Información a pedido sobre HP-UX 11i: prácticas recomendadas para la optimización del rendimiento desarrolladas en nuestros laboratorios para usted

Transcripción

1 Información a pedido sobre HP-UX 11i: prácticas recomendadas para la optimización del rendimiento desarrolladas en nuestros laboratorios para usted Serie Optimización del rendimiento para personal de instalación Funcionamiento de las herramientas de gestión para entornos Serviceguard Transcripción del tema de la conferencia web Hola. Me llamo Jonathan Patrizio y trabajo para el Centro de tecnologías de alta disponibilidad avanzadas de HP, donde soy experto en arquitecturas de soluciones. Hoy intentaré explicarles cómo funcionan las herramientas de gestión para entornos Serviceguard. La presentación está estructurada de la siguiente manera. Empezaré hablándoles de la facilidad de gestión y la alta disponibilidad de Serviceguard. En esta parte, veremos cuál es la mejor forma de administrar un entorno Serviceguard, para lo que nos centraremos en System Management Homepage, que es el contenedor de Serviceguard Manager. Seguidamente, daré paso a una pequeña demostración que ilustra cómo se configura un clúster y cómo hay que preparar la infraestructura CVM para crear sistemas de archivos en clúster. A continuación, me detendré en el conjunto de herramientas Distributed Systems Administration Utilities (DSAU) y les explicaré cómo se integran sus componentes con Serviceguard. Y, por último, concluiré la sesión con un resumen. En esta primera parte veremos muy someramente qué relación existe entre la facilidad de gestión y la alta disponibilidad; es decir, por qué influye una en la otra. Antes de continuar, conviene hacer unas aclaraciones terminológicas, ya que a lo largo de la presentación es posible que mencione los acrónimos de tres o cuatro letras que aparecen a la izquierda. Los CFS (sistemas de archivos en clúster) son una de las funciones más importantes de los paquetes Serviceguard Storage Management Suite. Además de crear sistemas de archivos en clúster, son la base de VERITAS Symantec Online JFS y de la infraestructura CVM. DSAU (Distributed Systems Administration Utilities) es otra herramienta de gestión importante que consta de tres partes distintas en las que nos detendremos más adelante. SIM (o HP SIM, que es como suele llamarse) designa a Systems Insight Manager, una herramienta de visualización que permite consultar el estado en que se encuentran los elementos de red y los sistemas de una empresa, y cómo se relacionan. Las colecciones, que son parte de HP SIM, son grupos de sistemas y particiones definidos por el usuario. Su función es particionar o dividir en compartimentos los sistemas que nos interesan.

2 Parallel Distributed Shell, o PDSH (al que quizá me refiera como "pe-dish"), es uno de los componentes de DSAU y sirve para seleccionar un número arbitrario de sistemas o un clúster y ejecutar comandos en paralelo en el clúster. SG SMS hace referencia a Serviceguard Storage Management Suite, un paquete del que hay unas siete versiones, de las cuales la quinta, la sexta y la séptima incluyen el sistema de archivos en clúster. Con SMH, que sustituye a la interfaz gráfica de usuario de SAM, pueden gestionarse usuarios, grupos y redes de un solo sistema. Eso es lo que lo diferencia de HP SIM, con el que pueden gestionarse varios sistemas distintos. En esta demostración, me centraré en las herramientas resaltadas en azul. Fundamentos de la disponibilidad. Aquí tienen los tres pilares en los que se basa la disponibilidad: la tecnología, la existencia de personal bien formado y procesos eficaces, y la asistencia. Veamos por qué estos tres factores son importantes. En lo que respecta a la tecnología, es evidente que tanto los sistemas como las soluciones tienen que apoyarse en tecnologías de eficacia probada. Por ejemplo, discos a prueba de fallos o cuyo funcionamiento en caso de error esté garantizado mediante matrices RAID; servidores fiables que puedan funcionar sin fallos durante horas; y, por supuesto, software de agrupación en clúster, que creará una infraestructura sin "puntos únicos de fallo"; es decir, componentes que puedan provocar el fallo de todo el sistema. En este contexto, la facilidad de gestión es sumamente importante porque, sin el software adecuado, es muy difícil hacer que encajen todos estos elementos y resolver los problemas que puedan surgir. La formación del personal y la existencia de procesos también desempeñan un papel importante, ya que si se descuidan estos aspectos, la disponibilidad podría empeorar debido a errores humanos. Si el personal carece de conocimientos, es posible que provoque fallos en los sistemas e interrumpa su funcionamiento. Por último, los servicios de asistencia son también esenciales para lograr los niveles de disponibilidad que queremos, ya que reducen al mínimo los periodos de inactividad programados o imprevistos. Así, si hay un fallo en el sistema, podremos saber rápidamente a qué se debe y solucionarlo. Los términos resaltados en azul son los que más condicionan la facilidad de gestión de un sistema. Pero, por qué es tan importante la facilidad de gestión? Por supuesto, todos sabemos que, en entornos de importancia clave para una empresa, los periodos de inactividad pueden causar grandes pérdidas económicas. Claro está que la repercusión no es siempre la misma, sino que depende de la carga de trabajo que haya en cada