Discurso de la Directora General de la UNESCO Irina Bokova, con el motivo de su visita al Senado de la República Dominicana

Transcripción

1 Discurso de la Directora General de la UNESCO Irina Bokova, con el motivo de su visita al Senado de la República Dominicana Santo Domingo, República Dominicana, 15 de enero de 2015 Excelentísima Señora Senadora Cristina Lizardo Mézquita, Presidenta de la Cámara de Senadores de la República Dominicana; Excelentísimo Señor Diputado Abel Martínez, Presidente de la Cámara de Diputados de la República Dominicana; Honorables Señoras y Señores Legisladores miembros del Congreso Dominicano; Señoras y Señores: Deseo hacer patente a ustedes mi sincera gratitud al invitarme a este encuentro en el Senado de la República Dominicana, en ocasión de mi visita a su país. Mi reconocimiento más sincero por esta distinción de tan importancia. Esta visita es más que una misión de trabajo. Es una visita altamente simbólica, cuando celebramos el 70 aniversario de la UNESCO. La afinidad de la República Dominicana con la UNESCO, como ustedes conocen, nos remite a los remotos orígenes de la Organización hace siete décadas, pues su país figura entre los veinte primeros que ratificaron nuestra Acta Constitutiva, al haberlo hecho el cuatro de noviembre de DG/2015/010 Original: Español

2 Desde entonces, la República Dominicana sigue siendo un asociado firme y comprometido de la UNESCO. Quisiera agradecer a la Embajadora Laura Faxas por su contribución positiva. Actualmente forma parte de nuestro Consejo Ejecutivo y, también, de las instancias rectoras de algunos de los más importantes programas intergubernamentales de la UNESCO, como la Oficina Internacional de Educación, el Programa Hidrológico Internacional, el Programa Internacional para el Desarrollo de la Comunicación, y el Comité Intergubernamental de Bioética, entre otros órganos. Su país posee una de las más eficientes y activas delegaciones permanentes acreditadas ante la UNESCO, y lo mismo podemos decir de su Comisión nacional. No hay un área de programa de la UNESCO en la que la República Dominicana no esté activa y comprometida. Pienso primeramente, en la larga tradición dominicana de investigación en ciencias humanas y sociales, la cual es un aspecto esencial de la comprensión de las sociedades modernas, y los medios para desarrollar políticas públicas más inclusivas, capaces de luchar con mayor eficacia contra la desigualdad y las fracturas que dividen a las sociedades. El Premio UNESCO-Juan Bosch es, obviamente, uno de los más recientes símbolos de nuestro interés común en la investigación en ciencias sociales, en honor a este gran intelectual, escritor, político y primer presidente democráticamente electo de la República Dominicana - un ejemplo fuerte del vínculo profundo entre los derechos humanos y la dignidad humana, por un lado, y la cultura y el conocimiento, por otro. Pienso también en nuestra cooperación en materia de las Cátedras UNESCO y con las numerosas personas que trabajan en su país en la gobernabilidad democrática, la inclusión social, la participación de los jóvenes - lo que muestra un compromiso profundo sobre estas cuestiones fundamentales. DG/2015/010 - Page 2

3 Otro ejemplo que también atañe a la República Dominicana, ahora en educación, es el papel que la UNESCO ha desempeñado en la Iniciativa Mundial La Educación ante Todo del Secretario General de las Naciones Unidas el Señor Ban Ki-moon. La iniciativa tiene como objetivos prioritarios escolarizar a todas las niñas y los niños, mejorar la calidad del aprendizaje y fomentar la conciencia de ser ciudadanos del mundo. La República Dominicana fue designada como uno de los Países Campeones por el Secretario General, lo cual implica un reconocimiento a sus notables progresos para fomentar el pleno acceso a la educación, para aumentar su calidad mediante la formación y permanente actualización de sus maestros, para reducir la brecha de género y por dedicar crecientes recursos del presupuesto nacional a la educación. Durante mi visita, tendré la ocasión de conocer de cerca los resultados del tan exitoso Plan Nacional de Alfabetización "Quisqueya Aprende Contigo", que demuestra una determinación sin igual de situar la educación en el centro de todas las dinámicas del desarrollo económico y social. Permítanme reiterar el compromiso de la UNESCO de continuar apoyando al país en lograr la meta final de más de 850,000 personas alfabetizadas. Junto con otras agencias hermanas de Naciones Unidas, tenemos la firme voluntad de continuar apoyando la estrategia conjunta del gobierno, e impulsada desde la Presidencia, Quisqueya sin Miseria. Pienso aquí, especialmente, en la Promoción de la Primera Infancia, y la Formación de Maestros, como elementos esenciales del Desarrollo Integral Local. Un desarrollo equitativo y sostenible, como me ha confirmado el Señor Presidente de la República, con la participación de todos, para lograr la plena inclusión social y erradicar la probreza. Es una cuestión de justicia. También es una cuestión de eficiencia social y económica. Nos unen, además, otros vínculos muy sólidos. DG/2015/010 - Page 3

