EL LEGADO DE LOS MEGAEVENTOS DEPORTIVOS: EL CASO DE LA COPA DEL MUNDO 2014

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1 EL LEGADO DE LOS MEGAEVENTOS DEPORTIVOS: EL CASO DE LA COPA DEL MUNDO 2014 Línea Temática III: Investigación y Compromiso Social Airton Saboya Valente Junior 1 (1) Doctorando en Desarrollo Local y Territorial, Universidad de Valencia, arsavaju@alumni.uv.es. RESUMEN El objetivo general del estudio es averiguar la preparación, organización e implementación de la Copa del Mundo de Fútbol 2014 en Brasil (Copa 2014). La presente investigación estudia si el referido evento representará un legado positivo, de largo plazo y un factor de desarrollo territorial para el país. Los instrumentos utilizados para estimar los efectos e impactos del evento son: (a) Análisis de los presupuestos de la Copa 2014; (b) Examen de las inversiones relacionadas con el evento; (c) Utilización y análisis de datos secundarios. La investigación indaga el papel de las inversiones vinculadas a la Copa 2014 en la inducción del desarrollo económico y social, en la medida que ocurren inversiones en los equipamientos deportivos e en el turismo, en proyectos de infraestructura urbana, además del fortalecimiento de las ciudades anfitrionas. Los resultados preliminares confirman que la celebración de la Copa 2014 se constituirá en una oportunidad para modernizar las ciudades anfitrionas. Además, el sector público ha sido un importante actor en la organización y en la realización de las inversiones directas relacionadas con este espectáculo deportivo. Mientras, las desigualdades económicas y sociales de las ciudades anfitrionas no serán solucionadas con la mencionada competición. Diferentes estudios internacionales muestran que los costes de oportunidad implícitos en la organización de megaeventos deportivos pueden ser significativos. En las ciudades anfitrionas de la Copa 2014, donde las desigualdades económicas y sociales son acentuadas, los costes de oportunidad adquieren importancia. De hecho, ya que los impactos del evento en sí son transitorios, el retorno de la inversión depende de manera crítica en el grado de utilización del legado a ser construido por Brasil. Palabras clave: Copa del Mundo 2014, Megaeventos Deportivos, Desarrollo Urbano, Brasil. EL LEGADO DE LOS MEGAEVENTOS DEPORTIVOS: EL CASO DE LA COPA DEL MUNDO LOS MEGAEVENTOS DEPORTIVOS La palabra megaevento es un neologismo formado por el prefijo griego mega, que significa grande, y por la palabra latina eventus, que significa acontecimiento. El uso de ese término se ha extendido en los últimos años desde el inglés a otros idiomas, incluso ha llegado al español, que ha traducido mega-event por megaevento (Goig, 2012). Según Roche (2012), los megaeventos deportivos son acontecimientos a gran escala, con un carácter grandioso, que cuentan con un poder de atracción global y poseen un significado internacional. Los megaeventos deportivos pueden también ser definidos como eventos de dimensiones significativas que poseen una duración breve y determinada, se organizan en una ciudad o país, atraen a un importante número de participantes y espectadores, son llamativos para los medios de comunicación a escala internacional y expresan una amplia inversión económica, de infraestructuras, servicios de logística y seguridad por parte del anfitrión (Hall, 1992; Hiller, 1998; Radicchi, 2012). 1

2 La organización de los megaeventos deportivos es compartida, en general, entre organismos gubernamentales de carácter nacional y local juntamente con asociaciones y federaciones deportivas de ámbito nacional e internacional. Son acontecimientos de duración breve y demarcada, y pueden tener lugar en una sola metrópoli o en diferentes ciudades de una nación (Goig, 2012). Las características principales de los megaeventos deportivos son su capacidad de atracción de espectadores y audiencias mundiales y las potenciales repercusiones o impactos en los anfitriones. Esa es la principal diferencia entre los mega y los eventos deportivos normales o habituales (Horne y Manzenreiter, 2006; Maening y Zimbalist, 2012). Es sabido que a los megaeventos acceden las audiencias globales, y que, gracias a eso, la nación anfitriona puede proyectar imágenes de su cultura y organización social, además de su pujanza geo-política y económica. Dicho poder de atracción ha