momento. Según ciertos estudios, en algunos sectores, una hora de inactividad puede causar pérdidas valoradas en un millón de dólares por hora, así que es importantísimo gestionar los sistemas de modo que apenas haya incidencias. La facilidad de gestión también es importante porque los sistemas y sus componentes son bastante complejos. Para usar y administrar bien todos esos componentes, hace falta dominar varias interfaces de gestión. Además, son tantos que es difícil ver qué relación existe entre unos y otros. Otro de los inconvenientes de tener redes complejas con muchos componentes interrelacionados es que no es fácil detectar los problemas rápidamente. Como ya he dicho, los errores humanos son unas de las principales causas de inactividad. Entre otras cosas, esto se debe a que cuando los sistemas funcionan bien la mayor parte del tiempo y apenas hay anomalías, la gente suele olvidarse de qué comando hay que usar para resolver los problemas. Y cuando hay un fallo grave, como prácticamente desconoce los procedimientos de recuperación, no sabe qué hacer. La consecuencia es que estos errores pueden alargar aun más los periodos de inactividad. Por último, cabe mencionar que, cuando hay una emergencia, los afectados suelen perder la calma, por lo que es necesario que haya procedimientos bien definidos y herramientas de gestión eficaces que garanticen la continuidad de las operaciones. Facilidad de gestión. En un contexto empresarial, la facilidad de gestión es una forma de poner orden en el caos que existiría si no hubiera procesos ni herramientas. El proceso se basa en la repetición y, como ven en la tabla, consta de cuatro aspectos principales: la configuración, la administración, la detección y la supervisión, y un

3 cuarto grupo formado por diversos factores. En el apartado de configuración entrarían las tareas de las que se encargan la persona o personas que crean los sistemas, definen sus atributos y añaden, quitan o modifican componentes para que la actividad empresarial pueda discurrir con el menor número de incidencias posible. La administración consiste en controlar todos esos aspectos y, normalmente, suele ser responsabilidad de alguien distinto a quien se encarga de la configuración. Esta persona suele ocuparse de supervisar el entorno y de mover las aplicaciones o cambiar el funcionamiento del sistema conforme cambian las necesidades. Las tareas de detección y supervisión se asignan a otra persona que observa el sistema y se asegura de que no haya problemas. Por ejemplo, podría haber un "punto único de fallo" que, aunque no modifique ni provoque errores en ninguna aplicación, merme la fiabilidad a largo plazo, así que hace falta que alguien controle los sistemas y haga los ajustes y cambios necesarios si algo no marcha bien. Veamos cómo contribuye Serviceguard a la facilidad de gestión. Serviceguard subyace a todas las soluciones de alta disponibilidad y con tolerancia a fallos de HP, así que es importante que nos centremos en sus propios pilares, que son tres. En primer lugar está la tecnología de agrupación en clúster de alta disponibilidad, que es la manifestación más básica de Serviceguard y se ejecuta en clústeres locales de sistemas HP-UX y Linux. En la parte de abajo, vemos las soluciones que aportan valor añadido (es decir, software complementario que hace que Serviceguard funcione con otras aplicaciones). En esta categoría están, por ejemplo, las extensiones de Serviceguard para Oracle RAC y SAP; los paquetes Storage Management Suite que mencioné antes, con los que se puede tener un sistema de archivos en clúster distribuido en varios nodos; Serviceguard Manager, el componente con funciones de gestión, en el que nos detendremos dentro de un momento; Serviceguard Extension for Faster Failover, que agiliza la conmutación por error en los clústeres binodo; y, por último, varios kits de herramientas que permiten usar Serviceguard con determinados tipos de aplicaciones, como las de Oracle. En lo que respecta a la tolerancia a errores, una vez más, todas estas soluciones se basan en Serviceguard. Algunas están pensadas para mejorar la fiabilidad en dos más centros de datos en lugar de uno. Los clústeres extendidos, que utilizan hosts de replicación (en lugar de los clústeres metropolitanos o metroclústeres, que replican datos o usan hardware de replicación), pueden abarcar distancias considerables, aunque en realidad están formados por un solo clúster. Por último, están también los clústeres continentales, cuya arquitectura consta de varios clústeres, de manera que es posible que los dos o más centros de datos estén muy separados. Veamos qué versiones de Serviceguard Manager existen. Aunque las principales son dos, en esta presentación nos centraremos en la segunda, que es la que se conecta a System Management Homepage. La primera de la lista es la versión autónoma, creada enteramente en Java, que se ejecutaba en PC y en sistemas HP-UX o Linux. Con esta versión independiente, sólo pueden gestionarse Serviceguard A y las ediciones anteriores, así que tendrán que usarla si tienen Serviceguard A Para las versiones posteriores a la A.11.17, cabe también la posibilidad de utilizar la interfaz gráfica de usuario, que se llama también Serviceguard Manager. Verán que la versión que sigue a la A es la B porque ha habido un cambio de arquitectura. Eso es lo que indica el cambio de letra. B es la versión para Serviceguard en entornos 11i v3 solamente, mientras que B es la versión de Serviceguard Manager para Serviceguard A11.18 en entornos 11i v2, v3 y en distribuciones de Linux. Algo que conviene recalcar es que si tienen la versión A Serviceguard instalada en HP-UX, tendrán también instalado el plug-in de Serviceguard Manager. Aquí se indica para qué sirve Serviceguard Manager. En otra transparencia anterior hablábamos de cuatro

