Viviendo la Experiencia

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1 Fundación para el Desarrollo Tecnológico Agropecuario y Forestal de Nicaragua Centro de Prospección Tecnológica Boletín de Prospección para la Innovación Tecnológica, Nº 7. Abril Viviendo la Experiencia EL CAFÉ, DULCE COMO EL AMOR: TIPS PARA UN BUEN DIAGNÓSTICO INTEGRAL DEL CAFETAL, BASE DEL MANEJO INTELIGENTE DE LA PRODUCCIÓN (MIP - CAFÉ) Cómo se hace un buen diagnóstico integral del cafetal? Monterrey M., J. A. Gerente de Emprendimiento y Desarrollo Empresarial FUNICA Para un manejo eficiente de la producción cafetalera, lo recomendable es establecer lotes de no más de cinco manzanas para asegurar una buena planificación y coordinación de las acciones de manejo agronómico, fitosanitario y de cosecha. Tomando estos lotes, el diagnóstico integral consiste básicamente en establecer 5 puntos de observación en cada lote. Alrededor de estos puntos, se establecen separadamente dos estaciones de recuento de 5 plantas consecutivas y en cada planta se toma una bandola para la lectura de las plagas o problemas presentes. Las bandolas se van alternando arriba y debajo de cada planta que componen cada estación de recuento. Al final tendremos datos generados de cada lote a partir de la lectura de 25 bandolas de arriba y 25 bandolas de abajo, de cinco diferentes puntos de observación en cada lote muestreado. FUNICA participó recientemente en un curso de Administración de fincas cafetaleras, en alianza con la Escuela del Café de Ocotal y el SNV, para formar capacidades a hijos (as) de productores (as); con el fin de que aprendan a manejar eficientemente aspectos técnicos y administrativos. En la primera semana de marzo 2013, realizamos un encuentro sobre este proceso de capacitación en ADEPROFOCA y en la finca Los Cipreses de Loma Fría, Dipilto, Nueva Segovia, perteneciente al productor Emilio Gutiérrez. Finca ubicada a una altura de 1200 msnm. Con este grupo de muchachos y muchachas conversamos y aprendimos sobre los tips o consejos que nos ayudan a hacer un buen diagnóstico integral del cafetal, como factor clave para el manejo inteligente de la producción (MIP-café). A continuación presentamos un resumen de lo compartido durante un valioso tiempo de aprendizaje por Las Segovias. 1. Conozcamos como es la vida de nuestras plantas de café. Lo primero, es conocer bien como es la vida de las plantas de café, reconocer cuando se presentan en los diferentes meses del año, las fases reproductivas, vegetativas y productivas del café y como es la influencia de las variables climatológicas principales (precipitación y temperatura). En nuestra finca, saber cuando se termina la cosecha principal y cuando se produce el fenómeno de caída de hojas viejas en las plantaciones. Cómo va el desarrollo de los glomérulos florales en los nudos productivos durante la época seca. Identificar cuando se inicia un revestimiento de las plantaciones, conocido por nuestros productores (as) como primavera y a partir de ella se da la brotación y desarrollo final de los botones florales que continúan desarrollándose durante los meses secos hasta culminar con la antesis, al iniciarse las lluvias.