crecido en años anteriores (Goig, 2012). La política de promoción de megaeventos llevada a cabo en diferentes países, ha sido respaldada a menudo no sólo por interés económico, sino, principalmente, por ambiciones y motivaciones geo-políticas. Entre ellas, la de posicionar estratégicamente a un país dentro del sistema global. Así, los megaeventos son instrumentos de poder blando que ayudan a fortalecer a los estados anfitriones (Black y van der Westhuizen, 2004; Cornelissen, 2012). Por otra parte, es importante señalar que la proliferación y auge de los megaeventos deportivos está vinculada a una combinación de factores. Inicialmente, la revolución de las tecnologías de la información y la comunicación, por ejemplo, el desarrollo de la televisión por satélite, que han contribuido a la creación de audiencias globales. La aparición de la televisión comercial, a mediados del siglo XX, contribuyó a reforzar la aproximación entre deporte y medios de comunicación. Actualmente, la televisión por satélite, y, más recientemente Internet asociada con nuevos instrumentos de comunicación, han abierto nuevas oportunidades para intensificar la promoción del deporte a escala global (Ferrando, 1990). Otro factor está relacionado con la aparición y consolidación de un conglomerado deportivo-mediáticoempresarial formado por la alianza entre el mundo del deporte, los medios de comunicación y el segmento empresarial que ha provocado una transformación en el sector de eventos relacionados con el deporte. Dicha alianza ha generado los patrocinios, los derechos de retransmisión de las competiciones, la publicidad y comercialización de productos en las competiciones que en conjunto representan las principales fuentes de ingresos de los megaeventos deportivos (Goig, 2012). El tercer factor está relacionado con la oportunidad de desarrollo y promoción de las ciudades, territorios o países anfitriones. De hecho, la literatura hace referencia a efectos e impactos, siendo cuatro las principales dimensiones en las que se manifiestan las mencionadas repercusiones en los anfitriones: la dimensión social, económica, urbanística y turística (Brown y Massey, 2001). 2. OBJETIVOS Y METODOLOGÍA A pesar de su amplia divulgación y comercialización, seguida de una campaña de búsqueda de consenso político, la preparación de la Copa del Mundo de Fútbol 2014, denominada de aquí en delante Copa del Mundo 2014 o Copa 2014, necesita ser ampliamente discutida, evaluada y confrontada con otras perspectivas de desarrollo para el país anfitrión, en este caso, Brasil. Así, surgen preguntas acerca de los beneficios y los costes de la celebración de este evento en un conjunto de ciudades marcadas por altos niveles de desigualdad social. Como consecuencia, el principal objetivo de la investigación es determinar si la Copa 2014 podrá ser utilizada como plataforma para promover el desarrollo económico, social, urbanístico y turístico de las ciudades anfitrionas, así como especificar los factores que pueden generar o impedir el mencionado desarrollo. Por lo tanto, este artículo abordará específicamente si la Copa 2014 hará posible la construcción de un legado para la sociedad brasileña en un contexto de cambio en la infraestructura de las ciudades anfitrionas del citado megaevento. Es importante decir que es una investigación en marcha. Las herramientas utilizadas son las estadísticas oficiales, el examen de las inversiones juntamente con los presupuestos relacionados con la Copa del Mundo 2014 y el análisis descriptivo. 3. RESULTADOS PRELIMINARES 2

3 La Copa del Mundo 2014 representa un importante acontecimiento deportivo previsto para Brasil. En su preparación, se están realizando grandes obras de construcción de infraestructuras y de creación o rehabilitación de estadios. Las doce ciudades elegidas para recibir la competición, que representan a las cinco grandes regiones del país, son: Belo Horizonte, Brasilia, Cuiabá, Curitiba, Fortaleza, Manaus, Natal, Porto Alegre, Recife, Rio de Janeiro, Salvador y Sao Paulo. Otras seis ciudades presentaron candidaturas, pero no fueron seleccionadas: Belém, Campo Grande, Florianópolis, Goiania, Maceió y Rio Branco (Ernst Young y FGV, 2010). A pesar de su amplia divulgación y comercialización, seguida de una campaña de creación de consenso político, la preparación de la Copa del Mundo 2014 no ha