos como Riva Agüero y Víctor Andrés Belaunde, que resaltaba el valor del mestizo como producto social forjado en la Colonia y con dominio de los valores hispánicos. Y por otro, el Indigenismo iniciado por el arqueólogo Julio César Tello, procedente de una modesta familia de campesinos de los andes (Arguedas, 1967, pp.1-2) En el Museo Nacional a mediados del siglo XX, con la presencia de Luis E. Valcárcel y Julio C. Tello, contraria a la postura conservadora hispanista la corriente indigenista revaloró (redescubriendo) la historia y cultura del Perú arqueológico, se dio a la búsqueda de los valores en el periodo prehispánico andino, dio más atención al estado de las colecciones y a la falta de protección del patrimonio cultural (Kania 2010, pp ). Fuera del campo museístico, esta corriente idealizó el pasado prehispánico, propició el florecimiento de los artistas indígenas, la admiración del pasado glorioso, los de la Colonia y la de los héroes de la independencia. Con estas ideas manifiestas en el Museo Nacional, podemos observar que en el no solo se refleja el vaivén político que determina su existencia y que no logró la maduración de la institución. También en el hay un sustrato social e ideológico. Por un lado una visión social conservadora, aunque declarada liberal (que en la práctica se ejerce desde lo económico). En un primer momento no se reconoce la población autóctona en la construcción identitaria. Luego, con la corriente indigenista esa pugna se personifica en la 22

27 construcción de la identidad nacional, la cual formula una construcción más compleja e idealizada de la sociedad andina. Retomaremos brevemente a Uhle y sus aportes en el museo. Su concepción científica -la cual trataba de poner al servicio de la institución y por ende del Estado que lo acogía- se nutría de la tradición germánica del Kulturgeschichte ( historia cultural ). Esta se refiere o es entendida como el estudio de los diversos aspectos de la vida de los pueblos: espiritual, socioeconómica, formas de pensar, usos, etc. Bajo esta idea se integrarían la arqueología, antropología, lingüística y disciplinas afines. Por ello, insistía desde el museo y en sus diversas publicaciones, en la necesidad de conjugar un aporte multidisciplinario de estos diversos campos para lograr el conocimiento de las sociedades del pasado peruano (Hampe, 1998, p.134). Desde la sección de Arqueología del Museo de Historia, Uhle intentó mostrar un conjunto representativo de las variadas épocas y de cada una de las regiones del territorio peruano (Hampe, 1998, p.129). Estos eran períodos culturales que antecedieron a la civilización Incaica. Esta noción dentro del museo era nueva pues hasta entonces solo se reconocía un pasado glorioso encarnado por la civilización Inca [7]. Después de su salida del museo, en sus diversos ensayos y trabajos, Uhle desarrolló mejor esta perspectiva en la que los distintos pueblos (preincas) habitaron el país y vivieron en épocas de unión a gran escala (Horizontes). Propuso al menos cuatro Horizontes o estadios en la evolución cultural del territorio; el último culmina con los Incas, períodos en los que se difundieron diversos rasgos como la lengua, artes, etc. Su aporte académico ha permeado por mucho tiempo, destacando principalmente la periodificación, en parte las interpretaciones en arqueología y la forma que se organizan las colecciones arqueológicas dentro de los museos peruanos. Con el retiro de Uhle del museo y los cambios posteriores, la oportunidad de la restauración como del renacimiento de la museología se iban perdiendo, aunque ya había ganado sus principales directrices y rasgos que permeaban desde disciplinas como la historia y la arqueología. A pesar de la situación de inercia institucional que vivía el Museo de Historia Nacional, en el país comenzó a ser notable la aparición de varios museos arqueológicos, tanto por iniciativas privadas como estatales, y especialmente los museos universitarios; además, fue una época muy favorable para las investigaciones motivada por la celebración del Centenario de la Independencia ( ) y la Batalla de Ayacucho ( ), la cual consolidó la independencia del país (Tello y Mejía, 1967). Por una parte en 1919, surgieron museos privados pertenecientes a coleccionistas de piezas prehispánicas como 23

28 Víctor Larco Herrera y a Enrique Brüning, así como varios museos universitarios estatales [8], como por ejemplo, el Museo de Etnología y Arqueología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en Lima creado en 1919; el Museo Arqueológico de la Universidad de San Agustín en Arequipa, creado en 1933; el Museo de Arqueología de la Universidad Nacional de Trujillo, creado en 1939; entre otros (Ravines, 1989, pp.72-97). La bonanza económica de las primeras décadas del siglo XX socialmente promovió el aumento de la clase obrera y los intelectuales de clase media, en lo cultural permitió que el Estado fuera partícipe de adquisiciones de museos y colecciones privadas como parte de las celebraciones por el centenario de la Independencia. Entonces adquirió en 1924 el Museo Larco Herrera, inaugurado como Museo de Arqueología Peruana a finales de ese año; también adquirió en 1921 el Museo Brüning en Lambayeque. Con el fin del gobierno dictatorial conocido como el Oncenio de Leguía en 1931 [9], en el país se realizaron importantes cambios, entre ellos en la organización de los museos administrados por el Estado. En ese año, bajo un gobierno provisional, se emitió un decreto Ley que reorganizó por completo los museos [10]. Se fusionaron tres museos importantes de la capital que pasaron a conformar el nuevo Museo Nacional: el Museo de Historia Nacional, Museo de Arqueología Peruana (construido, organizado en 1919) [11] y el Museo Bolivariano (inaugurado en 1921). El propósito fue hacer de este un gran instituto científico articulado por áreas que lo nutrían: historia, artes, antropología y arqueología. Por ello, se crearon los departamentos de Arqueología e Historia, y los institutos de investigaciones Antropológicas, Históricas y de Arte Peruano, con la finalidad de conservar y estudiar todas las reliquias de la historia del Perú pertenecientes al Estado (Ayllón, 2012, p.13). El nuevo Museo Nacional se mantuvo durante siete años ( ). Luego, bajo otro gobierno provisional del militar Oscar R. Benavides, se emitió otro decreto Ley que derogó el anterior [12] y los museos nuevamente se reconfiguraron asimilando los departamentos e institutos creados. Producto de esto, quedó establecido un conjunto de museos con carácter de nacionales y se dio vida a uno nuevo: Museo Nacional de Antropología y Arqueología [13]. Este museo es el que finalmente paso a encarnar el Museo Nacional después de El año 1945 también marca el intento de un cambio sustancial que afectaría la organización de los museos administrados por el Estado. Se dispuso la creación del Consejo Superior de Museos, el cual se encargaría de vigilar y establecer las dependencias que los museos nacionales tendrían bajo su administración, tales como museos regionales, institutos, entidades, edificios y monumentos 24

29 (arqueológicos e históricos). Además, se encargaría de formular el proyecto de reglamento de organización y funcionamiento de los Museos Nacionales. Sin embargo, el dispositivo no logró ejecutarse pues ni siquiera se pudo conformar el Consejo (Ravines 1989, p.60). Lo único que se logró consolidar fue el Museo Nacional de Antropología y Arqueología al incorporar las colecciones, mobiliario y biblioteca del antiguo Museo Nacional de Arqueología. En la actualidad este museo ha pasado a encarnar el Museo Nacional precursor, esto se debe a que a través de los años se mantuvo en funcionamiento, sobrevivió a otros museos y porque en especial, en 1992, se fusionó con el Museo Nacional de Historia. Particularmente, las décadas de los 30 y 40 han sido las de mayores mutaciones institucionales que ha atravesado el Museo Nacional, marcado por la fusión y separación de sus colecciones e instalaciones [14], y las formas en la que el Estado trató de organizar y administrar los museos en el país. Con todos estos cambios, cabe sostener que, en esencia tanto los museos estatales como privados provienen del Museo Nacional precursor establecido en El Museo Nacional como precursor, también es evidente en la historia del Museo Nacional Mexicano a partir de cuyas colecciones iniciales, por ejemplo, se crearon el Museo de Historia Natural (1913) y el Museo Nacional de Historia de Chapultepec (1939). También fueron décadas marcadas por la presencia de notables académicos y científicos ligados a la investigación y con una participación importante dentro de los museos peruanos, algunos de ellos parte de la corriente indigenista como Luis E. Valcárcel y Julio C. Tello. Es poco lo que se conoce sobre el contenido expositivo detallado y sobre el discurso en torno al patrimonio al interior de los museos peruanos. Sin embargo, puede señalarse de modo general que, particularmente en el Museo Nacional, bajo la dirección de Valcárcel y Tello en las décadas 30 y 40, permearon las ideas que resaltaron la cultura autóctona de origen prehispánico como centro de la identidad nacional. Y ella se acompaña de la vitalidad y protagonismo el patrimonio arqueológico, de la mano de la arqueología cultural historicista [15]. Precisamente este sustrato del pasado es el que ha sido capturado por los nuevos proyectos de Museo Nacional en los últimos cincuenta años. Durante el transcurso de la segunda mitad del siglo XX en adelante se observa que, más que un cambio fundamental al interior de los museos estatales, se fue dando una serie de cambios en la estructura administrativa y que éstos tienen repercusión hoy en día. Fueron también años en los que tomaron fuerza los Museos de Sitio arqueológicos apoyados por patronatos privados en el norte del país. Asimismo, el Estado también impulsó la creación y el funcionamiento de este tipo de museos. Además, se volvió a retomar la idea de la construcción de un Nuevo Museo Nacional [16]. Finalmente, en las últimas 25

30 décadas del siglo surgen aportes importantes que esbozaron la situación en que encontraban los museos peruanos (Castrillón, 1983; Aparicio, 1985). De manera concreta los cambios administrativos están representados por la creación de una serie de instituciones encargadas de cumplir el papel del Estado en cuanto al manejo de los museos. Se creó la Casa de la Cultura ( ), transformada luego en el Instituto Nacional de Cultura (INC) en En el 2010, el instituto fue convertido en el actual Ministerio de Cultura. Con el establecimiento de la Comisión Nacional de Cultura [17] en 1962 integrada por la Casa de la Cultura del Perú, ésta se convirtió en la entidad de la que dependían los museos nacionales. En 1965 se disolvió esta comisión y se creó el Sistema Nacional de Fomento de Cultura, integrada por un Consejo Superior, la Casa de Cultura del Perú y las casas departamentales. En 1969 se reorganizó la Casa de la Cultura del Perú, esta institución contaba con oficina de monumentos arqueológicos e históricos, sección de investigaciones y estaba a cargo de los museos nacionales de Arqueología, de Historia y de la Cultura Peruana (Lima), el Museo Arqueológico de Huaraz, el Museo Histórico de Ayacucho, el Museo Grau (Piura) y los Museos de sitio arqueológicos de Huallamarca, Puruchuco y Pachacamac (Coloma, 2001). Si bien su creación persiguió el desarrollo de una política cultural del Estado, sus carencias presupuestales y la falta de visión política no le han permitido actuar con la eficacia requerida (Ministerio de Relaciones Exteriores, Plan de Política Cultural, 2003, pp.4-5). En 1971, apenas nueve años después de su creación, la Casa de la Cultura fue disuelta y se fundó el Instituto Nacional de Cultura [18]. Desde su nacimiento, este instituto (INC) dirigía las acciones sobre el patrimonio cultural del país, sin embargo no fue hasta 1984 cuando se estableció un organismo especifico con fines administrativos para velar por los museos, la Dirección General del Museo Nacional [19]. Qué hizo el Instituto Nacional de Cultura (INC) para lograr dinamizar e impulsar acciones museológicas? Durante 1983, en conjunto con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD/UNESCO) y el Banco Central de Reserva del Perú, realizaron un diagnóstico con la finalidad de conocer el estado y el funcionamiento de los museos en el Perú. Aunque hay que puntualizar que directamente este esfuerzo era parte de la asistencia que la Unesco y el PNUD brindaron a los gobiernos de América Latina y el Caribe para la ejecución de un proyecto regional de cultura, en el cual se enmarcaba la realización de este tipo de diagnósticos [20]. Resultado de ese estudio se pudo conocer la cantidad y la realidad de los museos peruanos, tanto estatales como privados (Aparicio, 1985). Pero dicho análisis no fue el pionero en el país. Se complementó con una iniciativa previa y particular desarrollada en 1982 por el museólogo peruano Alfonso Castrillón Vizcarra. Sin embargo, el aporte de estos estudios para 26

31 mejorar las condiciones de los museos no se viabilizaron en acciones o cambios concretos. El mismo INC dio cuenta en el 2002, en un catastro desarrollado integramente por ésta entidad por medio de la Dirección General del Sistema Nacional de Museos del Estado (Martínez, 2002), que la situación de los museos peruanos se mantenía de forma general diversos con aspectos negativos y críticos. los museos peruanos, desarrollado por encargo de la Dirección General del Sistema Nacional de Museos del Estado (Martínez, 2002). En 1992 se creó el Sistema Nacional de Museos del Estado [21] con la finalidad de integrar técnica y normativamente a los museos de las entidades públicas existentes en el territorio nacional para garantizar la defensa, conservación, investigación y exhibición del patrimonio cultural de la nación (Peirano, 2013, p.13). Al día de hoy, este sistema básicamente se ha quedado establecido como un centro de registro oficial de museos del país. En él se encuentran enlistados los museos privados que no pierden su autonomía, los museos administrados directamente por el INC (ahora Ministerio de Cultura) y los museos que no dependen de dicho organismo, es decir, museos municipales, universitarios y de otras entidades educativas (institutos, escuelas). En 2007, de acuerdo a la Ley de General de Patrimonio (Ley 28296), se impulsó el Registro Nacional de Bienes Culturales Muebles mediante un sistema informático con la finalidad de conocer en toda su extensión y protegerlo de amenazas como el tráfico ilícito. Hasta la actualidad, mediante el Registro Nacional continuamente se están incorporando tanto las colecciones del Estado como las que se encuentran bajo custodia de entidades privadas (coleccionistas, instituciones educativas escolares o universitarias). En el 2010, la fusión de distintas dependencias del Estado [22], en la que se incluía el INC, dio lugar a la creación del Ministerio de Cultura. Este ministerio tiene como tarea principal destacar la importancia de la cultura en el desarrollo nacional y promover políticas que implican desde normatividades jurídicas hasta infraestructuras materiales, desde articulaciones con la sociedad civil hasta la intensa movilización de recursos simbólicos en la activación de procesos sociales y eventos culturales diversos (Ministerio de Cultura, Lineamientos de Política Cultural , 2012, pp.3-4). La creación del Ministerio de Cultura ha generado la formulación de varios órganos desconcentrados en provincias para el manejo del patrimonio cultural. En materia de museos, estos se administran a nivel nacional bajo la Dirección General de Museos y Bienes Muebles. Tras su implementación, se percibe que persisten varias y antiguas dificultades detectadas al interior de los museos en el territorio nacional. A 27

32 pesar de ello, éstas han podido ser sorteadas de manera creativa por sus agentes culturales involucrados en la gestión y administración tanto de los propios museos administrados por el Estado como los que no, tal como se sostiene en los diagnósticos nacionales de los años 80. Hay que reconocer que a través de la historia republicana del Perú se han movido esfuerzos para desarrollar políticas culturales. Por ejemplo, bajo el protectorado del general Don José de San Martín en el siglo XIX se dieron las primeras legislaciones para la defensa del patrimonio y para la fundación del Museo Nacional. Durante el siglo XX fueron sucesivas las organizaciones gestadas por el Estado en materia de cultura y museos hasta llegar a la creación del Ministerio de Cultura en la primera década del presente siglo. Los decretos fueron las formas de intentar frenar la salida del patrimonio, detener a la extracción ilegal y la comercialización del patrimonio que ocurrían desde la Colonia. Estos dispositivos han sido las bases de la actual legislación de protección del patrimonio. Aunque ello no signifique que las acciones hayan sido efectivas o hayan disminuido el tráfico de patrimonio, lo que si ha logrado es regularizar la tenencia y mantenimiento de colecciones privadas, asi como la de los procedimientos de investigaciones arqueológicas. Con la creación del Ministerio de Cultura en el 2010, y bajo esta organización, por primera vez la cultura ya no dependía del sector educación [23]. Aunque, en la realidad no representó la ruptura de lazos estrechos entre ambas porque desde estas entidades no se generaron políticas que vinculan de forma directa la educación formal con las entidades culturales públicas, mucho menos en el ámbito específico de los museos. Es interesante observar que en México, el museo como instrumento para la educación fue tempranamente reconocido yvinculado a la enseñanza formal. En 1952 tuvo lugar la creación de un área especifica para ello: Servicios Educativos, luego convertida en el Programa Nacional de Comunicación Educativa del Instituto Nacional de Antropologia e Historia (INAH). Por medio de ellas se ha buscado vincular las estrategias pedagógicas para la enseñanza de la historia a las estrategias museológicas (Vallejo, 2002). Ese reconocimiento dentro los museos administrados por el INAH ha dinamizado la forma en la que el museo comunica de manera positiva y reconoce la diversidad de sus públicos [24]. El desarrollo de una política cultural de manera formal se viene estableciendo recientemente a cargo del Ministerio de Cultura. Desde los 2000 se propusieron una serie de lineamientos desde el INC y el Ministerio de Relaciones Exteriores, con el propósito de difusión cultural, promoción de las industrias culturales y turísticas para el ámbito nacional e internacional. Sin embargo, recién bajo la autonomía del ministerio estas propuestas fueron retomadas y trabajadas en un documento publicado en su versión 28

33 preliminar en el año En el documento se muestran los lineamientos de política cultural proyectadas del 2013 al año La política cultural es un conjunto de orientaciones, normativas y proyectos (Lineamientos de PC, 2012, p.7) a seguir que se desarrollan en corto, medio y largo plazo, y van en una misma dirección. Este plan ministerial , tiene como fin reforzar los proyectos existentes y generar nuevas ideas en el campo de la protección del patrimonio, promoción del conocimiento de la diversidad cultural, industrias culturales, las artes y la interculturalidad ciudadana, teniendo a esta como vector principal. La política cultural responde a una concepción de cultura que ve en ella un bien público y un derecho de los ciudadanos, importante para el desarrollo (social y económico) nacional y que no ha sido suficientemente potenciado desde la gestión pública. Uno de los lineamientos de política cultural corresponde a Defensa y apropiación social del patrimonio. Y este en particular es importante porque en el se reconoce la función del museo peruano como un agente fundamental en la nación por ser el canal dinámico para la conservación y difusión del patrimonio, el lugar de encuentro con la ciudadanía en el que se llama a la reflexión del conocimiento e identidad que enriquecen su vida (Lineamientos de PC, 2012, p.22). En cuanto a acciones a realizar desde este lineamiento, en lo se refiere a museos peruanos, son dos los aspectos que tratan de manera tangencial sus problemas. Se plantea la suscripción de convenios con gobiernos locales para la protección patrimonial y la modernización del Sistema Nacional de Museos, específicamente la renovación de dos museos: El Museo Nacional de Arqueología, Antropología e Historia y el Museo de Sitio de Pachacamac. Todos los lineamientos planteados en este plan de corto plazo van de la mano del desarrollo de estrategias de gestión, las cuales buscan vincular el patrimonio con el desarrollo local, con los diversos agentes (comunidades, agentes culturales, gobiernos locales, regionales). Este es un cambio sustancial porque se va dejando de lado el modelo de la segunda mitad del siglo XX en la que el Estado era el único y principal agente para dirigir la política cultural (Lineamientos de PC, 2012, p.7). En la práctica museológica en el Norte Chico rápidamente se puede identificar y rastrear cuál ha sido el impacto de esta nueva visión dinámica del Estado, aunque desde una primera aproximación a ese universo es notable el papel de los agentes locales en el manejo del patrimonio sin la intervención estatal. 29

34 1.2 La situación de los Museos Peruanos Hasta entrada la década de los 80 no se sabía cuántos o bajo qué condiciones funcionaban los museos en el Perú. En 1983, con la aparición de la publicación Primera encuesta de Museos Peruanos, realizada por el museólogo peruano Castrillón Vizcarra, se produjo el primer acercamiento a la realidad de la praxis museológica en el país. En 1985 se publicó Diagnóstico de Museos del Perú, producto del trabajo colaborativo el PNUD/UNESCO y el Instituto Nacional de Cultura (INC). La publicación contenía los resultados de la encuesta que realizaran estas instituciones durante el año 1983 en todos los museos del territorio nacional (Aparicio, 1985). Un trabajo propiciado íntegramente y publicado por el INC en el 2002, bajo la Dirección General del Sistema Nacional de Museos del Estado, fue titulado Perfil de Catrasto y Situación de los Museos del Perú. En el se da cuenta de una sistematización de los datos recogidos en el mencionado sistema (Martínez, 2002), pero sin una profundización detallada de las condiciones y funcionamiento de las instituciones museísticas del país. En años recientes, el Ministerio de Cultura llevo a cabo un diagnóstico de los museos que dependen directamente de su administración, sin embargo los resultados aún no se encuentran disponibles al acceso público. El trabajo llevado a cabo por Castrillón nació como un proyecto de investigación que fue apoyado por el Instituto de Investigaciones Humanísticas de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en Lima. El proyecto consistió en una encuesta que requirió un año para su realización, fue ejecutado con escaso financiamiento por lo cual se delimitó a tratar de abarcar una muestra representativa. Registró 37 de los 60 museos que se creía que existían, pues el INC, órgano específico para dirigir, administrar y conducir los museos a nivel nacional, no tenía información precisa sobre ellos (Castrillón, 1986, p.89; Castrillón, 2014, p.84). Aún con estas dificultades, el estudio fue pionero en el tema y en recopilar una muestra representativa de lo ocurría en el interior de las instituciones museísticas del país. La aparición del Diagnóstico de Museos del Perú en 1985, vino a complementar y a ampliar el panorama esbozado por Castrillón. Lo primero es que se determinó que en el país operaban 130 museos. Estos estudios abrieron espectros importantes a reconocer sobre la realidad de los museos tanto estatales como privados [25]. Además, enumeraron diversas tipologías museísticas acorde a su administración y colecciones, e indicaron los problemas fundamentales que afectaron, y que aún afectan, a los museos. Ambos estudios tuvieron un camino metodológico similar, a diferencia -como se verá más adelantedel establecido por el INC en el 2002 (Martínez, 2002), para el estudio de las instituciones museísticas y su quehacer al someterlas a una evaluación comparativa con un referente establecido como el Museo 30

35 Ideal basado en la definición conceptual del Museo. Es decir, examinaron en cada institución, en qué grado se acercaban o alejaban de cada una de las funciones establecidas en definiciones de organismos internacionales como el ICOM o UNESCO. Entonces este parámetro teórico consideró el museo como una institución científica que se investiga, conserva y educa. Las encuestas creadas como instrumentos en estos trabajos propusieron una serie de preguntas fundamentales que fueron agrupados en varios ejes temáticos como colección, investigación, conservación, exhibición, infraestructura, presupuesto, etc. En términos generales, se destaca que en ambos estudios, a pesar de la diferencia numérica de encuestas aplicadas, tienen puntos de coincidencia que ratifica y esboza una situación crítica de los museos en aquellos años. De ese universo se detectaron museos localizados en la región del Norte Chico: el Museo Regional de Antropología y Arqueología de Huacho que ha dejado de funcionar en la década de los 90, el Museo Arqueológico de la Universidad Nacional Faustino Sánchez Carrión (Huacho) y el Museo Bolivariano (Pativilca), estos últimos activos al día de hoy. Los resultados de estos estudios midieron el pulso a los museos peruanos de los años 80. Se encontraba un panorama museológico desfavorable, con puntos críticos en la administración y planificación, la carencia de recursos económicos suficientes para poner en marcha el desarrollo de sus acciones y funciones, así como la falta de especialistas e infraestructura. Las reflexiones de Castrillón (1986) en torno a ello señalan la definición de museo en el Perú como terminantemente excluyente porque incluso más de la mitad no podrían ser llamados museos, visto que muchos de ellos se limitan solo a exponer sus colecciones. También pusieron en evidencia que el Estado y los gobiernos de turno no generaron las políticas y/o mecanismos para explorar a profundidad y mejorar el campo museológico. En ese sentido, el estudio de Castrillón, al ser una iniciativa de un profesional al margen del sector público, demostraba lo poco que se había hecho por aproximarse a estas entidades desde el Estado. En la mayoría de los museos los recursos económicos fueron absolutamente insuficientes y la tendencia general fue culpar de todos los males a dicho aspecto (Aparicio, 1985, p.145). No era para menos, pues la mayoría de ellos no contaban con una partida presupuestal anual. Solo un par de museos localizados en Lima como el Museo Nacional de Antropología y el Museo Universitario de San Marcos, mostraron que contaban con presupuestos altos para llevar a cabo sus actividades. Los que contaban con los presupuestos más bajos se localizaron en las provincias. En varios casos los gastos fueron cubiertos por ingresos generados por el museo o con los del propio bolsillo del director o del personal (Castrillón,1983; Aparicio, 1985). 31

36 Fundamental fue la determinación de que en la mayoría de los museos tenían como personal de planta a un encargado o director que llevaba a cabo la totalidad de actividades y funciones del museo. Las especialidades con que contaban eran afines al campo de los museos: Historia, Arqueología, Historia del Arte, con una mínima presencia de personal capacitado o formado en Museología y Museografía [26]. De la mano de esta situación, las políticas de capacitación al interior de estos espacios tampoco fue un aspecto que se realizara habitualmente. La preponderancia de museos con colecciones arqueológicas era significativa y natural en un contexto como el peruano en el que se desarrollaron una gran cantidad y diversidad de culturas y asentamientos prehispánicos y en el que las condiciones geográficas y ambientales permiten la conservación de estos vestigios a pesar del tiempo transcurrido. La mayoría de esfuerzos se centraron en el registro de las colecciones, aunque tampoco fueron hechos por completo. Los museos universitarios y privados fueron los que desplegaron mejor sus políticas de adquisición mediante la investigación científica y compra. Con respecto a la conservación y restauración de los objetos, estas actividades se realizaban por lo menos en la mitad de los museos. Sin embargo, había carencias tanto del personal dedicado a esta labor, como de presupuesto y de infraestructura (laboratorios). El tratamiento del control ambiental era insuficiente y descompensado tanto en las salas de exposición como en los depósitos. En cuanto a investigación, la situación era crítica. La mitad de ellos no las realizaba. Solo los Museos Universitarios y los del INC fueron casos excepcionales. Castrillón llama la atención sobre esto porque si bien casi todos indicaron que tenían relación con programas de investigación, en realidad se trataron de proyectos de investigación desarrollados por el personal u investigadores que se sumaron esporádicamente a los museos. Con esta situación, tampoco se podía revertir lo que él denominó criterios museográficos estacionarios, correspondiente a la notoria falta de actualización y falta de información que acompaña las piezas en las salas de exposición, en especial en los museos de provincia. La difusión cultural mostró tanto señales de estancamiento como de avances. Solo un 18% de los 130 museos realizaba programas educativos esporádicos (talleres, visitas escolares, maletas educativas, conferencias, seminarios, mesas redondas, concursos, conciertos etc.), y en número muy reducido esos programas fueron acompañados de evaluaciones. En provincia la situación ocurrió en un porcentaje mucho menor. Las publicaciones también fue un aspecto desatendido. Solo un 8% publicó periódicamente en revistas cada vez que los medios económicos lo permitieron. Las publicaciones científicas sumaron un 18%. Este porcentaje llama la atención si se considera que por lo menos en la 32

37 mitad de ellos se realizaban investigaciones. Ello significaba que no se están publicando los resultados. Y cabe agregar que cuando son de corte académico, por su tipo de lenguaje particular no han permitido el acceso a la comunidad que conforma el entorno directo del museo. Los estudios o evaluaciones del público fue un aspecto tratado mayormente por la contabilidad de visitantes, en libros de registro de visitantes, boletaje, etc. Con respecto a otro tipo de información, éstos incluyeron una referencia restringida a categorías de visitantes como nacionales (estudiantes de escuelas y colegios, turistas) y extranjeros. Fue una minoría de museos que se ocuparon de documentar las visitas mediante cuestionarios sobre lo que le interesaría ver al público. Con respecto a la infraestructura, los inmuebles en la mayoría de museos no fueron ex profesamente construidos para estos. Las instalaciones se adaptaron y dicha situación se puede correlacionar con las condiciones de las colecciones, pues la forma y los materiales (precariedad) empleados contrariaban la seguridad y el buen estado de conservación de las piezas (humedad, salinidad, etc.). Una referencia de la responsable del trabajo realizado para Diagnóstico de los Museos del Perú condensa dicha situación Aparicio (1985) señalo que en síntesis, podemos decir que en la mayoría de los museos, el hacinamiento de material en los depósitos y su desorganización afectan la integridad, manejo y control de las piezas. Queremos subrayar que esto es especialmente frecuente en los museos del INC (p. 94). Hubo algún cambio tangible que haya revertido la situación de los museos? La finalidad de estos estudios era ser una base para futuras guías para el Estado como para el sector privado en el manejo de museos, sin dejar el lado crítico sobre el papel que debía de cumplir el Estado al respecto. Por esos años se discutía la idea de la construcción del nuevo Museo Nacional, en una época de particular crisis económica y social (deuda externa y la presencia del terrorismo en la capital y provincias). La postura crítica no era la de abandonar el proyecto del todo, la crítica era a su falta de planificación y concepción en su ejecución. Porque en efecto, como expresara Castrillón (1986), se necesitan de museos para los peruanos, para una sociedad en cambio, para forjar la identidad nacional, y, muchos de estos museos ya existen y necesitan que el Estado también se ocupe de ellos, tal como demostraron estos diagnósticos. 33

38 1.2.1 Los museos en cifras En 1825, después de la consolidación de la independencia del Perú, se abrieron las puertas del Museo Nacional del país, precursor de los museos peruanos. Han transcurrido 191 años de este hecho y a pesar de las dificultades del quehacer museológico, el número de museos y espacios museísticas en el país ya asciende a 249 (Ministerio de Cultura, Guía de Museos del Perú, 2013). El informe publicado por el INC en 2002 puso en evidencia un aumento de museos en el país con respecto a los identificados en las décadas anteriores. De 130 pasaron a sumar unos 235 museos. Las cifras mostraban un aumento en un lapso de 17 años. Un promedio de 6 museos creados cada año. A qué condiciones se podrían atribuir el aumento de las cifras? Sin duda, en primer término, no respondían a una política museológica. En esos años se crearon una serie de museos que fueron impulsados principalmente por la iniciativa de gobiernos provinciales, distritales, instituciones educativas (universidades, escuelas, institutos pedagógicos) y particulares (coleccionistas, empresas). Con lo cual, se ratifica la idea de que el Estado no era el único y principal agente responsable y comprometido con el patrimonio y con la política cultural. Realmente, la pregunta tras reconocer esto es Qué tanto de la panorámica crítica de los años 80 se ha logrado revertir? La iniciativa de la Dirección General del Sistema Nacional de Museos del Estado del INC puso en marcha el desarrollo de un Perfil de Catastro y Situación de los Museos del Perú (2002). El producto fue una sistematización y procesamiento de la información disponible de los museos estatales y privados registrados en el Sistema Nacional. La intención era crear acciones desde el INC para mejorar las condiciones de los museos bajo su administración y crear lineamientos para otras entidades estatales y privadas, de manera que los museos funcionen al 100% como tales (Martínez 2002, p.49). El trabajo recogió ideas generales que no profundizaron en la situación misma de los museos. Se articularon una serie de caracterizaciones de acuerdo a la distribución espacial y los tipos de colecciones de los museos y se anotaron consideraciones globales sobre sus carencias y posibilidades. Los principales aspectos que destacaron entonces fueron en tres esferas: Colecciones, Edificios y las Categorías de Museos. Se resaltó el carácter esencialmente arqueológico e histórico que prima en los museos peruanos y como tarea pendiente se puso la investigación de la naturaleza de sus colecciones. Las condiciones de sus edificios resaltaron por sus condiciones favorables, aunque la información fue escasa y además careció de una constatación en la realidad. Y, además, se destacó la gran presencia de Museos de sitios arqueológicos, en su mayoría administrados por el INC, y los Museos locales administrados 34

39 principalmente por municipios. En este campo se señaló la carencia en conservación, exhibición y administración de museos locales, a la vez que se propuso la creación de este tipo de museos de Sitio y de Arte, así como apoyar las debilidades institucionales indicadas. Cabe destacar la mención y presencia de los Museos Escolares cuyo desarrollo no ha sido aún explorado en el país. Dentro del catastro se identificaron los museos presentes en el Norte Chico, como el Museo Municipal de Chancay, el Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura (Huacho), el Museo Arqueológico de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión (Huacho) y el desactivado Museo Regional de Antropología y Arqueología de Huacho. Las acciones emprendidas desde la administración estatal después de cuantificar y describir los museos del país y el balance al respecto son desconocidos. Tampoco se podrían indicar cambios evidentes que hayan repercutido favorablemente en el panorama museológico peruano con respecto a la operatividad de las instituciones. En la actualidad, en el Perú se encuentran unos 249 museos administrados en un 70% por entidades estatales (Ministerio de Cultura, Municipalidades, Escuelas, Universidades, etc.) y un 30% por instituciones privadas (Particulares, Fundaciones, Organizaciones Comunitarias, Universidades, etc.). Una gran cantidad de ellos se encuentran en la capital y representan alrededor del 25%. En el resto del país, por lo menos hay en promedio dos museos en cada provincia o región. De los museos estatales, un 25% es administrado por el Ministerio de Cultura. Entre ellos sobresalen los Museos de Sitio arqueológicos, y son precisamente ellos los que son un número significativo en el país. En los últimos años son lo que más han recibido apoyo del Estado. Son a la fecha de hoy, los museos que concentran mayor cantidad de visitas tanto en la capital como en los departamentos o regiones, según las últimas cifras expuestas en el portal web del Ministerio de Cultura que recoge las estadísticas de los museos que administra [27]. A la par, sobresalen un número significativo de Museos Municipales (20%) y Museos Universitarios (13%). Éstos, en estos últimos años han sostenido de forma equilibrada sus funciones apoyados por las instituciones de las que forman parte. 35

40 1.3 La museología como disciplina y el ideal del museo en el Perú En la década de los 60 las definiciones académicas y de organismos internacionales (como el ICOM, por ejemplo) sobre museos y sobre museología subrayaban el carácter de ciencia de esta última y mencionaban un conjunto de funciones que dan vida al museo: Investigar, conservar, difundir, etc. Para Castrillón (1986, pp.20-21) estas definiciones en realidad no sistematizaron o articularon los contenidos, funciones y postulados de la disciplina. En el Perú, en las décadas de los 70 y 80, tanto Museología como Museografía fueron definidas como una propuesta teórica integral en la obra antológica de Castrillón Vizcarra (1986; 2014). Dentro de la literatura museológica peruana, fue la primera vez que se ha propuesto la forma en que debe orientarse la museología, además, de resaltar el rol social deben guiar a los museos. Con ello, dentro del país, Alfonso Castrillón Vizcarra es el pionero y se mantiene como talen impulsar el reconocimiento y la definición de la museología como ciencia interdisciplinaria. Al mismo tiempo, se ha destacado como un promotor esencial en la formación de museólogos desde el campo académico. Estos aportes fueron desarrollados y sustentados a partir de la situación de los museos peruanos que esbozó como resultado de la primera encuesta nacional de museos que realizó en Si bien la obra antológica de Castrillón Utopía y Realidad en la Museología Peruana fue publicada a fines de los años 80, los tópicos tratados en ella aún se encuentran vigentes como tareas pendientes en la discusión y el quehacer museológico nacional. Tal es la vigencia y reconocimiento de su aporte que en el años 2014 su trabajo fue reeditado por la Dirección de Museos y Patrimonio Cultural de Colombia y la Universidad Nacional de Colombia, país en el que se mantuvo entre los años 70 y 80 impartiendo cursos de teoría museológica. Algunas de sus propuestas han tomado forma en la actualidad, tales como por ejemplo la consecución de espacios para la formación profesional de museólogos, la cual se señalará más adelante. Castrillón (1986) definió la museología como: La ciencia que se ocupa de dar sentido a los objetos culturales en el ambiente llamado museo o fuera de él, por medio del diseño, desarrollando ciertas funciones (catalogación y archivo, conservación, exhibición y extensión cultural) y de acuerdo a ciertos métodos y técnicas denominados museografía. (p.22) Lo que pretende es que la serie de funciones que desarrolla el museo se articulen por medio de lo que denomina Diseño Museológico. Tal diseño como propuesta se refiere a un método para concebir una articulación entre funciones y espacios en un nuevo museo que se constituye desde la concepción de una 36

41 idea abstracta (propuesta cultural) y muy general a una idea muy particular, concreta, anclada en la realidad, cuya finalidad es posibilitar la captación del sentido, así como el desarrollo de la experiencia cultural (Castrillón 1986, p.23). En ese sentido, la museología como diseño se constituye en un plan de selección de alternativas congruentes con la realidad, es la articulación de funciones y espacios, es planeación. Tal planeación se conforma de cinco fases que estudian el contexto y la situación de la(s) institución(es) museística(s) para evitar improvisaciones en su creación o reformulación. Además, involucra a un equipo interdisciplinario (conservador, museólogo, arquitecto) con conocimientos de los variados aspectos del museo y que puedan generar un intercambio de experiencias que favorezca el desarrollo y la crítica constructiva de la propuesta. El autor también consideró el papel de la museografía como método de la museología y como diseño. Es decir, la organización del espacio y de la explicación científica de los objetos, de los hechos culturales. No dio el papel a la museografía como una simple técnica, pues ella exige una serie de etapas que involucra un equipo interdisciplinario y un conjunto de tareas que involucran aspectos de investigación, propuestas teóricas y diseño (en un sentido amplio). Por tanto, la forma en que se debe llevar a cabo una exposición equivale al desarrollo de una serie de etapas en las que se articulan los aspectos antes mencionados, la cual fue una propuesta sistematizada en su obra antológica (Castrillón, 1986, p.46; 2014, p.74). Castrillón remarca el carácter científico de los museos, de su disciplina. Por tanto, los museos como instituciones culturales y científicas, deben ofrecer los últimos alcances y conocimientos científicos obtenidos por las investigaciones de diversas disciplinas (arqueológicas, históricas, etc.). Pero, señala que, en la realidad existen pocos museos en el Perú que cuentan con programas de investigación que puedan ofrecer esta explicación como lo indicaban los resultados de la encuesta promovida a partir de su iniciativa. En la mayoría de casos se accede a fichas técnicas que presentan a los objetos de manera aislada. Además, se presentan en términos de abundancia y estética de las piezas (por ejemplo las arqueológicas) que han dejado de lado aspectos de la historia como: la habilidad de los grupos sociales para organizarse y administrar territorios, entre otros aspectos. Con ello, en los términos de Castrillón, se asiste a un ejemplo de mistificación de la historia debido a que prima la ideología estética sobre cualquier explicación histórica-social; de igual forma sucede en los museos de historia republicana o colonial. Para contrarrestar los efectos de tal mistificación y el sentido acientífico que involucra, propone y le asigna una función de Intertextualidad al museo, esta es entendida como la acción de devolver al objeto sus significados originales (Castrillón 1986, p.34). Dicho de otra manera, es darle la posibilidad a los 37

42 objetos de ser leídos y explicados desde diversos puntos de vista: tecnología, religión, arte. También es generar que el público pueda sacar sus propias conclusiones. Por todo esto, al pensar en el museo moderno es necesario considerar estos aspectos que se engranan en su interior y pensar también en el papel que juega la ciencia -para dotarlo de un método, diseño y planeación- para hacer de él un reproductor de cultura en constante movimiento y al servicio del hombre hoy (Castrillón, 1986, p.54). Principalmente, desde la década de los 70 hasta la actualidad ha ido creciendo la demanda y la oferta en la especialización en el campo de la Museología peruana. Una cada vez más creciente reunión de profesionales de museos manifestaba ya esta necesidad de la profesionalización [28]. La aparición de programas, seminarios y otros cursos enfocados en las diversas áreas que operan en el museo [29] (gestión cultural, curaduría, conservación, etc.), han ido cubriendo las principales demandas de parte de los profesionales de museos a nivel nacional. Sin embargo, en su gran mayoría se han llevado a cabo en la capital, limitando el acceso en el resto del país. Posteriormente se han ido incorporando programas de largo aliento como la Maestría en Museología y Gestión Cultural, impulsada desde la década de los 90 por Castrillón dentro de la Universidad Ricardo Palma; así mismo sumó a la oportunidad de profesionalización la aparición del Diplomado en Museología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, al interior de la Facultad de Letras y Humanidades. Parte del resultado es la formación de profesionales en la materia, así como la aparición de una serie de publicaciones académicas como tesis de grado, artículos en revistas especializadas, publicaciones antológicas (p. ej. Gamboa, 1998; Borea, 2008; Kania, 2010; Alemán, 2011; Chirinos, 2013; Castrillón, 2014), y la aparición de la revista Illapa en el 2004, de la mano del Instituto de Investigaciones Museológicas y Artísticas de la Universidad Ricardo Palma y bajo la dirección de Castrillón Vizcarra. También han aportado al panorama museológico peruano la creación y la presencia de organismos que han contribuido a la formación y agrupación de los profesionales de museos. La Sociedad Peruana de Museología, creada en 1981, auspició varios eventos como cursos y conferencias, a menudo en colaboración con instituciones nacionales estatales e internacionales y tuvo presencia dentro de los museos peruanos que se adscribieron en esa década (Aparicio, 1985, p.25). Asimismo, hizo su aparición el Consejo Internacional de Museos (ICOM) en el Perú en 1987 y, en años recientes, la Asociación de Museólogos, Intérpretes del patrimonio y Gestores culturales (AMIG-Perú), fundado en 2006, en la que se integra un grupo de profesionales del sector patrimonio y viene promoviendo reuniones, conferencias y cursos como parte de sus estrategias para vincular a los agentes involucrados (profesionales, instituciones públicas y privadas) para beneficio del patrimonio cultural y natural del país. 38

43 1.3.1 El Museo Ideal Pensar en el surgimiento de los museos en el siglo XIX es considerar que estas instituciones fueron concebidas como el lugar para la conservación de la memoria nacional, para la generación de un sentido de identidad nueva. El Museo Nacional era entonces parte de un acta de nacimiento del Estado y tenía un sentido de representar su unidad y homogeneidad. En el siglo XX, tras la Guerra del Pacífico y motivados por la restauración del país, el museo nacional se convirtió en el espacio para conservar y difundir aún de forma más contundente las ideas nacionalistas, para restaurar un país en crisis. Las dificultades de llevar las ideas que representan la nación a la praxis y la gestión del patrimonio cultural son notorias y constantes en la historia del Museo Nacional y en la diversidad de instituciones que acompañaron esta trayectoria. Muestra, en síntesis, la dificultad (y/o desinterés) por parte del Estado para crear políticas culturales sostenibles. Las instituciones museísticas en el Perú surgieron en su mayoría en la segunda mitad del siglo XX. Hasta ese momento no se tenía un panorama global de los museos que se encontraban en el territorio. Los primeros estudios integrales sobre los museos peruanos, a finales de la década de los 80, nos acercaron a una situación crítica. Al interior de ellos se manifestaba unas grandes ganas de hacer museos bajo premisas tradicionales y con muchas dificultades para la acción de sus principales funciones. Según la museología tradicional y las clásicas definiciones internacionales sobre el museo, después de ver la situación de los museos con estos estudios, se puso en evidencia que en el país solo muy pocos logran desarrollarse bajo el modelo internacional (Castrillón, 1986). Por dentro subsistían una serie de problemas que impidió su funcionamiento y desarrollo positivo. Dentro de este panorama de museos de los años 80 se recogieron muestras significativas de la concepción de la institución (museo) y su rol social de la voz de sus directores y encargados. Predominaron tres visiones. En la primera, las definiciones apegadas al concepto integral del museo, similar al establecido por el Consejo Internacional de Museos (ICOM) de aquellos años. La segunda visión de una idea o un concepto menos completo que el anterior; en síntesis, el museo como un centro cultural basado en la exhibición pero no llegan a entender [directores y encargados] el alcance del investigador, creador y difusor que puede y debe tener en nuestra sociedad (Aparicio, 1985, p.169). Y por último, la visión del museo únicamente como una colección o almacén de objetos raros y curiosos, con muy poco o ningún dinamismo o vinculación con la comunidad (Aparicio, 1985, p.169). En líneas generales, muchos de sus responsables entendían el papel del museo en la sociedad para el desarrollo de la identidad por medio de la difusión del patrimonio (Castrillón, 1983; Aparicio, 1985). En un contexto en 39

44 el que apenas se sabía sobre los museos peruanos, fueron necesarios y destacables estos trabajos que pusieron sobre la mesa este primer panorama museistico. El panorama crítico de la institución museística y el patrimonio del país requería de una reflexión y crítica profunda para revertir y emprender un mejor camino. Pensar en un museo moderno para el país, en los términos que lo hizo Castrillón, es concebir que la cultura no es un hecho congelado y delimitado por la infraestructura museística, que el museo se encuentra al servicio de una sociedad en constante cambio y que es una necesidad cultural de la sociedad, que la institución debe reconocer la multiculturalidad del país y debe contribuir al forjamiento de una nueva identidad nacional (Castrillón, 1986; 2014). En esta concepción de museo se articulan el diálogo interdisciplinario, la desmitificación de la cultura y el patrimonio, y en el que se construye un discurso generardor de controversia y en constante diálogo con la sociedad. Asimismo, dentro de ella no se escapa la responsabilidad que el poder político estatal tiene para conservar y preservar el patrimonio y los museos. Al respecto, Castrillón continuamente ha resaltado este papel y ha señalado de forma crítica las desacertadas actuaciones de la administración cultural del Estado en orden a la creación de museos, y, en especial del Museo Nacional peruano. Esta concepción del museo recogida de la propuesta de Castrillón expresa el sentido de un museo ideal para el país. Es un museo crítico tanto del modelo tradicional (Museo Templo) como de las condiciones desfavorables en que operaban los museos peruanos; en la actualidad, muchas de esas condiciones parecen seguir sin remedio. Esta postura sitúa a este autor dentro de una visión crítica de la museología, entendida como la que juzga conforme a las reglas (Santacana y Hernández, 2006, p.18), pues maneja las nociones consensuadas de la época, conoce la realidad interna de los museos y es propositivo generando una definición integrada de la museología. Esta mirada de Castrillón sobre el museo es muy próxima a las reflexiones que se compartían en América Latina, expresadas en la reunión realizada en Santiago de Chile en 1972, que hicieron hincapié en la función social de los museos en los países latinoamericanos [30]. Lamentablemente estas ideas críticas como las de Castrillón, se vieron menguadas durante las décadas siguientes por un periodo oscuro en la historia de Sudamerica a causa de las dictaduras, golpes de estado y el conflicto interno armado en que se vió envuelto el Perú entre las décadas de los 80 y 90 (Ver Capítulo 2, Sección 2.1). Tras las primeras aproximaciones panorámicas sobre los museos peruanos durante los años 80, y con una revisión relativamente reciente de los 2000 (Martínez, 2002), queda claro que aún falta mucho por construir y definir dentro del campo museológico. Mucho más si pensamos y hablamos sobre su misión 40

45 social. Pero, todo es negativo dentro de los museos? en qué medida podemos encontrar algún hecho o acciones museológicas creativas para repensar estas instituciones en el Perú? Parte de esos aspectos se han buscado recuperar y reflexionar en el estudio de los museos del Norte Chico. 1.4 Conclusiones El origen de muchos de los museos nacionales en América Latina tiene sus orígenes en el siglo XIX y se relacionan con la independencia de España. Estas instituciones fueron el acta de nacimiento de los Estados Nación. Ellos, como el caso del Museo Nacional Mexicano, son los progenitores de nuevas instituciones que buscan la creación y reproducción de una identidad nacional. En su trayectoria se observa la forma en que los estados concibieron y direccionaron la cultura y su patrimonio. La genealogía del Museo Nacional del Perú muestra el esfuerzo e interés (y también desinterés) desplegado por el Estado por gestionar el patrimonio cultural de la Nación. Las continuas formas de administrar el museo emblemático y la cultura del país a lo largo de esa trayectoria denotan serias dificultades y tropiezos económicos, políticos y sociales. Los diagnósticos de museos que trataron de abarcar todo el territorio peruano, realizados ya hace más de 30 años, expusieron la situación crítica concentrada en aspectos económicos, técnicos, científicos y profesionales al interior de estas instituciones. Situación relacionada con la falta de políticas culturales para los museos, impulsadas desde el mismo Estado o por nuevos agentes de la ciudadanía. En cada uno de esos espacios administrados o no por el Estado, se pugno por generar las mejores condiciones para el patrimonio pese a lo limitado de los recursos. Es por ello, que en general, puede decirse que los esfuerzos de estos espacios se abocaron a las tareas de resguardar, proteger y mostrar el patrimonio, replegando la función investigativa y comunicativa para con la sociedad. A finales de los años 80 en el Perú, es destacable el papel del museólogo Alfonso Castrillón quien formuló una propuesta integral sobre la disciplina museológica, en ella también se despliega un llamado a la atención para que el Estado deje su papel estático y conservador con los museos. El propone concebir el museo como una forma de acercar al patrimonio a la población desde el reconocimiento de la diversidad cultural que conforma la ciudadanía peruana. En ese sentido, debe partir de una construcción desmitificadora del pasado que para ello integre lo científico y su ejercicio multidisciplinario. Tal como lo fue en su momento esta postura se mantiene vigente y pionera pues es la que ha profundizado en un análisis sobre los problemas de esta institución cultural en el país, y ha teorizado y reflexionado sobre la disciplina museológica y el papel del museo. 41

46 El panorama museológico es crítico como muestra el quehacer y desarrollo de la disciplina en el país. Sin embargo, se puede identificar la experiencia generada en varias instituciones públicas (escolares, universitarias, municipales, etc.) como privadas. Son notables en el campo museístico peruano las entidades que han generado creativas formas de administración cultural del patrimonio algunas de ellas involucran de forma alternativa y colaborativa diversas iniciativas: privadas, estatales, organizaciones civiles-, con lo cual hacen propicia la fecundidad de los fines que persigue el museo como institución y, particularmente en contexto peruano, contribuyen a proteger el patrimonio arqueológico cuya existencia se ve amenazada constantemente por el saqueo. Lo que faltaría, además, es el desarrollo de reales canales de diálogo entre las diversas instituciones museísticas y el Estado, que se reconozcan y articulen los logros alcanzados en este campo, y se desarrollen estrategias o políticas de mejoramiento en su constitución. En las últimas décadas han ido en aumento las posibilidades académicas y de formación en museología. Con esta perspectiva de una creciente especialización y profesionalización en el campo de los museos se espera una mejoría en el panorama museológico peruano. Pero cabe insistir en una articulación de estas nuevas formaciones contenido curricular acorde a la realidad de los museos peruanos, por ejemplo- y los canales o programas emprendidos por el Estado para revitalizar y fortalecer las instituciones que se encuentran bajo su administración. Una visión compartida para impulsar y capacitar los diversos agentes que participan en diversos espacios museales significa una posibilidad de repotenciar y reavivar la institución museológica peruana. De manera general, los museos de forma tradicional se conciben como un espacio de la conservación del patrimonio y su difusión por medio de actividades culturales. El Estado, por medio de sus diversas instituciones culturales, ha remarcado este rol para proteger y cuidar monumentos. Es una visión que debe de refrescarse, ver la diversidad cultural no solo como lineamiento sino llevarla a la práctica, al terreno de la gestión pública. Por la dificultad en el desarrollo de las funciones museológicas, estas ideas estáticas guían y parecen mantenerse dentro de la mayoría de museos. Sin embargo, hay experiencias adaptadas y nacidas dentro de sus propias realidades que precisamente demandan un acercamiento a su patrimonio, a la vez que con ellos redefinen y enriquecer la conceptualización tradicionalmente e internacionalmente conocida del museo. Hacer un zoom en el panorama en el regional del Norte Chico posibilita documentar y aproximarse a experiencias museológicas que no se identificaron dentro de los diagnósticos de museos realizados en los años 80. En ellos, es precisamente la situación crítica del patrimonio arqueológico que activa la creación de museos y motiva la creatividad de sus agentes 42

47 culturales y ciudadanía en general interesada en conocer, preservar y difundir su patrimonio. En los siguientes capítulos espero poder rescatar y analizar estos aspectos. Notas al pie del capítulo 1: [1] Tras varios intentos, el día de hoy dos instituciones cumplen esta función: el Museo Nacional de Antropología, Arqueología e Historia del Perú y el Museo de la Nación. [2] El museo contaba con una colección de alrededor de 2000 piezas que procedían de diversas instituciones públicas (Museo Municipal de Lima, Sociedad geográfica de Lima, Ministerio de Justicia, Culto e Instrucción, etc.). Para el año 1911, la cifra aumentó debido a las excavaciones metódicas realizadas en varios sitios prehispánicos y las donaciones de las familias limeñas, entonces se calcula habrían triplicado la cifra (Kania, 2010). [3] El instituto se componían por: miembros de la Academia Nacional de Historia de Madrid, miembros de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, el Presidente de la República, Ministro de Justicia, Instrucción y Culto (Ravines, 1989, p.39). [4] Sus primeros trabajos fueron como conservador asistente en el Real Museo Zoológico y Antropológico- Etnológico de Dresden y el Museo Etnológico de Berlín (1988), Alemania. A finales del siglo XIX se encontraba en el Perú realizando investigaciones arqueológicas bajo el apoyo de universidades estadounidenses, como la Universidad de California, Berkeley. Sus exploraciones e investigaciones por el Perú y parte de Sudamérica (Argentina y Chile), lo llevaron a conocer ampliamente el panorama prehistórico del continente americano. Sus contribuciones se pueden indicar en diversas ramas como la arqueología, antropología, etnología, historia, lingüística, geología, arte, prehistoria y la museografía (Málaga citado por Hampe, 1998, p.123; 148). Sus aportes en la arqueología aún se mantienen debido al sustento de la metodología de campo aplicada y las propuestas estilísticas y cronológicas que aún tienen vigencia, entre otros; mismo por lo cual se le ha reconocido al lado de Julio C. Tello- como los Precursores de la Arqueología Peruana. [5] La historia precolombina de América Latina tuvo mucho impacto tanto en Europa como en Estados Unidos durante el siglo XVIII, principalmente, la segunda mitad del siglo XIX, hasta mediados del siglo XX. Esta atención trajo consigo la presencia de viajeros, anticuarios, naturalistas que contribuyeron a formar colecciones privadas y a potenciar los acervos de muchos museos extranjeros. Fueron, principalmente, los objetos arqueológicos del Perú los que se enviaron a museos como el Etnográfico de Berlín (colección formada por Alfons Stübel, Wilhelm Reiss y Max Uhle), el museo de Historia Natural de Nueva York (colección conformada por Bandelier), los museos de la Universidad de Filadelfia y de California (colección conformada por Max Uhle), Museo del Hombre, París (colección conformada por Langlois, Reichelen, etc., entre otros. (Ravines, 1989; Kania, 2010). [6] Para Kania (2010, p.220) las primeras décadas del siglo XX fueron la época del renacimiento de la museología peruana. [7] El gobierno Inca articuló y dominó gran parte de los andes sudamericanos (conformado por los actuales territorios de Perú, Ecuador, Colombia, Bolivia, Chile, Argentina) desde el siglo XV hasta la llegada de los españoles en [8] Los Museos universitarios tienen una larga tradición en el país, ligados en sus inicios a los nombres de reconocidos investigadores como Julio C. Tello y Luis E. Valcárcel, muchos se de ellos aún se mantienen en 43

48 funcionamiento y son instituciones muy activas en investigaciones y difusión del patrimonio arqueológico, etnográfico, natural, artístico, entre otros. [9] Los cambios se daban dentro de un panorama muy convulsionado en el país. Tras el derrocamiento del gobierno dictatorial de Augusto B. Leguía ( Oncenio de Leguía ) en 1930, al que le se sucedieron seis presidentes de la República en el lapso de solo siete meses. En marzo de 1931 se estableció la Junta Nacional de Gobierno destinada a volver al país a la normalidad en un periodo de nueve meses. Aun después de las elecciones y de las disposiciones establecidas para organizar el país, la convulsión política se mantenía entre el partido de gobierno (Unión Revolucionaria) y el Partido Aprista, ello agitado por el impacto de la crisis económica internacional de Todo esto genero un periodo de desorden político, crisis económica y social muy fuertes. [10] Decreto Ley N 7084 del 9 de abril de [11] El Estado adquirió en 1924 el Museo Larco Herrera. Fue inaugurado como Museo de Arqueología Peruana a finales de [12] Ley N 8751, con fecha el 22 de setiembre de [13] Creado en 1938 partir de la fusión del Instituto de Investigaciones Antropológicas y la sección de Arqueología del Museo Nacional (Ravines 1989, p.60). Se le asignó uno de los inmuebles histórico que pertenecía al Museo Nacional antes de la fusión, localizado en el distrito de Pueblo Libre. [14] Desde su primera fundación, el Museo Nacional y los demás museos de la capital y provincia administrados por el Estado, adaptaron sus funciones y necesidades a inmuebles históricos. Por esta misma razón, los gobiernos de los 80 y en adelante vieron continuamente la idea de materializar un Museo Nacional partiendo con la creación de un espacio construido para tal fin. [15] En este enfoque teórico la atención se concentra en el origen de los materiales (áreas culturales), sus rutas de difusión, la tipología y la cronología como puntos focales que explican la historia, una crónica de hechos amalgamados que no explican por qué suceden los cambios (Johnson, 2000, p.36), estos solo suceden. [16] Esta idea se mantiene como como un proyecto político postergado, por lo menos, tres veces en los últimos cincuenta años. El último proyecto estaba previsto para ser inaugurado a inicios del 2016; las polémicas en torno a la ubicación de su construcción más que por el contenido han paralizado siempre su marcha. Ampliar un poco [17] Decreto Supremo N 48 del 24 de agosto de 1962 y mediante Decreto Ley N del 10 de junio de 1963 (Coloma 2001). [18] Decreto Ley N (9 de marzo de 1971), orgánico del Sector Educación por el que la Casa de la Cultura da paso al Instituto Nacional de Cultura. [19] Decreto Supremo 1-84-ED (Ravines, 1989, p.61). [20] Entre , la Unesco en conjunto con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el World Heritage Center, ayudaron a los gobiernos de América Latina para ejecutar un proyecto regional de la Cultura ( Proyecto Regional de Patrimonio Cultural, Urbano- Ambiental ). Dicho proyecto tuvo sede durante esos 19 años en la capital del Perú (Lima). Para ampliar información, consultar: [21] Decreto Ley N del 14 de octubre de [22] Como el Instituto Nacional de Cultura (INC), el Instituto Nacional de Desarrollo de los Pueblos Indígenas, Amazónicos y Afroperuanos (INDEPA), el Consejo Nacional de Cinematografía (CONACINE), el Consejo Nacional de Democratización del Libro y de Fomento de la Lectura (PROMOLIBRO), el Proyecto Especial Complejo Arqueológico de Chan Chan, el Proyecto Especial Naylamp-Lambayeque y la Unidad Ejecutora Marcahuamachuco. 44

49 [23] A lo largo de la vida republicana estuvo bajo las diversas instancias de este sector. En 1837, se encontraba bajo la administración del Ministerio de Instrucción Pública, Beneficencia y Negocios Eclesiásticos que se convirtió en Ministerio de Justicia, Culto e Instrucción. Luego ésta instancia en 1935 pasó a ser Ministerio de Educación Pública. [24] Para ver los alcances y estudios realizados sobre este campo en México, se pueden revisar por ejemplo a: Vallejo, M. E. (Coord.), Torres, P. & Rodríguez, M. (Comps.) (2002). Educación y Museos. Experiencias recientes Antología. Colección Obra Varia. México: Instituto Nacional de Antropología e Historia; y Castellanos, L. P. (2014). El Museo Nacional de Antropología y sus visitantes. Gaceta de Museos, (59), [25] Dentro del tipo de administración se consideran dentro de los estatales a los museos dependientes del INC, de Órganos Regionales y Municipales, Centros Educativos escolares y universitarios, Fuerzas Armadas y policiales. Y dentro de los privados a los museos dependientes de particulares, Iglesia Católica, Organismos de naturaleza Comunitaria, Escuelas, Universidades. [26] Dentro de los museos del INC se encontraba una muy reducida presencia de personal (3) con formación en Museología y Museografía. Todos ellos contratados profesionalmente, y además todos ellos en Lima (Aparicio, 1985). [27] Ver: [28] El II Encuentro de Museos del Perú, realizado en Cusco en 1987 abordó la necesidad de la profesionalización y la creación urgente de especialidades de Museología y Museografía a nivel universitario. Además, puso en marcha la creación de la Asociación Peruana de Trabajadores de Museos (Vera, 1998, pp ). [29] El Diagnóstico de Museos del Perú de la Unesco, INC, BCR (1985, pp.54-55) recoge varios de estos programas, por ejemplo: Cursos de Conservación de textiles y cerámica, dictado en el Museo de Arte (Lima, 1970); Museología, en Universidad Nacional Mayor de San Marcos (Lima, 1973); Conservación de textiles precolombinos, auspiciado por la Unesco y el Museo Nacional de Antropología, Arqueología e Historia (Lima, 1977); cursos y seminarios de Museología auspiciados y realizados en la Pontificia Universidad Católica del Perú (Lima, 1982); y por el Banco Central de Reserva (Lima, 1982). [30]. La Mesa de Santiago se convirtió en la voz de los museólogos latinoamericanos que años después se ve plasmada por las experiencias metodológicas en el marco de la propuesta de la Nueva Museologia (De Carli, 2003, p.5). 45

50

51 CAPÍTULO 2. MIDIENDO EL UNIVERSO: MAPA DEL UNIVERSO MUSEÍSTICO Y CONFIGURACIÓN DEL PANORAMA MUSEOLÓGICO EN EL NORTE CHICO Los caminos en la investigación museológica en el Perú han seguido principalmente dos vías. El camino de los diagnósticos nacionales realizados hace ya treinta años y aquel que concentra los estudios de casos. En esta investigación confluyen esas dos formas de abordaje, documentando un universo museístico del que apenas se conoce en museología peruana, y, analizando dos casos representativos que nos aproximan a una trayectoria que suma un poco más de cuarenta años de experiencias con el patrimonio. En el 2006 se realizó la primera mención sobre un conjunto de 18 museos localizados en el Norte Chico. La lista de museos fue realizada y presentada por el Dr. Henry Marcelo Castillo, en el marco de talleres participativos sobre arqueología y museos desarrollados en la región. Al año siguiente, en 2007, Marcelo publicó la lista completa de estos espacios. Desde el 2008, Marcelo puso en marcha una propuesta denominada Proyecto de Red de Museos del Norte Chico, en la cual planteó un conjunto de actividades en torno al patrimonio para ligar dichos espacios a la actividad turística de la región, además, propició un acercamiento a los agentes involucrados en cada uno de ellos. Una primera aproximación al universo a partir de este listado propone un escenario conformado por 18 espacios categorizados como museos, y, en el que se incluye un proyecto para crear uno nuevo (Marcelo, 2009). Basicamente, siguiendo la estrategia de red de museos de Marcelo, se desprende que cada uno de ellos fue creado para la conservación y difusión del patrimonio local y regional (arqueológico, histórico y ecológico). Más allá de esta iniciativa en la que se identifican los museos, se les trata de integrar y reconocerlos por medio de la red, es considerable el vacío informativo alrededor de ellos. Se desconocen aspectos de fondo pero básicos como su naturaleza y trayectoria, los cuales nos podrían conducir a tener una idea más clara del universo museístico y su constitución dentro de esta región y su implicación dentro de la museología nacional. A pesar de poder señalar rasgos generales en común, según la referencia citada, nos encontramos con universo indefinido en cual se destaca la cantidad y, aparente diversidad de los espacios que lo conforman. Partiendo de ese estado, medular para aproximarnos a reflexionar sobre los museos de este territorio, este apartado se formula a partir de las siguientes preguntas de investigación: Cuál es el universo museístico -cantidad, tipología- actual establecido en la región del Norte Chico? y Cómo se configuró el panorama museológico en dicha región? Con estas preguntas como guías, a lo largo del capítulo se busca establecer un mapa actualizado del universo museístico, así como sugerir una 46

52 proposición sobre su constitución. Esto es, recuperar la trayectoria de los museos en el Norte Chico, para más más adelante ahondar, analizar y reflexionar en ella. Para lograr los dos objetivos planteados hasta aquí, el capítulo tiene como punto de partida la definición de las características generales y esenciales que hacen particular a la región del Norte Chico, con miras a ayudar a identificar y contextualizar el territorio en el que se enmarca el estudio. Seguidamente, se presenta la sistematización del registro de cada uno de los espacios ligados al quehacer museológico, a partir del cual se ha discutido de manera global en torno a su naturaleza. Sobre esa base que constituye el universo museístico, se ahondó en una recopilación y análisis documental de dos casos representativos que proporcionaron información valiosa con la que se ha establecido la configuración de los museos de la región. Estos casos son el museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión y el Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa Nuestra Señora del Carmen ; cuyas trayectorias se encuentran entre las más antiguas, han sido documentadas y fueron proporcionadas por los responsables de su dirección, el Dr. Henry Marcelo Castillo y el Lic. Juvenal Ramírez. Inicialmente, propongo que se trata de un universo variado, el cual no ha sido formulado originalmente acorde a un plan o política museológica. Son, en su mayoría, producto de múltiples iniciativas locales generados por diversos agentes culturales como: autoridades distritales, provinciales, docentes, investigadores, quienes comulgan con un sentido de apropiación del patrimonio arqueológico de la región. Además, planteo que la configuración de este panorama está constituida por una serie de al menos tres etapas, en orden cronológico, en la que se amalgama los logros de los agentes involucrados en el quehacer museológico con la aparición y contribución de nuevos agentes como arqueólogos y proyectos de investigación arqueológica. Con lo desarrollado a lo largo del capítulo se ha tratado de poner sobre la mesa un conjunto de descubrimientos que nos permiten, además, de aproximarnos al universo y a la construcción de la trayectoria de los espacios ligados al quehacer museológico en el Norte Chico, abrir las líneas temáticas eje para la formulación de un balance y reflexión de la experiencia museológica que se aborda en el capítulo final. 47

53 2.1 La región del Norte Chico Coloquialmente se le llama Norte Chico al sector norte de la Provincia de Lima, provincia en la que se localiza la capital del país [1]. Es muy difícil identificar desde cuándo exactamente se comenzó a llamarle de esa manera. En la búsqueda de referentes bibliográficos fue evidente que no hay un abordaje sobre el origen del término. Sin embargo, hay algunas generalidades que se ha podido documentar a partir de los agentes culturales que han participado de este estudio y de la experiencia de trabajar en esta región. En principio, puede afirmarse que no se trata de una definición en el sentido de una división políticoadministrativa moderna. Pese a ello, su extensión espacial es bastante conocida, definitiva y usada coloquialmente en el país y, en especial, en esta región. Su popularidad es tal que se le emplea en el ámbito académico y político. El término se encuentra en la memoria popular y tuvo una similitud con la existencia y extensión de la antigua Provincia de Chancay [2] (Marcelo, 2015). Dentro de esa noción, como jerga geográfica corresponde con la visión capitalina (Limeña) de identificar y diferenciar la procedencia de esta zona con la del extremo norte del país (Advíncula, 2015). Dentro de las publicaciones arqueológicas también se encuentra esa relación con la extensión geográfica a la que se suma la presencia, en esa misma extensión, de uno de los pocos lugares en el mundo en el que las primeras civilizaciones tuvieron su origen. En este ámbito académico, se hace referencia al área comprendida por los valles de Huaura, Supe, Pativilca y Fortaleza, y comprenden un territorio de 50 km. a la altura de la desembocadura de esos cuatros ríos cuando se encuentran con el mar (Creamer 2004, en Hoces 2005). En la actualidad, ambas definiciones en el sentido coloquial como académico corresponden políticamente con la presencia de tres Provincias: Barranca, Huaura y Huaral, cada una con sus distritos, que forman parte del sector norte del Gobierno Regional de Lima [3] (Ver Figura 1). En líneas generales, estas provincias concentran una población estimada de habitantes (Instituto Nacional de Estadísticas e Informática, 2016). Desarrollan actividades económicas importantes como la producción agroindustrial (azúcar, papel), pesca (artesanal e industrial) y comercio. En el siglo pasado tuvieron lugar importantes Casas Haciendas azucareras que con la Reforma Agraria del Estado en 1968 se desbarataron y fueron administradas por las cooperativas de base campesina. Esta nueva administración falló en la década de los 80 y las tierras se dividieron en parcelas; a la par tuvo impulso el comercio desde Puerto Supe (distrito), puerto que con el auge movía la producción de caña de azúcar, guano, exportación de minerales, harina y aceite de pescado. 48

