Una aproximación al Deporte desde la Economía. El papel de la Fundación Observatorio Económico del Deporte (FOED)

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1 Encuentro Nacional de Observatorios del Deporte 3-5 Noviembre de 2010, Sevilla Una aproximación al Deporte desde la Economía. El papel de la Fundación Observatorio Económico del Deporte (FOED) Fernando Lera López Universidad Pública de Navarra Fundación Observatorio Económico del Deporte 1

2 Una aproximación al Deporte desde la Economía. El papel de la Fundación Observatorio Económico del Deporte (FOED) 1. Introducción Durante las últimas cuatro décadas, ha habido una profunda transformación no sólo en la concepción de la práctica deportiva, sino también en la importancia económica de la misma. Hasta la década de los 60, el deporte era una práctica fundamentalmente local, ampliamente dependiente del voluntariado (Gratton y Taylor, 2000). Como consecuencia, la importancia económica y social del deporte era pequeña. Desde los años 70, y en el marco del movimiento europeo de deporte para todos, los países europeos, entre ellos España, han sido testigos de un incremento muy significativo de la participación deportiva, que ha convertido al deporte en una actividad con una creciente importancia económica. Asimismo, hemos asistido a una creciente diversificación de dicha práctica, con una pérdida de importancia de la práctica deportiva organizada y el aumento de las actividades deportivas realizadas de manera individual y no organizada, así como la aparición de múltiples modalidades deportivas que combinan el deporte con el turismo o la aventura. El caso español refleja adecuadamente estos cambios cuantitativos y cualitativos que ha sufrido el deporte. Si en 1975, el 22% de los mayores de 18 años participaba en actividades deportivas, en el año 2005 el porcentaje se eleva hasta el 40%. Asimismo, la diversificación de la práctica deportiva es también una realidad en España. En el año 1975 apenas el 7% de los españoles practicaba más de un deporte, porcentaje que se duplica en el año 2005, hasta alcanzar el 15% (García Ferrando, 2006). En este contexto de desarrollo de las actividades deportivas en muchos países, desde finales de los años 80 se ha ido abordando paulatinamente desde el ámbito económico el análisis de la importancia económica del deporte y en especial del consumo de los hogares en bienes y servicios deportivos. En las siguientes páginas se recoge como la economía ha abordado el estudio de este bien, denominado deporte. 2. El deporte como actividad económica. El progresivo incremento de la práctica deportiva en muchos países, auspiciada por movimientos europeos como Sport for All (Deporte para todos, Comisión Europea, 1992) y por el desarrollo de políticas de fomento del deporte en distintos segmentos de edad para mejorar el estado de salud de la población, desarrollar hábitos en los jóvenes, etc., llevó a la 2

3 aparición a finales de los años 80 de diversos trabajos en diferentes países, que desde diferentes perspectivas y metodologías, han tratado de analizar el deporte desde una perspectiva económica, con el objetivo de estimar su importancia económica. De este modo, la economía del deporte constituye un área de investigación relativamente reciente que pretende considerar al deporte como un bien, cuya producción, consumo, financiación y gestión responde a criterios de racionalidad económica (Castellanos, 2001, pág. 181). Así, las interrelaciones entre economía y deporte se han intensificado en muchos países. Por un lado, el deporte ha abierto a la economía nuevos y rentables mercados en actividades como la medicina deportiva, el desarrollo de servicios deportivos (gimnasios y centros de fitness), nuevos espectáculos deportivos, el patrocinio deportivo, las emisiones televisivas y la prensa deportiva, entre otros. Por otro lado, la economía ha dotado al deporte de una estructura de pensamiento diferente para adoptar sus decisiones y evaluar las consecuencias de las mismas (Pedrosa y Salvador, 2003). Figura 1. El deporte como actividad económica DEPORTE COMO ACTIVIDAD ECONîMICA Toma de decisiones econ micas y actuaci n Aspectos socio-econ micos Sujetos Consumidores Socios del club Productores Investigadores AAPP çmbitos Gastos privados Empleo de tiempo Financiaci n Inversiones priv./pœblicas Estructura y pol tica econ mica Situaci n econ mica Empleo Renta Nacional Crecimiento Comercio Exterior Efectos socioecon micos Redistribuci n Urbanismo Infraestructuras Ecolog a Salud Integraci n social Elementos institucionales Agentes organizativos Hogares Clubes y federaciones Oferentes Estado Fuente: Heinemann, 1998 y Dom nguez Mart nez (2006) Mecanismos de coordinaci n Mercado Votaci n democr tica Planificaci n Otras estructuras Derechos de propiedad Sistema impositivo Seguridad jur dica De este modo, la gestión económica se ha incorporado como elemento fundamental en la producción y la prestación de cualquier producto y servicio deportivos. Así, la relaciones 3

