DÍA DE LA POLICÍA 2013

Transcripción

1 DÍA DE LA POLICÍA 2013 INTERVENCIÓN DEL MINISTRO DEL INTERIOR, JORGE FERNÁNDEZ DÍAZ, EN EL ACTO CENTRAL DEL DÍA DE LA POLICÍA CON MOTIVO DE LA FESTIVIDAD DE LOS SANTOS ÁNGELES CUSTODIOS Alcalá de Henares (Madrid), 2 de octubre de 2013 Mis primeras palabras deben ser esta mañana de gratitud a Sus Altezas Reales. Un sentimiento de agradecimiento que comparten conmigo quienes forman parte del Cuerpo Nacional de Policía, por haber aceptado Sus Altezas, presidir este emotivo acto central de sus Patronos, los Santos Ángeles Custodios. Al tiempo querría tener un recuerdo muy especial para Su Majestad El Rey, rogándoles a Sus Altezas Reales, que le transmitan nuestro deseo, el mío y el de todos los que hoy hemos sido convocados aquí, de que tenga una pronta recuperación. La semana pasada tuve el honor de visitarle, encontrándole en perfecto estado. Y me permitirán que se lo diga pues Su Majestad, conocedor de esta celebración, me pidió que les trasladase su más sentida felicitación. Su presencia hoy aquí, Altezas, simboliza la estrecha vinculación entre la Corona y el Cuerpo Nacional de Policía, y supone un gran honor para el Cuerpo por el reconocimiento de su incansable labor en defensa de nuestras libertades y nuestra seguridad. Altezas, Señoras y señores: Esta mañana tengo el honor de compartir y celebrar con todos ustedes el día de los Patronos de la Policía en esta gran ciudad Patrimonio de la Humanidad, Ciudad del saber y el conocimiento, y Ciudad de las Tres Culturas, que es Alcalá de Henares. Hoy día de los Patronos, es el día idóneo para reconocer y agradecer en nombre de todos los españoles el gran servicio que los miembros del Cuerpo Nacional de Policía prestan a nuestro país. 1

2 Cada día, el Cuerpo Nacional de Policía cumple con el mandato constitucional de garantizar a todos los ciudadanos su seguridad, el libre ejercicio de sus derechos y libertades, y lo hace, gracias al compromiso, a la dedicación, al sacrificio, a unos principios claros y, sobre todo, gracias al enorme y admirable trabajo que desarrolláis en cada una de las dependencias del Cuerpo Nacional de Policía. Los excelentes resultados de vuestro trabajo diario son visibles para todos los españoles. De ahí la gratitud que os tiene la sociedad y la alta valoración que hace de vuestra Institución, y por ello mi reconocimiento como Ministro del Interior a vuestra ejemplar labor. Vosotros convertís las amenazas a nuestra seguridad en retos y desafíos que alimentan incansablemente vuestra vocación y entrega diarias. Y estáis siempre a la altura de las demandas de los ciudadanos, no defraudando nunca la confianza que los españoles tenemos en vosotros. El Plan Estratégico de la Policía, de acuerdo a las directrices marcadas por este Ministerio, se ha planteado como una de sus metas conjugar con éxito la austeridad y la eficiencia, al tiempo que emprender un ambicioso plan de modernización y tener la máxima eficacia posible, tal como nos exigen los ciudadanos. La cohesión, la paz social, la convivencia en democracia en definitiva, no serían posibles si no contáramos con las altísimas cotas de seguridad y libertad que proporcionáis. Esa seguridad y libertad son importantes en sí mismas, porque son derechos inalienables. Pero no olvidemos que la seguridad contribuye además a crear un entorno más favorable a la recuperación económica y, en consecuencia, al bienestar de los ciudadanos. El trabajo especializado que desempeñáis en las distintas áreas policiales traslada un mensaje inequívoco a los delincuentes: España es y será siempre un lugar hostil para el crimen. 2

