UNIVERSIDAD VERACRUZANA

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1 UNIVERSIDAD VERACRUZANA FACULTAD DE BIOLOGÍA - XALAPA ICONOGRAFÍA DE MAMÍFEROS EN PIEZAS PREHISPÁNICAS DEL MUSEO DE ANTROPOLOGÍA DE XALAPA TESIS TRABAJO DE EXPERIENCIA RECEPCIONAL PRESENTA: CECILIA ODETTE CARRAL MURRIETA CO-DIRECTORES: DRA. CHANTAL HUCKERT M. en C. ALVAR GONZÁLEZ CHRISTEN XALAPA, VER. FEBRERO DE 2015

2 AGRADECIMIENTOS Este trabajo no hubiera podido concretarse sin la ayuda de la Dra. Chantal Huckert, muchas gracias por sus enseñanzas, así como su paciencia y amabilidad, que me ha brindado en todo momento. Agradezco al M. en C. Alvar González por el tiempo dedicado y por todos los consejos que me dio, los cuales permitieron mejorar mi trabajo; al Dr. Emilio Suárez y al Dr. Luis Pacheco-Cobos, quienes se interesaron siempre en mi tema y me apoyaron atentamente cada vez que tenía una duda; así como a la directora del Museo de Antropología de Xalapa, la Dra. Maura Ordóñez, y al personal del museo, por todas las facilidades otorgadas. Por otro lado, agradezco a todas aquellas personas que de una u otra forma me incentivaron a continuar trabajando en este hermoso tema, principalmente a mis padres, a mi hermano, a mis abuelos Armando, Beta y Rosa; a todos mis demás familiares que me apoyaron con su cariño, a mis viejos y nuevos amigos y a Bora.

3 No desprecies las tradiciones que nos llegan de antaño; ocurre a menudo que las viejas guardan en la memoria cosas que los sabios de otro tiempo necesitaban saber J. R. R. Tolkien A mis padres, que siempre, aunque no entiendan que es exactamente lo que hago, me apoyan, me tienen paciencia, me aman y están orgullosos de mí.

4 RESUMEN: La presencia de mamíferos se encuentra representada en un número considerable dentro del arte precolombino y mostraron una notable importancia en el desarrollo cultural de las antiguas civilizaciones del Golfo de México. En este sentido, el presente trabajo se enfocó en el estudio de la iconografía prehispánica de mamíferos del Estado de Veracruz, tratado desde la óptica de la Biología. La interdisciplinariedad en los estudios del arte prehispánico es importante para esclarecer interrogantes que resultan difíciles de responder por una sola área del saber. En este contexto, la Biología resulta útil y necesaria debido a la diversidad de información que puede otorgar, relacionada, primordialmente, a los hábitats y hábitos de las especies representadas, así como su taxonomía; a su vez, puede llegar a permitir la reconstrucción de las antiguas áreas de distribución de algunas especies del país. Este trabajo se llevó a cabo revisando material en custodia (exhibición y bodega) del Museo de Antropología de Xalapa de la Universidad Veracruzana (MAX); producto de éste análisis multidisciplinario se realizó un catálogo que aporta al conocimiento de los mamíferos representados en la Costa del Golfo. 1

5 ÍNDICE 1. INTRODUCCIÓN 3 2. ANTECEDENTES Representaciones iconográficas de la fauna en México y Veracruz Los mamíferos de México y Veracruz. Simbolismos en el arte prehispánico OBJETIVOS Objetivo General Objetivos Particulares HIPÓTESIS MATERIALES Y MÉTODOS Área y sitios de estudio Método de Análisis Clave dicotómica para identificar a los mamíferos encontrados en el arte prehispánico RESULTADOS Representaciones de mamíferos más abundantes del arte prehispánico hallado en el MAX Número de representaciones de mamíferos por sitio arqueológico Catálogo de representaciones de mamíferos en el arte prehispánico del Museo de Antropología de Xalapa DISCUSIÓN CONCLUSIÓN BIBLIOGRAFÍA 172 2

6 1. INTRODUCCIÓN La iconografía es la rama de la Historia del Arte que se ocupa de los significados de las obras de arte (Panofsky, 1972); un ícono es la configuración plástica escogida para la representación de un tema a comunicar, el cual absorbe al motivo o tema y lo reemplaza simbólicamente (Plazas, 2007). Para Panofsky (1972) el estudio iconográfico cuenta con tres niveles de reconocimiento del arte, en el primero de ellos, denominado como contenido temático natural o primario, la identificación de las formas puras y fáciles de reconocer corresponde a una descripción pre-iconográfica del arte. El contenido secundario o convencional, segundo de estos niveles, se adentra en el estudio iconográfico formal y se caracteriza por la relación de los motivos artísticos y sus combinaciones con temas o conceptos concretos. El último de estos niveles o fases, denominado significado intrínseco o contenido corresponde con los elementos socioculturales en los que el artista crea su obra, influyendo en la misma. Puesto que las representaciones artísticas pueden no mostrar aspectos evidentes en cuanto a su significado resulta complejo el reconocimiento de los géneros u especies animales que se empleaban como modelo e inspiración para las mismas, ya que sus atributos tienden a no ser una descripción del mismo sino una representación de significados de orden cultural y social en los que se tendía a seleccionar y privilegiar rasgos que de manera directa repercutían en los propósitos de la composición (Saunders, 1994; Navarijo, 2011). En este sentido, la iconografía prehispánica animal se caracteriza por figuras que aparecen completas o con algunos de sus elementos, como las garras, la cabeza o las orejas (González, 2001), elementos conocidos como pars pro toto, en donde la parte funciona por el todo (Oxford Dictionaries, 2015). Además, el paso del tiempo, la mutilación y la presencia abundante de zoormorfos antropomorfizados son factores que dificultan el discernimiento taxonómico preciso de las mismas. Las obras de arte rescatadas de saqueos sufren vicisitudes debido al manejo sin cuidado de personas que no conocen su valor; para Medellín-Zenil (1987) existen lugares conocidos como vertederos, en donde se encuentran piezas con este tipo de características. Aunado a la problemática del estudio iconográfico, existen escasos antecedentes interdisciplinarios dentro de este ámbito, tal como lo expresa Calte (2010): son pocos los 3