4 Me refiero a la memoria de la esclavitud, tan presente en los corazones y los cimientos de este hermoso país. Un país que vivió, junto con muchos otros de América Latina y el Caribe, la peor, y más inhumana, de las tragedias. Conseguir le efectiva aplicación de los derechos humanos incluye luchar contra el olvido de estos crímenes del pasado, construir una memoria común, y erradicar nuevas formas de esclavitud. Éso es precisamente lo que se propone, desde hace más de veinte años, el programa de la UNESCO de la Ruta del Esclavo. En él, la República Dominicana tiene un papel central, que debe ser fortalecido, ahora que recién comienza el Decenio Internacional de los Afrodescendientes. Juntos, durante los últimos 70 años, hemos construido una rica red de cooperación en los campos de la educación, las ciencias y la cultura. La República Dominicana es el hogar de la magnífica Reserva de la Biósfera Jaragua-Bahoruco-Enriquillo, nominada en En ella hemos desarrollado recientemente, con el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, un proyecto fascinante: Fortalecimiento de la capacidad de gestión del uso público en el Parque Nacional Lago Enriquillo. También inauguramos un centro de visitantes del lago, con el objetivo de amortiguar el impacto del turismo sobre el ecosistema del parque. Trabajamos además, con el PNUD y la Comisión Europea, para apoyar a comunidades susceptibles a los terremotos y tsunamis en Puerto Plata. Estamos fortaleciendo el Sistema de Alerta Temprana ante los Tsunamis, y avanzando en la cooperación científica para la reducción del riesgo de desastres en la región. Y, hace unas semanas, se organizó en Santo Domingo un taller sobre Seguridad y Gestión del Agua, promovido por el Programa Hidrológico Internacional de la UNESCO y la Cátedra UNESCO sobre el Agua, las Mujeres y la Gobernanza. Son ejemplos de nuestra sólida cooperación. DG/2015/010 - Page 4

5 Pero hay más. No me olvido de nuestro trabajo en el ámbito de la cultura: - De la promoción de la diversidad cultural dominicana como herramienta de diálogo, de inclusión, de desarrollo; - Del potencial de la industria creativa del país en la generación de empleo, especialmente para los jóvenes; - de la necesidad de conservar el rico patrimonio material, tanto terrestre como subacuático, y salvaguardar el patrimonio cultural inmaterial, vector de identidades y herramienta esencial del desarrollo. Así, el Espacio Cultural de la Cofradía del Espíritu Santo de los Congos de Villa Mella y la Tradición del teatro bailado Cocolo ya fueron reconocidos en la Lista Representativa del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Y, como sin duda conocen, la Ciudad Colonial de Santo Domingo está inscrita en la Lista del Patrimonio Mundial. Una ciudad de encuentro y de dialogo: es aquí donde se entrecruzaron por primera vez las culturas americana, europea y africana, y se forjó un mestizaje cultural único en el mundo. Estoy convencida de que, bajo la admirable y comprometida dirección del Ministerio de Cultura, los mecanismos de cooperación de la UNESCO contribuirán, aún más, a un desarrollo local sostenible gracias al uso de los enormes recursos culturales que tiene el país. Sí, el nuevo modelo de desarrollo sostenible debe basarse en el espíritu de inclusión, en la reducción de las desigualdades, en el fortalecimiento de los programas educativos, en el reconocimiento, y provecho, de la diversidad cultural. Todo ello, preocupaciones permanentes de la República Dominicana. Este es el mensaje que me llevo de esta visita. Juntos, tenemos muchos proyectos a realizar. DG/2015/010 - Page 5

6 Tendremos la oportunidad de conversar e intercambiar ideas para dar inicio a la que sin duda será una fructífera relación. Por ahora, solo me resta darles mi agradecimiento más sincero por concederme el privilegio de recibirme como Huésped de Honor en esta honorable Cámara. Muchas gracias. DG/2015/010 - Page 6