CONCLUSIONES Se trabajó en una población en transición rural-urbano, con familias de nivel socioeconómico bajo, localizada en el área metropolitana de la ciudad de Hermosillo y que en las últimas décadas ha sufrido un elevado proceso de urbanización. Debido a diversas causas, entre ellas la falta de apoyo para el campo ha provocado una mayor urbanización de las poblaciones cercanas a grandes centros de población que antes se dedicaban a la agricultura, como es el caso de San Pedro. Dentro de este proceso se ha dado una alimentación no ligada a la propia producción de alimentos, sino que se ha visto modificada a favor de productos industrializados en donde predominan las dietas con alta en densidad energética y bajas en fibra, así como un elevado consumo de bebidas con gran aporte energético, en donde la publicidad ha jugado un papel muy importante para la difusión de este tipo de productos. A su vez, dentro de este proceso de modernización, en donde la urbanización de la población, el crecimiento económico, los cambios en la tecnología para la producción de bienes y servicios así como los actuales estilos de recreación han provocado un mayor sedentarismo dentro de la población, uno de los principales factores predisponentes del sobrepeso y la obesidad en la población tanto infantil como adulta. Este proceso lo hemos constatado en esta población de estudio, en donde encontramos una alta prevalencia de sobre peso y obesidad en la población infantil, incluso más alta que la reportada a nivel estatal en un estudio reciente. Dentro de los alimentos más consumidos por los niños fueron alimentos altamente energéticos, como las bebidas gaseosas, las frituras, entre otras; y también estuvieron presentes como parte de las preferencias de consumo de los niños. Este tipo de alimentos se relacionan con el desarrollo de sobrepeso y obesidad en la infancia y con el posterior desarrollo en la edad adulta de problemas cardiovasculares. 83
En general, los niños y niñas de este poblado tienen una gran facilidad de obtener este tipo de productos tanto por su precio como por la disponibilidad de los mismos. En la localidad se encuentran una gran variedad de comercios desde supermercados, tiendas de auto servicio, hasta pequeños abarrotes en donde se expenden estos productos. En relación al consumo de alimentos durante el día, en las comidas principales los cereales básicamente fueron los más consumidos, principalmente las tortillas de harina y las de maíz, ya que había un gran consumo de tacos de frijol y de huevo con tortilla. En la mañana y en la noche, los cereales de desayuno también tenían un alto consumo. La presencia de bebidas gaseosas la encontramos en todas las comidas realizadas durante el día; únicamente en el desayuno fueron los jugos comerciales los más consumidos, pero aún así, algunos niños y niñas reportaron consumir bebidas gaseosas a esta hora del día. La escuela primaria donde realizamos el estudio cuenta con el Programa de Desayunos Escolares y durante ese tiempo se empezaron a dar los desayunos calientes, que consistían de huevo con tortilla, hot cakes, etc y es por ello que este tipo de productos está elevado en el desayuno. También los lácteos en esta comida fueron muy consumidos debido a la leche con sabores que les otorgaba este Programa Gubernamental. En sus hogares, el consumo de leche era mínimo, las bebidas principales eran las gaseosas y las tipo kool aid o zuko. Durante los horarios entre comidas, los alimentos chatarra, básicamente las frituras, y las bebidas gaseosas fueron los productos más consumidos por esta población. Otro producto de gran consumo fueron las salsas picantes y tipo chamoy que le añadían a las frituras. Algunos de los niños mencionaron tener problemas de gastritis y por prescripción médica ya no podían consumir productos de este tipo. 84
