DIVERSIDAD BIOLÓGICA Y ECOAGRICULTURA

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1 DIVERSIDAD BIOLÓGICA Y ECOAGRICULTURA L a mit ad de las reservas naturales protegidas del mundo se cult iva ext ens ament e, en tanto que el hambre sigue des enf r enada en sitios críticos para la diver s idad biológica, s egún un nuevo informe L a neces idad de alimentar a la población humana pone a la vida s ilvestre en peligro de extinción; la «ecoagr icult ur a» es la nueva s olución propuesta par a s alvar la diver s idad biológica y alimentar a las poblaciones con hambre Dos destacados grupos de cons er vación ambiental y apoyo a la agr icultur a del mundo declar an hoy que cas i la mitad de las reservas naturales más importantes del mundo, establecidas con la intención de pr oteger la vida s ilvestre en peligro de extinción, se emplean en su mayor parte par a la agr icultur a. Además, la malnutrición extrema y el hambre es tán generalizadas entre la población de por lo menos 16 de los 25 sitios críticos para la diver s idad biológica del mundo, donde la vida s ilvestre es tá más expuesta a riesgo. Las declaraciones de hoy, documentadas en un informe conj unto s in precedentes preparado por la Unión Mundial para la Natur alez a (UI CN) y Future Harvest, una or ganiz ación de apoyo a la agr icultur a con sede en Washington, D.C., son calificadas de «alarmantes» por los investigadores. Dado que el desbroce y el uso de la tierra par a la agr icultur a es la principal causa de extinción de la diver s idad biológica y que el hambre gener alizada per s is te en las regiones de mayor diversidad biológica del mundo, muchos animales y plantas se extinguirán a menos que s e manejen los ecosistemas de una for ma que per mita alimentar a la población y, al mismo tiempo, proteger las especies silvestres, según se indica en el informe. La diver s idad biológica es todo el conjunto de plantas, animales, insectos y microor ganis mos silvestres que s e encuentran en la natur alez a, son importantes para la ecología mundial y tienen valor práctico par a la ciencia y la indus tria. En el informe s e es boza una nueva s olución para la crisis de extinción de la diver s idad biológica bas ada en una nueva for ma de entender las características biológicas y ecológicas de la vida s ilvestre, en experimentos realizados sobre el terreno y en grandes adelantos científicos en genética, teleobservación y otros campos. Con la s olución propuesta, llamada «ecoagricultura», se bus ca ayudar a los agricultores, con mayor urgencia a quienes viven en los sitios críticos para la diver s idad biológica o en sus alrededores, a pr oducir más cultivos alimentarios y, al mismo tiempo, a cons er var el hábitat crítico par a la vida s ilvestre. Este planteamiento s e apar ta radicalmente de las políticas de cons er vación tradicionales y de las técnicas comunes de explotación agrícola. El informe titulado Common Ground, Common Future: How Ecoagriculture Can Help Feed the Wor ld and S ave Wild B iodiver s ity, ofrece, por primera vez, un resumen integral de la inter acción de la diver s idad biológica de la vida s ilvestre con la agr icultur a alrededor del mundo. Se elabor ó a pedido de Futur e P ar a más información sírvase comunicarse con: Amy Ekola o Ellen Wilson, tel La vasta diver s idad biológica de la T ierra. credito: Future Har ves t, Jason Wettstein Z ona agr ofor es tal credito: International Centre for Research in Agroforestry Cultivos intercalados con el arroz en China credito: International Rice Research I nstitute

2 resumen integral de la inter acción de la diver s idad biológica de la vida s ilvestre con la agr icultur a alrededor del mundo. Se elabor ó a pedido de Futur e Harvest en un período de dos años por medio de una revisión sistem tica de las publicaciones sobre cuestiones agrícolas y ecológicas, y pr cticas locales de explotación agrícola. S egún Jeffrey A. McNeely, investigador científico principal de la Unión Mundial para la Natur alez a (UI CN) y coautor del informe, «mucha gente cr ee que la diversidad biológica s e puede cons er var sencillamente construyendo una cer ca a s u alrededor. Nuestro informe mues tr a que la agr icultur a y la diver s idad biológica es t n inextricablemente vinculadas. De hecho, las fincas y las reservas naturales comparten un