54 Las capitales provinciales son importantes centros económicos comerciales (Barranca, Huacho- Huaura, Chancay), cuyo crecimiento está en relación directa con la migración de los pobladores de las provincias serranas aledañas (Cajatambo, Bolognesi, Oyón) que viajan permanentemente para adquirir productos industriales y alimentos (Comisión de la Verdad y Reconciliación, 2003, p.463) y para laborar en los diversos sectores del comercio y la industria. El Norte Chico es bastante variado por los procesos migratorios [Sierra a Costa], y donde la constante es el medio ambiente (Marcelo 2015). Ello, pues es debido a la propia geografía que facilita las vías de acceso, comunicación (tránsito) y recursos por los cuales movilizarse. Condiciones similares de movilizaciones e intercambio son las que se pueden observar y recoger de las evidencias arqueológicas; el más claro ejemplo puede remontarse al Arcaico Tardío cuando los valles y costas del Norte Chico fueron el escenario propicio para el surgimiento de la civilización andina. De hecho, las características de su constitución social hacen que sea una región rica y variada culturalmente, pero que pese encontrar polos de desarrollo económico en ella se pueden identificar problemas que afectan al tejido social: precarización del trabajo, discriminación, violencia, zonas rurales en situación de pobreza extrema. Tal variedad ha sido analizada y reflexionada por Marcelo (2015) y es la base para desarrollar las estrategias que emplea para acercar el museo a la población del Norte Chico (Ver Anexo 3, Entrevista 3). El Norte Chico cuenta con un valioso patrimonio arqueológico e histórico, producto de una larga ocupación humana ininterrumpida de más de alrededor de 5000 años. Desde las décadas de los 60 y 70, se realizaron exploraciones arqueológicas cuyos resultados esbozaban ya dicha antigüedad (por ejemplo, Kosok, 1965; Engel, 1980). Por entonces se le consideraba parte de una unidad geográfica y cultural denominada Costa Central (Ichiki, 2012, p.3). Posteriormente, y a partir de los trabajos arqueológicos desarrollados a finales de la década del 80 hasta la actualidad, el Norte Chico ha ido alcanzando popularidad -impulsada por el turismo- debido a que se propone que fue el escenario donde se desarrolló uno de los focos civilizatorios más antiguos del mundo, al igual que Mesopotamia, India, China y Egipto. Esto es que se trata de un crisol donde las culturas posteriores tuvieron sus antecedentes, como en la organización social, en lo político y el desarrollo tecnológico. Respecto a dichas investigaciones arqueológicas, sobre el origen de la Civilización en los Andes, ellas han profundizado sus estudios sobre la complejización social alcanzada durante el período conocido como Arcaico Tardío ( años a.c). Una de ellas, llevada a cabo por el Proyecto Arqueológico Norte Chico entre el 2002 al 2008 [4], ha mostrado evidencias de arquitectura monumental, doméstica y fechados radiocarbónicos tomados en diversos valles del Norte Chico, con lo cuales ha considerado el territorio como cuna de una de las civilizaciones más antiguas de América (Haas & Ruíz, 2003; Creamer, 49

55 Ruíz & Haas, 2006; Ruíz, Creamer & Haas, 2007). También se encuentra una investigación de largo aliento, el Proyecto Arqueológico Caral, desde 1994 a la fecha, establecido en el valle de Supe. Esta investigación propone como escenario específico del desarrollo civilizatorio andino la zona arqueológica Caral (Shady, 1997; Shady & Leyva, 2007). Al día de hoy estas vertientes discuten sus posturas sobre la dimensión, especificidad y complejidad del fenómeno y sus implicancias. Sin embargo, la que ha alcanzado mayor preponderancia y difusión académica y popular es el Proyecto Caral - reformulada actualmente como Unidad Ejecutora Zona Arqueológica de Caral (U.E 003-ZAC/MC)-, debido a que permanece de manera ininterrumpida con investigaciones desarrolladas en Supe y en otros varios sitios de la misma época localizados en la costa, ha desarrollado planes de gestión que le permite recibir apoyo tanto estatal como privado, y ha generado un polo de turismo arqueológico enfocado en los diferentes puntos de investigación del proyecto. A raíz de estas investigaciones y la formulación de circuitos turísticos, en la región se ha propiciado una revalorización de las colecciones particulares y museos existentes como ejes que dan posibilidad al desarrollo económico. Diversas investigaciones recientes que abarcan una gama de estudios arqueológicos (estilos cerámicos y cronológicos, sitios fortificados, etc.) de otra temporalidad diferente al Arcaico Tardío están tomando también el término Norte Chico, pues a partir de sus estudios observan las vinculaciones culturales entre los diversos valles que lo conforman (Aguilar, 2006; Brown, 2009; Cruzado, 2010; Ichiki, 2012, entre otros). Al respecto, no parece ser el caso de la construcción de una nueva Área cultural, como se hace desde la disciplina arqueológica para referirse a áreas que comparten tradiciones culturales y características geográficas particulares. En otras palabras, la arqueología está retomado un término coloquial y van ratificando lo distintivo de este territorio. Pese a esta condición privilegiada para las investigaciones, pese a contar con un marco jurídico e institucional (Ley General de Patrimonio Cultural y el Ministerio de Cultura) para la protección del patrimonio peruano y peses a las implicancias positivas en el ámbito turístico para el desarrollo económico y social, una característica esencial a la región es el estado de vulnerabilidad en que se encuentra el patrimonio arqueológico e histórico. En esta región, al igual que muchas zonas del país en donde se concentran evidencias prehispanicas, el patrimonio es constantemente saqueado y dañado, promovido por el tráfico ilícito como por el avance del crecimiento de las ciudades y poblaciones. Aunque en un balance general, es aun mucho el camino que queda por recorrer en este sentido, la condición actual del patrmonio trata de ser revertida desde los proyectos arqueológicos asentados en la región mediante campañas pro conservación. También los museos, que en su mayoría tienen colecciones arqueológicas, han comenzado a alzar su voz para la protección del patrimonio. 50

56 2.2 Mapa del universo museístico en el Norte Chico Diseño y construcción del instrumento para mapear el universo El año 2006, el Dr. Henry Marcelo Castillo mencionó por primera vez un conjunto museístico considerable localizado en el Norte Chico. Este hecho se dio en el marco de los talleres participativos en los que se trataron temáticas sobre patrimonio, arqueología y educación en la región; la organización y desarrollo de estos se detallan más adelante. En los años siguientes, Marcelo emprendió una serie de tareas para profundizar su trabajo con esos espacios. En el 2007, realizó la publicación del listado de los 18 museos (Guara, 2007; Marcelo, 2009). Un año después, formuló y desarrollo la propuesta Proyecto de Red de Museos del Norte Chico, recuperación del Patrimonio Cultural y Natural como estrategias de Comunicación Ecoturística sostenible para el Desarrollo Regional (Marcelo, 2007). Su propuesta tiene como objetivo mostrar que el ecoturismo y la cultura regional podían ser empleados dentro de los museos como herramientas de conservación, recuperación de la cultura y difusión de valores dentro de este territorio. Año tras año la propuesta se renueva y, principalmente, ha logrado respecto a los museos un avance en su identificación y en la formulación de lineamientos para la construcción de una futura red de museos de escala regional. En general, esta fue la primera aproximación y reconocimiento de la existencia de un conjunto de museos en el Norte Chico. Más allá de eso, se desconocen las características y praxis dentro de estos espacios que esta investigacion ha tratado de documentar y reflexionar. De la lista publicada por Marcelo podemos identificar un universo conformado de forma categórica por museos, ligados a la conservación y difusión del patrimonio arqueológico, histórico y ecológico (Ver Tabla 1). Sin embargo, se desprenden de estudios realizados en algunos de ellos (Holguín y Cornejo, 2007; Proyecto Arqueológico Norte Chico, 2007) que existiría una variedad en su constitución. Es decir, que entre ellas se podrían encontrar indistintamente colecciones, exposiciones y otros espacios que resguardan el patrimonio de sus localidades. Con ello se abrió la posibilidad de considerar, pensar y analizar un universo más heterogéneo y complejo. Incluso, esa misma posibilidad puede generar un impacto sobre la forma en que la estrategia de la Red de Museos del Norte Chico podría ser ajustada, o en el desarrollo futuro de otras nuevas estrategias de gestión o políticas culturales acordes a dicho universo. Ante la situación de carencia documental, y en consecuencia de un examen de las características similares o disimiles que constituye el universo actual, se planteó la pregunta inicial de investigación: Cuál es el universo museístico -cantidad, tipología- actual establecido en la región del Norte Chico? 51

57 Enseguida se examinaron qué acciones específicas serían necesarias para poder resolverla. Entonces, definí el mapeo como una vía y objetivo para aproximarnos al conjunto. Pensar en mapear implicó una serie de tareas como la recopilación de un conjunto de información para lo cual se diseñó y construyó una ficha de registro (Ver Anexo 1) que contiene datos mayoritariamente cualitativos (ubicación, tipo de propiedad y administración, funciones que desarrollan, naturaleza de la colección, una descripción general de la exposición museográfica actual, fecha de registro, entre otros) que ayudaron a clasificarlos y a establecer el número actual de estos espacios [5]. El instrumento ya construido tiene dos rasgos. Primero, es una recopilación formada por la observación directa durante una visita a los museos. En segundo lugar, incluye principalmente el manejo de fuentes documentales. Esto ha permitido contrastar ambos tipos de información y evitar que se obtuviera información insuficiente o sesgada. Además, con el complemento de ambos rasgos ha permitido tener información para el desarrollo de otra pregunta de investigación que toma de base el estudio de casos: Cómo se configuró el panorama museológico en la región del Norte Chico? Un par de pruebas previas con el instrumento permitió afinar el uso de sus elementos descriptivos, y su utilidad. Esto permitió calcular el tiempo y programar un cronograma de visitas, realizar ajustes en el instrumento de registro y coordinar la participación de personas que podrían ayudar brindando información sobre los museos. Por ser un referente inicial y único, la Lista de Museos del Norte Chico (Marcelo 2007) fue tomada como punto de partida para el registro del universo. En el desarrollo del mapeo esta información base fue nutrida por medio de la revisión de diversas fuentes (web de museos y del gobierno regional, entrevistas a gestores de museos, arqueólogos que trabajan en la región, artículos, etc.) y con las visitas de campo a cada uno de los museos. Estos aspectos remarcados en la ficha de registro de información fueron sustanciales, pues, permitieron identificar cambios o permanencias en el universo, tanto en lo cuantitativo como en lo cualitativo. Las fichas de registro son en la actualidad una fuente documental que por primera vez nos aproxima al conjunto museístico del Norte Chico. En muchos de los espacios visitados, es el primer escrito que documenta su existencia y funcionamiento. Se reproducen en extenso en el Anexo 1, para que puedan ser consultadas y revisadas en detalle. 52

58 2.2.2 Aproximación conceptual y sistematización del mapeo Existen variadas formas y criterios para clasificar los museos, de acuerdo a sus contenidos temáticos, según la disciplina, sus colecciones, etc. (Witker, 2001; Martínez, 2002; Desvallées y Mairesse, 2010; León, 2010). Dado el estado de conocimiento sobre estos espacios y su naturaleza, de forma referencial se estructuró una forma de categorizarlos acorde a los parámetros más usados en el contexto peruano como la tipología de museos empleadas por las entidades que administran la cultura y los museos en el país y el concepto actual del Consejo Internacional de Museos (ICOM). Con ello se orientó el mapeo y la sistematización de la información que se presenta como el actual universo museístico. El Sistema Nacional de Museos del Perú, dependiente del Ministerio de Cultura, es el encargado de otorgar la acreditación oficial a los museos en el país; cabe recalcar que la definición de museo que rige dentro de su reglamento es tomada del ICOM, y es en buena medida el referente de la praxis museológica en el territorio nacional, razón por la cual fue pertienente vincularla a la construcción de la propuesta que guiara la caracterización del universo museístico del Norte Chico. La clasificación de este sistema básicamente se rigen por dos aspectos el régimen de propiedad y la naturaleza predominante de sus exposiciones y colecciones. Dentro del régimen de propiedad se encuentran los museos estatales y privados, que en primera instancia permiten un análisis bastante general basado en la dependencia de sus recursos y de objetivos o fines institucionales. Dentro de la naturaleza predominante de sus exposiciones y colecciones es resaltante la diversidad de tipos: museos de arte, museos de arqueología e historia, museos de historia y ciencias naturales, museos de ciencia y tecnología, museos de etnografía y antropología, museos especializados, museos regionales, museos generales, otros museos, monumentos y sitios, jardines zoológicos y botánicos, acuarios y reservas naturales, salas de exhibición y galerías [6]. En ella se entrecruzan variables muy amplias como contenidos temáticos, alcance territorial y cientifico. De ese modo, su aplicación bastante ambigua. Es decir, podríamos ubicar un espacio museístico dentro de uno o dos tipos. Por ejemplo un museo con colección arqueológica también podría ser un museo regional o de arte. Esta ambigüedad dificulta la discrimación de rasgos más precisos que se requerían para la sistematización. Sin embargo, destacamos de esta el uso del sentido de área de influencia, pues con ella se relacionan las actividades que se realizan al interior de los museos, los objetivos y/o su compromiso con la sociedad. Este aspecto fue retomado por Martínez (2002) cuando elaboró un catastro de museos peruanos por parte del Instituto Nacional de Cultura (hoy Ministerio de Cultura) y que ha servido en parte 53

59 para guiar y rescatar rasgos que a priori (por ejemplo, museo universitario, museo escolar, colecciones) componen el universo museístico. Martinez (2002) empleó en el Pefil de catastro y situación de los museos del Perú una clasificación de museos basada en algunos de los tipos que se establecieron en el Sistema Nacional de Museos. De su trabajo se destaca la forma especifica que definió cada tipo de museo, acorde a la representatividad de la colección, funciones museológicas (acorde a la definición de museo del ICOM) y el ámbito corporativo (régimen de propiedad y administración). Su propuesta se conforma por: museos nacionales, museos regionales, museos locales, museos de sitio, casas-museo, museos religiosos, museos universitarios, museos escolares, museos militares, museos comunitarios, museos particulares, museos institucionales y museo internacional. De esta propuesta se seleccionaron los tipos que potencialmente se acercaron a las características generales observadas en el conjunto museístico del Norte Chico. En ellos se retomaron y especificaron criterios descriptivos para que pudieran ser aplicados en el área de estudio. A continuación se describen cada uno de ellos: Museo Regional: Espacio que expone a partir de su patrimonio o colección, sea de naturaleza arqueológica, histórica, artística, etc., las características representativas de una región En este caso, lo regional se avoca a la definición del Norte Chico. La propiedad y administración de la entidad es primordialmente de orden estatal (municipios), en los que se pueden incluir la participación civil y/o del sector privado. Museo Local: Espacio que aborda lo que hace representativo a una localidad a partir de su patrimonio o colección, sea de naturaleza arqueológica, histórica, artística, etc. En este caso, la localidad está referida a las delimitaciones de unidades como provincias, distritos y anexos. La propiedad y administración de la entidad es primordialmente de orden estatal (municipios) y puede incorporar la participación del sector privado y/o la participación civil. Museo Comunitario: Espacio que aborda las características representativas de una comunidad a partir de su patrimonio o colección, sea de naturaleza arqueológica, histórica, artística, etc. La comunidad se define como un conjunto social con valores sociales, culturales e identitarios en común, etc. enmarcados dentro de un territorio especifico. La propiedad y administración se constituye básicamente con la participación comunitaria, la cual se organiza para crear y mantener la institución; puede aceptar la participación de entidades estatales y/o privadas. 54

60 Museo Universitario: Espacio cuyas exposiciones y colecciones se relacionan con los programas de estudio e investigación que genera la institución universitaria. La colección es de propiedad de la universidad, sea estatal o privada. Asimismo, la propiedad y gestión de la entidad es de orden estatal, privada o mixta. Museo Escolar: Espacio que expone patrimonio o colección de diversa naturaleza (arqueológica, histórica, artística, científica, etc.), que de forma genérica tienen como propósito educar o formar por medio del patrimonio. Se dirige a y tiene como referencia una institución educativa de niveles básicos de educación. La colección y la entidad es propiedad estatal o privada. Involucra la participación de docentes y alumnos en su funcionamiento. Además, puede admitir la participación de entidades estatales y del sector privado. Casa-Museo: Inmueble y colección que asumen un papel emblemático por estar asociados a personajes que la habitaron y a los hechos que suscitaron en dicho inmueble y generaron un impacto en la historia nacional, regional o local. La propiedad y gestión de la entidad es de orden estatal o privada y admite una participación mixta. En esta denominación, para deslindar y perfilar mejor a los inmuebles musealizados que en algunos casos también son reconocidos como museos de sitio, se toma a éstos últimos como el lugar o punto geográfico donde ocurrieron procesos o hechos históricos, antropológicos u otros. En ellos se exhiben y explican los aspectos destacados propios del lugar; las actividades y programas de conservación e investigación que desarrollan se enfocan en la puesta en valor y uso social del sitio. Dentro de la propuesta original, descrita por Martínez (2002, pp.44-49), prima la noción de territorio e identidades en distintos niveles, acorde a la representatividad de la colección (regional, local, etc.). Asimismo, en ella se encuentran casos en que los tiene más peso la institución o propiedad (universidad, escuela, instituciones privadas) que generan dilemas al momento de clasificarlos. Por ejemplo, un museo formado por una iniciativa privada y con una colección representativa de una localidad o una región, puede ser calsificado bajo tres formas, como museo local, museo regional o museo privado. Un criterio reiterativo antes que de exclusividad para cada tipo fue el régimen de propiedad y administración. Se rescató esta dimensión de la propuesta original pues forma parte de las caracteristicas que en la investigación se planteó analizar. La propiedad bajo la cual nacen los museos se deslindo de la administración. Esto porque que la propiedad (sea estatal, privada o mixta) es de la que depende la fuente de financiamiento, y sobre la cual se planifican las acciones en el museo. Y, por otro lado, la forma de administrarlos es la que en parte conduce día a día su existencia, dentro de un sistema de organización; 55

61 más adelante, dentro de la administración se reconocen y las voluntades y estilo propio que caracteriza al agente cultural, concepto vinculado a la gestión del patrimonio cultural (Ver Capítulo 3). Más allá de tamizar lo más útil y aplicable de la propuesta citada, también se pensó en incluir unidades que conceptualmente dieran la posibilidad de identificar y clasificar sin muchas ambigüedades el conjunto a mapear. Es decir, a partir de un orden más elemental sostenido por el quehacer museológico. Tal y como se ha reconocido y empleado la definición del ICOM en el contexto peruano, se le toma como el punto de partida para definir el quehacer museológico. Este se refiere al ejercicio de las funciones que dan vida al museo: adquirir, conservar, estudiar, exponer y transmitir el patrimonio con fines de educación y deleite (Desvallées & Mairesse, 2010). Estas unidades conceptuales son: museo, sala de exposición y colección. Primordialmente, en cada una de ellas prevalencen un quehacer sobre el otro. Pese a ello, dentro de ellas se admiten la realización de otras funciones que favorecen sus objetivos y fines (p. ej. investigar o adquirir) o integrar de forma indicativa cualidades o características de los tipos de museos que se han descrito líneas arriba. Es decir, podemos hablar de salas de expociones escolares o colecciones universitarias. Museo: En la definición más comúnmente conocida se hace referencia a una institución permanente, que beneficia a la sociedad, que realiza diversas funciones: adquiere, conserva, estudia, expone y transmite el patrimonio, en el sentido más extenso (material, inmaterial, cultural, natural), con fines de educación y deleite (Desvallées & Mairesse, 2010, p.52). Sala de exposición: Espacio construido, habilitado o adaptado para presentar y comunicar por medio del patrimonio o colección de objetos culturales/naturales (de naturaleza material o inmaterial) una propuesta temática o conceptual. Colección: Conjunto de objetos culturales, naturales (material, inmateriales) o patrimonio de diverso valor y significado (arqueológico, histórico, antropológico), reunidos, seleccionados, clasificados y conservados por un individuo, una entidad estatal o privada. En el conjunto se advierte y se diferencia de la acumulación, pues tiene coherencia, un orden significativo (Desvallées & Mairesse, 2010). En este caso el conjunto de objetos culturales no admite la presentación coherente de ejes temáticos o discursos por medio de un espacio y recursos museográficos empleados para ello. El espacio en el que se concentra básicamente está restringido para su almacenamiento y manejo adecuado, y esta abierto al publico de forma esporádica. 56

62 El mapeo produjo una gran cantidad de información que fue procesada y sistematizada por medio de una base de datos creada en el programa Microsoft Excel. En síntesis se presentan dos tablas que contienen los criterios acorde a los objetivos que se plantean en este capitulo. Por un lado, la tabla 2 ofrece una visión general del conjunto (nombres de los museos, localización, año de creación, categorías, administración y propiedad) y la tabla 3 agrupa el universo museístico en categorías (museos, colecciones, exposiciones) que se contrasta a la luz de las definiciones de museos universitarios, escolares, comunitarios, etc Mapa actual del universo museístico Los diagnósticos de museos emprendidos en las décadas de los 80 (Castrillón, 1983; 1986; Aparicio, 1985) fueron las primeras iniciativas por conocer la realidad de los museos peruanos. En los 2000 el INC realizó un catastro nacional (Martínez, 2002) que mostró las características generales de operatividad de los museos privados o dependientes del instituto. Dentro de estos estudios se mencionaron al menos cuatro museos localizados en el Norte Chico: El Museo Bolivariano, el Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión, el Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura, el Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión y el Museo de Antropología y Arqueología de Huacho. El restante de espacios como sus colecciones pasaron inadvertidas. Por ello, el listado de museos realizado por Marcelo constituye un referente esencial para abordar el conjunto museístico (Ver Tabla 1). En el Norte Chico, Qué ha sido de ese panorama crítico y la visión de los museos que los diagnósticos y catastros esbozaron? Han pasado diez años desde que el listado de museos del Norte Chico por primera vez hiciera mención de la existencia de dichos espacios, y hasta ahora es casi nada lo que se conoce de ellos. Por esto, era necesario renovar esa primera aproximación para acercarnos a cada uno y profundizar en sus componentes y, en especial, sistematizar dicho universo y analizarlo. Ademas de reconectarlo a un panorama museológico más amplio que siempre ha enfrentado problemas en cuanto al manejo del patrimonio cultural que custodia y difunde. El listado elaborado por Marcelo se ha constituido en una hoja de ruta con que iniciar el mapeo. Una revisión inicial de ella, como ya se ha mencionado, sorprende por la cantidad y diversidad del conjunto. Predominan en la lista los museos escolares (8), seguidos de museos municipales (4) y otras en menor número como un (1) museo privado, un (1) universitario, un (1) comunitario, dos (2) de corte ecológico y un (1) proyecto de gestación de museo en la Provincia de Barranca. 57

63 Museos del Norte Chico Museo del Castillo de Chancay Museo de la Municipalidad de Chancay Museo de Huando Museo de Lomas de Lachay Museo del Colegio Luis F. Xammar Museo del Colegio Pedro E. Paulet Museo Ecoarqueológico Museo Arqueológico Regional Museo de Huaura Museo de Sayán Museo Comunitario de Végueta Comité Museo Provincial de Barranca Museo de Pativilca Museo de Huayto Museo de la Escuela Fiscalizada de varones Museo del colegio "Nuestra Señora del Carmen" Museo del Colegio Corazón de Jesús Museo de Huaricanga Distrito Chancay Chancay Huaral Huaral Huacho Huacho Huacho Huacho Huaura Sayán Végueta Barranca Pativilca Valle de Pativilca Paramonga Paramonga Paramonga Valle de fortaleza Tabla 1. Lista de Museos del Norte Chico elaborada por Marcelo en 2006 (Publicado en Revista Guara, 2007). Más allá de esa primera aproximación que permite saber el número y realizar una agrupación de acuerdo al nombre oficial de cada una de los espacios, no fue posible ahondar y formular desde ese mismo ángulo una propuesta sobre sus características y funcionamiento. Mucho menos sobre el aspecto relacionado a sus orígenes y la vinculación que tendrían dentro o como parte de una política cultural o museológica. Sin embargo, es de destacar que la denominación de Museos generada por la mayoría de dichos espacios, tal como se recogió en nuestros registros, toma dicha figura para aludir a un espacio institucionalizado, aunque a priori se reconoció que en la práctica se limitan a un quehacer que descansa en determinadas funciones como la conservación y difusión de colecciones. El resultado del mapeo actual pone sobre la mesa una serie de espacios de los que poco o nada se conocía y cuyos datos en extenso se ofrecen en un apartado especial (Ver Anexo 1, Fichas de Registro). A partir del resultado se puede discutir sobre las características comunes o divergentes y la constitución del panorama museológico en la región. La información hasta ahora compilada por el mapeo se ha sistematizado en tablas y un mapa del Norte Chico (Tablas 2 y 3; Mapa 1), en los que se destacan características como localización, la naturaleza de las colecciones, las entidades o personas de las que 58

64 dependen, la forma en que se administran, entre otros, a partir de las cuales se desarrolla el presente capítulo. Se trata de un universo, en efecto, variado y constituido por 17 espacios museísticos. Estos son: Salas de exposiciones, Colecciones, Casas-Museo, Museos (Local y Universitario) y un proyecto para creación de un Museo Regional en la Provincia de Barranca (Ver Mapa 1, Tablas 2 y 3). Hay que destacar como rasgo homogéneo, la naturaleza arqueológica de la mayoría de colecciones. Si bien el número de espacios se mantiene casi de forma similar con respecto al 2007, esto no quiere decir que ellos hayan permanecido tal cual en el tiempo; tan solo en los últimos nueve años se desactivaron espacios como el Museo del Colegio Luis F. Xammar, el Museo del Colegio Pedro E. Paulet y el Museo del Colegio Corazón de Jesús, sin embargo prontamente han ido surgiendo nuevos, como el Museo Comunitario de Supe (2013), el Museo Arqueológico Casa Hacienda Huando Huaral y la exposición museográfica "Los Huacos" (2014). Esto en primer término, nos situa frente a los espacios museísticos y su vinculación directa con el patrimonio arqueológico. En el territorio hay una distribución casi homogénea de estos espacios, teniendo en consideración la administración política. La Provincia de Barranca es la que cuenta con una mayor cantidad con un total de siete espacios. Ellos están distribuidos en la capital de la provincia (1 en Barranca) y en sus principales distritos (3 en Paramonga, 1 en Supe, 2 en Pativilca). Le sigue la Provincia de Huaura con seis espacios, distribuidos también en su capital provincial (2 en Huacho, 1 en Hualmay) y en sus principales distritos (1 en Végueta, 1 en Huaura y 1 en Sayán). Finalmente, en la Provincia de Huaral se encontraron cuatro espacios presentes en la capital de la provincia (2 en Chancay y 2 en el centro poblado de Huando). De esta manera, se ve una tendencia uniforme en la distribución tanto dentro de las unidades de mayor jerarquía administrativa (capitales de Provincia) -siendo la excepción Barranca que aún tiene un espacio museístico en formación-, como en las de menor jerarquía (distritos, anexos y centros poblados) (Ver Tabla 3). Se define el universo, de manera muy general, como un conjunto de Espacios Museísticos. Con ello hago referencia, a los lugares que conservan, exponen y/o difunden patrimonio cultural representado por las colecciones de naturaleza arqueológica e histórica, y en los cuales agentes culturales (entidades o personas particulares) movilizan gestiones y/o acciones que dan vida a estos espacios. Después de profundizar en cada uno de ellos, se sistematizaron sus características que tuvo como referente inicial la clasificación descrita en la metodología, la cual permite examinar las características y praxis del conjunto (Ver Tabla 3). 59

65 Figura 1. Mapa de la Región Norte Chico, Perú 60

66 Espacios museísticas del Norte Chico Distrito Año de apertura Categorías Administración Propiedad Museo Arqueológico Vichama Paramonga 2008 Sala de Escuela Fiscalizada de Escuela Estatal Exposición Varones N Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura Huaura 1969 Casa Museo Municipio de Huaura Municipalidad Distrital Museo Bolivariano Pativilca 1973 Casa Museo Municipio de Pativilca Municipalidad Distrital Museo de Arqueología de la Universidad Nacional José Faustino Sanchéz Carrión Huacho 1987 Museo Universitario Universidad Nacional José F. Carrión Universidad Estatal Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa "Nuestra Señora del Carmen" Paramonga 1987 Sala de Exposición Congregación Canonesas de la Cruz Entidad Privada Museos del Castillo de Chancay Chancay 1990 Sala de Exposición Empresa Privada Entidad Privada Museo Municipal de Chancay Chancay 1991 Museo Local Municipio de Chancay Municipalidad Distrital Museo Arqueológico de Huayto Pativilca 2004 Sala de Exposición Institución Educativa "José Pardo y Barreda" Escuela Estatal Museo Municipal Generalísimo "Don José de San Martin" Sayán 2003 Sala de Exposición Municipio de Sayán Municipalidad Distrital Museo Comunitario de Végueta Végueta 2008 Sala de Exposición Municipio de Végueta / Zona Arqueológica Caral, Unidad Ejecutora Ministerio de Cultura Entidad Estatal Museo Comunitario de Supe Supe 2013 Inaugurado el 08/11/2013 Sala de Exposición Municipio de Supe / Zona Arqueológica Caral, Unidad Ejecutora Ministerio de Cultura Entidad Estatal Museo Arqueológico Casa Hacienda Huando - Huaral Centro Poblado de Huando (Huaral) 2014 Sala de Exposición Fundación Bazán Entidad Privada Museo Escolar "Fernando Graña Elizalde" Centro Poblado de Huando (Huaral) 1997 Colección I. E. "Fernando Graña Elizalde" N Escuela Estatal Museo Ecoarqueológico Huacho Gestado en la década de los 80 Colección Miguel Ángel Silva Esquén Privada Exposición Museográfica "Los Huacos" Hualmay 2014 Sala de Exposición Municipio de Hualmay Municipalidad Distrital Colección arqueológica de la I.E Huaricanga Centro Poblado Huaricanga (Paramonga) S/F Colección Institución Educativa N Huaricanga- Paramonga Escuela Estatal Comité Museo Provincial de Barranca Barranca 2007 Proyecto de Museo Iniciativa de Cámara de Comercio de Barranca Tabla 2. Resumen del universo museístico actual en el Norte Chico 61

67 Barranca Huaura Huaral Colecciones Colección arqueológica de la I.E Huaricanga Colección Silva Esquén Colección arqueológica "Fernando Graña Elizalde" N de Huando Salas de Exposición Museo Arqueológico Escolar de la I. E Educativa "Nuestra Señora del Carmen" Museo Arqueológico Vichama Museo Arqueológico de Huayto Museo Municipal Generalísimo "Don José de San Martin" Museo Comunitario de Végueta Exposición Museográfica "Los Huacos" Museos del Castillo de Chancay Museo Arqueológico Casa Hacienda Huando Huaral Museo Comunitario de Supe Proyectos de museo Comité Museo Provincial de Barranca Casas-Museo Museo Bolivariano Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura Museos Museo de Arqueología de la Universidad Nacional José Faustino Sanchéz Carrión Museo Municipal de Chancay Tabla 3 Nos asomamos a un universo variado Una parte importante de esta aproximación al universo actual fue reconocer que estamos frente a un conjunto colecciones, museos, exposiciones y Casas-Museo, algunos institucionalmente más consolidados que otros, y que en líneas generales tienen como finalidad la protección del patrimonio local y su difusión, con miras al desarrollo social (identidad) y económico (actividad turística). Estos aspectos sobre la perspectiva de desarrollo fueron comentados por la mayoría de los responsables de los espacios. Más adelante, nos detendremos en casos específicos sobre cómo esta intención se manifiesta en misión, visión y objetivos institucionales o no, y cuánto se lleva a la práctica en el quehacer museológico. 62

68 Los espacios museísticos en el Norte Chico comenzaron a hacer su aparición en la década de los 70 con la creación de las Casas-Museo, como el Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura abierto a principios de esa década y el Museo Bolivariano de Pativilca abierto al público en Son los museos más antiguos en la región y su calidad de monumentos históricos está vinculado al paso y estancia militar en la primera mitad del siglo XIX de José de San Martín y Simón Bolívar, próceres de Independencia del Perú y de su consolidación en América Latina (Anexo 1, Fichas de Registro 2 y 3). Las acciones en estas Casas-Museo se dirigen a la conservación, exposición y difusión del sentido histórico de los inmuebles, los personajes y el rol que estos jugaron en la independencia, además de resaltar la importancia geopolítica de estos distritos. Es interesante que en ambas se hayan incorporado el pasado prehispánico en pequeñas salas que se han sumado en los últimos años. En el 2005 se ha incorporado, mediante un convenio con el Proyecto Arqueológico Norte Chico, una sala de exposción que da cuenta del proceso civilizatorio desarrollado en los valles de la región. En el caso de Huaura también se presenta una sala que incorpora un conjunto de objetos prehispánicos de la Cultura Chancay. El público que visita estos inmuebles son de la localidad, en su mayoría estudiantes de niveles de educación escolar y universitaria, además de visitantes procedentes de la capital (Lima) con fines turísticos. En estas Casas-Museo la investigación es una labor que tiene gran debilidad, puesto que en ellas no se han podido emprender proyectos de corto o mediano alcance que estudien los inmuebles y sus personajes que los ha convertido en emblemas de la región y el país. A pesar de esto, han surgido un número pequeño de publicaciones e investigaciones independientes que contribuyen a incrementar los conocimientos sobre ellos, aunque hace falta una articulación para que se pueda nutrir los contenidos expositivos de las casas. Las Colecciones identificadas en el conjunto son de naturaleza arqueológica. Se entiende que ello es producto de la riqueza arqueológica de la región, la cual atraviesa una situación frágil con respecto a su conservación (saqueo, invasiones, etc.); en primera instancia el origen de muchas de las colecciones y espacios museísticos en la región se entrecruza con esta problemática. Se ha agrupado en esta categoría a los acervos formados por docentes, al interior de dos escuelas estatales, y el impulsado por un coleccionista privado (Anexo 1, Fichas de Registro 13,14 y 16). Si bien cada uno de ellos cuenta con un espacio que alberga la colección, este no admite museografía o un guión que presente contenidos. El acceso a la colección es bastante restringido y en principio está abierta a los estudiantes de la misma escuela y a los investigadores de la zona o público muy especializado interesado en estudiarlos. Los responsables están conduciendo sus acciones, acorde con la legislación del patrimonio cultural vigente 63

69 (Ley N 28296), para registrarlas e inscribirlas en el Registro Nacional de Bienes Culturales de la Nación. Casos que ejemplifican esto son las colecciones de la institución educativa "Fernando Graña Elizalde" N de Huando y de la institución educativa N de Huaricanga. En este último caso, se puede dar mayores referencias por medio del trabajo que desarrolló el Proyecto Norte Chico con la escuela, en el se evidencia y resume el anhelo interno de las escuelas de crear una institución como un museo escolar. En el año 2007, los objetos de la colección arqueológica de la escuela N de Huaricanga fueron seleccionados, clasificados y registrados mediante un trabajo colaborativo con el Proyecto Arqueológico Norte Chico a iniciativa de la directora de la institución educativa. La colección destaca por ser una muestra variada de vasijas de un estilo cerámico característico de la zona: Pativilca, que se desarrolló entre los 900 años d.c a 1533 años d.c. Sus características indican que proceden de los cementerios prehispánicos de la localidad. El Proyecto Norte Chico produjo un catálogo con los objetos de la colección. En dicho documento se puede recoger el propósito bajo el cual la escuela reunió y conservó los objetos y que reúne aspectos esenciales de la gestación de espacios museísticos y colecciones escolares, tales como conservación patrimonial y turismo: Una de las razones por la que surgen los museos locales es por la expectativa de la población de mostrar su potencial cultural, con la esperanza que estos espacios permitan mantener vigentes las evidencias materiales y tradiciones que existen en la zona para que más adelante puedan tal vez insertarse dentro de algún circuito turístico que se pueda elaborar. (Proyecto Arqueológico Norte Chico - I.E 20532, 2007, p.4) Dentro de la categoría Sala de Exposiciones se han agrupado nueve espacios museísticos cuyas actividades están sustancialmente centradas en el manejo colecciones y su exposición (Anexo 1, Fichas de Registro 1, 5, 6, 8, 9, 10, 11, 12 y 15). En alguna medida en ellos se encuentran indistintamente criterios descritos en las categorías de Museo Local y Museo Escolar, por lo que su clasificación se consideró más apropiada dentro de la forma en que se manejan estos espacios. Las colecciones - básicamente arqueológicas- son muestra del patrimonio que tiene origen en cada uno de los distritos donde se ubican estos espacios, las mismas exposiciones tratan de resaltar el aspecto local del patrimonio. Son propiedad y están administrados por gobiernos locales e instituciones educativas (municipios distritales, provinciales y escuelas). Solo en tres casos la administración y propiedad es privada: Castillo de Chancay, la escuela "Nuestra Señora del Carmen" y la Fundación Bazán. En esta categoría también se consideró incluir a los denominados Museos Comunitarios de Supe y Végueta, pues las acciones dentro de estos espacios así como su propiedad y administración difieren totalmente del tipo comunitario. La creación de ambos espacios, su administración y propiedad, dependen 64

70 y se nutren de la Unidad Ejecutora - Zona Arqueológica Caral/ Ministerio de Cultura (U.E 003-ZAC/MC) y las municipalidades distritales de Végueta y Supe, sin la inclusión en el nivel organizativo o de formación de agrupaciones locales, sociales, de los distritos, tal como nos sugiere la definición de Museo Comunitario. Con el apoyo de los municipios locales que han destacado un local y responsables para mantener abierto al público estos espacios, la Unidad Ejecutora ha dotado de colecciones arqueológicas y ha habilitado museográficamente estos espacios (Anexo 1, Fichas de Registro 10 y 11). Un aspecto destacable de ambas exposiciones lo constituyen el contenido y los recursos museográficos con que se presentan los objetos recuperados de las investigaciones arqueológicas. En ambas se encuentra un discurso científico enfocado en los resultados de las investigaciones que la Unidad Ejecutora Proyecto Zona Arqueológica de Caral conduce en dos sitios correspondientes al periodo Arcaico Tardío. En ambos espacio se resalta y tiene como referente principal el valle de Supe y el sitio arqueológico Caral como máxima expresión donde tuvo origen uno de los cinco focos civilizatorios de la humanidad. En líneas generales, los encargados de colecciones arqueológicas han dirigido sus acciones a adaptar espacios dentro de las entidades (escuelas, municipios, casas) donde nacen estas iniciativas de museos para exponer los objetos. De allí su constante relación y búsqueda de asesoría científica arqueológica para organizar colecciones y exposiciones. En dichos espacios se concentran esfuerzos para el desarrollo actividades que les permita mantener en un buen estado las colecciones y difundir por medio de la exposición. Hay que destacar el caso del museo creado dentro de la Institución Educativa Fiscalizada: El Museo Arqueológico Vichama. Este es uno de los pocos espacios planificado y construido con diversas áreas para el manejo de la colección (Anexo 1, Ficha de Registro 1). Sin embargo, como es el caso del funcionamiento de la mayoría de casos de este conjunto, sus actividades se concentran en dos aspectos claves: Colección y Exposición. Las salas de exposición tienen una gama básica de recursos museográficos. Mediante cuadros cronológicos y dentro de vitrinas, se muestran las manifestaciones culturales prehispánicas más emblemáticas (p. ej.: Cultura Chancay, Estilos cerámicos Huaura y Pativilca) que en mayor profusión se despliegan en vasijas cerámicas y restos humanos momificados, ordenados por contenidos temáticos, por ejemplo: alimentación, textilería, guerra. Asimismo, se ha identificado un componente particular, que se va insertando en los cuadro cronológicos: El Origen de la Civilización en la región. Esto, debido a la difusión que han alcanzado las investigaciones que estudian el tema. Funciones como investigación y conservación de las colecciones, entre otras, se realizan eventualmente y en menor medida debido a que estos espacios museísticos carecen de una estructura 65

71 organizativa propia, el personal suficiente y los recursos económicos para ello. Actualmente, en la mayoría de los espacios expositivos, los esfuerzos se han movilizado para contar con un registro documental de sus colecciones y el mantenimiento básico de los objetos (limpieza). Las salas se mantienen en la medida de lo posible abiertas al público; particularmente en las escuelas cuyos profesores responsables dan tiempo extra de sus actividades de docencia para que además de los estudiantes las personas de la localidad y de otras comunidades educativas tengan acceso a las exposiciones. En esta categoría también cabe resaltar los espacios que y su relación con el tipo Museo Escolar. Todos ellos se localizan en el distrito de Paramonga (Provincia de Barranca): el Museo Arqueológico Vichama, "Nuestra Señora del Carmen" y Huayto (Anexo 1, Fichas de Registro 1, 5 y 8). La iniciativa para su constitución ha estado en manos de docentes y autoridades escolares. Ellos custodian únicamente objetos arqueológicos. Sus inicios generan polémica pues la forma de conformarlas fue mediante exploraciones organizadas por profesores y alumnos a los sitios arqueológicos adyacentes a las localidades cuyo resultado fue la recolección y acumulación de objetos descontextualizados. Actualmente, dichas prácticas se dejaron de lado y al interior de ellas se promueve la conciencia de protección el patrimonio. Su registro oficial en el Sistema de Registro Nacional de Bienes Culturales de la Nación es en parte una evidencia de ese cambio; adquirir objetos arqueológicos se ha vuelto una acción que única y excepcionalmente se realiza por donaciones. En el proceso de clasificación tipológica, estilística y selección de las colecciones escolares han intervenido profesionales en la rama de la disciplina arqueológica e histórica, punto de partida que da sentido y conexión a cada acervo en particular. Un caso en el que se experimenta esto la escuela "Nuestra Señora del Carmen", colección que se registró, conservó y renovó el acceso a la misma en 2005, trabajo que fue apoyado por el Proyecto Arqueológico Norte Chico (Holguín y Cornejo, 2007; Proyecto Arqueológico Norte Chico 2007B). Fue un trabajo colaborativo que tuvo eco en docentes y autoridades de otras instituciones educativas que solicitaron este tipo de asesoría para la conservación, registro y exposición de sus colecciones (Proyecto Arqueológico Norte Chico 2007A). Llama la atención el espacio museístico de la escuela "Nuestra Señora del Carmen" pues su trayectoria es una de las más antiguas y casi continua desde Su gestión, además de estar documentada, es se mantiene vigente. Sus acciones son replicadas en varios espacios que persiguen la misma visión de activar un museo dentro de las escuelas. También es significativo porque su trayectoria parece tener los rasgos o criterios que caracterizan lo que clasificamos como Museos Escolares. En la literatura museológica en el país se hace mención de la existencia de estos espacios (Martínez, 2002; Guía de Museos, 2013), pero 66

72 es una mención clasificatoria más que un examen de su praxis y su vinculación con el patrimonio cultural. Estas nociones las destacaremos más adelante (Capítulo 3). Las actividades dentro de los espacios expositivos de las escuelas recaen en un sola persona. Esta persona puede ser el director de la escuela o un docente con afinidad por la historia o el arte por lo general son principalmente del área de Ciencias Históricos Sociales- quien es el encargado de difundir la visita a la exposición, desarrollar actividades que vinculen a los alumnos en las funciones del espacio (como guías, y apoyo a la conservación) y a la creación de actividades que se conecten con los contenidos curriculares. Además gestionan la participación de especialistas para el desarrollo de exposiciones museográficas, registro y conservación de las colecciones. Predominan sus estrategias de difusión o promoción continua de estos espacios en los medios locales (radio, televisión, etc.) y el desarrollo de actividades educativas a partir de la colección. Es decir, en líneas generales tienen un perfil que los aproxima al de un agente cultural, pero eso lo examinaremos también en adelante. En general, en estos espacios museísticos destaca el componente turístico como un motor para el mantenimiento y el desarrollo de un sentido identitario. Por ejemplo, las municipalidades filtran este aspecto desde la formulación de los espacios hasta el desarrollo de promociones turísticas dentro de los mismos espacios, tal como ocurre con la exposición Los Huacos y en el Museo Municipal Generalísimo "Don José de San Martín" (Anexo 1, Fichas de Registro 9 y 15). Asimismo, Museos del Castillo de Chancay de propiedad privada se encuentra dentro del circuito de visitas que promociona su dirección y tiene el propósito explícito, al encontrarse dentro de un centro de recreación, de ser parte de la oferta turística de la región (Anexo 1, Ficha de Registro 6). Los pasos seguidos por el Proyecto de Museo, a cargo del Comité Museo Provincial de Barranca, se encaminan a la formación de un museo regional (Anexo 1, Ficha de Registro 17). El comité tiene sus orígenes en el año Surgió a partir de los talleres desarrollados por el Proyecto Arqueológico Norte Chico durante los años 2002 a 2007, dirigidos a la población en general y a los involucrados en la educación de la historia prehispánica, la protección y manejo del patrimonio cultural en la región. Originalmente el comité fue formado por la Cámara de Comercio de Barranca quien invitó y logró que participaran en el diversas autoridades y miembros de otras instituciones [7]. Dicho comité tiene como propósito generar una institución que promueva la visión integral de la historia (Advíncula 2015). Esta visión integral de la cultura de los valles, su riqueza cultural e histórica, y busca conjugar tanto patrimonio tangible como intangible. 67

73 Uno de los objetivos que tiene el comité es crear un tipo de administración mixta en la que confluyan diversos sectores, lo estatal, privado y la organización civil. Apunta a convertirse en uno de los museos eje de desarrollo y referente del Norte Chico. En la actualidad, los esfuerzos del comité están centrados en conseguir el inmueble adecuado dentro de la Provincia de Barranca para planificar y diseñar sus instalaciones. Uno de los aspectos que generan gran debilidad en el proyecto es la formulación paulatina de la colección pues no es un proceso concluido, y sobre el cual actualmente ya se empieza a planificar espacios y articular diversos aspectos de la institución que se pretende crear. Por las características de administración y operatividad, se ha incluido el Museo Municipal de Chancay (Anexo 1, Ficha de Registro 7) dentro de lo que se define como Museo local. Su surgimiento fue una iniciativa de parte de la autoridad máxima de la municipalidad donde se localiza. Fue inaugurado en 1991, sin embargo por muchos años se mantuvo cerrado hasta que una nueva iniciativa edil de la mano del Gobierno Regional de Lima promovió su restructuración partiendo por la creación de un espacio propio que fue inaugurado en el En él se articulan diversas funciones que se realizan de forma permanente: registro, adquisición de objetos, conservación, investigación y difusión. Su actual edificio es uno de los pocos que ha sido planeado y diseñado con diversos ambientes para el desarrollo de sus actividades. Su administración y organización, se encuentra a cargo del municipio. Este ha dotado de personal seleccionado y especializado en arqueología y en conservación, lo que ha vitalizado el desarrollo de actividades y proyectos (investigación y rescate arqueológico) y su funcionamiento permanente. Tiene una colección más variada, la cual incluye arte popular, objetos históricos y religiosos, mostrando de esa forma las diversas manifestaciones desde lo prehispánico hasta las manifestaciones culturales y actividades económicas tradicionales que tienen vigencia en el día a día de la provincia de Huaral. Dentro del universo museístico se resalta la presencia de un único espacio que conjuga las características indicadas en el tipo de Museo Universitario. Se trata del Museo de Arqueología de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión. Es una de las pocas instituciones que originó su colección a partir de intervenciones arqueológicas. Su gestación y creación fue producto de la iniciativa del arqueólogo responsable de la ejecución de dichos trabajos en los años 80, el Dr. Arturo Ruíz Estrada. (Anexo 1, Ficha de Registro 4). Fue abierto al público en 1987, desde entonces se ha mantenido en funcionamiento. Es un recinto ampliamente reconocido en el Norte Chico tanto por su antigüedad como por la constitución de su colección, una de las más grandes recuperada en el marco de trabajos arqueológicos sostenidos por una entidad educativa, y que alcanzó repercusión porque puso de manifiesto elementos y contextos de la cultura Chancay, cultura que tiene gran presencia en todos los valles de la región y que ha sido poco conocida a causa del constante saqueo y tráfico de bienes culturales. 68

74 Actualemente, este museo tiene como una de sus principales líneas de acción se centran en el registro, conservación y difusión de sus colecciones. Tiene como pilar la publicación periódica de una revista de investigaciones que agrupa los principales estudios históricos y arqueológicos desarrollados por diversos especialistas a partir de la colección universitaria o de proyectos llevados a cabo en la región. El aspecto de adquisición de colecciones mediante el desarrollo de proyectos de investigación se ha detenido algunos años después de su creación. En los últimos años la forma en que se han ido sumando objetos a la colección inicial es por medio de convenios en los que algunos proyectos arqueológicos desarrollados en la región y dirigidos por investigadores nacionales o extranjeros dejan en custodia los restos recuperados por medio de sus trabajos de campo. En la exposición museográfica se destacan los principales hallazgos con que se dio vida al museo y un conjunto de evidencias que señalan la cronología de ocupaciones en toda la región, con un énfasis en la cultura emblemática conocida como Chancay por medio de muestras de sus principales manifestaciones culturales (textitleria, ritual funerario, música). Además, se exhiben objetos que son relacionados con uno de los mitos prehispánicos más conocidos en la región (Vichama). Por la localización del museo, fuera de la ciudad universitaria, el grueso del público asistente son turistas procedentes de la capital del país, turistas locales, así como estudiantes escolares y universitarios del Norte Chico. Al interior se desarrollan diversas actividades aparte de las visitas regulares a la exposición. En estas se articulan visitas a sitios arqueológicos y a otros espacios museísticos de la localidad y del resto de la región que tienen como hilo conductor el mito regional Vichama. Además, se presenta la teatralización de este mito. Ello le ha valido para que el museo sea ampliamente conocido en toda la región. En este espacio el Dr. Henry Marcelo, actual jefe del museo, desarrolla un papel importante porque busca articular el universo museístico de la región por medio de una estrategia: Red de Museos del Norte Chico. Ella tendría como base o guía el museo universitario. En ese sentido, esta institución se postula como una pieza fundamental para la planificación, revitalización y quehacer museológico de la región. El museo local y el museo universitario fueron clasificados siguiendo algunos de los criterios establecidos y adaptados de la propuesta de Martínez (2002). En ambos casos descritos, tanto la representatividad (local, regional) que logra cubrir el acervo y la entidad bajo la que nace (universidad) son criterios que priman uno sobre otro. En todo caso, estas dimensiones están presentes en cada uno de los espacios del Norte Chico, sean colecciones, exposiciones, casas-museo, pese a que no se exprese en las clasificaciones en sí, las cuales se han visibilizado en la medida que se han descrito cada uno de los conjuntos que conforma el universo museístico; en el mismo museo universitario se encuentra una 69

75 proyección y desarrollo de sus contenidos hacia lo local y lo regional. Estos dos casos de manera genérica se han agrupado como museos, pues ambos constituyen unos de los pocos espacios que han institucionalizado sus prácticas y vienen desarrollado de forma integral funciones como adquirir, conservar, investigar, exponer, difundir sus colecciones. Más adelante, se analizará uno de ellos para entender lo que supone el quehacer museológico en esta región. Un rasgo que se convierte en característico en el universo museístico son los cierres definitivos y temporales, principalmente en los espacios expositivos. En algunos casos los cierres definitivos se deben a diversos motivos, el fundamental es la carencia de los medios económicos y de personal especialzado para mantener en funcionamiento y cubrir las necesidades que requiere la infraestructura y las colecciones. En el escenario actual se detectó un grupo que fueron desactivadas durante la década de los 90 y los Entre ellas se encuentran el Museo Regional de Antropología y Arqueología de Huacho, Museo Arqueológico Comunal Carquín (Huacho), además de los Museos de las escuelas Luis F. Xammar (Huacho) y Pedro E. Paulet (Huacho) y el "Divino Corazón de Jesús" (Paramonga). Se desconoce el destino final y condiciones de las colecciones. Pese a estas dificultades recurrentes, se han ido creando nuevos o reactivando los existentes como los museos escolares, los espacios expositivos de Supe y Végueta y el de la Casa-Hacienda de Huando. Iniciativas múltiples que movilizan la creación y las acciones en el universo museístico Aunque la mayor parte del universo museístico -al menos unas doce- son propiedad y dependen del sector estatal (escuelas, universidades, municipios), ello no significa que se encuentran bajo la tutela o administración oficial del Estado, específicamente bajo el área de Dirección General de Museos del Ministerio de Cultura. Estos espacios tienen autonomía desde su gestación. La conexión directa con esta instancia se establece por medio de una solicitud inicial por parte de los museos para formar parte del Sistema Nacional de Museos del Estado [8]. La presencia del Ministerio de Cultura se ha efectuado en casos bastante específicos, en forma de asesorías para conservación, registro, y asistiendo ante el caso de denuncias que implica el robo objetos de las colecciones registradas en el sistema integrado que maneja dicho ministerio (Anexo 1, Ficha de Registro 13). Por otro lado, cuatro de los espacios museísticos son propiedad y dependen del sector privado, es decir a coleccionistas, a una institución educativa y una empresa turística privada (Anexo 1, Fichas de Registro 5, 6, 12,14). Cada uno de ellos es o se encuentran en camino a convertirse en custodio legal de la colección que poseen [9], según exigencia de la legislación patrimonial del país (Ley N 28296). 70

76 Las iniciativas de creación y apertura de los monumentos históricos en Pativilca y Huara como Casas- Museo en principio fueron gestadas desde el Estado, directamente del poder legislativo, y se dieron en el marco conmemorativo del aniversario de la Independencia. Luego del acto fundacional de los espacios, su administración ha permanecido en manos de las autoridades municipalidades distritales. En ambos casos, los municipios han designado responsables del funcionamiento del inmueble. Al respecto, cabe resaltar el papel del de Huaura que ha destacado recursos en colaboración con el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo para la conservación del inmueble. Esta casa, además, se ha convertido en un importante repositorio documental del proceso de independencia en el país. Exinten casos específicos en los que el nacimiento de los espacios museísticos no se dan bajo una entidad superior. Por un lado, la iniciativa original por parte del Comité Museo Provincial de Barranca. Esta organización civil ha sido formada para la creación un museo regional proyectada con una administración mixta que conjugue diversos sectores (estatal y privado). Además, se resalta la Colección Bazán, cuyo manejo ha conducido a su propietario a crear una institución como una fundación para gestionar el manejo, conservación y difusión de la colección, con la cual el año 2014 logró implementar una exposición museográfica en la Ex-Casa Haciendo Huando (Anexo 1, Ficha de Registro 12). La mayoría de los espacios museísticos han nacido bajo una entidad superior (municipios, escuelas, universidades), bajo diversas razones. Iniciativas que han tomado parte en diversos agentes como docentes y autoridades educativas; autoridades locales (alcaldes); investigadores; proyectos arqueológicos; coleccionistas; asociación civil (Comité Museo Provincial) y el Estado peruano. En la actualidad, se observa que su funcionamiento recae, por lo general, en un solo agente cultural de la región. Todo el universo es, en ese sentido, producto de múltiples iniciativas locales que no descansan en un plan estratégico mayor en torno al manejo del patrimonio cultural como por ejemplo una política o lineamiento cultural orientado desde el Estado, el Gobierno Regional o los gobiernos locales (municipios). Un rasgo en común: la naturaleza arqueológica de las colecciones Como se ha resaltado desde el inicio, la naturaleza de las colecciones es predominantemente arqueológica y, en una mínima pero significativa proporción, histórica representadas únicamente en las Casas Museo de Huaura y Pativilca. Al respecto, hay que subrayar que incluso en estos espacios con patrimonio histórico se han incluido exhibiciones de objetos arqueológicos. Esto hace que el componente arqueológico se presente como un común denominador en todo el universo museístico. No resulta extraño en una región que cuenta con un inmenso y rico patrimonio arqueológico que abarca diversos periodos (a 71

77 lo largo de al menos unos 4500 años), según lo han venido establecido las investigaciones científicas. Pero, al igual como sucede en otras zonas del país, este patrimonio se encuentra sujeto a la depredación constante por el saqueo promovido para fines recreativos y culturales, por el tráfico ilícito de bienes culturales o el avance de invasiones de poblaciones que carecen de viviendas y pugnan por establecerse dentro de las zonas arqueológicas. La condición de la riqueza patrimonial y la problemática que atraviesa se han conjugado y en buena medida son parte del origen de muchos de las espacios museísticos en la región. Entre la década de los 70 y 80 la forma de adquirir objetos arqueológicos e ir conformando las colecciones escolares fue por medio de la recolección, resultado de las exploraciones guiadas por docentes acompañados de sus estudiantes a los diversos cementerios prehispánicos de sus localidades. Esas prácticas incentivaron también a que los padres de familia donaran objetos que recolectaron de sus tierras o de los que tenían en posesión. En la actualidad, estas acciones contra el patrimonio se han frenado y a cambio se han generado mensajes en pro de su preservación y difusión dentro de su comunidad educativa y local. Los municipios fueron importantes centros de acopio de objetos arqueológicos descontextualizados, que llegaron por donación o incautación. En las últimas décadas han tratado de reintegrarlos y darles un sentido histórico a través de exposiciones museográficas. Del mismo modo, las colecciones particulares se han ido abriendo al público de la región. Dando por descontadas las Casas Museo de Pativilca y Huaura, pocos espacios albergan colecciones arqueológicas procedentes de intervenciones arqueológicas. Entre ellos, el museo universitario, las exposiciones de Supe, Végueta y los Huacos. Y, en los últimos años lo viene haciendo el Museo Municipal de Chancay. En general, un cambio sustancial se evidencia desde los 2000 cuando se van dejando de lado estas prácticas que han fomentado directamente o no a formar colecciones, en la medida en que las escuelas y otras entidades (municipios, coleccionistas) han tenido un mayor acercamiento a las investigaciones arqueológicas. Especialmente en las escuelas, se han sensibilizado y han entendido las consecuencias de dichas prácticas. Además, la legislación patrimonial para la protección de los bienes culturales [10] ha ayudado a acelerar el proceso de las inscripciones de estas colecciones en el Registro Nacional de Bienes Culturales de la Nación, con las cuales las escuelas y docentes adquieren mayor responsabilidad sobre el patrimonio que custodian. Pese a que podemos establecer una diferencia por el tipo de financiamiento sea del sector privado o estatal, si nos referimos a las condiciones en que se encuentra el patrimonio, se puede decir de forma generalizada que éstas no son las más óptimas en ambos casos. La solvencia en presupuestos, personal y 72

78 protocolos para la conservación y mantenimiento de condiciones adecuadas de los objetos y los inmuebles se hacen indispensables en el mediano y largo plazo. Si bien observamos que la mayoría de colecciones tienen en general un buen estado de conservación, no es de esperar que su situación se mantenga como tal en el tiempo sin una minima acción sobre ellos. Casos sobre la vulnerabilidad aún dentro de estos espacios son reiterativos, como el reciente robo de objetos de la colección arqueológica de la escuela "Fernando Graña Elizalde" (Ver Anexo 1, Fichas de Registro 13) y del robo de objetos del desactivado museo de Huacho (Ver pie de página 21). Es fundamental procurar las condiciones más optimas para las colecciones, porque su deterioro es uno de los factores que dificultan su comprensión (Ver Gándara & Perez, En prensa). Por lo documentado, en cada uno de los espacios museísticos se observa que el tratamiento de la colección ha permitido el desarrollo de diversos contenidos temáticos que destacan la cultura local. Además, se advierte el carácter regional dentro del museo universitario y el proyecto de museo en marcha. No es una construcción diseñada con base en una imposición o discurso oficial. En cada uno de estos espacios, de forma particular se destaca la singularidad cultural de la localidad, partiendo del hecho de que la mayoría de colecciones son formados por objetos descontextualizados. En las exposiciones se rescatan el rasgo ancestral preshispánico y se resaltan el desarrollo de aspectos tecnológicos y sus prácticas sociales: tecnología textil, cerámica, lítica, rituales funerarios. Un hilo discursivo fundamental es la cronología de las colecciones y su engranaje dentro de las propuestas de desarrollo cultural de la historia y arqueología del país. El nuevo componente ha sido traído recientemente a raíz de las investigaciones arqueológicas en la región sobre el origen o foco civilizatorio, que tiene dos vertientes en las propuestas teóricas del Proyecto Arqueológico Norte Chico (Haas & Ruíz, 2003) y la U.E Zona Arqueológica Caral; además se suman otras investigaciones particulares (Aguilar, 2006; Vega-Centeno, Villacorta, Cáceres & Marcone, 1998; Vega-Centeno, 2005). Principalmente las dos primeras han permeado en los contenidos expositivos (cuadros cronológicos) que toman primordialmente la antigüedad del fenómeno civilizatorio y su despligue en los valles del Norte Chico, expuesto por ambas propuestas. 73

79 2.3 Configuración del panorama museológico en el Norte Chico Una mirada al interior del panorama: Selección de casos de estudio La creación y renovación de los espacios museísticos presentes en el Norte Chico han sido muestra de diversas iniciativas locales involucradas en el quehacer museológico y manejo del patrimonio arqueológico e histórico. Son pocos los referentes sobre las experiencias y la memoria museológica que se han generado al respecto. Sin embargo, con lo que se ha reunido y se ha ido describiendo en este estudio, podemos contar hoy con referentes para profundizar en esa trayectoria e identificar las experiencias. En la parte inicial del capítulo se ha visualizado un universo museístico variado cuya constitución misma, sumada a los casos representativos seleccionados de el, son referentes esenciales para reconstruir, analizar y realizar una propuesta coherente de la configuración del paisaje museológico en el Norte Chico. En esa primera aproximación se identificaron dos casos que presentan las condiciones ideales que posibilitan su estudio, el Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión y el Museo Escolar de la Institución Educativa Nuestra Señora del Carmen. Los criterios de selección se fundamentan en: - Los casos se encuentran dentro del grupo de espacios que tienen mayor antigüedad. Si bien no se sitúan con anterioridad a la década de los 80, sus orígenes tienen larga data y van de la mano con en el siguiente criterio que ayuda a observar su recorrido y el impacto que han generado. - Sus diversas actividades desde su formación y a lo largo de sus existencias han sido objeto de documentación, tanto en memorias y/o informes institucionales como en reportes periodísticos y de otro corte. Éstos fueron accesibles gracias a los responsables de la dirección de estos espacios. - Otro criterio fundamental es que se encuentran en funcionamiento. Este criterio de selección no es menos importante si se considera que en el universo museístico han ido cerrando temporal o permanentemente algunos espacios. - La presencia de sus responsables es vigente y sus acciones los perfilan como agentes culturales pues generaron y buscan generar cierto impacto tanto en los espacios que dirigen como en el universo museístico. Todas estos aspectos hacen de ellos casos indispensables para el estudio del panorama, a los cuales se suman las entrevistas a sus agentes. 74

80 El Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión [11] A finales de la década de los 70 se fue construyendo y ampliando el primer campus universitario de la región del Norte Chico. El desarrollo de esas labores puso al manifiesto una serie de evidencias arqueológicas prehispánicas, de las que se tiene muchas referencias por el saqueo constante y de las que poco se han podido estudiar por esa condición. Por entonces, desde el rectorado se impulsó una iniciativa para convocar la participación de un arqueólogo que desarrollara actividades para la recuperación e investigación de dichos vestigios. Participó y ganó la convocatoria el arqueólogo Arturo Ruiz Estrada, quien en ese momento laboraba como investigador en el Museo Nacional de Antropología, Arqueología e Historia del Perú. Al inicio realizó trabajos de excavación y recuperación de diversas evidencias dentro de la ciudad universitaria. Poco después formuló un proyecto en la zona sur de la misma con el objetivo de anticipar otras futuras ampliaciones- y recuperar los vestigios que se encontraban en peligro o habían sido afectados por invasiones o saqueos (huaquería), que por aquellos años y hasta la actualidad constituye una amenaza latente contra el patrimonio arqueológico de la región. Crear un museo universitario fue idea del arqueólogo, apoyado por la máxima autoridad del rectorado. El museo se fundó en 1987, la creación tenía la finalidad de constituir un espacio para conservar e investigar los restos que se iban recuperando de las excavaciones y exploraciones a su cargo; a la par el museo se convirtió en un espacio para promover la protección del patrimonio de la depredación a la que estaba sujeta. El inicio de su funcionamiento al interior de la universidad se concentró en la conservación e investigación de la colección formada por los trabajos arqueológicos. Las exposición se limitó a exhibir los principales hallazgos (Ruíz, 2015). La presencia del museo dentro del campus produjo un efecto dentro de la población local. La exposición y las zonas donde la universidad realizaba sus investigaciones eran continuamente visitadas por la comunidad de estudiantes universitarios, escolares y la población en general. Además, provocó algunas iniciativas que condujeron a crear espacios expositivos, tales como la colección y museo del colegio Xammar y la exposición de algunos objetos dentro de un instituto pedagógico para docentes; por entonces, también se fue creando la colección Silva Esquén (Ruíz, 2015). El museo se mantuvo en sus primeros años dentro del campus universitario. Fueron años en los que el Dr. Ruíz consiguió establecerse dentro de la docencia de esta entidad; exigencia que se planteó al interior de la universidad al considerar que la investigación y la responsabilidad del museo no eran suficientes (Ruíz, 2015). En 1992, a la par del cese del Dr. Ruiz como docente universitario, se fue abandonando el espacio y su mantenimiento. Ese mismo año, el Dr. Ruiz realizó gestiones para reubicar el museo. Logró reubicarlo fuera del campus, sin desligarlo de la responsabilidad administrativa y legal de la universidad. 75

81 Esos primeros años estuvo en un local que fuera el teatro de la ciudad (Ruíz, 2015), hasta que en el 2001 se instaló en el edificio de la Ex-Estación del Ferrocarril donde permanece hasta la actualidad. En los años sucesivos el manejo del museo estuvo en mano de personal administrativo que era cambiado continuamente. A pesar de esto, ellos lograron de una u otra manera mantener esporádicamente abierto el museo. Hasta que en el 2005, con la incorporación del Dr. Henry Marcelo como jefe del museo, la institución logró mantenerse abierta permanentemente y más activa. A la fecha, el Dr. Marcelo mantiene el cargo a la par de ejercer la docencia en la universidad. Sus labores en el museo universitario en los últimos años se han enfocado en elaborar una serie de propuestas y condiciones de mejoras para el espacio y la colección, en coordinación con las autoridades universitarias, lidiando con una serie de cambios orgánicos universitarios como la Ley de Reforma Universitaria puesta en marcha hace dos años [12] y con lo restringido del presupuesto y el personal especializado. La creación del museo fue la comunión de iniciativas especiales que reconocieron la relevancia y el valor histórico-arqueológico del patrimonio local. Es uno de los contados casos en el que el crecimiento urbano y de la infraestructura moderna no trató de imponerse al testimonio arqueológico, sino que logró recuperarlo para sí y su localidad mediante el aporte científico. El resultado fue la generación de un espacio con miras a transformase en una institución de corte erudito dedicado a conservar e investigar, primordialmente. El público primario que captó la atención fue el universitario y escolar, y una vez instalado dentro la ciudad, captó a la de la población. Su reubicación fuera del campus universitario ha marcado su existencia. Su localización actual lo alejó de la universidad pero ha valido para hacerlo más establecer un vínculo más próximo a la comunidad local. Se ha convertido en un referente de educación e identidad de la ciudad y la región. Las propuestas del actual jefe del museo, el Dr. Henry Marcelo, se manifiestan en una serie de actividades culturales que buscan llevar al museo y los símbolos de la identidad regional a otros espacios del Norte Chico. La representación de personajes míticos prehispánicos son los que han ganado popularidad en la región. Además, su propuesta de Red de Museos busca mantener en contacto los museos de la región y generar estrategias conjuntas y colaborativas para la gestión del patrimonio que se albergan en cada uno de los espacios museísticos. La relación entre cada parte que constituye el universo museístico hasta el poco antes del año 2005 era, puede decirse, inexistente. La propuesta de red reconoció por primera vez estos espacios y llevó a una mesa de trabajo desarrollada en 2006 a visibilizarlos y proponer acciones en torno a ellos. 76