2 Con la llegada de las lluvias, se activa la etapa de máximo crecimiento vegetativo, que se mantiene hasta septiembre u octubre, durante la cual se desarrolla el área productiva de la cosecha del próximo año. Simultáneamente, después de la antesis en mayo, se inicia el desarrollo de los frutos de la cosecha de ese año, culminando la etapa productiva, con su maduración y cosecha en el período entre noviembre y enero. Lo anterior, debemos manejarlo muy bien dentro de nuestro territorio y sobre todo dentro de nuestras fincas e identificar perfectamente qué tipo de problemas fitosanitarios están asociados a cada época, como se presentan, cómo son sus síntomas, en que momento los podemos controlar mejor. Con el grupo de muchachos y muchachas que estuvimos en Dipilto, analizamos la vida del café en sus municipios de origen y pudimos intercambiar conocimientos y experiencias del cultivo de café en diferentes alturas, desde 800 msnm, hasta 1800 msnm, ubicados en Las Sabanas, San Lucas, Somoto, Dipilto, Mozonte, San Juan Del Río Coco, Murra, Jícaro, Wiwili y Condega. Todas estas experiencias y vivencias sobre la vida del café, nos permitió a todos y todas estar mejor preparados para hacer un buen diagnóstico integral y un mejor manejo de la finca cafetalera en general. 2. Conozcamos bien los signos y síntomas de las principales plagas o de otros problemas, que afectan los cafetales. Antes de iniciar el recuento, pedimos al grupo de jóvenes que hicieran un recorrido dentro del plantío y que colectaran material vegetal vivo o muerto, insectos o animales y a juicio de ellos, pensaran qué representan un problema para el café. Les pedimos que observaran bien las condiciones bajo las cuales se encontraban esos supuestos problemas y así fijar la atención en la sombra, edad del cafetal, en qué parte de la planta se encontraba el problema/daño? En el estrato alto o en la parte baja, sobre el suelo. También conocer si había poca o mucha maleza, hojarasca, o suelo descubierto, plano o quebrado, sueltos o pesados, bien drenados o con mucha humedad. Todos estos detalles son muy valiosos para poder identificar bien, las causas de los problemas que encontramos en el plantío. Una vez que el grupo regresó con la colecta, preguntamos a uno de ellos que nos explicara qué era lo que había colectado, luego al resto del grupo, si estaban de acuerdo y que dijeran porque si o porque no estaban de acuerdo con la identificación que se había hecho. Una vez convenidas todas las opiniones y ya seguros de que plaga o enfermedad se trataba, pedimos al resto que agrupara todas las muestras similares que habían traído otros miembros del grupo. Así, procedimos con cada una de las muestras colectadas, hasta que todos y todas estuvimos seguros, de conocer los problemas fitosanitarios o agronómicos de este plantío. Al final, concertamos los principales signos/síntomas que permitieron examinar los problemas fitosanitarios y además que los productores/as reconocieran la problemática en el campo, sin mayor dificultad. En la roya, observar el polvo anaranjado debajo de la hoja. Mancha de hierro, se puede observar en ambos lados de la hoja, se observa un anillo amarillo alrededor de la mancha y un centro claro (gris).