4 entre deporte y economía se han ido estrechando, como indica Heinemann (1998). La Figura 1 recoge las implicaciones de considerar el deporte como una actividad económica. No obstante, son varios los problemas que es preciso superar cuando se pretende analizar la importancia económica del deporte. A la imprecisión conceptual reinante sobre la definición y concepto de deporte y la amplitud de su campo de análisis, hay que añadir la ausencia de estadísticas fiables, sistemáticas y homogéneas tanto sobre valores de intensidad de práctica como de gasto deportivo. Primeramente, existen dos concepciones contrapuestas del concepto de deporte. Mientras que en Estados Unidos el deporte queda reducido a la práctica deportiva organizada (competición, animación, etc.), en el ámbito europeo, su concepción es mucho más amplia, englobando a actividades físicas y deportivas que puedan ser realizadas de manera individual y no organizada. A su vez, y dadas las características de bien público que tiene el deporte por sus implicaciones sociales, sanitarias, educativas o culturales, los gobiernos han intervenido en una mayor o menor medida en su gestión y desarrollo. Aunque cabe distinguir dos enfoques claramente diferenciados: liberal y privado (Reino Unido), por un lado, estatal por otro (Francia, España), la realidad europea en la gestión pública del deporte es más compleja, como ha puesto de manifiesto el European Observatoire of Sport Employment (EOSE, 2005). De este modo, todavía continúan vigentes las palabras del más famoso especialista español en teoría y filosofía del deporte, el profesor Cagigal sostenía que nadie ha podido definir con general aceptación en qué consiste el deporte, a pesar de que su desarrollo se ha convertido en un hecho social (Cagigal, 1981). Asimismo, con el devenir de los años y la socialización del deporte, las distintas actividades deportivas se han ido vinculando a dos grandes tipos de deportes, que a veces han aparecido como contrapuestos: el deporte profesional y de alta competición, por un lado, y el deporte para todos, por otro. No obstante, independientemente de la concepción que se quiera considerar, y como indican Pedrosa y Salvador (2003), el bien deporte se trata de un producto muchas veces intangible, efímero, experimental y subjetivo (su valoración depende de la experiencia vivida, única y personal), se elabora y se consume casi simultáneamente, cambia vertiginosamente en un contexto de necesidades de los demandantes cambiantes e imprevisibles. A ello, y desde una perspectiva económica, hay que señalar que puede ser objeto, tanto de consumo final, como intermedio para la elaboración de otros productos (Gouguet, 2006). A su vez, se puede considerar desde la perspectiva de un bien privado o desde la concepción de un bien público que las autoridades tienen que garantizar y fomentar. 4

5 Como todo bien económico, su consumo exige en muchos casos pagar un precio, bien directamente o indirectamente si como bien público se paga a través de impuestos. Pero además su consumo exige tiempo, y por ello tiene que competir con las distintas alternativas de ocio que los individuos desarrollan en su tiempo libre. Por todo ello, su demanda dependerá de múltiples factores entre los que podemos destacar la preferencia de las personas por su práctica, los precios del mismo y de sus productos sustitutivos, el tipo, calidad y características de los bienes y servicios deportivos ofertados, la cantidad y estructura del tiempo libre, la información y disponibilidad de formas para practicarlo, el apoyo institucional, las modas perecederas del momento, el estado de salud y las condiciones físicas y psíquicas de los potenciales demandantes, entre otras variables. La Figura 2 recoge los principales flujos que se pueden generar por el consumo de bienes y servicios deportivos por parte de los múltiples agentes que intervienen, destacando especialmente el papel de las familias. Figura 2. Flujos económicos generados por las actividades deportivas FLUJOS GENERADOS POR LAS ACTIVIDADES DEPORTIVAS FAMILIAS Bienes caracter sticos (material deportivo) COMERCIOS SECTOR EXTERIOR Productos conexos (seguros, transporte É ) RESTO DEL SISTEMA ECONîMICO INDUSTRIAS (material deportivo) Compras de bienes y servicios Servicios caracter sticos (formaci n É ) Apuestas deportivas SECTOR PòBLICO Compras de material deportivo Compras de material deportivo Compras de material deportivo Patrocinio Compras de bienes y servicios Impuestos Financiaci n pœblica ESTABLECIMIENTOS E INSTITUCIONES DEPORTIVAS. EVENTOS DEPORTIVOS Fuente: Otero, Isla y Fern ndez (2001) Evaluar la incidencia económica del deporte constituye una labor muy compleja, tanto por la concepción tan amplia del concepto bien deporte, como por la escasez de 5