3 Una sociedad moderna como es la nuestra, sufre diferentes amenazas que quieren romper nuestra pacífica convivencia, y que se constituyen como los principales retos para los próximos años: En estos momentos, en que el objetivo de la total desaparición de ETA está más cerca, el Cuerpo Nacional de Policía debe perseverar en la misma línea de trabajo que ha llevado en los últimos años. Los españoles hemos estado muchos años sufriendo la lacra del terrorismo, y no nos han podido vencer, aunque si causar un inmenso dolor. Por ello no puedo evitar recordar a todos los que cayeron asesinados defendiendo nuestras libertades. Pero también debemos seguir muy atentos en el combate contra el fenómeno del terrorismo yihadista, tratando de anticiparnos a cualquier acción. Del mismo modo, se debe insistir en el control de los radicalismos violentos, que prescindiendo de las vías lícitas para expresar sus opiniones, enturbian la convivencia democrática. Se debe continuar la persecución del llamado Crimen Organizado, tarea en la que la Policía debe seguir siendo lo que hoy es: uno de los referentes internacionales en la erradicación de esta grave forma de delincuencia. La lucha contra la inmigración ilegal sigue siendo una prioridad. Una de las misiones de la Policía Nacional, es controlar nuestras fronteras y perseguir a aquellos que explotan sexual y laboralmente al ser humano, o que comercian con él, y que es especialmente dramático en el caso de las mujeres. Por último, la globalización e Internet han borrado las fronteras entre países, y con ello han aparecido nuevas formas de delito que nos amenazan. A esta nueva forma de delito, que se conoce como Ciberdelincuencia, nos debemos enfrentar con los mejores medios posibles, aprovechando el potencial que brindan las nuevas tecnologías, en un nuevo contexto al que evidentemente hay que adaptarse. Se están empezando a producir también buenos resultados en este campo, lo que indica el acierto del camino emprendido. 3

4 En todos estos retos va a seguir siendo esencial la inteligencia policial con el fin de anticiparse a la acción del criminal. Y en este campo la Policía está siendo referente, con su clara apuesta por mejorar el modelo de inteligencia e investigación. En el plano de la organización interna, este año ha entrado en vigor una nueva orden de estructura de la Dirección General, que pretende modernizar el funcionamiento del Cuerpo y adaptarse a las nuevas demandas de seguridad, y que se está revelando como un acierto como se demuestra con el descenso de las infracciones penales que se han cometido en el último año y el aumento de la eficacia policial. Como les indicaba anteriormente, la situación actual nos obliga más que nunca a gestionar los recursos materiales y humanos con la mayor Eficiencia. Las condiciones de trabajo deben de ser las mejores posibles, el esfuerzo nuestra principal baza, y la eficacia lo que nos defina. Estas premisas deben convertir al Cuerpo Nacional de Policía en un ejemplo de Austeridad, Ahorro y también de Eficacia en las respuestas al ciudadano. Así nos lo exigen los ciudadanos y así nos lo reconocen manteniendo al Cuerpo como una de las instituciones mejor valoradas por la sociedad española. También demos perseverar en la Colaboración entre distintos Cuerpos policiales, tanto nacionales como internacionales, así como con otros estamentos de la Administración. Esta colaboración debe siempre regirse por el respeto a los principios de coordinación, cooperación y lealtad institucional, como ya se está haciendo, lo cual es un motivo de agradecimiento y reconocimiento por mi parte. No quiero finalizar sin tener un emocionado recuerdo a todos aquellos policías que han fallecido en acto de servicio, especialmente a aquellos que pagaron con su vida la defensa de nuestra Patria. Su entrega hasta sus últimas consecuencias y su heroicidad, es un hecho que despierta nuestra admiración. Que llegue toda nuestra gratitud y nuestro afecto a sus familiares y amigos. 4

5 Igualmente, deseo felicitar a los condecorados este año, condecoraciones que por un lado, suponen un reconocimiento de colaboración y ayuda al Cuerpo Nacional de Policía, y que por otro, significan para quienes forman parte del mismo, premiar su ilusión, su compromiso, su profesionalidad en el día a día, y su indudable contribución al fortalecimiento de nuestra vida democrática. Quiero trasladarles a todos ustedes, en nombre del Presidente del Gobierno y en el mío propio, mi más sincera felicitación en este día de los Santos Ángeles Custodios. Muchas gracias. 5