sido debidamente evaluada desde el punto de vista técnico ni contrastada con otras perspectivas (Damo e Oliven, 2012). Es probable que, gracias a la celebración de la Copa del Mundo, Brasil sea un país observado por muchas naciones, hecho que favorecerá su promoción mundial. A pesar de esto, los beneficios económicos que este acontecimiento traerá al país son difíciles de estimar debido a que involucran complejas obras de infraestructura urbana, inversiones en instalaciones deportivas, apoyo al turismo y la promoción internacional de la nación. Hay mucha expectación alrededor de la preparación adecuada de las ciudades sede del evento. A menudo se cuestiona si será totalmente compatible con las exigencias impuestas por la Fédération Internationale de Football Association-FIFA respecto a la infraestructura de los estadios, la movilidad urbana, el turismo y, especialmente, acerca de la seguridad. El éxito de la Copa del Mundo en 2014 y su legado para las ciudades anfitrionas depende de una adecuada planificación y ejecución de las inversiones en infra estructura. De este modo, surgen muchas cuestiones acerca de los beneficios y los costes de la celebración de este evento en una red de ciudades marcadas por niveles altos de desigualdad social. Se ha constatado que importantes grupos de población se oponen al nombramiento de los países y ciudades para organizar megaeventos deportivos. Esta oposición ya se pudo observar en Vancouver en los Juegos Olímpicos de Invierno 2010, en Londres en los Juegos Olímpicos de Verano 2012 y en Valencia en el Gran Premio de Fórmula I en Este hecho refuerza la incertidumbre acerca de los costes y beneficios de organizar un megaevento deportivo. Además, algunos países han tenido diferentes experiencias en la celebración de la Copa del Mundo y otros acontecimientos deportivos en ocasiones anteriores. El presupuesto oficial de la Copa del Mundo 2014 está consolidado en un documento llamado Matriz de Responsabilidades, que relaciona actividades con recursos y equipos. Este presupuesto sumó, en noviembre de 2012, un total de R$ 29,3 mil millones (cerca de US$ 15 mil millones), incluyendo los gastos de ciento veinte proyectos en las doce ciudades anfitrionas y sus entornos. Dicho presupuesto está dividido en siete puntos a saber: movilidad urbana, aeropuertos, estadios, seguridad, puertos, telecomunicaciones y turismo, conforme se especifica en la Tabla 1. El sector público participa en todos los ítems mencionados siendo responsable del 85,5% del total de los gastos. Por su parte, el sector privado participa con un porcentaje inferior, el 14,5%, con inversiones concentradas en dos categorías: aeropuertos y estadios. El gobierno federal es el principal inversor en la competición, pues participa con el 62,1% del total de los gastos o el 72,7% del total de las expensas públicas, tomando parte en todos los ítems del presupuesto. Los gobiernos locales participan con el 23,4% de las expensas totales o el 27,3% del total de los gastos públicos, específicamente en los ítems de movilidad urbana, estadios y turismo. Tabla 1 - Copa del Mundo 2014 Presupuesto Global En R$ Millones Inversión Gobierno Federal Inversión Gobierno Local Ítem (R$ Mil) Financiamiento Gobierno Federal Inversión Privada Total Movilidad Urbana 7.060,7 0, ,9 0, ,6 Aeropuerto 0, ,1 0, , ,1 Estadio 4.065,6 0, ,2 612, ,8 Seguridad 1.879,1 0,0 0,0 0, ,1 Puerto 0,0 898,9 0,0 0,0 898,9 3

4 Telecomunicación 0,0 371,2 0,0 0,0 371,2 Turismo 0,0 194,5 18,0 0,0 212,5 Total , , , , ,1 Fuente: Portal Brasil (2012). Nota: La tasa de cambio de R$ 1,00 (un real brasileño) es cerca de US$ 0,50 (cincuenta centavos de dólares norteamericanos) y E$ 0,40 (cuarenta centavos de euros). Las fuentes del gasto del gobierno federal pueden ser a través de financiación o por presupuesto. La financiación totalizó R$ 11,1 mil millones en movilidad urbana y estadios, de los cuales cerca de R$ 6,1 mil millones son provenientes del Banco Nacional de Desenvolvimento Económico y Social-BNDES y R$ 5,0 mil millones de la Caixa Económica Federal-CEF, dos de los principales bancos públicos de Brasil. Los gastos originarios del presupuesto federal suman R$ 7,0 mil millones abarcando cuatro de los siete ítems previstos en el importe de la Copa del Mundo. Los gastos de los gobiernos locales, concentrados en tres ítems, provienen de sus