6 información estadística fiable y homogénea de los flujos económicos que se generan en el mismo. Su medición, como indican Pedrosa y Salvador (2003) requiere identificar correctamente el valor de la producción de bienes y servicios deportivos, la cantidad de factores utilizados en ella, el valor añadido creado, las exportaciones e importaciones de productos y servicios deportivos, los costes y beneficios de las actividades deportivas realizadas. De este modo, sus implicaciones afectan tanto al ámbito macroeconómico como al ámbito microeconómico. La Figura 3 recoge algunos efectos económicos del deporte que hay considerar en su evaluación. Figura 3. Efectos económicos del deporte EFECTOS ECONîMICOS DEL DEPORTE EFECTOS ECONîMICOS DEL DEPORTE EFECTOS MACROECONîMICOS EFECTOS MICROECONîMICOS Demanda Inputs Nivel de precio Tipo de inters Empleo Importaciones / Exportaciones Fuente: Dom nguez Mart nez (2006 ) Efectos Directos Efectos Indirectos Ingresos organizadores Gastos organizadores Coste/ B¼ (no monetarios ) Coste/ B¼ (monetarios ) Asimismo, resulta imprescindible la consideración del gasto de los diferentes agentes sociales implicados: deportistas profesionales, familias e individuos practicantes, empresas, y Administraciones Públicas. La Figura 4 esquematiza esas relaciones y el papel que juegan los multiplicadores en las estimaciones, que permiten distinguir entre efectos directo e inducido de la actividad deportiva en términos económicos. 6

7 Figura 4. Gasto directo de los distintos agentes en actividades deportivas y su impacto sobre la economía Gasto directo en deporte por los distintos agentes Deportistas Aficionados Gasto directo Efecto multiplicador Multiplicador Tablas Input- Output Impacto en la econom a del pa s/regi n Generaci n PIB Empresas Patrocinio/ Publicidad Administraci n pœblica y benefactores privados Actividades relacionadas con el DEPORTE Efecto indirecto Efecto inducido Mantenimiento empleo Generaci n ingresos para la Hacienda Pœblica Fuente: Elaboraci n propia a partir de KPMG Consulting (2002) Metodología de análisis de la importancia económica del deporte De acuerdo con Kurscheidt (2000), los principales enfoques utilizados en los distintos trabajos de análisis del impacto económico del deporte son los siguientes: A.- Sistemas de Cuentas Económicas del deporte (TEC) basados en la metodología de elaboración de las Cuentas Nacionales de la Contabilidad Nacional, y las Cuentas Satélites. Esta metodología se utiliza en los estudios que tratan de evaluar la incidencia o importancia del deporte en el conjunto del sistema económico y analizar su impacto macroeconómico. Dentro de este marco metodológico, se elaboran las tablas de oferta (producción) y demanda (intermedias y finales), desagregadas por industrias y por productos (bienes y servicios) generados en dichas ramas. Ello permite, por un lado, la estimación de lo que se denomina la oferta deportiva o el PIB deportivo o el valor añadido bruto (VAB) del deporte y su distribución vía rentas de trabajo y rentas mixtas. Asimismo, permite determinar el destino final, es decir, las demandas deportivas de consumo público y privado, de formación bruta de capital o inversión productiva pública y privada, y la demanda exterior o exportaciones. Adicionalmente, las Cuentas Satélites agrupan los datos en unidades monetarias y no monetarias, permitiendo calcular indicadores de la participación de la actividad deportiva en el conjunto de la economía distinguiendo entre distintas ramas productivas. 7

8 En el año 2006 bajo la presidencia austriaca de la Unión Europea, se creó el grupo de trabajo Sport & Economics, liderado por la Comisión Europea y que en el marco del desarrollo del Libro Blanco del Deporte (Comisión Europea, 2007) ha estado desarrollando unas cuentas satélites del deporte de manera preliminar en un grupo de países. Primeramente, y de común acuerdo en lo que se conoce como la Vilnius Definition of Sport se llego a una definición consensuada de lo que cabe entender como deporte, para en una segunda etapa recoger todas las actividades económicas relacionadas con el deporte, tanto a nivel de práctica activa como de práctica pasiva (asistencia a eventos deportivos, derechos televisivos de eventos deportivos, apuestas deportivas, etc.). En estos momentos, ya se dispone de resultados preliminares para tres de los países implicados en el desarrollo de estas cuentas satélites del deporte: Reino Unido, Austria y Chipre (Comisión Europea, 2010). B.- El análisis Input-Output. Los análisis input-output, incluyen todos los métodos y aplicaciones de carácter cuantitativo usados para diagnosticar y predecir las interdependencias estructurales de una economía. Para ello se utilizan las tablas estadísticas de entrada y salida o Tablas Input-Output (TIO), que a través de una representación matricial por bloques, recogen los flujos monetarios de bienes y servicios del total de la economía, desagregada por ramas de actividad o industrias. Las TIO están compuestas de tres bloques de información económica: el de consumos intermedios o de relaciones interindustriales, el de demandas finales y el de inputs primarios. Su objetivo es analizar con detalle las relaciones interindustriales entre las diferentes ramas de actividad de una economía nacional o regional. Esta herramienta de análisis nos proporciona un panorama desagregado de la actividad económica de cada industria o rama y la interdependencia entre todas las ramas. Es decir, por columnas nos proporciona información sobre el origen de los recursos (consumos intermedios y salarios más excedentes brutos o valor añadido) que cada rama necesita para realizar su actividad productiva y por filas, los destinos o empleos de cada rama (demandas intermedias y finales) de su output o producción. C.- El análisis Coste-Beneficio (ACB). Se trata de una metodología amplia y flexible, que permite evaluar las repercusiones socioeconómicas de grandes proyectos públicos, estimando el valor actual neto (VAN) de los costes y beneficios, es decir de los impactos cuantitativos y cualitativos, positivos y negativos que el proyecto genere. El análisis de costes y beneficios, es el enfoque más adecuado para evaluar los impactos de un evento deportivo (juegos olímpicos, campeonatos del mundo, etc.). El criterio de decisión en este caso concreto consiste en aceptar el proyecto sí el valor actual 8

