Diabetes e Hipertensión Arterial y su relación con la enfermedad renal.

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1 Laboratorios Santo Domingo Publicación mensual. Tomo1 Diabetes e Hipertensión Arterial y su relación con la enfermedad renal. La diabetes y la presión arterial alta son causas frecuentes de enfermedad renal; sin embargo, la mayoría de las personas que padecen de esta enfermedad no saben que la tienen. La enfermedad renal daña los riñones y evita que limpien la sangre como deberían. Este daño puede causar que se acumulen desechos en su cuerpo que llevan a otros problemas de salud, como enfermedades del corazón, de los huesos y anemia. Con el tiempo, si la enfermedad renal crónica no se trata, puede causar insuficiencia renal. Si usted tiene esta enfermedad, es importante que reciba un diagnóstico temprano. El tratamiento puede desacelerar el avance de la enfermedad y prevenir o retrasar el fallo renal en el futuro. Debido a que con frecuencia la enfermedad renal crónica avanza muy lentamente y presenta muy pocos síntomas, muchas personas con esta afección no saben que la tienen hasta que la enfermedad está avanzada y se requiere diálisis. Los análisis de sangre y orina son las únicas formas de detectar si usted tiene la enfermedad renal crónica. Consejos para mantener sus riñones saludables Entre las medidas a tomar para mantener sus riñones saludables están: * Mantener la presión arterial a menos de 130/80 mm/hg. * Mantener el colesterol dentro de los niveles recomendados. * Consumir menos sal o sustitutos de la sal. * Comer alimentos saludables. * Mantenerse activo físicamente. * Tomar los medicamentos de acuerdo a las instrucciones médicas. Si usted tiene diabetes, siga estas medidas también: * Mantener los niveles de azúcar en la sangre dentro de los límites recomendados, tanto como se pueda. * Hacerse una prueba de Hemoglobina Glicosilada (A1c) por lo menos dos veces al año, aunque lo ideal es hacerla cuatro veces al año. Esta prueba mide el nivel promedio de azúcar en la sangre en los tres meses anteriores.

2 Si su presión arterial es alta, revísesela regularmente y manténgala bajo control para asegurarse de que sus riñones permanezcan saludables. Consulte con su médico acerca de los medicamentos para bajar la presión arterial. Tratar de prevenir la diabetes tipo 2 es otra medida importante para prevenir la enfermedad renal. En estudios recientes se ha demostrado que las personas con sobrepeso y riesgo alto de contraer diabetes tipo 2 pueden prevenir o retrasar la aparición de la enfermedad si pierden entre un 5 a 7 por ciento de su peso corporal, lo que equivale a entre 10 y 14 libras en una persona que pese 200 libras. Usted puede lograrlo con una alimentación más sana y con 150 minutos de actividad física a la semana. Quién tiene más probabilidad de presentar enfermedad renal? Además de la diabetes y la presión arterial alta, hay otras afecciones y condiciones que aumentan el riesgo de enfermedad renal, como las enfermedades del corazón, la obesidad, la edad avanzada, el colesterol alto y los antecedentes familiares de enfermedad renal crónica. Una lesión física también puede causar enfermedad renal. En México cada año se diagnostican 100 mil casos de insuficiencia renal y 12 mil de los detectados están en etapa terminal, de estos 70 por ciento no es candidato a un trasplante de riñón, ya que por lo avanzado de la enfermedad presenta daños en órganos como el corazón, lo que incrementa el riesgo de muerte. Las enfermedades relacionadas con este órgano vital son de alta incidencia, y a los diagnósticos anuales se suma que también padecen enfermedad crónica hepática por factores como hepatitis B y C, así como obesidad, lo que aumenta la demanda de trasplante de riñón. De acuerdo con el Centro Nacional de Trasplantes, 8 mil 177 personas esperan recibir ese órgano. Más del 35% de adultos con diabetes tienen enfermedad renal crónica. El alto nivel de azúcar en la sangre (glucosa en la sangre) y la presión arterial alta aumentan el riesgo de enfermedad renal crónica, lo que con el tiempo llevará a fallo renal. Si tiene diabetes, controlar el nivel de azúcar en la sangre y la presión arterial reduce el riesgo de enfermedad renal o puede disminuir su avance. En México, la DM ocupa el primer lugar en número de defunciones por año, tanto en hombres como en mujeres las tasas de mortalidad muestran una tendencia ascendente en ambos sexos con más de 70 mil muertes y 400,000 casos nuevos anuales cabe señalar que según la Dirección General de Información en Salud en el 2007 hubo un número mayor de defunciones en el grupo de las mujeres (37,202 muertes) comparado con el de los hombres (33,310), con una tasa 69.2 por 100,000 habitantes en mujeres y de 64 en hombres, diferencias importantes a considerar en las acciones preventivas, de detección, diagnóstico y tratamiento de este padecimiento. La diabetes no es un factor de riesgo cardiovascular. Es un equivalente de enfermedad cardiovascular debido a que el riesgo de sufrir un desenlace cardiovascular es igual al de la cardiopatía isquémica. Algunas lesiones e infecciones pueden dañar los riñones