respectivos presupuestos o mediante financiación (Portal Brasil, 2012). Los proyectos de movilidad urbana, aeropuertos y estadios representan juntos el 88,5% del total de los gastos. Mientras, hay una serie de acciones asociadas a la Copa del Mundo 2014, no solamente a las ciudades anfitrionas, que no están relacionadas en el presupuesto oficial. Son iniciativas relacionadas con la infraestructura urbana, la energía eléctrica, las telecomunicaciones, el turismo, los equipamientos de ocio, los servicios de salud, la capacitación de personas, los servicios financieros y la seguridad pública. Además, la Copa del Mundo tiene repercusiones en las inversiones privadas en los más diversos sectores económicos, incluso en las inversiones directas extranjeras, así como en el consumo de las familias. De esta manera, una investigación realizada por la Asociación Brasileña de Infraestructura e Industrias de Base- ABDIB estima que el presupuesto amplio de la Copa del Mundo es de cerca de R$ 124,7 mil millones, cuando se suman los gastos en saneamiento básico, energía eléctrica, telecomunicaciones, seguridad y hospitalidad, además de los gastos en movilidad urbana, estadios, aeropuertos y puertos (ABDIB, 2012). El análisis del presupuesto oficial por ciudad anfitriona indica que Sao Paulo recibirá el 21,2% del total de los gastos. Esto se explica no solo por la dimensión poblacional y económica de esa metrópolis, sino también por su capacidad de atraer el interés privado en algunos de sus proyectos de infraestructura. Siguen Rio de Janeiro, Belo Horizonte, Manaus y Cuiabá, con 13,3% 8,8%, 8,7% y 7,1% del total de las expensas, respectivamente. Las anfitrionas Porto Alegre, Fortaleza, Natal, Brasilia y Recife recibirán 6,2%, 5,8%, 5,7%, 5,2% y 4,9% de los gastos, respectivamente. Por otro lado, Curitiba y Salvador son las ciudades con menor presupuesto, es decir, el 3,1% y el 2,3% del total de las expensas respectivamente. Es razonable decir que Curitiba ya tenía una infra estructura urbana moderna, incluso un estadio de arena parcialmente construido, así que su necesidad de inversión ha sido considerablemente menor. Por otro lado, la ausencia de proyectos de movilidad urbana en Salvador ha contribuido a disminuir su presupuesto (Tabla 2). Tabla 2 - Copa del Mundo Presupuesto de las Ciudades Anfitrionas En R$ Millones Ciudad Movilidad Aeropuerto Estadio Puerto Turismo Total Urbana Belo Horizonte 1.350,7 508,6 695,0 0,0 18, ,8 Brasilia 103,1 650,4 745,3 0,0 10, ,0 Cuiabá 1.453,5 90,4 518,9 0,0 13, ,6 Curitiba 573,4 84,5 234,0 0,0 19,4 911,3 Fortaleza 562,0 349,8 623,0 149,0 22, ,9 Manaus 1.597,7 327,4 515,0 89,4 8, ,3 Natal 661,3 576,9 350,0 53,7 23, ,9 Porto Alegre 887,9 579,2 330,0 0,0 25, ,8 Recife 840,9 19,8 529,5 21,8 17, ,6 Rio de Janeiro 1.883,6 844,7 808,4 314,0 25, ,6 Salvador 0,0 47,3 591,7 36,0 12,0 687,0 Sao Paulo 1.881, ,0 820,0 235,0 15, ,1 Total , , ,8 898,9 212, ,9 4

5 Fuente: Portal Brasil (2012). Nota: Las inversiones en telecomunicaciones y en seguridad aún no están distribuidas por las ciudades. Totalizaron R$ 2,2 mil millones en noviembre de Las ciudades con los más grandes porcentajes de inversión en relación a sus respectivos PIB son Cuiabá, Natal, Manaus, Belo Horizonte, Recife, Fortaleza y Porto Alegre, en esa secuencia. En términos de inversión en relación a la población, los índices más grandes son los obtenidos por Cuiabá, Natal, Manaus, Porto Alegre, Belo Horizonte, Recife y Fortaleza. Aún Sao Paulo y Rio de Janeiro ya que tienen los presupuestos más altos, las expensas se diluyen en sus respectivos PIB y poblaciones (Tabla 3). Ciudad/País Tabla 3 - Inversiones por PIB y Población Ciudades Anfitrionas y Brasil Inversión-R$ Millones (A) PIB-Mil Millones (B) Populación-Mil (C) A/B - % A/C R$ Belo Horizonte 2.572, , Brasilia 1.509, , Cuiabá 2.076, , Curitiba 911, , Fortaleza 1.705, , Manaus 2.538, , Natal 1.664, , Porto Alegre 1.822, , Recife 1.429, , Rio de Janeiro 3.876, , Salvador 687, , Sao Paulo 6.208, , BRASIL , , Fuentes: Portal Brasil (2012) y IBGE (2012). Dado que la Copa del Mundo es un evento a corto plazo, una parte de su impacto no será permanente. De hecho, una vez completadas las inversiones y finalizada la Copa 2014, la continuidad de los efectos positivos dependerá de la capacidad de la sociedad del país para utilizar las oportunidades y los legados del evento (Ernst Young y FGV, 2010). 