7 estudios que relacionan a la Biología con la Antropología y la Arqueología, a pesar de que existen amplitud de estudios enfocados en relacionar grupos zoológicos con las antiguas culturas prehispánicas. La importancia de la inserción de la Biología en esta clase de estudios radica en que permite discernir de forma más certera los géneros o especies de los diversos individuos representados, por medio del análisis de diversos factores, ya sean las características fenotípicas presentes en las piezas (dentición, orejas, cabeza, ojos, posturas, pelaje, entre otros) o relacionando aspectos como los hábitos, la ecología y la distribución de los grupos taxonómicos con las representaciones prehispánicas, asociando también la información brindada por la arqueología, como el contexto cultural de las piezas examinadas, tal y como se observa en la obra de Seler (1909). Finalmente, cada uno de los datos obtenidos es útil para determinar la identidad inspiradora de las representaciones, así como su origen, y permiten situarse en alguno de los niveles de interpretación iconográfica propuestos por Panofsky en Para la arqueología, el reconocimiento de las representaciones iconográficas de la naturaleza tiene valor porque al conocer la identidad biológica de las especies se cuentan con más cimientos para el desarrollo de nuevas interpretaciones iconográficas (Navarijo, 2011). Para Morales (2010), es posible utilizar el estudio biológico de las especies para entender la manera en la que fueron aprovechadas, siempre y cuando se tenga en cuenta el hecho de que los habitantes prehispánicos no observaban a la naturaleza como lo hace el hombre moderno, sino que la conocían de la manera concreta en que fue dotada de significado. El estudio iconográfico, enfocado en la Clase de los mamíferos, es un perfecto parteaguas para entender una fracción importante de la relaciones hombre-naturaleza, permitiendo también comparar las diversas formas de representación de las culturas del país y del mundo. Es debido a esta necesidad de multidisciplinariedad, que el presente estudio se avocó al análisis arqueobiológico de piezas prehispánicas, que derivó en un catálogo de las representaciones iconográficas de los mamíferos de Veracruz, el cual se compone de apartados de los grupos taxonómicos encontrados y, dentro de cada apartado, fueron anexadas fichas para cada pieza. 4

8 2. ANTECEDENTES 2.1. Representaciones iconográficas de la fauna en México y Veracruz. En el México prehispánico no existía ningún tratado relacionado con la botánica y la zoología que expusiera de manera formalizada y jerarquizada la nomenclatura de las diversas especies presentes (Palmeri, 2001), al menos ninguno que haya sobrevivido hasta el presente. Por lo que durante el periodo de la conquista se mostró particular interés hacia la descripción de la flora y fauna existente, principalmente por parte de los cronistas Gonzalo Fernández de Oviedo, quien escribió Historia general y natural de las indias, editada en 1535; José de Acosta, autor de La historia natural y moral de las indias publicada en 1590; Francisco Hernández, que entre 1574 y 1577 ordenó la información que había obtenido en sus viajes, condensándolos en su obra más famosa: Historia natural de Nueva España ; y Fray Bernardino de Sahagún, quien dedicó algunos capítulos de su Historia general de las cosas de la Nueva España o Códice Florentino (escrito entre 1547 y 1577) para describir la fauna del recién descubierto Nuevo Mundo (Barbero, 1999; Valcárcel-Martínez, 1989; Pardo-Tomás, s.f.), así como Martín de la Cruz, médico autóctono que en 1552 escribió Libellus de Medicinalibus Indorum Herbis, mejor conocido como Códice de la Cruz-Badiano (Turner, 2007). Estos autores, al ordenar el conocimiento de la flora y fauna de México, fungieron también como naturalistas. Según Restall (2004), el aporte de indígenas y frailes en estos textos dieron lugar a un extraordinario corpus literario. Dentro de este corpus se pueden encontrar crónicas, dibujos y descripciones, entre otra gran cantidad de escritos que iban, en su mayoría, dirigidos a la corona española y en los que confluían los estilos del Viejo y el Nuevo Mundo, mezclándose las tendencias europeas con la tradición oral, el arte y los libros ilustrados (códices) de los antiguos pueblos mexicanos, en donde quedaban codificados los profundos conocimientos que éstos tenían de su entorno. El interés hacia las formas de representación prehispánicas de la naturaleza continuó y, durante el siglo pasado y presente, múltiples estudios relacionados con el tema han sido llevados a cabo. Una de las fuentes más citadas es la de representaciones iconográficas del mexicanista 5

9 alemán Eduard Seler (1909), cuyo compendio y análisis de representaciones de animales de manuscritos mexicas y mayas permiten discernir, de manera general, géneros y especies a partir de características muy específicas. Otro estudio de esta índole, abordado desde una perspectiva biológica, fue llevado a cabo por Navarijo (2011), en el que identifica la diversidad ornitológica en la iconografía mural de Teotihuacán. Asimismo, en el texto Urnas de Oaxaca, de los arqueólogos Caso y Bernal (1952), se trata el tema de las representaciones de quirópteros en el arte zapoteco de Monte Albán. Existen, además, trabajos en los que se examina la iconografía y simbología de grupos concretos de mamíferos, principalmente los felinos, entre los que se encuentran el de González (2001) y los ensayos contenidos en el libro Iconografía mexicana II. El cielo, la tierra y el inframundo: águila, serpiente y jaguar, coordinado por Barba (2000); en los que se explica la importancia de los íconos felinos para los pueblos prehispánicos y las diversas connotaciones simbólicas que se les atribuían. Algunos artículos contenidos en los diversos números de la revista Arqueología mexicana ofrecen información significativa respecto a varias especies de mamíferos y la importancia que les conferían los nativos precolombinos. Entre ellos destacan los de López- Austin (1999), Ladrón de Guevara (2006) y Robles (1999). A nivel estatal, particularmente por parte de la Facultad de Arqueología de la UV, se han realizado dos catálogos con el objetivo de discernir qué mamíferos se encuentran representados en piezas prehispánicas en custodia del Museo de Antropología de Xalapa: el de Calte (2010) y el de Pérez-Chávez (2013), que se avoca exclusivamente a piezas de cánidos. En el campo de la biología se encuentran guías que describen la mastofauna del país y del Estado de Veracruz, que proveen información acerca de los diversos órdenes existentes, como su distribución, hábitats y características fenotípicas; entre ellos se encuentra el libro Los mamíferos de México de Villa y Cervantes (2003); una guía ilustrada de mamíferos de Veracruz, de González-Christen (2010), en donde se confirma la existencia de especies de mamíferos terrestres; la obra de Ceballos y Oliva (2005), que describe a todas las especies de mamíferos de México y su distribución; el Manual para el rastreo de mamíferos silvestres de México de Aranda-Sánchez (2012); así como información referente a las provincias bióticas del país y los mamíferos que las habitan de Morrone (2005). 6

