Estudio de la identidad editorial del libro antiguo mexicano como medio de instauración de las ideas coloniales

Transcripción

1 1 Estudio de la identidad editorial del libro antiguo mexicano como medio de instauración de las ideas coloniales Análisis conceptual y gráfico de las marcas tipográficas, las marcas de fuego y los exlibris producidos en los libros en México desde la llegada de la imprenta hasta el fin de la época colonial ( ) Por: Diana Varela RESUMEN En la siguiente investigación se propone estudiar la transformación o adaptación por la cual tuvieron que pasar los símbolos y los elementos gráficos de la época precolombina al entrar en la época de la colonia. Estos elementos fueron evolucionando con la influencia de un nuevo lenguaje gráfico de índole europea, el cual tenía como objetivo el instaurar las ideas de la colonia mediante la evangelización de los indígenas por medio de la educación, las órdenes religiosas y la producción de libros cristianos. Por consiguiente, el diseño editorial del libro antiguo mexicano se generó en el marco de cumplir el objetivo ya mencionado y por ende los contenidos y los símbolos generados en este objeto adoptaron en su mayoría un lenguaje gráfico europeo. De este modo, esta investigación buscará los puntos de transformación o adaptación de esos símbolos y elementos gráficos dentro del marco de nuestros tres objetos de investigación: las marcas tipográficas, las marcas de fuego y los exlibris, elementos editoriales que surgieron como marcas de propiedad de una biblioteca o un particular en la época de la colonia. En ese sentido, para entender la instauración e influencia de las ideas europeas, partiremos de entender que estas no sólo surgieron a partir de los contenidos de los libros, sino que además se expresaron en los diversos elementos gráficos que los mismos fueron adoptando, los cuales fueron producto de la generación de un nuevo lenguaje gráfico que transformó la concepción de muchos símbolos y elementos gráficos dentro de la sociedad y época en los que fueron generados. ESTADO DE LA CUESTIÓN: En México ha habido una gran cantidad de investigaciones, conferencias y publicaciones que han abordado diversos temas referentes al libro antiguo mexicano. Garone (2012:62) señala que estos estudios se han centrado en el rol de las imprentas e impresores, los fondos y acervos, la escritura y lenguas indígenas, los periodos históricos, la legislación, el comercio y la distribución. Sin embargo, en cuanto a los antecedentes producidos en torno al tema puntual de los aspectos materiales del libro, tales como la tipografía, la imagen y el grabado, los ex libris,

2 2 las marcas tipográficas, las marcas de fuego, el papel y la encuadernación, existe una atención escasa o al menos desigual por parte de los estudiosos (Garone 2012:61). Y todavía más desatendido existe dentro de este campo de investigación, un estudio aún más limitado del rol de los recursos y códigos gráficos generados en el México colonial en la instauración de las ideas europeas, lo cual es el tema de interés de la presente investigación. En ese sentido, Garone (2012:61) recopiló en un estudio bibliográfico las publicaciones hechas hasta el momento sobre el libro antiguo mexicano, en donde organizó las fuentes en rubros tentativos que buscan crear un primer escenario de la bibliografía de este tema (figura 1). En esta recopilación bibliográfica Garone menciona: Estas referencias constituyen un humilde primer acercamiento bibliográfico al mundo del libro colonial mexicano y creemos que servirán de guía a quien decida interiorizarse en algunos aspectos de la tipografía, la imprenta y el libro mexicano, así como permitirá identificar las zonas en penumbra, desdibujadas o directamente ausentes del mapa textual que estamos tratando de perfilar. (2012:61) Imprentas e impresores Fondos y acervos Escritura y lenguas indígenas 23 Periodos históricos Tipografía 26 Bibliografía lenguas indígenas Imagen y grabado Legislación Ex libris y marcas tipográficas Papel Marcas de fuego Comercio y distribución Figura 1. Acercamiento cuantitativo del número de publicaciones sobre el libro antiguo mexicano de acuerdo a los rubros de clasificación propuestos por Garone (2012:62). Se resaltan en naranja los estudios referentes a nuestros objetos de estudio: ex libris, marcas tipográficas y marcas de fuego. De este modo, al hacer un conteo de la bibliografía recopilada por la autora, nos encontramos que los estudios referentes a nuestros tres objetos de estudio: las marcas tipográficas, las marcas de fuego y los exlibris, cuentan con una muy escasa investigación a diferencia de otros temas relacionados a los aspectos materiales del libro, tales como la

