Los Sistemas de Gestión Medioambiental conforme a la norma UNE-EN-ISO 14001:1996 en el sector de la construcción MILAGROS GARROTE DE MARCOS AENOR C/ Génova, 6, 28004 Madrid. dcsconstruccion@aenor.es RESUMEN Contenidos: Introducción a la norma UNE-EN-ISO 14001:1996. Ventajas de su implantación. Requisitos de la norma y la aplicación práctica al sector de la Construcción. Política medioambiental. Planificación del Sistema de Gestión Medioambiental. Implantación y Desarrollo del Sistema de Gestión. Comprobación y Acción Correctora. Revisión por la Dirección. Conclusiones. Certificación de los Sistemas de Gestión Medioambiental. Debido a las dificultades que se están encontrado las empresas del sector de la construcción en la implantación de Sistemas de Gestión Medioambiental es necesario clarificar cómo se puede llevar a cabo eficazmente esta implantación. Se pretende orientar a todos los profesionales del sector en la implantación y diseño de estos Sistemas. Primeramente se comenta una breve introducción a la norma UNE- EN-ISO 14001:1996, definiendo el objeto y campo de aplicación. Asimismo, se comentan las ventajas de implantar un Sistema de Ges- 1719
I Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente tión Medioambiental conforme a esta norma (comerciales, de costes, de prevención, de imagen, etc.). A continuación se detallarán los requisitos establecidos en la norma de referencia, en particular los requisitos relativos a los puntos de la norma recogidos en los apartados de la política medioambiental, planificación, implantación y funcionamiento, comprobación y acción correctora y revisión por la dirección, explicando, en cada caso, cómo se satisfacen los requisitos establecidos, y particularizando estos requisitos en la actividad de construcción. Por último se comentará el proceso de certificación de los Sistemas de Gestión medioambiental conforme a la UNE-EN-ISO 14001:1996 para aquellas empresas que estén interesadas. 1720
Los Sistemas de Gestión Medioambiental conforme a la norma UNE-EN-ISO 14001:1996... 1. INTRODUCCIÓN A LA NORMA UNE-EN-ISO 14001:1996. VENTAJAS DE SU IMPLANTACIÓN La creciente conciencia social sobre la importancia de la protección del medio ambiente, las tendencias actuales de política comunitaria (y su reflejo a través de una legislación medioambiental cada vez más exigente) y la presión de las instituciones oficiales y de los consumidores, hacen que hoy en día ninguna empresa pueda permanecer ajena a la incorporación del factor medioambiental al conjunto de actividades de gestión. La publicación de la norma UNE-EN-ISO 14001:1996, así como la reciente publicación del Reglamento Europeo de Ecogestión y Ecoauditoría 761/2001, EMAS, forman el marco actual para el desarrollo de una efectiva gestión medioambiental de la empresa. Como objetivos específicos de esta Ponencia pretendemos dar a conocer los requisitos de un Sistema de Gestión Medioambiental conforme a la norma UNE-EN-ISO 14001:1996, en un sector en el que la gestión medioambiental está en pleno proceso de desarrollo. 1.1. Ventajas de la Implantación de un Sistema de Gestión Medioambiental Las ventajas que supone la implantación de un Sistema de este tipo son numerosas. Desde el punto de vista comercial se presenta como una ventaja competitiva frente a competidores, creando nuevos mercados (por eliminación de barreras) y aumentando la cuota de mercado existente. Debido a la Orden Ministerial de fecha14 de octubre de 1997, en la contratación con algunas Administraciones Públicas la Calidad Ambiental de la oferta puede suponer entre un 10 y un 20 % del total de la puntuación. Asimismo se potencia la imagen de la empresa por los compromisos adquiridos tanto con la Administración, como con las distintas partes interesadas, aumentando la confianza de los inversores y accionistas al asegurar la supervivencia de la empresa. También supone un beneficio por optimizar recursos, disminuir y controlar la generación de residuos y envases, y facilitar la obtención de ayudas económicas destinadas a la protección ambiental. Por otra parte la implantación de un Sistema de Gestión Medioambiental participa activamente en la prevención de accidentes medioambientales graves, la aparición de sanciones de carácter legal por incumplimiento de requisitos y la aparición de costes derivados de la no gestión. 2. REQUISITOS DE LA NORMA UNE-EN-ISO 14001:1996. APLICACIÓN PRÁCTICA AL SECTOR DE LA CONSTRUCCIÓN 2.1. Generalidades El Sistema de Gestión medioambiental nos proporciona una herramienta de control de actuación sobre el medio ambiente a través de un proceso estructurado, cuyo último objetivo es conseguir la mejora continua de nuestro comportamiento medioambiental. 1721
I Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente La estructura del Sistema de Gestión Medioambiental se basa en un sistema cíclico de perfeccionamiento, entendiendo este ciclo como la espiral de mejora continua. El ciclo se divide en cuatro etapas, que identifican tanto las distintas fases de funcionamiento del sistema como las fases de implantación del sistema, lo cual correspondería a la primera vuelta dentro del bucle de mejora. Cada una de las fases engloba diferentes requisitos de la norma, tal y como se especifica en la tabla adjunta. 2.2. Requisitos Los requisitos de un Sistema de Gestión Medioambiental se desarrolla partiendo del siguiente esquema de contenidos: Tabla 1. UNE-EN-ISO 1400:1996 Requisitos de un sistema de Gestión Mediambiental 4.2 Política Mediambiental 4.3 Planificación 4.3.1 Aspectos Medioambientales 4.3.2 Requisitos Legales y Otros Requisitos 4.3.3 Objetivos y Metas 4.3.4 Programa de Gestión Medioambiental 4.4 Implantación y Funcionamiento 4.4.1 Estructura y Responsabilidades 4.4.2 Formación, Sensibilización y Competencia Profesional 4.4.3 Comunicación 4.4.4 Documentación del Sistema 4.4.5 Control de la Documentación 4.4.6 Control Operacional 4.4.7 Planes de Emergencia y Capacidad de Respuesta 4.5 Comprobación y Acción Correctora 4.5.1 Seguimiento y Medición 4.5.2 No conformidad, Acción Correctora y Acción Preventiva 4.5.3 Registros 4.5.4 Auditoría del Sistema 4.6 Revisión por la Dirección 2.3. Política Medioambiental La Dirección debe establecer este compromiso inicial como comienzo del proceso de implantación del Sistema. La Política Medioambiental es una declaración pública documentada de una empresa, que incluye: Compromiso de Mejora Continua. Compromiso de Prevención de la Contaminación. 1722
Los Sistemas de Gestión Medioambiental conforme a la norma UNE-EN-ISO 14001:1996... Compromiso de Cumplimiento de la legislación y reglamentación medioambiental aplicable, y otros requisitos que la organización suscriba (por ejemplo, políticas de grupo o corporativas). La política debe ser adecuada a las actividades, productos o servicios e impactos medioambientales de la empresa. Es frecuente encontrar políticas que no discriminan ni la actividad, ni los productos, ni el ámbito de actuación de la empresa que la suscribe. Estas políticas «vacías» no son un compromiso auténtico, ni constituyen la mejor publicidad que pude tener la empresa, por no ser diferenciadoras. Debe ser el marco de referencia para el establecimiento de objetivos es decir, el encuadre de las grandes líneas de actuación de la empresa para cumplir con el compromiso de mejora continua. Así por ejemplo puede incluir compromisos en la reducción progresiva de generación de residuos, peligrosos o inertes, en las emisiones, en los consumos de materias primas, etc. Es aconsejable que la empresa defina a grandes rasgos: Las actividades que realiza (construcción de obra civil, edificación, obras especiales). La actividad característica de la empresa (obra ferroviaria, hidráulica, cimentaciones). Sus productos (hormigones, acero, materiales de construcción). Sus servicios (movimiento de tierras, encofradores, ferrallistas, instaladores). Su ámbito de actuación (local, nacional, europeo, multinacional). Sus instalaciones fijas emblemáticas (Parques de maquinaria, almacenes, fábricas). La Política Medioambiental debe ser conocida por todos los empleados y estar a disposición del público, es decir debe evidenciarse el acceso al documento por las partes interesadas. 2.4. Planificación Este segundo apartado incluye cuatro puntos de la norma. Aspectos Medioambientales La empresa debe identificar sus aspectos medioambientales, es decir aquellos elementos de sus actividades, productos o servicios que interactuen o puedan interactuar con el medio ambiente. El resultado de esta interactuación serán los impactos medioambientales. La identificación debe realizarse en condiciones normales de operación, en condiciones anormales y en situaciones de emergencia. Las condiciones anormales de funcionamiento son aquellas que no se producen de manera habitual, pero no generan una situación difícil, como si lo hacen los accidentes y las emergencias. Además se deberá tener en cuenta las actividades pasadas en los emplazamientos fijos, o en la zona donde se vaya a ejecutar la obra. 1723
I Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente Según el anexo de la norma se deberán tener en cuenta: Emisiones (de gases de combustión, de polvo, de compuestos orgánicos volátiles). Ruido (de maquinaria fija, de maquinaria auxiliar, de voladuras). Vertidos (se aguas sanitarias, de proceso, de lavado de maquinaria, de lavado de canaletas). Consumos (de materias primas, de energía). Residuos (Inertes, urbanos, peligrosos). Contaminación de suelos (según actividades pasadas). Otros aspectos que afecten a la comunidad (iluminación nocturna, olores, desvíos de trafico, afecciones al suelo, fauna o flora). En construcción la identificación de aspectos puede realizarse teniendo en cuenta las unidades de obra, o fases de construcción. Con esta opción, se identifican aspectos según cada una de las actividades que se lleven a cabo. A la hora de realizar la evaluación se pueden agrupar los distintos aspectos identificados por fases y evaluar conjuntamente para el global de la obra. Es necesario tener en cuenta las instalaciones auxiliares que prestan servicio a la obra (parques de maquinaria, plantas auxiliares de aglomerado, áridos, hormigón, canteras y prestamos), e incorporar los aspectos medioambientales asociados. También es necesario tener en cuenta las actividades propias de la empresa que llevan a cabo los subcontratistas. Desde el punto de vista del sistema, esos aspectos son consecuencia de nuestras actividades y será necesario que formen parte de nuestro sistema de gestión. La organización deberá determinar los aspectos significativos de sus actividades, productos o servicios. Para ello debe establecer criterios de evaluación de aspectos. Dichos criterios deberán tener sensibilidad medioambiental, es decir que su aplicación evalúe los aspectos desde el punto de vista medioambiental, no el económico, social, o legal. Será necesario asimismo establecer la forma de aplicación de estos criterios a los aspectos identificados. Esta metodología deberá estar documentada, de tal manera que se evite la subjetividad en su aplicación. Los criterios de evaluación pueden ser cuantitativos o cualitativos. Asimismo en el caso de los cuantitativos pueden ser directos o indirectos. Vemos algún ejemplo: Cuantitativos en función de la cantidad, m 3 de tierras sobrantes de excavación, kg de residuos peligrosos, litros o m 3 de agua consumidos, etc. Directos por medición directa del parámetro: m 3 de agua consumida. Indirectos por de otros datos disponibles: cantidad en función del n. o de personas del emplazamiento, kg de residuos según n. o de maquinas de obra, etc (no son los más estrictos, pero permiten obtener una aproximación cuando es imposible disponer de datos reales). Cualitativos, peligrosidad de los residuos (urbanos o peligrosos). La evaluación de aspectos puede realizarse en los centros particulares (fijos o temporales), o bien realizarse de manera global para las actividades de la empresa. El procedimiento o método de evaluación será distinto para cada empresa, no existiendo un método patrón que sea óptimo para todas. Cada uno tendrá que elaborarlo 1724
Los Sistemas de Gestión Medioambiental conforme a la norma UNE-EN-ISO 14001:1996... en función de sus características. Además, el método deberá ser sensible a los cambios o mejoras originadas en la empresa, y por tanto, mediante evaluaciones sucesivas, evidenciar el cumplimiento del compromiso de mejora continua. Este último aspecto es difícil de evidenciar en el sector debido fundamentalmente a la temporalidad de los centros de trabajo. Requisitos Legales y otros requisitos Se debe desarrollar un procedimiento que describa cómo se va a tener acceso a los requisitos legales medioambientales. De éstos hay que identificar los que sean de aplicación en función de sus actividades productos o servicios y mantener esta información actualizada. También deben identificarse otros requisitos de carácter voluntario que la organización suscriba. Por