10 2.2. Los mamíferos de México y Veracruz. Simbolismos en el arte prehispánico. La diversidad ecológica de la costa del Golfo de México jugó un papel importante para los numerosos grupos étnicos de esa zona, para quienes la relación con la naturaleza era sumamente importante y estrecha, siendo plasmada en todas sus manifestaciones artísticas (Ladrón de Guevara, 2006; Pellecer, 2004). En la cosmovisión mesoamericana los animales jugaban un papel en relación a lo divino y lo sobrenatural, como consta en las mitologías (González, 2001). Al ser tan significativos, se desarrollaron varios tipos de expresión artística inspirados en estos; Sánchez (2000) menciona algunos relacionados a los felinos, comenzando por las pinturas rupestres y posteriormente en la cerámica, lo arquitectónico y monumental, los metales y piedras preciosas, los textiles, la pintura mural y los códices. También se utilizaban ampliamente el material óseo y las conchas, como consta en las excavaciones arqueológicas. La iconografía de los mamíferos derivaba principalmente de la observación de sus conductas, hábitos, distribución espacial o conocimiento de su existencia, así como sus múltiples usos. El historiador López-Austin (1998), respecto al conocimiento prehispánico de la naturaleza, señala que siempre será la prejuiciada concepción del observador la que descubra las costumbres de los animales, y será la informal etología la que guíe la inspiración de los hombres cuando piensen en la naturaleza y origen de las leyes del mundo, remarcando la estrecha relación de los pobladores con ésta, siendo observadores y participantes de ella, asimilando las actitudes y características fenotípicas de las especies vivientes dentro de su cosmovisión. Es por esto que a los animales se les relacionaba con muchas actividades de manera directa e indirecta, como la agricultura, el ocio, la ganadería, la caza, etc. Asimismo servían como tributos, pieles para los guerreros y se ofrecían en sacrificios. Formaban parte de los calendarios nahua y maya; de los veinte días del calendario nahua, diez eran representados por animales, siendo cinco de ellos mamíferos: jaguar, venado, conejo, perro y mono (González, 2001). En México se distribuyen el jaguar (Panthera onca), el puma (Puma concolor), el ocelote (Leopardus pardalis), el jaguarundi (Puma yagouaroundi), el gato montés (Lynx rufus) y el margay (Leopardus wieddi) (Ceballos et Oliva, 2005). Los felinos fueron ampliamente utilizados dentro de la tradición iconográfica; en el arte Olmeca el ícono felino se representó con una nariz 7

11 plana y la comisura de los labios hacia abajo (Stirling, 1943), en sitios como San Lorenzo y El Azuzul, en Veracruz (Saunders, 2005). Sus hábitos nocturnos posiblemente contribuyeron a que se les relacionara a la oscuridad, al sol poniente y a las cuevas (entes zoomorfizados y deificados) que concebían la vegetación, por lo que también se le vinculaba a la fertilidad de la tierra (Sánchez, 2000). Por estas connotaciones, para los Olmecas la deidad-jaguar era la rectora de la agricultura, de la tierra y de la lluvia (Piña-Chan y Covarrubias, 1964). Entre los cánidos se encontraban diversas razas de perros (xoloitzcuintli, itzcuintli, tlalchichi y perro maya), así como lobos (Canis lupus baileyi), coyotes (Canis latrans) y zorras (Urocyon cinereoargenteus, Vulpes macrotis); además, se tiene la comprobada existencia de dos híbridos uno de perro-coyote y otro de perro-lobo o loberro (Pérez-Chávez, 2013), los últimos posiblemente eran manipulados por los teotihuacanos en un afán de crear una especie que portara la sangre del cánido silvestre, apreciado, junto con los coyotes, en la señalética militar (Pérez- Chávez, 2013; Boletín INAH, 2010). Este tipo de esqueletos híbridos han sido hallados, además de Teotihuacán, en el Templo Mayor de Tenochtitlán (Blanco et al., 2006). Los perros se relacionaban al fuego, particularmente el que cae del cielo, el relámpago, por lo que se le conocía como el animal relámpago (Seler, 1909); probablemente el rasgo más valorado por los habitantes prehispánicos era su lealtad y debido a esta característica conductual se desarrolló la creencia de que con la ayuda de estos se podían afrentar los obstáculos encontrados en el viaje a través del inframundo, por lo que se les quemaba junto a sus difuntos dueños para que acompañaran a éstos (Sahagún, 1982); a manera de animal mitológico los mexicas lo llamaban Xólotl, regente del decimoséptimo signo de los días, olin, movimiento (Seler, 1909). Otras importantes familias de carnívoros terrestres en el país pertenecen a las familias a) Mephitidae: Mephitis sp., Conepatus sp., Spilogale sp. (zorrillos); b) Procyonidae, con los géneros Bassariscus sp. (cacomixtle), Potos sp. (martucha, mico de noche), Procyon sp. (mapache) y Nasua sp. (coatí), c) Mustelidae, géneros Eira sp. (viejo de monte), Galictis sp.(grisón), Lontra sp. (nutria, perro de agua), Mustela sp. (comadrejas) y Taxidae sp. (tlacoyote); y d) Ursidae, con el género Ursus sp. (osos). Según Seler (1909), en la iconografía prehispánica aparecen representaciones de mapaches y zorrillos, los primeros caracterizándose por sus manos y pies como de un humano. Además de los carnívoros; resultan importantes los primates pertenecientes a los géneros Alouatta sp. (mono aullador) y Ateles sp. (mono araña), quienes se asociaban a las artes, al canto, 8