9 neto es positivo, dado que en este tipo de eventos es difícil identificar una alternativa desperdiciada o coste de oportunidad. D.- Análisis sectoriales y regionales. Finalmente, siguiendo el enfoque metodológico desarrollado por Pedrosa y Salvador (2003) se pueden considerar los análisis sectoriales y regionales. Estos análisis pueden complementar las magnitudes que proporcionan las cuentas económicas y las cuentas satélites del deporte. Proporcionan informaciones desagregadas y detalladas, tanto a nivel sectorial como a nivel regional de la actividad e importancia económica del deporte. La Figura 5 recoge un resumen de los distintos instrumentos metodológicos desarrollados para conocer mejor la importancia y relevancia económica del deporte. Figura 5. Instrumentos de medición de la importancia económica del deporte INSTRUMENTOS DE MEDICIîN DE LA IMPORTANCIA ECONîMICA DEL DEPORTE RASGOS ESPECêFICOS INSTRUMENTOS MEDICIîN RASGOS COMUNES LIMITACIONES VALORACIîN GLOBAL DEL DEPORTE CçLCULO INDICADORES Y COEFICIENTES REALIZACIîN EJERCICIOS DE SIMULACIîN VALORACIîN EFECTOS EXTERNOS ELABORACIîN PROGRAMAS ACTUACIîN ESPECêFICA TEC : Tablas econ micas del consumo CS : Cuenta Satlite AIO : An lisis AS : An lisis sectorial AR : An lisis regional Input-Output TEC Fuente: Dom nguez Mart nez (2006) a partir de Pedrosa y Salvador (2003) CS AIO ACB AS AR ENFOQUE MACROECONîMICO PERMITE: - DESAGREGAR FLUJOS - CONSTRUIR SISTEMA DE CUENTAS ECONîMICAS - EVALUAR EXPOST INCIDENCIA ECONîMICA DEL DEPORTE ESTRUCTURA Y FINANCIACIîN ENFOQUE PARCIAL E INFRARREGIONAL PERMITE: -EVALUAR REPERCUSIîN SOCIOECONîMICA DEPORTE - SUMINISTRAR INFORMACIîN DETALLADA Y PORMENORIZADA - DIFICULTAD EN LA MEDICIîN - CENTRARNOS EN EL CORTO PLAZO Y EN LO INTANGIBLE - ELEVADO COSTE - DIFICULTAD DE APLICACIîN - ELEVADO COSTE - ESCASA RELACIîN RESTO SISTEMA ECONîMICO 3. Estimaciones económicas de la importancia del deporte a nivel internacional Una vez descrito el marco teórico para abordar el análisis económico del deporte, y principalmente la cuantificación de la importancia económica del mismo, vamos a señalar brevemente la evidencia empírica disponible a nivel internacional. Las primeras estimaciones fueron recogidas por Jones (1989), en un pionero trabajo para estimar la importancia económica del deporte en distintos países europeos. Desde este primer trabajo, han ido surgiendo distintos estudios en Europa, tanto a nivel nacional como a 9