terreno común en muchos países donde las especies est n m s expuestas a r ies go. Para evitar una extinción generalizada y poder alimentar al mundo, debemos integrar la cons er vación de la diver s idad biológica en todos los paisajes desde las llanuras de pastoreo has ta las plantaciones de caf y los campos de cultivo de arroz. Nuestra inves tigación muestra que la ecoagr icultur a es una t cnica s eguida con xito en seis continentes alrededor del mundo". «En el enfoque de ecoagr icultur a s e r econoce el hecho de que las especies en peligro de extinción y la población humana des es per adamente pobr e ocupan el mismo terreno», afirma S ar a J. Scherr, investigadora de For es t T rends, una ins titución sin fines de lucr o, profesora adj unta del Departamento de Economía Agrícola y de los Recursos de la Univer s idad de Maryland y coautora del informe. «La ecoagr icultur a podría trans for mar la agr icultur a y la pr otección ambiental para s alvar la diver s idad biológica de la vida silvestre y, al mismo tiempo, abordar la r ealidad del hambre y del crecimiento demogr fico». H bitat en vía de r educción credito: Center for International Forestry Research Un lugar propio par a todas las especies? credito: Future Har ves t, Jason Wettstein La diver s idad biológica de la vida s ilvestre en todas sus formas tiene valor intrínseco, pero tambi n valor pr ctico, como el mantenimiento del equilibrio es encial en la atmós fer a de la T ierra, la pr otección de las cuencas hidrogr ficas, la r enovación del suelo y el reciclado de los nutrientes funciones indispensables para la agr icultur a. Las zonas protegidas con la intención de cons er var la diver s idad biológica cubr en 10% de la s uper ficie de la T ierra. Sin embargo, en el informe publicado hoy se afirma enf ticamente que las zonas protegidas del mundo no s on suficientes para mantener la diver s idad biológi ca de la vida s ilvestre del Planeta. Según el informe, 45% de las principales reservas protegidas del mundo s e emplean extensamente par a la agr icultur a. En otras reservas, las zonas protegidas est n intercaladas con terrenos agrícolas, coinciden parcialmente con stos o s on adyacentes a impor tantes fronteras agrícolas. Si se lograra que las zonas protegidas en la actualidad continuaran como h bitat de la vida s ilvestre, se perdería entre 30 y 50% de las especies de es as zonas porqu stas no contienen poblaciones suficientemente grandes para mantener cada es pecie.

3 «Las zonas protegidas se es t n convirtiendo con rapidez en islas de diver s idad biológica mor ibunda por causa de las zonas agrícolas circundantes», afirmó McNeeley. «Muchos animales necesitan emigrar para evitar el peligro de extinción. Las zonas de r es er va limitadas no per miten atender esa neces idad y las tierras necesarias para la ex pans ión en masa de zonas protegidas ya s e us an para alimentar a la población y estimular la economía de cada localidad. La ecoagricultura ofrece una s olución a es te dilema al permitir que los agricultores produzcan m s alimentos en la mis ma ex tens ión de tierra y, al mismo tiempo, reduzcan el daño caus ado a la vida s ilvestre». M s de millones de per s onas 20% de la población mundial viven en las 25 regiones m s amenazadas del mundo que s on ricas en especies, denominadas «sitios críticos para la diver s idad biológica» por la Unión Mundial para la Natur alez a (UI CN). Seg n el informe, esos sitios est n localizados, en su mayoría, en zonas con una tas a muy elevada de malnutrición que aloj an a 25% de toda la población desnutrida del mundo en desarrollo. En 19 de los 25 sitios críticos para la diver s idad biológica del mundo, la población crece con m s rapidez que en el mund o en general. Adem s, se s eñala en el informe que la población de las zonas tropicales en estado natur al escasamente pobladas crece, en promedio, a una tas a anual de 3,1%, equivalente a m s del doble del promedio mundial. S i contin a la tala for es tal en la pr opor ción actual, los bosques del mundo podr ían perder m s de la mitad de las especies restantes en los próximos 50 años, advierten los investigadores. Hoy en día, casi 24% de los mamíferos, m s de 12% de los p jaros y casi 14% de las plantas est n amenazados por el peligro de extinción. Seg n el informe, la diver s idad biológica