Las moléculas que más predisponen al cáncer son los radicales libre. Explico estos acontecimientos en el capítulo siguiente.

Transcripción

1 Capitulo XVI CÁNCER Enfermedad maligna de naturaleza celular de características únicas, donde el control de la reproducción celular se ha perdido con relación al ente viviente, dando como resultado un crecimiento proliferativo sin regulación y sin diferenciación, con la capacidad de invadir los tejidos normales y de matas atizar a distancia. El cáncer puede presentarse en cualquier tejido de cualquier órgano y a cualquier edad. Los rasgos principales son el crecimiento rápido, con infiltración y destrucción, formación independiente que se comporta en forma extraña el organismo y que vive a sus expensas como parásito, tomando las sustancias nutritivas que necesita. El cáncer es una enfermedad predominantemente degenerativa, donde las células presentan una alteración genética persistente y con carácter inmortal. La diseminación y generalización de los tumores malignos da lugar a alteraciones generales del organismo que, por mecanismos aún no comprendidos completamente llevan al paciente a un adelgazamiento extremo, desnutrición y anemia, que conduce a la muerte. Los tumores malignos son de dos tipos: los del tejido conectivo y sus derivados que constituyen los sarcomas; y, los del tejido epitelial, que se denominan carcinomas o cánceres propiamente dichos. El 90% de los canceres pertenecen al tejido epitelial, y éste tejido es el que más se divide y se reproduce. De una manera general es el tejido que cubre la parte exterior de nuestro cuerpo. Nuestro organismo es semejante a dos tubos unidos en la boca, el primer tubo es el digestivo, con la piel en el lado exterior y la mucosa en el lado interior, pero ambos de sus lados tienen contacto con el mundo exterior, y; el segundo, el aparato respiratorio, donde la mucosa de los alvéolos también tiene contacto con el exterior. Dado que este contacto con el medio ambiente produce un gran desgaste físico de material celular, es necesario que las células se reproduzcan activamente. En general, casi todas nuestras células del cuerpo se reproducen diariamente, con excepción de las musculares, las nerviosas y los condrocitos; con una renovación rotativa de 2.160``000` (dos mil ciento sesenta millardos) de células por día. Abrumadora cantidad de divisiones celulares que tienen que realizarse a la perfección. Basta un pequeño cambio molecular en la cadena de ADN para que el desastre se produzca. La frecuencia de esta enfermedad es elevada; ocupa el segundo lugar como causa de muerte, después de las enfermedades cardiovasculares.

2 La característica precisa de su formación todavía es desconocida pese a la abundancia de teorías y a la gran adelanto tecnológico de la medicina moderna. El problema básico consiste en determinar el mecanismo molecular básico consiste en determinar el mecanismo molecular que se realiza en el equipo genético de la célula, que hace que ésta se convierta en maligna. Es muy importante señalar que la acción de los virus sobre las células nos han conducido a interpretaciones muy valiosas sobre estos trastornos, y estas interrelaciones entre los virus y las células ha permitido comprender mejor la carcinogénesis a nivel celular. Hay muchos virus que producen cáncer. Pese a la aparente facilidad con que una célula se puede hacer cancerosa, en la práctica no lo es tanto; hay una gran dificultad fisiológica para la iniciación de un cáncer, en todos los casos hay dos factores principales que tienen que encontrarse presentes, y que deben coincidir de manera apropiada para iniciar el proceso proliferativo. El uno, es el factor de iniciación, que generalmente es un elemento físico, químico o biológico de naturaleza anormal o mutagénico para los tejidos del huésped; el otro, es el factor promotor que no es mutagénico. Los dos factores propuestos actúan de manera variable para generar un cambio cancerígeno en las células, así, cuando el iniciador se encuentra presente y el promotor es repetitivo, el resultado es cáncer; cuando el iniciador se encuentra presente y el promotor actúa después de un tiempo en forma repetitiva, también se provoca cáncer; cuando el promotor se encuentra en el primer momento y es repetitivo, seguido del iniciador, no hay la posibilidad de que se inicie un cáncer; cuando el iniciador se encuentra presente, seguido el promotor, pero este se presente esporádicamente, tampoco hay cáncer; pero cuando el iniciador se encuentra presente y es repetitivo, hay cáncer. El factor iniciador es el que lesiona la cadena de ADN, y el factor promotor es una enzima que activa la mutación del gen, produciéndose de esta manera la iniciación de la clona prohibida. Los indicadores son los elementos que actúan como espinas irritativas que mediante su persistencia comienzan un daño celular, su naturaleza es variada, puede ser físicos, químicos y tóxicos, entre ellos tenemos el alcohol, azúcar, tabaco, café, medicinas, ají, hormonas, piezas dentales en mal estado, irritantes como el monosodioglutamato, elementos radioactivos, ingesta o absorción de metales pesados, el envejecimiento, en fin, su número es variadísimo y muchos aparentemente con apariencia inocente. Los promotores, son moléculas que se encuentran presentes en nuestro organismo, como los esteres de phorbol, como el acetato de tetradecanoylphorbol (TPA), como agente activador de la proteína Kinasa C y del phosphatidylinositol.