4 aspectos importantes: la configuración, la administración, la supervisión y el control. Pues bien, los objetivos que se enumeran aquí hacen hincapié en lo mismo. Serviceguard Manager permite evaluar rápidamente la calidad de un clúster y el estado en el que se encuentra; gestionar el clúster sin tener que recordar las opciones de la línea de comandos; hacer las tareas de configuración inicial del clúster; crear nuevos paquetes y añadir aplicaciones. Las opciones son más fáciles de encontrar y consultar, y también se han simplificado tareas que antes eran manuales. Por ejemplo, ya no nos hará falta distribuir los paquetes que creamos mediante scripts de control, sino que Serviceguard Manager automatizará el proceso de distribución de los scripts. La interfaz web también facilita la resolución de problemas mediante pantallas de resumen con indicadores de estado, iconos y colores que muestran si hay problemas en el clúster. Por último, nos queda mencionar los registros consolidados, una parte que está incorporada en DSAU (Distributed Systems Administration Utilities) y permite consultar los registros de todo un clúster desde una misma vista. Con esta transparencia doy paso al apartado sobre System Management Homepage y Serviceguard Manager. Hace un momento, mencioné que había dos versiones. Pues ahora hablaremos de Serviceguard Manager B.01.01, que es la que corresponde a Serviceguard A en 11i v3. Se trata de una versión web que se inicia desde System Management Homepage (la interfaz de gestión de instalaciones de un solo sistema que sustituye a la GUI de SAM). Como acabo de decir, System Management Homepage es el punto desde el que se inicia Serviceguard Manager, cuya interfaz se abre en un navegador. Lo que ven en la transparencia es una captura de pantalla de la página de inicio de System Management Homepage. El equipo al que se hace referencia, que aparece arriba entre paréntesis, se llama kilt, k-i-l-t. Lo que no aparece es la dirección de la URL a la que remite, pero basta con hacerla coincidir con el número de puerto de System Management Homepage. En este ejemplo, sería " A continuación, iniciaríamos sesión escribiendo las credenciales de acceso de un usuario del sistema kilt; es decir, el nombre de usuario y la contraseña necesarias para establecer la conexión. Se abrirá esta página de inicio, que contiene toda la información relativa al estado del sistema kilt. Vemos que hay un clúster junto al que aparece una cruz roja. Si consultan el cuadro de leyendas de la izquierda, verán que se trata de una alerta de máxima gravedad ("critical"). Lo más probable es que el clúster no funcione, lo cual repercute en la zona funcional del sistema (el cuadro que aparece a la izquierda), donde aparece otra cruz roja que indica que hay un problema con el clúster. Como ya he dicho, desde esta pantalla también pueden hacerse otras tareas. Por ejemplo, el cuadro "system configuration" sirve para cambiar, añadir o eliminar usuarios y grupos; para mirar los discos, los sistemas de archivos, los grupos de volúmenes y los volúmenes físicos; y, por último, para configurar el núcleo y los dispositivos periféricos. Aquí vemos una vista más detallada de Serviceguard Manager. Si, en la transparencia anterior, hubiéramos hecho clic en el enlace de Serviceguard Manager, habría aparecido el clúster "Scotsman", del que forma parte kilt. En ésta que nos ocupa vemos hay dos nodos: "kilt" y "haggis". Quizá les cueste distinguirlos, pero dentro de un momento les enseñaré otra captura de pantalla más clara. Si consultasen la página de System Management Homepage correspondiente al segundo nodo, haggis, obtendrían exactamente la misma vista. Aunque System Management Homepage suele utilizarse para gestionar un solo sistema, se entiende que el sistema abarca el resto de los nodos del clúster, que también aparecen en la vista. System Management Homepage cuenta con diversas funciones estándar y un grado de integración bastante alto

5 con otros productos. Por ejemplo, cuando iniciamos sesión en System Management Homepage con nuestras credenciales, éstas se envían a Serviceguard. Serviceguard, a su vez, las usa para otorgar o denegar el derecho a modificar o ejecutar comandos de administración, como ocurriría si escribiésemos un comando en un sistema. Pues bien, Serviceguard Manager usa esos mismos algoritmos para determinar qué permisos y credenciales tenemos. Por ejemplo, supongamos que me llamo "Fred" y que tengo autorización para administrar paquetes. Si iniciase sesión en System Management identificándome como Fred, podría realizar tareas de administración, pero es posible que no tenga acceso a las de configuración, que aparecen atenuadas en el menú. La página dispone de ayuda contextual en línea, que se abre en una ventana distinta del navegador al hacer clic en signo de interrogación del extremo superior derecho. Así podremos consultar información más detallada sobre las páginas que nos interesen. Tanto la ayuda contextual en línea como las pantallas están traducidas a ocho idiomas asiáticos y