3 3 tipografía, que cuenta con 26 publicaciones y la imagen y el grabado que cuenta con 23 publicaciones. Regresando al tema de nuestro objeto de estudio, estas marcas, de acuerdo con Martin Abad (2004:311) fueron la forma en que la antigua anotación que hacía el librero para marcar propiedad, evolucionó a medidas más complejas y quizá más seguras. 1 Posteriormente, en cuanto a la investigación histórica de nuestros tres objetos de estudio es importante conocer de dónde procedieron para entender su evolución. En ese sentido destaca en primer lugar la tesis de Castro (2008:5) quien menciona que la marca tipográfica nace desde la impresión de libros con Gutemberg, ya que sus socios Johann Fust y Peter Schöffer fueron los primeros en tener una marca tipográfica. Este elemento es definido por la autora como un signo distintivo por los impresores, para diferenciarse y destacar sus talleres, y como una imagen xilográfica o calcográfica incorporada al libro antiguo (2008:6). Así mismo, Castro (2008:7) menciona que la marca tipográfica se vio influenciada por la tradición heráldica y la emblemática europea. Este dato es fundamental para poner en contraste los dos tipos de lenguaje de los cuales hablamos, teniendo por un lado el lenguaje precolombino producido en los códices y por otro lado el lenguaje de tradición heráldica y de emblemática europea. En ese sentido, Fevre (2010: 117) menciona que las marcas tipográficas pasaron de ser elementos abstractos y sintéticos como siglas y elementos geométricos a elementos de suma complejidad y símbolos. Los cuales tienen más relación con la tradición heráldica de la que nos habla Castro. En segundo lugar, en cuanto a las marcas de fuego, García (2007:272) opina que a pesar de su importancia estas no han sido estudiadas ni analizadas a pesar del enorme patrimonio que el tiempo les ha otorgado. Por otro lado, en cuanto a su origen se tienen opiniones variadas, ya que para algunos autores como Krausse (1989:1) éstas tienen su origen en España y para otros como Salomón (2010:342) surgen de un modelo novohispano. En cuanto a su concepto, Salomón (2010:341) la define como una señal carbonizada colocada principalmente en los cantos de los libros mediante un instrumento metálico suficientemente candente. Por otro lado, referente a su función, Salomón (2010) afirma que existen dos teorías: Hasta ahora las dos suposiciones sobre la posible finalidad de las marcas de fuego apuntan a entenderla, primeramente, como un indicador de propiedad, [ ] La segunda sostiene que los libros marcados representan un tipo de selección, premisa que se sustenta con la localización de libros que tienen otro tipo de marcaje (sellos, anotaciones manuscritas, ex libris, ex-donos, etc.) que ayudan a relacionarlos a determinada institución, pero que carecen de una 1 Esta hipótesis se hace evidente en el caso de las marcas de fuego, ya que, al ser marcadas sobre el canto del libro, eran irremovibles a menos que se guillotinaran las páginas. Aspecto que las diferenciaba de las otras marcas como los exlibris y las marcas tipográficas, las cuales eran fáciles de remover.

4 4 marca de fuego. Lo anterior hace cuestionarse necesariamente por que algunos ejemplares escaparon al marcaje con fuego. (344) En tercer lugar, en cuanto a los ex libris, León (1913:67) menciona que su uso data del siglo XVI en Alemania, llegando a México hasta el siglo XVIII. Este dato, al igual que el caso de las marcas tipográficas nos ayuda a entender a este elemento con sus fuertes influencias europeas. En este sentido León menciona (1913:67) que los primeros ejemplares de los que se tienen noticia son de los encontrados en la Biblioteca del Convento de San Francisco de México, los cuales tienen un sello de la orden de San Francisco de Asís, la seráfica. Así mismo, el exlibris es definido por León (1913:66) como la etiqueta impresa que indica la marca de propiedad o sello del bibliófilo que se suele adherir al reverso de la parte interior de los libros, la cual consistía únicamente en encerrar el nombre del bibliófilo dentro de una orla tipográfica. Posteriormente, se le agregó el elemento de los lemas o las divisas, siendo el Conde de la Cortina el primero en utilizarlos. En cuanto a estos símbolos de pertenencia, Garone (2012:64) menciona que los ex libris del periodo de la imprenta manual necesitarían nuevas aportaciones como el estudio de los autógrafos y otras marcas de propiedad. En términos más generales, en cuanto a la producción de los libros de la época colonial, la historiografía ubica a la primera imprenta de América en México y al primer texto impreso en el año de Beltrán (2013:16) menciona al respecto que ese conceso se debe a que ese fue el año en que fray Juan de Zumárraga firmó el convenio que favoreció la llegada de la imprenta al país. En ese sentido, Garone (2012:59) menciona que durante esa época en América la producción de libros contaba con tan sólo dos imprentas en el siglo XVI: una en México y otra en Lima (Perú). Al respecto Hampe (2010:56) menciona que las primeras prensas llegaron a la Ciudad de México y Lima gracias a los tipógrafos italianos Giovanni Paolo de Brescia y Antonio Ricardo de Turín, los cuales tuvieron el propósito de ayudar a los misioneros en la cristianización de las poblaciones nativas. Posteriormente, en el siglo XVII (Garone 2012:59) se abrieron talleres en Puebla (México) y Guatemala. Y hasta el siglo XVIII se fueron estableciendo otras imprentas de forma paulatina en diversas ciudades. De esta forma, nuestra investigación parte de esos primeros libros producidos en 1539, año que forma parte del periodo colonial que inició en 1521, hasta el fin de la época, marcado por la Independencia de México en Luego entonces, para entender la instauración y preponderancia de las ideas coloniales sobre las precolombinas, Chocano (1997:57) menciona que, en Nueva España de 1539 hasta el año de 1600, un tercio de los impresos locales fueron en idiomas nativos indígenas, mientras que, en la siguiente centuria, la cifra se redujo significativamente al 3 por ciento del total producido. En ese sentido, Leonard (1992:105) estimó que aproximadamente un 70 por ciento de los libros que circulaban en los siglos XVI y XVII en el Nuevo Mundo tenían que ver con asuntos religiosos. Así mismo para Hampe (2010:57) la imprenta atendía