4. CONCLUSIONES La preparación, organización e implementación de un megaevento deportivo es una tarea compleja y con características particulares. Los preparativos de la candidatura y la organización del acontecimiento se llevan a cabo desde 5 hasta 10 años antes del evento, y éste, el mismo evento, en sí mismo, de corta duración, solamente dura 20 o 40 días. Posteriormente, los efectos e impactos de la competición pueden prolongarse de entre 10 hasta 30 años o más en el país y ciudad anfitriones, dependiendo del volumen y del tipo de inversiones realizadas conjuntamente con la forma de financiación de los gastos. 5

6 La Copa del Mundo 2014 podrá generar diferentes tipos de legados: físico, social, institucional y la marca del país en el mundo. El legado físico es representado por las infraestructuras, por ejemplo, los sistemas de transporte, los equipamientos de telecomunicaciones y de seguridad pública, además de las instalaciones deportivas y de ocio (Ernst & Young, 2010). El legado social se traduce en la mejora de la autoestima de las personas, los beneficios de la educación y la formación técnica que el evento puede traer, los puestos de trabajo temporales, las mejoras obtenidas en el bienestar, como consecuencia de las inversiones realizadas y de la generación de ingresos devenida por la mayor actividad económica. El legado institucional, a su vez, es proporcionado por la experiencia que conlleva dirigir un evento internacional con plazos estrictos, la participación de varias entidades y organismos gubernamentales y del sector privado, con la necesidad de planificarse y ejecutar proyectos complicados que requieren una articulación extremadamente compleja, además de ofrecerse productos y servicios que tengan calidad y padrón internacional. El legado de la marca está relacionado con la exposición de Brasil en el escenario internacional y el consecuente fomento como destino turístico y divulgación de su patrimonio cultural. Todos estos legados pueden seguir generando bienestar a la población de las ciudades anfitrionas, y Brasil, como país, en un horizonte de tiempo más allá de la Copa del Mundo Sin embargo, sólo un evento exitoso no es suficiente para asegurar el legado de la Copa. También es necesario que el capital construido sea conservado, reutilizado y actualizado con el tiempo. De lo contrario, la depreciación se produce. La elección de Brasil para ser sede del Mundial representa una decisión de incurrir en una inversión significativa, desde la presentación de la candidatura, haciendo uso, esencialmente, de recursos públicos que podrían ser utilizados para otros fines, como por ejemplo, para la educación, la salud, los programas sociales, la ciencia y tecnología o la cultura y las artes. Esta disyuntiva lleva consigo un coste implícito, el coste de la oportunidad. Los estudios internacionales muestran que el coste de oportunidad implícito en la organización de megaeventos deportivos puede ser significativo. De hecho, se debe a que los impactos del evento en sí son transitorios y los retornos de las inversiones dependen del legado construido por el país. La cuestión del coste de la oportunidad es crucial, pues las inversiones son financiadas a través de la expansión de la deuda pública que tiene costos y efectos macroeconómicos de largo plazo (Ernst & Young, 2010). Además de los riesgos específicos del evento en sí mismo, por ejemplo de los desplazamientos de personas de sus viviendas, del endeudamiento público, los incrementos excesivos en los precios locales, el aumento de las importaciones de bienes y el envío de recetas para el extranjero. También los megaeventos deportivos pueden desencadenar actuaciones urbanas ineficientes, porque están en un lugar equivocado, porque tienen una dimensión inadecuada o simplemente porque son innecesarios. Además, los megaeventos pueden aportar intereses que tienen una vida limitada, mientras otros tienen un interés simplemente transitorio, en detrimento de la planificación urbana de largo plazo (Smith, 2012). Los riesgos pueden mitigarse o evitarse a través de la planificación, ejecución de políticas e implementación del monitoreo de los proyectos y control de los gastos. Igualmente, la Copa del Mundo está sujeta al riesgo sistémico de la coyuntura nacional e internacional. Las características