SENTENCIA Nº 366/2016

Transcripción

1 SENTENCIA Nº 366/2016 EN LA CIUDAD DE ZARAGOZA, A TREINTA DE NOVIEMBRE DE DOS MIL DIECISÉIS. EN NOMBRE DE S.M. EL REY ILMOS. SRES. PRESIDENTE.- D. FRANCISCO JAVIER CANTERO ARÍZTEGUI MAGISTRADOS.- Dª ESPERANZA DE PEDRO BONET D. FRANCISCO JOSE PICAZO BLASCO Vista en juicio oral y público por la Sección Primera de la Audiencia Provincial, constituida por los Ilmos. Señores que al margen se expresan la presente causa, seguida por los trámites de D.P. nº 1385/2014, Rollo nº , procedente del Juzgado de Instrucción nº 6 de Zaragoza, por delitos de falsedad y estafa en grado de tentativa, contra los acusados JOSE LUIS A. R. nacido en Gallur, el 14 de enero de 1966, domiciliado en Zaragoza, sin antecedentes penales, de solvencia no acreditada, representado por la Procuradora Sra. Magro Gay y defendido por el letrado Sr. Notivoli Escalonilla y FERNANDO A. R., nacido en Gallur, Zaragoza, el día 5 de septiembre de 1971, domiciliado en Zaragoza, sin antecedentes penales, de solvencia no acreditada, representado por la Procuradora Sra. Magro Gay y defendido por el letrado Sr. Notivoli Escalonilla. Es acusación particular la entidad REDENTAL RRR 2009 S.L., representada por la Procuradora Sra. Ena Pérez y defendida por el letrado Sr. Benítez Segura. Habiendo sido parte el Ministerio Fiscal. Ha sido Ponente el Ilmo. Sr. D. Francisco José Picazo Blasco quien expresó el parecer del Tribunal. 1

2 ANTECEDENTES DE HECHO PRIMERO.- Por el Juzgado de Instrucción nº 6 de Zaragoza se instruyó el presente Procedimiento Abreviado en el que resultó resultaron acusados las personas reseñada en el encabezamiento. SEGUNDO.- Elevado el Procedimiento Abreviado a esta Audiencia Provincial se formó el oportuno Rollo de Sala con el núm y tras los trámites procesales pertinentes se señaló la vista oral que ha tenido lugar el día 28 de noviembre de TERCERO.- El Ministerio Fiscal en sus conclusiones provisionales elevadas a definitivas en el acto del juicio calificó los hechos como legalmente constitutivos de un delito de falsedad documental del art. 395 C. penal en relación con el art y3 C. Penal respondiendo como autores JOSE LUIS A. R. y FERNANDO A. R. y sin la concurrencia de circunstancias modificativas de,la responsabilidad penal para quienes solicitó fueran condenados por el delito de falsedad documental a la pena de 18 meses de prisión y accesorias de inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y por el delito de estafa procesal en grado de tentativa a la pena de 11 meses de prisión y de 5 meses de multa con cuota diaria de 8 euros, responsabilidad personal subsidiara en caso de impago del art. 53 Penal y costas. CUARTO.- La Acusación Particular en sus conclusiones provisionales elevadas a definitivas en el acto del juicio se adhirió a la calificación del Ministerio Fiscal interesando para los acusados respecto del delito de falsedad la pena de dos años de prisión y respecto del delito de estafa procesal la pena de once meses de prisión y multa de 6 meses a razón de 12 euros diarios, accesorias así como a que por vía de responsabilidad civil indemnicen conjunta y solidariamente a la entidad REDENTAL RRR 2009 en los perjuicios que se acrediten en el plenario o en ejecución de Sentencia mas intereses legales y costas incluidas las de la acusación particular, siendo RCD la mercantil ADIREFOR ZARAGIZA S.L. QUINTO.- La defensa mostró su disconformidad solicitando la absolución de sus patrocinados. 2