82 El Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa "Nuestra Señora del Carmen" Este espacio expositivo conocido como museo escolar forma parte de la Institución Educativa Particular Nuestra Señora del Carmen, localizada en el distrito de Paramonga. Como buena parte de las colecciones arqueológicas presentes en la región, esta se formó producto de la exploración y recolección de sitios prehispánicos depredados y aledaños a la localidad. El espacio museístico fue forjado con el afán de ser empleado como auxiliar en la enseñanza de historia, además fue abierto al público interesado de la localidad. El espacio comenzó a gestarse en el año 1986, y fue solo hasta el 02 de febrero de 1987 que fue inaugurado como Museo de Ciencias Histórico Sociales. La creación fue posible a iniciativa de los profesores Percy Carrión Rea y Gelimer García Sears, por entonces encargados de conducir los cursos de Historia; además, participaron alumnos del último nivel secundario (Promoción 1986) (Holguín & Cornejo, 2007, p.18). A lo largo de su existencia, los docentes que laboraron en la escuela y que recibieron la responsabilidad del museo -específicamente en el área de Ciencias Sociales-, desarrollaron actividades para conectar la colección con la educación. Al no ser parte del contenido curricular oficial, crearon oportunidades y acciones. Las labores, por años se centraron, a parte de la visita eventual a la sala por parte de los estudiantes, al trabajo conjunto con ellos para el desarrollo de exposiciones temporales con los objetos de la colección; desde los cursos de arte, también se propiciaron actividades plásticas que tenían como referente la iconografía prehispánica. Desde el 2005, hasta la actualidad, el museo está a cargo del docente de Historia y Geografía, el Lic. Juvenal Ramírez. El docente tomó conocimiento de las actividades de investigación realizadas por el Proyecto Arqueológico Norte Chico en la región, a partir de los talleres participativos que desarrollaba este proyecto en conjunto con las autoridades de la municipalidad de Pativilca, y entró en contacto con el equipo en enero de ese año. Producto del acercamiento, el proyecto se comprometió a trabajar en conjunto el registro y conservación de la colección, la elaboración de una exposición, así como la realización de recomendaciones para el cuidado del acervo museo [13]. Por su parte, la entidad educativa [14], se comprometió a promover la protección y difusión del patrimonio que se encuentra bajo su custodia. Los trabajos en este espacio abrieron la posibilidad a otras instituciones educativas a aproximarse al Proyecto Norte Chico con la intención de recibir asesoría en el registro, conservación, exposición museográfica, entre otros temas, sobre las colecciones y espacios que proyectaban establecer como 77

83 museos. Además, tendieron un puente para pasar de la recolección a la promoción de la protección del patrimonio desde las escuelas. En otras palabras, puede decirse que se generó un efecto domino en las entidades escolares de la localidad a raíz de esta primera experiencia entre la escuela y el proyecto. Espacios y tiempo de convergencias Estos dos casos tienen una trayectoria individual y un impacto mediano en sus localidades. A partir del 2005, estas trayectorias confluyen en dos talleres participativos propiciados por el Proyecto Arqueológico Norte Chico. Estos talleres fueron un punto de convergencia de diversos agentes culturales. En síntesis, como se examina más adelante, fueron plataformas para visualizar sus experiencias particulares y evaluar los puntos de confluencia hasta incluso de divergencia- en torno al patrimonio arqueológico y los museos del Norte Chico. Desde el año 2002, el Proyecto Arqueológico Norte Chico dio inicio a un plan de investigaciones de largo aliento centrado en el origen de la Sociedad Compleja (Arcaico Tardío). Como objetivos y actividades, tenía el socializar su producción académica a las localidades mediante charlas y el desarrollo de talleres participativos. Desde los primeros talleres que realizó [15], las charlas en las localidades de los valles de Pativilca y Paramonga y el contacto directo con la población y sus autoridades, los miembros del proyecto detectaron el interés y el acercamiento de autoridades locales, docentes, encargados de manejar museos y colecciones. Ellos mostraron su interés tanto en conocer los resultados de las investigaciones como en recibir algún tipo de asesoría y ahondar en el aspecto del manejo de museos, aspectos que querían volcar en las colecciones. Cada uno de los talleres organizados por el proyecto tuvo una gran acogida en la población de la Provincia de Barranca, Huaura y Huaral. A ellos asistieron dirigentes de las asociaciones locales, presidentes de los patronatos turísticos, autoridades distritales y locales, directores de colegios y docentes locales y representantes de organizaciones de base (Proyecto Arqueológico Norte Chico, Dossier , pp.10-11). Los talleres fueron organizados en conjunto con la Municipalidad Distrital de Pativilca [16]; en su cuarta edición se sumó la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) N 16 [17]. El taller Arqueología y Educación en el Norte Chico [18] se realizó en 2005 y, en 2006, el taller Museos Arqueológicos y Comunidad [19]. En ambos participaron autoridades locales, representantes de la UGEL N 16, docentes de las instituciones educativas "José Pardo y Barreda (Museo Arqueológico de Huayto), Nuestra Señora del Carmen, Fiscalizada N (Museo Arqueológico Vichama), N Huaricanga (Colección arqueológica Huaricanga), entre otros, además de otros profesionales 78

84 como el Dr. Ruíz Estrada, el Dr. Henry Marcelo, el Sr. Antonio Bazán (Fundación Bazán) y los miembros de la Cámara de Comercio de Barranca. Los eventos fueron fundamentales pues fue el punto de encuentro de diversas personas cuyas experiencias estaban ligadas de otra forma al quehacer museológico y a la educación en el Norte Chico. Los resultados de los talleres [20] produjeron un diagnóstico de la enseñanza de la historia prehispánica regional y las debilidades y potencialidades de los museos arqueológicos. Así mismo, fue el punto de partida de aportes y propuestas desde la arqueología desarrollada en la región para visualizar y trabajar con el potencial humano y patrimonial que se encontraba en cada uno de estos espacios. En ambos talleres, además de los agentes que participaron, se identificaron otros más: proyectos de investigación (Proyecto Norte Chico o el Proyecto Caral, hoy dentro de la Unidad Ejecutora 003 ZAC/MC), UGEL N 16, investigadores locales, Instituto Nacional de Cultura. Se reconoció también que la participación de algunos de estos era mínima y/o nula. Por ejemplo, que el INC (ahora Ministerio de Cultura) daba un apoyo bastante limitado para la realización de trabajos de investigación y conservación, se señalaba la ausencia de apoyo formal del Ministerio de Educación, la poca prioridad dada a la educación y la cultura por parte del Gobierno Regional, o las actividades de la universidad centradas en lo académico y que dejan de lado sus aportes a la región. En los siguientes párrafos se exponen los principales resultados a los que se llegaron en cada uno de los talleres, por ser aspectos significativos que creo marcaron en parte el quehacer educativo y cultural en la región. El taller Arqueología y Educación en el Norte Chico concluyó con dos aspectos que en cierta medida se vinculan al desarrollo y dificultades del quehacer museológico. En primer término, se reconoció un importante potencial en los recursos locales (material e inmaterial) que viabilizan la enseñanza de la historia regional, tales como la gran cantidad de sitios arqueológicos, los museos locales y los mitos o tradiciones culturales locales. En segundo término, a pesar del potencial, se reconoció la existencia de un tropiezo en la articulación al nivel de interrelaciones; el nivel de coordinación regional entre agentes era mínimo, casi inexistente. Fue evidente la ausencia de una estrategia integrada de promoción, difusión, información, capacitación, y tecnología de punta (Proyecto Arqueológico Norte Chico, 2005, p.8). Pese que el taller también tuvo como objetivo el delimitar mecanismos para mejorar la enseñanza, estos no fueron expuestos en el informe del taller. Algo que si se destacó, por sobre todos estos alcances, fue el papel fundamental de los agentes que han ido trabajando localmente en la medida de sus posibilidades. 79

85 En la práctica, lo que ocurrió y se propició a partor de de este encuentro fue una vinculación más estrecha entre el Proyecto Norte Chico y los agentes culturales de la región, vinculación traducida en la difusión de sus investigaciones en las escuelas, municipios y museos, así actividades en conjunto dentro los museos, colecciones y el desarrollo de exposiciones, entre otros. Los resultados del taller Museos Arqueológicos y Comunidad expresan la identificación de puntos cruciales sobre la creación de museos arqueológicos integrados a la región. Ellos se resumieron en dos factores, uno Clave y otro Crítico. Ambos resultaron ser tanto el interés como el desinterés de las personas en el conocimiento científico arqueológico, es decir resultaron ser dos caras de la misma moneda. Los dos factores se evaluaron en posibles escenarios, uno positivo y otro negativo. En el escenario negativo las amenazas las constituían: los conocimientos científicos muy especializados que hacen poco accesible el entendimiento del patrimonio, la indiferencia de los autoridades por la cultura, la falta de cobertura de las necesidades básicas que dejan en un último plano la cultura y que la existencia de un museo no hace la diferencia ya que un cambio debe de partir por un cambio personal. Por otro lado, en un escenario positivo se contrarrestaron esos aspectos mediante: campañas de concientización, motivación del interés llevando a los estudiantes al museo, promoción del conocimiento de la historia regional, el establecimiento de la coordinación de autoridades y población. La conclusión a la que se llegó mediante ese examen fue la creación de una propuesta en grupo para potencializar el interés en tres niveles: Educativo, autoridades políticas y sociedad civil organizada y difusión (Del Castillo, 2006). En este taller se presentaron las experiencias desplegadas por el museo universitario y el museo de Nuestra Señora del Carmen. Por un lado, fue la primera vez que se menciono una serie de museos presentes en la región y se esbozó la estrategia de gestión (Red de Museos) que sería formalizada en un proyecto un año después. También, se presentó el proceso y resultados alcanzados por el trabajo colaborativo entre museo escolar Nuestra Señora del Carmen y el Proyecto Norte Chico. 80

86 2.3.2 Juntando las piezas del panorama: Propuesta sobre su configuración La configuración del panorama museológico hace referencia a un escenario en el que surgen y se desarrollan diversos espacios museísticos en el Norte Chico (Ver Tabla 4). Por lo examinado hasta ahora, son producto de múltiples iniciativas locales, cuya trayectoria está marcada por hitos en el tiempo en los que han dado pie a la creación de nuevos espacios, a la mejora en su manejo así como la del patrimonio que custodian. La propuesta se ha podido construir y articular por medio de dos casos en los que se ha encontrado referentes significativos sobre los que se teje la urdimbre y la trama de la trayectoria museológica en el Norte Chico. Tanto en el museo universitario como en el museo escolar, los agentes responsables de ellos y sus acciones recorrieron caminos paralelos que convergieron a mediados de los 2000, durante los talleres organizados por el Proyecto Norte Chico, autoridades del municipio distrital del Pativilca y representantes de la Unidad de Gestión Educativa (UGEL N 16) de la provincia de Barranca. Los hitos a los que se hace referencia son puntos y lapsos cruciales en el tiempo. Ellos tienen un sustrato formado por los logros de los agentes y la presencia y contribución de los proyectos de investigación arqueológica en la región, como los llevados a cabo por el Dr. Arturo Ruíz Estrada y el Proyecto Arqueológico Norte Chico Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura Museo Bolivariano 1987 Museo de Arqueología de la UNJFSC Museo Arqueológico de la I.E "Nuestra Señora del Carmen" Colección Silva Esquén Museo Municipal de Chancay Museos del Castillo de Chancay Museo Escolar de la I.E "Fernando Graña Elizalde" N Museo Arqueológico de Huayto Museo Municipal Generalísimo "Don José de San Martín" 2005 Colección arqueológica de la I.E 20532, Huaricanga Comité Museo Provincial de Barranca Museo Arqueológico Vichama Museos Comunitarios de Végueta y Supe Exposición Museográfica "Los Huacos" Museo Arqueológico Casa Hacienda Huando Huaral Tabla N 4 81

87 1970: Los primeros museos en el Norte Chico A inicios de la década de los 70 aparecieron en la región los primeros espacios museísticos. Dos de ellos fueron impulsados por la iniciativa legislativa del Estado, ellos son el Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura y el Museo Bolivariano. Se tratan de dos inmuebles que en 1942 fueron declarados monumentos históricos por haber sido sedes de la gesta independentista del país. Estos inmuebles patrimoniales se han ido constituyendo como referentes históricos del Norte Chico por ser lugares donde dejaron su paso los libertadores, José de San Martín y Simón Bolívar, imprimieron tácitamente la evocación de un punto medular en la historia del país y de América Latina. A mediados de los 70 hizo su aparición el Museo Regional de Antropología y Arqueología de Huacho. Con una colección arqueológica predominante, el museo estuvo a cargo de un reconocido personaje aficionado a la arqueología, el Sr. Domingo Torero Arrieta, quien formó el acervo con su colección y las donaciones recibidas por parte de la población (Ruíz, 2015). Fue el primer intento en formular una institución cultural con la participación mixta entre un particular y un gobierno local como la Municipalidad Provincial de Huaura. Sin embargo, el espacio se sostenía fuertemente en la figura de su gestor. Tras su fallecimiento, el museo quedó cerrado en 1989, y se mantuvo en condiciones de vulnerabilidad [21]. Cabe mencionar que desde finales de la década del 50 y principios de los 60 se tiene como la referencia más antigua posiblemente no la única existente pero si la única documentada- de la existencia de una colección arqueológica, custodiada por la escuela Fiscalizada del distrito de Paramonga (Provincia de Barranca), la cual consta de un poco más de 1000 objetos (Castillo, 2011). Ella es máxime referente - por la cantidad, calidad y los estilos iconográficos representativos de la región- dentro de las colecciones escolares de la provincia de Barranca y por décadas ha movido el interés científico de arqueólogos (p. ej. Cruzado, 2010; Ruíz, 2015). 1987: El primer Museo Universitario y Escolar en la región Se propone que esta etapa transcurre entre la década de los 80 a los En este periodo nace el primer museo en el Norte Chico gestado a partir del rescate y la investigación arqueológica, mismo que ha propiciado un impacto en la generación y mantenimiento de algunas colecciones y otros espacios museísticos en la región. En década de los 80 tuvieron lugar los primeros trabajos arqueológicos dentro de la primera universidad de la región, la Universidad José Faustino Sanchéz Carrión. Estos trabajos propiciaron la 82

88 formación de una colección y el nacimiento de una nueva institución. El inicio se marca en el año 1987 porque fue el año en el que el espacio abrió sus puertas al público. Ese mismo año, otro espacio museístico creado al interior de una escuela abrió sus puertas, el museo arqueológico escolar de la I.E Nuestra Señora del Carmen. Dentro de este periodo se mantuvieron en funcionamiento las Casas Museo de Huara y Pativilca, aparecieron y se desactivaron colecciones y espacios expositivos cuyo punto de partida en su conformación -a diferencia del museo universitario- fue la obtención por recolección y donación de diversos objetos arqueológicos. También, por entonces se cerró definitivamente un museo importante en la localidad, el Museo Regional de Huacho en 1989, sucedido poco después del fallecimiento de su gestor. Como se mencionó, en el año 1987 se abren las puertas del Museo de Arqueología de la Universidad Nacional José Faustino Sanchéz Carrión. La realización del proyecto de rescate e investigación arqueológica dirigida por el Dr. en Arqueología, Arturo Ruíz Estrada dentro y alrededores del campus de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión (UNJFSC), fue el punto de partida para la gestación y creación del primer museo universitario en la región. Su presencia provocó otras iniciativas, y aparecieron por entonces colecciones y espacios museísticos cuyo origen y función en principio se enfocó a la exposición de objetos arqueológicos. Entre estos espacios están la sala de exposición del Instituto Pedagógico de Docentes, la Colección Silva Esquén y la del Colegio Luis F. Xammar, todas ellas tomaron lugar en la ciudad donde se localiza el museo universitario (Huacho). Paralelamente, en el año 1987 se creó el primer espacio museístico dentro de una escuela, conocido como el Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa "Nuestra Señora del Carmen". Por años, el museo se mantuvo en funcionamiento con actividades específicas para ello. Cada uno de los docentes responsables, en su momento, desarrollaron exposiciones con los alumnos, controlaban el cuidado de la colección, entre otros. A pesar de que constantemente los docentes encargados, mantuvieron en funcionamiento el espacio, es el 2005 un año que marca un cambio en la forma de la organización de la colección y de la sala de exposición mediante el trabajo colaborativo con el Proyecto Norte Chico. Durante la década de los 90 aparecen en el escenario, principalmente en la Provincia de Huaral, nuevos espacios como el Museo Municipal de Chancay y Museos del Castillo de Chancay. El primero formado por la iniciativa municipal y el otro por una entidad privada ligada básicamente a la actividad turística. En 1997 se sumó el Museo Escolar de la Institución Educativa "Fernando Graña Elizalde" 83

89 N de Huando, a iniciativa del director de la escuela, Jesús Manuel Medina Gutiérrez. Con una colección arqueológica de alrededor de 6000 objetos es una de las colecciones más representativas dentro del Norte Chico -además de las colecciones del museo universitario (UNJFSC) y de la Institución Educativa Fiscalizada N , en particular de la Cultura Chancay, cultura emblemática de este territorio que ha sido punto de interés de varias investigaciones científicas pero que tiene una gran dificultad en su abordaje debido a que es parte del expolio constante tal como el que se encuentra el patrimonio arqueológico en el resto de la región y, en general, del país (Horkheimer, 1970; Miasta & Merino, 1986; Krzanowski, 1991). Entre los años 2003 y 2004 emergieron en otros lugares de la región dos nuevos espacios, el Museo Municipal Generalísimo Don José de San Martin (Provincia de Huaura) y el Museo Arqueológico de Huayto (Provincia de Barranca). Ambos son producto de iniciativas específicas, tales como las de la Municipalidad Distrital de Sayán y la de docentes de una institución educativa estatal. Varios hechos que afectaron el país a mediados de los 80 y 90 y que generaron gran convulsión social fueron desencadenados por la guerra interna generalizada [22]. En la arqueología, fueron años difíciles para el desarrollo a plenitud de las actividades de investigación, principalmente en el campo, en el interior de las provincias (Ruiz, 2015). Debido a ello, es que no se desarrollaron proyectos arqueológicos de manera plena en varias zonas del país sino hasta finales de la década de los 90. En esos primeros años hicieron su aparición el Proyecto Arqueológico Caral (Hoy llamada U.E 003-ZAC/MC) y, posteriormente, en el 2002, el Proyecto Arqueológico Norte Chico. Ese periodo es animado por la presencia de estas nuevas proyectos y sus investigaciones enfocadas principalmente en el Arcaico Tardío (3000 años a.c 1800 años a.c). Con su presencia y actividades impulsaron y dieron nuevas ideas sobre historia de la región y los museos. 2005: Los Museos y la Arqueología El año 2005 está marcado por la confluencia de varios agentes culturales en los talleres participativos realizados entre el Proyecto Norte Chico, la Municipalidad Distrital de Pativilca y la UGEL N 16. A partir de ellos se realizaron varias acciones que revitalizaron varios de estos espacios. Entre el 2005 y 2006, en torno a la realización de talleres participativos Arqueología y Educación en el Norte Chico y Museos Arqueológicos y Comunidad se produjo un primer acercamiento entre los agentes involucrados en el manejo de los espacios museísticos de la región. El encuentro y sesiones de 84

90 trabajo propició una vinculación más allá de los talleres y desencadenó un conjunto de acciones colaborativas, entre el equipo de arqueólogos del proyecto y varios de los agentes. En el campo de los museos, la vinculación con la Municipalidad de Pativilca se sostuvo en un convenio entre el Proyecto Norte Chico con las autoridades de dicho municipio. A raíz de ello, en el Museo Bolivariano se implementó la Sala de Historia Antigua del Norte Chico en 2005 (Proyecto Arqueológico Norte Chico, 2007A). También ese mismo año, el proyecto asesoró y colaboró en la organización de la colección y en la realización de una exposición en la escuela "Nuestra Señora del Carmen", y en el registro y catalogación de la colección arqueológica de la I.E Huaricanga (Anexo 1, Ficha de Registro 16). En el año 2008 se inauguró el Museo Arqueológico Vichama dentro la escuela Fiscalizada N (Provincia de Barranca). La gesta del espacio inició en el año 2003 hasta que pudo ser concluido en el Con el proyecto constructivo en marcha, las autoridades de la escuela y el gobierno regional recurrieron a la asesoría de los miembros del Proyecto Norte Chico para abordar temas esenciales como el registro y conservación de la colección, además de lo referido a los aspectos técnicos y museográficos que el museo debía abordar. En el nivel educativo, los miembros del Proyecto Norte Chico efectuaron charlas sobre la historia regional que respondían al interés temático específico y relevante para cada una de las instituciones educativas o de gobierno de los distritos, anexos, etc. de la región. En la mayoría de casos se abordaron los temas relacionados a la aparición de las primeras sociedades complejas en la región y del desarrollo de diversas culturas en cada uno de los valles en los que el Proyecto Norte Chico llevaba a cabo sus investigaciones. Además, se fueron incorporando temáticas referidas a las colecciones (p. ej. periodicidad, distribución de estilos cerámicos) y a los museos (p. ej. conservación, manejo de colecciones). Asimismo, como resultado de estos encuentros en los talleres, la sociedad civil organizada y personificada por la Cámara de Comercio de Barranca impulsó la Creación del Comité Museo Provincial de Barranca. Se formó con la participación de los arqueólogos, representantes de la UGEL N 16 de Barranca, docentes, también contó con la participación de autoridades locales de los municipios distritales (Advíncula, 2015). Otro hecho remarcable fue que como una de las primeras acciones emprendidas por este comité, antes de su fundación oficial, se planificó y realizó en noviembre del 2006 la primera exposición temporal de la 85

91 región denominada Museos Arqueológicos del Norte Chico, auspiciado por el Proyecto Norte Chico y que tuvo lugar en la ciudad de Barranca. En ella participaron por primera vez de el conjunto de espacios museísticos de la región. Entre la mayoría de participantes se encontraban las escuelas con sus colecciones, mismas que eran explicadas por los estudiantes (Advíncula, 2015). De este modo, casi inmediatamente se comenzó a trabajar en la integración propuesta al concluir los talleres, en especial a partir de los resultados del taller Museos Arqueológicos y Comunidad. El Proyecto Norte Chico, en el curso de los talleres participativos reconoció la importancia de la aún bosquejada propuesta de red de museos del Norte Chico: El tema educativo, museográfico y el tema de potenciar los museos que existían fue abordado a través de la propuesta inicial, de Henry Marcelo, de la Red de Museos. Ahí nosotros apuntamos también a apoyar esta iniciativa. (Advíncula, 2015). Estos talleres participativos como los trabajos desarrollados en conjunto, si bien tienen como punto de partida las alianzas estratégicas del proyecto Norte Chico y la aplicación de su programa de extensión sociocultural, establecieron en ese momento especifico un cruce de objetivos con los de los agentes vinculados al quehacer museístico y educativo de la región, mismos que pudieron identificar por medio de los talleres las debilidades y potencialidades de los museos arqueológicos y la enseñanza de la historia prehispánica regional. Los años 2008 y 2009 fueron marcados por la disminución de la intensidad de los trabajos de campo realizados por el Proyecto Norte Chico. Por entonces, sus labores se concentraron en la publicación de los resultados de sus investigaciones. Sin embargo, a la par fueron creciendo y formalizándose propuestas tales como la del Comité Museo Provincial de Barranca, inscrito en registros público en 2008, y que a la fecha se encuentra gestionando el acervo y espacio para la fundación de un museo regional. Así mismo, continuó su desarrollo la Red de Museos del Norte Chico, que desde el 2007 se convirtió en un proyecto financiado por la Universidad José Faustino Sánchez Carrión (Marcelo, 2009; 2015). Por su parte, cada uno de los espacios museísticos en la región se mantuvieron abiertos y en funcionamiento mediante diversas estrategias dirigidas a la difusión en medios de comunicación y la promoción de visitas a sus exposiciones. Así mismo, hicieron su aparición nuevas propuestas nacidas desde otro de los proyectos arqueológicos de larga trayectoria en la región, además de otras provenientes de iniciativas particulares y de gobiernos distritales. 86

92 Estos espacios nuevos son los denominados Museos Comunitarios de Végueta y Supe, creados a partir de las investigaciones y gestiones de la Unidad Ejecutora Zona Arqueológica Caral. Esta Unidad Ejecutora coordina diversos proyectos y objetivos en el valle de Supe y la costa aledaña para socializar la información de los proyectos y generar un polo de desarrollo turístico en la región. La formulación de estos espacios constituye parte de sus objetivos trazados dentro de sus lineamientos de trabajo. La localización de los espacios corresponde a los distritos donde la Unidad lleva a cabo sus investigaciones, son los puntos de bienvenida y presentación de estos trabajos. En cada uno de ellos se resalta la función e importancia de los sitios estudiados, y están articulados a una tesis más amplia que tiene al sitio arqueológico de Caral como ciudad matriz de la Civilización Andina. Los más reciente fue la creación de la exposición museográfica "Los Huacos" (2014), la apertura del Museo Municipal de Chancay (2012) y del Museo Arqueológico Casa Hacienda Huando Huaral (2014). Los dos primeros tienen como finalidad la difusión y educación del patrimonio local a la vez que siguen una línea turística impulsada desde su creación por parte de los municipios, aun sin una aparente conexión (mediante política turística) entre ambos. Por su parte, el Museo Arqueológico Casa Hacienda Huando Huaral es la consecución de la Fundación Bazán, cuyo fundador es presidente de un patronato de defensa del patrimonio de Huaral. En este espacio se cristaliza el hecho de divulgar una colección particular. Incluso la misma formación de la figura de la Fundación se ha generado para la gestión y manejo de la colección. Con la participación de Henry Marcelo en los talleres y su formulación inicial sobre la red, la iniciativa tomó forma de proyecto en Esta se ha generado como una propuesta para documentar y articular los diversos museos de la región, teniendo como principal conductor de la red al museo universitario. Resalta de ella la visión del territorio y los elementos que se conjugan en él tanto la arqueología como el turismo: El objetivo de este proyecto es demostrar que es posible emplear el Ecoturismo y la Cultura Regional a través de los espacios comunicacionales de los Museos existentes en el Norte Chico como herramientas de conservación, recuperación de la cultura y patrimonio material e inmaterial regional como estrategias de comunicación y difusión de los valores regionales. (Marcelo, 2009) Desde su primera mención, es la única apuesta integral para la gestión de los museos de la región. A lo largo de estos años, vemos que el Dr. Marcelo se distingue como uno agente cultural ampliamente reconocido dentro de estos espacios museisticos del Norte Chico, pues ha propiciado el intercambio y la 87

93 comunicación con otros agentes, y, principalmente, brinda asesorías desde la red y el museo universitario para difundir y mejorar las condiciones de las colecciones (Ramírez, 2015). 2.4 Conclusiones En el Norte Chico, el universo museístico actual está constituido por un conjunto variado de 17 espacios museísticos que pueden agruparse en 5 tipos: Casas-Museo, Salas de exposición, Colecciones, Museos (local y universitario); además se viene gestando un proyecto de museo. Estos espacios custodian y conservan patrimonio arqueológico y, en menor proporción, patrimonio histórico. Son producto de la iniciativa de al menos 7 tipos de agentes de cada una de las localidades: docentes y autoridades educativas, arqueólogos, autoridades distritales/provinciales, proyectos arqueológicos, coleccionistas, organizaciones civiles (Comité Pro Museo de Barranca) y el Estado. En principio, las iniciativas locales de agentes culturales han tenido una fuerza participativa que ha promovido la generación de los distintos espacios museísticos para la conservación del patrimonio arqueológico que continuamente está sujeto al expolio en la región. No hay políticas culturales o museológicas en la formación de estos espacios en la región. Lo más cercano a plantear una ruta para la formulación de museos en el Norte Chico fueron respaldadas por la dinámica generada con las investigaciones arqueológicas sobre el Arcaico Tardío en la región y los talleres participativos y las acciones del Proyecto Arqueológico Norte Chico durante el periodo en el que proyecto realizó sus actividades, apoyado en su alianzas estratégicas con otros agentes (Municipio Distrital de Pativilca, UGEL N 16 de Barranca). El reconocimiento de estos variados espacios museísticos también ha significado poner en evidencia sus diversas dificultades. Los espacios museísticos no funcionan a su máxima capacidad. El papel de los agentes es fundamental en la supervivencia museística y por tanto patrimonial. El interés por ahondar en la historia prehispánica de la región y por mejorar el manejo de las colecciones mediante el registro, conservación de colecciones y mejora de la infraestructura son evidencias o resultados de dichas acciones. En particular sobre este aspecto son significativos los casos como el Museo de Arqueología de la Universidad Nacional José Faustino Sanchéz Carrión y Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa "Nuestra Señora del Carmen". 88

94 La configuración del panorama museológico está marcada por hitos importantes. El primero fue la fundación en la década de los 70 del Museo Bolivariano y el Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura, establecidos mediante la participación del Estado. El segundo, en la década de los 80 con la creación del primer museo universitario, Museo de Arqueología de la Universidad Nacional José Faustino Sanchéz Carrión gestado desde la investigación arqueológica, y con la consecuente aparición de varios espacios museísticos durante los siguientes años. El tercero, en el 2005, a partir del encuentro de múltiples agentes y sus experiencias en los talleres Arqueología y Educación en el Norte Chico y Museos Arqueológicos y Comunidad, que detonaron varias acciones en el quehacer museológico de la región como el desarrollo de trabajos con las colecciones escolares, la creación del Comité Museo Provincial de Barranca y la propuesta de Red de Museos. La naturaleza de las colecciones que albergan los espacios es esencialmente arqueológica. En muchos de los casos, su formación genera polémica pues fue el resultado de las exploraciones y recolecciones de objetos de los sitios arqueológicos, principalmente durante la década de los 80. Muchos de estos sitios aún continúan siendo depredados por el saqueo. Sin embargo, en la actualidad, es visible un cambio en tratamiento del patrimonio arqueológico al interior de los espacios y los agentes responsables de ellos. Esas acciones que contribuyeron a mellar el patrimonio para formar sus coleccciones, hoy se reconocen como dañinas, ilegales y se han dejado de realizar. Desde éstos se está promoviendo la protección del patrimonio y haciendo hincapié en un claro rechazo al huaqueo. Además, las colecciones están siendo documentadas y conservadas, en la medida de las posibilidades de las instituciones bajo la cuales se han generado las colecciones. Esto último, en parte promovido desde los proyectos arqueológicos asentados en la región y los trabajos colaborativos desarrollados por el Proyecto Norte Chico en algunos de los museos, fomento que va de la mano con la vigente legislación de protección del patrimonio cultural de la Nación (Ley N 28296). Considerando niveles de instituciones como el Ministerio de Cultura (antes Instituto Nacional de Cultura) competentes en el ámbito del patrimonio cultural, su intervención es bastante puntual como en la asesoría a las instituciones inscritas en el Sistema Nacional de Museos del Estado y el registro de colecciones en el Registro Nacional de Bienes Muebles. Y, en años recientes por medio de la Unidad Ejecutora de la Zona Arqueológica Caral que creó los Museos Comunitarios de Supe y Végueta. El Norte Chico, más que un sentido identitario, corresponde a un territorio dinámico, marcado por la confluencia de procesos migratorios propiciados por el aspecto económico el cual moviliza constantemente poblaciones aledañas a las costas de esta región. En los últimos años, los resultados de las 89

95 investigaciones sobre el origen de la Civilización Andina, es una propuesta que podría articular el sentido de territorio aunado al identitario. Este aspecto se está haciendo visible casi en la totalidad del conjunto museístico mapeado, el cual puede constituir un aspecto muy rico para analizar y potencializar dentro de estos espacios. La aparición de la propuesta de Red de Museos del Norte Chico a cargo del Dr. Henry Marcelo, es un modelo de gestión pensado desde una aproximación y conocimientos de los espacios museísticos de la región, en el cual vale la pena ahondar para examinar sus características y potencial para el universo y la situación atraviesan los espacios museísticos de la región. Notas al pie del capítulo 2: [1] Ubicada en la Provincia de Lima, dentro del departamento de Lima es una división administrativa en el que se ubica la provincia sede de la capital de la República peruana, Lima. Concentra más de la tercera parte de la población del país calculada en el año 2015 en habitantes. Desde el 2002 el departamento de Lima se halla dividido de facto en dos territorios: La provincia de Lima, que por ser la sede de la capital de la República tiene autonomía regional y municipal en simultáneo, y la Región Lima, que agrupa las demás provincias del departamento y tiene sede en la ciudad de Huacho. [2] Fue una provincia del Departamento de Lima que existió desde 1821 hasta Se extendió desde Chancay hasta Huarmey. Limitaba al sur con la provincia de Lima, al este con la provincia de Cajatambo y el Departamento de Pasco y al oeste con el Océano Pacífico. [3] Desde 2002, el país cuenta con un régimen especial de autonomía a cargo de los Gobiernos Regionales que suman un total de 26. Los Gobiernos Regionales son las instituciones públicas encargadas de la administración superior que agrupa cada una de las regiones y departamentos; tienen autonomía política, económica y administrativa. El Gobierno Regional de Lima o Región Lima está conformado por las provincias de Barranca, Huaura, Huaral, Cajatambo, Oyón, Canta, Lima, Huarochirí, Yauyos y Cañete. Ver: La Provincia de Barranca está constituida por los distritos: Paramonga, Pativilca, Supe Puerto y Supe; la Provincia de Huaura constituida por los distritos: Végueta, Carquín, Hualmay, Ámbar, Huaura, Santa María, Huacho, Sayán, Leoncio Prado, Santa Leonor, Checras, Paccho; y la Provincia de Huaral, constituida por los distritos: Chancay, Huaral, Aucallama, Lampian, Sta. Cruz de Andamarca, Atavillos Alto, Ihuari, Pacaraos, San Miguel de Acos, Sumbilca, Veintisiete de Noviembre, Atavillos Bajo. [4] Financiado por el Museo Field de Chicago y National Science Foundation, inició sus trabajos en la región en el Fue dirigido por el Dr. Jonathan Haas, el Lic. Álvaro A. Ruiz Rubio y la Dra. Winifred Creamer. El grupo de investigadores, integrado por investigadores peruanos y estadounidenses, trabajó en el Valle Huaura, el Valle de Pativilca y el Valle de Fortaleza. Entre sus actividades, en el campo científico, desarrolló una serie de exploraciones en esos valles y estableció de forma preliminar su filiación cronológica y cultural; principalmente se centró en los estudios sobre las ocupaciones del periodo Arcaico Tardío (3000 años a.c a 1800 años a.c.). En el campo 90

96 académico buscó contribuir al conocimiento del proceso cultural prehispánico desarrollado en la región, fomentar y apoyar investigaciones que se desarrollaran en la región e incentivar publicaciones de difusión y divulgación. En el campo sociocultural, buscó canales y difundió las investigaciones, el mensaje pro conservación de sitios arqueológicos y dialogo sobre el rol del turismo y su impacto (Proyecto Arqueológico Norte Chico, Dossier ). [5] También, complementariamente, en algunos casos se acompaña del registro fotográfico que documenta el aspecto de las características generales de las exposiciones, instalaciones y, en la medida de lo posible, de las condiciones de las colecciones. [6] Ver Artículo 3 y 4 del Reglamento para la creación, registro e incorporacipn de museos al sistema nacional de museos del Estado, creado por Decreto Ley [7] Su constitución reúne a diversos agentes culturales del sector educación (docentes escolares, universitarios, Unidades de Gestión Educativa Local), arqueólogos (Proyecto Arqueológico Norte Chico) e incluía la invitación a participar a las municipalidades distritales (Pativilca, Paramonga, Supe). [8] En el Norte Chico se encuentran dos espacios registrados en el Sistema Nacional de Museos: Museo de Arqueología de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión y el Museo Monumental de la Municipalidad Distrital de Huaura. [9] Como propietarios de colecciones opera la figura de custodios legales, responsabilidad que han asumido por exigencia de la normativa de protección del patrimonio cultural de la nación. [10] Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación N 28296, Artículo 17.- Obligatoriedad del Registro. El propietario de un bien que es integrante del Patrimonio Cultural de la Nación está obligado a solicitar ante el organismo competente el registro de los mismos. [11] Fundada en el año 1968, es la primera universidad de la provincia de Huaura y de la Región Lima. [12] En junio del 2014 se promulgó la Ley de Reforma Universitaria, la cual tiene por objeto mejorar la calidad de la enseñanza de los estudiantes, haciendo de sus carreras acorde al desarrollo y necesidades del país. Con ello, cada universidad queda vinculada al Ministerio de Educación, sin perder su autonomía. Para lograr los propósitos, se vienen reestructurando cambios normativos internos para mejorar la calidad de la enseñanza, tales como la reestructuración de la exigencia académica de los docentes, la calidad de servicios y áreas educativas, procesos de evaluación interna, entre otros. [13] Entre los meses de agosto a noviembre del año 2005, como parte del equipo del Proyecto Arqueológico Norte Chico (PANC), quien redacta este trabajo y el arqueólogo Jesús Holguín, realizamos y apoyamos en trabajos centrados en labores de conservación, inventario total de los objetos de la colección y el montaje de una exposición museográfica que fue inaugurada en noviembre de ese mismo año. [14] Si bien el espacio museístico ha nacido bajo una institución educativa de propiedad privada como la Congregación Canonesas de la Cruz, ha encontrado su régimen de independencia en la toma de decisiones y criterios de trabajo bajo la responsabilidad del profesor a cargo, desde el 2005 el Lic. Juvenal Ramírez. La congregación, representada por la directora de la entidad, ha formado parte de reuniones y ha aceptado los acuerdos sobre el tratamiento y cuidado de la colección, cuya responsabilidad la tiene el docente del área de Historia. [15] En el 2002 se realizó el Primer Taller del Proyecto Arqueológico Norte Chico: Análisis Lítico, del 29 de Julio al 2 de Agosto; el 2003, el Segundo Taller: Hallazgos Arqueológicos y Plantas Nativas del Norte Chico desde 3,000 años a.c. y el 2004, el Tercer Taller del Proyecto Arqueológico Norte Chico: Computadoras en el Avance del Conocimiento de nuestro Pasado. Asimismo, entre 2003 y 2004 se realizaron talleres participativos para una propuesta de circuito turístico. La propuesta fue llevada a cabo por la Especialista en Turismo, Angélica Arriola; con los talleres recogió las expectativas y propuestas de los actores locales para la implementación de un circuito turístico que beneficie directamente a la población durante su ejecución. 91

97 [16] El PANC creó alianzas estratégicas con los gobiernos locales y entidades educativas. Principalmente, una de ellas, con la Municipalidad Distrital de Pativilca. En mayo de 2002 realizó un convenio de Cooperación Institucional. Dentro de ese marco se desarrollaron actividades como los talleres participativos, implementó un depósito para la conservación y manejo local de las distintas colecciones arqueológicas que posee la Municipalidad de Pativilca, y para el correcto almacenaje de todos los restos materiales recuperados en las excavaciones tanto realizadas por el proyecto como todas las investigaciones llevadas a cabo en la región; su administración se encuentra bajo la dirección del Museo Bolivariano de Pativilca. También, bajo el convenio el proyecto trabajó en el Museo Bolivariano acondicionó e implementó una exposición museográfica permanente: Historia Antigua del Norte Chico, en enero del 2005, en la que se presenta el recuento prehispánico de la región y los hallazgos que fueron realizados en el valle de Pativilca y otros valles donde el proyecto realizó sus estudios. [17] Las Unidades de Gestión Educativa Local son órganos desconcentrados de la Dirección Regional de Educación de Lima-Provincias, proporciona el soporte técnico pedagógico, institucional y administrativo a las Instituciones Educativas de su ámbito, con la finalidad de asegurar el servicio educativo con equidad y calidad. En este caso, la UGEL N 16 tiene competencia en la Provincia de Barranca. [18] Este fue el IV Taller llevado a cabo los días 13,14 y 15 de agosto del 2005 en el auditorio de la Municipalidad Distrital de Pativilca. Fue organizado en conjunto por el Proyecto Arqueológico Norte Chico y la Unidad de Gestión Educativa Local N 16 - Barranca. Contó con el auspicio oficial de la Municipalidad Distrital de Pativilca. Estuvo dirigido al público en general. El último día se realizó un taller participativo con todos los docentes asistentes (75 docentes de Historia y Geografía procedentes de 20 escuelas localizadas en distintas partes de la región). Del taller se obtuvo un documento en el que se diagnosticó la enseñanza de la historia prehispánica en la región. [19] Este fue el V Taller llevado a cabo los días 18, 19 y 20 de agosto de 2006 en el auditorio de la Municipalidad Distrital de Pativilca. Tuvo el auspicio de la Unidad de Gestión Educativa Local N 16 - Barranca. Estuvo dirigido a docentes y público en general. El último día se realizó el taller que consistió en actividades grupales que condujeron a desarrollar un diagnóstico de las potencialidades y dificultades para la implementación de museos arqueológicos integrados con la comunidad. [20] Los resultados producidos por los ejercicios de ambos talleres fueron distribuidos a los participantes. Estos fueron recuperados de los archivos del museo Nuestra Señora del Carmen y el Museo Arqueológico de la UNJFSC. [21] A inicios de la década del 90, el museo estuvo a cargo de Domingo Torero Fernández, hijo del Dr. Domingo Torero A. Entre los años 1997 a 1998, bajo órdenes de la Municipalidad Provincial de Huaura Huacho, el Arql. Daniel Cabrel realizó labores de conservación, limpieza e inventario de la colección. En años posteriores señaló en distintas notas sobre el mal estado y condiciones de vulnerabilidad en que se encontraba la colección, incluso denunció el robo de más de 200 piezas de la colección. Ver: [22] El conflicto interno armado es un fenómeno sin precedentes en la historia republicana del país, que provocó un alto costo alto en vidas humanas y daños materiales. La guerra desatada entre el Estado y los grupos subversivos Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru, fue la más larga y generalizada que se haya librado. Se prolongó por dos décadas (1980 a 2000) y abarco casi la totalidad del territorio nacional. En el Norte Chico la etapa de mayor violencia se concentró entre los años 1990 a 1993; en años anteriores el escenario se mantuvo cercano, concentrado en la sierra y en zonas rurales de la región. De esos años, se reporta en Barranca, en 1992, el asesinato del candidato a la Alcaldía provincial Orlando Tapia, al dueño de la emisora Radio Fortaleza, Santiago Jau; en Huaura fue abatida la Secretaria General del partido Cambio 90 y el Alcalde del distrito, Jesús Morales Bermúdez, y el empleado Roger Huerta; en Huacho, se registró el secuestro y desaparición del periodista y estudiante de la Universidad José Faustino, Sánchez Carrión, Pedro Yauri Bustamante. Asimismo, entre 1992 y 1993, Sendero Luminoso convocó a tres paros armados en la provincia de Barranca (Comisión de la Verdad y Reconciliación, 2003, pp ). 92

98

99 CAPÍTULO 3. EL PANORAMA MUSEOLÓGICO EN EL NORTE CHICO: DIAGNÓSTICO Y REFLEXIONES Hace un poco más de cuarenta años se comenzaron a gestar los primeros museos en el Norte Chico. Su aparición coincidía con la conmemoración del aniversario de la Independencia del país, propiciados por el Estado. A finales de los 70 y 80 poco a poco en la región fueron creándose nuevos espacios museisticos en cada una de las provincias y distritos de este territorio -en parte a consecuencia de los movimientos sociales y políticos de la época que en buena medida cuestionaban el centralismo (cultural, económico) de la capital y el Estado- a iniciativa de parte de autoridades locales, investigadores, docentes, asociaciones civiles, coleccionistas; ellos por sus acciones en el forjamiento y manejo de estos espacios se distinguen como agentes culturales en la región. Estas iniciativas no se circunscriben dentro de una política museológica regional o nacional, sin embargo, en líneas generales coinciden en una orientación hacia la conservación, educación, difusión y promoción turística del patrimonio arqueológico. La presencia y desarrollo de proyectos arqueológicos estudiando el proceso civilizatorio, en los últimos veinte años, ha provocado el interés y expectativa sobre aspectos como la historia, los museos y el turismo en la región. Con los resultados de los trabajos de extensión sociocultural y las alianzas estratégicas desarrollados por el Proyecto Arqueológico Norte Chico desde los 2000, se puso en evidencia la presencia de parte de diversos agentes culturales locales, las necesidades de conocimiento y praxis en el campo la historia, museología y el patrimonio arqueológico que custodian. Además resaltó un aspecto fundamental, el interés y experiencia que ellos han cultivado en cada uno de los espacios museísticos. Conocidos varios aspectos generales sobre el universo y configuración museológica a lo largo de más de 40 años, el presente capítulo se formula en torno a Cuál es el balance actual en algunos espacios museísticos representativos, conducidos por los agentes culturales más relevantes vinculados a ellos?, y cuál es el balance global sobre el quehacer museológico en la región en torno a esta trayectoria de más de 40 años? El propósito no es otro que ahondar en la experiencia museológica en el Norte Chico. Con estas preguntas guías se buscó producir un diagnóstico del estado actual de dos casos representativos y producir una reflexión global sobre el quehacer museológico en torno a ese largo recorrido. Para ello se ha realizado el estudio detallado de espacios museísticos que vienen trabajando de forma continua desde 1987, el Museo Arqueológico de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión y el Museo Arqueológico Escolar Nuestra Señora del Carmen. Documentos como informes, memorias institucionales, artículos, entre otros, y principalmente las voces de sus principales agentes tienen un 93

100 alcance importante para aproximarnos a la situación y condiciones de su funcionamiento. Asimismo, para la reflexión global se han tomado ejes temáticos fundamentales y transversales a la trayectoria museológica, tales como el rol de los agentes culturales vinculados a los espacios museísticos en el Norte Chico, sus acciones o estrategias de gestión del patrimonio y el papel de la arqueología en la región. En líneas generales, se plantea que la situación actual de los espacios museísticos representativos de la región presenta serias dificultades en cuanto al desarrollo de sus actividades vitales. A pesar de ello, los espacios son impulsados y se mantienen por las acciones y estrategias de los principales agentes culturales involucrados en ellos, esencialmente docentes. En esta trayectoria, el desarrollo de investigaciones arqueológicas en la región ha sido y es el motor que ha generado impacto en el quehacer museológico de estos espacios. Sin embargo el papel central recae en sus agentes culturales locales y fundamentalmente en la concreción de sus acciones y estrategias macro que logre articular en el futuro todos estos espacios museísticos y sus agentes. La situación de los museos peruanos no era, ni es, una situación aislada. La situación y vocación de los museos para una sociedad en constante cambio y al servicio del hombre fue una discusión ampliamente desarrollada por los museólogos latinoamericanos. Un balance hecho diez años después de la Mesa de Santiago (1972), mostraba que las condiciones en los museos de América Latina eran similares como sucedía en el Perú (falta de presupuesto, infraestructura, personal, falta de políticas culturales que incentiven el museo, falta de formación académica, sin dejar de lado la misión social del museo que aún no se movilizaba en ese sentido) [1]. El origen de estos problemas reside en que los museos son virtualmente ignorados [Estado] en la definición de las políticas culturales y en que no se les reconoce su papel en la gestión del patrimonio y en la satisfacción de las necesidades culturales de una nación [2]. Siguen pasando los años y esta situación parece prolongada. En ese panorama emergen nuevos agentes aparte del Estado que se involucran con su patrimonio y museos para el desarrollo de sus localidades o regiones. En el presente capitulo se ha logrado identificar, acciones emprendidas dentro de los espacios escolares en la forma de acercarse al patrimonio de sus museos y una estrategia como la Red de Museos de Norte Chico, las cuales vienen propiciando las condiciones óptimas para el quehacer museológico en la región. 94

101 3.1 Diagnóstico de museos Esta forma de evaluación toma como referente metodológico los estudios que contribuyeron a mostrar la realidad de los museos peruanos realizados por Castrillón (1983) y la Unesco en cooperación con el Instituto Nacional del Cultura (Aparicio, 1985), cuyos resultados y alcances se han reconocido en la presente investigación (Ver Capítulo 1, Sección 1.2). Los instrumentos de recolección de información como cuestionarios y entrevistas que emplearon dichos estudios fueron estructurados a partir de la conceptualización del museo en ese entonces (Betancur & Romero, 1979; Castrillón, 1983; Aparicio, 1985; Castrillón, 1986). Con ellos, documentaron y evaluaron las funciones y los alcances de los museos. Sin embargo, este estudio marca una diferencia cualitativa respecto a ellos. En primer término, se aborda de forma diferenciada pero no por ello desarticuladas la dimensión del quehacer museológico -referida al desarrollo de actividades específicas como la investigación, conservación, comunicación- y la dimensión que comprende el rol de los agentes culturales y sus acciones en la gestión del patrimonio, referidas a los asuntos administrativos del museo (organizacionales) y de planificación y desarrollo de estrategias (proyectos, programas). Además, tiene una perspectiva territorial y trayectoria temporal en las que se visualizan factores favorables en la praxis museológica, las voluntades para hacerlo y la visión o concepción que se tiene del museo. Castelli (2000) definió a la forma de aproximación a los museos del país por medio del diagnóstico como un llamado para conocer la realidad de los museos, sus avances, logros y necesidades (p.75). Al mismo tiempo, es un medio por el que se puede exponer las razones de la situación o realidad y formular orientaciones futuras. En ese sentido, el propósito de este abordaje fue poner sobre la mesa tanto estos aspectos como formular reflexiones sobre el futuro del quehacer museológico en una escala regional, en este caso en el Norte Chico. La aproximación por medio del diagnóstico se vinculada a las características y funciones vitales que se desenvuelven en dos casos representativos de la región, acorde a la definición actual más conocida y difundida, establecida en 2007 en los Estatutos de Consejo Internacional de Museos (ICOM). Además, se integra la figura del agente cultural y sus acciones. Como se ha descrito en el capítulo anterior, los agentes culturales son los responsables de conducir los espacios museísticos, han tenido y tienen una gran intervención tanto en su creación y en su manejo. Esta forma de participación se encuentra vinculada y ha sido conceptualizada dentro del campo de la gestión del patrimonio cultural (Zubiria & Tabares, 2001) [3]. Por esto se toman definiciones desde este campo para analizar las acciones emprendidas o 95

102 desarrolladas por las personas, instituciones u organizaciones ligados al funcionamiento de los museos en el Norte Chico. Para el análisis del quehacer museológico, como se ha mencionado, se partió del referente basado en el concepto actual establecido por el ICOM, el cual ha permeado la normativa para la creación y registro de museos al Sistema Nacional de Museos del Estado peruano [4], y que define al museo como: Una institución permanente, sin fines de lucro, al servicio de la sociedad y de su desarrollo, abierta al público que adquiere, conserva, estudia, expone y transmite el patrimonio material e inmaterial de la humanidad y de su medio ambiente con fines de educación y deleite. (Desvallées & Mairesse, 2010, p.52). Esta concepción del museo se establece como una condición modelo, tomada de base por ser el concepto más conocido y empleado. Sus elementos: adquirir, conservar, estudiar, exponer y transmitir el patrimonio, fueron disgregados con el propósito de caracterizar y evaluar la praxis desarrollada en cada uno de los casos seleccionados, el Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión y el Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa "Nuestra Señora del Carmen". Su aplicación en la evaluación no ha dejado de lado el hecho de contrastar y discutir el concepto con la práctica, e ir construyendo con eso la visión o noción del museo desde el contexto particular en estudio. En el país el patrimonio cultural tiene un sistema de gestión y administración vinculado al aparato estatal. El Ministerio de Cultura es actualmente la entidad estatal responsable de todos estos aspectos de la cultura, con la misión de proteger, conservar y difundir el patrimonio cultural. En las últimas décadas es evidente que el Estado no es el único agente responsable en el manejo de la cultura, el patrimonio y los museos en el país. Zubiria y Tabares (2001) sotienen que los agentes culturales tienen un papel mediador (positivo o negativo) entre el Estado y el patrimonio cultural, generando acciones y estrategias que pueden convertirse en políticas culturales. En este campo es que nos adentramos a la gestión cultural del patrimonio. Zubiria y Tabares (2001), han analizado y teorizado sobre la gestión en el marco de acuerdos, experiencias y encuentros iberoamericanos. Estos autores señalan que la gestión es una noción que ingresa a Iberoamerica a mediados de los 80, vinculada con grandes transformaciones contemporáneas en la dimensión social, política y económica (globalización); una de ellas es, principalmente, la extensión de la noción de cultura y patrimonio. Los países y regiones adoptaron denominaciones acorde a sus realidades, asi dentro de cada país se podía identidicar: tejedores, actores o agentes culturales. Dentro de 96

103 esas diversas denominaciones, se advierte la inclusión o mas bien un limite borroso de la actividad económica dentro del patrimonio (Zubiria, et al., 2001, p.20-22). El termino de agente o gestor es el más comúnmente conocido en el país, por lo que empleamos esa denominación en la investigación. La gestión del patrimonio cultural hace referencia al conjunto de acciones programadas con el objetivo de conseguir una óptima conservación junto con un uso adecuado a las exigencias sociales contemporáneas [5]. Más que un modelo general de praxis sobre la cultura y el patrimonio, se resalta y define a partir de elementos que participan en el proceso de gestión -manejo y administración - de la cultura. No se considera como un modelo porque tiene como fuente al agente o gestor cultural, que es un promotor y generador de cambio en la medida que crea y genera estrategias [proyectos]acciones y políticas, las cuales son resultado de su conocimiento y análisis del contexto [territorio] político, social y, principalmente, cultural; confronta y desarrolla distintas forma de expresión y manifestación cultural, encuentra las relaciones que se dan o pueden dar entre el patrimonio y la comunidad (Zubiria, et al., 2001, p.47-48). Desde la gestión se puede realizar un acercamiento a la forma en que los agentes culturales han ido direccionando o guiado sus acciones culturales, específicamente en sus modelos de gestión o administración. El concepto de gestión implica el abordaje de temas de índole administrativo, organizacionales, de planificación dentro de los museos y del patrimonio (colecciones). La administración es la conducción racional de las actividades de una organización, es lo imprescindible para la existencia y crecimiento de una ésta (Zubiria, et al., 2001, pp.71-73). Los agentes son aquellos que le dan vida y estilo propio a una organización, son quienes deben garantizar el logro de las variables organizacionales y la satisfacción de las necesidades y aspiraciones culturales de la comunidad o de un grupo social determinado (Zubiria et al., 2001, p.69). Construyen conocimientos a partir del análisis de su contexto social. Dentro de una organización, entiende su estructura y se encarga de poner en óptimas condiciones lo que tiene con lo que quiere, y que sea lo más adecuado a lo espera la organización. En esta investigación, los agentes culturales son los principales involucrados en la gestión, administración del patrimonio y en el quehacer museológico. Se reconoce la individualidad o la participación meditante entidades (civiles o gubernamentales). Acorde a la definición, permite denominar y reconocer como agentes culturales a: investigadores (arqueólogos, historiadores, etc.), docentes o profesores, autoridades locales (alcaldes), proyectos de investigación, entidades gubernamentales 97

104 (municipios), asociaciones civiles (patronatos, fundaciones, comités civiles). La identificación y desarrollo de sus acciones en lo que a gestión y quehacer museológico se refiere, nos señalan el camino, las tendencias o nociones con que conciben o han ido construyendo sobre el museo y patrimonio, y, a más profundidad sobre la cultura. Tampoco se puede dejar de lado definiciones que de forma implícita se encuentran dentro de las definiciones. El patrimonio es una noción que se deriva del dispositivo legal que los protege (Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación Nº 28296). Acorde a ello, el patrimonio en el sentido que se le emplea en la investigación -es decir, precisamente dentro de los museos- se expresa en cada uno de los objetos culturales (materiales o inmateriales) o su agrupación (colección) a los que damos algún tipo de valor y significado histórico, arqueológico, artístico. Más allá de eso, se trató de recuperar dentro de las reflexiones si esta noción para los agentes culturales tiene otras implicancias. Con el diagnóstico se planteó evaluar la situación actual a partir de dos casos que se consideran una muestra representativa del universo museístico del Norte Chico pues reflejan una trayectoria continua en museos y en acciones emprendidas por sus agentes en dichos espacios. Por lo tanto, la selección que se realizó en el capítulo anterior y los criterios que los sustentan (Ver Capítulo 2, Sección 2.3.1), el cual incluye la presencia de los principales agentes involucrados en ellos, también se han considerado como óptimos y, por tanto, válidos para el desarrollo del presente capítulo. Además, como parte de la estrategia metodológica se desarrollaron y aplicaron dos instrumentos para la recolección de información de ambos casos, la guía de entrevistas elaborada y dirigida para cada uno de los agentes culturales encargados de administrar los espacios y un cuestionario estándar sobre las principales funciones del museo, dirigida a las personas responsables de cada área. Las guías de entrevistas fueron dirigidas a los docentes responsables de cada espacio museistico, al Dr. Henry Marcelo, Jefe del museo universitario, y al Lic. Juvenal Ramírez, encargado del museo escolar. La guía como instrumento consistió en un documento que reunió un conjunto de preguntas de tipo semiestructuradas, dirigidas y no dirigidas (Campoy & Gomes, 2009). Su elección se determinó porque de esta forma se podría trabajar de forma individual, organizada y detallada con cada uno de los entrevistados. De esa forma se aseguró que las preguntas estuvieran adaptadas a las necesidades de la investigación y a las características de cada una de las personas a entrevistar (Ver Anexo 2, Entrevistas). Las entrevistas realizadas fueron registradas, transcritas en su totalidad [6], analizadas e interpretadas (Campoy & Gomes, 2009, p.292), para tratar de obtener de ellas una perspectiva de las acciones que 98

105 desempeñan los docentes como agentes culturales en cuanto a gestión y al quehacer museológico. En ambos casos se realizaron entrevistas individuales. Sin embargo, dentro del proceso de investigación surgió la necesidad de indagar para ampliar la visión del estudio mediante entrevistas a otros agentes claves en el desarrollo museológico de la región, como en buena parte se ha expuesto en el capítulo anterior. Ellos son los arqueólogos, el Dr. Arturo Ruíz y Lic. Mario Advíncula. Ambos participaron de proyectos arqueológicos que impulsaron, tanto la creación del Museo universitario en la década de los 80 como el desarrollo de exposiciones y talleres participativos (entre los años 2005 a 2006) que fueron punto de encuentro de varios agentes con experiencias en actividades museológicas dentro del Norte Chico (Ver Anexo 2, Entrevistas 1, 2, 3 y 4). Se diseño un cuestionario para registrar las actividades que definen el quehacer museológico. Los ítems agruparon campos como: Colección, exposición, investigación, conservación y restauración, difusión y divulgación; se incluyeron datos generales de ubicación e infraestructura. Para cada campo se desarrollaron preguntas cerradas (Si No) y abiertas o de desarrollo (Campoy & Gomes, 2009). Su aplicación permitió recoger información estandarizada, y con ello aproximarnos a conocer y comparar las condiciones en que se trabajan en ambos espacios (Ver Anexo 3). Se determinó desarrollar los cuestionarios después de las entrevistas, puesto que tras ese encuentro ya se contaba con una visión panorámica del funcionamiento de los museos. Al realizar esto, se pudo en la práctica (durante la visita) ir corroborando o no la información que proporcionaron. El cuestionario en formato impreso fue llenado de forma escrita por el investigador con los datos que dieron los responsables de las áreas de los museos [7]. Para cada caso, se trató de un responsable que resultó desempeñar múltiples actividades y funciones. En el museo universitario fue el Lic. Jorge Príncipe, asistente administrativo y encargado de desarrollar actividades de otras áreas del museo como laboratorio y comunicación, y en el museo escolar se trató del docente Lic. Juvenal Ramírez, quien es el único encargado y responsable de todas las actividades que hacen posible su funcionamiento. La información recopilada de las entrevistas y los cuestionarios fue analizada y su interpretación se desarrolla en las siguientes secciones del capítulo. Los alcances logrados por medio los instrumentos (guias de entrevistas y cuestionarios) y su sistematización, se conjugan en lo que constituye el diagnóstico del estado actual de los espacios museísticos. 99

106 3.1.1 El Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión En 1987 el museo universitario abrió sus puertas al público, aunque ya desde años anteriores las exploraciones y excavaciones que produjeron su gestación fueron notables y se reconocieron como las principales actividades por las que destacó este espacio en sus inicios. Producto de ello, son su identificación e incorporación dentro los diagnósticos nacionales de museos en la primera mitad de la década de los 80 (Castrillón 1981; Aparicio 1985). Después de una mudanza que lo llevó a establecerse fuera del campus universitario, pero que lo ha acercado más a la ciudad y sus pobladores, a partir del 2001 el museo ocupa las instalaciones de la Ex- Estación del Ferrocarril de la región. Este espacio adaptado a las necesidades del museo, se ha ido moldeando por los cambios administrativos que son parte de su trayectoria. A lo largo de ella, desde su fundación hasta la actualidad han sido cuatro los jefes que lo han dirigido. El Dr. Henry Marcelo es quien ha permanecido mayor tiempo en la jefatura. En sus inicios el museo fue dirigido por el arqueólogo Arturo Ruíz Estrada, quien contó con el apoyo de auxiliares de excavación y conservación; los trabajos por entonces se concentraron exclusivamente a la investigación y al montaje de una exposición temporal (Ruíz, 2015). A partir del año 1992 a 2005 el manejo del museo estuvo a cargo de personal administrativo, quienes básicamente mantuvieron abiertas las puertas de la sala de exposición. Desde el 2005 la jefatura del museo, según la incorporación de cambios en el estatuto universitario ya no está en manos de personal administrativo sino a cargo de docentes afines al quehacer del museo, como el Dr. Henry Marcelo [8]. Este agente destaca por su continuidad y experiencia alcanzada en el cargo, además por las estrategias que plantea en la gestión y en el quehacer como iremos anotando. El museo a lo largo de su existencia se ha nutrido y apoyado en una normatividad constituida por la legislación de protección patrimonial (Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación Nº 28296), por su inscripción en el Registro Nacional de Museos del Perú, por el Estatuto universitario, además de su propio reglamento y planes anuales, entre otros [9]. Estos aspectos han fortalecido y favorecido la institucionalización de este espacio museístico. En los últimos dos años, a raíz de la Ley de Reforma Universitaria se vienen implementando cambios a nivel nacional en las entidades universitarias. Se trata de un cambio paulatino en el museo, en el cual su principal estructura orgánica se mantiene y posibilitará (en un largo plazo) su autogestión al convertirse en un órgano desconcentrado. Es decir, autónomo en la toma de decisiones y en la incorporación de recursos externos que beneficien su crecimiento. 100

107 La estructura orgánica del museo en primera línea depende directamente del rectorado y bajo la responsabilidad y dirección del Vicerrectorado de Investigación, según el último estatuto universitario acorde a la reforma. Segun el reglamento y organización interna, el museo cuenta con un responsable que ejerce el cargo de Jefe del Museo. Tiene el apoyo de su fundador bajo la figura de asesor científico [10] y de un asistente en el área de administración. Bajo su responsabilidad se encuentran, incluyendo la administrativa, las áreas de: Conservación y Restauración, Comunicación e información, Laboratorio, Marketing. El personal establecido para la realización de estas áreas y funciones se encuentra en un Conservador y un Técnico administrativo. Además de dos personas para la vigilancia rotativa y constante, y ocasionalmente practicantes quienes suelen ser estudiantes de la carrera de Comunicación de la misma universidad. Esta entidad dota al museo de una partida presupuestaria anual para la realización de actividades según la programación y justificación establecida por la jefatura [11], además de la contratación de especialistas y de servicios que requiere el museo (Marcelo, 2015). El museo universitario se define como un espacio comunicacional de conservación, defensa y exhibición de objetos y recursos de la culturas que florecieron en el Norte Chico, como promotor de investigaciones culturales multidisciplinaria, como impulsor de la organización de exposiciones y actividades culturales de la localidad y de la región en coordinación con la Red de Museos del Norte Chico para la generación de autoestima de la población (Marcelo, 2012, p.4). Esta visión del museo contiene los lineamientos principales, oficiales y actuales que guían a la institución. Es notable el rol que tienen la comunicación y la difusión del patrimonio, que son partes remarcadas por la profesión del Dr. Marcelo, así como las estrategias desarrolladas para el manejo del universo museístico de la región teniendo como eje principal el museo universitario. Como ya se ha ido mencionando, la figura responsable del museo es el Dr. Henry Marcelo. Su participación, como en el caso del museo escolar, es Ad Honoren y se comparte con las horas lectivas que imparte en la Facultad de Ciencias de la Comunicación aunque en la práctica ese tiempo se extiende para poder cubrir las actividades que demanda el museo. Sus funciones más allá de las administrativas se concentran en el campo de la gestión para el desarrollo y promoción de las actividades específicas del museo y la protección y difusión del patrimonio regional. Es fundamental su conocimiento sobre la región, su permanencia y experiencia en el cargo, su participación en la incorporación de aspectos normativos como por ejemplo la creación del reglamento acorde a la visión del museo. En el campo del quehacer museológico ha incluido una de las tradiciones culturales más populares de la región, conocida como Vichama Raymi, como parte del patrimonio que difunde el museo, 101

108 vinculándola a la iconografía representativa de la colección y rastreando sus orígenes en la mitología prehispánica del Norte Chico que fue documentada por cronistas y extirpadores de idolatrías en el siglo XVII. Las acciones que ha desarrollado se conforman por estrategias diseñadas para garantizar la sostenibilidad y sustentabilidad del museo. Una de ellas es la creación del Patronato del Señor Tatuado de Huacho, denominado así por el hallazgo emblemático que forma parte de la colección universitaria, que tiene la capacidad para captar y dotar de donaciones y recursos económicos al museo. Otra de estas se denomina Vichama-Indecur que según Marcelo (2015), se trata de: un instituto independiente de la universidad conformado por gente de los patronatos de la región [de los distritos de Huacho, Supe y Huaral]. INDECUR es un Instituto de desarrollo y crecimiento urbano y rural. Tiene el enfoque del apoyo a la cultura como estrategia general, es multidisciplinario si yo salgo de acá o me sacan del cargo, me refugio en esa institución y continuaré las labores normales, y apoyaré desde el instituto al museo y otras actividades en la región. Ambos constituyen soportes alternos para el museo, aunque por ahora lo hacen sin un reconocimiento oficial o convenio con la universidad que permitan establecer acciones más programadas en distintos niveles o plazos. Asisten con recursos para el mantenimiento del edificio, recursos museográficos para la exposición y mediante investigaciones de diversa índole (arqueológica, antropológica, semiológica, ecológica, de defensa patrimonial regional y educativa) que nutre la publicación periódica del museo. Es decir, el soporte se concentra en servicios y áreas vitales en las que los recursos universitarios por diversas razones (presupuestales y/o burocráticas) no alcanzan a satisfacer. En cuanto a la investigación, el jefe del museo también ha sumado una serie de alianzas estratégicas con investigadores de la región, nacionales y extranjeros, comprometiéndolos -por medio de convenios avalados por la universidad- al intercambio académico, difusión de los resultados de sus proyectos y a su participación de las actividades del laboratorio (capacitación, registro), al almacenaje de las colecciones producidas por sus proyectos, y a la asesoría especializada en materia de arqueología para el museo [12]. Además de estas estrategias, se destaca su propuesta: Proyecto Red de Museos del Norte Chico, recuperación del Patrimonio Cultural y Natural como estrategias de Comunicación Ecoturística sostenible para el Desarrollo Regional por comprender una dimensión a escala regional en el mediano y largo plazo. La estrategia esta pensada desde la visión del museo universitario, indicado líneas arriba, sobre su conocimiento de los espacios museísticos de la región, de sus colecciones, así como de sus necesidades. Y, principalmente, el acercamiento y contacto que ha ido estableciendo a lo largo de los años 102

109 tanto con los agentes responsables de dichos espacios y colecciones como con los agentes que se requieren participen en ellos, es decir autoridades locales y estatales, investigadores, entre otros. La primera presentación de esta idea, y la primera mención de los museos del Norte Chico, la realizó entre los años 2006 y 2007 en el marco de los talleres participativos organizados por el Proyecto Arqueológico Norte Chico (Ver Capítulo 2, Secciones 2.2 y 2.3). En el 2007, diseñó este proyecto de largo aliento y fue aprobado mediante una resolución por la universidad. Sin embargo ha funcionado esporádicamente, a lo largo del 2008, 2009 y 2011, principalmente a causa de la falta de planificación de parte de la universidad para que el proyecto pueda contar a tiempo con los recursos económicos, materiales y de servicios. El proyecto al día de hoy es inconcluso, al grado de cubrir un 60% de sus actividades. Ante esta situación, desde el 2014, incorporó esta estrategia como parte de las funciones del museo, respaldada normativamente en el estatuto universitario. La propuesta Proyecto Red de Museos del Norte Chico tiene como objetivo mostrar que el ecoturismo como la cultura regional pueden ser empleados dentro de los espacios comunicacionales que son los museos como herramientas de conservación, recuperación de la cultura, del patrimonio regional, como estrategias de comunicación y difusión de valores dentro de este territorio (Marcelo, 2009). Esta idea nuevamente, desvela el sentido comunicacional de la identidad regional de la mano de la apropiación patrimonial que tiene el museo para este agente, como lo refiere: He pensado que el museo desde un aspecto académico deben ser los que deben de articular mejor el aspecto de transferencia cultural al aspecto educativo, en los colegios y además porque [en el Norte Chico] están dentro de los mismos colegios. Hay material [arqueológico] que ha sido destruido...lamentablemente no hay una cultura de respeto a lo arqueológico, y eso es una cosa importante que debe ser una cosa mediática para que se promueva una cultura del manejo del patrimonio. (Marcelo, 2015) En la práctica, con el proyecto desarrolló, programó y logró llevar a cabo un conjunto de actividades como visitas guiadas que ligan la colección del museo universitario con sitios arqueológicos emblemáticos de la región. Tomo sitios con referentes iconográficos y/o hallazgos asociados a las narrativas mitológicas de Vichama. Las visitas se engranan con la representación teatralizada del Vichama Raymi, el cual es promovido como símbolo de la identidad cultural de la región. También ha identificado importantes referentes patrimoniales. Entre ellos, se destacan los museos en los cuales ha entablado los primeros nexos por medio de dos reuniones. Estos encuentros le han permitido acercarse a las necesidades y dificultades por la que atraviesan, así como estructurar la estrategia de red sostenida por un mecanismo de liderazgo cultural: 103