europeos. En lo que respecta a la gestión de clústeres locales Serviceguard, cabe destacar que la pantalla se actualiza automáticamente con los cambios de estado de los nodos y paquetes, lo cual facilita la supervisión. Si desplegamos los menús de arriba, podremos hacer tareas de administración y configurar paquetes multinodo. Esto último es una de las novedades de la interfaz web, ya que la versión anterior de Serviceguard Manager no era compatible con la administración ni la configuración de paquetes multinodo. En esta captura de pantalla se aprecia la página de resumen de Serviceguard con algo más de detalle, que es donde podemos consultar el estado general del clúster. Al lado de la leyenda "resumen de alertas" (alert summary) aparece una cruz roja que indica que hay una alerta de gravedad "crítica". En este momento, el clúster está funcionando correctamente, pero si miramos los paquetes de abajo veremos cuál es la causa del problema. Al fin y al cabo, en ciertos sentidos los paquetes son más importantes que los nodos. En este caso, lo que ha hecho saltar el resumen de alertas es que new_package5 no funciona. También disponemos de más información distribuida en varias pestañas, como "Main", "Parameters", "Packages" o "Dependencies". La función de dependencias es nueva (su uso se generalizó en Serviceguard A.11.18) y permite ver si un paquete tiene asociado otro que dependa de él. Esto resulta útil si un paquete ejecuta otro que está supeditado a él. "Cluster Lock" resume la información de bloqueo de clúster aplicable a este clúster, "Volume Groups" contiene información sobre grupos de volúmenes compartidos y "Extensions" indica si hay otro software instalado. Por ejemplo, si Metrocluster o Continentalcluster están instalados, aparecerán en la pestaña de extensiones. Me interesa enseñarles esta otra parte de SMH para que vean que también pueden hacerse tareas de configuración del núcleo. Quiero que se den cuenta de que System Management Homepage presenta de forma muy atractiva algunas opciones para las que, probablemente, estén acostumbrados a utilizar la línea de comandos. En este ejemplo en concreto, vemos el parámetro ajustable de núcleo maxdsiz_64bit, que es uno de los que tendríamos que modificar si, por ejemplo, fuésemos a instalar Oracle. Vemos el valor configurado en este momento, las posibilidades de cambio y qué significa cada una. Y, si hacemos algún cambio, podemos indicar por qué en el recuadro correspondiente. Otro aspecto en el que quiero detenerme es el apartado funcional de System Management Homepage: la herramienta Disks and File Systems, que está integrada en Serviceguard. En este ejemplo, estamos creando un grupo de volúmenes en clúster. Fíjense en la captura de pantalla que aparece en la parte superior izquierda. Ya tengo un grupo de volúmenes configurado en el clúster. Si hago clic en "Create Cluster VG", se abrirá otro asistente que detectará si hay un clúster y cuántos nodos tiene (por supuesto, se tratará de un clúster de la misma versión de Serviceguard). A continuación, tendremos que indicar el nombre del grupo de volúmenes en clúster y

6 seleccionar los discos que se crearán en el grupo de volúmenes. Cuando se cree el grupo, la herramienta ejecutará automáticamente todos los comandos para los que antes era necesario usar la línea de comandos. Configuración de sistemas de archivos en clúster Antes apunté que Serviceguard Storage Management Suites nos da la posibilidad de configurar un sistema de archivos en clúster. Con un sistema de archivos en clúster, muchas de las tareas asociadas a un clúster son mucho más sencillas. Por ejemplo, si tuviéramos un servidor web y, en lugar de instalar el contenido que queremos publicar en varios sistemas, lo instalásemos en un solo sistema de archivos en clúster, cualquiera de los nodos del clúster podría leer la información y enviarla a las páginas web. Con esta solución, se simplifica muchísimo el mantenimiento y el uso compartido de archivos binarios web o de Oracle. Por tanto, está claro que configurar un sistema de archivos en clúster (o CFS) favorece enormemente la facilidad de gestión de un sistema. Serviceguard tiene dos funciones, los paquetes multinodo y las dependencias entre paquetes, que son esenciales a la hora de crear sistemas de archivos en clúster para clústeres Serviceguard. Esta transparencia contiene alguna información al respecto, pero enseguida veremos una presentación en la que se explica cómo se crean los paquetes, un proceso prácticamente automático que puede realizarse con distintas herramientas integradas, como VERITAS Enterprise Administrator (VEA). En este diagrama, vemos que hay n nodos y aplicaciones que dependen de los sistemas de archivos. Éstos, a su vez, dependen de los grupos de discos, y éstos últimos, de la infraestructura CVM que se ha creado. Aquí tienen una pantalla de HP Systems Insight Manager. Recuerden que HP SIM es la herramienta indicada para ver varios sistemas, más que System Management Homepage. Una de sus grandes ventajas es que permite crear colecciones desde el menú de ajuste ("Customize"). En este ejemplo, vemos que he creado la colección "Demo Systems", que consta de dos sistemas: hasupt19 y hasupt20. A la derecha, aparece un resumen muy útil en el que se indican sus nombres, el tipo de servidor y las direcciones de cada uno, y de qué tipo de sistemas se trata. Este organigrama describe cómo se crean sistemas de archivos en