es t m s amenazada ahor a que en cualquier otra poca desde la ex tinción de los dinosaurios hace 65 millones de años. Hoy en día, la ex tinción en masa afecta a especies de todas las formas y tamaños en proceso de evolución, en todas las regiones del mundo y en todas clases de h bitat. En el informe s e documentan seis estrategias clave de ecoagricultura (v as e la lista adj unta) empleadas alrededor del mundo. Esos m todos pueden ayudar a los agricultores de los países industrializados y en desarrollo a pr oteger las especies silvestres y conservar el h bitat en sus terrenos o en las zonas circundantes y, al mismo tiempo, a incr ementar la pr oducción y el ingreso agr ícolas. El informe contiene var ias docenas de es tudios de cas os de s is temas de ecoagr icultur a establecidos con xito en África, Am rica L atina, Asia, Australia, el Canad, los Estados Unidos, Europa y el Reino Unido. Las estrategias incluyen las siguientes: ** establecer redes de h bitat de vida s ilvestre en las zonas no cultivadas y conectarlas con zonas protegidas m s extensas; ** integrar las plantas perennes a los sistemas de explotación agrícola par a s imular diversas clases de h bitat natural, como bos ques y sabanas; ** propagar el uso de m todos de explotación agrícola que r eduzcan la contaminación;

4 h bitat natural, como bos ques y sabanas; ** propagar el uso de m todos de explotación agrícola que r eduzcan la contaminación; ** aumentar la pr oductividad agr ícola de las tierras ya cultivadas para r educir la conver s ión de otr as en sitios dedicados a la agr icultur a; ** modificar la ges tión de r ecur s os en los campos de cultivo y otras zonas productivas para incr ementar su valor como h bitat de la vida s ilvestre; y ** establecer zonas protegidas cerca de las regiones de cultivo, los terrenos destinados a la ganader ía y las zonas de pis cicultur a. «Los agricultores y los investigadores científicos del mundo han introducido con car cter pionero un sistema totalmente nuevo de agr icultur a», afirmó McNeeley. «Estas innovaciones muestran que la ecoagr icultur a puede s er productiva y rentable y, al mismo tiempo, proteger la diver s idad biológica. Se bas an en la convicción -confirmada por pruebas empíricas-de que el ser humano y las especies silvestres pueden compartir un terreno com n y prosperar en un futuro com n». «Muchos de los nuevos m todos empleados en ecoagricultura ex igir n un cambio en la maner a de pensar de muchos agricultores», afirmó S cherr. «Por siglos, los agricultores han hecho un gran esfuerzo por desbrozar la tierra de la vegetación natural y mantener las especies silvestres fuera de la finca. Esa ha s ido la se al de un buen agricultor. Ahora, les pedimos que dejen entrar a una par te de las especies silvestres». S eg n S cherr, en el pasado no s e s abía qu s pecies de ins ectos, plantas y animales podían ser nocivos para la pr oducción agrícola y se eliminaban todos. Pero en muchas de es as pr cticas de explotación agrícola s e puede des tr uir en forma inadver tida el h bitat de especies silvestres tiles, sin contribuir realmente a la productividad agr ícola. Ahora, al considerar desde un nuevo ngulo las características biológicas de la vida silvestre, se entienden m s claramente s us relaciones con la agr icultur a. «No r ecomendamos que s e per mita que los elefantes aplasten los campos de los agricultores», afirmó S cherr. «Queremos decir que hay soluciones estrat gicas para cons er var la diver s idad biológica de la vida s ilvestre y producir cultivos alimentarios en los mismos terrenos». Hace poco s e enfocó la atención de la comunidad internacional en una amplia gama de s ituaciones que hacen patente la neces idad de intr oducir la ecoagricultura: En la Res er va Natur al Wolong en China, establecida par a pr oteger el oso panda gigante en peligro de extinción, se ha des truido el h bitat del panda m s dentro que fuer a de la z ona protegida a medida que la población huma na, en r pido pr oces o de expans ión, ha conver tido los bosques en fincas. En África Central, la des trucción del h bitat y la caza fur tiva han reducido la población de gor ilas de monta a en peligro de extinción a unos 600. Viven en aislamiento en las cumbres de las monta as, rodeados de mar es de terrenos agrícolas cultivados en terrazas.