3 Algunas infecciones, como las que afectan la vejiga y los riñones, también pueden dañar los riñones. Llame a su proveedor de atención médica si tiene alguno de los siguientes síntomas de una infección de la vejiga: * Orina opaca o con sangre. * Dolor o ardor al orinar. * Necesidad urgente y frecuente de orinar. También hable con su proveedor de atención médica si tiene alguno de los siguientes síntomas de una infección de los riñones: * Dolor en la espalda. * Escalofríos. * Fiebre. La enfermedad renal crónica puede llevar a la necesidad de diálisis o un trasplante La etapa final de la enfermedad renal crónica es el fallo renal o enfermedad renal terminal. Las personas con fallo renal necesitan hacerse diálisis, que consiste en limpiar la sangre a través de una máquina, o recibir un trasplante de un riñón sano. Tome medidas para mantener sus riñones saludables. Si usted tiene un riesgo mayor de enfermedad renal, hable con su médico sobre las pruebas de detección. Si tiene diabetes, hable con su médico acerca de una prueba de detección de la enfermedad del riñón y controle su nivel de azúcar en la sangre y su presión arterial para mantener sus riñones sanos. Qué estudios puedo realizarme para saber si mis riñones se encuentran sanos? Existen diversas pruebas para ello, y la frecuencia para llevarlas a cabo dependerá de los antecedentes que Usted tenga en su historial médico: si es sano, paciente diabético, hipertenso, infección en vías urinarias frecuente, hipertensión arterial, etc. Los exámenes de laboratorio más simples incluyen la Glucosa Sérica y el Examen General de Orina; la primera nos da el valor de glucosa en ayuno al momento de la toma de la muestra, y el segundo examen nos permite conocer las características bioquímicas, organolépticas y microscópicas de la orina. Si el paciente tiene una glucosa basal dentro de los parámetros normales y en la orina los resultados no se encuentran alterados, se sugiere un control anual de estos parámetros. Si en el Examen General de Orina se detecta alguna infección, es necesario realizar un Urocultivo o bien a criterio del médico dar tratamiento antibiótico al paciente para erradicar la infección y realizar un nuevo Examen de Orina para verificar que dicha infección ha cedido; de no ser así el Ultrasonido Renal es de gran