último, el procedimiento debe contemplar como se van a comunicar los requisitos legales identificados la los responsables de su cumplimiento. No se debe confundir Legislación de aplicación «Ley Aguas» con requisito legal aplicable «art. 13 relativo a...». Es decir, el requisito es realmente lo que es de aplicación, no la legislación completa. Es necesario tener en cuenta la legislación en el ámbito Europeo, Nacional, Autonómico y Local. En el caso de la legislación local resulta conveniente que el Jefe de Obra sea el Responsable de identificar y acceder a los requisitos de carácter local, ya que para la obra son más accesibles. En numerosas ocasiones se presentan otro tipo de requisitos que son de obligado cumplimiento por parte de la empresa, y que provienen de otras fuentes: Contratos, Pliegos de Prescripciones, Licencias, Permisos y Autorizaciones, Declaraciones de Impacto Ambiental (si la hubiera), etc. Estos requisitos también hay que identificarlos. Objetivos y Metas Medioambientales Los objetivos y metas medioambientales constituyen la concreción de la política medioambiental de la empresa. El establecimiento de objetivos es un punto clave del sistema ya que define la velocidad de mejora del comportamiento medioambiental. A la hora de establecerlos la empresa debe tener e cuenta: Los aspectos que han resultado significativos después de la evaluación (es decir, los puntos débiles de la organización desde el punto de vista medioambiental). Esto no quiere decir que sea necesario establecer objetivos para cada uno de los aspectos medioambientales significativos sino tenerlos en cuenta todos para fijar los objetivos. Los cambios legislativos en materia medioambiental. Las opciones tecnológicas disponibles. Las opciones financieras para llevar a cabo las mejoras. Las opiniones de partes interesadas. 1725
I Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente Es frecuente que el establecimiento de objetivos se haga de forma general para una empresa y éstos se desplieguen en cascada a las distintas funciones o responsables que les apliquen. En el caso de una empresa constructora esto es común. Si una vez tenidos en cuenta los puntos anteriores, la empresa fija desde la Dirección los objetivos generales, éstos se pueden particularizar para las obras describiendo en cada caso el objetivo particular en sí. Puede darse la circunstancia que a alguna obra en particular no le aplique ningún objetivo general planteado (por ejemplo, debido a que no se presenta el aspecto medioambiental). En este caso no es necesario desarrollar objetivos particulares para estas obras, aunque pueden establecerse otros que no se incluyan en los generales. La dificultad que plantea esta opción viene dada por la necesidad de disponer de toda la información relativa a los aspectos medioambientales presentes en las obras (Aspecto que debe tenerse siempre en cuenta a la hora de establecer los objetivos y metas). Cuando la definición de objetivos sea particular de obras o centros conviene tener en cuenta cada uno de los puntos antes mencionados. Esta opción se presenta cuando la evaluación de aspectos se realiza por centros y no de manera global. En ambos casos es necesario que la información sobre el cumplimiento de los objetivos se tenga en cuenta en la Revisión por la Dirección, por lo que deberá establecerse los mecanismos necesarios para este intercambio de información. Merece especial atención desarrollar brevemente el concepto de meta desde el punto de vista de la norma. La meta son los requisitos detallados de actuación que se desarrollan con el fin de alcanzar los objetivos. Es decir, un objetivo por si sólo no define la forma en la que se va a llevar a cabo. Será necesario establecer cómo vamos a alcanzar, qué pasos vamos a andar para la consecución de nuestro objetivo. Programa de Gestión Medioambiental El programa de gestión medioambiental es la concreción práctica de los objetivos y las metas, con los cronogramas para cada uno de ellos. Consiste en disponer de metas establecidas para cada nivel, con los medios y recursos adecuados para su puesta en funcionamiento y un calendario que señale las fechas de compromiso para su consecución. Deben recoger las responsabilidades de llevar a cabo cada acción. Este programa se modificará cuando sea necesario debido a nuevos desarrollos, productos o servicios. Los programas deben ser una herramienta dinámica del Sistema. 2.5. Implantación y Funcionamiento Este apartado incluye siete puntos de la norma. Estructura y responsabilidades Las responsabilidades relativas a cada uno de las funciones deben estar definidas documentalmente. La Dirección debe asumir la responsabilidad ultima del desarrollo del Sistema a la vez que asignar responsabilidades para su funcionamiento. 1726