110 La mayoría de museos o colegios no tienen los recursos y el liderazgo cultural [para sus museos]., porque para que sean sostenibles los museos en los términos del Norte Chico, en la realidad quizás sea el articularlos a los liderazgos culturales que están bajo la forma de los patronatos [asociaciones civiles]., reconocidos o no reconocidos. Mira, hay un segmento de patronatos culturales y turísticos que si se sostienen en el tiempo Una de ellas es Ínsula también, por ejemplo el Patronato de Barranca, el Patronato del que forma parte Bazán, el Patronato de Supe hay varios patronatos que por la composición que tienen en la defensa de la cultura se sostienen en el tiempo Esta es la propuesta, bajo una perspectiva sostenible y sustentable en la que el Gobierno Regional financie el presupuesto de los sueldos. Por ejemplo, hay personas de los patronatos que han sido profesores, ahora están cesados manejan información, tiene la mística. También hay profesores que trabajan mucho, tienen interés, trabajan en la sostenibilidad, pero al final no dejan nada, me refiero al soporte orgánico que se sostenga en el tiempo. Quizás sea lo más sostenible que esta gente pueda ser designada con un presupuesto, bajo un proyecto especial del Gobierno Regional. Serian 20 personas que pudieran incluirse como CAS [Contratación Administrativa de Servicios]. o en planillas, obviamente seleccionadas por un jurado ligado al aspecto cultural, en este caso ligados a los museos. (Marcelo, 2015) En estas líneas analiza y destaca la estrategia que requiere el manejo de los espacios museísticos en el Norte Chico. Sin embargo, en especial, se refiere a los espacios museísticos dentro de las escuelas (comunmente reconocidos como museos escolares) porque son parte importante del universo museístico en la región y porque la participación de los docentes en las convocatorias y actividades del museo universitario es constante. En esta visión, es la universidad la que lidera y es propositiva sobre las acciones que podrían encauzar la sostenibilidad (en tiempo y dirección) y la sustentabilidad (en términos de recursos económicos). Con estas características y condiciones, vemos que en la practica es el mismo jefe del museo que ya tiene un rol importante como líder, como agente cultural en la región. El componente de la sustentabilidad viene desde el campo turístico. Es el aspecto práctico de la estrategia de Red de Museos para generar divisas desde el turismo cultural arqueológico, flujo que ya se encuentra activo en el Norte Chico, particularmente en la zona arqueológica de Caral (Valle de Supe) y que se ha ido promocionando cada vez más desde que ingresó a la Lista de Patrimonio Cultural de la Humanidad en el año 2009 [13]. Dentro de la pobreza de inversión que tienen los museos se apuesta por una economía de menor inversión y mayor ganancia social, desarrollándola de forma seria porque si no hay un turismo serio no se va a sostener en el tiempo (Marcelo, 2015). Lo que constituye particular de este componente es que se articula a la peculiaridad de la región y Marcelo denota que éste debe marcar una diferencia en la aproximación tradicional de las prácticas convencionales del museo, cuando menciona que se debe: Generar divisas pero con una política distinta, diferente en términos museográficos. Porque no funciona la museografía como la estamos planteando en un sentido occidental, no funciona en nuestra 104

111 articulación para el desarrollo de la identidad. Se ve como una especie de almacén, de piezas antiguas, que no activa la conciencia inmediata del presente hacia el pasado En la forma popular es otra cosa. Por ello, actividades como la teatralización del Vichama Raymi, la creación de visitas especiales como el Achachi, consistente en la celebración del día de los muertos dentro del museo y que tiene como referente las momias que forman parte de la colección, así como articular visitas a museos y sitios arqueológicos teniendo como hilo conductor el mito de Vichama, constituyen referentes a estas estrategias de una aproximación distinta y vigente en lo popular, que articula el pasado y el presente, desde dentro y fuera del museo. Tanto sostenibilidad como sustentabilidad se avizoran en un mediano y largo plazo. En principio porque las condiciones internas de los espacios museísticos del Norte Chico demandan más atención en términos técnicos y en el quehacer museológico. Aun así, dentro de cada uno de ellos, las acciones por conservar, emplear el patrimonio dentro de la enseñanza y su difusión, son aspectos fundamentales desarrollados durante muchos años y que ayudaran a cimentar las bases de la estrategia de Red de Museos o de cualquier otra iniciativa o intento de política sobre museos y patrimonio en esta región. Vistos los cambios traídos por la nueva ley de reforma universitaria y la capacidad de autogestión que se le confiere a futuro, el jefe del museo ha iniciado en el una etapa de ordenamiento básico, partiendo de la colección, sin dejar de lado la atención de la exhibición de sus salas ni dejar de lado el aspecto educativo sostenido en la mitología prehispánica a través de Vichama, la representación teatralizada del Vichama Raymi y las visitas guiadas que conecta el patrimonio del museo con los sitios arqueológicos y ecológicos de la región. Un agente fundamental dentro del quehacer en el museo es el Mg. Jorge Príncipe [14], pues el espacio cuenta básicamente con el trabajo tanto del jefe como de este profesional. Sus funciones de acuerdo al perfil y al reglamento se ajustan al de un personal técnico administrativo. Por ello, coordina y ejecuta los planes e informes anuales. Además, ha recibido responsabilidades fundamentales para realizar labores esenciales en cuanto al registro de la colección, museografía, comunicación y difusión, guiados, recepción, actividades que a diferencia de la jefatura son de dedicación exclusiva y remunerada por la universidad. La participación del conservador en el museo se ha limitado a un periodo muy corto. Su presencia es necesaria ante las labores que se han emprendido en el manejo de la colección, pero el cargo no puede ser cubierto debido a la falta de recursos de la universidad para la contratación de este especialista. 105

112 Considerando estas carencias en el personal, recursos y los cambios a razón de la reforma universitaria en el país, la programación anual del museo tiene acciones centradas hacia tareas de alta prioridad en las cuales Jorge Príncipe tiene un rol fundamental. Dentro del museo no existen programas para la capacitación del personal. Acaso se realizan de forma elemental en forma de charlas dirigidas a los practicantes para el manejo y registro de la colección. Una excepción fue cuando en el 2014 el Ministerio de Cultura brindó charlas para el manejo del Sistema del Registro de Bienes Muebles al personal para que incorporen la colección del museo a dicho inventario sistematizado. Generalmente, los cursos o diplomados de especialización en museología, museografía, conservación y temas afines al museo, como el caso del docente encargado del museo escolar, son financiados por el mismo personal y realizados en su tiempo libre. La primera gran etapa en que se forjó la colección universitaria fue emprendida por Ruíz Estrada en la década de los 80. Los proyectos del arqueólogo se concentraron en las exploraciones y excavaciones dentro del campus universitario, sus alrededores y en el distrito. El objetivo fue recuperar, investigar y emprender campañas de protección de los sitios y objetos que se encontraban en peligro constante por el saqueo o huaqueo. Su dedicación fue cubierta por distintos medios locales que reconocieron su labor con el patrimonio de la localidad de Huacho [15]. Se estima que el acervo está conformado por más de 3000 objetos resguardados. Se destaca porque incluyen hallazgos sobresalientes como los restos humanos momificados con tatuajes, únicos en la localidad y en el país, así como una vasija en la que se representa un personaje asociado a la mitología prehispánica y que se ha convertido en el símbolo oficial de la universidad [16]. Desde el 2014, como parte de las actividades del área de Laboratorio, se lleva a cabo el registro e inventario de la colección, el cual se ha ido incorporando al Registro Nacional de Bienes. Esta labor se encuentra en un 40% de su desarrollo. Se encuentran varias restricciones que limitan la continuidad de dichas tareas, tales como el bajo presupuesto para cubrir el costo de materiales para el registro, almacenaje y protección del personal. Además de la carencia de un espacio acondicionado para manipular y registrar la colección, por lo cual eventualmente se adaptan partes de la sala de exposición y auditorio del museo. Y, fundamentalmente, la ausencia del conservador que evalúe constantemente, trate la colección y asegure sus condiciones de conservación. Durante el 2014 se realizaron algunas mejoras en la infraestructura del museo que se concentraron en el cambio del techo (a cielo-raso), el pintado de los ambientes y el cambio del piso del auditorio y sala de exposición. Sin embargo, estas mejoras también aún son necesarias en los dos ambientes en que resguarda 106

113 la colección. En ellos las condiciones no son las más óptimas. Estos espacios han sido adaptados precariamente, requieren de la incorporación de anaqueles, equipos para el control de las condiciones medioambientales y de seguridad. Además de las condiciones del edificio, cabe decir que el valor de este como patrimonio histórico es poco destacado pese a que como Estación del Ferrocarril de la ciudad formó parte de un gran proyecto a inicios del siglo XX, el cual unió la capital con esta ciudad y las principales haciendas azucareras localizadas al norte de la región. Incorporar el sentido histórico que representa el inmueble contribuiría a caracterizar el carácter del papel de la economía en la región y su impacto en el país [17]. Las primeras exposiciones del museo carecen de registros que documenten su contenido. Sin embargo su fundador, el Dr. Ruíz ha referido que ellas se centraron en la cultura regional, en el proceso histórico desde sus inicios hasta antes de la conquista española; de la mano de ello subrayó la sencillez y precariedad de las exposiciones asociadas al espacio restringido y la carencia del equipo museográfico (Ruíz, 2015). Aún, varias de estas condiciones técnicas persisten [18], a pesar de que el museo cuenta con un local estable. Dentro de este se ha habilitado una sala amplia para la exposición permanente. La exposición actual está conformada por al menos 300 objetos. Se desarrolla en torno a una estructura cronológica que inicia con el origen de la civilización y finaliza con, lo que en esta colección es predominante, la cultura local Chancay (Siglo X a XIV). La narrativa se despliega con referencia a la iconografía y representaciones en cerámica además de diversos hallazgos, que son parte de un conjunto de estilos que caracterizan a la región. Con ello se da cuenta de que existieron múltiples culturas asentadas en este territorio, de su interacción constante, así como de la ideología-religiosa que se desprende de la iconografía que hacen alusión a diversos personajes y dioses ligados a la subsistencia, a la aparición de la agricultura, y que se han asociado a los mitos recogidos de las crónicas del siglo XVI, fundamentalmente con el mito de Vichama [19]. El área de Conservación y Restauración es una de las que menos condiciones tienen establecidas para su funcionamiento. Por un lado, carece de un espacio y equipamiento suficiente y por otro, no cuenta con un especialista responsable. Las labores de conservación se ven bastante reducidas a intervenciones mínimas sobre el acervo y se realizan acondicionando eventualmente el auditorio del museo. Como se ha mencionado, si bien está establecida una plaza para un conservador o restaurador, ella no puede ser cubierta por la universidad que ha señalado que carece de los recursos para contratar permanentemente a este profesional. Las intervenciones puntuales o necesarias, a medida que se desarrolla el registro y el inventario o se identifiquen como necesarias en los objetos expuestos, son realizadas por el personal técnico administrativo. El requerimiento de la contratación de este profesional y equipos de conservación 107

114 es constante. Alternativamente, se ha ido incorporando la intervención de especialistas en esta área mediante los convenios con proyectos de investigación que han aportado en tareas de evaluación, conservación y registro, tal como lo realizó el Proyecto de Investigación Acaray entre el 2006 y La investigación es un aspecto del museo que presenta dificultades. Tanto en ésta como el área de conservación, los recursos son mínimos. Con estas carencias, lo planteado en este caso es la realización de actividades puntales. Por un lado, el jefe del museo y el asesor del mismo desarrollan estudios iconográficos y semiológicos de los objetos cerámicos de la colección [20]. De otro lado, principalmente, desde el museo se promueven constantemente las investigaciones en la región, difundiéndolos mediante conferencias y charlas. Además, propicia la vinculación con proyectos de investigación de tipo arqueológica, histórica, antropológica, etc., para generar convenios para nutrir y cubrir las necesidades de las áreas de investigación y conservación del museo. La colección está disponible a investigaciones fuera del museo, sin embargo es poco lo que se ha hecho en la práctica debido al estatus del registro de la misma. Dada las carencias del personal y recursos para la investigación, potenciar esta condición favorecería notablemente tener una mejor aproximación a la colección y a la construcción de propuestas de exposición temporales. Dentro del área de Comunicación e Información el museo despliega sus actividades de difusión. Para ello, en el 2007 se ha creado la revista Guara. Es una publicación científica cultural, publicada periódicamente y de distribución gratuita [21]. En ella se difunden los estudios realizados en la colección y se suman los aportes de investigadores en diversos temas: Defensa y conservación patrimonial, arqueología, semiología, etc. Las exigencias sobre la publicación son al máximo debido a su periodicidad y de que en su edición se involucran tanto el jefe del museo como el personal técnico-administrativo. Son notables sus esfuerzos por reunir artículos producidos por investigadores locales y extranjeros en torno al patrimonio material e inmaterial de la región. Sus contenidos se han concentran en discusiones y propuestas de investigaciones arqueológicas recientes, tradiciones populares y su vinculación a lo prehispánico, análisis de documentos etnohistóricos de la región, entre otros. Otras acciones vinculadas a la difusión de sus actividades y contenidos del museo, se despliegan en seminarios, conferencias, eventos culturales, organizados por entidades como el Gobierno Regional o instituciones educativas. En ocasiones puntuales, el museo organiza este tipo de actividades, como por ejemplo para difundir las investigaciones de los proyectos que colaboran con el museo o para la presentación de una nueva edición de la revista, la creación y producción de videos promocionales. Sin duda, los medios de difusión que concentra el museo son los programas de radio, prensa y televisión, al 108

115 estar ligado el jefe del museo a la carrera y a la Facultad de Comunicación de la universidad. En este sentido, su participación es para difundir tanto las actividades del museo, pero principalmente a las denuncias sobre el saqueo del patrimonio arqueológico y el llamado a su protección por parte de las autoridades locales y la población. El campo educativo del museo es el más dinámico de todas las áreas. En contra de las dificultades presentes por la ausencia de personal y recursos, en el museo se han generado una serie de actividades congruentes al contenido de la colección y la misión de la institución. Jefe del museo ha logrado integrar los contenidos en la facultad de la comunicación para hacer partícipes a los alumnos en el museo y en la producción de materiales necesarios en este campo. Su desarrollo tiene como núcleo la integración de la particularidad de la iconografía de la colección y el mito regional de Vichama. La existencia de la celebración del Vichama Raymi en los distritos de Paramonga y Végueta, basado en la representación del mito, y el apoyo de la universidad a estas localidades en los años 70, fueron los antecedentes para retomar y vincular estas manifestaciones actuales con el museo. En conjunto con las organizaciones civiles encargadas de desarrollar estas representaciones, como los patronatos de estas localidades, el museo colaboró en la elaboración de material didáctico educativo y audiovisual para ser empleado tanto en las escuelas como en el museo (Marcelo, 2015); son materiales que también se canalizan y reafirmar vínculos con otros museos por medio de la red de museos. Además, continuamente apoya la producción y representación del mito de Vichama, conocido en la región como Vichama Raymi. Durante la visita a la exposición, la colección es explicada particularmente por su vinculación al mito, resaltando las ideas del nacimiento de la complejidad social, el origen de la agricultura, como las múltiples culturas y sociedad se asentaron e interactuaron en el territorio. Además, en los últimos años toma como referente los hallazgos arqueológicos sobre el origen de la civilización en esta región, lo que refuerza el carácter de esta zona en su antigüedad y los aportes sobre las demás culturas posteriores que se desarrollaron a lo largo del país. Otra forma de seguir esta lectura, es mediante un tipo de visita diseñado para poner en diálogo el museo con los sitios arqueológicos y ecológicos referentes de la región, particularmente con los de Arcaico Tardío localizados en el valle de Supe que aún vienen siendo estudiados. Las visitas se complementan con material audiovisual (cortos sobre el mito de Vichama y el Vichama Raymi) y -en especial en las visitas escolares- con material educativo que relaciona el contenido expositivo con el curricular. En estas acciones también vemos como se van articulando el quehacer y la gestión, las que definen a un agente cultural. Reconoce las necesidades del museo, las dificultades de la administración, conoce el contexto y articula las manifestaciones culturales vigentes en la región, las cuales tienen gran contenido 109

116 prehispánico. Son altos los índices de asistencias a las visitas especiales que articulan sitios y museos bajo el mito de Vichama (Marcelo, octubre 2014), así como la representación del Vichama Raymi fuera de las paredes del museo. Sobre este punto, este agente cultural, el Dr. Marcelo, apoyado por otros agentes de la región (patronatos y docentes) ha logrado vincular la representación y el mito a los contenidos escolares de la Región Lima [22]. A partir del 2017, se incluirán estos temas en las áreas curriculares de Historia, Geografía, Economía, Personal Social y Arte, en los niveles de educación primaria y secundaria. El Museo brinda atención gratuita a estudiantes de diversas instituciones educativas (escuelas, institutos y universidades) y público en general. El tipo de control de visitantes se trata por medio de un libro de registros. Particularmente, el análisis cuantitativo e informe de visitantes en el museo es sumamente valioso pues de ello depende en buena parte la sustentación de la llegada del museo al público y el presupuesto que otorgará la universidad (Marcelo, 2015). La media anual es de unos 6600 visitantes, calculado entre los años 2011 a 2014 (Marcelo, 2014). Aspectos generales como nacionalidad, nivel educativo, intereses sobre el museo, o el desarrollo de evaluaciones sobre la experiencia de los visitantes no se han desarrollado debido a las limitaciones ya mencionadas como la carencia de personal y recursos económicos. Sin embargo, una práctica sumamente sencilla que se lleva a cabo es la consulta verbal a sus visitantes para conocer las opiniones respecto al museo (exposición, actividades educativas) y sus servicios. El área de Marketing es la menos desarrollada, originada por la falta de personal y recursos pero no por la carencia de la visualización o creación de publicidad (promoción del museo) y productos derivados de las actividades principales del museo. En este sentido, se han creado nichos de demanda de parte de las escuelas de la región sobre videos del mito de Vichama y vestuario para la teatralización del mito. Las próximas acciones se encaminan a producir módulos educativos que contengan estos materiales y que además afiancen los lazos con estas entidades educativas. 110

117 3.1.2 El Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa "Nuestra Señora del Carmen" Como se ha mencionado, este espacio museístico abrió sus puertas en el año 1987 como Museo de Ciencias Histórico-Sociales, en el marco en que la institución educativa particular dirigida por la congregación religiosa Canonesas de la Cruz conmemoraba sus veinte años de labor educativa en el distrito de Paramonga. Su creación fue posible por la iniciativa de los docentes de historia, el Lic. Gelimer García Sears y el Lic. Percy Carrión Rea, en ese entonces, también encargados del museo. La colección inicial fue formada en los años previos a partir de exploraciones escolares a diversos sitios arqueológicos localizados dentro del distrito de Paramonga, como Rompequincha y Cerro La Horca (Holguín & Cornejo, 2007) programadas por la escuela y en las que se recolectaron objetos arqueológicos. Al plantearse la creación del museo, se sumaron más objetos donados por los padres de familia y los docentes. En los años sucesivos a su apertura, el funcionamiento y responsabilidad del museo escolar recayó sobre los nuevos docentes del área de Historia y Geografía que se iban incorporando a la escuela. Desde su apertura, esta iniciativa y participación de los docentes marcó el carácter del manejo y funcionamiento del espacio pues, desde entonces, la dirección escolar delegó a plenitud la responsabilidad a los docentes en turno del área de Historia y Geografía. La dirección de la escuela está a cargo de la Congregación Católica Peruana Canonesas de la Cruz, la cual tiene como directiva constante en sus diversos planteles a nivel nacional conformar una dirección rotativa de una duración de dos años consecutivos. En la practica, los que suelen mantenerse por más años en las escuelas son los docentes que usualmente son y viven en la localidad. Esto ha hecho que en cierta medida, los docentes estén más comprometidos con la colección. En sus inicios este espacio expositivo, bastante reconocido en la localidad como museo escolar, se organizó bajo los criterios de clasificación propios de los profesores de turno, quienes trataron de inventariar la colección y llegaron a organizar con sus alumnos pequeñas exposiciones temporales. A pesar de ello y haber sido forjado con el afán de permanecer abierto a la comunidad estudiantil y distrital, por años su funcionamiento se restringió a su apertura durante las ferias de ciencias que se realizan anualmente en el colegio. En el año 2005 ingresó a la plantilla de la escuela el Lic. Juvenal Ramírez como docente del curso (materia) de Historia y Geografía, el cual imparte en el nivel secundario. Desde ese año y hasta el día de hoy el museo se encuentra a su cargo. A lo largo de 10 años consecutivos es quien mayor tiempo ha asumido este cargo, se ha convertido en el principal responsable de su manejo y de documentar su existencia. 111

118 En el 2005 el docente tomó conocimiento sobre los trabajos del Proyecto Arqueológico Norte Chico y entró en contacto con los miembros de este equipo de arqueólogos, con el objetivo de iniciar las labores básicas que requería la colección para su conservación, documentación y exposición. Es entonces que el contacto produjo un acuerdo de trabajo colaborativo entre el proyecto y la dirección del colegio, la cual designó la responsabilidad integral del museo al docente. Por este acuerdo el proyecto se comprometió a colaborar para trabajar en conjunto con la colección en tanto que la escuela se comprometió a mantener y promover la protección y difusión del patrimonio que tiene bajo su custodia. El trabajo colaborativo implicó el desarrollo de distintas labores para la conservación, registro y exposición de la colección e involucraron otros profesionales en arqueología y en conservación [23], docentes y alumnos (Holguín & Cornejo, 2007). Tras ello, este espacio ha logrado mantener sus puertas abiertas de forma más continua y con criterios acordes a la naturaleza de la colección. En ese sentido, el docente reconoce que el trabajo en conjunto introdujo un sustento científico a la forma de conocer y trabajar con la colección, de tal modo que lo ha convertido en una herramienta pedagógica para los fines de enseñanza de la Historia prehispánica de la región en la escuela y la localidad (Juvenal, 2015). A pesar que no ha sido el único responsable a lo largo de la existencia de este espacio, vemos a través de su labor que recibir la responsabilidad o convertirse en el encargado del mismo significa la creación constante de acciones que garantizan la satisfacción de necesidades en pos de cumplir la aspiración que involucra albergar este espacio museístico dentro de la escuela. En estas acciones un aspecto fundamental fue y es la libertad de acción que los docentes han recibido de parte de la dirección escolar para trabajar tanto en su organización como con los temas a tratar en el y su vinculación con los temas curriculares. Por encontrarse dentro de una entidad superior, en este caso la escuela y la congregación, el espacio museístico no ha sido dotado de personal o un cuerpo administrativo independiente. Entonces, se soporta dentro de la estructura principal mediante la figura de una de responsabilidad directa y total por parte de un docente quien se encarga de mantener sus funciones y gestionar su marcha. En ese sentido asume el rol de agente cultural. La dirección escolar dota a este agente de soporte y apoyo que fundamental y materialmente se concentran en lo logístico y en recursos económicos. Es decir, en el mantenimiento de las condiciones óptimas tanto la sala de exposición como el depósito en que se resguarda el 70% de la colección y entregar recursos económicos esporádicos destinados principalmente a la compra de materiales básicos para la conservación de la colección. Tanto la condición estructural como presupuestal también son dos condiciones determinantes que moldean y que se expresan en las acciones del docente. 112

119 La mirada del docente sobre la importancia que le reconoce a los museos en la comunidad por contribuir a la identificación con el pasado para proyectar un futuro, se expresa de esta forma: Conociendo su historia van a querer más a su pueblo, se va a identificar más con historia y, quizás también, van a poner en práctica ciertas enseñanzas, valores, que nos han transmitido los antiguos pobladores, para tratar de comprender el presente y tratar de mejorar la calidad de vida en diferentes aspectos. (Ramírez, 2015) Haciendo eco de esta visión que representan los museos, y en congruencia con el acuerdo con el Proyecto Norte Chico, sus acciones y los objetivos que se ha planteado se concentran en desarrollar tareas para lograr condiciones óptimas de conservación y mantenimiento de la colección y la exposición. El contacto establecido con el Proyecto Norte Chico le ha brindado la oportunidad de conocer a profesionales dedicados tanto a la arqueología, a la conservación y a los museos, entre otros, quienes han apoyado de manera desinteresada en la conservación de la colección, asimismo ha permitido el intercambio de experiencias y su capacitación para identificar y desarrollar labores especificas relacionadas al quehacer en el museo. Sus demás acciones se orientan a conseguir recursos para la conservación y difusión en medios locales y regionales. Esta acción la realiza periódicamente mediante campañas entre la comunidad educativa y la localidad de Paramonga para la obtención de donaciones de materiales básicos para la conservación de los objetos de la colección además de materiales para la difusión. A una buena parte de su experiencia dentro del museo y su manejo, se ha sumado la vinculación con Proyecto de Red de Museos del Norte Chico. El docente reconoce y destaca el apoyo del Dr. Henry Marcelo a través de los años, pues él ha generado un intercambio de conocimientos además de propiciar que los estudiantes universitarios conozcan este museo, participen en su difusión o en el desarrollo de trabajos de investigación sobre la colección. Aunque, finalmente, subrayó una falta de integración cabal entre los distintos espacios y agentes que pretende articular la red (Ramírez, 2015). Esta desconexión se hace palpable en la falta de contacto con otros espacios museísticos de la localidad; por ejemplo no existe relación de ningún tipo con el más próximo, el Museo Arqueológico Vichama perteneciente a escuela Fiscalizada N ubicado en el mismo distrito. Al igual como sucede con el personal del museo universitario, no existe una afiliación en asociaciones u otras agrupaciones museológicas, como por ejemplo a la Asociación de Museos y Gestión Cultural o al ICOM-Perú. La razón principal de ello fue adjudicada a la falta de recursos para la inscripción. Aunque, los agentes reconocieron que la afiliación es necesaria para ellos debido a los beneficios que conlleva 113

120 como por ejemplo mantenerlos en contacto con otros museos, especialistas y estar informados sobre las novedades y actividades formativas. Al hilo de ello, si bien es notable que en ambos espacios museísticos se reconoce esto, tienen el concepto del Consejo Internacional de Museos (ICOM) como referente pero no de forma explícita u oficial. En ambos, espacios se introducen y remarcan aspectos particulares y sensibles sobre el patrimonio arqueológico de la región, tal como su defensa en contra del saqueo o bandalismo, su divulgación y su empleo en beneficio de la enseñanza de la historia. Con respecto al quehacer museológico, es el mismo docente quien conduce parte de las funciones o actividades específicas que dan vida al museo. En particular, por los aspectos organizativos mencionados relacionados a su gestación y trayectoria. Funciones como adquisición, investigación y conservación se nutren eventualmente mediante la participación y colaboración de profesionales y especialistas en la materia. Las funciones más destacadas son la difusión y el aspecto educativo dirigido a la escuela y a otras instituciones educativas de la región. La escuela está comprometida a no adquirir objetos arqueológicos o promover su obtención mediante recolecciones en sitios arqueológicos. Al interior, pues, se ha concienciado de que estas acciones son formas de sucitar el daño y vulnerar el patrimonio. Después de la apertura en 2005 y hasta la fecha, este espacio museístico se ha convertido en un receptor de donaciones pero de forma excepcional. La pauta seguida es no fomentar la recolección por ningún medio. Esta restricción marca un cambio en la forma inicial que se formó la colección. Además es coherente con la lesgislacion patrimonial que protege los bienes culturales de la nación (Ley de General del Patrimonio Cultural de la Nación N 28296). A la misma vez, es consecuente con los recursos y posibilidades que puede brindar el museo a los objetos arqueológicos. Parte de este compromiso con la protección del patrimonio es la responsabilidad legal que este agente buscó y logro materializar siete años atrás. A finales del 2009 la colección fue inscrita y reconocida por como perteneciente al Patrimonio Cultural de la Nación y se encuentra bajo custodia legal de la escuela. Ello ha conferido de una mayor responsabilidad a la vez que ha sumado su compromiso, por parte de la escuela, con respecto a la protección de la colección [24]. Las obligaciones que tienen las personas o instituciones (privadas o públicas) que poseen bienes culturales (patrimonio), según la ley N 28296, son registrarlos, protegerlos (investigar, difundir, etc.), conservarlos adecuadamente, evitando su deterioro o destrucción; las negligencias acarrean responsabilidades administrativas (multas, incautaciones, decomiso), civiles y penales. Visto lo que conlleva esta responsabilidad, la preocupación por las condiciones de conservación de la colección es una constante. 114

121 La colección está conformada por 265 objetos arqueológicos que cronológicamente datan del periodo conocido Horizonte Medio (500 años d.c años d.c.) e Intermedio Tardío (1000 años d.c 1470 años d.c), consistentes en diversos artefactos de madera, textiles, vasijas cerámicas y la momia de un niño. Corresponden a los estilos más representativos de la región: Huaura y Pativilca, los cuales resaltan particularmente por las representaciones escultóricas e iconográficas de flora, fauna y personajes míticos. Alrededor del 30% de la colección se encuentra expuesta en una pequeña sala de exhibición y el restante 70% se encuentra almacenado. Un aspecto favorable para la colección es que desde el 2005 cuenta con un registro e inventario actualizado y completo, que le ha valido para planificar tareas, controlar su manejo para préstamos en exposiciones temporales realizadas en otras provincias y para su estudio para los investigadores que lo soliciten. Además, conforme a su organización, recursos y el acuerdo establecido con el Proyecto Norte Chico, la colección trata de mantener su constitución actual. Por ello, no se ha desarrollado más labores de recolección de objetos y excepcionalmente la escuela ha recibido donaciones después del año Dadas las condiciones en cuanto al personal, en la medida que el docente ha detectado problemas o amenazas en la conservación de los objetos, ha recurrido a la gestión de acuerdos para asesorías y el trabajo de especialistas en conservación para el tratamiento de la colección. En general el estado de conservación de los objetos es estable. Sin embargo, las salas y el depósito requieren de mejoras. Ambos carecen instrumentos para evaluar las condiciones medioambientales. En especial, el depósito es un área en condiciones precarias (p. ej. carece de estantería, equipamiento de seguridad); es compartido con el mobiliario escolar, lo que lo hace un lugar continuamente visitado y que deja expuesta a la colección a manipulación y riesgos constantes. Con estos factores, no es de esperar que la estabilidad de la colección se mantenga. Es necesario ir más allá de las tareas a corto plazo, que por ejemplo involucren el control periódico por medio del compromiso de un responsable que evalué y pueda trabajar o establecer los requerimientos para realizar intervenciones a tiempo. Después de todo, es necesario contrarrestar los factores negativos que pueden alterar la integridad de los objetos y la posibilidad misma de estudiarlos y volver a recontextualizarlos en el museo. Con respecto a las investigaciones especializadas, este un aspecto que menos se ve favorecido. En este caso no se desarrolla dada la naturaleza del manejo y los recursos con que cuenta este espacio museístico. La disponibilidad de la colección a los investigadores ha permitido en años recientes nutrir de algunos conocimientos al docente sobre la colección. Entre 2010 y 2012, el conjunto cerámico del Estilo Huaura de esta colección fue analizado por investigaciones independientes de los arqueólogos, Elizabeth Cruzado y Naotoshi Ichiki [25]. También se promueve el intercambio y difusión con las investigaciones de la 115

122 región por medio de conferencias periódicas realizadas en la escuela a cargo de arqueólogos y docentes quienes exponen en torno al desarrollo cultural e histórico en la región, sus proyectos de investigación y sus aportes a la historia regional, la comunicación, la arqueología y la museología dentro del proceso educativo. Desde que fuera constituyéndose la colección se le albergó en una pequeña sala. Se trata de un antiguo taller de clases que fue adaptado precariamente para su almacenamiento y exposición. Es un ambiente pequeño (100m2) construido con material noble, sin subdivisiones internas, cuenta con instalaciones eléctricas y de seguridad, amplias ventanas para iluminación natural. En el 2005, se mejoraron algunas de estas condiciones, se implementaron vitrinas de madera y vidrio acondicionadas para una exposición producto del trabajo entre el docente y los miembros del Proyecto Norte Chico; en ese momento, la mayor parte de la colección que no forma parte de la exposición fue albergada en un depósito adyacente a la sala. El guión de la exposición fue desarrollado partiendo de las características y posiblidades de información que brindaba la colección, con miras a vincularlas al desarrollo de las clases de historia, pero también se dejó paso a que otras materias como el arte o la geografía puedan vincularse a este espacio. La exposición se denomina Norte Chico: Riqueza prehispánica y nos introduce por una clasificación cronológica y estilística local, recalcando la periodicidad de la colección. En ella se presenta la historia de la creación de este espacio, una campaña contra el huaqueo o tráfico de bienes culturales que muestra los efectos negativos de esta actividad en el patrimonio y, fundamentalmente, resalta diversos aspectos tales como el entorno (flora y fauna), la producción textil y alfarera, la concepción de la muerte y las representaciones iconográficas y mitológicas de la región. Conjuga estos elementos y busca mostrar que son el producto de la interacción de los grupos prehispánicos con su territorio y entre los grupos asentados en él. También, se recalca el personaje de Vichama como parte del mito unificador y de creación en la región; la representación iconográfica en una vasija cerámica de la colección es tomada como alusiva al personaje y se ha constituido en el ícono o emblema del museo escolar (Anexo 1, Ficha de registro 5). Las actividades más desarrolladas se vinculan a la difusión y se relacionan a la promoción de este espacio y a la protección del patrimonio arqueológico. Localmente, el docente convoca y difunde dentro de programas de prensa (web, radio y televisión). Asimismo, por su vinculación con la red de museos y el contacto con el Dr. Marcelo, recibe apoyo y difusión en diversos medios de la región [26]. Como se ha mencionado, también promueve los estudios e investigaciones arqueológicas que se realizan en el distrito 116

123 o la región, que en especial tengan vinculación con la temática de la colección. Específicamente se realizan seminarios y conferencias en la escuela. En el campo educativo, los contenidos temáticos del curso dictado por el docente son vinculados y desarrollados con la exposición y la colección como material didáctico para la enseñanza de la historia y geografía de la región. Tanto exposición como colección se tornan en ejemplos de aspectos relacionados procesos de una escala mayor territorial (nacional) en el desarrollo cultural y social. Además, se liga a la historia regional con los ejemplos sobre las características de la presencia de los pobladores y su medio en época prehispánica. Dentro de ella se ha sumado de forma referencial con el soporte cronológico- la trascendencia de las evidencias obtenidas partir de los proyectos desarrollados en Supe y demás valles del Norte Chico sobre el origen de la civilización en los Andes peruanos (Marcelo, 2015; Ramírez, 2015; Ruíz, 2015). Lo más resaltante es que más allá de ejemplificar con la exposición y los objetos, ha creado algunas alternativas para incentivar el aprendizaje. Pone a sus estudiantes en el rol del investigador. De esa forma, los hace partícipes en la construcción de los diversos temas que se estudian en las materias. Esta referencia particularmente describe cómo emplea esta estrategia en la enseñanza: En el tema [expositivo] La muerte de los antiguos pobladores, lo tomo como ejemplo para explicar la religión y la muerte, a partir de los fardos, la posición fetal en que enterraban a sus muertos les hago ver e investigar cómo y en qué otros lugares del mundo los hombres comienzan a tener idea de que cuando uno muere, este tiene vida en otro mundo. Entonces [los alumnos] relacionan la forma de enterramiento [fetal y/o momificada] que vemos con la posición en que ellos nacían, en la que nacen todos los seres humanos. Entonces nos acercamos juntos a una explicación, visión o creencia de la vida después de la muerte. Yo mismo tomo estos temas del currículo y los adapto para desarrollarlo en el museo. (Ramírez, 2015) Otra estrategia es mediante la participación de ellos en el museo, como una forma de alimentar el vínculo entre los estudiantes y el patrimonio arqueológico. El docente selecciona y capacita estudiantes que durante el desarrollo de las materias demuestren especial interés por la historia, arqueología o por el museo mismo, para que se desplieguen como guías en el museo. Los estudiantes guías son seleccionados de diversos grados del nivel secundario, son preparados por el docente en cada uno de los temas que se exponen en la sala y realizan guiados cuando estudiantes de otras escuelas o diversos grupos visitan las instalaciones. Esto que puede resultar singular, resulta en el fondo algo significativo ya que origina, refuerza y abre en cierta medida el interés y las capacidades de estos estudiantes por las ciencias sociales o por la comunicación, propiciado desde ese primer encuentro con el patrimonio. Este espacio museístico abre sus puertas a estudiantes de otras escuelas del distrito y de la región, así como al público en general. Con el apoyo sostenido por la difusión en radio, televisión y periódicos, este 117

124 espacio museístico recibe una media anual de 200 visitantes. Ya que no es un espacio que tiene a disposición plenamente de guías o personal, y que depende de la disponibilidad del docente y sus estudiantes para el guiado, las visitas son concertadas y programadas previamente. En este sentido, las explicaciones de los alumnos por medio del guiado se restringen al contenido de la exposición. Otros materiales didácticos, como sucede en el museo universitario, no han sido diseñados o complementan la visita Diagnóstico actual El estado actual de ambos espacios museísticos representa y personifica el quehacer museológico y la gestión conducida por sus agentes principales. Atraviesan múltiples dificultades y carencias identificadas a lo largo del acercamiento a cada uno de ellos. En gran medida, nuevamente nos asomamos a las mismas dificultades detectadas en los diagnósticos de museos de la década de los 80. En ellos se exponía una situación crítica en términos de personal, recursos e infraestructura, enraizada en una falta de políticas museológicas y una visión integrada de los museos y el patrimonio en el país. Las principales debilidades se agrupan en torno a las actividades del día a día. Las acciones como adquirir, conservar, estudiar y exponer el patrimonio se realizan con carencias. Estas se concentran en la ausencia del personal capacitado o especializado y organizado para realizar las diversas actividades, de presupuestos que solventen a tiempo sus actividades, de orientación de las prácticas que permitan la sostenibilidad de estos espacios independientemente de las instituciones que les han dado vida. Sin una definición explicita del rumbo a seguir acompañadas de acciones dentro de esta estructura mayor, las dificultades se acentúan. Estos espacios no alcanzan a configurarse como instituciones u organizaciones plenas; aspecto que es mucho más evidente en la escuela. Al encontrarse dentro de una estructura mayor, esta suple la constitución orgánica y regula en alguna medida las necesidades. Sin embargo, para el caso del museo universitario la creación y reformulación de su normatividad a través del tiempo va creciendo y alimentando favorablemente su autogestión, sin desvincularla de la entidad universitaria que le ha dado vida. El desarrollo del quehacer museológico en estos espacios dista de una definición teórica del museo, tal como es la definición más conocida y difundida establecida por el ICOM. Sin embargo en ellos operan los fines que persigue el museo, en ese sentido teórico. Guardan un compromiso vinculado a su medio social y patrimonial. Estamos ante espacios museísticos y sus agentes culturales que los definen como espacios 118

125 de comunicación patrimonial y educación. Lo cual se entiende en estos espacios son medios para la enseñanza de la historia regional, la identificación con el pasado y la protección del patrimonio material e inmaterial; además, de comprometer en ellos cierta transformación de lo debilitado del tejido social (por la discriminación, la delincuencia). Para ello, el quehacer se respalda constantemente en las acciones de los docentes que los perfila como agentes culturales. A través de sus acciones, se observa que estos agentes conocen y tienen un compromiso con su organización institucional, optimizan las condiciones de los espacios y la colecciones dentro de las posibilidades y oportunidades de recursos con que cuentan, planifican y formulan tareas y proyectos para el corto y mediano plazo que se concentran en la sostenibilidad y sustentabilidad, reconocen e identifican las necesidades (culturales, sociales) de su localidad y región y las tratan articular con el patrimonio para mejorar esas condiciones, reconocen sus propias limitaciones y reconocen las capacidades de otros agentes y profesionales, se rodean de otros agentes para intercambiar experiencias y acrecentar su capacitación en el campo del patrimonio arqueológico y los museos. Estos aspectos señalados se ejemplifican en dos dimensiones que se entrelazan en el día a día de los museos. Por un lado, en lo que a la gestión se refiere, las acciones de estos agentes propician la participación de otros agentes o profesionales, como investigadores que nutren la investigación y conservación de las colecciones, planifican y desarrollan estrategias de sustentabilidad y sostenibilidad como la Red de Museos, institutos de investigación (Indecur) o patronatos (Hombre tatuado) y promueven un mayor sentido de participación de la sociedad mediante la difusión de los espacios. Por otro lado, en lo que al quehacer museológico se refiere, se destaca su aproximación al patrimonio arqueológico que va más allá de la recurrencia tradicional de la enseñanza de la historia a través de propuestas cronológicas que explican el desarrollo cultural o de las usuales interpretaciones funcionales de los objetos que destacan de las sociedades prehispánicas, por ejemplo, su conocimiento del medioambiente o el desarrollo tecnológico que alcanzaron (textilería, alfarería). Estos agentes interpretan y articulan las colecciones a través de los mitos prehispánicos, propician una construcción de conocimientos por medio de la investigación escolar y fomentan el desarrollo de capacidades con los estudiantes guías. El museo visto desde las acciones de sus agentes no solo busca desarrollar un conjunto de funciones programadas, no se basa plenamente en una exposición inamovible, o en un afán de poseer una colección de objetos antiguos. La idea del museo desde sus agentes, en la práctica, busca estimular y la conexión de las personas con su patrimonio local y regional, haciendo puentes entre el presente y el pasado para mejorar las condiciones de su entorno. 119

126 Las principales fortalezas se encuentran tanto en el patrimonio que custodian como en la habilidad innata de sus agentes para gestionarlo. El reconocimiento actual del potencial arqueológico de la región, por medio de los estudios sobre el Origen de la Civilización Andina establecido en el periodo Arcaico Tardío, ha acentuado el sentido y valor histórico tanto de sitios como de colecciones, a la par de su preservación. El desarrollo de proyectos con la participación de arqueólogos y otros especialistas afines a esta profesión y al campo de la conservación y la Historia en la región es aprovechada por estos agentes para propiciar conexiones con estos profesionales, aproximarse a los aportes científicos sobre sus investigaciones, sobre el patrimonio y los museos. La principal debilidad es la condición vulnerable en que se encuentra el patrimonio, aún dentro de estos espacios. En el transcurso de los últimos años, en cierta medida, se ha venido favoreciendo su situación mediante la realización de inventarios o de puntuales acciones de conservación. Sin embargo, hace falta una acción programada en el largo plazo que asegure su conservación integral, la cual puede ser canalizada por medio de la estrategia en red propuesta por Marcelo. Y, que en la práctica inmediata, requiere del establecimiento de mejoras básicas en la infraestructura que los alberga y de protocolos para su manejo adecuado. Han sido vitales las voluntades de los diversos agentes involucrados en los espacios museísticos. Sin embargo, sus acciones descansan en plazos cortos y en soluciones coyunturales. Acciones de largo plazo y planificadas al interior de cada una de las instituciones que albergan y mantienen estos espacios deben propiciar el hacia dónde y cómo se conectan sus finalidades entre ambos. En ese sentido, deben apelar a co-crear un espacio entre autoridades escolares, docentes, estudiantes e investigadores. Otra estrategia en una escala mayor visualiza la situación de los espacios, las colecciones y en general el patrimonio de la región, el denominado Proyecto Red de Museos del Norte Chico. Esta tiene dos apuestas, dotarlos de sostenibilidad y sustentabilidad. Para ello, buscará la participación de agentes como patronatos de defensa del patrimonio, financiados por el gobierno regional y bajo la coordinación del museo universitario. Pero, aún se constituye en una estrategia en formación, que en el corto plazo debe lidiar con las condiciones actuales y necesidades del universo museístico regional. Desde una panorámica nacional, dentro de los actuales lineamientos de política cultural del patrimonio (Ver Lineamientos de Política Cultural , 2012) se reconoce y promueve la participación de este tipo de agentes, así como la de una mayor articulación que deben tener con organismos del Estado (Ministerio de Cultura, gobiernos locales, gobiernos regionales) para crear acuerdos sobre la protección, salvaguarda, uso y difusión del patrimonio. Es un canal óptimo en el cual se pueden anclar estrategias 120

127 como la Red de Museos o proyectar nuevas estrategias similares o congruentes a ésta. Pero más allá del canal óptimo, se necesitan las acciones en la práctica. En ese sentido, en principio, dentro de estos lineamientos se tendrían que considerar y reconocer la situación de los museos a nivel nacional y las prácticas y experiencias de sus agentes con el patrimonio. Esto se ha esbozado, en el Norte Chico, en las múltiples tareas y estrategias con el patrimonio arqueológico desarrolladas por diversos agentes, principalmente ligados a la docencia. 3.2 Reflexiones en torno al quehacer museológico en el Norte Chico Generar una reflexión global sobre el quehacer museológico a lo largo de una trayectoria un poco más de de cuarenta años nos lleva necesariamente a considerar tópicos vertebrales. Ellos son fundamentales y transversales en la configuración del panorama museístico. Estos son tanto el patrimonio arqueológico de la región como los agentes culturales que sostienen y nutren el quehacer en los espacios museísticos, tal como se ha ido conceptuando y caracterizando en el capítulo 2 y en la primera parte de éste. En ambos tópicos se desprenden diferentes aspectos que se han mantenido articulados o en contacto directo. Dentro del primero se circunscriben las investigaciones científicas, su condición vulnerable por la depredación y saqueo, el desarrollo del turismo cultural en la región y el aporte de los arqueólogos sobre el quehacer museológico y la historia regional. Dentro del segundo, opera el rol, acciones y estrategias que ejercen los docentes, arqueólogos, autoridades, entre otros agentes, para conducir las tareas especificas dentro de los espacios museísticos Ya nos hemos aproximado a las palabras y acciones concretas de agentes culturales, de docentes como Marcelo y Ramírez, que dan muestra de la situación y su experiencia en el manejo de los espacios museísticos y el patrimonio que tienen bajo su responsabilidad. En torno a la reflexión se irán sumando dos voces que se incorporaron previamente de forma referencial. Se tratan de arqueólogos que participan en el campo museológico desde su profesión, el Dr. Arturo Ruíz quien ha trabajado por más de 45 años en la región y el Lic. Mario Advíncula quien fue parte del equipo de investigadores del Proyecto Arqueológico Norte Chico, proyecto que ha desarrollado y promovido trabajos colaborativos en colecciones y museos de la región (Ver Anexo 2, Entrevistas 2 y 4). Sus voces acompañan el intento de desarrollar una perspectiva del crecimiento, características y futuro de este particular y representativo universo museístico. 121

128 El origen de los museos en el Norte Chico desde fines de los 70 y el incrementos de estos espacios durante los años 80 puede entenderse como una ruptura contra el centralismo cultural, social y político de la capital. Sin embargo, tampoco puede dejarse de lado que estos museos por si mismos pudieron replicar el museo en el sentido tradicional, como lo planteó Castrillón (1986; 2014), para legitimar su historia local o regional haciendo uso del patrimonio o colecciones de objetos reunidos para ese fin. Es decir, tratando de mostrar con los objetos el pasado como un hecho congelado. En general, en el Norte Chico bajo la denominación de Museos los espacios han encontrado una formula que, en efecto, les permite o legitima el resguardo de objetos arqueológicos y su difusión. Pero son espacios en los que no solo se busca reproducir la cultura como un hecho del pasado y sin implicancia en el presente, también en los últimos tiempos- se encuentran experiencias que muestran que son espacios donde el patrimonio tiene relación con el presente y puede contribuir a mejorarlo. En estos espacios, que en sus origenes solo eran o podían ser desarrollados únicamente por académicos, investigadores o especialistas autorizados, han hecho su ingreso diversos agentes cultuales (docentes, autoridades municipales, patronatos) que son los que precisamente han dinamizando la forma de concebir al museo dentro de un contexto particular como el Norte Chico. La aparición de las Casas-Museo como el Museo Bolivariano de Pativilca y el Museo Monumental de Huaura fueron impulsadas desde el Estado peruano. Son las principales y escasas manifestaciones desde la política para incentivar la creación de museos en esta región. Esencialmente su origen se liga a la conmemoración del aniversario de la Independencia y de su consolidación en América Latina. Los decretos que los declaran como Monumentos y Museos, han sido el binomio empleado constantemente el Estado para blindar el patrimonio contra el expolio al que está sometido. Son el intento por conservarlos y difundirlos. Estas son nociones esenciales que acompañan a estos museos, tal como se evidencia en la misma trayectoria del Museo Nacional. En los inmuebles opera su conversión a Monumentos Históricos, inherente por el episódico paso de los próceres de la Independencia, José de San Martín y Simón Bolivar. El ejercicio museográfico ambienta el funcionamiento de los inmuebles en el momento en el que los próceres los ocuparon, resaltando su visualización (evocación) sobre una conceptualización, lo cual los aproxima a un sentido de monumentalización. Actualmente, una aproximación científica en estos inmuebles es casi ausente, a la vez que no se encuentran por sobre su valor como documentos históricos per se. Tanto en los municipios, responsables de las Casas-Museo, como en otros junto a sus respectivas autoridades, se viene observando cierta preocupación por proteger el patrimonio arqueológico desde los 122

129 espacios museísticos. Por ejemplo, en los últimos años en estas casas, se han ido desarrollando exposiciones que destacan el patrimonio arqueológico de sus localidades. Antes de esto, los objetos arqueológicos -procedentes de donaciones o incautaciones- se mantuvieron en estos inmuebles, haciendo de ellos lugares o centros de acopio. Hace no más de diez años de ese acopio inicial se pasó a la instalación de salas y el desarrollo de exposiciones museográficas que parten desde lo descontextualizado para dar sistematización al conjunto de objetos. Este cambio, en cierta medida ha sido el aporte de la nueva ola de investigaciones arqueológicas que ha llevado diversos especialistas a la región, además de arqueólogos, con formación en conservación y en museología con los cuales las autoridades municipales establecieron alianzas estratégicas para registrar e incorporar las colecciones a los museos. La situación de depredación del patrimonio arqueológico no es reciente, ni se ha detenido por la promulgación de decretos estatales o la legislación patrimonial que prohíben su extracción. Esta situación es constante. En el caso del Norte Chico la cantidad y diversidad de sitios arqueológicos es enorme y su depredación es afrontada desde distintas canchas. De un lado, desde la arqueología se propició que en 1987 fuera fundado el primer museo arqueológico en el campus de la primera universidad regional, en el que se impulsó la conservación del patrimonio en resguardo y del que se hallara en peligro de perderse por el saqueo. Por otro lado, en los distritos de la región se han ido formado Patronatos de Defensa del Patrimonio Cultural constituidos por agrupaciones de ciudadanos con profesiones ligadas a diversas disciplinas (historia, antropología, arqueología, entre otras) y/o sensibles a al cuidado del patrimonio. Sus esfuerzos se concentran en la difusión de las investigaciones desarrolladas en la región, concienzar sobre impacto negativo del saqueo, denunciar estas delitos contra el patrimonio y establecer puentes de dialogo con los gobiernos locales para promover la protección del patrimonio cultural de sus localidades. El saqueo o huaquería complementa/ba la economía de las poblaciones dependientes de las actividades agroindustriales que tienen sus centros en los distritos localizados en la franja costera (Paramonga, Huacho, Huaura, Chancay); estas poblaciones se conforman por quienes tienen arraigo en las localidades y por grupos flotantes (procedentes de las provincias aledañas), los cuales dinamizan las actividades económicas y sociales la región. También, las invasiones populares a las zonas arqueológicas para la construcción de viviendas y la recolección de objetos de sitios arqueológicos o de parcelas agrícolas, son muestras de los factores de vulnerabilidad del patrimonio. Tener un objeto arqueológico en casa es visto como algo común o frecuente (Marcelo, 2015), hecho que ha trascendido a las escuelas, sea por recibirlas como donaciones hechas por parte de los padres de familia o por las campañas de excursión organizadas en las escuelas para recolectar estos objetos. 123

130 Esta polémica obtención de las colecciones ha dado paso a la creación de espacios museísticos en la región. Desde fines de la década de los 80 comienzan a aparecer, principalmente en escuelas y municipios, espacios en los que se reunian y mostraban diversos objetos arqueológicos descontextualizados. La ausencia del procedimiento científico, sistemático y riguroso de extracción constituye una perdida del valor contextual e informativo de los objetos, a la vez que entra en contradicción con los propósitos de la institución museística bajo las cuales se les reunía. Por entonces, su exhibición detonaba una función de estos espacios como vitrinas del pasado ; fue una forma de desacralizar el acceso al patrimonio y al conocimiento del pasado que solo los académicos ostentaban con la creación de museos o exposiciones. En el campo académico, las investigaciones plasmaron sus resultados en publicaciones de difusión científica más que de divulgación [27]; algunos patronatos y proyectos arqueológicos en marcha, como los del Dr. Ruiz, desempeñaron el papel de divulgadores de la arqueología local apoyados por los medios masivos de ciudades económicamente activas como Huacho, Barranca y Huaura. La creación del museo universitario en 1987, es la expresión de una de las primeras zonas de contacto entre el campo científico, el patrimonio arqueológico y la población. Después de la convulsión social causada por el conflicto armado interno de los 80 y 90, la actividad arqueológica volvió a germinar en gran magnitud desde mediados de los años 90, y se han vuelto a restablecer canales aún incipientes entre los académicos y la ciudadanía por medio del patrimonio. Esta primera apropiación material del patrimonio de los años 80 dentro de la región ha transitado a nuevos terrenos, particularmente por la dinámica que ha tenido la colección arqueológica en la educación, en la enseñanza de la historia y el arte en las escuelas. Con ello, me refiero en particular al conjunto de espacios comúnmente reconocidos como Museos Escolares, cuyo tipo y características es la menos conocida pese a ser un fenómeno reiterativo en la formación de colecciones y la creación de espacios museísticos en el país [28] y cuyas ventajas y dificultades pueden ser analizadas a la luz de lo que sucede en sus contextos y con experiencias latinoamericanas similares. En contraste con lo que sucede en el país, en México se creó el Programa de Museos Escolares y Comunitarios [29] desde el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) -entidad equiparable al Ministerio de Cultura peruano-. En México este programa trató, entre 1972 hasta mediados de los 80, de llevar la propuesta teórica sobre la función social del museo a la praxis. Esta se formuló desde la Dirección de Museos y Exposiciones del INAH, y tenía como objetivos lograr la participación de la población para la protección y conservación de su patrimonio; generar un cambio en relación de la población (público) y su museo en el sentido que este fuera de uso popular; y por último, dotar a las escuelas de material didáctico auxiliares (Olvera, 2008, p.119). A lo largo de los años trabajaron con 124

131 distintos profesionales (museógrafos, diseñadores, arquitectos, educadores) captando y capacitando maestros con interés sobre el tema para lograr que los museos creados al interior de las escuelas continuaran su funcionamiento independiente pero acompañada de asesorías de parte del programa. Algunas de las dificultades y limitaciones que puso fin al programa fueron que los espacios se encontraban en comunidades y escuelas en contextos de marginación (falta de recursos económicos) y la contradicción en que entró con la protección del patrimonio (con el propio INAH y con la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticos e Históricos) al propiciarse la recolección de objetos culturales que los niños encontraban en las parcelas de labor (Olvera, 2008). La formulación de esta propuesta de museo que iba sumando docentes y alumnos para insertarse como una organización dentro de las escuelas, estructural y jerárquicamente era una idea vertical cuya finalidad era aplicarse de manera horizontal en las escuelas. Quizás, un aspecto que rescatar con la experiencia peruana es que la formulación de programas en este sentido tomen como base las inciativas existentes en la práctica y se vayan construyendo de la mano con los agentes que tienen experiencia en el manejo de estos espacios y el patrimonio local. Un aspecto muy significativo que rescatar con la experiencia mexicana es sobredimensionar, analizar y reflexionar los alcances que puede tener este tipo de programas, particularmente en contextos de marginación (social, económica) y en las condiciones de vulnerabilidad en que se encuentra el patrimonio arqueológico. Hacer estos es considerar todas las aristas que implican procurar un mejor manejo del patrimonio y la misión que tiene el museo para con el. En los espacios museísticos del Norte Chico puede reconocerse, al menos en los últimos diez años, que se ha ido afianzando la función educativa desde el patrimonio. La participación de los agentes ha abierto el sentido del museo a un espacio más allá de la conservación y difusión al de un medio para la interpretación. Es decir, al análisis y entendimiento de su historia y su contexto social o cultural a través de las colecciones. Ello, es en gran medida producto del ejercicio educativo realizado por décadas - movido básicamente por docentes- en el cual las colecciones han tenido y tienen una variedad de lecturas (conocimientos). Lo que puede señarlarse como una nueva forma de apropiación del patrimonio por medio de la interpretación. Se suma a ello el reconocimiento de las consecuencias de la depredación, lo cual ha sido otro tránsito importante. La idea inicial con la que fueron concebidos se ha dejado de lado por una apuesta para proteger al no propiciar actividades de recolección de objetos. Además de la preservación se suma la construcción de propuestas expositivas. La aparición, ya mencionada de la actividad arqueológica, en la década de los 90 y 2000 ha movido el interés de docentes, autoridades y patronatos, involucrados en el 125

132 quehacer museológico a interactuar con agentes del campo académico con cierta participación o relación en el campo de los museos. Ello ha movilizado estos cambios señalados. Tal interacción ha sido documentada a principios de los 2000 como resultados de los talleres participativos coorganizados entre el Proyecto Norte Chico y la Municipalidad Distrital de Pativilca. Los talleres fueron el punto de convergencia de una variedad de agentes locales, sus experiencias y visión del campo museístico. Un poco más adelante volveremos a retomar y analizar estos cambios a la luz del quehacer de los agentes. Las investigaciones en el Norte Chico sobre el Arcaico Tardío, periodo también conocido como Precerámico Tardío por la particular ausencia de la cerámica, tuvo sus primeros acercamientos y aportes desde las décadas 60 y 70 a raíz del reconocimiento de los monumentos sepultados a lo largo de los valles costeros [30]. A mediados de los 90, en el valle de Supe, los trabajos conducidos por la arqueóloga Ruth Shady centraron su atención en el asentamiento arqueologico Caral, proponiéndolo como eje o núcleo originario de la Civilización Andina, uno de los escasos focos que se gestaron en la historia de la humanidad. Sus últimos trabajos desplegados en otros asentamiento de este valle y la costa aledaña dan soporte a esta postura e influencia de lo que ha denominado Civilización Caral. Por otro lado, desde el 2002 se dio inicio el Proyecto Arqueológico Norte Chico, conducido por el arqueólogo norteamericano Jonathan Haas y el arqueólogo peruano Álvaro Ruíz, el cual se concentró en los valles de Fortaleza, Pativilca y Huaura. A partir de reconocimientos superficiales y excavaciones en distintos asentamientos precerámicos de estos valles, formularon que la región del Norte Chico fue el territorio propicio por las condiciones medioambientales y geográficas- en el que se gestó el Crisol de civilización andina. A grandes rasgos, la formulación sobre el origen de la civilización plantea que las principales manifestaciones de organización política, prácticas sociales y culturales, tuvieron su inicio en este territorio; las culturas y sociedades prehispánicas posteriores son producto e hicieron uso de este bagaje milenario. Las causas del origen se le atribuye al impulso y desarrollo de una economía, basada en la agricultura y/o la pesca, que permitió sostener a poblaciones con un excedente a la par que éstas fueron diversificando sus tareas, organizadas por un grupo social que alcanzó el liderazgo por medio de practicas rituales y comunitarias (religión, política, etc.) que mantuvieron la unión de estas poblaciones. Sobre las investigaciones que abordan este tema, el Dr. Ruíz Estrada (2015) reflexiona sobre el impacto que han generado: Justamente estos proyectos han puesto sobre el tapete la discusión sobre la civilización, sobre el Estado en los Andes con esas nuevas investigaciones de Caral y de los otros sitios en el valle de Pativilca, entonces a nivel internacional se ha puesto el ojo sobre esa presencia o esa comunicación sobre el desarrollo de la civilización, la gestación del Estado en los Andes. Y todo eso permanece en 126

133 discusión, porque unos tienen una opinión, otros tienen otra, de acuerdo a las investigaciones que han hecho. Más allá del nivel académico, las investigaciones sobre el origen de la civilización han movido en algo a la población, tanto en el conocimiento de su historia como el articular también actividades de tipo turístico (Ruíz, 2015). De modo que la arqueología ha sido un motor no solo para crear museos, y proteger y difundir a través de ellos el patrimonio arqueológico, sino también se ha convertido en los últimos años en el motor del turismo cultural de la región, y ello dinamiza a la población y sus agentes involucrados con el patrimonio. Principalmente, el turismo es un tema sensible a estos agentes (Advíncula, 2015), por su relación con la sustentabilidad y la promesa de desarrollo económico y social de la región. También, producto de su presencia e interacción con autoridades locales, ambos proyectos han introducido sus discursos en los museos, por medio de la creación de los Museos Comunitarios de Supe y Végueta cuyos contenidos desarrollan la propuesta de la Civilización Caral, y con la implementación de la Sala Historia Antigua del Norte Chico en el Museo Bolivariano de Pativilca. En otros espacios museísticos el tema del origen de la civilización ha sido introducido sin el uso de colecciones y afilando hacia el sentido de la antigüedad, la importancia de los valles, y destacando el sitio arqueológico Caral por ser uno de los que mayor cantidad de proyectos, actividades turísticas y de difusión genera en la actualidad en la región. Recordemos que los espacios museísticos en el Norte Chico no han formado parte de un plan o un dirigismo cultural político estatal. Los agentes culturales involucrados con la cultura y patrimonio (docentes escolares y universitarios, autoridades distritales o alcaldes, asociaciones civiles como patronatos, comités pro-museo, arqueólogos y proyectos arqueológicos) han sido y son parte fundamental para forjar el universo museístico en la región. Las motivaciones son variadas, acorde a las profesiones, intereses y perspectivas de estos agentes sobre el patrimonio. Desde sus propias áreas e instituciones han dado vida a diversos espacios museísticos, tales como colecciones, exposiciones museográficas, museos locales, universitario, además de un proyecto de museo. En el Norte Chico el quehacer museológico camina de la mano de sus agentes, de su gestión y visión de museo. El quehacer ha sido entendido y comprendido en la experiencia en torno al patrimonio, echando mano de cierta capacitación en temas museológicos y de conservación. Asimismo, en los últimos años se ha alimentado de la presencia de las investigaciones arqueológicas. Los talleres participativos desarrollados entre el 2003 a 2007 fueron espacios de convergencia en los que se (re)conocieron diversos 127

134 agentes trabajando desarticuladamente en el campo museológico y de la educación de la historia prehispánica regional, que de integrarse podrían ser parte de un mecanismo de gestión ente la existencia de la gran depredación del patrimonio arqueológico (Advincula, 2015). También fue el escenario propicio para que uno de estos agentes presentara una estrategia en red para el manejo y articulación de estos espacios, iniciativa a la que se sumó y apoyó el Proyecto Norte Chico durante el desarrollo de sus labores de investigación. La existencia de dificultades dentro de los espacios son solventadas por ideas creativas particulares asi como integrales, tal como la idea de una red de museos acorde al contexto socio-cultural del Norte Chico. En la práctica, las acciones se sitúan a la consecusión de recursos humanos y económicos para complementar o desarrollar las funciones de conservación, investigación, exposición y difusión. Estas acciones se vuelven cíclicas en tanto que ingresan nuevos agentes a estos espacios y emprenden acciones que parten desde cero. Vuelven a plantearse nuevas exposiciones, a realizar o dejar de lado acciones emprendidas con las colecciones. Esta es quizás una de las mayores dificultades que cuanto a la sostenibilidad (a la par de la sustentabilidad) de estos agentes que la estrategia en red propone subsanar. El potencial del patrimonio arqueológico que constituye la esencia de las colecciones, en gran medida descontextualizado, es tomado en cuenta para construir representaciones y formular diversas aproximaciones interpretativas o diversas lecturas sobre él. Desde el campo científico, principalmente arqueólogos vienen contribuyendo a su sistematización, a situarlos dentro de las variables estilísticas locales y cronológicas. La conjunción de arquélogos y docentes en esta labor ha producido que en las exposiciones se presenten hechos e ideas generales sobre este patrimonio: Fauna y flora prehispánica, concepción de la muerte entre los antiguos pobladores del norte chico, la textilería, entre otros. Algunos casos que ejemplifican esta clasificación y la formulación de exposiciones para representar el pasado, y tienen lugar a inicios del 2000, se dan en las colecciones de la escuela N (Huaricanga), en el museo arqueológico Vichama, en Nuestra Señora del Carmen, en el museo Municipal de Chancay, en el museo arqueológico de Huayto y con la exposición Los Huacos. Aún existe el hacinamiento de objetos que requieren un rescate documental y de su valor intrínseco desde el campo científico. A partir de ello se puede afinar el sentido de la finalidad educativa en la enseñanza formal e informal. Los trabajos colaborativos entre docentes y arqueólogos va fomentado el sentido de la importancia del registro arqueológico, el contexto y la sistematización del patrimonio. Existe en la actualidad la conciencia de preservar y la necesidad de emprender campañas desde dentro de los espacios museísticos. La adherencia de las colecciones al Registro Nacional de Bienes de la Nación, como lo promueve la 128

135 legislación de protección patrimonial, es sintomático de un responsabilidad legal de los acervos. cambio de actitud por ejercer la Es cierto que emerge una cuestión sobre la diversidad de lecturas aplicadas al conocimiento arqueológico. Principalmente porque son voces que no están vinculadas directamente al campo científico, pero que en los últimos años han asumido un rol más activo con respecto al patrimonio de sus localidades. Entonces es inevitable ahondar en pensar en la aceptación y validez de tales conocimientos no científicos. Habría que partir desde una pregunta muy básica dónde se construyen? En los casos analizados a fondo, se construyen desde su vinculación por medio de un ejercicio que los mantiene en contacto con sus estudiantes y con otros posibles públicos del entorno. También se nutren de emblemas regionales, manifestaciones culturales vivas y del mismo conocimiento científico. En ese sentido, buscan generar un vinculo más próximo a la realidad de su localidad y región. Desde el campo de la enseñanza, entorno en el que fluctúan estos espacios, son tomados como una herramienta didáctica para la construcción y estudio de la historia regional. Los criterios clasificatorios y sistemáticos propios del campo científico, las temáticas propuestas en las exposiciones, son parte o base de las muchas posibilidades de lecturas que se puede generar. En este sentido, la comunión de lo metódico ha repotenciado el papel educativo que ejercen y le confieren los agentes a los espacios museisticos. El museo escolar Nuestra Señora del Carmen y el universitario José Faustino Sánchez Carrión pueden considerarse casos representativos de este aspecto. En ellos, se han introducido abordajes que demandan la participación de los estudiantes en el papel de investigadores, además incluyen referentes mitológicos para dar sentido a las colecciones y su relación sobre el origen civilizatorio y la diversidad social y cultural actual por medio de los mitos fundacionales. Un rasgo característico de la iconografía y escultórica de los acervos del Norte Chico no es tanto un complejo grado de abstracción de los personajes o las escenas en que se encuentran, lo es la referencia casi directa que estos tienen con el entorno geográfico, con actividades productivas (agrícolas), reproductivas, y el protagonismo que les hace destacar en diversos objetos (Advincula, 2015). Este rasgo es aprovechado al entretejerlo con la mitología, como se rescata del mito de Vichama, para interpretar la formación de un origen común o fundacional de la región. En este sentido, el reconocimiento de Marcelo sobre las actuales representaciones (teatralizadas) llamadas Vichama Raymi, basadas en el mito prehispánico y que se desarrollan en distritos como Paramonga y Végueta, y su incorporación al museo universitario, busca sumar esta manifestación viva como una estrategia para aproximarse a los distintos públicos de la región. Esto va de la mano con el hecho de que remarca el sentido integral, del 129