12 al baile, a la escritura, al cálculo y a la escultura (Miller y Taube, 1993) y, con base en la mitología nahua, Ateles sp. se relacionaba al viento y, por tanto, a Ehécatl-Quetzalcóatl y en su aspecto ave-serpiente como serpiente emplumada (Seler, 1909). Los murciélagos (Chiroptera) se dividen en cinco familias neotropicales (Emballonuridae, Natalidae, Thyropteridae, Noctilionidae y Phyllostomidae) y otras tres neárticas (Vespertilionidae, Mormoopidae y Molossidae), que se distribuyen entre ambientes fríos y tropicales. Los quirópteros se asociaban a las tinieblas debido a sus hábitos nocturnos y a que habitan en zonas densas y oscuras, como las cuevas. También forman parte de la iconografía los artiodáctilos, como los jabalíes (Pecari tajacu y Tayassu pecari), pertenecientes a la familia Tayassuidae, y los Cérvidos, principalmente el género Odocoileus sp., considerados como el ejército de las estrellas. En México también se distribuyen el temazate (Mazama sp.), el berrendo (Antilocapra sp.), el carnero (Ovis sp.) y el bisonte (Bison sp.). Resulta interesante mencionar que los cronistas recién llegados al Nuevo Mundo, para nombrar plantas y animales, recurrían a modelos europeos morfológicamente similares a los organismos que descubrían, tal es el caso del jabalí occidental, que se utilizaba como patrón para ilustrar al pecarí americano (Robles, 1999), lo que facilitaba su designación taxonómica. Entre los conejos y las liebres (Lagomorpha) de México se encuentran los géneros Romerolagus sp. (teporingo), Lepus sp. (liebres) y Sylvilagus sp. (conejos), quienes aparecen recurrentemente en el arte prehispánico y que se asociaban a la luna y a los dioses del pulque. En el país existe diversidad de marsupiales, Caluromys sp. (tlacuache dorado), Chironectes sp. (tlacuache acuático), Marmosa (ratón tlacuache), Metachirus sp. (tlacuache cuatro ojos), Tlacuatzin sp. (tlacuachín) y Philander sp. (tlacuache moro), todos sureños, y Didelphis (tlacuache, zarigüeya), que presenta una distribución que abarca tanto el norte como el sur del país. El tlacuache aparece en varios mitos, siendo el más recurrente, sin duda, el del robo del fuego (López-Austin, 1999), en el cual se hace referencia a su característica cola sin pelos, que para los antiguos nativos fue quemada durante el transporte del mismo. Los armadillos (Dasypus novemcinctus, Cabassous centralis) se distribuyen principalmente en el trópico y se representaban como un conejo con armadura (Seler, 1909). En náhuatl se le llama ayotochtli, nombre asociado a las tortugas (ayotl), al agua (atl) y a los conejos (tochtli). Dentro del superorden de los armadillos, Xenartha, se encuentra el orden Pilosa, el cual abarca al oso hormiguero (Tamandua mexicana). 9

13 En México también se distribuyen diversidad de especies pertenecientes a los órdenes Rodentia (ardillas, ceretes, ratones, tepezcuintle, tuzas), Soricomorpha (musarañas) y Perissodactyla (tapir o anteburro, Tapirus bairdii). El Estado de Veracruz se ha dividido en 3 áreas culturales que tuvieron, cada una, particular forma de representar a los mamíferos, éstas son la Olmeca (1200 a.c d. C), las Culturas del Centro (1200 a. C d.c.) y la Huasteca (800 a. C d. C) (Ortiz-Ceballos, 1994). El Estado, en términos biogeográficos, se incluye en 4 provincias bióticas (centros de distribución que comprenden agrupaciones de flora y fauna, propias de cada una), que se caracterizan por la presencia de ciertos grupos de mamíferos representativos: la Provincia de Tamaulipas, que abarca el extremo norte del Estado; Provincia de la Sierra Madre Oriental, que se encuentra encima de los 1500 m de altitud; Provincia del Eje Volcánico Transmexicano, la cual abarca este sistema, y la Provincia del Golfo de México (Morrone, 2005). La gran diversidad de mamíferos en México, particularmente de la Costa del Golfo, se origina por la posición geográfica intermedia entre las faunas de las regiones neotropicales y las del norte o neárticos (Villa y Cervantes, 2003). En el país, existen un total de 504 especies nativas y tres introducidas, que se clasifican en 188 géneros (Arita y Ceballos, 1997); González- Christen (2010), confirma la existencia de 192 especies de mamíferos terrestres en Veracruz. Es debido a esta gran riqueza de mamíferos que los habitantes mesoamericanos tuvieron contacto con las especies presentes y las integraron a su cultura. 3. OBJETIVOS 3.1. Objetivo General Indicar qué grupos de mamíferos se encuentran en la iconografía de piezas prehispánicas de salas y bodega del MAX. 10

14 3.2. Objetivos Particulares Realizar un registro adecuado de las especies de mamíferos del acervo del MAX que se encuentran representadas en barro, piedra y obsidiana, procedentes de salas y bodegas del museo, por medio de la realización de un catálogo. Describir las características fenotípicas, así como los hábitats y la distribución de los mamíferos representados en las piezas seleccionadas, analizándolas desde un punto de vista arqueobiológico. Contrastar la distribución de las familias, géneros o especies en la actualidad con las regiones y sus sitios arqueológicos en donde se encontraron las piezas seleccionadas. Indicar a nivel género o especie qué grupos de mamíferos de México se encuentran representados en el arte precolombino de la Costa del Golfo presente en el MAX. 4. HIPÓTESIS Los elementos morfológicos encontrados en las representaciones prehispánicas de mamíferos en custodia del MAX permitirán identificar concretamente los géneros o especies de los individuos representados. 5. MATERIALES Y MÉTODOS 5.1. Área y sitios de estudio Se analizaron piezas prehispánicas de las culturas del Centro-Sur, Norte y Huasteca del Estado de Veracruz (Mapa 1). 11

15 Mapa 1. Zonas culturales del Estado de Veracruz. Mapa: MAX. La mayor parte de las representaciones artísticas estudiadas provienen de diversos recintos arqueológicos (Mapa 2) o son de origen desconocido. Todas las piezas que fueron examinadas se encuentran en custodia del MAX. 12

16 Mapa 2. Sitios arqueológicos donde fueron halladas las piezas analizadas Método de Análisis Se eligieron representaciones iconográficas de mamíferos del Museo de Antropología de Xalapa (MAX) de la Universidad Veracruzana, tanto de salas como de bodega. La selección se avocó, primordialmente, a representaciones realistas, es decir, aquellas en las que se buscaba o lograba imitar la naturaleza del animal de manera que fuese posible su identificación. Las piezas se eligieron con base en las fotografías de los catálogos virtuales de salas y bodegas del MAX o se tomaron fotografías de las piezas que reunieron valor indicativo de su género/especie y que aún no se encontraban integradas en los catálogos; provenientes de las diversas culturas presentes en el MAX a partir del Siglo XII a. C. a I d. C. (Medellín-Zenil, 1960). Fueron analizadas 100 piezas como una muestra del arte prehispánico presente en el museo. Se compararon las características fenotípicas distintivas y actitudes encontradas en las piezas contra imágenes de las especies probables, apoyados en la literatura científica referente a las 13

