Tema 5. Los espacios informativos y el lenguaje Katholische Universität Eichstätt-Ingolstadt. KU. Periodismo online. Medios Audiovisuales. 1
ÍNDICE Tema 5. Los espacios informativos y el lenguaje Introducción Los espacios informativos o El boletín de noticias En cuanto a la presentación del boletín En cuanto al ritmo del boletín o Informativos principales: los diarios El lenguaje radiofónico Tipos de recursos Algunas cuestiones prácticas 2
Introducción Las peculiaridades del medio radiofónico condicionan el lenguaje en este medio y la expresión hablada. El periodista radiofónico debe ser consciente de la fugacidad del mensaje y de que el oyente no puede volver a atrás en lo escuchado, no puede comprobar si ha entendido bien la información. Solo puede el mensaje en el momento, orden y ritmo que el locutor establece. Para ello, se tendrán en cuenta siempre las características básicas del lenguaje hablado ya comentadas en el tema anterior: claridad: se trata de hacer clara y asequible el lenguaje, de forma que no se requiera tiempo en su descodificación (comprensión). Lo concreto, en forma activa y presente. La brevedad, Las exigencias del tiempo, obligan a utilizar frases breves que aseguren una comprensión rápida y eficaz. El periodista radiofónico está obligado a conocer el lenguaje y sus normas la ortografía, la morfología, la sintaxis, así como poseer un vocabulario rico y fluido. Debe saber escribir, describir, narrar, y debe adaptar su narración al ritmo, cadencia y entonación necesarios cada momento, todo ello unido a la expresión personal. Así, captar la atención del oyente y el interés del público -y además hacerlo con un lenguaje adecuado al medio y al mensaje en este medio-, debe ser la principal exigencia del periodista. 3
Los espacios informativos La programación informativa se presenta en los denominados los boletines horario, así como en los diarios informativos. Imágenes de la cadena de radio BR München (Radio pública de Baviera). Foto: Raquel Cano El boletín de noticias El boletín resume las noticias más importantes, los hechos de última hora y ofrece avances de los aspectos más noticiosos que son de interés general. Por ello, las noticias más importantes deben aparecer en todos los boletines. El boletín informa de aquellos hechos más significativos ocurridos desde el anterior servicio informativo, amplía datos de las noticias flash, recuerda los acontecimientos 4
que están ocurriendo en el momento de la emisión y los que previsiblemente se producirán hasta el siguiente boletín informativo. Como ya sabemos, el flash informativo es una información breve y urgente (en ocasiones transmitida por una agencia) que emite la emisora de radio. Se produce en un espacio de tiempo muy breve (más o menos un minuto), el locutor hace un avance de lo que posteriormente será tratado con mayor profundidad. La prioridad informativa, la inmediatez, el rigor, la pluralidad y el estilo comunicativo son los rasgos clave del boletín de noticias. La estructura del boletín depende de la capacidad de despliegue de medios, el grado de complejidad técnica y el estilo de redacción de los profesionales. En función de la capacidad técnica, algunos ofrecen únicamente una selección de noticias ofrecidas y leídas desde el estudio central. Otros, ofrecen conexiones (con el exterior o con emisoras territoriales), para dar la noticia desde el lugar de los hechos. También, se incluyen testimonios con el objetivo de enriquecer y dar veracidad a la noticia. En este caso, debe tenerse en cuenta la importancia del testimonio en sí, pero también su calidad sonora, porque el oyente debe entender siempre y en todo momento lo que dice cada una de las personas que intervienen. Por tanto, las intervenciones deben ser radiofónicamente aceptables y deben durar el tiempo que sea necesario para que el mensaje desarrolle una idea de principio a fin y sea lógico. En cuanto a la presentación del boletín Aunque existen varios modelos, el más común se basa en la figura de un locutor principal, encargado de suministrar nuevos datos de cada noticia, por medio de la lectura de entradillas, transiciones o continuidades o de leer la noticia completa. 5
El locutor principal puede apoyarse en otro locutor en el estudio para la lectura de aquellas informaciones con más desarrollo. El resto, serán los periodistas de las delegaciones de la emisora, los periodistas que se encuentren a esa hora cubriendo determinadas informaciones o los corresponsales en el extranjero. En cualquiera de los casos, es el conductor principal es quien debe presentar el último hecho y el resto de periodistas ampliarán y desarrollarán más datos de los hechos ya dados por el conductor principal. Para ello, lo normal es establecer transiciones verbales entre noticias. Son las llamadas transiciones, continuidades o entradillas, nombres que reciben las frases o párrafos que actúan como lazos o puentes entre una información concluida y la que sigue. Es la manera de encadenar las noticias entre sí. Ello ofrece a la locución más naturalidad. Sin embargo, este tipo de transición o continuidad, para vincular una noticia con la siguiente, sólo es posible cuando existen uno o más nexos entre ambas noticias, porque de no ser así, estaríamos ante una continuidad forzada. En cuanto al ritmo del boletín La dimensión y extensión de cada noticia contribuye a dar un ritmo concreto al boletín. Como sabemos, la actualidad es la que debe determinar la pauta del boletín, pero ésta debe presentarse del modo más atractivo y radiofónico posible. De esta forma, por ejemplo, encadenar tres o cuatro noticias de unos cincuenta segundos -sin cortes de voz y leídas por una misma persona- puede obligar al oyente a realizar un verdadero esfuerzo de atención. Informativos principales: los diarios El informativo principal desarrolla las noticias más importantes avanzadas ya en los boletines. Tiene, por tanto, una duración más duración amplia que los boletines. 6
El objetivo es captar el interés del oyente combinando todos los géneros radiofónicos y todos los recursos disponibles. La importancia de la noticia no significa una mayor longitud de las piezas. Su duración debe ajustarse siempre a una propuesta informativa atractiva, ágil y veraz. Cada noticia tendrá tantas piezas como sean necesarias para subrayar las claves de la noticia, pero se deben evitar piezas demasiado largas, ya que el objetivo es atraer el interés del oyente y mantener un buen ritmo en el espacio informativo. El lenguaje en los textos informativos de la radio En la redacción del periodista radiofónico debe primar el interés general y lo comprensible. Se pueden escribir noticias sumamente correctas pero poco radiofónicas, por no haber sido pensadas según el lenguaje propio de este medio. Insertar un corte de voz o una ráfaga en uno u otro momento puede determinar que el boletín resulte más o menos ágil. La elaboración de textos sobre noticias y hechos para una emisora deberá ajustarse siempre a las características del lenguaje radiofónico, pero sin olvidar las normas comunes sobre el lenguaje. Tipos de recursos La actualidad en los servicios informativos está en ocasiones delimitada por aquellos recursos que remarcan dicha actualidad de una emisora de radio. Podemos establecer tres grandes grupos de recursos: recursos redaccionales, técnicos y de programación. Recursos redaccionales 7
La utilización del verbo en tiempo presente, así como la el uso de palabras y frases que denotan actualidad, como por ejemplo, "en estos momentos...", "al inicio de esta transmisión...", etc. Recursos técnicos El uso del teléfono, las grabaciones en el lugar de los hechos y las unidades móviles. Recursos de programación Se trata de la inclusión de nuevos aspectos de una noticia ofrecida en anteriores servicios informativos. Hay que ofrecer nuevos datos, nuevos ángulos, repercusiones, trascendencia de un hecho, durante todo del día. En cuanto a la redacción periodística radiofónica hay que añadir que no debe leerse un texto en radio si previamente no se ha reelaborado. No sólo para darle un estilo propio, sino porque en muchas ocasiones puede dar lugar a un error o a la deficiente recepción por parte del oyente. 8