3 HECHOS PROBADOS PRIMERO.- En el mes de marzo de 2013 los acusados y administradores solidarios de la entidad ADIREFOR ZARAGOZA S.L. fueron requeridos por Ronaldo M. R. R. en su condición de representante legal de la sociedad REDENTAL RRR 2009 S.L. para realizar una reforma de la clínica dental propiedad de aquélla. Con el fin de que REDENTAL pudiera obtener un crédito para poder hacer frente a la realización de las obras, la entidad LA CAIXA exigía la presentación de un presupuesto que ADIREFOR les proporcionó por importe de ,68., solicitando la propiedad una rebaja del mismo y accediendo ADIREFOR quien les proporcionó otro por un precio final de ,68 que fue aceptado por la otra parte y que tras la subsanación de un error material en la fecha del mismo se transformó en el contrato de fecha 12 de agosto de 2013 en el que se pactaba como forma de pago la del abono del 80% a la firma del contrato y el 20% restante al terminar los trabajos. Dicho contrato se firmó en el domicilio de Ronaldo M., dándose la particularidad de que del mismo existen cuanto menos dos ejemplares de los que concretamente en uno, el aportado por la defensa en el acto del juicio y propuesto como prueba documental, aparecían dos firmas por la propiedad correspondientes a cada uno de los acusados, mientras que en el otro aparecía tan solo una firma, dándose además la circunstancia de que, en todo caso, estuvo también presente la madre del mismo, la odontóloga, siendo que las otras dos firmas fueron estampadas por ambos acusados en el apartado constructora en el ejemplar presentado por la defensa mientras que en el otro aparecía una sola firma. Así las cosas, en fecha 16 de agosto de 2013, Ronaldo M. que había partido para Estados Unidos, se puso en contacto telefónico con su madre para comunicarle que había hablado con el acusado José Luis A. R. y que éste se pasaría por el domicilio para que le firmara una documentación, así como también que se había producido un error en el número de cuenta cuyos dos últimos dígitos había que rectificar, lo que así sucedió, procediendo la odontóloga. a estampar su firma en un soporte papel y apareciendo a su vez la misma en otro documento de la misma fecha que aparece incorporado a la causa a los folios 24 y 25, siendo dicho documento idéntico al que se firmó en el domicilio de la propiedad a excepción de que en el apartado observaciones se incluía que todas las licencias y autorizaciones y cualquiera otra correrán a cargo del propietario, así como que ya no aparecía en el mismo la partida proyecto. En esa misma fecha, 16 de agosto, la odontóloga. inició los oportunos trámites ante el Ayuntamiento. 3

4 Como quiera que la obra se ejecutó a falta de meros retoques cuya realización ya no fue posible por impedirle la propiedad la entrada a los operarios encargados de tales arreglos, y ante la negativa de la propiedad de abonarle sus honorarios cuando le fueron reclamados, la entidad ADIREFOR ZARAGOZA S.L entabló dos acciones judiciales contra REDENTAL RRR 2009 S.L. en reclamación de cantidad; una primera mediante el Procedimiento Monitorio nº 38/14 seguido ante el Juzgado de Primera Instancia nº 1 de Zaragoza en reclamación de 8.237,60. en que REDENTAL no compareció y que fue seguido del Procedimiento Ordinario nº 284/14 promovido ante el mismo Juzgado. En ambos procedimientos y en apoyo de sus pretensiones, de los dos contratos aludidos de fecha 12 de agosto ADIREFOR ZARAGOZA S.L. presentó el ejemplar en el que solo aparecía en representación de la propiedad la firma de la Sra. R., lo que dio lugar que en el último de los procedimientos citados REDENTAL planteara una cuestión prejudicial penal y la promoción de una querella contra los socios de ADIREFOR por presuntos delito de falsedad y estafa procesal en grado de tentativa. FUNDAMENTOS DE DERECHO PRIMERO.- Los hechos que se declaran probados no son merecedores del reproche penal del que resultan objeto por parte del Ministerio Fiscal y la Acusación Particular. La cuestión nuclear no es otra que la de determinar si tal y como afirman las acusaciones, en fecha 13 de agosto de 2013 el acusado José Luis A. R. quien efectivamente se personó en el domicilio particular de la odontóloga, solicitó de la misma que estampara su firma en un documento en blanco con la excusa de que se había incurrido en un error que había que corregir en los últimos dígitos de la cuenta corriente donde había que ingresar el precio pactado, procediéndose mendazmente una vez obtenida tal firma, a rellenar el documento y constituyendo otro a imagen y semejanza del contrato inicial de fecha 12 de agosto de 2013 pero modificando aquel al añadir en el apartado observaciones que todas las licencias y autorizaciones y cualquiera otra correrán a cargo del propietario, y suprimiéndose, además, la partida la partida proyecto, lo que, en efecto, colmaría el tipo penal de la falsedad documental del art. 395 C. penal en relación con el art y 3 C. Penal; o si, por el contrario tal y como sostiene la defensa, tal modificación del contrato inicial no fue tal, ya que el hecho de que el ejemplar presentado por dicha defensa en el acto de la vista como prueba documental contuviera todas las firmas, incluida la de la odontóloga., era una demostración palpable de que ésta era parte de la propiedad y disponía de 4