Los Sistemas de Gestión Medioambiental conforme a la norma UNE-EN-ISO 14001:1996... La Dirección debe designar un Representante que tenga, entre otras las responsabilidades, las de: Garantizar que los requisitos del Sistema están establecidos, implantados y mantenidos al día. Informar del funcionamiento del Sistema de Gestión Medioambiental a la Alta Dirección para su revisión, como base para la mejora continua. En el ámbito de los centros de trabajo, fijos o temporales, conviene definir claramente las funciones y responsabilidades de cada persona dentro del Sistema de Gestión. Un organigrama es de gran ayuda para describir la estructura organizativa del Sistema. Formación, Sensibilización y Competencia Profesional Para que todo el personal cumpla de manera efectiva con sus obligaciones necesita poseer la formación necesaria en cuanto a conocimientos, experiencia y habilidades. Es necesario conseguir una actitud positiva de todos los miembros de la empresa. La forma de conseguirlo es doble: por un lado se requiere una formación adecuada para realizar su trabajo, y por otra que estén suficientemente sensibilizados. Es requisito de norma identificar las necesidades de formación, para que el personal que vaya a realizar este trabajo tenga la formación adecuada. Por lo tanto, será necesario definir las características de los puestos de trabajo que puedan tener influencia en la gestión medioambiental, para asegurarse que todo el personal cuya actividad puede generar un impacto significativo, haya recibido la formación necesaria y posea la competencia profesional adecuada. En general, la definición de puestos de trabajo desde el punto de vista del Sistema afecta fundamentalmente a jefes de obra, jefes de producción, jefes de plantas y encargados, pudiendo variar en función de las características de la empresa. Asimismo la norma indica dos perfiles que por su influencia en la norma deberán estar garantizados: El Representante de la Dirección y los Auditores. En algunos casos la actuación conforme o no frente al Sistema no se origina por la falta de conocimientos, sino por falta de concienciación de las repercusiones que pueden originar no seguirlo. Comunicación Se deben elaborar procedimientos para desarrollar las vías de comunicación sobre los asuntos relativos a la gestión, política, las actuaciones y los aspectos medioambientales. La comunicación debe desarrollarse atendiendo tanto a la comunicación interna, es decir a todos los niveles y a todas las funciones participantes de la gestión medioambiental dentro de la empresa, como a la comunicación externa, referida a la recepción de la documentación y a la respuesta de las comunicaciones relevantes de las partes externas interesadas. Con relación a este punto de la norma cabe señalar que se han de considerar las comunicaciones tanto escritas como verbales, siendo necesario documentar ambas. 1727
I Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente Debido a la multiplicidad de centros de trabajo (obras y centros fijos) seria conveniente que la sistemática desarrollada por la empresa para recoger estas comunicaciones incluyese también las recibidas en obra, ya sea porque se documenten en el libro de ordenes o un formato similar o por poder dejar constancia en la propia obra de las comunicaciones recibidas y realizadas. Es necesario clarificar que la empresa sólo ha de responder a aquellas comunicaciones que se considere relevantes, pudiendo el procedimiento contemplar que la respuesta no se realice desde la propia obra o centro de trabajo, sino desde el Departamento que se considere oportuno. Dentro de las comunicaciones relevantes (el criterio de relevancia lo define la empresa) podrían estar aquellas provenientes de sus clientes, de organismos estatales, autonómicos o locales, quejas de partes externas interesadas, de organizaciones sin animo de lucro, de medios de