3 Antracnosis, la mancha inicia del borde de la hoja hacia adentro, se pueden observar puntos negros sobre la mancha, ramas muertas de la punta hacia el centro de la planta, aunque también se observan lesiones entre los nudos de las bandolas. Minador, la mancha se separa en dos capas, el gusano hace galerías sobre la hoja (si rompe la hoja sin separar en capas no es minador). Broca, si hay perforaciones en el fruto, usualmente en el ombligo del fruto, pero en infestaciones severas la perforación ocurre por cualquier parte. Cochinilla harinosa, miel sobre las hojas y presencias de hormigas caminando sobre las colonias (agrupadas en diferentes partes de la planta). De igual forma hicimos un análisis agroecológico con cada problema identificado: Qué parte de la planta afecta?, Cuáles son las características más relevantes que permiten diferenciarlos de los demás problemas?, forma de la mancha o daño; color; posición de la mancha en la hoja; parte de la planta que afecta. En la planta donde se encuentra, más arriba o abajo?, Bajo qué condiciones abunda más en sol o sombra?, En qué meses del año abunda más?, Dónde sobrevive, después de la cosecha?, Conoce controladores naturales que ayudan a reducir este problema? 3. Iniciemos los diagnósticos integrales en los lotes que son tempranamente afectados por las plagas. Durante la sesión grupal de trabajo en ADEPROFOCA y posteriormente en los cafetales de Los Cipreses de Loma Fría, analizamos que las diferentes especies de hongos, insectos u otros organismos alcanzan el nivel de plaga, porque nosotros establecemos agro-ecosistemas que las favorecen y en la mayoría de los casos debilitan o desfavorecen al café. Algunas enfermedades son favorecidas por abundante entrada de luz como se da en las plantaciones de café a pleno sol, como por ejemplo el minador del café o la mancha de hierro. En cambio, otras se desarrollan por la poca entrada de luz, como se da en las plantaciones con mucha sombra y alta humedad ambiental; en las cuales prolifera el ojo de gallo, pellejillo y roya; entre otros. Importante tener presente que la distribución y abundancia de las plagas, está directamente influenciada por la lluvia y la temperatura, como la roya del café que alcanza sus mayores afectaciones hacia el final del año, en los meses más fríos y con alta humedad ambiental. Mientras el minador del café es favorecido en los meses secos y de altas temperaturas. En nuestras fincas tenemos una gran diversidad de condiciones dentro de nuestros plantíos, unos tienen mucha sombra, otras sombras irregulares y otros a pleno sol. También hay una gran diversidad de árboles de sombra y de otros aspectos muy importantes, como el viento que afecta más en unos lotes que otros; los tipos de suelos, presencia de agua o vertientes dentro de los lotes, cercanía a caminos o senderos que son fuentes de infestación. Analizando todas estas condiciones y variabilidad, podemos priorizar en cuales lotes debemos comenzar los recuentos, en la época seca o en la época lluviosa y en las diferentes fases fenológicas del café. Si estamos en época seca en una zona baja, debemos comenzar en los lotes a pleno sol, pues es casi seguro que allí se presentará primero el minador y las cochinillas. Si estamos en una zona alta y tenemos lotes con mucha humedad en tiempo lluvioso y mucha sombra, iniciemos por allí los recuentos, puesto que se presentarán ojo de gallo, pellejillo y roya, entre otros. De hecho, lo que logramos entonces es que estos lotes los usamos como indicadores de alerta temprana y con estos datos podemos tomar decisiones tempranas de manejo y por tanto una mayor eficiencia y efectividad en el manejo de los problemas en el café.