17 especies de mamíferos presentes en México y Veracruz, así como fuentes relacionadas con la identificación de géneros/especies representadas en el arte del México prehispánico, primordialmente Seler (1909). Se identificaron elementos particulares que arrojaron datos sobre los taxones que permitieron la designación taxonómica. La información obtenida se ordenó a manera de tablas y por medio de una clave dicotómica (páginas 14-18). Posteriormente, se realizó un catálogo en el que se anexaron apartados para cada taxón encontrado con información relevante de la misma: imagen, nombre de la especie, nombre común, categoría de riesgo de acuerdo con la NOM-059-SEMARNAT-2010, clasificación taxonómica, características fenotípicas, hábitos, hábitats, distribución (basados en los de IUCN) e interpretación etnozoológica y, dentro de cada uno de estos, una ficha por pieza que contiene: imagen(es) del fragmento arqueológico (extraídas del catálogo virtual del MAX, fotografiados por la autora o dibujados por Antonio Vázquez Vásquez), número de pieza, ubicación en el museo (salas, bodega), cultura, temporalidad, ubicación, medidas, tipo de objeto, material y sección de notas Clave dicotómica para identificar a los mamíferos encontrados en el arte prehispánico. Se realizó la presente clave dicotómica con el objetivo de señalar los rasgos más importantes que permitieron distinguir entre familias, géneros y especies. Es importante señalar que, a pesar de que existe una sorprendente similitud entre la mayor parte de las piezas de cada grupo, hay piezas que se incluyen en ciertos de los taxones listados pero que poseen rasgos fenotípicos diferentes. 1 a- Alas... Quirópteros 1 b- Sin alas a- Con prognatismo b- Sin prognatismo a- Presencia de trago... Quiróptero/Felino 3 b- Sin trago a- Con caparazón... Dasypus novemcinctus 4 b- Sin caparazón

18 5 a- Orejas puntiagudas b- Orejas redondeadas a- Pezuñas b- Sin pezuñas a- Disco nasal... Pecari tajacu 7 b- Sin disco nasal... Odocoileus virginianus 8 a- Cola muy enhiesta b- Cola libre o sin cola a- Ojos hacia el frente b- Ojos redondos a los lados de la cabeza a- Cara gruesa... Procyon lotor 10 b- Cara delgada... Nasua narica 11 a- Hocico redondeado... Sylvilagus sp. 11 b- Hocico proyectado hacia abajo... Tamandua mexicana 11 c. Hocico alargado d. Hocico corto... Felidae 12 a- Pelo hirsuto... Canis latrans 12 b- Sin pelo hirsuto a- Hilera de dientes b- Sin hilera de dientes... Bassariscus sp. 14 a- Presencia de arrugas... Canis lupus familiaris 14 b- Sin arrugas... Didelphis sp. 15 a- Extremidades largas... Ateles geoffroyi 15 b- Extremidades cortas... Alouatta palliata 6. RESULTADOS En las piezas seleccionadas las características fenotípicas de la mayor parte de las representaciones permitieron conocer la identidad de los géneros o especies utilizados como modelo o inspiración por los habitantes prehispánicos; sin embargo, existieron ciertas excepciones, como se observó en el caso de los felinos: en todas las representaciones de esta familia ninguna poseía suficientes rasgos que permitieran la distinción clara entre niveles más específicos. De forma interesante lo mismo sucedió con algunas de las representaciones de quirópteros y con todas las formas compuestas felino-quiróptero. Los órdenes, familias, géneros y especies que se encontraron en el arte prehispánico analizado se detallan en la tabla 1. 15

19 Tabla 1. Órdenes, familias, géneros y especies utilizados en la tradición iconográfica estudiada. Orden Familia Género Especie Didelphimorphia Didelphidae Didelphis Didelphis marsupialis Didelphis virginiana Cingulata Dasypodidae Dasypus Dasypus novemcinctus Pilosa Myrmecophagidae Tamandua Tamandua mexicana Chiroptera Emballonuridae Peropteryx Peropteryx macrotis Otros Primates Atelidae Ateles Alouatta Ateles geoffroyi, Alouatta palliata Lagomorpha Leporidae Sylvilagus Sylvilagus brasiliensis Sylvilagus floridanus Carnivora Canidae Procyonidae Felidae Canis Procyon Bassariscus Nasua Panthera Puma Canis lupus familiaris Canis latrans Procyon lotor Bassariscus astutus Bassariscus sumichrasti Nasua narica Panthera onca Puma concolor Artiodactyla Figuras compuestas Tayassuidae Pecari Pecari tajacu Cervidae Odocoileus Odocoileus virginianus Felino/ Quiróptero, Mono/Murciélago 16

20 6.1. Representaciones de mamíferos más abundantes del arte prehispánico hallado en el MAX. Entre las representaciones analizadas resultó evidente la preferencia de los antiguos artistas de la Costa del Golfo hacia ciertas formas animales, principalmente Ateles geoffroyi, Canis lupus familiaris, las figuras compuestas entre felinos y quirópteros y los felinos; asimismo, se encontró una cantidad importante de representaciones de tlacuaches (género Didelphis), coatíes (Nasua narica) y armadillos (Dasypus novemcinctus). En menor medida se encontraron otros grupos, como se indica en la tabla 2. Tabla 2. Número de representaciones de mamíferos del arte prehispánico del MAX. Mamíferos encontrados Número de piezas Ateles geoffroyi 22 Canis lupus familiaris 18 Felino/ Quiróptero 10 Felidae 9 Didelphis sp. 7 Nasua narica 6 Dasypus novemcinctus 6 Canis latrans 5 Pecari tajacu 4 Odocoileus virginianus 3 Otros quirópteros 2 Sylvilagus sp. 2 Procyon lotor 1 Bassariscus sp. 1 Peropteryx macrotis 1 Alouatta palliata 1 Tamandua mexicana 1 Mono/Murciélago 1 Total

21 6.2 Número de representaciones de mamíferos por sitio arqueológico. El sitio arqueológico puede ser un dato importante al momento de determinar qué animales se encuentran representados en el arte prehispánico, puesto que se relaciona a la distribución histórica de las especies, pista útil que ayuda a conocer la identidad de los mamíferos aludidos. Sin embargo, una gran cantidad de las piezas elegidas son de origen desconocido, seguidas por piezas provenientes de Nopiloa, Apachital, Dicha Tuerta, entre otras, como se observa en la tabla 3. Tabla 3. Número de representaciones de mamíferos por sitio arqueológico. Sitio arqueológico Número de piezas Desconocido 32 Nopiloa 27 Apachital 10 Dicha tuerta 7 Remojadas 5 Zapotal 4 El Faisán 3 Cosamaloapan 2 La Polvareda 2 Mixtequilla 1 Quiahuixtlán 1 Isla del ídolo 1 Tuxtla 1 Jamapa 1 Cuauhtochco 1 Soledad de Doblado 1 Tecolutla 1 Total