10 nivel europeo (Andreff et al., 1995). Entre los primeros, cabe citar las estimaciones realizadas entre otros países en Bélgica, Finlandia, Francia, Alemania, Italia y el Reino Unido en distintos trabajos nacionales (véase Lera et al., 2008 para una revisión de la literatura). Posteriormente, distintos trabajos a nivel europeo, algunos de ellos desarrollando unas cuentas satélites del deporte, han tratado de obtener estimaciones más fiables de la importancia económica del deporte. A nivel del conjunto de la Unión Europea, destaca el trabajo de Dimitrov et al. (2006), que estima en un 3,7% del PIB europeo la importancia del deporte, incluyendo tanto su impacto directo como indirecto. Por países, Amnyos (2008) estima la importancia económica del deporte en países como Francia (1,8% del PIB), Alemania (1,4%), Finlandia (1,76%), Portugal (0,96%) ó Suecia (0,52%). Desarrollando cuentas regionales, en el Reino Unido las estimaciones alcanzan el 2,6% del PIB (SIRC, 2010), el 2,4% en Chipre, y el 4,0% en Austria (Comisión Europea, 2010). Fuera del ámbito europeo, distintos trabajos han tratado de cuantificar la importancia económica del deporte. A nivel mundial, Naciones Unidas (UNEP, 2006) habla de aproximadamente el 3% del PIB mundial. Para Estados Unidos, en Mukherjee et al. (2010) se recogen valores entre el 2,3-3,3% del PIB del país, mientras que en el caso de Japón, el valor sube al 3,9% del PIB japonés. Para Canadá, se cifra la importancia del deporte en el 1,2% del PIB del país. No obstante, conviene constatar que la ausencia hasta el momento de una armonización en la elaboración de estadísticas económicas del deporte y la no consideración del deporte y las actividades económicas que lo engloban como una unidad estadística de información dificultan enormemente toda comparativa a nivel internacional. Asimismo, conviene indicar que la inexistencia de una definición común y aceptada de lo que es la actividad deportiva, a pesar de los esfuerzos realizados en el marco del Proyecto COMPASS (COMPASS, 2002), generan también dificultades metodológicas a la hora de realizar comparaciones entre distintas regiones y países. Como indica Domínguez Martínez (2006), la evaluación económica del deporte es una labor compleja debido a la multiplicidad de flujos reales y financieros y de agentes involucrados: familias, sector industrial, sector comercial, sector de servicios deportivos, sector exterior, y sector público. El consumo deportivo de los hogares europeos Dentro de los distintos componentes del consumo en deporte, la evidencia empírica pone de manifiesto una tendencia ascendente del consumo deportivo en la participación del gasto familiar, mientras que ha descendido drásticamente la proporción del gasto público en 10

11 deporte (Taks y Késenne, 2000). De hecho, el consumo privado en deporte ha crecido a tasas más elevadas que el gasto familiar en muchos países europeos (Sport Industry Research Centre, SIRC, 2004). Todo ello ha llevado a que según distintas estimaciones (Andreff, 2006; Amnyos, 2008), en la mayoría de países europeos la contribución económica de los hogares al conjunto de la actividad económica del deporte sea superior a la del resto de agentes económicos (empresas, y gobiernos centrales y locales). Así, en países como Alemania o el Reino Unido, el peso del consumo de los hogares sobre el total del consumo en bienes y servicios deportivos es superior al 75%. En Suecia, Finlandia o Holanda, los valores son cercanos al 70%. No obstante, y pese a que el componente de gasto personal o familiar puede suponer la mitad de la contribución del sector deportivo al PIB de una economía, el análisis del consumo privado ha recibido escasa atención. Apenas cuatro trabajos nacionales -SIRC (2004) en el Reino Unido, Weber et al. (1995) en Alemania, el Ministerio de Juventud y Deporte en Francia (2001)-, Lera et al. (2008) para España y dos regionales Taks y Késenne (2000) en Flandes (Bélgica) y Rapún et al. (2004, 2008) en Navarra (España)- han analizado con detalle la importancia del consumo de los hogares en la práctica deportiva, distinguiendo entre costes asociados a la práctica deportiva activa y consumo asociado a la práctica deportiva pasiva, siguiendo la metodología de Taks et al. (1999) y Taks y Késenne (2000). De acuerdo con la escasa evidencia empírica, se detectan ciertas similitudes entre países. Así, países como Alemania o regiones como Flandes muestran un gasto deportivo asociado principalmente a la participación activa en deportes, mientras que en el Reino Unido y en España la participación de la práctica deportiva pasiva en el conjunto del gasto en deporte de las familias e individuos es superior (Lera et al., 2008). Otros estudios, como los de Michon et al. (1987) y Michon y Ohl (1989) se han centrado en la estimación del consumo deportivo de determinados tipos de deportes y prácticas deportivas. En los trabajos que analizan los determinantes del consumo deportivo de las familias y los individuos, las variables sociodemográficas y económicas desempeñan un papel primordial como factores explicativos del mismo. Las primeras aportaciones se centran en la importancia explicativa de la edad, el género y los ingresos personales/familiares, aunque con resultados divergentes. De este modo, en general, se ha estimado que los hombres gastan más que las mujeres en deporte (Lamb et al., 1992; Gouguet, 1998; Ohl, 1991; Taks et al., 1995), aunque en otros estudios esta situación se ve condicionada por el tipo de deporte practicado, que resulta ser la variable relevante (Michon y Ohl, 1989, Michon et al., 1987; Ohl, 1991). 11