comunicación, empresas competidoras, etc. Documentación La empresa debe disponer de una documentación básica para, por un lado describir los elementos básicos del Sistema y por otro, para orientar sobre la documentación de referencia. El Manual no es un requisito del Sistema de Gestión Medioambiental, pero es la forma más habitual de dar cumplimiento a este apartado de la norma. Además es necesario disponer de otros documentos del Sistema como pueden ser procedimientos generales y específicos, instrucciones, ect, donde se describan cada una de las acciones que se llevan a cabo para cumplir con un requisito o función especifica de la empresa. Control de la Documentación El control de la documentación obedece a la necesidad de garantizar que el documento que se está utilizando es el correcto, es decir, el documento vigente, aplicable y aprobado. Es importante que las personas dispongan de la información necesaria para realizar sus tareas correctamente. El control de la documentación debe aplicarse tanto a los documentos externos como internos. Control Operacional El objetivo del control operacional es mantener las actuaciones medioambientales de la empresa dentro de unos límites predeterminados. Es necesario identificar cuales son las actividades que van a ser objeto de este control. Hay que considerar la política medioambiental de la empresa, los aspectos medioambientales significativos, los objetivos y metas planificados, los requisitos legales aplicables y el principio de prevención de la contaminación. La forma de cumplir con este requisito es: A través de la elaboración de procedimientos que definan como se llevan a cabo estas actividades. 1728
Los Sistemas de Gestión Medioambiental conforme a la norma UNE-EN-ISO 14001:1996... Definiendo criterios de operación, es decir, formas de actuación en circunstancias en las que la no definición de las mismas pudiera llevar a desviaciones de nuestra política, objetivos y compromisos adquiridos. Comunicando estos requisitos a proveedores y subcontratistas. Los procedimientos de control operacional pueden incluir puntos que hay que controlar, pueden definir especificaciones, criterios de aceptación, frecuencia y método del control, identificación de los formatos a emplear y el responsable de llevarlo a cabo. El origen de las desviaciones del control operacional es la falta de seguimiento de estas pautas. En muchas ocasiones la causa es la falta de sensibilización del personal implicado. No conviene confundir control operacional con seguimiento y medición. El control operacional incluye las actividades que hay que realizar para no incumplir especificaciones. El seguimiento y medición se refiere a las inspecciones, mediciones o ensayos que hay que realizar para verificar el cumplimiento de estas especificaciones. En relación con este apartado de la norma la mayoría de los casos las empresas definen planes de gestión medioambiental aplicables a cada emplazamiento temporal o fijo. Es necesario tener en cuenta que estos planes deben adaptarse a las características de las obras y tener presente su duración, presupuesto y magnitud. No es lógico desarrollar un plan completo para una obra cuya duración se mide en días, ni tampoco desarrollar un mero plan de inspección para una obra con un presupuesto de miles de millones. La empresa debe adaptar estos planes definiendo, si es necesario, varios tipos de planes según el presupuesto de la obra, su duración y su implicación medioambiental. El contenido de estos planes puede ser: Consideraciones generales (Descripción y características de la obra, funciones y responsabilidades, documentación de referencia, etc.). Aspectos Medioambientales. Requisitos Legales. Objetivos y Programa de Gestión Medioambiental. Control Operacional. Seguimiento y Medición. Otros Requisitos (Comunicaciones, Formación, Planes de Emergencia, No Conformidades, Acciones Correctoras y Preventivas, Auditorías). Los planes también son de aplicación a los centros fijos de la empresa, como parques de maquinaria, almacenes de medios auxiliares y otras instalaciones auxiliares de obra. Será necesario adaptar a la medida de cada centro el contenido y el alcance de cada plan. Planes de emergencia Los planes de emergencia son secuencias de actuación encaminadas a responder ante situaciones de emergencia, y a prevenir y disminuir el posible impacto medioambiental. La necesidad de desarrollar un plan vendrá dada por el riesgo medioambiental identificado. El contenido del plan debe incluir datos sobre servicios externos de emergencia, 1729
I Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente medidas a adoptar ante la emergencia y después de ella, las responsabilidades en cada caso, su comunicación a los empleados y revisión y verificación de la eficacia a intervalos periódicos. 2.6. Comprobación y Acción Correctora Seguimiento y Medición El requisito de la norma nos pide procedimientos que definan como medir y comprobar el cumplimiento de especificaciones provenientes del control operacional, los requisitos legales y otros requisitos, los objetivos y metas planteados y los compromisos que la empresa haya suscrito voluntariamente. Estos procedimientos deben definir los parámetros a medir, la frecuencia de la medición o seguimiento, el responsable, y los equipos empleados. La información recogida en estos registros puede servir para realizar un análisis con objeto de extraer conclusiones de, por ejemplo, el grado de cumplimiento de objetivos y metas o una evaluación del cumplimiento legal aplicable. La empresa debe definir las operaciones y especificaciones a controlar. Si se emplean equipos, estos deben estar calibrados. Deben originarse registros de los procedimientos definidos para el seguimiento y medición. La forma más habitual de dar cumplimiento a este requisito en el sector de construcción es mediante las inspecciones periódicas documentales o in situ. Estas inspecciones pueden desarrollarse independientemente o bien integradas en un formato conjunto con el de nuestro Sistema de la Calidad. Es conveniente, que cada centro evalúe periódicamente su cumplimiento de la legislación aplicable en función de los requisitos legales previamente identificados. No Conformidades, Acciones Correctoras y Preventivas Se deben desarrollar procedimientos que definan como se va a llevar a cabo la operativa para identificar las desviaciones reales o potenciales, de modo que se tomen las medidas oportunas para su tratamiento, corrección o prevención. Registros En la implantación y funcionamiento del Sistema se genera documentación con la que se comprueba que se realizan las acciones relacionadas con el funcionamiento del sistema, es decir, registros. Es necesario definir la forma en la que vamos a controlar esta documentación, así como el plazo que vamos a conservarla. Auditorías La auditoría interna es la herramienta del sistema para comprobar el grado de implantación y la eficacia del mismo. Se deben planificar las auditorías, indicando el objeto 1730
Los Sistemas de Gestión Medioambiental conforme a la norma UNE-EN-ISO 14001:1996... de la auditoría, el alcance, los centros o personal a auditar, el equipo auditor y la documentación de referencia. Las auditorías deben ser sistemáticas, documentadas, periódicas y objetivas. En el sector, debido a la multitud de centros temporales que se presentan se puede establecer documentalmente criterios de muestreo, definidos inequívocamente, basados en el tipo, la magnitud, la duración o la ubicación de las distintas obras en ejecución de la empresa. Los centros fijos deben auditarse siempre. 2.7. Revisión por la Dirección La Revisión del Sistema es responsabilidad especifica de la alta Dirección. En ella se deben verificar la adecuación del sistema para el cumplimiento del compromiso de mejora continua así como evaluar la eficacia del mismo. Para revisar la adecuación del Sistema es importante que se haga referencia a: Cambios en la política medioambiental. El grado de cumplimiento de los objetivos y metas. Otros cambios en el sistema. Los resultado de las auditorias. Las circunstancias cambiantes. No conformidades, Acciones Correctoras y Preventivas. Otra información relevante de interés. Es necesario documentar las conclusiones extraídas del Sistema así como dejar registro de la Revisión. La frecuencia de la Revisión por la Dirección debe ser coherente con otros ciclos del Sistema. Una vez descritos los elementos de la norma, conviene señalar que la implantación del sistema debe realizarse de forma progresiva. Es mejor crear una base sólida para poco a poco construir sobre ella, que intentar que el sistema lo cubra todo desde el comienzo. 1731