136 pasado común, de la región. Es de ese modo que el museo universitario va trascendiendo las paredes del museo para estar más en contacto con la sociedad, situado desde el mismo lado de las manifestaciones culturales vivas. Asimismo, la particularidad de los acervos permite que se desarrolle tópicos de investigación escolar y artística plástica debido a su riqueza iconográfica (Ver Sección de este capítulo). En la región son siete los estos espacios museísticos vinculados a entidades educativas. Sea al interior (para crearlos nuevos espacios o formar colecciones) o fuera de estas, existe un grupo importante de agentes que son los docentes escolares. En estos espacios visitados es notable su preocupación por preservarlos, de salvarlos de la depredación, a la vez de fomentar e incentivar esta práctica mediante campañas o llamados desde las exposiciones. Los docentes son quienes han generado dinámicas de apropiación, quizás sin proponérselo al incentivar desde la investigación escolar una práctica de interpretación de su historia, de sus colecciones, relacionando piezas y personajes con como por ejemplo con hechos o mitos o ligándolas al ejercicio del arte (Ramírez, 2015; Advíncula, 2015). En ese sentido, la aproximación y contacto con arqueólogos, historiadores o profesionales en materia museológica es para obtener pautas científicas con las cuales abordar las colecciones, más allá de las cronológicas o estilísticas. Fuera de las aulas, hay un caso particular comentado por Advíncula (2015) de cómo se manifiesta y desarrolla dicha forma de apropiación patrimonial y la connotación que el museo ha adquirido en el campo educativo. Él refiere que: En el caso del colegio Z-15 de Huacho, es un centro educativo técnico-agrario, ellos buscaron precisamente la información del Museo de Pativilca porque les daba esa posibilidad de entender un poco más allá de la pieza misma, entender por ejemplo técnicas del manejo de recursos, cómo se cultivaba, qué significaban los símbolos ceremoniales más posibilidades de poder interpretar y trabajar temas de investigación con los estudiantes de diferentes materias. Entonces ellos, todos los profesores fueron a hacer una visita al Museo de Pativilca, hicimos una visita guiada. Y ellos a partir de esto hicieron visitas con sus alumnos al museo y generaron investigación en los temas de matemáticas, técnicas agrarias, lenguaje, religión, literatura porque hay mitos también. Entonces ese acercamiento que nació a través de los profesores corresponde a una nueva visión de museos. Desde la noción de conservar y difundir con que nace el primer museo en la región el museo universitario- a partir de investigaciones arqueológicas, reconozco que se han ido sumando o entendiendo visiones particulares sobre los museos, como medios comunicacionales de la cultura regional y como medio didáctico para el estudio de la historia y otros tópicos anclados al contexto regional. En esos espacios no solo se va a escuchar o ver la historia, también se le analiza y se explica desde diversas materias (Advíncula, 2015), lo que les permite entender y/o transformar su comunidad. Lo cual, nos 130

137 lleva a pensar que se destaca la función social del museo. En este mismo sentido, el patrimonio arqueológico está siendo tomado como parte constitutiva y sustantiva para la construcción identitaria. La idea o concepción teórica del museo como una institución permanente, al servicio de la sociedad, con una diversidad de funciones organizadas en torno a la colección, con fines de estudio, educación y recreo [31], en el caso del Norte Chico viene gestándose ligada más a la preservación material de los objetos como documento histórico contextualizados o no- ligada a una finalidad social: educativa porque es susceptible de ser interpretado en varias dimensiones. Con lo hasta ahora visto sobre el universo museístico, se puede considerar que el Museo es el espacio que preserva el patrimonio de la destrucción, permite la construcción de diversos conocimientos (científicos, artísticos) y contribuye al desarrollo de la persona y de la sociedad. La sensibilidad sobre el turismo cultural está vinculad a al impacto que ha generado la arqueología con los estudios sobre Origen de la Civilización Andina en la región, además de que constituye una parte de lo qué es o lo que representan los museos. Es una dimensión que requiere de un análisis más profundo, en el sentido económico y político, pero nos asomaremos ligeramente dado que en varios de los espacios museísticos era notable su situación como promotor de actividades culturales-recreativas. Entonces cabe preguntarse Qué impacto ha generado en la forma que se percibe el patrimonio y los museos a raíz de ese gran enunciado lanzado por la investigación arqueológica? Qué se empieza o debería articularse con respecto al patrimonio arqueológico? En términos de lo que es dentro de un gran proyecto y de largo aliento como Caral y el valle de Supe es en realidad el modelo de gestión que logra recuperar Caral y varios sitios relacionados a esa época. Son sitios excepcionales, con inversiones absolutamente millorarias y justas en sitios con dificultades de acceso que se superaron con la puesta en valor. Existen aún más sitios monumentales y accesibles pero que no corresponden a este periodo ni tienen un porcentaje de inversión. Ello evidencia la falta de una perspectiva territorial en el desarrollo del Norte Chico (Advincula, 2015). El turismo cultural es un tema sensible dentro de la región porque se vincula al desarrollo económico. Moviliza a las autoridades locales y eso se manifiesta en que se convierte en un tema de las agendas políticas distritales y provinciales [32]. Los espacios museísticos adscritos a dichas entidades se convierten también en espacios promotores del patrimonio arqueológico para el turismo. Algunos de ellos fueron creados con la finalidad de crear un polo o esfera turística dentro su localidad. Basta recordar casos como el Museo Municipal de Sayán o la exposición museográfica de Hualmay (Ver Anexo 1, Ficha de Registro 9 y 15) que incentivan la visita y ofrecen paquetes turísticos de visitas a los sitios 131

138 arqueológicos aledaños. No por ello se deja de lado el intento de construcción y exposición de su historia e identidad basada en sus colecciones. El intento político es articular museos y sitios arqueológicos como parte de la oferta turística. Sin embargo, las grandes dificultades se concentran por un lado en la cuantiosa inversión que demanda poner en valor los sitios arqueológicos, y que no se han emprendido en el mediano, corto, ni a largo plazo. Además está la situación precaria de los museos que demanda repotenciarlos. Pese a que los espacios museísticos son considerados como recursos turísticos, tanto los que se encuentran bajo una administración municipal o de otro tipo (escolares, universitarias, etc.), persiste una desarticulación entre estos espacios y los agentes responsables de ellos. No hay vinculación entre los planes de desarrollo turístico (municipales), acompañados con condiciones de mejora por medio de apoyo o incentivos a las colecciones y museos que se encuentran bajo su jurisdicción. Pese a ser alrededor de siete espacios museísticos ligados a municipalidades, en los últimos años solo en dos de ellos se invierte con fondos municipales y del Gobierno Regional, dotándolos de recursos económicos y humanos para la conservación e investigación en estos lugares y en los sitios arqueológicos de sus jurisdicciones. Los casos que muestran esta situación favorable son el Museo Municipal de Chancay y la Exposición Museográfica Los Huacos (Ver Anexo 1, Ficha de Registro 7 y 15). Aunque significativos y con acogida dentro de su localidad, estas iniciativas deberían trascender un cambio de autoridades en los municipios. Hacia dónde se dirigen o qué perspectiva evolutiva hay en estos espacios museísticos? Es inminente que estos requieren cubrir necesidades tanto técnicas como científicas, necesidades que son plenamente identificadas por los agentes responsables de ellos o que han propiciado su creación (Marcelo, 2015; Ramírez, 2015; Ruíz, 2015). Sin la gestión cultural -entendida también como administración- y los agentes, el quehacer museológico y el patrimonio de la región quedaría en una situación mucho más que relegada. Los principales medios y fortaleza con que cuentan los espacios museísticos son las colecciones arqueológicas y sus agentes. Sus cambios continuos o repentinos, conlleva a que los nuevos agentes reinventen sus prácticas y tareas dentro de los espacios. Se suma una situación de desarticulación de agentes que persiguen sin saberlo o desconociéndolo- objetivos similares y generales en torno a la protección y difusión de su patrimonio; esta condición también fue reconocida en los diágnósticos de los talleres participativos sobre Museos arqueológicos e Historia Regional realizados en el 2005 y 2006 (Proyecto Norte Chico, 2005; Del Castillo 2006). 132

139 A lo largo de un poco más de 40 años en el ejercicio del quehacer museológico se han ido sumando logros para la preservación de las colecciones y se ha podido identificar cómo el patrimonio es un medio para la enseñanza, como se ha ido señalando, pero también es notorio que se convive con retrocesos y necesidades recurrentes la vuelta a cero- debido en parte a una falta de institucionalización de las practicas de los agentes. La inclusión de protocolos de manejo y actividades con colecciones podrían constituir pequeños pero significativos cambios para mantener los museos y el patrimonio en condiciones óptimas y estables. También en esta larga trayectoria se destaca un gran aporte para la existencia de los museos como lo es la propuesta de una estrategia que integra a todos estos espacios, la Red de Museos del Norte Chico. Ella va de la mano del liderazgo del museo universitario, bajo la responsabilidad de Henry Marcelo, quien tiene experiencia en el campo museológico de la región y, ello, es reconocido en cada uno de los museos. Es por ello un agente clave en esta estrategia. La red es propicia porque puede conectar a todos los agentes y empoderarlos en la administración y quehacer museológico. La Red de Museos es proactiva y propositiva pues busca cubrir dos necesidades recurrentes: sustentabilidad y sostenibilidad de los museos. En la actualidad, empodera a los agentes, colaborando con ellos para repotenciar el manejo de las colecciones, el tema educativo, museográfico y la difusión de las exposiciones. El funcionamiento de esta red también necesita y depende de la madurez institucional de los agentes tales como los gobiernos municipales, regionales o instituciones educativas (Advíncula, 2015) para sentar las practicas de la red, que eso se traduzca en que si cambian los agentes las acciones anteriores no sean descartadas y que el nuevo responsable vuelva a comenzar de cero. En el futuro, la oportunidad de la red perfila un trabajo en equipo en la comunidad de museos que permitirá guiar y afrontar los desafíos que tienen con el patrimonio, además de promover la intervención de otros agentes (Patronatos culturales, Gobierno Regional, entre otros) para respaldar con recursos humanos y financiamiento los espacios museísticos. En el contexto nacional esta Red puede permitir la conexión con la política y gestión pública mediante la Ley de los Puntos de Cultura promulgada en junio del presente año (2016). Es un canal que permite la conectar con el Estado a través del Ministerio de Cultura. Los lineamientos de política cultural desde el Estado básicamente se han concentrado en promover pero no en concretar varias acciones en el campo general de la cultura. Esta ley fortalece a las organizaciones culturales comunitarias, reivindica el rol de la cultura como elemento transversal en el desarrollo e impulsa la participación ciudadana [33]. En ese sentido, los Puntos de Cultura establece un campo de dialogo con el Estado y permitirá trabajar conjuntamente apoyados con financiamiento, capacitaciones, intercambios, acompañamiento y monitoreo- sin dejar de lado su autonomía. Con todo ello, es el escenario ideal para la elaboración de 133

140 políticas culturales en el que la red de museos del Norte Chico puede contribuir desde la experiencia alcanzada a lo largo de los años por los agentes en cuanto al patrimonio y la museología. Es trascendental la visión de un territorio integral que se puede configurar dentro de los museos, quizás promovido en parte por la arqueología, pese a que hay posturas teóricas contrarias. El sitio arqueológico Caral es un referente importante, también se resaltan sitios similares o de la época dentro de todos los valles de la región. La noción de patrimonio regional la están propiciando estas investigaciones arqueológicas y el hecho de que se están incluyendo aspectos inmateriales de la cultura: el Mito de Vichama, en los museos. En este sentido, al interior y alrededor de los espacios museísticos hay una excelente oportunidad para visualizar y proyectar de manera positiva, esta forma de integración / pasado común que permite el patrimonio, para concienciar, criticar o contrarestar las dimensiones que vulneran el tejido social de la región: discriminación, violencia (Marcelo, 2015; Advíncula, 2015), hasta las mismas causas de depredación patrimonial de la región. 3.3 Conclusiones Por medio del estudio de casos como el museo universitario y el museo escolar, nos hemos aproximado a a la forma en la que se gestionan y realizan las acciones museológicas para con el patrimonio. Las condiciones en recursos económicos y humanos son precarios, dificultan y hacen imposible la ejecución funciones vitales como la investigación o la restauración; es una situación similar a la que se esbozaron en los diagnósticos de museos de los años 80. Ante la situación poco favorable que atraviesan, los agentes responsables de estos espacios, han puesto el énfasis en acciones estrategicas que les permita mantenerlos activos, por ejemplo, mediante la participación de otros agentes: arqueólogos, conservadores. Esta apertura, en el caso del museo escolar, ha propiciado dotar de mejores condiciones a la colección y construir contenidos para una exposición a partir del patrimonio descontextualizado. Además, es notable la construcción de lecturas diversas desde la enseñanza- que se le puede dar y se le da a partir de esa construcción. El caso mencionado por Advíncula (2015) sobre los docentes de la escuela técnica-agraria Z-15, que se acercan a los arqueólogos para prepararse sobre determinadas exposiciones prehispánicas y que, luego, analizan y desarrollan dentro de sus contenidos curriculares dándoles variadas interpretaciones, ejemplifica la forma en que el patrimonio es apropiado dentro de una comunidad escolar. Esto, permite hacer una proyección sobre el futuro de ese patrimonio descontextualizado que se acopia en las entidades educativas y municipios y que puede ser recuperado para la enseñanza de las localidades que conforman el Norte Chico. 134

141 Es destacable el papel que como institución está forjando el museo universitario. Su presencia y antigüedad marca un hito en la región, además de contar con un agente cultural con experiencia y ampliamente reconocido. La existencia del museo está sujeta a los vaivenes políticos de la universidad, pese a ello ha logrado mantenerse a flote durante casi 30 años, en buena parte por el papel que ejerce su fundador y el actual jefe del museo. Son agentes fundamentales que han logrado darle normatividad y acciones estratégicas para traspasar las paredes del museo y acercarse más al público de la localidad, aspecto que también se ha visto favorecido por la salida física del museo del campus universitario y establecerse en el corazón mismo de ciudad de Huacho. Este espacio, tal como el museo escolar, desarrolla estrategias centradas en la función educativa, por medio de las visitas especializadas y el empleo de un mito conocido en la región: Vichama, que es empleado como un hilo conductor para la interpretación del patrimonio. Esta idea partió del trabajo previo que el museo realizó en los años 80 en la región, recogiendo e incentivando representaciones (escenificaciones) que las poblaciones de los distritos realizan tomando como referente este mito prehispánico. Una mirada a la trayectoria del quehacer museológico a lo largo de cuarenta años nos conduce a pensar que no hay quehacer sin gestión, sin los agentes culturales. Se trata de una gestión realizada de forma innata, propiciada por los pocos recursos que es la característica más habitual en estos espacios. Sus estrategias no solo han permitido sumar aspectos favorables a las colecciones, sino que producto de ello se ha establecido una relación más activa con los arqueólogos o investigadores de la región. Una de las mayores apuestas para mantener en óptimas condiciones colecciones, exposiciones, casas-museo, entre otros espacios museísticos de la región, es la estrategia de la Red de Museos. Está pensada en dos ejes esenciales: sostenibilidad y sustentabilidad. Su éxito se ve favorecido por los canales recientemente tendidos para que reciba apoyo desde el Estado, como lo es la Ley de Puntos de Culturas que promueve la autonomía de los agentes en materia cultural y da las condiciones para financiar sus iniciativas. El mayor reto de la estrategia es la integración y el empoderamiento de cada uno de los agentes de los espacios museísticos. Si nos referimos a las condiciones en que se encuentra el patrimonio o colecciones se puede decir de forma generalizada que éstas no son las más óptimas; es notoria la precariedad en la falta de acondiciomiento de las salas y depósitos o del equipamiento para la seguridad. La solvencia en presupuestos, personal y la producción de protocolos para la conservación y mantenimiento de condiciones adecuadas de los objetos y los inmuebles se hacen indispensables en el corto, mediano y largo plazo. Si bien observamos que el estado de conservación la mayoría de colecciones en general es estable, no es de esperar que su situación se mantenga como tal en el tiempo sin una minima acción sobre 135

142 ellos, más allá de la que los agentes procuran brindarles, sobre la infraestructura que los contiene y sobre los controles de seguridad. Es indispensable asegurar su integridad porque no solo se relaciona con los fines institucionales del museo, sino porque fundamentalmente afectan su comprensión y las posibilidades de lecturas y estrategias que los agentes desarrollan por medio de ellas. Como se puede reconocer de la configuración museológica, uno de los cambios más significativos que han operado al interior de los museos es el entendimiento de las consecuencias que causa la depredación. Recordemos que muchas colecciones escolares en parte fueron formadas por donaciones y por recolección de objetos de sitios arqueológicos aledaños a la escuela. Este cambio se observa en el hecho de que tanto escuelas como municipios con colecciones arqueológicas han emprendido campañas en contra del saqueo de sitios arqueológicos o huaqueo (deriva del nombre quechua huaca con que es llamado cada sitio). Asimismo, se han encargado registrarlas oficialmente ante la máxima autoridad en cultura para ser reconocidos como custodios legales. De tal modo que las prácticas de adquisición se restringen a eventuales donaciones. Pero, fundamentalmente, se puede reconocer ahora que el aporte más prometedor para el futuro de los museos y el patrimonio arqueológico en él, se concentra en la capacidad de apropiación que se viene realizando desde la enseñanza, promovido esencialmente por docentes. Las investigaciones arqueológicas en la región desde los 80 hasta la actualidad han contribuido al campo museológico de la región. Producto de ello es la aparición del primer museo arqueológico en 1987, seguido de la proliferación de nuevos espacios y colecciones. Desde los 90 con el desarrollo de investigaciones centradas en el periodo Arcaico Tardío, en el que se despliega el origen de la Civilización Andina y las primeras formaciones, ha generado un escenario propicio para conectar en el campo museológico y patrimonial a los arqueólogos con agentes responsables del manejo de colecciones. Es una conexión guiada por el interés de acercarse a los resultados de las investigaciones sobre la historia de la región, que ha resultado en la participación de los investigadores en el campo museológico de la región. Los contenidos museísticos se han revitalizado y se van nutriendo en este intercambio. Tambien, la arqueología ha sido un motor para el desarrollo del turismo cultural, el cual apenas es esbozado en el impacto que generan en los museos, pero que era fundamental señalar porque es otra arista de la noción que toma el museo en el Norte Chico: Recurso turístico, posibilidad de desarrollo económico. En líneas generales, retomando esta idea junto a la del museo en la región, este se visualiza o proyecta como un espacio que permite resguardar y conservar el patrimonio de la región, tiene la finalidad de favorecer el aprendizaje, el desarrollo social y económico. 136

143 Notas al pie del capítulo 3: [1] La situación de los museos fue una discusión ampliamente desarrollada por diversos museólogos latinoamericanos en una publicación de la revista Museum. La discusión tuvo como eje la reflexión y los avances logrados en los 10 años posteriores a la Mesa de Santiago. Ver: Museum (1982). Museos, patrimonio y políticas culturales en América latina y el Caribe. 34 (2). Revista de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Paris [2] Montreal, L. (1982). cien años de soledad?. Revista Museum, 34(2), [3] Los diversos países de la región [latinoamericana] adaptaron a sus realidades y expectativas estas nociones [animadores y promotores culturales, gerentes y administradores culturales, trabajadores culturales] como también otras [agentes culturales o actores sociales] y conforman su autoconcepción de la actividad cultural. Algunas comunidades y países las preservan hoy con algunas modificaciones. [4] Perú cuenta con un marco legal para el establecimiento del Sistema Nacional de Museos del Estado (Decreto Legislativo Nº 25790), el cual en su reglamento para creación, registro e incorporación de museos a dicho sistema, incorpora la siguiente definición: Se denomina Museo a la Institución que tiene por función principal, conservar, investigar, exhibir y difundir el patrimonio, así como toda actividad que contribuya a enriquecer la vida cultural de la sociedad. Su clasificación según la UNESCO abarca a todas las actividades culturales, regímenes de propiedad o ámbitos geográficos (Reglamento para la Creación, Registro e Incorporación de Museos al Sistema Nacional de Museos del Estado, artículo 2 ). [5] Seminario de Gestión del Patrimonio Cultural y Participación Ciudadana realizado en la ENCRyM, Noviembre del [6] Las personas que fueron entrevistadas dieron su consentimiento y los permisos correspondientes tanto para la grabación y la reproducción por escrito de los contenidos de las entrevistas. Estas fueron documentadas por medio de una grabadora de voz y guardadas en archivos en formato Audio WAV. Asimismo, han sido transcritas en su totalidad y se presentan dentro de la sección Anexos. [7] Adicionalmente, a la recopilación de información se le sumo el registro fotográfico, en la medida de lo permitido por los responsables, acorde a cada tema tratado en el cuestionario. [8] Por un periodo corto comprendido entre junio del 2008 a noviembre de 2009, los docentes Maritza Martínez Loli y Marcelo Zúñiga hicieron un paso rápido por la jefatura del museo y lograron mantener en funcionamiento sus salas. En diciembre del 2009, el Dr. Marcelo se reincorporó al museo. [9] La normatividad está constituida por un conjunto de dispositivos que también son mencionados y descritos a lo largo del desarrollo del capítulo. Estos son: Ley de Patrimonio Cultural de la Nación N 28296; Decreto Ley 25790, Norma A.140, Reglamento Nacional de Museos; Estatutos de la UNJFSC; Planes estratégicos , UNJFSC; Decreto Legislativo N 1057 que regula el régimen especial de contratación administrativos de servicios; Resolución Jefatural N Instituto Nacional de Cultura, 22/04/1993/, que declara la intangibilidad del local que ocupa, sus gabinetes de trabajos y los restos culturales que conserva; Resolución Vice-rectoral Nº II-VRAC-06, Reglamento del Museo; Manual de Organización y Funciones del Museo; Resoluciones anuales de la UNJFSC sobre la programación de actividades del museo. [10] La Resolución Nº CU-COG-UNJFSC, con fecha del 25 de octubre del 2010 indica al el Dr. Arturo Ruíz Estrada, profesor emérito, como asesor Ad Honorem en Investigación Arqueológica del museo. [11] El presupuesto recibido por el museo en el 2014 ascendió a USD $10,360; normalmente es el promedio que ha recibido entre el 2011 a Con ello, esencialmente se puso en marcha el registro y conservación de la colección, mantenimiento de la infraestructura (sala de exposición y almacenes), realización de las actividades de comunicación como la publicación de la revista de difusión y la realización de eventos culturales del museo (conferencias, charlas) (Marcelo, 2014; 2015). 137

144 [12] Dos ejemplos son los convenios suscritos mediante resoluciones rectorales ( UH y 2014-UH) con Margaret Brown y Allen Rutherford, investigadores extranjeros responsables, respectivamente, de los proyectos de Investigación Acaray y Fortaleza del Cerro Colorado. [13] Ver: ; [14] Es un profesional formado en la especialidad de Biología y Química, con capacitación en conservación, museología y turismo, con experiencia en el área por más de ocho años. Está encargado también de la atención al público y de otras tareas en coordinación con el jefe y el asesor del museo. [15] El Dr. Ruíz (2015) recordó que: cuando presente todos esos objetos, además hablé y publiqué en los diarios locales, los hallazgos digamos y las visitas que yo hacía a determinados monumentos arqueológicos del valle de Huaura, llamó la atención de la población. Entonces así se enteró Huacho mismo de que tenía un pasado, de que tenían restos de alta importancia, a raíz de eso es que fui declarado como hijo predilecto de Huacho Ese es el detalle como resultado de mis trabajos [16] En los últimos años, excepcionalmente, se sumaron algunos objetos provenientes de dos proyectos de rescate arqueológico de los arqueólogos Water Tosso y Cárdenas, además de la donación de algunos objetos de parte del Proyecto Norte Chico que les fueran entregados por la población de Barranca. [17] La Ex-Estación del Ferrocarril en Huacho es testimonio del gran proyecto de unir Lima y Huacho. Su importancia está ligada a los polos económicos importantes. Fue construido a inicios del siglo XX y se mantuvo en funcionamiento hasta Servía para el transporte de la sal obtenida de las Salinas de Huacho, además en su extensión hacia el norte conectaba con las haciendas de Supe, Barranca, Pativilca y Paramonga para el transporte del azúcar y sus derivados. Su cierre se relaciona a la reforma agraria que ejerció un cambio importante en la forma de administrar las haciendas de esta región que recayó en los ex trabajadores de las haciendas y las cooperativas que ellos formaron poco después de la reforma. [18] Es notorio en el montaje de la sala la carencia en cuanto al mobiliario especializados para las condiciones de conservación que requieren los objetos de naturaleza orgánica, el equipamiento para la seguridad y de las condiciones de conservación en la sala. En este sentido, los requerimientos son constantes, pero también pospuestos constantemente por el bajo presupuesto asignado al museo. [19] En 1617 el mito del dios Vichama fue recogido y escrito por el padre jesuita Luis Teruel en una carta anua que daba cuenta de los Corregimientos de Barranca y Cajatambo. La carta inicia mencionando el culto religioso al dios Vichama en los valles del Norte Chico. El mito nos habla de la creación del mundo por Vichama y de la rivalidad con otro dios costeño y hermano, Pachacamac. Al poco tiempo de nacer Vichama es destruido por Pachacamac y de sus restos aparecen los productos agrícolas como el maíz, camote, carnes, frutas. El Sol, padre de Vichama, lo devolvió a la vida de una parte de los restos despedazados. A partir de aquí Vichama comienza a recorrer el mundo. Pachacamac aprovecha su ausencia y mata a la madre de Vichama. Cuando él retorna de su peregrinación se venga matando a todos los pobladores de Végueta que no defendieron a su madre, pero en un acto de arrepentimiento los quiere volver a la vida. Entonces, le pide al Sol que los convierta en piedras para que fueran veneradas; los curacas principales fueron convertidos en huacas adoradas como dioses, los indios plebeyos en piedras ordinarias. Y volvió a poblar el mundo a partir de tres huevos que cayeron del cielo: un huevo de oro de donde salen los curacas principales, un huevo de plata de donde salen las mujeres de los curacas y otro huevo de donde salen los indios plebeyos, la gente común. [20] Resulta fundamental la participación del fundador del museo como asesor científico, el Dr. Ruíz Estrada, quien apoya constantemente sobre temas referidos al estudio de la colección y lineamientos de investigación que son abordados en la revista de difusión del museo. [21] La revista del museo publica anualmente dos números. Estos son accesibles mediante el portal: [22] Mediante la Resolución N de la Dirección Regional de Educación del Gobierno Regional de Lima se aprobó incluir la representación (guión) y mito (narración del Padre Luis Teruel) al Proyecto Curricular 138

145 Regional y dentro de la Planificación Curricular de las Instituciones Educativas de las nueve Unidades de Gestión Educativa que se encuentran dentro del Gobierno Regional de Lima. De ellas, tres tienen lugar en todo el Norte Chico: UGEL 09 Huaura, UGEL 10 Huaral y UGEL16 Barranca. [23] Entre los agentes que participaron en menor o gran medida en la organización del museo, se identificaron: Sra. Katty Li, entonces Regidora de la Municipalidad Distrital de Pativilca y madre de familia de la escuela. Mediante ella, el docente estableció la conexión con el equipo del Proyecto Arqueológico Norte Chico (PANC). Sor Juana Herrera, por entonces directora de la escuela, dio las facilidades para iniciar y desarrollar los trabajos con la colección. Dr. Arturo Ruíz Estrada, asesor científico del PANC, colaboró con una primera identificación de los objetos de la colección. Seleccionó y clasificó piezas originales, así como dio sus opiniones sobre el conjunto estilístico de la colección. Lic. Álvaro Ruiz, arqueólogo y codirector del PANC y el Lic. Mario Advíncula, arqueólogo y administrador del proyecto. Ambos fueron los responsables de iniciar la coordinación y colaboración interinstitucional entre el proyecto y la escuela, además de asesorar y recomendar sobre las labores desarrolladas con la colección. Lic. Jesús Holguín e Isabel Cornejo, arqueólogos y asistentes de investigación del PANC, fuimos responsables de realizar las labores al interior del museo y los trabajos colaborativos con la colección arqueológica. Lic. Arabel Fernández, arqueóloga especialista en textiles prehispánicos, colaboró con el museo a solicitud del proyecto. [24] La colección y su custodia se encuentran reconocidas mediante el Oficio N _RNPIBIPCN_DG/INC emitido por la Dirección de Gestión y el área de Registro Nacional de Patrimonio Cultural del entonces Instituto Nacional de Cultura, hoy Ministerio de Cultura. [25] Ambos investigadores se centraron en un análisis estilístico e iconográfico y su relación con la interacción en este territorio durante el periodo conocido como Horizonte Medio (500 años d.c años d.c.). Sus trabajos fueron entregados al docente y están disponibles en la biblioteca de la escuela. [26] Buena parte de las notas y publicaciones que aparecen sobre el museo en los diarios locales son archivadas por el docente. De estos se recoge que la promoción del museo es fundamental y una de las partes más activas fuera del museo pues trata de propiciar la participación no solo escolar sino de la población del distrito y la región. [27] Investigadores como por ejemplo Krazonwsi (1986; 1991) y Horkheimer (1970) publicaron sus trabajos en varios círculos académicos internacionales como nacionales, específicamente sobre sus exploraciones e interpretaciones de los sitios tardíos en los valles de la región. [28] En la reciente Guía de Museos del Perú (2013), el Ministerio de Cultura reconoce al menos unas ocho (8) de estos museos, sin considerar los que se han registrado en el Norte Chico. [29] El programa fue pensado y consolidado por profesionales que produjeron estos programas como parte de las reflexiones latinoamericanas sobre la misión social del museo latinoamericano que compartieron en los 70, las cuales tuvieron como uno de sus encuentros más importantes en la Mesa de Santiago realizado en 1972 (Chile); esta reflexión deviene posteriormente como parte de la corriente conocida como Nueva Museología. [30] Frederick Engel y Paul Kosok emprenden las primeras miradas territoriales amplias sobre los valles costeros y su desarrollo. Engel, durante los años 60 y 70 realizó varios reconocimientos en los que registró gran cantidad y diversidad de asentamientos prehispánicos de diversas épocas, las que reunió en la publicación De las begonias al maíz en 1980, llamada así por el hecho de que abarcó una sinnúmero de asentamientos que probaba el origen y desarrollo de la civilización andina por medio de la agricultura. Kosok por su parte en Land, Life and Water in Ancient Peru (1965) reune una serie de fotografías aéreas que se constituyen en documentos visuales ampliamente consultados en el emprendimiento de trabajos de campo sobre cualquier periodo prehispánico. Recientes trabajos sobre el Arcaico Tardío han sido conducidos por Rafael Vega-Centeno en el valle de Fortaleza (1998; 2005); Miguel Aguilar en el valle de Huaura (2006), entre otros, no se han considerado dentro de un mayor análisis de este estudio debido a la especificidad de sus análisis sobre los sitios precerámicos, además de que escapan a los objetivos del presente trabajo. 139

146 [31] Según los Estatutos del ICOM adoptados durante la 22ª Conferencia General de Viena, Austria, [32] Un ejemplo de ellos son los planes integrales para el desarrollo del turismo de la provincia de Barranca. Como parte de sus recursos se señala la presencia de museos y sitios arqueológicos: [33] La Ley de Promoción de los Puntos de Cultura - N se promulgó el 16 de junio del Fue producto de un trabajo conjunto de alrededor de 250 organizaciones culturales e iniciativas desarrolladas en todo el país, las cuales trabajan desde el arte y la cultura para el desarrollo de sus comunidades: romoci%c3%b3n%20de%20los%20puntos%20de%20cultura.pdf 140

147 CONCLUSIONES GENERALES La presente investigación nació ante la carencia de investigaciones y reflexiones sobre los museos en el Perú, en especial en la región del Norte Chico. En el 2005 me uní al equipo de investigaciones del Proyecto Arqueológico Norte Chico. A partir de sus actividades desarrolladas en museos y el patrimonio arqueológico de la región, conocí esta región y allí creció mi interés por las colecciones que se formaron, las personas, sus voluntades y acciones para protegerlas, por medio de la educación y difusión de su patrimonio. Al iniciar la maestría en 2014 tenía en claro que podía reexaminar esta experiencia y reflexionar en torno a ella con cierta distancia temporal y espacial, además de las herramientas que nos han ido proporcionado la formación y los maestros de la Encrym a lo largo de estos dos años. De ese modo he querido contribuir a la construcción y proyección de una panorámica museológica de la que casi no se tenía referentes en la literatura museológica peruana. Por encontrarme con esta carencia informativa decidí partir por preguntas fundamentales con el propósito de aproximar un conocimiento sobre el universo museístico de la región, conocer su configuración museológica, a sus espacios y agentes involucrados y reflexionar sobre dicha trayectoria. Siguiendo mi formación en arqueología, me guié de nociones como la prospección y la excavación para abordar el estudio. Para resolver las preguntas de investigación me propuse mapear y aproximarme más por medio del estudio de casos. Mapear es el símil a lo que se realiza en una prospección arqueológica en la cual se hace un reconocimiento superficial, caminando identificando y registrando cada una de las evidencias y sitios arqueológicos. En este caso, mapeé los museos localizados dentro de un territorio especifico como lo es el Norte Chico. Por otro lado con el estudio de casos, como se procura en una excavación, examiné las partes más específicas de estos museos, vi en ellos los estratos o capas que comparten lo que sirvió para poder examinar sus condiciones, reconstruir y proponer su trayectoria, y producir el balance global sobre el conjunto. Para realizar los objetivos trazados se hizo todo lo posible para ubicar y describir cada una de las colecciones, exposiciones, museos y otros espacios que forman parte del universo museístico; también se reunió información documental dispersa sobre su formación e historia. El conjunto de información fue procesada, analizada e interpretada y con ello se ha logrado aproximarnos sobre el origen y trayectoria de las espacios museísticos del Norte Chico. Los principales resultados de la investigación se concentran en los aspectos que se definen a continuación. 141

148 En el panorama nacional es necesario identificar y actualizar nuestra visión sobre el museo y su quehacer. No solo es prioritario enumerar colecciones o museos. Es necesario profundizar en su contexto y reconocer los pocos o muchos logros desarrollados en cada uno de estos espacios para con ello, proponer y emprender la construcción acertiva de lineamientos que reviertan la situación crítica que golpean constantemente a la institución museística en el país. Dicha situación diagnosticada en los años 80, aún hoy -35 años después- parece tan vigente como en su momento. No se puede dejar de lado que en esa trayectoria, la aparición de formaciones y capacitaciones por medio de seminarios, diplomados, maestrías, publicaciones y asociaciones museológicas, son el resultado de un interés por reavivar y mejorar las condiciones del museo peruano. Seguir la trayectoria del Museo Nacional ha valido para evidenciar cómo se conciben los museos en el país, cómo se administra la cultura. El Estado ha mantenido esencialmente un papel como ente conservador del patrimonio, de monumentos y museos que los preservan, y como difusor promocionando su visualización mediante eventos culturales. En ello hay una falta de visión de la cultura en un sentido amplio como ente de transformación social. El papel se desarrolla en una desconexión con el contexto en que se encuentra. La formulación de políticas y gestión pública para la cultura hasta el momento se concentran en lineamientos de políticas culturales que poco han concretado en la realidad o que hayan producido cambios significativos. En los últimos años parece gestarse el escenario ideal para la formulación de políticas culturales en el que la ciudadanía tiene también protagonismo. Se ha generado pues un diálogo participativo entre el Estado y organizaciones civiles e iniciativas involucradas con el arte y la cultura, propiciado por éstas últimas, y se ha dado cuerpo a los Puntos de Cultura que reconoce el papel de la ciudadanía y la apropiación de su patrimonio para el desarrollo de sus comunidades. Esto lleva al Estado, mediante el Ministerio de Cultura, a encarar estructuralmente en el corto, mediano y largo plazo acciones para empoderar a la ciudadanía en la gestión de su propio patrimonio cultural. Es un puente que puede vincular las estrategias y logros alcanzados en el universo museístico del Norte Chico mediante la Red de Museos. El Norte Chico es la denominación coloquial de un territorio dinámico. En el se producen flujos migratorios constantes incentivados por la actividad económica y que lo hacen culturalmente variado. Pese a que se encuentran polos de desarrollo económico, también es evidente como lo muestran diversos medios de comunicación y estadísticas- que el tejido social está debilitado por la corrupción, la violencia, la discriminación, la precarización del trabajo y la pobreza de anexos y localidades de la región. En este escenario han hecho su aparición desde la década de los 70, variados espacios museísticos que actualmente suman unos 17 y se pueden clasificar en 5 grupos: Colecciones, salas de exposición, Casas- 142

149 Museo, Museo (Local y Universitario) y un proyecto de museo. La creación de estos responde a la iniciativa de 7 diversos agentes: Docentes y autoridades educativas, arqueólogos, autoridades distritales/provinciales, proyectos arqueológicos, coleccionistas, organizaciones civiles (Comité Pro Museo de Barranca) y el Estado. Los museos del Norte Chico no han sido concebidos bajo una política museológica. Prima en ellos la naturaleza arqueológica de las colecciones, de la mano de una delicada situación del patrimonio, especialmente el arqueológico, provocada por el saqueo. En el contexto culturalmente variado del Norte Chico, así como lo debilitado de su tejido social, la visualización de los museos está en una situación relegada en gran medida porque la atención y recursos se concentran en cubrir las necesidades básicas y de emergencia, y no contempla un reconocimiento o reflexión de que los museos pueden contribuir a una real transformación o mejora social en la región por medio de la construcción de ideas de integración o de ser propicios para el encuentro y desarrollo artístico. Pese a ello, las acciones de los agentes culturales responsables de los espacios museísticos se movilizan a desarrollar dicho rol transformador. La configuración del panorama museológico en el Norte Chico está marcada por 3 hitos importantes. En ellos se involucran agentes locales, el patrimonio arqueológico, y la convergencia de situaciones oportunas que han ayudado a optimizar las condiciones de las colecciones y espacios museísticos que han proliferado a lo largo de 40 años. El primer hito se dio en los años 70 con el establecimiento de las Casas-Museo de Pativilca y Huaura, una iniciativa desde el Estado peruano, que resalta dos monumentos históricos de la región ligados a la Independencia del país. Y esa ha sido, en definitiva, una de las mayores apuestas del Estado en materia de museos para la conservación de los inmuebles. Su administración ha recaído en las municipalidades distritales, quienes dentro de sus posibilidades los han mantenido abiertos al público. Asimismo, han contribuido a incorporar núcleos expositivos de colecciones arqueológicas, dejando de lado la condición de centros de acopio de objetos donados o decomisados a saqueadores de bienes culturales, en que se estaban convirtiendo los inmuebles. El segundo hito tiene su escenario en la década de los años 80, inició con la apertura del primer Museo Arqueológico promovido por la primera universidad nacional de la región: José Faustino Sanchéz Carrión, y el arqueólogo Arturo Ruíz Estrada. Él fue convocado para realizar excavaciones y exploraciones ante la aparición de vestigios arqueológicos durante la construcción del campus universitario. La finalidad de crear el museo fue la necesidad de conservar la colección universitaria, difundir las investigaciones y propiciar una campaña de concienzación para la protección del patrimonio 143

150 en situación vulnerable. La aparición de este espacio fue la primera zona de contacto entre el patrimonio arqueológico desde el campo científico y la población. Entre esa década y los años 90, se fue incrementando el número de colecciones y espacios expositivos, fundamentalmente promovidos por entidades escolares y coleccionistas privados. En esas décadas fue visto como un hecho o práctica común la exploración a sitios arqueológicos y la recolección de objetos asociados a estos; las escuelas resguardaron los objetos con el propósito de hacerlos parte de la enseñanza. El tercer hito tiene lugar en los años 2005 y 2006, precedido por la aparición de proyectos arqueológicos sobre el Periodo Arcaico Tardío (3000 años a.c 1800 años a.c). En dichos años se dio un punto de convergencia entre arqueólogos y otros agentes (autoridades municipales, docentes, patronatos de defensa cultural, entre otros). Fue el detonante para que se emprendieran acciones de forma colaborativa en el quehacer museológico, se formara un comité para la creación del Museo Provincial de Barranca y se conociera la propuesta de Red de Museos desarrollada en el museo universitario por el Dr. Henry Marcelo. Con estas experiencias se repotenciaron el registro de colecciones, su conservación y fueron implementados nuevos espacios museísticos de la mano de proyectos arqueológicos, municipalidades distritales y docentes. Aspectos relevantes que quedaron claro con el diagnóstico de dos casos particulares y significativos por su larga trayectoria en el panorama museológico de la región, como el Museo Universitario José Faustino Sánchez Carrión y el Museo Arqueológico Escolar Nuestra Señora del Carmen, son que han puesto en evidencia las condiciones en que operan estos espacios, el papel que desempeñan los agentes culturales y las nociones que motivan su mantenimiento. En principio, al depender de otras entidades, muchas de sus funciones son ancladas a las instituciones en la que nacen. Gran parte de las funciones museológicas, como por ejemplo: conservación e investigación, se ven limitadas o son inexistentes por la falta de recursos humanos y económicos. Ello, sitúa ambos espacios en condiciones críticas para el manejo de las colecciones. Dichas condiciones son superadas por la gestión de los agentes que han identificado y aprovechado situaciones oportunas -como la presencia de investigaciones arqueológicas- y por el desarrollo de estrategias que han llevado acabo para mantener vivos los espacios. Entre ellas, se destaca la dinámica generada con los arqueólogos que les ha permitido mejorar algunas del las condiciones de las colecciones (su conservación y representación expositiva) y la creación de una estrategia como la Red de Museos que propicia la articulación inexistente (hasta ahora) y puede elevar la situación y panorámica museológica al mecanismo estatal para que sean espacios sostenibles. 144

151 Pese a que podemos establecer una diferencia entre los espacios museísticos por el tipo de fuentes de financiamiento con que cuentan (sea por el tipo de propiedad, privada o estatal), si nos referimos a las condiciones en que se encuentra el patrimonio o colecciones se puede decir de forma generalizada que éstas no son las más óptimas. La solvencia en presupuestos, personal y protocolos para la conservación y mantenimiento de condiciones adecuadas de los objetos y los inmuebles se hacen indispensables en el mediano y largo plazo. Si bien observamos que la mayoría de colecciones tienen en general un buen estado de conservación, no es de esperar que su situación se mantenga como tal en el tiempo sin una minima acción sobre ellos, sobre la infraestructura que los contiene y sobre los controles de seguridad. El caso del robo de al menos 200 piezas de una colección municipal ejemplifica en parte esta situación adeversa. Tampoco, se pueden dejar de mencionar algunos otros ejemplos positivos que muestran que se van emprendiendo acciones para revertir problemas, como en el Museo Universitario (UNJFSC). O, como sucede en el Museo Municipal de Chancay, que demuestra en sus expociones e infraestructura, el cuidado por el manejo y conservación del patrimonio y sus visitantes. Una reflexión en torno al quehacer museológico en un período tan largo como lo son 40 años, recae en primer lugar en el cambio sustancial que se ha gestado en torno a la forma de aproximación al patrimonio. Resulta controversial para los fines que persigue una institución museal que la forma de obtención o constitución de las colecciones sea por medio de la descontextualización de los objetos patrimoniales que se pretende preservar. Sin embargo, esta situación controversial por medio del interés y la interacción de los agentes directamente ligados con los objetos arqueológicos con investigadores, ha dado paso a reformular esta aproximación perjudicial. Las nuevas prácticas se enfocan en fomentar su protección. Y el primer paso dado ha sido presentarse como custodios legales de las colecciones, acorde a la vigente legislación de protección patrimonial. Asumiendo con ello, todo compromiso y responsabilidad sobre las mismas. Asimismo, se ha podido reconocer no en un sentido de reemplazo- una forma de apropiación lograda por la interacción con la arqueología y/o por la disposición e interés en la historia regional. Esta forma de aproximarse a las colecciones se ha generado por la construcción de estrategias educativas que permiten leer/interpretar el patrimonio desde diversas materias. En ellas, las colecciones se anclan tanto en el pasado como adquieren nociones para explicar, entender y transformar el presente. Esto es un aporte sustancial generado desde los docentes. Ejemplos de estas estrategias son: El rol de investigador que adquieren los estudiantes, la fuente iconográfica para creación desde la actividad artística, o la incorporación de manifestaciones actuales (como el Vichama Raymi) y mitológicas en los museos para vincular a las poblaciones con el patrimonio. Este aspecto desarrollado por los agentes culturales es 145

152 interesante porque es un terreno fértil que permite proyectar el futuro del patrimonio arqueológico en la región. Es una forma en que el patrimonio cultural puede ser recuperado y propiciar su protección y conservación. No puede dejarse de lado en la reflexión como el concepto o denominación de Museos opera de forma general en el universo museístico. Vista la configuración y trayectoria del conjunto, esta noción se ha posicionado para legitimar la tenencia del patrimonio, como parte de colecciones o dentro de espacios expositivos, para la difusión de conocimientos, para la generación o incentivo del desarrollo social y económico de las localidades en las que surgen. El fin se concentra casi de manera tácita en la dimensión educativa. La presencia de proyectos arqueológicos y sus equipos han acompañado la trayectoria de los museos. En algunos casos han fomentado su creación, han contribuido en el campo museológico mediante la capacitación, la sistematización, registro, conservación y la construcción de contenidos temáticos en exposiciones. También, en los últimos años, han impulsado el desarrollo del turismo cultural que tiene como máximo polo de visitas el sitio arqueológico Caral y el valle de Supe. Esta situación ha movilizado principalmente a agentes como autoridades políticas que dirigen esfuerzos para promover sitios arqueológicos y museos como recursos turísticos, aunque sin ahondar en aspectos previos fundamentales como son el entendimiento de las necesidades y situación de estos espacios (museos y sitios). Este es un tema mucho más amplio que es necesario abordar en el futuro de una forma más analítica en las dimensiones económicas, sociales y de los planes estratégicos formulados desde los gobiernos de la región. Finalmente, quiero señalar que el presente estudio es solo un punto de partida para las futuras investigaciones museológicas en el Norte Chico. Próximas exploraciones o reflexiones mucho más específicas y detalladas en el universo museístico pueden ampliar o discutir con esta visión panorámica, y de esa forma contribuir al desarrollo de aportes que sean significativos tanto en la museología de esta región como en el contexto nacional. 146

153 BIBLIOGRAFÍA Advíncula, M. (23 de diciembre de 2015). Entrevista al arqueólogo Mario Advíncula Zeballos. I. Cornejo, Entrevistador. Aguilar, M. (2006). Surgimiento de las Sociedades Complejas en los Andes Centrales. Una perspectiva desde el Valle de Huaura, Perú. Tesis de Licenciatura. Universidad Nacional Federico Villarreal, Lima, Perú. Alemán, A. (2008). La importancia de los estudios de públicos en la gestión de museos. Cultura, (22), Alemán, A. (2011). Los Museos Comunitarios participativos. Una aproximación desde la Nueva Museología. Cultura, (25), Aparicio, M. (1985). Diagnóstico de los Museos del Perú. Lima: Instituto Nacional de Cultura, Museo del Banco Central de Reserva, Proyecto Nacional para el Desarrollo del Patrimonio Cultural-Proyecto Regional de Patrimonio Cultural y Desarrollo (Programa de las Naciones unidas para el Desarrollo (PNUD/UNESCO). Arévalo de la Cruz, G., Arrieta, S. & Morón, H. (2014). Museo Nacional de Perú: Museología, Historia y el Proyecto Tawak. Universidad Nacional Mayor de San Marcos - Facultad de Ciencias Sociales, Lima. Arguedas, J. M. (1967). El Indigenismo en el Perú. Tlatoani, (18), Recuperado el 19 de junio de 2016, de Ciesas: http//: Ayllón, F. (2012). Directorio de Museos de Lima y Callao. Lima: Museo del Congreso y de la Inquisición. Betancur, J. & Romero, S. (1979). Los museos en Colombia: Diagnóstico de la situación actual. Bogotá: Instituto Colombiano de Cultura. 147

154 Brichetti, I. (2009). Museos regionales en el Sudeste de la Provincia de Buenos Aires. Una aproximación a la problemática del patrimonio arqueológico. Intersecciones en Antropología, Revista de la Facultad de Ciencias Sociales UNCPBA, (10), Brown, M. (2009). War and Social life in Prehispanic Perú: Ritual, Defense, and Communities at the Fortress of Acaray, Huaura Valley. Tesis doctoral. University of Illinois at Urbana Champaign, Illinois. Campoy, T & Gomes, E. (2009). Técnicas e Instrumentos cualitativos de recogida de datos. En A. Vallejo (Coord.), Manual básico para la realización de tesinas, tesis y trabajos de investigación (págs ). España: EOS. Castelli, A. (2000). Situación de los Museos en Perú. Gaceta de Museos, 32 (17), Castillo, R. (16 de junio de 2011). Reseña Histórica del Museo Arqueológico de la Institución Educativa N 21577, Paramonga. Castrillón, A. (1983). Primera encuesta de Museos Peruanos. Lima: Instituto de Investigaciones Humanísticas de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Castrillón, A. (1986). El Museo Peruano: Utopía y Realidad. Lima: Industrial Gráfica. Castrillón, A. (2014). Utopía y Realidad en la Museología Peruana. Colección de pioneros en museología. Colombia, Bogotá: Dirección de Museos y Patrimonio Cultural Universidad Nacional de Colombia. Chirinos, V. (2013). Propuesta Museográfica para el Museo de Sitio Huaca Pucllana: Reflexiones sobre el vínculo entre el pasado y presente de Lima Metropolitana. Tesis para optar el grado de Maestra en Museología. Escuela de Posgrado de la Universidad Ricardo Palma, Lima, Perú. Coloma, C. (22 de junio de 2001). Una casa de la cultura?. El Comercio, págs. a-14. Comisión de la Verdad y Reconciliación. (2003). Tomo IV. Sección Tercera: Los Escenarios de la Violencia. Capítulo 1: La violencia en las regiones. 1.6 Los Ejes complementarios. Recuperado el 15 de enero de 2016, de CVR: 148

155 Creamer, W., A. Ruíz, A. & Haas, J. (2006). Late Archaic Regional Organization in the Norte Chico. Monografía presentada en la 71 reunión anual de la Society for American Archaeology. San Juan. Cruzado, E. (2010). Algunos Alcances sobre la Cerámica del Estilo Huaura. Guara, Revista del Museo de Arqueológico de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión, (5), De Carli, G. (2004). Vigencia de la Nueva Museología en América Latina: conceptos y modelos, Revista Abra, 24(33), Del Castillo, C. (2006). Resultados del V Taller Participativo: Diagnóstico de las potencialidades y dificultades para la implementación de museos arqueológicos integrados con la comunidad en el Norte Chico. Archivos del Proyecto Arqueológico Norte Chico, Barranca. Desvallées, A. & Mairesse, F. (2010). Conceptos Claves de Museología. Recuperado el 15 de enero de 2016, de ICOM: Engel, F. (1980). De las Begonias al Maíz. Lima: Centro de Investigación de las Zonas Áridas - Universidad Nacional Agraria de la Molina. Falcón, V. (s.f). Sobre el Patrimonio Paleontológico y los Museos en el Perú. Recuperado el 15 de enero de 2016, del Portal Iberoamericano de Gestión Cultural: Fernández M. (1987). Historia de los museos de México. México: Banamex. Gándara, M & Perez, L. (En prensa). Museos de sitio y centros de interpretación Excluyentes o complementarios?, Gaceta de Museos. García, J. M. (2000). Panorama de los museos en Murcia. Tejuelo, Revista de la ANABAD, (1), García, G. (1986). Nuestro Museo. Nuestra Familia, Revista del Colegio Parroquial "Nuestra Señora del Carmen" Paramonga. (1),

156 Hampe, T. (1998). Max Uhle y los orígenes del Museos de Historia Nacional (Lima, ). En P. Kaulicke (Ed.), Max Uhle y el Perú Antiguo (1 ed., págs ). Lima: Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Haas, J. & Ruiz, Á. (2003). Proyecto de Investigación Arqueológica en el Norte Chico: Valle de Fortaleza, Perú. Informe final presentado al Instituto Nacional de Cultura, Lima. Hermosilla, J.P. (11 de noviembre de 2015). Profesor Paramonguino orgulloso el Museo Arqueológico Escolar. Diario Así, pág. 2. Hernández, F. (1992). Evolución del concepto de museo. Revista general de información y documentación, 2(1), Hernández, F. (2006). Planteamientos Teóricos de la museología. España: Ediciones Trea. Hoces, L. (Ed.). (2005). Los Sorprendentes Valles del Norte Chico: Fortaleza, Pativilca, Supe y Huaura. Raíces, Boletín de Divulgación cultural, (II), Holguín, J. & Cornejo, I. (2007). Reorganización del Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa Nuestra Señora del Carmen - Paramonga. Revista Guara, publicación del Museo Regional de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión, (2), Horkheimer, H. (1970). Chancay Prehispánico: Diversidad y Belleza. En R. Ravines (Comp.), 100 años de años de Arqueología en el Perú (págs ). Lima: Instituto de Estudios Peruanos. Ichiki, N. (2012). El Estilo Huaura Policromo Figurativo : Interacciones estilísticas e iconográficas durante la segunda mitad del Horizonte Medio en el área del Norte Chico de la Costa del Perú. Tesis para optar el grado de Magíster en Arqueología con mención en Estudios Andinos. Escuela de Posgrado, Pontificia Universidad Católica del Perú, Lima, Perú. Instituto Nacional de Estadísticas e Informática. (2016). Perú en cifras. Recuperado el 15 de enero de 2016, de INEI: 150

157 Johnson, M. (2000). Teoría Arqueológica.Una introducción. Barcelona: Ariel Historia. Kania, M. (2010). La nación que honra su pasado, se honra a si mismo. El difícil inicio de la museología nacional y protección de patrimonio arqueológico del Perú ( ). Studies in Ancient Art and Civilization, (14), Kosok, P. (1965). Land, Life and Water in Ancient Peru. New York: Long Island University Press. Krzanowski, A. (1986). Cayash Prehispánico. Primera parte del informe sobre las investigaciones Arqueológicas de la Expedición Científica Polaca a los Andes Proyecto Huaura Checras, Perú Polska Akademia Nauk, Oddzial W Krakowie, Krakow. Krzanowski, A. (Ed.). (1991). Estudios sobre la Cultura Chancay, Perú. Krakow, Polonia: Universidad Jaguelona. León, A. (2010). Teoría, praxis y utopía (8 ed.). Madrid: Cátedra. León, E. (Comp.) (1996). Huaura Villa y Región. Antes y despúes de la Independencia. Lima: Centro de Estudios y Publicaciones Ser Huaura. Linares, J. (2013). Museos, Tiempo, espacio y luz. La Habana Vieja: Ediciones Boloña. Publicaciones de la Oficina del Historiador. Marcelo, H. (2009). Proyecto Red de Museos del Norte Chico Perú. Recuperado el 15 de enero de 2016, de Red de Museos del Norte Chico: Marcelo, H. (2007). Proyecto Red de Museos del Norte Chico. Recuperación del patrimonio cultural y natural como estrategias de comunicación Ecoturística sostenible para el Desarrollo Regional. Presentado a la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, Huacho. Marcelo, H. (15 de diciembre de 2015). Entrevista al Dr. Henry Marcelo Castillo, director del Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión. I. Cornejo, Entrevistador. 151

158 Marcelo, H. (Enero de 2010). Informe N 002-Informe de Requerimiento de Información sobre Número de personas visitantes Año Fiscal 2010 Museo de Arqueología de la UNJFSC. Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, Huacho. Marcelo, H. (Noviembre de 2012). Informe N 003-Informe sobre actividades desarrolladas del Museo de Arqueología de la UNJFSC Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, Huacho. Marcelo, H. (Enero de 2014). Informe N 001- Informe sobre actividades desarrolladas en el Museo de Arqueología de la UNJFSC Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, Huacho. Marcelo, H. (Octubre de 2014). Informe N 014- Informe del desarrollo de Actividades del Museo de Arqueología de la UNJFSC. Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, Huacho. Marcelo, H. (Enero de 2015). Informe N 001-Evaluación del POI y Memoria Institucional 2014 del Museo de Arqueología de la UNJFSC. Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, Huacho. Martínez, F. (2002). Perfil de catastro y situación de los museos del Perú. Lima: Instituto Nacional de Cultura. Mateo, S. (2011). Las Casas Museo como salvaguarda del Patrimonio Inmaterial: El mobiliario como exponente de una cultura ya desaparecida. Seminario de Investigación en Museología de los Países de Lengua Portuguesa y Española, Comité Internacional del ICOM para la Museología - ICOFOM, (II), , Buenos Aires. Recuperado el 15 de enero de 2016, de Biblioteca Digital: Miasta, G, & J. Merino. (1986). Inventario y Catastro de Monumentos Arqueológicos del Valle de Huaura. Lima: Seminario de Historial Rural Andina de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Ministerio de Cultura del Perú. (2012). Lineamientos de Política Cultural Lima. Ministerio de Cultura del Perú (2013). Guía de Museos del Perú. Lima: Dirección de Museos y Bienes Muebles. 152

159 Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú (2003). Plan de Política Cultural. Lima. Morales, L. (1994). Orígenes de la Museología Mexicana: Fuentes para el estudio histórico del Museo Nacional, México: Universidad Iberoamericana, Departamento de Historia. Morales, L. (1999). Museo y Grafía: Observación y lectura de los objetos. Historia y Grafía UIA, (13), Morales, L. (2007). Museológicas. Problemas y vertientes de investigación en México. Relaciones. Estudios de historia y sociedad XXVIII (111), Olvera, C. (2008). La participación infantil como motor del origen y desarrollo de los museos escolares. Cuicuilco, 15(44), Peña, R. (2015). Diagramación de Documentos e Imágenes, Ediciones de videos y Trámites documentarios del Museo de Arqueología de la UNJFSC. Informe presentado al Museo de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, Huacho. Proyecto Arqueológico Norte Chico (Agosto de 2005). Resultados del IV Taller Arqueología y Educación en el Norte Chico. Archivos del Proyecto Arqueológico Norte Chico, Barranca. Proyecto Arqueológico Norte Chico. (2007A). Proyecto Arqueológico Norte Chico, Dossier Archivos del Proyecto Arqueológico Norte Chico, Barranca. Proyecto Arqueológico Norte Chico (2007B). Catálogo del Museo Arqueológico Escolar de la I.E Nuestra Señora del Carmen de Paramonga. Archivos del Proyecto Arqueológico Norte Chico, Barranca. Proyecto Arqueológico Norte Chico, Institución Educativa (2007). Catálogo de las piezas arqueológicas de la I.E de Huaricanga. Archivos del Proyecto Arqueológico Norte Chico, Paramonga. Ramírez, J. ( 28 de junio de 2015). Entrevista al docente Juvenal Ramírez Sánchez, encargado del Museo Escolar de la I.E.P Nuestra Señora del Carmen, Paramonga. I.Cornejo, Entrevistador. 153

160 Ravines, R. (1989). Los Museos del Perú. Breve historia y guía. Lima: Instituto Nacional de Cultura Dirección General de Museos. Reyes, S. (18 de diciembre de 2015). 28 años del Museo Escolar. I.E Nuestra Señora del Carmen de Paramonga Construyendo la Red de Museos del Norte Chico. El Chaski, pág. 10. Reyes, S. (23 de diciembre de 2015). Docente Juvenal Ramírez: Logros de un Maestro. El Chaski, pág. 9. El Chaski, pág. 9. Ruíz, A. (2007). Historia del símbolo de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión. Revista Guara, publicación del Museo Regional de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión, (1), Ruíz, A. (10 de diciembre de 2015). Entrevista al Dr. Arturo Ruíz Estrada, Fundador y Asesor Científico del Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión. I. Cornejo, Entrevistador. Ruíz, A., Creamer, W. & Haas, J. (2007). Investigaciones Arqueológicas en los Sitios del Arcaico Tardío (3000 a 1800 años A.C) del Valle de Pativilca. Barranca: Instituto Cultural del Norte Chico. Santacana, J & Hernández, F. (2006). Museologia Crítica España: Trea. Shady, R. (1997). La Ciudad Sagrada de Caral Supe en los albores de la Civilización en el Perú. Lima: Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Shady, R. y& C. Leyva. Eds (2003). La Ciudad Sagrada de Caral-Supe: Los Orígenes de la Civilización Andina y la Formación del Estado Prístino en el Antiguo Perú. Lima: Instituto Nacional de Cultura. Tello, J. C. (1988). Presente y futuro del Museo Nacional. Informe presentado al Director General de Instrucción (Perú) el 14 de julio de Revista del Museo Nacional de Antropología y Arqueología, (III), Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión. (s.f). Manual de Organización y Funciones Museo Arqueológico. Archivos del Museo Arqueológico de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, Huacho. 154

161 Vallejo, M. E. (Coord.), Torres, P. & Rodríguez, M. (Comps.) (2002). Educación y Museos. Experiencias recientes Antología. Colección Obra Varia. México: Instituto Nacional de Antropología e Historia. Vega-Centeno R., L. Villacorta, L. Cáceres & G. Marcone. (1998). Arquitectura Monumental Temprana en el Valle Medio de Fortaleza. Boletín de Arqueología de la Pontifica Universidad Católica del Perú, (2), Vega-Centeno, R. (2005) Ritual and Architecture in a Context of Emergent Complexity: A Perspective from Cerro Lampay, a Late Archaic Site in the Central Andes. Tesis Doctoral. Department of Anthropology, The University of Arizona. Witker, R. (2001). Los Museos. México: Conaculta Tercer Milenio. Zubiría, S. D., Abello, I., & Tabares, M. (2001). Conceptos básicos de administración y gestión cultural. España: Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura. OEI. 155

162

163 ANEXO 1 Mapeo del universo museístico en el Norte Chico 156

164

165 FICHA DE REGISTRO N 1 Museo Arqueológico Vichama Datos Generales: Ubicación: Distrito de Paramonga / Provincia de Barranca Responsable y/o encargado: Institución Educativa Fiscalizada N / Profesora encargada: Ruth Giraldo Acero de León Descripción: La Institución Educativa Fiscalizada N 21577, de Educación estudiantil mixta de Primaria, resguarda una colección arqueológica prehispánica (900 d.c 1533 d.c). La colección tuvo sus inicios aproximadamente en el año 1957 bajo la gestión del director por entonces, Alfonso Olivera Vidal. La colección está conformada por objetos de cerámica, restos óseos, textiles, objetos de metal, etc. Fue formada por donación y recolección realizada por profesores, alumnos y padres de familia dentro de la localidad de los valles de Fortaleza y Pativilca (en sitios arqueológicos como el Balcón de Judas, Tunan y la Fortaleza de Paramonga). Con los años paulatinamente ha ido acumulando alrededor de 1100 objetos. Desde los orígenes de su constitución, la colección fue almacenada en varias aulas de la escuela. Esta situación cambiaría a partir del año 2003 cuando la directora de entonces, Ingri Gaviño Lossio en colaboración con el subdirector y docente Roberto Quevedo, iniciaron las gestiones ante el Gobierno Regional de Lima para la creación de instalaciones adecuadas para la colección. Las gestiones tuvieron éxito y el Gobierno Regional apoyó la iniciativa y financió un proyecto para la construcción de un espacio y el equipamiento museográfico para exhibir los objetos de la colección. Los trabajos con el proyecto constructivo siguieron su marcha hasta una fase en la que se contaba con la infraestructura terminada. En esa fase recurrieron a la asesoría sobre aspectos técnicos y científicos sobre la distribución de los espacios y la misma colección, que hasta ese momento no había sido documentada (inventario). En el 2007 recurrieron a la asesoría de los Licenciados Álvaro Ruíz y Mario Advíncula, miembros del Proyecto Arqueológico Norte Chico (PANC). La asesoría los condujo a un convenio entre la escuela y el PANC para la realización de labores de conservación, inventario de la colección y la asesoría en museología y museografía Los trabajos en la colección fueron realizados en los meses de enero a marzo del 2007 y 2008, con la colaboración de bachilleres de Arqueología que laboraron en uno de los proyectos de investigación arqueológica que coordinaba el PANC en la localidad de Huacho (Proyecto PIAC). Este convenio cumplió sus objetivos en lo que al registro, conservación y embalaje de la colección se refiere. Además, acorde con dichas labores, dio las pautas para el acondicionamiento de la sala museográfica y la implementación de otras áreas como un depósito para la colección. 157

166 El espacio para el museo es una edificación de una sola planta construida con material noble (ladrillos y cemento), correspondiente a 480m2 aprox. Los ambientes están conformados por una sala de exposición, un ambiente para depósito y trabajos de conservación de la colección y una pequeña sala de recepción. La edificación tiene instalaciones eléctricas y mobiliario en la sala de exposición que en general presenta un buen estado de conservación. Como resultado de la construcción de las instalaciones y los trabajos realizados con la colección, el museo fue inaugurado el 05 de octubre de La exposición museográfica muestra unos 100 objetos que destacan diversos aspectos prehispánicos de la región: joyería prehispánica, fauna marina y terrestre, textiles, guerreros, vasijas ceremoniales (Keros y aríbalos Inca; vasijas con representaciones de deidades conocidas en la región como Vichama y Viracocha) y diversos objetos líticos, de madera, hueso y yeso. También presenta recursos como maquetas para indicar la ubicación del sitio más emblemático del distrito: La Fortaleza de Paramonga y maniquíes de guerreros prehispánicos representando una lucha ritual, escena identificada en una de las vasijas de la colección. El responsable desde el 2005, año en que ingresó a laborar en la escuela, es la Profesora en Educación Primaria, la Lic. Ruth Giraldo. Sus labores consisten en coordinar o gestionar la colaboración de diversos especialistas (arqueólogos, conservadores y otros profesionales de proyectos independientes o particulares que trabajan en la región), la producción de materiales de difusión (por ej. trípticos) para las visitas son diseñados por la profesora y sus alumnos, así como la coordinación con medios locales y de la región para difundir la apertura y actividades realizadas en el museo. Sus actividades en el museo están restringidas a las actividades escolares de la programación curricular de las materias o la celebración de eventos como ferias y actividades culturales para la celebración de aniversarios de la escuela u otros. Los recursos económicos con que funciona la institución son bastante limitados para la realización de las diversas actividades que demanda la colección. Estos provienen de la dirección de la escuela y eventualmente del apoyo de los estudiantes y padres de familia. Desde su apertura, el museo cuenta con un cuaderno de visitas que ha registrado el año pasado (2014) alrededor de 200 visitas escolares de otras instituciones educativas del distrito de Paramonga y del resto del Norte Chico. Los estudiantes tienen acceso al museo como parte de las actividades programadas por la profesora. Las visitas del público general o estudiantes de otras escuelas se realizan previa cita, son guiadas y realizadas por los alumnos de primaria. El ingreso es gratuito. 158

167 ás fuentes de información: Proyecto Arqueológico Norte Chico. (2007). Inventario de Piezas Arqueológicas del Museo Escolar de la Institución Educativa Fiscalizada N Paramonga: PANC. Castillo, R. (16 de junio del 2011). Reseña Histórica del Museo Arqueológico de la Institución Educativa N Paramonga. Cruzado, E. (2010). Algunos Alcances sobre la Cerámica del Estilo Huaura. Guara, Revista del Museo de Arqueológico de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión, (5), Registro fotográfico: Sala de exposición y colección escolar Registrado por: Fecha de elaboración: Isabel Cornejo Rivera Enero,

168 FICHA DE REGISTRO N 2 Datos Generales: Ubicación: Distrito de Huaura / Provincia de Huaura Museo Monumental de la Municipalidad Calle San Martín S/N, esquina de la Plaza de Armas. Distrital de Huaura Responsable y/o encargado: Municipalidad Distrital de Huaura. Descripción: Fue creado como Museo Histórico Generalísimo José de San Martín por Ley N del 19 de Septiembre de 1964, por iniciativa de parlamentarios del partido Aprista. Fue hasta el año 1969 en que fue inaugurado y su placa conmemorativa lo identifica como Memorial Generalísimo José de San Martín. El museo, con el nombre actual que se le conoce, fue incorporado en 1996 al Sistema Nacional de Museos del Perú mediante Resolución Directoral N INC. Cuenta con una colección histórica y arqueológica, conformada por cuadros que muestran la Campaña Libertadora, los muebles utilizados por San Martín, cañones de la época de la Colonia (Siglo XVIII), un estandarte de Argentino (original) y una réplica del primer estandarte del Perú; la colección arqueológica está conformada por vasijas prehispánicas (500 d.c 1470 d.c) procedentes de los sitios arqueológicos conocidos como Rontoy y Acaray. El museo ocupa una antigua casona que fuera oficina de la Real Aduana de Lima, hasta la llegada del General San Martín y su Ejército Libertador. En este lugar instaló su cuartel y dio el primer grito de libertad por la independencia del Perú el 27 de noviembre de El 28 de octubre de 1942 el Estado Peruano declaró como Monumento Histórico de la Nación al Balcón de Huaura mediante Ley N 9636 (publicada 17 noviembre de 1942) por haber sido sede del primer grito de Libertad de Independencia. Las instalaciones pertenecen a una casona que data del siglo XVII, tiene dos plantas y fue construida con quincha (barro y cañas) y madera. En dicho lugar, a la llegada de San Martín, funcionaba la receptoría de la Real Aduana de Lima, que luego fue sede de la Presidencia en 1821, y posteriormente paso a ser la Casa de Gobierno del Estado Norperuano en 1836, además de sede de las celebraciones por el Centenario de la Independencia. Entre el 2005 y 2006, la Municipalidad distrital, el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo financiaron obras de conservación y reacondicionamiento de la fachada de la casona así como de la estructura del balcón, en el marco de las celebraciones por el 185 aniversario del primer grito de Independencia del Perú. 160