5 *** La Unión Mundial para la Natur alez a ( UI CN) fue fundada en 1948 y agrupa a 79 estados, 112 organizaciones gubernamentales, 735 organizaciones no guber namentales, 35 instituciones afiliadas y unos investigadores científicos y expertos de 181 países en una s ingular asociación mundial. Su misión es ejercer influencia en las sociedades del mundo y animarlas y ayudarles a cons er var la integr idad y diversidad de la natur alez a y velar por que el uso de los recursos naturales sea equitativo y ecológicamente sostenible. Dentro del marco de las convenciones mundiales, la UI CN ha ayudado a m s de 75 países a preparar y poner en pr ctica es trategias nacionales de conservación y diversida d biológica. Tiene cer ca de 1000 funcionarios, asignados en su mayoría a s us 42 oficinas regionales y nacionales y otros 100 que trabajan en la s ede en Gland, Suiza. Future Har ves t ( es una organización sin fines de lucr o que cr ea conciencia y da apoyo par a inves tigación sobre alimentación y el medio ambiente par a tener un mundo con menos pobreza, una familia humana m s sana, ni os bien nutridos y un mejor ambiente. Apoya inves tigaciones, fomenta asociaciones y patrocina pr oyectos que llevan los Viven en aislamiento en las cumbres de las monta as, rodeados de mar es de terrenos agrícolas cultivados en terrazas. En la s elva de la Cos ta Atl ntica del Brasil, de la cual queda s olo 7%, el h bitat del mono tamarino con melena de león, una es pecie r ar a, se ve amenazado por el uso agr ícola de la tierra, incluso por la pr oducción de ganado lecher o, las plantaciones de caf y la quema de pr ader as dentro de la s elva. Los autores advierten en el informe que «A la lar ga, con mucha inves tigación y experimentación, la mayor parte de la agr icultura podr ía conver tir s e en ecoagricultura en los países desarrollados y en desarrollo, tanto par a los agricultores ricos como par a los pobres. En el futuro inmediato, la ecoagr icultur a debería pr omover s e donde s e neces ite con m s urgencia, como en los centros de diver s idad biológica de las especies silvestres en los trópicos, en los alrededores de las reservas de vida s ilvestre y en las zonas agrícolas pobres donde la población depende particularmente de la diver s idad biológica de las especies silvestres para su sustento». «Por demasiado tiempo, los especialistas en agricultura y conservación ambiental han trabajado con distintos fines», afirmó Bar bar a Ros e, Directora Ej ecutiva de Future Har ves t. «Debemos comenzar a trabaj ar juntos para poder alimentar al mundo y proteger la vida silvestre. Este infor me s e ala el comienzo de un esfuerzo inter nacional por crear conciencia con respecto a diver s os m todos de explotación agrícola que no s olamente s on muy productivos sino que permiten conservar el medio ambiente del que depende toda la vida de la T ierra. Se neces ita mucha m s investigación para que los agricultores pobres se beneficien de la cons er vación de la diver s idad biológica, en lugar de pagar su costo, y puedan cultivar los productos alimentarios que neces itan para s u familia y su sustento».