22 6.3. Catálogo de representaciones de mamíferos en el arte prehispánico del Museo de Antropología de Xalapa. Canis lupus familiaris FOTO: Nadia Sánchez Nombre común: Perro Características fenotípicas: Variedad de formas y tamaños. Clasificación taxonómica: Reino: Animalia Filo: Chordata Subfilo: Vertebrata Clase: Mammalia Subclase: Theria Infraclase: Eutheria Orden: Carnivora Suborden: Caniformia Familia: Canidae Género: Canis Especie: Canis lupus Subespecie: Canis lupus familiaris (Linnaeus, 1758) 19

23 Hábitos: Especie doméstica. Hábitats: Cosmopolita, especie doméstica. Distribución (IUCN): Sin datos, dependiente del humano y cosmopolita. Interpretación cultural: Los perros se relacionaban al fuego y al relámpago; probablemente el rasgo más valorado por los habitantes prehispánicos era su lealtad, debido a esta característica conductual se desarrolló la creencia de que con la ayuda de estos cánidos se podían afrentar los obstáculos encontrados en el viaje a través del inframundo, por lo que se les quemaba junto a sus difuntos dueños, para que acompañaran a éstos (Sahagún, 1982). A manera de animal mitológico los mexicas lo conocían como Xólotl, regente del decimoséptimo signo de los días, olin, movimiento (Seler, 1909). 20

24 FOTO: MAX PIEZA: 01974, SALAS CULTURA: CENTRO DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 21 cm; ANCHO: 7.5 cm; ALTO: 16.4 cm OBJETO: PALMA MATERIAL: PIEDRA NOTAS: El hocico de esta representación luce más corto que el de un coyote, presenta orejas puntiagudas. Para Seler (1909), el perro suele representarse con una mancha alrededor de los ojos, característica observable en esta pieza. 21

25 PIEZA: /10 5/10, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: APACHITAL MEDIDAS: LARGO: 4.3 cm; ANCHO: 4.3 cm; ALTO: 3.2 cm OBJETO: FRAGMENTO DE FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Las orejas y hocico no son tan afilados como en Canis latrans, además, se observa la presencia de arrugas,característica que se relaciona al xoloitzcuintli. 22

26 PIEZA: 00168, BODEGA CULTURA: CENTRO DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: EL FAISÁN MEDIDAS: LARGO: 4.6 cm;; ANCHO: 4.5 cm; ALTO: 10.7 cm OBJETO: FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: La presencia de arrugas, el hocico y las orejas permiten considerar a la pieza como un ejemplar de Canis lupus familiaris. 23

27 PIEZA: /3, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 17 cm; ANCHO: 9.8 cm; ALTO: 16.3 cm OBJETO: FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Para Calte (2010), este tipo de representación, abundante en el MAX, semeja más a otros cánidos como los coyotes, los lobos o las zorras. Sin embargo, me parece determinante la postura de aparente atención de la pieza, que se aprecia por el acomodo de la cabeza y las orejas muy erectas, hacia quien podría ser su dueño. Un rasgo interesante de este grupo de piezas es el artefacto bucal en el hocico. 24

28 PIEZA: 04234, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO TARDÍO D.C. UBICACIÓN: NOPILOA MEDIDAS: LARGO: 8.5cm; ANCHO: 6.6 cm; ALTO: 16.5 cm OBJETO: FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: La postura de sentado permite considerar a la pieza como un cánido, particualrmente un perro (Canis lupus familairis). Las orejas y el hocico no son tan largas y puntigudas como en Canis latrans. 25

29 PIEZA: 04356, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: NOPILOA MEDIDAS: LARGO: 11 cm; ANCHO: 11.7 cm; ALTO: 7.6 cm OBJETO: FRAGMENTO DE ESCULTURA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: El hocico no se observa tan alargado como el de un coyote y se pueden observar las características arrugas que poseen los xoloitzcuintlis. 26

30 PIEZA: 03944, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO TARDÍO D.C. UBICACIÓN: NOPILOA MEDIDAS: LARGO: 4.8 cm; ANCHO: 6.4 cm; ALTO: 8.3 cm OBJETO: SILBATO MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: El hocico no luce tan afilado como el de un Canis latrans, presenta orejas puntiagudas. 27

31 PIEZA: 04351, BODEGA CULTURA: HUASTECA TEMPORALIDAD: POSCLÁSICO D.C. UBICACIÓN: ISLA DEL ÍDOLO MEDIDAS: LARGO: 4.3 cm, ANCHO: 4 cm; ALTO: 4.6 cm OBJETO: FRAGMENTO DE FIGURILLA MATERIAL: PIEDRA NOTAS: Se aprecia la forma de cánido de la cabeza; el hocico y orejas de largo medio la relacionan a la especie Canis lupus familiaris. 28

32 PIEZA: /6, BODEGA CULTURA: DESCONOCIDA TEMPORALIDAD: DESCONOCIDA UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 4.5 cm; ANCHO: 7.4 cm; ALTO: 6.6 cm OBJETO: SELLO MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: La postura que presenta la pieza, probablemente aullando, la cabeza hacia arriba, las orejas y la cola relativamente larga permiten identificar a la representación como un cánido. El hocico corto lo relaciona con el perro (Canis lupus familiaris). 29

33 PIEZA: # L-4, BODEGA CULTURA: CENTRO- SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: APACHITAL MEDIDAS: LARGO: 4.6 cm; ANCHO: 4.9 cm; ALTO: 3.2 cm OBJETO: FRAGMENTO DE FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: La presencia de arrugas, así como el tamaño de las orejas y el hocico son características que permiten que las piezas se consideren representaciones de Canis lupus familiaris. 30

34 PIEZA: 00156, BODEGA CULTURA: CENTRO DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 8.9 cm; ANCHO: 9.4 cm; ALTO: 7 cm OBJETO: FRAGMENTO DE FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Las orejas son largas y redondeadas, el hocico no se observa tan largo como el de un coyote. Esta características permiten considerar a la pieza como un perro (Canis lupus familiaris). 31

35 PIEZA: 00721, BODEGA CULTURA: CENTRO DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: PROTOCLÁSICO (150 A.C D.C.) UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 6.3 cm; ANCHO: 6.5 cm; ALTO: 9 cm OBJETO: FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: La forma de los ojos de esta representación es similar a los de la pieza número Seler (1909) menciona que el perro suele representarse con una mancha alrededor de los ojos. Aunque rotos, se aprecian las orejas y el hocico. 32

36 PIEZA: 04792, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: COSAMALOAPAN MEDIDAS: ALTO: 11.4 cm; DIÁMETRO: 9.4 cm OBJETO: OLLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: La cabeza que se aprecia en esta olla presenta un hocico medianamente largo, así como lo que parecen ser orejas. Además, ostenta arrugas, lo que permite relacionarla con Canis lupus familiaris. 33