3 La forma exacta de curar la enfermedad cancerígena aún es desconocida para la medicina convencional, pero se ha postulado tres métodos para la lucha; la cirugía, la quimioterapia y la radiación. La cuales deben aplicarse lo más tempranamente posible para tener éxito. De esta manera, la detección del cáncer en sus etapas primarias es el objetivo primordial de la medicina clínica. Como tal, muchos cánceres son curables, antes de la medicina moderna la relación era de un paciente curado por cuatro enfermos no curados, hoy la relación es de uno por cada tres. El inicio de un cáncer se debe a la pérdida de los mecanismos inmunológicos encargados de defender a una persona, y por la presencia de iniciadores tóxicos; pero si los factores de defensa inmunológica se encuentran en perfectas condiciones y además evitamos el contacto con materiales o elementos agresivos, nunca se podría contraer cáncer. Aunque este concepto examinado desde un punto de vista estrictamente real, deberíamos admitir que todos los días tenemos cáncer. Dentro de los treinta billones de células que poseemos, algunos se nos desordenan produciendo una célula monoclonal que pueden dar origen a una clonación prohibida, pero nuestros mecanismos defensivos de tipo celular o de carácter químico salen al paso para neutralizar la situación. La predisposición al cáncer, desde el aspecto genético, es como un revolver cargado, que solo se dispara cuando por alguna razón apretamos el gatillo. Los elementos desencadenantes que nos rodean son los que disparan el arma (iniciadores) Podemos decir que la predisposición genética en algunos casos puede deberse a ciertos virus que se mantienen en estado latente; pudiendo o no manifestarse más tarde, dependiendo de los agentes externos, que a modo de gatillo, ponen en marcha al proceso de cancerización. La enfermedad es mas manifiesta en la primera parte de la vida, esto es hasta los diez años, y a partir de los cuarenta en adelante. Son dos etapas cruciales de la vida en que debemos poner más atención a la medicina preventiva para evitarlo. Las causas son variadísimas, incluso los mismos métodos que se utilizan para curar el cáncer involucran factores cancerígenos, lo cual resulta una paradoja, pero hablando en oro, todo lo que nos rodea puede producir cáncer, el aire, el agua, la tierra: vivimos inmersos en medios cancerígenos, si no los sabemos manejar adecuadamente nos harán dañó. Hemos visto en los últimos años un incremento notable del cáncer; esto se debe a que un gran número de agentes químicos a nuestro alrededor pueden originarlo: la contaminación atmosférica, las sustancias derivadas de los vapores de carbón y del petróleo, los compuestos medicamentosos que ahora se toman en mayores cantidades que antes los insecticida, los detergentes y otros variados productos que hasta hace 80