169 El museo cuenta con cinco salas permanentes: Sala de la Legión Peruana, Sala del Batallón Numancia, Sala de Banderas, Sala de Arqueología y la Sala del Balcón. Otros espacios son el área de almacén (depósito), oficina de administración, oficina de turismo y una biblioteca que cuenta con una importante colección de documentos de la Independencia del Perú. En las dos primeras salas se exhiben los retratos y reseñas de los personajes que participaron de la independencia al lado de San Martín; la Sala de Banderas tiene una réplica del primer estandarte del Perú que se le atribuye a un diseño propio del General San Martín; la Sala de arqueología es un ambiente que contiene vasijas prehispánicas de culturas prehispánicas de la localidad (Cultura Chancay, Estilo Huaura) recuperadas de manos de huaqueros (saqueadores de huacas o sitios arqueológicos); la Sala del Balcón se encuentra en la segunda planta y es una sala introductoria que reseña los sucesos entorno al grito de independencia. Más fuentes de información: Instituto Nacional de Cultura (diciembre 1999) Relación de Monumentos Históricos del Perú. Centro Nacional de Información cultural. Lima

170 FICHA DE REGISTRO N 3 Museo Bolivariano Datos Generales: Ubicación: Distrito de Pativilca / Provincia de Barranca Calle Bolívar S/N, a unas cuadras de la Plaza de Armas Responsable y/o encargado: Municipalidad Distrital de Pativilca Descripción: El 07 de noviembre de 1942 la casona fue declarada como Monumento Histórico de la Nación mediante la Ley N 9653 (publicada el 18 noviembre de 1942) por haber sido sede de un lugar único que guarda información del Libertador Simón Bolívar y donde él mismo fundó el Diario El Peruano, primer diario oficial del Perú y al mismo tiempo de Latinoamérica. En esta casona el libertador estableció su cuartel general, mientras recuperaba su salud para preparar la ofensiva en las batallas de El lugar es reconocido porque fue donde el Libertador exclamó el premonitorio: Triunfar! antes de librar las batallas de Junín (06 agosto de 1824) y Ayacucho (09 diciembre de 1824) con las que se sellan el fin de la dominación española, consolidando de esa forma la independencia de Perú. En 1924, con motivo de la celebración del Centenario de la Independencia, la Casona fue restaurada y fue sede por primera vez del municipio de Pativilca. En septiembre de 1973 la casona fue restaurada por la Comisión Nacional del Sesquicentenario de la Independencia del Perú misma que realizó este tipo de labores en el Balcón de Huaura. La obra en homenaje al Libertador está destinada a perennizar el recuerdo de la etapa Bolivariana, según menciona la placa conmemorativa. Esta obra incluyó la incorporación de una biblioteca. La casona abrió sus puertas como Museo Bolivariano en ese mismo año. Se exhibe el mobiliario, documentos, retratos, entre otros, relacionados con la estadía del Libertador en Pativilca. Así mismo, se conservan la imprenta, los primeros números y el primer editorial de El Peruano, firmado por Bolívar en Se incluye una pequeña muestra fotográfica del distrito de la primera mitad del siglo XX. En el año 2005 se incorporó una colección arqueológica con la inauguración de la Sala de Historia Antigua del Norte Chico. Ello fue producto de un convenio entre la municipalidad del distrito y el Proyecto Arqueológico del Norte Chico (PANC). La casona se constituye de una sola planta y sus ambientes como recibidor, salas y dormitorios, albergan el mobiliario de casa, fotografías, reproducciones de retratos de Bolívar y otros personajes, así como algunas herramientas y maquinarias de la imprenta de la época. En una sala especial llamada Historia Antigua del Norte Chico, se exhiben las evidencias de los valles del Norte Chico y éstas dan 162

171 cuenta de la complejidad social alcanzada en el período denominado Arcaico Tardío (3000 a 1800 años a.c); además se presentan las evidencias de ocupaciones posteriores (900 d.c 1533 d.c) que señalan la larga secuencia de ocupación que se tuvo lugar en la región. La Casona es administrada por el municipio del distrito. La entidad ha designado dos personas que se encargan de la atención y el mantenimiento (limpieza) de los ambientes. Eventualmente, la persona encargada de la atención que consiste en la venta de boletos, realiza guiados a solicitud de los visitantes. El museo abre sus puertas de martes a domingo. La entrada tiene un costo general. Más fuentes de información: Cruz, L. (Junio 2001). Pativilca. Bosquejo de su historia Tomo I. Pativilca. Instituto Nacional de Cultura (Diciembre 1999) Relación de Monumentos Históricos del Perú. Centro Nacional de Información cultural. Lima. Hoces, L. (2005). Los Sorprendentes Valles del Norte Chico: Fortaleza, Pativilca, Supe y Huaura. Boletín de Divulgación cultural. Luis Hoces Ed. Agosto Edición II. Yllia, Ma. E. (2005). Tres museos: Experiencias recientes (Salesiano de Huancayo / Bolivariano de Pativilca/ Etnográfico de Pío Aza). Illapa, Revista del Instituto de Investigaciones Museológicas y Artísticas. Lima, Universidad Ricardo Palma, (2), Registro fotográfico: Fachada, habitaciones y Sala de Historia Antigua Registrado por: Fecha de elaboración: Isabel Cornejo Rivera Enero,

172 FICHA DE REGISTRO N 4 Museo de Arqueología de la Universidad Nacional José Faustino Sanchéz Carrión Datos Generales: Ubicación: Huacho / Provincia de Huaura Calle Eusebio Arroniza S/N (Ex Estación del Ferrocarril). Responsable y/o encargado: Universidad Nacional José Faustino Sanchéz Carrión / Encargado: Lic. Henry Marcelo Castillo. Descripción: Fue creado el 07 de noviembre de 1987 por iniciativa del arqueólogo Arturo Ruiz Estrada. Al ser creado funcionaba en la oficina Escalafón de la Ciudad Universitaria. Posteriormente entre 1993 hasta el año 2000, estuvo funcionando en un local ubicado en la plaza principal de la ciudad (Calle San Román, al lado del que fue antiguo cine Colón). Desde el 2001 se encuentra en lo que fuera una estación del ferrocarril. La antigua estación está bajo el resguardo de la beneficencia pública de Huacho y el convenio con la universidad permite que ocupe las instalaciones. El inmueble como el patrimonio intangible que alberga fue declarado Patrimonio de la Nación a través de la Resolución Jefatural N 270-INC, con fecha 22 de abril de Los ambientes generados para el funcionamiento del museo consisten en: una recepción que se subdivide en una oficina administrativa, una sala de exposición permanente, dos ambientes para depósitos de las colecciones y un ambiente donde transitoriamente se encuentran los objetos que tienen problemas de conservación. Adicionalmente, se encuentra un espacio destinado para el Archivo Regional de Lima, ambiente que no se encuentra bajo la administración del museo. El museo resguarda una colección arqueológica proveniente de las investigaciones arqueológicas conducidas por el Arql. Arturo Ruíz Estrada en el sitio arqueológico Cerro Colorado y las labores de excavación dentro y alrededores de la ciudad universitaria, localizados en el distrito de Huacho. Con el tiempo se han ido sumando nuevas piezas a la colección inicial mediante donaciones. En la actualidad la colección tiene alrededor de 3300 objetos entre los que destacan textiles, vasijas de cerámica, artefactos de madera, restos humanos momificados, entre otros, pertenecientes a culturas prehispánicas locales (500 d.c 1533 d.c). Desde el 2014 se realiza el inventario general que se va incorporando continuamente en el sistema de Registro Nacional de Bienes Culturales del Ministerio de Cultura. La exposición permanente exhibe alrededor de 100 a 150 objetos que se agrupan en vitrinas de acuerdo a criterios como estilos cerámicos, periodificación arqueológica y las principales manifestaciones culturales locales (actividad textil, artefactos musicales, flora y fauna, tatuajes prehispánicos). Es administrado por la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, la cual provee los recursos económicos y humanos para su funcionamiento. Las actividades son programadas anualmente y tienen una partida presupuestal que se va modificando acorde a las actividades y el flujo de visitantes al museo. 164

173 Anualmente se remiten informes de gestión para dar cuenta de las actividades y necesidades de la institución. El personal está conformado por un docente encargado y un auxiliar administrativo. Eventualmente asisten a las labores del museo dos practicantes (estudiantes). El actual director del museo es el profesor. Lic. en Ciencias de la Comunicación, Henry Marcelo Castillo. A sus actividades como docente se le suman las realizadas para el funcionamiento de la institución. Bajo su gestión, el museo ha impulsado diversas actividades de difusión en cuanto a la interpretación de mitos del Norte Chico, y la producción periódica de una revista de difusión de investigaciones científicas (arqueológicas, históricas) y otros estudios llevados a cabo por diversos investigadores en la región. Más fuentes de información: Marcelo Castillo, Henry (Octubre 2014). Informe de desarrollo de actividades del Museo de Arqueología de la UNJFSC Remitido al Jefe de la Oficina de Planificación p. é i. Huacho, Perú. Marcelo Castillo, Henry (Enero 2015). Evaluación del POI y Memoria Institucional 2014 del Museo de Arqueología de la UNJFSC. Remitido a Jefe de la Oficina de Planificación p. é i. Huacho, Perú. Marcelo Castillo, Henry (2007). Proyecto Red de Museos del Norte Chico. Recuperación del patrimonio cultural y natural como estrategias de comunicación Ecoturística sostenible para el Desarrollo Regional. Presentado a la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión. Huacho, Perú. Ruíz Estrada, Arturo (2007). Historia del símbolo de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión, Revista Guara, publicación del Museo Regional de Arqueología. Universidad José Faustino Sánchez Carrión, N 1, Registro fotográfico: Fachada del inmueble e interiores del museo Registrado por: Fecha de elaboración: Isabel Cornejo Rivera Enero,

174 FICHA DE REGISTRO N 5 Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa "Nuestra Señora del Carmen" Datos Generales: Ubicación: Distrito de Paramonga / Provincia de Barranca Responsable y/o encargado: Institución Educativa Particular "Nuestra Señora del Carmen" Congregación Canonesas de la Cruz. Profesor encargado: Juvenal Ramírez Sánchez Descripción: Fue creado y abrió sus puertas por primera vez en el año Su gestación y creación fue posible a la iniciativa de los profesores de Historia, Percy Carrión Rea y Gelimer García Sears. Cuenta con una colección arqueológica conformada por 265 objetos, entre los que destacan: vasijas cerámicas, textiles, mates, cestería, artefactos de madera, la momia de un infante y otros objetos relacionados a la producción textil, mismos que datan del periodo Horizonte Medio (500 d.c 900 d.c) e Intermedio Tardío (1000 d.c 1470 d.c). A finales del año 2009 la colección fue inscrita en el Registro Nacional de Bienes Culturales del Instituto Nacional de Cultura (INC), con lo cual la custodia legal se encuentra reconocida oficialmente y bajo tutela de la dirección escolar (Congregación Canonesas de la Cruz). Desde su apertura, el museo se mantuvo en actividad principalmente en las ferias científico-culturales realizadas anualmente en la escuela. Para estas actividades, los objetos y las propuestas de contenido y disposición fueron organizados por el profesor de turno encargado de la colección que contaron con la participación de estudiantes. En el año 2005, bajo un convenio entre el PANC y la escuela, se realizaron trabajos de conservación y registro de la colección y la realización de una exposición museográfica llamada Norte Chico, Riqueza Prehispánica. Con ello, el museo abrió sus puertas de forma continua desde noviembre de ese año. Esta exposición muestra y agrupa los objetos predominantes de la colección en temas como la actividad textil, personajes míticos, flora y fauna, la concepción de la muerte en los pobladores prehispánicos de la región y una llamada a los peligros que conlleva la destrucción del patrimonio cultural. En la actualidad el museo cuenta con una pequeña sala adaptada para la exposición permanente (100 m2 aprox.); tiene instalaciones eléctricas y vitrinas para tal fin. Además, tiene un ambiente para el depósito de la colección, adaptado dentro de un área de depósito del mobiliario de la escuela; eventualmente sirve para la realización de trabajos de conservación de la colección. Los recursos económicos son provistos por la dirección de la escuela y son mínimos para la compra de materiales para la conservación y mantenimiento (limpieza) de la colección. El funcionamiento por completo está a cargo del profesor, Lic. en Ciencias Histórico Sociales, Juvenal Ramírez Sánchez. El distribuye sus actividades como profesor y encargado del museo, mismas que son la preparación o 166

175 gestión de la producción de materiales de difusión, preparación de alumnos guías, gestión para la conservación y donaciones de materiales para la conservación, entre otras. A lo largo de los años, el profesor ha ido recopilando información de las actividades realizadas en nombre del museo y las labores realizadas por el desde su renovación en el año Los estudiantes tienen acceso y participación en el museo como parte de las actividades programadas por el profesor. Las visitas del público general o estudiantes de otras escuelas del distrito y la región se realizan previa cita. Las visitas son guiadas y realizadas por los alumnos del nivel secundario. El ingreso es gratuito. Más fuentes de información: Holguín, Jesús y Cornejo, Isabel (2007). Reorganización del Museo Arqueológico de la Institución Educativa Nuestra Señora del Carmen - Paramonga. Revista Guara, publicación del Museo Regional de Arqueología. Universidad José Faustino Sánchez Carrión, N 2, Proyecto Arqueológico Norte Chico (2007). Catálogo del Museo Arqueológico Escolar de la I.E Nuestra Señora del Carmen de Paramonga. Archivos del Proyecto Arqueológico Norte Chico, Barranca. Registro fotográfico: Visitas guiada a la sala de exposición a cargo de los alumnos Registrado por: Fecha de elaboración: Isabel Cornejo Rivera Enero,

176 FICHA DE REGISTRO N 6 Museos del Castillo de Chancay Datos Generales: Ubicación: Chancay / Provincia de Huaral Av. 1 de Mayo 1224 Responsable y/o encargado: Empresa privada Descripción: El espacio que alberga el acervo fue fundado en 1990 por Juan Barreto Boggio, después de ser restauradas las instalaciones del Castillo. Este inmueble en una casona construida en la primera mitad del siglo XX y que fue ocupada por la familia de Doña Consuelo Amat y León. Con el tiempo fue abandonada y a inicios de los 90 restaurada casi por completo para convertirla en centro turístico que se mantiene en funcionamiento hasta la fecha. El Castillo de Chancay, como es conocido en la actualidad, cuenta con espacios acondicionados para servicios de hospedaje y entretenimiento. Parte de las habitaciones y muebles originales forman parte del recorrido al Castillo. Adicionalmente, se implementaron salones modernos que conforman la Zona de Museos : El salón de fotografías, Museo Arqueológico del Castillo de Chancay, Museo de los animales, Salón de los espejos, Museo del Vino y el Mirador de la Covadonga. Se trata de salas contiguas en las que se exhiben fotografías de la época de la construcción y remodelación del castillo, animales disecados y objetos para entretenimiento. En especial, se destaca la sala arqueológica la cual es un espacio de alrededor de 225m2 implementado con vitrinas e iluminación básica, en la que se exhiben más de 1000 objetos de la cultura Chancay ( d.c). La exposición muestra la distribución espacial y temporal que esta cultura tuvo a lo largo del Norte Chico, así como sus manifestaciones más estudiadas y destacadas: prácticas funerarias, música y tejidos. La mayor parte de los objetos se encuentran expuestos, conservando sólo en el depósito las que presentan algún tipo de daño. En 1991, la colección fue registrada ante el Instituto Nacional de Cultura (hoy, Ministerio de Cultura). La administración a cargo de una empresa privada se encarga del mantenimiento y operación de las salas. Éstas permanecen abiertas para recibir el continuo flujo de visitantes al castillo. La difusión del Castillo de Chancay y sus instalaciones tiene por completo una finalidad turística. Las actividades en ese sentido están orientadas solamente a promocionar visitas a las instalaciones y a la participación en eventos musicales o deportivos. La atención y visitas guiadas es de lunes a domingo. Son obligatoriamente guiadas para controlar el flujo de visitantes y tienen una duración máxima de una hora. La entrada tiene un costo general. 168

177 Más fuentes de información: Registro fotográfico: Recorrido a las Zonas de Museos del Castillo de Chancay Registrado por: Fecha de elaboración: Isabel Cornejo Rivera Diciembre,

178 FICHA DE REGISTRO N 7 Museo Municipal de Chancay Datos Generales: Ubicación: Chancay / Provincia de Huaral Calle López de Zúñiga #142 Plaza de Armas de Chancay Responsable y/o encargado: Municipalidad de Chancay / Arqueóloga responsable: Miriam Calero Descripción: Fue creado en el año 1991 por iniciativa de la Municipalidad de Chancay. En ese entonces se le asignó un local en el antiguo Palacio Municipal. Las colecciones iniciales se fueron incrementando por donaciones y en la actualidad producto de las investigaciones y rescates arqueológicos realizados en el distrito. Por varios años se mantuvo cerrado hasta que una nueva iniciativa de la alcaldía logró que se apoyara un proyecto para el diseño y construcción de un nuevo Palacio y Museo Municipal. Específicamente, la obra de construcción del museo fue asumida por el Gobierno Regional de Lima. Se encontró bajo un proyecto meta denominado Acondicionamiento de los Recursos Turísticos en la Ruta Ecoturística de la Provincia de Huaral. Con ello se logró que el museo tuviera un espacio propio para el almacenaje y la exhibición de su colección. El museo abrió nuevamente sus puertas al público el año Actualmente, la colección está conformada por alrededor de 2000 objetos arqueológicos, históricos y de arte popular. Entre ellos destacan piezas de la emblemática cultura de la región, conocida como Cultura Chancay ( d.c), denominación que surgió a partir de los primeros hallazgos arqueológicos hechos en el distrito durante el siglo XIX. Además, se encuentran piezas de la goleta chilena La Covadonga, hundida en el puerto de Chancay durante la Guerra del Pacífico ( ), máscaras de teatro y objetos religiosos. Los ambientes del museo se encuentran contiguos al municipio. Consta de tres plantas (750 m2 aprox.) destinadas a salas permanentes y ambientes para la conservación y realización de trabajos sobre la colección como un depósito y laboratorio. Se trata de una instalación moderna equipada con iluminación LED, sistemas para control de humedad, temperatura y seguridad. Además de otras áreas de servicios como recibidor, acceso para personas con discapacidades físicas y espacios para la realización de talleres educativos. En la primera planta se inicia el recorrido de las salas. En ella se encuentra la cronología del desarrollo histórico del distrito. Se destacan hitos históricos como las evidencias que forman parte del foco civilizatorio desarrollado en el Norte Chico, la presencia de la Cultura Chancay, la fundación del distrito en el siglo XVI, etc. Esta planta está destinada a resaltar las principales manifestaciones de la cultura local (ritos funerarios y arte textil) que tuvo su centro en esta localidad y que se extendió a lo largo del 170

179 Norte Chico. Desde el siglo XIX hasta la actualidad el distrito es una fuente prolífica de edificaciones y objetos prehispánicos de lo que exploradores e investigadores en arqueología han llamado Cultura Chancay. Sin embargo, es una fuente que también alimenta el tráfico de bienes culturales pues tanto los objetos textiles como cerámicos por su estética han alcanzado gran demanda en el coleccionismo. La segunda planta muestra el Territorio, naturaleza y paisaje. Se desarrollan aspectos como la geografía, emblemas arqueológicos e históricos y características de la economía y sociedad actual: gastronomía, pesca, agricultura; algunas son acompañadas con décimas, versos que tienen gran popularidad y tradición en Chancay. Finalmente, en la tercera planta se exhiben los restos históricos y de arte popular y religioso contemporáneo. Para la exposición se han empleado recursos multimedia y recreaciones de tumbas, murales. El museo es administrado por la Municipalidad de Chancay. Los recursos económicos provienen de la misma municipalidad. Además, la entidad ha destacado personal para el funcionamiento del museo. Actualmente, la responsable es una arqueóloga que cuenta con el apoyo de un conservador y restaurador. Las colecciones se vienen incrementando con el desarrollo de proyectos arqueológicos realizados en el distrito. El museo abre sus puertas de martes a domingo. El ingreso tiene un costo general que se revierte en el mantenimiento del museo. Más fuentes de información: - Registro fotográfico: Registrado por: Isabel Cornejo Rivera Fecha de elaboración: Enero,

180 FICHA DE REGISTRO N 8 Museo Arqueológico de Huayto Datos Generales: Ubicación: Distrito de Pativilca / Provincia de Barranca Responsable y/o encargado: Institución Educativa Estatal José Pardo y Barreda Descripción: El museo fue gestado en 1999 y su apertura aproximadamente ocurrió en el año Tiene una colección arqueológica conformada por vasijas cerámicas, textiles, entre otros objetos. Ella fue formada tanto por recolección como donación realizada por los estudiantes. Los objetos se exhiben en un aula adaptada para tal fin. Los estilos cerámicos indican que proceden de zonas como la costa y sierra norte del país, así como de la propia región del Norte Chico. Estos estilos han sido identificados dentro de períodos tardíos (Horizonte Medio: 500 d.c 900 d.c; Intermedio Tardío: 1000 d.c 1470 d.c; Periodo Inca: d.c). Atendiendo un poco más a los estilos cerámicos de la región y las referencias de los encargados de la colección, se estima que la procedencia específica de la cerámica seria de los sitios arqueológicos del valle de Pativilca (Cerro Mirador, Churlín). La constitución del museo tiene como propósitos impulsar el turismo arqueológico en el valle de Pativilca y de la región del Norte Chico mediante la vinculación Museos-visitas a sitios arqueológicos y promover mediante la educación los símbolos de identidad local-regional. En la formulación del espacio museístico intervinieron profesores y un arqueólogo de la región mediante su asesoría. Su administración, funcionamiento, así como los recursos económicos, están a cargo de los docentes y de la dirección de la escuela. Los recursos económicos e instalaciones son limitados para su pleno desarrollo. Más fuentes de información: Registrado por: Isabel Cornejo Rivera Fecha de elaboración: Enero,

181 FICHA DE REGISTRO N 9 Museo Municipal Generalísimo Don José de San Martin Datos Generales: Ubicación: Distrito de Sayán / Provincia de Huaura Plaza de Armas del distrito Responsable o encargado: Municipalidad Distrital de Sayán Gerencia de Desarrollo Humano, Social y Económico Descripción: El espacio fue abierto al público en septiembre del Tiene como núcleo diversos objetos históricos y arqueológicos (predominantemente) que se exhiben por completo en las instalaciones de la que fuera la casona donde se alojó San Martín a su paso por la localidad en plena lucha por la independencia. El inmueble con escasos recursos para mobiliario e iluminación se ha adaptado para organizar los objetos en cuatro habitaciones. En la Sala 1 y 2 se encuentran principalmente vasijas cerámicas provenientes del valle de Huaura y corresponden a estilos de la cultura Huaura y Chancay (Horizonte Medio: 500 d.c 900 d.c; Intermedio Tardío: 1000 d.c 1470 d.c). En estas salas se destaca el pasado prehispánico de la localidad y los atractivos turísticos (deportes, gastronomía, sitios arqueológicos). En la Sala 3 se encuentran los retratos y reseñas de los personajes destacados del distrito (hijos ilustres nacidos en Sayán). La Sala 4 presenta los objetos antiguos rescatados o donados por los vecinos del distrito, entre los que destacan libros de fotografías familiares, pinturas y objetos rescatados del incendio que dañó la iglesia principal de la localidad. El espacio es administrado por el municipio distrital. Los recursos económicos y humanos son provistos por dicha entidad. Una persona del área de Gerencia del Desarrollo Humano es destacada como responsable del espacio. Ella se encarga del control del acceso de visitantes además de coordinar las ventas de paquetes turísticos que promociona la municipalidad en el mismo lugar. El estado de conservación del inmueble es regular. Es notoria la necesidad de llevar a cabo labores de conservación y restauración en él. Las instalaciones funcionan de miércoles a domingo. La entrada tiene un costo general y se revierte en el mantenimiento del museo. Más fuentes de información: 173

182 Registro fotográfico: Registrado por: Fecha de elaboración: Isabel Cornejo Rivera Enero

183 FICHA DE REGISTRO N 10 Museo Comunitario de Végueta Datos Generales: Ubicación: Distrito de Végueta / Provincia de Huaura Av. San Martin S/N, Plaza de Armas del distrito. Responsable o encargado: Zona Arqueológica Caral, Unidad Ejecutora Municipalidad Distrital de Végueta. Descripción: Fue inaugurado el 23 de febrero del El espacio es administrado por Zona Arqueológica Caral, Unidad Ejecutora Ministerio de Cultura, en coordinación con la Municipalidad Distrital de Végueta. Se encuentra conformado por una sala de exposición en la que se exhiben los objetos recuperados del Complejo Arqueológico Vichama. Desde el año 2010, se renovó la sala con la exposición: Vichama, la ciudad agropesquera de la civilización Caral: 4200 años de ciencia y tecnología agropesquera, en la que se presentan los últimos resultados de las excavaciones en el complejo que han tenido lugar entre 2009 a 2013; esencialmente muestra las características del complejo y su importancia y vinculación con la Civilización Caral que tuvo gran importancia en el periodo Arcaico Tardío ( A.C). La administración en los últimos años ha logrado el apoyo del Gobierno Regional de Lima para la mejora de la infraestructura y servicios del museo que se efectuaron en el 2009 y El ambiente donde se encuentra la exposición es un local perteneciente a la municipalidad, el cual ha sido adaptado para la exhibición. Para ello se ha recurrido al uso de recursos museográficos como módulos interactivos y reproducción de segmentos de la arquitectura (relieves de personajes hechos en barro). La participación comunitaria se lleva a cabo por medio de talleres de escultura, artesanía, música y charlas sobre patrimonio. Los contenidos y propuesta museográfica son realizados por la Unidad Ejecutora, Zona Arqueológica de Caral. El funcionamiento de la sala es atendido por personal de la oficina de turismo de la municipalidad. El espacio está abierto al público de martes a domingos, de 9 a 5pm, y el ingreso tiene un costo general. Más fuentes de información: Registrado por: Isabel Cornejo Rivera Fecha de elaboración: Diciembre,

184 FICHA DE REGISTRO N 11 Museo Comunitario de Supe Datos Generales: Ubicación: Distrito de Supe / Provincia de Barranca Av. Francisco Vidal N 188 Plaza de Armas del distrito Responsable y/o encargado: Zona Arqueológica Caral, Unidad Ejecutora Ministerio de Cultura Descripción: Fue inaugurado el 08 noviembre de Es administrado por Zona Arqueológica Caral, Unidad Ejecutora Ministerio de Cultura en coordinación con la Municipalidad Distrital de Supe Se encuentra conformado por una sala de exposición en la que se exhiben los objetos recuperados del sitio arqueológico Caral. Se inauguró con la exposición: La Civilización Caral, Símbolo Cultural de la Integración, realizada a partir de los resultados de las investigaciones en el sitio arqueológico de Caral y varios sitios del valle de Supe. En ella se muestra las características sociales, políticas y religiosas de Caral, y su importancia dentro de la complejización social en los Andes. Además, resalta el papel de Caral, y el valle de Supe, como sitio predominante en el periodo Arcaico Tardío ( A.C) en la formación de la Civilización en América. La Unidad Ejecutora Zona Arqueológica Caral gestionó la creación de este espacio con apoyo del Gobierno Regional de Lima y la Municipalidad Distrital de Supe. El museo funciona en un ambiente adaptado de la Casa de Cultura de Supe. Se trata de una sala de 250 m2. Para ello se ha recurrido al uso de recursos museográficos como módulos interactivos, reproducción de relieves, maniquíes, maquetas, entre otros recursos. La participación comunitaria se lleva a cabo por medio de talleres de escultura, artesanía, música y charlas sobre patrimonio. Los contenidos y propuesta museográfica son realizadas por la Unidad Ejecutora, Zona Arqueológica de Caral. El funcionamiento de la sala es atendido por personal de la oficina de turismo de la municipalidad. El espacio está abierto al público de martes a domingos, de 9 a 5pm, y el ingreso tiene un costo general.. Más fuentes de información: 176

185 Registro fotográfico: Registrado por: Fecha de elaboración: Isabel Cornejo Rivera Diciembre,

186 FICHA DE REGISTRO N 12 Museo Arqueológico Casa Hacienda Huando Huaral Datos Generales: Denominación: Ubicación: Centro Poblado de Huando Distrito de Huaral / Provincia de Huaral Responsable y/o encargado: Antonio Bazán. Descripción: El espacio fue abierto al público el 30 de mayo del Es iniciativa de Antonio Bazán, Presidente del Patronato de Defensa del Patrimonio Cultural de los valles de Huaral y propietario de la colección arqueológica que alberga. Esta es una colección bastante conocida en el distrito de Chancay y el Norte Chico, en ella predominan objetos de la Cultura Chancay ( d.c). El espacio museístico se encuentra dentro de uno de los ambientes de la lo que fue una Casa Hacienda que perteneció a Fernando Graña Elizalde. Con la Ley de Reforma Agraria de 1969 impulsada en el país por el gobierno militar de Juan Velasco Alvarado, la administración de la casa estuvo a cargo de una cooperativa conformada por los ex trabajadores de la hacienda. En las décadas 80 y 90 esta forma de administración fracasó y se dividieron las parcelas. En la actualidad la propiedad está a cargo de los ex trabajadores y sus descendientes quienes dan mantenimiento a la casa a través y han encontrado una forma de financiarla mediante guiados a las instalaciones y ambientes de la casona que aún se mantienen. Como se mencionó, uno de estos ambientes fue adaptado para el montaje de la exposición Las Antiguas sociedades de la Provincia de Huaral en el Perú Prehispánico. En ella se muestra los principales logros tecnológicos de la cultural Chancay: textilería, alfarería, arquitectura, ajuares funerarios. Durante el próximo mes de enero el museo cerrará para realizar el mantenimiento de las salas. Este pequeño espacio museístico es administrado mediante la Fundación Bazán, organización sin fines de lucro, creada por Antonio Bazán. Con ella ha podido lograr un acuerdo que le permite utilizar algunas de las habitaciones de la antigua Casa Hacienda Huando para la implementación de la exposición. La fundación recibe donaciones de diversas personas particulares que apoyan la labor de conservación y difusión del acervo. Este espacio abre sus puertas de lunes a domingo, previo contacto con el Sr. Bazán, y el ingreso es gratuito. Más fuentes de información: Registrado por: Fecha de elaboración: Isabel Cornejo Rivera Diciembre,

187 FICHA DE REGISTRO N 13 Museo Escolar "Fernando Graña Elizalde" Datos Generales: Ubicación: Centro Poblado de Huando Distrito de Huaral / Provincia de Huaral Responsable y/o encargado: Institución Educativa Estatal "Fernando Graña Elizalde" N Encargado: Javier Ramírez, personal administrativo Descripción: Fue inaugurado el 6 de diciembre de La iniciativa fue del director de la escuela, Jesús Manuel Medina Gutiérrez. La escuela tiene bajo su custodia una colección arqueológica conformada por alrededor de 6000 objetos pertenecientes a la Cultura Chancay ( d.c). Entre ellos destacan vasijas cerámicas, textiles, artefactos de madera, instrumentos musicales, restos humanos momificados, entre otros objetos Fue formada por recolección y donación. Se estima que proceden de sitios arqueológicos aledaños a Huando, uno de ellos conocido como Saca chispa. La colección fue incorporada en el sistema del Registro Nacional de Bienes Culturales del Instituto Nacional de Cultura (INC, hoy Ministerio de Cultura). A mediados del año 2015, inspectores del Ministerio de Cultura realizaron una supervisión puesto que el director de la escuela denunció una serie de robos de varios objetos de la colección. Como resultado de la inspección se realizaron recomendaciones para la conservación y seguridad de las instalaciones. Toda la colección se encuentra expuesta en dos aulas, en un área de 176 m2 aprox. Estas instalaciones como la de toda la escuela (y buena parte de la localidad de Huando) formaron parte de la Casa Hacienda de Fernando Graña Elizalde. De hecho, se encuentra a no más de 50 metros del Museo Arqueológico Casa Hacienda Huando Huaral. El sector donde se ubica tanto la colección como algunas aulas y oficinas, mantiene la infraestructura original. La colección ocupa lo que fueron dos habitaciones antiguas de la hacienda. El mobiliario (estantería de madera, vidrio y aluminio) y sistema de iluminación son precario e insuficiente para la cantidad de objetos de la colección. Las cédulas indican los nombres dados a los objetos más resaltantes tales como momias. A pesar de estas condiciones, la colección se encuentra en buen estado de conservación. El lugar se encuentra administrado por la Institución Educativa. El director, Jesús Manuel Medina Gutiérrez es el encargado de gestionar apoyo para el mantenimiento de la colección. Además, la persona responsable del funcionamiento y mantenimiento del ambiente y la colección es un administrativo de la escuela que como parte de sus labores incluye esas labores a su trabajo. En los últimos años se ha implementado la iluminación y mejorado las condiciones de la techumbre. Las labores de conservación se limitan a la limpieza mecánica de las salas y las vasijas. 179

188 En 1999, la colección recibió una placa recordatoria del Patronato Provincial de Huaral en reconocimiento a su cualidad de herencia cultural. Antes de los robos, las instalaciones funcionaban de lunes a viernes. A raíz de ello se ha restringido las visitas a una coordinación previa. En su mayoría la sala es abierta a los estudiantes de la institución y de alrededores. El ingreso tiene un costo general que se revierte en el mantenimiento del museo. Más fuentes de información: de-huando-huaral/ Registro fotográfico: Registrado por: Fecha de elaboración: Isabel Cornejo Rivera Enero,

189 FICHA DE REGISTRO N 14 Museo Ecoarqueológico Datos Generales: Ubicación: Huacho / Provincia de Huaura Av. Moore 628 Responsable y/o encargado: Miguel Ángel Silva Esquén. Descripción: Se trata de una colección arqueológica formada aproximadamente desde la década de los 80. Los objetos que predominan son de la Cultura Chancay ( d.c) y provienen de la localidad (Valle de Huaura, Chancay y Huacho). Se encuentra una mínima parte de ella expuesta en una ambiente dentro de la vivienda del coleccionista. La administración es por completo llevada por el Sr. Silva Esquén. Las visitas pueden realizarse previa cita. Más fuentes de información: - Registrado por: Isabel Cornejo Rivera Fecha de elaboración: Enero,

190 FICHA DE REGISTRO N 15 Datos Generales: Exposición Museográfica "Los Huacos" Descripción: Ubicación: Distrito de Hualmay / Provincia de Huaura Jr. Túpac Amaru Mz-B Lot. 05 Responsable y/o encargado: Municipalidad Distrital de Hualmay Área de Educación, Cultura, Deporte y Turismo / Encargado: Juan Carlos La Rosa La exposición fue inaugurada en agosto del El espacio en si consta de una ambiente implementado para una exposición y muestra los hallazgos de las intervenciones arqueológicas realizadas en 2009 en la zona arqueológica Los Huacos. El proyecto de investigación arqueológica fue iniciativa de la alcaldía del municipio para la revalorización y Puesta en Valor de tres edificaciones de la zona arqueológica (Montículos 19, 25 y 30) con miras a convertirla en una expresión de identidad y desarrollo económico por medio de su integración al Circuito Turístico Cultural de la Región Lima. La exposición tuvo como antecedentes una exposición temporal realizada en el 2012, denominada Ciudad de Barro. En ella se mostraron los hallazgos recuperados del Montículo 30, se le definió como un centro administrativo religioso para lo que se exhibieron los restos y el ajuar funerario de una mujer. Las evidencias procedentes del montículo indican que la última ocupación de la zona tuvo lugar durante el período Horizonte Tardío ( d.c). La actual exposición museográfica: Ciudad de barro. Símbolo de Identidad e Integración Regional se encuentra en la primera planta de un local otorgado por la municipalidad para dicho fin. Se ubica a unas cuadras del municipio y a 1 Km de la zona arqueológica. El inmueble está en buen estado, cuenta con instalaciones eléctricas y condiciones de seguridad para el resguardo de los objetos. La exposición se desarrolla en varias habitaciones y consta de 100 m2 aprox., en los que se ha implementado vitrinas y paneles. La exposición da cuenta de los principales hallazgos recuperados por el proyecto. La administración se encuentra a cargo de la Municipalidad Distrital de Hualmay. Este ha delegado un responsable del área de Educación, Cultura, Deporte y Turismo para la atención al público. Además, ha previsto la contratación de arqueólogos. Sin embargo, en estos momentos el acceso y mantenimiento a la exposición se ha cerrado temporalmente hasta concluir con la contratación del personal. El espacio es visitado continuamente por grupos de escolares de las instituciones educativas de la localidad de Hualmay y Huacho. Funciona de lunes a viernes, previa cita con el encargado. Más fuentes de información: =3 Registrado por: Isabel Cornejo Rivera Fecha de elaboración: Diciembre,

191 FICHA DE REGISTRO N 16 Datos Generales: Colección arqueológica de la I.E Huaricanga Descripción: Ubicación: Centro Poblado de Huaricanga - Distrito de Paramonga / Provincia de Barranca Responsable y/o encargado: Institución Educativa N Huaricanga-Paramonga. La I.E Huaricanga posee una colección arqueológica constituida básicamente por vasijas cerámicas, correspondientes con los estilos locales tardíos (Horizonte Medio: 500 d.c 900 d.c; Intermedio Tardío: 1000 d.c 1470 d.c). La colección se ha ido conformando por medio de donaciones. No se tiene registro del año o fecha exacta en que se comenzó a formar la colección. Producto del contacto de la Directora María Pajuelo Encarnación y la Profesora de Historia Elva Torres Cristóbal con los miembros del Proyecto Arqueológico Norte Chico, se estableció en el 2006 un convenio para el registro de las piezas de la colección. El resultado del trabajo fue un documento con el inventario de la colección, con recomendaciones para su conservación y para el establecimiento de un Museo Escolar. A fecha de hoy no se ha logrado consolidar el museo, sin embargo, las piezas se exhiben en un aula de la escuela. Las visitas son con cita previa en la dirección de la institución educativa. Más fuentes de información: Proyecto Arqueológico Norte Chico, Institución Educativa (2007). Catálogo de las piezas arqueológicas de la I.E de Huaricanga. Archivos del Proyecto Arqueológico Norte Chico, Paramonga. Registrado por: Isabel Cornejo Rivera Fecha de elaboración: Enero,

192 FICHA DE REGISTRO N 17 Datos Generales: Comité Museo Provincial de Barranca Ubicación: Provincia de Barranca Responsable y/o encargado: Luis Bustamante Girio. Descripción: Fue fundado en febrero del año 2007, reconocido en registros públicos en el 2008 (Partida N ), por una asociación civil conformada por miembros de la Cámara de Turismo de Barranca, docentes escolares y universitarios de la región, arqueólogos del Proyecto Norte Chico, representantes de la Unidad de Gestión Educativa de Barranca, entre otras personas de la ciudad de Barranca. El comité se formuló motivado por los talleres participativos desarrollados por el Proyecto Norte Chico en Pativilca, y tiene como propósito el generar una institución que promueva la visión integral de la historia... (Advíncula 2015). Uno de los objetivos que tiene el Comité es crear un tipo de administración mixta en la que confluyan diversos sectores, lo estatal, privado y la organización civil. Apunta a convertirse en uno de los museos eje de desarrollo y referente del Norte Chico. En la actualidad el comité viene gestionando la donación de un terreno de la Beneficencia Pública para la proyección de la propuesta museográfica. Uno de los aspectos que generan debilidad en estas acciones es la formulación conclusa y determinada del acervo. Más fuentes de información: Advíncula, M. (2015). Entrevista al arqueólogo Mario Advíncula Zeballos (23de diciembre de 2015). Transcripción de entrevista realizada por Isabel Cornejo al arqueólogo Mario Advíncula, parte del equipo del Proyecto Arqueológico Norte Chico entre 2002 a Lima, Perú. Marcelo, H. (2015). Entrevista al Dr. Henry Marcelo Castillo, director del Museo de Arqueología de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión (15 de diciembre de Transcripción de entrevista realizada por Isabel Cornejo al Dr. Henry Marcelo Castillo. Huacho, Perú. Registrado por: Isabel Cornejo Rivera Fecha de elaboración: Diciembre,

193 ANEXO 2 Entrevistas a los agentes involucrados en el quehacer museológico 185

194

195 ENTREVISTA 1 Juvenal Juan Ramírez Sánchez es Licenciado en Ciencias Históricos Sociales. Desde hace más de 25 años se desempeña como docente en esta área dentro de diversas instituciones escolares del Norte Chico. Desde inicios del año 2005 se desempeña como docente de Ciencias Históricos sociales del nivel secundario de la Institución Educativa Particular Nuestra Señora del Carmen localizada en el distrito de Paramonga. Desde entonces, también es el encargado del Museo Arqueológico Escolar de la institución, donde realiza diversas actividades que se concentran en la gestión y articulación del espacio con la enseñanza de la historia prehispánica de la región en las aulas. Ha realizado cursos de especialización y actualización docente en Historia y Geografía, también, ha participado en diversos cursos y capacitaciones sobre museos y conservación del patrimonio arqueológico. La entrevista fue realizada el día domingo 28 de junio del 2015 en la ciudad de Huacho. (*) En lo sucesivo se utilizan las siglas de los nombres de los entrevistados. En negrita y corchetes se incluyen las siglas del nombre de la investigadora (I.C) y sus intervenciones. I.C.: En qué consiste el trabajo como docente de historia? Pero, en especial, cómo se articula y relaciona con su trabajo en el museo escolar? J.R.: Soy profesor de Historia y Geografía del 1 a 5 año de secundaria y al mismo tiempo encargado del museo, esta [labor] viene como parte de la carga [docente]. Debo dedicar dos 2 horas en el museo pero trabajo más de 20 horas [risas] Me dieron dos horas semanales pero yo trabajo más horas en el museo. Osea que en el documento [carga lectiva] dice dos horas de museo en el horario en el horario me ponían los días jueves, por decirte, pero era variable porque se presentaban [visitas] lunes, martes, en la tarde, en la mañana, hasta a veces sábado y domingo se presentaban por las visitas que yo tenían que atenderlo. Como profesor solamente trabajaba 26 horas semanales y con el museo tenía dos horas, que serían 28 horas. Esa era mi carga horaria. El museo está relacionado porque yo dictaba Historia y ambas están relacionados como parte de la carga curricular o contenidos del curso. Cuando estudiábamos la cultura Chimú, íbamos al museo a ver la cerámica y ver ciertos aspectos eso era durante las horas de clase Por decirte, me tocaba el origen del hombre, en el museo buscábamos en el tema El antiguo Poblador y su entorno, les explico eso utilizando ese ejemplo para que puedan entender cómo fue el desarrollo del hombre en la región. Se puede explicar, que primero eran cazadores, recolectores, pescadores y después empezaron a practicar la agricultura, la ganadería, porque ahí se muestra. Parte de eso, trato de que relacionen a los habitantes antiguos con el medio donde se ubicaban como en orillas de tres zonas: mares, lagos y caminos, porque tenían facilidades en trasladarse y en la obtención de sus recursos animales, plantas. Osea que todo eso se relacionaba pues con otras actividades productivas que se muestran en la exposición. Por ejemplo, en el tema [expositivo] La muerte de los antiguos pobladores, yo lo tomo como ejemplo para explicar la religión y la muerte, a partir de los fardos, la posición fetal en que enterraban a sus muertos les hago ver e investigar cómo y en que otros lugares del mundo los hombres comienzan a tener idea de que cuando uno muere, este tiene vida en otro mundo. Entonces [los alumnos] relacionan la forma de enterramiento [fetal y/o momificada] que vemos con la posición en que ellos nacían, en que nacen todos los seres humanos. Entonces nos acercamos juntos a una explicación, visión o creencia de la vida después de la muerte. Yo mismo tomo estos temas del currículo y lo adaptaba para desarrollarlo en el museo. 186

196 I.C.: Veo que tiene mucha libertad desde la dirección para trabajar y articular sus clases y lo que ofrece el contenido temático del museo. Aparte de ello, qué otras facilidades tiene para desarrollar estos trabajos en el museo? Por ejemplo, presupuesto, materiales, capacitación, etc. J.R.: Facilidades para las visitas y sobre todo para difundir el museo por radio, periódicos, televisión, esté eeh...tengo, como puedo decirte, total libertad para hacer actividades, la dirección no me impone eres testigo que los recursos son mínimos me agencio mediante donaciones, auspicios de personas ajenas al colegio. La dirección apoya con materiales, cosas mínimas, pero después, impresiones y todo corre por cuenta mía. Ya con los auspicios y donaciones de personas de buen corazón I.C.: Cuando entro a trabajar en el colegio, qué sabía entonces del museo escolar en términos de antecedentes? Y en la actualidad percibe algún cambio significativo en este espacio? J.R.: El museo, anteriormente [en los 90 y 2000], claro que trataron de activarlo. Lo activaron pero no de manera podríamos decir de manera pedagógica, sino que clasificaron de acuerdo a su criterio. En cambio con ustedes [Proyecto Arqueológico Norte Chico] en el 2005, el Dr. Arturo Ruiz, el apoyo de Arabel Fernández [especialista en textiles prehispánicos] logramos organizarlo de forma científica porque utilizamos técnicas en el sentido de que se pudo determinar de qué periodo pertenecía cada cerámica o cada tejido o cada objeto de madera ubicamos los objetos por culturas y por periodos. Previamente a eso en el museo se hacían exposiciones pero, como te puedo decir, bajo un criterio muy libre del profesor [de turno] da más. I.C.: Ud. Entro a trabajar en el NSC en el En ese año fue que contacto con el PANC? J.R.: Si. Claro, con ustedes [Proyecto Arqueológico Norte Chico], y en ese mismo año lo reaperturamos. En noviembre fue. Empezamos a trabajar creo que en el mes de mayo, junio. Después de meses de trabajo, el museo lo reaperturamos el 18 de noviembre del 2005, con el apoyo de la madre Juana Herrera. La persona que me sirvió de puente fue la señora Katty Li, era Regidora de Pativilca. Hubo una muestra en el museo de Pativilca y fue donde me contacto con Mario Advíncula y Álvaro Ruíz, y ya luego con ellos me contactaron con ustedes [Jesús Holguín e Isabel Cornejo] [Mario Advíncula y Álvaro Ruíz] hicieron un convenio con la madre directora [Sor Juana Herrera], pero yo no estuve al tanto de ese convenio Creo que ese convenio estipulaba que deberíamos siempre estar en funcionamiento. Inclusive hicimos una muestra en el Hotel Chavín de Barranca (2007?) y en base a esa muestra nos regalaron dos vitrinas; si era una donación que era parte del convenio. I.C.: Y los trabajos, básicamente en qué consistieron? J.R.: el inventario, mantenimiento, ubicación de las piezas según las culturas por periodo. Eso lo hicimos con ustedes [Proyecto Arqueológico Norte Chico] y con la participación del Dr. Arturo Ruiz Estrada para determinar cuáles eran replicas, cuáles era originales Y con Arabel Fernández hicimos la cuestión de los tejidos porque ella es especialista en textiles [conservación de textiles prehispánicos] a ella le mandamos unas muestras para identificación y colaboró con ello. Si, también llegó al colegio, visitó la exposición y allí trabajamos con Jesús Holguín y ella, toda una tarde trabajamos allí. I.C.: Ud. Me decía que ha hace varias labores dentro del museo, cuáles son? J.R.: Si publicaciones no se le pueden llamar, pero difusión si difusión en radio, difusión en televisión, en periódicos, etc. Ahora, lo malo? Lo malo es que los periódicos que tenía. Todo eso se quedó en mi casillero ese año que no trabajé, te acuerdas?, ese año que me dio el derrame. Fue en el 2013, yo no trabajé pues y todo se quedó en ese casillero. Te los mostré, lo dejé en mi casillero pero cuando regresé en el 2014 ya no lo he encontrado El documental del 2009 no se perdió? Claro, eso lo tienes no es cierto? Si. Ya, si, eso es una muestra del trabajo que se ha realizado. 187

197 Elaboramos trípticos también. Osea, hemos brindado servicios no solamente al distrito, sino a la provincia, a la región y también fuera porque han venido tanto de Lima a visitar, Japón, Colombia. De Colombia vino una chica de parte de Miguel Aguilar para hacer un estudio de cerámica negra; tomo fotos y todo. De Japón vino alguien [Naotoshi Ichiki] con Mario Advíncula que también vino a estudiar la cerámica de esta parte [Región].ellos sacaron fotos, y median, y registraban toda la cerámica. I.C.: cómo apoyan por ejemplo, municipalidades, otras instituciones? J.R.: Solamente una sola vez el Consejo municipal del distrito de Paramonga ha dado materiales para mantenimiento. Materiales como guantes, agua destilada Una sola vez nada más, después nunca hemos recibido apoyo ni del consejo ni de otra institución cómo se dio ese apoyo? Por medio del presidente de la APAFA [Asociación de Padres de Familia] del colegio que fue bien allegado al alcalde de esa época, Roberto Díaz de la Cruz contactamos pero solamente una vez nos han apoyado. Después ya no más. Y de allí ya no hemos tenido el apoyo de ningún alcalde. Pero, pero si hemos brindado servicio al consejo municipal en su circuito turístico que hacían por fiestas patrias y por el aniversario de Paramonga.ellos mandaban un oficio a la dirección de la escuela y ya la dirección nos comprometía para poder hacer ese servicio de guiados con alumnos.los alumnos de primero a quinto de secundaria. Y siempre ellos colaboran de esa forma (guiados)? Colaboran si, y de manera personal el colegio les daba refrigerios o yo de manera personal. Pero el consejo raras veces que nos apoyaba. Y otras municipalidades apoyaron? No ninguna. Ni siquiera empresas u otras instituciones? Nada, nada, solamente los que han apoyado son personas naturales y medios de comunicación, por ejemplo Nedtel de Paramonga, radio Supermix y periódicos como Chasqui, El libertador que daban un apoyo gratuito e incondicional, pero después nada son contactos suyos? Si, son contactos de uno. I.C.: Y por ejemplo, para materiales de conservación, apoyaban los padres de familia? J.R.: Los materiales de conservación un poco los alumnos y las madres de los alumnos. Por ejemplo, ahora último [2015] con la Madre Amparo se compraron materiales de conservación. No había un presupuesto mensual que era de tanto. Hay presupuesto? No, cuando uno lo requiere, apoyan [dirección escolar] nada más. Así ha sido siempre. A pesar que habían ingresos económicos por el guiado pero no tenemos un presupuesto. I.C.: Cómo funciona el guiado en el museo? Quiénes lo visitan con más frecuencia? J.R.: Vienen de colegios de otros lugares y dejaban algún recurso [donativo]. Inclusive para hacer los trípticos con esos recursos o sino con personas a las que se les pedía apoyo. Llaman de colegios y acordaban la fecha de visita el libro de visita que puede dar fe de lo que estoy diciendo. Allí dicen cosas positivas del museo, que era bueno, que da a conocer la historia de la zona, que es interesante, que los alumnos de la escuela que hacen el guiado están bien preparados, que así deberían hacer en otros colegios buenos comentarios. Felicitan al colegio, felicitan a los alumnos, al mí. Algo negativo es que piensan que la exposición debe ser más grande, que debe tener más cosas en exhibición. I.C.: Dentro de poco entrará usted se retira de la docencia, cómo se dará ese cambió en el museo de la escuela? J.R.: Está ya el profesor Torres Roque. De él dependerá que se realicen todas las actividades. He dejado preparado a los alumnos de cuarto de secundaria para los guiados; desde el año pasado ellos se están encargando del guiado. Eventualmente le diré sobre las actividades del museo, también para apoyarlo en lo que sea necesario para el museo Él ya se debe encargar no solo del funcionamiento sino de la difusión, de todas esas cosas Mantenimiento, difusión. Si indicáramos un número de personal del museo. Una persona nada más. 188

198 I.C.: Cómo cree usted que puede contribuir el museo en la comunidad de estudiantes, en la comunidad de Paramonga y en la de Norte Chico? J.R.: Contribuye tratando de fomentar la identificación del pueblo de Paramonga con su cultura antigua. La identificación conociendo su historia va a querer más a su pueblo, se va a identificar más con su historia y quizás también va a poner en práctica ciertas enseñanzas, valores que transmiten o que han transmitido los antiguos pobladores para tratar de comprender el presente y tratar de mejorar la calidad de vida o en diferentes aspectos dentro porque ahora Paramonga está tomando un caso muy especial, en el sentido que está a cargo de los Wong que es el dueño de Agro Industrial Paramonga el grupo Wong ha entrado a Paramonga ya hace años porque compró la empresa, pero al comprar la empresa se ha apropiado de varias inmuebles: del hospital, del estadio. Y la población quiere recuperar eso. Entonces, el museo como participa en eso? Tratando de buscar la identificación del poblador con su comunidad a través de su historia, conociendo su cultura, transformando el presente, etc. Y Dentro del Norte chico a que cree que pueda contribuir? Va a conocer por medio de la cerámica, de los tejidos, de los trabajos en madera, va a conocer la forma de vida de los antiguos pobladores y también al mismo tiempo el nivel cultural que ellos tenían. I.C.: Ud. cree que ahora hay un cambio en la forma en que se ve ahora el museo? ( de los ochenta para acá). J.R.: Del año 87 a este año si ha habido un cambio hasta ahora Ha habido un cambio hasta mayo del 2015 con el trabajo con los arqueólogos. Ahora yo no sé si habrá cambios más adelante, cómo trabajará el profesor hasta donde yo he visto ha habido un cambio con el proyecto Norte Chico.se ha logrado que el museo adquiera una importancia Osea, que se reconoce el museo, se ha hecho conocido en toda la región a través de la red de museos. Cómo aporta la red de museos? porque por medio de la universidad de Huacho [Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión] a través de su revista Huara ha dado a conocer bastante los restos que contenemos, tanto cerámica como tejidos, etc. I.C.: Y en relación con otros museos, por ejemplo el más cercano, como el museo escolar de la Fiscalizada, se tiene o mantiene algún contacto? J.R.: No ha habido relación porque la Fiscalizada no se mantiene activa pues en cambio el museo de nosotros siempre está activo. Cuando van a visitarlo no tienen guías solamente los que van miran nada más. Vinieron alumnos de la universidad de huacho y yo los lleve y solamente pudimos mirar porque no hubo quien nos guíe. I.C.: Qué relación tiene este museo con la red de museos? J.R.: La única relación que hemos tenido es con el profesor Henry Marcelo, porque después con los otros museos nada. Con el museo de Pativilca, con el Museo Balcón de Huaura, por decirte con Caral, con Bandurria, no hay ninguna relación o acercamiento. La única relación de intercambio que hemos tenido sobre conocimientos es con el profesor Henry Marcelo que está a cargo de la Red de Museos él nos ha mandado visitantes, nos ha mandado alumnos de la universidad también visitan o realizan [de la carrera de Comunicación] los trabajos universitarios que él les había dejado; algunos se difunden en la revista del museo, se difunde el museo en otros medios también. El único contacto con él pero después con el resto de museos ninguno hemos tenido. I.C.: Cómo entiende la red de museos del Norte Chico? J.R.: Pienso que falta más integración cada museo. Si bien es cierto hay una red de museos pero no hay una organización, no hay una comunicación. La red la entiendo como un conocimiento de los museos que existen en el Norte Chico pero no existe una relación, una comunicación o un intercambio de conocimientos para poder determinar a ciencia cierta la evolución cultural de la región. 189

199 I.C.: Qué otros museos tiene presente que son parte de la red? J.R.: Los museos más representativos son el Bolivariano, el Museo del Balcón de Huaura y el Museo que la Arql. Ruth Shady ha abierto en Caral, en Supe y el Museo de la Universidad de Huacho funcionan varios y otros no y no hay una relación En Huacho hay varios colegios pero no funcionan, por ejemplo el Xammar 190

200 ENTREVISTA 2 Arturo Ruíz Estrada es Doctor en Arqueología. Se desempeña como director de la Escuela Profesional de Arqueología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM). Es profesor emérito de la Universidad Nacional José Faustino Sanchez Carrión (UNJFSC), localizada en la ciudad de Huacho. Además, es Asesor científico Ad Honorem del Museo Arqueológico de dicha universidad. A mediados de los 70 y en los 80 a partir de sus trabajos arqueológicos en el campus universitario, fue el principal impulsor para la creación del museo de esta casa de estudios. Por su reconocida trayectoria como investigador en la región, fue Asesor Científico del Proyecto Arqueológico Norte Chico. La entrevista se realizó el 10 de diciembre de 2015, en la dirección dela Escuela de Arqueología, en la Facultad de Ciencias Sociales de la UNMSM. I.C.: Doctor, Cuáles son los inicios de sus trabajos de investigación en el Norte Chico y en la creación del Museo Arqueológico de la UNJFSC? A.R.: Mis trabajos en el Norte Chico, específicamente en el valle de Huaura y en la ciudad de Huacho y su entorno se inician a raíz de la construcción de la ciudad universitaria de Huacho. Porque al levantar y construir las edificaciones se dieron cuenta que habían materiales arqueológicos. Entonces las autoridades de ese tiempo, yo todavía no estaba en Huacho, convocaron a un concurso para que vea esa problemática de la aparición de restos arqueológicos en la actual ciudad universitaria a un arqueólogo. En ese momento yo trabajaba en el Museo Nacional de Antropología, donde era director el Dr. Lumbreras. De modo que habiendo esa oportunidad, me presente a ese concurso para hacer investigaciones arqueológicas propiciadas por la universidad de Huacho. Gané ese concurso y a raíz de eso, presente un proyecto para investigar justamente en terrenos adyacentes en la parte sur de la ciudad universitaria. Ese proyecto se aprobó y naturalmente hice las excavaciones respectivas, ubicando varias tumbas de los huachanos ancestrales. Eso naturalmente dio resultados de muchos materiales arqueológicos. Entonces por supuesto que me dieron algunos ambientes en la ciudad universitaria donde iniciamos los análisis de esos materiales, pero los materiales fueron creciendo porque al entorno de la ciudad de Huacho existen numerosos cementerios, entonces nosotros también al mismo tiempo que realizábamos la excavación también realizábamos la exploración para conocer todo el contexto funerario de toda esa área. Y acumulamos miles de materiales, tanto restos óseos humanos, cerámica, tejidos, en fin, materiales de madera, en fin, todo tipo de material que se conserva en este territorio desértico. Y esa fue la idea fundamental para crear y fundar un museo, donde se conservase y se investigase desde luego los restos que iban apareciendo. El origen de la existencia del museo actual de Huacho es ese, el resultado de las excavaciones que inicie en la ciudad universitaria de Huacho. I.C.: La idea de fundar el museo fue una iniciativa de usted a raíz de todos estos trabajos? A.R.: Por supuesto, yo siempre tuve esa iniciativa. También formé un museo, una colección por ejemplo en Puno, en el complejo arqueológico de Sillustani. Deje numerosas piezas allí resultado de los trabajos que hice. Pensé hacer eso también en Kuelap [Cultura arqueológica Chachapoyas, Provincia de Luya] pero no me dió tiempo porque allí estuve solamente unos tres meses trabajando, luego me reemplazaron otros colegas y no pude cumplir con esa tarea de fundar un museo. Por lo menos los museos de Sillustani y Huacho me corresponden en su organización y en su fundación, para que la población naturalmente de esos pueblos observe los objetos que han creado, han producido sus antecesores hace cientos miles de años, para que el pueblo conozca, porque en el Perú muchos pueblos no conocen su historia. Y eso pasó 191

201 en Huacho porque cuando presente todos esos objetos; además, hable y publique en los diarios locales, los hallazgos digamos y las visitas que yo hacía a determinados monumentos arqueológicos del valle de Huaura, llamo la atención de la población. Entonces así se enteró Huacho mismo de que tenía un pasado, de que tenían restos de alta importancia, a raíz de eso es que fui declarado como hijo predilecto de Huacho en vista de que les hacía conocer su historia. Ese es el detalle como resultado de mis trabajos y desde luego la fundación del museo que hasta ahora persiste. Desde luego es la exhibición de una colección en la cual falta todavía articular toda una perspectiva, un proyecto museográfico, museológico Por lo menos como hay problemas en las universidades que las autoridades no dan mucha importancia a veces a la presencia de un museo y a la propia investigación arqueológica, no les dan los recursos suficientes por eso el museo esa en esa situación. I.C.: En esta primera etapa que da inicio al museo cómo fue el tránsito del museo dentro de la universidad? A.R.: Bueno, en primer lugar se tuvimos una etapa de transición y sufrimiento puesto que yo ya salía de la universidad de Huacho en 1992, entonces los restos arqueológicos que estaban en un local los sacaron fuera. Entonces cuando fui de visita a Huacho, me enteré y reclamé esa situación. Entonces los restos los pasaron a una parte, al primer piso de lo que era el teatro de la universidad. Posteriormente pasó a un local que se solicitó a la Beneficencia Pública, lo que es la antigua estación del ferrocarril que es donde ahora está el museo, y que ya otros colegas, otros profesores ya asumieron la instalación del museo en ese lugar donde funciona actualmente. I.C.: Cómo fue su incorporación al equipo de docentes de la universidad? A.R.: Al poco tiempo de que yo inicie las excavaciones y los trabajos, algunas personas como profesores me reclamaron el porqué estaba solo dedicado a investigar como si fuese un gran pecado! Entonces alguien mencionó que yo debería dar clases. Efectivamente, creo que la investigación debe dar como resultado, proporcionar información a la población, a los estudiantes. Me propusieron que dicte clases en la Facultad de Sociología. Entonces también resulté como profesor y al mismo tiempo investigando. Pero en ningún momento dicte un curso de arqueología. Di cursos de Ciencias Sociales, del Hombre y Sociedad, Antropología Social, pero no específicamente cursos de arqueología. No existía la carrera, lo que existía era Sociología, Trabajo Social y otras especialidades como Educación, Ingeniera En ningún momento dicté una clase de arqueología, salvo dictar alguna conferencia a la población o a las asociaciones en Huacho. Estuve allí, fue elegido como decano también en dos oportunidades en la Facultad de Sociología y ya pronto se dio mi salida, mi cese de la universidad es en Entonces luego, asumieron varios otros profesores la dirección del museo, hasta que tomó eso el actual director, Henry Marcelo. Es el que más tiempo ha estado y tiene mucha voluntad y entusiasmo pero no tiene espacio como para que despliegue una real exposición como debe ser. I.C.: Entre 1987, año en que se fundó el museo, hasta el año 1992 cómo planificó u organizó su funcionamiento? A.R.: Lo hice por iniciativa propia, comprendiendo esas necesidades de mostrar a la población parte de su historia. Y teníamos en los locales que nos daban en la ciudad universitaria exposiciones sencillas que eran visitadas por escolares y parte de la población. Pero cuando ya el museo resulta expuesto a toda la población es cuando funciona en el local del antiguo ferrocarril. I.C.: Coménteme sobre las exposiciones museográficas o museos que se conocían alternamente al museo universitario A.R.: Claro aparte del museo de Huaura dedicado a la gesta libertaria, había un museo en la ciudad de Huacho que estaba regentado por el señor Domingo Torero Arrieta, en un local en el centro de la ciudad 192

202 donde se ponían muchos objetos resultado de las colecciones que había hecho el mismo señor o de donaciones. Era importante porque estaba instalado más o menos adecuadamente para lo que es la ciudad y para las posibilidades que tenía el señor Domingo Torero con el apoyo de la municipalidad que le dio el local. Pero posteriormente con el fallecimiento del señor el museo quedó cerrado como ocurre hasta ahora. Y el único museo que quedó fue el de la universidad que nosotros fundamos. I.C.: Paralelamente cuando el museo universitario fue creado e inaugurado surgieron colecciones, museos escolares u otros museos? A.R.: Efectivamente, algunas instituciones en vista de que la universidad había gestado el crear un museo Yo me acuerdo que un colega de la universidad, también en una institución pedagógica que tenía, creó una sala con muchos objetos arqueológicos que los exhibía naturalmente a los alumnos o a otras personas que iban. Yo estuve en la inauguración de ese museo. Además, surgieron otras personas como el señor Silva Esquén que tiene su colección particular, además del Instituto Pedagógico de Docentes, también algunos centros escolares como del colegio Xammar que tenía una colección en su institución. I.C.: Tiene conocimiento de la colección escolar de la Institución Educativa Fiscalizada? A.R.: En Paramonga, claro. Es una colección de esa institución y que tiene objetos realmente importantes sobre todo objetos donde se muestra lo que se llama la o conoce como el Estilo Pativilca, muy importante. I.C.: A mediados de los años 80 y principios de los 90 en el Norte Chico se encontraban muchos proyectos que se afectaron por la presencia del terrorismo. Coménteme sobre esta situación A.R.: Fue una etapa difícil aquella por la subversión. Durante esos diez años nosotros, personalmente o no salía a hacer exploraciones al valle de Huaura porque había mucha convulsión social. Aparecían muertos aquí y allá y era difícil viajar incluso a las partes altas de las comunidades [Serranía]. Sin embargo, fui por ejemplo al pueblo de Pimachi, publiqué sobre Pimachi [Provincia de Ocros, Departamento de Ancash, al norte del Departamento de Lima]. Pero después se agravó la situación, mataron a dirigentes de allí y no salí más. Entre los 80 y 90 fue una convulsa, en la misma ciudad de Huacho, en Huaura, en la Campiña [de Huacho]. La universidad también fue afectada tuve un alumno, Pedro Yauri, un buen alumno. Conservo su trabajo de investigación porque fui su profesor. El como era periodista, entonces tuvo problemas, entonces no se sabe hasta ahora donde, está desaparecido. I.C: En la época en la que establece el museo cómo era el financiamiento y el funcionamiento del espacio? A.R.: Desde un principio la universidad se comprometió a proporcionar los materiales para los trabajos de investigación y exploración porque tuve la suerte de que había un rector visionario. Fue justamente este Dr. Acosta el que convocó el concurso, dijo que quien debía ver el tema era un arqueólogo, por eso llamo a un concurso. Si no hubiera habido esas circunstancias jamás hubiera estado en Huacho Había un personal que la universidad pagaba y con todos ellos hicimos las exploraciones e iniciamos la idea de hacer un museo en Huacho. El contenido de la exposición era la cultura regional expresada en restos óseos, restos de tejidos, restos de maderas, restos de alimentos, partes de momias tatuadas, eso era el principal. Se exhibía la cultura material pero tratando de hacer conocer el proceso que había sufrido Huacho en su historia, desde sus inicios hasta la etapa Incaica. Tratábamos de expresar todo el proceso de forma sencilla porque no teníamos espacio, vitrinas, no teníamos una serie de detalles que ahora por lo menos ya están en un local estable. 193

203 I.C.: Coménteme lo que conoce sobre el termino Norte Chico A.R.: Lo había oído, así decían era el Norte Chico, muy ligado al Norte Grande con La Libertad. I.C.: Háblame sobre su participación en el Proyecto Arqueológico Norte Chico y de lo que este tipo de estudios sobre el Origen de la Civilización movieron o propiciaron por ejemplo en el aspecto turístico de la región del Norte Chico A.R.: Desde luego, se han abierto hasta tiendas, unos lugares para promover el turismo, ya empezaron a pensar en los lugares próximo como las Salinas [de Huacho], la laguna que está cerca, el Puerto, o promocionar la gastronomía Huachana que tiene buena tradición. Yo creo que la presencia o la muestra arqueológica, las evidencias, han movido en algo a la población. Tanto en el conocimiento de su historia como el articular también actividades de tipo turístico. Es así en los pueblos, las universidades y la creación de museos dinamiza a la población. Los nuevos trabajos ahora de la Dra. Ruth Shady [Directora del proyecto Caral en el valle de Supe], de Jonathan Haas [Director del Proyecto Arqueológico Norte Chico] en el valle de Pativilca y Paramonga, han avivado más el interés del conocimiento de la historia de la zona de Huaura y Barranca con un núcleo evidente y lo muestran los restos arqueológicos de Végueta, luego los de Caral, que son de alta importancia dentro de la perspectiva o visión del desarrollo de la Civilización Andina. Justamente estos proyectos han puesto sobre el tapete la discusión sobre la civilización, sobre el Estado en los Andes con esas nuevas investigaciones de Caral y de los otros sitios en el valle de Pativilca, entonces a nivel internacional se ha puesto el ojo sobre esa presencia o esa comunicación sobre el desarrollo de la civilización, la gestación del Estado en los andes. Y todo eso permanece en discusión, porque unos tienen una opinión, otros tienen otra, de acuerdo a las investigaciones que han hecho. Hemos cumplido una visión de que la arqueología cumpla su función social, por eso es que publiqué la mayor parte de mis artículos en diarios de Huacho. Son 60 ó 80 artículos en los Especiales de Huacho [Diario local de la ciudad], el diario Ahora, etc. en los que cada semana o día difundía todo lo que veía o encontraba en el entorno de Huacho. Eso llamó la atención por eso que recibí varios premios, homenajes de diversas instituciones en Huacho. Yo creo que eso es muy importante. Siempre mi idea ha sido que la población conozca su realidad histórica, la importancia de sus ancestralidad. Ya en paradoja, cuando vine acá a San Marcos y presenté mis artículos para que me los califiquen, me fueron devueltos todos porque no eran hechos en revistas internacionales, que tienen créditos, ISBN. Entonces ya deje de hacer un poco, aunque si para el caso de Amazonas sigo publicando en revistas locales, pero al mismo tiempo en revistas nacionales e internacionales también por el hecho de que estar en San Marcos nos exigen para ser calificados como investigadores y hacer publicaciones nacionales e internacionales que tengan ISBN. 194