37 PIEZA: 00744, BODEGA CULTURA: CENTRO DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 9 cm; ANCHO: 4.3 cm; ALTO: 5.1 cm OBJETO: SILBATO MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: La pieza presenta una actitud desafiante, se aprecian las orejas y el hocico. 34

38 PIEZA: /9, BODEGA CULTURA: DESCONOCIDA TEMPORALIDAD: DESCONOCIDA UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 4.7 cm; ANCHO: 2.4 cm; ALTO: 2.6 cm OBJETO: FRAGMENTO DE FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Se aprecia una actitud de ferocidad, así como un hocico que no termina en punta, lo que lo relaciona con un cánido, particularmente la especie Canis lupus familiaris. 35

39 PIEZA: 05129, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: NOPILOA MEDIDAS: LARGO: 12.5 cm; ANCHO: 12.3 cm; ALTO: 13.6 cm OBJETO: FRAGMENTO DE FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Resulta llamativa la zona pintada de negro sobre la cabeza de la pieza. Presenta un hocico que no es lo suficiente largo ni puntiagudo para considerarlo una alusión a Canis latrans, las orejas se encuentran a los costados del rostro, característica antinatural de la pieza. 36

40 PIEZA: 00182, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: EL FAISÁN MEDIDAS: LARGO: 5.1 cm; ANCHO: 5.3 cm; ALTO: 10.3 cm OBJETO: FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Figura antropomorfizada que presenta hocico y orejas medianamente alargadas. 37

41 PIEZA: /4, BODEGA CULTURA: DESCONOCIDA TEMPORALIDAD: DESCONOCIDA UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 4.5 cm, ANCHO: 3.8 cm, ALTO: 4.4 cm OBJETO: FRAGMENTO DE FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Esta cabeza posee rasgos de cánido, particularmente Canis lupus familiaris por la forma del hocico y las orejas. 38

42 Canis latrans FOTO: Wikipedia Nombre común: Coyote Clasificación taxonómica: Reino: Animalia Filo: Chordata Subfilo: Vertebrata Clase: Mammalia Orden: Carnivora Suborden: Caniformia Familia: Canidae Género: Canis Especie: Canis latrans (Say, 1823) Características fenotípicas: Similares a los lobos grises, pero más pequeños y delgados. Poseen orejas puntiagudas más grandes que éstos y se caracterizan por un hocico mucho más delgado (WAZA). Hábitos: Sociales con parejas estables durante 3-4 años. Nocturnos, también presentan actividad diurna. Carnívoros oportunistas (Hidalgo, 2004). Hábitats: Diversidad de hábitats. Encuentran beneficiosos los ambientes humanos (WAZA). 39

43 Prefiere espacios abiertos semiáridos, áreas cultivadas y pastizales (González-Christen, 2010). Distribución (IUCN): Interpretación cultural: Preciados en las actividades de guerra (Pérez- Chávez, 2013). El coyote era considerado el animal ladrón, emparentado con el jaguar, y con un gran apetito sexual. También era el dios de la danza y el canto (Seler, 1909). 40

44 PIEZA: 00090, SALAS CULTURA: CENTRO-SUR TEMPORALIDAD: CLÁSICO TARDÍO D.C. UBICACIÓN: DICHA TUERTA MEDIDAS: LARGO: 19 cm; ANCHO: 14 cm; ALTO: 24 cm OBJETO: FRAGMENTO DE ESCULTURA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: El hocico largo y delgado, así como su representación a manera de yelmo, que tiene una evidente función para la guerra, permiten relacionar a la figura superior con un coyote (Canis latrans). Calte (2010) también considera a esta figura como una representación de algún cánido, sin especificar uno en particular. 41

45 PIEZA: /2, BODEGA CULTURA: CENTRO DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 6.4 cm; ANCHO: 5.2 cm; ALTO: 10.1 cm OBJETO: SILBATO MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Esta figura antropomorfizada presenta largas y puntiagudas orejas, además de un hocico largo y delgado, que son características que permiten la identificación del coyote (Canis latrans) como la entidad inspiradora de la misma. 42

46 PIEZA: 03903, SALAS CULTURA: REGIÓN CENTRAL TEMPORALIDAD: CLÁSICO TEMPRANO D.C. UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 7.5 cm;; ANCHO: 7 cm; ALTO: 15.5 cm OBJETO: SILBATO MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Esta representación forma parte del atavío de un hombre o quizá es su nahual. A pesar de que la mandíbula se observa muy deformada es posible considerarla un cánido, principalmente un coyote, puesto que las formas ovaladas sobre el lomo podrían comparse con la crin característica que se observa en diversas representaciones de estos animales. Además, la piezas es un silbato, lo cual podría relacionarse al Dios de la danza y el canto, el cual se representa a manera de coyote (Seler, 1909). 43

47 PIEZA: 04160, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO TARDÍO D.C. UBICACIÓN: NOPILOA MEDIDAS: LARGO: 5.1 cm; ANCHO: 5.4 cm; ALTO: 9.4 cm OBJETO: FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: A pesar de ser una pieza fantástica, las largas y puntiagudas orejas, además del hocico largo y delgado, permiten la identificación del coyote como la entidad inspiradora o modelo de la misma. 44

48 PIEZA: 00070, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: LA POLVAREDA MEDIDAS: ALTO: 7.9 cm.; DIÁMETRO: 17 cm. OBJETO: CUENCO, CAJETE O ESCUDILLA MATERIAL:- NOTAS: El pelaje hirsuto que se aprecia sobre el lomo, así como el hocico largo y delgado permiten considerar a la pintura como una representación de Canis latrans. 45

49 Procyon lotor FOTO: pinimg.com Nombre común: Mapache Clasificación taxonómica: Reino: Animalia Filo: Chordata Subfilo: Vertebrata Clase: Mammalia Subclase: Theria Infraclase: Placentalia Orden: Carnivora Suborden: Caniformia Familia: Procyonidae Subfamilia: Procyoninae Género: Procyon Especie: Procyon lotor (Linnaeus, 1766) Características fenotípicas: La cola se presenta anillada y un característico antifaz color negro. El pelo es largo y de color negro o pardo. Las patas delanteras se encuentran adaptadas para manipular objetos (Mora, 2000). Hábitos: Adaptado a la vida urbana. Nocturna, solitaria y terrestre (Glatston, 1994). Hábitats: Preferentemente lugares en los que haya agua disponible marismas, manglares y bosques inundados (Glatston, 1994). 46