clúster. El proceso consta de sólo unos pasos. El primero es, por supuesto, crear un espacio de almacenamiento compartido, para lo que podría interesarnos usar un conjunto de discos mediante, por ejemplo, Command View EVA. A continuación, una vez que hayamos asignado las unidades lógicas al sistema y a los nodos del clúster, tendremos que comprobar que VxVM está inicializado. Si no lo está, habrá que ejecutar vxinstall en todos los nodos por separado. Luego iremos al apartado funcional de SMH, Disks and File Systems, donde veremos las nuevas LUN compartidas. Si aún no están inicializadas, podremos ejecutar el comando vxdisksetup en el sistema. Así, dejaremos constancia de que el disco no está en uso. Este paso (la ejecución del comando vxdisksetup) también puede hacerse con VERITAS Enterprise Administrator. El siguiente sería configurar el clúster y, a continuación, ejecutar los comandos cfscluster config y start. En la presentación se explica con más detenimiento todo lo que hemos visto hasta ahora (la creación del clúster y los comandos cfs config y start). Si seguimos todos los pasos, dispondremos de una infraestructura CVM. Llegados a ese punto, iniciaríamos VEA, desde donde crearíamos grupos de discos con las LUN compartidas y los volúmenes para cada sistema de archivos. Por último, montaríamos los sistemas de archivos, que quedarían habilitados para que los use la aplicación que corresponda.

7 Ahora mismo veremos una breve demostración que ilustra los pasos necesarios para crear un clúster con Serviceguard Manager. Antes de esto, tendremos que haber configurado un servicio de quórum de alta disponibilidad (HA Quorum Service), que usa el software Quorum Server, y haberlo instalado en un sistema binodo. Esto nos va a servir para interrumpir el bloqueo de clúster en el nuevo clúster, hptf. A continuación, configuraremos e inicializaremos CVM en el clúster hptf. Si procede, ejecutaremos el comando vxinstall, y luego los comandos cfscluster config y cfscluster start. Una vez hecho eso, Serviceguard Manager indicará que está usando el paquete multinodo que se creó con los comandos cfscluster config. Después, siguiendo la cronología de la demostración, repetiríamos el proceso de detección en HP SIM para localizar el nuevo clúster. Como ven en la parte inferior del diagrama, los dos sistemas ya figuran en el clúster hptf. Demos paso a la demostración. Esta demostración explica cómo configurar un clúster Serviceguard con Serviceguard Manager de modo que reúna los requisitos necesarios para crear un sistema de archivos en clúster. Disponer de un sistema de archivos que compartan todos los miembros del clúster aligera la carga de trabajo administrativa de muchos entornos de aplicaciones, ya que sólo se necesita una copia de los datos de la aplicación. Uno de los pasos habituales (aunque no exentos de problemas) a la hora de configurar un clúster es preparar la infraestructura de almacenamiento. En este caso, usaremos Serviceguard Manager para crear un nuevo clúster llamado "hptf" a partir de un servicio de quórum de alta disponibilidad que configuramos antes. Para preparar VERITAS Cluster Volume Manager de Symantec (CVM) sólo se necesitan unos cuantos comandos. Hace falta instalar uno de los paquetes CFS Storage Management Suite y los parches que correspondan, y llevar a cabo el proceso de inicialización de VxVM estándar en los nodos pertenecientes al clúster. Los comandos cfscluster crean e inician un paquete de sistema multinodo llamado SG-CFS-pkg. Este paquete especial para todo el clúster se ocupa de mantener los archivos de configuración de VERITAS y de iniciar los demonios de servicios que sean necesarios. En la página de Systems Management Homepage, en System Insight Manager, nos desplazamos a la página de HP System Management Homepage correspondiente a hasupt19. Al iniciar la herramienta Disks and File Systems en HP SMH, vemos que, en ese momento, hay tres LAN de 5 GB sin usar en el sistema. Se trata de dispositivos que ya llevan un tiempo en el conjunto de discos y que ambos sistemas pueden usar a través de la red SAN. En la página de herramientas (Tools), iniciamos Serviceguard Manager, que buscará un clúster o una configuración que ya existan. Como no se encuentra ninguno, tendremos que hacer clic en "create cluster" para empezar a configurar el nuevo clúster. Seleccionamos los dos nodos, hasupt19 y hasupt20, y escribimos el nombre del clúster, "hptf". Al pasar a otra pestaña, Serviceguard Manager hace una búsqueda automática en los sistemas seleccionados para ver si tienen algún espacio de almacenamiento común o la configuración de red necesaria. Dejamos los valores predeterminados de los parámetros del clúster y miramos la configuración de red. Establecemos la LAN 3 como interfaz de reserva de la LAN 2 en ambos nodos del clúster para la subred de latido Y, seguidamente, configuramos el bloqueo de clúster con un servidor de quórum. Antes de eso, ya habremos configurado un servicio de quórum de alta disponibilidad en la dirección IP , que puede reubicarse. También sería válido indicar el nombre de dominio, que equivale a la dirección IP. Por último, añadimos una función con la que cualquier usuario pueda supervisar el clúster desde cualquier nodo Serviceguard. Al hacer clic en "OK", veremos una página de resumen donde aparecen todos los atributos que se usarán en la configuración. Como todo está en orden, pulsamos el botón "Apply Configuration".