5 suficientes facultades para ostentar la representación de la misma, de lo que no era posible inferir que la modificación insertada en el contrato de la siguiente fecha se hubiera hecho aprovechando su falta de conocimiento y precipitadamente con la excusa de encontrarse su hijo Ronaldo fuera de España, tratándose por el contrario de una corrección del contrato anterior consentida y admitida por ambas partes ya que los plazos para conseguir la financiación bancaria de la obra apremiaban y era urgente obtener las correspondientes licencias de obra para que la consulta pudiera estar abierta ante de las Fiestas del Pilar, para lo que se facultaba a la propiedad a la ejecución de todos los trámites administrativos y burocráticos. SEGUNDO.- Ciertamente no le falta razón a la defensa. No lo pudo expresar mejor el propio letrado de la acusación particular cuando expresó en su informe que nos hallábamos ante una declaración contra otra, huérfana de cualquier suerte de elemento probatorio directo corroborador de la tesis de la querellante por el que se hubiera podido constatar cualquier suerte de manipulación en el documento presentado a juicio que recogiendo la firma estampada en blanco por la odontóloga. R. incorporara al mismo el texto del contrato anterior pero suprimiendo la partida proyecto y agregando en el apartado observaciones que todas las licencias y autorizaciones y cualquiera otra correrán a cargo del propietario. Antes al contrario, el hecho incontestable y acreditado a través del propio reconocimiento de la odontóloga. de que ésta inició efectivamente sus gestiones ante el Ayuntamiento de Zaragoza en fecha 16, esto es, con inmediata posterioridad a la firma del segundo contrato y el mismo día en que recibió la visita de uno de los acusados, parece dar a entender que si lo hizo así era por ser ya conocedora de que la gestión burocrática correría a cargo de la propiedad conforme a la nueva cláusula. A ello debemos añadir la ausencia de constancia en orden a que D. Romualdo fuera el único interlocutor de REDENTAL, siendo plausible deducir o, cuanto menos, no descartar, que la Sra. R. participara igualmente en las tareas de gestión del negocio y que, por tanto, se encontrara implicada en los entresijos del mismo y fuera plenamente conocida por los acusados, lo que descartaría que ésta pudiera resultar engañada conforme a las tesis de REDENTAL. También debemos reparar en la existencia de dos firmas en el apartado propiedad del contrato de fecha 12 de agosto que fue aportado en la vista por la representación de los acusados como prueba documental, una de las cuales, la que aparece en posición más alta y justamente bajo la apostilla firmado propiedad parece corresponderse a simple vista con la de D. Ronaldo (ver declaración sumarial f. 335) mientras que la que aparece debajo de ésta presenta a simple vista rasgos similares con la de la odontóloga, tanto si se coteja con la que aparece en el contrato de fecha 12 de agosto como con la que aparece al pié de su declaración sumarial (f. 342), con lo que ya no resultaría posible afirmar que el primer contrato fuera firmado por el Sr. Ronaldo y reafirmaría 5

6 la tesis sostenida por los acusados. Finalmente agregar que produce cierta perplejidad el hecho de que la propiedad ni tan siquiera compareciera en el procedimiento monitorio y que, sin embargo, esperara a la promoción del juicio ordinario para aducir la cuestión prejudicial generadora de la querella. Lo anterior pone de manifiesto que no concurre prueba de cargo suficiente para enervar el principio de presunción de inocencia ex. art C.E., de lo que forzosamente ha de derivar un pronunciamiento de absolución afectante a ambos acusados. TERCERO.- Siendo la sentencia absolutoria las costas deben ser declaradas de oficio ex art.109 C. penal y 239 y 240 L.E.Cr. VISTAS las disposiciones legales citadas y los artículos pertinentes del Código Penal y de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. EL TRIBUNAL, por la autoridad que le confiere la Ley, emite el siguiente. FALLAMOS DEBEMOS ABSOLVER Y ABSOLVEMOS a JOSE LUIS A. R. y FERNANDO A. R. como autores responsables de los delitos de falsedad y de estafa en grado de tentativa de los que resultan acusados, declarando de oficio las costas causadas. La presente resolución no es firme cabiendo interponer frente a la misma recurso de casación ante la sala Segunda del Tribunal Supremo, debiendo anunciarse ante esta Sección Primera de esta Audiencia Provincial en el plazo de cinco días contados a partir del siguiente al de su última notificación y de la que se llevará certificación al Rollo de Sala. Así por esta nuestra Sentencia, lo pronunciamos, mandamos y firmamos. 6