204 ENTREVISTA 3 Henry Marcelo Castillo es Doctor en Ciencias ambientales. Es docente en la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Nacional José Faustino Sanchez Carrión (UNJFSC), localizada en la ciudad de Huacho. Desde mediados del 2000 al día de hoy lleva la jefatura del Museo Arqueológico de la Universidad. La entrevista se realizó el 15 de diciembre de 2015 en las instalaciones del museo. I.C.: Primero, hablemos sobre su perfil académico y su formación (en museología, museografía). Además, de su ingreso a la universidad y al museo universitario. H.M.: En primer lugar, mi en experiencia laboral. He trabajado en la universidad de Huánuco, Trujillo, Universidad Nacional de Piura, en Chimbote, un tiempo en Cerro de Pasco, en Arequipa, en Lima y acá [Universidad José Faustino Sanchéz Carrión, Huacho]. Y me he quedado acá cerca de veinte años; más o menos tendré unos 25 a 27 años de trabajo en la universidad de Huacho [UNJFSC]. Siempre está en el área de Comunicación? Es esta su especialidad? Sí, Claro. Mira, yo estudié Ciencias de la Comunicación pero también estudié Ingeniería en Alimentos, estudié algo de Ingeniería Geográfica, algo de Matemática. Y, bueno, ya después me he hecho capacitaciones y especializaciones en la parte Museográfica. Pero mi área dentro de la comunicación es la semiótica, que es la investigación en la ciencia de los signos. Siempre mis cursos han estado ligados a lo que es el aspecto de Comunicación Turística, cultural, semiótica y he enseñado bastante Historia porque en la carrera de comunicación siempre hay cursos de antropología e historia, y en esas áreas me he movido. En televisión y cine también he trabajado. He dictado siempre en la Facultad de Ciencias Sociales y en la escuela de Ciencias de la Comunicación. Y siempre he estado ligado pues a esto de la investigación cultural en cada zona que he ido, hemos publicado, hemos hecho producción de videos; con la universidad de la Molina hemos investigado también [Universidad Nacional Agraria de la Molina, Lima] en el aspecto ambiental. Bueno, tengo estudios de posgrado en Investigación Científica y mi doctorado en Ciencias Ambientales. Pero siempre mi tendencia va hacia parte, hacia el aspecto histórico y cultural. Pero mi trabajo un poco va a partir de la tendencia de la investigación de la iconografía... Yo no soy arqueólogo, pero sin embargo es valioso el dato arqueológico porque me permite verificar algunas percepciones de análisis de iconografías que en uno de los principios de la ciencia de los signos indica He escuchado cuando era jovencito a Rebeca Carrión Cachot, a Victoria de la Jara, y me he quedado sorprendido. De ahí viene quizás mi acercamiento a la semiótica porque es más sólida. Eeh, yo me quedaba admirado la capacidad que tenía esta señora de poder absorber información y el manejo de formas dialectales para llegar a esas tesis que hasta ahora la comunidad científica hasta ahora lo ha aceptado, pero lo interesante es esa capacidad de absorción de información que tenía. Eso me llevo a un campo también relacionado a la cuestión de la matemática pero yo leía a la filosofía de la matemática para entender el mundo de la Y yo me fui a San Marcos [Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Lima] a estudiar Matemática Pura.entendí que la cultura está muy relacionado a las formas sígnicas y a las formas estructurales, tanto que en la semiótica le llaman los símbolos-signos, los índices y que cada uno tiene su propia expresión en lo que la cultura va expresando de acuerdo al momento. En lo que la disciplina de la arqueología llaman Estilo y otras cosas. Entendí muchas de esas situaciones que había, bueno de mi punto de vista había bastante objetividad de poder interpretar, no leer, interpretar un hecho sígnico a través del aporte de la arqueología. Digo, me sale más rentable en el aspecto científico cruzar información con el aspecto arqueológico que hacer una interpretación del signo por el signo que obviamente ha pasado en este caso con Végueta. En Végueta, el 195

205 proyecto Vichama, salió en forma mediática una interpretación de tres figurinas, una alta y dos pequeñas y la interpretación que indica es que había matriarcado. Es una apresuración. Desde nuestro punto de vista semiológico decimos es una interpretación del signo por el signo sin contexto que es lo equivalente en la arqueología, que es: dónde están los contextos? No hay contextos, ni siquiera una momia que este representando la objetividad de lo que tiene, de lo que tiene que decir la arqueología. La arqueología tiene que hablar en función de lo que descubre y la verificación analítica (laboratorio, etc.) Esas cosas entonces las he digerido durante bastantes años para entender que es necesario la palanca arqueológica y la mejor forma práctica es por medio de los museos, desde mi punto de vista Me parece valioso y pienso que no solo es el campo de la semiológica, esto es en todos los campos, que lamentablemente no están integrados a esta visión de la arqueología porque la arqueología tiene muchas visiones en conjunto. Rastrean no solo la antigüedad de una persona sino también los aspectos culturales, parciales, en todos los procesos como el arte. Pero que requiere de la verificación de cada disciplina y en su propia disciplina. Tienen que utilizar a la arqueología al final me quede con esta disciplina. Yo me considero más semiólogo que otra cosa. Yo acá [UNJFSC] estoy desde el año 99 pero como nombrado. Pero apoyando acá porque la escuela de comunicación recién se estaba iniciando, estoy más o menos desde el año 72. No me acuerdo bien. Pero ya es buen tiempo en museos que he estado apoyando en Huánuco, en otras partes, serán pues unos 15 ó 20 años [experiencia]. Pero acá como jefe estoy cerca de 8 a 10 años. Es el jefe que más tiempo tiene en dirección? Si, en dirección el que tiene más tiempo acá Entre y hubo un problema político en la universidad y salí y entro una profesora de Patria Roja que cerró el museo. No cerró el museo sino, que lo amontonó e hizo un auditorio. Luego, entro otro profesor, Marcelo Zúñiga y se salió porque dice que por un momento la Momia Tatuada le hizo así [hace gestos] y salió y nunca más regresó. Y allí entre nuevamente y de allí me he quedado hasta ahora. I.C.: En qué consisten las labores como jefe de museo? y Cómo se relaciona el museo dentro de la organización de la universidad? H.M.: En la fase que yo entre en primer lugar entré por una situación en que cambiaron los estatutos, el cual reglamento que los jefes de museo tenían que ser profesores. Y lo más cercano, además porque yo tenía presencia mediática dando entrevistas en radio y televisión; entonces me dijeron para que ocupara la jefatura y yo estaba feliz. He sido el primer director oficialmente normado por la universidad. El primero ha sido el Dr. Ruíz Estrada pero en otra coyuntura de investigaciones científicas que se hizo en algunas zonas de la universidad. Y después se han normado ahora con la nueva Ley Universitaria como un órgano descentralizado desconcentrado [museo universitario], que si puede tener la capacidad de generar recursos ahora pero todavía estamos pasando por la primera fase básica porque todavía no podemos hacer gestión porque todavía no hay estabilidad con esta nueva ley porque están cambiando rectores. Pero veremos, la fase de aprovechar todo esto es alinear todo lo que es inventarios y la infraestructura sobre todo para la conservación de las piezas arqueológicas. I.C.: Dentro de ese organigrama de la universidad, dentro de qué área está el museo con esta restructuración por la nueva Ley Universitaria? H.M.: Ahora está en investigación, en el Vice rectorado de Investigación. Pero de esta universidad, particularmente nuestra universidad ha tenido una cantidad de intervenciones. Y producto ya esta universidad se adelantó hacer su estado de investigación junto con San Marcos, creo. San Marcos creo ha sido la primera que ha tenido investigación.antes [el museo] dependía directamente del rectorado. Pero siempre respetaban la relación con las Ciencias Sociales y con la Facultad de nosotros [Comunicación] ahora directamente de investigación. Obviamente con autonomía dentro de su propia 196

206 reglamentación que tiene el museo, la cual hay que modificarla un poco porque hay que adecuarla a la Ley. Hemos elaborado un reglamento pero todavía no lo hemos adecuado mucho Entonces está un poco articulado, solamente hay que reactualizarlo y si va a girar hacia la parte desconcentrada que significa la generación de recursos. Desde qué año existe el reglamento? Más o menos hace cinco años. Anteriormente no había y funcionaba administrativamente nada más. Osea había una persona de rango administrativo que era profesional, de rectorado. El rector era el que designaba pero era administrativa no era docente. Luego, al cambiar los Estatutos, me designan y me he quedado con algunos ligeros baches en el camino. Eso fue hace ocho años más o menos [al ingresar como jefe de museo]. Cuando yo entro a la jefatura todavía no había reglamento de museo y eso fue lo que hicieron? Si, porque habían dificultades en el aspecto normativo que entraba en contradicción con el propio Estatuto. El Estatuto pedía la reglamentación. Se tuvo que hacer la reglamentación para poder dar paso a aspectos de formalidad presupuestal y otras cosas. El Dr. Ruíz Estrada ingresa porque lo llaman a él porque descubrieron zonas arqueológicas en la universidad Entonces él viene y se queda como profesor. Y ese material recuperado el plantea que sea conservado en un museo. Y se crea el museo. Funciono primero en la ciudad universitaria en un local chiquito, después se trasladó acá creo que a un ambiente de la municipalidad y después aquí. Ese más o menos ha sido el camino del museo. Prácticamente a este museo deberíamos ponerle el nombre del Dr. Ruiz Estrada porque fue el que lo ha creado. I.C.: Hace cinco años está reglamentado que el jefe del museo sea un profesor H.M.: Vinculado a las Ciencias Sociales Mis funciones las ejerzo como Jefe de Museo no como Director. Jefe de museo ha sido una consideración de las autoridades y que puede ser modificado. Las funciones están ligadas al aspecto estatutario. Una de ellas es el manejo interno del museo, lo que es la perspectiva del manejo de y estimulación- de la Red de Museos. Por ello es que vamos a diferentes museos tratando de organizar, asesorar. También está el mantenimiento y conservación de piezas arqueológicas, la custodia de bienes culturales y la coordinación de trabajos que tengan que ver con especialistas que son arqueólogos, antropólogos o de diferentes disciplinas que pueda contratar la universidad para un trabajo específico. Esas son las funciones básicas. I.C.: Cuál es la visión y misión del museo? H.M.: La visión está relacionada bastante a lo que es la defensa del patrimonio cultural para ser un paradigma de los museos de la región. Por razones obvias de que esta es la universidad más antigua y que debería generar ese tipo de cosas en un museo de esta naturaleza para que pueda generar políticas de desarrollo de la cultura. La misión es la adecuar un museo en las mejores condiciones para que se pueda sostener en el tiempo. I.C.: Cuáles son los referentes o antecedentes de la creación del museo? H.M.: Era lo que estaba comentando. El primer museo, hasta donde tenemos información tenía piezas almacenadas y funcionaba como un museo pequeño en la universidad. Y de ahí se trasladó a la municipalidad. Luego por presión de la sociedad civil y también el rol que jugó el Dr. Ruíz Estrada, se traslada acá [Antigua Estación del Ferrocarril] con un convenio que se hizo con la Beneficencia Pública con un convenio por 20 ó 25 años más o menos. Se cedió todo el local y luego hubo un tropiezo con un vicerrector y se cambió, se cedió una pequeña parte al Archivo, que también es patrimonio. También se le cedió una parte del depósito Lo que nos ha nucleado bastante han sido el apoyo de actividades de carácter cultural como el Vichama Raymi de Paramonga. Hemos colgado un video del año 72 donde el patronato mando documentos a la universidad y se hizo una representación en Végueta. Ya la gente tenía 197

207 conocimiento, ya había esa actividad del Vichama La gente hacia su Vichama de otra forma básica, elemental. Nosotros si hemos ayudado un poquito a sistematizarlo mejor lo que la gente hacia hace años. Como vieron que había interés de la universidad, ellos mandaron documentación para que le hagan un video, Végueta mandó. Entonces nosotros pedimos a Paramonga para que nos apoyen, porque ellos tenían ya la fiesta del Vichama Raymi pero querían grabar la parte del contexto del mito. Y se hizo en el año 72, creo. Hace poco hemos colgado el video. En eso nos hemos mantenido como eje central para poder articular una caja de propaganda cultural viva. I.C.: Hay información documental de las actividades desde el inicio del funcionamiento del museo? H.M.: En publicaciones serias es a partir de mi gestión. Son 18 revistas indexadas desde casi el inicio de la gestión. Antes hubo algunas publicaciones básicas de Ruiz Estrada como también de los administrativos. El de Ruiz Estrada con formato de Boletines, informes de carácter arqueológico. En cuanto de actividades si han habido pequeños informes [de anteriores administraciones] algunas cosas pequeñas, gestiones que no les han dado resultados y otras sí. Si, por ahí hay alguna documentación de la que si hemos encontrado algo. Pero a partir de que he entrado, hemos comenzado a apoyar un poco más. Diría un poco más organizado, un poco más de contenido. Lo que no ha sido difícil por la razón de que ya teníamos los antecedentes. I.C.: El Vichama Raymi lo entiendo que lo toma como parte de la investigación de uno de los mitos prehispánicos muy conocidos en la región cómo se incorpora en el museo? H.M.: Claro. Te cuento un fragmento más de esto y como se mejoró esa idea del Vichama Raymi. El Vichama Raymi estaba en los valles. En los valles de Fortaleza se llamaba así, algo sabían en Caballete que hacían sus tradiciones allí pero en pequeñito. También de la Princesa Misqui, que también hemos encontrado en Calancha que lo había recogido de esas zonas. Como se conoce ahora está un poco más elaborado, es porque la universidad a través del museo incorporo algunos detalles, también lo técnico. Porque cuando se fue a la selva con los estudiantes ashánincas que después van a Paramonga, la gente se quedó sorprendida y lo incorporó porque se veía que venían [al Norte Chico] peregrinaciones de la selva. Y se incorporó en el mito [de Vichama] porque hay un fragmento del mito que habla de esos temas, además que genero una unidad bonita en ese sentido. Esa es una actividad pero hay múltiples actividades que se han hecho, por ejemplo la investigación sobre los tatuados, también se hizo en Végueta el Vichama Raymi con personas de Paramonga, estudiantes de la universidad y de todo el Norte Chico (Churín, Sayán), estudiantes y trabajadores. La mayoría de gente que ha participado en estas actividades ha sido de Paramonga, fundamentalmente obreros, y estudiantes de diferentes partes del Norte Chico, todo el tiempo ha sido así. Y hay múltiples actividades que contarte. Pero mucho relacionado a eso. De tal manera que en el año 2000 me acuerdo se hizo una actividad grande aquí en Huacho, en la noche mística, porque ese era el año que se celebraba el cambio de la nueva era. Asi como en diversos sitios que se hizo algo sobre el aspecto mitológico, aquí se hizo el Vichama Raymi en la playa. Fue un evento grande. Huacho tiene una particularidad, no le entra mucho al aspecto de la sostenibilidad, ni Végueta tampoco, en esos años y hasta ahora creo. No se pudo mantener por más que se intentó y había gente que apoyo, como Nelson Chui, que es el actual Presidente Regional de Lima, el alcalde de esa época también, también con los patronatos de Huacho, Barranca y Paramonga, se avivó para hacer esta actividad que se hizo en Huacho. Teniendo como base esta actividad que ya se realizaba en Paramonga. Nuestra idea era que se pudiera sostener en diferentes versiones Por primera vez el Proyecto Caral [Zona Arqueológica Caral] nos ha invitado oficialmente al evento por el aniversario del proyecto arqueológico Vichama, La Perlita. Hemos ido con el asistente y un grupo de alumnos. Y no he visto gente de Végueta. Es un fenómeno que pienso que tiene que ver mucho con los procesos migratorios, lo que antes se llamaban peregrinaciones. La gente que se ha 198

208 asentado no es de Végueta sino de otros sitios, y cada uno forma sus clubes. Entonces, el que aparezca una investigación nueva y no hay un ente articulador y lo que comentaba de articular partes vivas del museo con el aspecto arqueológico. Eso que hace que suceda con el Vichama Raymi Exactamente, que sale del museo para ir fuera de forma viva. Yo diría como el método que guía eso. Se ve eso, se articula, se toma la visión de la gente La gente ve, de años 1940 que hay que reconstruir también esos procesos que me parecen valiosos, la gente como miraba esas imágenes que le llamaban Viracocha al Vichama.Cuando llego Rebeca Carrión lo generalizo porque no había quizás una apreciación muy clara de la arqueología entonces ella les llamaba los dioses de la Luna eh, los dioses de la Siembra, de la Cosecha, algo por el estilo. Pero ya gente ya, en la vida cotidiana lo hablaba: Es el Vichama. Y eso me llamo la atención bastante porque era una cosa más sólida. Cuando el Proyecto Arqueológico Norte Chico lee algunas publicaciones en el periódico de lo que yo había aplicado, les llamo la atención y es el proyecto que tuvo más acercamiento a nosotros. El proyecto Caral, lamentablemente no quería saber nada con el Vicha Raymi... siempre ha habido esa tendencia particularmente en el caso de Paramonga de centrarse más en eso [Vichama Raymi] quizás más por la composición de más gente de la sierra.ve una dificultad para que esta perspectiva se acomode como la visión de museo vivo pueda ingresar en estas localidades? Exacto. Aquí mira, en estrategias de ese nivel que le llaman Performance ensayamos otra cosa, la modernidad y si funciona. Vino una empresa ligada a la Universidad de Ciencias Aplicadas para que les apoye en una actividad sobre Vichama, pero acá no le llaman Vichama Raymi, le llaman Vichama Fest que es una tendencia internacional de música electrónica. Y eso si funciona aquí en Huacho. Y todavía se mantiene. Tiene mucha tecnología, que no está mal, es una expresión cultural. Lo que si hemos tomado es un poco de distancia porque el trato que hicimos con ellos era que si un poco la investigación que nosotros desarrollamos sobre todo en materia semiológica y se llevó 3 ó 4 años, después cambiaron el libreto. Pero dijimos al final para que vamos a hacer tanto esfuerzo si se está distorsionando un poco el manejo de la línea que habíamos iniciado. Ellos siguieron su camino Dudo mucho de que se pueda transferir en materia de originalidad, folclórico, al estilo como lo hace Paramonga. Huaura si es otra cosa. La ciudad de Huaura tiene una composición bastante parecida a la de Paramonga pero con poca solidez, como Hualmay, donde también hay clubes eh, que también tiene Paramonga. Pero Paramonga ha logrado cierta unidad por medio de las danzas. Hualmay tiene su centro que es un problema que está pasando ahorita con Los Huacos. El alcalde se preocupó, interesante gestión, a pesar de los problemas arqueológicos que han habido allí con los arqueólogos pero siempre tienen la dificultad, porque hemos conversado varias veces con ellos cómo articular a estos centros sociales que hay de diferentes provincias o distritos de las zonas Si son de Tongos, ellos hacen sus fiestas. Si es que son los de Shecras, igualmente Y cuando aparece la investigación de Los Huacos que es parte de la Cultura Chancay, hay 30 ó 40 grupos que los convocan y no van. Osea, lo sienten como algo diferente pero que al final es la misma relación. Osea, la estrategia es un tanto diferente allí. Paramonga parece que ha logrado medianamente por la articulación de la juventud ligada a las danzas y quizás sea su esencia lo del Vichama Raymi, las fiestas y eso A pesar que no están organizados pero al final funciona Osea, cada componente de esta complejidad que nosotros tenemos se mantiene pero pienso que se puede plasmar esa idea en un museo, pero de una manera más práctica, más viva, más real. I.C.: Con respecto a la Región del Norte Chico, desde cuando ha escuchado el termino o de dónde cree que proviene? H.M.: Norte Chico, lo he escuchado desde toda la vida, desde que nací. Siempre se ha mencionado para poder entender de que el norte tenía una fase muy concurrida hacia Lima, que es de Huarmey hasta Huaral entonces lo simplificaban porque acá popularmente le decían Norte a los 199

209 Norteños Pienso era la visión limeña de identificar esta parte que era un fragmento del norte algo así y que lo llevaban bien acá porque se identificaban y se diferenciaban de los otros norteños que venían del otro lado [extremo norte del país]. Entonces de ahí es siempre se ha llamado Norte Chico. En lo arqueológico, lamentablemente no ha habido un trabajo de identificación de cómo se llamaba esta zona hace miles de años. En lo contemporáneo, hasta 30 ó 40 años, y por mis padres que han vivido en esta zona, se conocía ya como Norte Chico. Y por qué Norte Chico? Porque había la provincia de Chancay, entonces la provincia de Chancay perduro paralelamente a la versión de Norte Chico porque antes se llamaba Provincia de Chancay, desde Chancay hasta Paramonga. Nosotros teníamos partidas de nacimiento que eran de la provincia de Chancay. Éramos Chancayanos todos pero a la vez también se hablaba del Norte Chico. Pero Norte Chico le llamaban a la extensión desde Huaral hasta más o menos Huarmey y la provincia de Chancay era hasta Paramonga. Hay algún documento en el que figure el nombre de esta zona como Norte Chico? No, no. Ha estado en la memoria popular por muchos años posicionada pero legalmente era la Provincia de Chancay. Y después se dividió en la Provincia de Barranca, la de Huaura, y la que tenemos ahora. La división administrativa genera también problemas porque dentro de esa dinámica económica, Huacho ha generado recursos y muchos de esos recursos al parecer se han quedado acá y no se va a Barranca. Entones ha habido problemas, dificultades y diferencias que están haciendo mal a la unidad ideológica. Es interesante hablar de una región pero las diferentes estrategias culturales que plantea se hacen porque señala que hay una variedad cultural, social, etc. en los distritos de la región Esa variable, pienso que vienen de los procesos migratorios. Es algo que he encontrado y desarrollado en mi tesis doctoral. Paramonga, el valle de Fortaleza y Pativilca Pativilca tiene la parte de lagunas que alimentan Y el rio Fortaleza proviene del rio Santa, pero hay una peculiaridad en las quebradas, que hasta ahora no se han detenido a estudiar las quebradas. Al parecer, Fortaleza y Pativilca tienen la mayor cantidad de quebradas. Por eso, Barranca es la provincia más serrana que la provincia de Huaura, es una particularidad que se ha dado. A excepción de la ciudad de Huaura que viene de la influencia de Supe que allí están los Ancashinos y se han posicionado a ese lado. Y Huacho tiene la influencia limeña que obviamente esta en esa situación. Entonces, esta gran cantidad de afluencia, obviamente viene con sus propias tradiciones desarticuladas. Que al parecer también fue en el pasado porque eran las peregrinaciones de diferentes zonas. Los de la Universidad Cayetano que trabajaron con Haas [director del Proyecto Arqueológico Norte Chico] dijeron que encontraron pachamancas, pero también chuchuhuasi, que viene de la selva. Es por la movilización, por la zona que genera procesos migratorios están en ida y vuelta Parece que siempre ha sucedido eso. Como lo que sucedió en el Arcaico Tardío. Sí, pero la constante ha sido el medio ambiente. Osea, las condiciones ambientales del Norte Chico, y particularmente de los valles de Fortaleza y Pativilca han generado mejor atracción. Hay un dato bien interesante de Teruel, una carta que ha publicado la Universidad La Católica, donde Teruel viene a Huacho. Lo envían los corregimientos y le preguntan acá a los huachanos: ustedes que creen en el aspecto espiritual? Lo que indica Teruel es que la gente cree en dos mundos espirituales. Uno que es el mundo de las islas cuando muere una persona, el alma lo llevan los animales marinos (bufeos, delfines) lo llevan a donde está el dios Huamancaca. Y el otro, el Aica, que es un lugar en abundancia de alimentos. Y describe cómo se llega al valle de los alimentos. Dice que tienen que pasar por un desierto donde le queman los pies y llegan a un rio grande donde hay un puente de cabellos y llegan a ese lugar donde hay bastante alimento y las almas no se mueren de hambre. Si tú ves en estos cuatro valles, el rio más grande es Pativilca y el desierto estamos hablando del desierto próximo que era así en esa época. Y una cosa que estamos viendo en los últimos datos que revisamos, por ejemplo las cuestiones ambientales. El valle de Fortaleza no tiene agua en determinados periodos pero 200

210 todo el tiempo tiene agua para la agricultura porque se alimenta, por eso están los Wong allí, del agua de Pativilca que viene de las lagunas Entonces, todas esas condiciones ambientales parece que allí hay una cosa interesante en esos valles, por algo debe ser las condiciones y este dato que te digo del Aica, este mundo de la abundancia de alimentos. Y ello esta expresado en la iconografía [Prehispánica] de la zona se ven maíces, yucas, pepinos y otras cosas; le llama La fertilidad, Rebeca Carrión. Pero con estas cosas, la gente lo identifica con estas cosas como el Vichama falta mayor sustento, pero queda en la versión popular. I.C.: Cómo y con qué propósito surgió el Proyecto Red de Museos del Norte Chico? H.M.; Porque personalmente, y porque la gente que viaja permanentemente de sobre todo los colegios, hemos tenido información y hacíamos pequeños viajes para visitar de un colegio con museo a otros, hasta que he pensado que el museo desde un aspecto académico deben ser los que deben de articular mejor el aspecto de transferencia cultural al aspecto educativo, en los colegios y además porque están dentro de los mismos colegios. Hay material [arqueológico] que ha sido destruido y todo en malos tiempos. Lamentablemente no hay una cultura de respeto a lo arqueológico, y eso es una cosa importante que debe ser una cosa mediática para que se promueva una cultura del manejo del patrimonio. I.C.: Con transferencia quiere decir replicar lo que se conoce dentro de los museos o a nivel arqueológico hacia el sector popular para y por la educación, osea por la vía educativa formal? H.M.: Sí, exacto y también por la educación de política de medios porque ahora en medio es más determinante quizás por la asociación de información. La televisión tiene más credibilidad que la realidad, pasa eso en la juventud entonces es estratégico, inevitable y lo más económico de repente en políticas de comunicación y sobre todo en las escuelas de comunicación que deben de transferir ese tipo de información, crear nuevos formatos. Eso me parece valioso del instrumento de las comunicaciones para introducir en la conciencia, en todos los niveles, pero particularmente en el caso social es recontra estratégico y necesario si hablamos de violencia si las mismas escuela de comunicación están reproduciendo todo lo que están haciendo los medios. Si todo es violencia, y el aspecto cultural no es tomado en cuenta. El problema es que toman el aspecto cultural como un adorno y no como una necesidad, estratégica para resolver problemas nacionales, de autoestima, y otras cosas. Estas variables que son necesarias pienso que es muy estratégico que pueda introducirse una conciencia cultural y patrimonial a través de los medios pero de arriba hacia abajo Cuando aparecen las investigaciones de Haas y Shady aparecen en escena, la gente y los mismo patronatos decían por qué tanta tierra y cuándo será? pero casi allí nada más, y quizás sea una forma de valoración de la Dra. Shady, hacen el video de Caral de las pirámides perdidas. Pero, Dónde lo hicieron?, lo hicieron arriba. Me refiero, en el extranjero o de Lima. A la semana o dos semanas, todo mundo estaba interesado...la conciencia interna es articulación, pienso en perspectiva de museos vivos articulados con estos elementos del pasado que pueden ser las cuestiones arqueológicas, antropológicas y la expresión sostenible, digo así del impacto tiene que ser política de medios, inevitablemente. Tienen que estar articuladas y junto con la sostenibilidad de políticas de educación, en el aspecto leyes. Por eso que me preocupa, y nos sigue preocupando la ley la aprobación de la Ley 1730 del Vichama Raymi que nos podía haber dado una cobertura de poder hacer la otra fase de exigir al Ministerio de Educación con la ley a que se introduzca en los colegios, reglamentariamente dentro de lo que es el aspecto curricular es decir la historia regional por ejemplo acá los muchachos están entrando a danza, que siempre lo han hecho pero como no van a querer si ven que su universidad está desarrollando políticas de concurso de danzas y están allí, todo el dia bailando...su conexión, con el elemento del pasado no lo tienen. Si nosotros vemos lo que dice Haas sobre fiestas y festines. Digo, fiestas y festines, son danzas y comidas. La danza la tienen en la 201

211 tradición, en su sangre, al igual que las comidas. Pero no son conscientes de su articulación y el significado y el simbolismo de lo que tienen ellos en el presente con lo que fue el pasado y que genero una estructura ideológica y que se ha mantenido en el tiempo durante miles de años las políticas de comunicación tampoco ayudan tanto a resolver estos problemas que si podrían sostener un carácter nacional, del orgullo regional, del orgullo nacional, y poder sostener políticas de entretenimiento para que los jóvenes puedan acumular fuerzas en aspectos de perspectivas de desarrollo y o disolverse en polarizaciones de violencia y de otras cosas. I.C.: Revisando el proyecto de Red de Museos, con base a todo lo que puede articular y generar hay otro componente, el turístico H.M.: Lo que te he comentado y muchas cosas más son aspectos culturales ligados al amor a la cultura y hay una vinculación con el proyecto también para la identidad, y otra parte vinculada a la sostenibilidad con la parte turística Mira, eso viene, y quieras o no hay que darle el rol que le ha dado la historia a Shady. Con ella hemos aprendido bastante, entendiendo no el aporte científico pero si el aspecto práctico del marketing. Quizás hemos entendido allí como lo aplica de forma excelente y de Merchandising lo que pasa es que cuando pensamos sobre la cuestión turística, un poco revisando la un poco la apreciación viva es este impacto que ha tenido Caral, y viendo que el impacto estaba relacionado al marketing, y revisando desde la universidad el comportamiento real de la economía, el turismo se mueve con una economía muy básica, el turismo que genera divisas, pero divisas que vienen del extranjero y que obviamente la seriedad que se debe de tener en el aspecto de un turismo serio tiene que tener todas las normas internacionales Entonces, esta apreciación es, viendo la cuestión de la economía que genera divisas, puede ser una economía de menor inversión y mayor ganancia social por decirlo así, entonces es necesario que todo ese proyecto red de museos concluya en un aspecto práctico, en el aspecto económico también de generar divisas pero con una política distinta, diferente en términos museográficos porque no funciona la museografía como la estamos planteando en un sentido occidental, no funciona en nuestra articulación para el desarrollo de la identidad. Se ve como una especie de almacén, de piezas antiguas que no activa la conciencia inmediata del presente hacia el pasado si lo ven una elite, de clase media, pero no de forma popular. En la forma popular es otra cosa. Nosotros hemos sacado el Orgullo Regional que le decimos a una pieza, el Cuchimilco. Eso funciona, puede ser atrevido pero funciona dentro de un segmento. Quizás, rompiendo el eje museográfico, tengamos que hacer esas cosas para llamar la atención dentro de la pobreza de la inversión que tienen los museos. Funciona en la mayoría de los casos, hemos roto también con el Achachí, pero funciona. Pero ahora, se requiere mayor fuerza e inversión, que no lo tenemos. Son las estrategias de gestión, así las maneja? Si, son solamente estrategias de gestión. No estamos hablando una seriedad científica. Quizás en el fondo puede permitirse entonces todas esas cosas que han estado desarticuladas, han tenido esa Es decir, el aspecto cultural y arqueológico, todas estas cosas, deben de tener una sostenibilidad. Disculpa, me corrijo, una cosa es sostenibilidad y otra sustentabilidad. La sustentabilidad pienso que está basada en la cuestión turística porque es la parte económica pero hay que hacer un turismo serio, porque lo único que hemos aprendido en estos tiempos, de Caral sobre todo, es que si no hay un turismo serio no se va a sostener en el tiempo. Porque el turismo serio para que genere divisas tiene que ser turismo receptivo y el turismo receptivo viene con una cultura previa, diferente a nuestra idiosincrasia que nosotros tenemos Nosotros tenemos que tener otro ángulo que nos pueda permitir articular esa atención viva del pasado con el presente. 202

212 I.C.: En qué medida el proyecto Red de Museos ha alcanzado sus objetivos y propósitos? H.M.: Mira, lamentablemente el proyecto no concluyo. En la práctica se ha desarrollado el proyecto Red de Museos y lo formalizamos con FONCAM del gas de Camisea, que es de la universidad. Y por políticas internas de la universidad no se concluyó porque cuando nosotros planificamos, a veces en logística nos daban o programaban la compra de un X producto que era para la fase final y nos lo daban para la primera. Era muy desorganizado, entonces se tenía que hacer maniobras para poder manejar la situación. Al final cambiaron las normas y no concluimos, llegamos a cubrir un 60% del proyecto. Faltan publicaciones por ejemplo. En tareas, se ha hecho el levantamiento de información básica para poder articular políticas de comunicación en cada museo, se acopio información de flora y fauna de Lomas de Lachay del periodo pre cerámico, hemos logrado articular comunicaciones con algunos museos no todos, hemos tenido algunas reuniones; el problema es la sustentabilidad en el aspecto económico porque la mayoría de gente responsable de los museos depende de los museos, y se requiere dinero para movilizarse a pesar que estamos cerca. Hicimos en un momento la reunión, y subsidiamos todo eso a través del proyecto, pero no tenemos sustentabilidad porque no se ha podido continuar pero lo que sí, hasta la fecha, es la producción del Vichama Raymi el documental que se proyectó en los museos y lo siguen hasta ahora utilizando como un instrumento cultural del Norte Chico. Y necesitamos más producciones porque tenemos que hacer lo de Végueta, esa segunda versión, para que se entienda esa visión original de la religión católica, porque la iglesia tuvo una visión diferente. El antecedente más concreto es que las publicaciones que hemos registrado en el proyecto Red de Museos coincide con que el primer antecedente de Vichama se tiene en los lugares donde se desarrollan las tradiciones como en Paramonga y en Végueta...Toda esta campaña que se inicio ha ido avanzando I.C.: Ha habido alguna reunión entre todos los responsables de los museos del Norte Chico? H.M.: Hemos tenido dos o tres reuniones pero la dificultad es la sustentabilidad económica porque la mayoría dice que ira a la reunión pero hay problemas económicos para solventar los pasajes. Cuando hubo reunión vinieron acá pensando estratégicamente [Ciudad de Huacho] lo hicimos en el auditorio del Poder Judicial y allí asistieron todos. Eso sucedió hace cuatro años. Fueron dos reuniones. La otra fue fragmentada porque no asistieron muchos. Siempre es latente el problema de la movilidad por los pasajes. En total asistieron, el Museo de la Fiscalizada de Varones de Paramonga, el museo Nuestra Señora del Carmen, el de Huaral-Huando [museo escolar], el museo de Pativilca [museo Bolivariano], el museo de Huaricanga en esa época era un profesor el encargado, el museo de Xammar, el museo de Silva-Esquén, Castillo de Chancay, Végueta todavía no existía en esa época creo, museo de Chancay, el museo de Huaura, Sayán. I.C.: Cuáles fueron los alcances de estas reuniones en el intento de formar la red? H.M.: Todos están de acuerdo en primer lugar, les parece buena la idea. El museo universitario seria la cabeza, es la visión porque es la universidad más antigua, desde aquí se está liderando esto y en la práctica también porque la gente en el contexto genérico ven a los profesionales con un liderazgo científico, una visión en la que la universidad es la que debe liderar la organización de la red de museos y la que debe de tener la obligación de manejar información. El problema es que hay un poco la filosofía de que estas reuniones se pide mucho, al decir que la universidad se encargue de todo como del financiamiento. Debería ser, pero también tienen que involucrarse las mismas instituciones. Ahora, quizás en la primera fase podamos estimular esa conexión de financiamiento con otros proyectos pero en otra fase. Pero también está la condición de voluntad de las instituciones que están ligadas a los museos pero pensando desde otro ángulo, la mayoría de museos o colegios, no tienen los recursos por un lado y el liderazgo cultural, porque para que sean sostenibles los museos en los términos del Norte Chico en la 203

213 realidad quizás sea el articularlos a los liderazgos culturales que están bajo la forma de los patronatos, reconocidos o no reconocidos. Mira, hay un segmento de patronatos culturales y turísticos que si se sostienen en el tiempo y tienen esa sostenibilidad, que te digo, durante años. Una de ellas es Ínsula también, por ejemplo el Patronato de Barranca, el Patronato del que forma parte Bazán, el Patronato de Supe hay varios patronatos que por la composición que tienen en la defensa de la cultura se sostienen en el tiempo. Eso sería en el ideal, pero en la práctica los profesores se encuentran encargados de la mayoría de museos y colecciones Claro, la mayoría, si pero ese también es otro problema de la sostenibilidad ligada a la cuestión del liderazgo, tanto de danzas, como de historia, y también de los museos. Por ejemplo, en el caso de Huaricanga hay un profesor muy bueno que hizo el museo. Salió y el museo quedo estancado ah!, como invitados a las reuniones también estuvieron los patronatos que vinieron es gente que si tiene sostenibilidad. Te digo en términos de quienes deberían liderar estos museos. Hace poco hemos tenido una reunión parcial con algunos patronatos y estábamos pensando qué hacer porque del museo de Huando se han robado gran cantidad de piezas y no ha pasado nada. Se han ido a hacer la denuncia por un ídolo, que nosotros llamamos Urpiwachac, y la policía les ha dicho que por ese pedazo de madera van a denunciar? Entonces, lo que pensamos es hacer un memorial para solicitar que el gobierno regional asuma un presupuesto para que designe por CAS [Contrato Administrativo por Servicios] gente que esté ligada a los patronatos, que se mantengan seria la forma más sostenible y sana de repente de manejarlos. Los profesores también pueden, pero hay un problema legal porque tendrían doble función y tampoco tendrían incentivos porque la ley lo prohíbe. Entonces es bien complicado que se sostenga los museos escolares solo por profesores, pero de la otra forma sí. Entonces sería alguien externo como de uno de los patronatos que se adhiera a la institución educativa, esa es la propuesta? Esa es la propuesta, bajo una perspectiva sostenible y sustentable, en la que el Gobierno Regional financie el presupuesto de los sueldos. Por ejemplo, hay personas de los patronatos que han sido profesores, están cesados. Son profesores que manejan información, tiene la mística. También hay profesores que trabajan mucho, tienen interés, trabajan en la sostenibilidad, pero al final no dejan nada, me refiero al soporte orgánico que se sostenga en el tiempo. Quizás sea lo más sostenible que esta gente pueda ser designada con un presupuesto, bajo un proyecto especial del Gobierno Regional. Serian 20 personas que pudieran incluirse como CAS o en planillas, obviamente seleccionadas por un jurado ligado al aspecto cultural, en este caso ligados a los museos. Las principales dificultades que se ha visto en las reuniones siempre han sido la falta de sostenibilidad y sustentabilidad? Si eso es A corto plazo pienso que se puede articular un enorme potencial. Como potencial tienen la experiencia, tienen la habilidad del manejo de estrategias culturales. A estas me refiero a sus actividades que realizan de manera natural Por ejemplo, si no hubiera habido ese liderazgo natural, el Vicha Raymi no hubiera funcionado en la medida que tiene porque sería una fiesta más, que casi se perdía además de las estrategias culturales que se sostienen en el tiempo, está la gran cantidad de información que ellos han acumulado, obviamente las colecciones. Y había que ver y priorizar estratégicamente, era algo que conversábamos con los profesores, por ejemplo siendo crudos e independientemente de la arqueología, cada museo hasta donde tenemos conocimiento proviene de rescates, en el caso de los colegios los padres han traído, no tienen registro arqueológico y se ha perdido ese dato. Pero cada uno tiene piezas importantes para tejer una estrategia. Nosotros hemos pensado la estrategia del Vichama Raymi, en el aspecto ideológico, porque siempre los mitos tienen un elemento unificador. He visto, y conversando con los profesores, pensamos que quizás podamos dar unas custodias de intercambio de algunas cosas que puedan permitir sostener como eje de propaganda para poder estimular la visita de los escolares. Por ejemplo Huaral tiene una colección pequeña que está en buenas condiciones como de los arboles Chancay 204

214 que aquí en el museo no se encuentran en buenas condiciones. Entonces, quizás, hacer un intercambio o préstamos de piezas para complementar y generar, estimular las visitas. Por ejemplo, estos de estilo Pativilca generan mucha atención por la imágenes que tiene, y quizás el museo de Paramonga pueda proveer ese tipo de piezas para generar un módulo de exhibición. Entonces, de ese modo se puede ir unificando módulos para generar la atención. Lo otro que veo es el aspecto del dinero.también hay otra cuestión multidisciplinaria y multisectorial civil del Norte Chico, para generar propuestas y pedir cooperación internacional, también eso tiene que hacerse. Pero de forma inmediata para poder sostenerlo podría ser eso una salida y lo otro una exigencia a la sociedad, a la escuela de comunicación para que el material educativo se lleve al lenguaje audiovisual de los medios. Si no hay eso, pienso que las cosas pueden quedar ahí. Osea, que se mantendrán por mucho tiempo en las salas de los museos, quizás como pasa en el mismo Ministerio [de Cultura] que están las piezas en los depósitos con una política que te cuento es posible y puede activar de forma viva estos espacios. Este un lado dinámico en la que la sostenibilidad puede manejarse. I.C.: Precise de manera general la organización interna del museo H.M.: Tenemos un organigrama, no lo hemos publicado. Solo somos dos y tenemos varias dependencias. Tenemos la Jefatura, en la jefatura existe la Asesoría que es un órgano de apoyo y el asesor permanente ad honorem, mediante resolución, el Dr. Ruiz Estrada. Después está el Asistente técnico, mi mano derecha. Luego están los departamentos de Laboratorio, de Comunicación e Información, Conservación y Restauración y el de Marketing. Ese es más o menos el organigrama. Las tareas las hacemos en múltiples actividades funcionales, solo las necesarias porque sabe la administración pública que no contamos con el presupuesto para mantener un responsable en cada área. Entonces lo que hacemos es utilizar porque nos exigen es contradictorio porque la función pública nos exige y no cumple pero quizás con esta cobertura en la que el museo es un órgano desconcentrado, terminando la fase técnica de inventario y la conservación de las piezas, podremos entrar a otra fase -dentro del presupuesto mínimo que tenemos- a hacer gestión mucho más precisa porque ahora nos están permitiendo realizar gestión, antes nos limitaban Lamentablemente hemos tenido una camisa de fuerza que no ha permitido cobrar en el museo ni hacer este tipo de cosas, pero ahora si se permite Hay un plan anual de actividades del museo? Si, están en el POI [Plan Operativo Institucional] de la universidad, el cual está de acuerdo a las normas del Ministerio de Economía y también un documento de inscripción de las actividades que se mandan a través de una resolución. Lo realizado se va detalla en un informe anual? Si, si no nos dan el dinero del presupuesto. Nuestras actividades principales son el inventario, técnicamente hablando. Eso entra dentro del área de Laboratorio. Pero el Ministerio de Economía no nos exige explícitamente eso, básicamente los objetivos En comunicación están los videos que sacamos todos los años eh, también está el mantenimiento de la infraestructura. La parte museográfica nos hemos detenido un poquito porque estamos priorizando esto [inventario]. I.C.: Hace cuánto tiempo están con esta exposición permanente? H.M.: La última permanente tiene aquí ya tres años. Solo han sido dos permanentes que se han reacomodado pero ligeramente. El contenido es el mismo. Tenemos una sala temporal que ahorita está lo prehispánico. En este caso esta lo Arcaico, el estilo Pativilca y el estilo Chancay del siglo X. En la temporal queremos renovar pero es otro problema de sostenibilidad. Por ejemplo, hemos creado un patronato El señor tatuado de Huacho y un instituto que no pertenece a la universidad, el cual es Vichama-Indecur, para que estén al ritmo de los patronatos, también porque las empresas privadas no quieren apoyar a la universidad. Aquí Plaza Sol [centro comercial aledaño al museo] colaboró pintando los exteriores pero aparte de ello no quieren involucrase. Aparte de la burocracia aparece el problema del 205

215 incentivo del impuesto porque cuando ellos dan presupuesto de donación o estimulación económica cuando la dan a una institución pública del mismo Estado, no son sujetos a la deducción de impuestos. Por ello no quieren, no es algo rentable, por eso que no entonces, si se hace mediante un patronato y que el patronato lo solicite, que es la sociedad civil, si lo pueden apoyar Vichama-Indecur también lo tenemos de apoyo con el sentido de sustentabilidad. Ahora por ejemplo se necesitan replicas y hay conseguir dinero fuera del presupuesto de la universidad, pero a la vez que se mantenga en el tiempo porque al final va a servir para la filosofía de la red de museos. Se tratan de réplicas sumamente interesantes y estratégicas que estén hablando de las investigaciones que estamos haciendo. Por ahora ha ingresado presupuesto por estas estrategias de los patronatos creados? Ahora lo que se ha conseguido es lo del pintado que fue bastante dinero que puso una empresa en Vichama-Indecur si hay bastante por ejemplo nosotros conseguimos apoyo. Por ejemplo, conseguimos figurinas réplicas de las que hay en Végueta. Además estamos haciendo un artículo con los alumnos sobre una interpretación semiótica Y así conseguimos cosas, y eso lo trabajamos porque en el supuesto que salga de la jefatura, viene otra gestión y no se va a sostener el modulo. Entonces en el momento en que se sostenga con presupuesto la red y este museo con determinadas características, entonces todo el material deberá ser entregado en las mismas condiciones como estos módulos [réplicas de objetos arqueológicos], para que sean sostenibles en el tiempo I.C.: Cuál es el presupuesto con el que cuenta el museo? H.M.: Más o menos 3200 dólares anuales. Eso se reparte entre las cinco áreas. Pero se va priorizando de acuerdo a las coyunturas y a las necesidades que se tienen. Cuando por ejemplo nosotros entramos a promoción llegamos a visitas. La entrada es gratuita. Y llegaron de visitas colegios de Lima, de aquí de la ciudad. Pero cuando caemos en promoción, el presupuesto nos lo bajan. Sacando un dato estadístico comparativo nada más, que tiene razón las estadísticas hechas por Promperú, el que genera más divisas es el turismo urbano con un 60-70%, luego museos es el segundo con un 30 ó 40% y visitas a sitios arqueológicos con un 11.5%...Nosotros con tres mil dólares tenemos visitas, con cuatro mil dólares tenemos visitas es necesario invertir estratégicamente en museos, fríamente en materia de turismo para generar divisas es clave los museos, en los dos. Por qué en lo otro, la arqueología, porque la arqueología mantiene los contenidos. Si tú no tienes contenidos en los museos que va a proveer el desarrollo arqueológico, obviamente no tendrá sostenibilidad seria en materia científica I.C.: Para redondear sobre el tema de los planes anuales Tiene alguna intervención en la elaboración del POI y de las actividades prioritarias que debe de realizar el museo? H.M.: Si, nosotros tenemos control sobre eso. Nosotros tenemos la autonomía para hacer y deshacer. Eso si las autoridades nos han dado, por lo menos lo bueno que tiene en este caso, no nos han dicho no. Se envían las actividades sujetas al presupuesto [a finales de año]. Hasta ahora no nos han puesto objeciones de decirnos no hagan esto. Todo lo que nosotros decimos, nos dicen que está bien y es excelente. Osea no nos ponen objeción en eso. I.C.: También los patronatos dan sustentabilidad, difusión, pero también hay otras vías por las que puede ingresar recursos económicos? H.M.: Por entradas no porque es gratuito pero si puede haber donaciones. Pero en la donación estamos con el problema, como te digo que no quieren hacerlo por la cuestión de la universidad. Lo que se tiene que trabajar es vía patronato. En este caso lo que hemos hecho es creado el patronato del Señor Tatuado de Huacho pero tenemos dificultades porque hace tiempo que ya debiera estar ya con un reconocimiento de la misma universidad mediante un convenio para que el patronato pueda manejar el asunto, para que el dinero que consiga pueda hacerlo llegar a manos de la universidad, sino es un patronato más. 206

216 Las publicaciones no está formalizada la venta de las publicaciones de la universidad pero si tenemos publicaciones de Vichama-Indecur, que es un instituto independiente de la universidad formada por gente de los patronatos de la región. Indecur es un Instituto de desarrollo y crecimiento urbano y rural. Tiene el enfoque del apoyo a la cultura como estrategia general, pero es multidisciplinario. Entonces por ejemplo si yo salgo de acá o me sacan del cargo, me refugio en esa institución y continuare las labores normales, y apoyare desde el instituto al museo y otras actividades en la región Por ejemplo ahora queremos hacer lo del cántaro, un cántaro hermoso que tiene el museo de Paramonga [Institución educativa Nuestra Señora del Carmen], que es importantísimo y lo debería tener cada museo, deberían tenerlos los 18 pero solo una réplica cuesta 800 soles, para contar el Vichama Raymi, se ven escenas de la copula divina, se ve al dios Con es una escena hermosa que la hemos publicado con el nombre de la Copula de la Sabiduría porque reúne todas esas condiciones de información. Estoy hablando de mucha información ideología que deberían tener en cada museo. Eso va a servir para los colegios. De que obviamente se tiene que hacer investigación arqueología, pues obviamente tiene que hacerse. Hay una debilidad en cuanto a la investigación en los museos Cómo se hace para nutrir al museo de información? Sí. Pero nosotros de donde nos alimentamos más es de las investigaciones [arqueológicas] extranjeras. Comparten más información. De parte de los proyectos peruanos también pero no de la misma magnitud, no me refiero a la alta tecnología. Pero si nos llega información de los peruanos, pero tampoco hay una política que obligue Pienso que esas tres líneas debieran estar funcionando casi siempre articuladas para generar políticas de regulación y desarrollo. Que cosa haces dando educación si no hay difusión y dando difusión si no hay una articulación de difusión con la cuestión cultural. Son interdependientes, tienen que estar funcionando esas tres permanentes porque si no, no haces nada. Uno hace muchos esfuerzos en la parte educativa y no tienen la palanca de la difusión que tienen que estar articuladas. Y si no tienes el sustento científico-cultural, tampoco. Entonces están permanentemente esas tres áreas como estrategia macro genérico para la cultura. I.C.: Y con esta partida presupuestal realmente alcanza? H.M.: No alcanza, realmente hacemos maravillas con eso y a veces también de nuestro bolsillo se va. Pero lo que hacemos es manejar con los pocos recursos que se tiene. Por ejemplo a falta de presupuesto, ponemos a funcionar el patronato. Es un poco así como lo manejamos. I.C.: Ahora que comentó de las cinco áreas del museo, cómo están trabajando en las áreas de conservación e información? H.M.: En información con la escuela de Comunicación para darle sostenibilidad, porque tengo cursos ligados a ella. Dos, la articulación con los periodistas, los medios, el cable que aquí en provincia funciona algo de eso. Si quiero difundir, se puede hacer hasta un programa cultural, no hay ningún problema o impedimento. Eso se consigue, el problema es el tiempo y hay que priorizar el aspecto estratégico. Ahora estamos haciendo un video sobre 1900 años de guerra, entre la propaganda y la investigación porque lo estamos poniendo como una interrogación porque hemos conseguido material de Acaray (900 años a.c) y con el proyecto de Allen Rutherford que es del periodo 1000 años d.c estamos hablando de la Cultura Chancay. Hay ocho fortalezas identificadas en los informes científicos desarrollados por ellos, y más de 40 están en el Norte Chico. Margaret Brown [Proyecto Arqueológico Acaray] ha identificado estas cosas. Allí tienes una lectura básica para poder hacer una interpretación, hay un fundamento I.C.: En el área de comunicación se generan contenidos, videos, trabajan con la prensa, también tienen otra parte que es la publicación periódica de la revista del museo, Guara. Explique un poco más sobre eso. 207

217 H.M.: Sí. En Guara lo articulamos todo. Osea, va a salir una revista del Dr. Ruiz Estrada, sobre tejidos Chancay. Se nos ha ido el presupuesto en las cuatro revistas pero es de calidad y ya están en imprenta. Vamos a sacar una Ychsma también, porque tenemos una revista indexada de Vichama Indecur. Y cuando, estamos esperando un artículo de interpretación de la historia de las guerras del Norte Chico, que saldrá en Ychsma o Guara, pero también saldrá el video y las clases en la universidad también están vinculadas a esas actividades. Osea el trabajo es articulado, museo, videos, proyección social, investigación, dentro de nuestras limitaciones que tenemos. En Conservación tenemos una debilidad. Contratamos en una oportunidad a un conservador que trabajó en el Museo Larco. Trabajo poco tiempo, era muy bueno pero ya no teníamos presupuesto. Ahora vamos a ver de conseguir un restaurador. De repente si hay más presupuesto, con esta nueva gestión, vamos nuevamente a contratar a uno. Igualmente también un arqueólogo, pero el arqueólogo siempre ha sido el Dr. Ruiz Estrada que siempre asesora. Para cualquier cosa siempre ha sido el Dr. Ruiz, también se recurre a arqueólogos como Mario Advíncula, así también gente conocida que apoya. En un momento también estuvo otro arqueólogo que no fue de mi gestión. Pero con el viajamos por todo el Norte Chico, por toda la sierra de Huaura. También está la participación de los arqueólogos americanos. Con ellos vemos el material, lo traen para la custodia y traen los resultados de sus investigaciones, también dan charlas y conferencias de la información que nos traen Por ejemplo Allen está estudiando la Fortaleza con Margaret Brown, vienen otros y están así. Y ya después un investigador genérico de su universidad, comienzan a conectar y comienzan a hacer su proyecto. Hay que aprender de ellos, en cambio de Caral nada. Ese es un problema. I.C.: Vienen al museo para buscar objetos de la colección para estudiarlos, investigarlos? H.M.: También vienen para ello. Para el caso del museo también han hecho y estamos esperando ahora a Kit Nelson que hizo un análisis de pigmentación. Han encontrado cinabrio en las pinturas de las momias. También se han hecho análisis sobre instrumentos musicales, y así llegan. I.C.: El área de Laboratorio se concentra ahora en el inventario de la colección? H.M.: Claro, el inventario se hace con el presupuesto del museo. Nosotros nos capacitamos en el Ministerio de Cultura. Fuimos a una capacitación, pero no podemos físicamente es que somos dos. Hacer un trabajo minucioso lamentablemente no se puede. I.C.: De cuantas piezas está conformada la colección? H.M.: Son unas 3000 aproximadamente, quizás más. Las momias enfardeladas son un poco más de 80; son momias del proyecto de Córdova. Tenemos de dos colecciones, de Córdova y Tosso. Falta solo pedir las custodias de estos materiales. Son proyecto de rescate, creo. Casi la mayoría de materiales o piezas son de la Cultura Chancay, periodo Intermedio Tardío, a excepción de Haas que nos ha traído de la época de Caral y lo de Acaray que está en trámite y nos deben de estar dando la custodia. Ese material [Acaray] aún no está acá, eso va a venir ahora lo tienen todo chequeado y parece que va a salir El inventario se inició hace dos años pero lo hacemos por temporadas porque no nos alcanza el dinero. Vamos a un 20% del inventario. I.C.: Tienen los equipos para medir las condiciones ambientales? H.M.: Los teníamos pero lamentablemente tuvimos un robo. Y los robaron en ese entonces porque los teníamos puestos en las vitrinas. Aire acondicionado tenemos para el almacén si tenemos, para la sala de exposición lo vamos a comprar este año. Los equipos de medición de temperatura los teníamos pero nos lo robaron. 208

218 I.C.: Y el área de marketing? H.M.: Todavía no lo hemos acentuado. Es más que todo el marketing social, es bajo la forma de proyección social que funciona lo del Vichama Raymi y bastante también la saludación al Hombre Tatuado que también hemos traído pero no tenemos mayor investigación el Achachi también entra como una estrategia de marketing Otra cosa también, desde los patronatos nos apoyan con vestuario especializado, eso también es interesante. Hay una enorme demanda de los colegios de vestuarios especializados en esta línea. Los prestamos pero pensamos en un futuro hacer un módulo sostenible, incluso vender módulos. Estamos pensando por ahí un poco por ejemplo los videos funcionan para niños. Por ejemplo el documental para chicos de 15 años o tercer año lo entienden perfectamente y del hombre tatuado también hemos hecho un video, se les explica y ven el video. Pero no hemos cubierto el público más pequeño, niños. Hemos pensado en hacer un módulo de títeres. I.C.: Mencionó que la exposición inicia por el Arcaico Tardío y el origen de la civilización. Eso es a raíz del impacto de las investigaciones que tuvieron las investigaciones del Proyecto Caral y Norte Chico en la región. También es el hecho que surgieran iniciativas para formar nuevos museos, en especial los escolares? H.M.: Sí, sí. Eso es el impacto y esa también la idea de los módulos que te comente. Cada módulo me parece que debería repetir ese contexto, ese contenido. Me parece que funciona porque se entiende. Hasta donde eh, cuando vienen los estudiantes entienden la conexión que hay entre uno y otro periodo. Ahora creo que se necesita hacerlo más sofisticado. I.C.: De qué forma los proyectos de investigación como Bandurria, Norte Chico, Caral, han apoyado al museo? ellos se han acercado al museo o el museo a ellos? H.M.: Más que todo nosotros somos los que no acercamos. A excepción del proyecto Norte Chico dirigido por Haas, que ellos si han venido para acá. Han venido también dos o tres cuatro veces el Dr. Haas para visitarnos como también para dejarnos materiales como donación, para ver las piezas arqueológicas. Han venido y también nos han dado información. Los de bandurria, no. Y Caral, no. Últimamente han estado viniendo pero no oficialmente, han venido sus arqueólogos algunos muy de acuerdo con mucho cuidado con lo que decimos. Si han venido a conversar a conocer, y porque les llama la atención el contexto de Vichama. Me comentaron una cosa curiosa, que la Dra. no quería saber nada y les pregunté por qué, porque no le llama la atención dijeron. Lo que he visto es que ella utiliza mucho a las crónicas de Cajatambo para hacer referencia al Norte Chico pero es otro contexto, que tiene relación si pero es otro contexto. Y pregunte por que no utilizaba la carta Anua, la de Teruel y a Calancha. Me dijeron, todo lo contrario, la hemos visto utilizando Calancha. Y por qué no Teruel?, no sé solo Calancha era a quien leía y releía. Vienen en ese tipo de información no oficial. Lo último que si hemos tenido oficial es la invitación formal con documentos del centro poblado de Caral cuando han entrado en conflicto con el proyecto. Nos han pedido apoyo para el esclarecimiento, desde su punto de vista, yo no soy nada de eso pero por lo menos pedían una opinión sobre Caral y esta gente han crecido los hijos de los pobladores, son abogados, ingenieros, y están respondiendo de otra manera. Todavía nos han pedido que estemos dentro de su centro poblado y también hemos recibido después de dos o tres semanas una carta de la Dra. Shady, del proyecto Caral pidiendo que nos integremos a la comisión multisectorial del Plan de Manejo. Y allí por primera vez se ha incluido al centro poblado de Caral como miembros de esta comisión I.C.: Cómo cree que este museo puede contribuir al Norte Chico? H.M.: Lo viene haciendo con apoyo sobre todo el aspecto cultural en general, al llevar un poco de los contenidos de lo que vamos aprendiendo de los resultados científicos de la arqueología y llevándolo a 209

219 otros campos de lo audiovisual, a los campos de o a las transferencias de lo científico porque han hecho exposiciones de todo tipo bajo las directivas, el material que uno le da, la asesoría y tiene su expresión dentro de lo mínimo de lo mínimo porque en realidad si tuviésemos nosotros un 1% de lo que tiene el proyecto Caral, estoy seguro que podríamos multiplicar el esfuerzo en el aspecto cultural que nosotros tenemos. Nosotros estamos haciendo casi nada pero si tuviésemos un poquito de estas cosas incluso en las decisiones políticas que se puedan tomar de priorizar investigaciones arqueológicas de puesta en valor en términos de estrategias para el turismo. Por ejemplo la Fortaleza de Paramonga, como el Templo de Chacra Socorro o como la Fortaleza de Cerro Colorado, con poca inversión y con una política de concentración obviamente se pudiera tener el poder de una manera política, se pudiera generar un enorme potencial económico. Lamentablemente no hay esa política pero si se podría. Mira en la Huaca Pucllana [Lima] lo que están haciendo. Cerro Colorado a pesar que está invadido, la zona nuclear está arriba y está intacta. Ya pues se perdió y es responsabilidad también de los arqueólogos. I.C.: Cómo cree que se percibe el museo por parte del público? H.M.: Mira, en general no hemos tenido nada de problemas en absoluto, más bien todo es apoyo. Apoyo y creo que la población peruana tiene y pienso que es un problema también porque no todo es apoyo porque en el fondo hay una filosofía en la que ven a las personas que desarrollan algo de cultura, a la misma arqueología, a los antropólogos, que piensan que todo lo que dicen es correcto. Yo pienso que eso es un problema, un problema porque no es así. Hay arqueólogos y arqueólogos, hay antropólogos y antropólogos y obviamente el análisis crítico es fundamental, no todo lo que dicen los arqueólogos es cierto. Este espacio es un lugar para generar ese pensamiento crítico? Pienso que sí, pero que necesitamos ampliar más. Pienso que hay cobertura, se ha dicho aspectos críticos fuertes, obviamente dentro de la seriedad posible del manejo vienen al museo a hacer denuncias, es un poco la retroalimentación que hay. Vienen a hacer denuncias, pero no tenemos los medios suficientes lamentablemente, ni la autoridad suficiente ni las normas que puedan permitir, ni la economía suficiente para poder capitalizar tanta denuncia que hacen. Eso es interesante, porque ven al museo como un agente que puede encargarse de todo, tienen ese rol con la cultura en general? Lo que nos preocupa es que no podamos resolver todos esos problemas porque vienen con problemas en Cerro Colorado, un problema que no sé si es cierto o no. Hay arqueólogos que les han dado dinero para que hagan proyectos para justificar a priori de que no es sector arqueológico. Y han venido acá los dirigentes a denunciar para que los denunciemos. Les he dicho, yo no puedo hacer la denuncia porque no soy el afectado, soy un intermediario. Tráiganme ustedes la denuncia y la podremos canalizar. Entonces ese órgano, ese espacio debería ser el colegio de arqueólogos pero el colegio también tiene problemas. Lo único y además es que se están destruyendo muchas evidencias, tenemos información no te imaginas, siempre llegan acá Como te digo, hay arqueólogos y arqueólogos. Osea, por el manejo y a mí mismo porque de alguna manera me dicen el arqueólogo. Pero yo digo que no los soy, pero me dicen que estoy haciendo las funciones de arqueólogo no, no son funciones. Simplemente dirijo el museo y converso con muchos arqueólogos y tengo esa cultura de la información que me dan los arqueólogos. Pero es peligrosa esa visión porque pienso que se debe de desmitificar esa imagen que se tiene porque puede justificar muchos errores que se están haciendo I.C.: Fortalezas o potencial del museo para que pueda ser la plataforma de cultura viva de la región H.M.: Yo veo un potencial del 90%, siempre y cuando cuente con un pequeño presupuesto porque todo se construye, osea hay condiciones. Felizmente en esta zona hay, somos cuna de la civilización. Hay momentos como digo, en la que la conciencia está abierta como una ventana y son momentos estratégicos para introducir allí una conciencia que no se va a perder pero se necesitan en ese preciso momento los 210

220 presupuestos. Si nos han sucedido momentos así con algunas cosas básicas y no se pierden pero obviamente se necesita un pequeño presupuesto. Un poco acá lo que hacemos, Jorge Príncipe se encarga de ver el aspecto educativo, él es especialista en ello. De profesión es biólogo Las potencialidades las veo que son bastantes, lo que se requiere es ver políticas de gestión y tener un presupuesto adecuado. Porque uno gasta su presupuesto, se nos vuelve complicado y difícil eso Mira el campo sostenible en nuestra localidad es el turismo, si nosotros pudiéramos captar solamente el 5% del mercado turístico del cono norte de Lima, tuviéramos para sostener pienso que por lo menos un año esta zona. Obviamente que con una política adecuada porque el turismo da cualquier cantidad de recursos es más sostenible. Pero también tiene que haber un colchón serio en términos educativos I.C.: Cómo apoya el Ministerio de Cultura al museo universitario? H.M.: El ministerio no nos ha apoyado solo gente suelta. Vino una bióloga (?) de Pueblo Libre dos o tres veces, institucionalmente. Nos dijo para ir allá pero no hemos tenido dinero para movilizarnos a Lima para capacitación y eso Han venido te digo varios, vino también uno de Estados Unidos pero lamentablemente no se le ha hecho seguimiento, eso como particulares. Del Estado, los del Museo de Pueblo Libre que nos ofreció el apoyo para hacer análisis de restos de hongos de las momias. Y para capacitación si nos han invitado algunas instituciones, a veces no hemos podido ir. I.C.: Están dentro del Sistema Nacional de Museos del Estado cómo beneficia ello al museo? H.M.: Es registro nada más. Solamente lo que hacen es recomendaciones, recomendaciones y recomendaciones, pero físicamente últimamente me he enterado que hay un presupuesto para las principales redes de museos, pero las que ellos consideran no las que no todas. Y también hay un presupuesto para la creación de museos estuve hablando en el Ministerio y estuve conversando con la gente y me dijeron que no, aquí no hay una creación para Huacho. Aquí hay tres presupuestos, para el Museo de Pachacamac, un museo de la selva y otro museo que no recuerdo. Eran tres, osea que tenían presupuesto para museos pero lo que ellos consideran La dirección de museos del ministerio tiene como política el registro de museos Lo que si nos han ofrecido últimamente es apoyarnos desde la Dirección de Museos vinieron de esa área para la supervisión de los inventarios. Nos han recomendado un montón de cosas, nos han dicho que nos van a apoyar, para ver lo del material del Acaray, para recepcionar los materiales también. Parece que hay ciertas condiciones, el problema es que estamos preocupados con lo del inventario y hay cosas que se nos han ido, y ahora también con la ley universitaria y esas cosas, también hay retraso en mis pagos, un montón de cosas. 211

221 ENTREVISTA 4 Mario Advíncula Zeballos es Licenciado en Arqueología. Durante el 2002 al 2008 fue parte del equipo del Proyecto arqueológico Norte Chico (PANC), donde se desempeñó como investigador y encargado del área administrativa del proyecto. Se ha dedicado a temas de proyección social y en ese sentido ha tomado en cuenta formarse en museología. Estudio un diplomado en Museología, trabajó varios proyectos de museografía, organización y desarrollo de proyectos museográficos en el Norte Chico, asimismo en Caraz durante el En los años siguientes trabajó en la Municipalidad de Lima donde desarrolló varios planteamientos museológicos para el Museo Metropolitano. En la actualidad trabaja en el Ministerio de Cultura, en el tramo sur del Qhapac Ñan donde a partir del tema de gestión inserta el tema de museos como una estrategia de gestión. La entrevista se realizó en la ciudad de Lima, el jueves 23 de diciembre de I.C.: Comenzaremos por hablando sobre el Proyecto Norte Chico y sus inicios. Puedes comentarme de dónde y por qué se empleó el término con que se identificó el proyecto M.A.: [Región del Norte Chico] Creo que es una jerga geográfica y que se aplica también, por lo menos que yo sepa, en Chile. Chile también aplica lo de Norte Chico-Norte Grande, sobre todo porque la capital está en la parte casi media, igual que en Perú. Pero así que exista un rastreo del término, no. Sé que es el más popular ahora. Permite diferenciar la capital del polo norte de desarrollo como Chiclayo, Piura, Trujillo. El Norte Chico es un área de transición entre Huarmey y Chancay y que es una transición de la capital con el bloque con el norte. Desde Chiclayo ya puede ser considerado como norte norte. I.C.; Cuál fue la vinculación del Proyecto Norte Chico con la comunidad/es de esta región, en el aspecto de museos y protección del patrimonio? M.A.: Bueno, el proyecto Norte Chico desde el inicio busco siempre alianzas sobre todo con los gobiernos locales. En este caso la Municipalidad de Pativilca siempre estuvo más llana a coordinar acciones a partir de talleres. Y sobre todo que ellos tenían la necesidad de activar su Museo Bolivariano, el cual es administrado por la municipalidad. Tenían una experiencia ya con una museografía implementada por el diario de El peruano, porque la primera edición de El Peruano sale de Pativilca, habían hecho una sala de periodistas con una colección interesante y materiales documentales también y de reproducción bastante importantes. Ellos querían dinamizar más este museo y ponen dentro del convenio el hacer una exposición con arqueología, porque ellos también tienen una colección arqueológica. Entonces se coordinó esa primera aproximación. Luego en la formulación de talleres [talleres participativos de los años 2003 al 2007] y el trabajo de campo nos dimos cuenta de que había un potencial bastante importante respecto a las colecciones, sobre todo de los colegios que estaban alrededor de todos los valles y que podían ser parte de un mecanismo de gestión también porque existe una gran depredación del patrimonio arqueológico. Y tal vez todo el patrimonio que se perdía a través del huaqueo podía ser de alguna forma tomado en cuenta, a partir de la sensibilización de lectura que tú puedas darle a las colecciones. El tema educativo, el tema museográfico y el tema de potenciar los museos que existían fue abordado a partir de la propuesta inicial de Henry Marcelo de la Red de Museos. Entonces, ahí nosotros apuntamos también a apoyar esta iniciativa. La Red de Museos era una situación oportuna, una propuesta que se ajustaba a la realidad y que podía y puede funcionar pero dependía mucho de la madurez institucional de los actores como los gobiernos o las instituciones educativas. Claro, puede ser un trabajo bastante importante pero de pronto cambian las autoridades y empiezas básicamente de cero. Entonces era básicamente institucionalizar la práctica 212

