CENSOS Y ENCUESTAS DE HOGARES EN LA MEDICIÓN Y CARACTERIZACIÓN DEL DÉFICIT URBANO HABITACIONAL

Transcripción

1 CENSOS Y ENCUESTAS DE HOGARES EN LA MEDICIÓN Y CARACTERIZACIÓN DEL DÉFICIT URBANO HABITACIONAL Minuta Presentación del Instituto Nacional de Estadísticas. Miriam Villarroel TALLER DE TRABAJO REPENSAR EL DÉFICIT URBANO HABITACIONAL MINVU-CEPAL- Santiago de Chile de abril de 2009

2 El uso de censos y encuestas de hogares en la medición y caracterización del déficit habitacional y el déficit urbano. El MINVU busca abordar dos tipos de déficit, el déficit habitacional y el déficit urbano, así como la interacción entre ambos. El déficit habitacional tiene que ver con el número y calidad de las viviendas, tiene que ver con la satisfacción de una necesidad de las personas en tanto parte de un hogar particular, o sea tiene que ver con generar espacios privados suficientes y adecuados para el alojamiento de los hogares y sus miembros. El déficit urbano tiene que ver con el número y calidad de la disponibilidad de espacios, servicios y equipamientos urbanos, también tiene que ver con la satisfacción de necesidades de las personas pero no en su ámbito privado, sino en el ámbito común, compartido con el resto de la comunidad, o sea, tiene que ver con generar espacios públicos suficientes y adecuados. La presentación buscará dar cuenta de los diferentes aportes que entrega el Ine para la estimación de los déficit urbano y habitacional. Sobre el déficit habitacional: El Censo como principal fuente de datos para la estimación del déficit habitacional 1- El INE ha sido la institución que ha entregado los insumos básicos para la evaluación y cálculo del déficit habitacional, ya que los censos son la fuente central de datos empleados para dicho cálculo. El Censo entrega datos a través de: - la sección de viviendas, que permite estimar el déficit cualitativo al identificar viviendas precarias, e identificar hacinamiento al registrar el número de piezas de las viviendas que son utilizadas por el hogar para el alojamiento. - la identificación de las viviendas que tienen más de un hogar. - la identificación de las relaciones de parentesco al interior de un hogar, lo que permite establecer criterios para calcular los núcleos familiares allegados al interior de un hogar. No nos extenderemos en las metodologías de cuantificación del déficit habitacional, ya que el Minvu y la Celade tienen una amplia experiencia en este tema. 2- En el marco de los estudios que se están efectuando para el próximo Censo de Población y vivienda (2012), y en relación con el tema del déficit habitacional, se está analizando la posibilidad de introducir algunas modificaciones en el cuestionario censal, específicamente en este contexto cabe mencionar la pregunta por las relaciones de parentesco, en la cual se estudia introducir especificaciones sobre las relaciones de paternidad con los hijos. Esto podría entregar nueva información al momento de calcular el déficit habitacional de las familias allegadas a un hogar extenso. 3- También cabe señalar que se están estudiando diferentes metodologías para generar proyecciones de hogares con los resultados del próximo Censo. Hasta el momento los resultados de los Censos se emplean para realizar proyecciones de población, sobre las cuales se sostiene todo el sistema estadístico. Se estudia complementar estas proyecciones con proyecciones de hogares, lo que podrá ser una contribución para la estimación de las futuras necesidades de viviendas y la estimación de la evolución del déficit habitacional.