4 utilidad para evaluar infecciones urinarias de repetición. Por otra parte, si la glucosa se encuentra por encima de los valores de referencia, se deberá descartar el Diagnóstico de la Diabetes en el paciente, la cual como ya sabemos, hace susceptible a la persona que la padece de presentar a la postrer una enfermedad renal. Para el Diagnóstico de la Diabetes existen diferentes criterios; sin embargo, los estudios que son solicitados con mayor frecuencia después de encontrar una glucosa sérica elevada en ayuno son los siguientes: Test de Tolerancia a Glucosa (algunos médicos prefieren aún la Curva de Tolerancia a Glucosa), el Examen General de Orina (nuevamente si es que ya se había realizado) y la cuantificación de Hemoglobina Glicosilada. Se ha comprobado que la realización simultánea de estos tres estudios son suficientes para establecer un diagnóstico certero en el paciente, considerando que los tres estudios se complementan a la perfección pues jamás se deberá diagnosticar como diabético a un paciente considerando únicamente una glucosa basal alterada (elevada); se deberá correlacionar la glucosa elevada con la presencia de glucosa en orina (glucosuria) y la hemoglobina glicosilada nos dará, como ya se mencionó, el promedio de glucosa en sangre en los tres meses anteriores a la toma del estudio. En casos muy puntuales serán necesarios otros estudios para poder establecer un diagnóstico definitivo de la diabetes. Por otra parte, la hipertensión arterial está relacionada con la elevación de Colesterol y Triglicéridos en sangre; por lo que la determinación de estos elementos es importante para prevenir la enfermedad renal crónica. Hoy día, muchos médicos prefieren solicitar además de la glucosa en ayuno, la Química Sanguínea de 6 elementos, con el fin de evaluar en un solo paso la glucosa para el diagnóstico oportuno de la diabetes ó hipoglicemia; la urea y la creatinina (para evaluar la función renal en primera instancia); el ácido úrico (el cual nos da una idea acerca de la dieta que sigue el paciente entre otras utilidades); el colesterol y los triglicéridos (para evaluar el riesgo cardiovascular). En general, son diversos los estudios que el médico puede solicitar al Laboratorio; lo cual depende de los datos clínicos observados en el paciente. Así pues, de ser necesario se puede solicitar desde la primera ocasión un Ultrasonido Renal al paciente si el médico lo considera necesario. Es imprescindible realizar análisis de laboratorio complementarios para evaluar la función renal en caso de salir alterados los resultados de los estudios que se han mencionado, entre los que se encuentran por mencionar algunos: la depuración de creatinina, depuración de urea, determinación de proteínas totales en orina de 24 horas, ultrasonido de vías urinarias, determinación de insulina, péptido C, perfil del lípidos, etc., dependiendo del Diagnóstico presuntivo para cada paciente. SD Laboratorios, le ofrece una amplia gama de estudios que pueden ser de utilidad a su médico para hacer a Usted un diagnóstico efectivo y así preservar o reestablecer su salud de la manera más rápida posible.

5 Recuerde que no es necesario estar enfermo para visitar a su médico, quien podrá orientarle acerca de los estudios que puede realizarse periódicamente para evaluar y preservar su salud. La prevención siempre es más económica cualquier tratamiento. Referencias bibliográficas. 1. Centers for Disease Control and Prevention. National Diabetes Fact Sheet: national estimates and general information on diabetes and prediabetes in the United States, Atlanta, GA: U.S. Department of Health and Human Services, Centers for Disease Control and Prevention, Hoyert DL, Xu JQ. Deaths: Preliminary data for National vital statistics reports; vol 61 no 6. Hyattsville, MD: National Center for Health Statistics Centers for Disease Control and Prevention. National Chronic Kidney Disease Fact Sheet: general information and national estimates on chronic kidney disease in the United States, Atlanta, GA: U.S. Department of Health and Human Services, Centers for Disease Control and Prevention, Plantinga LC, Boulware LE, Coresh J, et al. Patient awareness of chronic kidney disease: trends and predictors. Arch Intern Med.2008;168(20): Urinary Tract Infections in Adults - National Kidney and Urologic Diseases Information Clearinghouse 6. United States Renal Data System, Renal Data Extraction and Referencing System (online data querying application) Annual Data Report dataset. Available athttp:// 7.