222 dentro debido que si se cambian a los agentes involucrados se mantenga las experiencias y prácticas [sostenibilidad] Hasta establecer normativas internas como reglamentos del manejo de colección, protocolo, que no hay y es lo último que les interesa gestionar. Entonces entra coordina para hacer una exposición y hay un cambio por un nuevo director del colegio y dice: sabes qué, cambiemos mejor y ponemos estas piezas que me gustan más y estas otras tráiganlas para aquí adelante. Y ya el guión que se implementó pierde sentido. Entonces, la Red de Museos podía de una forma ser como un organismo que dé estabilidad en esos aspectos. Entonces era como la red.si la nueva autoridad del museo podría consultar con esa red cómo se podía hacer. Era poder dar un soporte mucho más grande. Pero bueno, necesitábamos de todas maneras unos puntos bases y la propuesta de red era que el museo de la universidad sea un punto base y posiblemente el museo de Pativilca, puedan ser una base, para tener una cobertura de todo el territorio. I.C.: Hasta qué punto crees que se llegó con esa iniciativa dentro de los museos de la región? M.A.: Se hizo, se convocó a una exposición en el año 2005 o 2006, no me acuerdo, en Barranca, que básicamente era que los museos participen con su exposición en una semana en el Hotel Boli... eh, el Hotel Chavín, allí. Y que ellos, que la mayoría era de colegios, los mismos estudiantes cuenten qué interpretación daban a su colección y a su historia, a su historia de museo. Ese fue tal vez el punto más alto de hechos concretos. Fue auspiciado por la Cámara de Comercio [de Barranca], por el Proyecto Norte Chico. Y fue un punto bastante importante. Inclusive tuvimos la visita de la directora del Museo Nacional [de Arqueología, Antropología e Historia del Perú]. Y era realmente sorprendente que una exposición sea explicada por los estudiantes del colegio. Eso fue un punto importante, pero a nivel de organización, de funcionamiento todavía faltaba digamos que se gestione un proyecto. Como el de Red de Museos para que articule todo... Claro, y que tengan un presupuesto inicial para que poder hacer capacitaciones, para por lo menos poder tener un nivel de acercamiento porque los museos están bien distribuidos. Entonces para que se movilice por ejemplo el señor que está en Huayto a una reunión en Huacho sin que esto genere un [inaudible] de manejo de su colección o nuevas perspectivas es un poco difícil. Tiene que haber algo que ellos ganen, no monetariamente pero si a nivel de conocimientos. I.C.: Recuerdo que dentro de los talleres participativos tenían como ejes temáticos principalmente estos ejes temáticos: Arqueología, Educación, Patrimonio, Turismo. Y en cierto sentido punto lo que más atracción generaba era el tema turismo. Coméntame cómo era percibido te parece que cómo una estrategia de gestión M.A.: Claro, porque el tema a nivel de autoridades, el tema más sensible, el tema que los va a movilizar siempre va a ser el turismo. Entonces la propuesta, secuencialmente establecida, decía que era mucho más estratégico económicamente, o se complementa -si quieres- económicamente, proponer una activación de un museo para la recuperación, puesta en valor de un sitio arqueológico. Pero supuestamente, la recuperación de un sitio arqueológico es enorme, muchos de estos sitios están realmente distantes de los centros poblados. Entonces, si bien es parte de una estrategia, también tendría que descubrir una estrategia de los museos que están dentro de la ciudad y que pueden generar digamos un impacto complementario con el sitio. Entonces, turísticamente tienes que tener eh diversificar la oferta. Entonces, ese, eh era uno de los enunciados estratégicos Eh, Paramonga tiene al menos dos colecciones de dos colegios que están en el centro de la ciudad. Con que si se oferta la posibilidad de conocer estos museos, el turista tendría que pasar por la ciudad, consumir en la ciudad, ver los productos que hay en la ciudad, en vez de pasar por la panamericana [carretera Panamericana Norte] que esta distante y enrumbarse a conocer a los sitios arqueológicos y después regresar por la misma panamericana y no conocer jamás Paramonga. Ese tipo de estrategias son las que se ponían como enunciado. Por supuesto que trabajar los museos significa 213

223 establecer un vínculo de educación, conocer la historia, investigar su historia, interpretar su historia una oportunidad bastante importante para que los conceptos de historia local ingresen en los escolares porque están bien distanciados. I.C: Esto que mencionas sobre la sensibilidad del tema turismo parece estar muy vinculado al impacto que ha generado la arqueología a partir de los 2000 en adelante con los estudios del Arcaico Tardío en los que se plantea el Origen de la Civilización en la región. Qué impacto crees que se genera dentro del patrimonio y en los museos a raíz de ese gran enunciado y todo lo que empiezan a articular y a mover estos estudios? M.A.: Es en realidad el modelo de gestión que se gestionó, que se logró, claro, logro recuperar todo un sitio o varios sitios relacionados a esa época al Arcaico Tardío, pero esto eh no se complementa con un panorama territorial. Son sitios excepcionales, son sitios importantísimos, pero no hay una perspectiva integral de los valles. De tal manera, que tienes en la realidad inversiones absolutamente millonarias y justas en sitios que están bastante distantes, con ciertas dificultades de acceso y que después fueron superadas por la puesta en valor. Osea, la puesta en valor género el acceso, y tienes sitios que están al lado de la panamericana [carretera Panamericana Norte] con una monumentalidad increíble pero que no son de la época [del Arcaico Tardío] y que no tienen ni un porcentaje de inversión que tienen los demás sitios. Entonces, yo creo que es eso que no hay una perspectiva territorial. Hay hechos importantes pero no responden a un enfoque de la integridad del desarrollo del Norte Chico. I.C.: Has participado de cerca en los talleres participativos organizados por el Proyecto Norte Chico y la Municipalidad de Pativilca. Hay un hecho que resulta interesante, el cual fue la conformación de un comité para crear un museo regional, llamado Comité Pro Museo de Barranca. Coméntame sobre esta experiencia, los agentes que participaron y que se involucraron en esta iniciativa. M.A.: Digamos que es logro formal o institucional de los talleres o de las mismas exposiciones que se organizaron en Barranca y Pativilca. En realidad el actor que se propuso impulsar realizar esto fue la Cámara de Comercio de Barranca, a través del señor Raúl Bustamante, que ve como una necesidad real de contar con la institución de un museo porque no solamente estamos hablando de una visión histórica de un periodo o un hecho particular sino una visión integrada de los valles, de las culturas, de los pueblos, de las historias que existen en el Norte Chico, y sobre todo en la Provincia de Barranca, inclusive en la actualidad, ver toda esa riqueza histórica, cultural a través de unas exposiciones, una institución que guarde este testimonio y promueva la investigación de todas estas historias. Entonces la Cámara de Comercio es la que da el soporte, convoca a las instituciones que están involucradas y logra hacer capacitaciones, charlas y legaliza esta institución y comienza ya a trabajar con las autoridades locales para cada vez insertar en agenda política el tema de un museo y ver la posibilidad de ir avanzando en este proyecto aprovechando que ya en la ciudad de Barranca está funcionando una universidad, la Universidad Nacional de Barranca. Entonces son coyunturas que se ven favoreciendo un proyecto. Lamentablemente hay muy poco en el caso de museos, hasta que no lo ven no lo creen. Entonces se está avanzando de a pocos, hay muchas dificultades con los cambios periódicos de autoridades, pero digamos es una propuesta que viene siendo llevada por los mismos actores locales. Actores como la Cámara de Comercio, el Sr. Raúl Bustamante, también participa mucho en esto Henry Marcelo que es el Jefe del Museo Arqueológico de la UNJFSC, que digamos que dentro de todos los personajes que están involucrados en esto tiene mayor experiencia en el manejo de un museo, tiene capacitaciones en muchos temas y ya sabe cuáles son las dificultades del manejo de una colección y la de generar temas educativos con la colección. Esos son los avances que tiene pero es un tema de muy largo aliento. Necesita aun formalizar por ejemplo el ceder 214

224 el terreno, que una institución financie el proyecto museográfico porque es todo un tema es un proyecto bastante complejo que necesita de varios profesionales. Pero, digamos está ahí y yo creo que ojalá en algún momento las autoridades puedan incorporar dentro de sus logros, posibles logros, y sacar este proyecto desde qué año está en marcha? Desde el 2007, Es un comité formado por la Cámara de Comercio pero que invita a los representantes de las municipalidades y otras instituciones. Del Proyecto Norte Chico, estuvimos Álvaro Ruiz, Manuel Perales y yo como asesores, también estaba la UGEL [Unidad de Gestión Educativa] del sector educación, el Sr. Ibarra si no me equivoco, miembros de la Cámara de Comercio obviamente. Se invitaba igualmente a las municipalidades de Pativilca y Paramonga. Había de Supe había de varias instituciones, no recuerdo. Supongo que ahora debe estar con más presencia de estudiantes como ya está funcionando la universidad [de Barranca] que era que algo que no estaba al inicio, en un entendido de que los estudiantes también están participando de esto. Se estaba promoviendo la creación de una institución museológica que promueva la visión integral de la historia, que se convierta en un eje de desarrollo que sea útil a Barranca, no que se aisle de Barranca, que sea parte de la agenda de desarrollo de Barranca. Ese es el perfil de museo que se está buscando. De tal manera que el corte no era solamente histórico, temas actuales, tradiciones, hasta económicas la histórica económica de Barranca, de la provincia estoy hablando. Barranca como un valle prospero tiene digamos, tiene mucho movimiento de poblaciones, hay mucha población flotante pero que por varios o por muchos motivos existe también un problema de discriminación y también se puede abordar ese tema, por ejemplo con los Pararinos. Hay, con las distancias del caso, lo que se percibe en Lima. La limeñidad reducida en grupos sociales a una utopía señorial pero que es absolutamente falsa incluso el título de la propuesta era Museo Antropológico, Arqueológico, Histórico de la Provincia de Barranca. No era por eso estigmatizar la historia partir de un periodo ni nada, era una visión integral. La historia no se paralizo en un momento sino que continúo hasta lo que somos ahora, que somos parte de la historia. I.C.: En el Norte Chico y en el resto del país también hay muchas instituciones como museos y colecciones que se forman no por iniciativa del Estado sino por agentes de la ciudadanía y, pues, tienen ya una larga trayectoria y experiencia, en mantener esos espacios y el interés por trabajar con el patrimonio arqueológico/histórico. Lo que me llama la atención es que no necesariamente el Estado está moviendo este tema. Qué aspectos resaltarías de la forma en el que los agentes, en el Norte Chico, trabajan con el patrimonio? M.A.: Ellos, osea el actor principal de la formación de colecciones, no solamente en el Norte Chico sino también en varios de los sitios del país son los profesores. Son los educadores los que tienen un rol bastante importante. Y ellos recuperan la mayoría de las colecciones con el fin primero de que no se pierdan, de que exista este repositorio para estas piezas que puedan salvar del huaqueo y por otros lado también generar dinámicas de apropiación, quizás sin proponérselo.dinámicas de apropiación, de que los alumnos sean capaces de interpretar su historia, su colección, saber de que esta pieza corresponde a un hecho o qué personajes se puedan rescatar. Muchas piezas símbolo son de personajes [en la iconografía de ceramios], más que de abstracciones son de personajes que está portando algo o teniendo cierto protagonismo en la pieza, ese va a ser el emblema. Ellos están atrás de eso. Y es más, cuando llegan los arqueólogos, quieren que les den más información para que ellos puedan acercarse con las pautas científicas a poder interpretar. Yo creo que va más a esa exigencia. No les importa tanto cuan antiguo sea sino qué están representando estos personajes? Estas técnicas? Hay mucho? Hay poco? Qué significa que utilicen?...yo qué sé, que la cerámica esté pintada o no, o que la cerámica esté roja o negra. Entonces yo creo que ellos están atrás de esa información. Hay una visión del manejo del valle, si hay. En el caso del colegio Z15 de Huacho que es un colegio técnico-agrario, es un centro educativo técnico- 215

225 agrario, ellos buscaron precisamente la información del Museo de Pativilca porque les daba esa posibilidad de entender un poco más allá de la pieza misma, entender por ejemplo técnicas del manejo de recursos, cómo se cultivaba, qué significaban los símbolos ceremoniales, eh más posibilidades de poder interpretar y trabajar temas de investigación con los estudiantes de diferentes materias. Entonces ellos, todos los profesores fueron a hacer una visita al museo de Pativilca, hicimos una visita guiada. Y ellos a partir de esto hicieron visitan con sus alumnos al museo y generaron investigación en los temas de matemáticas, técnicas agrarias, lenguaje, religión, literatura porque hay mitos también. Entonces ese acercamiento que nació a través de los profesores corresponde a una nueva visión de museos. Ese es ejemplo tal vez más extraordinario, porque ya solamente no es que vamos a escuchar la historia, vamos a analizar e interpretar la historia desde nuestras materias y eso tal vez es el caso más bonito. Hay experiencias también en Paramonga con el colegio con el profesor de arte, Carlos Sipán. Hacia sus lecciones de arte a partir de la riqueza iconográfica de las piezas de la colección. Entonces hay pero como que -y fue parte de los diagnósticos de los talleres- eso de que se pierde, que el que llega y quiere hacer algo casi que empieza de cero. Pero lo más importante es que ellos no esperaron al Estado. Ellos realmente resolvieron sus problemas con las colecciones, el aspecto educativo con la colección. Y eso es importantísimo y tienen que ser reconocidos. Porque muchas veces llega el Estado y llega mal. Claro porque llega el Estado con una actitud de que claro, todo lo que han hecho ustedes no es científico. Claro, no va acorde al estándar de museo ideal, tradicional que básicamente funciona en la capital. Están tratando de que tengan la misma estructura. De repente son otras estrategias u otras formas de concebir el museo o el patrimonio en el museo. 216

226

227 ANEXO 3 Instrumento para el diagnóstico de museos 217

228

229 INSTRUMENTO PARA EL DIAGNÓSTICO DEL ESTADO ACTUAL DE LOS MUSEOS EN EL NORTE CHICO El presente instrumento de recolección de información ha sido elaborado para alcanzar uno de los objetivos de la investigación, la cual tiene como propósito estudiar el origen y trayectoria de las instituciones museísticas en el Norte Chico-Perú, desde sus orígenes que nos remiten a década de los 70 hasta nuestros días, a fin de producir un diagnóstico y reflexionar sobre el quehacer museológico en la región. Por la cantidad de instituciones y la dimensión temporal de la investigación es un tanto ambicioso abordar cada una de ellas, por lo que se ha planteado realizar el estudio en dos casos representativos: el Museo Arqueológico de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión y el Museo Arqueológico Escolar de la Institución Educativa Particular Nuestra Señora del Carmen. A partir de ellos se espera poder medir el pulso al quehacer museológico de los espacios museísticos presentes en el Norte Chico. Específicamente, el instrumento fue desarrollado para cumplir con el objetivo de la investigación que se corresponde a Producir un diagnóstico en torno al estado actual de dos espacios museísticos representativos, conducidos por los agentes culturales más relevantes vinculados a ellos. El instrumento elaborado fue un cuestionario que sirvió para recoger información sobre el funcionamiento de los museos bajo tópicos puntuales, como: Colección o acervo, infraestructura, conservación y restauración, difusión y divulgación, acorde a la definición actual del museo establecida por el ICOM (2007). Tiene un carácter mixto pues contiene tanto preguntas cerradas (Si No) como abiertas o de desarrollo, el mismo que se aplicó en cada caso. Su aplicación permitió recoger información estandarizada, y con ello aproximarnos a conocer y comparar las condiciones actuales en que trabajan ambos espacios Se consideró realizar su desarrollo después de la realización de las entrevistas a los agentes involucrados en cada caso seleccionado, puesto que para ese momento se tendría una visión panorámica de lo que sucede en cada espacio. Al realizar esto, se pudo ajustar el instrumento y en la medida de su aplicación se fue corroborando o no la información disponible de las entrevistas. Se empleó en formato impreso y fueron llenados por escrito. Esto fue directamente realizado por el investigador con los datos que directamente proporcionaron los responsables de cada una de las áreas del museo. Estos responsables resultaron desempeñar múltiples actividades y funciones. En el caso del Museo Arqueológico de la Universidad José Faustino Sánchez Carrión, fue el Lic. Jorge Príncipe, asistente administrativo del museo y encargado de desarrollar actividades de otras áreas del museo como laboratorio y comunicación. En el 218

230 caso del Museo Arqueológico Escolar Nuestra Señora del Carmen, el docente Lic. Juvenal Ramírez, es el encargado de este espacio y de todas las actividades que hacen posible su funcionamiento. Adicionalmente, a la recopilación de información se le sumo el registro fotográfico, en la medida de lo permitido por los responsables, acorde a cada tema tratado en el cuestionario. El instrumento se desgloso en ocho formularios que se denominaron formatos de cuestionario. En el presente documento se indica en color azul la información que en detalle se iba a tomar o profundizar en descripciones. 219

231 Formato de Cuestionario- Hoja 1 de 8 DATOS GENERALES Nombre y Ubicación: Dirección: Contacto: Teléfonos y correo de la institución Fecha de registro: Inicio: día / hora Final: día / hora Tipología Público Privado Marcar con una X en las columnas de la derecha Colección Museo Escolar Casa Museo Centro de Interpretación Museo Comunitario Otros (indicar tipo) Titularidad Área construida Indicar el nombre del titular En metros cuadrados Horarios de atención N de visitas al año Cuaderno de visitas y/o Estadísticas de visitantes Indicar si existe o no; cantidad. También si los datos han sido procesados por la institución o no. Observaciones Registrado por Iniciales del investigador: I.C.R Fuente Nombres de responsable y área 220

232 Formato de Cuestionario - Hoja 2 de 8 PERSONAL DEL MUSEO Nombres Área / Cargo Relación laboral Temporalidad de los cargos 1. Indicar nombre Indicar: cargo en el área y especialidad (profesión) 2. Indicar nombre Indicar si es contratado, por servicios, practicante, etc. indicar cada qué tiempo se renuevan los cargos y/o el tiempo que viene trabajando en el museo 3. Indicar nombre Anotaciones adicionales: Por ejemplo si cursa o cursó algún tipo de capacitación o especialidad en Museología, Conservación, etc. Registrado por I.C.R Fuente Área y responsable 221

233 Formato de Cuestionario - Hoja 3 de 8 COLECCIÓN Tipo de colección Indicar: Histórica, antropológica, arqueológica, religiosa, ciencias naturales, tecnológicas, artísticas, mixto, etc. N de objetos De ser posible indicar por tipo de colección. Forma de adquisición Programa o políticas de préstamo y/o adquisición Indicar la forma: por donación, excavación, recolección, etc. y cantidad Indicar Si - No. Si es afirmativo especificar cómo se realiza. Objetos exhibición en Indicar cantidades. ATENCIÓN EN: Desde aquí hasta el final del formato marcar con una X en cada ítem SI NO ANOTACIONES CRITERIOS /FUENTES Inventarios: Fichas de registro Libro de registro El inventario está actualizado? Manejo de la documentación de la colección Faltan inventariar piezas? Registro Nacional: Nº de piezas inscritas en el registro Faltan ingresar piezas? ondiciones para el desarrollo del registro Indicar si cuenta con inventario o no, o si se encuentra en proceso Indicar qué datos se recogen según la ficha (descripción, estado de conservación, etc.). Indicar fechas de registro (fechas y/o último periodo). Indicar si se encuentran las siguientes condiciones para el desarrollo del registro: * Equipos * Acceso a internet * Personal capacitado * Sistema informatizado del inventario. Indicar en % la cantidades inventariadas y no. Indicar en % las cantidades inscritas. Indicar en % las cantidades. Indicar si se encuentran las siguientes condiciones para el desarrollo del registro: * Equipos * Acceso a internet * Personal capacitado * Sistema Indicar si las publicacione s o convencione s utilizadas, son por ejemplo: ICOM, Cómo administrar un Museo. Un manual práctico. Capítulo, El papel de los Museos y el Código profesional de Deontología. Pp Pueden ponerse las referencias completas como en éste ejemplo. 222

234 informatizado del inventario. Catalogación: Nº de piezas catalogadas Faltan catalogar piezas? Indicar en % las cantidades inscritas. Indicar las cantidades en % Registrado por I.C.R Fuente Área y responsable INVESTIGACIÓN Formato de Cuestionario - Hoja 4 de 8 ATENCIÓN EN: Desde aquí hasta el final del formato marcar con una X en cada ítem SI NO ANOTACIONES Existe un programa de investigación? Trabajos actuales La colección está abierta a investigadores de afuera? Podemos saber cuántos trabajos sobre el museo se realizan cada año? Existe una biblioteca o medios de consulta propios? Si es afirmativo, explicar cómo se desarrolla y conecta con las otras áreas. Indicar con una X. Anotar si son parte del programa o independientes. Si son sobre las colecciones como trabajo de campo u otros. Por ejemplo: Tesis universitarias, trabajos de campo, etc. Recoger datos de tesista e investigadores. Si es afirmativo, explicar cómo se realiza. Cuantificar e indicar el número estos trabajos. Si es afirmativo, explicar cómo funciona este servicio y cómo se conecta con el área. Registrado por I.C.R Fuente Área y responsable 223

235 224

236 225

Manual de Procedimientos

Manual de Procedimientos 1 de 11 Elaborado por: Revisado por: Aprobado por: División de Bibliotecas Vicerrectoría Académica Arqueológico Jefe División de Bibliotecas TABLA DE CONTENIDO 1. OBJETIVOS... 2 2. ALCANCE... 2 3. DEFINICIONES...

Más detalles

PLAN DE ACCION BARRIOS DEL MUNDO BOGOTÁ

PLAN DE ACCION BARRIOS DEL MUNDO BOGOTÁ PLAN DE ACCION BARRIOS DEL MUNDO BOGOTÁ PRESENTACION Barrios del Mundo se constituye en un proceso en el cual los jóvenes juegan un papel fundamental en su concepción y consolidación. Esta iniciativa busca

Más detalles

1. Desarrollar y consolidar las distintas instancias del Sistema Nacional de Museos

1. Desarrollar y consolidar las distintas instancias del Sistema Nacional de Museos ANEXO 1. RELACIÓN DE LOS OBJETIVOS CON LAS ESTRATEGIAS Y LÍNEAS DE ACCIÓN NECESARIAS PARA LOGRARLOS Objetivo General Objetivos Específicos Estrategias Líneas de Acción 1. Desarrollar y consolidar las distintas

Más detalles

Grado de Historia: COMPETENCIAS

Grado de Historia: COMPETENCIAS Grado de Historia: COMPETENCIAS El Grado de Historia responde a un doble objetivo. Ante todo, el de suministrar un conocimiento crítico del pasado humano y, en consecuencia, el dominio de los métodos y

Más detalles

LAS RUTAS DE LA LIBERTAD. Conmemoración del Bicentenario de las Independencias en Iberoamérica

LAS RUTAS DE LA LIBERTAD. Conmemoración del Bicentenario de las Independencias en Iberoamérica LAS RUTAS DE LA LIBERTAD Conmemoración del Bicentenario de las Independencias en Iberoamérica 1 LAS RUTAS DE LA LIBERTAD Las Rutas de los Libertad es una iniciativa de la Organización de Estados Iberoamericanos

Más detalles

LICENCIATURA EN DESARROLLO REGIONAL SUSTENTABLE

LICENCIATURA EN DESARROLLO REGIONAL SUSTENTABLE LICENCIATURA EN DESARROLLO REGIONAL SUSTENTABLE La Licenciatura de Desarrollo Regional Sustentable, pretende preparar a profesionales que tengan un enfoque holístico de la realidad de una región cualquiera,

Más detalles

1 Concepto polisémico: Concepto que adquiere diferentes significados según el enfoque y la percepción del planificador-gestor territorial.

1 Concepto polisémico: Concepto que adquiere diferentes significados según el enfoque y la percepción del planificador-gestor territorial. CAPITULO II. MARCO CONCEPTUAL La revisión de la bibliografía producida en América Latina y El Caribe durante los últimos veinte (20) años por parte de expertos en el tema y el análisis de las diferentes

Más detalles

MESA Nº 1 FORTALECIMIENTO DE LAS ORGANIZACIONES SOCIALES, COMUNAS Y CONSEJOS COMUNALES.

MESA Nº 1 FORTALECIMIENTO DE LAS ORGANIZACIONES SOCIALES, COMUNAS Y CONSEJOS COMUNALES. BLOQUE ESTADAL DEL CONSEJO PRESIDENCIAL DE GOBIERNO POPULAR CON LAS COMUNAS. CAPÍTULO MIRANDA MESA Nº 1 FORTALECIMIENTO DE LAS ORGANIZACIONES SOCIALES, COMUNAS Y CONSEJOS COMUNALES. Establecer políticas

Más detalles

Análisis de la Revalorización Patrimonial en municipio de San Miguel Allende, Guanajuato de 1980 a 2010.

Análisis de la Revalorización Patrimonial en municipio de San Miguel Allende, Guanajuato de 1980 a 2010. Universidad Nacional Autónoma De México Posgrado en Geografía Proyecto de investigación: Análisis de la Revalorización Patrimonial en municipio de San Miguel Allende, Guanajuato de 1980 a 2010. Presenta:

Más detalles

EL MUSEO COMO FORUM DE CIUDADANÍA EN EL MUNDO Raúl Andrés Méndez Lugo México

EL MUSEO COMO FORUM DE CIUDADANÍA EN EL MUNDO Raúl Andrés Méndez Lugo México CADERNOS DE MUSEOLOGIA Nº 28 2007 265 EL MUSEO COMO FORUM DE CIUDADANÍA EN EL MUNDO Raúl Andrés Méndez Lugo México El museo representa un recinto que necesariamente tiene forma, contenido y protagonistas.

Más detalles

XV Encuentro Internacional de Estadísticas de Género

XV Encuentro Internacional de Estadísticas de Género XV Encuentro Internacional de Estadísticas de Género Noviembre 2014 XV Encuentro Internacional En el marco de los trabajos de la Conferencia Estadística de las Américas, se realizó el XV Encuentro Internacional

Más detalles

LA PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO CULTURAL EN LOS ÁMBITOS REGIONALES Y LOCALES

LA PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO CULTURAL EN LOS ÁMBITOS REGIONALES Y LOCALES LA PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO CULTURAL EN LOS ÁMBITOS REGIONALES Y LOCALES Magali González Manco Área de Asesoría legal Proyecto Qhapaq Ñan Sede Nacional El Patrimonio Cultural se compone de elementos o

Más detalles

ENFOQUE PARA LA DE LA HISTORIA

ENFOQUE PARA LA DE LA HISTORIA HISTORIA ENFOQUE PARA LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA FORMATIVO consideran la diversidad de los sujetos históricos y el estudio de la sociedad en sus diversas dimensiones: sociales, culturales, políticas y

Más detalles

Carrera Artes Visuales Siglo XIX y XX. Hrs. Teóricas 4 Semestre 7 Seriación LAV Hrs. Prácticas

Carrera Artes Visuales Siglo XIX y XX. Hrs. Teóricas 4 Semestre 7 Seriación LAV Hrs. Prácticas Arte en México II Carrera Artes Visuales Siglo XIX y XX Nivel Licenciatura Eje Formativo Histórico, Filosófico y Social Clave LAV08-07-44 Hrs. Teóricas 4 Semestre 7 Seriación LAV08-06-38 Hrs. Prácticas

Más detalles

Una reflexión de la Facultad de Ciencias Sociales 35 años después de fundada

Una reflexión de la Facultad de Ciencias Sociales 35 años después de fundada En lo que respecta a la Facultad de Ciencias Sociales, es la primera vez que científicos sociales que estaban indebidamente diseminados, o sea, dependiendo de diversas Facultades, se han reunido en una

Más detalles

I ENCUENTRO INTERNACIONAL DE EAD URBE JULIO INVESTIGANDO EN EDUCACION A DISTANCIA EN LAS UNIVERSIDADES VENEZOLANAS

I ENCUENTRO INTERNACIONAL DE EAD URBE JULIO INVESTIGANDO EN EDUCACION A DISTANCIA EN LAS UNIVERSIDADES VENEZOLANAS I ENCUENTRO INTERNACIONAL DE EAD URBE 02-03 JULIO INVESTIGANDO EN EDUCACION A DISTANCIA EN LAS UNIVERSIDADES VENEZOLANAS Dra. Magally Briceño Caracas,julio 2009 ORGANIZACIÓN N DE LA Contextualizacion Problematizacion

Más detalles

Secretaría de Cultura de la Ciudad de México: Promoción del Desarrollo Cultural Comunitario.

Secretaría de Cultura de la Ciudad de México: Promoción del Desarrollo Cultural Comunitario. UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓMA DE MÉXICO ESCUELA NACIONAL DE TRABAJO SOCIAL DIVISIÓN DE ESTUDIOS PROFESIONALES DEPARTAMENTO DE PRÁCTICAS ESCOLARES PROPUESTA DOCENTE DE PRACTICA DE ESPECIALIZACION PERIODOS

Más detalles

Plan de estudios Licenciatura en Gestión del Patrimonio Cultural

Plan de estudios Licenciatura en Gestión del Patrimonio Cultural Plan de estudios Licenciatura en Gestión del Patrimonio Cultural A) Datos Generales 1. Unidad Académica Escuela de Desarrollo Social y Humano 2. Carrera Licenciatura en Gestión del Patrimonio Cultural

Más detalles

CONSEJOS TÉCNICOS ESCOLARES PREESCOLAR, PRIMARIA Y SECUNDARIA CICLO ESCOLAR

CONSEJOS TÉCNICOS ESCOLARES PREESCOLAR, PRIMARIA Y SECUNDARIA CICLO ESCOLAR ESCOLARES De conformidad con el artículo 3, de los Lineamientos para la Organización y Funcionamiento de los Consejos Técnicos Escolares de la Educación Básica, en el Consejo Técnico Escolar participan

Más detalles

'eduvim. Librería Garcia Cambeiro

'eduvim. Librería Garcia Cambeiro tr 'eduvim Índice Agradecimientos Presentación Introducción Agradecimientos Los autores l. Expresiones del patrimonio inmaterial en Simbilá, un pueblo de alfareros de la costa norte del Perú 9 11 13 17

Más detalles

UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales Departamento y Área Curricular de Ciencia Política Sede Bogotá

UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales Departamento y Área Curricular de Ciencia Política Sede Bogotá Información General UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales Departamento y Área Curricular de Ciencia Política Sede Bogotá Programa Curricular de Ciencia Política

Más detalles

Estrategias para promover la participación de la familia en la educación

Estrategias para promover la participación de la familia en la educación Estrategias para promover la participación de la familia en la educación Dirección de Calidad para la Educación Preescolar Básica y Media Subdirección de Fomento de Competencias Equipo de fortalecimiento

Más detalles

Plan de Voluntariado Asociación Sociocultural Grupo Cinco Cuenca

Plan de Voluntariado Asociación Sociocultural Grupo Cinco Cuenca 2016-2020 Plan de Voluntariado Asociación Sociocultural Grupo Cinco Cuenca Cada nuevo día, cada paso, cada pequeño esfuerzo, cada promesa cumplida, cada reto superado te hace invencible QUIENES SOMOS Grupo

Más detalles

Nuevas tecnologías de información y comunicación

Nuevas tecnologías de información y comunicación Nuevas tecnologías de información y comunicación Compilación y comentarios de Marta Rizo Antología Universidad Autónoma de la Ciudad de México ÍNDICE Unidad I. Las nuevas tecnologías de información y comunicación

Más detalles

1. SUBSECRETARÍA DE EDUCACIÓN BÁSICA COORDINACIÓN NACIONAL DEL SERVICIO PROFESIONAL DOCENTE

1. SUBSECRETARÍA DE EDUCACIÓN BÁSICA COORDINACIÓN NACIONAL DEL SERVICIO PROFESIONAL DOCENTE 1. SUBSECRETARÍA DE EDUCACIÓN BÁSICA COORDINACIÓN NACIONAL DEL SERVICIO PROFESIONAL DOCENTE 137 S U P E R V I S O R. E D U C A C I Ó N F Í S I CA 1. SUBSECRETARÍA DE EDUCACIÓN BÁSICA COORDINACIÓN NACIONAL

Más detalles

Historia PERFIL VOCACIONAL CAMPO LABORAL DATO PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL PERÚ

Historia PERFIL VOCACIONAL CAMPO LABORAL DATO PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL PERÚ PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL PERÚ FACULTAD DE LETRAS Y CIENCIAS HUMANAS Historia Ser egresada de Historia de la PUCP es contar con una formación integral e interdisciplinaria que te permita desarrollarte

Más detalles

PLAN OPERATIVO ANUAL 2013 RESUMEN. Plan de Fortalecimiento de carreras y programas

PLAN OPERATIVO ANUAL 2013 RESUMEN. Plan de Fortalecimiento de carreras y programas ACADÉMICA Plan Operativo Anual UDA 2013 - Resumen PLAN OPERATIVO ANUAL 2013 RESUMEN FUNCIÓN Nro. Proyecto/Actividad 1 Plan de Actividad Cultural 1.1 Nombramiento Responsable (Director) 1.2 Organizar el

Más detalles

UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS

UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS FACULTAD DE LETRAS Y CIENCIAS HUMANAS E.A.P. DE COMUNICACIÓN SOCIAL Labor realizada en la facultad de derecho y ciencia política de la Universidad Nacional Mayor

Más detalles

Acto Regional Presentación NERA. Gracias Sr. Consejero, buenos días a todas y a todos

Acto Regional Presentación NERA. Gracias Sr. Consejero, buenos días a todas y a todos Sevilla, 26 de febrero de 2007 Discurso de D. José Román Montes, Director General de Desarrollo Rural Acto Regional Presentación NERA Gracias Sr. Consejero, buenos días a todas y a todos El proyecto NERA

Más detalles

UNIVERSIDAD DEL CAUCA FACULTAD DE CIENCIAS CONTABLES, ECONÓMICAS Y ADMINISTRATIVAS PROGRAMA DE TURISMO PLANIFICACION Y DESARROLLO TURISTICO.

UNIVERSIDAD DEL CAUCA FACULTAD DE CIENCIAS CONTABLES, ECONÓMICAS Y ADMINISTRATIVAS PROGRAMA DE TURISMO PLANIFICACION Y DESARROLLO TURISTICO. Asignatura: PLANIFICACION Y DESARROLLO TURISTICO Semestre: 8 Vigencia: PRIMER PERIODO DE 2015 Campo de Formación: PREGRADO Intensidad: 3 HORAS SEMANALES Profesor: Luz Marina Ardila B. 1. PRESENTACION Determinar

Más detalles

Programa de asistencia integral a Ciudades Patrimoniales e históricas del Perú. Representación de la UNESCO en Perú

Programa de asistencia integral a Ciudades Patrimoniales e históricas del Perú. Representación de la UNESCO en Perú Programa de asistencia integral a Ciudades Patrimoniales e históricas del Perú Representación de la UNESCO en Perú Cajamarca, 19 de junio del 2015 Programa de asistencia integral a Ciudades Patrimoniales

Más detalles

Discurso. Coordinadora de Humanidades

Discurso. Coordinadora de Humanidades Discurso Doctora Mari Carmen Serra Puche Coordinadora de Humanidades Adolfo Rodríguez Gallardo Dr. Filiberto Felipe Martínez Arellano, Director del Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas,

Más detalles

Planificación de las Áreas Naturales Protegidas

Planificación de las Áreas Naturales Protegidas Planificación de las Áreas Naturales Protegidas Lineamientos y Herramientas para un Manejo Creativo de las Áreas Protegidas Arguedas, S.; Castaño, B.L. y Rodriguez, J. Eds. 2004 Marco conceptual Contexto

Más detalles

Es la identificación y formulación del problema principal de la monografía, puede formularse en forma interrogativa.

Es la identificación y formulación del problema principal de la monografía, puede formularse en forma interrogativa. ESQUEMA DE LA MONOGRAFÍA Carátula Constancia de Aprobación (expedida por el docente responsable) Declaración de autenticidad y no plagio (declaración jurada simple firmada por los participantes del grupo)

Más detalles

PROYECTO:DISEÑO DE INDICADORES E INSTRUMENTOS DE EVALUACIÓN PARA LA INTERVENCIÓN COMUNITARIA

PROYECTO:DISEÑO DE INDICADORES E INSTRUMENTOS DE EVALUACIÓN PARA LA INTERVENCIÓN COMUNITARIA PROYECTO:DISEÑO DE INDICADORES E INSTRUMENTOS DE EVALUACIÓN PARA LA INTERVENCIÓN COMUNITARIA RESPONSABLE: MTRO. JOSÉ LUIS SAINZ VILLANUEVA PROYECTO: DISEÑO DE INDICADORESE INSTRUMENTOS DE EVALUACIÓN PARA

Más detalles

Descripción. Objetivo. Perfil de ingreso

Descripción. Objetivo. Perfil de ingreso Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades Área Académica de Sociología y Demografía Licenciatura en Planeación y Desarrollo Regional Descripción El Desarrollo

Más detalles

OBJETIVOS DE DESARROLLO DEL MILENIO

OBJETIVOS DE DESARROLLO DEL MILENIO Seminario Planificación y Gestión Pública en la Implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible OBJETIVOS DE DESARROLLO DEL MILENIO RED GUBERNAMENTAL Experiencia MILENIO de Chile sobre la

Más detalles

Este libro recoge los aportes de las participaciones

Este libro recoge los aportes de las participaciones Este libro recoge los aportes de las participaciones en el II Foro Internacional de Educación Superior en Entornos virtuales: perspectivas teóricas y metodológicas, realizado el 6 y 7 de noviembre de 2008

Más detalles

datos de opinión: Elites Parlamentarias Latinoamericanas La democracia en América Latina: aportes y amenazas

datos de opinión: Elites Parlamentarias Latinoamericanas La democracia en América Latina: aportes y amenazas : n: Elites Parlamentarias Latinoamericanas La democracia en América Latina: aportes y amenazas índice 1 Índice Presentación 1. Evaluación de la democracia 2. Característica más importante de la democracia

Más detalles

COMMISSION ON SOCIAL DETERMINANTS OF HEALTH ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD INICIATIVA DE LA COMISION SOBRE DETERMINANTES SOCIALES DE LA SALUD

COMMISSION ON SOCIAL DETERMINANTS OF HEALTH ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD INICIATIVA DE LA COMISION SOBRE DETERMINANTES SOCIALES DE LA SALUD ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD INICIATIVA DE LA COMISION SOBRE DETERMINANTES SOCIALES DE LA SALUD ESTRATEGIA DE PARTICIPACION DE LAS ORGANIZACIONES DE LA SOCIEDAD CIVIL DE AMERICA LATINA 2006-2008 65

Más detalles

Términos de referencia

Términos de referencia Términos de referencia Consultoría para coordinar el diseño de un curso virtual para docentes promotores que desarrollan prevención de la violencia familiar y sexual, embarazo en adolescentes y trata de

Más detalles

PROTOCOLO. Fechas Mes/año Clave Semestre

PROTOCOLO. Fechas Mes/año Clave Semestre Programa de Estudios: DERECHO ADMINISTRATIVO PROTOCOLO Fechas Mes/año Clave Semestre Elaboración Julio 2007 Nivel Licenciatura X Maestría Doctorado Aprobación Ciclo Integración Básico Superior x Aplicación

Más detalles

CONSEJO DE LA JUDICATURA ESTRUCTURA ORGANIZACIONAL POR PROCESOS DE LA DIRECCIÓN NACIONAL DE PLANIFICACIÓN

CONSEJO DE LA JUDICATURA ESTRUCTURA ORGANIZACIONAL POR PROCESOS DE LA DIRECCIÓN NACIONAL DE PLANIFICACIÓN CONSEJO DE LA JUDICATURA ESTRUCTURA ORGANIZACIONAL POR PROCESOS DE LA DIRECCIÓN NACIONAL DE PLANIFICACIÓN 1. El Sistema Nacional de Planificación del Consejo de la Judicatura Es el conjunto ordenado de

Más detalles

PATRIMONIO CULTURAL POLITICAS MUNDIALES

PATRIMONIO CULTURAL POLITICAS MUNDIALES PATRIMONIO CULTURAL POLITICAS MUNDIALES La UNESCO y el Patrimonio Mundial Objetivo: Promover la identificación, protección y preservación del patrimonio cultural y natural del mundo Convención del patrimonio

Más detalles

BACHILLER EN TURISMO

BACHILLER EN TURISMO BACHILLER EN TURISMO PRESENTACIÓN La formación en la Orientación en Turismo de la Nueva Escuela Secundaria de la Ciudad de Buenos Aires, propone a los jóvenes estudiantes el desarrollo de saberes que contribuyan

Más detalles

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA BENITO JUÁREZ DE OAXACA

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA BENITO JUÁREZ DE OAXACA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA BENITO JUÁREZ DE OAXACA ORGANIGRAMA DE LA SECRETARÍA DE VINCULACIÓN SECRETARIO DIRECTOR DE ARTE Y CULTURA DIRECTOR DE SERVICIOS COMUNITARIOS ATRIBUCIONES Y RESPONSABILIDADES SECRETARIO

Más detalles

Reglamento de la Ley de Protección al Acceso a la Diversidad Biológica y los Conocimientos Colectivos de los Pueblos Indígenas

Reglamento de la Ley de Protección al Acceso a la Diversidad Biológica y los Conocimientos Colectivos de los Pueblos Indígenas Reglamento de la Ley de Protección al Acceso a la Diversidad Biológica y los Conocimientos Colectivos de los Pueblos Indígenas ANEXO - DECRETO SUPREMO Nº 022-2006-PCM (El Decreto Supremo en referencia

Más detalles

GUÍA PARA PARTICIPAR

GUÍA PARA PARTICIPAR - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - GUÍA PARA PARTICIPAR > Ayudas públicas y otras herramientas para el apoyo al tejido cultural: Los días 15 y 16 de junio

Más detalles

UNIVERSIDAD IBEROAMERICANA DOCTORADO INTERINSTITUCIONAL EN EDUCACION CIUDAD DE MEXICO

UNIVERSIDAD IBEROAMERICANA DOCTORADO INTERINSTITUCIONAL EN EDUCACION CIUDAD DE MEXICO UNIVERSIDAD IBERAMERICANA DCTRAD INTERINSTITUCINAL EN EDUCACIN CIUDAD DE MEXIC El Modelo educativo de las Telesecundarias Vinculadas a la Comunidad, como expresión reivindicativa de la educación inclusiva

Más detalles

Los medios de comunicación masiva hoy en día son de vital importancia para la

Los medios de comunicación masiva hoy en día son de vital importancia para la Introducción Los medios de comunicación masiva hoy en día son de vital importancia para la sociedad ya que éstos son los que proporcionan casi el cien por ciento de la información que sucede en el mundo.

Más detalles

RESOLUCIÓN Nº 266. General Pico, 24 de junio de 2016

RESOLUCIÓN Nº 266. General Pico, 24 de junio de 2016 General Pico, 24 de junio de 2016 VISTO la Actuación N 1068-P-16 por la cual las profesoras María Rosana Moretta y Verónica Zucchini, Coordinadora y Responsable del Área Pedagógica del Área de Educación

Más detalles

Programa de Coinversión Social. Desarrollo Integral Sustentable con Participación Comunitaria (DI)

Programa de Coinversión Social. Desarrollo Integral Sustentable con Participación Comunitaria (DI) Programa de Coinversión Social Desarrollo Integral Sustentable con Participación Comunitaria (DI) Dirección de Concertación con Actores Sociales 8 de febrero de 2015 Ejes estratégicos de gobierno EPN Ejes

Más detalles

DERECHO ROMANO I. II CICLO Cuaderno de Trabajo. Formamos los Profesionales. que el mundo exige. Material didáctico de uso exclusivo del Alumno

DERECHO ROMANO I. II CICLO Cuaderno de Trabajo. Formamos los Profesionales. que el mundo exige. Material didáctico de uso exclusivo del Alumno DERECHO ROMANO I II CICLO Cuaderno de Trabajo Formamos los Profesionales que el mundo exige II Material didáctico de uso exclusivo del Alumno PRESENTACIÓN En una época de globalización y de alta competitividad

Más detalles

OBSERVATORIO DE LAS MUJERES EN EL DEPARTAMENTO DE ANTIOQUIA

OBSERVATORIO DE LAS MUJERES EN EL DEPARTAMENTO DE ANTIOQUIA OBSERVATORIO DE LAS MUJERES EN EL DEPARTAMENTO DE ANTIOQUIA Un observatorio gubernamental, es un instrumento que va más allá del diagnóstico de una situación, pues su función es observar los cambios con

Más detalles

CIENCIA Y CONCIENCIA DEL PAISAJE SABER, PENSAR, IMAGINAR, SENTIR

CIENCIA Y CONCIENCIA DEL PAISAJE SABER, PENSAR, IMAGINAR, SENTIR IFLA CONFERENCIA REGIONAL DE LAS AMERICAS IFLA/ LA PAZ, BOLIVIA - 5 AL 9 DE OCTUBRE DE 2015 CIENCIA Y CONCIENCIA DEL PAISAJE SABER, PENSAR, IMAGINAR, SENTIR A grandes esfuerzos de preservar nuestros paisajes,

Más detalles

Instituto Aragonés de Estadística / Análisis sociales, Justicia, Cultura y Deporte/ Cultura/ Estadística de museos

Instituto Aragonés de Estadística / Análisis sociales, Justicia, Cultura y Deporte/ Cultura/ Estadística de museos Instituto Aragonés de Estadística / Análisis sociales, Justicia, Cultura y Deporte/ Cultura/ Estadística de museos Recopilación de datos estadísticos de la estadística de museos y colecciones museográficas

Más detalles

Maestría en Educación Ambiental Promoción

Maestría en Educación Ambiental Promoción La Universidad Autónoma de la Ciudad de México Convoca A los profesionistas titulados en cualquiera de las disciplinas del conocimiento, interesados en cursar la Maestría en Educación Ambiental Promoción

Más detalles

confiere a la Escuela su más específica identidad, no sólo porque ayuda a mantener determinadas señas culturales, sino porque se encuentra también

confiere a la Escuela su más específica identidad, no sólo porque ayuda a mantener determinadas señas culturales, sino porque se encuentra también PLAN DE COMUNICACIÓN Y DIFUSIÓN para el Departamento de Orientación, Formación, Evaluación e Innovación Educativa de la ESCUELA DE ARTE DE GRANADA. Blas Calero Ramos 1. INTRODUCCIÓN. La comunicación y

Más detalles

CONCEJO DE SANTIAGO DE CALI

CONCEJO DE SANTIAGO DE CALI 1 ACUERDO N DE 2007 POR MEDIO DEL CUAL SE ADOPTA EL SISTEMA MUNICIPAL DE JUVENTUD EN SANTIAGO DE CALI 2 El Concejo Municipal de Santiago de Cali, en uso de sus atribuciones constitucionales y legales,

Más detalles

Guía. para la elaboración del Informe de cumplimiento de responsabilidades profesionales. Director o Supervisor

Guía. para la elaboración del Informe de cumplimiento de responsabilidades profesionales. Director o Supervisor Evaluación del Desempeño Ciclo Escolar 2015 2016 para la elaboración del Informe de cumplimiento de responsabilidades profesionales Director o Supervisor para la elaboración del Informe de cumplimiento

Más detalles

TERRITORIO GESTION SOCIAL INTEGRAL

TERRITORIO GESTION SOCIAL INTEGRAL 3. Estrategia de Gestión Social Integral 1 3.1. Definición La Gestión Social Integral es un instrumento que integra las acciones y recursos sectoriales y locales (salud, educación, binestar social, cultura,

Más detalles

ESTADÍSTICAS A PROPÓSITO DEL DÍA MUNDIAL DEL HÁBITAT (3 DE OCTUBRE)

ESTADÍSTICAS A PROPÓSITO DEL DÍA MUNDIAL DEL HÁBITAT (3 DE OCTUBRE) PÁGINA 1/4 ESTADÍSTICAS A PROPÓSITO DEL DÍA MUNDIAL DEL HÁBITAT (3 DE OCTUBRE) En México, el universo de registros en el padrón es de 37.1 millones de predios. De éstos, el 92.5% corresponden a privados.

Más detalles

RESUMEN. Para una mejor comprensión del trabajo, a continuación se detalla la estructura:

RESUMEN. Para una mejor comprensión del trabajo, a continuación se detalla la estructura: RESUMEN Es importante que la Agencia Internacional Esperanza Bolivia cuente con un reglamento para poder controlar sus activos fijos, para el mejoramiento de sus funciones. La imperante necesidad de establecer

Más detalles

MSc. Maricel López Lemus, MSc Rafael León Pérez. 1. Dirección Municipal de Educación, Avenida 14 No 1105, entre 11 y 13, Jovellanos, Matanzas, Cuba.

MSc. Maricel López Lemus, MSc Rafael León Pérez. 1. Dirección Municipal de Educación, Avenida 14 No 1105, entre 11 y 13, Jovellanos, Matanzas, Cuba. SISTEMA DE ACTIVIDADES DE CAPACITACIÓN A DIRECTORES DE INSTITUCIONES EDUCACIONALES PARA LA INTRODUCCIÓN DE LOS RESULTADOS CIENTÍFICOS DE LA INVESTIGACIÓN EDUCACIONAL EN JOVELLANOS MSc. Maricel López Lemus,

Más detalles

Versión: 01. Fecha: 01/04/2013. Código: F004-P006-GFPI GUÍA DE APRENDIZAJE Nº 1. IDENTIFICACIÓN DE LA GUIA DE APRENDIZAJE. Programa de Formación:

Versión: 01. Fecha: 01/04/2013. Código: F004-P006-GFPI GUÍA DE APRENDIZAJE Nº 1. IDENTIFICACIÓN DE LA GUIA DE APRENDIZAJE. Programa de Formación: SERVICIO NACIONAL DE APRENDIZAJE SENA GUÍA DE APRENDIZAJE SISTEMA INTEGRADO DE GESTIÓN Proceso Gestión de la Formación Profesional Integral Procedimiento Ejecución de la Formación Profesional Integral

Más detalles

M.A. Marco Antonio Rosales Admon. Moderna. Reyes A. Fundamentos de Administración, Koonts H.

M.A. Marco Antonio Rosales Admon. Moderna. Reyes A. Fundamentos de Administración, Koonts H. M.A. Marco Antonio Rosales Admon. Moderna. Reyes A. Fundamentos de Administración, Koonts H. Planificar para prevenir La planificación es una técnica que se puede ayudar de otras, por ejemplo la de Escenarios.

Más detalles

2. CONOCIMIENTO Actividad por la cual se adquiere certeza de la realidad, de la existencia del entorno, con características comprobadas.

2. CONOCIMIENTO Actividad por la cual se adquiere certeza de la realidad, de la existencia del entorno, con características comprobadas. 1 1. CONOCER Proceso intelectual por el cual se establece relación entre quien conoce (actor) y el objeto conocido (realidad). 2. CONOCIMIENTO Actividad por la cual se adquiere certeza de la realidad,

Más detalles

Programa Integral de Acompañamiento para la guía vocacional, académica y profesional de los y las estudiantes del American Junior College

Programa Integral de Acompañamiento para la guía vocacional, académica y profesional de los y las estudiantes del American Junior College Programa Integral de Acompañamiento para la guía vocacional, académica y profesional de los y las estudiantes del American Junior College Iván Freile J., B. A. Director de Bienestar Estudiantil Julio de

Más detalles

PLAN NACIONAL DE DESARROLLO

PLAN NACIONAL DE DESARROLLO +DECRETO SUPREMO Nº 29272 EVO MORALES AYMA PRESIDENTE CONSTITUCIONAL DE LA REPUBLICA PLAN NACIONAL DE DESARROLLO BOLIVIA DIGNA, SOBERANA, PRODUCTIVA Y DEMOCRÁTICA PARA VIVIR BIEN LINEAMIENTOS ESTRATÉGICOS

Más detalles

3.2. Justificación del programa

3.2. Justificación del programa 3.2. Justificación del programa El programa de psicología de la Universidad Cooperativa de Colombia, se ofrece con fundamento en la disciplina científica albergada dentro de las ciencias sociales, área

Más detalles

TALLERES Y SEMINARIOS DE CAPACITACIÓN

TALLERES Y SEMINARIOS DE CAPACITACIÓN TALLERES Y SEMINARIOS DE CAPACITACIÓN ELABORACIÓN REVISIÓN APROBACIÓN Elaborado por: Revisado por: Aprobado por: Isabel Cristina Arbeláez Gálvez Martha Liliana Cardona Montoya Martha Liliana Cardona Montoya

Más detalles

H. AYUNTAMIENTO CONSTITUCIONAL DE COATLAN DEL RIO, MORELOS

H. AYUNTAMIENTO CONSTITUCIONAL DE COATLAN DEL RIO, MORELOS H. AYUNTAMIENTO CONSTITUCIONAL DE COATLAN DEL RIO, MORELOS 2013 2015 PROGRAMA OPERATIVO ANUAL 2015 Elabora Autoriza C. VIOLETA ORIHUELA LOPEZ Directora de la Dirección de Asuntos de la Mujer Lic. Juan

Más detalles

DIPLOMADO EN GERENCIA DE PROYECTOS CON ÉNFASIS EN PMI

DIPLOMADO EN GERENCIA DE PROYECTOS CON ÉNFASIS EN PMI FACULTAD DE ADMINISTRACIÓN DIPLOMADO EN GERENCIA DE PROYECTOS CON ÉNFASIS EN PMI PRESENTACIÓN El Diplomado está diseñado para que los participantes se comprometan en un proceso de intercambio de conocimiento

Más detalles

IV SIMPOSIO LATINOAMERICANO DE FÍSICA Y QUÍMICA EN ARQUEOLOGÍA, ARTE Y CONSERVACIÓN DE PATRIMONIO CULTURAL

IV SIMPOSIO LATINOAMERICANO DE FÍSICA Y QUÍMICA EN ARQUEOLOGÍA, ARTE Y CONSERVACIÓN DE PATRIMONIO CULTURAL IV SIMPOSIO LATINOAMERICANO DE FÍSICA Y QUÍMICA EN ARQUEOLOGÍA, ARTE Y CONSERVACIÓN DE PATRIMONIO CULTURAL Bogotá, Colombia Octubre 16 al 18 de 2013 Comité Científico Internacional de LASMAC. (Brasil,

Más detalles

Plan Estratégico Participativo de Desarrollo Turístico Sustentable en el Partido de Patagones

Plan Estratégico Participativo de Desarrollo Turístico Sustentable en el Partido de Patagones Plan Estratégico Participativo de Desarrollo Turístico Sustentable en el Partido de Patagones Fundación Carolina Argentina Municipalidad de Patagones Informe de Actividades de la Coordinación Local Marzo

Más detalles

LICENCIATURA EN SOCIOLOGÍA. Este programa educativo se ofrece en las siguientes sedes académicas de la UABC:

LICENCIATURA EN SOCIOLOGÍA. Este programa educativo se ofrece en las siguientes sedes académicas de la UABC: LICENCIATURA EN SOCIOLOGÍA Este programa educativo se ofrece en las siguientes sedes académicas de la UABC: Campus Unidad académica donde se imparte Situación de calidad Campus Ensenada, Facultad de Ciencias

Más detalles

BASES CONVOCATORIA. Objetivo general:

BASES CONVOCATORIA. Objetivo general: CONVOCATORIA El Programa Bécalos de Fundación Televisa y la Asociación de Bancos de México, el Instituto Mexicano para la Excelencia Educativa, A.C. y el Tecnológico de Monterrey invitan a los docentes

Más detalles

PLAN DE ESTUDIOS DEL PROGRAMA DE DOCTORADO EN HUMANIDADES CON MENCIÓN EN ESTUDIOS SOBRE CULTURA

PLAN DE ESTUDIOS DEL PROGRAMA DE DOCTORADO EN HUMANIDADES CON MENCIÓN EN ESTUDIOS SOBRE CULTURA PLAN DE ESTUDIOS DEL PROGRAMA DE DOCTORADO EN HUMANIDADES CON MENCIÓN EN ESTUDIOS SOBRE CULTURA Universidad de Piura Elaborado por la Universidad de Piura. Abril de 2016. PLAN DE ESTUDIOS 1. Objetivo académico

Más detalles

PROGRAMA INSTRUCCIONAL DERECHO CONSTITUCIONAL VENEZOLANO I

PROGRAMA INSTRUCCIONAL DERECHO CONSTITUCIONAL VENEZOLANO I UNIVERSIDAD FERMIN TORO VICE RECTORADO ACADEMICO FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y SOCIALES ESCUELA DE CIENCIA POLÍTICA PROGRAMA INSTRUCCIONAL DERECHO CONSTITUCIONAL VENEZOLANO I DENSIDAD HORARIA CÓDIGO

Más detalles

InterCLIMA 2012: "Gestión de los Riesgos Climáticos en el Perú " Lima, 29, 30 y 31 de octubre 2012

InterCLIMA 2012: Gestión de los Riesgos Climáticos en el Perú  Lima, 29, 30 y 31 de octubre 2012 PERÚ Ministerio de Economía y Finanzas Viceministerio de Economía Dirección General de Política de Inversiones InterCLIMA 2012: "Gestión de los Riesgos Climáticos en el Perú " Lima, 29, 30 y 31 de octubre

Más detalles

INSTITUO NACIONAL PARA LA EVALUACIÓN DE LA EDUCACIÓN COORDINACIÓN NACIONAL DEL SERVICIO PROFESIONAL DOCENTE

INSTITUO NACIONAL PARA LA EVALUACIÓN DE LA EDUCACIÓN COORDINACIÓN NACIONAL DEL SERVICIO PROFESIONAL DOCENTE INSTITUO NACIONAL PARA LA EVALUACIÓN DE LA EDUCACIÓN COORDINACIÓN NACIONAL DEL SERVICIO PROFESIONAL DOCENTE Programa General de Formación para Evaluadores de Desempeño Docente Módulo 4. El uso de los resultados

Más detalles

COORDINACIÓN DE INVESTIGACIONES ESCUELA DE TURISMO Y GASTRONOMÍA PROYECTO INTEGRADOR FASE EJECUCIÓN Y ENTREGA

COORDINACIÓN DE INVESTIGACIONES ESCUELA DE TURISMO Y GASTRONOMÍA PROYECTO INTEGRADOR FASE EJECUCIÓN Y ENTREGA PROYECTO INTEGRADOR FASE EJECUCIÓN Y ENTREGA El problema de investigación se encuentra claramente planteado, delimitado en términos de contenido, espacial y temporalmente. Se justifica con argumentos sólidos

Más detalles

Sistema de Garantía Interna de Calidad de los programas de doctorado de la UAM

Sistema de Garantía Interna de Calidad de los programas de doctorado de la UAM Página 1 de 7 8.1.1. - E1-F1: Unidad responsable del Sistema de Garantía Interna de Calidad (SGIC) del programa de doctorado: identificación, normas de funcionamiento y participación de los grupos de interés

Más detalles

Orden del día. 1_ Constitución de la Comisión Promotora. 3_ Fase I. Trabajos asociados. 4_ Asociaciones de planificación estratégica

Orden del día. 1_ Constitución de la Comisión Promotora. 3_ Fase I. Trabajos asociados. 4_ Asociaciones de planificación estratégica Orden del día. 1_ Constitución de la Comisión Promotora 2_ Plan Estratégico Santander 2.010-2.020. 2 020 Objetivos, fases y calendario 3_ Fase I. Trabajos asociados 4_ Asociaciones de planificación estratégica

Más detalles

Dr. Héctor Masoero Presidente del Consejo de Administración Fundación UADE

Dr. Héctor Masoero Presidente del Consejo de Administración Fundación UADE 3 4 5 6 En la Fundación UADE, mediante las diversas actividades desarrolladas por UADE Art, trabajamos permanentemente en la difusión del arte en todas sus manifestaciones, ofreciendo a nuestra comunidad

Más detalles

RED NACIONAL DE EDUCACION SUPERIOR INCLUSIVA RED NACIONAL DE EDUCACIÓN SUPERIOR INCLUSIVA: ORIGEN, ACCIONES Y PROPUESTAS

RED NACIONAL DE EDUCACION SUPERIOR INCLUSIVA RED NACIONAL DE EDUCACIÓN SUPERIOR INCLUSIVA: ORIGEN, ACCIONES Y PROPUESTAS RED NACIONAL DE EDUCACION SUPERIOR INCLUSIVA RED NACIONAL DE EDUCACIÓN SUPERIOR INCLUSIVA: ORIGEN, ACCIONES Y PROPUESTAS Arlett Krause UFRO Georgina García ULS Contexto nacional 1970 Ex-Instituto Pedagógico

Más detalles

(Elaboración y puesta en marcha del Plan de Evacuación en el Parque Natural Lagunas de Ruidera)

(Elaboración y puesta en marcha del Plan de Evacuación en el Parque Natural Lagunas de Ruidera) AGENDA 21 LOCAL Ossa de Montiel PROYECTO DE LA ACCIÓN 2.5.1. DEL PLAN DE ACCIÓN Ampliar y reforzar los recursos humanos en medio ambiente y sostenibilidad que dispone el Ayuntamiento (Elaboración y puesta

Más detalles

Programa. Ceremonia de Homenaje al Dr. Miguel Messmacher Tscherniavski.

Programa. Ceremonia de Homenaje al Dr. Miguel Messmacher Tscherniavski. Dr. Miguel Messmacher Tscherniavski. Curriculum Vitae. Nacido en 1934, en México, D.F., Miguel Messmacher Tscherniavski es un arquitecto y antropólogo estudioso de la problemática histórico-artística y

Más detalles

CRITERIOS DE EVALUACIÓN CULTURA CLÁSICA

CRITERIOS DE EVALUACIÓN CULTURA CLÁSICA CRITERIOS DE EVALUACIÓN CULTURA CLÁSICA 1 Localizar geográficamente las civilizaciones griega y romana, situando los lugares que representan un papel primordial en el mundo político, religioso y cultural,

Más detalles

MANIFIESTO RED NACIONAL DE VIDA INDEPENDIENTE

MANIFIESTO RED NACIONAL DE VIDA INDEPENDIENTE Página 1 de 5 Por la creación de la RED NACIONAL DE DOWN ESPAÑA APOSTAMOS POR La vida independiente, entendida como la situación en la que la persona con discapacidad intelectual ejerce el poder de decisión

Más detalles

Formulario para presentar Proyecto: Impresoras 3D. Guía general para la presentación del proyecto

Formulario para presentar Proyecto: Impresoras 3D. Guía general para la presentación del proyecto Formulario para presentar Proyecto: Impresoras 3D Guía general para la presentación del proyecto INFORMACIÓN DEL PROYECTO Nombre del proyecto Institución Dirección Localidad Departamento Nombre del Director/a

Más detalles

INSTRUMENTO PILOTO VISITA DE OBSERVACIÓN AL DIRECTOR DE ESCUELA AÑO ESCOLAR Categoría III: Desempeño organizacional y ético

INSTRUMENTO PILOTO VISITA DE OBSERVACIÓN AL DIRECTOR DE ESCUELA AÑO ESCOLAR Categoría III: Desempeño organizacional y ético PEM-03-C INSTRUMENTO PILOTO VISITA DE OBSERVACIÓN AL DIRECTOR DE ESCUELA Categoría III: Desempeño organizacional y ético Nombre del director: Número del sistema TAL: Estatus del puesto: Número del puesto:

Más detalles

INSTITUTO TECNOLÓGICO Y DE ESTUDIOS SUPERIORES DE OCCIDENTE

INSTITUTO TECNOLÓGICO Y DE ESTUDIOS SUPERIORES DE OCCIDENTE INSTITUTO TECNOLÓGICO Y DE ESTUDIOS SUPERIORES DE OCCIDENTE Reconocimiento de Validez Oficial de Estudios de Nivel Superior según Acuerdo Secretarial 15018, publicado en el Diario Oficial de la Federación

Más detalles

Indicador de Logro. Protocolo de Prácticas y estrategias de Buena Convivencia por curso y talleres artísticos.

Indicador de Logro. Protocolo de Prácticas y estrategias de Buena Convivencia por curso y talleres artísticos. Ejemplo: Plan de Calidad y de Mejoramiento Educativo Área Escolar AREA: Escolar OBJETIVO GENERAL: Potenciar y fortalecer la Propuesta Curricular Artes Integradas como la estrategia para lograr el desarrollo

Más detalles

CONVOCATORIA V COLOQUIO NACIONAL DE ESTUDIANTES Y EGRESADOS DE PROGRAMAS ACADÉMICOS EN EDUCACIÓN AMBIENTAL

CONVOCATORIA V COLOQUIO NACIONAL DE ESTUDIANTES Y EGRESADOS DE PROGRAMAS ACADÉMICOS EN EDUCACIÓN AMBIENTAL CONVOCATORIA V COLOQUIO NACIONAL DE ESTUDIANTES Y EGRESADOS DE PROGRAMAS ACADÉMICOS EN EDUCACIÓN AMBIENTAL LA EDUCACIÓN AMBIENTAL Y LOS MOVIMIENTOS SOCIALES 16 AL 18 DE JUNIO DE 2016 Centro Cultural El

Más detalles

La Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia de Panamá

La Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia de Panamá Introducción El Pueblo Kuna al igual que otros pueblos indígenas del mundo hemos tenido un proceso de lucha desde hace muchísimo tiempo, y hemos escrito nuestra propia historia defendiendo los derechos

Más detalles

Educación para la ciudadanía: 3Eso

Educación para la ciudadanía: 3Eso Educación para la ciudadanía: 3Eso Tema 1 QUÉ ES LA CIUDADANÍA? - La necesidad de vivir en sociedad: Vivir en sociedad; Qué es la política? _ Ciudadanos de un Estado y ciudadanos del mundo: La ciudadanía

Más detalles

POLÍTICA Y LEGISLACIÓN DEL PATRIMONIO. Ángel Cabeza Monteira

POLÍTICA Y LEGISLACIÓN DEL PATRIMONIO. Ángel Cabeza Monteira POLÍTICA Y LEGISLACIÓN DEL PATRIMONIO Ángel Cabeza Monteira QUÉ ES LA POLÍTICA POLÍTICA EJERCICIO DEL PODER ADMINISTRACIÓN DEL ORDEN FACULTAD DE DECIDIR CONTROL DE LA SOCIEDAD, LAS PERSONAS Y LOS RECURSOS

Más detalles

DISEÑO CURRICULAR EDUCACIÓN AMBIENTAL

DISEÑO CURRICULAR EDUCACIÓN AMBIENTAL DISEÑO CURRICULAR EDUCACIÓN AMBIENTAL FACULTAD (ES) CARRERA (S) Ciencias Económicas y Sociales Ingeniería - Humanidades, Arte y Educación. Contaduría Pública, Gerencia de Recursos Humanos, Administración,

Más detalles

VIRTUAL MAESTRÍA EN GESTIÓN CULTURAL, PATRIMONIO Y TURISMO

VIRTUAL MAESTRÍA EN GESTIÓN CULTURAL, PATRIMONIO Y TURISMO VIRTUAL MAESTRÍA EN GESTIÓN CULTURAL, PATRIMONIO Y TURISMO INTRODUCCIÓN La gestión cultural y del patrimonio, inicialmente relacionada exclusivamente con aspectos museográficos y de cuidado de restos arqueológicos,

Más detalles