4 4. Hagamos una buena distribución de los puntos de recuento dentro del lote seleccionado, antes de iniciar el recuento. Conocer previamente la forma del lote a muestrear cafetal y la distribución de sombra, es importante para tratar de distribuir de una manera bien representativa los puntos donde vamos a hacer las observaciones. El productor (a) dueño de la parcela o en fincas grandes, los mandadores son de gran ayuda, porque conocen todos los plantíos y nos deben hacer sugerencias de donde ubicar los puntos de muestreo; punto con mucha sombra, punto con poca sombra, punto con sombra regulada. Consultemos con ellos, los datos generales del plantío: área, variedad sembrada, edad, dibujemos la forma del lote y ubiquemos los puntos de muestreo, antes de entrar al lote. Es clave, que ubiquemos los puntos de observación buscando elementos de referencias: como árboles que sobresalen en el plantío, ojos de agua, piedras, quebradas u otras cosas que faciliten su ubicación. Una buena escogencia de los puntos de referencia, facilitará los siguientes recuentos; ya que su ubicación será más rápida cuando regresemos a hacer recuentos a este lote. 5. Nombremos los puntos de muestro, con aspectos reconocibles dentro de cada lote; de tal forma que recordemos más adelante. Uno de los errores más frecuentes al hacer el diagnóstico, es identificar con números del 1 al 5 a los puntos de muestreo que ubicamos dentro de cada lote. Al terminar el recuento y procesar los datos, no podemos saber en qué puntos del lote se están dando las afectaciones o presencia de las plagas o problemas que encontremos. Lo correcto, es nombrar cada punto con las referencias que hemos acordado previamente con el productor (a) o administrador (a) de la finca. Nombres como punto El ojo de agua; punto El madreado; punto La cueva del tigre; punto Frente al río; punto El aguacate de monte; esto permitirá que al procesar los datos, ubiquemos exactamente donde tenemos los problemas y tomar decisiones de manejo de estos problemas de manera dirigida y efectiva. Por ejemplo, hacer recepas en el punto El madreado, granitear o pepenar broca en el punto Frente al río, foquear contra la roya en el punto El aguacate de monte y así con una diversidad de condiciones, decisiones y acciones, nos permitirán un manejo inteligente de los problemas de cada uno de los lotes que muestreamos. 6. Ubiquemos las estaciones de diagnóstico separadas, alrededor de cada punto. El método de diagnóstico integral del cafetal, fue concebido a partir del trabajo con grupos de productores (as) de café y posteriormente confrontado y validado estadísticamente con respecto a otros métodos específicos ya existente de recuentos de cada plaga del café. Anteriormente se contaba con un método para roya, otro para minador, otro para mancha de hierro y así con cada problema que se nos iba presentando. Esto nos generaba muchos problemas para el aprendizaje y aplicación efectiva de estos recuentos por los productores (a) y técnicos, a quienes se capacitaba para un manejo agroecológico del café. Por ello se decidió en las sesiones de aprendizaje con los grupos de productores (as) de Nicaragua, hacer una sola lectura de todos los problemas que se encontraran, al momento de entrar a un cafetal. A partir de allí, el método se fue mejorando con el énfasis puesto en captar

5 toda la variabilidad ambiental de cada lote y su influencia expresada en la diversidad de condiciones en las que se nos presenta cada plaga que afecta las plantaciones de café. Por ello, uno de los aspectos fundamentales es que alrededor de cada punto de se referencia, deben establecer separadamente dos estaciones de recuento de cinco plantas cada una. La idea entonces es captar la variabilidad de situaciones alrededor de cada punto de referencia. Si la primera estación de recuento la hicimos atrás del punto, hagamos la siguiente estación varios pasos o surcos adelante. Si la primera estación la hicimos hacia la izquierda, caminemos un buen espacio hacia la derecha para hacer la segunda estación; si la primera estación quedó hacia el este, hagamos la segunda hacia el oeste y así sucesivamente. Muy importante es establecernos mentalmente un criterio uniforme de pasos o surcos de separación entre cada estación, con base a lo cual tomemos la primera planta de cada estación, sin ver a las plantas donde vamos a ubicar la estación. Si nosotros vemos las plantas que vamos a tomar para hacer las estaciones de recuento, seguramente vamos a tomar las plantas más afectadas por problemas y por tanto los recuentos nos saldrán con datos muy altos de plagas. 7. No miremos previamente las plantas y bandolas en las cuales vamos a hacer las lecturas, alternemos arriba y abajo las bandolas de recuento. Durante la práctica de campo en Loma Fría, se mostró como tomar las bandolas de recuento y cada vez que los muchachos y muchachas participantes vieron directamente las bandolas que iban a seleccionar para el recuento, obviamente tomaron a las más afectadas por roya o a las bandolas más paloteadas. Por eso les explicamos que en la primera estación nos acercamos a la primera planta y sin ver a las bandolas extendimos nuestro brazo hacia arriba y tomamos una bandola; en la siguiente extendimos nuestro brazo hacia abajo e igualmente tomamos una bandola; y así vamos haciendo en todas las plantas siguientes. Es decir que seleccionamos una bandola arriba en la primera planta, en la segunda planta tomamos una bandola abajo y así sucesivamente vamos alternando arriba-abajo, hasta hacer las cinco plantas de la estación. Es importante recordar que si en la primera estación se terminó muestreando una bandola de arriba, en la siguiente estación se tiene que comenzar abajo. Esto nos permite tener siempre el mismo número de bandolas contadas tanto de arriba, como de abajo. Con ello garantizamos observar y anotar la presencia de plagas y otros problemas del café que afectan unas en las partes altas y otros en las partes bajas, de las plantas, manteniendo el enfoque principal de este método que es captar variabilidad ambiental y variabilidad de presencia y daños de los diferentes tipos de plagas y problemas, que se nos pueden presentar en un cafetal. 8. Hagamos entre dos personas el diagnóstico integral. Para hacer el recuento una vez seleccionada cada bandola, contamos primero el número total de hojas, apuntamos el dato en la hoja de recuento. Después, pasamos a revisar cada hoja con presencia de cada una de las plagas (roya, mancha de hierro, antracnosis, mal de hilacha, ojo de gallo, minador). Después observamos el tejido de la bandola y calculamos el porcentaje de la bandola con antracnosis y anotamos el dato. Después pasamos a contar los frutos totales en la bandola, frutos brocados, frutos brocados con el hongo Beauveria bassiana y frutos con chasparria. Finalmente, contamos el número total de nudos productivos y nudos con cochinilla. Así sucesivamente con todas las bandolas que recontamos en cada lote.