4 años eran desconocidos. También, porque la expectativa de vida de los seres humanos se ha prolongado, lo que permite que le mayor porcentaje de canceres se manifieste sobre los cuarenta años. Además, porque ahora se diagnostican como cánceres muchas patologías que tiempo atrás no eran consideradas como tales. El inicio de un cáncer se encuentra determinado por una trasformación celular donde se involucra el acido nucleído con las dos moléculas principales, ácidos desoxirribonucleico ADN y el ribonucleico o ARN, que son elementos fundamentales en el proceso del origen del ávida, mecanismo físico-químico que ha requerido el encadenamiento de toda una serie de combinaciones moleculares, entre las que se encuentra la duplicación de la célula, mecanismo que está regido por el ácido nucleíco. Es lógico pensar que un conocimiento más profundo sobre el comportamiento de estos fenómenos moleculares nos dará en el futuro una mejor comprensión de los trastornos cancerígenos. Puede decirse que el crecimiento anárquico de la células únicamente se puede dar en los seres vivientes más complejos, como tal, el cáncer se presenta desde los batracios, en las plantas superiores, en las aves y en los mamíferos, pero en las formas más elementales de la vida no se presenta nunca. Por ejemplo: Que dice el Dr. David Cramer? (de la Escuela de Medicina de Harvard): Si una mujer no metaboliza la galactosa de la leche, está tiene una gran predisposición de desarrollar cáncer del ovario. Estudios serios recomiendan no ocupar una casa construida de hormigón, sin solamente cuatro años después de haber sido construida, ya que este tiempo es el que tarda para disipar la radio-actividad emitida por el gas radón que emiten sus materiales, por lo que si nos toca vivir en una casa recién construida, deberíamos disminuir los riesgos abriendo sus ventanas todo el tiempo que nos sea posible, en ese caso tendremos una concentración de este gas entre 0,1 y 0,4 picocuries, que es tolerable para la salud, pero si cerramos las ventanas, la concentración se elevara a los 27 picocuries, que significa alto riesgo de cáncer. El cáncer es el paradigma de las enfermedades degenerativas, es el ejemplo más evidente de los desórdenes celulares por autofagia celulares por autofagia; cuando nuestro organismo no recibe los nutrientes necesarios, las células pueden responder de dos maneras: la una, dejándose comer pasivamente, que es lo más común; y la otra, al escapar a la depredación, separándose del control primario que regular la división celular, y haciéndose independientes en la reproducción, tomando de esta manera el control de una división celular anárquica e invasora; fenómeno que hasta cierto punto se observa en las grandes agrupaciones vitales de las organizaciones de colonias de seres vivos.

5 Según el raciocinio anterior, la comida que ingerimos diariamente tiene una significación de gran importancia para nuestra salud y supervivencia, por lo que debemos comer carne, leche, huevos, legumbres, hortalizas y especialmente frutas, pues en ellas se encuentra la mayor cantidad de antioxidantes de fácil asimilación con los que controlamos los radicales libres. A manera de experiencia diaria en mi profesión he tenido grandes satisfacciones con relación a los pacientes cancerosos, quienes muchos de ellos han tomado Eveliza para corregir el estrado depauperativo que produce esta maligna enfermedad, y el efecto, ciertamente ha sido sorprendente. Debo manifestar en honor a la verdad la siguiente estadística de éstos pacientes que han llegado desahuciados por la medicina convencional, de los cuales el 75% se ha curado, dentro de este grupo las neoplasias son las siguientes; melanoma maligno, dos pacientes; cáncer del ovario, 3; mieloma múltiple, 2; tumor del útero, 4; tumor del testículo, 1; tumor del intestino delgado, 3; angiomioblastoma, 2. Varios de estos pacientes tenían metástasis en los pulmones. Lo más importante de esta experiencias se refiere a que los pacientes curados no se encontraban recibiendo medicación anti cancerígena alguna, y varios de los cuales habían sido operados hasta dos veces por la misma causa. Pero aquello que se encontraban recibiendo tratamientos como radiación o quimioterapia no tuvieron ningún resultado positivo. Sospecho que le fracaso curativo que tuvieron los pacientes que se encontraban recibiendo radiación o quimioterapia se debe al bloqueo que sufren los mecanismos defensivos naturales del paciente, los que muy al contrario, son estimulados por el nutriente Eveliza y por otras recomendaciones a las que tiene que someterse el enfermo. El fenómeno curativo que he observado en estos pacientes me resulta inexplicable dentro de las ideas normales de la medicina convencional, y supongo que requieren otro tipo de análisis que debe encontrarse en la medicina conceptual. Si nuestra vida la relacionamos dominantemente con nuestra alimentación, y le damos la importancia que tiene el comer adecuadamente, podemos encontrarnos seguros que a través de nuestra existencia no vamos a adquirir enfermedades involutivas o degenerativas de ninguna clase y nuestra vejez sería larga, saludable y productiva. Las moléculas que más predisponen al cáncer son los radicales libre. Explico estos acontecimientos en el capítulo siguiente.

6 Capítulo XXII ARTROSIS Enfermedad involutiva de tipo degenerativo, que se manifiesta especialmente en las articulaciones, con compromiso del cartílago hialino y pérdida de la estructura del mismo, acompañada de hipertrofia ósea con la presencia de partículas de tejido óseo anormal.