8 La ventana del registro de operaciones que se abre a continuación indica que la configuración se ha aplicado correctamente. En la página principal, seleccionamos la opción "Ejecutar clúster" del menú de tareas de administración (Administration Task > Run Cluster), confirmamos la operación e iniciamos el clúster. El registro sigue actualizándose hasta que el clúster está en funcionamiento. Ahora que ya está configurado y en ejecución, podemos crear la infraestructura CVM en la que se basará el sistema de archivos en clúster que crearemos a continuación. Desde una ventana de terminal de hasupt19, nos aseguramos de que el gestor de volúmenes se ha inicializado con el comando vxinstall. Antes de configurar CVM, tendremos que haber instalado el gestor de volúmenes en todos los nodos pertenecientes al clúster. Como, en este caso, ya estaba inicializado, podemos ejecutar los comandos cfscluster config y start para configurar CVM. El comando cfscluster config crea un nuevo paquete de sistema multinodo cuya función es mantener los archivos de configuración de VERITAS (llttab, llthosts y gabtab) en el directorio /etc. Serviceguard se ocupa de gestionar estos mismos archivos, que no se pueden modificar. cfscluster config iniciará también los servicios que correspondan, y el comando cfscluster start iniciará los procesos de VERITAS (llt, gab, vxfen, odm, cvm y cfs) en el orden correcto. Ya ven que estos dos comandos realizan gran parte de la configuración, así que habrá que esperar un momento a que terminen. A continuación, comprobamos si Cluster Volume Manager se ha inicializado. Para ello, usamos el comando cfscluster status, que identifica también el nodo maestro de CVM (en este caso, hasupt20). Al ejecutar cmviewcl, vemos el paquete de sistema multinodo (SG-CFS-pkg), que está activado y se encuentra en ejecución en todos los nodos del clúster. Si volvemos a Serviceguard Manager, veremos un resumen con los atributos del nuevo paquete. Ahora que ya hemos sentado estas bases, el clúster estará listo y podremos crear archivos de sistemas en clúster para los paquetes de la aplicación. Con esto llegamos al final de la demostración. Muchas gracias. Ahora que hemos visto la demostración, volvemos a las capturas de pantalla de la pestaña de paquetes ("Packages"). En ésta en concreto, vemos que hay varios paquetes multinodo. Y, por supuesto, abajo de todo aparece el paquete multinodo del sistema, que es el que creamos con el comando cfscluster config. Una vez que configuremos el grupo de discos, tendremos un paquete multinodo Serviceguard (SG-CFS-DG1) que se encarga de activarlo y desactivarlo. Como ven, hay tres paquetes multinodo (SG-CFS-MP-1, MP-2 y MP-3), cada uno de los cuales corresponde a un sistema de archivos en clúster distinto. Si ejecutásemos cualquiera de ellos, se montarían en todo el clúster y las aplicaciones podrían utilizarlos. Si vamos a la pestaña de dependencias ("Dependencies"), veremos un diagrama como éste: el gráfico de dependencias. En realidad, esta información es parte de la pestaña de paquetes, donde se ven las dependencias entre los distintos paquetes. Arriba está el paquete con más dependencias, un paquete de sistema multinodo que debe ser el primero en ejecutarse y que, además, hace que se ejecuten CVM y todos los demonios y procesos necesarios para su funcionamiento. Por supuesto, todo esto forma parte de las dependencias del grupo de discos. Así pues, nuestro grupo de discos (SG-CFS-DG1) depende de SG-CFS-pkg. Abajo de todo, vemos tres paquetes multinodo MP-N que controlan los procesos de montaje y desmontaje de los sistemas de archivos en todo el clúster. Veamos para qué sirven las herramientas Distributed Systems Administration Utilities.