50 Distribución (IUCN): Interpretación cultural: El mapache, en mexicano se llama mapachtli, es decir, el que coloca toda su mano sobre la tierra y se consideraba que tenía manos y pies como un humano, además de que presentaban una mancha negra sobre los ojos (Seler, 1909). 47

51 PIEZA: 00005, SALAS CULTURA: CENTRO-SUR TEMPORALIDAD: PROTOCLÁSICO (150 A.C D.C.) UBICACIÓN: REMOJADAS MEDIDAS: LARGO: cm; ANCHO: 21 cm; ALTO: 25 cm OBJETO: VASIJA ZOOMORFA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Calte (2010), relaciona a la pieza con varios grupos entre los que se encuentran Bassariscus, Nasua y Procyon. El ancho de las extremidades posteriores, la postura de las patas supierores (las cuales se encuentran sobre el hocico, rasgo similar al de otra representación de Nasua narica), y el grueso del rostro son rasgos que hacen a la pieza fenotípicamente parecida a un mapache, particularmente Procyon lotor, especie que se distribuye ampliamente en la costa del Golfo. 48

52 Bassariscus astutus FOTO: naturfakta.com Nombre común: Cacomixtle Categoría de riesgo NOM-059-SEMARNAT-2010: Amenazada Clasificación taxonómica: Reino: Animalia Clase: Mammalia Orden: Carnivora Familia: Procyonidae Subfamilia: Procyoninae Género: Bassariscus Especie: Bassariscus astutus (Lichtenstein, 1830) Características fenotípicas: Son de tamaño mediano, cráneo pequeño y ojos grandes. Poseen garras semi-retráctiles (Ceballos y Oliva, 2005). Presentan anillos color negro o café oscuro alrededor de los ojos, la cola es tupida y más larga que el resto del cuerpo. Hábitos: Nocturnos, solitarios (Nowak, 1999). Hábitats: Zonas cercanas al agua. Huecos de árboles y ruinas arqueológicas (Nowak, 1999). Zonas áridas y rocosas. 49

53 Distribución (IUCN): 50

54 Bassariscus sumichrasti FOTO: wildlifenorthamerica.com Nombre común: Cacomixtle Categoría de riesgo NOM-059-SEMARNAT-2010: Amenazada Clasificación taxonómica: Reino: Animalia Clase: Mammalia Orden: Carnivora Familia: Procyonidae Subfamilia: Procyoninae Género: Bassariscus Especie: Bassariscus sumichrasti (Saussure, 1860) Características fenotípicas: Pequeño con orejas redondeadas y cola anillada. De tamaño pequeño a mediano (Aranda-Sánchez, 2010). Hábitos: Solitario, nocturno y arborícola (Aranda-Sánchez, 2010). Hábitats: Bosques subtropicales y tropicales hasta los 2,500 msnm (Aranda-Sánchez, 2010). 51

55 Distribución (IUCN): Interpretación cultural: La palabra cacomixtle proviene del náhuatl tlaco= medio y miztli león (lexicoon, 2014). 52

56 PIEZA: /9, BODEGA CULTURA: DESCONOCIDA TEMPORALIDAD: DESCONOCIDA UBICACIÓN: DESCONOCIDA MEDIDAS: LARGO: 4 cm; ANCHO: 2.6 cm; ALTO: 2.8 cm OBJETO: FRAGMENTO DE FIGURILLA MATERIAL:BARRO/ARCILLA NOTAS: La pieza presenta un hocico delicado, similar al de las especies Bassariscus astutus y Bassariscus sumichrasti, además, posee orejas redondeadas y pequeñas, también similares a las de este género. 53

57 Nasua narica FOTO: pixdaus.com Nombre común: Coatí Categoría de riesgo NOM059-SEMARNAT-2010 : Amenazada Clasificación taxonómica: Reino: Animalia Filo: Chordata Subfilo: Vertebrata Clase: Mammalia Subclase: Theria Infraclase: Placentalia Orden: Carnivora Suborden: Caniformia Familia: Procyonidae Subfamilia: Procyoninae Género: Nasua Especie: N. narica (Linnaeus, 1766) 54

58 Características fenotípicas: El cuerpo es largo y esbelto. El hocico largo y puntiagudo. Presentan una cola larga y que usualmente está erecta, la cual presenta anillos. El pelaje alrededor de los ojos, orejas, garganta, barbilla y punta del hocico es amarillento. Alrededor de las manchas oculares tienen una mancha en tonos café. (Ceballos y Oliva, 2005). Hábitos: Diurnos y terrestres, con algunas actividades nocturnas. Sociales. Trepadores. (Ceballos y Oliva, 2005). Hábitats: Bosques tropicales, subtropicales, templados y campos de cultivo hasta los msnm (Aranda-Sánchez, 2010). Distribución (IUCN): Interpretación cultural: Para los qu iché-cakquiquel el coatí era la pareja del jabalí o puerco almizclero, representando a la potencia masculina y al sur (Seler, 1909). Los mayas solían representarlo con una o dos patas sobre el hocico. 55

59 PIEZA: 00007, SALAS CULTURA: CENTRO-SUR TEMPORALIDAD: PROTOCLÁSICO (150 A.C D.C.) UBICACIÓN: REMOJADAS MEDIDAS: LARGO: 23 cm; ANCHO: 17 cm; ALTO: 25 cm OBJETO: VASIJA ZOOMORFA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Nasua narica posee un hocico alargado, cola erguida, y una postura de sentado similar a la de esta pieza. Para Calte (2010), la pieza tiene un parecido importante con N. narica, así como con Procyon lotor y diversas especies de tlacuaches. 56

60 PIEZA: 14830, SALAS CULTURA: CENTRO-SUR TEMPORALIDAD: CLÁSICO D.C. UBICACIÓN: NOPILOA MEDIDAS: LARGO: 5 cm; ANCHO: 5 cm; ALTO: 8.7 cm OBJETO: OCARINA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: La pieza presenta un cola erguida y gruesa, orejas pequeñas y redondeadas; el hocico es relativamente largo. Posee aparentes anillos alrededor de los ojos, similares a los de Nasua narica. 57

61 PIEZA: 00179, BODEGA CULTURA: CENTRO-SUR DE VERACRUZ TEMPORALIDAD: CLÁSICO TARDÍO D.C. UBICACIÓN: NOPILOA MEDIDAS: LARGO: 6 cm; ANCHO: 5.7 cm; ALTO: 7.6 cm OBJETO: FIGURILLA MATERIAL: BARRO/ARCILLA NOTAS: Las orejas redondeadas y el hocico alargado, así como la marca alrededor de los ojos permiten considerar a esta figurilla como una representación de Nasua narica. 58