3 4- El INE tiene que ser parte de cualquier discusión sobre el tema para analizar como se pueden adecuar las variables que mide el Censo. En este sentido es necesario enfatizar que es imposible separar la producción del dato del posterior análisis. La producción de un instrumento para generar datos estadísticos implica variabilizar la realidad, conceptualizar las problemáticas y pensar tanto en indicadores como en las visiones de lo deseable como meta de política pública, por lo que la producción del instrumento delimita en gran medida las posteriores posibilidades de estudio. Por ello el Ine tiene que ser parte de cualquier discusión sobre los fenómenos que cualquier institución quiere que el Censo mida, como el déficit habitacional. Sobre el déficit urbano: Instrumentos que permiten una aproximación indirecta al conocimiento del déficit urbano: Censo 1- Con respecto al déficit urbano, tanto a nivel nacional como internacional, hay menos adelantos: falta conceptualizar el déficit urbano, falta dimensionarlo, faltan índices e indicadores para cuantificarlo, falta generar instrumentos para medirlo. Pero algún avance se ha realizado y el Ine ha trabajado en eso. 2- El censo también permite caracterizar zonas o barrios, al agregar los datos de vivienda, hogares y personas en unidades mayores (como las manzanas). Así, por ejemplo, siguiendo recomendaciones de Naciones Unidas se han podido caracterizar determinadas zonas de las ciudades como tugurios. En este caso lo que se hace es agregar datos sobre ámbitos privados (viviendas/hogares) buscando dar una visión del entorno urbano común, en tanto las viviendas y los hogares presentan características comunes, conformando zonas homogéneas. Pero, qué pasa con los espacios de uso público, con el entorno compartido de los hogares y personas, los lugares de uso y desplazamiento cotidiano que influyen directamente en los modos como se relacionan las personas y en su calidad de vida? Sistema de encuestas de hogares 3- El INE llega a los espacios públicos desde los hogares, a través de las encuestas de hogares. Estas encuestas permiten recoger la evaluación que se hace de distintas dimensiones del espacio público en base a la percepción, experiencia y uso que desde el ámbito del hogar se tiene de dichas dimensiones. 4- Así, se ha conformado un conjunto de encuestas de hogares que han entregado datos sobre la percepción del entorno inmediato de los hogares ( el barrio ) o sobre el entorno más amplio (comunas o ciudades). Estas encuestas recogen atributos y cualidades que los ciudadanos, en función de sus prácticas, percepciones y experiencias, le asignan a los territorios. Dichas cualidades del territorio, si bien no nos muestran directamente las carencias específicas, objetivas, de los espacios de uso público, nos entregan luces sobre la manera en que se configuran las ciudades y los atributos que la población le asigna a esos espacios.

4 5- Como ejemplo de encuestas de hogares que recogen evaluaciones o datos del entorno urbano y las prácticas asociadas al territorio urbano, se puede mencionar: - Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana (Ministerio del Interior, INE): Entrega datos sobre la percepción de inseguridad en diversos entornos urbanos, como barrio, calles, plazas, etc. - Encuesta Piloto sobre Uso del Tiempo (MINSAL, OPS, INE): Da información sobre tiempos de traslado en el Gran Santiago. - Nueva Encuesta Nacional de Empleo (INE): Entrega datos de conmutación, ya que recopila información sobre el lugar de residencia y la comuna donde está el lugar de trabajo. - Encuesta de Consumo Cultural y Uso del Tiempo Libre (Consejo Nacional de la Cultura, INE): Recoge información sobre la participación en actividades callejeras, locales y comunales. Sin embargo, estas encuestas, aunque son útiles para caracterizar ciertos elementos del espacio público, y a través de ellos entregan luces sobre carencias y déficits, no están diseñadas para abordar directamente el problema del déficit urbano en su pluralidad de dimensiones. Encuestas de hogares que permiten una aproximación directa al conocimiento del espacio urbano, encuesta de Percepción de Calidad de Vida Urbana: Objetivos de la encuesta. 6- El año 2007 el Ine, en conjunto con el Minvu, realizó una primera encuesta que se relacionó de un modo más directo con este tema, la encuesta de Percepción de Calidad de Vida Urbana. Esta encuesta buscaba: - Conocer los niveles de satisfacción de la ciudadanía respecto al equipamiento y servicios de las comunas y barrios donde habitan. - Conocer la frecuencia de uso de la infraestructura y los servicios urbanos. - Conocer el nivel de participación e información respecto a medidas que apuntan a mejorar el entorno urbano. Todos estos factores apuntan a las condiciones de habitabilidad de las ciudades desde el punto de vista de la percepción de las personas, y reflejan la visión que los entrevistados tienen sobre el espacio urbano que los rodea. Esto entrega indicadores sobre la manera en que las personas experimentan las carencias de sus ciudades, visión central al momento de identificar el déficit urbano. Discusiones en el marco del diseño de la Encuesta sobre la conceptualización y medición de la calidad de vida urbana. 7- En el contexto del Taller sobre déficit urbano habitacional, resulta más interesante que el análisis de los resultados de la encuesta (que están disponibles) considerar el proceso de generación de la encuesta, que requirió un trabajo conjunto del MINVU y el INE para conceptualizar lo que se entendería por calidad de vida urbana, y buscar mecanismos para su medición. Esta discusión puede anticipar algunos de los temas que deben ser abordados al intentar entrar en la problemática del déficit urbano.