9 Todas ellas se han creado a partir de programas de código abierto a los que HP ha incorporado mejoras, algunos cambios de empaquetado y servicios de asistencia. Además, están muy bien integradas con Serviceguard y Serviceguard Manager (por lo que sus funciones son más accesibles) y funcionan bien en clústeres Serviceguard. DSAU abarca varias áreas: la consolidación de registros, la sincronización de configuraciones y la cargabilidad de salida de comandos. Esta última utiliza el componente Parallel Distributed Shell, que ya mencioné al principio. Veamos la primera de ellas: la consolidación de registros. Uno de los inconvenientes de Serviceguard es que, debido al número de nodos y sistemas, se crean muchos archivos de registro. Si, además, hay paquetes que se ejecutan en los sistemas, se generarán aún más datos de registro. A esto hay que añadir que, conforme un paquete se traslada de un nodo del clúster a otro, los archivos de registro se dispersan. Una parte de los datos estará en un sistema y otra parte en otro, lo cual complica mucho la resolución de problemas. Con la consolidación de registros, todos los archivos de registro se centralizan y pueden consultarse desde un único punto. Para mejorar el acceso centralizado, ahora son compatibles con el protocolo de transporte TCP, que es más fiable y seguro que el protocolo UDP. Insisto en que todo esto está integrado con Serviceguard, así que también pueden consolidarse los archivos syslog y los archivos de registro de paquetes. Es más, en realidad es posible consolidar los archivos de registro de cualquier aplicación, reenviándolos a un registro general. La sincronización de configuraciones permite tener un archivo maestro de configuración que alberga una imagen de referencia y es muy útil para gestionar la deriva de archivos de configuración. Una vez que configuremos las plantillas del entorno, podremos controlar si hay cambios en los archivos-patrón de un sistema o si alguien ha modificado sus permisos. Si ha habido modificaciones, recibiremos una alerta con la que podremos hacer un seguimiento. Por último, la cargabilidad de salida de comandos facilita la ejecución de comandos en todo el clúster. Por ejemplo, si queremos copiar un archivo a todos los nodos del clúster, podremos hacerlo con un solo comando. Todo esto simplifica mucho la configuración en paralelo, ya que pueden configurarse los mismos usuarios y grupos en varios sistemas a la vez. Aquí se indica adónde pueden dirigirse si desean más información sobre las herramientas originales en las que se basan las tres partes de DSAU y la tecnología que utilizan. Y aquí tienen un ejemplo de una de las prácticas recomendadas: un clúster de servicios. Mi idea es darles algo de contexto para que entiendan mejor cómo funcionan algunas de las herramientas. En la parte inferior izquierda tenemos un clúster de servicios con dos nodos: haatc17 y haatc18. Podría tratarse, por ejemplo, de dos sistemas ProLiant de bajo coste que funcionasen con Linux. Lo que haríamos sería crear el clúster de dos nodos que vemos aquí, y luego crearíamos un servicio de quórum de alta disponibilidad en el clúster de servicios. Aunque el servicio de quórum no es un punto único de fallo y podría ejecutarse en un solo sistema que no pertenezca al clúster, es fundamental que funcione si el clúster tiene que reformarse por alguna razón. Por tanto, crear un clúster de dos nodos, un quórum de alta disponibilidad y un paquete que controle el servicio de quórum es una buena forma de aprovechar un sistema binodo. DSAU también puede utilizarse para crear un servidor de consolidación de registros de alta disponibilidad. Así, si haatc17 fallase, el paquete de registros que controla la consolidación de registros pasaría a haatc18 mediante un proceso de conmutación por error. El registro consolidado usaría una dirección IP reubicable a la que otros sistemas podrían enviar sus datos. De esa manera, aunque hubiese un punto único de fallo en el clúster de servicios, podríamos seguir consultando el registro consolidado y los datos reenviados de otros clústeres. Por último, también podríamos configurar aquí (en el clúster de servicios) un archivo de sincronización maestro de alta disponibilidad en el que guardar todas las plantillas. Así podríamos gestionar todos los archivos de

10 configuración y los patrones que se hayan configurado en otros clústeres. En este mismo diagrama, vemos también otro clúster que está utilizando todo esto. Se trata del clúster de aplicaciones hptf, que consta de dos nodos (hasupt19 y hasupt20) y tiene un sistema de archivos en clúster. Aquí podríamos tener, por ejemplo, alguna aplicación de Oracle. Quizá un kit de herramientas de alta disponibilidad de Oracle para que tanto Oracle como Serviceguard queden protegidos. En este ejemplo, podríamos hacer el clúster de aplicaciones reenviase todos los registros del clúster y los registros de paquetes, así como el registro de alertas de Oracle, al clúster de servicios. Veamos cómo pueden ayudarnos las herramientas DSAU a configurar una base de datos de alta disponibilidad de Oracle. Como ya he dicho, es importante ajustar los parámetros de configuración del núcleo desde la pantalla de SMH, ya que si no no podremos instalar Oracle. Y si usamos Parallel Distributed Shell, nos resultara más fácil hacer los preparativos necesarios para, por ejemplo, configurar los usuarios de Oracle y sus directorios de inicio. Si usamos un sistema de archivos en clúster y seguimos los pasos indicados en la demostración de