6 ambiente par a tener un mundo con menos pobreza, una familia humana m s sana, ni os bien nutridos y un mejor ambiente. Apoya inves tigaciones, fomenta asociaciones y patrocina pr oyectos que llevan los resultados de la inves tigación a las comunidades rurales, los agricultores y las familias de Áfr ica, Am rica L atina y Asia. Es una iniciativa de 16 centros de inves tigación alimentaria y amb iental que r eciben fondos del Grupo Cons ultivo s obr e I nves tigaciones Agrícolas Internacionales (CGIAR). E S T R AT E GI AS DE ECOAGRICULTURA Estrategia No. 1: R educir la dest r ucción del hábitat con el aumento de la pr oduct ividad de la t ierra ya cult ivada 1. La introducción del cultivo de yuca a Z ambia r educe la defor es tación. 2. El aumento de los rendimientos de arroz en las tierras bajas disminuye el cultivo en las faldas de las monta as en las Filipinas. 3. El h bitat de los bosques de pinos en Honduras se regenera con mejores t cnicas de cultivo. 4. Se s alva un cultivo en África con el control biológico de la cochinilla har inos a de la yuca. 5. Se pr otege la s elva de la Cos ta Atl ntica del Brasil con la mej or a de la pr oducción de ganado lecher o. E s t r at egia No. 2: Crear redes de hábit at de vida s ilvestre que vinculen los terrenos no cultivados 6. Los rompevientos crean corredores de vida s ilvestre en hatos lecheros de Cos ta Rica. 7. Las plantas naturales sirven de barrera contra la erosión del suelo en la s Filipinas. 8. Los due os de terrenos particulares protegen el h bitat del mono s aki de la Amaz onía. 9. Los agricultores de los Estados Unidos protegen las tierras h medas. 10. Los agricultores del Reino Unido r es er van un h bitat para la vida s ilvestre. E s t r at egia No. 3: Establecer reservas protegidas cer ca de las regiones cultivadas, los terrenos des t inados a la ganader ía y las zonas de pis cicult ur a 11. Las zonas amortiguadoras protegen al rinoceronte y al tigre en un parque nacional de Nepal. 12. Los naranjales de Cos ta Rica s on un medio par a cooper ar con la z ona de cons er vación. 13. Varios grupos de agr icultor es australianos abren nuevos espacios para la vida s ilvestre. 14. Las pr cticas de cultivo que incr ementan el almacenamiento de car bono en el suelo en M xico protegen la diver s idad biológica for es tal. 15. Las reservas naturales de her encia gen tica agrícola pr otegen la diver s idad biológica de la vida silvestre en T urquía. 16. Las reservas marinas ayudan a los peces y a los pescadores de las Filipinas. E s t r at egia No. 4: I nt egr ar las plantas perennes a los sistemas de explot ación agrícola par a simular el hábitat natural 17. Los cereales perennes en las fincas de los Estados Unidos simulan las praderas naturales. 18. Los períodos de bar becho en tierra cultivada aumentan los rendimientos y ofrecen un h bitat para la vida s ilvestre en Kenya y Z ambia. 19. El caf cultivado baj o la s ombr a pr otege la diversidad biológica de ins ectos y p jaros en Am rica Central.

7 vida s ilvestre en Kenya y Z ambia. 19. El caf cultivado baj o la s ombr a pr otege la diversidad biológica de ins ectos y p jaros en Am rica Central. 20. Los rboles sembrados en las praderas de Cos ta Rica alimentan a los p jaros del bosque. 21. La domes ticación salva un rbol medicinal de fr ica en peligro de extinción. 22. Los terrenos destinados a agr os ilvicultura en I ndonesia aloj an una r ica diver s idad de es pecies. 23. El ingreso obtenido en los períodos de bar becho forestal reduce la defor es tación en Am rica L atina. E s t r at egia No. 5: Usar métodos de cult ivo que r eduzcan al mínimo la cont aminación causada por la agr icult ur a 24. Los cultivos intercalados en Yunan, China, controlan las plagas del arroz. 25. Un biocida natur al salva a la cigüe a y al p jaro cantor en frica Occidental. 26. El manejo integr ado de plagas fomenta la inocuidad del agua par a la vida acu tica en el Vietnam. 27. Las zonas agrícolas amortiguadoras ayudan a restituir las zonas de pis cicultur a en la B ahía de Chesapeake. 28. El pastoreo intens ivo del ganado lecher o en los Estados Unidos conserva la calidad del agua par a la vida s ilvestre y la población humana. 29. El cultivo or g nico de cacao es tabiliza una z ona amortiguadora de Cos ta Rica. 30. Las t cnicas de teleobs er vación ayudan a s alvar a las poblaciones autóctonas de peces del Lago Victor ia. E s t r at egia No. 6: Modificar las pr cticas de ges t ión de r ecur sos para aument ar el valor de las t ierras product ivas para el h bitat 31. El arroz de r iego pr opor ciona un h bitat para el p jaro cantor en California. 32. El riego por drenaje canalizado del agua de depresiones en Z imbabwe per mite cons er var las zonas h medas. 33. La t cnica de labr anza mínima cons erva la microfauna del suelo alr ededor del mundo. 34. El manejo for es tal conjunto r egener a los bosques naturales de la I ndia. 35. Una vacuna de us o veter inar io combate una enfermedad mor tal para el antílope y el u en frica Oriental.