5 8- Mencionaremos algunas discusiones que se dieron en este contexto: - Discusión sobre la calidad de vida, la calidad de vida en el marco de los espacios urbanos públicos, y los modos de dimensionarla: El Ine hace estudios sobre fenómenos de carácter más bien objetivos, cómo el desempleo, ligados a las condiciones de vida de la población. Por tanto, la demanda del MINVU de indagar en un tema referido a la calidad los espacios públicos urbanos obligó a poner la mirada en las metodologías que apuntara a medir la percepción y construir, por primera vez, una encuesta que apuntaba a indagar en aspectos eminentemente subjetivos. La idea de calidad de vida está directamente vinculada con los sentimientos de bienestar, y con la satisfacción de necesidades. El problema que se presenta al intentar especificarla y dimensionarla es que los sentimientos de bienestar y la definición de las necesidades, así como los medios para satisfacerlas, varían dependiendo de las expectativas y valorizaciones de los diferentes grupos sociales en función de sus condiciones económicas y culturales así como de variables vinculadas a la edad y el sexo. Por ello es imposible definir a priori una determinada forma de la calidad de vida ni un conjunto inequívoco de necesidades, lo cual obliga a centrar la medición en apreciaciones sobre un conjunto amplio de dimensiones, sabiendo que ellas tendrán diferentes escalas de importancia para cada grupo social. La calidad de vida urbana, hace referencia a características territoriales del espacio urbano, así como a la pluralidad de equipamientos y servicios que aloja, y con ello a las prácticas e interacciones que posibilita que se den en su interior. Así, la noción de calidad de vida adquiere una dimensión espacial, ambiental, física, que se concretiza en las condiciones que entregan barrios, comunas y ciudades para su habitabilidad, las cuales son experimentadas y evaluadas desde las expectativas que surgen desde diferentes perspectivas generacionales, socioeconómicas, culturales y de género. Esta interacción entre lo territorial y las expectativas de los diferentes grupos sociales hizo necesario generar un instrumento de recolección de datos enfocado en la percepción. - Discusión sobre el tipo de ciudades y sus implicancias en términos de los problemas (los déficit ) específicos de cada tipo de ciudad, y las necesidades que deben ser satisfechas: Un desafío de la discusión fue considerar las diferentes realidades urbanas, relativizando las perspectivas excesivamente santiagocéntricas, que identifican lo urbano con las grandes metrópolis. Por ejemplo, son muy diferentes las necesidades de áreas verdes, de eliminación de aguas lluvia, de interconexión interna y externa, etc. entre una ciudad de de habitantes y una de Con esto se ve que no hay que imponer los criterios metropolitanos para la evaluación del déficit en ciudades con otras características, lo que tiene directa implicancia en la forma que adquieren las preguntas del cuestionario y en la forma de leer los resultados. Además esto trajo implicancias en el diseño muestral, ya que el Minvu entregó una tipología de ciudades que el Ine incluyó en el diseño muestral, lo que fue una novedad en términos del abordaje metodológico de una encuesta de hogares. - Discusión sobre la noción de barrio, es decir, sobre el entorno urbano inmediato de las personas: Luego de analizar algunas posibilidades de conceptualizar la noción de barrio, se asumió que en el marco de una encuesta de percepción no se podía tomar un concepto predefinido del barrio, sino que había que asumir que cada persona le daría a la noción un significado dependiente de sus propias experiencias.