antes, podremos instalar los archivos binarios de Oracle en /cfs/mnt1 y, posiblemente, instalar los archivos de datos en otro sistema de archivos en clúster. Por último, quizá nos interese usar el kit de herramientas ECM de Oracle para simplificar la configuración del entorno de alta disponibilidad de Oracle. El kit forma parte de paquete de Serviceguard SMS, pero también puede descargarse junto con Serviceguard. Tanto estas herramientas como DSAU facilitan muchísimo la instalación de Oracle, y el kit de herramientas ECM hace que implantar la aplicación en sí sea también mucho más sencillo. También hemos hecho algunos retoques a Serviceguard para mejorar su integración con Oracle. Si lo desean, podrán descargar el marco de compatibilidad con Oracle RAC, que está pensado para facilitar la configuración de entornos Oracle RAC con Serviceguard y detalla los pasos necesarios para que la extensión Serviceguard para el kit de herramientas de RAC funcione con Oracle RAC. Otra de las plantillas que utilizamos es el kit de herramientas de Oracle ECM para instalaciones de una sola instancia, cuya versión B es compatible con las versiones A.11.16, A y A de Serviceguard y con gran parte de las versiones de Oracle (de la 9i a la 10gR2). Estos complementos se instalan con diversos archivos preconfigurados que simplifican la creación de instalaciones de Oracle de alta disponibilidad. El archivo README contiene instrucciones de integración detalladas, pero sólo tendrán que modificar unos cuantos parámetros de haoracle.conf, como el identificador de sistema (SID) y el directorio de inicio de Oracle. Si utilizan el kit ECM y siguen los pasos necesarios para instalar el paquete de Oracle, es posible que creen una imagen como ésta en el gráfico de dependencias correspondiente al paquete. El diagrama es igual que el anterior, con una salvedad: en la parte de abajo, aparece un paquete llamado "Oracle" que tiene dos dependencias en dos de los tres sistemas de archivos (una en cada uno). Al instalar Oracle, pusimos los archivos binarios de Oracle en el sistema de archivos /cfs/mnt1 y los archivos de datos de Oracle de la base de datos que creamos en /cfs/mnt2. La consecuencia de todo esto es que, si alguno de los paquetes multinodo (o el paquete multinodo del sistema) pasa por encima del paquete de Oracle, Oracle quedará fuera de servicio o se transferirá a otro nodo.

11 Ya nos vamos acercando al final de la presentación. La idea principal con la que quiero que se queden es que contamos con diversas herramientas que facilitan la gestión de los entornos Serviceguard. Hoy he mencionado System Management Homepage, HP SIM, Serviceguard Manager y, más por encima, DSAU, que dispone de funciones de consolidación de registros, sincronización de archivos y ejecución de comandos en todo el clúster que simplifican la instalación y la administración de las aplicaciones. Serviceguard Manager es fundamental porque es la tecnología en la que se sustenta toda la gama de productos de alta disponibilidad y tolerancia a errores. Con él podrán hacer tareas de configuración, evaluar rápidamente un clúster, simplificar la gestión, controlar las opciones que regulan la ejecución de clústeres concretos o la detención de paquetes, y consultar la ayuda en línea en distintos idiomas. También es conveniente que creen un clúster de servicios. Así, podrán experimentar con las opciones de configuración y administración de Serviceguard Manager, además de usarlo para los clústeres de aplicaciones. Recuerden que los clústeres de servicios se encuentran entre nuestras prácticas recomendadas porque allí es donde pondremos el servicio de quórum de alta disponibilidad, el servidor de registros consolidados y el motor de sincronización maestro. En cuanto a las funciones que incorpora Serviceguard, hay que destacar los sistemas de archivos en clúster, que pueden facilitar muchísimo la configuración, la administración y el mantenimiento. Si hacen memoria, recordarán que la herramienta Disk and File Systems de SMH (System Management Homepage) cuenta con la opción "Create Cluster VG, con la que se crean grupos de volúmenes similares a los de LVM tradicionales, pero en clúster. Con esto hemos llegado al final, pero si necesitan más información, pueden consultar también estos documentos de referencia y las páginas del sitio web. Si les interesa descargarse alguna demostración, acudan a las direcciones que se indican, donde encontrarán varias sobre soluciones de alta disponibilidad y con tolerancia a errores. Algunas de ellas les ayudarán a entender mejor cómo funcionan Serviceguard y otros productos de la gama Serviceguard, de qué manera facilitan la gestión y cómo se integran con los productos de virtualización de HP. En HP.com encontrarán información sobre los cursos de formación sobre Serviceguard Manager y Serviceguard que se detallan en esta transparencia. Con todo esto, espero haberles ayudado a entender mejor cómo funcionan algunas de las herramientas de gestión de su entorno Serviceguard. Muchas gracias por su atención. Para obtener más información, visiten: Hewlett-Packard Development Company, L.P. La información contenida en este documento está sujeta a cambios sin notificación previa. Las únicas garantías para productos y servicios HP se incluyen en la información de garantía que los acompaña. Nada de lo mencionado en el presente documento constituye una garantía adicional. HP no se hace responsable de los errores técnicos o editoriales ni de las omisiones que pueda haber en el presente documento.