12 Por su parte, el nivel de renta suele estar relacionada positivamente con el consumo deportivo, mostrando que el bien deporte es un bien normal o de lujo. Evidencia empírica en este sentido la encontramos en Lamb et al. (1992), Michon y Ohl (1989), Pedrosa (2000), Taks et al. (1995), Villalba (2002). No hay una relación determinante entre la edad y el gasto deportivo. En algunos estudios, los grupos de menor edad gastan más (Lamb et al., 1992), mientras que en otros la edad está positivamente correlacionada con el gasto deportivo (Oga, 1998), y en otros trabajos la relación no es lineal con un máximo de gasto en los grupos centrales de edad (Gouguet, 1998). Posteriormente, otros estudios han incluido variables adicionales, como la ocupación y el nivel educativo. Desbordes et al. (1999) y Andreff y Nys (2001) muestran cómo los trabajadores menos especializados y los grupos sociales con menor educación tienden a estar negativamente relacionados con el consumo positivo. Sin embargo, Taks et al. (1999), y Gable y Ohl (2002) muestran una relación positiva. Menor atención ha recibido el tamaño del hogar en el consumo deportivo. Por un lado, Taks et al. (1999) muestran que las familias con niños gastan más en deporte, mientras que Gratton y Taylor (2000) no encuentran relación significativa alguna. Entre los últimos trabajos sobre el consumo deportivo, siguiendo la revisión de la literatura realizada por Breuer et al. (2010), cabe destacar los trabajos de Lera y Rapún (2005 y 2007) para España y de Wicker et al. (2010) para Alemania. En el caso español, se destaca como el consumo deportivo es mayor entre los hombres, y está relacionado positivamente con el nivel de ingresos y el nivel educativo, mientras que desciende conforme se incrementan la edad. En el caso alemán, se observa importante diferencias en el nivel de gasto según el tipo de deporte practicado, siendo los principales determinantes del gasto en deporte el nivel de renta y la frecuencia de práctica deportiva. No obstante, conviene advertir las dificultades metodológicas de la comparación de la evidencia empírica disponible, que tradicionalmente se centra en los gastos asociados a la práctica deportiva activa, dejando a un lado la incidencia económica de la práctica deportiva pasiva. 4. Estimaciones económicas de la importancia del deporte en España A continuación, se va a proceder a contextualizar la importancia del deporte en España, comparando la evidencia empírica disponible. A nivel nacional, el primer intento de cuantificación económica del deporte es el trabajo de Alonso et al. (1991), que estimaba en un 12

13 1,2% la contribución del deporte al PIB en España. Trabajos recopilatorios posteriores recogidos en EOSE (2005) estiman para el año 2003 en un 1,3% la importancia económica del deporte en España. Posteriormente, y en el marco del desarrollo autonómico y la transferencia de competencias a las Comunidades Autónomas, se han realizado algunos trabajos de índole regional, como los de Otero et al. (2000, 2001), Villalba (2002) y UNICAJA y Junta de Andalucía (2010) en Andalucía, el de Pedrosa (2000) en Castilla y León, y los de Rapún et al. (2004, 2008) en Navarra. Recientemente, Domínguez Martínez (2006) ha recogido una revisión a nivel nacional e internacional. En particular, los trabajos de Otero et al. (2001), la Fundación Andalucía Olímpica (2001) y Villalba (2002) estiman en un 1,2% la importancia económica del deporte en el PIB andaluz, y en un 2,6% la participación del consumo en deporte en el gasto total de las familias andaluzas, lo que supone la mitad del gasto en ocio que recoge la Encuesta de Presupuestos Familiares en la región. El último trabajo realizado en esta Comunidad conjuntamente por Unicaja y la Junta de Andalucía (2010) cuantifica la actividad económica del deporte desde la perspectiva de la oferta y la demanda, obteniendo un gasto en deporte del 2,96% de la renta de la región, con una estimación de gasto medio por habitante de euros anuales en el año 2008, incluyendo la práctica activa y la pasiva. Para Castilla y León, las estimaciones realizadas por Pedrosa (2000) indican que el deporte supone el 2,5% del total del consumo regional, y el 1,4% del PIB de la región. Para Navarra el consumo en deporte supone el 1,82% del PIB regional del año 2006, y el 3,18% del consumo familiar de la región en dicho año. El trabajo realizado por KPMG Consulting (2002) para el País Vasco en el año 2001, estima en un 1,9% del PIB de la región la importancia económica del deporte, incluyendo tanto el consumo de los hogares, como de las empresas y las distintas Administraciones Públicas. Por su parte, Garai (2003) recoge que el gasto medio por deportista en la Comunidad del País Vasco fue de 433 euros en el año 2002 en el ámbito del deporte activo. Finalmente, a nivel nacional, destaca las estimaciones ofrecidas por Lera et al. (2008) en un trabajo financiado por el Consejo Superior de Deportes, donde se obtiene que el consumo de los hogares en deporte supone el 2,38% del PIB y el 3,5% del consumo total de los hogares en España para el año En términos de gasto medio por habitante, el gasto medio por español mayor de 18 años en deporte es de 595 euros anuales, 442 euros en práctica activa y 153 en deporte pasivo, que se incrementan hasta los euros entre los que practican deporte. De ese gasto, el 74% se concentra en deporte activo y el otro 26% en 13

