Página 1 de 6 LAVADO GASTRICO 1.- DEFINICIÓN El lavado gástrico (LG) es una técnica de descontaminación digestiva cuyo objetivo es extraer del estómago la máxima cantidad de toxico y evitar así su absorción (1). 2.- OBJETIVO Realizar el lavado gástrico con una técnica adecuada para conseguir efectividad y reducir las posibles complicaciones. 3.- ÁMBITO DE APLICACIÓN General 4.- POBLACIÓN DIANA Pacientes ingresados en unidades de hospitalización y servicios de urgencias que precisen la descontaminación digestiva mediante lavado gástrico. 5.- REFERENCIAS PG-ENF-01 6.- DESARROLLO DEL PROCEDIMIENTO 6.1.- Precauciones Conocer las sustancias tóxicas ingeridas y el tiempo transcurrido, si es posible. El LG está indicado en pacientes que han ingerido un producto potencialmente tóxico, y en los que el intervalo transcurrido desde la ingesta hasta la atención hace suponer que no se ha completado la fase de absorción. No debe ser realizado de forma rutinaria pues su eficacia es limitada (2). El lavado gástrico está contraindicado en (1,3):
Página 2 de 6 o Sospecha de abdomen agudo. o Cirugía digestiva alta reciente. o Coagulopatías. o Estenosis esofágica. o Ingesta de sustancias cáusticas o corrosivas, tanto si se tratan de ácidos como de álcalis. o Fractura de base de cráneo, rotura de huesos de la cara y taponamiento nasal, está contraindicado la inserción de la sonda por la nariz. En estos casos se utilizará la vía orogástrica. o En pacientes obnubilados o comatosos, si no están intubados previamente. Colocar sonda nasogástrica, preferentemente tipo Levin calibre 18 fr, según PT-GEN-16. Comprobar las posibles alergias a los materiales que se van a utilizar. Valorar el estado físico y psíquico del paciente. 6.2.- Información al paciente / familia Comprobar la identidad del paciente. Informar al paciente del procedimiento que se va a realizar y solicitar su colaboración. 6.3.- Preparación del entorno y de materiales Guantes. Mascarilla, bata y gafas, si se prevén salpicaduras. Dos jeringas de 50 c.c. de cono ancho. Indicador de ph. Fonendoscopio. Pinza de Kocher. Equipo de aspiración, revisado y comprobado. Bolsa colectora. Solución prescrita (S. Salino 0.9%/S. Glucosado 5%/Glucosalino). Batea y bolsa de residuos.
Página 3 de 6 6.4.- Preparación del paciente Proporcionar intimidad. Colocar al paciente en posición decúbito lateral izquierdo con las rodillas flexionadas y ligero trendelemburg. 6.5.- Realización de la técnica Realizar higiene de manos según PD-GEN-105. Colocación de guantes. Insertar la sonda nasogástrica y/o comprobar la localización según protocolo PT-GEN-16. Aspirar el contenido gástrico suavemente con la jeringa, manteniendo esta por debajo de la cavidad gástrica y reservando una pequeña cantidad por si se precisa su análisis. Pinzar la sonda y cargar la solución prescrita. Despinzar la sonda e introducir suave y lentamente la solución, manteniendo la jeringa por encima de la cavidad gástrica. Conectar la sonda a una bolsa colectora. Poner la sonda en declive para que por decantación salga el contenido gástrico. Despinzar la sonda y dejar que el líquido drene por gravedad, realizando un suave masaje en el hipocondrio izquierdo si el flujo es demasiado lento. Si la cantidad de líquido que retorna es inferior al introducido, movilizar la sonda. Observar el aspirado gástrico para ver su aspecto. Repetir la maniobra hasta que se hayan utilizado de 3 a 5 litros de líquido o hasta que éste salga claro (1). Se puede dejar la sonda en declive con una bolsa de recogida para que vaya fluyendo el contenido gástrico o retirarla.
Página 4 de 6 6.6.- Observaciones / problemas potenciales Finalizado el procedimiento, mantener el cabecero de la cama ligeramente elevado (30º) Vigilar el estado general del paciente. Interrumpir el proceso si el nivel de conciencia contraindica el procedimiento. Mantener al paciente en posición semifowler y decúbito lateral izquierdo durante toda la técnica. Medir la cantidad del líquido introducido y eliminado, así como las características de este último. Administrar preferentemente sueros glucosalinos o alternar sueros salinos con glucosados, en caso de utilizar grandes cantidades de líquido para el lavado (4,5). Movilizar la sonda nasogástrica para facilitar el vaciamiento del liquido introducido. Repetir el lavado hasta que el contenido extraído aparezca limpio. Vigilar la aparición de distensión abdominal. No introducir grandes cantidades de líquido de una sola vez. Hacer lavados parciales (250 ml como máximo)(1,6). Desechar los residuos generados según la normativa vigente. 6.7.- Educación para el autocuidado Enseñar al paciente y/o cuidador: La razón y el efecto deseado del procedimiento. Avisar inmediatamente ante la presencia de náuseas, mareos, dolor o cualquier otra incidencia. Evitar la manipulación y movimientos bruscos que desplacen la sonda. 6.8.- Registro del procedimiento Registrar en el plan de cuidados: La realización de la técnica. Registrar en las observaciones de enfermería:
Página 5 de 6 Las características del líquido evacuado, el nivel de consciencia anterior y posterior a la técnica y cualquier incidencia. Registrar en la grafica de signos vitales: El balance del lavado. 6.9.- Cuidados posteriores Vigilar signos y síntomas de sangrado. Mantener en decúbito lateral izquierdo y en semifowler. Vigilar signos vitales y nivel de conciencia. Retirar la sonda una vez terminado el lavado, según prescripción facultativa. En el caso de que se prescriba aspiración nasogástrica continua, utilizar una aspiración suave a baja intensidad. 7.- BIBLIOGRAFÍA 1. Amigó Tardín M. Lavado gástrico en el paciente con intoxicación aguda [Internet]. NURE Inv. 2012 [cited 2015 Jun 20]. Available from: http://www.nureinvestigacion.es/ficheros_administrador/protocolo/nu RE58_protocolo_lavado.pdf 2. Kupferschmidt H, Züst A, Rauber-Lüthy C. [Decontamination and antidotes in acute cases of poisoning]. Ther Umsch. 2009 May;66(5):331 4. 3. Benson BE, Hoppu K, Troutman WG, Bedry R, Erdman A, Höjer J, et al. Position paper update: gastric lavage for gastrointestinal decontamination. Clin Toxicol (Phila). 2013 Mar;51(3):140 6. 4. Herdman T, editor. Riesgo de desequilibrio electrolítico (00195). NANDA Internacional Diagnósticos Enfermeros Definiciones y Clasificación 2012-2014. Barcelona: Elsevier; 2013. p. 184. 5. Bulechek G., Butcher H., Dochterman J., editors. Manejo de electrolitos (2000). Clasificacion de Intervenciones de Enfermeria (NIC). 6th ed. Barcelona: Elsevier; 2013. p. 475.
Página 6 de 6 6. Herdman T, editor. Riesgo de motilidad gastrointestinal disfuncional (00197). NANDA Internacional Diagnósticos Enfermeros Definiciones y Clasificación 2012-2014. Barcelona: Elsevier; 2013. p. 212.