de las inversiones de la Copa del Mundo 2014 ayudan a plantear algunas reflexiones. Inicialmente, las ciudades anfitrionas tienen, en diferentes niveles, carencias de desarrollo humano, déficits de infraestructura física y de habitaciones, padrones de protección ambientales insuficientes, desigualdades económicas y sociales elevadas juntamente con bolsones de pobreza además de cierta violencia urbana. Los problemas mencionados se intensificaron tras un atropellado proceso de migración para esas áreas urbanas en los últimos 30 años. El nivel de desarrollo de las ciudades juntamente con las carencias anteriormente mencionadas, además de la complejidad de los proyectos de la Copa del Mundo, las carencias institucionales y 6

7 la inexperiencia de los planificadores urbanos han dificultado la celeridad de algunos proyectos. En meados de 2012, solamente 5% de las obras habían sido concluidos, 54% estaban en progreso y 41% en proceso de elaboración de los proyectos o en licitación. La previsión era que 85% de las obras se quedarían concluidas hasta 2013 y los 25% restantes en el primero semestre de 2014 (Portal Brasil, 2012). Debido a las características de las ciudades anfitrionas, es difícil imaginar que la Copa del Mundo consiguiera solucionar sus problemas sin políticas de desarrollo complementares. Incluso, el presupuesto oficial de la Copa del Mundo, cerca de US$ 15 mil millones a fines de 2012, no contempla todas las expensas relacionadas con el evento. En términos de comparación, estimase gastos de US$ 32,6 mil millones y US$ 40,0 mil millones en Londres y Beijing en los Juegos Olímpicos de Verano 2008 y 2012, además de US$ 87,7 mil millones la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010 (Gold y Gold, 2011; Tomlinson y Bass, 2012). En resumen, el escenario de los impactos causados por la Copa del Mundo 2014 no será el resultado de factores aislados, sino un conjunto de factores relacionados entre sí. Los efectos de la acción directa pueden se reflejar en una serie de beneficios sociales, económicos, urbanísticos e institucionales, algunos de los cuales, si fueren bien utilizados, pueden ser incorporados de forma duradera en la sociedad brasileña. La Copa del Mundo podrá ser utilizada como una palanca para incrementar inversiones en infraestructuras esenciales para el desarrollo del país en un plazo más corto. AGRADECIMENTOS A mí me gustaría de agradecer a Da. María José Sánchez, profesora de la Escuela Oficial de Idiomas de Valencia-EOI, por la revisión del idioma del presente artículo. BIBLIOGRAFIA ABDIB (2012). Grupo de Trabalho Copa 2014 Projetos e Diagnósticos para a Copa En: Acceso en: Black, D. y van der Westhuizen, J. (2004). Going Global: The Promises and Pitfalls of Hosting Global Games. Third World Quarterly, Brown, A. y Massey, J. (2001). Literature Review: The Impact of Major Sporting Events. Manchester: Manchester Metropolitan University. Cornelissen, S. (2012). Los Megaeventos Deportivos como Grandes Proyectos Políticos. Una Interpretación de la Copa del Mundo de Fútbol de la FIFA 2010 Sudáfrica. En: Megaeventos Deportivos Perspectivas Científicas y Estudios de Casos. Goig, R.L. (ed.). Barcelona: Editorial UOC. Damo, A.S. y Oliven, R.G. (2012). Brasil como Sede de la Copa del Mundo de la FIFA. En: Megaeventos Deportivos Perspectivas Científicas y Estudios de Caso, editado por Ramón Llopis Goig. Barcelona: Editorial UOC. Ernst Young y Fundación Getulio Vargas-FGV (2010). Brasil Sustentável Impactos Sócioeconômicos da Copa do Mundo Rio de Janeiro: Fundaçao Getúlio Vargas-FGV. Ferrando, M. G. (1990). Aspectos Sociales del Deporte: Una Reflexión Sociológica. Madrid: Alianza. Goig, R. L. (2012) (ed.). Repercusiones y Efectos Sociales de los Megaeventos Deportivos. En: Megaeventos Deportivos Perspectivas Científicas y Estudios de Casos. Goig, R.L. (ed.). Barcelona: Editorial UOC. Gold, J.R. y Gold, M.M. (2011). Olympic Cities: Cities Agendas, Planning and The World`s Games, Londres y Nueva York: Routledge. Hall, C.M. (1992). Hallmark Tourist Events: Impacts, Management and Planning. Londres: Belhaven Press. Hiller, H.H. (1998). Assessing the Impact of Mega-events: A Linkage Model. Current Issues in Tourism, 1(1): Hiller, H.H. (2007). Post-event Outcomes and the Post-modern Turn: The Olympics and Urban 7

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