6 Uno de los secretos de este método, es poder hacerlo de manera rápida y con una buena precisión en la lectura y anotación de todos estos datos. Hemos comprobado que mientras más tiempo se pasa en cada lote de recuento, se pierde mucha calidad en los datos, pues por cansancio o por urgencia de hacer otras labores, los formatos de recuento se llenan con información no confiable. Factor clave el agrupar a los participantes en la sesión de capacitación en parejas; de tal manera que entre ambos decidieran los puntos y estaciones de recuento y al momento de hacer el recuento, uno iba haciendo las lecturas en las bandolas y otro iba apuntando en el formato de toma de datos. Estos roles se van alternando a fin de no generar cansancio, aburrimiento o premura en la toma de datos, factores que bajan fuertemente la calidad de los datos tomados. Un recuento realizado en parejas y con toda calidad como lo hicimos durante la práctica, normalmente dura una hora y media por lote. 9. Procesemos adecuadamente los datos El formato de toma de datos del diagnóstico integral está divido en tres secciones para facilitar la toma y procesamiento de los datos. En la primera sección, están ubicados todos los problemas fitosanitarios que podemos encontrar en las hojas y al final de esta sección los totales de hoja en cada bandola de recuento. De esta manera al dividir las sumatorias de las observaciones de cada plaga en las hojas, entre los totales de hojas y multiplicarlos por 100, se obtienen directamente los porcentajes de afectación de cada plaga. En la segunda sección del formato, están las afectaciones que se nos pueden presentar en los frutos y al final la sumatoria del total de frutos. Luego, se sacan los porcentajes de cada plaga que afecta los frutos. Finalmente está la sección con las afectaciones que se pueden encontrar en los botones florales y al final la sumatoria de los nudos productivos en cada bandola, con los cual procedemos de la misma manera. Explicamos muchas veces durante la sesión de capacitación, que hay que fijarse muy bien que a cada parte de la planta como son hojas, frutos y botones florales, corresponde un total diferente del cual generamos los porcentajes de infestación de plagas. De esos mismos datos también generamos indicadores de productividad de las plantas como son el promedio de hojas por bandola, el promedio de nudos productivos por bandola, el promedio de frutos por bandola y otros. Los datos colectados en cada punto, se suman, se obtienen los totales por punto y se pasan a porcentajes. El porcentaje, es el valor que expresa el nivel en que se encuentran las plagas en cada uno de los puntos observados. Para estimar el nivel de incidencia para todo el plantío, se suman los totales por punto y se divide entre el total de puntos observados. Los porcentajes, son la base para saber Cuáles son los problemas más relevantes en el plantío? El que obtuvo el porcentaje más alto. Al revisar los porcentajes de plaga por punto nos ayuda a identificar cómo se distribuyen las plagas; o sea si es en focos o generalizada. Los porcentajes también nos sirven de referencia para saber si la cantidad de plaga que tenemos es baja o alta.

7 10. Usemos los datos para tomar decisiones de manejo agroecológico, de acuerdo a la fenología del café. El recuento integral, además de identificar el estado fitosanitario del plantío, permite conocer el estado del cafetal en cuanto al vigor y el potencial productivo de la planta. Para esto usamos como punto de referencia la cantidad de hojas por bandola y la cantidad total de frutos por nudo productivo. Con los datos también podemos estimar la cantidad de hojas por nudo productivo, este dato permite ver la relación de hojas por nudos productivos, se considera que un promedio de dos hojas por nudos productivos, es ideal y garantiza la sostenibilidad y buen llenado del fruto, sin causar efectos negativos como derrame de frutos, por efecto de caídas de hojas. Además, a través, del recuento integral se puede hacer una aproximación sobre cómo estará la producción en cada parcela, considerando la cantidad de frutos totales entre la cantidad de nudos productivos. Con toda la información generada debemos hacer análisis lote por lote En qué parte del plantío los cafetos están más vigorosos o tiene mayor crecimiento? Dónde hay mayor producción? Por qué? Qué condiciones del ambiente están favoreciendo para tener plantas vigorosas o por el contrario aspectos negativos? Dónde hay más enfermedades y por qué? Cuál es el principal problema en cada uno de los plantíos, por qué?. Como sabemos, los niveles de referencia que podemos tolerar en la roya son 10-30% depende de la época, mancha de hierro 2-10%, Ojo de gallo 10%, minador 20-30%, y broca 2-5%. En función de los datos obtenidos, podemos decidir Qué acciones podemos hacer para mejorar el plantío? Todas las reflexiones y decisiones de manejo, las enmarcamos en las principales estrategias de manejo agroecológico de cultivos como son: Crear un ambiente favorable para el cultivo y los reguladores naturales (sombra, cobertura del suelo, etc.; fortalecer el cultivo con nutrición, manejo de tejidos y también controles directos como saneamiento, podas sanitarias, aplicación de fungicidas e insecticidas, aplicación de Beauveria bassiana y graniteo etc.). Haciendo diagnósticos integrales del café, tomando buenos datos, haciendo discusiones con enfoque agroecológico y sobre todo tomando decisiones y poniendo en práctica buenas acciones para un manejo inteligente de la producción del café (MIP-Café), podremos asegurar que productores como Don Emilio Gutiérrez seguirá produciendo y cosechando muy buen café. Un ejemplo a seguir es su finca Los Cipreses de Loma Fría que continúa siendo un lindo y acogedor lugar para hacer realidad el amor a la tierra, a la familia, a la mujer...pues el café es dulce como el amor.