En todos los hogares de los niños encuestados había al menos un aparato de televisión y los niños y niñas la veían en un amplio horario durante el día e incluso cuando realizaban alguna comida. En cuanto al número de horas de televisión consumidas por esta población fue elevado y encontramos que las mujeres estuvieron más expuestas al aparato de televisión. El número de horas frente al televisor es un factor de riesgo para el desarrollo de sobrepeso y obesidad en la población infantil, ya que aumenta el sedentarismo y a la vez, están más expuestos a los anuncios publicitarios, así como a consumir alimentos tipo chatarra mientras están viendo televisión. En esta población, las niñas mencionaron que les gusta más ver la televisión que salir a jugar; en el caso de los niños fue diferente, preferían jugar en la calle con sus amigos. En torno a la imagen corporal emitida por la televisión tuvo más impacto en las niñas, sobre todo la delgadez y la belleza física, ya que manifestaron que les gustaría ser alguna actriz porque era bonita y se veía bien: por lo general, la actriz que querían ser era la más popular de la telenovela infantil del momento. Mientras que en el caso de los niños, a la mayoría no les interesaba la manera en cómo se veían físicamente; ellos estaban más interesados por adquirir la fuerza o un poder especial de algún personaje de ficción de las caricaturas. Con respecto a la publicidad emitida por los canales de televisión más vistos por los niños de este estudio fueron los relacionados con alimentos, en especial los alimentos chatarra y las bebidas. Dentro de los primeros, los dulces y chocolates, las galletas y panes y las frituras fueron los más publicitados. Dentro de las bebidas, las gaseosas fueron las que más mensajes publicitarios tuvieron seguidos de los jugos de fruta. Con esto podemos concluir que existe una gran influencia en lo que respecta a los anuncios publicitarios y el tipo de alimentos que consume esta población infantil así como la transmisión de una imagen corporal, sobre todo en las niñas. Las bebidas gaseosas, al igual 85
que las frituras, fueron los productos que más se publicitaron por televisión dentro de los horarios que los niños reportaron ver televisión y fueron los productos que los niños reportaron que consumían influenciados por los anuncios publicitarios por televisión. En cuanto a la mercadotecnia de estos productos, la envoltura, el sabor, el precio, lo novedoso del producto y los regalos que traen en cada uno de los paquetes hace que sean más atractivos y más disponibles para esta población infantil. Estas dos últimas estrategias fueron las más exitosas dentro de esta población, ya que compraban el producto para obtener el regalo; así como también, buscaban lo más novedoso del mercado en cuestión de comida chatarra y bebida gaseosa, principalmente. Con este trabajo podemos decir que la televisión es un medio de comunicación muy popular dentro de la población infantil de este poblado y que algunos de sus hábitos alimentarios actuales se ven influenciados por la publicidad emitida por este medio. Este tipo de población está cada vez más inserta en la sociedad de consumo, en donde la publicidad es parte esencial de la misma. Actualmente, los medios masivos de comunicación forman parte de nuestra vida diaria y estamos en contacto con ellos en cualquier circunstancia o evento cotidiano. Es a través de ellos que recibimos continuamente mensajes publicitarios y estrategias de marketing sobre todo tipo de bienes y servicios con la finalidad de convencernos de su utilización y consumo. Como integrantes de esta sociedad, es muy difícil mantenerse al margen de la publicidad, ya que es una de las estrategias de la sociedad de consumo actual, para difundir sus bienes de consumo. Por lo que es importante tener un buen conocimiento en cuanto a alimentación y salud se refiere, para no caer en excesos o deficiencias que pudieran provocar la influencia de la publicidad y la mercadotecnia en nuestras vidas. En este sentido, nos hace pensar que la televisión, a través de la publicidad y de su programación se podría utilizar como un medio para difundir y fomentar una alimentación 86
saludable en la población en general; pero sobre todo, en la población infantil. Es en los primeros años de vida en donde se adquieren buenos hábitos de vida que pueden perdurar en la edad adulta. Además en los niños la televisión forma parte de sus vidas y el tiempo que dedican a esta actividad es muy elevado, por lo que se podría utilizar con buen resultado. De esta forma se pudiera contribuir a ofrecer alternativas al problema de la obesidad en la infancia, que se ha convertido en un grave problema de salud pública por las dimensiones que ha adquirido en los últimos años en nuestro país y nuestra región. 87