14 deporte pasivo. Dentro de los gastos asociados al deporte activo, destaca la importancia de la ropa y calzado deportivos, que junto al material deportivo duradero suponen más del 50% de dicho gasto en deporte activo. Le siguen en orden de importancia las cuotas y abonos de club y sociedades deportivas y la adquisición de material deportivo duradero. En lo que se refiere al gasto en deporte pasivo, destacan especialmente cuatro componentes. En primer lugar, los programas deportivos de pago, que suponen casi una cuarta parte del gasto total en deporte pasivo. Le sigue en importancia la asistencia a espectáculos deportivos con un 20% del gasto, y las quinielas y apuestas deportivas, y los libros y prensa deportiva con un 18% respectivamente. Asimismo, se observa que los gastos asociados a la asistencia a eventos deportivos constituye el 40% del gasto en deporte pasivo. De este modo, se pone de manifiesto la importancia creciente que tiene en términos económicos determinadas actividades y componentes de gasto asociados al deporte pasivo, especialmente la asistencia a eventos y espectáculos deportivos y los programas deportivos de pago por televisión. Si realizamos una comparación entre las primeras estimaciones en la década de los 90 y las últimas, cabe reseñar una evolución creciente en la importancia económica del deporte. Es decir, el bien de consumo deporte es un bien con una elasticidad-renta superior a la unidad, pasando en el caso español del 1,2% del PIB para España en 1990 al 2,38% en En términos de empleo, diversos trabajos regionales en España cifran el peso del deporte en términos de empleo en el 1,7% de la población ocupada en Navarra (Rapún et al., 2004), el 2,2% en el País Vasco (Garai, 2003), el 1,5% de la población activa en Castilla y León (Pedrosa, 2000), y el 2,52% en Andalucía (Unicaja y Junta de Andalucía, 2010), con valores similares al de otros países como el Reino Unido, pero superiores la media europea (EOSE, 2005). Trabajos como el de Primault (2006) recogen valores de crecimiento del empleo cercanos al 100% en la década de los El desarrollo de observatorios económicos del deporte. El papel de la FOED La creciente importancia económica del deporte ha llevado no sólo a la aparición de una importante evidencia empírica que ha tratado de estimar el impacto económico del deporte en una sociedad, sino también a la creación de centros de investigación especializados en el ámbito de la economía del deporte. A nivel europeo, se pueden destacar el Sport Industry Research Centre de la Sheffield Hallam University (Reino Unido), el Centre de Droit et d Economié du Sport de la Université du Limoges (Francia) o el Institute of Sport Economics and Sport Management en la German Sport University Cologne (Alemania). 14

15 En España era patente la necesidad de crear también una institución que analizara específicamente y con un enfoque principalmente económico la realidad del deporte en nuestro país. Si bien, se habían desarrollado en nuestro país distintos trabajos e investigaciones sobre los beneficios y costes del deporte en relación con la salud, el bienestar o la capacidad de integración social del mismo, apenas se hablaba de la incidencia económica del deporte o del deporte como una industria económicamente relevante. Esta escasa presencia de los análisis económicos en el caso del deporte en España, propició la iniciativa del Departamento de Economía de la Universidad de Oviedo de crear la Fundación Observatorio Económico del Deporte (FOED) ante la falta palpable de estudios y de datos estadísticos fiables y completos en la mayoría de los deportes. La FOED se constituyó el 4 de octubre de 2007 en Gijón, siendo sus patronos fundadores el Ayuntamiento de Gijón, la Caja de Ahorros de Asturias, el Consejo Superior de Deportes y la Universidad de Oviedo. Posteriormente, en años sucesivos se incorporan la Liga Nacional de Fútbol Profesional (LFP) y el Gobierno del Principado de Asturias. Su sede social está en la Escuela Universitaria Jovellanos; Laboral, Ciudad de la Cultura, en Gijón. El director de la FOED es el catedrático Plácido Rodríguez Guerrero, profesor del Departamento de Economía de la Universidad de Oviedo y actual presidente de la International Association of Sports Economics (IASE), que recoge a los investigadores de economía del deporte a nivel mundial. La Fundación Observatorio Económico del Deporte pretende la búsqueda, sistematización y estudio de todos los datos económicos del deporte español, tanto en la vertiente profesional como amateur. En concreto, cabe destacar los siguientes objetivos o fines de la FOED: -Promover y elaborar estudios de carácter socio-económico sobre aspectos relativos al deporte en sus vertientes profesional, amateur y lúdica. -Recoger, tratar, sistematizar y difundir información de base en relación con los diferentes deportes. -Promover y asumir la enseñanza de materias relacionadas con aspectos socioeconómicos del deporte. -Impulsar el debate y el intercambio de conocimientos en la disciplina a través de congresos, seminarios, conferencias, etc. -Realizar tareas de asesoramiento en las materias objeto de interés del observatorio. -Fomentar las relaciones académicas con aquellos centros e investigadores de reconocido prestigio a nivel internacional 15