5 5 sobre todo los propósitos de los administradores peninsulares y reflejaba la prosperidad creciente y las necesidades intelectuales de los colonos europeos, criollos o mestizos. De esta manera, el siguiente proyecto se plantea responder cómo el lenguaje gráfico europeo transformó la concepción de los símbolos y elementos gráficos, así como identificar como estos nuevos sistemas gráficos se nutrieron e hicieron un sistema gráfico mixto, en donde se combinaron elementos del México precolombino y del México colonial, todo ello en afán de entender cómo el lenguaje gráfico ayudó a la instauración de las ideas evangelizadoras y los estilos europeos que con ellas devenían y cómo formaron parte de un contexto social y religioso determinado. OBJETIVOS E HIPÓTESIS La hipótesis de este proyecto de investigación parte de la siguiente premisa: en México, el diseño editorial, específicamente el diseño de libros, contribuyó a la incorporación de las ideas europeas coloniales no sólo en los contenidos, sino además en el lenguaje gráfico que se generó en torno a ellos y el cual determinó los subsecuentes códigos gráficos que se instauraron en Nueva España, siendo las marcas de propiedad que se generaron en la época colonial mexicana los objetos de estudio que demostrarán esta hipótesis De esta forma, el siguiente trabajo busca analizar morfológica y conceptualmente a los primeros sellos que se hicieron en los libros mexicanos en la época colonial como el caso de las marcas tipográficas, las marcas de fuego y el exlibris para poner en contraposición a sus antecedentes directos: los signos de los códices, los cuales Hampe define como la colección de manuscritos mesoamericanos pintados previa y posteriormente a la Conquista (2010:57) Teniendo presente lo anterior, se plantearon como propósitos de esta investigación: a) rastrear algunos de los probables antecedentes formales y conceptuales de los ex libris, las marcas tipográficas y las marcas de fuego, b) relacionar y contrastar a partir de símbolos puntuales, cuál era la significación en el México precolombino de esos elementos y cuál fue la significación en el México colonial, c) detectar cuáles símbolos adoptaron recursos gráficos de la época precolombina, como el caso de los ex libris de Nicolás Leon, d) detectar cuáles símbolos transformaron por completo el significado del objeto e) esbozar, a partir de este contexto, cómo esos símbolos contribuyeron a la instauración de las ideas europeas en el continente por el camino de la comunicación gráfica. METODOLOGÍA El corpus del análisis del trabajo presente se construirá a partir del análisis gráfico y conceptual los sellos de reconocimiento de propiedad encontrados en libros de la época colonial de México y su consecuente comparación con los signos generados en México precolombino, todo ello con la finalidad de contrastar estos dos lenguajes gráficos de la identidad editorial del libro antiguo mexicano. De esta forma, en primer lugar, se analizarán aquellas marcas de fuego encontradas en los cantos de libros recopilados por la Universidad Benemérita de Puebla en su catálogo