6 - Discusión sobre la adecuación de las unidades de muestreo y de análisis de las encuestas de hogares: Habitualmente las unidades territoriales a partir de las cuales se elaboran las muestras de las encuestas de hogares se sustentan en la división político administrativa del país (centralmente comunas y regiones). Esto mostró algunas limitaciones para el estudio del fenómeno urbano, que tiende a ser mirado desde las perspectivas del barrio y la ciudad. Estas entidades, el barrio y la ciudad, no son unidades estándar del marco muestral de las encuestas de hogares que realiza el Ine, por lo que no se emplearon para el diseño muestral, pero el analizar el desafío de incorporar ese tipo de unidades quedó planteado para una próxima versión de la encuesta. - Discusión sobre la autoidentificación de las personas en relación a las ciudades: Hay entidades territoriales urbanas definidas técnicamente por el Minvu como una unidad, como una ciudad, pero que no son experimentados por sus habitantes de esa manera. Nos referimos a conurbaciones como el gran Concepción o el gran Valparaíso, que no logran identificar a sus habitantes con una identidad urbana unitaria (un viñamarino no se siente parte de la ciudad de Valparaíso ). Esto planteaba problemas al momento de diseñar preguntas que apuntaban a las visiones de los entrevistados sobre las ciudades que habitan, ya que su sentido de ciudad no tiene relación con la definición técnica de ciudad. Finalmente en el cuestionario se consultó por ciudad en sólo en el caso de Santiago. - Discusión sobre la relación entre la satisfacción y el uso de la infraestructura urbana. La satisfacción sobre determinado equipamiento o servicio urbano se vincula de diferentes maneras con su uso o falta de uso. Hay casos en que el no uso de un servicio o infraestructura pública indica indiferencia hacia el servicio, otros en los que indica una alta insatisfacción que hace que se evite, otros en los que indica inexistencia. Estas alternativas tenían que reflejarse en el cuestionario, por lo que se decidió incluir módulos de uso que pudieran relacionarse con los de satisfacción. Además se debió analizar la pertinencia de la categoría de respuesta no existe para cada pregunta sobre algún servicio urbano. 9- El conclusión. Lo que nos convoca es la discusión conceptual de los déficit habitacional y urbano, los conceptos, categorías, dimensiones, metodologías, indicadores, e instrumentos para conceptualizarlos y medirlos. En este marco el Ine como organismo oficial productor de estadísticas no puede estar ausente porque: - Produce y está a cargo del instrumento que recoge la información central para el déficit habitacional, el Censo. - Tiene un sistema de encuestas de hogares que entrega información que puede ser aprovechada para evaluar el déficit urbano, sistema que podría evaluarse en términos de su pertinencia para el análisis de fenómenos territoriales. - Acumuló experiencia en las discusiones que tuvieron lugar al momento de diseñar el instrumento de la Encuesta de Calidad de Vida Urbana, discusión que puede anticipar algunos de los temas centrales en torno al déficit urbano. - Además, en términos generales, no se puede separar la discusión conceptual de la producción de los instrumentos de medición ni de la aplicación de dichos instrumentos en el levantamiento de información, por lo que el rol del Ine como ente productor de estadísticas implica un papel en la reflexión conceptual para la generación de metodologías, indicadores e instrumentos de recolección de información.