16 -Convertir el observatorio en un centro universitario de referencia a nivel internacional en los temas relativos al análisis socio-económico del deporte. En la realización de estos fines, la FOED está desarrollando diversos proyectos de investigación relacionados con la economía del deporte en convocatorias de carácter público y privado, ha organizado diversos congresos internacionales y nacionales, entre los cuales cabe destacar el I, II y III Congreso Internacional de Economía del Deporte, IV y V Gijón Conference of Economics of Sports, y el Primer Congreso Hispano-Americano del Deporte. Además, ha acogido la décima conferencia internacional de la International Association of Sport Economics (IASE), y ha participado en los cursos de verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP). Asimismo, colabora con otras instituciones académicas y no académicas nacionales e internacionales como la International Association of Sport Economics (IASE) y la recientemente creada European Sports Economics Association (ESEA), y en su seno se han desarrollado diversas tesis doctorales. Su equipo de investigadores comprende un prestigioso grupo de profesores de trece universidades españolas. Entre sus objetivos más inmediatos cabe destacar la recolección de la información económica sobre el deporte publicada por los medios de comunicación, las federaciones, las ligas, los clubes, los organismos deportivos internacionales etc., para hacer un Anuario Económico del Deporte. Está labor está siendo llevada a cabo por diversos investigadores del Observatorio y por los becarios que actualmente hacen sus prácticas en el mismo. 6. Conclusiones El deporte ha dejado de ser una actividad residual tanto en términos sociales como en términos de peso económico. En el caso de España, la importancia económica del mismo ha crecido desde un 1,2% del PIB en el año 1990 al 2,38% del PIB y el 3,5% del gasto en consumo final de los hogares en el año Estimaciones regionales obtienen valores semejantes en Andalucía, Navarra ó Castilla y León. A nivel nacional, el gasto medio del español en actividades relacionadas con el deporte es de 595 euros, de los cuáles el 75% son gastos relacionados con la práctica deportiva y el 25% restante con el deporte pasivo. La evolución en las estimaciones de la importancia económica del deporte parece indicar que el bien de consumo deporte se trata de un bien con una elasticidad-renta superior a la unidad. Asimismo, esta importancia económica del deporte en España parece estar en valores semejantes a las estimaciones realizadas en otros países europeos, con una distribución entre gasto activo y pasivo, semejante a la de países como el Reino Unido, y con 16

17 una importancia significativa del deporte pasivo. En términos de empleo, las estimaciones regionales realizadas en nuestro país señalan valores del 2,5% del empleo en Andalucía, por ejemplo, con valores por encima de la media europea y semejantes al país europeo con mayor peso del deporte en términos de empleo, el Reino Unido. La importancia económica del deporte ha favorecido la creación de instituciones cuya finalidad central es abordar el estudio del deporte desde una perspectiva económica. En el ámbito español, hay que destacar la creación en el año 2007 de la Fundación Observatorio Económico del Deporte (FOED) con la finalidad de abordar el análisis económico del deporte. En su breve trayectoria hasta la actualidad se ha convertido en un referente nacional e internacional en el ámbito de la economía del deporte. 7. Referencias Alonso, J., Ruesga, S., Sáez, F. & Vicens, J. Impacto económico del deporte en España. Revista de Investigaciones y Documentación sobre las Ciencias de la Educación Física y el Deporte, 18 (1991), pp Amnyos. Study of public and private financing of sport in Europe. (2008). Andreff, W. Sport and financing. En W. Andreff & S. Szymanski (ed.), Handbook on the Economics of Sport. Cheltenham: Edward Elgar. (2006), pp Andreff, W., & Nys. Economie du sport. Paris: PUF. (2001). Andreff, W., Bourg, J.F., Halba, B., & Nys, J.F. Les enjeux économiques du sport en Europe: financement et impact économique. Paris: Dalloz. (1995). Breuer, C., Llaman, K., Wicker, P., Feiler, S. Socio-economic patterns of sport demand and ageing. European Review of Aging and Physical Activity, 7, 2, (2010), pp Cagigal, J.M. Oh deporte!: Anatomía de un gigante. Valladolid: Miñón. (1981). Castellanos, P. Análisis de la demanda y economía del deporte. En Otero, J.M. (dir). Incidencia económica del deporte. Málaga: Instituto Andaluz del Deporte. (2001), pp Comisión Europea. European Sports Charter. Strasbourg: European Union. (1992). Comisión Europea. Sport Satellite Accounts. A European Project. First Results. Bruselas (2010). Comisión Europea. White Paper on Sport. Brussels: European Union. (2007). COMPASS Project. Comparable data on sports participation: a new tool for sport policies. II Compass Workshop, Rome, Italy, (2002). 17

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