6 6 en línea de las marcas de fuego de los impresos mexicanos, los cuales cuentan con un análisis conceptual hecho por Isabel Salomón de los diversos elementos que los conforman para después ser comparados con sus equivalentes precolombinos. Un ejemplo de cómo se hará esta comparación de elementos de los dos lenguajes gráficos ya mencionados (el colonial y el precolombino) se puede observar con claridad en la comparación de uno de los signos que predominó en las marcas de fuego de los agustinos: el corazón, el cual se define por Salomón (2010:349) en el contexto de las marcas de fuego como centro de iluminación, devoción, perdón, felicidad; atravesado por una flecha, profundo arrepentimiento, devoción bajo extrema aflicción; flameante, fervor religioso, dolor. Definición que se contrastará con imágenes y significados del mismo elemento encontrado en códices. En este sentido, León-Portilla define al mismo elemento en su concepción precolombina, la cual proviene del vocablo náhuatl yóllotl, como la esencia o fuerza de la vida (2004:252). Esa misma palabra en sus derivados como el caso del vocablo yollo, tiene otro sentido, en este caso alguien rico de corazón o bien inteligente y agudo de ingenio (2004:253) Esta metodología, tiene la finalidad de mostrar no sólo como cambió el estilo gráfico de representación de un elemento a otro, sino además tiene el propósito de mostrar cómo el mismo elemento tuvo significaciones diversas y cómo cada una de ellas influyó en la consecuente concepción de diversos elementos gráficos en la sociedad y época en que se generaron. En ese sentido, respecto a las marcas de fuego, se pretende analizar cómo estos tomos pertenecientes a las diversas bibliotecas de las órdenes religiosas que llegaron de España a México con el objetivo de evangelizar a los indígenas (las ya mencionadas agustinas, betlemitas, carmelitas, dominicas y franciscanas) cuentan con sellos que muestran una mentalidad y lenguaje gráfico europeo que marcó una nueva generación de significaciones en el medio gráfico mexicano. Por otra parte, en cuanto a los ex libris, el trabajo analizará los ejemplos recopilados por Nicolás León en su obra Ex libris simbólicos y artísticos de bibliófilos mexicanos (1913:71-124), en los cuales se pondrá en juego otra dinámica de trasformación de elementos gráficos, ya que en ellos más que retomar sólo un lenguaje grafico europeo, se encontraron algunos ejemplares que retomaron y adoptaron elementos precolombinos y los conjugaron con elementos gráficos europeos. Finalmente, en cuanto a las marcas tipográficas, se analizarán los elementos gráficos de las marcas compiladas por Castro (2008) de Antonio de Espinosa, Enrico Martínez, Diego Fernández de León, y Carlos de Sigüenza y Göngora, en las cuales se analizará gráfica y conceptualmente cómo estas forman parte de un lenguaje gráfico precolombino, europeo o mixto, según sea el caso. Esta metodología busca poner en claro como el lenguaje gráfico de la época contribuyó a la instauración de las ideas europeas, ya que esta época marcó una nueva forma de entender al mundo, lo cual se observa en la forma en que éste fue representado.

7 7 BIBLIOGRAFÍA BELTRÁN CABRERA, Luz del Carmen Mujeres impresoras del siglo XVIII novohispano en México, Fuentes Humanísticas 48, CASTRO REGLA, Elizabeth Comentarios en torno a la marca tipográfica de Diego Fernández de León. (Ciudad de México: UNAM, Facultad de Filosofía y Letras) CHOCANO MENA, Magdalena La América colonial, : cultura y vida cotidiana. (Ciudad de México: Casa del libro) FEVRE, Lucien La aparición del libro. (Ciudad de México: Ediciones del Castor) GARCÍA AGUILAR, María Idalia Libros marcados con fuego, Emblemata: Revista aragonesa de emblemática 13, GARONE GRAVIER, Marina Fuentes para el estudio de la tipografía, la imprenta y el libro antiguo mexicano ( ). (Ciudad de México: UNAM, Instituto de Investigaciones Bibliográficas) HAMPE MARTÍNEZ, Teodoro La historiografía del libro en América hispana: un estado de la cuestión, en Leer en tiempos de la Colonia: imprenta, bibliotecas y lectores en la Nueva España, comp. María García Aguilar (Ciudad de México: Instituto de Investigaciones Bibliotecológicas y de la información), KRAUSSE, Manuel Marcas de fuego: catálogo. (México: Consejo Nacional para la Cultura y las Artes) LEONARD, Irving Los libros del conquistador (España: Fondo de Cultura Económica) LEÓN, Nicolás Ex-libris de bibliófilos mexicanos. Colección formada por Nicolás León y continuada e ilustrada con notas bibliográficas de Juan B. Iguíniz, en Anales del Museo Nacional de México V, (Ciudad de México: Instituto Nacional de Antropología e Historia), LEÓN-PORTILLA, Miguel Significados del corazón en el México prehispánico. (Ciudad de México: UNAM, Instituto de Investigaciones Históricas) MARTÍN ABAD, Julián Los libros impresos antiguos. (Valladolid: Universidad de Valladolid) SALOMÓN SALAZAR, Mercedes Isabel Las marcas de fuego: propuesta de una metodología para su identificación, en Leer en tiempos de la Colonia: imprenta, bibliotecas y lectores en la Nueva España, comp. María García Aguilar (Ciudad de México: Instituto de Investigaciones Bibliotecológicas y de la información),